Fic New Generation (Xover Glee/X-MEN) Capitulo III- Genosha

Hola a todos.
Quizá alguno que otro de aquí ya me conozca por otro fic que tengo escrito.
Bueno esta nueva historia que les traigo es algo loca, fantastica y muy rara jejejeje
Es una combinación de Glee con los X-MEN... ya se me había ocurrido la idea y había estado jugando con ella durante toda la semana... pero fue hasta hoy que me decidí a publicarla ¿Por qué? Pues porque soñe con ella, resulta rara y tonta esta excusa pero es la verad, soñe con esto y simplemente me termine de inspirar.
Espero que sea de su agrado... apenas va comenzando por si algunos sienten que el capitulo esta muy flojito.

Son alrededor de las 6 p.m y las calles de Ohio se encuentran vacías… al menos la calle en la que se encuentra Rachel Berry. Y es de esperarse ya que es una de las calles más peligrosas y menos concurridas, nadie quiere pasearse por allí a esas horas y mucho menos sin compañía, pero para Rachel eso no es problema.
Nuestra amiga no es como las demás, no, por supuesto que no, y eso lo descubrió cuando tenía trece años. Todo comenzó cuando jugaba a ser la próxima ganadora del Toni, la primera niña estrella o como a ella le gustaba autonombrarse… la Reina Estrella. Una jaqueca la hizo tirarse al suelo del dolor, sus padres la llevaron al doctor pero este les dijo que no era nada de cuidado, que se trataba de estrés y muy probablemente era un síntoma de la pubertad. Sin embargo las jaquecas siguieron por días y días hasta que por fin cesaron.
Sin jaqueas y sin malestares, todo marchaba bien… hasta que comenzó a escuchar cosas: voces, susurros, gritos y plegarias, todo al mismo tiempo. La primera vez que le ocurrió eso estaba en un centro comercial, grito «CALLENSE» a todo pulmón y la gente se volvió para mirarla con disgusto, eso hizo que las voces que solo ella escuchaba resonaran con más intensidad en su cabeza, así que salió corriendo a toda velocidad como alma que lleva el diablo.
Desde ese día se enclaustro en su dormitorio, no salía ni siquiera a comer, sus padres tenían que subir el plato con alimentos y al llegar a su puerta ella los obligaba a irse de inmediato alegando que las voces la volvían loca, y ellos siempre respondían que ni siquiera habían abierto la boca.
Cuando Rachel estaba a punto llegar a su límite, con un cúter sobre su muñeca dispuesta a hacer correr la sangre en un desesperado intento por silenciar aquellos inquietantes susurros, una presencia invadió su mente y la lleno de una tranquilidad y confort que hacía ya algún tiempo no había podido experimentar, y escucho un último susurro «no estás sola».
Una hora después de aquel incidente Rachel por fin se decidió a salir de su habitación, mientras bajaba los escalones escucho a sus padres platicar con alguien más. Al llegar a la sala de estar vio a sus papas sentados en un sofá y frente a ellos se encontraba un anciano en silla de ruedas y un hombre de unos treinta a su lado.

- Hija… ellos son los profesores Charles Xavier y William Shuester, querían hablar contigo sobre una beca de estudios pero les dije que no te sentías muy bien y…
- Ya me siento mejor- Contestó Rachel acercándose al anciano y a su acompañante.
- Buenas tardes pequeña- Saludo el profesor Shuester.

El anciano profesor Charles solo miraba a Rachel con una ternura que ella solo había visto en los ojos de sus padres y eso la hizo sentir bien.

- No estás sola- Le dije el anciano profesor a Rachel.

Y con esas palabras Rachel rompió a llorar arrojándose a los brazos del anciano Charles.
Desde aquel día Rachel comprendió su verdadera naturaleza: No estaba estresada, no era la pubertad y, sobre todas las cosas, no estaba loca. Las voces que escuchaban no eran psicofonías del más allá ni el resultado de una abducción alienígena. Aquellos susurros eran pensamientos y no precisamente los suyos, los pensamientos eran de las personas que la rodeaban. Ella tenía la habilidad de escuchar los pensamientos de los demás, y no solo eso, su poder podía ir mucho más allá, sin embargo eso dependería de la constancia que ella demostrara en su entrenamiento como nuevo miembro de los X-MEN. Rachel Barry era una mutante telepata.
El profesor Xavier era un reclutador de mutantes, un mutante telepata con un gran computador llamado Cerebro el cual tenía la peculiaridad de poder encontrar mutantes en cualquier parte del mundo. William Shuester fue uno de sus alumnos y ahora era profesor del instituto Xavier, el tenía el poder de la telepatía y telequinesis.
Cuando llego a vivir al instituto pensó que sería el bicho raro. La chica loca que escuchaba voces y que se sentía la nueva promesa de Brodway, Sin embargo las cosas resultaron diferentes, se encontró con chicos como ella… parias incomprendidos en un mundo que los odiaba por el simple hecho de ser diferentes.
A demás de ser un lugar de entrenamiento y base general de los X-MEN, el instituto Xavier resulto ser una escuela de verdad, contrario de lo que pensaba Rachel ya que pensaba que el nombre de «instituto» solo era una charada para disimular lo que realmente era. Llevaba clases normales como cualquier chica de su edad y por las tardes se sometía a un entrenamiento para poder controlar sus habilidades mentales, ella fue la última telepata que el profesor Xavier tomo a su cargo antes de su muerte.
El deceso de Charles Xavier marco un antes y un después para todos los mutantes que Vivian en el instituto, Rachel en ese entonces contaba con 15 años y sabía exactamente lo que haría… se quedaría pasará lo que pasará. Casi todos abandonaron la escuela, incluyendo maestros y alumnos, ya que temían ser descubiertos por las personas normales o que incluso los grupos radicales de mutantes atacaran, sin Charles nadie se sentía seguro.
Cuando sucedió el «fatídico acontecimiento», como lo solía llamar Rachel, el personal docente quedo reducido a tres: El profesor Shuester con sus habilidades mentales, la entrenadora Beiste dotada de súper fuerza y la orientadora Emma cuyo talento era atravesar paredes. En cuanto a los alumnos, de estos solo quedaron dos; Rachel Berry y Finn Hudson, un chico con habilidades lumínicas.
Rachel sintió un profundo vacio por la pérdida de Xavier ya que el hecho de que muriera era algo imposible de asimilar, una persona tan querida y tan importante en su vida se había ido para no volver jamás. Esa noche se quedo hasta tarde en la habitación de Charles, quería estar allí mientras el aroma de su querido profesor aun inundaba la habitación, miro las fotografías colgadas en las paredes, observo a la antigua generación de X-MEN… un joven con unos lentes rojos como la sangre estaba a la derecha del profesor mientras que a su izquierda se encontraba una chica pelirroja, había también un hermoso chico con un par de alas blancas y otro más con la piel azul como el cielo invernal. Y en los álbum fotográficos también aparecían, solo que con unos trajes muy llamativos y elaborados… así fue como comprendió lo que eran los X-MEN… eran súper héroes y aquel no era un álbum fotográfico, era una lista de los mutantes que alguna vez formaron parte de los X-MEN: el chico de lentes rojos se llamaba Scott pero era mejor conocido como Cyclops y su habilidad era lanzar rayos de plasma a través de sus ojos, el rubio se llamaba Warren y su nombre de X-MEN era Arcángel. Y así fue revisando todos los álbumes, conociendo a todos los héroes que habían pasado por las puertas del instituto Xavier… Nightcrawler, Rogue, Colussus, Gambit… todo eso fue una revelación para Rachel, ella pensó que los X-MEN eran los mutantes que ingresaban al instituto, pero al parecer los que vivían en el instituto eran simples alumnos a los que se les enseñaba el ABC y sobre cómo controlar sus dotes especiales, los X-MEN era un grupo de élite mutante destinados a defender a la humanidad de mutantes y humanos.
Con una nueva visión de lo que eran los X-MEN y con el pecho lleno de esperanza Rachel salió de la habitación con uno de esos álbum entre los brazos estrechándolo tan fuertemente contra su pecho como si quisiera fusionarse con él.
No durmió toda esa noche trabajando en lo que sería su traje… un poco de tela por aquí, hilo por allá y tierrazos por acá.
A la mañana siguiente se dirigió a la oficina del director, la cual sabía ahora era la oficina del señor Shue. Antes de poder abrir la puerta escucho una discusión que se gestaba detrás de esta, la voz del señor Shue, Beiste y Emma junto con una cuarta que no reconocía.

