|
Estreno Glee 5x17
"Opening Night" en:
"Opening Night" en:
Últimos temas
Los posteadores más activos de la semana
No hay usuarios |
Publicidad
Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
+13
Dolomiti
micky morales
Anddy Rivera Morris
3:)
Ignarriagada
Stariv
iFannyGleek
naty_LOVE_GLEE
Claru!
Heya Morrivera
atercio
Linda23
VictoriaRivera
17 participantes
Página 5 de 11.
Página 5 de 11. • 1, 2, 3, 4, 5, 6 ... 9, 10, 11
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
micky morales escribió:yo tambien pienso lo mismo, no ha sido su culpa, no pudo avisarle a brittany pq cuando llego al lugar fue que se dio cuenta que era puck, britt esta siendo injusta asi que espero que rectifique, hasta pronto!
Gracias por comentar y habrá sorpresas pronto
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
3:) escribió:holap,...
me gusto la maratón,..
es entendible que britt reaccione de esa manera era punk o ella de cierta manera nop!!!,...
es ver al 100% e trabajo de san aunque le duela es así!!!
a mi me parece bien que agregues personajes nuevos es divertido ver como reaccionan los personajes!!!!!
nos vemos!!!
Gracias siempre intento subir como mínimo 3 capítulos cuando se puede subo de a 5
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Capítulo 13
Brittany
Hoy era el día de San Valentín. Y sabía que no había manera en que fuera capaz de dejar a Rachel para salir en una cita con Santana . Puck había planeado una noche romántica y estuvo burlándose de ella con pequeñas notas por semanas que dejaban pistas sobre lo que estarían haciendo. Entré en el dormitorio de Rachel, y ella tenía todas las notas sobre su cama en un círculo a su alrededor. El oso que le había dado el año pasado estaba asentado en su regazo y el collar que había guardado tanto se encontraba en su mano. Frotaba el afable diamante mientras miraba las notas frente a ella.
Cuando cerré la puerta detrás de mí, su cabeza se disparó en alto y una pequeña sonrisa curvó sus labios. —Hola, no te esperaba aquí hoy.
¿No tienes una cita?
Negué con la cabeza y me acerqué para sentarme en la esquina de la cama, cuidadosa de no mover o sentarme en uno de esos pequeños pedazos de papel que ahora eran tesoros.
—No, hoy estoy aquí contigo. Santana puede esperar. Creo que me necesitas más que ella en estos momentos.
La sonrisa de Rachel tambaleó y apretó el oso en su regazo más firme. —He releído todas estas pistas un millón de veces y no puedo entenderlo. Estuvo planeándolo durante meses. Uno pensaría que... —su voz se quebró y respiró hondo—, uno pensaría que debí de haber descubierto cual era la sorpresa para ahora. Pero Puck era tan bueno para guardar secretos. No quería que yo lo averiguara. Quería sorprenderme.
Tenía razón, por supuesto. Puck amaba burlarse de ella. Se había burlado de ella, incluso cuando éramos niños.
Yo siempre había sido la etiquetada como aquella que hacía las cosas divertidas y peligrosas, y Rachel se parecía a una muñequita vestida de color rosa, mirándonos con desaprobación. Él había estado enamorado de ella en aquel entonces. Era algo que él no entendía, pero incluso cuando niño quería tocarla. La trataba como a una princesa de Hadas. Algo frágil y precioso. Siempre puse mis ojos en blanco con disgusto, pero recordándolos ahora de esa manera, eso me hizo sonreír.
—Voy a estar bien, Brittany. Has pasado todos los días conmigo desde, desde entonces —Se interrumpió y tocó la imagen asentada a la derecha de su cama. Era Puck en su uniforme de baloncesto, sonriendo brillantemente con su trofeo de MVP del juego del año pasado, del campeonato estatal.
—Ve con Santana . Diviértete. Por mí. No podía divertirme con Santana sabiendo que mi mejor amiga se acurrucaba en su cama con las notas de su novio muerto mientras lloraba a solas. Tenía que sacarla de la habitación.
—Tengo una idea mejor. Santana está ocupada esta noche. Le he liberado de nuestros planes y decidió que alcanzaría el concierto de Atlanta que Cold Soul está teniendo esta noche. Originalmente, ella les dijo que no podía asistir, pero ahora ya se dirige hasta allá. —Bueno así que mentí, pero ella nunca lo sabría—. Entonces, tú y yo vamos a ir a hornear galletas de chocolate y luego ver la primera temporada entera de The Vampire Diaries. —No era una fanática de Vampire Diaries, pero Rachel era adicta a la serie. Tenía todas las temporadas en DVD y en iTunes.
Podía verla a dondequiera que ella estuviera. Como ya he dicho, era adicta.
Rachel apoyó la barbilla en la cabeza del oso y miró por encima, hacia mí, a través de sus largas pestañas que se rizaban a la perfección sin ningún tipo de ayuda en absoluto. —Está bien. Puedo hacer eso. — respondió.
—Por supuesto que sí. Ahora levántate y vámonos a asaltar la despensa de tu abuela por chispas de chocolate. Tal vez tiene algunas de esas chispas de mantequilla de maní todavía. Podríamos hacer galletas de mantequilla de maní también.
Rachel colocó al oso hacia abajo y puso el adorable collar sobre la mesa, junto a las fotografías de Puck.
Luego, rigurosamente reunió cada nota dispersa alrededor de su cama, contándolas para que no se perdiera ninguna y las puso entonces al lado del collar. Una vez que hubo terminado se volvió hacia mí.
—Vamos a cocinar galletas. No he comido en días.
Santana
El olor de moho, tierra y el mal encontró mi nariz cuando entré en la choza de madera vieja. El exterior podrido de la casa me hizo difícil de creer que no hubiera cedido ante algo tan simple como una torrencial lluvia. Las paredes en el interior no eran mucho mejor de lo que espere ver.
Estantes llenos de frascos de artículos destinados para hechizos y brebajes ridículos con la intención de curar el cuerpo, causar enfermedad, eliminar los recuerdos y un sinfín de otros fines cubrían la mayor parte de las paredes. Las personas valientes como para aventurarse en esta parte del pantano y caminar a través de esta puerta estaban de los más desesperados por una respuesta. La mayoría de las personas que sabían del verdadero poder del vudú se mantenían alejadas. No era un mal necesario para los seres humanos meterse en estos problemas. Podría poseerte, robarte el alma si se los permitías.
La anciana que había venido a ver estaba sentada junto al fuego de la hoguera y cubierta por una colcha de ganchillo. La desvencijada mecedora dejó de moverse al momento en que entré en la habitación. Ella me sentía. Incluso alguien que ha vivido una vida controlada por la unión profana del vudú sabía cuándo la Muerte estaba cerca.
Ella me esperaba en breve, pero no era su tiempo todavía.
Regresaría por ella a su tiempo y su alma sería destinada al Infierno por la eternidad. De eso estoy segura. Un médico del vudú nunca obtenía otra vida. Una vez que vendían su alma, ese era el resultado. No hay vuelta atrás. La taza de lata en sus manos se asentaba a su lado en una pequeña mesa hecha a mano. Pude ver el temblor de sus brazos mientras la colocaba con cuidado.
—Mi carne de gallina dice tú estar aquí. Estoy lista para encarar mis decisiones. —La voz de la anciana tembló mientras se dirigía a mí. Me aparecí delante de ella, apoyándome en el horno de carbón negro caliente.
—Ah, sin embargo, yo aún no vengo por tu alma —dije arrastrando las palabras en el dialecto que sabía que la anciana entendería fácilmente.
Frunciendo el ceño, me miró, la parte blanca de sus ojos sobresaliendo en contra de la oscuridad de su piel.
—¿Crees que yo tonta?
Riendo, negué con la cabeza. —Muy bien, podrías entenderlo con otras palabras, no estoy aquí por ti todavía. No me iré antes de que obtenga lo que vine a buscar.
—¿Qué puede ser? Yo no morir.
Asentí con la cabeza. —No morirás, ese no es el por qué estoy aquí.
Ella se movió en su silla y trató sin éxito de sentarse recto. Su espalda encorvada hacia delante tan mal hizo que su intento fuera imposible.
—Dime qué quieres y no des vueltas con ello. A mí no gustar que estés aquí.
No, estoy segura de que ella no me quería en su casa. Yo era el final de su vida. La única vida que ella conseguiría. Pero no estoy aquí para apaciguar el miedo de una anciana. Estoy aquí para saber qué es exactamente lo que le hizo a Brittany.
—Dime acerca de la chica a la cual le salvaste la vida…
La anciana comenzó a negar con la cabeza y una mirada de horror en sus ojos.
—No, no puedo hacerlo. Un espíritu salvó a esa chica, es ruin de lo peor.
—Sé que Ghede la salvó. Eso no te he preguntado. ¿Qué tiene que hacerse para que él termine de maldecir su alma?
Sus manos nudosas lucharon nerviosamente con el afgano en su regazo. Ghede era el señor del espíritu vudú de los muertos, el padre de Sam. En su religión era el fin de todo. A pesar de que yo delante de ella, no se enfrentaría a mí por toda la eternidad. Yo simplemente iba a remover su alma.
Ghede sería el señor de ella mientras enfrentara a su eternidad.
—Cualquier cosa que Ghede haga, cuesta. Eso sabía mamá que yo hacía cuando me obligó a salvar esa deuda.
—Entonces, dime qué puede hacerse para cambiarlo. —Exigí, cada vez más cansada de que esquivara la pregunta.
Con un profundo suspiro, la mujer alzó sus ojos vidriosos para encontrar los míos. —Un alma por un alma es lo que cuesta. Nada menos puedes ofrecer. Tal vez cueste más. Ghede quiere a esa chica. Saliendo de la casa en ruinas, tomé una profunda bocanada de aire. Aunque no era exactamente aire fresco... había un olor húmedo rodeando la casa del médico vudú. Con una sonrisa ante la ironía, miré por encima del hombro una vez más antes marcharme para ir a convencer a Brittany de que necesitaba hacerle frente a la única persona que yo sabía entendería las consecuencias de las decisiones de ella. Antes de que Ghede decidiera comenzar a exigir su pago.
___________________________________________________________________________
Que les parece lo que ha pasado después de todo lo de Puck es hora de seguir......
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
CAPITULO 14
Brittany
Rachel se había dormido después de cuatro episodios. Yo no podía decir que no me sentía aliviada. Si tenía que sentarme a ver una escena más de Stefan y Elena iba a gritar. La angustia era demasiado para mí en este momento. Apagué la televisión y saqué una manta que la madre de
Rachel mantenía enrollada en el centro de entretenimiento y la extendí sobre la silueta dormida de Rachel.
Habíamos dejado un desastre en la cocina y aunque estoy segura de que su madre estaría encantada de que Rachel hubiera cocinado y comido algunas galletas, pero no quería dejar el lío para que ella lo limpiara.
Recogiendo el plato grande con las galletas y los dos vasos de leche restantes, me dirigí a la cocina. Una vez que entré en la puerta vi a Sam sentado con los codos apoyados sobre la mesa y la mirada fija en mí, casi grito y dejo caer todo. Me las arreglé para tragarme el grito de sobresalto en la garganta y evité hacer un lío aún mayor en la cocina.
—¿Qué estás haciendo aquí? —pregunté, tratando de mantener la calma a medida que me acercaba al fregadero y coloqué los vasos en el agua jabonosa para luego colocar el plato de galletas en la barra.
—Esperar hasta que ella se quedara dormida para poder verte. Es el Día de San Valentín, sabes. He estado esperando años para pasarlo contigo y hacer que realmente lo recuerdes. Este iba a ser mi año. Ahora estarías conmigo eternamente si la Muerte no hubiera perdido la cabeza una vez que llegó a darte un vistazo.
Puse una mano en mi cadera y lo miré. No me encontraba de humor para esto. No ahora. No esta semana especialmente.
—Escucha, Sam, sabes lo que he pasado esta semana. ¿No puedes respetar eso y sólo retroceder? —repliqué.
Una mirada de ternura brilló en sus ojos y bajó la mirada hacia sus manos todavía apoyadas en la mesa frente a él. —Siento tu pérdida, Brittany. Pero si Snix no lo hubiera jodido con tu destino nunca hubieras experimentado el dolor de perder a Puck. Los dos tenían que haber sido las tragedias que afectaran a nuestra pequeña ciudad en este año escolar.
Mi mente inmediatamente fue a Rachel. Ella nos hubiera perdido a los dos. Oh, Dios, eso la habría devastado por completo. Se habría derrumbado. Pero Santana detuvo eso. Pudo no haber sido capaz de detener el destino de Puck, pero ella cambió el mío. Yo estaría aquí para ayudar a sanar a Rachel, e iba a estar bien. Ella lo estaría.
—Bueno, entonces, es algo bueno que Santana decidera que yo valía la pena salvar. Rachel nunca podría haber manejado perder a los dos con únicamente meses de diferencia.
Sam suspiró y se recostó en la silla, dejando caer las manos a su regazo. —¿Siempre piensas en los demás en primer lugar, Brittany? Su pregunta me sorprendió. Por supuesto que no. Sólo una persona desinteresada pensaría en los demás primero, y yo no era desinteresada.
Cuando yo quería algo, iba tras ello y jodía a quien se interpusiera en mi camino. —Sólo pongo a quienes amor primero, pero también lo hacen la mayoría de las personas.
Sam negó con la cabeza. —No, no lo hacen. La mayoría de los humanos se ponen antes incluso de aquellos a quienes más aman. Es su naturaleza.
Esta conversación comenzaba a volverse extraña. Quería que Sam se fuera, para que así pudiera limpiar la cocina e ir a la cama.
—Sólo di lo que viniste a decir y vete, por favor. No quiero hablar contigo.
—Te dije que quería pasar el Día de San Valentín contigo este año.
Incluso traje regalos. —Resplandeció su sonrisa torcida y de la nada sacó una docena de rosas rojas y negras junto con una muñeca de vudú real con un collar de plata alrededor de su cuello pequeño. El pendiente que colgaba de ella era un rubí cortado en forma de una luna.
Alcé los ojos para mirarlo, no estando segura qué pensar de este regalo. —¿Me conseguiste una muñeca de vudú y rosas negras? —Le pregunté incrédula.
Sam se echó a reír y se recostó en su silla. —Pensé que te haría reír.
El collar es el verdadero regalo. Y las rosas también. A mí me gustan las rosas negras. Me recuerdan a casa. Retrocediendo un poco hasta que la barra entera estuvo entre los regalos de miedo muy extraños y yo, lo vi acercarse. No quería que viniera a ningún lugar cerca de mí con ese collar. Sabía que el vudú era mayor en talismanes y si eso era un talismán, no lo quería cerca de mí. Ningún espíritu me iba a tener.
La sonrisa divertida de Sam cayó en un ceño fruncido. —No crees que sea divertido, ¿verdad? —La muñeca de vudú y las rosas negras se desvanecieron al instante y sólo una docena de rosas rojas y rosadas se mantuvieron junto con el collar que me aterrorizaba.
—Um, no, es el collar lo que quiero que alejes de mí —Expliqué sin apartar mis ojos de él, mientras reposaba sin causar daño en su mano.
—¿El collar? ¿Tienes miedo del collar? ¿Por qué?
—Porque no quiero ser poseída por un espíritu maligno —Escupí, retrocediendo un poco más. Me preguntaba si podría gritar por Quinnn y si ella me escucharía. Pero entonces correría el riesgo de despertar a Rachel y esto no era algo que necesitaba ser testigo.
