[Fic] Embarazada de nuevo

Observó sin comprender a la rubia que se encontraba frente a él con un aparato blanco entre sus manos. Ella se veía preocupada, pues mordía con fuerza su labio inferior y bajaba la mirada. Entonces recordó algo. Algo que nunca debió haber pasado. Algo que regresaba del pasado para hacerle notar su error. Una chica que no tenía la culpa. Torció la boca en una mueca triste y tomó la mano de la chica.

Un mes atrás…

— ¡Discúlpame por intentar ser divertido y espontaneo! —el grito resonó como un bramido agresivo.

Se fue sin siquiera escuchar los gritos de Kurt que terminaron siendo un eco lleno de frustración. Pero él siguió andando sin medir paso. Había sido una noche estupenda; aunque casi no había estado con su novio, Sebastian se había encargado de hacerle pasar una noche inolvidable. Y hubiese sido perfecta si no fuera porque no había recibido su primera experiencia sexual con un chico.
¿Pero qué demonios? Pensaba iracundo. No tenía idea de cuánto tiempo había estado caminando y se estaba arrepintiendo pues no sabía ni donde se encontraba. Sus ojos veían borrosos y se sentía mareado. Unas arcadas lo invadieron; apoyó sus manos en las rodillas y vomitó, producto del alcohol ingerido. La cabeza le dolía como los mil demonios.

Sus rodillas toparon con la banqueta. Aquellas luces de colores lo tenían desconcertado. Cerró los ojos por un momento y los abrió, relajando su rostro. Frente a él se encontraba una iglesia. El asco lo invadió: no era un secreto para nadie que ser gay era mal visto ante los ojos de los fieles católicos… Y recordó lo que estuvo a punto de hacer con Kurt y fue más que suficiente para deprimirlo.

Volvió a cerrar sus ojos.

Sintió un tímido apretón en su hombro izquierdo, que lo hizo respingar y abrir los ojos. Frente a él se encontraba una hermosa chica. Cabellos rubios y ojos esmeraldas, enmarcados de largas pestañas; pero eso no fue lo que llamó su atención. Carnosos labios le hablaban, y sin lograr entender nada, anunció:

—Eres un ángel.

La muchacha sonrió y le tendió la mano. Aquellos hermosos ojos mostraban confusión y preocupación.

— ¿Estás bien, Blaine?

Eso pareció sacarlo de sus cavilaciones y ponerle los pies en la tierra. No era un ángel, ni un ser divino. Era simplemente su compañera de coro Quinn. Apenas y se miraban o saludaban por mera cortesía. Pero sus más bajos instintos salieron a flote tan rápido que un parpadeo, ya se encontraban en algún lado.
Esa noche el deseo se apoderó de ambos. La rubia no sabía muy bien que hacía ahí: se había preocupado por un rostro familiar después de la misa y ahora se encontraban en una habitación.

Ese día había dado un increíble giro. Y traería sus consecuencias con el paso del tiempo.

Al día siguiente, Blaine tenía su resaca y se disculpó un millón de veces con Quinn, sintiendo la culpa correr por cada parte de su cuerpo. Ella no parecía enojada ni nada, sólo vacía y perdida. Le sonrió falsamente y le dijo que estaba bien. No más que una mentira para hacer sentir bien al chico. Murmuró algo que no se entendió y salió de la habitación de aquel barato motel.

Por extraño que parezca, el ex Warbler se la pasó complaciendo a Kurt, incluso el día de la apertura West Side Story, su tímido novio había decidido dar el siguiente paso con él, pero el recuerdo de una rubia arremetió contra él con fuerza y declinó su oferta. Por una parte, se sintió aliviado y sin presión, por otra, deseaba demostrarle su amor al chico de ojos claros.

Y su amor continúo. Aunque podía palparse cierto distanciamiento entre ellos. Todos lo percibían. Hasta Sebastian que sabía que esta era realmente su oportunidad de hacer su próximo movimiento con Blaine.

Este es un fic que tenía en mente desde hace unas semanas. Espero que les guste.

