FanFic {Dhris} - Keep Calm and... "Capítulo 4 - ...Don't be Scared"

- ¡Rayos! ¡No, de nuevo! - Se escuchó un quejido al otro lado de la puerta. Acompañado de un golpe contra la misma.

Chris Colfer abrió los ojos de par en par asustado. Se estaba quedando dormido sobre su sillón de cuero negro cuando escuchó los quejidos que venían del pasillo a las afueras de su departamento.

Con el corazón en la mano, tomó su teléfono celular y corroboró lo tarde que era, las cuatro de la mañana. Los quejidos acabaron, pero él no se atrevió a ponerse de pie, ni mucho menos mirar por el rabillo de la puerta y ver quien estaba afuera quejándose. Porque, ¡Oh no! no sería primera vez que alguien viene a molestarlo, porque a las tres, cuatro, cinco de la mañana ya antes lo habían venido a incomodar, tipos que lo odiaban por ser famoso y que se le paraban del otro lado de la puerta a insultarlo… algun que otro amigo alcoholizado de algun residente del edificio que quería corroborar si efectivamente ahí vivía “Chris Colfer” e incluso en otra ocasión estuvo a punto de ser asaltado, pero aquella vez se encontraba con Cory y el mayor lo ayudó a retener al emborrachado tipo que había querido metérsele a la fuerza al departamento.

El castaño suspiró y suspiro por dos cosas, una: porque era de noche, y Chris Colfer odiaba la noche, porque noche significaba oscuridad, y Chris Colfer… sí, efectivamente le tenía miedo a la oscuridad y dos: porque… bueno, esta vez estaba solo.

¡Toc, Toc! ¡Toc, Toc!

Los golpes retumbaron contra su puerta y Chris Colfer sintió ganas de llorar. Sus amigos y familiares sabían que si algún día lo iban a ver de noche, debían de avisarle con anterioridad. Era una regla que todos los conocidos de Chris debían de saberse de memoria. Porque el ojiazul los había puesto de sobre aviso. Odiaba la noche, odiaba vivir solo, porque era un miedoso y claro está, odiaba que le tocaran la puerta sin saber quién era. Y como esta vez nadie lo había llamado y demonios ¡Eran las cuatro de la maña! ¡La madrugada de un domingo! Y todos sabemos lo que pasa de un sábado a un domingo ¡F I E S T A! Y fiesta significaba gente borracha y descontrolada. Chris Colfer se asustó.

¡Toc, Toc! ¡Toc, Toc!

Tembloroso, el contratenor apagó la única luz encendida en su departamento a esa hora, la de una moderna lámpara de pie. Se levantó de su lugar, despacio y tembloroso y a paso seguro se encaminó hacia la entrada de su departamento alumbrándose solo con la débil luz que le proporcionaba la pantalla de su teléfono móvil. Tragó saliva y tímidamente se levanto para ver por el rabillo de la puerta. Hasta mirar le daba miedo, sentía que del otro lado también podían verle. Entrecerró el ojo izquierdo y apoyó el derecho en el rabillo… y lo vio.

Acto reflejo quitó rápidamente el seguro de su puerta y la abrió.


El Starkid estaba furioso. Y furioso era decir poco. Había tenido un incómodo vuelo desde Londres a Los Ángeles, no había logrado conciliar el sueño durante todo el viaje. Cuando por fin aterrizó en L.A e hizo todo el desplazamiento en transfer desde el aeropuerto a su departamento sintió que por fin estaba en su medio ambiente, era cosa de llegar a su casa, dejar su equipaje tirado en cualquier parte, tumbarse sobre su cama con o sin ropa y dormir hasta más no poder. Pero… ¡No! Las cosas no siempre suceden como Darren Criss quiere. Al llegar a su departamento, bueno… se dio cuenta de que en alguna parte había perdido su juego de llaves. No importa, eso tenía solución ¿no?, visitó rápidamente al conserje del edificio, y tras disculparse los primeros cinco minutos por ir a despertarlo a las dos de la mañana, le pidió un juego de llaves para poder entrar a su departamento. Pero era domingo en la madrugada y no había más copias, porque ¡Oh, si! No era primera vez que Darren Criss perdía sus llaves, se había acabado ya todas las copias y el conserje no le tendría un juego nuevo sino hasta el medio día.

