(FIC-Klaine) "Escenas borradas" All or Nothing “Awkward and Clumsy”

-Pasen... pasen…
-Hija, este lugar es perfecto…—dijo Hiram, poniéndose la mano en el pecho.
-Así es…¿Kurt no está?
-No lo sé...¡Kurt!...—grito Rachel hacia los dormitorios.
-¡Rachel!...—exclamo de vuelta el chico, dándole la bienvenida con un abrazo—¿Cómo te fue?, ¿Qué tal el crucero de Rossie O’donell?
-¡Fantástico!—respondió separando la palabra en dos silabas.
-Fue estupendo Kurt…—agrego LeRoy, que seguía mirando el departamento de su hija con admiración.
-Debiste haber ido con nosotros Kurt—dijo Hiram apuntándolo.
-¿Qué tal tu navidad?, ¿Burt ya se fue?
-Se fue al otro día…muy bien—dijo Kurt entristeciéndose un poco.
-¿Estás bien?—le pregunto Rachel en voz baja y sobándole un brazo.
-Luego te cuento…—respondió Kurt en el mismo tono—Señores Berry… ¿Quieren algo?, agua, una gaseosa…
-No Kurt, nos vamos de inmediato, nuestro vuelo sale…—dijo consultando su reloj—en 40 minutos—mira…
-Tienes razón, debemos partir de inmediato
-Bueno bebé…tu departamento es fantástico…un abrazo…un abrazo—pidió Hiram mientras abrazaba a Rachel y la hacía retroceder unos cuantos pasos—cuídate ¿si?
-Por supuesto, te quiero papá…
-Ahora otro abrazo para mi…—acoto Leroy caminando hacia ella con los brazos abiertos.
-Adiós Kurt, cuiden sus espaldas, Bushwick y New York no son Lima...—advirtió uno de los señores Berry estrechando la mano de Kurt.
-Por supuesto, que tengan un buen viaje—respondió abrazando a cada uno de los Padres de Rachel.
-Adiós Papás… ¡los amo!—exclamo Rachel cerrando la puerta de corredera— ¡TE EXTRAÑE!—agrego gritando en un tono particularmente agudo, como si no hubiese visto a Kurt en varios años—¿me extrañaste?
-Por supuesto que si…—respondió Kurt tomándola del brazo y avanzando con ella hasta la mesa de la cocina.
-¿Qué tal todo?... ¿Burt como esta?... ¿Llamaste a Blaine en año nuevo?... ¡BESASTE A ALGUIEN!—pregunto Rachel como una metralleta extra cargada.
-Ok…primero tomaremos un café, a ver si te calmas un poco.
-Claro, dame cafeína para calmarme—dijo sentándose a la mesa— ¿aun no has desarmado el árbol?—agrego mirando el rincón de la sala.
-No…estuve…un poco ocupado, pensé en hacerlo hoy…—contesto encendiendo la cafetera y sentándose junto a ella.
-¿Ocupado?...—pregunto sonriendo con doble intención.
-Si…ocupado—respondió Kurt levantándose a por los tazones y poniendo la cara de quien no debe explicación a nadie.
-Sé que me lo contaras igual, pero…gracias…—dijo recibiendo su tazón— ¿Qué tal tu Navidad con tu Papá?
-Estuvo bien, pero…está enfermo.
-¿Enfermo?... ¿se pego un refriado algo?, te dije que le permitieras usar mi cama…
-No Rachel, no es nada de eso…le diagnosticaron cáncer, cáncer de próstata.
-¿Qué?... ¡por Dios!...pero, ¿Cómo esta?, ¿Cuál es su prognosis?
-Esa bien…me dijo que esta todo controlado, que no me preocupara…—explico Kurt levantándose otra vez, esta vez para tomar la jarra lista con café.
-Kurt, lo siento…—dijo Rachel, haciéndole cariño en una mano como signo de consuelo.
