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FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
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Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Hola que capítulo creo que ya casi se viene el primer beso entre las chicas <3 y por fin el Papi de Britt Acepto q ella baile sólo falta q ella deje a Sam por Santana jjjj creo me estoy adelantando a los hechos pero bueno espero la próxima actualización ;-)
Pame_21***** - Mensajes : 245
Fecha de inscripción : 31/10/2012
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Hola chicas! Pretendía actualizar hoy pero no puedo... :-( desde mi cel es imposible que pueda subirles el capítulo...
Pretendía que el capítulo fuera mi regalo de San Valentin para ustedes pero bue.... no se pudo.
Espero hayan pasado un lindo día, no hace falta estar en pareja para disfrutar este día, simplemente estar enamoradas... cursi no? jeee admito que soy cursi así que deberán tolerar ese detalle de mí.
Besos a todas y un gran abrazo! Bien pueda actualizo.... <3
Pretendía que el capítulo fuera mi regalo de San Valentin para ustedes pero bue.... no se pudo.
Espero hayan pasado un lindo día, no hace falta estar en pareja para disfrutar este día, simplemente estar enamoradas... cursi no? jeee admito que soy cursi así que deberán tolerar ese detalle de mí.
Besos a todas y un gran abrazo! Bien pueda actualizo.... <3
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
También espero que hayas pasado un lindo día de San Valentín
(lo que es yo, me pasé escuchando canciones de glee, viendo videos de Naya y leyendo; además de ver millones de parejas con flores y globos xD)
Espero tu actu, que aunque llegue posterior al día de San Valentín, lo tomaré como un regalo de cupido xD
Saludos!
(lo que es yo, me pasé escuchando canciones de glee, viendo videos de Naya y leyendo; además de ver millones de parejas con flores y globos xD)
Espero tu actu, que aunque llegue posterior al día de San Valentín, lo tomaré como un regalo de cupido xD
Saludos!
Tat-Tat******* - Mensajes : 469
Fecha de inscripción : 06/07/2013
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
hola que lastima que no pudiste actualizar
espero que hayas pasado lindo en el día de san valentin, yo lo pase con amigos bien tranqui jeje
todavia ando esperando que llegue el hombre que me haga sentir especial jejejeje aunque
ando en algo con un muchacho que es re lindo conmigo pero veremos en que termina jejeje
nos vemos en la proxima que pases lindo
espero que hayas pasado lindo en el día de san valentin, yo lo pase con amigos bien tranqui jeje
todavia ando esperando que llegue el hombre que me haga sentir especial jejejeje aunque
ando en algo con un muchacho que es re lindo conmigo pero veremos en que termina jejeje
nos vemos en la proxima que pases lindo
Patri_glee***** - Mensajes : 225
Fecha de inscripción : 01/10/2013
Edad : 32
raxel_vale****** - Mensajes : 377
Fecha de inscripción : 24/08/2013
Edad : 34
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Hola chicas... no actualice porque no tenía internet en mi ciudad pero.... estoy de vacaciones en Buenos Aires! Aquí si hay internet, trataré de actualizar en breve... sólo denme un poco de tiempo, el viaje fue largo y cansador... Pero actualizaré...
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Estagenial esta historia
Nueva fiel lectora
Saludos y esperando con ansias el capitulo
Nueva fiel lectora
Saludos y esperando con ansias el capitulo
Jane0_o- - Mensajes : 1160
Fecha de inscripción : 16/08/2013
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Tatymm! Gracias por leer, en breve actualizo...tatymm escribió:aaaaaaaaaaaaaaaaawwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwww me encanto el cap te pasaste fue genial!!!! ya quiero leer otross besos!
BESOS!
raxel_vale escribió:aaaaahhhhh me encantooooo!!!!
adore el capitulo
todo perfecto
saludos hasta la prox!!!
Raxel! Disculpa la tardanza... en breve actualizo...
:DANG escribió:Hola ! soy nueva lectora y ya leí todo tu Fic en una noche ..... debo decirte que fuiste la culpable de mi desvelo . Y sinceramente me gusto muchisismo . Hasta me atrevería decir que es uno de los mejores Fics que eh leído en el foro tomando en cuenta que soy exigente .
Tu sigue
así y espero que actualices pronto.
DANG! Yo también soy de desvelarme leyendo Fics... me agrada que te haya gustado! Gracias por tus palabras, te lo agradezco, bienvenida y espero sigas leyendo, me gustaría saber que más piensas del Fic, las críticas costructivas son bienvenidas...
Besos!
3:) escribió:me encantooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
espero que no tarden mucho britt en darse cuenta de lo que siente,.... pero lo tiene igual de claro que santana de lo que sienten una por la otra,...
espero que marcia no sea un problema en la relación de san con britt,... ya que posiblemente sam no salga como ex novio celoso en recuperación de britt,....
Ummm... Marcia! las chicas aún no están juntas y Marcia es un personaje que no desaparecerá por el momento... quieres que desaparezca? je veremos como avanza la historia; en cuanto a Sam, no quiero que él sea el chico malo de la historia pero veremos como reacciona en los siguientes capítulos...
Patri_glee escribió:holaaa me encantoooo!!! cada vez mejor esta la historia, siempre me dejas con ganas de leer más jeje los capitulos son largos cosa que me encanta pero igual me quedo con ganas de seguir leyendo jeje
que bueno que haya un avance entre britt y san,
que britt se vaya dando cuenta de lo que esta empezando a sentir por santana :)
van lento pero creo que es mejor ir lento y segura que empezar rapido y que despues pase algo je
nos vemos en la proximaa, que pases lindo
Siempre captas mis ideas! No quise escribir la historia juntando a las chicas desde el principio, me gusta esto de que se conozcan con el tiempo y vean si realmente pueden estar juntas, es verdad que voy lento, le comentaba a otra lectora que yo al leer y corregir los capítulos también me desesperaba por no "ver" a las chicas juntas... me imagino como deben estar! pero paciencia, sólo sigue leyendo...
Besos!
Laura-Fernanda escribió:Holaa. Eso fue demasiado tierno
Aww me encanto, sin palabras. Me gusto mucho la perspetiva de Britt
ademas tambien es intersante saber que a ella le atrae San
Sin mas espero la proxima Actu!!
Pdta: A pesar de que no llevas mucho capitulos, la historia es genial.
espero que no tengas pensado un fin, al menos no uno cercano
Hasta la Proxima!!!
Un final? aún no he pensado en un final, todavía tengo ideas sobre las Brittana que espero poder plasmarlas y las lean... un final aún no hay... no cercano por lo menos...
Gracias por leer...
Besos!
Pame_21 escribió:Hola que capítulo creo que ya casi se viene el primer beso entre las chicas <3 y por fin el Papi de Britt Acepto q ella baile sólo falta q ella deje a Sam por Santana jjjj creo me estoy adelantando a los hechos pero bueno espero la próxima actualización ;-)
Es verdad... te estás adelantando pero veremos como avanza la historia, no te estás alejando pero tranqui... veremos como avanza todo... ansiosa por ver a las chicas juntas? jeee
GRACIAS POR LEER, BESOS!
Tat-Tat escribió:También espero que hayas pasado un lindo día de San Valentín
(lo que es yo, me pasé escuchando canciones de glee, viendo videos de Naya y leyendo; además de ver millones de parejas con flores y globos xD)
Espero tu actu, que aunque llegue posterior al día de San Valentín, lo tomaré como un regalo de cupido xD
Saludos!
Mi San Valentín fue tranquilo... demasiado tranquilo, pero bue, es lo que hay... en breve el regalo atrasado pero al fin regalo, verdad?
BESOS Y GRACIAS POR LEER!
Patri_glee escribió:hola que lastima que no pudiste actualizar
espero que hayas pasado lindo en el día de san valentin, yo lo pase con amigos bien tranqui jeje
todavia ando esperando que llegue el hombre que me haga sentir especial jejejeje aunque
ando en algo con un muchacho que es re lindo conmigo pero veremos en que termina jejeje
nos vemos en la proxima que pases lindo
Awww! qué tierna, espero que se te de lo del chico, siempre y cuando te respete todo bien, éxitos con él!
En breve actualizo... je BESOS!
raxel_vale escribió:vuelve. ..
Al ver esto me dije a mi misma... DEBES ACTUALIZAR! Lo haré, disculpa la tardanza, pasaron cosas que no me dejaron actualizar... no prometo nada pero trataré de no demorarme en subir los capítulos, gracias por leerme y disculpa la espera...
BESOS!
Jane0_o escribió:Estagenial esta historia
Nueva fiel lectora
Saludos y esperando con ansias el capitulo
JANE! Bienvenida...! en breve actualizo, gracias por leer!
Besos!
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
Edad : 33
Capítulo 7: Sincerándonos.
Actualización al fin... disculpen chicas, primero no tenía internet, luego mi viaje de vacaciones que por cierto es genial! Estoy en Buenos Aires! Bella ciudad y ando de puro paseo conociendo todo lo que siempre veo a través de la tv... pero, me resfrié, ayer estuve re mal y bue, hoy con un poco mejor de ánimos les traigo la actualización. Hubo un inconveniente con el documento pero ya se resolvió, gracias a Agus, una amiga...
Este era el regalo de San Valentín, espero les guste y disculpen la tardanza!
Besos y gracias por leer!
Capítulo 7: Sincerándonos.
Era lunes, ya estaba en la oficina, el fin de semana pasó rápido, estaba emocionada pues vería a Britt, después de ese sábado no volvimos a vernos. No le comenté nada a Quinn, también debía hablar con ella, estaba organizando su fiesta de aniversario, sería al día siguiente, presuponía que era el lugar ideal para acercarme más a Britt, lo que no tuve en cuenta era que Sam seguía con ella, me percaté de eso al verlo entrar de la mano con ella. Mis sueños se desvanecieron por unos instantes, Britt me vio y sonrió, Sam la besó pero ya no la notaba tan enamorada, algo había cambiado en ella, me sentía responsable de ese cambio.
Quinn llegó y comenzó a repartir tarjetas de invitación para su fiesta, la haría en un restaurant, ella estaba feliz. “Santana, quiero que cantes una canción conmigo, es un popurrí, lee la letra y apréndetela, será una sorpresa para Rach” me dejó la canción y se fue. Leí la letra y me gustó, era una mezcla de Madonna y The Association el título decía “Cherish/Cherish” perfectamente representaba lo que yo sentía, si bien era de Quinn para Rachel, también podría ir dedicada para Britt de mi parte.
Estaba leyendo la letra de la canción pero no tenía el ritmo, supongo que debíamos practicar juntas, fui a su oficina y entre diciendo “Quinn, ¿cuándo ensayamos?” miré y mi amiga no estaba, Britt sonreía y dijo: “Tienes la mala costumbre de entrar y decirle cosas a Quinn cuando ella no está, recuerdo la primera vez que hiciste eso”. Me sonrojé, esa vez entre diciendo que quería tener sexo, Brittany me miraba y me dijo:
- Ella volverá, se fue a arreglar algo con su padre. ¿Qué deben ensayar?
- Una canción, no digas nada, es una sorpresa para Rachel.
- ¿Quinn canta también?
- Si. Lo hace muy bien, creo que con eso logró enamorar a Rach…
- ¿Qué canción es?
- Oh… no puedo decírtelo, es una sorpresa.
- La sorpresa es para Rachel, no para mí.
- La letra representa muchas cosas, me siento identificada, pero no puedes leerla, la escucharás mañana, supongo que no faltarás…
- Sam no quería ir, pero yo si quiero.
- Si él no va, ¿tampoco lo harás tú?
- No lo sé…
Eso me molestó, me levanté furiosa y tiré unos papeles de Quinn. “¡Demonios!” dije y comencé a recoger los papeles. Britt me ayudaba, levantó un sobre y cayeron unas fotos, era las fotos del bailarín, miré asustada eso, ella no sabía lo de la demanda, justo los papeles que ella tenía en las manos eran los de la demanda, ella leyó un poco y me dijo preocupada:
- Santana, ¿tú le hiciste esto? Aquí dice que tú lo insultaste y le pegaste.
- Es verdad, pero le pagué los gastos médicos.
- O sea que, ¿tú comenzaste todo? Me mentiste esa noche…
- Estaba enojada Britt, él me miraba feo y te miraba ti y no lo soporté…
- ¿Te molestó que me mirara? No entiendo Santana…
- Es un imbécil.
- Debes pedirle disculpas.
- ¿Qué? Estás loca Brittany, no lo haré.
Me miró desafiándome, acomodamos los papeles y ella seguía viéndome de esa manera que no me gustaba. “Ok, le hablaré y me disculparé” ella sonrió, agarró su celular y marcó el número de él, aún conservaba el papel que él le dio, eso me enfureció pero tomé el celular y esperé a que me atendieran.
- Hola -dijeron.
- ¿Eres Mark? Habla Santana López.
- Soy yo, ¿qué quieres? Ya arreglé todo con tu abogada.
- Lo sé, sólo quiero ofrecerte una disculpa, estuve mal, lo siento.
- Oh… gracias.
- Muy bien, te dejo entonces.
- Oye, ya que todo está arreglado, ¿me pasarías el número de Britt?
Brittany estaba escuchando todo, la miré y ella notó que lo que el bailarín dijo me molestó, entonces le dije a ese tipo lo siguiente:
- ¿Aún no te ha mandado un mensaje? No es que sea mala pero, ¿no crees que eso significa algo? No te hagas muchas ilusiones…
- Oh… tienes razón, gracias de todos modos Santana.
- Adiós.
Britt no estaba muy conforme con eso, me miraba enojada pero al final se rió “¿Por qué le dijiste eso?”, entregándole su celular le dije: “No pensaras salir con él ¿verdad? Por lo menos yo no te dejaré”. Ella sonreía y no dijo nada más, salí de la oficina sin decir nada más, ya no podía controlar mis celos y ella se estaba dando cuenta de eso.
Cuando Quinn regresó pactamos practicar en mi casa, almorzamos juntas y le conté todo lo que pasó con Britt el sábado.
- O sea… ¿piensas que ella siente algo por ti?
- ¿Acaso no lo ves? Lo siento Quinn, sino ella se hubiera apartado, me hubiera golpeado o algo por el estilo. Pero no hizo nada de eso.
- No te ilusiones mucho, ella aún sigue con Sam, recuérdalo.
- Ok… cómo tu digas. Esta canción irá dedicada a ella.
- Oye, esa canción es para Rach.
- Lo sé, pero también para Britt, ella ya lo sabe, por cierto vio las fotos del bailarín.
- ¿Cómo?
- Se cayeron algunos papeles, me obligó a pedirle disculpas a ese imbécil.
- ¿Ella? Vaya Santana, si que te trae mal Britt.
- Estoy enamorada Quinn…
- Ok, esto es demasiado para mi, ¿Qué pasó con mi amiga? Estás muy melosa.
- Es el amor Quinnie…
- Suficiente, vámonos, hay una canción que preparar para nuestras amadas.
Nos fuimos a la empresa, estábamos en mi oficina planeando como cantar la canción, Britt miraba y se moría por saber qué canción era, eso me causaba risa, ya quería que fuera martes así podría cantarle y demostrarle lo que sentía. Con Quinn ensayamos toda la noche, Rachel se encargaba de la fiesta, todo saldría perfecto.
El martes llegó, Britt le confirmó a Quinn su participación en la fiesta eso sí, iría con Sam. Él era lo de menos. Fabiola también iría, Carla, y algunos socios también. Todos estaban pendientes de la fiesta de esa noche, hablaban sobre la ropa que usarían y los regalos que llevarían, esto parecía una boda. Quinn no parecía nerviosa, estaba feliz de estar enamorada de esa enana, eran felices juntas.
La jornada laboral terminó y la hora de la fiesta llegó. Yo estaba lista para disfrutar de la noche, curiosamente el hecho de que Britt asista junto a Sam no era un factor que influyera en mi de manera negativa, él era mi competidor, tenía la ventaja pues era el novio de ella pero no la dejaría ir sin antes luchar, ahora si ella me decía que realmente no estaba interesada en mí, dejaría de insistir, pero ella tendría que mostrarme que no le intereso, hasta ahora me demostraba lo contrario.
La gente comenzaba a llegar, Rachel estaba contentísima, Britt llegó junto con Sam, lucía hermosa, tenía un vestido gris no muy largo, ni muy corto, su pelo estaba recogido. Sam la llevaba a todos lados de la mano, no la dejaba sola un instante, yo solamente estaba al pendiente de ella, en un instante ella me miró, sonrió y se soltó del agarre de Sam, se acercaba a mi sonriendo, yo hice lo mismo, me abrazó y me besó en la mejilla.
- ¿Ya me dirás que canción cantarán?
- Aún no… debes escucharla, lo que te puedo decir es que es un popurrí…
- Oh… ¿en serio?
- ¡Claro! Te gustará, lo prometo.
- Quinn le dedicará esa canción a Rachel, tú ¿a quién se la dedicarás?
- Ummm… no lo diré públicamente, eso podría traerme problemas, no quiero ser la tercera en discordia…
- Pero esa persona debe saber que le dedicas la canción, sino, no tendría sentido.
- Descuida, esa persona sabe que se la dedico.
Ella me miró desconcertada, la verdad que no me animaba a decirle que era para ella la canción, pero supongo que se daría cuenta, algo me decía que entendía mis indirectas. Regresó junto a Sam, yo me dispuse a pasarla bien con algunas personas que conocía allí. La noche avanzaba y Quinn anunciaría el momento de cantar, ella pidió un micrófono y solicitó la atención de todos: “Muy bien, les agradezco que estén aquí acompañándonos, son tres años de puro amor, a veces discutimos pero el amor prevalece ante todo, jamás pensé enamorarme de la forma en la que lo hice de Rach, ella es todo para mí, pero siento que no puedo expresar concretamente todo lo que digo, por eso elegí dos canciones que representan lo que siento, pero así como Rachel y yo somos dos personas diferentes al igual que las canciones que elegí, decidí unirlas y hacer una sola canción, eso representa nuestra relación, la perfecta mezcla entre dos personalidades. Juntas hacemos una linda melodía amor, esta canción es para ti”. Después del meloso discurso de Quinn me hizo señas así agarrara un micrófono y cantáramos, Britt no dejaba de verme, yo tampoco, la música sonó y Quinn comenzó a cantar, ambas nos turnábamos para dar rienda suelta a ese popurrí.
Cherish is the world I use to describe
All the feeling that I have hiding here for you inside
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how “ times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish the thought
Of always having you
Here by my side (oh baby I)
Cherish in the Word that more
Tan applies
To the hope in my heart each time I realize (uhhh uhhh)
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish the thought
Of always having you
Here by my side (oh baby I)
(Who? You!) Can´t get away I won´t let you (Who? You!)
I could never forget to
Cherish in the Word I use to remind me of your love (your love)
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish the thought
Of always having you
Here by my side (oh baby I)
Cherish the joy
You keep bringing i tinto my life (I´m always singing it)
Cherish your strenght
You got the power
To make me feel good (and baby I)
Cherish the thought
Of ever leaving
I never would You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish me as much as I
Cherish you
Cherish the thought.
La gente bailaba mientras cantábamos, Rach estaba emocionada, al terminar la canción se abrazaron y se besaron, la gente alrededor las aplaudía, miré hacia donde estaba Britt, ella sonreía pero también la noté preocupada, tal vez me excedí con la canción, pero realmente era lo que estaba sintiendo.
El baile seguía, estaba con un grupo de personas bailando, noté que Britt no bailaba, Sam menos, de repente Fabiola me agarró y me llevó a un lugar apartado donde no había gente, ella estaba un poco ebria y me dijo: “Quiero hacerlo contigo esta noche”. Me sorprendió su ofrecimiento, en otra circunstancia lo aceptaría pero ahora era diferente, pretendía cambiar mi forma de ser sólo por Britt, quería ser merecedora de su amor y no me aceptaría si yo me acostaba con la primera mujer que se me ofreciera, desde que la conocí algo cambió en mi, ella era la indicada para mi, entonces haría las cosas bien.
- No puedo Fabiola, estoy interesada en otra persona.
- ¿En esa mujer? ¿La tal Marcia?
- No, no te diré quién es, pero respeta mi decisión, no insistas.
- Santana te ofrezco mi amor, ¿no sientes lo mismo que yo?
Dijo eso y me besó a la fuerza, sostenía mi cabeza con sus manos, abrí mis ojos y vi que Brittany estaba mirándome, ¡Demonios!, con esfuerzo logré zafarme, Britt ya se había ido, estaba intranquila y furiosa con Fabiola, quise irme y ella me agarró, le di una cachetada diciéndole que ni se le ocurra volver a hacer eso. La dejé allí en ese lugar y me dispuse a buscar a Britt. No la podía encontrar, estaba desesperada, miraba a todos lados y no la encontraba, tal vez se había ido, me maldecía. Noté que Sam estaba hablando con un grupo de hombres, entonces eso quería decir que ella no se había ido aún, a menos que haya decidido irse sola. Tal vez estaría en el baño; me dirigí hacia ahí, había muchas chicas, esperé un poco y Britt salió de un cubículo, se lavo las manos y se acomodó su cabello. La miré pero ella no hacía contacto conmigo, me estaba ignorando, no quería verme pero sabía que estaba allí viéndola.
- ¿Necesitas algo Santana? -me dijo.
- Quiero hablar contigo.
- ¿Sobre qué? -dijo mirándome con cierta decepción.
- Yo… …. -no supe que decir, no sabía cómo justificar lo que hice.
- Ya sé para quien era la canción -me dijo y se fue.
No la seguí, dejé que se fuera al lado de Sam, ¿por qué debía darle explicaciones? Me sentía como una idiota, pero ella se enojó conmigo, ¿acaso también estaba celosa? Por un lado eso me generaba satisfacción, pero a la vez angustia, no quería que pensara que estaba jugando con ella, tenía que arreglar lo que pasó. Me armé de valor y crucé todo el salón en dirección a donde ella estaba, me le puse en frente y ella se sorprendió de eso. Sam me miraba, no entendía que pasaba ahí, sin dejar de mirar a Britt me acerqué a su oído y le dije: “No era para ella la canción” ella soltó a Sam, y me dijo: “No te creo, adiós”. Se apartó de mí y se fue con Sam. Quedé sin nada, me enfadé y también me fui del lugar, me despedí de las agasajadas y me dirigí a casa, al final no todo había salido como pensaba, estaba odiando a Fabiola, no lo podía soportar más. Me dormí con rabia, al día siguiente tendría que hablar bien con Britt y aclarar esto, por un lado lo bueno era que ella sentía algo por mí, no era en vano todo lo que estaba haciendo.
Desperté con pereza, podría no ir a trabajar pero debía hablar con Britt. No desayuné, me duché y me fui directamente a la empresa. Los que asistieron a la fiesta de Quinn llegaban con una cara de resaca tremenda. Carla estaba bien, ella se fue temprano de la fiesta, Britt no llegaba. Después de media hora Quinn llegó.
- San, ¿por qué te fuiste anoche?
- Britt se enojó conmigo, siéntate, te contaré.
Quinn se sentó y le conté lo que pasó la noche anterior, le comenté mi suposición sobre los celos de ella.
- Me lo dices y no lo creo, ¿estará celosa?
- ¿Lo dudas? ¡Claro que son celos!
- Pero ella me dijo que no era celosa…
- Pues te habrá mentido.
Estábamos hablando de eso y Britt llegó con Sam. Él tenía un traje gris, la noche anterior estaba con un traje oscuro, pero ella… ella tenía el mismo vestido que la noche anterior, su pelo ya no estaba recogido, lo tenía suelto y húmedo. Miré eso con detenimiento, ellos durmieron juntos, de eso no tenía dudas. Algo dentro de mí explotó, Quinn notó eso y me preguntó que me pasaba, “Britt durmió con Sam, tiene el mismo vestido que anoche”. Ella volteó a mirarla, después centró su mirada en mí.
- San, ella es su novia.
- Lo sé… creo que me equivoqué con ella.
- Santana, no insistas con esto, enfócate en otra cosa, no te ilusiones más.
- Déjame sola, -Brittany miraba a mi oficina- cierra la persiana.
Quinn obedeció, la imagen de Britt desapareció, quería llorar, mi pecho era invadido por una sensación horrible, me dolía el alma, pero no lloraría por ella, no lo haría.
Toda la mañana estuve allí encerrada, Brittany ni siquiera me buscó, de seguro estaba enojada, yo no la buscaría, menos sabiendo que la noche anterior se revolcó con ese imbécil. Comenzaba a odiarla, los celos me ganaban, ella no era nada para mí pero odiaba la idea de imaginarla con él. Llegó la hora del almuerzo, salí de mi oficina y Britt estaba charlando con Carla sobre la fiesta de Quinn, “Me voy, regreso mañana, puedes irte Carla”. Ni siquiera miré a Britt, Carla se sorprendió de mi actitud y me dijo:
- Santana, tienes una reunión a las tres.
- Pásame la dirección del lugar por mensaje -dije sin mirar atrás.
“Santana espera”, dijo Britt, pero yo seguía mi camino, entré en el ascensor, la miré y ella dijo nuevamente “San, espérame”, no le hice caso y las puertas del ascensor se cerraron. Me arrepentía por lo que acababa de hacer pero los celos me dominaban, si seguía viéndola terminaría insultándola y quería evitar eso.
Estaba en mi casa almorzando, mi nana notó que algo no andaba bien pero no preguntó nada, simplemente esperaba que le dijera el por qué de mi actitud, pero yo no le decía nada. “Dilo” dijo ella levantando mi plato de comida, la miré y le dije: “Ella se acostó con él anoche, ya sé que es su novio, pero, la estoy odiando por eso”. Mi nana no dijo nada, me levanté de la mesa y me encerré en la biblioteca, Carla me envió un mensaje con la dirección del lugar donde sería la reunión. Antes de las tres me fui a ese lugar.
Entré en el edificio, me recibieron y me llevaron a un salón, ni bien entré vi una cabellera rubia conocida, era Brittany, estaba vestida de otra forma, por lo menos tuvo la decencia de cambiarse de ropa, pero no entendía que hacía ahí. Se dio la vuelta y me vio.
- ¿Qué haces aquí? -dije.
- Quiero hablar contigo.
- Esto es una reunión de trabajo.
- Te acompañaré, luego hablaremos.
Los empresarios llegaron y la reunión comenzó, al cabo de una hora nos estábamos despidiendo, Brittany se iba conmigo. Yo seguía seria, al salir del edificio ella me dijo:
- ¿Por qué estás enojada?
- Anoche te enojaste y no te pedí explicaciones, no hagas lo mismo conmigo ahora.
- Ok… ¿qué te parece si dejamos de lado todo eso y continuamos cómo estábamos?
- ¿Y cómo estábamos?
- Como amigas.
- ¿Amigas?... ¿Eso quieres?
- Sí.
- Ok… nos vemos.
La dejé sola. ¡Maldita sea! Todo se arruinó, quería matar a Fabiola, también a Sam, me odiaba rotundamente, ella no quería estar conmigo y eso dolía.
…………………………………………….
Santana me dejó sola afuera del edificio. Estaba muy enojada conmigo, yo estaba muy confundida y no me gustaba esta situación. Creí que la canción que cantó era para mí… Cherish is the world I use to describe all the feeling that I have hiding here for you inside… yo cantaba la canción ni bien me acordaba la mezcla que hicieron; sin embargo estoy confundida, ella cantaba y me miraba a mí, la otra noche casi me besó, ¿habrá cambiado de parecer en unos días? Fabiola la besó en los labios, Marcia también lo hizo, pero lo hizo a propósito, me vio y le robó un beso.
Santana me dijo que la canción no era para Fabiola, ¿será para mí? Ella me confundía, quería besarme, pero estoy con Sam, él no se merece que le sea infiel, es atento conmigo sin embargo, mi cariño es diferente, lo quiero mucho pero hay algo que me tiene nerviosa, Santana me mira y siento el impulso de mirarla también, ella sonríe y me contagia eso. Si está triste yo también lo estoy pero quiero hacer algo para que ella cambie de humor. Cuando me defendió de mi papá simplemente quería estar abrazada a ella, la necesitaba a mi lado pero Sam me decía que ella se estaba abusando de mi amistad, según él ella decidía por mí, pero no coincidía con él, ella sólo me motivaba para seguir adelante con mi sueño, me sorprendía que él hablara así de ella pues era su admirador.
A Sam no le gusta la idea de que baile, es celoso, teme que lo deje pero si él no me apoya en esto obviamente discusiones tendremos. No estaba dispuesta a renunciar a esto ahora, Santana me ayudaría y eso es lo que quería que hiciera mi novio. Ella se estaba portando bien conmigo, hizo bastantes cosas en tan poco tiempo, lo hacía con buenas intenciones, lo notaba. Cada vez que me abrazaba lo hacía con mucha fuerza como si no deseara soltarme, yo me dejo abrazar por ella sin problemas, me gusta sentir el calor de su cuerpo, pero a la vez me confunde, ¿será que desea algo conmigo? Siento que le gusto pero no sé si eso es sólo algo temporal o definitivo. Lo que sé es que a ella le gustan las niñas, inclusive sé que las besa, tal vez sólo quiera besarme, la verdad es que también me gustaría besarla, no he besado a una mujer antes. Alexandra quería besarme, ella quería que fuera su novia y nos fuéramos juntas a buscar el éxito en el baile, apenas conocía a Sam y él me agradaba pero lo que no me animé a hacer es dejar a mis papis. No era justo que yo me fuera huyendo, Alexandra me dijo que estaba enamorada de mí pero a pesar de eso se fue. Recuerdo que bailábamos juntas y ella siempre me abrazaba y me acariciaba, eso me estremecía pero a la vez me daba miedo, no entendía muy bien lo que ella me hacía sentir, cuando se despidió de mi y se fue de Ohio me dijo que Sam no era para mí, y deseaba que la próxima vez que me vea sea con una chica, yo no entendía eso, le dije que yo no me veía estando de novia con una mujer, ella sonreía y me dijo: “Ojalá encuentres a la persona adecuada” pensé que me dijo eso como diciendo: “Oye, yo soy la adecuada” pero no volví a saber de ella. Cuando la vi en Inglaterra ella miró a Santana y yo automáticamente le aclaré que era mi socia, temía que interpretara mal las cosas, realmente la quise muchísimo, significaba mucho para mí. Con ella me sentía completa en esos años, tenía los mismos sueños que yo, pensaba igual a mí y nuestros gustos eran similares, a ella le gustaban las chicas, como coincidíamos en todo quizás por eso pensó que a mí también me gustaban las chicas. Ella me decía, “Mira Britt, observa a las chicas mientras bailan, ¿no ves lo bellas que son?”. Yo miraba a las chicas, en especial las de Ballet, todas con sus cuerpecitos frágiles similares al mío, eran lindas no lo negaba pero no nacía en mi la necesidad de estar con una de ellas. Alexandra no salió con ninguna de ellas pero si sé que a varias besó. Ella me contaba sus hazañas, yo simplemente me reía con incomodidad, ella más una vez intentó besarme y yo me negaba, siempre me decía “¡Qué suerte tendrá la que te bese!”. Con Alexandra íbamos a todos lados, si bien en la escuela íbamos a salones diferentes, siempre nos encontrábamos para bailar con las porristas o en el Club de canto, también practicábamos ballet, a veces practicábamos en mi casa o en la suya, mis papás casi nunca estaban en casa, nunca llegaron a conocerla totalmente, ella simplemente era “Ale, mi compañera”. En tres años nos hicimos grandes amigas, después conocí a Sam y ella se puso un poco celosa pues él me invitó al baile de graduación y allí me besó, nunca antes me habían besado, estar con él era lindo, pero a Alexandra no le gustó y fue ahí cuando se le ocurrió la idea de escaparnos. Sólo era un plan, pero con los meses ese plan se iba transformando en una realidad, llegado el momento no luché por lo que quería, y ella no se detuvo, siguió adelante. “Te quiero Britt, te quiero pero no como a una amiga o a una hermana, sino por la mujer que eres, ¿estás segura que te quedarás?” ambas llorábamos, la abracé y le dije que me quedaba en Ohio. Ella intentó besarme pero no se lo permití, pensaba en Sam. Ella lloró y dejó un beso en mi mejilla, puso sus dedos en mis labios y lanzó un beso al aire. Los días siguientes a su despedida fueron horribles, mi única compañía era Sam, él me acompañó desde ese momento, pero de ese tiempo hasta acá siento que hay algunos cambios en mí. Sé que él quiere casarse conmigo, formar una familia y todo eso, yo también deseo eso pero no ahora, además sus últimas actitudes no me gustan.
Después del problema con mi papá mi mamá reprimió a Sam, le dijo que él no era merecedor de mí si mantenía esa postura negativa ante mis deseos por bailar. Cuando él me buscó después de eso, simplemente me besó y me abrazó; me dijo que no podíamos estar separados pues éramos el uno para el otro. Cuando le pregunté lo que pensaba sobre la propuesta del director me dijo que llegado el momento lo hablaríamos dado que eso no era seguro, que esas obras musicales eran protagonizadas por bailarinas profesionales. Eso me desilusionó un poco, él no creía en mí como lo hacía Santana.
Llegué a casa después de mi encuentro con San en el hotel junto a los empresarios y practiqué toda la noche, bailaba con entusiasmo, debía estar bien preparada por si Ryan me llamaba. Santana me dijo que llamaría y le creí, confiaba en ella, por más que estuviera enojada, ella me ayudaría.
Ahora el tema era ¿por qué ella estaba enojada? Yo sé que me enojé por la canción, pero me dio rabia todo ese juego que hizo, yo quería que esa canción fuera para mí, era mi canción no de Fabiola, San la cantó para mí. Pensar en eso me enfurecía, pero al día siguiente ni bien desperté ya quería verla, no podía estar enojada con ella, pero cuando nos vimos ella me miró enfadada, se encerró en su oficina y decidí no molestarla, pero sí que estaba enojada, cuando se fue de la empresa no quiso hablar conmigo. Realmente no sé qué le pasó… no entendía su actitud, quería hablar con ella, arreglar todo esto, pero no sabía cómo actuar, ella estaba así por algo que hice pero no sabía que hice mal.
Santana tenía un carácter particular, no era mala sólo que algunas personas no le caían bien, por ejemplo Mark, él era un buen chico pero ella no lo quería, no sé muy bien por qué, era como si estuviera celosa, ¿eso significaba algo? Inclusive ella le pegó y como fue también su decisión, no permitió que él se volviera a acercar a mí. Realmente esa actitud no me molestaba, yo quería que ella esté bien y si él le molestaba pues era mejor no tratarlo y evitar que ella se enfadara más. En realidad aunque no me negué a ese deseo de ella, algo no hice bien, por eso se enojó. De eso debíamos hablar.
La mañana siguiente, como la mayoría de las veces, Sam estaba en la sala esperándome para irnos juntos a la empresa. Mi mamá y él casi no se hablaban, me tomó de la mano y nos íbamos cuando mi mamá dijo:
- Britt, invita a cenar a Santana y a Gustavo esta noche, tu padre ya se fue y me olvidé de decirle que los invite.
- ¡Wow! ¿Qué cocinarás? ¿Puedo invitar a la nana de San?
- ¡Claro hija! Los espero a las ocho, el menú será sorpresa.
Salimos con Sam, él estaba molesto, lo noté en su rostro, sin que yo dijera nada él dijo:
- Tú madre está enojada conmigo, deberíamos hablar con ella.
- No te preocupes, el enojo se le pasará, a propósito, ¿por qué está enojada?
- ¿Es una broma Britt?
- No, claro que no, no lo sé…
- Santana la convenció de que arruiné tus sueños, sabes que eso no es así.
- ¿Cómo es entonces?
- Britt, no te ilusiones mucho, tener éxito en eso es difícil, sólo algunos lo logran, no todos.
- ¿No crees que lo logre?
- Es difícil Britt, sólo trato de ser realista. Oye, por lo que dijo tu madre, ¿tampoco estoy invitado a cenar esta vez?
- No lo sé Sam…
- En vez de invitar a los sirvientes de Santana, podrías invitarme a mí.
- También puedes asistir.
- Lo dices cómo si no te quedara de otra, soy más importante que ellos, soy tu novio Britt.
- ¿Podemos escuchar música?
Él me miró y prendió el estéreo, su actitud no me gustó, algo estaba cambiando en él, o tal vez siempre fue así y recién podía verlo. Lo desconocía y me sentía rara, estaba triste por dentro; quería arreglar mi conflicto con Santana, necesitaba estar bien con ella.