- No escuchas lo que te digo William- Alegaba en voz alta el desconocido- Magneto no estaba muerto como creíamos, ha regresado y su interés primordial es acabar con la humanidad.
- Pero dime Logan- Respondió la entrenadora Besite-. Qué rayos quieres que hagamos, después del apocalipsis pensamos que nunca más habría peleas entre humanos y mutantes. El instituto Xavier se centro en enseñarles a sus estudiantes el control de sus habilidades y nada más, y ahora con la muerte de Charles el número de nuestros estudiantes se redujo a dos ¿crees que con eso armamos un ejército? ¿Quieres que los mandemos a la guerra sin armas? ¡Contéstame Logan! ¡¿Es eso lo que quieres?!
- Los chicos que tenemos no son soldados- Interrumpió Emma al ver que Beiste estaba a punto de echársele encima a Logan-. Son jóvenes que fueron entrenados para no utilizar sus poderes en forma de ataque. No saben…
- Con eso me dices que no saben pelear- Le interrumpió Logan bruscamente-, pero ustedes si saben, incluso tu Emma, podrás ser una lunática pero eres buena en batalla… o prefieres que te llame por tu otro nombre, Ghost-M.
- Te ausentas durante diez años y de repente vuelves como si nada pidiéndonos que te sigamos a une pelea que…
- ¡Estuve diez años siguiéndole la pista a Magneto William!- Gritó Logan- ¡Y no me gusta que escuchen conversaciones ajenas!

Tres garras plateadas atravesaron la puerta de la dirección e hicieron saltar a Rachel del susto para después desaparecer con un «slash» dejando tres pequeñas grietas en la puerta. Esta se abrió de golpe y Rachel contemplo a un hombre de mediana estatura con los músculos muy marcados, los brazos y el rostro velludo y una expresión de pocos amigos.

- ¡Y esta enana de dónde salió!- Vocifero Logan volteando a ver a los demás profesores- ¿Y por qué usa esa ridícula toga?
- En primer lugar no me llames enana que somos casi de la misma estatura ¡Enano!- Reitero Rachel mientras entraba sin permiso a la oficina haciendo a Logan a un lado- Y en segunda no es una toga es una capa que cubre lo que traigo debajo.
- Rachel si quieres discutir algo mejor ven despu…
- Quiero ir a buscar a Magneto… quiero ser una verdadera X-MEN.
- ¡Niña! Pero qué diantres estás diciendo- Interrumpió Beiste mientras se acercaba a Rachel- ¿A caso perdiste un tornillo? Tú no sabes pelear, ninguno de nosotros te entreno para…
- Ustedes no pero el profesor Charles sí.
- ¿Qué dijiste?- Pregunto Emma mientras abría los ojos haciendo que sus ojos salieran casi de sus cuencas- ¿Estás hablando en serio?
- Si, quizá no sepa mucho sobre ataques físicos pero en ataques mentales me defiendo muy bien.
- Lo ven- Interrumpió Logan-. El profesor nunca se confió como ustedes y esta chiquilla es la prueba.
- Aún así Rachel no tiene la experiencia que nosotros tenemos- Se entrometió William-, ella no podría…
- Ustedes tampoco nacieron sabiendo- Comento Rachel disgustada-, y a partir de ahora seré Star Queen.

Rachel había dejado caer su capa para dejar al descubierto el traje que ella misma elaboro. Se trataba de un conjunto de pantalón y bolero en color gris claro. Llevaba la parte del vientre descubierto y debajo del ombligo resaltaba la dorada hebilla de su cinturón la cual tenía forma de estrella y en medio de esta había una X en tono rojo.

- Yo opino que está más que lista- Agrego Logan.
- Como te atreves a decir eso es solo una niña…
- No tienes respeto…
- Eres un desconsiderado…

Y nuevamente comenzó la discusión, todos hablaban, gritaban, insultaban y parloteaban sobre lo que Charles hubiera querido y el disgusto que le habría ocasionado escuchar los argumentos de Logan.

- ¡CÁLLENSE!- Grito Rachel.
Una onda psíquica entro en las mentes de los tres profesores y Logan haciéndolos caer al suelo y retorcerse como caracoles en sal. Rachel sabía que si les pedía silencio nunca la escucharían ya que la consideraban una niña indefensa y por lo tanto su palabra no contaba, sin embargo si les mostraba lo que era capaz de hacer quizá la comenzarían a tomar en serio.
- ¡BASTA RACHEL!- Grito a todo pulmón William- ¡DETENTE O TE OBLIGARE A HACERLO!

Quizá fuera la peor idiotez que se le había ocurrido en su corta vida, pero si quería demostrar que era una mutante fuerte tenía que probarlo. Libero a Logan, Besite y Emma de la onda mental, sin embargo no lo hizo con Will. Este sería un enfrentamiento telepático entre ella y él, esta sería una demostración de lo que podía hacer.

- ¡Rachel que estas pensando hacer!- Refunfuño Will mientras se incorporaba trabajosamente aún victima de la intrusión psíquica de Rachel- ¡Si así es como lo quieres entonces así será!

Los sonidos desaparecieron y las luces se apagaron en la conciencia de Rachel… la mente de William había comenzado su ataque, ella no tenía idea de lo que pasaba, se encontraba en un lugar oscuro e incluso el tiempo parecía haberse detenido. Aquello no podía terminar de esa manera, no, no podía permitirse quedar en ridículo, eso jamás pasaría, jamás…

- ¡JAMÁS!- Grito Rachel liberándose de la conciencia de Will y haciendo que este chocara con la pared de la dirección debido al impacto psíquico.
- ¡Santo dios¡ ¡William!- Exclamo alarmada Emma mientras corría para levantar a Will- ¿Estás bien Will?
- ¿Alguien más piensa que esta chica no está lista para ser una X-MEN?

En ese momento ninguno de los presentes se atrevió a contradecir a Logan. Nadie dijo palabra alguna, solo miraron a Rachel con los ojos llenos de asombro.

- Bienvenida al equipo Star Queen- Dijo Logan dirigiéndose a Rachel.
- Gracias Wolverine.
- Haz escuchado de mi ¿verdad?
- Solo lo que los libros de recortes y fotografías del profesor dicen. Esqueleto de adamantium, regeneración…
- Y como se supone que vamos a luchar contra Magneto, tú dices haberlo visto pero como sabemos que no te confundiste- Agrego Shuester mientras se incorporaba con la ayuda de Emma-. Y sobre todo ¿Cómo vamos a armar un nuevo equipo si solo estamos los presentes en este cuarto y otro chico que se encuentra en la cocina?
- Se refieren a mí- Decía Finn mientras entraba a la dirección muy quitado de la pena comiendo mantecado de un traste gigantesco que llevaba entre las manos.
- ¿También escuchaste la conversación muchacho metiche?- Pregunto Beiste.
- Como no escucharla, sus gritos se escuchaban por todo el instituto, aunque no hubiera querido hacerlo me hubiera resultado inevitable.
- ¿Y tú que puedes hacer?- Le cuestiono Logan.

Al instante comenzaron a aparecer resplandecientes destellos de luz por toda la habitación, unos eran pequeños y otros grandes. La dirección parecía haberse llenado de luciérnagas multicolores.