La comprensión cayó en cuenta y Sam se echó a reír de nuevo. Esto no era gracioso. ¿Por qué tenía que ser tan gracioso todo el tiempo?
—¿Crees que este collar es un talismán?
—Sí, no soy estúpida, Sam. Me la paso con la Muerte, sabes.
Sam suspiró y colocó el collar sobre la mesa. —Nunca te haría daño. Ya te he dicho eso, pero te niegas a creerme. —No aparté los ojos de él mientras que él permanecía allí, extendiendo el collar como si fuera una pieza preciosa, lo cual sólo me convenció más que estaba lleno de toda clase de mal. Una vez que lo expuso en la mesa a su gusto, levantó los ojos a los míos—. Sabes, Brittany, el miedo puede dar vuelta al amor.
Me quedé mirando el collar sobre la mesa sin saber qué hacer con él. Diablos, hasta tenía miedo de tocar las rosas que había dejado atrás. ¿Podría el tomarlas y tirarlas ser peligroso? Tal vez debería dejarlas allí e ir a buscar a Quinnn, o mejor aún, a Santana .
Acercándome a la puerta, me asomé a la sala para ver a Rachel aún profundamente dormida. Bien. Tenía tiempo de hacer algo con estos regalos antes de que ella se despertara.
Santana
Su voz me hizo removerme en mi lugar al momento en que me llamó por mi nombre. Al instante, estuve de pie frente a su casa, preparándome para el enfrentamiento que iba a tener con su madre cuando su voz me llegó.
Se encontraba en la casa de Rachel, en el pórtico trasero cuando la alcancé. Un grito ahogado de sorpresa se le escapó y luego sonrió dejando escapar un suspiro que debió haber estado conteniendo. —Oh, eso fue rápido. Gracias a Dios —dijo en un apuro y corrió hacia mí, rodeándome con sus brazos alrededor de mi cuello.
Hasta ahora esto era bueno. Hubiera estado aquí mucho antes si hubiera sabido que este era el tipo de recepción que tendría. Empujándola con más fuerza contra mi pecho, inhalé el aroma de su champú y la besé en la sien. —Mmmm, esto es bueno —dije en su cabeza. Ella suspiró en mis brazos y luego se apartó lo suficiente como para ver mi rostro.
—Me temo que todo va cuesta abajo desde aquí —Explicó.
No es lo que yo quería oír. Esperaba que el próximo movimiento fuera ella pidiéndome que la besara y luego tal vez llevarla a su casa para que yo pudiera acunarme en la cama con ella.
—Sam estuvo aquí —Comenzó, y yo me tensé, apartando mi atención en ella para dejar que mis sentidos escanearan el área por espíritus. Pero no sentí nada. Salvo una pequeña helada en algún lugar cercano. No fue lo suficientemente fuerte para ser un espíritu real, pero no era bueno tampoco. Sosteniendo más de cerca de Brittany, rebusqué aún más la presencia no deseada y noté que algo se encontraba dentro de la casa.
—¿Quién está dentro? —pregunté poniendo a Brittany detrás de mí y dirigiéndome a la puerta de atrás.
—¿Qué? No, se ha ido. Rachel está ahí durmiendo. —Brittany se apresuró para mantenerse detrás de mí, pero ante la mención de Rachel estando sola cerré la distancia más rápido de lo que un humano podría viajar posiblemente, y abrí la puerta para encontrar la esencia palpitante oscura tumbada en la mesa de la cocina, en la forma de una luna. La piedra roja casi palpitaba por tanta maldad. Rosas rojas y rosas yacían a su lado, por lo que miré a los artículos tratando de averiguar qué era lo que veía.
—Es por esto que te llamé —Resopló Brittany después, finalmente, llegando al interior.
—¿El collar? —pregunté.
—Sí, Sam lo dejó y me da miedo tocarlo.
Mis ojos se dirigieron de nuevo a las rosas. ¿Sam trajo esos también?
—No es un collar. Tiene parte de un espíritu vudú. No todo el ser, lo justo para que cuando estés cerca de ese espíritu sientas una adhesión de él.
Escuché el silbido de su respiración mientras Brittany inhalaba.
—Sabía que era algo así —murmuró con rabia. Ahí estaba mi chica y su coraje. El príncipe del vudú la había cabreado. Si no estuviera tan molesto por esas malditas rosas, me reiría.
—¿De dónde vinieron las rosas?
—De Sam, ¿Por qué? ¿Están llenas de mierda maligna también?
Así que Sam trajo las rosas. Espera. Había algo que tenía que recordar acerca de hoy. Las cajas de chocolate en forma de corazón que había visto en todas partes hoy mientras recuperaba las almas.
Era el día de San Valentín. Y me había olvidado. Pues bien, demonios.
—No, sólo son rosas —Le contesté. No señalé que eran hermosas rosas. De la clase que sólo la magia puede producir. Probablemente nunca mueran.
Serían eternamente bellas si ella las colocara en un florero en su habitación. Y entonces yo recordaría la terrible novia que soy cada vez que las viera. ¿Por qué ese espíritu vudú es mejor en esto que yo?
—Aun así no las quiero. ¿Puedo quemarlas?
Mi corazón no se sentía tan pesado al escuchar su disgusto.
Chasqueé mis dedos y las rosas se incendiaron.
—¡Santana ! ¿Qué estás haciendo? Vas a quemar la casa o por lo menos la mesa —dijo Brittany, corriendo al fregadero y miré hacia atrás para verla llenando un cántaro de agua. Mi chica no creyó que protegería la mesa. Chasqueé mis dedos para hacerlo y el fuego se extinguió sin dejar nada atrás. Ni siquiera un pequeño montón de cenizas.
El agua se cerró detrás de mí y oí a Brittany dejar escapar una pequeña risa. —Supongo que vi el fuego y no pensé bien las cosas.
—Fue lindo —Le contesté y ella se sonrojó adorablemente.
—¿Qué pasa con el collar? —preguntó con la mirada vacilante en la piedra maligna sobre la mesa.
—Puedo deshacerme de eso con la misma facilidad, si prometes no correr al grifo por una jarra de agua en esta ocasión —Bromeé.
Brittany se rio y asintió con la cabeza. —Creo que puedo refrenarme.
Ni siquiera me molesté en chasquear esta vez. En cambio, me quedé mirándolo mientras las llamas entraron en erupción y en cuestión de segundos nada quedó.
Una vez que ya no quedaba nada atrás de Sam, volví mi atención completa a Brittany.
—Lamento perderme el día de San Valentín.
Ella me sonrió. —Está bien. Pasé la mayor parte del día con Rachel. Comimos galletas y miramos The Vampire Diaries. Metiendo un mechón de cabello tras su oreja, recordé que tenía algo para ella. Había estado esperando el momento perfecto para enseñárselo y no podía pensar en un mejor momento que ahora. —Ven afuera conmigo, tengo algo para ti —Le susurré antes inclinarme hacia abajo y presionar un casto beso en sus labios.
—Está bien —Su voz era suave y tenue. Me gustó saber que todavía le afectaba, incluso después de todo lo que le había hecho pasar.
Sosteniendo su mano, la lleve afuera y bajamos las escaleras del porche trasero hasta que estuvimos en el jardín de flores ubicado en el rincón más alejado del patio de Rachel. Asentí con la cabeza a uno de los bancos de piedra ornamentados que se alineaban en el jardín y luego ella llego a mis espaldas con una sonrisa. La suave textura crujiente del papel de regalo que había elegido llenó mis manos y se lo mostré viendo como sus ojos se iluminan al ver el paquete de color azul pálido tornasolado.
—Bonito truco —Bromeó ella, sonriendo hacia mí.
Me arrodillé frente a ella y puse la caja en sus manos. —Sí, bueno, soy buena para unos cuantos shows de entretenimiento de vez en cuando.
Mordiéndose el labio inferior con ansiedad lo tomó. —Casi me da lástima romper el papel. Es hermoso.
—Te voy a comprar un rollo entero, Brittany. Sólo ábrelo.
Asintiendo, desgarró el costado y el papel quedó en el olvido, a medida que cayó al suelo. La caja de raso blanco queda asentada en su regazo mientras poco a poco abre la tapa. No estoy segura si recordaría exactamente lo que era, pero pensé en esperar y ver si descubría esto por su cuenta.
Brittany levantó el broche de oro pequeño de la caja.
El destello de emoción en su rostro me dijo que buscaba a través de los recuerdos, buscando donde había visto el broche en su mano. Había estado guardándolo por más de quince años. Reverentemente tocó las piedras de cristal de color rosa que decoraban el corazón en forma de filigrana.
—La abuela me lo dio. Yo me encontraba enferma en el hospital, y ella había ido a quedarse con mamá en el hotel cercano. Se turnaban para estar conmigo. Entonces, la abuela tuvo que irse a su casa porque su corazón la molestaba y su médico la quería en casa bajo observación.
El día que se fue me trajo este broche. Lloró tanto cuando me dijo que lo sostuviera cerca de mi corazón siempre. Así yo siempre sabría que ella me amaba.
Brittany levantó la mirada asombrada a la mía. —Entonces, cuando... cuando...
—Se calló sacudiendo la cabeza en frustración. El recuerdo estaba allí. Sabía que lo estaba y quería que ella lo recordara sin mi ayuda. Era algo que yo había esperado pacientemente a que recuerde desde que había descubierto exactamente quién era yo.
Sus ojos verdes expresivos mostraron emociones tan diferentes. Finalmente, abrió la boca y susurró—: Ay dios mío —Y supe que había recordado.
—Entonces tú, Santana , tú viniste a hablar conmigo. Para decirme que me iba a morir, pero que obtendría otra vida. Mi cuerpo estaba enfermo.
Que cuando regresaras me enviaras a otro lugar y volvería de nuevo.
—Ay, Dios mío —Brittany se detuvo y respiró hondo.
—Yo te di este broche. Te dije que lo quería llevar conmigo. Dijiste que podrías arreglarlo y lo metí en tu bolsillo... pero…
—Pero nunca me volviste a ver. Porque que tu alma fue borrada de la lista. La única razón por la que me acordé de ti fue a causa de este broche. Sabía que había sido un alma que se había salvado. A veces eso sucede. Es raro, pero a veces el Creador cambia de opinión. Pensé que te había pasado eso. Así que me aferré a ese broche que me dio una niña que quería tomar algo de esta vida a su siguiente. Pensé que una vez que tu nombre apareciera en los libros de nuevo, me aseguraría de que obtuvieras tu broche justo como lo solicitaste. Sin embargo, tu nombre apareció mucho antes de lo que esperaba. Eso me intrigó. No podía entender por qué el Creador detendría tu muerte como una niña para tomarla sólo unos pocos años más tarde al borde de la edad adulta. Por lo tanto, vine a verte. Para ver qué pasa con esta alma que era tan única.
Por qué había roto todos los moldes a los que me había acostumbrado a lo largo de mi existencia.
La mano de Brittany cubrió su boca cuando un pequeño sollozo escapó. No tenía la intención de hacerla llorar. Sólo había querido darle algo que una vez fue muy querido.
—Oh, Santana —Exclamó echándose en mis brazos—. No puedo creer que no te recuerde.
¿Lloraba porque olvido que conoció a la Muerte cuando era niña?
Sosteniéndola en mis brazos, me quedé sin palabras. ¿Cómo la consolaba por algo como esto?
—Este es el regalo más precioso y perfecto que jamás haya recibido una persona. Me diste un recuerdo que recordaré para siempre. Me diste algo de mi abuela que yo no sabía que tenía. Y lo guardaste y lo trajiste de nuevo hasta mí. Esto me trajo hasta ti.
Sentí una humedad en mis ojos y parpadeé confundida por la extraña sensación. Un hilillo de agua corrió por mi mejilla. Miré en la oscuridad mientras sostenía en mis brazos a Brittany con asombro.
La Muerte acababa de derramar una lágrima
____________________________________________________________________________
Los recuerdos serán los mas importantes siempre ???
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
CAPITULO 15
Brittany
La pequeña margarita amarilla que saqué del ramo de mamá que su novio le trajo parecía un poco triste sin todos sus pétalos. Hice girar el tallo entre mis dedos y le fruncí el ceño.
Flores estúpidas. Dulces estúpidos. Estúpidos conejitos de peluche con su estúpida piel morada. Ah, y globos estúpidos, estúpidos en forma de corazón.
Todo era una estupidez.
Arroje el tallo de mi mano al arroyo detrás de mi casa.
La margarita dañada flotó por un momento, mientras la rápida corriente se la llevaba hasta que vi que se hundía lentamente en la superficie barrosa. Se lo tenía merecido por ser estúpida, pensé en una rabieta. Cruzando mis brazos vacíos, fulminé con la mirada el agua a medida que pasaba corriendo. No tenía nada más que hacer. Así que acabe estando aquí y contando todas las cosas estúpidas acerca de hoy.
—¿No tienes un buen día? —Preguntó una voz familiar detrás de mí. Me di la vuelta y vi a un muchacho rubio con amistosos ojos azules, sonriéndome. Sentí que lo conocía, pero no pude averiguar de dónde lo había visto antes.
Tal vez jugó en uno de los otros equipos que habían jugado béisbol este año. Es difícil de reconocer a las personas cuando no tienen su gorra de béisbol y uniforme. Fuera de allí, todos tienen el mismo aspecto. Empecé a responder hasta que noté el perro de peluche blanco y esponjoso en su mano. El animal de peluche tenía un corazón rojo lleno de dulces de chocolate en sus patas.
Incluso él recibió un estúpido presente de San Valentín. Decidí que no quería hablar con él y me di la vuelta para mirar hacia el agua. Tal vez se daría cuenta de que yo era grosera y se iría lejos.
—¿Tienes algo en contra de los animales de peluche y chocolates? —
Preguntó en un tono divertido. No pensaba que fuera gracioso. Ni un poquito. Chico estúpido con su estúpido presente de San Valentín. De una chica estúpida.
—Sí, ¿Qué pasa si lo tengo? —Le respondí en un tono agrio.
—Bueno, parece cómico que tengas problemas con esas cosas. Quiero decir hay un montón de cosas que no le gustan a las personas. Serpientes, por ejemplo, o arañas. —Se estremeció haciéndome poner los ojos en blanco.
—¿Me puede disgustar lo que quiera, no es así? Es un país libre.
Se aclaró la garganta y sonaba sospechosamente como si estuviera ocultando una sonrisa. Tenía muchas ganas de pegarle y ver si pensaba que era gracioso. Porque sabía que yo podría lanzar un gancho derecho mejor que la mayoría de los niños de mi calle.
No, él no se reiría de todo después de que lo golpeara.
—Creo que puedes. Tengo curiosidad de por qué odias estas cosas. A la mayoría de las niñas les gustan. —El hecho de que ya no sonara bromista, sino en realidad confundido, lo salvó de mi puño.
—¿Quieres saber por qué? —Le pregunté, cambiando mi mirada furiosa a su dirección—. Te diré por qué. —Fruncí el ceño, tragando el nudo en la garganta. Odiaba que esto realmente me diera ganas de llorar. Las lágrimas eran para cobardes estúpidos.
—Estoy escuchando. —El chico me convenció.
—Porque eso es lo único de lo que todo el mundo habla hoy. Todos andan por allí con sus corazones de chocolate y osos de peluche y conejitos, incluso estúpidos, mientras caminan por los pasillos. Globos atados a las sillas con esas cursis líneas estúpidas “Te amo” en ellos.
