Aprendiendo sobre el amor!!... Capítulo 36

Holaaa gracias por sus comentarios me gusta dejarlas con la intriga (Soy mala jeje) pero para que vean que no soy tan mala hoy les dejo un cap mas HOT jajaja disfrutenlo.

Posdata: Ando de pasada después prometo que cuando tenga oportunidad respondo cada comentario...

Capítulo 16

Narra Brittany

— ¿A dónde hablamos? ¿Quiere ir afuera?
—No, ven
Santana volvió a mirar a Dianna y yo le articulé que me esperara. La señorita Santana tomó mi brazo y camino conmigo hasta una de las habitaciones del primer piso y cerró la puerta. Me di cuenta que era un despacho por el escritorio.
— ¿Prenderás la luz? – le pregunté desde el otro lado del cuarto.
—Si – Santana caminó y prendió la luz.
— ¿Qué es lo que quiere hablar señorita? – estábamos tan lejos, esto era tan raro.
—Nada en realidad solo quería un tiempo a solas contigo.
— ¿Conmigo? ¿Por qué? ¿Qué hice? Me va a regañar por algo del instituto ¿verdad?
—No, lo que leíste el otro día fue increíble – no dejaba de mirarme.
—Eres muy buena con las palabras y hasta podría jurar que te relacionas mejor escribiendo que hablando en persona.
— ¿Me encerró en un despacho para hablar de mi tarea de instituto? Tengo a una chica increíble allá afuera que me está esperando y…
—No quiero que subas a los cuartos con ella – me quedé callada y dejé que hablara.
—Durante toda la noche esperé un maldito momento para acercarme a ti, para felicitarte por tu pelea pero no podía porque tú estabas muy solicitada y no me molesta porque son tus amigas y tienes que disfrutar pero yo… yo solo quería un momento contigo, un instante, me hubiera gustado abrazarte y decirte que peleaste magnífico que nunca antes había disfrutado tanto una pelea, pero no podía y entonces… entonces llegó Sam – fruncí el ceño – una parte de mí sabía que te iba a molestar por todo lo que paso y así entones tendría tu atención pero no fue así, me viste y decidiste salir de la fiesta.
— ¿Qué se suponía que hiciera? Que fuera corriendo y lo golpeara por tratar de violarla hace dos días y usted está con él como si nada. No es correcto sabe.
— ¿Estas molesta?
—Es peor que eso, si estuviera molesta podría quebrar un puto vaso y eso disminuiría
— ¿Entonces?
— ¿Por qué no quiere que vaya a las habitaciones del segundo piso con Dianna?
— ¿Por qué crees tú?
—No juegue conmigo, usted me hizo venir hasta acá cuando ahora podría estar pasando un buen momento con esa chica y usted…
—Me matan los celos Brittany – en ese momento la señorita Santana tuvo toda mi atención.
—Me mata saber que muchas de las que se te acercaron solo te quieren en su vida para que te las folles cuando eres más que un pedazo de carne, cuando yo sé que vales mucho. Cuando estaba con Sam decidí tratar de sacarte celos lo cual es estúpido porque tengo 24 años y me estoy comportando como un niñita de 15 pero es tu culpa sabes – Santana se comenzó a mover por todo el despacho.
—Es tu culpa por tener esa cara de niñita buena que después se transforma en la reina del sexo desenfrenado, es tu culpa por ser tan tímida e intimidante a la misma vez, es tu culpa por tener esos tatuajes que solo me hacen tener malos pensamientos y es tu culpa por ser tan jodidamente atractiva ¡tú Brittany! – me apuntó con su dedos.
—Eres todo lo que no quería en mi vida, eres un desastre emocional, eres un desastre con tu ropa, con tus pensamientos, con tus gustos, a diferencia mía eres todo lo contrario Brittany, te conocí y mi mundo dio una vuelta de 360° y no sé qué hacer para volver a la normalidad porque resulta que eres mi alumna, resulta que trato de ignorarte y a ti te da igual que lo haga y llegas y me hablas como si…
— ¿Quién le dijo que me daba lo mismo si me ignoraba o no?
—Se te nota, se te notó hoy cuando saliste con Quinn de la fiesta.
—Salí porque no aguantaba los celos – me sentía vulnerable a su lado pero no era momento para bajar mi carácter.
—Sí, estaba celosa y es una sensación horrible porque nunca me había pasado.
— ¿Celosa? ¿De Sam?
—Sí, yo… yo le dije… — mierda sabía que no iba a poder mantener mi carácter.
— ¿Qué me dijiste? – Santana comenzó a acercarse con tan decisión que comencé a retroceder