- Genial, si Magneto ataca podemos atacarlo con chispitas- Comento Logan con ironía.
- Volviendo a lo de antes- Dijo Rachel-, podríamos usar a Cerebro para encontrar a más mutantes.
- ¿Sabes usarlo niña?
- Yo no… aún. Pero el profesor Shue sí.
- Sería bueno intentarlo- Interrumpió Emma.
- Pensé que estabas en mi contra- Comento Logan en tono ácido.
- Quizá no esté del todo convencida, pero más vale prevenir que lamentar.
- Entonces están conmigo.
- Yo sí- Se adelanto Rachel-, seré la más grande X-MEN que el mundo haya visto, la heroína más grande de todos los tiempos y a demás seré una reconocida actriz de teatro, el mundo me amara y me…
- Cuenten conmigo también- Agrego Finn interrumpiendo la perorata de Rachel.
- ¿Y ustedes?- Pregunto Logan volteando a ver a Besite y William respectivamente- Están con nosotros o qué.
- Si no hay de otra- Agrego Will.
- Pues ya que- Contesto Besite.
- Entonces no se diga más, nosotros seremos la nueva generación de X-MEN- Decía logan mientras miraba a cada uno de ellos-, buscaremos a más como nosotros y les enseñaremos a dominar sus habilidades para que nos ayuden a detener los malvados planes del amo del magnetismo.

De eso ya hacía un año, pero el recuerdo permanecía en la menoría de Rachel, el día en que oficialmente se volvió una X-MEN. Claro que no fue tan fácil como ella esperaba, tuvo que recibir entrenamiento físico y clases de artes marciales, sin embargo había valido la pena. Aquel recuerdo provocaba en ella una sensación agridulce… agria por el hecho de que un día antes de ser una X-MEN falleció su querido profesor Charles; y dulce por formar parte de los X-MEN.

Ahora, volviendo al escenario antes mencionado. Star Queen paseaba sola en una de las calles más peligrosas de Ohio, pero no se encontraba allí por casualidad. Cerebro había indicado la presencia de un mutante en ese lugar, las lecturas solo decían «mutante venenoso». No sabía del todo a que se refería aquello, pero estaba a punto de descubrirlo.

El ruido que provocan los cubos de basura al ser tirados hizo que se detuviera frente a un callejón oscuro. Se hubiera detenido de todos modos aunque no hubiera escuchado aquel ruido ya que lo que había percibido era la presencia mental de alguien escondido allí mismo.

- ¡Hola! ¡Se que estás allí!
Entro al callejón, al parecer no había nadie. Pero ella sabía que sí, es más, sabía que se escondía dentro de uno de aquellos grandes depósitos de basura.
- Ya sé que te escondes dentro de la basura- Dijo Star Queen hablando lo más dulcemente que le fue posible.

La puerta del contendor se abrió con un «clap» y de él salió un muchacho delgado con la ropa llena de porquería y rasgada.

- No te asustes por favor- Dijo el chico-. No quiero lastimarte, solo buscaba comida.

«No piensa lastimarme» Repetía irónicamente Star Queen en su mente «El es el que está muerto de miedo y me dice a mí que no tema».

- ¿Por qué no sales de allí?
- Quizá te asustes si me vez completamente, prefiero quedarme aquí.
- Se que eres diferente. No temas mostrarte ante mí.
- ¿A caso eres del circo?
- Soy como tu- Le dijo telepáticamente.
- ¿Como hiciste eso?- Pregunto moviendo la cabeza en varias direcciones como si buscase bocinas ocultas en la pared.
- Hice eso porque soy como tú. Mi habilidad es la telepatía, puedo meterme en tu cabeza y saber qué es lo que piensas, y también puedo comunicarte lo que yo pienso sin necesidad de abrir la boca.
- ¿En serio?- Dijo con la voz llena de emoción- Pensé que querías llevarme al circo o a algún laboratorio.
- Jamás haría eso. Ahora sal de allí.
- Está bien.

El chico salió de un salto de aquel depósito de basura. En si no era muy diferente de ella… salvo que tenía una cola reptílica que le salía del trasero. Sus pies iban descalzos y dejaban ver unas uñas afiladas al igual que en sus manos.

- No eres muy diferente- Dijo Star Queen intentando contener las ganas de agarrarle la cola.
- Pues no todos piensan eso… la mayoría me tiene miedo, he tenido que comer de la basura para poder…
- No digas nada. De ahora en adelante vivirás con migo y otros chicos como nosotros.
- ¿Me juras que no es el circo a dónde me llevas verdad?
- Te lo juro.
- Esta bien, pero como vamos a ir sin llamar tanto la atención. Tú vas vestida como si fueses a ir a una convención de Cosplayer y yo a demás de tener cola parezco un pordiosero.
- Y crees que una heroína y futura cantante como yo viaja a pie. Hay un auto esperando a la vuelta de la esquina.
- Si es que no lo han robado. Esta es una calle muy peligrosa.
- Ya lo sé, pero tiene un sistema de seguridad muy bueno, si alguien intenta robárselo simplemente explota. Y como no he escuchado ninguna detonación confió en que aún sigue donde lo deje.
- Valla sistema que usas. Y a todo esto cuál es tu nombre.
- Me llaman Star Queen, pero si lo prefieres puedes llamarme Rachel.
- Mucho gusto Rachel. A mí me llaman fenómeno, monstruo, demonio…
- ¿Y cómo te gustaría que yo te llamará?
- Mike… Mike Chang… o simplemente Mike.
- Muy bien Mike, pues entonces sigamos nuestro camino y… bienvenido a los X-MEN.
- ¿Quiénes son los X-MEN?
- En el camino te explico.

Y así un mutante más se une a la nueva generación de X-MEN. Sin embargo ellos no son los únicos que están reclutando nuevos miembros a su equipo… Genosha está renaciendo de sus cenizas y un nuevo monarca esta por ocupar el trono.

Amig@s... lamento la tardanza pero mi mente estaba en blanco... bueno, no en si precisamente... sabía que seguiria a continuación y las escenas y los personajes, lo que no sabía era como narrarlo, es decir, como escribir... me ponía a escribir y luego perdía el hilo de la historia o sino se me iba la inspiración... y escribir sin inspiración es como ir a la escuela pero sin libros (que analogía más estupida se me ocurrio :roll: ).
Quiero decirles que ya tengo ordenado de que va a tratar esta primera parte; pienso dividirla en tres partes... si es que les gusta la historia y la siguen lellendo en un futuro, así que no se espanten si termino esta primera y no aparecen algunos personajes, porque lo harán en la segunda... ya todo esta friamente calculado... solo falta que lo escriba jejeje :P .
Les dejo el segundo capitulo, ya tengo la idea del tercero pero falta que lo escriba... necesitare leer mis comics y ver los capitulos de las series que tengo para inspirarme jejeje. Espero y les guste... me tarde un poco con el final del capitulo pero espero y les guste.

En la cocina del instituto Xavier se encuentra un chico asaltando el frigorífico; es un joven alto, de piel blanca, buen cuerpo, labios carnosos y cabello artificiosamente rubio. Muchos lo conocen con el nombre de «Nilo» pero para los amigos es Sam. Quizá a simple vista parezca un chico normal, pero la normalidad acaba cuando lo sobrehumano hace acto de presencia, y su habilidad sobrehumana se presento hace un año.