Quiero decir, realmente, tenemos nueve. No amamos a nadie todavía. Por lo menos no de ESA manera. Y para empeorar las cosas, el estúpido trasero de Jeff le dio a Rachel, mi mejor amiga, un conejo de color púrpura con un gran globo unido y una gran caja de chocolates. ¿Y ella compartió un pedazo de su dulce conmigo? ¡NO! No lo hizo. Dijo que no sería romántico regalar un dulce de su San Valentín. Luego, cuando le pedí sentir la suave piel de su conejo negó con la cabeza y se acurrucó contra ella como si tuviera una enfermedad que le pudiera contagiar. ¿Qué tan absurdo es eso? ¿Eh? Ciertamente ridículo. Luego, vuelvo a casa y mi mamá aún tiene un gran ramo de flores y una caja con forma de corazón sobre la mesa de parte de su novio. Estaba segura que conseguiría un caramelo entonces.
¡PERO NO! La caja se encontraba vacía. Se había comido todo. ¿Por qué mantiene una estúpida caja vacía?
Dejé mi diatriba furiosa el tiempo suficiente para mirar sobre mi hombro al niño a través de mi cabello y ver si él me miraba como a un bebé llorón. Pero él tenía esa sonrisa estúpida en su cara otra vez. Supongo que dado a que él si recibió chocolates, pensó que el que yo no los recibiera era divertido.
Me di la vuelta pensando en pegarle de todas formas o decirle que se fuera y volver a entrar. Sin embargo, sostuvo el cachorro cuya piel parecía realmente más suave que la del conejito púrpura que Rachel había recibido de Jeff y la caja de bombones hacia mí.
Confundida, levanté mi mirada hacia él.
—Esto es para ti. Puedes sentir la piel todo lo que quieras y comer cada uno de esos bombones todo para ti sola. Lo traje para ti... es decir, si los quieres.
—¿A mi? Pero, ¿Por qué a mí? Ni siquiera me conoces —Balbucee, queriendo desesperadamente acercarme y tomar los regalos. Tenía muchas ganas del chocolate.
—Es el Día de San Valentín y bueno, te he estado observando desde hace mucho tiempo y tú eres la única persona que quiero que sea mi San Valentín.
Mis ojos se abrieron y el broche de oro sobre el buró al lado de mi cama brilló con las corrientes de luz de la madrugada. Me acordé de ese San Valentín. Me sentía mal porque nadie quería que yo fuera su San Valentín. A todas las niñas en la escuela les había dado algo un niño. Incluso Puck le había dado algo a Julie Thursby. Pero yo no había conseguido nada. Puck les había dicho a los niños que no era una niña porque podía correr más rápido que ellos y golpear un balón más allá de lo posible. Pero aún me molestaba.
Sam lo había sabido y me había traído algo. Había comido cada uno de esos bombones antes de irme a la cama esa noche. Milagrosamente, no me había dado un dolor de estómago como el que mamá dijo que me daría cuando le confesé en la cena que me llené de chocolate. Recuerdos como éste hacían muy difícil temerle a Sam. Él realmente ha sido muy bueno conmigo toda mi vida. Tal vez no eran todos defectos.
Ese hecho me recordó que quería llevar mi alma al Infierno. Tal vez esa no era la forma en que él lo veía, pero era la forma en que yo lo veía. Y estar cerca de él cuando no estaba en su forma de "ser humano" me ponía la piel de gallina. Odiaba la sensación que se apoderaba de mí cuando él estaba cerca. Los vellos de mis brazos y cuello se erizaban y retrocedía al instante.
Pensando en el Día de San Valentín, recordé el cachorro. Se encontraba en el desván, en algún lugar de una caja. No había sido capaz de deshacerme de él cuando ya había descartado todos mis juguetes infantiles. No podía recordar dónde lo había conseguido, pero siempre me pareció muy especial para mí. Como si no pudiera deshacerme de él.
Realmente tuve un momento difícil al dejarlo en el ático. Ahora la idea de que un regalo de un espíritu vudú estuviera mi casa era inquietante. Tenía que sacarlo. Claro que había dormido con el durante años, pero eso era antes. Esto es ahora. Lo quería fuera.
Sentada en la cama, decidí que tendría que esperar y ver si Quinn o Santana se presentaban hoy. Le dije que tenía la intención de regresar a casa ayer por la noche, pero que no era seguro. Ellas piensan que estoy allí con Rachel y dijo que Ella y Quinn se turnaban para vigilar la casa. La deje esperando a Quinn se apareciera de la nada, pero ella no lo hizo.
Entonces, me arrastré en la cama y caí dormida. La puerta de mi dormitorio se abrió y andando con paso majestuoso entro Quinn.
—Así que aquí estás. Estoy vigilando la casa de Rachel sin prestarle atención a algo de la noche, porque estoy aburrida de mi maldito ingenio. Luego, me doy cuenta de que definitivamente no te siento allí. Así que hago una comprobación rápida, ¿Y adivina qué? No te encontrabas allí, Brittany. —Posó su mirada sobre mí, dejándose caer en la silla de la que es de Quinn y cruzando las piernas—. Por lo tanto, vengo aquí a echarte un ojo y mira, aquí estás. Perdí toda una noche en el patio trasero de Rachel, cuando podría haber estado comiendo en tu cocina y viendo el patea traseros de Chuck Bass en la pantalla de televisión. —Sonrió divertida con ella misma—. Rime. Patea traseros de Chuck Bass. — Poniendo mis ojos en blanco, me levante y me acerqué al armario para coger un jersey. Si Quinn estaba aquí, entonces, podríamos ir a buscar ese perrito de peluche a mi ático.
—¿A dónde vas a ir? Acabo de llegar. —Quinnn gruñó.
—Vamos al ático. Tengo un perrito de peluche arriba que me dio
Sam y lo quiero afuera.
—¿Qué?
—Sólo vamos Quinn, te explicare mientras lo buscamos.
Santana
—Snix, necesito hablar contigo. —Me detuve frente a la casa de Brittany y me giré para ver a Katie. La ansiedad en su rostro era alarmante. Los transportistas normalmente no tenían problemas reales. Quinnn era una excepción porque ella había hecho amistad con un humano. Jasyln era un transportista típico. Su único objetivo era manejar las almas.
—¿Qué pasa Katie? No tengo mucho tiempo.
—Me doy cuenta señora, pero realmente tienes que escuchar lo que tengo que decir o umm... explicar —Miró nerviosamente hacia la casa—.
Tiene que ver con tu um,... el alma, eh...
—Tiene que ver con Brittany, la chica que amo. —Terminé por ella.
Ella no había estado segura de la terminología, ya que nunca había sentido la emoción.
— Sí, Brittany. Ya ves... —El giro nervioso de sus manos comenzaba a molestarme.
—Escúpelo, Katie. Si se trata de Brittany, entonces necesito saberlo ahora. —Asintió con la cabeza rápidamente como un niño desobediente que acaba de ser regañado y miro hacia el suelo.
—Vera, señora, el chico cuya alma transportada. El conoce a Brittany. Él, eh, no debía morir. Ese no era su destino. No llegó muy lejos antes de que su alma se me muera apartada…
—¿QUÉ quieres decir con que no debía morir? Su cuerpo ya no era utilizable. Me sentí atraído allí. Su alma podía apenas mantenerse en su cuerpo en espera de mi llegada. ¿Y a qué te refieres con que PERDISTE su alma? —No pude evitar el rugido que salió de mi cuerpo. Esto no tenía ningún sentido. ¿Se había vuelto loca Katie?
—Sí, lo sé, me sentía atraída allí también. Pero algo sucedió.
Otro poder se lo llevó. El poder tiene el derecho debido a una... una restitución. —El hielo llenó mi coraza vacía con la comprensión, fue cuando caí en la cuenta. La restitución pedía un alma por un alma. Una que estuviese pegada cerca del corazón de Brittany.
—No. —Replique, acechando la puerta por la que había estado a punto de entrar sólo unos minutos antes. Esto no podía estar sucediendo. Puck no podía ser un alma de Ghede debido a Brittany. Ella nunca sería capaz de vivir con ello si se enteraba.
Sin embargo, ¿Podría alejarla de esto? Tenía que conseguir el alma de Puck de regreso. Él no podría ser capaz de volver a esta vida, pero su alma pertenecía al Creador. Puck no había hecho nada malo. Nunca se había vendido a Ghede.
—Snix, señora, no es todo. —El suave susurro de Katie rastrillo sobre mí como cuchillas de afeitar. Esto no podría ser peor.
—¿Qué? —Susurré mirando la.
—El Creador. Él quiere verte. Ahora.
____________________________________________________________________________Hasta aquí en la siguiente actualización subiré 4 capítulos el día martes despues de la 1 por favor no dejen de comentar.
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
y ahora que pasara? hasta pronto.
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Ya se me hacia raro la muerte repentina de puck ... :0 ... y no entiendo el objetivo de "alma por otra alma"... bueno as exepcion y realiza mas capitulos,si? ... sin precion... si ya se no me lo repitas "paciencia" :'( ... bueno ya va , estuvo realmente bueno, esperare esperare esperare, hasta la proxima :)
Invitado- Invitado
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Hola! me encanta que actualices tan seguido asdfghj no puedo decir nada de la ultima actualización porque aun no la leo, estoy tratando de alcanzarte después de que te conté que hice trampa al leer tu fic,me estoy poniendo al día, pero hace poco estrenaron la segunda temporada de "Orange Is The New Black" y no me puedo despegar xd así que me atrase en todos los fics que leo, pero prometo que en cuanto me ponga al día tratare de comentarte en cada actualización :)
Pd: sigo asiendo trampa, leo pedasitos de cada actualización porque la intriga me gana :c
Pd: sigo asiendo trampa, leo pedasitos de cada actualización porque la intriga me gana :c
Nathy_Gleek*** - Mensajes : 108
Fecha de inscripción : 15/12/2012
Edad : 30
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
holap,...
me encanto esto cada vez se pone mas bueno!!!!
no jodas que punk es el intercambio de alma x alma que le dijeron a san!!!
x cierto ame el regalo de britt a san,...
espero que no le pase nada malo a san cuando valla a ver al "creador"
nos vemos!!!
me encanto esto cada vez se pone mas bueno!!!!
no jodas que punk es el intercambio de alma x alma que le dijeron a san!!!
x cierto ame el regalo de britt a san,...
espero que no le pase nada malo a san cuando valla a ver al "creador"
nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
CAPITULO 16
Brittany
Creo que quizás moriré por inhalación de polvo —Se quejó Quinn mientras abría otra caja de las decenas de cajas de cartón que mi madre había colocado aquí en los últimos años.
—¡Oh, deja de ser tan dramática! ¿Qué es un poco de polvo? Has estado en edificios en llamas.
—Sí, bueno, porque es mi obligación. Es mi trabajo. Sin embargo, mi trabajo no dice que tenga que hacer trabajo manual en un ático con un ser humano. —Riéndome de mí misma, abrí la caja que acababa de bajar de la pila largamente peligrosa que mi madre había hecho. Quiero decir, entiendo que ella tratara de ahorrar espacio aquí, pero una pila de cajas que casi tocaba el techo no era exactamente una decisión inteligente.
—¿Quieres que busque en esta? —preguntó Quinn mientras dejaba la caja que había bajado a un lado.
—Sí, por favor.
—Y es un perrito de peluche blanco, ¿no?
—Sí... bueno, quizá ya no sea exactamente blanco. Han pasado muchos años, así que la piel puede estar un poco descolorida ahora. — Quinn gruñó para sus adentros mientras comenzaba a hurgar en su caja. Me moví a través de los artículos que había empacado hace sólo ocho años, porque había sido incapaz de armarme de valor para llevarlos a la beneficencia. Un bolso pequeño con letras de lentejuelas que decían
“Las Vegas” me hizo sonreír.
Mi madre me llevo a una convención de escritores allí una vez. Fue uno de los últimos viajes que pasé con ella. Siempre me aburría, pero en el viaje a Las Vegas conocí a un amigo...
Creo. Sacudiendo la cabeza, lo hice a un lado y encontré una camiseta de los Backstreet Boys que recibí una navidad. Dios, había sido una idiota. Después, encontré una caja de zapatos que supe sin mirar que contenía las cartas que nos pasábamos Rachel y yo en la escuela. Tenía de cosas inútiles e interesantes, tales como: "¿Crees que le guste a Kyle?" O "¿Has visto la manera en que el trasero de Ashley se ve en esos pantalones vaqueros?, Debería ponerse a dieta", o mi favorita,
"¿Crees que la señora Nordman tiene un pelo en la barbilla nuevo hoy?" Sí, esa caja de zapatos no tenía precio. Desafortunadamente, no había un cachorro de peluche. Frustrada, cerré la caja y la deje a un lado.
—Bueno, esto fue un fracaso… -—Golpee mi mano sobre mi boca para no aullar de risa.
Quinn posaba frente al espejo que una vez estuvo en mi dormitorio de "princesa". Pero esa no era la parte divertida. Quinn encontró mis ropas de vestir de las que yo no quise separarme cuando tenía diez años, pero ya no las quería en mi habitación más. Se había puesto mi vestido de
Campanita con un par de tacones de Blanca Nieves a los que no encajaba ni de lejos su pie. En su cabeza llevaba el velo que había ido con mi traje de Jasmine.
—¿Cómo me veo? -—Preguntó dando vueltas más rápido de las que un ser humano sería capaz de hacer con la falda de Campanita flotando en frente de ella. Yo siempre daba vueltas en ese vestido también, tratando con todas mis fuerzas en conseguir que se destacara a la perfección.
—Fabuloso, deberías usarlo para el trabajo. –Canté, luego solté una gran carcajada.
—No sé qué pensaría Santana si me presentara luciendo como si estuviese lista para un viaje a Disney World. Temería enviar el alma conmigo. -—Me senté en la caja detrás de mí, no podía parar de reír al verla vestida tan ridícula.
—Lo asustarías... ¡Hasta la muerte! —Me reí más fuerte ante mi propio pequeño juego de palabras. Quinn empezó a decir algo más cuando un sonido detrás de mí convirtió mi risa en un pequeño chillido.
—¿Qué diablos, Katie? Esta no es una fiesta —Se quejó Quinn y me alivió un poco saber que Quinn conocía a la pelirroja pálida que apareció en mi ático. Sus rasgos perfectos, translúcidos, eran tan similares a los de
Quinn cuando estaba en el modo de "transportista" que rápidamente sume dos más dos.
—Lo siento, Quinn -—Se detuvo y lentamente miró el vestuario de Quinn
con el ceño fruncido, la confusión en su rostro.
—Déjate de tonterías Katie y dime por qué estás aquí —La corto Quinn.
Las prendas de vestir desaparecieron de su cuerpo y estuvo una vez más, vestida con sus pantalones vaqueros, sudadera con capucha y botas.
—Oh, eh, sí... bueno, uh, Snix te necesita. —La atención de Quinn se desvió de la transportista a mí.
—¿Qué hay de Brittany?
—Oh, eh, no lo dijo. Sólo dijo que te necesitaba. —El ceño fruncido en el rostro de Quinn me dijo que no estaba tan segura de esto. Pero si Santana envió por ella, entonces debía ser importante.
—Iré a pasar el día con Rachel. Podemos buscar el pelu… la cosa más tarde —Empecé a hablar. Quinn asintió con la cabeza hacia mí.
—Bueno, vayamos ahora, antes de irme. No necesitas quedarte aquí sola.
—Está bien.
Me dirigí a las escaleras, entonces miré a Quinn para pedirle que por favor, me hiciera saber si algo andaba mal, pero ella hablaba en voz baja con Katie en una conversación muy intensa, por lo que las deje solas.