—Le dije que… que… ugh – gruñí.
—Dilo Brittany, dilo ahora porque no tendremos ni una sola oportunidad más – tomé aire y lo dije.
—Le dije que sus piernas eran mías, que no me gustaba que nadie se las tocara y que no quería ver que nadie lo hiciera. Pero a usted no le importó y dejó que lo hiciera igualmente sabiendo que estaba mirando.
—Quería ponerte celosa y adivina.
— ¿Qué? – choqué con el escritorio que estaba atrás de mí.
—Funcionó – ella sonrió y yo también.
—No sé qué estamos haciendo pero…
— ¿Usted ha tenido algún tipo de relación?…
—Nunca he tenido una relación seria con nadie y no la pienso tener – nos quedamos mirando.
—Si me siento atraída hacía las personas pero tu… lo tuyo es algo que no puedo controlar y sigo sin entender como me he controlado tanto – la quede mirando.
—Pero si tu pregunta es que si acaso he tenido algún tipo de relación con mis alumnos anteriormente puedo decir que si pero relación nunca fue.
— ¿Por qué… porque ellos nunca dijeron nada? – Santana sonrió.
— ¿Por qué crees tú?
— ¿Notas? – negó con su cabeza.
—No… lo sé.
Entonces me di cuenta que nuestra distancia era mínima, yo no tenía para donde salir corriendo y ni siquiera sabía si quería escapar de esto o no.
— ¿Te acuerdas de lo que me dijiste en mi casa cuando delirabas?
—Dije muchas cosas.
—Me dijiste que te rogaría para que me lleves a tu cama ¿lo recuerdas?
—Sí, si lo recuerdo.
—No creo que ganes – sonreí.
— ¿Por qué está tan cerca señorita Santana? – dije cuando solo estábamos a centímetros la una de la otra.
—Te lo dije, quiero algo de tiempo contigo.
— ¿Entonces que va hacer?
— ¿Te puedo abrazar? – sonreí nuevamente y me di cuenta que Santana se parecía en algo en mí solo que en ella era difícil de encontrar. También bajaba los muros que ella misma se había impuesto pero solo pasaba a veces, me había dado cuenta que la señorita Santana era una persona muy difícil de doblegar.
— ¿Te puedo abrazar o no? – volvió a repetir y sonreí.
—Los abrazos no se le niegan a nadie – me enderecé frente a ella y está vez yo tomé el control. Tomé un mechón de cabello y lo coloqué detrás de su oreja, ella sonrió y deje escapar una leve risa.
—Ni menos a usted – dejé que el pulgar de mi mano derecha acariciara su mejilla.
—Pero antes creo que debería sacarme el Beanie ya que no le gustan…
—No es que no me gustes – ella me interrumpió.
—Solo te hace ver más deseable y me vuelve loca – en ese momento la señorita Santana escondió su cabeza en mi cuello y sentí el roce de su nariz en mi piel.
—Hueles tan bien – y sin pensarlo dejé un leve beso en la piel desnuda de su hombre que se podía ver por el diseño del vestido que andaba trayendo. Mis manos vagaban por su espalda acariciándola y las manos de Santana jugaban con las puntas de mi cabello.
— ¿Qué me estás haciendo? – Dijo en mi oído.
—Nunca antes me había pasado esto contigo – se alejó lentamente pero mis manos no dejaron sus caderas.
—Esto puede ser la peor decisión que pueda llegar a tomar – dijo acariciando mi pómulo hinchado por los golpes de la pelea de hace unas horas atrás.
— ¿De que decisión habla?
—Tú lo sabes, no eres tonta.
—Me gusta que me lo diga, así que dígamelo señorita Santana.
—Tengo una lucha mental de si te beso o no – sonreí.
—Deja de sonreír de esa forma porque me tienes a tus pies inmediatamente, eres lo más atractivo que he visto.
— ¿Por qué le tiene miedo a mis besos?
—No le tengo miedo a tus besos
— ¿Entonces?
—Tengo miedo al efecto que pueden tener en mí.
— ¿Qué clase de efecto crea que pueda tener sobre usted? – me acomodé en el escritorio y atraje el cuerpo de la señorita Santana hacía mí.
—No… estoy segura… — dijo mirando mis labios y deseándolos como nunca antes lo habían hecho.
—Entonces… — comencé a acercarme lentamente – que le parece si salimos de la duda.
— ¿Y qué pasaría si quisiera más, si no quisiera despegarme de tus labios? – sus manos se acomodaron en la parte trasera de mi cabeza y acarició mi cuello.
—Bueno – miré hacia afuera.
—La noche es larga y descuide – acaricié la comisura de sus labios y ella besó mi pulgar lenta y sexymente.
—Tenemos toda la noche.
—Pero… tengo miedo Brittany, que pasa si….

