One shot Faberry Unforgettable song

Hola! es la primera vez que publico un one shot y espero les guste...ademas de decir que fue una tarea de mi distrito :>.<: :besos:
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Y aquí de nuevo yo, Quinn Fabrey, camino por los pasillos de NYADA bajo la atenta mirada de los demás al ver mi total y completa seguridad, claro, es lo que debes demostrar cuando invades territorio ajeno, o eso creo, pero el estar aquí tiene un objetivo.

–Berry –dije apareciendo en la puerta del salón de danza, su nuevo estilo de femme fatale le da una imagen tan, se que sonara raro, pero la hace ver sexi.

– ¿Quinn qué haces aquí? –pregunto dejando de lado la práctica de sus pasos.

–Parece que tus pies se han despegado del suelo –entre y me senté junto a la ventana.

– ¿Santana? –puso una de sus manos en el tubo donde la había encontrado practicar.

–Quizá –lo sé, mi actitud era la de una egocéntrica creída pero tenía que serlo.

–Pensé que después de su encuentro en la recepción del Sr. Shue ustedes no se hablaban – comenzó de nuevo su ensayo y yo fruncí el ceño, no sabía que Santana se lo había dicho –No, ella no me lo dijo, pero eran las únicas que faltaban y creo fue demasiado obvio –había leído mi pensamiento, eso era nuevo.

–Bueno, eso ahora no tiene importancia, oí que tienes una segunda audición para Fanny Brice, felicidades –me miro y se detuvo.

–Gracias, y no es por grosera pero… ¿Qué haces aquí en realidad? –me puse de pie.

–Además de querer verte quería recordarte que la Rachel Berry que vale más es la antigua, claro todos cambiamos, eso lo sé mejor que nadie pero tú solo tenias que dejar la ropa de niña adulta, tu forma de ser, aunque un tanto insoportable era lo que nos agradaba de ti, sobre todo a mi –me acerque a ella, puse mi mano sobre la suya aun en el tubo –Esa forma en que pones tu boca cuando estas nerviosa, tomas aire y te paras en una posición recta…justo como ahora –acerque más mis labios a ella.

–Yo pensé que a penas y éramos amigas –miraba mis labios y mis ojos alternadamente, sonreí.

–Dime una cosa, ¿Por qué las personas molestan a otras? –Frunció el entrecejo –Porque quieren llamar su atención, por eso siempre te molestaba, además conmigo tienes esa química que con Puck, Brody incluso Finn te hacía falta –notaba confusión en sus ojos, tenía que aceptarlo, tenía que aceptar que estaba loca por ella, Rachel Berry me tenia de cabeza desde hacía años y aparentaba odiarla por que tenia celos, porque me negaba a verla con alguien más, porque nunca me vio con los mismos ojos que yo a ella.

–Quinn…esto…esto me rebasa –no pude mas, solo un beso fue lo que pude hacerle ver que era lo que sentía por ella pero me aparto, me miro de una manera indescriptible, pero sé que no era de felicidad.

Salí corriendo, fue cobarde eso lo tengo presente.

–Quinn, espera, lo siento –escuche, me sentía tan mal, las personas…la verdad ni pude verlas, tenía la mirada centrada en la salida, solo quería salir de ahí.

Y mientras yo asimilaba lo que acababa de ocurrir, Quinn Fabrey me había besado y yo lo único que hice fue rechazarla, pero no podía engañar de nuevo a Finn, si, recién habíamos vuelto y no quería volver a engañarlo, menos con una de sus ex novias.

Me sentía terrible, durante todo el día había estado pensando en ello, al llegar a casa solo pude ver el reprochante rostro de Santana, era obvio que sabía sobre lo ocurrido.

–No me mires así, no tienes ningún derecho de opinar sobre esto –me senté junto a ella en el sofá, en sus manos tenía un plato de cereal, sabía bien que Kurt estaba en Vogue por lo que solo éramos ella y yo.

–Berry, ella te ama, lo hace desde mucho tiempo atrás, por esa misma razón te hacia la vida difícil, no por Finn, el solo era una tapa para ella.

–Pero vaya, así que Sue solo reclutaba lesbianas de closet –mi comentario fue fuera de lugar –Lo siento, pero no sabes cómo sufrí durante el tiempo, el mismo en el que ella me hacia padecer –a mi mente vinieron tantos recuerdos.