-Yo mas… ”¡Feliz navidad!…¡AH!...de paso…tengo cáncer…”…solo espero que este bien—termino por decir en medio de un suspiro y sirviendo café.
-Lo estará, sabes que si, además, si él te dijo que estaba todo bien, es porque lo está, nunca te ha mentido ¿o sí?
-No…—respondió rodeando su tazón con tres de sus dedos.
-Entonces, confía en que así será… ahora—dijo dando un sorbo a su taza y cruzándose de piernas— ¿Por qué estuviste tan ocupado?, ¡Quiero saberlo todo!
-Blaine estuvo aquí…
-¿De verdad?... ¿Cuándo llego?, ¿en Navidad?, ¿Qué te regalo? ¿Lo besaste en año nuevo?—pregunto Rachel de corrido volviendo a parecer la metralleta de minutos antes.
-Rachel…respira…
-Lo siento—dijo sonriendo—pero cuéntame… ¿hay algún dato que deba conocer?—pregunto dándole pequeños toques en un brazo y en el pecho, como si quisiera torturarlo con puntadas para que le dijera la verdad sobre todo el asunto.
-¡Rachel!...¡basta!...¡ay!...—exclamo Kurt golpeándole la mano de los pinchazos para que los detuviera.
-¡Vamos!...yo te cuento después del chico que bese en el crucero de Rossie O’Donnel
-¿Besaste a alguien?, ¿habían heterosexuales en el barco?
-Sí que lo habían…pero yo te pregunte primeo, cuéntame…¡Cuéntame!...¡CUÉNTAME!—insistió Rachel con las preguntas y las punzadas.
-Ok...Ok… ¡OK!... Blaine llego para Nochebuena, mi Papá lo trajo.
-¿Burt?, ¿por qué?
-No lo sé…tal vez la creer que tiene la muerte cerca, lo hace querer que todos se reconcilien o algo parecido.
-¿Te reconciliaste con él?
-Digamos que tuvimos “la conversación” que nos debíamos.
-¿Y a que conclusión llegaron?—pregunto la chica abriendo el gabinete del lado del extractor de aire— ¿Por qué hay tan pocas galletas?—agrego mirando el paquete a medio comer y poniéndolo sobre la mesa.
-Blaine se las comió y no alcance a comprar más.
-Ok…—dijo media disgustada—sigue…
-Bueno, hablamos y quedamos en que nos daríamos un tiempo, bueno yo propuse eso y el acepto.
-¿De mala gana?—pregunto mascando.
-No lo sé, bueno, al principio sí, pero después termino aceptando que podemos salir con otras personas.
-¿Saldrás con otras personas?, ¿de verdad quieres eso?, porque no sé si sabes, que si le das luz verde a Blaine para que lo haga…no le faltara con quién hacerlo…él es demasiado guapo para ser real y pasar desapercibido.
-¡Cállate!...—exclamo Kurt sintiendo mas celos del comentario que acababa de hacer su amiga que del propio “Eli algo”
-Es la verdad…
-Lo sé, pero no lo hará, y tal vez yo tampoco, pero necesito comprobar que aquello que creemos es verdad.
-¿Qué cosa?—pregunto Rachel mientras golpeaba el envase de galletas para extraer hasta la última migaja.
-Que estamos hechos el uno para el otro y predestinados a pasar el resto de nuestra vida juntos.


Abril de 2019

-¿Dónde está Kurt?
-Cálmate, debe estar por llegar, ¿no le dijiste que la conferencia era a las cinco?
-Sí, pero por eso, faltan 15 minutos para las cinco, y el no es de llegar tarde.
-Pues no llegara tarde si aún faltan 15 minutos—dijo Dylan sentado en un gran sofá rojo, de una de las salas que SONY tenía en su oficina de New York— ¿Por qué no bebes algo?
-No gracias…—respondió Blaine soltándose su corbata y consultando su reloj.