Narra Santana

Y entonces pasó, Brittany me besó para que me callara lo cual me hizo sonreír en el acto. Mis manos se fueron a sus mejillas las cuales agarré delicadamente por sus moretones, sus labios estaba fríos y algo temerosos, sus manos temblaban en mis caderas lo cual lo hizo ver tierno.
—Cálmate – dije en sus labios – no muerdo – ella sonrió se acomodó nuevamente sobre el escritorio y me di cuenta como sus ojos me miraban como si fuera lo más importante que tenía en su vida.
—Te voy a besar de verdad – dijo mirando mis labios y sonreí.
— ¿Acaso no nos estábamos besando ya?
—Me refiera a esto Santana — ¿Santana? Había dicho mi nombre tan segura lo que hizo que todas mis defensas hacía su persona bajaran.
Brittany envistió con sus labios a los míos sin darme tiempo de reaccionar, sus manos apretaron mis caderas lo cual hizo que mi cuerpo se acercara más al suyo, succionó mi labio inferior y me estremecí por completo. Sus manos vagaban por mi espalda lentamente, queriendo descubrir cada detalle de esta. Sentí como su lengua acarició mi labio inferior y me dio a entender que ella quería mi aprobación para profundizar el beso. Ni siquiera lo pensé.
Nuestras lenguas se encontraron en un erótico baile de sensaciones, nuestros movimientos estaban sincronizados como si nos conociéramos de toda la vida. Mientras nos besábamos me di cuenta de lo mucho que venía deseando esto, lo mucho que anhelaba sentirme entre sus brazos ¿todas las chicas se sentirían así en sus brazos? Realmente espero que no, realmente me gustaría ser la única la que la hace sentir de esta forma tan pura. Lo que estaba observando era una versión de Brittany que estoy segura que nadie más había visto.
—Besas increíble – dije alejándome lentamente lo cual no duró mucho ya que Brittany volvió a apoderarse de mi labio inferior.
—No dejes de besarme por favor – comencé a morder sus labios, soltarlos, morderlos, soltarlos hasta que la escuché gruñir y de un solo movimiento me sentó encima del escritorio y ella quedó entre mis piernas.
—No juegues conmigo – dijo apretando la parte posterior de mi rodilla.
—Por… porque… — tragué saliva, Brittany se veía tan sexy.
—Porque terminarás rogando – Brittany tenía una sonrisa malévola en su rostro.
—– Me encantan tus piernas – dijo acariciándolas y acercándose nuevamente a mis labios.
—Me gustan tus labios – esta vez Brittany introdujo su lengua sin pedirme permiso y me tomó por sorpresa, dejé escapar un leve gemido sobre su boca y me aferré a su cuello mientras ella comenzaba a torturarme con sus caricias. Sentí que mis labios comenzaron a arder nunca antes había besado a nadie de esta forma y me estaba explotando la cabeza.
—Eres hermosa – dijo alejándose de mis labios para apoderarse de mi cuello donde hizo lo que quiso literalmente. Succionó, lamió y besó de extremo a extremo cada detalle de mi cuello… Brittany sabía combinar cada movimiento que hacía con el lenguaje corporal de su cuerpo.
—Dios me vas a volver loca – dije cuando Pierce recorrió desde mi mandíbula hasta el espacio de mis pechos y a la misma vez elevó mis piernas para que estas rodearan sus caderas. Sus manos subieron hasta mis muslos y ya no daba más. Su toque era preciso, es como si conociera cada detalle de mi cuerpo, como si lo hubiera recorrido anteriormente, supo de inmediato cuales eran mis puntos débiles y que era lo que más me excitaba y lo que más me excitaba era que me tocaran las piernas pero nadie lo había logrado como Brittany
— ¡DIOS TIENES QUE PARAR! – dije sacando sus manos cuando iban subieron hasta mis bragas las cuales ya estaban estropeadas y todo por su culpa.
—Por… por favor… tienes que parar – mi respiración era irregular y la mirada de Brittany se había transformada
—Eres estúpidamente sexy – dije besando sus labios los cuales estaban hinchados.
—Que tienen tus manos dime, que tienen porque nadie me había tocado como tú – sus manos se fueron desesperadamente a los costados de mi rostro y su legua recorrió mis labios de lado a lado.
—No puedo parar de besarte – dijo juntando nuestras frentes.
—No puedo dejar de tocarte, de hacerte delirar con mis caricias – apretó mis piernas.
—Te acariciaría toda la noche – volvió a besarme.
— Y es estúpido porque no seremos nunca nada – nos quedamos mirando.
—Te haría mía acá y ahora mismo ¿lo sabes verdad?
—Créeme que por primera vez en mi vida dejaría que hicieras lo que quisieras conmigo – junté nuestras narices y ella sonrió.
—Pero…. Pero tengo miedo
—Yo también – dije mirándola
— ¿De qué? – preguntó ella
—De que cuando pase… sea eso, solo pase y de ahí no haya otra vez porque ahora en este mismo momento sé que no voy a querer que se repita más de una vez – sus ojos no dejaban de mirarme, ni desearme.
—Tienes que dejar de mirarme así.
— ¿Por qué? – dijo alejándose y besando los nudillos de mis manos, uno por uno.
—Porque te terminaré rogando para que me hagas tuya acá y ahora cuando la verdad me gusta nuestro juego de coqueteo y será muy gracioso ver como reaccionarás en el instituto.
—Santana – porque era tan atractiva la forma en que decía mi nombre cuando ella tenía el control de la situación.
—Eso lo veremos, solo acuérdate que yo también se jugar.
— ¿CHICAS ESTÁN ACÁ? – esa era Marley.
— ¡SI! – Gritó Brittany sin dejar de mirarme
— ¡SALIMOS DE INMEDIATO!
—Brittany, Dianna se aburrió de esperar y se fue – no pude evitar reírme.
— ¡DESCUIDA, YO TAMBIÉN ME HUBIERA ABURRIDO DE ELLA! – Su mirada no dejaba la mía
—Es mejor que salgamos a disfrutar de mi fiesta – acarició mi mejilla.
— le gustaría bailar conmigo señorita Santana.
—No creo que se buena idea – dije bajándome del escritorio y caminando hacia la puerta,
—Estoy lo suficientemente caliente y húmeda para seguir estropeando mi mente – Brittany solo reía – y sé que te encanta saberlo
—No sabes cuánto – abrí la puerta y me dirigí hacía la barra necesitaba algo frío, lo más frío que tengan para bajar esta temperatura porque mi cabeza no podía sacarse la imagen de Brittany besándome, acariciándome y deseándome de la forma que lo hizo
— ¿Qué paso ahí dentro? – dijo Quinn sentándose a mi lado.
— ¿Fue idea de ustedes invitar a Sam y Dianna verdad? – pregunté mirando a Quinn y a Mercedes.
—Bueno… si y no – dijo Mercedes.
—No me voy a enojar – las miré.
—Solo les diré Gracias – las chicas me quedaron mirando raro
—Solo gracias.
— ¡OH DIOS MIO TE FOLLASTE A LA OJITOS! – Gritó Quinn y Mercedes le tapó la boca con su mano y yo sonreí
—TIENES QUE RESPONDER ¿TE LA FOLLASTE? YO SABÍA, SABÍA QUE SE GUSTABAN OH MI DIOS DIME COMO FUE ¿Cómo PASO?
No dije nada, agarré mi vaso y caminé hacía el jardín, pasé por atrás de Brittany acariciando su espalda y salí de ese lugar, necesitaba aire y tratar de enfriarme. La noche aún era algo larga… Según Brittany nos quedaba mucha noche.