Darren Criss estaba furioso. Y Cansado. Sudado también, porque aunque fuesen las tres de la mañana, se encontraba en Los Ángeles, California, una madrugada de verano. V E R A N O. Ni siquiera por ser de noche hacía menos calor.
Decepcionado de sí mismo, a esas horas de la madrugada, Darren tomó sus dos maletas gigantes y las comenzó a arrastrar por las calles de la ciudad. Llevaba un solo rumbo, haría una visita a su mejor amigo del Glee Cast, que por suerte era el que más cerca vivía también.

En el camino se encontró a varios enfiestados devotos saliendo de distintos Night Club a lo largo del camino en dirección al departamento de Chris Colfer. Esos fans que al verlo y reconocerlo le fueron pidiendo autógrafos y fotografías. Darren sonrió y dejo su furia de lado unos momentos y accedió con gusto. Le divertía ver a sus fans atolondrados tanto por el alcohol como por su presencia y el no era de esos que rehuían de sus admiradores. Sonrió, los abrazó, firmo y se fotografió con cada uno de ellos.
Una vez finalizado con las firmas y saludos y tras lograr salirse de en medio del grupo de fans sano y salvo. Retomó su caminata y por esas cosas de la vida recordó una regla fundamental en cuanto a visitas a media noche se trataba, debía llamar a Chris y decirle que iría a verlo. Pero… y Darren ya debería saberlo, las cosas no siempre suceden como él quiere.

- ¡No, no, no… NO! - Exclamó llevándose la mano a la nuca y sacudiéndose la cabellera en señal de desesperación. Su celular estaba sin batería. Suspiró.

Camino nervioso el resto del camino, porque sabía que no era buena idea ir a ver a Chris sin avisarle, pero ya serían las cuatro de la mañana, estaba muerto de sueño, quería darse una ducha y dormir. Chris debía de entender su situación ¿verdad?

¿Verdad?

Terminó por fin su recorrido a pie y compró frente al edificio dónde vivía Chris un sixpack de latas de cola light y varios paquetes de oreo. Todo como una acto reflejo, porque sabía que eran favoritos de Chris, no era primera vez que visitaba al ojiazul. Saludó al guardia del edificio y subió por el ascensor en compañía de sus maletas.

Cuando llegó por fin al departamento. Dio tres leves toquidos a la puerta. No quería tocar muy fuerte para no asustar a Chris, pero sabía que si tocaba despacio quizás el menor nunca lo escucharía.

Tocó nuevamente un poco más fuerte pero nadie le respondió.

Se sentó en el suelo pensando en que quizás Chris podría estar en otra parte. Se regañó a sí mismo por no llamar antes aunque sea desde una cabina telefónica. Completamente resignado a que debería quizás esperar a Chris hasta que llegase de quien sabe dónde decidió por abrir una de las bebidas que había comprado y apagar la sed que lo quemaba por dentro. Cuando abrió la lata de bebida ésta literalmente le estalló en la cara empapándolo entero.

- ¡Rayos! ¡No, de nuevo! - Exclamó con los ojos ardiendo con el gas de la bebida de cola a la vez que lanzaba una patada perdida - Hay, no, no… - se quejó cuando se dio cuenta de que había abollado la puerta con la patada que le había proporcionado.

Se puso de pie asustado mientras se restregaba los ojos para quitarse la bebida dentro de ellos. Miró a todos lados como esperando que alguien lo viniese a regañar por ello. Suspiró.

Tocó nuevamente la puerta. Ya no daba más.

Pero nadie abrió.

Toco otra vez….

Hasta que por fin pudo sentir del otro lado como le quitaban el seguro a la entrada. Y la puerta se abría de par en par.
Darren inspiró profundo cuando vio a Chris frente a él. Se sintió peor de lo que se había podido sentir durante toda la noche. Ver a Chris Colfer de pie con la mirada llorosa, con las mejillas acaloradas y respirando entre cortadamente le rompió el corazón.