-Pues yo si beberé—afirmo Dylan poniéndose de pie y preparándose un trago del mini bar que había en un rincón— ¿lo llamaste?
-Lo llame, peo no me contesto, pienso que está en el teatro, pero me dijo que el suplente haría la función de hoy, así él podría venir con más tranquilidad.
-Bueno, tal vez el suplente no pudo y no existe un suplente de suplente—respondió, contando en su cabeza las veces que había dicho la palabra “suplente”
-No, Kurt no es así…si promete algo lo cumple.
-Igual que yo…—afirmo Dylan haciendo el ademan de un brindis.
-¿Estas bromeando?, ¿verdad?—pregunto Blaine entre risas.
-¡Es verdad!, además puede habérsele olvidado.
-¡Vamos!...conoces a Kurt lo suficiente como para saber que no olvida nada.
-Eso no es cierto, prometió presentarme a la chica encargada del maquillaje de su obra y aun no lo ha hecho.
Blaine sonrió y negando con la cabeza siguió mirando por la ventana el ajetreo de la intersección de las avenidas Madison y la E 55th. Recordó que Lily tenía razón y que aunque pasaran 1000 años, Dylan no cambiaría su actitud con las mujeres.
-¿No debería haber una ventana aquí, para ver cuanta gente hay en la sala de conferencias?—pregunto Blaine dibujando una ventana con sus dedos, en la pared contraria la puerta.
-Pues no, la prensa te vería de antes y eso no tiene gracia.
-Pero si ya me conocen, todos saben como es mi es mi cara, está en todas partes junto al disco—dijo Blaine consultando su teléfono y menándolo en el aire por si es que había algún problema con la señal.
-Tienes razón y es bastante desagradable verte en todas partes…
-¡Oye!...eres mi amigo, ¿no deberías estar dándome ánimos y halagándome?, diciéndome que todo saldrá bien y no sé que mas…
-Todo saldrá bien Blaine…y no sé que más…—dijo Dylan tomándole un hombro y dándole seriedad a su sarcasmo.
-Gracias Dylan, no sé qué haría sin ti…—respondió Blaine del mismo modo y riendo después de mirar su reloj por enésima vez.
-¡Ya deja eso!...Kurt llegara y lo sabes.
-¿Cómo lidias tu con esto?, con las conferencias me refiero…
-Bueno como yo solo soy el guitarrista de la banda, nunca me preguntan nada, toda la atención se la lleva nuestro vocalista y líder indiscutido—explico Dylan al tiempo que hacía con sus brazos como si adorara a un ídolo.
-Pero si te han hecho entrevistas, después de todo eres el que compone las canciones.
-Sí, pero no les doy importancia—contesto buscando un nuevo trago para beber de las botellas dispuestas para ello.
-¿Qué tal si alguien me pregunta algo que no quiero contestar?
-¿Cómo cuanto mides, por ejemplo?—pregunto riendo.
-No…
-¿Tienes miedo que te pregunten sobre si eres gay?
-Tampoco, además creo que todos lo saben.
-No es que lo crean, de hecho TODOS LO SABEN, tu disco es bastante decidor—dijo Dylan apuntándolo con una botella de whisky casi vacía.
-Lo sé, y me da lo mismo, no tengo nada que ocultar al respecto, pero no quisiera que me preguntaras cosas íntimas, que terminaran incomodando a Kurt…no se—termino por explicar Blaine, mientras se aflojaba nuevamente la corbata y consultaba su reloj, otra vez.
-Solo di, “No hablo de eso” o “Sin comentarios”
-¿Si?, ¿no se ofenderán?
-De que estás hablando… están curtidos, nadie se ofenderá con nada, me preocupa mas que vayas a ofenderte tu, siendo un “pollito nuevo” en estas lides…
-¡Blaine!...esto es fantástico la sala está llena…
-¿Quién eres tú y porque no te conozco?—dijo Dylan dejando su vaso y la botella en la mesa de café y acercándose a la chica que acaba de entrar desbordando entusiasmo.