Ame!!! 2° Lectora ♥ Actualiza muy pronto!!!! ahahah, Me gusto mucho :)
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LO AME!!!!! dios esta genial nunca pero nunca me imagine a Blaine y Quinn juntos!!! es demaciado loco!!!! jaja espero tu actualizacion
Besos
Maluu

wow me encanto el es demasiado macho pero gay es como ricky martin hahhaha
me gusto siguela como se lo tomara kurt y el resto del coro
y que hay de las situaciones amaorosas de quinn
klaines te mataran pero bueno esto esta muy bien

WOOOOOOOOOOOOOOOOOWW!1..dios.. esto es nuevo.. y.. MUY ..MUY BUENO!!.. osea.. wow..lo que hace el alcohol!!.. Blaine.. y... Quinn.. DIOS!!.. lo amo!!!.. y ahora que pasara ??!!.. OK.. necesito prox cap!!.. muy bueno!!.. NOS LEEMOS!!

PD:aqui fiel lectora!!!

Les agradezco sus comentarios *O*

Prometo que actualizaré pronto.

Es una historia de giro cambiante. Es decir, las decisiones afectan al futuro. XD No esperen que siga el curso de la serie.

Eso es so harry frikiing potter ok no, este super interesante Blaine papa? Sebastian tras Blaine? Que pasara con Klaine? continua me tienes en la duda.

Capítulo uno

— ¿Quinn, estás bien? —Inquirió su madre al otro lado de la puerta.

La rubia se cubrió la boca con su mano, evitando un sollozo delatador. Llevaba tres semanas de retraso. Sólo una vez le había sucedido esto: cuando estaba embarazada de Beth. Sentía su corazón latir contra su pecho, esperando salir. ¿Sería posible?

Carraspeó y buscó una voz calmada para responder.

—E-estoy bien. Es sólo que tengo un dolor de estómago —Mintió.

—Busca en el gabinete de medicinas. Creo que todavía tenemos antibiótico.

—Gracias, mamá.

Sus ojos rojos le devolvieron la mirada en el espejo. Un bebé. Instintivamente se llevó las manos a su nada abultado vientre y suspiró. Un bebé de Blaine Anderson.

El rostro se le iluminó en cuestión de segundos. Beth se quedaría con Shelby, aunque la quisiera también, este nuevo bebé era su gran paso a la madurez. Lo único que le preocupaba era la reacción del padre, que estaba públicamente declarado homosexual. Torció la boca, pero en seguida se compuso, sonriendo de oreja a oreja.

-.-.-.-.-.-.-

Mientras tanto, en la cafetería ‘’The Lima Bean’’ se encontraba un angustiado Blaine. Había sido citado el día anterior por Sebastian. Ellos tenían una relación muy estrecha que asustaba al chico de ojos avellana. Y es que en tan poco tiempo sentía una conexión con él. Dio unos sorbos a sus cafés, a la espera de su llegada.

— ¡Hey, sexy! —Saludó, Sebastian, tomando asiento frente a él—. ¿Cómo estás?

—Seb —le regañó—. Te he dicho que dejes de ponerme apodos… Así —Murmuro, incómodo.

—Sólo es la verdad —Respondió con un guiño—. Me alegra que vinieras, hace tiempo que no salíamos a charlar…

—He estado ocupado con Kurt.

Sebastian frunció el ceño.

— ¿Y cómo está ese novio tuyo, eh? —Cuestionó de mala gana—. La verdad no les he visto juntos… Es más, siento como si ustedes solo fueran una ex pareja que en cercanía están en incomodidad.

Blaine se removió en su asiento, puesto que las sinceras palabras de su amigo le habían calado. Eran tan ciertas que dolían. Lo peor era que él era el único incómodo con la presencia de Kurt. Era insoportable recordar su infidelidad con Quinn; guardar sentimientos negativos hacia ella, le hacían odiarse.

El chico frente a él se dio cuenta que debió haber sido menos directo. Soltó un bufido.

—Blaine, no es tu culpa…

—No, no, Seb, sí lo es —Cortó, desesperado—. Yo… Yo tuve un desliz… Me siento tan… Sucio y me siento mal con respecto a Quinn y Kurt.

— ¿Quinn? —Soltó sorprendido.

—Sí, ella y yo… —Parecía atragantarse con las palabras—. Tuvimos sexo el día que fuimos al bar.

Si hubiera estado bebiendo de su café, la preciosa mesa de madera y parte de la ropa de Blaine, estarían manchadas. Abrió sus ojos desmesuradamente ante la confesión de su conquista. Quizá no debió haber dicho nada, pensó segundos después. Ladeó la cabeza y analizó al chico frente a él. Y sonrió. Kurt podía irse despidiendo de Blaine.