- Hey, deja de comer tanto o perderás ese cuerpo de escándalo- Dijo Rachel de modo juguetón mientras pasaba frente a la cocina.
- Miren quien regreso- Comento Sam mientras cerraba el frigorífico- Drama Queen.
- Soy Star Queen- Replicó Rachel con tono indignado-. Eres un…
- Tranquila Rach solo estaba jugando- Se adelanto a decir Sam antes de que Rachel comenzará a parlotear-. ¿Cómo te fue con ese chico?
- Se está bañando- Le respondió mientras tomaba asiento en una silla frente a él-. Llegó hecho un asco, aunque debajo de toda esa mugre se ve que hay un muchacho muy guapo.
- ¿Igual o más que yo?
- Tú siempre de narcisista.
- Y me lo dice la reina del drama.
- Que no soy la reina del drama.
- Tienes razón, eres la reina de la tragedia.
- No soy dramática ni mucho menos trágica, lo que pasa es que suelo ser muy intensa y a veces me dejo llevar por…
- ¿Hola?- Se escucho la voz de otro chico- ¿Rachel?
- Por aquí Mike- Contesto Rachel alzando un poco la voz para que le oyera-, a dos puertas de donde estas.
- ¿En verdad puedes ubicarlo sin verlo?- Le pregunto Sam asombrado- Eres igual que «Cerebro».
- Solo puedo ubicar a personas siempre y cuando estén en mi radio de alcance… yo nunca podría ubicar a alguien que estuviera en China o Francia ya que eso supera por mucho mis habilidades, sin embargo cerebro amplifica las ondas cerebrales de quien lo utilice para crear una onda psíquica de largo alcance para…
- Rachel, detente para respirar o te ahogaras antes de terminar lo que me estabas diciendo. De todos modos no entendí.
- Eres un gran bobo.
- Hemm… hola- Saludo Mike desde la entrada.
- Hola Mike pas…

Rachel se quedo sin palabras al volverse para mirar a Mike, sabía que detrás de toda esa mugre había un chico lindo, pero no uno tan guapo.
Mike se encontraba parado en la entrada de la cocina y lucia unos jeans rotos, no porque fueran viejos más bien porque ese era el diseño, y una playera lisa en color verde claro. La playera se ajustaba perfectamente a su cuerpo y dejaba que se notara su bien formado cuerpo, sus brazos eran delgados pero con músculos y su rostro era fino con un par de ojos rasgados dejando ver su ascendencia asiática.

- Creo que alguien se enamoro- Comento Sam en modo burlón.
- Lo dice el que se enamoro de la chica que lo recluto- Le contesto Rachel en tono ácido-, mírenme, soy Sam y me muero por Ethernal.
- Estas mal de la cabeza- Respondió Sam haciéndose el desentendido aunque un pequeño rubor cubrió sus mejillas.
- Creo que interrumpí algo- Comento Mike- Mejor regreso después.
- No Mike, no te vayas- Se adelanto Rachel al ver que Mike estaba a punto de salir-. Descuida, siempre me estoy peleando con «pelos de mantequilla».
- Si, es nuestra manera de «querernos»- Agrego Sam- Me llamo Sam y al parecer tú te llamas Mike ¿Cuál es tu talento?
- Bailar… supongo- Contesto Mike mientras metía sus manos en los bolsillos.
- No me refiero a ese tipo de talento- Reitero Sam-. Me refiero a cuál es tu poder ¿Qué habilidad tienes?
- Pues… yo…- Dudaba Mike mientras su cola comenzaba a moverse- yo puedo… puedo intoxicar a… puedo intoxicar a la gente.
- Garras venenosas en manos y pies- Añadió el profesor Shuester mientras entraba a la cocina-. Agreguémosle a eso una agilidad y elasticidad en extremidades superiores e inferiores y qué tenemos como resultado.
- Una lagarpiente- contesto Sam.
- Eso ni siquiera existe- Le reprendió Rachel.
- Tenemos a un mutante nivel 3- Dijo el profesor Shue.
- ¿Nivel 3? No entiendo- Dijo Mike enarcando una ceja.

- Veras- Agrego el profesor Shuester preparado para dar toda la información que le fuera posible-, los poderes de los mutantes se miden por niveles. Generalmente hay seis escalas. Y los mutantes que están en los últimos números de esta escala son los considerados de cuidado o con un poder más que avanzado. Un mutante de nivel 3 es considerado de poder normal.

- Ah- Exclamo Mike- ¿Y ustedes qué nivel tienen?
- Sam es de nivel 3, yo soy de nivel 4 al igual que Rachel.
- ¿O sea que ustedes dos son de cuidado?

- Los telepatas siempre somos de cuidado- Se entrometió Rachel-, no importa qué nivel tengamos, pero si, somos de mucho cuidado porque podemos entrar en tu mente y retorcerla a nuestro antojo para después enloquecerte o dejarte en estado vegetativo que ni siquier…- Se detuvo para respirar.

- Te dije que terminarías ahogándote por hablar tan rápido- Le reprendió Sam.
- ¿Qué poder tienes tú Sam?- Pregunto Mike.
- ¿Puedo?- Cuestiono Sam mirando al profesor.
- Solo no termines haciendo un desastre.
- Mejor después- Interrumpió Rachel-. Ahora quiero mostrarle el instituto, después tendrán tiempo de mostrarse mutuamente sus cosas.
- Eso tenía doble sentido o lo dijiste así a propósito.
- Tómalo como quieras Sam, y eso también iba con doble sentido.

Rachel tomo a Mike por el brazo y los dos salieron de la cocina dejando a Sam y al profesor Shuester.
Mike conoció los lugares donde se impartían clases, los dormitorios, una fuente en la cual podían sentarse al borde de esta y sentir las pequeñas gotas de agua salpicar la piel.
Después se encontraban en una gigantesca cancha de basquetbol, la cual le dijo Rachel servía de escondite para la Blackbird; un jet de gran potencia utilizado para misiones especiales.
Y así pasaron el resto de la tarde hasta que Rachel lo llevo a una parte del instituto que estaba oculta para otras personas. Era una habitación algo extraña parecía un centro de mandos y frente a ella había una gran pared de cristal.

-¿Y qué se supone que hacen aquí?- Pregunto Mike.
- Es la «habitación del peligro»- Respondió Rachel- Mira a través del cristal para que sepas de que se trata.

Algo temeroso, pero con más curiosidad que miedo, Mike se acerco cautelosamente al cristal. Detrás de este se encontraba una gran sala que simulaba situaciones de riesgo; como por ejemplo la que estaba presenciando en ese momento; tres robots atacaban a dos chicos, el primero era un joven musculoso y con un corte mohicano y la segunda era una chica de larga cabellera negra y un par de lindos ojos rasgados.

- ¿Quiénes son ellos?
- El chico es Puck y la chica Tina, también puedes llamarlos Blast y X-Plosion.
- ¿Qué se supone que están haciendo?
- Están entrenado, en este cuarto simulamos combates para poder entrenar aunque eso no quiere decir que salgamos ilesos, a veces esas maquinas nos dan un mal golpe y casi siempre terminamos en la enfermería.
- Pero tú eres telepata, para ti no ha de ser problema deshacerte de esas hojalatas andantes.
- Solo que hay un pequeño fallo en tu teoría, y es que las maquinas no poseen mente, o sea que son inmunes ante mí y yo por el contrario no soy inmune a los ataques físicos.
- Ah…

Una gran explosión desvió la atención de Mike. En la habitación del peligro uno de los Robots estallo dejando cables y pedazos de metal en el piso. Puck se movió rápidamente para esquivar el ataque de otro robot y antes de que este lograra asestarle un golpe una esfera roja de energía apareció ante sus manos y la arrojo contra el robot, una segunda maquina estallo en pedazos. El tercer robot perseguía a Tina, esta mantenía la distancia, cuando el robot estaba a punto de abalanzarse sobre ella Tina estiro la mano derecha y abrió la palma de su mano hasta donde esta se lo permitió, un gran estallido se escucho… pero el robot resulto ileso… al contrario de Tina que salió volando por los aires y choco contra la dura pared de hierro.