Quinn no tardaría mucho. Santana no la dejaría irse demasiado tiempo. Además, Santana estaba bien. Ella era la muerte. No hay de qué preocuparse.
Santana
—¿Qué está pasando Snix? —Exigió Quinn a su llegada con Jasyln en el cementerio fuera de la pequeña funeraria en la ciudad de Brittany. Vine a la tumba de Puck para ver si había algún rastro de actividad. Su alma no se había quedado vagando por la tierra. El único otro lugar en el que podría estar era con Ghede en el Vilokan. Si es así, se encontraba completamente fuera del radar. Dar con él sería casi imposible. Ninguna deidad o ser creado por el Creador habían estado nunca en Vilokan. La isla bajo el mar era para los espíritus del vudú y las almas que reclamaban en la tierra.
—Puck. Su alma no debió ser tomada. Él nunca estuvo en los libros. —Continuaba sonando increíble cuando lo decía. Incluso después de hablar con el Creador. Las decisiones habían sido tomadas. Con el poder de la restitución en el lado de Ghede, esto podría empeorar.
—¿Qué? —Su tono de incredulidad no me sorprendió. Yo tuve la misma reacción. Esto nunca había sucedido. Y si no encontraba una manera de detenerlo, el Creador esperaría que entregara a Brittany o a su madre a Ghede. Ninguna de las dos era una opción.
—Ghede, él tomó el alma de Puck por la restitución de Brittany. El
Creador no cree que vaya a parar allí. Puck fue una advertencia para mí o para Brittany. No se detendrá hasta tener en sus garras a Brittany. Quinn se dejó caer en la lápida detrás de ella. —Oh, mierda.
—No quiero que le digas a Brittany aún. No si podemos arreglar esto sin que ella lo sepa. Las implicaciones de la muerte de Puck serían demasiado para que ella les hiciera frente. Se sacrificaría sin lugar a dudas. No lo permitiré. Detendré esto.
Quinn asintió con la cabeza totalmente de acuerdo. Sabía que podía contar con ella. Katie por el contrario, estaría dispuesta a ofrecer a Brittany en bandeja de plata. Ella no entendía, pero aun así se me era difícil tenerla cerca de mí. Quería saciar mi enojo con alguien y su indiferencia la ponía directo en el camino de mi ira.
—¿Dónde está Brittany ahora? —Le pregunté, variando mi ceño fruncido de Katie a Quinn de nuevo.
—Ella está con Rachel —Me aseguró. Eso era bueno. Necesitaba a Quinn en estos momentos. Teníamos que encontrar una manera de penetrar Vilokan. El infierno habría sido mucho más fácil.
Brittany
Convencer a Rachel para un día de compras no fue fácil, pero tenía que salir. Después de forzarla a alistarse y empujarla hacia mi coche, nos dirigimos al centro comercial. Cuatro horas más tarde, ella mostró señales de vida. Estuve muy agradecida.
—Necesito un café —Anuncie cuando salimos de nuestra tercer tienda de zapatos a la hora. Me las arreglé para encontrar dos pares de zapatos sin los que no podría vivir. Uno de ellos era un par de sandalias amarillas sin respaldo que tenían un poco de tacón. Los otros eran botas de color beige que combinan perfectamente con mi chaqueta de cuero beige. La mejor parte era que tenían descuento. Rachel, sin embargo, no había comprado nada. Fuimos poco a poco para llegar allí.
Ella había intentado medirse unos zapatos en la tienda anterior. Yo la había obligado, pero al menos se los había puesto.
—Yo también —respondió Rachel, volviéndose hacia el Starbucks en vez de ir a la siguiente ala del centro, donde se ubicaba Wide Mouth, la cafetería favorita de Puck. Entendí, y honestamente, no estoy segura de poder entrar en Wide Mouth ahora tampoco.
—¿Qué quieres? —Le pregunté, sacando mi cartera.
—No sé, consígueme lo mismo que tú pidas —dijo ella con un gesto de la mano y se acercó a encontrar una mesa.
No podía pedirle lo mismo que yo. Yo siempre pedía un café con leche con caramelo, crema batida al igual que lo hacia Puck. Me hice a un lado para que las personas detrás de mí pudieran ordenar y estudié el menú detrás del mostrador. Hacía años que no ordenaba algo más que un café con leche y caramelo. Ni siquiera estoy segura de conocer algo más para ordenar.
—He oído que el chocolate caliente es increíble —Susurró en mi oído Sam. Él tenía forma humana, porque los vellos de mis brazos no se erizaron.
—Soy una niña grande. Prefiero el café —Le espeté sin mirar hacia atrás a él. Él rio en voz baja.
—Sí, lo sé. Café con caramelo, leche con crema batida. —
Tensándome, miré hacia donde se encontraba sentada Rachel. Nos observaba con una mirada divertida y triste en su rostro. Sabía que verme con Sam le recordaba a Puck. Sin embargo, era otra razón para permanecer malditamente lejos de él. Si sólo entendiera la insinuación y me dejara en paz. Nunca estaría de acuerdo en darle mi alma. Que se jodiera la estúpida restitución o lo que fuera.
—No —Replique y me acerqué al mostrador para ordenar y poner espacio entre los dos. La chica en el mostrador se comía con los ojos a Sam y no me prestaba ni un ápice de atención. Ella empezó a jugar con un mechón de su cabello castaño alrededor de su dedo y bateo sus pestañas. Si la chica tonta supiera… Él no era el Sr. Todo-Americano.
Me aclaré la garganta para llamar su atención y cuando eso no funcionó, literalmente, tuve golpear el área del mostrador frente a ella.
—Hola, perdón, pero es mi turno. —Apartó su intensa mirada de “ven a por mí” de Sam y me miró. Bien, ahora va a escupir en mi café.
—Ya lo sé. Esperaba que ordenaras —El tono de la muchacha fue molesto.
—Bueno, no me di cuenta. Parecías ocupada.
Tenía las mejillas enrojecidas y lista para dar rienda suelta a su réplica ágil cuando Sam tosió ruidosamente. Su voz sonaba sospechosa, como si estuviera ocultando una sonrisa.
—Creo que hemos comenzado con el pie equivocado —La voz de Sam fue suave y profunda. Tal como imaginó la chica en su mente. Las chicas realmente eran débiles cuando se trataba de hombres atractivos—. Sólo necesitamos ordenar, necesito un chocolate caliente y tú necesitas un...
—Fijo la mirada en mí, como si estuviéramos aquí juntos. Empecé a abrir la boca para corregirlo, cuando decidí que era mejor ir con él si no quería la saliva de la chica en mi café con leche.
—Oh, eh, que sean dos grandes... uh.... dos grandes.... um... — Pude sentir la molestia e impaciencia en la chica, pero no deje que eso me detuviera. Traté de encontrar algo en el menú que seguramente nosotras ordenaríamos.
—Quiere dos cafés con leche, de moka, con nata y chocolate espolvoreado en la cima, grandes, por favor -—Informó Sam a la chica.
¿Qué diablos? No le di permiso para ordenar por mí. Incluso, si lo que él ordenó sonaba tan bien. Se acercó a mí, le pagó a la chica mientras coqueteaba con ella, me crucé de brazos y espere hasta que terminara.
Cuando se volvió para sonreírme, gruñí.
—¿Qué? No podías decidir. Te he ayudado. Te encanta el chocolate.
Te gusta el moca con leche.
—No recuerdo haber pedido tu ayuda. Puedo ordenar yo sola — Susurré. Sam se encogió de hombros y tomó mi brazo, poniéndome a un lado para que la gente que hacía fila detrás de nosotros pudiera ordenar. Quise alejarme de él, pero tiro de mi brazo hasta él.
—¿Por qué insistes en estar molesta conmigo todo el tiempo? — ¿Acaso no lo sabía? Abrí la boca para decirle exactamente cómo me sentía acerca de su reclamo sobre mi alma, cuando Rachel se puso de pie y corrió hacia la puerta de la cafetería hacia el Centro comercial.
Empujé a Sam mientras pasaba y salí detrás de ella. Ella giró a la izquierda y se dirigió a la puerta de atrás por la que habíamos entrado. Cogí mi ritmo y esquive las personas que se detenían a ver como perseguía a Rachel. Mi primera preocupación fue que quizás le recordé algún momento doloroso. Mi segunda preocupación fue que un policía me iba a arrestar por pensar que iba a hacerle daño. Y luego me preocupé por chocar accidentalmente contra una persona en mi búsqueda.
Menos mal, se detuvo en las puertas que llevaban al estacionamiento donde nos estacionamos. Sus hombros se movían mientras se aferraba a la manija para tratar de recuperar el aliento. Mis dos bolsas que había estado llevando estaban a sus pies.
—Rachel, ¿Qué pasa? —Le pregunté sin aliento cuando definitivamente me encontré con ella.
Las lágrimas corrían por sus mejillas mientras miraba lejos. La devastación estaba tan profundamente grabada en su rostro que me pregunte si alguna vez el dolor se iría.
La chica que había conocido toda mi vida cambió completamente ese día en el campo de futbol, mientras que vimos el cuerpo sin vida de Puck.
—No puedo —Sollozó sacudiendo la cabeza—, Sólo no puedo.
Envolví mi brazo alrededor de sus hombros y la acerqué. Ella se desplomó a mi lado, llorando y triste. Fui demasiado lejos hoy. No estaba preparada para ello. La culpa me carcomía. Debía haber hecho esto en una excursión más pequeña. Salir de poco a poco. Yo y mis grandes ideas.
—Ven, vámonos a casa —Inste a que abriera la puerta y que entrara en el auto.
—¿Podemos...? —Rachel hipo—, ¿Podemos ir a visitar su tumba? Tengo que hacerlo. —No estaba de acuerdo. Ella no estaba lista para eso todavía. Yo tampoco estoy preparada para eso. Pero no podía negarme.
Abrí la puerta del lado del pasajero y Rachel se deslizó en el interior.
Tal vez, podríamos ir. Si eso era lo que ella quería hacer, entonces yo sería fuerte e iría con ella. Pero primero, íbamos a pasar por su casa. Ella necesitaría una pequeña dosis de coraje y su madre tenía un armario entero con valor alcohólico que iba a necesitar.
____________________________________________________________________________________
Disculpen la demora aquí esta la siguiente parte créanme lean esta es de las mejores partes de la historia en adelante.
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
CAPITULO 17
Los cementerios en la noche son mucho más espeluznantes que durante el día. Intenté desesperadamente ignorar a las almas cerniéndose sobre las tumbas que supuse que eran suyas. Pero era muy difícil no saltar cada vez que pasábamos por delante de una tumba y un alma aparecía frente de nosotras. Quería agarrar a Rachel por el brazo y detenerla para que el alma pudiese vagar más allá, pero eso sólo la habría confundido y les haría saber a las almas que yo las podía ver. Así que en vez de eso, cerré los ojos con fuerza y traté de fingir que no caminábamos entre las almas. Oh, cómo odiaba al padre de Sam por esta estúpida maldición.
—Hace frío aquí —dijo Rachel, rompiendo el silencio.
Le miré mientras tomaba otro sorbo de la botella de vino que tenía en las manos. Había encontrado un vino de postre que yo sabía que ella podría manejar. Venir al cementerio en la noche no era mi mejor idea de pasar un rato agradable, pero no quería que ella perdiese el control o, Dios no lo quiera, que corriese asustada en la noche de la manera que corrió por el centro comercial. Yo no estaba dispuesta a perseguirla entre almas.
—Sip —dije, tirando de mi chaqueta de cuero beige y abotonándomela.
—¿Quieres? Te calentará —Rachel me ofreció la botella de vino. La miré en su mano. El color pálido y el aroma afrutado me tentaban. Podía beber un poco para mitigar mi incomodidad. Pero yo conducía, así que negué con la cabeza.
—No, estoy bien.
Rachel esperó un segundo más antes de atraer el vino a su pecho.
—De acuerdo, si estás segura. Pero ayuda de verdad. No iba a discutir con ella. Estoy segura de que el vino le ayudaba muchísimo. Tres semanas antes no habría podido pagarle para caminar a través del cementerio por noche. Tener a alguien querido enterrado aquí cambia las cosas.
—Ahí está —susurró, deteniéndose finalmente.
Mi mirada siguió la suya. La tumba de Puck se encontraba todavía fresca y cubierta de flores. Unas pocas comenzaban a marchitarse, pero la mayor parte de las flores todavía seguía tan encantadoras como lo habían estado en su funeral.
—Sentémonos en el banco —dijo Rachel casi reverentemente.
Los padres de Puck habían puesto un banco a los pies de su tumba. Me pregunté sobre eso cuando lo vi el día del funeral. Pensé que solo estaría allí durante el funeral, pero cuando nos fuimos miré atrás y todavía estaba allí.
—Ahí está el que mandé yo —La voz de Rachel se quebró mientras nos sentábamos y mirábamos los arreglos florales que había delante nuestro. La pelota de baloncesto grande y redonda que se recostaba en la cabeza de su tumba estaba hecha de claveles naranjas y botones de oro negros. Rachel había insistido histéricamente al florista que hiciera un arreglo que pareciese una pelota de baloncesto. Lo hicieron para ella. Era bonito. A Puck le habría encantado.
—Quedó muy bien —Le aseguré.
—Sí. Ojalá él pudiera verlo. No estaba segura de cómo responder a eso. No quería empezar a decirle que su alma no estaba aquí y que yo lo vi irse. Mentir no era mi punto fuerte y lo pasé mal estando de acuerdo con ella cuando yo sabía más cosas.
—¿Recuerdas la vez que trajimos la cuatri moto de Puck hasta aquí, por el camino del bosque de detrás de su casa? —La voz de Rachel tenía un toque divertido.
—Sí —La policía nos persiguió por saltar tumbas con su cuatri moto. Puck y yo asumimos la culpa y dejamos a Rachel fuera. Puck siempre había sido protector con ella y, honestamente, nos había rogado que no lo hiciéramos. Le habíamos escuchado durante todo el camino hasta aquí hablar sobre lo mal que estaba eso y cómo los fantasmas de las personas sobre cuyas tumbas habíamos saltado nos perseguirían. Yo sabía, claro, que se equivocaba y no me preocupaba.
—Mi madre todavía no tiene ni idea de lo que pasó. Ni siquiera le he dicho que fueron perseguidos, porque temí que no me dejase salir con delincuentes.
Me reí y una pequeña sonrisa apareció en los labios de Rachel. Era tan bueno ver esas sonrisas. Eran muy pocas y distantes entre sí. Rachel tomó otro trago de vino. Sus sorbos habían vuelto tragos.
La mirada vidriosa en sus ojos me dijo que conseguía el efecto deseado.
Me sentí culpable de conseguirle el vino, pero ella necesitaba estar relajada para afrontar esto. Recordar el pasado. Eso era bueno. Valían la pena una botella de vino y consumo de alcohol de menores.
—Whoa, no son a quienes esperaba ver aquí —dijo Sam mientras se acercaba a nuestro lado. Rachel dejó escapar un pequeño grito, luego le siguió una risilla después de darse cuenta que era Sam y no un zombi quien se nos había unido.
—¿Y bebiendo? —Los ojos de Sam se levantaron de la botella de vino de Rachel para encontrarse con mi mirada.
—Ella quería venir aquí. Me imaginé que necesitaba un poco de valor para afrontarlo.
Sam asintió con la cabeza y un pequeño ceño frunció su frente. Me pregunté si lo sentía por la pérdida de ella o si incluso echaba de menos a Puck.