Y solo un calenton....!? Jajajaa Gracias por fin ya se dieron un poco de amor, se aman pero como de plano San dice que no quiere relaciones eso es triste :S espero el sig.capitulo!!!!

Y porque lo dejan ahi eres muy mala sube otro ahorita yaaaaaaa

GENIALLLLLLLLLLLL
OTRO CAPITULOOOO PLISSSS

Que buen capitulo!!!! Dios mio que hermosoo, me encanto este capitulo!! Santana tambien le queria darle celos a Britt y le funciono perfectamente, pero ahhh porque no paso algo mas que esos besos
QUIN TE AMOOO SOS LA MEJOR LEJOSSS!!!
Por favor otro capitulooo!!!!!
ME FACINAAAAAAAAAAA

ufff,... si tan solo con un beso reaccionan asi,.. como sera cuando pasen a segunda base!!! como dijo britt la noche es larga a ver que pasa???
ame el plan de las chicas con el juego de los celos jajajajaj
AMO TU FIC!!!!!

Hola!! Quiero saber cuanto van a aguantar asi??? jajaja
Saludos

bueno me imagine que su primer encuentro seria algo asi, solo que no me gusta lo reacia que es santana a una relacion!

Narra Brittany

La fiesta paso demasiado rápido y no podía dejar de pensar en lo que había sucedido dentro de ese cuarto, Santana estaba compartiendo con sus amigas y no le prestaba atención a Sam así que no me preocupaba.
— ¿Qué miras? – de la nada Quinn apareció a mi lado y me asustó.
—Eres… casi me matas Quinn.
— ¿Se te paso el enojo ojitos?
—Si – dije mirándola – y lamento haber sido tan insoportable solo… solo no estaba acostumbrada a lo que estaba sintiendo en ese mismo momento.
— ¿Celos? – Dijo mirándome mientras bebía de su vaso – no tengas miedo en decírmelo yo siempre voy un paso delante de la flaca.
— ¿La flaca? ¿De quién hablas?
—De Santana.
—Oh – la quedé mirando – no es tan flaca.
— ¡DIME QUE NO ACABAS DE DECIRLE GORDA A MI AMIGA PORQUE TE JURO QUE SOY CAPAZ DE MATARTE! – sonreí.
—Creo que como ya estás un paso delante de Santana y creo que de mí ya sabes que sería incapaz de tratarla de esa forma.
— ¡DIOS QUE HERMOSO! – Me abrazó y me estaba ahogando entre sus pechos.
—Quinn…
— ¡NO LO PUEDO CREER, TE JURO QUE LAS APOYO, LO ÚNICO QUE QUERÍA ERA QUE SE DIERAN CUENTA QUE SE MUEREN DE GANAS LA UNA DE LA OTRA!
—Quinn… me estas…
—Le dije a Santana que tú le gustabas pero ella no me creía, debería hacerlo porque soy como su subconsciente y nunca me equivoco.
— ¡QUINN ME ESTAS AHOGANDO! – grité.
—Oh… lo siento – se alejó – ya es segunda vez.
—A la tercera me matas – nos reímos.
—Todo esto fue tu idea ¿verdad?
— ¿De qué hablas? – se hacía la tonta.
—De Dianna y Sam – ella sonrió
—Lo sabía.
—Pero tu amiga Marley ayudo, ella también lo notó. A todo esto esa chica me cae genial es como si fuera yo pero más morena, no sé si me entiendes.
—Créeme que ella es más morena que tú por todos lados – nos miramos y explotamos en risa – lo siento tenía que decirlo.
—No te preocupes ojitos – me abrazó por el cuello y la agarré de su cintura
—Realmente me gusta la relación que tenemos, es como si nos conociéramos desde siempre – la miré.
—Es raro, pero me gusta – le sonreí.
— ¿Me dirás que pasó en ese cuarto?
—Creo que será mejor que hables con ella, tu y yo tenemos cosas en común pero no creo que sea buena idea a lo mejor ella querrá contarles.
—A lo mejor, quien sabe – las dos miramos a Santana