- Oh, Chris… - dijo tratando de que el menor le creyera, porque por su vida que era cierto - Dios… ¿te asusté? No fue mi intención, te lo juro… - finalizó estrechando entre sus brazos al contratenor que temblaba aún. Sintió los latidos acelerados de Chris, lo había asustado, Darren deseo que lo tragara la tierra en ese momento - te quise llamar, pero mi celular se ha descargado… y no tengo las llaves de mi departamento… lo siento, lo siento. Por favor perdóname.

Chris anonadado aún se dejó abrazar por el mayor mientras intentaba recobrar la calma, sollozó levemente. No era broma que la situación lo había dejado al borde del desconsuelo. ¿Cómo iba a saber que se trataba de su moreno amigo? Intentó auto consolarse para no quedar en ridículo frente a Darren.

- No… no pasa nada - sollozó separándose de su amigo sin mirarle a la cara. - ¿Qué… que te pasó? ¿Por qué… que fue lo que dijiste de tus llaves? - preguntó pasándose la manga de su camiseta por los ojos para secárselos. Alzó la mirada para tranquilizar a Darren y le sonrió.

Darren arqueó levemente los labios. Sabía que todo había asustado a Chris y que el menor quería parecer tranquilo para no darle más preocupaciones. Suspiró. - te juro que te recompensaré… - dijo con un poco más de humor - perdí mis llaves.

Chris rió por fin. - ¡¿otra vez?! Oh, cielos Darren… ven vamos, no te quedes ahí parado, entra y me cuentas, dame… yo te ayudo. - dijo saliendo a buscar una de las maletas de Darren. El mayor hizo lo mismo con otra maleta y ambos entraron al departamento.

Chris encendió las luces y cerró la puerta nuevamente con seguro.

- El conserje no tenía otra copia… - dijo Darren desplomándose en uno de los sillones.

Chris rió mucho más fuerte mientras se sentaba en otro sillón. - ni modo… le has gastado todas las copias.
Darren sonrió.

- Y ¿Por qué estás tan mojado? - preguntó Chris que no había podido evitar notarlo.

- abrí una lata de bebida.

- ¡¿Otra vez?! - Y Chris Colfer se retorció de risa sentado en su sillón. - Pero si… tu no… Darren, sabes que debes dejarme a mi hacerme con las latas de bebida… lo tuyo son las tapas roscas. - terminó de decir entre risas descontroladas.

Darren rió ante el comentario de menor. Inspiró profundo, se sentía tan bien. Y no supo si era producto de que por fin se encontraba en un lugar grato o era producto de la risa de Chris. Pero eso no le importó mucho, quizás luego se preguntaría el porqué, ahora prefería disfrutar del placentero momento. Se quedó entonces, en silencio contemplando a su compañero hasta que este dejó de reír.

- oh… lo siento. - dijo Chris mientras se sonrojaba. - no quise reírme tanto. - se disculpó pensando que Darren lo miraba seriamente.

- ¿Qué?- preguntó Darren abriendo los ojos…. - No, no importa… me lo merezco. - dijo al fin mientras se encogía de hombros. - No tienes que disculparte…

- ¿Quieres comer algo? - preguntó Chris poniéndose de pie, queriendo ser atento con su amigo- ¿o quieres ducharte primero? porque ni creas que compartiré mi cama contigo todo sudado y bañado en cola ligth. - alegó mientras se cruzaba de brazos y enarcaba una ceja.

- pero tu adoras la cola light - le respondió Darren de manera picara mientras se ponía de pie y se acercaba a Chris - ¿no es cierto? - le preguntó cruzándose de brazos también.

- muy gracioso… - reprochó Chris sin intimidarse por la cercanía de su compañero - tú conoces las reglas… no ducha, no cama.

Darren se rindió y abrazó a su compañero. - te odio por ser tan perfecto y maniático.