-¿Qué?
-Ginger, el es mi amigo Dylan, Dylan ella es Ginger Fletcher, productora del sello.
-¿Dylan?... ¿Dylan Westbrook?
-Así es…
-¿El guitarrista de “Dear Beth”?
-El mismo…—respondió el Inglés, acercándose a la chica como dando pasos de baile, casi como si quisiera ser el Fred Astaire de esta Ginger.
La chica rio con el baile de Dylan como si su cerebro hubiera perdido 20 años de edad en un segundo.
Blaine entorno sus ojos pensando en que nunca entendería que era lo que le sucedía a las mujeres cuando estaban en torno a Dylan. Volvió a mirar el reloj y pensó que tal vez Kurt si había olvidado lo de la conferencia y que tendría que pasar por ello sin él.
-¡Blaine!, debemos salir, están todos expectantes—dijo la chica de pronto, como si se hubiera despertado de una hipnosis en un show en Las Vegas.
-¿No podemos esperar un poco?
-¿Por qué?
-Por nada…—respondió Blaine chequeando su reloj y dando una mirada a Dylan.
-No es bueno hacerlos esperar, todos están ansiosos por verte, “My Universe” ha recibido las mejores críticas y la cantidad de medios acá afuera, dice bastante de aquello—explico la chica.
-Claro…
-¡Relájate hombre!…tranquilo, TU eres la estrella aquí, no ellos—dijo Dylan al tiempo que le arreglaba la corbata.
-Gracias…
-¿Vamos?—indico Ginger abriendo la puerta de la sala.
-Vamos…
Ginger partió adelante hablando por la radio que cargaba para que el otro productor que estaba en la sala de conferencias anunciara que Blaine Anderson estaba a punto de llegar. Blaine, por su parte, la secundo en la fila, arreglándose su traje y consultando su reloj y teléfono tres veces seguidas de manera alternada y pensando por cierto, que le gustaría que Kurt lo llevara de la mano en aquel momento. Dylan camino al final descuidado como siempre, pero sonriendo por tener la mejor vista, la del trasero de Ginger Fletcher.
-¿Listo?...—pregunto la chica con una mano en la cortina de la puerta y la otra en el hombro de Blaine.
-Listo…—respondió este, dando un suspiro y tragando un poco de saliva.
-Vamos entonces…
La productora abrió la cortina y de inmediato comenzó a sonar “You”, el primer sencillo que había sido puesto en las radios hacia un par de días. Blaine salió y los flashes de los medios gráficos se encendieron inmediatamente, así como las gargantas de un grupo de chicas que se identificaban como sus fans, se detuvo al lado de la gigantografía de su disco y comenzó a escuchar los “¡Blaine!”, “¡Mira para acá!”, “¿Cómo te sientes Blaine Anderson?”, entre otros gritos de la prensa y de las chicas que solo había escuchado en las entregas de premios en la televisión y cuando Kurt debuto en Broadway hacia casi 5 meses.
Luego de un par de minutos de fotografías, Ginger le indicó que era hora de sentarse para que respondiera las preguntas y hablara de su disco.
Blaine se sentó al lado de ella en la mesa dispuesta para el evento, habían micrófonos y grabadoras de todos los medios especializados en música y entretenimiento, cuando levanto la vista luego de acomodarse en la silla vio entrar a Kurt casi corriendo, dio un suspiro de alivio y lo vio a la distancia murmurar un “lo siento”, de vuelta le dijo de la misma manera “No hay problema”. Kurt le lanzo un beso y dibujo con uno de sus dedos un corazón en la palma de su mano contraria, que en su lenguaje privado y de alcoba significaba “te amo”.
Todos los periodistas tomaron su turno para hacerle preguntas a Blaine, le consultaban cuáles eran sus influencias, que esperaba del disco, cuanto había demorado en componer todas las canciones e incluso algunos de la prensa del corazón, insistían en preguntarle cosas sobre Kurt y sobre su pequeño hijo.