—Iré a bailar con ese trasero – fruncí el ceño
— ¿Qué pasa? OH!… CLARO me odias porque puedo bailar con mi amiga y tú solo podrás mirar – me sacó la lengua
—Adiós ojitos – se fue moviendo el trasero hasta llegar a donde estaba Santana mientras que yo caminé hacía donde estaban mis amigas.
—Apareciste – dijo Marley abrazándome
— ¿Qué pasó ahí dentro? – Nos soltamos y noté que todas me miraban
—Lo siento pero me obligaron a contarles cuando te vieron entrar al cuarto.
—No te vimos entrar, esta idiota comenzó a saltar como estúpida y no entendía porque – dijo Kitty —Entonces creo que por culpa de la emoción lo dijo.
— ¿Emoción? – pregunté.
—Oh vamos Brittany – esa era Tina
— ¿Hace cuánto no te veíamos así por alguien?
—De hecho yo no recuerdo haberte visto así nunca –dijo Rachel – y me agrada aunque sea con la profesora, ya sabes… es algo peligroso.
—Lo sé, no quiero que ella sepa que ustedes saben, no quiero bromas en doble sentido ¿escuchaste Marley?
— ¿Qué? ¿Porque me dices solo a mí?
—Porque siempre eres la que termina estropeando todo – dijo Kitty.
—Explícame porque estoy contigo – respondió Marley.
—Porque me amas pequeña – se besaron.
—Brittany – miré hacia atrás y era Shay
— ¿Podemos hablar? – mi vista inconscientemente se desvió hasta Santana quien tenía su vista fijada en Shay, noté su cara. Estaba celosa y sonreí.
—Sí, pero solo un rato estoy ocupada.
Caminé con ella hasta el sector donde estaban los sofás y algunas cosas para comer.
—Primero felicitarte por la pelea.
—Oh ¿fuiste?
—Claro que fui, todo el instituto estaba ahí – sonreí
—Lo hiciste muy bien.
—Muchas gracias, debo admitir que antes de entrar estaba muy nerviosa les costó casi una hora a las chicas poder relajarme.
—Son tus amigas, te conocen así que creo que hicieron un buen trabajo – sonreí
—Lamento… lamento realmente lo que paso en el pasillo el otro día.
—Oh… bueno, da lo mismo a estas alturas… de hecho creo que te entiendo un poco.
—Realmente no quiero perderte ni mucho menos perder lo que tenemos – me congelé
—Tú me gustas y por algo me elegiste.
— ¿Te elegí?
—Sí, ya sabes la única con la que lo has hecho más de una vez.
—Oh… verdad que anda ese rumor por el instituto.
— ¿Rumor? ¿No es verdad?
—Si lo es – la quedé mirando.
—Pero creo que…. Que es hora de que terminemos con eso sabes, te mereces a alguien que esté para ti al 100%, alguien que no quiera compartirte con nadie más, que se muera por dentro cuando alguien se te acerque y esa persona no soy yo. Porque dudo que me pueda a llegar a enamorar de ti Shay y te quiero y fuiste importante pero no… no puedo seguir con esto, creo que no puedo seguir con la estúpida leyenda.
— ¿Hay…. Hay alguien más?
— ¿Qué? No, claro que no – si decía que sí me vería obligada en decir el nombre de Santana y eso no era bueno para ella.
—Solo… solo creo que llego el tiempo de madurar, es mi último año y quiero hacer las cosas bien – ella se quedó en silencio
— ¿Me odias verdad?
—No – tomó mis manos con las de ella
—Nunca lo haría – le sonreí
—Creo que iré a disfrutar de la fiesta – se acercó y dejó un beso entre la comisura de mis labios y me mejilla.
—Adiós.
Volví a donde estaban las chicas y noté como Shay sacaba a bailar a una chica, justo en ese momento mi celular sonó.

