One-Shot - Brittana - Déjà Vu

7:00 A.M.

Santana se encuentra profunda y plácidamente dormida en la habitación de su departamento, hasta que aquel sueño vuelve a invadir su mente, de un momento a otro empieza a respirar un poco agitada…

S: mmm… ¿Qu… Quien eres?  (Pregunta algo nerviosa y aún dormida)

POV SANTANA

Abro los ojos repentinamente y me doy cuenta que estoy en el interior de mi habitación, apoyada de codos en la cama, mientras intento besar aquella silueta. Uff… nuevamente ese sueño.

Suspiro pesadamente y me dejo caer en la cama pensando ¿Qué significará? Cubro mi cara con ambas manos y restriego mis ojos. Observo el reloj a mi derecha, colocado en la mesita de noche, son las 7:00 a.m. ¡Genial! Pienso con sarcasmo mientras ruedo los ojos, el único día en el que puedo descansar y me despierto tan temprano.

Salgo de la cama aun con un poco de pereza, de cualquier manera soy de esas personas que una vez despiertas no pueden conciliar el sueño nuevamente. Me doy una ducha rápida, mientras mi mente sigue ocupada tratando de descifrar el por qué de ese sueño tan recurrente.

30 minutos después me encuentro fuera de la ducha, desayuno, y le echo un vistazo a mi teléfono. Vaya, tengo un mensaje de Quinn, abro el aparato y reviso el mensaje. ¡Genial!, hoy es noche de chicas, eso solo significa diversión y ligues. Le respondo sin importarme la hora, jajaja de seguro la he despertado, sonrío complacida al imaginármela toda despeinada y asustada al oír el celular sonando a estas horas de la mañana, obviamente se enfadará muchísimo.

No más de 10 minutos después, estoy recibiendo la respuesta al mensaje que le envié. Hay Santanita, hoy no te la vas a acabar, ¿Cómo te atreves a despertarme a estas horas de la mañana?... bla blá bla algunos insultos, que confirman que se ha molestado, y para terminar… has despertado a la leona literalmente ;). Sonrío nuevamente mientras imagino su cara de molestia al escribir el mensaje.

Entonces el sueño de esta mañana regresa a mis pensamientos, me pongo totalmente seria, es algo que nunca he hablado con nadie, quizá Quinn me pueda ayudar a comprenderlo. Le escribo un segundo mensaje diciéndole que debemos hablar de algo importante (al menos para mí).

Otros cinco minutos de espera y me responde… claro que si amiga sabes que puedes contar conmigo para lo que sea. Miro la respuesta con el ceño fruncido y después ruedo los ojos sorprendida con la bipolaridad de mi amiga, es decir, un momento se enfada y al siguiente es alguien súper comprensiva; niego con la cabeza mientras sonrío, es algo que no me importa, ella es increíble la mejor amiga que pueda tener.


9:00 A.M.

Escucho el timbre de la puerta sonar insistentemente ¡ya voy! Grito enfadada mientras me dirijo hasta la entrada para poder abrir.

Hola San, ¿Cómo estás? Me da un beso en la mejilla y después entra en mi departamento hasta llegar al sofá que se encuentra en la sala, ruedo los ojos, cierro la puerta y la sigo hasta sentarme a su lado, es Quinn.

Q: Venga San, ya que me despertaste tan temprano… (de repente guarda silencio y se queda pensando, de un momento a otro Quinn me golpea en el brazo con el puño cerrado) Eso, es por despertarme tan temprano en domingo,… (dice señalándome con el dedo) …que no ves que son sagrados jajaja.

Me tomo el brazo por la sorpresa de recibir el golpe, la miro con el ceño fruncido, ella ríe nuevamente y después vuelve a hablar…

Q: Bueno, como te decía, ya que me despertaste tan temprano… (levanta ambas manos y veo algunas bolsas que antes no había notado) …he pasado a rentar unas películas, a comprar palomitas y eso para pasar el rato en lo que salimos a nuestra noche de chicas.

Yo me limito a cruzarme de brazos observarla con cara de incredulidad e incitarla a que me diga la verdadera razón por la que ha venido. Se pone completamente seria, se encoge de hombros y yo levanto la ceja en señal de no saber qué está pasando.

Q: Bueno, bueno me has atrapado San, lo que pasa es que no se me ha olvidado que tienes algo que contarme eh. Sabes que yo te apoyo en lo que sea. Por eso estoy aquí, para que me lo cuentes.