—Jesucristo, Blaine, ¿eres bi?

— ¿Qué? ¡Oh, no, no, no! Estaba borracho, Sebastian.

Fingió estar aliviado.

— ¿No le piensas decir a Kurt?

—No he encontrado el momento adecuado.

Sebastian sonrió, viendo por encima del hombro de su acompañante.

— ¿Qué tal ahora?

Sebastian es mi b*tch! :'D Lo amo tanto. ¿Quieren capítulos más largos? ¿Qué les pareció?

BUENISIMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO muy bueno, me gusta la idea del fic es diferente y muy entretenida

wooooooooooooooooooooooo si q es nuevo espero que Blaine y Kurt esten bien !!!!!!!!!!

wow pobre Quinn
el deseo lleva a esas crisis existenciales...
blaine triste va quedar la grande con esto

O_O como dije antes esto es tan Harry friking Potter aunque amo el SeKurt y detesto el SeBlaine este Fic podría ser la exención quiero decir amo la idea de que Quinn este embarazada. Pero no se sentirá fatal porque tipo se acostó con ella ebrio. Sebastian tendra malas intenciones? OK esa es una pregunta estupida es obvio que las tiene me a gustado y lo mejor es que me chute dos capítulos en un día :P

WOOOOOOOOOOOWW!!.dios.. enserio.. esta muy bueno!!.. y ahora como reaccionara Blaine.. dios!!.. un gay dejo embarazada a una chica!!!.. wow.. espero el prox cap!1.. MUY BUENO!!

Capítulo 2

Blaine se alarmó y giró su cabeza para ver a un molesto Kurt mirando hacia donde él estaba. Después, se asustó al verlo caminar hacia ellos con un rostro de desconcierto y enfado.

—Blaine, no sabía que estabas aquí —dijo como quien no quiere la cosa.

El parisino se preguntó si siempre iba a ser de esta manera: él, llegando cuando estaba teniendo una charla con un exquisito café.

—Sí, veras —se apresuro a contestar—. Seb me invitó el día de hoy a por un café. Ya sabes, casi no tenemos tiempo de vernos por los ensayos.

Kurt sonrió falsamente.

— ¿Puedo unirme a su reunión? —a pesar de no haber comprado su café, inquirió.

Sebastian, que había permanecido al margen de la situación, sonrió burlesco y asintió, dejando claro que a él no le molestaba en lo absoluto. No le incomodaba que se uniera, mientras más rápido, mejor. El chico de ojos de claros arrastró una silla hasta colocarla a lado de su novio, y fue como un deja vu para los tres. Blaine se levantó como resorte, excusando que iba al baño.

El joven recién llegado aprovechó para dejarle las cosas claras al escurridizo muchacho.

—No me gusta que otros chicos se acerquen a mi hombre —rezongó, frunciendo el ceño ligeramente.

—A mi no me gusta que me den órdenes, y menos un chico con una cara gay que se nota a kilómetros —respondió a cambio.

—No me agradas, Sebastian, nunca me has agradado —dijo con algo parecido a un gruñido—. ¿Y sabes por qué? Porque eres arrogante, desagradable y te fijaste en el muchacho equivocado.

—Te refieres a que estoy interesado en Blaine —afirmó con superioridad—. Te encuentras celoso porque no tienes confianza en ti mismo y sabes que al final, él me escogerá a mí.

Cuando estaba por responder, el tan peleado chico, regresó del baño con un rostro mucho más fresco. Se situó a lado de Kurt y les sonrió. Sebastian se veía imperturbable, al igual que su novio, pero el ambiente estaba tenso.

— ¿No tienes nada qué decirle a Kurt, mon trésor?

Éste lo miró con duda en su rostro. Blaine tragó en seco. No, aún no estaba listo para enfrentar la realidad. Se mordió el labio inferior, pensando.

—No me llames de esa manera, Seb —bufó, un poco avergonzado por el apelativo—. Se refiere a que los Warblers saldrán a festejar que ganaron sus Selecciónales —medio sonrió—. Y me han invitado a festejar; espero no te moleste.