Santana: ¿Con que no hay nadie más? – Sonreí.
Brittany: Si decía su nombre podría terminar en problemas y créame que no quiero que se vaya de esta ciudad tan rápido.
Santana: ¿Por qué no?
Brittany: Porque aún no eres mía
Santana: Sabes cómo colocar las cosas calientes Brittany y eso no me gusta.
Brittany: ¿Por qué no? Era solo una acotación, ya sabe simplemente podemos volver a repetir lo de esta noche cuando quiera.
Santana: ¿Solo eso? ¿Cuándo daremos ese gran paso?
Brittany: ¿A qué se refiere con gran paso señorita Santana?
Santana: No me hagas decirlo.
Brittany: ¿Por qué no?
Santana: No es buena idea hablar de eso cuando dormiré sola hoy Brittany – miré hacía donde supuestamente estaba Santana con sus amigas y no estaban.
Brittany: ¿Te fuiste? ¿Por qué te fuiste? No te despediste!!! No se vale
Santana: Es increíble lo inmadura y adorable que eres a la misma vez y si, si me fui.
Brittany: ¿Por qué?
Santana: Creo que después de lo que paso hoy no puedo mentirte… Shay me da celos, no puedo evitarlo y cuando te vi con ella no pude evitar sentirme algo descompensada.
Brittany: Creo que la señorita Santana celosa es mi Santana favorita
Santana: Tierna!! ¿Sabes que no es justo?
Brittany: ¿Qué?
Santana: Que tu estés ahí con todas esas jóvenes de cuerpos perfectos, rubias, tetas de mentiras y sin bragas mientras que estoy acá yo… sola, las chicas salieron y yo me quedé acá en el departamento… ¿te dije que estaba sola verdad? – mierda, sabía que haría eso. Sabía que comenzaría a provocarme y mi cabeza comenzó a dar vuelta.
Brittany: No es justo!!!!! Tú no te despediste y ahora haces esto.
Santana: Nadie te mandó a hablar con Shay
Brittany: Celosa
Santana: Hermosa, linda, preciosa ¿Qué me estás haciendo Brittany? – no pude evitar sonreír
Brittany: ¿Qué estamos haciendo?
Santana: Dejarnos llevar… no es necesario un nombre.
Brittany: Entonces los celos no valen, porque no somos nada
Santana: Extraño tus besos
Brittany: Deja de cambiar el tema
Santana: Y tus caricias.
Brittany: Necesitas parar
Santana: Y tu respiración
Brittany: ¿Crees que hay espació en su cama para mí señorita Santana?
Camia: No te demores, adiós.

NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
mujer como se te ocurre cortar justo ahí el capitulo?????,....
amo los celos de san y si van a terminar concretando el encuentro con britt en una cama!!!! te amare!!!!
QUIERO EL OTRO CAPITULO!!!!

Ahhhh sube otro yaaaaa

Hey.....! Eres mala, y chicas andenles solo faltarian 8, bueno si es que no hay otro comentario antes que el mio, ya que lo estoy escribiendo :)

esoooooo es MALDAD PURAAAAAAAAAAAAAAA!!!!

no puede ser actualizaaaaa

queeeeee, espacio en su cama señorita santana y lo dejas ahi???? te buscare, juro que lo hare, pero como se te ocurrio dejarlo ahi? saldre de viaje y estare hiperventilando hasta mi vuelta en 4 dias ya que en esa casa no hay internet!!!!!! porque??????

Eres tan malvada no lo dejes ahi, sube otro por fa!!

Gran capitulo!!!
Me gusta mucho como va desarrollando las cosas,aunque parece raro esto de una relacion maestra y alumna, espero que sea algo serio y no un juego.
Otrooooo capitulooo por favorrrr

Aaah! Justo lo dejas ahí :/

Eso es cruel :(

No seas malitaaa sube otroo andaaa pleaseeeee :'(

quueeeeeeeeee???? nooooooooooo como lo dejas ahi en la mejor parte por dios no seas mala y actualiza pronto por favor

Ya estan lo diez comentarios sube el cap

siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ya estan los diez por favor ya sube el capitulo

Lo prometido es deuda que lo disfruten  

Capítulo 18

Narra Santana

Me coloqué la bata sobre mi ropa interior y bajé hasta el living, me serví una copa de vino, prendí el televisor y me puse a esperar a Brittany.
Estaba desesperada, nos habíamos besado hace menos de 1 hora y ya la extrañaba nunca antes había pasado algo así.
Era increíble como cada vez que pensaba o recordaba lo que acababa de pasar cada parte de mi cuerpo la recordaba y la extrañaba.
Había tenido este tipo de contacto con otros estudiantes y les había hecho firmar un contrato de silencio completamente legalizado pero con Brittany ni siquiera lo pensé, sé que ella no diría absolutamente nada ni que sus amigas ni las mías lo harían y lo que hacía más complicado este asunto era que yo me llevaba bien con sus amigas las cuales eran mis alumnas y ella se llevaba excelente con las mías. Especialmente con Quinn, esa extraña conexión que tuvieran apenas Brittany cruzó esa puerta la primera vez era rara pero me agradaba.

Brittany: ¿Sigues sola? – No pude evitar sonreír
Santana: Dime que estas afuera de mi departamento o me iré a dormir, nunca he esperado tanto por alguien Pierce.
Brittany: Bueno siempre hay una primera vez para todo ¿no? Y si, ábreme la puerta que ni siquiera puedo tocar el timbre apúrate.