–El amor nunca será fácil, Finn te ama y sé que tu a él pero por lo menos deberías hablar con ella y dejárselo en claro, yo…bueno nosotras a pesar de todo somos amigas y no quiero que ninguna salga herida, sabía que algo así pasaría y se lo advertí pero al parecer siente algo muy fuerte por ti, por favor habla con ella, es lo menos que puedes hacer –agradecía los momentos en los que Santana hablaba con madurez –Aunque tener sexo ayuda mucho para alegrar a las personas –bueno, no iba ser así para siempre.

–Tienes razón…pero no hablo del sexo…iré a hablar con ella mañana.

Estaba en mi departamento, recostada en mi cama, era sábado y las tareas de Yale podían esperar. Seguía pensando en Rachel, en su rostro, en todo, y yo tenía la culpa.

Una hora antes del medio día y unos golpes sonaron en mi puerta pero no tenía intención de abrir.

–Quinn, soy Rachel, quiero que hablemos –logre escuchar con el silencio al interior de mi “hogar” –Lamento como reaccione ayer pero entiende que fue desconcertante para mi…por favor, se que estas ahí –no me moví –Esta bien, pero si no hablamos hoy será mañana o cuando sea pero sucederá, ahora me voy, se que quieres estar sola –no escuche mas por lo que supuse se había ido, seguí acostada el resto del día hasta dormirme pero el sueño que cada vez me despertaba era sobre como ella se alejaba de mi, o más bien ella yo tratando de alcanzarla pero parecía que nunca lo lograría.

–Fabrey –encontré a Santana recargada en mi auto cuando salí de la universidad, ya había pasado una semana y era viernes.

–Que sorpresa verte aquí –le salude con un beso en la mejilla.

–Solo venia a invitarte a una reunión que tendremos los “ex new Directions”, será en Lima, mañana por la tarde, más vale que no faltes –me guiño un ojo y se dirigió a su auto.

Pensar tan solo en que estaría cerca de Rachel me hacía sentir mil sensaciones en mi estomago pero también quería ver a todos mis amigos de nuevo. Estaba decidido, iría.

Esa misma tarde salí rumbo a Lima, sentía muchos nervios que me provocaban querer girar el volante y regresar.

–Pequeña –mis padres me recibieron con un abrazo.

–Hola, no saben cuánto los he extrañado –les dije aun abrazándolos.

–Y nosotros a ti, ¿Qué tal NYADA? –pregunto mi padre, Leroy.

–Genial, además de tener una segunda oportunidad para audicionar por el papel de Fanny Brice –no había hablado con mis padres, lo cual me hacía sentir mal.

– ¿Funny girl? –pregunto mi otro padre.

–Sí, ¿No es increíble? –los dos estaban asombrados y felices.

–Mi pequeña será una estrella –de nuevo Leroy y sus lágrimas de alegría.

–Hija –mi madre me recibió con un varazo y reproches por la falta de comunicación de mí hacia ella.

–Lo siento mamá pero la universidad me tiene absorbida –me disculpaba.

–Está bien, prepare tu habitación desde que me llamaste, no sabes cuánto me emociono saber que vendrías –caminábamos en dirección a mi dormitorio.

A medio día del sábado desperté mirando mi habitación, era como la de una niña y hasta ese momento me había dado cuenta, quizá mis padres gay tenían algo que ver.

En cambio yo me sentía más tranquila en mi vieja habitación, la cual me traía muchos recuerdos, tristes y alegres pero recuerdos que nunca olvidare.

–Hola Q –me saludo Brittany abriendo un poco la puerta de mi habitación.

–Pasa –abrió mas la puerta y vi a Santana –Pasen –rectifique rápidamente.

Pude ver cómo iban de la mano y con una gran sonrisa.

– ¿Reconciliación? –pregunte sentándome en mi cama.

–Algo hay de eso –contesto la latina riendo ambas.

–Me alegro –les sonreí.

–Venimos a verificar que hoy uses un lindo vestido y que te veas espectacular –dijo Britt.

–“¿Para qué?” –me pregunte.

–Veamos –Santana buscaba entre mi ropa y encontró un vestido que había comprado hacia dos años y que sin embargo nunca use –Este es perfecto –Brittany asintió.

– ¿De qué va todo esto? –pregunte esperando la respuesta.

–De que debes verte linda para más tarde –respondió mi rubia amiga.