—Oh, no te… —su celular sonó en el bolsillo de su pantalón—. Disculpen —sacó el aparato y respondió con un efusivo ‘hola’—. No, estoy con Blaine y, err, Sebastian. ¿Qué? Está bien. Nos vemos en veinte, Rach. Claro, adiós —cortó la llamada.

— ¿Todo bien? —Preguntó su novio con comprensión—. ¿Rachel se encuentra bien?

—Claro —respondió con una sonrisa, Kurt—. Es solo una emergencia de moda. Me tengo que ir —Dijo levantándose y guardando su celular dentro del bolsillo—. Nos vemos después para hablar sobre esto —aún no daba por zanjado el tema. Le dio un sonoro beso en la mejilla.

—Kurt Hummel al rescate —musitó un divertido Blaine.

—Cuídate, Sebastian.

—Lo mismo, Kurt —dijo con el mismo tono agrio.

El castaño desapareció en un par de minutos y Sebastian encaró al moreno.

— ¿Se puede saber por qué no le dijiste nada? Era tu oportunidad perfecta.
Blaine meditó con cuidado su respuesta, organizando sus ideas para poder expresarse con claridad.

—Tal vez nunca lo deba de saber.

Estaba seguro que Quinn no soltaría palabra alguna y el único motivo por el que se lo había contado a Sebastian era porque necesitaba alguien con quién contar y desahogarse. Las cosas no cambiarían. El Hummel nunca se enteraría de nada. O eso pensó, hasta que un inesperado mensaje le llegó a su móvil.

‘’Necesitamos vernos. Breadstix a las 6.
Quinn.’’


-.-.-.-.-.-

Ya nos acercamos a la introducción. Pronto veremos la reacción de ND y como avanza la historia. AMO a Quinn/Dianna y esta historia será Quick. :) Espero y me sigan leyendo. En un rato subiré un One de Seblaine y Kurtofsky. Gracias por leer.

Yo queria a Quinn con Blaine no se vale nos diste falasa esperanzas u.u

Sí va a haber de ellos ;) Son la pareja principal, ¿recuerdas? Pero soy fiel a mi Seblaine, al Kurtofsky y pienso que Quinn y Puck son lindos a morir. Pienso que para mañana o más tarde ya hay capítulo nuevo. Gracias por comentar :)

Nueeva lectora :)
Me encanta la historia
Quinn y Blaine padres? Awwwwwwww <3
Mi Lindo Kurt! Pobre! Vendria a ser una especie de padre o o tio..? Ok nose nada con respecto a los temas del arbol genealigico xD
En fin espero tu proxima actualizacion :)

Capítulo 3

Mentiría si dijera que no estaba nervioso. La verdad es que el contacto con la chica Fabray había sido casi nulo desde ese día. Le tenía miedo y sería honesto e imbécil al admitirlo. Deseaba que su reunión terminará pronto. Sin embargo, estuvo por casi media hora en esa mesa, y no había rastro de la rubia. Tal vez le había jugado una mala pasada o se había entretenido con algo. Lo que sea que fuese, Blaine sentía su corazón latir rápido contra su pecho. No se sentía cómodo en ese momento y mucho menos lo estaría con la presencia de la chica.

Una silla se movió delante de él, sobresaltándolo. El rostro de la chica esta sonrojado y su respiración era agitada. Quiso preguntarle si estaba bien, pero ella levanto un dedo, indicando que le diera un minuto, después, intentó sonreír, que terminó siendo una mueca.

—¿De qué quieres hablar?

Quinn tomó el vaso de agua del joven y dio unos sorbos, como si intentara reponerse o tuviera la boca completamente seca. ¿Cómo se daban estás noticias? Ella lo sabía. El problema era dárselo a un chico gay. Buscó los ojos avellana de Blaine y con voy clara y pausada declaró:

—Estoy embarazada.

Acto seguido, sacó de su bolso la prueba de embarazo y la sostuvo ante los ojos de su compañero.

Observó sin comprender a la rubia que se encontraba frente a él con un aparato blanco entre sus manos. Ella se veía preocupada, pues mordía con fuerza su labio inferior y bajaba la mirada. Entonces recordó algo. Algo que nunca debió haber pasado. Algo que regresaba del pasado para hacerle notar su error. Una chica que no tenía la culpa. Torció la boca en una mueca triste y tomó la mano de la chica.

—Saldremos adelante.