Llegamos a la oficina, Santana también llegaba con nosotros, nos miró y noté que seguía disgustada. Entramos juntos en el ascensor, la saludé, Sam hizo lo mismo y ella nos respondió con pocas ganas. No nos habló durante el breve trayecto que nos llevaba al séptimo piso del edificio. No me gustaba estar así con ella, teníamos que hablar seriamente. Llegamos a nuestro piso y Sam me tomó de la mano para salir juntos del ascensor, Santana vio eso y giró sus ojos hacia arriba, Sam no notó eso pero yo sí, ella se dio cuenta de que la vi y bajó su mirada. Sam me llevaba de la mano y yo miraba hacia atrás sonriéndole a Santana, ella simplemente me miraba sin decir nada. Sam intentó besarme pero no lo dejé, le corrí la cara y me besó cerca de mis labios. “¿Qué pasa?” me dijo, y no sabía que responderle, me miraba pero mi mente pensaba en Santana. Ella entró en su oficina, la persiana seguía cerrada, miré con nostalgia hacía allí y Sam volvió a preguntar “¿Qué pasa? Responde Britt” sin pensar en mi respuesta dije: “Santana tiene cerrada su persiana” Sam me miró y no entendía nada. “Te busco más tarde” me dijo y entré en mi oficina. Quinnie no había llegado, entonces salí de mi oficina, Carla estaba charlando con una chica cerca del ascensor, me crucé y golpeé dos veces la puerta, abrí y entré. Santana estaba sentada detrás de su escritorio.
- ¿Necesitas algo Brittany?
- ¿Por qué hiciste ese gesto? En realidad fue gracioso, no me puse a pensar que tal vez mi relación con Sam pueda incomodar un poco, él es muy cariñoso.
- Me he dado cuenta de eso, sólo que es un imbécil… emmm… perdón, no debí decir eso, disculpa.
- Estás enojada conmigo, no lo entiendo San, ¿qué hice de malo? ¿Es por Sam? Mi mamá también está enojada con él.
- ¿Nicole? ¿Por qué?
- Él no está de acuerdo con que baile, no le agrada la idea y a mi mamá eso no le gustó.
- Brittany, no dejes que nadie obstaculice tus deseos de bailar, él podrá ser tu novio pero tengo razón al decir que es un imbécil, no entiendo por qué estás con él.
Dijo eso y cerró sus ojos de golpe, sonreí, ella se arrepentía de lo que dijo, es muy tierna, no entiendo por qué algunas personas le tienen miedo. “Britt, disculpa, no debí decir eso” me dijo mientras abría sus ojos. Sonreí, ella hizo lo mismo, la formalidad la dejó de lado, eso era un buen avance. “Mamá te invita a cenar esta noche, también a Gustavo y a tu nana, espero asistan” le dije, antes de que saliera preguntó:
- Espera, ¿Sam irá?
- No creo… ¿Prefieres que él no esté?
- Es tu novio, supongo que él estará.
Dijo eso con sarcasmo, lo noté, ella no quería que él estuviera presente, la miraba, quería entender si esos eran celos, yo nunca sentí celos por nadie, entonces no estaba segura si lo que ella sentía eran celos. “Santana, ¿estás enamorada?” ella se puso colorada, abrió sus ojos de par en par, no podía contestarme, tal vez fui muy directa.
- ¿Por qué lo preguntas? -dijo ella.
- Ummm… olvídalo. Te espero en casa para cenar.
Me fui a mi oficina, Quinnie estaba tarareando una canción, me miró y dijo:
- Buen día, ¿estás bien Britt?
- Tú estás enamorada ¿verdad? -dije.
- ¿Qué?... bue, sí, así es. ¿A qué viene esa pregunta?
- ¿Estar enamorada te hace sentir celos?
- Ummm… -dudaba al contestar- a veces sí, no siempre, pero generalmente sí.
Miré hacia la ventana, la persiana de San estaba cerrada, quería verla, pero ella no me dejaba. “Nunca sentí celos por Sam, ¿eso quiere decir que no estoy enamorada de él?” dije y al instante la miré, Quinnie me miraba sorprendida, se acomodó en su silla y me dijo:
- ¿Crees que no estás enamorada de él? Britt, son tres años de relación con él, deberías saber que sientes. ¿Por qué lo dudas?
- Siento que él no me comprende, tal vez no debamos estar juntos, necesito estar con una persona que me quiera por lo que soy, que me acepté por lo que realmente soy.
- ¿Cómo eres?
- Soy una bailarina, una soñadora.
Quinnie sonreía, se acercó a mí y me abrazó, la charla apenas comenzaba, se sentó a mi lado, y la escuché con atención.
- Britt, si crees que él no es el adecuado para ti, pídele tiempo. Estás en una etapa de cambios muy importantes, concéntrate en ti ahora, que nada más importe, bastante tiempo has estado posponiendo lo que realmente deseas hacer, no te detengas y lucha por eso, que nada ni nadie sea un obstáculo; la persona que realmente merezca estar contigo debe aceptar lo que deseas hacer sin condicionarte. Siempre has sido “Britt la empresaria”, nadie conoce tu faceta de bailarina, esa es otra Britt, la verdadera. Sam no la conoce, no sabemos cómo es esa Britt, no sabemos sus gustos, ni que tiempo dedica a sus amigos y familiares, tampoco sabemos qué tanto la veremos pues esa bailarina sólo desea algo: triunfar. Ese éxito que busca sólo lo logrará practicando arduamente, y allí es donde todo lo demás queda en un segundo plano, no digo que no sea importante la familia y las relaciones con otras personas, pero la mente de la bailarina tiene sus prioridades. Britt, tus prioridades ahora son el trabajo aquí, tu relación con Sam y con tus padres, pero ¿te pusiste a pensar en cómo será tu vida si decides dedicarte a lo que realmente sueñas? Tus tiempos cambiarán, conocerás otras personas, este mundo empresarial no es el tuyo, podrás ser muy buena en los negocios pero no perteneces aquí. Si dedicas tiempo para ti, será ideal, aún no te conoces totalmente, conócete y quiérete tal cual eres, una vez que hagas eso la persona que deba estar contigo, te querrá por lo que eres. Si Sam es el indicado, esperará y amará la persona que realmente eres, no éste disfraz.
- Quinnie… te quiero, gracias por tus palabras, pero no quiero que Sam sufra.
- Britt, que le pidas tiempo no significa que sea un adiós, él debe entender que tienes otras prioridades ahora, si él no acepta eso pues te está perjudicando, y eso es un obstáculo para ti. Si te ama dejará que hagas lo que deseas hacer.
- Él es muy celoso, no aceptará esto, me pongo a pensar en sus celos, sé que me quiere mucho, por eso es así, tal vez yo no lo quiera igual, no soy celosa Quinnie.
- Que no seas celosa no significa que no lo quieras, ¿lo quieres realmente?
- Sí que lo quiero… pero el problemas es que creo que siento celos, pero no de él, sino de otra persona. Estoy muy confundida, no sé si son celos, jamás los he sentido por alguien.
- ¿Qué sientes? ¿Por qué crees que son celos?
- Siento muchas cosas, sólo deseo ser yo la persona a quien mire, me confundo porque también siento bronca, odio, pero yo no soy así, me desconozco.
- Son celos Britt.
- ¿Eso significa que estoy enamorada de esa persona?
- Tal vez…
Miré a la oficina de San, ¿estaba enamorada de ella?, estaba muy confundida. Quinnie me abrazó y me dijo: “No te hagas un lío, conócete primero, mira, ni sabías que eras celosa”, la miré y nos reímos, ella tenía razón, mi vida estaba cambiando y Sam no tenía intenciones de seguirme. “Hablaré con Sam” le dije a Quinnie, ella me abrazó fuerte y siguió con su trabajo. Yo estaba nerviosa, tenía que hablar rápido con Sam.
Salí de mi oficina, necesitaba ver a Santana primero, no entendía por qué pero deseaba verla, entonces golpeé y entré en su oficina.
- Brittany…
- Dime… ¿Por qué tienes cerrada tu persiana?
- ¿Hay algún problema con eso?
- ¿Es algo que yo hice?
- Puede ser…
- ¿Qué hice?
- No tiene sentido que lo hablemos, mejor no insistas.
- Siempre haces lo que quieres Santana, generalmente yo estoy implicada en esas cosas y no quieres explicarme nada.
- ¿Perdón? ¡Oh… no me di cuenta que eras el centro del mundo!
- Yo no dije eso, sólo explícame por qué actúas así conmigo, haces gestos cuando estoy con Sam, me haces un juego mental con una canción que terminas cantándole a otra, golpeas a un amigo mío…
- ¿Resulta que ese estúpido es amigo tuyo? ¡No llevaba ni horas de haberte conocido!
- Es un buen chico.
- Pues vete con él, además de que baila dile que te cante canciones, ¿acaso no es eso lo que quieres?
- No te entiendo, no entiendo qué te pasa…
- ¡Maldita sea!... ¡Son celos Brittany! ¿acaso no lo ves? ¡Odio la forma en la que ese imbécil te mira, y odio sus malditas intenciones! Listo, lo dije…
No sabía cómo reaccionar, lo acababa de admitir, la miré y ella estaba asustada, no pude decir nada, ella se paró frente a mí y me dijo: “Lo siento, mejor déjame sola. No volveré a reaccionar así, perdón”. Estaba avergonzada, la abracé, me sentía feliz, eso significaba que la canción fue para mí. Me solté de su agarre y le dije: “Abre la persiana, es raro no verte. Te espero esta noche en casa, Sam no irá”.
…...............
Al instante en que salí de la oficina de San, ella abrió la persiana, le sonreí y ella lo hizo también; esa acción ya se estaba convirtiendo en costumbre, ambas sonreíamos al ver a la otra. Entré en la oficina de mi papi, Sam leía unos papeles y no entendía unas cosas. “Amor, ¿me ayudas?” sonó raro eso, sentía que él no tenía el derecho de llamarme así. Acepté ayudarlo, mi padre estaba reunido con Gustavo. Tardamos unas horas en terminar con eso, eran cerca de las once de la mañana y ya tenía hambre, “¿Ves que eres una genia con los negocios? Este es tu lugar amor” dijo intentando besarme pero corrí mi cara. Él besó mi mejilla y dijo “¿Qué sucede?” lo miré, estaba enojado. “Esta mañana me hiciste lo mismo, ¿acaso andas con otro?”, me asusté, tenía que hablar con él pero me daba miedo su reacción, sin embargo, estaba decidida a hacerlo, no podía posponer esto más. “Debemos hablar Sam.”
Eran las tres de la tarde, estaba volviendo a la oficina, había almorzado con mi mamá, ella ya estaba al tanto de mi última decisión. Había decidido hablar con Sam en un lugar que no fuera la empresa. Él me esperaba en la puerta de mi oficina, miré a la ventana, Santana estaba concentrada leyendo algo, hacía unos gestos adorables, “Sam, espérame abajo” le dije, él se sorprendió pero hizo lo que le pedía. Quinnie me miraba, “¿Hablarás con él ahora?” preguntó, la miré y le dije que sí. Salí de la oficina, Santana me vio, le dije adiós con la mano y ella sonrió.
Sam lloró, él cree que lo estoy dejando por otro hombre, le echa la culpa a Santana por animarme a bailar. Le explique que realmente bailar era mi sueño, no lo entendió, traté de persuadirlo con las cosas que Quinnie me dijo, y me dijo que nadie más que él me conocía. Estábamos en su departamento, estuvimos media hora discutiendo, él no aceptaba la idea de darnos un tiempo. Me senté en el sillón de la sala, miraba todo a mi alrededor, muchas veces había dormido allí, cada objeto de ese lugar lo acomodé yo, recuerdo que más de una vez me imaginé viviendo con él, todo eso me pertenecía de alguna forma y ahora tal vez nada de eso se cumpliría, no volvería a ver esa sala por un tiempo, no volvería a dormir en su cama, de repente nada de eso me pertenecía. Él daba vueltas por la sala “Dime quien es” repetía, yo no decía nada, pero insistía a cada instante. “Sam, sólo te pido un tiempo, si realmente debemos estar juntos, sólo el tiempo determinará eso”, él me miró y dijo: “Lo que quieres es revolcarte con otro”. Eso no lo soporté, me paré y me disponía a irme, él me abrazó y no me soltaba, repetía la palabra perdón a cada instante. “¿Por quién me tomas Sam? No soy una cualquiera”, él seguía pidiendo perdón sin soltarme. Me dolía verlo así, por un instante dudé si estaba haciendo lo correcto, iba a decirle que desistía de mi idea pero algo me dijo que eso sería peor a futuro. “Sam, déjame ir, por favor…” Le imploré, él no desistía, me estaba dando miedo esa situación, “Sam, debo irme”, le dije y él me agarró de mis brazos “¿Él te está esperando acaso?” me dijo con rabia, no lo miré, me soltó y exclamó: “Vete”.
Llegué a la empresa, mi papá estaba en su oficina, entré y hablé con él. Me miraba sorprendido.
- Britt, ¿lo dejas por otro hombre?
- No lo estoy dejando, sólo le pedí tiempo.
- Pues a mí eso me suena a ruptura. Hablaré con él, espero que esto no influya para mal en nuestros negocios.
- Lo siento papá…
- Hija, tu tendrás tus razones, no te reprocho ni me enojo, son cosas que pasan. Veremos a futuro que sucede.
Sam no regresó esa tarde, Quinnie ya estaba al tanto de todo, ambas estábamos triste por él, pero también sabíamos que era lo correcto, por el momento.
……………………………………………………………………………………….
Eran las ocho y ya estaba ansiosa por volver a ver a Britt, mi abuelo tardaba, estábamos invitados a cenar en casa de los Pierce. Después de mi pelea con Harry, la relación entre nosotros iba mejorando, de a poco, pero iba mejorando. Mi abuelo bajó por fin, sin más preámbulos nos fuimos a casa de Britt.
Llegamos y Nicole nos recibió, Harry entró en el salón, nos saludó a todos y nos invitó a comer unas botanas antes de la cena. Estábamos hablando, en realidad ellos charlaban, Britt no estaba, capaz andaba con Sam. Los celos me invadieron, me los imaginaba juntos, eso me mataría, algo tenía que hacer con eso, cada día me molestaba más verlos juntos, si bien hoy los noté raros, no debía confiarme, ella al parecer quería estar con un hombre, por más que fuera un imbécil. “¿Britt no está?” le pregunté a Nicole, ella me miró, y sonriendo pero concentrándose en levantar las cosas de la mesa me dijo: “Está arriba bañándose”. Le sonreí incómoda y le ayudé a levantar las cosas, mi nana lo iba a hacer pero le dije que ella allí era una invitada que ni se le ocurra hacerse la sirvienta.
Estábamos solas en la cocina, me miraba y sonreía, me armé de valor y le dije:
- Nicole, ¿por qué me miras así?
- ¿Así cómo?
- No lo sé, dímelo tú.
- San, veo que te preocupas por mi Britt, eso es tierno, veo que la quieres mucho. Desde niña has sido atenta con ella.
- Pues ella es sensible e inspira algo que no sé que es, pero lo que menos deseo es hacerle daño.
- Lo sé.
Dijo eso yéndose a la sala, me miró e hizo una seña para que la siguiera. Entramos el salón y Britt ya estaba allí saludando a todos, la miré y sonreí, ella estaba feliz pero a la vez la notaba un poco preocupada. Se acercó a mí y me abrazó. Sentí con ese abrazo que algo en ella había cambiado. Nos sentamos juntas en el sillón, ella agarró mi mano y no la soltó. Yo estaba feliz, cuando Nicole nos invitó a cenar, Britt se paró y me llevó de la mano a la mesa. Nicole nos deleitó con su comida, ella y mi nana hablaban sobre comidas, mi abuelo y Harry sobre negocios, con Britt sólo escuchábamos mientras nos mirábamos. Algo le preocupaba, decidí preguntarle sobre eso.
- Britt, ¿estás bien?
- Si...
- Pues no lo parece, ¿pasa algo?
Pensé que tal vez estaba incómoda por nuestra charla, ella sabía que sentía celos de ella, sabía que deseaba besarla. Me miró y dijo que se sentía bien, que luego hablaríamos. Todo estaba tranquilo, llegó un momento donde estábamos en silencio y mi abuelo decidió hablar, felicitaba a Britt por su decisión de bailar, le dijo que esperaba que eso no generara una distancia entre ellos. Britt le decía que ella también espera eso, realmente no sabía cómo serían sus tiempos, tal vez ya no iría a la empresa. Esa idea me estremeció, ¿qué haría si no volvía a verla? La miré con nostalgia, la extrañaría pero quizás era lo que estaba destinado para nosotras, prefería verla feliz haciendo lo que más le gusta antes de que esté sufriendo en un lugar que no era el suyo.
- Dime, ¿me visitarás? -preguntó mi abu.
- Claro, prometo hacerlo -respondió ella.
- ¿Cómo estás? Me enteré que tú y Sam ya no salen… -dijo mi abuelo.
Yo dejé de comer, mi nana y Harry miraron a Britt esperando una respuesta, Nicole me miraba, Britt estaba un poco incómoda, dejó de comer, me miró y le dijo a mi abuelo:
- Le pedí tiempo, eso no significa que sea definitivo, sólo que él lo interpretó así, y por lo que veo, mi padre también -dijo mirando a Harry.
- Britt hija, Harry me comentó eso por cuestiones de la empresa, ustedes tendrán sus razonas, sólo espero que eso no afecte sus negocios.
- No te preocupes Gustavo, eso no pasará.
Dijo eso y me miró, no podía creer que esto esté pasando, podía divisar las oportunidades con ella, por más que ella se fuera de la empresa chances tenía, podría visitarla todos los días, es verdad que siempre invertí en las obras teatrales sólo que nunca me inmiscuía mucho, ahora tenía la excusa perfecta, pero a la vez había muchas amenazas pues ella conocería gente que tuviera sus mismos gustos, gente con la cual la afinidad se daba en cuestión de minutos; pero eso no me detendría, chances había, podríamos estar juntas, una probabilidad había.
Luego de cenar pasamos nuevamente al salón, mi nana me miraba contenta, ella también pensaba lo mismo que yo, ella también amaba a Britt, de seguro me ayudaría a enamorarla. Yo no sabía de qué manera hablar con Britt, pero estaba tan emocionada que no tenía apuros en actuar, pero como dicen muchos, no hay que dormirse en los laureles.
El celular de Britt comenzó a sonar, ella miró y era un número desconocido el que figuraba en su pantalla, ella me lo dijo, sin embargo lo mismo atendió. Ella se sorprendió un poco, pero estaba feliz, pidió permiso y se fue en dirección a la cocina. Yo estaba molesta, quería saber con quien hablaba y por qué estaba tan feliz. “Ya vengo” dije, salí en dirección a la cocina, Britt no estaba allí, miré a un costado y había un pasillo, me acerqué poco y escuché que Britt reía, “¿Mañana? ¿Lo dices en serio? En realidad quisiera verte ahora” eso hizo que mis celos aumentaran, ella se vería con otro. ¿Era yo o no me estaba dando cuenta que me estaba convirtiendo en una ingenua? No podía creer que esto estuviera pasándome, Britt agregó: “Te veo mañana, un beso… También te quiero lo sabes… ja, ja, lo hablaremos, adiós, te quiero, siempre lo hice”. Quería llorar pero no lo haría, no dejaría que esto me afecte. Britt salió sonriendo del pasillo y me vio allí parada, se sorprendió y me dijo:
- San ¿estás bien? ¿Necesitas algo?
- ¿Por qué no me dijiste que ya no salías con Sam?
- Sólo le pedí tiempo.
- La mayoría de las parejas que se dan un tiempo generalmente no vuelven, ¿estás interesada en otra persona Brittany?
- Tal vez, no lo sé con certeza, no quería dañar a Sam, por eso le pedí tiempo para saber si realmente él es el indicado.
- El que te habló recién, ¿es un pretendiente?
- ¿Qué? No. -dijo muy convencida, pero con efusividad agregó- me llamó Alexandra, está en New York, quiere verme.
Me sentí estúpida por unos momentos, sentía celos de una amiga de Britt, la miré con vergüenza, ella estaba muy emocionada, eso me agradaba, Alexandra también la ayudaría con su sueño, Britt no estaba sola, eso me reconfortaba, pero a la vez me hacía sentir descartable, yo no pertenecía a ese mundo de baile, arte y glamour; Britt era lo contrario a mí, si bien me gustaba el Ballet e invertía en esa industria, lo mío eran los negocios. Nuestros mundos eran distintos, tal vez eso me atraía de ella, ese lugar fantástico que me describía era desconocido para mí, me atraía la idea de conocerlo pero sólo si era guiada por ella. Alexandra conocía todo eso, ella comprendía en su totalidad a Britt, eso me daba celos también, ¡era una maldita pendeja! por todo la celaba y ni siquiera era mi novia, apenas éramos socias y casi amigas. La distancia entre nosotras me molestaba, no pasaba de la franja de la amistad, estaba estancada allí y lo peor es que estaba locamente enamorada de ella.
- Mañana me veré con ella, en la noche podemos salir juntas, me encantaría que la conocieras más -dijo Britt.
- Está bien, por mi no hay problema.
- San, lo de Sam quería contártelo yo pero no tuve la oportunidad de hacerlo, sólo mis padres sabían y Quinnie, nadie más.
- ¿Quinn sabía?
- Si… no te enojes con ella, pretendía decírtelo, pero se me adelantaron.
- Lo entiendo. Te noté algo preocupada, me imagino que es por eso.
- No lo negaré, estuve tres años junto a él y fue difícil pedirle esto, no sé que pasará a futuro pero por el momento es lo mejor.
Me miró fijamente, me acerqué un poco más a ella y la contemplé detenidamente, era hermosa, quería que fuera sólo mía, pero eso sería imposible, deseaba abrazarla y subirla a la mesada mientras la besaba apasionadamente, mis ganas de desnudarla y hacerla mía eran enormes, si ella seguía mirándome de esa forma no lo aguantaría e intentaría besarla pero cerré mis ojos, suspiré pesadamente, de repente sentí sus brazos rodeando mi cuello, mis brazos se colocaron en su cintura, mi cabeza descanso en su hombro, no existía nadie más para mí en esos momentos, todo el maldito mundo dejaba de existir, sólo esa rubia lograba desconectarme de mis miedos a perderla, calmaba la rabia que sentía por Quinn dado que no me contó nada, además, Britt no me dijo nada de este “tiempo” que se daba con Sam, me transmitía paz, justo lo que necesitaba entre tanto caos que mi cabeza generaba. ¿Cómo se sentirá ella? Estaba triste lo sé, pero era otra Britt, la soñadora y realmente me volvía loca por ella, deseaba conocerla más, pasar más tiempo juntas, simplemente disfrutando de su felicidad. “Britt, la persona que esté contigo será muy afortunada” ella me miró y sonrió, “Yo también seré afortunada, porque con la próxima persona con la que esté, sé que será para siempre”.
Era hora de irnos, nos despedimos de los Pierce, al día siguiente nos veríamos, era medianoche, tan sólo debía esperar ocho horas y volvería a verla. Mi nana subió conmigo a la habitación, ni bien estuvimos solas la abracé feliz, ella sonreía. “Nana, será mía, ella es para mí”, ella me miraba y me hizo sentar en la cama, me miró a los ojos y me dijo: “Vi como te mira, la noto confundida, ve despacio hija, ella no es como las demás”. Claro que Britt no era como las demás, con ella todo era diferente, absolutamente todo. Mi nana se iba, antes de cerrar la puerta me miró, “Estoy enamorada” le dije, ella sonreía y me dijo: “¡YA ERA HORA!”. Me dormí, pensando en ella, en un nosotras no tan lejano.
El día que se asomaba era nublado, el frío invadía todo, llegué temprano a la empresa, Quinn llegó junto conmigo y mientras caminábamos hacia la entrada del edificio le dije:
- Debemos hablar, ¿cómo está eso de que no me cuentas que Britt y Sam ya no salen?
- No es algo que yo deba contarte.
- ¿Cómo que no? ¡Eres mi amiga!
- Pues sí. Pero esos son temas de Britt, San, ella está confundida, pero que ya no esté con Sam es un avance, él sólo la limitaba.
- Quinn, ella planea irse de la empresa, yo acepto eso, me encanta que siga sus sueños, pero no sé cómo seguiré si no la veo, conocerá otras personas y puede que yo no signifique nada para ella.
- Pues es verdad, conocerá otras personas, ya te lo dije más de una vez, no te ilusiones con ella San, puede pasar algo, y puede que no.
Mientras me decía esto Britt llegó junto a su padre, nos saludó con efusividad, caminamos juntas al ascensor, nos mirábamos y sonreíamos, Quinn, que estaba a mi lado, me mandó un mensaje de texto donde me decía: Déjala de mirar así, parece que estuvieras enamorada ¡ja, ja, ja! Sonreí. Llegamos a nuestro piso y cada una ocupó su oficina; a los minutos llegó Sam, vi que saludó desde la puerta a Britt, se dio la vuelta y me miró unos segundos, luego se fue. Si yo sufría por no poder estar con ella no me imagina él, ella le pidió tiempo, debió ser terrible, si yo hubiera estado con ella y me dijera eso creo que moriría, tal vez así se sentía él. Tenía miedo de pasar por eso, ¿qué haría si ella volvía con él o si eligiera a otra persona que no fuera yo? La miraba desde mi escritorio, moría por decirle lo que sentía, pero no era el momento, tenía que ir despacio, mi nana me lo dijo y si ella lo decía era por algo.
A media mañana Britt se fue. No volvió en todo el día. Sabía que estaba con su amiga pero me desesperaba la idea de imaginarla lejos de mí. Aproveché su ausencia para charlar con Quinn, mi amiga me contó todo lo que habló con Britt, me dijo: “Chances tienes, pero será cuestión de tiempo” me aclaró que Britt estaba pasando por cambios muy radicales, yo conocía parte de esa mujer, mis tiempos no serían los mismos de ella, al parecer muchas cosas nos separaban, es como si todo dijera: no deben estar juntas. Sin embargo Quinn me decía que todo es posible, ella y Rachel eran diferentes, en todo sentido, pero aún así estaban juntas, eso era un ejemplo para mí, debía luchar por Britt contra todo, ella no parecía oponerse, yo interpretaba eso como una buena señal; ella estaba celosa, ¿acaso eso no dice nada?
Regresé a casa a las siete de la tarde. Me duché y encendí el equipo de música. Pasaron unos minutos y mi celular sonó, era Quinn. Tenía dos mensajes de ella, uno que me envió veinte minutos antes, no lo había visto, me decía que Britt nos invitó a cenar junto con Alexandra si yo iría, como no respondí volvió a preguntar si iría, iba a responderle pero me llamó:
- San, ¿qué haces? ¿Irás? Con Rach ya estamos listas, nos esperan en el departamento de Alexandra.
- ¡Claro que iré! Pásame a buscar.
En menos de veinte minutos Quinn estaba en casa, y yo lista. Mi nana me vio apurada pero contenta, “¿A dónde vas mi´ja?” corriendo hacia la puerta le dije: “Cenaré con las chicas y Britt” ella sonrió y salí. Llegamos al departamento de Alexandra, Rachel estaba emocionada, ella adoraba a Alexandra, no dejaba de contarme sus proezas para llegar a ser la bailarina que era, en un momento Quinn preguntó sí Alexandra tenía novio, Rach contestó que un año ella se mostraba mucho con una chica, todos pensaron que eran pareja pero ellas nunca lo confirmaron, era un rumor apenas, nunca se le conoció un novio. Esa idea me inquietó, Quinn notó eso pero no me dijo nada. Me acordé de la forma en que ellas se miraban esa vez en Inglaterra, los celos otra vez, ¿y si Britt dejó a Sam por ella? Ellas se querían mucho, ella le dijo que la quería la noche anterior por teléfono, Alexandra era una compañera perfecta para Britt, la entendía, la conoció desde hace tiempo, incluso quiso escaparse con ella, de repente ella se convirtió en una amenaza para mí, podía brindarle más cosas a Britt que yo, estaba nuevamente a la deriva, me sentía impotente, no dejaría que alguien me separe de ella, no lo permitiría.
Entramos en el departamento, era enorme, estaba decorado con colores claros, rosa, lila, beige y blanco. Britt nos recibió, lucía contenta, nos presentó a Alexandra, la más emocionada era Rachel, prácticamente se le tiró encima. Alexandra también la conocía, “La talentosa Rachel Berry” así le dijo, Quinn me miró y me dijo: “Creo que Alexandra genera celos en ti y en mí” la miré y era verdad, mi amiga estaba celosa porque su novia estaba embobada con la bailarina. Britt no era la excepción, se sentó al lado de ella y mientras hablaba colocaba sus manos en las rodillas de Alexandra, ésta cuando contaba algo constantemente tocaba a Britt. Yo estaba sentaba lejos de ellas, a Quinn pareció no molestarle que su novia estaba embelesada con esa bailarina, pues estaba igual, concentrada escuchándola, realmente pasó por muchas cosas, la gente le puso muchos obstáculos pero luchó y hoy es reconocida internacionalmente “Ayudaré a Britt a triunfar, juntas lo haremos, hoy hablamos con Ryan, dentro de un par de días comienza a practicar” yo no lo podía creer, Quinn y Rachel la felicitaban, yo estaba en shock.
- ¿Cómo está eso? Yo invertiré en esa obra, Ryan no me dijo nada.
- Hablé con él, me dijo que te lo comentaría -respondió Britt.
- Pues no lo ha hecho aún -respondí con fastidio.
- Lo dijiste muy bien, “aún” no lo ha hecho, pero lo hará, yo participaré, será un éxito Santana, Britt es genial -respondió Alexandra.
- ¡Brindemos! -dijo Rachel.
Entre risas brindaron, yo no despegaba mi mirada de Alexandra, hablaba mirando a Britt, se dirigía a ella solamente, le gustaba, no tenía dudas. Britt sólo le sonreía, ¿acaso estaban coqueteando? No podía soportar eso, salí al balcón, tenía que hablar con Ryan, estaba feliz por Britt pero me enfurecía ser la última en enterarme de todo lo que le pasaba a ella.
- ¡Santana! Iba a llamarte mañana.
- ¿Mañana? ¡Por qué demonios me entero por terceros que harás el musical!
- Santana cálmate, te dije que lo haría, sólo tenía que confirmarlo, es lo que iba a hacer mañana, ¿quién te lo comentó? De seguro fue Britt, ¿no son amigas? No entiendo tu enojo.
- Me lo dijo Alexandra, no sabía que ella participaría, no me gusta no tener en orden las cosas en las que invierto.
- Santana, las veces que trabajaste conmigo dejaste todo en mis manos, jamás te involucraste mucho, no soy uno de tus socios empresariales, ¿por qué ahora el cambio?
- … Perdón, tienes razón, me sobresalté, mañana te espero en mi oficina.
- Así será, nos vemos Santana.
Él tenía razón, me molestó la idea de que otras personas estuvieran con Britt, siempre invertí en las obras musicales pero no me involucraba mucho. Veía a Alexandra, a ella parecía interesarle Britt, estaban riendo como enamoradas. Me molestó la idea de imaginarlas juntas, de seguro practicarían juntas, sus cuerpos sudados rozarían a cada instante mientras bailen, ella podría tocarla tal como lo hizo Britt conmigo esa vez que descubrí su mini estudio de baile…
Alexandra me vio fijamente por unos instantes, yo no dije una sola palabra pero mi mirada le decía que si llegaba a tocar a Britt la mataría.
Este era el regalo de San Valentín, espero les guste y disculpen la tardanza!
Besos y gracias por leer!
Capítulo 7: Sincerándonos.
Era lunes, ya estaba en la oficina, el fin de semana pasó rápido, estaba emocionada pues vería a Britt, después de ese sábado no volvimos a vernos. No le comenté nada a Quinn, también debía hablar con ella, estaba organizando su fiesta de aniversario, sería al día siguiente, presuponía que era el lugar ideal para acercarme más a Britt, lo que no tuve en cuenta era que Sam seguía con ella, me percaté de eso al verlo entrar de la mano con ella. Mis sueños se desvanecieron por unos instantes, Britt me vio y sonrió, Sam la besó pero ya no la notaba tan enamorada, algo había cambiado en ella, me sentía responsable de ese cambio.
Quinn llegó y comenzó a repartir tarjetas de invitación para su fiesta, la haría en un restaurant, ella estaba feliz. “Santana, quiero que cantes una canción conmigo, es un popurrí, lee la letra y apréndetela, será una sorpresa para Rach” me dejó la canción y se fue. Leí la letra y me gustó, era una mezcla de Madonna y The Association el título decía “Cherish/Cherish” perfectamente representaba lo que yo sentía, si bien era de Quinn para Rachel, también podría ir dedicada para Britt de mi parte.
Estaba leyendo la letra de la canción pero no tenía el ritmo, supongo que debíamos practicar juntas, fui a su oficina y entre diciendo “Quinn, ¿cuándo ensayamos?” miré y mi amiga no estaba, Britt sonreía y dijo: “Tienes la mala costumbre de entrar y decirle cosas a Quinn cuando ella no está, recuerdo la primera vez que hiciste eso”. Me sonrojé, esa vez entre diciendo que quería tener sexo, Brittany me miraba y me dijo:
- Ella volverá, se fue a arreglar algo con su padre. ¿Qué deben ensayar?
- Una canción, no digas nada, es una sorpresa para Rachel.
- ¿Quinn canta también?
- Si. Lo hace muy bien, creo que con eso logró enamorar a Rach…
- ¿Qué canción es?
- Oh… no puedo decírtelo, es una sorpresa.
- La sorpresa es para Rachel, no para mí.
- La letra representa muchas cosas, me siento identificada, pero no puedes leerla, la escucharás mañana, supongo que no faltarás…
- Sam no quería ir, pero yo si quiero.
- Si él no va, ¿tampoco lo harás tú?
- No lo sé…
Eso me molestó, me levanté furiosa y tiré unos papeles de Quinn. “¡Demonios!” dije y comencé a recoger los papeles. Britt me ayudaba, levantó un sobre y cayeron unas fotos, era las fotos del bailarín, miré asustada eso, ella no sabía lo de la demanda, justo los papeles que ella tenía en las manos eran los de la demanda, ella leyó un poco y me dijo preocupada:
- Santana, ¿tú le hiciste esto? Aquí dice que tú lo insultaste y le pegaste.
- Es verdad, pero le pagué los gastos médicos.
- O sea que, ¿tú comenzaste todo? Me mentiste esa noche…
- Estaba enojada Britt, él me miraba feo y te miraba ti y no lo soporté…
- ¿Te molestó que me mirara? No entiendo Santana…
- Es un imbécil.
- Debes pedirle disculpas.
- ¿Qué? Estás loca Brittany, no lo haré.
Me miró desafiándome, acomodamos los papeles y ella seguía viéndome de esa manera que no me gustaba. “Ok, le hablaré y me disculparé” ella sonrió, agarró su celular y marcó el número de él, aún conservaba el papel que él le dio, eso me enfureció pero tomé el celular y esperé a que me atendieran.
- Hola -dijeron.
- ¿Eres Mark? Habla Santana López.
- Soy yo, ¿qué quieres? Ya arreglé todo con tu abogada.
- Lo sé, sólo quiero ofrecerte una disculpa, estuve mal, lo siento.
- Oh… gracias.
- Muy bien, te dejo entonces.
- Oye, ya que todo está arreglado, ¿me pasarías el número de Britt?
Brittany estaba escuchando todo, la miré y ella notó que lo que el bailarín dijo me molestó, entonces le dije a ese tipo lo siguiente:
- ¿Aún no te ha mandado un mensaje? No es que sea mala pero, ¿no crees que eso significa algo? No te hagas muchas ilusiones…
- Oh… tienes razón, gracias de todos modos Santana.
- Adiós.
Britt no estaba muy conforme con eso, me miraba enojada pero al final se rió “¿Por qué le dijiste eso?”, entregándole su celular le dije: “No pensaras salir con él ¿verdad? Por lo menos yo no te dejaré”. Ella sonreía y no dijo nada más, salí de la oficina sin decir nada más, ya no podía controlar mis celos y ella se estaba dando cuenta de eso.
Cuando Quinn regresó pactamos practicar en mi casa, almorzamos juntas y le conté todo lo que pasó con Britt el sábado.
- O sea… ¿piensas que ella siente algo por ti?
- ¿Acaso no lo ves? Lo siento Quinn, sino ella se hubiera apartado, me hubiera golpeado o algo por el estilo. Pero no hizo nada de eso.
