FanFic: Viviendo en Londres

Sinopsis

Brooke Berry es la hija adolescente de la famosa cantante de Broadway Rachel Berry. La relación entre ambas no va nada bien, y el que Rachel nunca mencione al padre de Brooke no ayuda. ¿Qué pasa cuando Rachel tiene que irse de gira por Estados Unidos y es obligada a contactarse con el padre de Brooke? ¿Brooke está dispuesta a dejar Nueva York solo para ir a vivir con su padre en Londres? ¿Qué pasará cuando Brooke conosca a su padre y se vea forzada a vivir dos años en Londres, en una nueva escuela donde no conoce a nadie?

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Viviendo en Londres
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"Quiero decir que quiero un animal, tal vez un hurón o un cerdito" - Brooke Berry

Um

"Déjame ver si entendí" suspiré "¿Quieres que vaya a vivir a otro continente, con un padre que no recuerdo y que me abandonó cuando yo era apenas un bebé; y todo eso mientras tú te diviertes y cantas para millones de personas?" dije, escupiendo las palabras.
No podía creer que mi madre, mi propia madre me estuviera haciendo esto. Me estaba obligando a dejar mi hogar, donde he vivido desde que tengo memoria he incluso antes; para irme a vivir con un completo desconocido. Sin mencionar que tendré que dejar atrás a todos mis amigos para ingresar en una nueva escuela. Mi madre es una desconsiderada.
"Cuando lo dices de esa forma suena peor de lo que es" replicó, sirviéndose zumo de naranja, como si la situación fuera de lo más común y no me estuviera obligando a vivir en Londres por dos años. Dos. Estúpidos. Años.
"Acabas de admitirlo" dije, triunfante.
"¿Admitir que?" preguntó, levantando una ceja.
"Qué todo esto es terrible" chillé.
"Por favor Brooke, no es tan malo" dijo, mirándome directo a los ojos. Miré de vuelta a la mujer que se hacia llamar mi madre.
No entiendo como alguien puede pensar en que mi madre y yo tenemos algo en común. No nos parecemos en nada, ya sea en lo físico, como en lo psicológico.
Tal vez tengamos el mismo pelo y los mismo ojos, pero por lo demás no nos parecemos en nada.
"¿Por qué no me puedes llevar contigo?" pregunté, suplicante.
"Porque no quiero que suceda lo de la última vez" puse los ojos en blanco. Siempre me saca en cara lo que pasó hace dos años. Nunca lo olvida, y siempre actúa como si fuera la gran cosa; fue solo un pequeño incidente.
Mamá estaba en el escenario, cantando con es maravillosa voz suya. Yo estaba tras bambalinas comiendo de una pequeña mesa, la cual estaba repleta de comida.
Mike, un productor, me había dicho que no tocara nada, y siendo la obstinada persona que soy, me acerqué a un panel de botones.
Uno de los botones era rojo brillante, mi color favorito. Decidí que apretar un botón no mataría a nadie, por lo que lo apreté sin pensarlo dos veces.
Pasaron unos segundos y no ocurrió nada. Pensé que tal vez era de ese tipo de botones que eran completamente inútiles. Pues no.
Mike estaba ordenando una sillas y recogiendo los restos de comida que yo había dejado, cuando de la nada cayó un enorme sacó - nunca me dijeron que fue lo que contenía - que aterrizo sin piedad en la pierna de Mike.
Tuvieron que llamar a la ambulancia, y llevaron al desdichado productor al hospital. Intentaron averiguar que es lo que había ocurrido, y como no soporto mentir, les dije toda la verdad.
Los médicos dijeron que Mike tenía una leve fractura en la pierna izquierda, pero por lo demás, se encontraba completamente bien.
"¿Brooke?" dijo mamá, volviéndome a la realidad.
"¿Sabes qué? me rindo, de todas formas me ibas a obligar, así que no hace mucha diferencia si acepto o no" suspiré, penetrando con la mirada a la tostada con mantequilla que estaba en mi plato.
"Gracias" murmuró ella, aliviada de que ya no opusiera más resistencia.
"Pero" dije, con una sonrisa malvada.
"¿Pero qué?" espetó ella, preparándose mentalmente para lo peor. Algunas veces me asusta que mi madre piense que soy tan malvada y que hago lo posible por torturarla.
"Pero, sí voy a estar allí por tanto tiempo al menos quiero un compañero" farfullé.
"¿Qué quieres decir con un "compañero"?" preguntó, la confusión esparcida en su rostro.
"Quiero decir que quiero un animal, tal vez un hurón o un cerdito" dije, con satisfacción.
Ella casi se desmaya.
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El número al principio del capítulo esta en portugués, significa uno.
Espero les haya gustado!