- ¿Qué demonios paso allí?- Pregunto Mike con tono asustado.
- ¡Maldición! Tina aún no controla por completo su poder- Respondió Rachel acercándose al cristal para ver mejor lo sucedido-. Puede hacer que las cosas exploten… pero si no se enfoca bien… pues… bueno… entonces su poder le explota en la cara.
- ¡Que feo!
- Feo… es algo feo, pero también gracioso. Mira por ti mismo.

Mike miró de nuevo a través del espejo y vio a Puck ayudando a Tina a levantarse… y al ver el aspecto de la chica asiática los dos no pudieron contener la risa. Tina tenía el aspecto de alguien al que le había estallado el boiler en la cara; su cabello estaba esponjado y algo quemado, sus cejas habían casi desaparecido y tenía el rostro renegrido.

- No creo que sea bueno que nos estemos riendo de lo que le paso- Comento Mike intentando recuperar el aliento.
- Y por qué no. Ellos se burlan de mí todo el tiempo, no veo el problema en que yo me burle de ellos también.

Unos minutos después Mike y Rachel salieron de la «habitación del peligro» con una sonrisa en los labios… aunque Mike no se sentía del todo bien ya que tenía el temor de que Tina estuviera lastimada, muy contrario a Rachel que parecía no preocuparle ese asunto más de lo debido.
Siguieron caminando por el largo pasillo hasta encontrarse con un hombre de mediana estatura y rostro de pocos amigos.

- Hola Logan- Le saludo Rachel-. Para que estés enterado: Tina volvió a explotar…

Un golpe en el estomago por parte de Logan hizo callar a Rachel y una ágil patada giratoria la hizo caer al suelo.

- ¡Rachel!

Mike le dio un rodillazo a Logan en el estomago y un codazo en la espalda, pero más tardo él en intentar darle otro codazo que Logan en moverse de una forma mucho más ágil que Mike y de una barredora patada dejarlo tendido en el suelo.

- ¿Qué pasa cariño?- Pregunto Logan; con una voz femenina y los ojos amarillos como los de una serpiente; a Mike que se encontraba debajo de él- Pensé que darías más batalla. No cabe duda que desde la muerte de Xavier todos los buenos mutantes perdieron aquel fuego y quedo solo el rescoldo…
- ¡Mistique!

Alguien se abalanzo contra Logan y lo quito de encima de Mike. Este se incorporo rápidamente, frente a él vio algo muy extraño… Dos Logan rodando por el piso.
El Logan de ojos amarillos se zafo rápidamente del segundo. Cuando los dos estuvieron a una distancia sensata el segundo Logan hizo crecer sus dos pares de garras de adamantium y arremetió contra su doble, este solo esquivaba los zarpazos de una manera muy ágil y elegante esbozando una sonrisa burlona y, antes de que Logan pudiese dar otro zarpazo, el de ojos amarillos lo tomo por ambas muñecas mientras que con la pierna izquierda escalaba por su abdomen y con la derecha remataba una patada justo en la quijada.
Antes de aterrizar en el suelo después de aquella acrobática patada, la figura de aquel hombre de ojos amarillos cambio hasta quedar convertido en una mujer de piel azul y cabellos rojos al tocar el suelo nuevamente.

Logan se incorporo rápidamente decidido a contra atacar.
- ¡Aún quieres luchar!- Se burlo de él la mujer azul.
- ¡Cállate Mistique! ¿Qué rayos buscas aquí?
- No es de tu incumbencia… asuntos de Erick.

De repente apareció una segunda chica detrás de Logan. Vestía un traje parecido a una semiarmadura; un corsé metálico, botas y protectores para los brazos metálicos también. Y un casco muy extraño; parecido al que usaban las valkirias de Valhala el cual dejaba ver una cabellera rubia saliendo por detrás y una máscara en color blanco la cuál le cubría el rostro. Pero el artefacto más extraño que cargaba era una gigantesca espada colgada sobre su espalda muy parecida a un bracamante, solo que de exageradas dimensiones.
Logan percibió el olor de la segunda intrusa y se coloco a distancia de las dos para poder predecir sus movimientos.

- Querido Wolverine- Anuncio Mistique-, quiero presentarte a nuestra nueva recluta, Sable, tiene un gran conocimiento bélico y usa esa espada tamaño familiar para cortar a sus oponentes como si fuesen cubitos de mantequilla.
- Veamos si su espada puede contra mis garras- Respondió Wolverine en modo de reto.
- No pienses que es una espada común, está hecha del mismo material que tus garras… Adamantium. Igualmente la armadura y el casco.

Sin esperar orden alguna Sable arremetió contra Wolverine con su espada en un movimiento casi sobrehumano, Logan a penas y pudo desviar la emboscada con ambos pares de garras.
Mientras Sable y Wolverine se batían en un afilado duelo, Mistique aprovecho la situación para escabullirse y llegar hasta donde estaba el inconsciente cuerpo de Rachel.

- Muy bien pequeña- Le dijo Mistique a la desmayada Rachel-. Es hora de llevarte con Magneto.

Justo cuando estaba por recoger a Rachel, una cola morada se enredo en su pierna izquierda y la hizo caer de sentón en el piso. Mike dio un gran salto y en una clara demostración de su gran agilidad y velocidad cargo a Rachel y se alejo con ella unos cuantos metros.

- ¡Maldito mocoso!- Comento ofuscada Mistique mientras se levantaba del piso y se frotaba el trasero con una mano- Me había olvidado de ti.
- Y también de mí.

Sam apareció a la derecha de Mike justo por la puerta que estaba al lado de él.

- Otro bebé- Mascullo Mistique.
- Quiere a Rachel- Le dijo Mike a Sam-. Dijo algo sobre llevársela con un Magneto.
- Será que quiere llevársela a Magneto- Corrigió Sam.
- ¡Hey! ¡Ustedes dos!- Grito Logan mientras esquivaba una estocada por parte de Sable- Menos charla y más acción.
- No podrán contra mí- Exclamo Mistique-. Son demasiado jóvenes e inexpertos para enfrentarse a nosotros.
- ¡Nilo!- Grito Wolverine nuevamente mientras paraba un espadazo- ¡Utiliza ese ataque que te enseño Ethernal!
- Aún no puedo controlarlo- Respondió Sam en tono angustiado- Podría resultar peor que…
- ¡Mierda! ¡Eres estúpido o qué rayos!- Exclamo Logan perdiendo los estribos- ¡Haz lo que te digo maldición! Porque si no lo haces te juró que si no resultas muerto por las manos de Mistique entonces yo te cortare la cabeza con este par de garras.
- ¡Esta bien!- Respondió Sam- Lo haré.
- El muñequito de porcelana piensa que podrá hacer algo contra nosotras- Se mofo Mistique-. No sé quién es más patético; si tu obedeciendo a Wolverine o él ordenándote atacar, hasta dónde ha llegado nuestro querido Logan… pidiéndole a un crío hacer el trabajo de un adulto.

Sam se coloco en posición de ataque, flexiono el brazo izquierdo al nivel de su pecho como si se estuviera preparando para lanzar algo. El ambiente comenzó a tornarse húmedo, inclusive una pequeña escarcha cubrió el azulejo del piso y paredes.
Justo cuando Mistique estaba a punto de hacer otro cometario mal intencionado y Wolverine decirle otro sádico método para matarlo, Sam tomo impulso y extendió su brazo como si lanzase una daga invisible por los aires. De repente varios chorros de agua disparados a presión aparecieron de la nada y arrasaron con Mistique, Sable… y Logan incluido. Este último se aferro a la pared del pasillo utilizando sus afiladas garras igual que un gato se aferra de la rama de un árbol para no caer.
El torrente de agua desapareció tal como empezó. Sam y Mike, con Rachel en brazos, se acercaron a Logan y este se soltó de la pared.