- No te ilusiones mucho, ella aún sigue con Sam, recuérdalo.
- Ok… cómo tu digas. Esta canción irá dedicada a ella.
- Oye, esa canción es para Rach.
- Lo sé, pero también para Britt, ella ya lo sabe, por cierto vio las fotos del bailarín.
- ¿Cómo?
- Se cayeron algunos papeles, me obligó a pedirle disculpas a ese imbécil.
- ¿Ella? Vaya Santana, si que te trae mal Britt.
- Estoy enamorada Quinn…
- Ok, esto es demasiado para mi, ¿Qué pasó con mi amiga? Estás muy melosa.
- Es el amor Quinnie…
- Suficiente, vámonos, hay una canción que preparar para nuestras amadas.
Nos fuimos a la empresa, estábamos en mi oficina planeando como cantar la canción, Britt miraba y se moría por saber qué canción era, eso me causaba risa, ya quería que fuera martes así podría cantarle y demostrarle lo que sentía. Con Quinn ensayamos toda la noche, Rachel se encargaba de la fiesta, todo saldría perfecto.
El martes llegó, Britt le confirmó a Quinn su participación en la fiesta eso sí, iría con Sam. Él era lo de menos. Fabiola también iría, Carla, y algunos socios también. Todos estaban pendientes de la fiesta de esa noche, hablaban sobre la ropa que usarían y los regalos que llevarían, esto parecía una boda. Quinn no parecía nerviosa, estaba feliz de estar enamorada de esa enana, eran felices juntas.
La jornada laboral terminó y la hora de la fiesta llegó. Yo estaba lista para disfrutar de la noche, curiosamente el hecho de que Britt asista junto a Sam no era un factor que influyera en mi de manera negativa, él era mi competidor, tenía la ventaja pues era el novio de ella pero no la dejaría ir sin antes luchar, ahora si ella me decía que realmente no estaba interesada en mí, dejaría de insistir, pero ella tendría que mostrarme que no le intereso, hasta ahora me demostraba lo contrario.
La gente comenzaba a llegar, Rachel estaba contentísima, Britt llegó junto con Sam, lucía hermosa, tenía un vestido gris no muy largo, ni muy corto, su pelo estaba recogido. Sam la llevaba a todos lados de la mano, no la dejaba sola un instante, yo solamente estaba al pendiente de ella, en un instante ella me miró, sonrió y se soltó del agarre de Sam, se acercaba a mi sonriendo, yo hice lo mismo, me abrazó y me besó en la mejilla.
- ¿Ya me dirás que canción cantarán?
- Aún no… debes escucharla, lo que te puedo decir es que es un popurrí…
- Oh… ¿en serio?
- ¡Claro! Te gustará, lo prometo.
- Quinn le dedicará esa canción a Rachel, tú ¿a quién se la dedicarás?
- Ummm… no lo diré públicamente, eso podría traerme problemas, no quiero ser la tercera en discordia…
- Pero esa persona debe saber que le dedicas la canción, sino, no tendría sentido.
- Descuida, esa persona sabe que se la dedico.
Ella me miró desconcertada, la verdad que no me animaba a decirle que era para ella la canción, pero supongo que se daría cuenta, algo me decía que entendía mis indirectas. Regresó junto a Sam, yo me dispuse a pasarla bien con algunas personas que conocía allí. La noche avanzaba y Quinn anunciaría el momento de cantar, ella pidió un micrófono y solicitó la atención de todos: “Muy bien, les agradezco que estén aquí acompañándonos, son tres años de puro amor, a veces discutimos pero el amor prevalece ante todo, jamás pensé enamorarme de la forma en la que lo hice de Rach, ella es todo para mí, pero siento que no puedo expresar concretamente todo lo que digo, por eso elegí dos canciones que representan lo que siento, pero así como Rachel y yo somos dos personas diferentes al igual que las canciones que elegí, decidí unirlas y hacer una sola canción, eso representa nuestra relación, la perfecta mezcla entre dos personalidades. Juntas hacemos una linda melodía amor, esta canción es para ti”. Después del meloso discurso de Quinn me hizo señas así agarrara un micrófono y cantáramos, Britt no dejaba de verme, yo tampoco, la música sonó y Quinn comenzó a cantar, ambas nos turnábamos para dar rienda suelta a ese popurrí.
Cherish is the world I use to describe
All the feeling that I have hiding here for you inside
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how “ times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish the thought
Of always having you
Here by my side (oh baby I)
Cherish in the Word that more
Tan applies
To the hope in my heart each time I realize (uhhh uhhh)
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish the thought
Of always having you
Here by my side (oh baby I)
(Who? You!) Can´t get away I won´t let you (Who? You!)
I could never forget to
Cherish in the Word I use to remind me of your love (your love)
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish the thought
Of always having you
Here by my side (oh baby I)
Cherish the joy
You keep bringing i tinto my life (I´m always singing it)
Cherish your strenght
You got the power
To make me feel good (and baby I)
Cherish the thought
Of ever leaving
I never would You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I had told you
You don´t know how many times
I´ve wished that I could mold you
Into someone who could
Cherish me as much as I
Cherish you
Cherish the thought.
La gente bailaba mientras cantábamos, Rach estaba emocionada, al terminar la canción se abrazaron y se besaron, la gente alrededor las aplaudía, miré hacia donde estaba Britt, ella sonreía pero también la noté preocupada, tal vez me excedí con la canción, pero realmente era lo que estaba sintiendo.
El baile seguía, estaba con un grupo de personas bailando, noté que Britt no bailaba, Sam menos, de repente Fabiola me agarró y me llevó a un lugar apartado donde no había gente, ella estaba un poco ebria y me dijo: “Quiero hacerlo contigo esta noche”. Me sorprendió su ofrecimiento, en otra circunstancia lo aceptaría pero ahora era diferente, pretendía cambiar mi forma de ser sólo por Britt, quería ser merecedora de su amor y no me aceptaría si yo me acostaba con la primera mujer que se me ofreciera, desde que la conocí algo cambió en mi, ella era la indicada para mi, entonces haría las cosas bien.
- No puedo Fabiola, estoy interesada en otra persona.
- ¿En esa mujer? ¿La tal Marcia?
- No, no te diré quién es, pero respeta mi decisión, no insistas.
- Santana te ofrezco mi amor, ¿no sientes lo mismo que yo?
Dijo eso y me besó a la fuerza, sostenía mi cabeza con sus manos, abrí mis ojos y vi que Brittany estaba mirándome, ¡Demonios!, con esfuerzo logré zafarme, Britt ya se había ido, estaba intranquila y furiosa con Fabiola, quise irme y ella me agarró, le di una cachetada diciéndole que ni se le ocurra volver a hacer eso. La dejé allí en ese lugar y me dispuse a buscar a Britt. No la podía encontrar, estaba desesperada, miraba a todos lados y no la encontraba, tal vez se había ido, me maldecía. Noté que Sam estaba hablando con un grupo de hombres, entonces eso quería decir que ella no se había ido aún, a menos que haya decidido irse sola. Tal vez estaría en el baño; me dirigí hacia ahí, había muchas chicas, esperé un poco y Britt salió de un cubículo, se lavo las manos y se acomodó su cabello. La miré pero ella no hacía contacto conmigo, me estaba ignorando, no quería verme pero sabía que estaba allí viéndola.
- ¿Necesitas algo Santana? -me dijo.
- Quiero hablar contigo.
- ¿Sobre qué? -dijo mirándome con cierta decepción.
- Yo… …. -no supe que decir, no sabía cómo justificar lo que hice.
- Ya sé para quien era la canción -me dijo y se fue.
No la seguí, dejé que se fuera al lado de Sam, ¿por qué debía darle explicaciones? Me sentía como una idiota, pero ella se enojó conmigo, ¿acaso también estaba celosa? Por un lado eso me generaba satisfacción, pero a la vez angustia, no quería que pensara que estaba jugando con ella, tenía que arreglar lo que pasó. Me armé de valor y crucé todo el salón en dirección a donde ella estaba, me le puse en frente y ella se sorprendió de eso. Sam me miraba, no entendía que pasaba ahí, sin dejar de mirar a Britt me acerqué a su oído y le dije: “No era para ella la canción” ella soltó a Sam, y me dijo: “No te creo, adiós”. Se apartó de mí y se fue con Sam. Quedé sin nada, me enfadé y también me fui del lugar, me despedí de las agasajadas y me dirigí a casa, al final no todo había salido como pensaba, estaba odiando a Fabiola, no lo podía soportar más. Me dormí con rabia, al día siguiente tendría que hablar bien con Britt y aclarar esto, por un lado lo bueno era que ella sentía algo por mí, no era en vano todo lo que estaba haciendo.
Desperté con pereza, podría no ir a trabajar pero debía hablar con Britt. No desayuné, me duché y me fui directamente a la empresa. Los que asistieron a la fiesta de Quinn llegaban con una cara de resaca tremenda. Carla estaba bien, ella se fue temprano de la fiesta, Britt no llegaba. Después de media hora Quinn llegó.
- San, ¿por qué te fuiste anoche?
- Britt se enojó conmigo, siéntate, te contaré.
Quinn se sentó y le conté lo que pasó la noche anterior, le comenté mi suposición sobre los celos de ella.
- Me lo dices y no lo creo, ¿estará celosa?
- ¿Lo dudas? ¡Claro que son celos!
- Pero ella me dijo que no era celosa…
- Pues te habrá mentido.
Estábamos hablando de eso y Britt llegó con Sam. Él tenía un traje gris, la noche anterior estaba con un traje oscuro, pero ella… ella tenía el mismo vestido que la noche anterior, su pelo ya no estaba recogido, lo tenía suelto y húmedo. Miré eso con detenimiento, ellos durmieron juntos, de eso no tenía dudas. Algo dentro de mí explotó, Quinn notó eso y me preguntó que me pasaba, “Britt durmió con Sam, tiene el mismo vestido que anoche”. Ella volteó a mirarla, después centró su mirada en mí.
- San, ella es su novia.
- Lo sé… creo que me equivoqué con ella.
- Santana, no insistas con esto, enfócate en otra cosa, no te ilusiones más.
- Déjame sola, -Brittany miraba a mi oficina- cierra la persiana.
Quinn obedeció, la imagen de Britt desapareció, quería llorar, mi pecho era invadido por una sensación horrible, me dolía el alma, pero no lloraría por ella, no lo haría.
Toda la mañana estuve allí encerrada, Brittany ni siquiera me buscó, de seguro estaba enojada, yo no la buscaría, menos sabiendo que la noche anterior se revolcó con ese imbécil. Comenzaba a odiarla, los celos me ganaban, ella no era nada para mí pero odiaba la idea de imaginarla con él. Llegó la hora del almuerzo, salí de mi oficina y Britt estaba charlando con Carla sobre la fiesta de Quinn, “Me voy, regreso mañana, puedes irte Carla”. Ni siquiera miré a Britt, Carla se sorprendió de mi actitud y me dijo:
- Santana, tienes una reunión a las tres.
- Pásame la dirección del lugar por mensaje -dije sin mirar atrás.
“Santana espera”, dijo Britt, pero yo seguía mi camino, entré en el ascensor, la miré y ella dijo nuevamente “San, espérame”, no le hice caso y las puertas del ascensor se cerraron. Me arrepentía por lo que acababa de hacer pero los celos me dominaban, si seguía viéndola terminaría insultándola y quería evitar eso.
Estaba en mi casa almorzando, mi nana notó que algo no andaba bien pero no preguntó nada, simplemente esperaba que le dijera el por qué de mi actitud, pero yo no le decía nada. “Dilo” dijo ella levantando mi plato de comida, la miré y le dije: “Ella se acostó con él anoche, ya sé que es su novio, pero, la estoy odiando por eso”. Mi nana no dijo nada, me levanté de la mesa y me encerré en la biblioteca, Carla me envió un mensaje con la dirección del lugar donde sería la reunión. Antes de las tres me fui a ese lugar.
Entré en el edificio, me recibieron y me llevaron a un salón, ni bien entré vi una cabellera rubia conocida, era Brittany, estaba vestida de otra forma, por lo menos tuvo la decencia de cambiarse de ropa, pero no entendía que hacía ahí. Se dio la vuelta y me vio.
- ¿Qué haces aquí? -dije.
- Quiero hablar contigo.
- Esto es una reunión de trabajo.
- Te acompañaré, luego hablaremos.
Los empresarios llegaron y la reunión comenzó, al cabo de una hora nos estábamos despidiendo, Brittany se iba conmigo. Yo seguía seria, al salir del edificio ella me dijo:
- ¿Por qué estás enojada?
- Anoche te enojaste y no te pedí explicaciones, no hagas lo mismo conmigo ahora.
- Ok… ¿qué te parece si dejamos de lado todo eso y continuamos cómo estábamos?
- ¿Y cómo estábamos?
- Como amigas.
- ¿Amigas?... ¿Eso quieres?
- Sí.
- Ok… nos vemos.
La dejé sola. ¡Maldita sea! Todo se arruinó, quería matar a Fabiola, también a Sam, me odiaba rotundamente, ella no quería estar conmigo y eso dolía.
…………………………………………….
Santana me dejó sola afuera del edificio. Estaba muy enojada conmigo, yo estaba muy confundida y no me gustaba esta situación. Creí que la canción que cantó era para mí… Cherish is the world I use to describe all the feeling that I have hiding here for you inside… yo cantaba la canción ni bien me acordaba la mezcla que hicieron; sin embargo estoy confundida, ella cantaba y me miraba a mí, la otra noche casi me besó, ¿habrá cambiado de parecer en unos días? Fabiola la besó en los labios, Marcia también lo hizo, pero lo hizo a propósito, me vio y le robó un beso.
Santana me dijo que la canción no era para Fabiola, ¿será para mí? Ella me confundía, quería besarme, pero estoy con Sam, él no se merece que le sea infiel, es atento conmigo sin embargo, mi cariño es diferente, lo quiero mucho pero hay algo que me tiene nerviosa, Santana me mira y siento el impulso de mirarla también, ella sonríe y me contagia eso. Si está triste yo también lo estoy pero quiero hacer algo para que ella cambie de humor. Cuando me defendió de mi papá simplemente quería estar abrazada a ella, la necesitaba a mi lado pero Sam me decía que ella se estaba abusando de mi amistad, según él ella decidía por mí, pero no coincidía con él, ella sólo me motivaba para seguir adelante con mi sueño, me sorprendía que él hablara así de ella pues era su admirador.
A Sam no le gusta la idea de que baile, es celoso, teme que lo deje pero si él no me apoya en esto obviamente discusiones tendremos. No estaba dispuesta a renunciar a esto ahora, Santana me ayudaría y eso es lo que quería que hiciera mi novio. Ella se estaba portando bien conmigo, hizo bastantes cosas en tan poco tiempo, lo hacía con buenas intenciones, lo notaba. Cada vez que me abrazaba lo hacía con mucha fuerza como si no deseara soltarme, yo me dejo abrazar por ella sin problemas, me gusta sentir el calor de su cuerpo, pero a la vez me confunde, ¿será que desea algo conmigo? Siento que le gusto pero no sé si eso es sólo algo temporal o definitivo. Lo que sé es que a ella le gustan las niñas, inclusive sé que las besa, tal vez sólo quiera besarme, la verdad es que también me gustaría besarla, no he besado a una mujer antes. Alexandra quería besarme, ella quería que fuera su novia y nos fuéramos juntas a buscar el éxito en el baile, apenas conocía a Sam y él me agradaba pero lo que no me animé a hacer es dejar a mis papis. No era justo que yo me fuera huyendo, Alexandra me dijo que estaba enamorada de mí pero a pesar de eso se fue. Recuerdo que bailábamos juntas y ella siempre me abrazaba y me acariciaba, eso me estremecía pero a la vez me daba miedo, no entendía muy bien lo que ella me hacía sentir, cuando se despidió de mi y se fue de Ohio me dijo que Sam no era para mí, y deseaba que la próxima vez que me vea sea con una chica, yo no entendía eso, le dije que yo no me veía estando de novia con una mujer, ella sonreía y me dijo: “Ojalá encuentres a la persona adecuada” pensé que me dijo eso como diciendo: “Oye, yo soy la adecuada” pero no volví a saber de ella. Cuando la vi en Inglaterra ella miró a Santana y yo automáticamente le aclaré que era mi socia, temía que interpretara mal las cosas, realmente la quise muchísimo, significaba mucho para mí. Con ella me sentía completa en esos años, tenía los mismos sueños que yo, pensaba igual a mí y nuestros gustos eran similares, a ella le gustaban las chicas, como coincidíamos en todo quizás por eso pensó que a mí también me gustaban las chicas. Ella me decía, “Mira Britt, observa a las chicas mientras bailan, ¿no ves lo bellas que son?”. Yo miraba a las chicas, en especial las de Ballet, todas con sus cuerpecitos frágiles similares al mío, eran lindas no lo negaba pero no nacía en mi la necesidad de estar con una de ellas. Alexandra no salió con ninguna de ellas pero si sé que a varias besó. Ella me contaba sus hazañas, yo simplemente me reía con incomodidad, ella más una vez intentó besarme y yo me negaba, siempre me decía “¡Qué suerte tendrá la que te bese!”. Con Alexandra íbamos a todos lados, si bien en la escuela íbamos a salones diferentes, siempre nos encontrábamos para bailar con las porristas o en el Club de canto, también practicábamos ballet, a veces practicábamos en mi casa o en la suya, mis papás casi nunca estaban en casa, nunca llegaron a conocerla totalmente, ella simplemente era “Ale, mi compañera”. En tres años nos hicimos grandes amigas, después conocí a Sam y ella se puso un poco celosa pues él me invitó al baile de graduación y allí me besó, nunca antes me habían besado, estar con él era lindo, pero a Alexandra no le gustó y fue ahí cuando se le ocurrió la idea de escaparnos. Sólo era un plan, pero con los meses ese plan se iba transformando en una realidad, llegado el momento no luché por lo que quería, y ella no se detuvo, siguió adelante. “Te quiero Britt, te quiero pero no como a una amiga o a una hermana, sino por la mujer que eres, ¿estás segura que te quedarás?” ambas llorábamos, la abracé y le dije que me quedaba en Ohio. Ella intentó besarme pero no se lo permití, pensaba en Sam. Ella lloró y dejó un beso en mi mejilla, puso sus dedos en mis labios y lanzó un beso al aire. Los días siguientes a su despedida fueron horribles, mi única compañía era Sam, él me acompañó desde ese momento, pero de ese tiempo hasta acá siento que hay algunos cambios en mí. Sé que él quiere casarse conmigo, formar una familia y todo eso, yo también deseo eso pero no ahora, además sus últimas actitudes no me gustan.
Después del problema con mi papá mi mamá reprimió a Sam, le dijo que él no era merecedor de mí si mantenía esa postura negativa ante mis deseos por bailar. Cuando él me buscó después de eso, simplemente me besó y me abrazó; me dijo que no podíamos estar separados pues éramos el uno para el otro. Cuando le pregunté lo que pensaba sobre la propuesta del director me dijo que llegado el momento lo hablaríamos dado que eso no era seguro, que esas obras musicales eran protagonizadas por bailarinas profesionales. Eso me desilusionó un poco, él no creía en mí como lo hacía Santana.
Llegué a casa después de mi encuentro con San en el hotel junto a los empresarios y practiqué toda la noche, bailaba con entusiasmo, debía estar bien preparada por si Ryan me llamaba. Santana me dijo que llamaría y le creí, confiaba en ella, por más que estuviera enojada, ella me ayudaría.
Ahora el tema era ¿por qué ella estaba enojada? Yo sé que me enojé por la canción, pero me dio rabia todo ese juego que hizo, yo quería que esa canción fuera para mí, era mi canción no de Fabiola, San la cantó para mí. Pensar en eso me enfurecía, pero al día siguiente ni bien desperté ya quería verla, no podía estar enojada con ella, pero cuando nos vimos ella me miró enfadada, se encerró en su oficina y decidí no molestarla, pero sí que estaba enojada, cuando se fue de la empresa no quiso hablar conmigo. Realmente no sé qué le pasó… no entendía su actitud, quería hablar con ella, arreglar todo esto, pero no sabía cómo actuar, ella estaba así por algo que hice pero no sabía que hice mal.
Santana tenía un carácter particular, no era mala sólo que algunas personas no le caían bien, por ejemplo Mark, él era un buen chico pero ella no lo quería, no sé muy bien por qué, era como si estuviera celosa, ¿eso significaba algo? Inclusive ella le pegó y como fue también su decisión, no permitió que él se volviera a acercar a mí. Realmente esa actitud no me molestaba, yo quería que ella esté bien y si él le molestaba pues era mejor no tratarlo y evitar que ella se enfadara más. En realidad aunque no me negué a ese deseo de ella, algo no hice bien, por eso se enojó. De eso debíamos hablar.
La mañana siguiente, como la mayoría de las veces, Sam estaba en la sala esperándome para irnos juntos a la empresa. Mi mamá y él casi no se hablaban, me tomó de la mano y nos íbamos cuando mi mamá dijo:
- Britt, invita a cenar a Santana y a Gustavo esta noche, tu padre ya se fue y me olvidé de decirle que los invite.
- ¡Wow! ¿Qué cocinarás? ¿Puedo invitar a la nana de San?
- ¡Claro hija! Los espero a las ocho, el menú será sorpresa.
Salimos con Sam, él estaba molesto, lo noté en su rostro, sin que yo dijera nada él dijo:
- Tú madre está enojada conmigo, deberíamos hablar con ella.
- No te preocupes, el enojo se le pasará, a propósito, ¿por qué está enojada?
- ¿Es una broma Britt?
- No, claro que no, no lo sé…
- Santana la convenció de que arruiné tus sueños, sabes que eso no es así.
- ¿Cómo es entonces?
- Britt, no te ilusiones mucho, tener éxito en eso es difícil, sólo algunos lo logran, no todos.
- ¿No crees que lo logre?
- Es difícil Britt, sólo trato de ser realista. Oye, por lo que dijo tu madre, ¿tampoco estoy invitado a cenar esta vez?
- No lo sé Sam…
- En vez de invitar a los sirvientes de Santana, podrías invitarme a mí.
- También puedes asistir.
- Lo dices cómo si no te quedara de otra, soy más importante que ellos, soy tu novio Britt.
- ¿Podemos escuchar música?
Él me miró y prendió el estéreo, su actitud no me gustó, algo estaba cambiando en él, o tal vez siempre fue así y recién podía verlo. Lo desconocía y me sentía rara, estaba triste por dentro; quería arreglar mi conflicto con Santana, necesitaba estar bien con ella.
Llegamos a la oficina, Santana también llegaba con nosotros, nos miró y noté que seguía disgustada. Entramos juntos en el ascensor, la saludé, Sam hizo lo mismo y ella nos respondió con pocas ganas. No nos habló durante el breve trayecto que nos llevaba al séptimo piso del edificio. No me gustaba estar así con ella, teníamos que hablar seriamente. Llegamos a nuestro piso y Sam me tomó de la mano para salir juntos del ascensor, Santana vio eso y giró sus ojos hacia arriba, Sam no notó eso pero yo sí, ella se dio cuenta de que la vi y bajó su mirada. Sam me llevaba de la mano y yo miraba hacia atrás sonriéndole a Santana, ella simplemente me miraba sin decir nada. Sam intentó besarme pero no lo dejé, le corrí la cara y me besó cerca de mis labios. “¿Qué pasa?” me dijo, y no sabía que responderle, me miraba pero mi mente pensaba en Santana. Ella entró en su oficina, la persiana seguía cerrada, miré con nostalgia hacía allí y Sam volvió a preguntar “¿Qué pasa? Responde Britt” sin pensar en mi respuesta dije: “Santana tiene cerrada su persiana” Sam me miró y no entendía nada. “Te busco más tarde” me dijo y entré en mi oficina. Quinnie no había llegado, entonces salí de mi oficina, Carla estaba charlando con una chica cerca del ascensor, me crucé y golpeé dos veces la puerta, abrí y entré. Santana estaba sentada detrás de su escritorio.
- ¿Necesitas algo Brittany?
- ¿Por qué hiciste ese gesto? En realidad fue gracioso, no me puse a pensar que tal vez mi relación con Sam pueda incomodar un poco, él es muy cariñoso.
- Me he dado cuenta de eso, sólo que es un imbécil… emmm… perdón, no debí decir eso, disculpa.
- Estás enojada conmigo, no lo entiendo San, ¿qué hice de malo? ¿Es por Sam? Mi mamá también está enojada con él.
- ¿Nicole? ¿Por qué?
- Él no está de acuerdo con que baile, no le agrada la idea y a mi mamá eso no le gustó.
- Brittany, no dejes que nadie obstaculice tus deseos de bailar, él podrá ser tu novio pero tengo razón al decir que es un imbécil, no entiendo por qué estás con él.
Dijo eso y cerró sus ojos de golpe, sonreí, ella se arrepentía de lo que dijo, es muy tierna, no entiendo por qué algunas personas le tienen miedo. “Britt, disculpa, no debí decir eso” me dijo mientras abría sus ojos. Sonreí, ella hizo lo mismo, la formalidad la dejó de lado, eso era un buen avance. “Mamá te invita a cenar esta noche, también a Gustavo y a tu nana, espero asistan” le dije, antes de que saliera preguntó:
- Espera, ¿Sam irá?
- No creo… ¿Prefieres que él no esté?
- Es tu novio, supongo que él estará.
Dijo eso con sarcasmo, lo noté, ella no quería que él estuviera presente, la miraba, quería entender si esos eran celos, yo nunca sentí celos por nadie, entonces no estaba segura si lo que ella sentía eran celos. “Santana, ¿estás enamorada?” ella se puso colorada, abrió sus ojos de par en par, no podía contestarme, tal vez fui muy directa.
- ¿Por qué lo preguntas? -dijo ella.
- Ummm… olvídalo. Te espero en casa para cenar.
Me fui a mi oficina, Quinnie estaba tarareando una canción, me miró y dijo:
- Buen día, ¿estás bien Britt?
- Tú estás enamorada ¿verdad? -dije.
- ¿Qué?... bue, sí, así es. ¿A qué viene esa pregunta?
- ¿Estar enamorada te hace sentir celos?
- Ummm… -dudaba al contestar- a veces sí, no siempre, pero generalmente sí.
Miré hacia la ventana, la persiana de San estaba cerrada, quería verla, pero ella no me dejaba. “Nunca sentí celos por Sam, ¿eso quiere decir que no estoy enamorada de él?” dije y al instante la miré, Quinnie me miraba sorprendida, se acomodó en su silla y me dijo:
- ¿Crees que no estás enamorada de él? Britt, son tres años de relación con él, deberías saber que sientes. ¿Por qué lo dudas?
- Siento que él no me comprende, tal vez no debamos estar juntos, necesito estar con una persona que me quiera por lo que soy, que me acepté por lo que realmente soy.
- ¿Cómo eres?
- Soy una bailarina, una soñadora.
Quinnie sonreía, se acercó a mí y me abrazó, la charla apenas comenzaba, se sentó a mi lado, y la escuché con atención.
- Britt, si crees que él no es el adecuado para ti, pídele tiempo. Estás en una etapa de cambios muy importantes, concéntrate en ti ahora, que nada más importe, bastante tiempo has estado posponiendo lo que realmente deseas hacer, no te detengas y lucha por eso, que nada ni nadie sea un obstáculo; la persona que realmente merezca estar contigo debe aceptar lo que deseas hacer sin condicionarte. Siempre has sido “Britt la empresaria”, nadie conoce tu faceta de bailarina, esa es otra Britt, la verdadera. Sam no la conoce, no sabemos cómo es esa Britt, no sabemos sus gustos, ni que tiempo dedica a sus amigos y familiares, tampoco sabemos qué tanto la veremos pues esa bailarina sólo desea algo: triunfar. Ese éxito que busca sólo lo logrará practicando arduamente, y allí es donde todo lo demás queda en un segundo plano, no digo que no sea importante la familia y las relaciones con otras personas, pero la mente de la bailarina tiene sus prioridades. Britt, tus prioridades ahora son el trabajo aquí, tu relación con Sam y con tus padres, pero ¿te pusiste a pensar en cómo será tu vida si decides dedicarte a lo que realmente sueñas? Tus tiempos cambiarán, conocerás otras personas, este mundo empresarial no es el tuyo, podrás ser muy buena en los negocios pero no perteneces aquí. Si dedicas tiempo para ti, será ideal, aún no te conoces totalmente, conócete y quiérete tal cual eres, una vez que hagas eso la persona que deba estar contigo, te querrá por lo que eres. Si Sam es el indicado, esperará y amará la persona que realmente eres, no éste disfraz.
- Quinnie… te quiero, gracias por tus palabras, pero no quiero que Sam sufra.
- Britt, que le pidas tiempo no significa que sea un adiós, él debe entender que tienes otras prioridades ahora, si él no acepta eso pues te está perjudicando, y eso es un obstáculo para ti. Si te ama dejará que hagas lo que deseas hacer.
- Él es muy celoso, no aceptará esto, me pongo a pensar en sus celos, sé que me quiere mucho, por eso es así, tal vez yo no lo quiera igual, no soy celosa Quinnie.
- Que no seas celosa no significa que no lo quieras, ¿lo quieres realmente?
- Sí que lo quiero… pero el problemas es que creo que siento celos, pero no de él, sino de otra persona. Estoy muy confundida, no sé si son celos, jamás los he sentido por alguien.
- ¿Qué sientes? ¿Por qué crees que son celos?
- Siento muchas cosas, sólo deseo ser yo la persona a quien mire, me confundo porque también siento bronca, odio, pero yo no soy así, me desconozco.
- Son celos Britt.
- ¿Eso significa que estoy enamorada de esa persona?
- Tal vez…
Miré a la oficina de San, ¿estaba enamorada de ella?, estaba muy confundida. Quinnie me abrazó y me dijo: “No te hagas un lío, conócete primero, mira, ni sabías que eras celosa”, la miré y nos reímos, ella tenía razón, mi vida estaba cambiando y Sam no tenía intenciones de seguirme. “Hablaré con Sam” le dije a Quinnie, ella me abrazó fuerte y siguió con su trabajo. Yo estaba nerviosa, tenía que hablar rápido con Sam.
Salí de mi oficina, necesitaba ver a Santana primero, no entendía por qué pero deseaba verla, entonces golpeé y entré en su oficina.
- Brittany…
- Dime… ¿Por qué tienes cerrada tu persiana?
- ¿Hay algún problema con eso?
- ¿Es algo que yo hice?
- Puede ser…
- ¿Qué hice?
- No tiene sentido que lo hablemos, mejor no insistas.
- Siempre haces lo que quieres Santana, generalmente yo estoy implicada en esas cosas y no quieres explicarme nada.
- ¿Perdón? ¡Oh… no me di cuenta que eras el centro del mundo!
- Yo no dije eso, sólo explícame por qué actúas así conmigo, haces gestos cuando estoy con Sam, me haces un juego mental con una canción que terminas cantándole a otra, golpeas a un amigo mío…
- ¿Resulta que ese estúpido es amigo tuyo? ¡No llevaba ni horas de haberte conocido!
- Es un buen chico.
- Pues vete con él, además de que baila dile que te cante canciones, ¿acaso no es eso lo que quieres?
- No te entiendo, no entiendo qué te pasa…
- ¡Maldita sea!... ¡Son celos Brittany! ¿acaso no lo ves? ¡Odio la forma en la que ese imbécil te mira, y odio sus malditas intenciones! Listo, lo dije…
No sabía cómo reaccionar, lo acababa de admitir, la miré y ella estaba asustada, no pude decir nada, ella se paró frente a mí y me dijo: “Lo siento, mejor déjame sola. No volveré a reaccionar así, perdón”. Estaba avergonzada, la abracé, me sentía feliz, eso significaba que la canción fue para mí. Me solté de su agarre y le dije: “Abre la persiana, es raro no verte. Te espero esta noche en casa, Sam no irá”.
…...............
Al instante en que salí de la oficina de San, ella abrió la persiana, le sonreí y ella lo hizo también; esa acción ya se estaba convirtiendo en costumbre, ambas sonreíamos al ver a la otra. Entré en la oficina de mi papi, Sam leía unos papeles y no entendía unas cosas. “Amor, ¿me ayudas?” sonó raro eso, sentía que él no tenía el derecho de llamarme así. Acepté ayudarlo, mi padre estaba reunido con Gustavo. Tardamos unas horas en terminar con eso, eran cerca de las once de la mañana y ya tenía hambre, “¿Ves que eres una genia con los negocios? Este es tu lugar amor” dijo intentando besarme pero corrí mi cara. Él besó mi mejilla y dijo “¿Qué sucede?” lo miré, estaba enojado. “Esta mañana me hiciste lo mismo, ¿acaso andas con otro?”, me asusté, tenía que hablar con él pero me daba miedo su reacción, sin embargo, estaba decidida a hacerlo, no podía posponer esto más. “Debemos hablar Sam.”
Eran las tres de la tarde, estaba volviendo a la oficina, había almorzado con mi mamá, ella ya estaba al tanto de mi última decisión. Había decidido hablar con Sam en un lugar que no fuera la empresa. Él me esperaba en la puerta de mi oficina, miré a la ventana, Santana estaba concentrada leyendo algo, hacía unos gestos adorables, “Sam, espérame abajo” le dije, él se sorprendió pero hizo lo que le pedía. Quinnie me miraba, “¿Hablarás con él ahora?” preguntó, la miré y le dije que sí. Salí de la oficina, Santana me vio, le dije adiós con la mano y ella sonrió.
Sam lloró, él cree que lo estoy dejando por otro hombre, le echa la culpa a Santana por animarme a bailar. Le explique que realmente bailar era mi sueño, no lo entendió, traté de persuadirlo con las cosas que Quinnie me dijo, y me dijo que nadie más que él me conocía. Estábamos en su departamento, estuvimos media hora discutiendo, él no aceptaba la idea de darnos un tiempo. Me senté en el sillón de la sala, miraba todo a mi alrededor, muchas veces había dormido allí, cada objeto de ese lugar lo acomodé yo, recuerdo que más de una vez me imaginé viviendo con él, todo eso me pertenecía de alguna forma y ahora tal vez nada de eso se cumpliría, no volvería a ver esa sala por un tiempo, no volvería a dormir en su cama, de repente nada de eso me pertenecía. Él daba vueltas por la sala “Dime quien es” repetía, yo no decía nada, pero insistía a cada instante. “Sam, sólo te pido un tiempo, si realmente debemos estar juntos, sólo el tiempo determinará eso”, él me miró y dijo: “Lo que quieres es revolcarte con otro”. Eso no lo soporté, me paré y me disponía a irme, él me abrazó y no me soltaba, repetía la palabra perdón a cada instante. “¿Por quién me tomas Sam? No soy una cualquiera”, él seguía pidiendo perdón sin soltarme. Me dolía verlo así, por un instante dudé si estaba haciendo lo correcto, iba a decirle que desistía de mi idea pero algo me dijo que eso sería peor a futuro. “Sam, déjame ir, por favor…” Le imploré, él no desistía, me estaba dando miedo esa situación, “Sam, debo irme”, le dije y él me agarró de mis brazos “¿Él te está esperando acaso?” me dijo con rabia, no lo miré, me soltó y exclamó: “Vete”.
Llegué a la empresa, mi papá estaba en su oficina, entré y hablé con él. Me miraba sorprendido.
- Britt, ¿lo dejas por otro hombre?
- No lo estoy dejando, sólo le pedí tiempo.
- Pues a mí eso me suena a ruptura. Hablaré con él, espero que esto no influya para mal en nuestros negocios.
- Lo siento papá…
- Hija, tu tendrás tus razones, no te reprocho ni me enojo, son cosas que pasan. Veremos a futuro que sucede.
Sam no regresó esa tarde, Quinnie ya estaba al tanto de todo, ambas estábamos triste por él, pero también sabíamos que era lo correcto, por el momento.
……………………………………………………………………………………….
Eran las ocho y ya estaba ansiosa por volver a ver a Britt, mi abuelo tardaba, estábamos invitados a cenar en casa de los Pierce. Después de mi pelea con Harry, la relación entre nosotros iba mejorando, de a poco, pero iba mejorando. Mi abuelo bajó por fin, sin más preámbulos nos fuimos a casa de Britt.