—Puedo entenderlo —Contestó.
Rachel se acercó más a mí y dio unas palmaditas en el sitio al lado suyo.
—Ven y siéntate —Le ordenó a Sam.
Quería decirle que él era lo más peligroso aquí afuera, pero mantuve mi boca cerrada. Por lo menos, en el otro lado de Rachel no tendría que ver su cara.
—Toma, está bueno —Contestó Rachel, empujando la botella a Sam torpemente. Vale, posiblemente ya ha bebido suficiente.
—Claro —Contestó él, y pude verlo inclinar la botella por la esquina de mi ojo.
—Perdón por haber huido hoy y… po habete deado allí—Rachel comenzaba a balbucear. Sip, había tenido suficiente. Llegué al otro lado de ella y le cogí la botella a Sam.
—Has alcanzado tu límite, Rachel. Un poco más y mañana me odiarás. —Le expliqué mientras me sacaba el corcho del bolsillo y tapé la botella antes de ponerla entre mis pies.
—Me preocupe por ti, pero vi a Brittany contigo —Respondió Sam palmeándole la rodilla.
—Sssssí. Do zabría ge hacer zin ella —Balbuceó Rachel.
Sam se inclinó hacia delante y pude sentir su mirada en mí.
—Ella es muy especial —Concordó.
Rachel asintió con la cabeza y empezó a apoyar su cabeza en mi hombro, pero falló y se cayó. Tanto Sam como yo la agarramos antes de que pudiera caerse de cara en la tierra fresca y las flores. Riendo, Rachel se balanceó de atrás y adelante mientras la sentábamos de nuevo. Había bebido más que suficiente. Dudo que recordara algo en la mañana. Con suerte, no se despertaría abrazando la taza del baño.
—Vale, creo que es hora de que volvamos a casa —dije agachándome para coger la botella de vino y después me levanté—.
Vamos. Te meteremos en la cama.
—Te ayudaré a llevarla al coche —Ofreció Sam y comencé a negarme cuando Rachel se cayó de rodillas y se rió a carcajadas.
—Sí, gracias —murmuré. Sería de mucha ayuda si Quinn no hubiese desaparecido completamente hoy. Pero estaba por mi cuenta y Sam era el único “ser” acechándome en este momento. Sam parecía demasiado satisfecho con este giro de acontecimientos, y tuve que reprimir el impulso de decirle que yo podía hacerlo por mí misma. Porque estaba más que segura de que terminaríamos durmiendo en el cementerio si tenía que llevarla al coche sola.
Sam se agachó y la cogió por debajo de los brazos. Ella se balanceó en sus pies y Sam envolvió su brazo alrededor de su cintura.
—Tranquila, chica —dijo.
—Dranquila, chica —Le imitó Rachel riéndose como si hubiera dicho la cosa más graciosa que nunca había escuchado. Nota para mí, Rachel es un peso ligero. En el futuro, una copa de vino será su límite.
—Adiós, Puck, de guiero musho —gritó Rachel mientras Sam la guiaba por el camino que hicimos desde el aparcamiento hasta aquí. Como yo, Sam podía ver las almas, las esquivó y las ahuyentó así yo no tendría que atravesarlas en el camino a la salida.
—De guiero musho —Rachel empezó a canturrear con tristeza. La borracha triste empezaba a emerger. No había pensado sobre esa posibilidad.
Sam abrió la puerta del lado del pasajero y dejó a Rachel en el asiento en vez de dejar que cayera. Lo que debía admitir era muy considerado. Especialmente para un espíritu vudú.
Me dirigía el lado del conductor cuando oí cerrarse la puerta del pasajero y abrirse la de la parte de atrás. Volviendo mi cabeza, vi a Sam meterse en el asiento trasero. No había manera de que eso pasara. Me paré y abrí la puerta del pasajero de mi lado y metí la cabeza.
—¿Qué crees que estás haciendo? —Siseé.
—Me estoy asegurando de que lleguen a casa a salvo. —Contestó con una sonrisa educada en el rostro.
—Oh, no, no lo vas a hacer. ¡Sal fuera!
—No seas tan mala, Brittany —Intervino Rachel desde el lado del copiloto.
Rodando los ojos, dejé salir un suspiro exasperado. Bien, si quería ser el príncipe encantador podía serlo. No iba a tratar con el ahora mismo. Necesitaba llevar a Rachel a casa antes de que se desmayase, o peor, vomitase en el coche.
—Lo que sea —refunfuñé y cerré la puerta de golpe para darle un efecto extra.
Me las arreglé para arrancar el coche y llevarlo a la carretera sin mirar atrás, ni reconocer la presencia de Sam. Pretendí ignorarlo todo el camino hasta casa. Igual se enfadaba y desaparecía. Dios sabe que
Rachel no se enteraría. Deslicé mis ojos a ella y vi sus parpados ponerse pesados.
—Quédate despierta. No seré capaz de llevarte dentro si estás desmayada. No queremos que tu padre salga y te encuentre de esta manera.
Eso la animó. Si su padre la encontraba borracha estaría furioso. Bueno, puede. Sus padres habían estado tan preocupados por ella que quizás lo entendería. O podrían ingresarla en un centro psiquiátrico. Ella realmente no quería ir a uno de esos.
—Así está mejor, mantén esos ojos abiertos —Bajé su ventana—. El aire frío te ayudará y si empiezas a marearte, por favor, asómate por la ventana y vomita.
Rachel se rió y apoyó la cabeza en el reposacabezas, dejando que la fría brisa le volase el pelo de un lado a otro de su cara.
—¿De quién fue la idea de emborracharla? —preguntó Sam desde el asiento trasero.
Me iba apegar a mi plan de ignorarlo, así que alcancé el volumen de la radio para subirlo cuando Rachel dijo arrastrando las palabras:
—Deeee Brrriiiiittttt, eees tan listaaa.
Sam rió entre dientes desde el asiento trasero. Tenía que estar de acuerdo con él. Yo también me cuestionaba mi inteligencia.
—¿Podemos hacerlo ooootra vez ma…mañana? —preguntó Rachel. Negué con la cabeza.
—No. Créeme, el dolor de cabeza que vas a tener mañana me dará la razón. Esto ha sido cosa de una sola vez. Rachel hizo un sonido de “pffft” que causó que escupiera saliva. Me detuve en el camino de entrada de Rachel, esperando por completo que Sam simplemente se evaporara cuando abrió la puerta del coche como un humano y procedió a sacar a Rachel del coche. Genial, el Príncipe Encantador iba a seguir con su educado comportamiento. Lo seguí a la puerta y la madre de Rachel se encontró allí con nosotros. Di un paso adelante y le entregué la botella de vino medio vacía.
—Ella quería ir a ver la tumba de Puck esta noche. Cogí esto porque pensé que lo iba a necesitar. Lo siento...
Su madre levantó la mano para detenerme.
—No, está bien. Entiendo. Esto no es peor que las pastillas que le he estado dando —El tono de voz de su madre sonó derrotado. Había escuchado ese tono antes en mi madre. Esperaba que no hiciesen con Rachel lo que mi madre hizo conmigo.
—Solo vete a casa, Brittany. Tu madre ya me ha llamado buscándote. Su avión llegó hace una hora. Cuidaré de Rachel esta noche. Asentí y di un paso atrás mientras Rachel se metió en los brazos de su madre y cerró la puerta.
—Parece que estamos solo tú y yo —dijo Sam, completamente satisfecho
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
CAPITULO 18
Yo, estoy sóla yo y me voy a casa. —Le respondí dándome la vuelta y me encaminé al coche.
No le iba a dar el placer de mirar atrás. Abrí la puerta del coche con un poco más de fuerza de la que era necesaria y me metí dentro. Alcanzando las llaves que había dejado en el encendido, las busqué a tientas y no las pude encontrar. Frustrada, encendí la luz y miré alrededor del volante para ver que mis llaves no se encontraban allí.
Comprobé mis dos bolsillos y empecé a agacharme y buscar por el suelo cuando la puerta del lado del pasajero se abrió y Sam se deslizó dentro con mis llaves colgando de sus dedos.
Grrrrrr… Las alcancé y se las arrebaté fácilmente de sus dedos y las empujé en el encendido.
—¿Qué planeas hacer, Sam? ¿Irás conmigo a visitar a mi madre? Hmmm… Porque es más que probable que Quinn esté allí poco después de que yo llegue y está deseando darte una patada en el culo. Sam se inclinó hacia atrás en el asiento, poniéndose cómodo.
—No, Brittany, sólo pienso que tu y yo necesitamos hablar.
—¿Sobre qué? ¿Del hecho de que quieres quitarme mi alma para algún rito vudú o del hecho de que me has acechado toda mi vida y luego me quitaste mis recuerdos? ¡Ya lo se! Quieres hablar sobre cómo me mentiste sobre todo desde el principio y me hiciste pensar que eras un buen tipo. Elige un tema porque voy a hablar de todos.
Sam dejó escapar un cansado suspiro y se frotó la palma en la rodilla casi nerviosamente. Antes, cuando pensaba que era humano, pensaba que era un gesto lindo. Ahora, yo no estoy muy encariñada con ese gesto.
—Estás enfadada conmigo. Lo veo. Incluso lo entiendo. Yo siempre esperaba a que tú lo supieses…
—¿Entonces por qué no me lo dijiste?
—Porque te elegí. Era tu propósito. Es tu propósito. ¿No lo entiendes? Has muerto, Brittany. Muerto. Desaparecido. Conseguido otra vida y completamente perdido la oportunidad en esta vida. Porque tú ibas a morir. La Muerte no estaba enamorada de ti entonces. Iba a cogerte como se suponía que debía. No había nada que nadie pudiese hacer para detenerle, excepto tu madre. Ella pudo elegir entregarte a Ghede, y así lo hizo. Puede que no se diese cuenta, pero cuando le suplicó a un doctor vudú que salvase tu vida con magia vudú, ella te entregó a mi padre. Así que viviste. No moriste. La Muerte no te tomó. Tú tenías que crecer con tu madre y tener una amistad con Rachel e incluso con Puck. Tú tenías que VIVIR. Esos años no los habrías tenido si yo no te hubiese elegido.
Esta vida que tienes ahora debió terminar esa noche en el Hospital Infantil de Nueva Orleans.
Escuchar esa explicación fue duro. Tragando el repentino nudo en
mi garganta, empecé a dar la vuelta cuando Sam agarró le volante.
—No. No hemos terminado de hablar. Intenté girar, pero el volante no se movía. El coche se quedó encabezado hacia las afueras de la ciudad y el viejo puente East Gulf.
—Vale, de acuerdo. Me has mantenido viva. Tenía que vivir esta vida. Lo aprecio, pero ahora quiero mantenerla y a ti no te importa. Tú reclamas que me quieres y me necesitas, pero no te podría importar menos lo que yo quiero. Es muy egoísta de tu parte. Es todo sobre lo que
Sam quiere. No tomas en consideración lo que yo quiero. Actúas como si fuera tu posesión y yo debo estar feliz sobre eso.
Sam no me contestó de inmediato. Intenté girar el volante otra vez y no pude. Sospechaba que si quitaba mis manos del volante, el coche conduciría solo. La idea de que posiblemente Sam no me dejaría ir a casa empezó a crecer. Mi ritmo cardiaco se aceleró e intenté mantenerme en calma. Si ese no era su plan, no quería darle ninguna idea.
—He intentado hacértelo fácil. He intentado hacer esta transición de manera que lo pudieses aceptar. Te he protegido de la verdad. Quería que hicieses esta decisión porque tú lo querías. No porque te estuviese forzando, pero nos hemos quedado sin tiempo. Hay algo que debes saber.
—Sam señaló hacia la parte de la carretera justo antes del puente—.
Detente.
No estaba segura si se dirigía a mí o al coche, porque yo no iba a detenerme, pero el coche se detuvo y se paró sin mi ayuda.
—¿Qué es lo que necesito saber? —Le pregunté, golpeando el volante por haberme traicionado.
—No te va a gustar esto. No quería que lo supieses. Pero cuando te negaste a aceptar que tu alma era la restitución por la vida que mi padre te concedió, mi padre decidió que el tomaría su restitución en otra parte. ¿Qué quería decir eso? ¿Significaba que la deuda fue pagada por completo y que sería libre ahora? Porque si era así, no había nada sobre eso que no me gustase.
—Brittany, mírame. —Me ordenó Sam, y volví mi cabeza para encontrarme con su firme mirada—. La muerte de Puck fue solo el principio. Ghede tomará más. A todos a tu alrededor. Él los tomará uno por uno hasta que cedas y aceptes venir conmigo o hasta que no quede nadie más por tomar.
Un entumecimiento se estableció en mí y miré de regreso a Sam. Era como si hubiera hablado en otro idioma. Entendí lo que decía, pero el significado debajo de sus palabras era casi imposible para mí de aceptar.
Quería empujarlo hacia atrás, empujarlo fuera. No podía haber dicho lo que acababa de escuchar. No había manera de que esta restitución de mi alma afectase a otros. Solo a mí. No… no a Puck. No, había estado allí.
Había visto a Santana . Sam mentía. Sacudiendo mi cabeza casi violentamente grité:
—¡NO! TÚ estás mintiendo. Eres un mentiroso. Yo vi a Santana . La vi sacar el alma de Puck. Santana nunca habría tomado un alma para tu padre. Ella nunca habría…
—Santana no lo sabía —Me interrumpió Sam—, ¿Te dijo sobre eso de antemano? ¿Te preparó para la muerte de tu amigo? No. No lo hizo. Porque la muerte de Puck no era el destino. Mi padre usó su poder sobre tu restitución sin pagar para matar el cuerpo que habitaba el alma de Puck. Santana fue atraída a allí para recuperar el alma del cuerpo porque ese es su trabajo. Ella estaba tan sorprendido como tú. No tenía respuesta. Santana no me lo dijo. Nunca me había preparado para ello. ¿Podría esto simplemente ocurrir? ¿Podría este señor espiritual de los muertos tomar almas porque yo no cumplí sus órdenes?
—Pero… pero tú me dijiste que mi muerte y la de Puck iban a ser las tragedias este año escolar. Eso significaría que la muerte de Puck era el destino.
—Te mentí. Quería que estuvieses enfadada con Santana . Podía sentir tu dolor y sabía que te mantenías lejos de ella. Mentiras. Parecía que Sam sólo sabía cómo vivir con mentiras. Me quería a su lado, así que mintió de todas las maneras que pudo para conseguir lo que quería. Y ahora, su padre iba a matar a personas inocentes que amaba si no me rendía. ¿Quién sería la siguiente? ¿Mamá? ¿Rachel? No podía esperar a averiguarlo. Esto no ocurriría otra vez.
Santana había dicho que ella era más grande que esto. Ella podría detenerlo, pero era muy tarde ahora. Puck ya había perdido la vida por mí. No podía sentarme y esperar que alguien más muriese. El dolor y la culpa serían peores que una eternidad con Sam. Dejé ir el férreo control que tenía en el volante y mis hombros se hundieron en derrota.
—Bien. Iré contigo.
Sam no contestó inmediatamente. El coche se puso en marcha y se movió a la carretera. Miré a través de una neblina mientras se conducía a sí mismo hacia el puente. Al instante, mi cabeza se estrelló contra el reposacabezas por la velocidad del coche y agarré frenéticamente el volante y empecé a apretar los frenos inservibles.
—¡Sam! ¡Ayúdame! —Lloré y el volante hizo un brusco giro a la derecha tan pronto como estuvimos en medio del puente.