Chris le correspondió el abrazo. - te odio por el susto que me hiciste pasar.

Darren suspiró y apoyó su frente en la del menor - lo siento, de veras que lo siento… déjame recompensarte… piensa en lo que quieras y lo haré…

Chris sonrió de manera picara - Mmm… - musitó - puede que algo se me ocurra… pero ya en serio… ¿te vas a duchar o vas a comer?

Darren sonrió también y contempló a su amigo un par de segundos más. - no tengo mucha hambre… quizás coma de las galletas que traje, no te preocupes… hem… tomaré una ducha eso si…

- Bueno… si es lo que quieres… ¿quieres que te abra una bebida? - Y comenzó a reír a carcajadas.

- Golpe bajo, Chris Colfer - comentó Darren fingiendo haberse ofendido - pero… si, ¿me dejas una abierta antes de irte a la cama?

Chris rió nuevamente. No podía evitarlo cada vez que estaba con Darren el era de terminar en esos ataques de risa provocados por los hilarantes comentarios del de los ojos hazel.

- Basta de burlas - replicó Darren - vete a dormir… yo puedo manejarme solo. Esta es como mi casa - se encogió de hombros.

Chris suspiró aliviado. - Oh, Darren no sabes cuan feliz me estás haciendo. - le dijo de forma sincera. Realmente estaba muerto de sueño y sólo deseaba volver a la cama, pero tampoco iba a dejar a su amigo a solas, sin por lo menos ofrecerle su atención. - entonces… yo me acuesto, tu te duchas… yo me duermo y tu… - no pudo terminar su frase cuando un bostezo se escapó desde su interior… - lo siento.

Darren soltó una risa explosiva. Pero sabía que Chris solo estaba tratando de ser buen hospitalario, pero tampoco es que sabía disimular su rostro somnoliento por sobre la preocupación, aunque agradecía enormemente la ternura de su compañero para con él. - anda… acuéstate…. y piensa que quieres que haga para recompensarte por el susto que te di.

Chris sonrió y se acercó a su compañero, bostezó nuevamente - perdón - y besó la mejilla de Darren. - algo pensaré. Buenas noches.

- Buenas madrugadas - diría yo. Agregó sonrojándose un poco por aquel beso. Algo extraño porque ya estaban acostumbrados a ese tipo de contacto físico entre ellos dos. Sobre todo desde que comenzaron a grabar juntos y sintieron aquella empatía y conexión tanto dentro como fuera del set.

Pero Chris no se dio cuenta de las mejillas coloradas de Darren y si lo hizo pensó que era producto del calor que hacía y por haber arrastrado las maletas desde su departamento a este.

Darren se sentó unos segundos en el sillón de cuero negro y contempló a su compañero mientras iba a acostarse. Sintió un fuerte cosquilleó en el medio del pecho, algo muy parecido a la ternura o a la afección. Se sentía tan bien en aquel lugar y en compañía del castaño, podía pasarse la vida entera viviendo en ese departamento y con la sola compañía de Chris, de verdad que de repente sentía que no necesitaría nada más para ser feliz.

Sacudió la cabeza fuertemente sorprendido por el último pensamiento que se le había avecinado a la cabeza ¿realmente la sola compañía del contratenor le bastaría para ser feliz? Asustado y como si alguien hubiese escuchado lo que pensaba se puso de pie tratando de escapar de sus propios pensamiento. Caminó hacia sus maletas y abrió una buscando sus neceseres necesarios para tomar una ducha, cambiarse las ropas por un pijama limpio y meterse a la cama junto a Chris.

Oh, rayos.

Parecían un matrimonio.

Se rió de sí mismo por la “absurda” idea y agradeció que nadie más pudiese escuchar sus pensamientos. Tomó todas sus cosas y se dirigió al baño. Camino a este la pared de la sala estaba adornada por varios retratos, la gran mayoría del Glee Cast. Eran fotos muy lindas, dónde se podía distinguir a leguas como entre todos se trataban como una familia. Una de las fotos captó su atención. Eran dos muchachos sentados en una escalera de cemento. Darren reconoció de inmediato el escenario de la Academia Dalton. Los muchachos estaban sentados, uno moreno y el otro blanco como la nieve, este último tenía la cabeza apoyada sobre el hombro del otro, mientras que el moreno depositaba un tierno beso en la nuca del de piel nívea.