Llegamos y Nicole nos recibió, Harry entró en el salón, nos saludó a todos y nos invitó a comer unas botanas antes de la cena. Estábamos hablando, en realidad ellos charlaban, Britt no estaba, capaz andaba con Sam. Los celos me invadieron, me los imaginaba juntos, eso me mataría, algo tenía que hacer con eso, cada día me molestaba más verlos juntos, si bien hoy los noté raros, no debía confiarme, ella al parecer quería estar con un hombre, por más que fuera un imbécil. “¿Britt no está?” le pregunté a Nicole, ella me miró, y sonriendo pero concentrándose en levantar las cosas de la mesa me dijo: “Está arriba bañándose”. Le sonreí incómoda y le ayudé a levantar las cosas, mi nana lo iba a hacer pero le dije que ella allí era una invitada que ni se le ocurra hacerse la sirvienta.
Estábamos solas en la cocina, me miraba y sonreía, me armé de valor y le dije:
- Nicole, ¿por qué me miras así?
- ¿Así cómo?
- No lo sé, dímelo tú.
- San, veo que te preocupas por mi Britt, eso es tierno, veo que la quieres mucho. Desde niña has sido atenta con ella.
- Pues ella es sensible e inspira algo que no sé que es, pero lo que menos deseo es hacerle daño.
- Lo sé.
Dijo eso yéndose a la sala, me miró e hizo una seña para que la siguiera. Entramos el salón y Britt ya estaba allí saludando a todos, la miré y sonreí, ella estaba feliz pero a la vez la notaba un poco preocupada. Se acercó a mí y me abrazó. Sentí con ese abrazo que algo en ella había cambiado. Nos sentamos juntas en el sillón, ella agarró mi mano y no la soltó. Yo estaba feliz, cuando Nicole nos invitó a cenar, Britt se paró y me llevó de la mano a la mesa. Nicole nos deleitó con su comida, ella y mi nana hablaban sobre comidas, mi abuelo y Harry sobre negocios, con Britt sólo escuchábamos mientras nos mirábamos. Algo le preocupaba, decidí preguntarle sobre eso.
- Britt, ¿estás bien?
- Si...
- Pues no lo parece, ¿pasa algo?
Pensé que tal vez estaba incómoda por nuestra charla, ella sabía que sentía celos de ella, sabía que deseaba besarla. Me miró y dijo que se sentía bien, que luego hablaríamos. Todo estaba tranquilo, llegó un momento donde estábamos en silencio y mi abuelo decidió hablar, felicitaba a Britt por su decisión de bailar, le dijo que esperaba que eso no generara una distancia entre ellos. Britt le decía que ella también espera eso, realmente no sabía cómo serían sus tiempos, tal vez ya no iría a la empresa. Esa idea me estremeció, ¿qué haría si no volvía a verla? La miré con nostalgia, la extrañaría pero quizás era lo que estaba destinado para nosotras, prefería verla feliz haciendo lo que más le gusta antes de que esté sufriendo en un lugar que no era el suyo.
- Dime, ¿me visitarás? -preguntó mi abu.
- Claro, prometo hacerlo -respondió ella.
- ¿Cómo estás? Me enteré que tú y Sam ya no salen… -dijo mi abuelo.
Yo dejé de comer, mi nana y Harry miraron a Britt esperando una respuesta, Nicole me miraba, Britt estaba un poco incómoda, dejó de comer, me miró y le dijo a mi abuelo:
- Le pedí tiempo, eso no significa que sea definitivo, sólo que él lo interpretó así, y por lo que veo, mi padre también -dijo mirando a Harry.
- Britt hija, Harry me comentó eso por cuestiones de la empresa, ustedes tendrán sus razonas, sólo espero que eso no afecte sus negocios.
- No te preocupes Gustavo, eso no pasará.
Dijo eso y me miró, no podía creer que esto esté pasando, podía divisar las oportunidades con ella, por más que ella se fuera de la empresa chances tenía, podría visitarla todos los días, es verdad que siempre invertí en las obras teatrales sólo que nunca me inmiscuía mucho, ahora tenía la excusa perfecta, pero a la vez había muchas amenazas pues ella conocería gente que tuviera sus mismos gustos, gente con la cual la afinidad se daba en cuestión de minutos; pero eso no me detendría, chances había, podríamos estar juntas, una probabilidad había.
Luego de cenar pasamos nuevamente al salón, mi nana me miraba contenta, ella también pensaba lo mismo que yo, ella también amaba a Britt, de seguro me ayudaría a enamorarla. Yo no sabía de qué manera hablar con Britt, pero estaba tan emocionada que no tenía apuros en actuar, pero como dicen muchos, no hay que dormirse en los laureles.
El celular de Britt comenzó a sonar, ella miró y era un número desconocido el que figuraba en su pantalla, ella me lo dijo, sin embargo lo mismo atendió. Ella se sorprendió un poco, pero estaba feliz, pidió permiso y se fue en dirección a la cocina. Yo estaba molesta, quería saber con quien hablaba y por qué estaba tan feliz. “Ya vengo” dije, salí en dirección a la cocina, Britt no estaba allí, miré a un costado y había un pasillo, me acerqué poco y escuché que Britt reía, “¿Mañana? ¿Lo dices en serio? En realidad quisiera verte ahora” eso hizo que mis celos aumentaran, ella se vería con otro. ¿Era yo o no me estaba dando cuenta que me estaba convirtiendo en una ingenua? No podía creer que esto estuviera pasándome, Britt agregó: “Te veo mañana, un beso… También te quiero lo sabes… ja, ja, lo hablaremos, adiós, te quiero, siempre lo hice”. Quería llorar pero no lo haría, no dejaría que esto me afecte. Britt salió sonriendo del pasillo y me vio allí parada, se sorprendió y me dijo:
- San ¿estás bien? ¿Necesitas algo?
- ¿Por qué no me dijiste que ya no salías con Sam?
- Sólo le pedí tiempo.
- La mayoría de las parejas que se dan un tiempo generalmente no vuelven, ¿estás interesada en otra persona Brittany?
- Tal vez, no lo sé con certeza, no quería dañar a Sam, por eso le pedí tiempo para saber si realmente él es el indicado.
- El que te habló recién, ¿es un pretendiente?
- ¿Qué? No. -dijo muy convencida, pero con efusividad agregó- me llamó Alexandra, está en New York, quiere verme.
Me sentí estúpida por unos momentos, sentía celos de una amiga de Britt, la miré con vergüenza, ella estaba muy emocionada, eso me agradaba, Alexandra también la ayudaría con su sueño, Britt no estaba sola, eso me reconfortaba, pero a la vez me hacía sentir descartable, yo no pertenecía a ese mundo de baile, arte y glamour; Britt era lo contrario a mí, si bien me gustaba el Ballet e invertía en esa industria, lo mío eran los negocios. Nuestros mundos eran distintos, tal vez eso me atraía de ella, ese lugar fantástico que me describía era desconocido para mí, me atraía la idea de conocerlo pero sólo si era guiada por ella. Alexandra conocía todo eso, ella comprendía en su totalidad a Britt, eso me daba celos también, ¡era una maldita pendeja! por todo la celaba y ni siquiera era mi novia, apenas éramos socias y casi amigas. La distancia entre nosotras me molestaba, no pasaba de la franja de la amistad, estaba estancada allí y lo peor es que estaba locamente enamorada de ella.
- Mañana me veré con ella, en la noche podemos salir juntas, me encantaría que la conocieras más -dijo Britt.
- Está bien, por mi no hay problema.
- San, lo de Sam quería contártelo yo pero no tuve la oportunidad de hacerlo, sólo mis padres sabían y Quinnie, nadie más.
- ¿Quinn sabía?
- Si… no te enojes con ella, pretendía decírtelo, pero se me adelantaron.
- Lo entiendo. Te noté algo preocupada, me imagino que es por eso.
- No lo negaré, estuve tres años junto a él y fue difícil pedirle esto, no sé que pasará a futuro pero por el momento es lo mejor.
Me miró fijamente, me acerqué un poco más a ella y la contemplé detenidamente, era hermosa, quería que fuera sólo mía, pero eso sería imposible, deseaba abrazarla y subirla a la mesada mientras la besaba apasionadamente, mis ganas de desnudarla y hacerla mía eran enormes, si ella seguía mirándome de esa forma no lo aguantaría e intentaría besarla pero cerré mis ojos, suspiré pesadamente, de repente sentí sus brazos rodeando mi cuello, mis brazos se colocaron en su cintura, mi cabeza descanso en su hombro, no existía nadie más para mí en esos momentos, todo el maldito mundo dejaba de existir, sólo esa rubia lograba desconectarme de mis miedos a perderla, calmaba la rabia que sentía por Quinn dado que no me contó nada, además, Britt no me dijo nada de este “tiempo” que se daba con Sam, me transmitía paz, justo lo que necesitaba entre tanto caos que mi cabeza generaba. ¿Cómo se sentirá ella? Estaba triste lo sé, pero era otra Britt, la soñadora y realmente me volvía loca por ella, deseaba conocerla más, pasar más tiempo juntas, simplemente disfrutando de su felicidad. “Britt, la persona que esté contigo será muy afortunada” ella me miró y sonrió, “Yo también seré afortunada, porque con la próxima persona con la que esté, sé que será para siempre”.
Era hora de irnos, nos despedimos de los Pierce, al día siguiente nos veríamos, era medianoche, tan sólo debía esperar ocho horas y volvería a verla. Mi nana subió conmigo a la habitación, ni bien estuvimos solas la abracé feliz, ella sonreía. “Nana, será mía, ella es para mí”, ella me miraba y me hizo sentar en la cama, me miró a los ojos y me dijo: “Vi como te mira, la noto confundida, ve despacio hija, ella no es como las demás”. Claro que Britt no era como las demás, con ella todo era diferente, absolutamente todo. Mi nana se iba, antes de cerrar la puerta me miró, “Estoy enamorada” le dije, ella sonreía y me dijo: “¡YA ERA HORA!”. Me dormí, pensando en ella, en un nosotras no tan lejano.
El día que se asomaba era nublado, el frío invadía todo, llegué temprano a la empresa, Quinn llegó junto conmigo y mientras caminábamos hacia la entrada del edificio le dije:
- Debemos hablar, ¿cómo está eso de que no me cuentas que Britt y Sam ya no salen?
- No es algo que yo deba contarte.
- ¿Cómo que no? ¡Eres mi amiga!
- Pues sí. Pero esos son temas de Britt, San, ella está confundida, pero que ya no esté con Sam es un avance, él sólo la limitaba.
- Quinn, ella planea irse de la empresa, yo acepto eso, me encanta que siga sus sueños, pero no sé cómo seguiré si no la veo, conocerá otras personas y puede que yo no signifique nada para ella.
- Pues es verdad, conocerá otras personas, ya te lo dije más de una vez, no te ilusiones con ella San, puede pasar algo, y puede que no.
Mientras me decía esto Britt llegó junto a su padre, nos saludó con efusividad, caminamos juntas al ascensor, nos mirábamos y sonreíamos, Quinn, que estaba a mi lado, me mandó un mensaje de texto donde me decía: Déjala de mirar así, parece que estuvieras enamorada ¡ja, ja, ja! Sonreí. Llegamos a nuestro piso y cada una ocupó su oficina; a los minutos llegó Sam, vi que saludó desde la puerta a Britt, se dio la vuelta y me miró unos segundos, luego se fue. Si yo sufría por no poder estar con ella no me imagina él, ella le pidió tiempo, debió ser terrible, si yo hubiera estado con ella y me dijera eso creo que moriría, tal vez así se sentía él. Tenía miedo de pasar por eso, ¿qué haría si ella volvía con él o si eligiera a otra persona que no fuera yo? La miraba desde mi escritorio, moría por decirle lo que sentía, pero no era el momento, tenía que ir despacio, mi nana me lo dijo y si ella lo decía era por algo.
A media mañana Britt se fue. No volvió en todo el día. Sabía que estaba con su amiga pero me desesperaba la idea de imaginarla lejos de mí. Aproveché su ausencia para charlar con Quinn, mi amiga me contó todo lo que habló con Britt, me dijo: “Chances tienes, pero será cuestión de tiempo” me aclaró que Britt estaba pasando por cambios muy radicales, yo conocía parte de esa mujer, mis tiempos no serían los mismos de ella, al parecer muchas cosas nos separaban, es como si todo dijera: no deben estar juntas. Sin embargo Quinn me decía que todo es posible, ella y Rachel eran diferentes, en todo sentido, pero aún así estaban juntas, eso era un ejemplo para mí, debía luchar por Britt contra todo, ella no parecía oponerse, yo interpretaba eso como una buena señal; ella estaba celosa, ¿acaso eso no dice nada?
Regresé a casa a las siete de la tarde. Me duché y encendí el equipo de música. Pasaron unos minutos y mi celular sonó, era Quinn. Tenía dos mensajes de ella, uno que me envió veinte minutos antes, no lo había visto, me decía que Britt nos invitó a cenar junto con Alexandra si yo iría, como no respondí volvió a preguntar si iría, iba a responderle pero me llamó:
- San, ¿qué haces? ¿Irás? Con Rach ya estamos listas, nos esperan en el departamento de Alexandra.
- ¡Claro que iré! Pásame a buscar.
En menos de veinte minutos Quinn estaba en casa, y yo lista. Mi nana me vio apurada pero contenta, “¿A dónde vas mi´ja?” corriendo hacia la puerta le dije: “Cenaré con las chicas y Britt” ella sonrió y salí. Llegamos al departamento de Alexandra, Rachel estaba emocionada, ella adoraba a Alexandra, no dejaba de contarme sus proezas para llegar a ser la bailarina que era, en un momento Quinn preguntó sí Alexandra tenía novio, Rach contestó que un año ella se mostraba mucho con una chica, todos pensaron que eran pareja pero ellas nunca lo confirmaron, era un rumor apenas, nunca se le conoció un novio. Esa idea me inquietó, Quinn notó eso pero no me dijo nada. Me acordé de la forma en que ellas se miraban esa vez en Inglaterra, los celos otra vez, ¿y si Britt dejó a Sam por ella? Ellas se querían mucho, ella le dijo que la quería la noche anterior por teléfono, Alexandra era una compañera perfecta para Britt, la entendía, la conoció desde hace tiempo, incluso quiso escaparse con ella, de repente ella se convirtió en una amenaza para mí, podía brindarle más cosas a Britt que yo, estaba nuevamente a la deriva, me sentía impotente, no dejaría que alguien me separe de ella, no lo permitiría.
Entramos en el departamento, era enorme, estaba decorado con colores claros, rosa, lila, beige y blanco. Britt nos recibió, lucía contenta, nos presentó a Alexandra, la más emocionada era Rachel, prácticamente se le tiró encima. Alexandra también la conocía, “La talentosa Rachel Berry” así le dijo, Quinn me miró y me dijo: “Creo que Alexandra genera celos en ti y en mí” la miré y era verdad, mi amiga estaba celosa porque su novia estaba embobada con la bailarina. Britt no era la excepción, se sentó al lado de ella y mientras hablaba colocaba sus manos en las rodillas de Alexandra, ésta cuando contaba algo constantemente tocaba a Britt. Yo estaba sentaba lejos de ellas, a Quinn pareció no molestarle que su novia estaba embelesada con esa bailarina, pues estaba igual, concentrada escuchándola, realmente pasó por muchas cosas, la gente le puso muchos obstáculos pero luchó y hoy es reconocida internacionalmente “Ayudaré a Britt a triunfar, juntas lo haremos, hoy hablamos con Ryan, dentro de un par de días comienza a practicar” yo no lo podía creer, Quinn y Rachel la felicitaban, yo estaba en shock.
- ¿Cómo está eso? Yo invertiré en esa obra, Ryan no me dijo nada.
- Hablé con él, me dijo que te lo comentaría -respondió Britt.
- Pues no lo ha hecho aún -respondí con fastidio.
- Lo dijiste muy bien, “aún” no lo ha hecho, pero lo hará, yo participaré, será un éxito Santana, Britt es genial -respondió Alexandra.
- ¡Brindemos! -dijo Rachel.
Entre risas brindaron, yo no despegaba mi mirada de Alexandra, hablaba mirando a Britt, se dirigía a ella solamente, le gustaba, no tenía dudas. Britt sólo le sonreía, ¿acaso estaban coqueteando? No podía soportar eso, salí al balcón, tenía que hablar con Ryan, estaba feliz por Britt pero me enfurecía ser la última en enterarme de todo lo que le pasaba a ella.
- ¡Santana! Iba a llamarte mañana.
- ¿Mañana? ¡Por qué demonios me entero por terceros que harás el musical!
- Santana cálmate, te dije que lo haría, sólo tenía que confirmarlo, es lo que iba a hacer mañana, ¿quién te lo comentó? De seguro fue Britt, ¿no son amigas? No entiendo tu enojo.
- Me lo dijo Alexandra, no sabía que ella participaría, no me gusta no tener en orden las cosas en las que invierto.
- Santana, las veces que trabajaste conmigo dejaste todo en mis manos, jamás te involucraste mucho, no soy uno de tus socios empresariales, ¿por qué ahora el cambio?
- … Perdón, tienes razón, me sobresalté, mañana te espero en mi oficina.
- Así será, nos vemos Santana.
Él tenía razón, me molestó la idea de que otras personas estuvieran con Britt, siempre invertí en las obras musicales pero no me involucraba mucho. Veía a Alexandra, a ella parecía interesarle Britt, estaban riendo como enamoradas. Me molestó la idea de imaginarlas juntas, de seguro practicarían juntas, sus cuerpos sudados rozarían a cada instante mientras bailen, ella podría tocarla tal como lo hizo Britt conmigo esa vez que descubrí su mini estudio de baile…
Alexandra me vio fijamente por unos instantes, yo no dije una sola palabra pero mi mirada le decía que si llegaba a tocar a Britt la mataría.
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
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Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
wwwwwwwwwwwwwwwwwwwooooooooooooooooooooooooooooowwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwww mi san hermosamente celosa!! hay dios que bueno que britt ya dejo a sam pero espero que alexandra no sea una amenaza o la odiare por completo!! besos! vuelve pronto!!
Y en bs as aprovecha ir a ver el parque tecnopolis! es precioso y si pasas por cordoba visitame jajaja besos!!
Y en bs as aprovecha ir a ver el parque tecnopolis! es precioso y si pasas por cordoba visitame jajaja besos!!
tatymm-*- - Mensajes : 2406
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Edad : 34
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Gracias por la actu!!!!
Wooow... pobre Britt, tantos cambios la confunden (si hasta el desayuno lo hace, okno ._.)
Y San en modo celos xDDD
Mi Dios amo tu fic y la forma de escribir que tienes.
Saludos. Pásalo bien en Bs Aires y cuídate =)
Wooow... pobre Britt, tantos cambios la confunden (si hasta el desayuno lo hace, okno ._.)
Y San en modo celos xDDD
Mi Dios amo tu fic y la forma de escribir que tienes.
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Tat-Tat******* - Mensajes : 469
Fecha de inscripción : 06/07/2013
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
mmm san enamorada,... y sobre todo celosa, combinación fatal para quien se le ponga en frente,.. jajajaj
ufff,... muchas cosas,... la confusión de san y britt las vuelve locas a cada una (aunque san lo tenga 1.000% claro),...
britt y sam "un tiempo" separados,... ¿definitivo?
alexandra de cierta forma me gusta,.. todavía no se bien, derecho a duda con respecto a la relación con britt que solo sea una simple amistas,..
PD: respecto a marcia, seria bueno que este un tiempo mas, para hacer "intercambio" de celos (en el hipotetico caso),...
san por alexandra,.. y britt por marcia
ufff,... muchas cosas,... la confusión de san y britt las vuelve locas a cada una (aunque san lo tenga 1.000% claro),...
britt y sam "un tiempo" separados,... ¿definitivo?
alexandra de cierta forma me gusta,.. todavía no se bien, derecho a duda con respecto a la relación con britt que solo sea una simple amistas,..
PD: respecto a marcia, seria bueno que este un tiempo mas, para hacer "intercambio" de celos (en el hipotetico caso),...
san por alexandra,.. y britt por marcia
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Muy buenas noches!
Vaya casualidad! Recién comentaba en un fic que no creo que nada bueno pueda salir de los celos... Pero es bien cierto que muchas veces son inevitables. Una poeta escribió, una vez: "Hay celos?, luego hay amor. Hay amor? luego habrá celos". Y la pobre Santana está predestinada a sentirlos, por el simple hecho de que Brittany no le pertenece.
Tu fic me tiene embobada, de verdad. Es uno de los pocos en donde los sentimientos de al menos una están muy claros y puestos sobre la mesa, de una manera llamativamente realista. Y son sentimientos absolutos, que justifican todas y cada una de las actitudes de Santana, aunque duela leerlas. Como le comentaba a Paz hace unos días, cuando una persona egocéntrica y orgullosa como la latina se enamora tan categóricamente de otra persona persona a la que, al mismo tiempo, admira, se desplaza del centro de su propio universo. Comienza a vivir a la sombra de quien es, ahora, la justificación de la vida, de todo lo que sucede. Santana no es más la razón de su propia existencia: ahora es Brittany todo lo que importa. Y como consecuencia de que Brittany no siente lo mismo por ella, su lugar de sombras la opacará y hará sufrir.
El tema es que tal vez Brittany nunca corresponda a sus sentimientos, incluso aunque se enamore o enamorisque de Santana. Cuando pienso en eso, entiendo toda la razón de Quinn al decirle a su amiga que es mejor que no se ilusione. Sobre todo porque si empieza a enloquecer y ejercer presión sobre la rubia, lo más probable es que la aleje. Ahora que ella misma abrió las puertas de la jaula de Brittany, tendrá que acostumbrarse a verla volar.
Oh, ese párrafo casi final en el que pide disculpas a Ryan por no haberle hablado antes que a nadie... excelente. Santana es inteligente, a pesar de todo. Su autoconciencia aun le funciona. Es normal -e impecablemente descripto por parte tuya- la sensación de que ella importa menos que nadie, que es la eterna relegada en las noticias de la rubia. Son los coletazos supervivientes de su forma de ser esencial, acostumbrada a pararse en el centro de su vida y dominar las situaciones que la rodean, cuando le interesan. Ya no lo hace, ya no domina casi nada y lo sabe, por supuesto.
En cuanto a Brittany, si no alcanza a atar todos los cabos con lo muy obvia que es Santana, es porque tal vez, inconscientemente, no quiera hacerlo. No quiera o no pueda. Nadie podría culparla. El consejo de Quinn acerca de que primero debe conocerse a sí misma y vivir su vida antes de pretender asociarla a la de nadie más, es impecable. Y creo que lo hará, verdad? Pues ojalá así sea.
Y Santana tendrá que sobreponerse o enloquecer. Pero ya que aceptó quedarse, por lo menos debería tener la nobleza de tratar de ser amiga de la rubia. Ella aceptó ese destino de muerte y tortura interior. Ella aceptó quedarse para experimentar cada gesto de la rubia como si fuese la sentencia de su destino final, sea llevándola al cielo o al infierno. Todo lo que has escrito es impecable, pero te espera una enorme tarea por delante.
Y no veo la hora de leer cómo lo hacés. Yo solo me quedo quietita en un rincón, a la espera de las novedades.
Buenos Aires! Adoro esa ciudad infinita. Que tengas unos hermosos días...
Vaya casualidad! Recién comentaba en un fic que no creo que nada bueno pueda salir de los celos... Pero es bien cierto que muchas veces son inevitables. Una poeta escribió, una vez: "Hay celos?, luego hay amor. Hay amor? luego habrá celos". Y la pobre Santana está predestinada a sentirlos, por el simple hecho de que Brittany no le pertenece.
Tu fic me tiene embobada, de verdad. Es uno de los pocos en donde los sentimientos de al menos una están muy claros y puestos sobre la mesa, de una manera llamativamente realista. Y son sentimientos absolutos, que justifican todas y cada una de las actitudes de Santana, aunque duela leerlas. Como le comentaba a Paz hace unos días, cuando una persona egocéntrica y orgullosa como la latina se enamora tan categóricamente de otra persona persona a la que, al mismo tiempo, admira, se desplaza del centro de su propio universo. Comienza a vivir a la sombra de quien es, ahora, la justificación de la vida, de todo lo que sucede. Santana no es más la razón de su propia existencia: ahora es Brittany todo lo que importa. Y como consecuencia de que Brittany no siente lo mismo por ella, su lugar de sombras la opacará y hará sufrir.
El tema es que tal vez Brittany nunca corresponda a sus sentimientos, incluso aunque se enamore o enamorisque de Santana. Cuando pienso en eso, entiendo toda la razón de Quinn al decirle a su amiga que es mejor que no se ilusione. Sobre todo porque si empieza a enloquecer y ejercer presión sobre la rubia, lo más probable es que la aleje. Ahora que ella misma abrió las puertas de la jaula de Brittany, tendrá que acostumbrarse a verla volar.
Oh, ese párrafo casi final en el que pide disculpas a Ryan por no haberle hablado antes que a nadie... excelente. Santana es inteligente, a pesar de todo. Su autoconciencia aun le funciona. Es normal -e impecablemente descripto por parte tuya- la sensación de que ella importa menos que nadie, que es la eterna relegada en las noticias de la rubia. Son los coletazos supervivientes de su forma de ser esencial, acostumbrada a pararse en el centro de su vida y dominar las situaciones que la rodean, cuando le interesan. Ya no lo hace, ya no domina casi nada y lo sabe, por supuesto.
En cuanto a Brittany, si no alcanza a atar todos los cabos con lo muy obvia que es Santana, es porque tal vez, inconscientemente, no quiera hacerlo. No quiera o no pueda. Nadie podría culparla. El consejo de Quinn acerca de que primero debe conocerse a sí misma y vivir su vida antes de pretender asociarla a la de nadie más, es impecable. Y creo que lo hará, verdad? Pues ojalá así sea.
Y Santana tendrá que sobreponerse o enloquecer. Pero ya que aceptó quedarse, por lo menos debería tener la nobleza de tratar de ser amiga de la rubia. Ella aceptó ese destino de muerte y tortura interior. Ella aceptó quedarse para experimentar cada gesto de la rubia como si fuese la sentencia de su destino final, sea llevándola al cielo o al infierno. Todo lo que has escrito es impecable, pero te espera una enorme tarea por delante.
Y no veo la hora de leer cómo lo hacés. Yo solo me quedo quietita en un rincón, a la espera de las novedades.
Buenos Aires! Adoro esa ciudad infinita. Que tengas unos hermosos días...
MarisaParedes****** - Mensajes : 316
Fecha de inscripción : 25/02/2012
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Pero me olvidaba!
Ummm... De nuevo esa historieta de que Santana pida perdón a alguien, simplemente porque a Brittany se le antoja...
Hasta donde recuerdo, el tipo "chinchó" a la latina. Si Santa Brittany de Las Verdades no sabe cómo fueron las cosas, no debería exigir reparaciones. Pero el amor hace tontos, no hay nada que hacer.
También impecable cuando Santana empatiza con Sam sobre cómo debe sentirse ante el pedido de tiempo por parte de su novia.
Te tomás una leche merengada en El Tortoni, por mí? Besos
Ummm... De nuevo esa historieta de que Santana pida perdón a alguien, simplemente porque a Brittany se le antoja...
Hasta donde recuerdo, el tipo "chinchó" a la latina. Si Santa Brittany de Las Verdades no sabe cómo fueron las cosas, no debería exigir reparaciones. Pero el amor hace tontos, no hay nada que hacer.
También impecable cuando Santana empatiza con Sam sobre cómo debe sentirse ante el pedido de tiempo por parte de su novia.
Te tomás una leche merengada en El Tortoni, por mí? Besos
MarisaParedes****** - Mensajes : 316
Fecha de inscripción : 25/02/2012
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Lo unico que puedo poner es:
Por favor no te tardes con el siguiente capitulo
Saludos
Por favor no te tardes con el siguiente capitulo
Saludos
Jane0_o- - Mensajes : 1160
Fecha de inscripción : 16/08/2013
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Hola al fin Britt dejó q Sam jaja las los celos son divertidos en algunas ocasiones más cuando uno los lee jjjj pero bueno el capítulo estuvo genial ahora será Santana vrs Alexandra quien ganará la batalla. Espero q no me hagas sufrir esperando actualización jaja Chao
Pame_21***** - Mensajes : 245
Fecha de inscripción : 31/10/2012
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
holaaa
me parece a mi o santana es algo celosa jeje broma,
sin tener una relacion es celosa no me imagino si la llegan a tener jeje
el primer paso ya lo dio britt en dejar a sam, ahora a esperar que se aclare britt con lo que le esta pasando, si siente algo o no por santana
veremos como se desarrolla la relacion britt- alexandra, britt-santana y pero la mas entretenida santana-alexandra je
ya quiero leer más, espero que no demores mucho :(
nos vemos en la proxima que pases lindo
me parece a mi o santana es algo celosa jeje broma,
sin tener una relacion es celosa no me imagino si la llegan a tener jeje
el primer paso ya lo dio britt en dejar a sam, ahora a esperar que se aclare britt con lo que le esta pasando, si siente algo o no por santana
veremos como se desarrolla la relacion britt- alexandra, britt-santana y pero la mas entretenida santana-alexandra je
ya quiero leer más, espero que no demores mucho :(
nos vemos en la proxima que pases lindo
Patri_glee***** - Mensajes : 225
Fecha de inscripción : 01/10/2013
Edad : 32
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
holaaa!!!
que mas decir que es genial el fic
san celosa joder jajaja. .
espero que britt deje su confucion de lado y pueda seguir su sueño. .
ojala que la amiga de britt no traiga distanciamiento entre britt-britt y san. .. ojala halla acercamiento brittana xD. ..
en fin saludos disfruta de esos dias de vacaciones
hasta la prox actualizacion
que mas decir que es genial el fic
san celosa joder jajaja. .
espero que britt deje su confucion de lado y pueda seguir su sueño. .
ojala que la amiga de britt no traiga distanciamiento entre britt-britt y san. .. ojala halla acercamiento brittana xD. ..
en fin saludos disfruta de esos dias de vacaciones
hasta la prox actualizacion
raxel_vale****** - Mensajes : 377
Fecha de inscripción : 24/08/2013
Edad : 34
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
Holaa
Me gusto mucho. Sabes, los celos de San son lindos y dan miedo..
En torno a como va la historia, pienso que viene una etapa dura para ellas; porque viene la aceptación de Britt, su nuevo sueño, y la llegada de su mejor amiga.
Sin más, espero que actualices pronto y me sorprendas de nuevo !!
Me gusto mucho. Sabes, los celos de San son lindos y dan miedo..
En torno a como va la historia, pienso que viene una etapa dura para ellas; porque viene la aceptación de Britt, su nuevo sueño, y la llegada de su mejor amiga.
Sin más, espero que actualices pronto y me sorprendas de nuevo !!
Laura-Fernanda* - Mensajes : 35
Fecha de inscripción : 21/11/2013
Edad : 25
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
tatymm escribió:wwwwwwwwwwwwwwwwwwwooooooooooooooooooooooooooooowwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwwww mi san hermosamente celosa!! hay dios que bueno que britt ya dejo a sam pero espero que alexandra no sea una amenaza o la odiare por completo!! besos! vuelve pronto!!
Y en bs as aprovecha ir a ver el parque tecnopolis! es precioso y si pasas por cordoba visitame jajaja besos!!
Tatymm! Me agrada que te guste la historia, con respecto a Alexandra... ummmm... lo confieso, para Santana es una amenaza, pero tranquila, confiemos en Britt, ok?
Tecnopolis no estaba abierto... pero fueron unas vacaciones increibles!!! Me queda pendiente Córdoba! je
Besos!
Tat-Tat escribió:Gracias por la actu!!!!
Wooow... pobre Britt, tantos cambios la confunden (si hasta el desayuno lo hace, okno ._.)
Y San en modo celos xDDD
Mi Dios amo tu fic y la forma de escribir que tienes.
Saludos. Pásalo bien en Bs Aires y cuídate =)
Me agradeces por actualizar? awwww! eres un amor! Gracias a vos por leer y comentar, ya seguiras leyendo a San en modo celos... hay mucho de eso jeje
Besos!
3:) escribió:mmm san enamorada,... y sobre todo celosa, combinación fatal para quien se le ponga en frente,.. jajajaj
ufff,... muchas cosas,... la confusión de san y britt las vuelve locas a cada una (aunque san lo tenga 1.000% claro),...
britt y sam "un tiempo" separados,... ¿definitivo?
alexandra de cierta forma me gusta,.. todavía no se bien, derecho a duda con respecto a la relación con britt que solo sea una simple amistas,..
PD: respecto a marcia, seria bueno que este un tiempo mas, para hacer "intercambio" de celos (en el hipotetico caso),...
san por alexandra,.. y britt por marcia
Hola! Alexandra está en la historia justamente para ese intercambio de celos... No te equivocas! Diste en el blanco! Siempre hay alguien que está con esa persona que tanto nos gusta y naaaa dan ganas de matar! Alexandra es esa persona y Marcia va por el mismo camino, tendremos a estos personajes un tiempo más en la historia...
Sam... pobre Sam, él seguirá luchando, veremos si sus esfuerzos tienen frutos...
Besos y gracias por leer!
MarisaParedes escribió:Muy buenas noches!
Vaya casualidad! Recién comentaba en un fic que no creo que nada bueno pueda salir de los celos... Pero es bien cierto que muchas veces son inevitables. Una poeta escribió, una vez: "Hay celos?, luego hay amor. Hay amor? luego habrá celos". Y la pobre Santana está predestinada a sentirlos, por el simple hecho de que Brittany no le pertenece.
Tu fic me tiene embobada, de verdad. Es uno de los pocos en donde los sentimientos de al menos una están muy claros y puestos sobre la mesa, de una manera llamativamente realista. Y son sentimientos absolutos, que justifican todas y cada una de las actitudes de Santana, aunque duela leerlas. Como le comentaba a Paz hace unos días, cuando una persona egocéntrica y orgullosa como la latina se enamora tan categóricamente de otra persona persona a la que, al mismo tiempo, admira, se desplaza del centro de su propio universo. Comienza a vivir a la sombra de quien es, ahora, la justificación de la vida, de todo lo que sucede. Santana no es más la razón de su propia existencia: ahora es Brittany todo lo que importa. Y como consecuencia de que Brittany no siente lo mismo por ella, su lugar de sombras la opacará y hará sufrir.
El tema es que tal vez Brittany nunca corresponda a sus sentimientos, incluso aunque se enamore o enamorisque de Santana. Cuando pienso en eso, entiendo toda la razón de Quinn al decirle a su amiga que es mejor que no se ilusione. Sobre todo porque si empieza a enloquecer y ejercer presión sobre la rubia, lo más probable es que la aleje. Ahora que ella misma abrió las puertas de la jaula de Brittany, tendrá que acostumbrarse a verla volar.
Oh, ese párrafo casi final en el que pide disculpas a Ryan por no haberle hablado antes que a nadie... excelente. Santana es inteligente, a pesar de todo. Su autoconciencia aun le funciona. Es normal -e impecablemente descripto por parte tuya- la sensación de que ella importa menos que nadie, que es la eterna relegada en las noticias de la rubia. Son los coletazos supervivientes de su forma de ser esencial, acostumbrada a pararse en el centro de su vida y dominar las situaciones que la rodean, cuando le interesan. Ya no lo hace, ya no domina casi nada y lo sabe, por supuesto.
En cuanto a Brittany, si no alcanza a atar todos los cabos con lo muy obvia que es Santana, es porque tal vez, inconscientemente, no quiera hacerlo. No quiera o no pueda. Nadie podría culparla. El consejo de Quinn acerca de que primero debe conocerse a sí misma y vivir su vida antes de pretender asociarla a la de nadie más, es impecable. Y creo que lo hará, verdad? Pues ojalá así sea.
Y Santana tendrá que sobreponerse o enloquecer. Pero ya que aceptó quedarse, por lo menos debería tener la nobleza de tratar de ser amiga de la rubia. Ella aceptó ese destino de muerte y tortura interior. Ella aceptó quedarse para experimentar cada gesto de la rubia como si fuese la sentencia de su destino final, sea llevándola al cielo o al infierno. Todo lo que has escrito es impecable, pero te espera una enorme tarea por delante.
Y no veo la hora de leer cómo lo hacés. Yo solo me quedo quietita en un rincón, a la espera de las novedades.
Buenos Aires! Adoro esa ciudad infinita. Que tengas unos hermosos días...
Marisa!!!! Me encanta leerte! He leído el poema, es hermoso, no lo conocía, me gustó mucho y como lo has dicho, los celos son inevitables, habrá muchos celos, creo que me he abusado pero en fin, ya me dirás que tal quedó todo eso en la historia.
Con que estás embobada? Confieso que eso me halaga bastante, nunca imaginé que algo escrito por mi genere eso en alguna persona, gracias de corazón!