—No, no se trata de esto —Dijo retirando la mano del joven—. Se trata de mi cuerpo, de mí. No hay un nosotros.

Eso desencajó el rostro del muchacho. Sí no quería su ayuda, sí no quería nada de él, ¿para qué demonios lo había llamado? ¿No era más fácil anunciarlo en el Glee Club alegando que era de un desconocido, en lugar de envolverlo ahora? Frunció el ceño, esperando a que su acompañante continuara.

—Lo hago para que te des cuenta que lo que le hiciste a Kurt no está bien —aclaró—. Y que espero que no lo vuelvas a hacer. También deseo que mi hijo o hija heredé alguno de tus rasgos. Eres una criatura muy bella, Blaine Anderson y estoy feliz de que seas el padre.

Él estaba sin habla y sentía sus mejillas enrojecer; por lo de Kurt y por el vago cumplido de la rubia. Mordió su mejilla.

—Si necesitas algo, no dudes en hacérmelo saber, Quinn —Murmuró—. Siento no ser de mucha ayuda... Y siento que mi estúpido error te haga dar a luz de nuevo. No debe ser muy agradable para ti.

—Al contrario, señor. Estoy inmensamente feliz de tener en mi vientre a otra personita. Yo quiero ser ya una adulta. Esto no es más que un gran paso para mí. Claro que querré a mi hijo, pero es sólo mi medio seguro a crecer y madurar.

—Quinn, me parece que...

—No. No le diré a nadie que es tuyo, aunque como dije, espero y tenga alguno de tus rasgos y no sería muy difícil saber quién es el papá. Ni Kurt, ni nadie debe enterarse de lo que pasó. ¿Entendiste, Blaine?

Tragó en seco. Desvió la mirada a la mesa y eso alertó a la chica. Esos ojos culpables y la manera en que se mordía la mejilla, nervioso. Algo andaba mal.

—¿A quién se lo has contado?

Abrió sus ojos alarmados. El miedo y pánico se leía en ellos. Quinn Fabray era de temer.

—Olvídalo. No le dirá a nadie.

Eso hizo que ella chasqueara la lengua. Debía saber el nombre de la persona, más que nada, por el bien de ella y su bebé. Fulminó con la mirada al encorvado muchacho.

—Blaine, no estoy jugando. Dime quién más lo sabe.

Apenas y fue un susurro y ella no pudo escucharlo. Sólo fue consciente de la risa burlona a su espalda.

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Soy mala por qué nadie sabe quién es. Y no, no es Seb. Dejen un comentario para saber qué les pareció y gracias por la nueva lectora. Ojalá y más personas se unan.

DIOS!!!!..enserio. cada ves amo mas tu fic.. diso esto esta muy interesante!!1. ye sa noticia.. "estoy embarazada".. pobre Blaine.. pero bueno me alegra que este dispuesto a ayudarla..aunque ella no kiera.. y bueno.. wow.. es verdad, Quinn esta madurando, y me alegra que le haya hecho dar cuenta a Blaine del error que habia cometido... engaño a Kurt y las consecuencias se hicieron presentes..

y sii..sos muy mala!!!!!.. a quien le conto??.. espero que actualises pronto!1.enserio..esta muy bueno!!

Se lo dijo
De enserio AMO tu fic, es muy atrapante
No es Sebastian? WOW Blaine si que eres lengua floja xD
En fin espero tu proxima actualizacion :)

Capítulo 4

No era Sebastian, si no Dave Karofsky al que habían transferido de escuela ese año. Quinn torció la boca en un gesto de disgusto; nunca le había caído 'bien' ese chico, sentía que había algo raro en él. Se esforzó por no hacer ningún comentario indebido y sonrío.

—Oh, Dave, tiempo sin vernos.

—No hagas como si realmente te importara, Fabray —replicó con simpleza el joven.

La rubia hizo un intento más por no borrar la sonrisa de su rostro. Rogaba al Señor que el simplón no llevara mucho tiempo ahí. ¿Cómo Blaine no le advirtió? Se giró para ver al susodicho y notó el feroz sonrojo en sus mejillas.

—Así que, ¿están en una cita?

Y fue como que la esperanza renacía. Ella sabía que no había escuchado nada del engaño y de su embarazo. Mordió su labio inferior, pensando en sus próximas palabras. Regresó su vista al jugador de futbol.