¿Ni siquiera puedo abrir la puerta? Dejé el celular en el sofá y me dirigí hacía la puerta, la abrí y estaba ella con su estúpida sonrisa que me derretía, con sus estúpidos ojos color azul profundo y su maldito Beanie que me estaba matando.
—Hola – dije levantando dos bolsas blancas.
—Creí que tendrías hambre y no precisamente de mí – una carcajada se me salió y a ella también — ¿Me harás pasar o comeremos acá en el suelo?
—Oh, lo siento pasa – Brittany pasó y cuando cruzó frente a mí noté su perfume y recordé cuando me acomodé en su cuello hace una hora atrás en ese cuarto
— ¿Qué trajiste? – pregunté cerrando la puerta.
—Bueno no sé si te gusta pero es mi comida favorita y tenía antojo así que – Brittany sacó el contenido de la bolsa y lo dejó sobre la mesa
—Es sushi dime que te gusta o te juro que soy capaz de lanzarme de tu terraza – sonreí.
—Me encanta el sushi – dije sentándome frente a ella
—Pero tú no tomas vino verdad – ella me quedó mirando.
—Creo que una copa de vino blanco no me haría mal.
— ¿Solo una? – me acerqué a ella.
—Eres adorable – entonces ella se acercó a mí, agarró mi barbilla y depositó un tímido beso sobre los míos.
Era estúpido que ese estúpido beso insignificante tuviera esta estúpida reacción en mí. Parecía una estúpida chica de 15 años que se había puesto de novia por primera vez.
—Iré a buscar el vino – toqué la punta de su nariz y fui hacía la mesa que estaba al lado del sofá donde había estado tomándome una copa antes.
—Lamento que esté abierto pero tenía que esperarte y te demoraste mucho.
—Lo sé, pensé en llamarte pero… pero la sorpresa se arruinaría.
—Qué raro – dije mirando la mesa.
— ¿Qué cosa?
—Ya no me tratas de usted – ella sonrió.
—Se siente raro hacerlo después de… bueno… ya sabes.
—En el instituto tendrás que hacerlo – comenzamos a comer y a hablar como si nos conociéramos de toda la vida.
—Descuide señorita Santana – dijo mirándome directamente a los ojos .
—Que en el instituto volveré a ser su sumisa — ¿Sumisa? Esa palabra me hizo delirar en imágenes que se vinieron a mi cabeza ¡tienes que parar Santana, tienes que parar!
— ¿Dónde fueron las chicas?
—Bueno Quinn acompañó a Mercedes a seguir bebiendo y los más probable es que lleguen con un chico cada una.
—Si no hubiera pasado lo que paso hoy hubieras ido con ellas ¿verdad? – Ni siquiera pude tragar el pedazo de sushi cuando ella me hizo esa pregunta
—Descuida, traga antes de contestar.
—Lo siento – dije después de tragar
—Sí, hubiera ido con ellas pero no sería por la misma razón que iba antes.
— ¿Porque ibas antes?
—Solo para tener algo de acción
— ¿Y porque razón hubieras ido ahora?
—Para sacarte de mi mente – las dos dejamos de comer y nos fulminamos con la mirada
—Creo que quiero probar el postre – ella sonrió y se lamió los labios.