Me gustó mucho y coincido con vos en relación a lo que le comentabas a Paz, una se pierde en la persona amada, me ha pasado y quería dejar plasmado eso, algunos me han culpado de ser patética pero... eso les ha pasado también y pasa, yo sé que es así.
Santana abrió el camino para que Britt vuele, con dolor dejará que siga su sueño, le dolerá pero Santana sabrá lidiar con eso.
Brittany de a poco cederá... ya lo verás y espero leer que te parece su accionar, presiento que no te gustará... pero me arriesgo! No me molestará leer un largo comentario hecho por vos en cuanto a las acciones de Britt a partir del próximo capítulo.
Para mí, Santana definitivamente enloquecerá... Gracias por describir mi escritura como impecable, tienes la razón al decir que hay todo un trabajo por delante, aún estoy trabajando en eso...
MarisaParedes escribió:Pero me olvidaba!
Ummm... De nuevo esa historieta de que Santana pida perdón a alguien, simplemente porque a Brittany se le antoja...
Hasta donde recuerdo, el tipo "chinchó" a la latina. Si Santa Brittany de Las Verdades no sabe cómo fueron las cosas, no debería exigir reparaciones. Pero el amor hace tontos, no hay nada que hacer.
También impecable cuando Santana empatiza con Sam sobre cómo debe sentirse ante el pedido de tiempo por parte de su novia.
Te tomás una leche merengada en El Tortoni, por mí? Besos
Santana se portó mal con el tipo ese, él simplemente quería salir con Britt y a Santana no le gustó nada esa idea, se dejó llevar por la rabia y le pegó... Tenía que pedirle disculpas, verdad?
Me agrada muchísimo que tengas en cuenta pequeños detalles de la historia, me encanta!
Te confesaré algo, me obsesioné con el Café Tortoni, no pude tomar la leche merengada pero si conocí el lugar desde afuera. Como no conozco Buenos Aires y tampoco me animaba a salir sola no pude ir, pero le decía a mi tío y a mi primo: "Iremos al Tortoni?" ellos prometían llevarme pero entre una y otra cosa no pudimos ir. He leído la historia del Tortoni, quedé fascinada! Volveré a Buenos Aires y lo primero que haré es ir a tomar esa leche merengada! Planeaba contarte que tal la pase y darte detalles de mi paso por ahí pero lo único que conseguí son unas fotos afuera del lugar... peor es nada, verdad?
Marisa, aunque suene raro o no, me agradas! Me encanta que leas esta historia y me encanta aún más lo que siempre aportas y comentas...
Besos y gracias por leer!
Jane0_o escribió:Lo unico que puedo poner es:
Por favor no te tardes con el siguiente capitulo
Saludos
Perdón!!! me he tardado verdad? En breve actualizo... Gracias por leer!
Besos!
Pame_21 escribió:Hola al fin Britt dejó q Sam jaja las los celos son divertidos en algunas ocasiones más cuando uno los lee jjjj pero bueno el capítulo estuvo genial ahora será Santana vrs Alexandra quien ganará la batalla. Espero q no me hagas sufrir esperando actualización jaja Chao
Pame...! me tardé... verdad? En breve actualizo. En cuanto a la batalla... pues será algo que tiene para rato... haré que amen a Alexandra! je je
Besos y gracias por leer!!!
Patri_glee escribió:holaaa
me parece a mi o santana es algo celosa jeje broma,
sin tener una relacion es celosa no me imagino si la llegan a tener jeje
el primer paso ya lo dio britt en dejar a sam, ahora a esperar que se aclare britt con lo que le esta pasando, si siente algo o no por santana
veremos como se desarrolla la relacion britt- alexandra, britt-santana y pero la mas entretenida santana-alexandra je
ya quiero leer más, espero que no demores mucho :(
nos vemos en la proxima que pases lindo
Patri!!! Veo que a vos al igual que a otras chicas les gusta Alexandra! Pobre Santana, no la tiene fácil, fácil... Pero al parecer les agrada los celos de la latina... habrá más de eso...
Disculpa por tardar en actualizar...
Besos!!!
raxel_vale escribió:holaaa!!!
que mas decir que es genial el fic
san celosa joder jajaja. .
espero que britt deje su confucion de lado y pueda seguir su sueño. .
ojala que la amiga de britt no traiga distanciamiento entre britt-britt y san. .. ojala halla acercamiento brittana xD. ..
en fin saludos disfruta de esos dias de vacaciones
hasta la prox actualizacion
Raxel, gracias por tus saludos! Pasé unos días hermosos en mis vacaciones! El acercamiento Brittana está un poco alejado, pero no tanto! Sólo sigue leyendo y... GRACIAS POR LEER! BESOS!
Hola! Me gustó eso de "etapa dura", todas hemos pasado por eso, verdad? Pues sí, no te equivocas, se viene el ciclo de aceptación, es difícil pero las chicas son luchadoras, ese ciclo será largo... bastante largo...Laura-Fernanda escribió:Holaa
Me gusto mucho. Sabes, los celos de San son lindos y dan miedo..
En torno a como va la historia, pienso que viene una etapa dura para ellas; porque viene la aceptación de Britt, su nuevo sueño, y la llegada de su mejor amiga.
Sin más, espero que actualices pronto y me sorprendas de nuevo !!
Gracias por leer! Besos! En breve actualizo!
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
Edad : 33
Capítulo 8: Falsas ilusiones. Parte 1.
Feliz día de la Mujer! Besos para vos, querida lectora! Una vez más te agradezco que leas esta historia, la verdad me siento realizada y eso me hace una mujer feliz, todo gracias a vos! Quería agradecertelo hoy, en nuestro día! Te mando un beso enorme y un cálido abrazo!
Feliz día, aquí va mi regalo!
Capítulo 8: Falsas ilusiones. Parte 1.
Quinn salió al balcón, se puso a mi lado y prendió un cigarro, me lo dio y prendió otro para ella, aspiró el humo y soltándolo dijo:
- No sabes disimular, Alexandra dijo que eras muy seria, si supiera que estás a punto de matarla ya te sacaría del departamento, por suerte Britt te defendió “San es tierna, sólo dale tiempo”, eso dijo.
- ¿Acaso eso debería consolarme? ¡No has visto cómo se miran! Si pareciera que desean besarse, eso si no lo hicieron todo el día.
- No exageres, estás celosa, ven adentro, está buena la charla.
- ¿fumas? -dijo Britt dirigiéndose a mí.
- A veces lo hago.
- Me voy adentro, entren luego -dijo Quinn.
- ¿Me convidas? -dijo Britt.
Le di mi cigarro y ella lo apagó, luego lo partió en dos y lo dejó en un costado, yo miré eso con sorpresa, ella se limpió las manos y comenzamos a charlar.
- No debes fumar, te hace mal.
- Ok, pero podrías habérmelo dicho antes de matar a ese pobre cigarro.
- ¿Y dejar que él te mate a ti? Ni pensarlo.
Ambas sonreímos, sus ideas me parecían tiernas, ella me tomó de las manos y me dijo:
- Te molestaste hace rato por lo de Ryan, pensé que él ya había hablado contigo.
- Lo hablé, mañana hablaremos bien, pero me alegra que ya empieces a practicar, no volviste en todo el día a la empresa, ¿estuviste hablando con Alexandra?
- Sí… se nos pasó el tiempo, ella quería invitar a todas a cenar, me alegra que hayas venido.
- ¿Se pusieron al día?
- Sí; vamos a cenar, luego te contaré…
Cenamos, Britt me llevó de la mano a la mesa, se sentó a mi lado y el tiempo que duró la cena lo dedicó para mí, reíamos y charlábamos de cualquier cosa, se hacía tarde y decidimos irnos, todas nos despedimos de Alexandra. “Britt, te busco mañana” le dijo, ella le sonrió y la sangre hervía por mis venas.
Quinn dejaría a Britt en su casa y luego a mí, pero ella dijo: “Santana se queda conmigo”. Y así fue, me bajé del auto y entramos en su casa, Harry estaba despierto aún.
- Hija, volviste.
- Perdón papá, estuve ocupada, sabes, ¡ya empezaré a practicar para el musical!
- ¡Hija, eso es genial! -le dijo abrazándola- le comentaré a tu madre, acaba de subir, espérame, veo que la soltería te hizo bien…
- Papá… -dijo en forma de reproche.
- Es la verdad hija -dijo riéndose y subiendo las escaleras para desaparecer al instante.
- Santana, siéntate, traeré café.
Britt volvió con el café, Nicole bajó y la felicitó, se abrazaron y lloraron de la alegría, era tierna esa imagen. Harry desde lejos contemplaba la escena, se acercó a mí y me dijo: “Sin ti, nada de esto pasaría, mi princesa es feliz gracias a ti” le sonreí. Nicole me abrazó y me dijo algo similar, Britt escuchó y sonreía abrazada a Harry. Ellos se despidieron y quedé a solas con Britt. “El café no está caliente, déjame calentarlo” dijo yéndose a la cocina, me levanté y la seguí, veía como calentaba el café en el microondas, me apoyé en el marco de la puerta a observarla, ella no notó que yo estaba allí, en realidad eso creía yo, pero me dijo: “¿Siempre estarás espiándome?” Sonreí por eso, me acerqué y le dije: “Siempre te das cuenta, no sé cómo le haces”, ella se acercó a mí y me dijo: “No podrás ocultarme nada nunca, lo sé todo, además sentí tu perfume, es rico”. Ella se alejó; mientras sacaba leche del refrigerador noté que pudo verme en el reflejo de la puerta del microondas, sin embargo, me gustó lo que me dijo, por lo menos sabía que mi perfume no le era indiferente a ella.
Estábamos en la sala tomando el café, ninguna decía nada, yo sólo la miraba, ella sonreía y se sonrojó.
- ¿Por qué te sonrojaste?
- San, me miras mucho, ¿no te parece incómodo?
- Para mí no…
- Te contaré lo que hablé con Ale…
Ellas se pusieron al día con sus vidas, Alexandra le contó todo lo que pasó después de su partida de Ohio. Britt por su parte le contó lo suyo y los últimos eventos, fue ahí cuando Alexandra llamó a Ryan, él le había dicho que estaba preparando algo inspirado en una bailarina que conoció y él quería que formara parte de la obra, Alexandra aceptó sin saber que la bailarina era mi Britt. A partir del día siguiente comenzarían a practicar por las tardes, por lo menos de mañana la vería, pero una vez que se dedique a esto totalmente, casi no la vería. Britt me dijo que dejaría la empresa. Eso me entristeció pero lo tenía que aceptar, era su sueño, yo no sería un obstáculo para ella, por otro lado, ella y Alexandra se separaron hace años y de a poco se volvían a unir, tal vez el maldito destino me estaba diciendo que esa rubia de ojos celestes no sería para mí, sino para Alexandra.
- San… ¿estás bien?
- Sí, será raro no verte seguido por la empresa, pero es lo que hay, sigue tu sueño Britt.
- Me gusta que me digas Britt…
- Emmm… Me voy, mañana nos vemos en la empresa, te felicito Britt-Britt…
Me salió eso desde el fondo de mi corazón, noté unas lágrimas en su rostro y nos abrazamos, ¿la estaba perdiendo? No, claro que no, ella no era mía, no la estaba perdiendo simplemente estaba dejándola ir, que sea libre, sabía que me arriesgaba a que alguien más estuviera a su lado, pero prefería su felicidad. Si eso significaba que yo no fuera la afortunada de sentir sus labios, de ser dueña de sus sueños por las noches, ser la primera en contemplarla al despertar y no sentir su aroma en cada ambiente; pues mala suerte la mía, quien quiera que estaba destinado o destinada para ella simplemente se ganaría mi odio, porque tendría todo aquello que yo no podía brindarle a ella. Si eso llegara a ocurrir me iría lejos, no soportaría verla con otro u otra, sé que chances tenía de conquistarla, Quinn me lo dijo, pero ya no estaba tan segura de eso, en realidad no me sentía merecedora de ella.
Dejamos de abrazarnos, llamé a Marcelo, él vendría a buscarme. Britt me miraba, no dejaba de hacerlo, me incomodé y me sonrojé. Ella sonrió y me dijo: “Ahora sientes lo que siento yo”. Sonreí, la tomé de la cintura y le pregunté: “¿Qué sientes?”, ella cerró sus ojos, apoyó su frente en la mía, colocó sus manos en mi rostro y me dijo: “No lo sé, el tiempo dirá”.
Llegué a casa, estaba confundida, Britt dejó todo en manos del Señor Tiempo, maldito viejo, siempre está importunando, cuando uno desea estar con la persona deseada acorta cada momento, pero cuando se trata de esperar al parecer se olvida que una está ansiosa y no se atreve a acortar los momentos, allí ya no son efímeras las esperas, parecen eternas, y tan sólo han pasado veinte minutos desde la última vez que se tuvo noción de la hora. Contra él sí que no podía luchar, ella lo eligió por algo. Mientras estaba con Alexandra él hizo que “el tiempo pasara volando” pero cuando se trataba de mí, me hacía sufrir, no le importaba que yo fuera la famosa Santana López, mi prestigio o mi dinero no le importaban, nada que poseía le importaba en realidad, sólo quería que espere. Por ella lo haría, sólo por ella.
Los días siguientes fueron una mierda, Britt iba poco a la empresa, sólo de mañana, por las tardes se iba a practicar con Alexandra. Sam andaba como perro abandonado, tal vez yo era la versión femenina de él, a ambos nos hacía falta ella y tan sólo había pasado una semana.
El fin de semana llegó, Quinn me invitó a salir, iríamos a la inauguración de un boliche nuevo, “Invité a Britt, pero me dijo que no podría ir”. Eso me desanimó un poco pero debía hacerme a la idea de que no siempre ella tendría tiempo para nosotras, en especial para mí.
Estábamos en el boliche, una rubia me miraba coquetamente desde la barra, yo estaba con Quinn y Rachel en la pista, me pareció conocer a esa rubia, pero no sabía de dónde. Ella se acercó a mí con dos copas, me ofreció una y me dijo: “¡Hola! ¿No me recuerdas?” tomé la copa y le sonreí, realmente no la recordaba, se acercó a mí y me dijo: “Nos conocimos en un baile, me llevaste a tu casa y pasamos una noche espectacular, ¿no lo recuerdas?” ahora sí sabía que la conocía pero no recordaba con exactitud el día que la conocí, ni en que baile, no obstante, nos pusimos a bailar, Quinn no se sorprendió de verme coquetear con la rubia pero me sentía culpable, sentía que no le estaba siendo fiel a Britt, pero realmente yo no estaba con ella, por lo tanto no le debía respeto, aunque por dentro lo mismo me sentía en falta. La rubia me decía que quería que repitiéramos lo de la otra vez, cuando me dijo eso sólo pensé en Britt, ella estaría en su casa descansando y yo andaba de levante, no me parecía justo, si realmente quería ser merecedora de su amor, tendría que hacer bien las cosas, no todo estaba perdido. Le dije a la rubia que no podía hacer nada porque ahora no estaba disponible, ella fingió un puchero pero lo entendió, entonces simplemente bailábamos y bebíamos un trago tras otro.
La noche avanzaba, mis amigas estaban tomando bastante, yo también, pero la pasábamos bien. La rubia me meneaba seguido, me tomaba de la cintura provocándome, al parecer se le olvidó lo que le había dicho al principio. Seguíamos bailando y veo en la barra a una rubia, creí que era Brittany, seguía mirando y ahora no me equivocaba, Alexandra estaba allí, esa rubia era Britt, ella miraba a todos lados, la rubia que tenía al lado me agarró de la cintura, la miré y casi me besa, la alejé de mi, miré a Alexandra y ella vio todo, Britt también. Ella me miró sorprendida, tal vez era por lo que acababa de hacer, pero yo también la miraba sorprendida, pensé que estaría durmiendo, y no era así, estaba en el boliche y con Alexandra. Britt no hizo nada, su acompañante me saludó con la mano, yo le respondí por cortesía. Se acercaron al lugar donde estábamos todas, Britt sólo dijo: “Hola” pero casi ni lo escuché por la música, estaba enojada, lo noté pero yo también estaba igual, sólo que cada una tenía sus razones. Mi rubia acompañante las saludó con un beso a cada una, Quinn y Rachel las vieron y se sumaron al saludo. Nos pusimos a bailar, yo estaba furiosa, la rubia me dijo: “¿Pasa algo malo?” la miré y al oído le dije: “Vino alguien que no me cae bien” ella sonrió, me tomó de la mano y me alejó de allí. Estábamos apartadas de las chicas “¿Así está mejor?” dijo ella, sonreí y seguíamos bailando. “La rubia alta no deja de mirarnos” me dijo al cabo de un tiempo, miré y era verdad Britt estaba visiblemente molesta, tomé de la mano a mi acompañante y nos fuimos a la barra, pedí dos tragos más.
- ¿Quién es la rubia?
- Es mi socia, tú sabes, cuestiones de la empresa.
- Ah… claro. En realidad no sé nada pero, ¿qué más da?
Me gustó eso, después de todo la estaba pasando bien con esta rubia. Nos dirigíamos a la pista pero Quinn me agarró del brazo.
- ¿Qué demonios haces?
- ¿Perdón? Estoy bailando.
- ¿Con esa?
- Pues sí, la conocí hace tiempo y nos volvimos a encontrar.
- ¿Qué también te la tiraste?
- ¿Eso qué tiene que ver?
- Pues mucho fíjate, ¿dónde quedó el amor que decías sentir por Britt?
- ¿Acaso crees que ella sienta lo mismo? YO SIENTO QUE NO.
- Eres una imbécil, está molesta ¿no la has visto? Por si no lo sabías esos son celos.
- Pues ¿acaso tú no viste con quién anda? Con esa idiota.
- Son increíbles, ¡ambas están celosas! Déjate de pavadas y ve a hablar con ella.
- Que lo haga ella, no quiso aceptar tu invitación pero con ella viene, pues yo no debo explicar nada -le dije y me iba con la rubia.
- ¡IDIOTA! -dijo Quinn mientras me alejaba.
Yo seguía bailando, me sentía mal pero no lo quería demostrar, la rubia volvió a insistir que nos fuéramos juntas. Miré a Britt, vaya que estaba enojada, era verdad, estaba celosa, Quinn tenía razón. Miré a la rubia y me robó un beso, la aparté rápido, la miré enojada ella simplemente reía, “Traeré unos tragos” dijo y desapareció entre la multitud. Miré hacía donde estaban las chicas y Britt no estaba, me acerqué más y vi como ella se iba, Alexandra iba por detrás, Quinn se acercó y me dijo: “Idiota”. Mi amiga estaba enojada, Rachel se acercó y me dijo: “Ve a hablar con ella San”. Rach sabía todo lo que pasaba con Britt, yo no le conté muchas cosas pero suponía que mi amiga le contaba todo, no me sorprendió que me dijera eso, le di un beso en la mejilla y salí rápido del lugar.
No la encontraba, había bastantes autos estacionados y corría entre ellos, crucé unos y noté que había dos chicas, volví y Britt estaba en el suelo sentada llorando, me maldecía, otra vez la hacía sufrir, me acerqué y Alexandra me dijo:
- Santana, por favor vete.
- Vete tú, -dije enfurecida- no me hagas hacerte daño, realmente puedo romperte una pierna, y créeme, eso no te dará suerte.
- ¡Santana! -gritó Britt.
- Por favor Alexandra, déjame hablar con ella- dije.
Alexandra nos dejó, estaba enojada pero se alejó, me acerqué a Britt y la abracé. Ella lloró más “Shhh… Britt, no llores, no me gusta verte así, perdón, pero no llores” ella de a poco se calmaba, ¿le pedía perdón por bailar con otra rubia? No entendía la situación, pero si era consciente de que yo le hacía daño.
- San, sólo vine porque sabía que estarían aquí, no quería salir pero Ale insistió.
- Está bien, sólo estaba bailando con esa chica.
- Pero te besó, la vi.
- Ella me besó, yo no, tú la viste.
Ella no dijo nada, se aferró más a mí. Noté que con Alexandra estaba Quinn y Rachel. Me levanté y les dije: “Váyanse, yo llevo a Britt a su casa” ninguna se quería mover, Britt se paró y les dijo: “Me voy con Santana”. Eso las convenció, Alexandra hervía de la rabia, ella también estaba celosa, cruzamos nuestras miradas, pero no se atrevió a seguir desafiándome.
- ¿No te cae bien Ale?
- No, pero la respeto porque es tu amiga.
- Ella no es mala San.
- No digo que lo sea, pero no me cae bien.
La tomé de la mano y la llevaba a mi auto, Quinn y las demás se fueron en taxi supongo. Entramos en el auto y prendí la calefacción, estaba un poco fresco. Britt no me miraba, eso me hacía agonizar.
- Britt, perdón.
- Llévame a casa San.
- No hasta que me perdones, no quiero que estés así por mi culpa.
- San, no entiendo lo que me pasa, esto duele mucho, por favor, llévame a casa.
No la contradecía, durante todo el camino no nos dijimos nada. Llegamos a su casa y antes que se bajara le dije: “A mí también me duele, jamás sentí algo así”. Ella escuchó eso y recién me miró, se acercó y me besó en la frente, “Te quiero San”. Dijo eso y salió del auto, yo volaba de nube en nube, me quería, no sé de qué manera, pero como amiga no.
…………………………………………………………………………………………………
El lunes llegó, había hablado con Quinn y se le pasó el enojo, me contó que Alexandra estaba súper enfadada porque Britt prefirió quedarse conmigo. Estaba feliz por ese lado pero Britt no volvió a hablarme en todo el fin de semana. No sabía si me perdonaba, sin embargo, confesó que me quería, eso me reconfortaba un poco al menos.
Carla me anunció que había reunión de socios en una hora. Britt llegó a la empresa, me saludó desde lejos, aún estaba dolida, lo percibía. Ella salió de su oficina en dirección a la de su padre, no volvió a salir de allí, la volví a ver en la reunión recién. “Hay problemas” dijo mi abuelo, primero le estaba prestando atención, luego mi mente se centró en Britt, la miraba y vi su dolor ¿acaso era momento de decir lo que sentía? Ella una vez me rechazó, en realidad no le dije nada, sólo intenté besarla, ¿ella esperaba que yo diera el primer paso? No sabía qué pensar, entonces mi abuelo dijo: “Por eso Santana viajará en mi lugar, ¿todos de acuerdo?” todos accedieron, yo no entendía nada, ¿por qué mi abuelo no podía ir? ¿Qué debía hacer yo? ¿A dónde me iría?
- Santana hija, viajarás mañana a la tarde, prepara todo -dijo mi abuelo.
- Espera, ¿con quién iré?
- Fabiola viajará contigo.
- No. Quinn debe ir conmigo.
- ¿No me prestaste atención? Ella debe estar aquí, tú te irás con Fabiola, hija por Dios, esto es grave.
No entendía nada “Ok, ok” fue lo único que dije y todos se dispersaron. Le pedí a Quinn que me explicara qué demonios había pasado. Me contó la estrategia de mi abuelo, unos árabes querían cerrar un trato pero se estaban poniendo difíciles, tendría que viajar a Los Ángeles con Fabiola en representación de él, mientras tanto aquí ellos estarían al pendiente de todo, yo sólo sería una vocera, mi abuelo comandaría aquí las decisiones a tomar junto con los demás socios. Lo peor es que seguro estaría allá como tres días aproximadamente, eso era lo peor, ¿Qué haría todos esos días sin ver a Britt? Me fui al baño, necesitaba refrescarme, me azotaba una preocupación enorme, de repente Fabiola entró, estábamos solas, “Imagínate, tu y yo tres días en Los Ángeles, eso será genial morena” me besó en la mejilla, cerca de mis labios y se fue. Sólo pensaba en Britt, no quería irme, eran tres días pero no quería hacerlo. Fui a la oficina de Britt, ella no estaba.
- ¿Dónde está Britt?
- Fue al baño -dijo Quinn.
Dios, ¿habrá escuchado lo que Fabiola dijo? No lo creo, estábamos solas, eso creo. Britt entró, me miró y no se veía bien, había escuchado todo. “¿Salimos esta noche? Puede ser noche de Karaoke” dijo Britt, Quinn se emocionó, le comentó que Rachel hace rato que quería que saliéramos a cantar y bailar. Yo miré a Britt, algo tramaba.
- ¿Tú cantarás? -le pregunté.
- Sí, tengo en mente una canción.
- Pues no me perderé eso, yo voy –dijo Quinn.
- Bien, invitaré a Ale también, invita a alguna amiga tuya Santana, no lo sé, tal vez Fabiola.
Dijo eso de una manera realmente molesta, estaba celosa, muy celosa; tenía ganas de abrazarla y besarla, decirle al oído que la quería y que sólo ella me importaba, era tierno
verla así enojada, Britt me volvía loca, la quería.
Que Alexandra fuera no era un problema, yo ya sabía que Britt sólo la llevaba para causarme celos, en parte lo lograba pero ella ya no podía disimular lo que sentía por mí, me acercaba de a poco a ella, me sentía feliz. “Rachel ya confirmó, será una noche genial” dijo Quinn, sonreí y salí del lugar, Britt seguía enojada conmigo.
Las horas pasaron rápido, me reuní con mi abuelo y toda la tarde armamos la estrategia, no podría salir mal, lo único feo era que tendría que estar allá tres días o más. Volví a casa, me alisté y espere a Quinn, ella y Rachel pasarían por mí.
Eran alrededor de las diez de la noche. Entramos en el boliche, Britt ya estaba bailando, Alexandra me miró y no me saludó bien, estaba molesta todavía por lo que pasó el fin de semana. Britt saludó a todas con un beso en la mejilla, se acercó a mí pero no llegó a besarme, sólo se acercó y sentí su aliento en mi mejilla, “Hola Santana” dijo y se alejó. Estaba jugando conmigo, eso me gustaba, yo sólo sonreía. Nos pusimos a bailar, ella bailaba con Alexandra, muchos celos no sentí, admito que algo sí, pero sabía que esto lo hacía a propósito. De repente alguien me abrazó y me dijo al oído: “Hola hermosa”. Marcia saludó a todas sin soltarme, intenté sacar su mano de mi cintura pero ella volvía a sostenerme. Vio que estaba Britt y le dijo: “Hola Britt, un gusto volver a verte” eso no le gustó a mi rubia, la miraba con odio, yo estaba incómoda, Quinn me mataba con la mirada. “Marcia, estoy con mis amigas, mejor ve con quien viniste” ella me miró y al oído me dijo: “Sabes que vengo sola San, a Britt no le gusta la idea de que esté aquí ¿verdad? Mírala, se muere de la rabia” dijo eso y miraba sonriéndole a Britt, ella se enojó y le dio la espalda. Rachel agarró del brazo a Marcia y la llevaba hacia un costado, no sé que le decía, Quinn estaba enojada pero le expliqué que no era mi culpa. Alexandra estaba feliz, creía que con esto ella se quedaría con mi chica, pero estaba equivocada.
El karaoke estaba habilitado, una chica subió a cantar y se llevó los aplausos de todos, Berry no pudo contra Marcia, ella volvía hacia donde estábamos nosotras. Britt vio que no hacía nada por apartarla, se acercó a mí y me dijo: “Veo que no perdiste el tiempo, pensé que vendría Fabiola, no ella” la miré y le dije: “Podía traer una amiga me dijiste”. Ella se enfureció, se alejó, estaba cantando un hombre, ni bien bajó él, mi rubia subió al escenario, le indicó al Dj la canción y antes que empezara dijo: “Toda canción siempre es dedicada para una persona, esta no es la excepción, es para esa persona que hace poco conocí, pero que transforma mi mundo”. Yo escuchaba atenta, era para mí la canción, no había dudas. La música sonó, el tema era movido, lo conocía, todos cantaban con ella, yo sólo escuchaba.
Somebody said you got a new friend
Does she love you better than I can
There's a big black sky over my town
I know where you at, I bet she's around
Yeah I know it's stupid
But I just got to see it for myself
¿Alguien me dijo que tenías una nueva amiga
¿Te quiere ella más que yo?
Hay un gran cielo negro encima de mi ciudad
Sé dónde estás, apuesto a que ella está cerca.
Si, sé que es una tontería
pero tengo que verlo yo misma.
I'm in the corner, watching you kiss her
(Oh, oh, oh)
I'm right over here, why can't you see me
(Oh, oh, oh)
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home
(Ooh, ooh, ooh)
I keep dancin' on my own
(I keep dancin' on my own)
(Coro)
Estoy en la esquina, viendo como la besas.O!h
Estoy aquí mismo, ¿porque no puedes verme? Oh!
Te estoy dando todo, pero yo no soy la chica a la que te llevas a casa.Uh!
Seguiré bailando sola.
(Seguiré bailando sola)
I'm just gonna dance all night
I'm all messed up, I'm so out of line
Stilettos and broken bottles
I'm spinning around in circles
Voy a bailar toda la noche
Estoy hecha un lío, tan fuera de tono
Zapatos de tacón y botellas rotas
Yo estoy dando vueltas en círculos.
(Coro)
Estoy en la esquina, viendo como la besas.Oh!
Estoy aquí mismo, ¿porque no puedes verme? Oh!
Te estoy dando todo, pero yo no soy la chica a la que te llevas a casa.Uh!
Seguiré bailando sola.
(Seguiré bailando sola)
I'm in the corner, watching you kiss her
Robyn Dancing On My Own lyrics found on
(Oh, oh, oh)
I'm right over here, why can't you see me
(Oh, oh, oh)
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home
(Ooh, ooh, ooh)
I keep dancin' on my own
(I keep dancin' on my own)
Tan lejos, pero aún tan cerca
(Las luces se encienden, la música se apaga)
Pero tú no me ves, ahí de pie
Sólo he venido a decir adiós.
So far away, but still so near
(The lights go on, the music dies
But you don't see me, standing here
I just came to say goodbye
Estoy en la esquina, viendo como la besas.Oh!
Te estoy dando todo, pero yo no soy la chica a la que te llevas a casa.Uh!
Seguiré bailando sola.
(Seguiré bailando sola)
I'm in the corner watching you kiss her
(Oh, oh, oh)
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home
(Ooh, ooh, ooh)
I keep dancin' on my own
(I keep dancin' on my own)
Noté que Britt lloraba, estaba sufriendo, me estremecí. Ella bajó y Marcia reía, “No me digas que te la dedicó a ti San”. La miré y la saqué del boliche, ella pensó que la sacaría y discutiríamos afuera, no ponía oposición, se dejaba llevar, la saqué y le dije al tipo de seguridad quien era yo, y que si dejaba entrar a Marcia esa noche, jamás en su bendita vida conseguiría un trabajo decente. Él me conocía, Marcia estaba enfurecida, me gritaba uno y mil insultos desde afuera. Yo entré y busqué a Britt entre la multitud, no la encontraba, a ninguna, me subí al escenario, le cantaría algo. Ya allí arriba busqué a las chicas y no estaban. Tomé el micrófono y dije: “No encuentro a mis amigas, con ellas está una persona que conozco desde niña; desde ese instante en que el destino cruzó nuestras vidas, mi existencia cambió, le agradezco por eso”. Indiqué cual era la canción al Dj, a lo lejos las vi, Britt me veía, yo le sonreí. La música sonó y mi voz le dijo a todos los que estaban ahí, lo que mi corazón sentía.
I took my love and I took it down
I climbed a mountain and I turned around
And I saw my reflection in the snow-covered hills
Well, the landslide brought me down
Tomé mi amor, lo tomé roto
Escalé una montaña y giré alrededor
Y vi mi reflejo en las colinas cubiertas de nieve
Hasta que el derrumbe lo tiró abajo
Oh, mirror in the sky, what is love
Can the child within my heart rise above
Can I sail through the changing ocean tides
Can I handle the seasons of my life
Uh uh... uh uh, uh uh....
oh, espejo en el cielo, que es el amor?
Pude el niño dentro de mi corazón emerger arriba?
Puedo navegar a través de las cambiantes mareas del océano?
Puedo manejar las estaciones de mi vida?
Well, I've been afraid of changin'
Cause I've built my life around you
But time makes you bolder
Children get older
And I'm getting older too
Well
Bien, he estado asustado del cambio porque
he construido mi vida alrededor de ti
Pero el tiempo te hace atrevido
Incluso los niños envejecen
Y Yo estoy envejeciendo, también.
Well, I've been afraid of changin'
Cause I've built my life around you
But time makes you bolder
Children get older
And I'm getting older too
Well, I'm getting older too
Bien, he estado asustado del cambio
porque he construido mi vida alrededor de ti
Pero el tiempo te hace atrevido
Incluso los niños envejecen
Y Yo estoy envejeciendo, también.
Estoy envejeciendo, también
So.. take this love and take it down
Yeah, and if you climb a mountain and you turn around
And if you see my reflection in the snow-covered hills
Well, the landslide brought it down
Tomé mi amor y lo tomé roto
Escalé una montaña y giré alrededor
Y vi mi reflejo en las colinas cubiertas de nieve
hasta que el derrumbe lo tiro abajo
And if you see my reflection in the snow-covered hills
Well maybe...
Well maybe...
Well maybe...
The landslide'll bring you down
Y vi mi reflejo en las colinas cubiertas de nieve
hasta que el derrumbe lo tiro abajo
Britt cantó desde donde estaba la última parte de la canción, todos aplaudieron. Me acerqué a mis amigas, ellas me felicitaron, tomé de las manos a Britt y la aparté un poco.
- Cantas hermoso Britt.
- Tu también -dijo sin mirarme.
- Britt, no invité a Marcia, me la encontré aquí.
- No tienes que darme explicaciones, Santana.
- Tal vez, pero mírate, estás enfadada por mi culpa, no lo hago a propósito Britt.
- Mejor no hablemos de esto.
- ¿Y cuándo lo haremos? Britt, yo…
- No Santana, no digas nada, sea lo que sea que deseas decirme guárdatelo, sólo quiero que seamos amigas, sólo eso quiero.
Eso fue un balde de agua fría para mí, la miré a los ojos, estaba asustada, dolida, pero era sincera. No dije nada, la dejé ir. Quinn se acercó a preguntar qué pasó. “Sólo quiere que seamos amigas” le dije, ella se sorprendió. Me fui del lugar. No sentía rabia ni nada, estaba como fuera de mí cuerpo, respiraba porque mi organismo reaccionaba con órdenes que mi cerebro comandaba. Me dormí pensando en ella, no quería llorar, ella había decidido, yo no estaba incluida en sus planes.
Feliz día, aquí va mi regalo!
Capítulo 8: Falsas ilusiones. Parte 1.
Quinn salió al balcón, se puso a mi lado y prendió un cigarro, me lo dio y prendió otro para ella, aspiró el humo y soltándolo dijo:
- No sabes disimular, Alexandra dijo que eras muy seria, si supiera que estás a punto de matarla ya te sacaría del departamento, por suerte Britt te defendió “San es tierna, sólo dale tiempo”, eso dijo.
- ¿Acaso eso debería consolarme? ¡No has visto cómo se miran! Si pareciera que desean besarse, eso si no lo hicieron todo el día.
- No exageres, estás celosa, ven adentro, está buena la charla.
- ¿fumas? -dijo Britt dirigiéndose a mí.
- A veces lo hago.
- Me voy adentro, entren luego -dijo Quinn.
- ¿Me convidas? -dijo Britt.
Le di mi cigarro y ella lo apagó, luego lo partió en dos y lo dejó en un costado, yo miré eso con sorpresa, ella se limpió las manos y comenzamos a charlar.
- No debes fumar, te hace mal.
- Ok, pero podrías habérmelo dicho antes de matar a ese pobre cigarro.
- ¿Y dejar que él te mate a ti? Ni pensarlo.
Ambas sonreímos, sus ideas me parecían tiernas, ella me tomó de las manos y me dijo:
- Te molestaste hace rato por lo de Ryan, pensé que él ya había hablado contigo.
- Lo hablé, mañana hablaremos bien, pero me alegra que ya empieces a practicar, no volviste en todo el día a la empresa, ¿estuviste hablando con Alexandra?
- Sí… se nos pasó el tiempo, ella quería invitar a todas a cenar, me alegra que hayas venido.
- ¿Se pusieron al día?
- Sí; vamos a cenar, luego te contaré…
Cenamos, Britt me llevó de la mano a la mesa, se sentó a mi lado y el tiempo que duró la cena lo dedicó para mí, reíamos y charlábamos de cualquier cosa, se hacía tarde y decidimos irnos, todas nos despedimos de Alexandra. “Britt, te busco mañana” le dijo, ella le sonrió y la sangre hervía por mis venas.