—Te tengo, Brittany. —La voz de Sam era calmada, a pesar que el coche rompió a través de la barandilla y nos fuimos a toda velocidad a las aguas del océano de debajo de nosotros. Ni siquiera tuve tiempo de gritar antes de que todo se volviese oscuro.
Santana
Quinn apareció delante de mí, deteniéndome de ir más lejos en mi búsqueda de espíritus vudú en su principal Meca de New Orleans. Sabía que tenían aquí, en alguna parte, un portal que los llevaba a Vilokan, el espíritu vudú de otro mundo. Sólo tres sitios en el mundo tenían un portal. Con el tiempo, New Orleans se había convertido en el portal más famoso para los espíritus. Aquí los humanos les daban la bienvenida y los celebraban. Incluso los católicos empezaron a aceptarlos e integrarlos en su religión.
—Tenemos un problema. —Las palabras de Quinn no contenían sarcasmo ni humor. Eran serias. Lo que significaba que cualquiera que fuera el problema, involucraba a Brittany. Preparándome, le pregunté:
—¿Qué?
—Fui a revisarla tal como me dijiste. Había coches de policía en su casa. Su madre está muy cerca de un colapso emocional, si no ha sufrido ya uno, y había lanchas de rescate, helicópteros y ambulancias en el Puente East Gulf. El coche de Brittany fue encontrado a un kilometro río abajo. Hay marcas de patinazos en el puente y una apertura del tamaño de un coche en la barandilla donde el coche chocó.
—Ella no está ahogada —declaré, sabiendo que el cuerpo de Brittany no había muerto. Yo no había sido convocada.
—Claro que no lo está. Pero todos piensan que ha muerto. Llevó a casa a Rachel anoche y ella se emborracho. Sam la acompañó a casa según lo que dice la madre de Rachel. Ahora se están preguntando si también estaba intoxicada y por supuesto, si Sam también está desaparecido, otra vez, y piensan que los dos se encontraban en el coche que cayó al río.
—Vilokan —gruñí.
Sam la había llevado a Vilokan. Se sabía que había una isla debajo del agua. Pero sólo los espíritus vudú podrían entrar a través del fondo del mar. Los portales eran la única vía para cualquiera pudiera entrar.
—Eso es lo que yo pensé, también, pero no podría llevarla si ella se negara.
Él se lo había contado. Sam le había dicho sobre Puck y por supuesto ella acepto. Haría cualquier cosa para salvar a aquellos que amaba. La había visto rendirse por mí sin ninguna pregunta. Mi bella alma se sacrificaba una vez más. Maldito Ghede. Él pagaría por esto. Lo pagaría con la extinción del Vudú. Su mundo se cerrará a este mundo.
Haré que desee nunca haberse acercado a Brittany. Con un rugido de furia, empujé la farola que estaba junto a mí con la suficiente fuerza para mandarla volando hacia el centro de la concurrida calle. El cristal se hizo añicos y la gente corrió gritando mientras las bocinas de los coches sonaban.
—Un movimiento brillante, Hulk. Ve y mata a alguien que no está destinado a morir hoy, ¿Por qué no? Como si el Creador no estuviera lo suficientemente enfadado ahora mismo. —Se quejó Quinn antes de empujarme y empezar a andar con enojo.
No había matado a nadie. Lo máximo que había hecho era causar algún daño a unos pocos coches y a la farola. El caos que había creado no había sido intencional, pero sería muy útil.
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Capítulo 19
Brittany
Chiffon negro flotaba encima de mi cabeza cuando abrí mis ojos. Esto era familiar. Había hecho esto antes.
Parpadeando varias veces hasta que pude concentrarme, estudié el delicado tejido envuelto sobre mi cabeza. Era encantador pero espeluznante. Velas de todos los diferentes tipos en candelabros de plata presentaban los muebles de la habitación; las llamas llenaron la habitación con un brillo suave.
Había estado aquí antes. Tratando de concentrarme, me senté y mire a mí alrededor. Las paredes de piedra que me rodeaban daban a la larga habitación una sensación de oscuridad. Una lámpara de cristal grande flotaba en el centro de la habitación. El techo era alto y hecho de piedra, al igual que las paredes. Poco a poco, mi mente comenzó a trabajar y me acordé que esta era la habitación de Sam. Él me trajo aquí antes. Me encontraba en Nueva Orleans. Esto era bueno. Había una puerta oculta en algún lugar de estos muros que me pondría en la calle
Bourbon. Podría salir allí y llamaría a Santana . Ella vendría por mí, estaré bien.
Me puse de pie y me quedé inmóvil a medida que más recuerdos comenzaron a brillar en mi mente. Mi auto volando por la carretera. Había sido incapaz de controlarlo. Sam fue quien lo controlo.
Giró el volante y nos estrellamos contra la baranda y luego nosotros... entonces nosotros...
—Estás despierta. —La voz de Sam rompió mi concentración y di la vuelta, para verlo entrar por una puerta oculta. Al otro lado de la habitación.
No es la misma que recordaba. ¿Cuántas puertas se encontraban en esta habitación?
—Nosotros. Tú, nos estrellamos con un puente. Sobre el océano. — Sam asintió con la cabeza y una sonrisa sencilla. Por lo menos lucía arrepentido por habernos conducido a través del Golfo de México.
—Sí, lo hice. Lo siento, pero era la forma más rápida de llegar hasta aquí sin que tenga que transportarme. La última vez quedé realmente agotado, pero tenía que traerte aquí en tu forma humana. Tratar de extraer tu alma sería imposible, considerando que la Muerte nunca te haría eso, tenía que traerte a Vilokan a través de la ruta más cercana…
—¿Vilokan? ¿Que es Vilokan? ¿No estamos en Nueva Orleans? ¿Y lanzarnos en el océano es la ruta más cercana a dónde?
Sam se echó a reír y se sentó en el borde de la cama. Quería estar enfadada con él, pero algo en mi mente me recordaba que no podía echarle la culpa.
—Lo siento. Vilokan es mi hogar. Es el mundo del espíritu en la religión vudú. Se encuentra bajo el agua. Es una isla preciosa. No puedo esperar para enseñártela.
Sacudiendo la cabeza, me acerqué a la puerta que la última vez me había conducido directamente a la calle Bourbon. —He estado fuera de esa puerta. Sé lo que hay allí afuera. Nosotros no estamos bajo el agua.
Estamos en un edificio en la calle Bourbon. Sam se levantó, se acercó a la pared y empujó sobre ella —No hay puerta, ves.
—Pero he estado fuera de esa puerta —Insistí.
—Sí, cuando hice una puerta que salió de la misma. Pero a menos que haga una puerta allí, entonces no hay. Te fuiste a través de un portal especial que sólo los espíritus vudú pueden crear. Tenemos tres. Uno en Nueva Orleans, uno en Haití, y uno en Togo, en África. Todos estos lugares tienen la mayor población de creyentes. Nuestros espíritus son llamados allí y tenemos los portales para traer humanos o almas de aquellas ciudades en Vilokan.
—¿Estás manteniéndome aquí? —La comprensión de que esta vez podría estar atrapada en esta isla bajo el agua comenzó a hundirme.
Sam frunció el ceño, entonces la comprensión parecía asomar en su rostro.
—¿No te acuerdas? Debí haber adivinado que el viaje podría haber confundido tu cabeza un poco. Todo volverá a ti, pero no voy a sentarme alrededor a esperar por eso.
De pie, Sam cerró el espacio entre nosotros y comencé a retroceder cuando él puso sus manos a cada lado de mi cabeza. Irradiaba calor, hasta que imágenes poco a poco comenzaron a parpadear en mis ojos.
Entonces, como una pantalla de cine que se creó tras de mis párpados, me acordé de todo. Cada horrible detalle. Dando un paso atrás, fuera de sus manos, me tapé la cara con ambas manos. Estaría aquí. Por siempre. Puck se había ido por mi culpa. Rachel había perdido tanto de nosotros, por mí culpa. Y Santana , nunca sabría que me pasó. ¿Podría incluso encontrarme aquí?
—Lo siento, tuve que hacerlo. Anoche sólo lidiaste con esta noticia unos pocos minutos antes de hundirnos. Con el tiempo, estas cosas se curan. Te lo prometo.
El tono suave de Sam era tan fuera de lugar como las palabras que salían de su boca. ¿Acaso se notaba que acababa de decir que mi amigo MURIÓ por MI? No había nada que decir. No había nada que decir sobre el hecho de que me encontraba atrapada aquí eternamente con él, mientras a quien amo camina por la tierra buscándome. Mi madre llorando por mí. Rachel...
¡Oh, Dios! No quiero pensar en Rachel. No está emocionalmente estable. Esto no es algo que manejaría con facilidad.
—Sé que es mucho que procesar en este momento. Pero todas esas cosas son de ese mundo. Tienes que dejar de lado la vida que conocías. —
Sam me dirigió una sonrisa y extendió sus brazos a lo ancho, como si me estuviera ofreciendo el mundo—. Brittany, puedes vivir aquí como nunca has vivido antes.
No tenía una respuesta a eso. Él realmente no lo entiende. La humanidad que pensé que poseía, al menos un poco, en realidad no existía, fue una ilusión. Las emociones y pensamientos de Sam no eran las de un ser humano normal.
Creía que me ofrecía un maravilloso mundo, que era mucho más grande, que en el que yo había nacido. Pero era una prisionera. Siempre sería una prisionera. Me encontraba aquí, porque no podía permitir que su padre tomara ningún alma más. Era mi alma, la que había sido condenada. Era mi alma, la que tendría que pagar.
—Ven conmigo. Te voy a enseñar la isla. Es hermoso aquí. Te encantara. Es como un paraíso que otros podrían haber imaginado.
Vamos a caminar a lo largo de la blanca costa y el agua es de un azul cristalino. Luego está mi padre. Quiere conocerte oficialmente. Y…
—No voy a salir de esta habitación. —Puede tener el poder para obligarme a permanecer aquí, pero eso no significaba que tuviera que obedecerlo. Era una maldita mascota molesta, él podía jugar conmigo. Me quedaría aquí. Tal vez voy a perder mi cordura y empezare a hablar con amigos imaginarios. Eso sería mucho más preferible que la realidad.
—Brittany, por favor, no actúes de esta manera. Te aburrirás aquí.
Quiero mostrarte todas las cosas que hay en Vikolan, te gustara. Es tu hogar. Por favor, ven conmigo.
De ninguna manera en el infierno. Negué con la cabeza y caminé para sentarme en la cama. —¿Tienes algún libro aquí? Dudo tener mi iPhone. —Metí la mano en mi bolsillo para ver si mi teléfono seguía en el último lugar que lo había visto. Pero, por supuesto, no.
—Tenemos una biblioteca entera. Llena de todo lo que quieras leer. Ven conmigo. Conseguiremos algunos, no te puedes llevar todos. —La esperanza en su voz sólo encendió más mi furia.
Sacudiendo mi cabeza, espete: —No, gracias. Sólo dormiré —Le informé, sacudiendo las sabanas de satén negro, le di la espalda. No iba a ser capaz de dormir, pero tal vez si pensaba que lo hacía, sería capaz de deshacerme de él, por el momento. Tenerlo aquí no me ayuda a hacer frente a las cosas. La puerta detrás de mí, fue abierta y luego cerrada, dejé escapar un suspiro. Rodando sobre mi espalda, miré fijamente el chiffon negro y trate de imaginar mi eternidad. Se veía muy triste. Con suerte la locura llegaría rápidamente.
Debo haberme quedado dormida porque el sonido de la puerta de piedra moviéndose me asusto.
Frotándome los ojos, me senté y observe a Sam entrando a la habitación.
Su sonrisa era tentativa cuando sus ojos se encontraron con los míos. Bien, lo ponía nervioso acercarse a mí.
Tal vez sería la peor "compañera" y me dejaría ir y buscaría una nueva compañera de juegos.
—¿Te sientes mejor después de la siesta? —preguntó, deteniéndose en los pies de la cama.
No, nunca me sentiré mejor de nuevo. Ni siquiera daré una respuesta a esa pregunta tan ridícula. Sam acepto mi silencio, sin mucha preocupación. Trataba con mi actitud demasiado bien. ¿Y por qué llevaba un esmoquin?
—A mi padre le gustaría que te unieras con nosotros para la cena.
—No. —Nunca.
—Brittany, no puedes rechazar a Ghede. No puedo protegerte de cualquier castigo que él decida que mereces. Por favor, no le desobedezcas.
Tenía que estar bromeando. ¿Estoy atascada en la versión vudú del infierno y piensa que me haré pis por su estúpido papi? —No —repetí. La fría determinación de Sam comenzó a resquebrajarse un poco. Pude ver la frustración en sus ojos y me pregunté si en verdad podría molestarlo, al punto que decida deshacerme de mí. Por supuesto, no esperaba que me enviara de vuelta a la tierra, pero me tiraría a su fosa de fuego o algo así. ¿Tendrían incluso uno de esos?
—Está bien, escucha. Si haces esto por mí yo... Voy a enviar el alma de Puck a ti. Incluso serías capaz de hablar con él. Su alma es diferente cuando no está en la tierra. Una vez que un alma sin cuerpo deja la tierra y habita en el más allá, puede hablar. Es sólo en la tierra que se requiere un cuerpo para la comunicación. Sin embargo, cuando te hable va a ser diferente. No lo hará con su boca. La voz de Puck estará en tu cabeza. Su alma hablara con tu alma.
Puck. Podría ver y hablar con Puck. Me puse de pie y caminé alrededor de la cama hacia la puerta. —Bueno, vamos a hacer esto. Sam se echó a reír detrás de mí. —Tengo que tomar nota de esto. Sólo tengo que encontrar el incentivo adecuado para ponerte en marcha y en movimiento. Ojala hubiera pensado antes en Puck. Y no puedes llevar eso a la cena. Ghede exige respeto. Necesitas vestirte de acuerdo a sus deseos.
—Bueno, Ghede tendrá que superarlo porque cuando me lanzó del maldito puente sólo tenía un par de pantalones vaqueros, un suéter y una chaqueta de cuero. No sabía exactamente que empacar para esta excursión. —Sonriendo, Sam hizo un gesto con su mano, que más bien parecía un patético intento de espantar a una mosca.
—Te ves hermosa y mi padre estará satisfecho. Al bajar la mirada, contuve el aliento. Sabía que tenía algo de busto, pero el apretado escote del vestido ridículamente extravagante, había hecho subir mis pechos a mi nariz. O al menos eso parecía. La falda del vestido estaba a mí alrededor como un aro ¿Qué era esto, 1800?
—¿Por qué acabas de ponerme en un vestido de Scarlett O'Hara? ¿Eres conscientes de que nos trasladamos a la moda de hace mas de cien años?
Sam se río entre dientes y me ofreció su codo. —Mi padre disfrutará de la fiesta. Mardi Gras es su época favorita del año. Hoy en día, el Mardi Gras está en su apogeo a lo largo de las calles de Nueva Orleans, de modo que mi padre tiene sus propias celebraciones aquí. Lo más probable es que él lance cuentas de rosario en la mesa y nos sirva King Cake. Te gustara de verdad. Es conocido por ser el alma de las fiestas.
—¿En serio? Y yo que pensaba que él era conocido por ser el espíritu maligno del mal de los muertos. Tonta de mí. Sam sacudió la cabeza hacia mí. —No puedes decir esas cosas, Brittany. No lo va a aprobar. No puedo evitar que se te castigue. Por favor, escucha lo que dices. Si no lo haces, no seré capaz de traer a Puck para ti esta noche.