-¡Señor Anderson!...¡aquí!—grito un reportero cuya identificación decía “Glide Magazine”
-¿Si?—respondió Blaine apuntándolo.
-¿Este es su tercer disco?, ¿verdad?....
-Así es…—respondió Blaine comenzando a incomodarse.
-¿Por qué los anteriores no tuvieron éxito?
-No lo sé…es decir, tal vez porque estaba en un sello independiente que no….
-¿Sabía usted que muchos artistas han comenzado con un sello independiente y que aun así, todos los discos que han producido ellos han sido un éxito?
-No, no lo sabía, pero…
-¿Puede ser que tal vez en su caso sea porque los dos primeros fueron mediocres y todas las canciones terminaron pareciéndose?
Kurt arrugo el entrecejo y abrió su boca a toda su capacidad de pura rabia y con ganas de arrancarle la lengua al reportero allí mismo. Las chicas del fans club comenzaron a pifiar al periodista y Ginger trato de hacerlas callar. Blaine bebió agua en abundancia y busco la mirada de Kurt entre el desorden, este le hizo con uno de sus dedos el gesto de que aquel tipo estaba loco.
-¡Perdón!...¡PERDON!...—grito Kurt, levantando su mano y haciéndose notar.
-¿Si?... ¡silencio por favor!
-Mi nombre es…da lo mismo, soy del canal “videfmor”…
-¿Perdón cual?...—pregunto Ginger, que no tenía idea quien era Kurt, pero ya le había creído que era uno más de los periodistas acreditados.
Blaine le hizo un gesto de que no se preocupara y lo dejara hablar.
-¿Señor Anderson?, ¿conoce usted al cantante Bruno Mars?
-Por supuesto…—respondió Blaine sonriendo y pensando que quería amar a Kurt en ese mismo instante solo porque ser quien era para él.
-Bueno…yo igual obvio…—dijo haciendo una especie de comentario a sus “colegas” de los lados—pues bien si mal no recuerdo el comenzó justo como usted, con un disco con pocas ventas, en el sello “Motown Records” para luego, al cambiarse y convertirse en la estrella que es…¿cree usted que mi “colega” aquí presente menosprecia su disco por falta de información o porque necesita algo con que llenar el octavo de pagina que tiene en su revista?
Todas las chicas gritaron ante la pregunta de Kurt que humillaba al reportero de la revista Glide y nuevamente se produjo un desorden.
Blaine sonrió de manera celestial y mirando a Kurt, fue él quien esta vez dibujo un corazón con su dedo en la palma de su mano.
-¡Silencio por favor!—clamo nuevamente Ginger, haciendo gestos que pedían lo mismo con sus manos.
Dylan reía como loco desde uno de los rincones de la sala de conferencias y el hacía gestos con sus pulgares hacia arriba a Kurt, al tiempo que propiciaba las pifias y los aplausos encendiendo aun mas a las chicas fanáticas.
-¿Quieres que termine con la conferencia Blaine?—le pregunto la chica en el oído.
-¿Crees que todo esto sea perjudicial?
-¡Estás loco!, esto saldrá en primera plana en todos lados... ¡ES FANTASTCO!
-Entonces déjame responder y terminamos.
-Perfecto… ¡Silencio!, el Señor Anderson responderá a la pregunta que quedo inconclusa y daremos por terminada la conferencia.
-¡Te amo Blaine!...—grito una fan aprovechando el silencio, todos comenzaron a reír al ver que aquel grito daba pie para que el resto de las chicas hicieran lo mismo, agregando “Cásate conmigo” y “¡Se el Padre de mis hijos!”.
-¡Yo también te amo!—grito Kurt aprovechando el bullicio.