Quinn dejaría a Britt en su casa y luego a mí, pero ella dijo: “Santana se queda conmigo”. Y así fue, me bajé del auto y entramos en su casa, Harry estaba despierto aún.
- Hija, volviste.
- Perdón papá, estuve ocupada, sabes, ¡ya empezaré a practicar para el musical!
- ¡Hija, eso es genial! -le dijo abrazándola- le comentaré a tu madre, acaba de subir, espérame, veo que la soltería te hizo bien…
- Papá… -dijo en forma de reproche.
- Es la verdad hija -dijo riéndose y subiendo las escaleras para desaparecer al instante.
- Santana, siéntate, traeré café.
Britt volvió con el café, Nicole bajó y la felicitó, se abrazaron y lloraron de la alegría, era tierna esa imagen. Harry desde lejos contemplaba la escena, se acercó a mí y me dijo: “Sin ti, nada de esto pasaría, mi princesa es feliz gracias a ti” le sonreí. Nicole me abrazó y me dijo algo similar, Britt escuchó y sonreía abrazada a Harry. Ellos se despidieron y quedé a solas con Britt. “El café no está caliente, déjame calentarlo” dijo yéndose a la cocina, me levanté y la seguí, veía como calentaba el café en el microondas, me apoyé en el marco de la puerta a observarla, ella no notó que yo estaba allí, en realidad eso creía yo, pero me dijo: “¿Siempre estarás espiándome?” Sonreí por eso, me acerqué y le dije: “Siempre te das cuenta, no sé cómo le haces”, ella se acercó a mí y me dijo: “No podrás ocultarme nada nunca, lo sé todo, además sentí tu perfume, es rico”. Ella se alejó; mientras sacaba leche del refrigerador noté que pudo verme en el reflejo de la puerta del microondas, sin embargo, me gustó lo que me dijo, por lo menos sabía que mi perfume no le era indiferente a ella.
Estábamos en la sala tomando el café, ninguna decía nada, yo sólo la miraba, ella sonreía y se sonrojó.
- ¿Por qué te sonrojaste?
- San, me miras mucho, ¿no te parece incómodo?
- Para mí no…
- Te contaré lo que hablé con Ale…
Ellas se pusieron al día con sus vidas, Alexandra le contó todo lo que pasó después de su partida de Ohio. Britt por su parte le contó lo suyo y los últimos eventos, fue ahí cuando Alexandra llamó a Ryan, él le había dicho que estaba preparando algo inspirado en una bailarina que conoció y él quería que formara parte de la obra, Alexandra aceptó sin saber que la bailarina era mi Britt. A partir del día siguiente comenzarían a practicar por las tardes, por lo menos de mañana la vería, pero una vez que se dedique a esto totalmente, casi no la vería. Britt me dijo que dejaría la empresa. Eso me entristeció pero lo tenía que aceptar, era su sueño, yo no sería un obstáculo para ella, por otro lado, ella y Alexandra se separaron hace años y de a poco se volvían a unir, tal vez el maldito destino me estaba diciendo que esa rubia de ojos celestes no sería para mí, sino para Alexandra.
- San… ¿estás bien?
- Sí, será raro no verte seguido por la empresa, pero es lo que hay, sigue tu sueño Britt.
- Me gusta que me digas Britt…
- Emmm… Me voy, mañana nos vemos en la empresa, te felicito Britt-Britt…
Me salió eso desde el fondo de mi corazón, noté unas lágrimas en su rostro y nos abrazamos, ¿la estaba perdiendo? No, claro que no, ella no era mía, no la estaba perdiendo simplemente estaba dejándola ir, que sea libre, sabía que me arriesgaba a que alguien más estuviera a su lado, pero prefería su felicidad. Si eso significaba que yo no fuera la afortunada de sentir sus labios, de ser dueña de sus sueños por las noches, ser la primera en contemplarla al despertar y no sentir su aroma en cada ambiente; pues mala suerte la mía, quien quiera que estaba destinado o destinada para ella simplemente se ganaría mi odio, porque tendría todo aquello que yo no podía brindarle a ella. Si eso llegara a ocurrir me iría lejos, no soportaría verla con otro u otra, sé que chances tenía de conquistarla, Quinn me lo dijo, pero ya no estaba tan segura de eso, en realidad no me sentía merecedora de ella.
Dejamos de abrazarnos, llamé a Marcelo, él vendría a buscarme. Britt me miraba, no dejaba de hacerlo, me incomodé y me sonrojé. Ella sonrió y me dijo: “Ahora sientes lo que siento yo”. Sonreí, la tomé de la cintura y le pregunté: “¿Qué sientes?”, ella cerró sus ojos, apoyó su frente en la mía, colocó sus manos en mi rostro y me dijo: “No lo sé, el tiempo dirá”.
Llegué a casa, estaba confundida, Britt dejó todo en manos del Señor Tiempo, maldito viejo, siempre está importunando, cuando uno desea estar con la persona deseada acorta cada momento, pero cuando se trata de esperar al parecer se olvida que una está ansiosa y no se atreve a acortar los momentos, allí ya no son efímeras las esperas, parecen eternas, y tan sólo han pasado veinte minutos desde la última vez que se tuvo noción de la hora. Contra él sí que no podía luchar, ella lo eligió por algo. Mientras estaba con Alexandra él hizo que “el tiempo pasara volando” pero cuando se trataba de mí, me hacía sufrir, no le importaba que yo fuera la famosa Santana López, mi prestigio o mi dinero no le importaban, nada que poseía le importaba en realidad, sólo quería que espere. Por ella lo haría, sólo por ella.
Los días siguientes fueron una mierda, Britt iba poco a la empresa, sólo de mañana, por las tardes se iba a practicar con Alexandra. Sam andaba como perro abandonado, tal vez yo era la versión femenina de él, a ambos nos hacía falta ella y tan sólo había pasado una semana.
El fin de semana llegó, Quinn me invitó a salir, iríamos a la inauguración de un boliche nuevo, “Invité a Britt, pero me dijo que no podría ir”. Eso me desanimó un poco pero debía hacerme a la idea de que no siempre ella tendría tiempo para nosotras, en especial para mí.
Estábamos en el boliche, una rubia me miraba coquetamente desde la barra, yo estaba con Quinn y Rachel en la pista, me pareció conocer a esa rubia, pero no sabía de dónde. Ella se acercó a mí con dos copas, me ofreció una y me dijo: “¡Hola! ¿No me recuerdas?” tomé la copa y le sonreí, realmente no la recordaba, se acercó a mí y me dijo: “Nos conocimos en un baile, me llevaste a tu casa y pasamos una noche espectacular, ¿no lo recuerdas?” ahora sí sabía que la conocía pero no recordaba con exactitud el día que la conocí, ni en que baile, no obstante, nos pusimos a bailar, Quinn no se sorprendió de verme coquetear con la rubia pero me sentía culpable, sentía que no le estaba siendo fiel a Britt, pero realmente yo no estaba con ella, por lo tanto no le debía respeto, aunque por dentro lo mismo me sentía en falta. La rubia me decía que quería que repitiéramos lo de la otra vez, cuando me dijo eso sólo pensé en Britt, ella estaría en su casa descansando y yo andaba de levante, no me parecía justo, si realmente quería ser merecedora de su amor, tendría que hacer bien las cosas, no todo estaba perdido. Le dije a la rubia que no podía hacer nada porque ahora no estaba disponible, ella fingió un puchero pero lo entendió, entonces simplemente bailábamos y bebíamos un trago tras otro.
La noche avanzaba, mis amigas estaban tomando bastante, yo también, pero la pasábamos bien. La rubia me meneaba seguido, me tomaba de la cintura provocándome, al parecer se le olvidó lo que le había dicho al principio. Seguíamos bailando y veo en la barra a una rubia, creí que era Brittany, seguía mirando y ahora no me equivocaba, Alexandra estaba allí, esa rubia era Britt, ella miraba a todos lados, la rubia que tenía al lado me agarró de la cintura, la miré y casi me besa, la alejé de mi, miré a Alexandra y ella vio todo, Britt también. Ella me miró sorprendida, tal vez era por lo que acababa de hacer, pero yo también la miraba sorprendida, pensé que estaría durmiendo, y no era así, estaba en el boliche y con Alexandra. Britt no hizo nada, su acompañante me saludó con la mano, yo le respondí por cortesía. Se acercaron al lugar donde estábamos todas, Britt sólo dijo: “Hola” pero casi ni lo escuché por la música, estaba enojada, lo noté pero yo también estaba igual, sólo que cada una tenía sus razones. Mi rubia acompañante las saludó con un beso a cada una, Quinn y Rachel las vieron y se sumaron al saludo. Nos pusimos a bailar, yo estaba furiosa, la rubia me dijo: “¿Pasa algo malo?” la miré y al oído le dije: “Vino alguien que no me cae bien” ella sonrió, me tomó de la mano y me alejó de allí. Estábamos apartadas de las chicas “¿Así está mejor?” dijo ella, sonreí y seguíamos bailando. “La rubia alta no deja de mirarnos” me dijo al cabo de un tiempo, miré y era verdad Britt estaba visiblemente molesta, tomé de la mano a mi acompañante y nos fuimos a la barra, pedí dos tragos más.
- ¿Quién es la rubia?
- Es mi socia, tú sabes, cuestiones de la empresa.
- Ah… claro. En realidad no sé nada pero, ¿qué más da?
Me gustó eso, después de todo la estaba pasando bien con esta rubia. Nos dirigíamos a la pista pero Quinn me agarró del brazo.
- ¿Qué demonios haces?
- ¿Perdón? Estoy bailando.
- ¿Con esa?
- Pues sí, la conocí hace tiempo y nos volvimos a encontrar.
- ¿Qué también te la tiraste?
- ¿Eso qué tiene que ver?
- Pues mucho fíjate, ¿dónde quedó el amor que decías sentir por Britt?
- ¿Acaso crees que ella sienta lo mismo? YO SIENTO QUE NO.
- Eres una imbécil, está molesta ¿no la has visto? Por si no lo sabías esos son celos.
- Pues ¿acaso tú no viste con quién anda? Con esa idiota.
- Son increíbles, ¡ambas están celosas! Déjate de pavadas y ve a hablar con ella.
- Que lo haga ella, no quiso aceptar tu invitación pero con ella viene, pues yo no debo explicar nada -le dije y me iba con la rubia.
- ¡IDIOTA! -dijo Quinn mientras me alejaba.
Yo seguía bailando, me sentía mal pero no lo quería demostrar, la rubia volvió a insistir que nos fuéramos juntas. Miré a Britt, vaya que estaba enojada, era verdad, estaba celosa, Quinn tenía razón. Miré a la rubia y me robó un beso, la aparté rápido, la miré enojada ella simplemente reía, “Traeré unos tragos” dijo y desapareció entre la multitud. Miré hacía donde estaban las chicas y Britt no estaba, me acerqué más y vi como ella se iba, Alexandra iba por detrás, Quinn se acercó y me dijo: “Idiota”. Mi amiga estaba enojada, Rachel se acercó y me dijo: “Ve a hablar con ella San”. Rach sabía todo lo que pasaba con Britt, yo no le conté muchas cosas pero suponía que mi amiga le contaba todo, no me sorprendió que me dijera eso, le di un beso en la mejilla y salí rápido del lugar.
No la encontraba, había bastantes autos estacionados y corría entre ellos, crucé unos y noté que había dos chicas, volví y Britt estaba en el suelo sentada llorando, me maldecía, otra vez la hacía sufrir, me acerqué y Alexandra me dijo:
- Santana, por favor vete.
- Vete tú, -dije enfurecida- no me hagas hacerte daño, realmente puedo romperte una pierna, y créeme, eso no te dará suerte.
- ¡Santana! -gritó Britt.
- Por favor Alexandra, déjame hablar con ella- dije.
Alexandra nos dejó, estaba enojada pero se alejó, me acerqué a Britt y la abracé. Ella lloró más “Shhh… Britt, no llores, no me gusta verte así, perdón, pero no llores” ella de a poco se calmaba, ¿le pedía perdón por bailar con otra rubia? No entendía la situación, pero si era consciente de que yo le hacía daño.
- San, sólo vine porque sabía que estarían aquí, no quería salir pero Ale insistió.
- Está bien, sólo estaba bailando con esa chica.
- Pero te besó, la vi.
- Ella me besó, yo no, tú la viste.
Ella no dijo nada, se aferró más a mí. Noté que con Alexandra estaba Quinn y Rachel. Me levanté y les dije: “Váyanse, yo llevo a Britt a su casa” ninguna se quería mover, Britt se paró y les dijo: “Me voy con Santana”. Eso las convenció, Alexandra hervía de la rabia, ella también estaba celosa, cruzamos nuestras miradas, pero no se atrevió a seguir desafiándome.
- ¿No te cae bien Ale?
- No, pero la respeto porque es tu amiga.
- Ella no es mala San.
- No digo que lo sea, pero no me cae bien.
La tomé de la mano y la llevaba a mi auto, Quinn y las demás se fueron en taxi supongo. Entramos en el auto y prendí la calefacción, estaba un poco fresco. Britt no me miraba, eso me hacía agonizar.
- Britt, perdón.
- Llévame a casa San.
- No hasta que me perdones, no quiero que estés así por mi culpa.
- San, no entiendo lo que me pasa, esto duele mucho, por favor, llévame a casa.
No la contradecía, durante todo el camino no nos dijimos nada. Llegamos a su casa y antes que se bajara le dije: “A mí también me duele, jamás sentí algo así”. Ella escuchó eso y recién me miró, se acercó y me besó en la frente, “Te quiero San”. Dijo eso y salió del auto, yo volaba de nube en nube, me quería, no sé de qué manera, pero como amiga no.
…………………………………………………………………………………………………
El lunes llegó, había hablado con Quinn y se le pasó el enojo, me contó que Alexandra estaba súper enfadada porque Britt prefirió quedarse conmigo. Estaba feliz por ese lado pero Britt no volvió a hablarme en todo el fin de semana. No sabía si me perdonaba, sin embargo, confesó que me quería, eso me reconfortaba un poco al menos.
Carla me anunció que había reunión de socios en una hora. Britt llegó a la empresa, me saludó desde lejos, aún estaba dolida, lo percibía. Ella salió de su oficina en dirección a la de su padre, no volvió a salir de allí, la volví a ver en la reunión recién. “Hay problemas” dijo mi abuelo, primero le estaba prestando atención, luego mi mente se centró en Britt, la miraba y vi su dolor ¿acaso era momento de decir lo que sentía? Ella una vez me rechazó, en realidad no le dije nada, sólo intenté besarla, ¿ella esperaba que yo diera el primer paso? No sabía qué pensar, entonces mi abuelo dijo: “Por eso Santana viajará en mi lugar, ¿todos de acuerdo?” todos accedieron, yo no entendía nada, ¿por qué mi abuelo no podía ir? ¿Qué debía hacer yo? ¿A dónde me iría?
- Santana hija, viajarás mañana a la tarde, prepara todo -dijo mi abuelo.
- Espera, ¿con quién iré?
- Fabiola viajará contigo.
- No. Quinn debe ir conmigo.
- ¿No me prestaste atención? Ella debe estar aquí, tú te irás con Fabiola, hija por Dios, esto es grave.
No entendía nada “Ok, ok” fue lo único que dije y todos se dispersaron. Le pedí a Quinn que me explicara qué demonios había pasado. Me contó la estrategia de mi abuelo, unos árabes querían cerrar un trato pero se estaban poniendo difíciles, tendría que viajar a Los Ángeles con Fabiola en representación de él, mientras tanto aquí ellos estarían al pendiente de todo, yo sólo sería una vocera, mi abuelo comandaría aquí las decisiones a tomar junto con los demás socios. Lo peor es que seguro estaría allá como tres días aproximadamente, eso era lo peor, ¿Qué haría todos esos días sin ver a Britt? Me fui al baño, necesitaba refrescarme, me azotaba una preocupación enorme, de repente Fabiola entró, estábamos solas, “Imagínate, tu y yo tres días en Los Ángeles, eso será genial morena” me besó en la mejilla, cerca de mis labios y se fue. Sólo pensaba en Britt, no quería irme, eran tres días pero no quería hacerlo. Fui a la oficina de Britt, ella no estaba.
- ¿Dónde está Britt?
- Fue al baño -dijo Quinn.
Dios, ¿habrá escuchado lo que Fabiola dijo? No lo creo, estábamos solas, eso creo. Britt entró, me miró y no se veía bien, había escuchado todo. “¿Salimos esta noche? Puede ser noche de Karaoke” dijo Britt, Quinn se emocionó, le comentó que Rachel hace rato que quería que saliéramos a cantar y bailar. Yo miré a Britt, algo tramaba.
- ¿Tú cantarás? -le pregunté.
- Sí, tengo en mente una canción.
- Pues no me perderé eso, yo voy –dijo Quinn.
- Bien, invitaré a Ale también, invita a alguna amiga tuya Santana, no lo sé, tal vez Fabiola.
Dijo eso de una manera realmente molesta, estaba celosa, muy celosa; tenía ganas de abrazarla y besarla, decirle al oído que la quería y que sólo ella me importaba, era tierno
verla así enojada, Britt me volvía loca, la quería.
Que Alexandra fuera no era un problema, yo ya sabía que Britt sólo la llevaba para causarme celos, en parte lo lograba pero ella ya no podía disimular lo que sentía por mí, me acercaba de a poco a ella, me sentía feliz. “Rachel ya confirmó, será una noche genial” dijo Quinn, sonreí y salí del lugar, Britt seguía enojada conmigo.
Las horas pasaron rápido, me reuní con mi abuelo y toda la tarde armamos la estrategia, no podría salir mal, lo único feo era que tendría que estar allá tres días o más. Volví a casa, me alisté y espere a Quinn, ella y Rachel pasarían por mí.
Eran alrededor de las diez de la noche. Entramos en el boliche, Britt ya estaba bailando, Alexandra me miró y no me saludó bien, estaba molesta todavía por lo que pasó el fin de semana. Britt saludó a todas con un beso en la mejilla, se acercó a mí pero no llegó a besarme, sólo se acercó y sentí su aliento en mi mejilla, “Hola Santana” dijo y se alejó. Estaba jugando conmigo, eso me gustaba, yo sólo sonreía. Nos pusimos a bailar, ella bailaba con Alexandra, muchos celos no sentí, admito que algo sí, pero sabía que esto lo hacía a propósito. De repente alguien me abrazó y me dijo al oído: “Hola hermosa”. Marcia saludó a todas sin soltarme, intenté sacar su mano de mi cintura pero ella volvía a sostenerme. Vio que estaba Britt y le dijo: “Hola Britt, un gusto volver a verte” eso no le gustó a mi rubia, la miraba con odio, yo estaba incómoda, Quinn me mataba con la mirada. “Marcia, estoy con mis amigas, mejor ve con quien viniste” ella me miró y al oído me dijo: “Sabes que vengo sola San, a Britt no le gusta la idea de que esté aquí ¿verdad? Mírala, se muere de la rabia” dijo eso y miraba sonriéndole a Britt, ella se enojó y le dio la espalda. Rachel agarró del brazo a Marcia y la llevaba hacia un costado, no sé que le decía, Quinn estaba enojada pero le expliqué que no era mi culpa. Alexandra estaba feliz, creía que con esto ella se quedaría con mi chica, pero estaba equivocada.
El karaoke estaba habilitado, una chica subió a cantar y se llevó los aplausos de todos, Berry no pudo contra Marcia, ella volvía hacia donde estábamos nosotras. Britt vio que no hacía nada por apartarla, se acercó a mí y me dijo: “Veo que no perdiste el tiempo, pensé que vendría Fabiola, no ella” la miré y le dije: “Podía traer una amiga me dijiste”. Ella se enfureció, se alejó, estaba cantando un hombre, ni bien bajó él, mi rubia subió al escenario, le indicó al Dj la canción y antes que empezara dijo: “Toda canción siempre es dedicada para una persona, esta no es la excepción, es para esa persona que hace poco conocí, pero que transforma mi mundo”. Yo escuchaba atenta, era para mí la canción, no había dudas. La música sonó, el tema era movido, lo conocía, todos cantaban con ella, yo sólo escuchaba.
Somebody said you got a new friend
Does she love you better than I can
There's a big black sky over my town
I know where you at, I bet she's around
Yeah I know it's stupid
But I just got to see it for myself
¿Alguien me dijo que tenías una nueva amiga
¿Te quiere ella más que yo?
Hay un gran cielo negro encima de mi ciudad
Sé dónde estás, apuesto a que ella está cerca.
Si, sé que es una tontería
pero tengo que verlo yo misma.
I'm in the corner, watching you kiss her
(Oh, oh, oh)
I'm right over here, why can't you see me
(Oh, oh, oh)
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home
(Ooh, ooh, ooh)
I keep dancin' on my own
(I keep dancin' on my own)
(Coro)
Estoy en la esquina, viendo como la besas.O!h
Estoy aquí mismo, ¿porque no puedes verme? Oh!
Te estoy dando todo, pero yo no soy la chica a la que te llevas a casa.Uh!
Seguiré bailando sola.
(Seguiré bailando sola)
I'm just gonna dance all night
I'm all messed up, I'm so out of line
Stilettos and broken bottles
I'm spinning around in circles
Voy a bailar toda la noche
Estoy hecha un lío, tan fuera de tono
Zapatos de tacón y botellas rotas
Yo estoy dando vueltas en círculos.
(Coro)
Estoy en la esquina, viendo como la besas.Oh!
Estoy aquí mismo, ¿porque no puedes verme? Oh!
Te estoy dando todo, pero yo no soy la chica a la que te llevas a casa.Uh!
Seguiré bailando sola.
(Seguiré bailando sola)
I'm in the corner, watching you kiss her
Robyn Dancing On My Own lyrics found on
(Oh, oh, oh)
I'm right over here, why can't you see me
(Oh, oh, oh)
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home
(Ooh, ooh, ooh)
I keep dancin' on my own
(I keep dancin' on my own)
Tan lejos, pero aún tan cerca
(Las luces se encienden, la música se apaga)
Pero tú no me ves, ahí de pie
Sólo he venido a decir adiós.
So far away, but still so near
(The lights go on, the music dies
But you don't see me, standing here
I just came to say goodbye
Estoy en la esquina, viendo como la besas.Oh!
Te estoy dando todo, pero yo no soy la chica a la que te llevas a casa.Uh!
Seguiré bailando sola.
(Seguiré bailando sola)
I'm in the corner watching you kiss her
(Oh, oh, oh)
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home
(Ooh, ooh, ooh)
I keep dancin' on my own
(I keep dancin' on my own)
Noté que Britt lloraba, estaba sufriendo, me estremecí. Ella bajó y Marcia reía, “No me digas que te la dedicó a ti San”. La miré y la saqué del boliche, ella pensó que la sacaría y discutiríamos afuera, no ponía oposición, se dejaba llevar, la saqué y le dije al tipo de seguridad quien era yo, y que si dejaba entrar a Marcia esa noche, jamás en su bendita vida conseguiría un trabajo decente. Él me conocía, Marcia estaba enfurecida, me gritaba uno y mil insultos desde afuera. Yo entré y busqué a Britt entre la multitud, no la encontraba, a ninguna, me subí al escenario, le cantaría algo. Ya allí arriba busqué a las chicas y no estaban. Tomé el micrófono y dije: “No encuentro a mis amigas, con ellas está una persona que conozco desde niña; desde ese instante en que el destino cruzó nuestras vidas, mi existencia cambió, le agradezco por eso”. Indiqué cual era la canción al Dj, a lo lejos las vi, Britt me veía, yo le sonreí. La música sonó y mi voz le dijo a todos los que estaban ahí, lo que mi corazón sentía.
I took my love and I took it down
I climbed a mountain and I turned around
And I saw my reflection in the snow-covered hills
Well, the landslide brought me down
Tomé mi amor, lo tomé roto
Escalé una montaña y giré alrededor
Y vi mi reflejo en las colinas cubiertas de nieve
Hasta que el derrumbe lo tiró abajo
Oh, mirror in the sky, what is love
Can the child within my heart rise above
Can I sail through the changing ocean tides
Can I handle the seasons of my life
Uh uh... uh uh, uh uh....
oh, espejo en el cielo, que es el amor?
Pude el niño dentro de mi corazón emerger arriba?
Puedo navegar a través de las cambiantes mareas del océano?
Puedo manejar las estaciones de mi vida?
Well, I've been afraid of changin'
Cause I've built my life around you
But time makes you bolder
Children get older
And I'm getting older too
Well
Bien, he estado asustado del cambio porque
he construido mi vida alrededor de ti
Pero el tiempo te hace atrevido
Incluso los niños envejecen
Y Yo estoy envejeciendo, también.
Well, I've been afraid of changin'
Cause I've built my life around you
But time makes you bolder
Children get older
And I'm getting older too
Well, I'm getting older too
Bien, he estado asustado del cambio
porque he construido mi vida alrededor de ti
Pero el tiempo te hace atrevido
Incluso los niños envejecen
Y Yo estoy envejeciendo, también.
Estoy envejeciendo, también
So.. take this love and take it down
Yeah, and if you climb a mountain and you turn around
And if you see my reflection in the snow-covered hills
Well, the landslide brought it down
Tomé mi amor y lo tomé roto
Escalé una montaña y giré alrededor
Y vi mi reflejo en las colinas cubiertas de nieve
hasta que el derrumbe lo tiro abajo
And if you see my reflection in the snow-covered hills
Well maybe...
Well maybe...
Well maybe...
The landslide'll bring you down
Y vi mi reflejo en las colinas cubiertas de nieve
hasta que el derrumbe lo tiro abajo
Britt cantó desde donde estaba la última parte de la canción, todos aplaudieron. Me acerqué a mis amigas, ellas me felicitaron, tomé de las manos a Britt y la aparté un poco.
- Cantas hermoso Britt.
- Tu también -dijo sin mirarme.
- Britt, no invité a Marcia, me la encontré aquí.
- No tienes que darme explicaciones, Santana.
- Tal vez, pero mírate, estás enfadada por mi culpa, no lo hago a propósito Britt.
- Mejor no hablemos de esto.
- ¿Y cuándo lo haremos? Britt, yo…
- No Santana, no digas nada, sea lo que sea que deseas decirme guárdatelo, sólo quiero que seamos amigas, sólo eso quiero.
Eso fue un balde de agua fría para mí, la miré a los ojos, estaba asustada, dolida, pero era sincera. No dije nada, la dejé ir. Quinn se acercó a preguntar qué pasó. “Sólo quiere que seamos amigas” le dije, ella se sorprendió. Me fui del lugar. No sentía rabia ni nada, estaba como fuera de mí cuerpo, respiraba porque mi organismo reaccionaba con órdenes que mi cerebro comandaba. Me dormí pensando en ella, no quería llorar, ella había decidido, yo no estaba incluida en sus planes.
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
Edad : 33
Capítulo 8: Falsas ilusiones. Parte 2
Chicas... No sé por qué pero siento que es corto el capítulo anterior... verdad? Como es nuestro día pues les daré la otra parte del capítulo... además, la primera parte tiene un final triste... No quiero hacerlas sufrir, no soy tan mala! jee Eso si, van a sufrir lo mismo... pero no mucho!
Les dejo la otra parte... Besos!!
Capítulo 8: Falsas ilusiones. Parte 2
Al día siguiente no fui a la empresa a la mañana, directamente me encontré con mi abuelo y Fabiola en el aeropuerto. Quinn fue a despedirme.
- San, ¿estás bien? Britt está muy triste, no ha hablado en todo el día, deberías despedirte de ella por lo menos.
- Quinn, volveré en unos días, ella estará bien sin mí, tal vez Alexandra la consuele mejor que yo.
- No digas eso. Si Britt sólo quisiera tu amistad no estaría así. Habla con ella.
- Cuando vuelva hablaremos -dije.
Nos despedimos. Llegamos a Los Ángeles antes del anochecer. Fabiola estaba feliz, nos registramos en el hotel y nos dieron nuestras habitaciones. Me duché y llamé a Quinn.
- Hola Quinn, ¿qué tal todo por allí?
- Yo bien San pero Britt es la que está mal, llámala, no te imaginas cómo está.
Fabiola en su cuenta de twitter no ha dejado de comentar que pasará una buena noche al estilo latino, que vibrará toda la ciudad con sus gritos de placer y cosas así; Britt está que camina por las paredes.
- No la entiendo Quinn, me dijo que quería ser mi amiga y, ¿ahora me dices que sigue con los celos?
- Serás idiota, ella no quiere ser tu amiga, se nota a leguas eso, tal vez está asustada por eso te dijo lo que dijo, San llámala.
- ¿Y qué haré? Le digo: “por si estabas sin pendientes Britt, no me acostaré esta noche con Fabiola”, no creo que eso sea suficiente.
- Pues no lo sé, tú eres ingeniosa ¿no? Haz algo.
- Ok… la llamaré, pásame el número de ella.
- ¡¿Qué?! ¿No tienes su número?
- Pues no… es raro, pero es la verdad.
- Ok, corto y te lo paso por mensaje, me avisas cómo sale todo.
Esperé un poco y el mensaje de Quinn llegó. Miré el número dudé un poco pero llamé, a estas horas Britt estaría en su casa. “¿Hola?” dijo con su dulce voz, sonreí, yo estaba nerviosa sin embargo le dije: “Britt-Britt” ella parecía sonreír desde el otro lado.
- San… ¿Cómo conseguiste mi número?
- Se lo pedí a Quinn, quería saber cómo estabas, no pude verte hoy a la mañana, estaba ocupada.
- Entiendo, estoy bien, ¿tú cómo estás?
Así comenzamos a charlar, le dejé en claro que estuve la mayoría de las horas viajando, que acababa de ducharme y que estaba sola en la habitación, me preguntó si saldría, le dije que no. Hice pedir la cena al cuarto, comí acompañada de ella en el teléfono. Tal vez con esto ella se quedaría tranquila. Me preguntaba donde estaba Fabiola, le decía que no sabía, y golpearon la puerta, abrí y era Fabiola “San, ¿cenamos juntas?”, le dije que ya estaba cenando sola, que estaba cansada y que recién nos veríamos al día siguiente. Britt estaba escuchando todo eso. Fabiola se retiró enfadada. Con Britt seguíamos hablando, me comentaba todo lo que aprendió en las prácticas junto a Ryan; estaba emocionada, pero muy cansada, me decía que la exigencia era mucha, no estaba acostumbrada y se cansaba seguido, le dije que eso sería hasta que se acostumbre, le pedí que se alimentara bien y también se hidratara correctamente. Ella me contó muchas cosas, nada de eso me aburría, la escuchaba atentamente y de vez en cuando le hacía algún aporte.
- Dios San, mira la hora que es aquí son las dos de la madrugada allí son como tres horas más, debes estar cansada, perdón por molestarte.
- Britt, no me molestas, yo te llamé, realmente contigo pasan volando las horas, pero mejor cortamos, me espera una jornada larga.
- Es verdad, qué descanses San, gracias por llamar.
- Qué descanses Britt, te quiero, no lo dudes.
No escuché nada más del otro lado, pero ella estaba allí. “Ya quiero que vuelvas, también te quiero San” dijo. Sonreí, “Prometo volver pronto” le dije y la comunicación terminó. Me dormí feliz, volvería pero sólo a conquistarla, ya bastante dilatamos esto.
Desperté animada, la charla con Britt me cambió el humor, ya quería verla, tomé mi celular y le mandé un mensaje “Buen día Britt-Britt, espero sea un gran día para ti”. Me arreglé y esperé a Fabiola, juntas nos fuimos a la reunión con los árabes, estaba actuando de acuerdo a lo planeado con mi abuelo, de a poco los convencería que acepten el trato que les proponía. La reunión terminó y quedamos en vernos al día siguiente. Mi celular vibró, leí el mensaje, era de Britt “Te extraño San, vuelve”. Mi corazón se encogió, mi semblante cambió, miré a los árabes, uno de ellos me dijo: “¿Pasa algo señorita López?”. Y sí pasaba algo, suspiré y les expliqué que estaba alejada de una persona importante para mí, que debía invertir mi tiempo en negocios cuando en realidad debía estar conquistando el amor de esa persona, les dije que me sentía triste por dentro, pero que así como estaba debía arreglar el trato que ellos se negaban a firmar. “No sé cómo hacen ustedes, están lejos de sus esposas e hijos y sin embargo están aquí desperdiciando el tiempo, una vez que los momentos pasan, no los volvemos a recuperar, jamás” dije eso y ellos se miraron. Hablaron en su idioma original y luego me dijeron que tenía razón, no había por qué perder el tiempo, firmarían el contrato esa misma noche.
Los árabes se despidieron de nosotras, sólo faltaba agregar unas cosas al contrato y listo. Fabiola estaba feliz, le comunicamos a mi abuelo que todo había terminado, que hice un ligero cambio en la estrategia. Él estaba feliz, supuestamente a la noche firmaríamos todo y en la madrugada estaríamos volviendo a New York, mi abuelo dijo: “Pueden quedarse dos días más, disfruten y descansen un poco, se lo merecen”. Fabiola estaba feliz, me miró coquetamente, yo ya no quería estar en ese lugar, extrañaba a mi rubia.
Volvimos al hotel, estaba en mi habitación pensando en Britt, ella todavía estaría en la empresa a estas horas, quería llamarla pero no sabía si era correcto, tenía miedo de ser molesta, sofocarla mucho, esperaría a que ella me llamara o me mandara un mensaje. La puerta sonó, era Fabiola, pasó a mi habitación con los papeles listos. “Como verás, agilicé todo, sólo falta que firmen, ¿celebramos?”. La miré y tomé los papeles, era verdad, todo estaba en orden, “Claro que celebraremos, pero cuando ellos firmen…” dije firmando los papeles, “…Tu te encargaras de que firmen, celebraremos en New York” exclamé mientras guardaba mis cosas en la maleta, ella me miró extrañada.
- ¿Cómo? ¿Te vas?
- Claro, alguien me espera en New York, ¿a qué me quedaré?
- Pensé que esa historia fue un invento tuyo para convencerlos de que firmen.
- Pues no, no es una excusa.
Mi maleta estaba lista, Fabiola estaba enfurecida “No puedes dejarme sola, ¿quién es esa mujer por la que te vas? ¿Esa tal Marcia?” la miré y le dije: “No es Marcia, mira, haz que firmen y listo, si quieres quejarte hazlo con mi abuelo, yo me voy”.
Mi abuelo me llamó ni bien llegaba al aeropuerto de Los Ángeles, habíamos venido en el avión de la empresa, pero decidí dejar el avión para Fabiola, me convenía volver en otro avión.
- ¿Por qué te vuelves?
- Abuelo, no quería venir, cerré el trato es lo que importa, sólo deseo volver.
- ¿Y dejarás sola a Fabiola?
- Abuelo, no me quedaré, digas lo que digas.
Él sabía que no cambiaría de opinión, sólo me deseo un buen viaje y al llegar hablaríamos bien. Luego de cuatro horas estaba en New York. Marcelo me buscó en el aeropuerto, fui directamente a la empresa, todos se sorprendían de verme, fui a la oficina de Britt pero ella no estaba, eran cerca de las cuatro de la tarde, ella seguro estaba en el teatro practicando. Mi abuelo me estaba esperando, era hora de hablar.
- Fabiola me contó lo que inventaste para convencer a los árabes, ¿cómo está eso?
- No es un invento, necesito estar aquí, por eso volví.
- Hija, no me quejo de tu trabajo, jamás lo he hecho pero estás actuando diferente, ese enamoramiento no me gusta mucho, te hace hacer locuras.
- Nada ha salido mal, no tienes por qué quejarte abuelo.
- Quiero conocer a ese hombre Santana, ¿quién es?
Era el momento para decirle que no era un hombre de quien estaba enamorada, sino de Britt, analicé las posibles repercusiones, prefería callar; “Lo sabrás, pero no ahora, no es el momento”. Él no se conformó con eso, pero no le diría nada más. Dejé las cosas en mi oficina, le dije a Marcelo que volvería a salir, me disponía a irme cuando Carla y Quinn me vieron, ellas se sorprendieron. “Volví, no podía quedarme más tiempo allá” Carla no entendía nada, pero Quinn sí, “¿Te acompaño?” me preguntó, asentí y nos fuimos.