- Discúlpame Logan no quería atacarte a ti también.
- Descuida, yo estoy bien, al parecer lograste espantarlas… su aroma… están tratando de escapar ¡Vamos tras ellas! ¡Coludo! Tu quédate con la reina del drama.
Wolverine y Nilo salieron disparados tras el rastro de Mistique y Sable mientras Mike se quedaba con Rachel en brazos y les gritaba algo parecido a «no me llamo coludo».
Recorrieron todo el pasillo hasta salir a las afueras del instituto. Cuando llegaron al jardín se sorprendieron de ver a William desmayado sobre el pasto y a Emma en posición de batalla frente a un árbol. Pero lo más sorprendente era ver que en el árbol se distiguía a un chico con un gran par de alas negras y al parecer estaba atravesado… o mejor dicho, atorado dentro del árbol.

- ¡Ghost-M!- Exclamo Wolverine mientras corría hacia ella seguido de Nilo- ¿Qué paso?
- Ese chico- Respondió con la voz aún jadeante debido al combate que había tenido que llevar a cabo-. Apareció de la nada y golpeo a Will en la cabeza dejándolo inconsciente. Luego quiso llevárselo volando, pero logre impedirlo… es muy fuerte y… sus plumas… están afiladas como un cuchillo y puede… puede arrojarlas con solo aletear… al final logre atraparlo dentro de ese árbol.
- A nosotros también nos atacaron, pero Nilo ahuyento a ese par de locas. No viste a una mujer azul y una chica enmascarada salir corriendo.
- ¡Verlas!- Exclamo Emma- La mujer azul llego hasta aquí y después se transformo en el chico alado y se llevo a la enmascarada volando… creo que voy a volverme loca…
- Entonces lograron escapar…

El ruido de ramas al quebrarse hizo que centraran su atención en el árbol otra vez. Al mirarlo se dieron cuenta de que el chico se había liberado de su prisión y los miraba cautelosamente. Era un joven no mayor que Sam, con el pelo negro ondulado y ojos de igual color… y un inmenso par de alas aún más negras que sus ojos y cabello.

- Ríndete mocoso- Le dijo Wolverine-. Somos tres contra dos. Estas en desventaja.
- No puedo rendirme- Respondió el muchacho-. Tengo que llevar al profesor conmigo.
- Mira mocoso…
- No me llames mocoso. Mi nombre es Crow.
- Muy bien, tordo sarnoso. No dejaremos que te lleves a Will, ahora vete o yo mismo te amputare esas alas de gallina negra.

Crow dio un salto y empezó a batir sus alas desde arriba. Un torbellino de plumas negras envolvió a los X-MEN, Emma tuvo que entrar en fase y abrazar a Sam para que las plumas no cortasen su cuerpo, con Logan no había problema, el podía curarse instantáneamente.
Crow aprovecho el caos que había creado y voló en picada para llevarse al profesor Shuester. Entonces algo repentino ocurrió. Las plumas que giraban ciclónicamente alrededor de Wolverine y compañía dejaron de hacerlo y quedaron suspendidas en el aire como si estuviesen en un lugar con gravedad cero. Crow desvió la mirada y en ese interludio una ráfaga de sus propias plumas lo ataco haciéndolo desviar el vuelo y regresar a mirar desde lo alto nuevamente.

- ¿Quién de ustedes está haciendo esto?- Pregunto el chico alado desde lo alto.
- Ninguno de ellos lo está haciendo- Respondió la voz de una mujer envuelta en un misterioso eco que parecía venir desde ningún lugar.
- ¿Quién eres tú?- Cuestiono Crow con tono de preocupación- ¿En dónde estás? ¡Muéstrate!

Y como si aquellas palabras hubiesen sido una orden… las plumas comenzaron a moverse en espiral y de en medio de este comenzó a surgir una sombra que poco a poco fue tomando la forma de una silueta femenina. No se podía distinguir nada distintivo de aquella negra figura, era eso, solo una sombra… una sombra de una chica con cabello largo. Solo aparecía la mitad… de la cintura hacía arriba. Y todo en ella eran sombras… excepto los ojos… estos eran azules… era lo único que se distinga claramente de aquella sombra.
Cuando Crow distinguió aquella silueta hizo nuevamente su ataque, aleteo fuertemente y un gran torbellino negro ataco a la sombra.
Antes de llegar frente a aquella extraña silueta, el flujo de viento cambio de dirección y… ataco a Crow. El chico alado cayó a unos cuentos metros y unos minutos después emprendió el vuelo… pero esta vez huyo.
La sombra permanecía estática frente a los X-MEN, ninguno articulaba palabra, el silencio imperaba… hasta que Sam se atrevió a hablarle.

- E… Ethernal… ¿Eres tú?
- No, que va, soy tu abuela- Respondió la sombra con la voz envuelta es ese extraño eco.
- Es Ethernal- Confirmo Emma soltando a Sam.
- ¿Como rayos llegaste aquí?- Pregunto Logan- Como puedes estar aquí si se supone que…
- Estoy en el plano astral, solamente así puedo comunicarme con ustedes sin tener que transportar mi cuerpo hasta este lugar.
- ¿Falta mucho para que regreses?- Interrogo Emma- Ya encontraste el «artefacto» que buscas en ese lugar al que fuiste.
- Aún no. Este lugar es algo extraño… creo que me tardaré un poco más.
- Espero que no te demores mucho- Le dijo Logan-. Te necesitamos por aquí, a demás… tu novio te extraña- Comento en tono burlón mientras pescaba a Sam de el cuello y le frotaba el puño en la cabeza- Tu admirador se muere por verte otra vez.
- Ya deja de molestar con eso- Replico Sam mientras se liberaba del brazo de Logan.
- Que delicado- Murmuro Logan.
- Oye…- Comento Sam dirigiéndose a Ethernal-. Pude… pude utilizar el ataque que me enseñaste, hoy me encargue de dos locas que…
- ¿Y qué quieres?- Contesto Ethernal con tono mordaz- ¿Qué te haga una fiesta? ¿Qué te horne un pastel?
- No… yo solo…
- Nos vemos pronto.

Y tras decir esto, la sombra se disolvió en el aire y las plumas cayeron al suelo.
Sam se quedo contemplando el espacio vacío en el que antes había estado la sombra de Ethernal. Siempre tenía que ser tan fría y malvada con él…

- Es una lunática- Comento Logan mientras que se acercaba un poco a Sam y le ponía una mano en el hombro derecho-. Si sabes lo que te conviene aléjate de ella, créeme cuando te digo que no es lo que parece.
- Pues a mí me parece más fría que el hielo de los polos… y muy… bella.
- Recuerdas lo que nos dijo, que solo nos ayuda porque ella piensa obtener algo a cambio… no es de fiar. Ni siquiera sabemos cuál es su habilidad mutante. Rachel y Will no pueden entrar en su cabeza, y Cerebro no puede detectarla. Ni siquiera sabemos si es un mutante… o humana.
- Pero está de nuestro lado- Replico Sam-. No puede ser malvada.
- No digo que sea malvada, solo digo que sigue sus propios intereses. Pero bueno, basta de hablar de Ethernal. Será mejor que me ayudes a llevar a Shue a la enfermería y después valorar los daños que sufrieron las instalaciones.
- Si… está bien. Solo una cosa.
- ¿Qué?
- No quiero estar al lado de Rachel cuando despierte. Va a armar un alboroto tremendo.
- Esta bien… mandaremos al chico nuevo para que la cuide.

Los dos dieron media vuelta y regresaron al interior del instituto. Sin embargo… este solo era el comienzo de una gran batalla… y el comienzo de un nuevo
apocalipsis.

Asdf! escribió:Realmente me ha gustado demasiado este Fic! Es más, me dan ganas de tomar unas ideas del tuyo y hacer el mío xDDD!!!! Pero rayos, me sentiría algo plagio. Pero sé que es buena mi idea mental xDD!!!

En fín. Continúa me gusta demasiado el Fic :D!