Eso fue suficiente para hacerme callar. Tengo que morder mi lengua y negociar con él. Bajando la mirada, el vestido lavanda y púrpura oscuro con perlas que adornaban, me pregunté si tendría que soportar este ridículo vestido todas las noches. Si es así, ¿Significa eso que conseguiré ver a Puck?
—Vamos. La cena espera y debes estar hambrienta.
Mi estómago gruñó en respuesta y Sam sonrió antes de abrir la puerta y permitirme salir. Esta vez, no había calles malolientes. En cambio, el amplio pasillo se encontraba adornado con lámparas de gas y algunas esculturas con máscaras a lo largo de las paredes. Eran el tipo de máscaras que se ven en los bailes de disfraces.
Elegante y bueno… exquisitas eran las únicas maneras de describirlas.
—Estos son recuerdos del Mardi Gras pasado. Cada año, mi padre hace una fiesta de disfraces el Fat Tuesday y cada máscara es la asistencia que siempre es recordada por estas paredes.
Si no despreciara todo lo relacionado con este lugar podría encontrarlo interesante.
____________________________________________________________________________
Que les ha parecido esta parte de la historia ya sabemos por que murio Puck, habra alguna forma de que regrese???, Violokan sera un lugar bonito o no??? pronto sabremos lo que hizo la mama de Brittany y lo mas importante que pasara con Santana y que ara para recuperar y si puede recuperar a Brittany ya que como sabemos, si regresa mataran a mas seres queridos.
Perdón por la tardanza, pero aquí están los capítulos ya faltan muy pocos y los siguientes los subiré el jueves y después subiré el final el sábado, si desean que suba la parte que seria de Sam y su vercion de la historia díganmelo, o continuamos con la ultima parte la historia es asi, exitence, predestined, Sam, la ultima parte que no recuerdo jajaja. y para quienes les gusto la historia tengo ya mas adaptadas así que seguiré subiendo hasta que me digan ya no.
Finalmente no dejen de comentar
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Hola...
Muy interesante los caps... espero que santana arregle todo y recupere a britt..., me da pena que esten separadas ojala pronto juntas, yo creo que sam esta de mas, ve con el tercer libro...
Muy interesante los caps... espero que santana arregle todo y recupere a britt..., me da pena que esten separadas ojala pronto juntas, yo creo que sam esta de mas, ve con el tercer libro...
Invitado- Invitado
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
estoy harta de ese boca de trucha, en todas las historias aparece como un estorbo! en fin a esperar a ver que pasa!
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Time-young&day481 escribió:Hola...
Muy interesante los caps... espero que santana arregle todo y recupere a britt..., me da pena que esten separadas ojala pronto juntas, yo creo que sam esta de mas, ve con el tercer libro...
Si me lo permiten es la historia de los dos libros en resumen desde su perspectiva, y precisamente siempre sera el "malo" jajaja por que aqui todos o todas queremos Brittana, si no acaba en final feliz no nos gusta, o en su defecto se tiende a no querer a Danni jajaja que cabe constar que en las siguientes historias que suba sera un personaje regular pero en resumen si yo también lo odio pero es por como dicen la química que hay entre las actrices al actuar hace que sea mas creíble jajaja. Y con tantos recortes de capitulos y las noticias sobre la serie creo que sera mejor que hagamos nuestros finales felices por si no tenemos uno en la serie.
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
micky morales escribió:estoy harta de ese boca de trucha, en todas las historias aparece como un estorbo! en fin a esperar a ver que pasa!
Si me lo permiten es la historia de los dos libros en resumen desde su perspectiva, y precisamente siempre sera el "malo" jajaja por que aqui todos o todas queremos Brittana, si no acaba en final feliz no nos gusta, o en su defecto se tiende a no querer a Danni jajaja que cabe constar que en las siguientes historias que suba sera un personaje regular pero en resumen si yo también lo odio pero es por como dicen la química que hay entre las actrices al actuar hace que sea mas creíble jajaja. Y con tantos recortes de capitulos y las noticias sobre la serie creo que sera mejor que hagamos nuestros finales felices por si no tenemos uno en la serie.
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
holap,...
lo único que quiero es que san le arranque la cabeza a sam!!!!
espero que san no tarde mucho en encontrar a britt, no me gusta que estén separadas...
omitamos la parte de sam,.... es al que mas odio así que si no aparece mejor jajaja
nos vemos!!!
lo único que quiero es que san le arranque la cabeza a sam!!!!
espero que san no tarde mucho en encontrar a britt, no me gusta que estén separadas...
omitamos la parte de sam,.... es al que mas odio así que si no aparece mejor jajaja
nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
3:) escribió:holap,...
lo único que quiero es que san le arranque la cabeza a sam!!!!
espero que san no tarde mucho en encontrar a britt, no me gusta que estén separadas...
omitamos la parte de sam,.... es al que mas odio así que si no aparece mejor jajaja
nos vemos!!!
Ok de aqui a lo que acaba la historia si no hay apelaciones a la causa omitimos a Sam y lo pongo al final de la historia por quien quiera que opinan.
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Hey! como estás? Me había atrasado bastante con los caps, pero bueno! Ya me puse al corriente!! :) muero por saber si Santana y Quinn podrán llegar a donde esta britt y si pueden regresarla sin más muertes, pobre de puck :( no se merecía una muerte así.. Y ese boca de trucha haciendo y deshaciendo a su antojo hasta que consiguió que Britt se fuera con el :'( lo detesto!! Saludos!! Hasta la siguiente actu!! :)
Dolomiti- - Mensajes : 1406
Fecha de inscripción : 05/12/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Jai. :)
Hace mucho que empece a leer la adaptación pero apenas me "ánimo" a comentar. Pues me gustan los malos y más los inteligentes así que me gusta la forma en la que Sam puede llegar a chantajear a Brittany, espero lo sepa utilizar y no sea de esos villanos que parecen tener claro lo que planean y al final "los derrotan" muy fácil. Estaría muy padre que subieras la perspectiva de Sam más o menos para saber como piensa, entiendo que Sam no es completamente malo porque de alguna forma quiere a Brittany...
Espero que Quinn y Santana no encuentren muy fácil a Britt y espero ver como la va pasando Rachel.
No tardes mucho en actualizar por favor, saludos. ;)
Hace mucho que empece a leer la adaptación pero apenas me "ánimo" a comentar. Pues me gustan los malos y más los inteligentes así que me gusta la forma en la que Sam puede llegar a chantajear a Brittany, espero lo sepa utilizar y no sea de esos villanos que parecen tener claro lo que planean y al final "los derrotan" muy fácil. Estaría muy padre que subieras la perspectiva de Sam más o menos para saber como piensa, entiendo que Sam no es completamente malo porque de alguna forma quiere a Brittany...
Espero que Quinn y Santana no encuentren muy fácil a Britt y espero ver como la va pasando Rachel.
No tardes mucho en actualizar por favor, saludos. ;)
iFannyGleek****** - Mensajes : 335
Fecha de inscripción : 03/10/2013
Edad : 27
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
iFannyGleek escribió:Jai. :)
Hace mucho que empece a leer la adaptación pero apenas me "ánimo" a comentar. Pues me gustan los malos y más los inteligentes así que me gusta la forma en la que Sam puede llegar a chantajear a Brittany, espero lo sepa utilizar y no sea de esos villanos que parecen tener claro lo que planean y al final "los derrotan" muy fácil. Estaría muy padre que subieras la perspectiva de Sam más o menos para saber como piensa, entiendo que Sam no es completamente malo porque de alguna forma quiere a Brittany...
Espero que Quinn y Santana no encuentren muy fácil a Britt y espero ver como la va pasando Rachel.
No tardes mucho en actualizar por favor, saludos. ;)
Hola estoy de acuerdo las historias que son así de fáciles no son mucho de mi interes espero no decepcionarte jaja y en cuanto a lo de Sam mira muchos lo odian ya pero hagamos algo si como va la mayoría no lo quiere su parte la subiré al final del tercer libro cronológico, pero si tu la quieres te le envió a un correo que me digas por mensaje privado para que lleves la continuidad.
En cuanto a la siguiente tanda de capítulos hoy mismo estarán los iba a subir pero aran pruebas de mi internet y no lo tendré un rato asi que espero tu respuesta. Cuídate y gracias por comentar espero que las siguientes historias sean de tu agrado
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Dolomiti escribió:Hey! como estás? Me había atrasado bastante con los caps, pero bueno! Ya me puse al corriente!! :) muero por saber si Santana y Quinn podrán llegar a donde esta britt y si pueden regresarla sin más muertes, pobre de puck :( no se merecía una muerte así.. Y ese boca de trucha haciendo y deshaciendo a su antojo hasta que consiguió que Britt se fuera con el :'( lo detesto!! Saludos!! Hasta la siguiente actu!! :)
Ya extrañaba a mi seguidora uno por que fue quien hizo el primer comentario si no mal recuerdo seria importante saber tu opinión y en cuanto a lo de Sam mira muchos lo odian ya pero hagamos algo si como va la mayoría no lo quiere su parte la subiré al final del tercer libro cronológico, pero si tu la quieres te le envió a un correo que me digas por mensaje privado el cual creo ya tengo para que lleves la continuidad. Es corto es de 70 pag o menos y narra su opinion hay cosas interesantes pero a como gustes.
En cuanto a la siguiente tanda de capítulos hoy mismo estarán los iba a subir pero aran pruebas de mi internet y no lo tendré un rato asi que espero tu respuesta. Cuídate y gracias por comentar espero que las siguientes historias sean de tu agrado. Nunca me dijiste cual era la que preferirías, ya que me he dedicado a leer mas de 50 libros para hacer mas historias como dije al final hay que hacernos a la idea de que en la serie darán probablemente de los máximo 533 min que serian 13 cap nos darán en total un final de 30 a 45 min como mucho. Espero que no te pierdas y como siempre no dejes de comentar
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Lo sé!! y lo siento!! Esque la mayoría de veces leo en mi cel y bueno!! se me pasaron las actualizaciones... dije... amm.. creo que no a tenido tiempo de actualizar.. y cuando revisé en la compu dije que??? cap 19??? Pero si me quedé en el 8!!! y bueno! me puse al corriente!! Jajjaa claro niña!! Sam se da a odiar... pero creo que si me gustaría leer su perspectiva... y sip!! ya tienes mi correo, pero por cualquier cosa me dices y te lo vuelvo a mandar
Como te había comentado, podrías poner como el prólogo de algunas historias que tengas en mente y hacerlo por votación, esa sería una opción!! pero como te decía a mi me gustaría algo así como la historia de romance, engaños y amor que habías comentado jejej esque me gusta un poco el drama aunque una historia tipo los juegos del hambre también me llama la atención.... Creo que no soy de mucha ayuda pero sin duda alguna me tendrás en tu siguiente historia
Besos!! Nos leemos pronto
Como te había comentado, podrías poner como el prólogo de algunas historias que tengas en mente y hacerlo por votación, esa sería una opción!! pero como te decía a mi me gustaría algo así como la historia de romance, engaños y amor que habías comentado jejej esque me gusta un poco el drama aunque una historia tipo los juegos del hambre también me llama la atención.... Creo que no soy de mucha ayuda pero sin duda alguna me tendrás en tu siguiente historia
Besos!! Nos leemos pronto
Dolomiti- - Mensajes : 1406
Fecha de inscripción : 05/12/2013
Re: Fan fic Brittana Existence / Predestined/SAM (pendiente)/ Ceaceles / TERMINADO
Capítulo 20
Santana
La madre de Brittany se encontraba en duelo. Podía oír su dolor desde fuera de la casa. Había pasado dos días buscando la manera de penetrar en Vilokan. Pero Brittany no querría que su madre llorara su muerte. No querría saber que su madre tenía una completa crisis emocional. Ahora mismo, esta era la única cosa que podía hacer por ella y en cambio, podía encontrar si había algo, cualquier cosa que su madre recordara acerca de la noche con el doctor vudú en la choza.
Llamar a la puerta seria lo que ella esperaba. Me veía como el novia de Brittany. Si quería que creyera que no soy un ser humano, tendría que entrar de una manera diferente. Sólo esperaba que no se asustara demasiado.
Aparecí en el taburete de la barra, directamente en frente de la madre de Brittany. Ella se encontraba sentada en la mesa con una taza de café. Podía oler el whisky en su bebida.
Los ojos hundidos se destacaban con anillos oscuros por no dormir, su mirada se encontró con la mía. Sorprendentemente, ni siquiera se inmuto. En cambio, me miró directamente y me estudió en silencio. No hubo manchas de lágrimas corriendo por su rostro.
Su rostro eran los de una completa pérdida y angustia. Había visto esa expresión en otras madres, que se enfrentan a la pérdida de su hijo. Pero este dolor de madre hizo que mi pecho doliera. Tal vez, porque compartía su dolor. Aunque sabía que Brittany no ha muerto, se había ido.
Por ahora.
—Santana . —Por fin habló. Su voz era pequeña y áspera por el poco uso.
—Sí —le contesté, a la espera de que dijera más. No lo hizo de inmediato. Tenía su cabeza inclinada y buscaba en mi rostro las respuestas a sus preguntas, sabía que se acumulaban en su cabeza. Pensó que había bebido hasta quedarse dormida y que se encontraba soñando.
Posiblemente alucinando. Varias explicaciones diferentes corrieron a través de la niebla de sus pensamientos
—¿Cómo has…? —Callo, no sabía que decir exactamente. ¿Cómo acabas de aparecer de la nada? Aún podía ver la incertidumbre en sus ojos.
—Porque no soy un ser humano. Soy algo más. —La dejé asimilar esa información.
Dio un suspiro de cansancio y empujó la taza de café y whisky fuera de ella.
—Bueno, he tenido mucho de eso, supongo.
—No soy una alucinación. He estado aquí en su casa casi todas las noches desde el momento en que el alma de Brittany estuvo marcada por la muerte. Vigilándola.
—¿Tu sabías que iba a morir? —La pregunta de su madre era una mezcla de ira y confusión.
Sacudiendo la cabeza sostuve su mirada. —No. Brittany no está muerta. No le permití morir en el accidente de coche que debería haber tomado su vida, y no murió cuando su coche se salió de ese puente.
Empujándose así misma de nuevo fuera de la mesa, se puso de pie.
—Tengo que ir a la cama. No he dormido en un tiempo y ahora estoy perdiendo la cabeza —murmuró.
Me puse de pie y me detuve en su camino. —No. No lo harás. Soy real y lo que te estoy diciendo también, Brittany está viva. Su alma está en su cuerpo. Sin embargo, el espíritu vudú al que la vendiste, cuando era una niña, tiene derecho sobre ella y en este mismo momento él la tiene.
Necesito que me escuches, confía en mí y ayúdame. Poco a poco el rostro de su madre, paso de la incredulidad al horror. Comprobé que estuviera estable, hasta que sus piernas se reunieron con el sillón de cuero detrás de ella, se dejó caer en él y la comprensión hundió más su rostro. No estaba segura de si lo creía o no, pero sabía que mis palabras tenían algo de verdad.
—¿El espíritu vudú? —susurró con voz entrecortada.
—Sí, el médico vudú que abrió el alma de Brittany con el fin de salvar su vida.
Sacudió la cabeza y levantó los ojos de nuevo hacia mí —Nunca prometí su alma. Nunca haría algo por el estilo. Sólo pregunté por cualquier forma de hacer alguna magia especial o poción milagrosa para curarla. La enfermera, la enfermera dijo que su abuela nos podría ayudar.