Entramos en el teatro donde Britt estaría ensayando, era un salón enorme donde practicaban, el escenario estaba en otra sala, Ryan me vio y se acercó a saludarnos, me comentó que todo estaba bien. Britt lo inspiraba todos los días, decía que era una bailarina innata, me mostraba más o menos lo que quería hacer, vi que Alexandra estaba allí con unas chicas hablando, me vio y no le gustó nada la idea de tenerme allí. Britt entraba en el salón, estaba con ropa deportiva, tenía una botella de agua en las manos, Ryan seguía hablándome pero yo centré mi atención en ella, ella vio a Quinn, se alegró y la saludó desde lejos agitando su mano, miró a un costado y nuestras miradas se encontraron en medio de esa distancia. Sin dejar de mirarme le entregó la botella a una chica y corrió hacia mí, sonreí como tonta, me aparté de Ryan y el cuerpo de ella se unió al mío en un efusivo abrazo, ella estaba feliz, y yo también. “Estás aquí…” dijo, me aparté un poco de ella y le respondí: “No podía estar tan lejos de ti”. Alexandra nos miraba con rabia, Quinn estaba feliz y Ryan no entendía nada. Él siguió explicándome lo que deseaba hacer, Britt me tomó de las manos y no tenía intenciones de soltarme. Antes de que empezara a practicar me llevó a su camarín, allí me abrazó fuerte.
- Britt, ¿pasa algo?
- Te extrañé, mucho.
- Y yo a ti, ni bien arreglé todo me vine, necesitaba verte.
Sonrió y me abrazó, la llamaban para practicar, decidimos despedirnos, a la noche no podríamos vernos, recién lo haríamos al día siguiente. La tomé de la cintura y acerqué mi rostro al suyo, ella suspiró nerviosa, sonreí y la besé en la frente.
Regresé con Quinn a la empresa, no estaba cansada, me puse a trabajar. Por momentos
pensaba en Britt, cada vez estábamos más cerca una de la otra.
El tiempo sí qué pasó rápido, llegué a casa y mi nana se sorprendió de verme tan pronto, mientras ella preparaba la cena le conté todo lo que hice en Los Ángeles.
- ¿En serio mi´ja? Vaya, los árabes esos habrán estado muy enamorados, diste en el blanco.
- ¡Coincido! Están tan enamorados como tu Santana -dijo mi abuelo entrando en la cocina- ¿por qué no quieres decirme quien es tu novio?
- Será porque no tengo novio abuelo.
- ¿Cómo está eso?
- Abu… estoy enamorada, es verdad pero aún no hay nada concreto, por ahora.
- ¿Por ahora? Sólo te diré que quiero conocerlo, hija, no le haré nada malo.
- Lo sé, no le harías nada.
Dije eso con firmeza, él me miró desconcertado, supongo se dio cuenta que me refería a una persona que él conocía. Antes de irse dijo: “Harry cenará con nosotros”.
El papá de Britt llegó y comenzó a charlar con mi abuelo, se escuchaban las carcajadas, yo
seguía en la cocina aún no había ido a saludarlo, desee que Britt también estuviera aquí en casa pero de seguro estaba cansada, tenía que descansar.
Entré en la sala, Harry estaba rojo de la risa, no pude evitar sonreír, la risa era contagiosa, me abrazó y me dijo: “Tu abuelo es un payaso”. Me reí de eso, Harry me abrazó y me dio un beso de bienvenida. Me tomó de la mano e hizo que me sentara a su lado, recordé a Britt, ella se parecía a él, bastante. Me miró y dije:
- ¿Y Britt?
- Oh… la quise traer, en realidad iba a venir, fue a bañarse y no bajaba me preocupé y subí a buscarla, estaba dormida, mi esposa se quedó con ella. Con todo esto de las prácticas se cansa bastante, supongo será hasta que se acostumbre y hasta que deje la empresa.
- ¿Es definitivo que dejará la empresa?
- Me dijo que sí, no me agrada la idea, pero debo respetarla, llega a casa muy cansada, temo que se enferme.
Le dije que no se preocupara, que era cuestión de tiempo hasta que se acostumbre. Esa
idea de que dejaría la empresa comenzó a inquietarme, por lo menos ella tuvo intensiones de venir, eso me reconfortaba.
Cenamos tranquilos, resulta que mi abuelo le contó a Harry lo que dije para conseguir el cierre del contrato con los árabes, “Vaya que eres ingeniosa, ¿quién será el afortunado que te trae tan enamorada?”. Sonreí, si tan sólo supiera que ando loca por su hija, quizás me mata o tal vez me tenga en un pedestal. Por el momento no me interesaba eso, aparte de lo que sentía, el miedo me acechaba, no sabía cómo afrontar mi sexualidad con mi abuelo, temía defraudarlo; mi nana me miraba, ella sabía que había desperdiciado momentos claves
para hablar con mi abuelo, pero sinceramente no podía.
Me costaba decirle a Britt lo que sentía, temía que ella me rechazara, no era lo suficiente valiente para reconocer frente a ella lo que secretamente sentía, con ella no podía, con mi abuelo menos. Me condicionaban muchas cosas, sabía que sólo eran excusas y que hacía mal en negar lo que sentía, pero el terror se apoderaba de mí, la verdad estaba en mi boca pero no era capaz de soltarla, la opresión en mi pecho y el miedo aumentaban y se instalaban desde lo más profundo de mi ser; en otro momento le diría la verdad.
Alrededor de las tres de la mañana mi celular vibró, me desperté asustada, miré sin importancia el aparato y vi que Britt me mandó un mensaje: Me dormí, quería cenar contigo, lo siento. Sonreí, no sabía que contestarle, me estaba durmiendo pero quería contestarle, abrí mis ojos y con pereza le dije: Debes descansar, ya cenaremos otro día, duerme, dentro de unas horas nos volveremos a ver. De respuesta recibí una carita feliz, sonreí y me dormí con el celular en la mano, al día siguiente desperté y noté que no había cambiado mi posición. Me levanté y me dirigí a la empresa, ella ya estaba allí, sonriendo como siempre, no podría estar sin ella, no quería que dejara la empresa.
Fabiola había regresado, estaba enojada conmigo “Debemos hablar” dijo entrando en mi oficina. Entré sin protestar, Britt miraba todo eso sin entender nada. Cerré la puerta, Fabiola se sentó en el sillón y casi a punto de llorar me dijo:
- ¿Por qué me haces esto?
- ¿Hacerte qué?
- Me dejaste sola en esa ciudad.
- Perdón, pero te expliqué mis razones Fabiola.
- San, te quiero, me duele que no me des una oportunidad, mi amor por ti es sincero, esa chica de la cual dices estar enamorada no te querrá como yo.
- Ni siquiera la conoces, no te atrevas a hablar de ella.
- ¿Quién es?
- Eso no te incumbe.
- ¿Tu abuelo sabe de esto?
Lo dijo de una manera maliciosa, sus lágrimas desaparecieron, sonreía y agregó: “No lo
sabe”. La miré con desprecio, hice que se parara y la saqué de mi oficina, ni bien cerré la puerta ella entró nuevamente. “¿Qué pasará si se entera?” dijo, quería golpearla, lo iba a hacer pero vi cómo Britt se levantó y entró en mi oficina, se paró entre nosotras dos. “¿Qué pasa?” dijo ella, les di la espalda y me senté en la silla de mi escritorio, no sabía qué hacer. “Brittany, déjanos solas por favor”. Ella salió, Fabiola sólo sonreía, la miré y le dije: “Eres una maldita sínica, ¿así dices quererme? Haz lo que quieras, ve y dile a mi abuelo lo que quieras, veremos quién se va, porque las dos no seguiremos aquí cuando él se entere. ¿Apostamos? Yo apuesto a que me quedo”. Ella me miró sorprendida, no dijo nada pero estaba odiándome “Lárgate de mi oficina” le dije y ella salió. Britt estaba mirando todo desde su escritorio, la miré con angustia y ella volvió a mi oficina.
- Santana, ¿qué pasó?
- Sólo estaba arreglando algo con Fabiola, en realidad no quise viajar con ella, pero tuve que hacerlo, se enojó porque la dejé sola.
- Eso es lo que no me queda claro, ¿cómo hiciste para volver tan rápido? Todo estaba planeado para cerrar el trato en unos días.
- Simplemente les dije la verdad, que no podía esperar tanto.
A Britt esa idea no le cerraba bien, pero la aceptó igual. Era incómodo el silencio que se creó en ese instante, la miraba y ella hacía lo mismo, ¿acaso no se daba cuenta que estaba enamorada de ella?
- Te extrañaré cuando te vayas.
- Yo también San… Sabes, mientras desayunaba con Lord Tubbington tuve una visión, amo bailar, pero me gusta trabajar aquí, no quiero dejar de hacer esto, hago bien me trabajo ¿verdad? Pues, no debería dejarlo, Lord Tubbington coincide con esa idea.
- ¿y cómo es que Lord Tubbington coincide? Él no habla Britt…
- No habla pero cuando le dije que dejaría la empresa dejó de comer y me miraba, que él deje de comer es raro San, eso fue una señal.
- Ja… ¿ya volvió a comer?
- Cuando le dije que no dejaría la empresa, volvió a comer.
- Vaya que es inteligente ese gatito.
- Lo es…
- Britt, pero estar trabajando aquí y practicar ¿no será mucho para ti? Podrías estresarte.
- Descuida, me gustan las dos cosas, es cuestión de organizarme, ¿no quieres que me quede Santana?
- No es eso… claro que quiero que te quedes, pero… cuídate ¿ok?
- Lo haré.
Sonrió y salió de la oficina, ella no se iría, eso era genial. Por la tarde ya no la vi, me daban ganas de ir al teatro a visitarla, pero ¿con qué excusa iría? No se me ocurría nada, busqué a Quinn, ella me ayudaría.
- Si que estás enamorada López -dijo Quinn.
- Pues sí, ¿vamos?
- No.
- ¡¿CÓMO QUE NO?!
- Serás muy obvia, hagamos una cena, en tu casa, y la invitamos ¿qué prefieres? ¿verla unos minutos o varias horas?
- Pues con unos minutos me conformo pero si fuera posible, quisiera estar con ella todo el tiempo.
- Apestas cuando estás enamorada López.
- Te quiero Quinnie…
- ¡Cállate!
- ¡Te quierooo!
La abracé y le daba besos que ella esquivaba, había tenido una gran idea, le avisé a mi nana y le mandé un mensaje a Britt, ella respondió: Prometo no dormirme…
Rachel y Quinn llegaron a casa, estábamos en espera de Britt, mi abuelo se nos unía a la cena, todos estábamos en la sala. Cerca de las ocho y media Britt llegó, estaba hermosa, si bien vestía unos jean y una campera color rosa, el color celeste de sus ojos resaltaban más que nunca, su cabello estaba trenzado y estaba ligeramente maquillada. Saludó a todos con un beso, mi nana al verla la abrazó con mucha efusividad, cuando se soltaron Britt tomó mi mano y besó mi mejilla con delicadeza, ambas sonreíamos.
- Muy bien, deseo escucharlas cantar, ¿me deleitarían con algunas canciones? -dijo mi abuelo.
- Britt canta lindo -dijo Rachel.
- ¿Es eso verdad? Pues canta hija…
Britt estaba un poco avergonzada, eso de seguro le recordó la canción de la noche en el karaoke, nos miramos con complicidad. “Canta” le dije y señalé el piano. Rachel sabía tocar el piano, ella tomó de la mano a Britt y juntas improvisarían una canción. Los acordes comenzaban a salir de la cola del piano, era una canción lenta, la conocía, Britt la cantaría.
You with the sad eyes
Don't be discouraged
Oh I realize
It's hard to take courage
In a world full of people
You can lose sight of it all
And the darkness inside you
Can make you feel so small
Tu, con los ojos tristes
No te desalientes
Oh, me doy cuenta
Es difícil tomar valor
En un mundo lleno de gente
Puedes perder la vista de todo
Y la oscuridad dentro de ti
Puede hacerte sentir tan pequeño
But I see your true colors
Shining through
I see your true colors
And that's why I love you
So don't be afraid to let them show
Your true colors
True colors are beautiful,
Like a rainbow
Pero yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris
Show me a smile then,
Don't be unhappy, can't remember
When I last saw you laughing
If this world makes you crazy
And you've taken all you can bear
You call me up
Because you know I'll be there
Entonces enséñame una sonrisa
No seas infeliz, no puedo recordar
Cuando fue la última vez que te vi reír
Si este mundo te vuelve loco
Y has estado tomando todo lo que puedes soportar
Lámame
Porque tu sabes que allí estaré
And I'll see your true colors
Shining through
I see your true colors
And that's why I love you
So don't be afraid to let them show
Your true colors
True colors are beautiful,
Like a rainbow
Y yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris
No puedo recordar
Cuando fue la última vez que te vi reír
Si este mundo te vuelve loco
Y has estado tomando todo lo que puedes soportar
Lámame
Porque tu sabes que allí estaré
Y yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Colores verdaderos
Colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris.
Mi abuelo aplaudía con emoción ni bien terminó la canción, las demás hicimos lo mismo, incluyendo a mi nana. Britt no me dijo nada, pero sabía que esa canción iba para mí. Ella se acercó y me tomó de la mano, nos sentamos juntas escuchando a Rachel, ella cantaba una canción dedicada a Quinn. Al terminar la canción se abrazaron y se besaron, eran muy tiernas, no tenían vergüenza ni pudor, se tomaban de las manos y con sus miradas se decían más de lo que las palabras podrían decir, sin lujuria se besaban, era un beso cargado de puro amor, amor sincero, sonreían por lo enamoradas que estaban. Yo miré a Britt, ella simplemente me dio un ligero apretón en la mano. “Santana, canta esa canción que tanto me gusta; les cuento chicas que esta canción es un himno al amor, se la dediqué a mi esposa cuando cumplimos treinta años de casados, ella fue el amor de mi vida, Santana, canta esa canción”. Miré a mi abuelo, con su mirada me rogaba que cantara esa canción que tanto le gustaba. Me acerqué al piano, me senté y traté de recordar las notas, estaba nerviosa pues Britt estaba allí, esa canción reflejaba los sentimientos reprimidos, la cantaría para ella, recuerdo que mi papá compró el disco de Fleetwood Mac y siempre que sonaba la canción número 8 tomaba a mi madre de la cintura y bailaba con ella cantándole al oído esa dulce canción, de allí que mi abuelo se la dedicó a mi abuela en su aniversario; de tanto escucharla me la aprendí pero sólo hasta este momento esa letra cobraba vida, recién tenía sentido para mí esa mezcla de palabras y melodías, estaba enamorada, y la canción tenía nueva dueña, mi Britt-Britt.
Los acordes salían lentamente, mi voz por momentos quería quebrarse, me estaba mostrando en cuerpo y alma para Britt, ella sonreía y lloraba, mi abuelo estaba igual, sólo que ambos sentían cosas diferentes, unas lágrimas recorrieron mis mejillas, la canción representaba tres momentos diferentes, tres amores distintos, pero al fin amor.
For you......
there'll be no more crying.
for you......
the sun will be shining.
and i feel that when i'm with you,
it's alright...
i know it's right.
To you.......
i'll give the world.
to you.......
i'll never be cold.
cause i feel that when i'm with you,
it's alright...
i know it's right.
..and the songbirds are singing, like they know the score.
..and i love you, i love you, i love you..
like never before.
And i wish you all the love in the world.
but most of all, i wish it from myself.
..and the songbirds keep singing, like they know the score
..and i love you, i love you, i love you..
like never before.
like never before.
like never before.
“Me puse melancólico chicas, mejor vamos a cenar” dijo mi abuelo abrazándome y llevándome al comedor. Britt me miraba desde la pequeña distancia que nos separaba, por más que no lo haya dicho, esperaba que haya sentido que esa canción fue para ella.
Luego de cenar, mi abuelo se fue a dormir, mi nana hizo lo mismo. Quedábamos en la sala sólo las chicas. “Iremos a hacer café” dijo Quinn llevándose a Rachel a la cocina.
- Mi padre me contó lo que les dijiste a los árabes… ¿por qué no me lo contaste San?
- No es algo que deba andar contando por ahí, en realidad fue algo tan natural que hasta yo me sorprendo de lo que dije. No estaba planeado Britt.
- Mi papi me preguntó si yo sabía de quien estabas enamorada.
- ¿Qué le dijiste?
- Que no sabía nada.
- Ummm…
- ¿Quién es?
Preguntó eso y nos miramos mutuamente, ella esperaba que yo diera el primer paso, pero deseaba que fuera ella la que realice ese primer paso. Ninguna decía nada, no me atrevía a decir algo, ella me miraba y esperaba ansiosa la respuesta, “Pronto lo sabrás” le dije tocando su nariz con mi dedo. Ella sonreía.
Las chicas regresaron con el café y nos pusimos a charlar, eran alrededor de la una de la madrugada y noté que Britt estaba cansada, bostezaba muy seguido pero seguía allí. Le pregunté si ya deseaba irse, asintió con la cabeza, estaba muy cansada. Tomé las llaves de mi auto y decidí llevarla, Quinn y Rachel se iban por su lado. Britt se durmió en el auto. No quería despertarla, era aún más hermosa dormida, pero no podía dejarla así, la desperté y la ayudé a bajarse del auto. “Acompáñame” me dijo y no me negué, entramos en su casa, las luces estaban apagadas, subimos las escaleras y nos dirigíamos a su habitación, entramos y ella se recostó en la cama. No pretendía ponerse el pijama, la descalcé y la arropé, antes de irme ella me tomó de la mano y me dijo: “San, dame el beso de las buenas noches”. sonreí y me acerqué a su rostro, la besé en la frente, ella me acarició y rozó apenas sus labios en los míos, yo cerré mis ojos contenta, “Buenas noches” dijo, y mi rostro fue cubierto con su aliento, se durmió inmediatamente. Salí de la casa con cautela, no lo podía creer, mis labios sintieron los suyos, estaba deseosa por más, pero esperaría, ella lo merecía.
Al día siguiente Britt no fue a la empresa, me preocupé, le mandé un mensaje pero no respondió, pensé que tal vez se arrepentía de todo lo que había pasado la noche anterior. La situación me sobrepasaba, estaba intranquila. Harry podría sacarme algunas dudas. Fui a su oficina y le consulté, él no sabía qué habría pasado, pensó que tal vez Britt vendría más tarde pero eran cerca de las diez de la mañana, se preocupó y llamó a Nicole.
- Santana, Britt no vendrá, se sentía un poco cansada, prefiere descansar un poco.
- Oh… entiendo.
Salí de la oficina de Harry. Planeaba pedirle a Britt que fuera mi novia, pero el destino me decía que espere un poco. Estaba intranquila, quería verla, me di cuenta que la necesitaba mucho, no tenía nada de ella, ni una foto siquiera. Se me ocurrió comprarle algo, tal vez un anillo. Salí de la oficina directo a la joyería, miraba la cantidad de anillos disponibles pero ninguno me convencía, Britt no aparentaba ser una persona que le gustara resaltar, más bien era sencilla. Vi que escondido estaba un anillo de oro con un diminuto diamante. Pedí que me lo mostraran, noté que el diamante era en forma de corazón. Me gustó, era perfecto para ella, lo compré, le pediría que fuera mi novia y le regalaría eso.
Regresé a trabajar tranquila, estaba emocionada, de este día no pasaría, ella sería mi novia. Me sentía nerviosa, pensaba una y mil veces cómo sería mi discurso, no sabía cómo empezar. No quería pedirle ayuda a Quinn, me gustaba la idea que, sea lo que sea que le dijera, pues serían ideas mías, estaba enamorada de ella, ser sincera era lo mejor que podía hacer.
Las horas pasaron, almorcé con mi abuelo, él me notaba feliz, pero no preguntó mucho. Fabiola no le había dicho nada, ni en cuenta tuve eso, al parecer le dio miedo perder su trabajo. Almorzamos y regresamos a trabajar, suponía que Britt seguía descansando, le mandé un mensaje y no respondió, comenzaba a preocuparme, miraba el anillo, tenía miedo de hacer algo mal y perder la oportunidad de estar junto a ella.
Las horas pasaban, alrededor de las cuatro de la tarde vi que Harry y Sam salieron apurados de la empresa, eso no me dio buena espina, algo malo pasaba. Le dije a Carla que averiguara con la secretaria de Harry el por qué de su partida. Al cabo de unos minutos Carla regresó, estaba preocupada. “Britt tuvo que ser hospitalizada, dicen que vomitó en varias oportunidades, luego se desmayó, estaba practicando” dijo eso y cómo alma que lleva el diablo salí de la empresa rumbo al hospital que me indicó Carla, Quinn me acompañaba. Apenas llegamos estaba Nicole abrazada a Harry, ambos preocupados, Ryan y Alexandra también estaban allí, Sam no dejaba de caminar de un lado a otro. Nos acercamos y Quinn preguntó que sabían de Britt, Harry nos dijo que ella ingresó al hospital inconsciente, no sabían nada más. Me senté a esperar, Quinn nos trajo café, me temblaba todo, no podía perderla ahora, seguro esto pasaba por el estrés, nada malo podía pasarle, no ahora. Nicole me dijo que toda la mañana durmió, Alexandra dijo que la notó pálida ni bien llegó al teatro y que en varias oportunidades vomitó, sin embargo seguía bailando, hasta que se desplomó en el suelo.
“¿Estará embarazada?” dijo Ryan y todos lo miramos en silencio, él notó que dijo algo grave y agregó “Es una posibilidad, los médicos nos dirán si es así o no, los síntomas coinciden…” miré a Quinn asustada, ella se acercó y me abrazó, Alexandra no decía nada, pero me miraba como diciendo: “¿Qué pasará si está embarazada?” Nicole y Harry miraban a Sam como consultándole si eso podría pasar, después de todo él fue el último hombre que estuvo con ella, él estaba en shock, nos miró a todos y dijo: “Britt y yo nos dimos un tiempo, pero si está embarazada, el bebé es mío”.
Se me partía el corazón en mil pedazos, quería matarlo, golpearlo hasta mandarlo al mismísimo infierno, ella no podía estar embarazada, no de él, no ahora. Una enfermera se acercó a nosotros e informó que Britt despertó, estaba en una sala, no todos podíamos pasar, nos turnaríamos para verla. Fuimos hasta la sala donde estaba, la miré desde la ventana, ella sonrió al verme, Nicole y Harry entraron, los tres se abrazaron, ella no dejaba de mirarme, el médico llegó pero entró en la sala, Sam con decisión entró, quería hacer lo mismo pero mejor esperaría. El médico hablaba mientras miraba unos papeles, una enfermera entró y le extrajo sangre a Britt, yo no entendía nada, Harry parecía estar ¿feliz?, Sam estaba preocupado al igual que Nicole; yo no entendía nada. El médico salió y le pregunté qué pasaba con Britt “Creemos que podría estar embarazada, le haremos unos análisis para confirmar o descartar esa posibilidad” dijo eso y miré a Britt, ella parecía confundida, estaba embarazada. Mis ilusiones se fueron desmoronando de a poco.
Quinn me dijo: “No es nada seguro San” no quise escuchar nada más, la miré y le dije “Vámonos de aquí” Miré a Britt con dolor y me fui.
Estaba en el departamento de Quinn llorando desconsoladamente, todo había terminado, Rachel no podía creer que esto estuviera pasando, me decían que nada era seguro pero el imbécil de Sam estaba muy seguro de eso, y Britt al parecer dudaba. Quería desaparecer de la faz de la tierra. Britt me llamaba pero no le contestaba, no quería saber nada de ella. Apagué mi celular.
Estaba acostada en la cama de Quinn, escuché que el celular de Rachel sonó, era Britt, charlaron un poco y Rachel entró en la habitación. “Britt quiere hablar contigo, San, habla con ella”; no lo dudé, tomé el celular de Rachel y dije:
- ¿Britt?
- ¿Por qué te fuiste San?
- Debes descansar.
- Quiero verte, necesitamos hablar, por favor ven, estoy sola, ven San.
No habían pasado ni quince minutos y yo ya estaba en el hospital, Britt le había pedido a sus padres que la dejasen sola con la excusa de pensar bien todo por lo que estaba pasando. Entré en la sala y la vi allí triste, mis lágrimas salieron sin previo aviso, ella extendió sus brazos y nos abrazamos. “San, ¿has estado llorando? No llores por favor…” No pude decirle nada, me aferré más a ella y con fuerza la abrazaba más a mí. Pensaba que ella podía tener el bebé y lo criaríamos juntas, que Sam fuera el padre no era un gran obstáculo, él tendría que entender que Britt y yo queríamos estar juntas, ahora, si Britt deseaba volver con Sam también era entendible, la que sobraba era yo y debería apartarme. Si ella quisiera que yo estuviese con ella amaría a ese bebé como si fuera mío, aceptaría todo con tal de estar junto a ella. La miré a los ojos y le dije:
- ¿Volverás con Sam? Él dice que es el papá del bebé.
- Santana, no estoy embarazada.
- Eso no lo sabes, hay que esperar los estudios.
- Pues no sé que tendré, pero créeme, no estoy embarazada, yo sé porque te lo digo.
- ¿Qué te hace estar tan segura?
- Soy mujer San, me daría cuenta si estoy embarazada. No lo estoy.
- Pero Sam…
- Que lo que diga Sam no te importe, mi papi también está emocionado, pero no San, no estoy embarazada.
La abracé, por algún motivo eso me tranquilizó, era rara nuestra relación, no éramos novias ni nada por el estilo pero nos celábamos mutuamente, no lo decíamos abiertamente pero cada una sabia que estábamos enamoradas, ella explicaba algo que no tendría que explicarme, yo tranquilizaba sus celos por más que no debía hacerlo, no éramos nada pero a la vez una era el complemento de la otra, no funcionábamos separadas. “¿Te quedarías conmigo esta noche?” me preguntó, la miré y le dije que sí. Ella se corrió a un costado de la cama y me pidió que me acomodara ahí, obedecí, la cama era lo suficientemente ancha como para albergarnos a las dos, nos tomamos de las manos y juntamos nuestras frentes, ella acariciaba mi rostro y yo besaba su frente, una enfermera entró y me asusté, me levanté de la cama avergonzada. La enfermera no dijo nada Britt sonreía, le tomó la temperatura y revisó su suero, todo estaba en orden. Antes de salir la enfermera dijo: “Pueden dormir juntas, eso sí, nada de sexo por favor”. Dijo eso y apagó la luz de la habitación, menos mal, porque estaba roja de la vergüenza, Britt reía. “Ven San, es hora de dormir” me acerqué a ella y volví a la cama, a pesar de la oscuridad podía notar los ojos celestes de ella, “Si tienes un bebé, quiero que tenga tus ojos” le dije, ella sonrió, me acarició y dijo: “No tendré un bebé ahora, pero en un futuro me encantaría, allí veremos si salen con ojos celestes o marrones” dijo eso y me estremecí. Desee hacerla mía allí mismo y embarazarla yo, pero no podía, ni embarazarla ni hacer nada, la enfermera podría volver y me sacarían del hospital. Acaricié el rostro de Britt y le di el famoso beso esquimal, ella no dejaba de sonreír. “Tus bebés serán hermosos” le dije, no podía creer que yo estuviera pensando en tener bebés con ella, o sea, no pensaba en uno, sino en varios. Ella se dio la vuelta con cuidado e hizo que la abrazara. Estábamos “haciendo cucharita”, eso era demasiado excitante pero adorable a la vez, mi brazo se posó en su cintura y mi mano acarició su abdomen, ella agarró mi mano y entrelazó sus dedos con los míos. “Te quiero” dijo ella, besé su cuello y le dije: “Yo también Britt-Britt”.
Desperté a eso de las siete de la mañana, Britt dormía, algo había en la cama que me producía dolor, metí la mano en el bolsillo de la campera que tenía puesta y vi que estaba el estuche con el anillo que compré para ella. Lo tenía en la mano, lo miré un poco y volví a dormirme. Al cabo de un rato sentí que Britt se movía, abrí los ojos y ella estaba viéndome con esos bellísimos ojos celestes, “Buen día San” dijo dándome un beso en la mejilla, sonreí y dije: “Buen día Britt-Britt” ella sonrió y la besé en la frente. No me fijé la hora pero la puerta se abrió y entró Nicole. Me levanté asustada de la cama, no me di cuenta y el estuche con el anillo estaba en la cama, Britt lo agarró pero no dijo nada.
- Santana ¿dormiste aquí? -preguntó Nicole.
- Emmm… sí, le hice compañía a Britt.
- Si ya veo, Harry vino conmigo, se quedó charlando con el médico, Sam también vino hija, ambos están ansiosos por el resultado de los estudios.
Miré a Britt, ella estaba tranquila, eran las ocho, debía ir a la empresa, me hubiera gustado quedarme pero ¿con qué excusa lo haría? Volvería al mediodía, a visitarla. Nicole dijo que saldría a ver a Harry. Me quedé a solas con Britt, ella abrió el estuche y vio el anillo, su rostro demostraba la sorpresa, sin dejar de mirarlo dijo:
- Es hermoso, ¿quién te lo dio?
- Lo compré, es para alguien especial, es un regalo.
- Oh… es hermoso, toma -me dijo entregando el estuche.
Vi que estaba un poco desilusionada, era para ella el anillo pero no se lo daría hasta que pasara todo esto. Guardé el anillo y me acerqué a ella, “Debo irme, vendré a la hora del almuerzo, avísame cualquier cosa que necesites”, la besé en la frente. Salí sin que Harry o Sam me vieran. Me sentía como una prófuga, pero era feliz, Britt me hacía feliz.
Una vez en la empresa me dispuse a hablar con Quinn, le conté todo lo que pasó, incluyendo lo del anillo, ella miró el anillo y quedó enamorada de él.
- San, es hermoso, pero más hermoso es el detalle, realmente la quieres…
- Muchísimo Quinn, sería capaz de criar junto a ella al bebé.
- Pero ella asegura que no está embarazada, por algo será San, igual, si piensas así sólo es una muestra más de tu amor.
- La quiero Quinn, no soporto estar lejos de ella.
- Tranquila, ella te quiere, pronto estarán juntas. ¿Cómo se lo dirás a tu abuelo?
- Mientras esté con ella eso es lo de menos Quinn.
Realmente sólo me importaba Britt, la quería con locura. Alrededor de las diez de la mañana Harry llegaba a la empresa acompañado de Sam, fui a hablar con él.
- Harry, ¿cómo está Britt?
- Santana, mi princesa está bien, está un poco anémica, eso es producto de tanto esfuerzo, fue una falsa alarma lo del embarazo, estaba emocionado, pensé que sería abuelo…
- Oh… quizás no sea el momento adecuado Harry.
- Es verdad, pero mi Britt me dijo que me haría abuelo, no ahora pero seré abuelo en el futuro.
Sonreí, él también, el que no estaba de humor era Sam. Lo entendía, pero eso no significaba que renunciaría a Britt, ahora más que nunca ella estaba libre para mí.
Les dejo la otra parte... Besos!!
Capítulo 8: Falsas ilusiones. Parte 2
Al día siguiente no fui a la empresa a la mañana, directamente me encontré con mi abuelo y Fabiola en el aeropuerto. Quinn fue a despedirme.
- San, ¿estás bien? Britt está muy triste, no ha hablado en todo el día, deberías despedirte de ella por lo menos.
- Quinn, volveré en unos días, ella estará bien sin mí, tal vez Alexandra la consuele mejor que yo.
- No digas eso. Si Britt sólo quisiera tu amistad no estaría así. Habla con ella.
- Cuando vuelva hablaremos -dije.
Nos despedimos. Llegamos a Los Ángeles antes del anochecer. Fabiola estaba feliz, nos registramos en el hotel y nos dieron nuestras habitaciones. Me duché y llamé a Quinn.
- Hola Quinn, ¿qué tal todo por allí?
- Yo bien San pero Britt es la que está mal, llámala, no te imaginas cómo está.
Fabiola en su cuenta de twitter no ha dejado de comentar que pasará una buena noche al estilo latino, que vibrará toda la ciudad con sus gritos de placer y cosas así; Britt está que camina por las paredes.
- No la entiendo Quinn, me dijo que quería ser mi amiga y, ¿ahora me dices que sigue con los celos?
- Serás idiota, ella no quiere ser tu amiga, se nota a leguas eso, tal vez está asustada por eso te dijo lo que dijo, San llámala.
- ¿Y qué haré? Le digo: “por si estabas sin pendientes Britt, no me acostaré esta noche con Fabiola”, no creo que eso sea suficiente.
- Pues no lo sé, tú eres ingeniosa ¿no? Haz algo.
- Ok… la llamaré, pásame el número de ella.
- ¡¿Qué?! ¿No tienes su número?
- Pues no… es raro, pero es la verdad.
- Ok, corto y te lo paso por mensaje, me avisas cómo sale todo.
Esperé un poco y el mensaje de Quinn llegó. Miré el número dudé un poco pero llamé, a estas horas Britt estaría en su casa. “¿Hola?” dijo con su dulce voz, sonreí, yo estaba nerviosa sin embargo le dije: “Britt-Britt” ella parecía sonreír desde el otro lado.
- San… ¿Cómo conseguiste mi número?
- Se lo pedí a Quinn, quería saber cómo estabas, no pude verte hoy a la mañana, estaba ocupada.
- Entiendo, estoy bien, ¿tú cómo estás?
Así comenzamos a charlar, le dejé en claro que estuve la mayoría de las horas viajando, que acababa de ducharme y que estaba sola en la habitación, me preguntó si saldría, le dije que no. Hice pedir la cena al cuarto, comí acompañada de ella en el teléfono. Tal vez con esto ella se quedaría tranquila. Me preguntaba donde estaba Fabiola, le decía que no sabía, y golpearon la puerta, abrí y era Fabiola “San, ¿cenamos juntas?”, le dije que ya estaba cenando sola, que estaba cansada y que recién nos veríamos al día siguiente. Britt estaba escuchando todo eso. Fabiola se retiró enfadada. Con Britt seguíamos hablando, me comentaba todo lo que aprendió en las prácticas junto a Ryan; estaba emocionada, pero muy cansada, me decía que la exigencia era mucha, no estaba acostumbrada y se cansaba seguido, le dije que eso sería hasta que se acostumbre, le pedí que se alimentara bien y también se hidratara correctamente. Ella me contó muchas cosas, nada de eso me aburría, la escuchaba atentamente y de vez en cuando le hacía algún aporte.
- Dios San, mira la hora que es aquí son las dos de la madrugada allí son como tres horas más, debes estar cansada, perdón por molestarte.
- Britt, no me molestas, yo te llamé, realmente contigo pasan volando las horas, pero mejor cortamos, me espera una jornada larga.
- Es verdad, qué descanses San, gracias por llamar.
- Qué descanses Britt, te quiero, no lo dudes.
No escuché nada más del otro lado, pero ella estaba allí. “Ya quiero que vuelvas, también te quiero San” dijo. Sonreí, “Prometo volver pronto” le dije y la comunicación terminó. Me dormí feliz, volvería pero sólo a conquistarla, ya bastante dilatamos esto.
Desperté animada, la charla con Britt me cambió el humor, ya quería verla, tomé mi celular y le mandé un mensaje “Buen día Britt-Britt, espero sea un gran día para ti”. Me arreglé y esperé a Fabiola, juntas nos fuimos a la reunión con los árabes, estaba actuando de acuerdo a lo planeado con mi abuelo, de a poco los convencería que acepten el trato que les proponía. La reunión terminó y quedamos en vernos al día siguiente. Mi celular vibró, leí el mensaje, era de Britt “Te extraño San, vuelve”. Mi corazón se encogió, mi semblante cambió, miré a los árabes, uno de ellos me dijo: “¿Pasa algo señorita López?”. Y sí pasaba algo, suspiré y les expliqué que estaba alejada de una persona importante para mí, que debía invertir mi tiempo en negocios cuando en realidad debía estar conquistando el amor de esa persona, les dije que me sentía triste por dentro, pero que así como estaba debía arreglar el trato que ellos se negaban a firmar. “No sé cómo hacen ustedes, están lejos de sus esposas e hijos y sin embargo están aquí desperdiciando el tiempo, una vez que los momentos pasan, no los volvemos a recuperar, jamás” dije eso y ellos se miraron. Hablaron en su idioma original y luego me dijeron que tenía razón, no había por qué perder el tiempo, firmarían el contrato esa misma noche.
Los árabes se despidieron de nosotras, sólo faltaba agregar unas cosas al contrato y listo. Fabiola estaba feliz, le comunicamos a mi abuelo que todo había terminado, que hice un ligero cambio en la estrategia. Él estaba feliz, supuestamente a la noche firmaríamos todo y en la madrugada estaríamos volviendo a New York, mi abuelo dijo: “Pueden quedarse dos días más, disfruten y descansen un poco, se lo merecen”. Fabiola estaba feliz, me miró coquetamente, yo ya no quería estar en ese lugar, extrañaba a mi rubia.