Una pregunta... Ethernal es Quinn...? o: estoy muy intrigado por ella o:

Si quieres un buen consejo. Comienza a escribir ahora que tienes la idea, porque luego la inspiración se va tal y como llega... creeme a mi me pasa (y a varios que conozco) y se siente feo ya no conectar con la idea que nos hacía retorcernos de la felicidad ;).
Pues si te decides a escribir tu fic mandame un mp para avisarme, que yo seré uno de los primeros en leer tu fic y comentarlo lol
Y sobre tu pregunta. Ethernal no es Quinn, aaayy ya quiero escribir la parte donde aparece Quinn... pero va a tardar un poquitín ¬¬

ScottEvansHummel escribió:Jerry te amo!!!! (?) Ame a Ethernal, su personalidad de nada me interesa me recordo a Kurt, pero segun el fic Ethernal es mujer xD. Continua Jerry tienes todo mi apoyo y coments ;D. Por cierto, cuando aparecera Kurt *0*?

Jajajaja yo también amo a Ethernal, y espera cuando regrese de su "viaje", las cosas se pondrán más interesantes.
Respecto a Kurt; el también va a tardar un rato en aparecer, pero no te preocupes, su aparición promete mucho al igual que la de Quinn.

Fedee Evans escribió:Ethernal es quinnie??? espero que lo sea!!! mike&rach??? espero que nooo!!! jajaja!!! pon finchel please!!!!...ok respecto al cap, ES TAN BUENO COMO SIEMPRE!!! escribes muy que muy bien!!!

Quinn no es Ethernal, lamento decepcionarte amiga, Quinnie puede ser mala cuando quiere, pero no tanto... Y no creo que Rachel y Mike terminen juntos, aunque ya había visto las posibilidades de un Finchel... o un St.Berry
Como dije Quinn tardara en aparecer. Ella aparecera en la segunda parte. Como había escrito anteriormente dividire el fic en 3 partes. Lamento que algunos personajes aparezcan después pero si no lo hacía así el fic no iba a tener la historia tal como la imagine jejeje. Y es que necesitaba personajes fuertes y decididos para que le dieran peso a la segunda parte. Los eventos que pasaran en esta primera parte solo serán una cerilla que encenderá la bomba que detonará en la segunda. Y creanme cuando les digo que el lider de "los malos" de la segunda parte será una persona más mala que magneto. Y creo que ya dí demasiados spoilers :P

Como he tenido una racha de inspiración muy buena para este fic ya estoy escribiendo parte del tercer capitulo. Llevo poquito pero es mejor que nada, y como dije, es mejor escribir cuando la idea esta latente en la mente (cacofonía o rima... quien sabe).
Les dejo unas pequeñas lineas de lo que he escrito para que sepan de que va el siguiente cap.
Los quiero amigos (que gay sono eso... jajaja, creo que esa será mi frase lol )!!!

En capítulos anteriores conocimos a algunos miembros de los X-MEN, las instalaciones del instituto Xavier y los poderes de los mutantes que allí residen.
Pero hoy quiero mostrarte otro lugar, un escenario nuevo, una tierra inhóspita y, por la mayoría de los mutantes, pensada extinta.
En un lugar en medio del mar; situada en el océano Índico, muy cercana a las costas de África y Madagascar; se encuentra una isla olvidada por humanos y mutantes, una isla que años atrás fue un infierno y, posteriormente, un paraíso para los mutantes. Genosha.
Hoy en día muchos piensan que es una isla desierta, pero la verdad es que no. La isla es habitada por un grupo de personas, o quizá debería decir… por un grupo de mutantes, los Acólitos.
Acólitos es el nombre que Magneto dio a sus subordinados, hace veinte años tenía un gran número de seguidores en sus filas, pero en estos tiempos el número de simpatizantes a su causa es un poco menor al de los X-MEN.
Pero eso te lo contare después, ahora vayamos con un chico de pelo negro… pero no tanto como las alas que adornan su espalda. Es ese que se alcanza a distinguir por aquel camino pedregoso…


Blaine Anderson marchaba a paso lento y cada uno de sus movimientos delataba el cansancio de su cuerpo. Y no solo eso, detrás de él un ligero rastro de sangre marcaba los metros recorridos a pie. Podría volar, pero volar para qué… quizá ni siquiera el vuelo le saldría bien, nada le había salido bien… era un inútil… un inepto… un bueno para nada…

-…Un completo fracaso- Reprendió Magneto al trío de mutantes que había enviado al instituto Xavier.
- Hicimos lo que pudimos Erick- Se defendió Mystique-, pero ese chico rubio resulto más peligroso de lo que esperábamos… creí que solo podía chapotear en el agua…
- Eso no es excusa mi querida Raven- Le dijo Magneto-. Su misión era traer a la chica telepata y a William costara lo que costara.
- No es lo mismo hablar que actuar- Mascullo Blaine.

Magneto se detuvo frente a Blaine y se le quedo mirando fijamente, escrutando cada línea de su rostro, notando los detalles de las plumas negras en aquellas enormes alas, observando el escurrir de la sangre de su magullada piel…

- Y tú, pequeño Crow- Dijo Magneto dirigiéndose a Blaine- ¿Qué te ocurrió?
- Una sombra apareció de la nada y me ataco.
- ¿Sombra? No pudiste con una simple sombra- Comento Magneto en tono burlón.
- No era una simple sombra, era…
- Una presencia astral- Interrumpió la voz de una mujer desde una cabina que se encontraba a unos cuantos metros por encima de ellos.
- ¿A qué te refieres con eso Data?- Cuestiono Magneto a la mujer-. Se concisa.
- Me refiero a que Crow fue atacado por alguien de otro lugar del estado, continente, planeta, galaxia o dimensión- Respondió la voz de la mujer.

Las puertas de aquella cabina se abrieron y de ella salió una figura alta y larguirucha, ataviada con un traje azul rey y con un extravagante acabado en el cuello el cual tenía la forma de una flor de alcatraz que le rodeaba la cabeza por detrás. Era calva y de piel blanca como el marfil, tenía las orejas puntiagudas y un par de ojos color rosa.
De un salto, que a cualquier humano común y corriente le habría costado un par de huesos rotos o fracturas considerables, Data bajo de la cabina y aterrizó a unos cuantos centímetros de Magneto pero este no se inmuto por aquella estrambótica forma de aparecer.

- Las computadoras detectaron la repentina intromisión de ese ser- Comentaba Data mientras se acercaba a Magneto-. A decir verdad… los sistemas se volvieron locos al percibir toda esa energía.
- ¿Presencia astral?- Recalco Magneto- Si no me equivoco, para viajar en el plano astral no se necesita tener cierto control o conocimiento mental, o ser un…
- Telepata- Finalizó Data.
- ¿Ya nos podemos retirar Erik?- Pregunto Mystique con tono de enfado.
- Si- Respondió Magneto sin prestarle demasiada atención- Puedes irte, y llévate al inútil de Crow. Sable se queda.

Y tras decir esas palabras el piso en el que estaban parados Blaine y Raven se elevo por los aires y los llevo fuera de la habitación. Al salir las puertas se cerraron y el piso regreso de golpe al suelo.

- Bueno chico- Anuncio Raven-. Nos vemos después. Si yo fuera tu me curaría esos raspones y cortadas.
- Descuida, lo haré.
- Nos vemos y salúdame a Halo… a tú «querido» Halo.