-Gracias chicas…—dijo Blaine haciéndoles un saludo que derritió a unas cuantas—con respecto a su pregunta, si, tal vez mis otros discos no tuvieron el éxito monetario que esperaba, pero llenaron mi alma como no se imagina, y si no cree que este disco será exitoso, tal vez debería hablar con su colega de la revista Bilboard y pregúntele porque después de una semana de ser estrenada “You” , ya está en el numero 9.
Todas las fans gritaron y el cronista de la “Glide” negó con su cabeza mientras escribía en su tablet. Blaine sonrió mirando a Kurt que aplaudía y gritaba como si perteneciera al Fans Club, ya habría tiempo de contarle que su atraso se debió a la reunión que sostuvo con el elenco de su obra para hablar de los rumores de nominación a los premios Tony, hoy era turno de Blaine de brillar y Kurt estaba orgulloso de concedérselo.


-Por supuesto que lo están…
-Bueno lo mismo creía yo de ti y de Finn—dijo Kurt tomando con sus dedos las migajas de galleta esparcidas en la mesa.
-Es diferente, con el tiempo y la reflexión, me he dado cuenta que con él no tenía nada en común, ni siquiera éramos los mejores amigos, tu y Blaine fueron amigos antes de amantes—Kurt sintió sonrojarse pues pensó en la noche de año nuevo al escuchar la palabra “amantes”—y eso es algo que no se encuentra todos los días…insisto en que deberías darle una segunda oportunidad.
-¿Desarmemos el árbol mejor?—dijo Kurt apuntando hacia el sector donde estaba.
-¡Bien!...pero esta tarea no cambiara mi opinión con respecto a todo esto.
-Ni la mía Rachel Berry…—respondió Kurt tomando la caja para guardar los adornos—háblame mejor del chico al que besaste, ¿era guapo?
-No bese a nadie…—confeso Rachel moviendo el árbol para alcanzar todos los adornos.
-¿Qué?...acabas de decir que si…
-Lo hice para que me contaras si TÚ habías besado a alguien, pero con la conclusión a la que llegaste con Blaine, asumo que no hubo beso ni nada…
-Si hubo beso…
-¡QUE!... ¿me quieres provocar un infarto?, ¡CUENTAMELO TODO!—exclamo Rachel tirando 5 bolas de una vez dentro de la caja.
-¡Terminaras por romper todo!—advirtió Kurt, al ver el arrebato de su amiga.
-¡Da lo mismo!... ¿fue a Blaine al que besaste?... ¿qué es esto?—dijo tomando una pequeña caja envuelta en papel brillante y que decía “Para Kurt”.
-No lo sé…
-Pues tiene tu nombre…—dijo Rachel volviendo a leer la tarjeta y moviendo la caja cerca de su oído, como si pudiera adivinar su contenido solo con el sonido que producía el movimiento.
-¡Dame eso!...es la letra de Blaine…—afirmo Kurt mirando la tarjeta.
-Debe ser tu regalo de Navidad, pero ¿Por qué no te lo dio personalmente?
-Digamos que no lo recibí de muy buen modo…—respondió haciendo un gesto de arrepentimiento con su cara.
-¡Kurt!...—grito Rachel dándole un golpe con una media roja, que acababa de descolgar del árbol—¡ABRELO!—agrego entusiasmada.
-Está bien…—dijo Kurt abriendo la caja con cuidado y descubriendo primero una tarjeta que decía “Para tu primera alfombra roja” y debajo de ella un broche que emulaba al adorno central del icónico collar de perlas que Audry Hepburn usara en Breakfast at Tiffany's—¡Por Dios!—agrego Kurt mirando la pieza de joyería.
-¡Kurt es igual al de…
-AUDRY HDEPBURN!...—dijeron ambos al mismo tiempo
-¿No crees y es real?... ¿o sí?—dijo Rachel casi cegada por lo que estaba viendo.
-Por supuesto que no…no puede serlo…
-Pero si es…eso sí que es amor…¿o no?—dijo la chica volviendo al árbol.
-SI que lo es…—respondió Kurt en un suspiro de asombro.