Y ahí está nuevamente esa bipolaridad, la poca paciencia y también la gran curiosidad que siempre han caracterizado a mi amiga, yo sonrío por lo que me acaba de decir jamás dudé en tener su ayuda.

Doy un hondo suspiro, la miro a los ojos y le digo… Quinn últimamente… para ser más específicos estas dos últimas semanas he estado teniendo un sueño, es demasiado recurrente, se repite diariamente, todas las noches sin excepción. Veo que Quinn me observa asintiendo, de esta manera me indica que continúe. Bueno, este sueño es algo raro ¿sabes?... no sé cómo interpretarlo, o que pensar de él y necesito que tú me ayudes. La observo.

Q: Claro que si San, cuéntame.

S: Sonrío, y empiezo a contarle… Veras, el sueño empieza en mi habitación, es raro porque yo estoy dormida, entonces me despierto bruscamente, volteo a todos lados y, efectivamente, me doy cuenta que estoy en mi habitación lo único extraño es que todo, absolutamente todo, está en color blanco y el espejo que tengo al lado izquierdo no se encuentra ahí, y mi ventana parece obstruida por una especie de pared, sin embargo, la habitación está completamente iluminada.

Después de echar un vistazo a toda la habitación, me siento en la cama desconcertada, y justo cuando hago el amago de levantarme, una especie de neblina o… humo, en realidad no se que sea, empieza a inundar la habitación, del susto vuelvo a quedarme estática sentada sobre la cama, entonces noto que esta neblina solo cubre la mitad de la habitación. Espero un rato más, para ver si sucede algo extraño, pero nada parece ocurrir. Entonces decido volver a intentar bajarme de la cama y ¡Bom! Como por arte de magia, de la neblina empieza a aparecer una silueta.

Veo emerger primeramente sus ojos, unos ojos completamente hermosos, son rasgados, de un azul bellísimo, un azul claro y profundo a la vez, es… no sé cómo explicarlo, pero son hermosos. Después logro ver su rostro completo, es una mujer, rubia, con unas cuantas pecas sobre las mejillas, su rostro en si es completamente hermoso como el de una modelo o algo. Logro ver también  su larga cabellera, es dorada como el oro y al igual que toda ella es bellísima.

Yo me quedo inmóvil en la cama, completamente estupefacta ante semejante belleza, estoy maravillada, sigo sentada sí, pero mi cuerpo no responde. Ella empieza a gatear directamente hacia a mí, colocando sus piernas y sus manos cada una a un costado mío, todo eso sin dejar de mirarme ni un solo instante de una forma completamente sexy y seductora. Yo trago saliva una y otra vez con mucha dificultad, a pesar de no conocer a esta chica o lo que sea, el simple hecho de que me mire así, me excita muchísimo. Yo como acto reflejo empiezo a arrastrarme hacia atrás buscando de alguna manera “escapar” de ella, pero sigue acercándose a mí y después termino recostándome en la cama sin quitarle los ojos de encima. Ella se sienta a horcajadas sobre mí, se apoya en sus rodillas, se pone completamente erguida y con el dedo índice de su mano derecha, me indica que me acerque a ella. Yo la miro maravillada y entonces, por fin, logro juntar las fuerzas necesarias para decir algunas palabras… mmm…  ¿Qu… Quien eres? le pregunto torpemente, ella sonríe. ¡Dios! ¡Qué hermosa sonrisa tiene! Vuelve a señalarme que me acerque a ella, entonces obedezco y me apoyo en mis antebrazos para poder sentarme, cuando por fin lo he logrado, ella acerca su rostro al mío, junta nuestras narices y sin dejar de sonreír me responde con una voz completamente excitante Yo… Soy tu ángel. Inmediatamente después se acerca a mí y cuando estamos por rozar nuestros labios ¡¡PUM!! El sueño se interrumpe, me levanto sobresaltada y agitada, intentando besar a “mi ángel”. Es frustrante ¿sabes Q? Porque nunca, nunca logro besarla.

Cuando termino mi relato y observo la reacción de Quinn, me doy cuenta de que ella está al igual que yo al despertarme por las mañanas, intentando besar a alguien. ¿Qué haces? Le digo, ella abre los ojos y me mira totalmente ruborizada.

Q: Joder San. La forma en que me contaste tu sueño y yo imaginándomelo he terminado por sentirlo tan real, ¡Dios! Hasta me ha dado calor. (me dice abanicándose con la mano para intentar bajar el calor)

S: ¿Y bien? ¿Qué crees que signifique?

Q: (se encoge de hombros) Realmente no lo sé. Lo siento San.