Algo tenían entre manos y tenía la impresión de que quizá querían que me viera bien para Rachel y demostrarle que estoy bien, que sigo de pie y la mirada en alto, esa idea me gustaba así que no me opuse.

–Nosotras iremos a mi casa para arreglarnos y dentro de tres horas vendremos por ti –miro su reloj –ósea a las 7 –me aviso San despidiéndose de mí al igual que Britt.

–Está bien –dije mientras salían de mi habitación.

Justo a las 7 el claxon de Santana sonó frente a mi casa, me despedí de mamá y salí.

–Despampanante –adulo Santana abriendo la puerta trasera de su auto para dejarme entrar.

–Ustedes no de quedan atrás, se ven hermosas –agradecieron y nos retiramos hasta llegar a…a McKinley – ¿Qué hacemos en McKinley? –pregunte mientras Santana se estacionaba.

–Ha sido idea de Finn, una reunión con los nuevos de “New Directions” y los “viejos”, al parecer Shuester se ira de Lima y quiere darle una despedida antes de todo el caos de las Nacionales, la graduación y todo eso –me explico brevemente.

–Ya veo –no éramos muchos pero estaba bien, llegamos hasta el gimnasio, musica, comida, bebidas y esas cosas, se me figuraba algo absurdo pero que podía hacer, había sido idea de Finn.

En cuanto entre inconscientemente busque a Rachel pero no la encontré así que no lo hice mas, una hora después de estar bailando con Mike y Sam ya que las Brittana se habían perdido quizá en los baños.

–Quinn, Santana te espera en la salón del coro, su vestido –asentí una vez me lo dijo Brittany apareciendo.

–Ahora vengo –les dije caminando un poco a prisa, abrí una de las puertas y entre, no vi a nadie al principio.

–Hola –voltee y vi a Rachel en la puerta, cerro con seguro.

–Ya entro –decía Santana junto a la otra puerta viendo a Brittany llegar hasta su lado, la rubia le tomo la mano y se fueron entre risas.

–Aquí me tienes, ahora habla –le dije fría.

–Estuvo mal la forma en la que reaccione, lo siento, pero aun te veo como la popular y yo como la nerd, además de que eres mujer, pero eso no importa…quiero saber que de verdad me disculpas y que seguiremos siendo amigas –se acercaba a mí a paso lento y yo retrocedía con la misma lentitud mientras la veía, estaba hermosa con su vestido y más.

–Rachel…yo…

–Aun no termino, yo amo a Finn y sé que te es duro escucharlo pero es así, sin embargo desde que me besaste tengo tanto deseo de probar esos labios, de sentir tu piel –choque contra el banquillo frente al piano.

–Rach… –me había acorralado, me tenía atrapada junto a mi nerviosismo, mi deseo, toda mi maraña de emociones y confusiones que en ese momento todo mi cuerpo sentía.

–No digas nada, las palabras ahora nos sobran –me acaricio la mejilla y poco a poco acerco sus labios a los míos hasta juntarlos en un beso que quito toda duda en mi.
Hasta ese momento pude ver la manta que estaba en el suelo acompañada de algunos almohadones.

– ¿Estás segura de que quieres hacer esto? –le pregunte nerviosa mientras nos arrodillábamos.

–Muy segura –me dijo besándome hasta recostarme, la tenía sobre mi y la abrace y ella me beso con más pasión.

Podíamos escuchar perfectamente como la música sonaba y parecía eran mis palabras en una canción y sabía que nunca la olvidaríamos.



Sus besos pasaban de mis labios a mi cuello. Con mis manos buscaba el cierre de su vestido y al encontrarlo lo baje, metí mi mano y al tocar su piel sentí la calidez de su cuerpo, le quitaba el vestido mientras nos besábamos y ella acariciaba mis pechos, un poco inexperta pero me gustaba.

No me hagas más
Ahora que yo haría cualquier cosa por ti
No me hagas más
Ahora que sabes cómo yo te adoro

Cuando logre deshacerme del vestido gire para quedar sobre ella, Rachel me imito y poco a poco fue desvistiéndome, ninguna llevaba sostén, nos miramos y sonreímos antes de volver a juntar nuestros labios.

No se moleste en las cosas que digo, las cosas que hago
Sólo me amas con todas mis faltas, de manera que Te amo
Te lo ruego

Con mis labios paseaba por su boca, su cuello, su pecho, su abdomen, sus piernas, sus pies y de nuevo hasta volver a sus labios los cuales me esperaban con ansia.