Me encontraba desesperada y dispuesta a intentar cualquier otra vía. La medicina tradicional no funcionaba. Pensé que con las hierbas y remedios naturales de la anciana, podría tener alguna posibilidad de hacer algo que los médicos no pudieron. Nunca... nunca... prometí su alma.
Los seres humanos eran tan ingenuos de los poderes sobrenaturales a su alrededor. Las cosas que creían muchos, otros tenían una fácil explicación. Los conceptos de magia y poderes eran tan exagerados que ellos asumían una curación natural. Esa sería una explicación médica que cubre todo.
—El vudú no son hierbas y recursos naturales de jurisdicción. Es una religión. Una que se hace poderosa por los malos espíritus, cuando los seres humanos creen en ellos. Si no crees, entonces no pueden hacerte daño. Pero si alguna vez encomienda responder una solicitud, se encuentra en deuda con el espíritu que responde. Quiso salvar a su hija de la muerte. Sólo hay un espíritu vudú que puede hacer eso. Uno poderoso. El espíritu del Señor de los muertos puede otorgar la vida. Es aficionado a la concesión de las vidas de los niños. Pero no es por amabilidad. Porque entonces, él es dueño de su alma. Le pidió al médico vudú que hiciera lo que sea por ella. Sin embargo, Ghede, el espíritu señor de los muertos, podía hacer algo. Y así lo hizo. Él le dio vida a Brittany cuando era su destino fallecer. Su alma tendría una vida corta esta vez. Su otra vida hubiera sido más larga. Permitiste que el mal cambiara eso porque no estabas dispuesta a dejarla ir. Ahora, Ghede ha venido a reclamar lo que por derecho le pertenece.
Ella no habló de inmediato. Vi cómo se hundía más con mis palabras y procesaba todo lo que le había dicho. No es fácil para los humanos entender. Por lo menos no los temas espirituales. Pero esperaba que, debido a que había experimentado el poder del vudú aquella vez, por lo menos podría abrir su mente.
—¿Me estás diciendo que Brittany esta... ella está en…?
—Vilokan, el reino más allá o espiritual, donde los espíritus del vudú habitan. Está ahí en su forma humana. Ellos no pueden tomar el alma de su cuerpo sin la Muerte y puedo asegurarte que la Muerte no se llevará su alma. —Explicarle que yo era la muerte sería llevar las cosas un poco demasiado lejos. Había tomado en su mente todo lo que era capaz de manejar.
—¿Cómo hago? ¿Qué debo hacer? Si está en Vilokan ¿Hay alguna manera en la que pueda traerla de regreso? ¿Cómo puedo solucionar este problema?
—Usted no. Pero yo lo haré. Sólo necesito que recuerdes esa noche.
Desde el momento en que la enfermera vino y el momento en el que Brittany se curó. Luego, necesito que recuerde la infancia de Brittany. Esta ese niño, un niño rubio que entró en su vida varias veces. Necesito que lo recuerde todo. Incluso si cree que no es importante. Necesito saberlo.
Asintió con la cabeza y luego frunció el ceño —¿Y si estoy dormida?
¿Esto no es un sueño?
—No, está muy despierta. De hecho, ¿Por qué no va y se preparas una taza de café sin el whisky esta vez? La necesito tan alerta como sea posible.
—Sí, está bien, eh, ¿no tomas café? —preguntó volviendo a mirarme.
—No, gracias. Estoy bien. —Le aseguré, y se apresuró a entrar en la cocina para preparar la taza. Me levanté y me acerqué a la repisa, tomé una de las muchas fotos de Brittany alineadas en la misma. Se encontraba sonriendo con alegría a la cámara, con los brazos colgando sobre los hombros de Puck y Rachel. Froté la yema de mi dedo pulgar por encima de su dulce sonrisa, luego, coloque la imagen en su lugar.
—Acaba de ocurrir algo. La madre de Rachel dijo que Sam iba en el coche con ella y que está también desaparecido.
Sin darme la vuelta para mirarla, respondí.
—Sí, me imagino. Considerando que Sam es el hijo de Ghede. El fuerte ruido de la taza golpeando el suelo de baldosas me recordó, que trataba con un humano aquí. Uno que, a diferencia de Brittany, no había visto almas durante toda su vida. Realmente necesito decir las cosas con un poco más de cuidado.
Brittany
Cuando acepte la invitación de Ghede ni una sola vez imaginé, lo que veía en la larga mesa de seis metros. Echándose hacia atrás, con una sonrisa siniestra en su rostro, era una figura alta con un negro sombrero de copa, un par de gafas de sol oscuras y dos cigarrillos colgando de su boca. Por lo que podía decir, llevaba un esmoquin de colas. Sus dos pies apoyados en la mesa, mientras se reclinaba en la silla de mármol y un enorme espaldar que, me recordó más, a un trono de una película de princesas. Salvo, como la mayoría de los otros elementos en la habitación, era negro.
Sam nos había colocado justo a la derecha de él y sonreía con orgullo como si hubiera traído a su preciada posesión para impresionar a su padre.
Una mujer escasamente vestida colocó una copa de plata gigante delante de mí y me sentía un poco preocupada de que sus senos fueran a explotar en mi cara. Me encontraba aterrorizada de tomar o beber algo, que un montón de espíritus vudú pusieran algo en mi comida, pero quería ver a Puck. Por lo que me forcé a recoger la copa y entre abrir los labios.
El hedor quemó mi nariz y rápidamente la coloqué de nuevo en su lugar. No tomaré eso.
La risa de Sam me sobresaltó y de un tirón llamo la atención de Ghede, para verlo golpear la mesa con una mano y reír sorprendentemente en voz alta, sin dejar caer ni una vez un cigarrillo de su boca.
—Me divierte hijo —gritó y el resto de los asistentes en la mesa se unieron a su risa.
La mano de Sam tomó la mía bajo la mesa, en un intento de apretón y luego la apartó rápidamente.
No quería que me tocara.
—No te gusta el ron —declaró Ghede para que el resto de la mesa escuchara.
Ron. Así que eso era. No, no me gustó el ron.
—No —respondí, incapaz de sostener su mirada penetrante, incluso con las gafas oscuras. Todavía podía sentirlo.
—Ah, eso podemos solucionarlo
Es muy improbable.
—¿Podrías tener un poco de soda, padre? —preguntó Sam y por una
vez me sentí agradecida por su presencia. Tenía la boca muy seca.
—Si, trae un poco de soda —Ordenó a una de las mujeres de pie, alrededor de la mesa, a la espera de hacer su voluntad.
—Gracias —Logré articular. Puck, me recordé a mí misma. Hacía esto por Puck.
—Ah, y tiene costumbres. Has elegido una buena, hijo. Me agrada. Sam sonrió a mi lado y sentí el impulso de vomitar.
—Un brindis —anunció en voz alta Ghede al resto de la mesa—.
Ella se enamoró de Snix. Correcto. —Gozo de las respuestas de sorpresa que venían de los otros. Me asomé bajo la mesa, por primera vez desde que me había sentado, y tuve que esforzarme para no bostezar. Por lo menos mi vestido no destacaba. Cada mujer en la mesa se encontraba vestida de una manera similar al estilo antiguo. Sin embargo, sus pechos eran mucho más grandes, por lo que en realidad tenía el escote a la altura de su nariz. Mi respiración se atascó, cuando observé a uno de los hombres, tirar de la parte delantera de una dama hasta que su pecho entero rebotó libre.
Aparté la mirada y estudié otro lado de la mesa. Los hombres iban vestidos con trajes de etiqueta e incluso varios llevaban máscaras negras. Los peinados de las mujeres, fueron alarmantemente altos. Rizos apilados al menos de treinta centímetros, joyas brillantes, plumas y otros accesorios. Todos bebieron abundantemente y reían estridentemente. Un chillido fuerte trajo mis ojos de nuevo al otro lado de la mesa y vi como el hombre que sacó los pechos de la mujer, ahora dejaba el trasero de ella en el borde de la mesa, con su vestido levantado, y tenía las piernas extendidas mientras gritaba con deleite. Cuando el hombre fue a desabrochar sus pantalones cerré los ojos y moví mi cabeza hacia la pared, detrás de la cabeza de Sam.
Querido Dios, iban a... hacerlo en la mesa. ¿Qué había acordado?
—Padre, por favor, Brittany no está acostumbrado a este tipo de comportamiento. ¿Por esta noche se puede detener? —preguntó Sam a mi lado y quería enterrar mi cara en su hombro y empezar a tararear una canción, que disfrazara los fuertes gruñidos que venían del hombre tan sólo a unos metros.
—¿Qué? El sexo es parte de la diversión. ¿Que es una fiesta sin el placer de la carne? Nada. Esa no es la respuesta. La mujer empezó a gemir en voz alta y gritar palabras que nunca había oído antes. El brazo de Sam rodeó mis hombros y a su lado usé su brazo para callar el sonido, mientras mis ojos seguían herméticamente cerrado.
—Lo siento, Brittany —susurró en mi pelo.
Si él realmente lo sintiera, no me habría sobornado para que viniera a este lugar. No era una comida, esto era... una... maldita orgía. Más gemidos se unieron y me encogí con horror, cuando las mujeres daban sugerencias vulgares y los hombres gritaban descripciones desagradables.
Esto no era nada como lo que había imaginado.
—Por favor, Padre, ¿Puedo ser excusado? —preguntó Sam.
—Hmph, supongo. No quiero detener mi fiesta. Toma a la chica, enviaré comida para ustedes.
Aliviada, me levanté con cuidado de no echar un vistazo hacia la mesa y dejar que Sam me lleve a la habitación, de nuevo en la seguridad del gran pasillo.
—Ay. Dios. Mío —Le susurré horrorizada. Mi mente siempre quedaría traumatizada.
—Lo siento. Esperaba que con mi padre allí, pudieran contenerse pero…
—Pero él es un enfermo pervertido —Terminé por él.
Sam comenzó a abrir la boca, pero lo interrumpí.
—No lo hagas. No me importa lo que tengo y lo que no puedo decir sobre él, aquí. Esa fue la experiencia más repugnante de mi vida. Y tú sólo me llevaste directamente a ella. Sin preparación, ni advertencia.
—Porque si no, no hubieras asistido y mi padre te habría castigado.
—¿Y eso no fue un castigo?
—No, encuentra eso entretenido. Él es el un espíritu vudú sobre muchas cosas. El erotismo es uno de ellos.
—Uf, ¡oh!, ¡uf! —Negué con la cabeza y comencé a caminar hacia la habitación en la que había estado antes.
—¿No quieres ver a la biblioteca? —preguntó Sam.
Pensé en lo que acababa de ver y tuve una idea de lo que la biblioteca contenía, probablemente el noventa por ciento de porno, era una salida importante para mí.
—No, prefiero ir a lavar con cloro mis ojos y mis oídos —Le espeté de vuelta.
—¿Qué pasa con Puck? Había utilizado el poder de esa jugada. Me detuve y lo fulminé con la mirada. Odiaba que aún tuviera algún control sobre mí.
—Si de verdad sintieras lo de esta noche, lo enviarías a mí ahora. Sam asintió con la cabeza. —Hecho. Y te voy a traer comida, también. Comida normal y soda.
No discutí, porque sabía que, cuando mi estómago se estableciera de esa escena asquerosa de la que fui testigo, iba a tener hambre. Hacía un tiempo desde que había comido.
—Cruza a la derecha, es la tercera puerta —Instruyó Sam. Era buena con las direcciones, así que no necesitaba que me lo recordara, pero aun así, asentí con la cabeza y seguí mi camino. Ahora, me sentía aterrorizada de lo que podría ser testigos en estos pasillos.
La puerta era de un color púrpura oscuro, con una gran calavera negra esculpida en mármol montado en el centro de la misma. No había prestado atención a la puerta cuando habíamos salido, anteriormente.
Es triste, pero esto fue un recuerdo reconfortante para mí. Anteriormente, lo había odiado. Ahora, después de la horrible experiencia, decidí que tenía que estar muy bien informada de esta habitación, porque no la dejaría de nuevo.
Al mirar hacia mi vestido, lo quería fuera. Me recordó a las otras mujeres y me hizo sentir sucia llevarlo. Sin embargo, no vi mis otras ropas.
____________________________________________________________________________
Bueno comenzamos con la penúltima parte del segundo libro
awong_snix- ---
- Mensajes : 552
Fecha de inscripción : 15/11/2013
Contenido patrocinado
Página 5 de 11. • 1, 2, 3, 4, 5, 6 ... 9, 10, 11
Temas similares
» Adaptación Brittana "Ven a buscarme " TERMINADO
» FanFic Brittana: "7 Noches De Pecado G'P" terminado
» FIC - PAN COMIDO - terminado
» Adaptación Brittana "Amor accidental" TERMINADO
» Adaptación Brittana Buenos Negocios TERMINADO
» FanFic Brittana: "7 Noches De Pecado G'P" terminado
» FIC - PAN COMIDO - terminado
» Adaptación Brittana "Amor accidental" TERMINADO
» Adaptación Brittana Buenos Negocios TERMINADO
Página 5 de 11.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Lun Mar 14, 2022 3:20 pm por Laidy T
» Busco fanfic brittana
Lun Feb 28, 2022 10:01 pm por lana66
» Busco fanfic
Sáb Nov 21, 2020 2:14 pm por LaChicken
» [Resuelto]Brittana: (Adaptación) El Oscuro Juego de SATANÁS... (Gp Santana) Cap. 7 Cont. Cap. 8
Jue Sep 17, 2020 12:07 am por gaby1604
» [Resuelto]FanFic Brittana: La Esposa del Vecino (Adaptada) Epílogo
Mar Sep 08, 2020 9:19 am por Isabella28
» Brittana: Destino o Accidente (GP Santana) Actualizado 17-07-2017
Dom Sep 06, 2020 10:27 am por Isabella28
» [Resuelto]Mándame al Infierno pero Besame (adaptación) Gp Santana Cap. 18 y Epilogo
Vie Sep 04, 2020 12:54 am por gaby1604
» Fic Brittana----Más aya de lo normal----(segunda parte)
Mar Ago 25, 2020 7:50 pm por atrizz1
» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
Lun Ago 03, 2020 5:10 pm por marthagr81@yahoo.es
» Que pasó con Naya?
Miér Jul 22, 2020 6:54 pm por marthagr81@yahoo.es
» [Resuelto]FanFic Brittana: Medianoche V (Adaptada) Cap 31
Jue Jul 16, 2020 7:16 am por marthagr81@yahoo.es
» No abandonen
Miér Jun 17, 2020 3:17 pm por Faith2303
» FanFic Brittana: " Glimpse " Epilogo
Vie Abr 17, 2020 12:26 am por Faith2303
» FanFic Brittana: Pídeme lo que Quieras 4: Y Yo te lo Daré (Adaptada) Epílogo
Lun Ene 20, 2020 1:47 pm por thalia danyeli
» Brittana, cafe para dos- Capitulo 16
Dom Oct 06, 2019 8:40 am por mystic
» brittana. amor y hierro capitulo 10
Miér Sep 25, 2019 9:29 am por mystic
» holaaa,he vuelto
Jue Ago 08, 2019 4:33 am por monica.santander
» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
Miér Mayo 08, 2019 9:25 pm por 23l1
» [Resuelto]FanFic Brittana: Comportamiento (Adaptada) Epílogo
Miér Abr 10, 2019 9:29 pm por 23l1
» [Resuelto]FanFic Brittana: Justicia V (Adaptada) Epílogo
Lun Abr 08, 2019 8:29 pm por 23l1