S: No te preocupes Q, de cualquier modo lo averiguare después, supongo. Ahora que te parece si vemos las películas que trajiste le propongo, ella asiente y nos dirigimos a mi habitación.


11:00 P.M.

Estoy a punto de salir para encontrarme con Quinn en la discoteca, me doy unos retoques, miro en el espejo que todo este perfecto y como siempre, lo está. Fiu Fiu Hoy estoy despampanante vas a arrasar con todas las chicas del lugar pienso, guiño el ojo al reflejo del espejo y después me dispongo a salir.


11:30 P.M.

Llego al antro en el que he acordado verme con Quinn, está a reventar y todos se ven muy animados bailando y bebiendo por doquier. Me paro a la entrada haciendo pininos para poder buscar a mi amiga, después de recorrer con la mirada el lugar entero, logro visualizarla en una mesa al lado derecho, ella me está haciendo la mano mientras se despide de una chica que seguramente fue su primera víctima de la noche, esa Quinn no pierde el tiempo.

Me acerco hasta la mesa en donde está sentada, nos ponemos a platicar un rato y después decido ir a buscar algo de beber para empezar a calentar motores. Así pasamos unos 15 minutos, Quinn se levanta para buscar la que, según nosotras, será la última ronda para posteriormente salir a coquetear y a ligar en la pista de baile. Yo estoy sentada moviéndome al ritmo de la música, hasta que veo a mi rubia amiga regresar con nuestras bebidas, las asienta en la mesa y me acerca la mía para poder beberla.

Observo a Quinn tomarse su bebida de un solo trago mientras yo rio porque sé, que cuando hace esto, significa que ya está lista para “atacar” como ella dice. Yo niego con la cabeza y doy un sorbo a mi bebida, aun no me siento en ambiente para ir a bailar.

De pronto veo que Quinn, mira disimuladamente por sobre mi hombro, y cuando lo hace abre los ojos como platos y se queda completamente estática y pálida, tanto que me atrevería a decir que toda la borrachera que se cargaba encima desapareció por completo. Regresa su mirada hacia mí, con los ojos aun abiertos y solo se limita a decir…

Q: ¡OH… POR… DIOS! San, creo que tanto alcohol me está haciendo daño.

La miro con el ceño fruncido y sin entender a que se debe ese repentino cambio. Después de unos segundos, la curiosidad me gana y entonces giro el rostro para ver en la misma dirección que Quinn. ¡OH… POR… DIOS! Así es, al igual que a mi amiga, los ojos se me abren a más no poder, y la mandíbula casi se me desencaja. Entonces las dudas empiezan a surgir en mi ¿estoy dormida?, ¿en qué momento empecé a soñar?  No, no es un sueño porque aun me encuentro en la discoteca ¡¡Ella está aquí, es real!! es en lo único en lo que puedo pensar en este momento.

Ella está ahí al otro lado del antro, esta bellísima como en mis sueños y, además, me está mirando de esa manera tan sexy y seductora con la que sueño todas las noches, me mira sin pestañear. Yo me veo obligada a tragar saliva con dificultad y toda esta situación me parece un ritual cotidiano al cual ya estoy acostumbrada.

Devuelvo mi rostro hacia Quinn, quien al igual que yo está completamente incrédula, nos miramos completamente asombradas, y entonces sin poder evitarlo doy un segundo vistazo a la mesa en la que está sentada aquella mujer; sin embargo, me doy cuenta que ya no se encuentra en su asiento. Giro completamente mi cuerpo, para tener una mejor vista y trato de buscarla con la mirada, pero nada, es como si se hubiese esfumado. Debo admitir que me siento un poco desilusionada.

De pronto, el local empieza a llenarse de un humo que inunda todo el lugar, por el micrófono anuncian que es para dar “ambiente”, y yo siento mi corazón acelerarse.

Por alguna razón siento que la pista me llama y sin poder evitarlo levanto la vista hacia allá, es cuando logro observar que de entre la leve neblina que se ha formado, veo emerger esos ojos, mirándome directamente y acercándose a mí. Tengo todos mis sentidos concentrados en ella, sin embargo me parece escuchar a Quinn hablándome al oído.

Q: Quizás no era un sueño San, quizás era… un Deja Vu.

Yo sigo sin despegar mis ojos de aquella chica tan guapa y misteriosa, ella me sonríe mientras con su mirada me recorre entera, levanta su mano derecha moviendo el dedo índice invitándome a bailar, yo le sonrió de vuelta y me levanto para seguirla, porque sé que con esto, algo nuevo acaba de empezar…