Volvimos al hotel, estaba en mi habitación pensando en Britt, ella todavía estaría en la empresa a estas horas, quería llamarla pero no sabía si era correcto, tenía miedo de ser molesta, sofocarla mucho, esperaría a que ella me llamara o me mandara un mensaje. La puerta sonó, era Fabiola, pasó a mi habitación con los papeles listos. “Como verás, agilicé todo, sólo falta que firmen, ¿celebramos?”. La miré y tomé los papeles, era verdad, todo estaba en orden, “Claro que celebraremos, pero cuando ellos firmen…” dije firmando los papeles, “…Tu te encargaras de que firmen, celebraremos en New York” exclamé mientras guardaba mis cosas en la maleta, ella me miró extrañada.
- ¿Cómo? ¿Te vas?
- Claro, alguien me espera en New York, ¿a qué me quedaré?
- Pensé que esa historia fue un invento tuyo para convencerlos de que firmen.
- Pues no, no es una excusa.
Mi maleta estaba lista, Fabiola estaba enfurecida “No puedes dejarme sola, ¿quién es esa mujer por la que te vas? ¿Esa tal Marcia?” la miré y le dije: “No es Marcia, mira, haz que firmen y listo, si quieres quejarte hazlo con mi abuelo, yo me voy”.
Mi abuelo me llamó ni bien llegaba al aeropuerto de Los Ángeles, habíamos venido en el avión de la empresa, pero decidí dejar el avión para Fabiola, me convenía volver en otro avión.
- ¿Por qué te vuelves?
- Abuelo, no quería venir, cerré el trato es lo que importa, sólo deseo volver.
- ¿Y dejarás sola a Fabiola?
- Abuelo, no me quedaré, digas lo que digas.
Él sabía que no cambiaría de opinión, sólo me deseo un buen viaje y al llegar hablaríamos bien. Luego de cuatro horas estaba en New York. Marcelo me buscó en el aeropuerto, fui directamente a la empresa, todos se sorprendían de verme, fui a la oficina de Britt pero ella no estaba, eran cerca de las cuatro de la tarde, ella seguro estaba en el teatro practicando. Mi abuelo me estaba esperando, era hora de hablar.
- Fabiola me contó lo que inventaste para convencer a los árabes, ¿cómo está eso?
- No es un invento, necesito estar aquí, por eso volví.
- Hija, no me quejo de tu trabajo, jamás lo he hecho pero estás actuando diferente, ese enamoramiento no me gusta mucho, te hace hacer locuras.
- Nada ha salido mal, no tienes por qué quejarte abuelo.
- Quiero conocer a ese hombre Santana, ¿quién es?
Era el momento para decirle que no era un hombre de quien estaba enamorada, sino de Britt, analicé las posibles repercusiones, prefería callar; “Lo sabrás, pero no ahora, no es el momento”. Él no se conformó con eso, pero no le diría nada más. Dejé las cosas en mi oficina, le dije a Marcelo que volvería a salir, me disponía a irme cuando Carla y Quinn me vieron, ellas se sorprendieron. “Volví, no podía quedarme más tiempo allá” Carla no entendía nada, pero Quinn sí, “¿Te acompaño?” me preguntó, asentí y nos fuimos.
Entramos en el teatro donde Britt estaría ensayando, era un salón enorme donde practicaban, el escenario estaba en otra sala, Ryan me vio y se acercó a saludarnos, me comentó que todo estaba bien. Britt lo inspiraba todos los días, decía que era una bailarina innata, me mostraba más o menos lo que quería hacer, vi que Alexandra estaba allí con unas chicas hablando, me vio y no le gustó nada la idea de tenerme allí. Britt entraba en el salón, estaba con ropa deportiva, tenía una botella de agua en las manos, Ryan seguía hablándome pero yo centré mi atención en ella, ella vio a Quinn, se alegró y la saludó desde lejos agitando su mano, miró a un costado y nuestras miradas se encontraron en medio de esa distancia. Sin dejar de mirarme le entregó la botella a una chica y corrió hacia mí, sonreí como tonta, me aparté de Ryan y el cuerpo de ella se unió al mío en un efusivo abrazo, ella estaba feliz, y yo también. “Estás aquí…” dijo, me aparté un poco de ella y le respondí: “No podía estar tan lejos de ti”. Alexandra nos miraba con rabia, Quinn estaba feliz y Ryan no entendía nada. Él siguió explicándome lo que deseaba hacer, Britt me tomó de las manos y no tenía intenciones de soltarme. Antes de que empezara a practicar me llevó a su camarín, allí me abrazó fuerte.
- Britt, ¿pasa algo?
- Te extrañé, mucho.
- Y yo a ti, ni bien arreglé todo me vine, necesitaba verte.
Sonrió y me abrazó, la llamaban para practicar, decidimos despedirnos, a la noche no podríamos vernos, recién lo haríamos al día siguiente. La tomé de la cintura y acerqué mi rostro al suyo, ella suspiró nerviosa, sonreí y la besé en la frente.
Regresé con Quinn a la empresa, no estaba cansada, me puse a trabajar. Por momentos
pensaba en Britt, cada vez estábamos más cerca una de la otra.
El tiempo sí qué pasó rápido, llegué a casa y mi nana se sorprendió de verme tan pronto, mientras ella preparaba la cena le conté todo lo que hice en Los Ángeles.
- ¿En serio mi´ja? Vaya, los árabes esos habrán estado muy enamorados, diste en el blanco.
- ¡Coincido! Están tan enamorados como tu Santana -dijo mi abuelo entrando en la cocina- ¿por qué no quieres decirme quien es tu novio?
- Será porque no tengo novio abuelo.
- ¿Cómo está eso?
- Abu… estoy enamorada, es verdad pero aún no hay nada concreto, por ahora.
- ¿Por ahora? Sólo te diré que quiero conocerlo, hija, no le haré nada malo.
- Lo sé, no le harías nada.
Dije eso con firmeza, él me miró desconcertado, supongo se dio cuenta que me refería a una persona que él conocía. Antes de irse dijo: “Harry cenará con nosotros”.
El papá de Britt llegó y comenzó a charlar con mi abuelo, se escuchaban las carcajadas, yo
seguía en la cocina aún no había ido a saludarlo, desee que Britt también estuviera aquí en casa pero de seguro estaba cansada, tenía que descansar.
Entré en la sala, Harry estaba rojo de la risa, no pude evitar sonreír, la risa era contagiosa, me abrazó y me dijo: “Tu abuelo es un payaso”. Me reí de eso, Harry me abrazó y me dio un beso de bienvenida. Me tomó de la mano e hizo que me sentara a su lado, recordé a Britt, ella se parecía a él, bastante. Me miró y dije:
- ¿Y Britt?
- Oh… la quise traer, en realidad iba a venir, fue a bañarse y no bajaba me preocupé y subí a buscarla, estaba dormida, mi esposa se quedó con ella. Con todo esto de las prácticas se cansa bastante, supongo será hasta que se acostumbre y hasta que deje la empresa.
- ¿Es definitivo que dejará la empresa?
- Me dijo que sí, no me agrada la idea, pero debo respetarla, llega a casa muy cansada, temo que se enferme.
Le dije que no se preocupara, que era cuestión de tiempo hasta que se acostumbre. Esa
idea de que dejaría la empresa comenzó a inquietarme, por lo menos ella tuvo intensiones de venir, eso me reconfortaba.
Cenamos tranquilos, resulta que mi abuelo le contó a Harry lo que dije para conseguir el cierre del contrato con los árabes, “Vaya que eres ingeniosa, ¿quién será el afortunado que te trae tan enamorada?”. Sonreí, si tan sólo supiera que ando loca por su hija, quizás me mata o tal vez me tenga en un pedestal. Por el momento no me interesaba eso, aparte de lo que sentía, el miedo me acechaba, no sabía cómo afrontar mi sexualidad con mi abuelo, temía defraudarlo; mi nana me miraba, ella sabía que había desperdiciado momentos claves
para hablar con mi abuelo, pero sinceramente no podía.
Me costaba decirle a Britt lo que sentía, temía que ella me rechazara, no era lo suficiente valiente para reconocer frente a ella lo que secretamente sentía, con ella no podía, con mi abuelo menos. Me condicionaban muchas cosas, sabía que sólo eran excusas y que hacía mal en negar lo que sentía, pero el terror se apoderaba de mí, la verdad estaba en mi boca pero no era capaz de soltarla, la opresión en mi pecho y el miedo aumentaban y se instalaban desde lo más profundo de mi ser; en otro momento le diría la verdad.
Alrededor de las tres de la mañana mi celular vibró, me desperté asustada, miré sin importancia el aparato y vi que Britt me mandó un mensaje: Me dormí, quería cenar contigo, lo siento. Sonreí, no sabía que contestarle, me estaba durmiendo pero quería contestarle, abrí mis ojos y con pereza le dije: Debes descansar, ya cenaremos otro día, duerme, dentro de unas horas nos volveremos a ver. De respuesta recibí una carita feliz, sonreí y me dormí con el celular en la mano, al día siguiente desperté y noté que no había cambiado mi posición. Me levanté y me dirigí a la empresa, ella ya estaba allí, sonriendo como siempre, no podría estar sin ella, no quería que dejara la empresa.
Fabiola había regresado, estaba enojada conmigo “Debemos hablar” dijo entrando en mi oficina. Entré sin protestar, Britt miraba todo eso sin entender nada. Cerré la puerta, Fabiola se sentó en el sillón y casi a punto de llorar me dijo:
- ¿Por qué me haces esto?
- ¿Hacerte qué?
- Me dejaste sola en esa ciudad.
- Perdón, pero te expliqué mis razones Fabiola.
- San, te quiero, me duele que no me des una oportunidad, mi amor por ti es sincero, esa chica de la cual dices estar enamorada no te querrá como yo.
- Ni siquiera la conoces, no te atrevas a hablar de ella.
- ¿Quién es?
- Eso no te incumbe.
- ¿Tu abuelo sabe de esto?
Lo dijo de una manera maliciosa, sus lágrimas desaparecieron, sonreía y agregó: “No lo
sabe”. La miré con desprecio, hice que se parara y la saqué de mi oficina, ni bien cerré la puerta ella entró nuevamente. “¿Qué pasará si se entera?” dijo, quería golpearla, lo iba a hacer pero vi cómo Britt se levantó y entró en mi oficina, se paró entre nosotras dos. “¿Qué pasa?” dijo ella, les di la espalda y me senté en la silla de mi escritorio, no sabía qué hacer. “Brittany, déjanos solas por favor”. Ella salió, Fabiola sólo sonreía, la miré y le dije: “Eres una maldita sínica, ¿así dices quererme? Haz lo que quieras, ve y dile a mi abuelo lo que quieras, veremos quién se va, porque las dos no seguiremos aquí cuando él se entere. ¿Apostamos? Yo apuesto a que me quedo”. Ella me miró sorprendida, no dijo nada pero estaba odiándome “Lárgate de mi oficina” le dije y ella salió. Britt estaba mirando todo desde su escritorio, la miré con angustia y ella volvió a mi oficina.
- Santana, ¿qué pasó?
- Sólo estaba arreglando algo con Fabiola, en realidad no quise viajar con ella, pero tuve que hacerlo, se enojó porque la dejé sola.
- Eso es lo que no me queda claro, ¿cómo hiciste para volver tan rápido? Todo estaba planeado para cerrar el trato en unos días.
- Simplemente les dije la verdad, que no podía esperar tanto.
A Britt esa idea no le cerraba bien, pero la aceptó igual. Era incómodo el silencio que se creó en ese instante, la miraba y ella hacía lo mismo, ¿acaso no se daba cuenta que estaba enamorada de ella?
- Te extrañaré cuando te vayas.
- Yo también San… Sabes, mientras desayunaba con Lord Tubbington tuve una visión, amo bailar, pero me gusta trabajar aquí, no quiero dejar de hacer esto, hago bien me trabajo ¿verdad? Pues, no debería dejarlo, Lord Tubbington coincide con esa idea.
- ¿y cómo es que Lord Tubbington coincide? Él no habla Britt…
- No habla pero cuando le dije que dejaría la empresa dejó de comer y me miraba, que él deje de comer es raro San, eso fue una señal.
- Ja… ¿ya volvió a comer?
- Cuando le dije que no dejaría la empresa, volvió a comer.
- Vaya que es inteligente ese gatito.
- Lo es…
- Britt, pero estar trabajando aquí y practicar ¿no será mucho para ti? Podrías estresarte.
- Descuida, me gustan las dos cosas, es cuestión de organizarme, ¿no quieres que me quede Santana?
- No es eso… claro que quiero que te quedes, pero… cuídate ¿ok?
- Lo haré.
Sonrió y salió de la oficina, ella no se iría, eso era genial. Por la tarde ya no la vi, me daban ganas de ir al teatro a visitarla, pero ¿con qué excusa iría? No se me ocurría nada, busqué a Quinn, ella me ayudaría.
- Si que estás enamorada López -dijo Quinn.
- Pues sí, ¿vamos?
- No.
- ¡¿CÓMO QUE NO?!
- Serás muy obvia, hagamos una cena, en tu casa, y la invitamos ¿qué prefieres? ¿verla unos minutos o varias horas?
- Pues con unos minutos me conformo pero si fuera posible, quisiera estar con ella todo el tiempo.
- Apestas cuando estás enamorada López.
- Te quiero Quinnie…
- ¡Cállate!
- ¡Te quierooo!
La abracé y le daba besos que ella esquivaba, había tenido una gran idea, le avisé a mi nana y le mandé un mensaje a Britt, ella respondió: Prometo no dormirme…
Rachel y Quinn llegaron a casa, estábamos en espera de Britt, mi abuelo se nos unía a la cena, todos estábamos en la sala. Cerca de las ocho y media Britt llegó, estaba hermosa, si bien vestía unos jean y una campera color rosa, el color celeste de sus ojos resaltaban más que nunca, su cabello estaba trenzado y estaba ligeramente maquillada. Saludó a todos con un beso, mi nana al verla la abrazó con mucha efusividad, cuando se soltaron Britt tomó mi mano y besó mi mejilla con delicadeza, ambas sonreíamos.
- Muy bien, deseo escucharlas cantar, ¿me deleitarían con algunas canciones? -dijo mi abuelo.
- Britt canta lindo -dijo Rachel.
- ¿Es eso verdad? Pues canta hija…
Britt estaba un poco avergonzada, eso de seguro le recordó la canción de la noche en el karaoke, nos miramos con complicidad. “Canta” le dije y señalé el piano. Rachel sabía tocar el piano, ella tomó de la mano a Britt y juntas improvisarían una canción. Los acordes comenzaban a salir de la cola del piano, era una canción lenta, la conocía, Britt la cantaría.
You with the sad eyes
Don't be discouraged
Oh I realize
It's hard to take courage
In a world full of people
You can lose sight of it all
And the darkness inside you
Can make you feel so small
Tu, con los ojos tristes
No te desalientes
Oh, me doy cuenta
Es difícil tomar valor
En un mundo lleno de gente
Puedes perder la vista de todo
Y la oscuridad dentro de ti
Puede hacerte sentir tan pequeño
But I see your true colors
Shining through
I see your true colors
And that's why I love you
So don't be afraid to let them show
Your true colors
True colors are beautiful,
Like a rainbow
Pero yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris
Show me a smile then,
Don't be unhappy, can't remember
When I last saw you laughing
If this world makes you crazy
And you've taken all you can bear
You call me up
Because you know I'll be there
Entonces enséñame una sonrisa
No seas infeliz, no puedo recordar
Cuando fue la última vez que te vi reír
Si este mundo te vuelve loco
Y has estado tomando todo lo que puedes soportar
Lámame
Porque tu sabes que allí estaré
And I'll see your true colors
Shining through
I see your true colors
And that's why I love you
So don't be afraid to let them show
Your true colors
True colors are beautiful,
Like a rainbow
Y yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris
No puedo recordar
Cuando fue la última vez que te vi reír
Si este mundo te vuelve loco
Y has estado tomando todo lo que puedes soportar
Lámame
Porque tu sabes que allí estaré
Y yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Colores verdaderos
Colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arco iris.
Mi abuelo aplaudía con emoción ni bien terminó la canción, las demás hicimos lo mismo, incluyendo a mi nana. Britt no me dijo nada, pero sabía que esa canción iba para mí. Ella se acercó y me tomó de la mano, nos sentamos juntas escuchando a Rachel, ella cantaba una canción dedicada a Quinn. Al terminar la canción se abrazaron y se besaron, eran muy tiernas, no tenían vergüenza ni pudor, se tomaban de las manos y con sus miradas se decían más de lo que las palabras podrían decir, sin lujuria se besaban, era un beso cargado de puro amor, amor sincero, sonreían por lo enamoradas que estaban. Yo miré a Britt, ella simplemente me dio un ligero apretón en la mano. “Santana, canta esa canción que tanto me gusta; les cuento chicas que esta canción es un himno al amor, se la dediqué a mi esposa cuando cumplimos treinta años de casados, ella fue el amor de mi vida, Santana, canta esa canción”. Miré a mi abuelo, con su mirada me rogaba que cantara esa canción que tanto le gustaba. Me acerqué al piano, me senté y traté de recordar las notas, estaba nerviosa pues Britt estaba allí, esa canción reflejaba los sentimientos reprimidos, la cantaría para ella, recuerdo que mi papá compró el disco de Fleetwood Mac y siempre que sonaba la canción número 8 tomaba a mi madre de la cintura y bailaba con ella cantándole al oído esa dulce canción, de allí que mi abuelo se la dedicó a mi abuela en su aniversario; de tanto escucharla me la aprendí pero sólo hasta este momento esa letra cobraba vida, recién tenía sentido para mí esa mezcla de palabras y melodías, estaba enamorada, y la canción tenía nueva dueña, mi Britt-Britt.
Los acordes salían lentamente, mi voz por momentos quería quebrarse, me estaba mostrando en cuerpo y alma para Britt, ella sonreía y lloraba, mi abuelo estaba igual, sólo que ambos sentían cosas diferentes, unas lágrimas recorrieron mis mejillas, la canción representaba tres momentos diferentes, tres amores distintos, pero al fin amor.
For you......
there'll be no more crying.
for you......
the sun will be shining.
and i feel that when i'm with you,
it's alright...
i know it's right.
To you.......
i'll give the world.
to you.......
i'll never be cold.
cause i feel that when i'm with you,
it's alright...
i know it's right.
..and the songbirds are singing, like they know the score.
..and i love you, i love you, i love you..
like never before.
And i wish you all the love in the world.
but most of all, i wish it from myself.
..and the songbirds keep singing, like they know the score
..and i love you, i love you, i love you..
like never before.
like never before.
like never before.
“Me puse melancólico chicas, mejor vamos a cenar” dijo mi abuelo abrazándome y llevándome al comedor. Britt me miraba desde la pequeña distancia que nos separaba, por más que no lo haya dicho, esperaba que haya sentido que esa canción fue para ella.
Luego de cenar, mi abuelo se fue a dormir, mi nana hizo lo mismo. Quedábamos en la sala sólo las chicas. “Iremos a hacer café” dijo Quinn llevándose a Rachel a la cocina.
- Mi padre me contó lo que les dijiste a los árabes… ¿por qué no me lo contaste San?
- No es algo que deba andar contando por ahí, en realidad fue algo tan natural que hasta yo me sorprendo de lo que dije. No estaba planeado Britt.
- Mi papi me preguntó si yo sabía de quien estabas enamorada.
- ¿Qué le dijiste?
- Que no sabía nada.
- Ummm…
- ¿Quién es?
Preguntó eso y nos miramos mutuamente, ella esperaba que yo diera el primer paso, pero deseaba que fuera ella la que realice ese primer paso. Ninguna decía nada, no me atrevía a decir algo, ella me miraba y esperaba ansiosa la respuesta, “Pronto lo sabrás” le dije tocando su nariz con mi dedo. Ella sonreía.
Las chicas regresaron con el café y nos pusimos a charlar, eran alrededor de la una de la madrugada y noté que Britt estaba cansada, bostezaba muy seguido pero seguía allí. Le pregunté si ya deseaba irse, asintió con la cabeza, estaba muy cansada. Tomé las llaves de mi auto y decidí llevarla, Quinn y Rachel se iban por su lado. Britt se durmió en el auto. No quería despertarla, era aún más hermosa dormida, pero no podía dejarla así, la desperté y la ayudé a bajarse del auto. “Acompáñame” me dijo y no me negué, entramos en su casa, las luces estaban apagadas, subimos las escaleras y nos dirigíamos a su habitación, entramos y ella se recostó en la cama. No pretendía ponerse el pijama, la descalcé y la arropé, antes de irme ella me tomó de la mano y me dijo: “San, dame el beso de las buenas noches”. sonreí y me acerqué a su rostro, la besé en la frente, ella me acarició y rozó apenas sus labios en los míos, yo cerré mis ojos contenta, “Buenas noches” dijo, y mi rostro fue cubierto con su aliento, se durmió inmediatamente. Salí de la casa con cautela, no lo podía creer, mis labios sintieron los suyos, estaba deseosa por más, pero esperaría, ella lo merecía.
Al día siguiente Britt no fue a la empresa, me preocupé, le mandé un mensaje pero no respondió, pensé que tal vez se arrepentía de todo lo que había pasado la noche anterior. La situación me sobrepasaba, estaba intranquila. Harry podría sacarme algunas dudas. Fui a su oficina y le consulté, él no sabía qué habría pasado, pensó que tal vez Britt vendría más tarde pero eran cerca de las diez de la mañana, se preocupó y llamó a Nicole.
- Santana, Britt no vendrá, se sentía un poco cansada, prefiere descansar un poco.
- Oh… entiendo.
Salí de la oficina de Harry. Planeaba pedirle a Britt que fuera mi novia, pero el destino me decía que espere un poco. Estaba intranquila, quería verla, me di cuenta que la necesitaba mucho, no tenía nada de ella, ni una foto siquiera. Se me ocurrió comprarle algo, tal vez un anillo. Salí de la oficina directo a la joyería, miraba la cantidad de anillos disponibles pero ninguno me convencía, Britt no aparentaba ser una persona que le gustara resaltar, más bien era sencilla. Vi que escondido estaba un anillo de oro con un diminuto diamante. Pedí que me lo mostraran, noté que el diamante era en forma de corazón. Me gustó, era perfecto para ella, lo compré, le pediría que fuera mi novia y le regalaría eso.
Regresé a trabajar tranquila, estaba emocionada, de este día no pasaría, ella sería mi novia. Me sentía nerviosa, pensaba una y mil veces cómo sería mi discurso, no sabía cómo empezar. No quería pedirle ayuda a Quinn, me gustaba la idea que, sea lo que sea que le dijera, pues serían ideas mías, estaba enamorada de ella, ser sincera era lo mejor que podía hacer.
Las horas pasaron, almorcé con mi abuelo, él me notaba feliz, pero no preguntó mucho. Fabiola no le había dicho nada, ni en cuenta tuve eso, al parecer le dio miedo perder su trabajo. Almorzamos y regresamos a trabajar, suponía que Britt seguía descansando, le mandé un mensaje y no respondió, comenzaba a preocuparme, miraba el anillo, tenía miedo de hacer algo mal y perder la oportunidad de estar junto a ella.
Las horas pasaban, alrededor de las cuatro de la tarde vi que Harry y Sam salieron apurados de la empresa, eso no me dio buena espina, algo malo pasaba. Le dije a Carla que averiguara con la secretaria de Harry el por qué de su partida. Al cabo de unos minutos Carla regresó, estaba preocupada. “Britt tuvo que ser hospitalizada, dicen que vomitó en varias oportunidades, luego se desmayó, estaba practicando” dijo eso y cómo alma que lleva el diablo salí de la empresa rumbo al hospital que me indicó Carla, Quinn me acompañaba. Apenas llegamos estaba Nicole abrazada a Harry, ambos preocupados, Ryan y Alexandra también estaban allí, Sam no dejaba de caminar de un lado a otro. Nos acercamos y Quinn preguntó que sabían de Britt, Harry nos dijo que ella ingresó al hospital inconsciente, no sabían nada más. Me senté a esperar, Quinn nos trajo café, me temblaba todo, no podía perderla ahora, seguro esto pasaba por el estrés, nada malo podía pasarle, no ahora. Nicole me dijo que toda la mañana durmió, Alexandra dijo que la notó pálida ni bien llegó al teatro y que en varias oportunidades vomitó, sin embargo seguía bailando, hasta que se desplomó en el suelo.
“¿Estará embarazada?” dijo Ryan y todos lo miramos en silencio, él notó que dijo algo grave y agregó “Es una posibilidad, los médicos nos dirán si es así o no, los síntomas coinciden…” miré a Quinn asustada, ella se acercó y me abrazó, Alexandra no decía nada, pero me miraba como diciendo: “¿Qué pasará si está embarazada?” Nicole y Harry miraban a Sam como consultándole si eso podría pasar, después de todo él fue el último hombre que estuvo con ella, él estaba en shock, nos miró a todos y dijo: “Britt y yo nos dimos un tiempo, pero si está embarazada, el bebé es mío”.
Se me partía el corazón en mil pedazos, quería matarlo, golpearlo hasta mandarlo al mismísimo infierno, ella no podía estar embarazada, no de él, no ahora. Una enfermera se acercó a nosotros e informó que Britt despertó, estaba en una sala, no todos podíamos pasar, nos turnaríamos para verla. Fuimos hasta la sala donde estaba, la miré desde la ventana, ella sonrió al verme, Nicole y Harry entraron, los tres se abrazaron, ella no dejaba de mirarme, el médico llegó pero entró en la sala, Sam con decisión entró, quería hacer lo mismo pero mejor esperaría. El médico hablaba mientras miraba unos papeles, una enfermera entró y le extrajo sangre a Britt, yo no entendía nada, Harry parecía estar ¿feliz?, Sam estaba preocupado al igual que Nicole; yo no entendía nada. El médico salió y le pregunté qué pasaba con Britt “Creemos que podría estar embarazada, le haremos unos análisis para confirmar o descartar esa posibilidad” dijo eso y miré a Britt, ella parecía confundida, estaba embarazada. Mis ilusiones se fueron desmoronando de a poco.
Quinn me dijo: “No es nada seguro San” no quise escuchar nada más, la miré y le dije “Vámonos de aquí” Miré a Britt con dolor y me fui.
Estaba en el departamento de Quinn llorando desconsoladamente, todo había terminado, Rachel no podía creer que esto estuviera pasando, me decían que nada era seguro pero el imbécil de Sam estaba muy seguro de eso, y Britt al parecer dudaba. Quería desaparecer de la faz de la tierra. Britt me llamaba pero no le contestaba, no quería saber nada de ella. Apagué mi celular.
Estaba acostada en la cama de Quinn, escuché que el celular de Rachel sonó, era Britt, charlaron un poco y Rachel entró en la habitación. “Britt quiere hablar contigo, San, habla con ella”; no lo dudé, tomé el celular de Rachel y dije:
- ¿Britt?
- ¿Por qué te fuiste San?
- Debes descansar.
- Quiero verte, necesitamos hablar, por favor ven, estoy sola, ven San.
No habían pasado ni quince minutos y yo ya estaba en el hospital, Britt le había pedido a sus padres que la dejasen sola con la excusa de pensar bien todo por lo que estaba pasando. Entré en la sala y la vi allí triste, mis lágrimas salieron sin previo aviso, ella extendió sus brazos y nos abrazamos. “San, ¿has estado llorando? No llores por favor…” No pude decirle nada, me aferré más a ella y con fuerza la abrazaba más a mí. Pensaba que ella podía tener el bebé y lo criaríamos juntas, que Sam fuera el padre no era un gran obstáculo, él tendría que entender que Britt y yo queríamos estar juntas, ahora, si Britt deseaba volver con Sam también era entendible, la que sobraba era yo y debería apartarme. Si ella quisiera que yo estuviese con ella amaría a ese bebé como si fuera mío, aceptaría todo con tal de estar junto a ella. La miré a los ojos y le dije:
- ¿Volverás con Sam? Él dice que es el papá del bebé.
- Santana, no estoy embarazada.
- Eso no lo sabes, hay que esperar los estudios.
- Pues no sé que tendré, pero créeme, no estoy embarazada, yo sé porque te lo digo.
- ¿Qué te hace estar tan segura?
- Soy mujer San, me daría cuenta si estoy embarazada. No lo estoy.
- Pero Sam…
- Que lo que diga Sam no te importe, mi papi también está emocionado, pero no San, no estoy embarazada.
La abracé, por algún motivo eso me tranquilizó, era rara nuestra relación, no éramos novias ni nada por el estilo pero nos celábamos mutuamente, no lo decíamos abiertamente pero cada una sabia que estábamos enamoradas, ella explicaba algo que no tendría que explicarme, yo tranquilizaba sus celos por más que no debía hacerlo, no éramos nada pero a la vez una era el complemento de la otra, no funcionábamos separadas. “¿Te quedarías conmigo esta noche?” me preguntó, la miré y le dije que sí. Ella se corrió a un costado de la cama y me pidió que me acomodara ahí, obedecí, la cama era lo suficientemente ancha como para albergarnos a las dos, nos tomamos de las manos y juntamos nuestras frentes, ella acariciaba mi rostro y yo besaba su frente, una enfermera entró y me asusté, me levanté de la cama avergonzada. La enfermera no dijo nada Britt sonreía, le tomó la temperatura y revisó su suero, todo estaba en orden. Antes de salir la enfermera dijo: “Pueden dormir juntas, eso sí, nada de sexo por favor”. Dijo eso y apagó la luz de la habitación, menos mal, porque estaba roja de la vergüenza, Britt reía. “Ven San, es hora de dormir” me acerqué a ella y volví a la cama, a pesar de la oscuridad podía notar los ojos celestes de ella, “Si tienes un bebé, quiero que tenga tus ojos” le dije, ella sonrió, me acarició y dijo: “No tendré un bebé ahora, pero en un futuro me encantaría, allí veremos si salen con ojos celestes o marrones” dijo eso y me estremecí. Desee hacerla mía allí mismo y embarazarla yo, pero no podía, ni embarazarla ni hacer nada, la enfermera podría volver y me sacarían del hospital. Acaricié el rostro de Britt y le di el famoso beso esquimal, ella no dejaba de sonreír. “Tus bebés serán hermosos” le dije, no podía creer que yo estuviera pensando en tener bebés con ella, o sea, no pensaba en uno, sino en varios. Ella se dio la vuelta con cuidado e hizo que la abrazara. Estábamos “haciendo cucharita”, eso era demasiado excitante pero adorable a la vez, mi brazo se posó en su cintura y mi mano acarició su abdomen, ella agarró mi mano y entrelazó sus dedos con los míos. “Te quiero” dijo ella, besé su cuello y le dije: “Yo también Britt-Britt”.
Desperté a eso de las siete de la mañana, Britt dormía, algo había en la cama que me producía dolor, metí la mano en el bolsillo de la campera que tenía puesta y vi que estaba el estuche con el anillo que compré para ella. Lo tenía en la mano, lo miré un poco y volví a dormirme. Al cabo de un rato sentí que Britt se movía, abrí los ojos y ella estaba viéndome con esos bellísimos ojos celestes, “Buen día San” dijo dándome un beso en la mejilla, sonreí y dije: “Buen día Britt-Britt” ella sonrió y la besé en la frente. No me fijé la hora pero la puerta se abrió y entró Nicole. Me levanté asustada de la cama, no me di cuenta y el estuche con el anillo estaba en la cama, Britt lo agarró pero no dijo nada.
- Santana ¿dormiste aquí? -preguntó Nicole.
- Emmm… sí, le hice compañía a Britt.
- Si ya veo, Harry vino conmigo, se quedó charlando con el médico, Sam también vino hija, ambos están ansiosos por el resultado de los estudios.
Miré a Britt, ella estaba tranquila, eran las ocho, debía ir a la empresa, me hubiera gustado quedarme pero ¿con qué excusa lo haría? Volvería al mediodía, a visitarla. Nicole dijo que saldría a ver a Harry. Me quedé a solas con Britt, ella abrió el estuche y vio el anillo, su rostro demostraba la sorpresa, sin dejar de mirarlo dijo:
- Es hermoso, ¿quién te lo dio?
- Lo compré, es para alguien especial, es un regalo.
- Oh… es hermoso, toma -me dijo entregando el estuche.
Vi que estaba un poco desilusionada, era para ella el anillo pero no se lo daría hasta que pasara todo esto. Guardé el anillo y me acerqué a ella, “Debo irme, vendré a la hora del almuerzo, avísame cualquier cosa que necesites”, la besé en la frente. Salí sin que Harry o Sam me vieran. Me sentía como una prófuga, pero era feliz, Britt me hacía feliz.
Una vez en la empresa me dispuse a hablar con Quinn, le conté todo lo que pasó, incluyendo lo del anillo, ella miró el anillo y quedó enamorada de él.
- San, es hermoso, pero más hermoso es el detalle, realmente la quieres…
- Muchísimo Quinn, sería capaz de criar junto a ella al bebé.
- Pero ella asegura que no está embarazada, por algo será San, igual, si piensas así sólo es una muestra más de tu amor.
- La quiero Quinn, no soporto estar lejos de ella.
- Tranquila, ella te quiere, pronto estarán juntas. ¿Cómo se lo dirás a tu abuelo?
- Mientras esté con ella eso es lo de menos Quinn.
Realmente sólo me importaba Britt, la quería con locura. Alrededor de las diez de la mañana Harry llegaba a la empresa acompañado de Sam, fui a hablar con él.
- Harry, ¿cómo está Britt?
- Santana, mi princesa está bien, está un poco anémica, eso es producto de tanto esfuerzo, fue una falsa alarma lo del embarazo, estaba emocionado, pensé que sería abuelo…
- Oh… quizás no sea el momento adecuado Harry.
- Es verdad, pero mi Britt me dijo que me haría abuelo, no ahora pero seré abuelo en el futuro.
Sonreí, él también, el que no estaba de humor era Sam. Lo entendía, pero eso no significaba que renunciaría a Britt, ahora más que nunca ella estaba libre para mí.
Claru!***** - Mensajes : 209
Fecha de inscripción : 22/09/2012
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
hola,...
me encanta san tan dulce, por todo lo que dice y hace por britt,...
me gusta san que sacrificaría su felicidad por ver feliz a britt y que cumpla sus sueños de bailarina, y se quede con otro u otra...
me divertí cuando se daban celos jajajaja pero me ponía mal por que lloraba britt,...
definitivamente san esta recontar enamorada de britt para querer cuidar al "bebe" que iba a tener britt!!!,.... quiero ver cunado le entregue el anillo a britt,.. y sobre todo como va a reaccionar el abuelo de san cuando se entere que san es lesbiana,....?????
me encanta san tan dulce, por todo lo que dice y hace por britt,...
me gusta san que sacrificaría su felicidad por ver feliz a britt y que cumpla sus sueños de bailarina, y se quede con otro u otra...
me divertí cuando se daban celos jajajaja pero me ponía mal por que lloraba britt,...
definitivamente san esta recontar enamorada de britt para querer cuidar al "bebe" que iba a tener britt!!!,.... quiero ver cunado le entregue el anillo a britt,.. y sobre todo como va a reaccionar el abuelo de san cuando se entere que san es lesbiana,....?????
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
hola!!!
te juro que amo este fic estan estan como decirlo mmm solo que me dan ganas de enamorarme. ..
la relacion me encanta me encanta como es san con britt como de apoco se estan acercando. .
aaaa ame los capituloss!!!
saludos!!! feliz dia de la mujer!!!
te juro que amo este fic estan estan como decirlo mmm solo que me dan ganas de enamorarme. ..
la relacion me encanta me encanta como es san con britt como de apoco se estan acercando. .
aaaa ame los capituloss!!!
saludos!!! feliz dia de la mujer!!!
raxel_vale****** - Mensajes : 377
Fecha de inscripción : 24/08/2013
Edad : 34
Re: FanFic BRITTANA La verdad sobre el amor
ame los cap graciasss!!! amo como san empieza a dejar su papel de chica dura y empieza a mostrar su amor a britt esa fabiola, marcia y alexandra asi en fila las voy a matar que ni se les ocurra intervenir entre mis chicas!! y ya san es hora que le cuentes a tu abuelo al menos lo de tu sexualidad! besotes Felizzz diaaaaa!!
tatymm-*- - Mensajes : 2406
Fecha de inscripción : 20/08/2012
Edad : 34
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