Narra Brittany

Caí al sofá con Santana encima de mí, mis manos vagan por sus piernas las que tanto me gustaban mientras ella no dejaba de besarme ni de moverse sexymente, la escuché gemir cuando apreté sus muslos y llevé mis manos hasta el nudo de su bata
—Dime que traes pijama – dije volviéndome loca en su boca.
—Creo que tendrás que desatarlo para obtener esa respuesta – solo se alejó de mis labios para responder porque después de eso volvió a envestirme con sus labios, su lengua entró sin pedir permiso y sonreí en el acto. Sus manos las llevó a la parte trasera de mi cabeza y enredó sus dedos en mi cabello.
Mis manos desabrocharon el nudo de su bata lentamente, dejé de besarla y llevé mi vista hacia abajo… no podía creer lo que tenía frente a mí. Su cuerpo… su cuerpo era increíble, sus curvas se hacían más deseables al verlas sin ni una prenda encima.
—No sabía que conjunto colocarme así que creí que este sería buena idea – su maldita voz, está jugando conmigo.
— ¿te gusta jugar verdad? – Dije mirándola y ella sonrió
—Vamos a tu cama – Santana abrió los ojos muy grande, se levantó, me tomó la mano y me llevó a su cuarto. Cuando llegamos la lancé a la cama y me lancé sobre ella. Las manos de Santana se fueron a mi cabeza y sacó mi Beanie, de ahí noté como desesperadamente trataba de sacarme mi suéter.
—Tienes que sacarte esto o me volveré loca.
—Ok – me alejé de ella y aproveché de sacarme el suéter con la camisa puesta, cundo terminé de sacármela Santana tenía sus dedos sobre los tatuajes de mis caderas
— ¿Qué pasa? – dije mirándola.
— ¿Es posible que seas más sexy? – Sonreí – y esa estúpida sonrisa que tienes me terminará matando.
—Eres muy ruda sabes – ella sonrió y yo también. Sus manos desabrocharon mi pantalón y lo lanzó lejos.
—Creo que ahora estamos en la misma sintonía señorita Pierce.
—Ahora a jugar –me lancé nuevamente y con cuidado hacía la cama a Santana y ella simplemente me quedó mirando con su mirada completamente encendida. Llevé mis manos hasta sus piernas y rocé su liga, la cara de Santana estaba completamente transformada. Sabía que quería que la hiciera mía ahora ya pero eso no pasaría, no está noche lo que no quería decir que no lo pasaríamos bien… volví a colocarme sobre su cuerpo y comencé a moverme encima de ella, sus manos vagaban por mi espalda, la arañaba y hacía círculos con las yemas de sus dedos. Era increíble como lograba hacerme sentir tan cómoda, tan única… esto no se comparaba con las otras veces que tuve sexo.
Dejé de besarla para apoderarme de uno de los lóbulos de su oreja el cual tiré lentamente con mis dientes lo que la hizo gemir, solté su lóbulo para apoderarme de su cuello. Recorrí la piel expuesta de su cuello de par en par, no dejé ni una superficie sin mi ADN. Santana temblaba debajo de mi cuerpo y el cuarto estaba cubierto por una atmosfera erótica y de sudor que a esta altura ya se hacía presente.
—Deja de jugar conmigo Brittany porque no sé cuánto más aguante – solo sonreí y bajé mi boca hasta su abdomen, dejé un camino de besos hasta llegar al dobladillo de su ropa interior el cual noté que ya estaba estropeado por su humedad. Me salté su ropa interior y me dirigí a las ligas, agarré una con mis dientes y la saqué lentamente, lo mismo hice con la otra pierna mientras que Santana se retorcía de placer… comencé a besar la parte interna de sus muslos y noté como sus músculos se tensaban ante mi tacto
— ¡Dios! – Dijo colocándose las manos en el rostro mientras se volvía loca con mis caricias
— Brittany… basta… yo… ¡OH MI DIOS! – subí rápidamente hasta sus pechos y de un solo movimiento los deje descubiertos.
—Ropa interior que se desabrocha por delante– nos quedamos mirando
—Gracias – bajé hasta sus pechos sin dejar de mirarla y me apoderé de uno de sus pechos con mi boca y el otro pecho con mi mano libro.
—BRITTANY… BRITTANY… TU… OH DIOS – escucharla decir mi nombre se había transforma en uno de mis sonidos favoritos. Sus pechos estaban hechos a mi medida y no podía creer que disfrutara tanto tocando el cuerpo de Santana, noté como se aferraba de las sábanas de la cama, como su espalda se arqueaba y como sus gemidos crecían y crecían cada vez más. Hice un cambió y me apoderé de su otro pecho…. Santana estaba muy sensible.
—NO… NO PUEDO CREERLO – comenzó a recoger sus piernas.
— BRITTANY TU… NO…. ¡¡DIOS!! ¿QUE ES ESTO?…. ¡BRITTANY! – y entonces lo había logrado, Santana había tenido un orgasmo sin la necesidad de tenerme dentro de ella. Abracé su cuerpo mientras se le pasaban los espasmos y ella se aferraba a mi cuerpo como si su vida dependiera de ello. Nos quedamos algunos minutos en silencio, acariciaba su cabello, su espalda. Nunca antes había hecho cosas así.
— ¿Estas bien? – pregunté besando su frente y ella elevó su rostro.
— ¿Qué si estoy bien? – Preguntó algo sorprendida.
—Brittany lo que acabas de hacer fue mejor que cualquier otro orgasmo que haya tenido en mi vida y ni siquiera… ni siquiera fue necesario tenerte dentro de mí sonreí
— ¿Qué tiene esa boca? – Se acercó y mordió mi labio inferior lentamente
—Eres increíble – nos quedamos mirando durante segundos.
— ¿Quieres que me vaya? – ella se acurrucó en mi cuello.
—No Brittany, quédate. Quiero dormir contigo – besó mi cuello
—Ya rompiste todas mis barreras una más, una menos.
— ¿Me quedo?
—Quédate Brittany – nos volvimos a besar, me pasó una camiseta y ella se colocó otra, nos acostamos bajo las sábanas y ella se acurrucó a mi lado, su cabeza quedo en mi cuello y apenas sentí el olor de su cabello me di cuenta que mis ojos se iban cerrando y cómo no pasaba hace tiempo no me costó dormir y las pesadillas no volvieron, como hace tiempo no pasaba era feliz.

Fueeee increible!!!!! me gustooo muchoeste capitulo, pero quiero que san lleve el control no brittt.
PORR FAVORRRR OTRO CAPITULOOO

no puede ser buenisimo
creo que me dio calorcito!!!.... por dios sube otro O una MARATÓN jaajjaja me gusta como britt domina a santana, me encanta que sea britt la dominante aunque no estaría mal verla de sumisa de vez en cuando