Raven se alejo y dejo a Blaine.
El chico alado permaneció unos segundos más frente a aquellas gigantescas puertas metálicas y después decidió regresar a la guarida que compartía con Halo.
Camino durante unos cuantos minutos por un camino pedregoso, podría haber volado, pero de que le servía, estaba demasiado deprimido como para volar… era un «inútil» ante los ojos de Magneto… un completo fracaso.
Después de aquel recorrido Blaine llego a una gruta… la cual era la entrada del refugio, su refugio. Entro por aquella rocosa gruta y unos metros más adelante quedo frente a una puerta metálica, si hubiera sido una puerta normal habría sacado una llave y después de introducirla en el picaporte solo la habría girado para abrirla, pero esta era una puerta que se habría al «tacto». Es decir, tenía que poner la palma de su mano en el centro de la puerta y esperar a que esta leyera su código digital y después se abriera.
Una vez hecho el reconocimiento las puertas se abrieron automáticamente. Dentro todo estaba apacible. Había una pequeña mesa y un chico de pelo claro sentado a la derecha de esta. El hombre estaba vestido con unos jeans y una camisa a cuadros. Al parecer estaba disfrutando de una taza de café antes de que Blaine entrara. Al irrumpir este en la habitación el chico de pelo claro se levanto de su silla y corrió directamente hacía el, al parecer muy consternado por verlo con la piel llena de cordadas.

- Blaine ¿Qué rayos te paso?- Pregunto con tono de preocupación- ¿Estás bien?
- Son solo unos raspones… no pasa nada.
- ¡Que no pasa nada! ¡Tienes todo el cuerpo rasgado!
- No hagas dramas. Con unos cuantos vendajes estaré bien.
- Pues vas a acabar como una momia…

Blaine solo entorno los ojos y se fue a sentar a un sillón no muy apartado de la habitación. El otro chico lo observo con genuina preocupación y luego descolgó el botiquín de la pared.

- Déjame que te ayude.
- No es necesario, solo dame unas vendas y yo lo haré solo.
- Pero quiero hacerlo.

Blaine sintió que las mejillas le ardían como brasas. Sabía desde hace tiempo que lo que tenía con Jeremiah era algo más que una amistad, pero aún no habían definido qué… ¿Amigos? No, eran mucho más cercanos que eso ¿Hermanos? Tampoco, los hermanos no sienten ese tipo de atracción ¿Novios? Blaine lo deseaba con toda el alma, pero Jeremiah… el no parecía querer llegar más lejos.

- ¡Ouch!
- Perdona.
- Descuida, es el alcohol. Arde.
- Pues te va a arder más, tienes varias cortadas ¿Qué fue lo que paso?
- Una sombra apareció de la nada y me regreso mi propio ataque
- ¿Una sombra? ¿Te regreso tu ataque? Eso es algo que no cualquiera hace.
- Si, y si te he de ser sincero… tuve miedo.
- Descuida, ya estás aquí. Fuiste muy valiente al…
- ¿Valiente? Magneto piensa que soy un inútil.
- Magneto puede pensar lo que quiera, para mi eres un chico muy valiente.

Le encantaba que Jeremiah lo hiciera sentir así; tan especial, único, querido… Definitivamente lo mejor que le había ocurrido en su vida había sido Jeremiah. Un chico tan dulce, comprensivo y preocupado por su bienestar, no lo cambiaría nunca por nada.

- Blaine ¿En qué piensas?
- En dada, descuida.
- Pensé que éramos amigos, sabes que puedes contarme cualquier cosa.
- No es nada, en serio.
- Y veo que no me tienes la suficiente confianza.
- No es eso, solo creo que no te va a gustar lo que estaba pensando.
- Esa cabecita tuya no es capaz de tener malos pensamientos, no creo que…

Pero un beso en sus labios interrumpe las palabras que de su boca salían. Los labios de Blaine son dulces, suaves y a la vez agresivos. Jeremiah se deja llevar por un momento, pero reacciona y se parta levemente de Blaine, apenas unos cuantos centímetros, los suficientes para que sus labios se despeguen.

- No está bien Blaine- Comenta con la voz entrecortada-. Tú eres un niño y yo…
- Hace mucho que deje de ser un niño y te lo puedo demostrar en este instante.

Y sin dejar que Jeremiah pusiera objeción alguna, Blaine se arrancó la ropa dejando su pecho desnudo para después abalanzarse nuevamente contra los labios de Jeremiah. Sus labios se juntaron y sus lenguas compartieron una danza de la cual solo ellos conocían el ritmo… pero el momento duro poco. Jeremiah se libero de la dominante boca de Blaine y casi sin aire exclamo:

- Creo que… es… es mejor que te pongas los vendajes- Y sin más ni más salió del refugio dejando solo y confundido a Blaine.

Una vez fuera y con la mente más despejada Jeremiah tuvo más claras sus ideas y, por lo tanto, no paraba de reprenderse a sí mismo ¿Qué rayos le había pasado con Blaine? ¿Sería capaz de dejarse llevar por las hormonas de aquel chico? No, no tenía que ser así… Blaine era su amigo, su compañero… pero sobre todo, era un niño, no podía hacerle eso, nunca se aprovecharía de él aunque estuviera quemándose por dentro. El era más adulto y sabía lo que hacía y lo que quería, Blaine en cambio estaba en la difícil edad de la punzada, su cuerpo era un hervidero de hormonas y podía confundir el amor con el deseo…

- Ya vienes de revolcarte con ese chico ¿verdad? Ustedes los maricas me dan asco.

No era necesario que Jeremiah levantara la vista para saber quien había dicho eso. Esa forma de expresarse, el tono de desprecio, la rabia con que lo dijo… Azimio.

- Que te importe un carajo con quien me revuelco. O acaso tú también quieres que te haga gemir en mi cama como la perra que eres.
- ¡No te permito que me hables así marica!
- ¡Yo te hablo como quiero!

Un ligero temblor en el suelo hace que Jeremiah pierda un poco el equilibrio pero se recupera rápidamente y cuando levanta la vista lo primero que ve son dos rocas flotando en el aire, sabe lo que pasará… tendrá una pelea con Azimio.
Preparado para atacar Jeremiah hace aparecer de sus manos un par de aros plateados de energía.

- ¡Magnitude y Halo!- Les grita un chico- ¡Deténganse!

Antes de que alguno pueda lanzar el primer ataque el chico que les llamo aparece rápidamente en la escena y se interpone entre los dos. Es un joven de mediana estatura y de cabello castaño el cual tiene un cristal rojo incrustado en la frente, varios lo conocen como Diamond.

- ¡St. James!- Le grita un furioso Azimio- ¡Metete en tus asuntos, esta es una pelea entre el homo y yo!
- Calma tus ánimos y modera el tono en el que me hablas Magnitude- Le responde sin inmutarse.
- ¡No me digas lo que tengo que hacer!

Diamond voltea a verlo pero esta vez no le dice nada, en vez de eso el cristal que tiene en la frente comienza a destellar un vivo color rojo sangre. Azimio traga saliva y las rocas caen de inmediato en el suelo con un ruido sordo.

- Esto no ha terminado Halo…

Azimio se da la vuelta y se va rápidamente intentando disimular el ligero temblor de piernas que le provoco la amenaza silenciosa de Diamond.

- Gracias Jesse, pero yo podía solo contra ese gorila.
- Se supone que los Acólitos debemos de ser unidos, somos hermanos de la misma causa sin embargo Magnitude es tan…
- Maldito.
- Iba a decir cabeza dura pero creo que maldito lo define mejor.
- Pensé que Genosha sería un buen lugar para Blaine y para mí, sin embargo aquí también encuentro personas tan cerradas de mente como ese maldito gorila y su amigo Karofsky.
- No generalices… solo son ellos dos, pero tendrán que acostumbrarse. Aquí todos somos iguales por el simple hecho de ser mutantes y si no lo quieren aprender por la buena… puedo enseñárselos por las malas.
- ¿Qué andabas haciendo por aquí?
- Me gusta pasear solo, la soledad es buena compañera de la reflexión. Sin embargo los gritos del gori… de Magnitude me hicieron saber que algo no andaba bien. Así que decidí dar un vistazo y me encontré con ustedes dos.
- Gracias nuevamente.
- Para eso están los amigos.