No me hagas más
Ahora que no lo puedo hacer sin ti
No me hagas más
No cambiaría una cosa sobre ti

Solo llévame dentro de tus brazos y abrázame fuerte
Y siempre estar a mi lado, si estoy bien o mal
Te lo ruego

De nuevo quiso tomar el contra l y le deje, se puso sobre mi y se apodero de mis pechos haciéndome soltar suspiros y uno que otro gemido.

No me hagas más
No me hagas más
Ahora que me tienes a tus órdenes

La tome entre mis brazos y sentada ella sobre mi le hice gozar con sus pechos entre mis labios, podía sentir como sus uñas se clavaban en mi espalda.

Acéptame por lo que soy
Acéptame por las cosas que puedo hacer
Acéptame por lo que soy
Acéptame por las cosas que hago

La recosté y poniéndome sobre ella decidí deshacerme del único pedazo de tela que impedía estar completamente en contacto, bese sus labios y baje hasta su vientre, lo bese y ella parecía estar demasiado excitada, comencé un juego con mi lengua en su sexo provocando que se moviera aun más.

Ahora que yo no puedo hacer sin ti
No cambiaría una cosa sobre ti

Solo llévame dentro de tus brazos y abrázame fuerte
Y siempre estar a mi lado, si estoy bien o mal
Te lo ruego

Ella me pidió intentarlo conmigo, sus labios tocaban mis piernas haciéndome desear aun mas sentirla, cuando por fin lo hizo pude sentir como casi tenía un orgasmo, ella a diferencia de mi hizo uso de sus dedos dándome más placer, no podía soportar más, sentí el placer mas grande, ella lo sabía.

No me hagas más
No me hagas más
Ahora que me tienes a tus órdenes

Al besarme de nuevo tome el control y me acomode entre sus piernas para comenzar con ese movimiento que nos haría terminar juntas esa experiencia por la cual me moría, no supe cuanto tiempo estuvimos juntas pero fue lo mejor, nos quedamos desnudas en aquel salón escuchando aquella canción.

Acéptame por lo que soy
Acéptame por las cosas que hago
Acéptame por lo que soy
Acéptame por las cosas que hago

Llegada la hora de vestirnos y regresar a la realidad me di cuenta de que ella a pesar de haber estado conmigo quería a Finn y yo no podría cambiarlo, había sido una increíble experiencia pero había llegado a su fin tan rápido como había comenzado, me tomo de la mano y caminamos hasta la entrada del gimnasio donde me beso antes de abrir.

–No puedo decirte que te amo…pero…gracias –de nuevo la bese dejando escapar una lagrima.

–Que seas muy feliz –abrió la puerta y la vi caminar, la puerta se cerró poco a poco frente a mí, salí caminando de ahí sin mirar atrás.
Esa fue la última vez que la vi, nunca más me busco ni yo a ella, sabía que había triunfado por las revistas, los periódicos, la televisión, en fin.

También sabía que se había casado con Finn, yo me case con un increíble hombre pero ella…siempre será el amor de mi vida, mi canción inolvidable.

Wow...

OK este es uno de los fics que queria leer, por que bueno amo el Klaine, escribi, klaine, sueño klaine, pero hay mas parejas y me llaman mucho las parejas no tan convencionales.

Ahora bien me alegra que decidieras escribir, estoy mas que segura que varias personas halagaran el oneshot, creeme.

Por otro lado un pequeño consejo?...bueno cuando cambies de escenario mencionalo, por que un par de veces solo vi dialogos o descripciones pero no mencion del cambio de lugar o de tiempo.

Solo sería eso, gracias, por participar y espero seguir viendote, creeme aun faltan actividades

Gracias por las observaciones...y la verdad me encanta escribir...ademas de que debo decir que esto lo escribi en tan solo 4 horas ya que no disponia de mucho tiempo pero lo logre....como? la verdad no tengo ni idea
sin mas :besos:

Apryl ya vine a leer tu OS!

bien que introdujiste a las Brittana o si un pequeño reencuentro nunca esta de más :D

que pasa con Rach y su solo recluta gays reprimidos? pasada de ambiente :/

Wuuuuaw que hermoso momento no crei que fuera a quedar en solo eso :'( pero bueno no se quedaron con las ganas de ver que pasaba!

nos leemos saludos!