—Sí, pero no de forma romántica —se apresuró a añadir—. Blaine me daba consejos para cantar mejor, ¿verdad que sí?

Los ojos avellana de Blaine revolotearon de Dave a Quinn y asintió.

—Ajá.

Su respuesta afirmativa hizo tranquilizar a su acompañante. Dave los miró sin tragarse el cuento por completo, pero los dejó ser. Dedicó una sonrisa traviesa a ambos y desapareció por los sanitarios. La chica se relajó automáticamente.

—Breadstix ya no es un lugar seguro, ¿uh? —dijo para aligerar el ambiente—. Ahora sí, hazme saber a quién le has dicho.

La atención de él fue atrapada de nuevo. Suspiró de cansancio, pues ya no tenía ganas de ocultarlo. Además, Seb no le diría nada a nadie, estaba seguro. Agarró su vaso con el agua casi al borde y le dio varios sorbos para aclarar su garganta. Aquella mirada en la chica lo perturbaba, y más el hecho de que de por sí, él ya le temía.

—Sebastian lo sabe.

Quinn no sabía que decir ante tal revelación; el alma se le había caído a los pies. Blaine era un traidor. ¿Sebastian Smythe? ¿El vil muchacho parisino? El padre de su bebé debería estar considerando cambiar de amistades. ¿Quién le aseguraba que todos en Dalton no sabían ya de su embarazo? Frunció el ceño hasta juntar sus perfectas cejas. Debía tratar con el mismo criminal para asegurar su silencio.

—¿Sólo él?

Asintió con miedo el menor. De un momento a otro, el celular de la chica estaba entre sus manos y le exigía el número del alto. Blaine estaba sin mucha cooperación. Se estrujó los sesos buscando una manera de poder persuadir al chico y así hablar con Sebastian. Sonrió con maleficencia y le pidió que le llamara en ese momento. De seguro la petición más descabellada que le había hecho.

Él sabía que su compañera no se detendría hasta lograr su cometido. Con un bufido sacó su móvil y presionó el número tres y después marcar.

— ¿Lo tienes en marcación rápida? —rió.

—Oh, cállate, Fabray —dijo con tono molesto. El celular seguía replicando, hasta que una conocida voz le contesto con un ''Hola, sexy''—. Hey, Seb —contestó incómodo—. Quinn quiere hablar contigo.

Antes de la respuesta del chico, le pasó velozmente el teléfono a la rubia.

—Escucha, warbler —Pronunció lentamente—. Si tu lengua viperina le cuenta a alguien de mí y mi bebé, te la verás conmigo.

Oyó la risa ronca del joven.

—No, rubiecita —Respondió, burlón—. Escúchame a mí. Yo soy el que sabe su secreto y sólo por ser Blaine no le contaré a nadie, pero ten en cuenta que sí alguien se mete con él, yo me encargué personalmente de hacerte, hacerlo, sufrir, ¿comprendes?

Quinn se tuvo que tragar su orgullo y aceptar el trato con el muchacho. Colgó acto seguido. Se sintió más tranquila, porque ahora sabía que él no le contaría a nadie pero por otro lado todavía no estaba segura de confiar en él. Miró a Blaine con aprensión.

—Dijiste que me ayudarías. Por favor, no dejes que Sebastian le cuente a alguien de nosotros.

Ella usaba el plural refiriéndose a su bebé y a ella, sólo que en el contexto sonaba como Blaine, el bebé y ella. Un sentimiento de calidez invadió el pecho del joven y asintió. Se aseguraría de cuidar de la criaturita creciendo en el vientre de su compañera y de la misma.

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Mi Blaine es un amor, ¿no? Gracias por sus buenos comentarios, seguiré pronto con la historia. Los invito a pasarse por las demás que tengo :)

aaaaaaaaaaaaaaaaauuu.. me encanto!!!.. y si.. Blaine es un amor.. me alegra que se haga responsable!!.. y ahroa va a ser papá!!. y de nuevo digo.. Quinn esta madurando.. me alegra que acepte y ame con orgullo a su bebe.. respecto a Sebastian. mas le vale que no diga nada!!!.. y.. Dave.. sospechara algo!!??. ok.. espero con ansias el prox cap! como siempre... lo ame!!.NOS LEEMOS!!