¿Cuándo le habían sacado esa foto a Chris y a él? Darren no lo pudo recordar y se reprochó a sí mismo por olvidarlo y apostó a que Chris si lo recordaría. Pero más allá de no acordarse estaba el hecho de lo condenadamente atractiva que la foto le parecía. Era como ver a un par de cómplices de toda la vida… ¿hace cuanto que conocía a Chris? ¿Menos de un año quizás?

Darren separó la vista del retrato y fue a darse una ducha fría.

Demasiados pensamientos “absurdos” por ahora se dijo así mismo.

Una vez terminó con el baño y tras dejar todo en su lugar se dispuso a ir a la cama. Apagó todas las luces y se dirigió al dormitorio de Chris. El contratenor dormía ocupando el centro de la cama matrimonial, el televisor de pared estaba encendido en la Fox dónde Los Simpsons mostraban a un homero estrangulando a Bart como siempre. Tomó el control remoto y le bajó el volumen más no lo apagó pues la luz de la pantalla le servía para alumbrarse. Se metió a la cama con mucha cautela de no despertar al castaño. Este, dormido tenía puestos los audífonos del Ipod aún sonando. Darren sonrió conmovido y muy despacio logró quitarle los audífonos a Chris. Poco a poco se fue acomodando al lado del contratenor y lo movió un poco para que le dejara espacio.

Sin darse cuenta se quedó unos minutos mirando el rostro simétrico de Chris, el cabello castaño revuelto, y los labios apretados.

Y Darren Criss se sorprendió a si mismo mordiéndose los labios.

Abrió los ojos de par en par y se puso de espalda mirando al techo. Sintió un frio recorrerle el cuerpo entero ¿acaso… acaso le habían parecido sexy los labios de Chris? Soltó un bufido de perturbación. Porque bueno… se había mordido los labios solo con verle.

De pronto sintió una mano rosarle el pecho. Se giró inmediatamente a ver como Chris tanteaba con su mano por todas partes - Hey… - habló casi suspirando - Chris, soy yo….

Chris levantó perezosamente el rostro de la almohada y con la mirada entrecerrada logró distinguir a Darren mirarle fijamente… - Mmm… que… bien. - dijo más dormido que despierto.

Darren no pudo ni siquiera mascullar alguna minimo reparo, pues su mente estaba c colapsada con la intriga de porque se había mordido el labio al observar a Chris. Tragó saliva nerviosamente tomando el control remoto y apagando el televisor por fin. Se recostó en la almohada y aunque todavía estaba oscuro se quedó mirando hacia dónde se encontraba Chris.

De pronto y en plena oscuridad, el menor se acercó al mayor y Darren sintió un bochorno que le sacudió el cuerpo entero. Chris simple e inocentemente y completamente dormido buscó el abrazo del mayor, recostando su cabeza por sobre uno de los brazos de Darren. El mayor suspiró con una mezcla de sorpresa y vergüenza pero no dudó ni un segundo y estrechó al menor en un abrazo. Lo dejó ser. Chris era así, muy afectivo, muy de piel… y sonrió.

De seguro cuando Chris despierte al otro día se sentiría avergonzado y pediría mil disculpas por haberle hecho dormir abrazado a él.

Pero Darren sabía que no había nada que disculpar… después de todo…. a él también le gustaba dormir abrazado de vez en cuando.

Se durmió.

GioGlee escribió: Gracias a ti por alimentar mi corazon Dhris/Carren/CrissColfer ^^[/color]

Jajajaja... adoré eso de mi corazón Dhris/Carren/CrissColfer =)
Si, mi corazón tiene esos mismos nombres!
Estoy terminando el cap. Lo subo en un ratito más, tengo que pasarlo en limpio :P

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