Un entierro y mil secretos

Hey chicas aquí me tiene de vuelta… Como cada que me desobligo de las tareas escolares y me fugo a mi mundo imaginario perfecto donde soy una escritora que vive en un departamento bohemio de una gran ciudad YAY (me encanta fantasear con ello xD) ¿Pudieron escuchar la selección de canciones para esta cuarta temporada? ¿Qué les pareció que Britt cante Gimme More? Yo no pude evitar enseguida imaginarme una escena Brittana hermosa donde nuestra querida Santana esté a punto de un paro cardiaco… Pero bueno… Ahora si a lo que nos incumbe que es el fic…

Por cierto mis amadísimas lectoras cada día se ganan un pedacito en mi corazón… :B de verdad que son así bien máximo geniales y por eso las quiero y adoro demasiado *O* no cambien… y como les decía ahora ya tengo internet pero lo que no tengo es mucho tiempo… esos profes parece que creen que uno no tiene una ex novia de la cual escapar y esconderse en los pasillos, una madre pseudo homofóbica que te obliga a pasar todo el día pegada al brazo de tu beard boyfriend, un par de hermanas menores que te practican el bullying y un grupo de lectoras que cada día te tienen más feliz…


-¡Tengo algo que preguntarte!...- exclamo una morena de estatura baja mientras entraba al departamento de aquella joven bailarina

-Eh… si como no pásale…- comento Brittany con un deje de ironía al ver como su amiga se internaba a su hogar sin pedir invitación

-Mira esto te parecerá muy raro… si de hecho es raro… muy raro… pero muchísimo muy raro… he tenido que pensármelo las últimas 24 horas para venir aquí, plantarme frente a ti y pedirte este estúpido consejo- comento Rachel mientras caminaba rumbo a la sala del lugar, seguida por Brittany que al pasar frente a la puerta de un pequeño cuarto, que usaba como estudio de baile, le indico a Masha que el ensayo había terminado y que sería mejor no se apareciera por allí mientras arreglaba las cosas de la judía

-Rachel estas muy… estresada… ¿te quieres sentar y mientras te sirvo algo de beber?-

-Si… si… es probable… algo de beber… ¿tienes whisky?- la rubia negó con una cabezada pero en ese momento irrumpió la joven castaña con la que compartí departamento y sin decir nada le entrego una botella de vodka y dos vasos

-Saldré de compras… ¿necesitas algo más que la crema para depilar?- pregunto amablemente Masha mientras tomaba su bolso de uno de los sofás de la sala, la rubia negó con otra cabezada y le regalo una sonrisa significativa con un “privacidad” bien marcado en el gesto. La castaña sonrió con un deje de ironía y se alejó por el pasillo rumbo a la puerta del departamento

-Que se diviertan chicas…- fue su última frase y entonces se oyó la puerta cerrarse tras de ella. La rubia sonrió de medio lado mientras serbia en los dos vasos la misma cantidad de vodka y entregaba uno de los mismos a la morena que se mantenía tiesa sobre el sofá mirando asía una nada

-¿Qué pasa?- pregunto la rubia después de ver como Rachel bebía de un solo todo el contenido que llenaba el vaso que minutos antes le había dado


-¿Diga?-

-Santana… necesito a mi mejor amiga ahora mismo- fue lo primero que dijo Quinn al ori a su amiga contestar el teléfono

-La tienes… lo sabes… Nos distancian tantos kilómetros pero sabes que tienes a tu amiga, hoy y siempre-

-Eso es lo que quería oír… Creo que estoy enamorada- la declaración que acababa de hacer no era lo que esperaba la latina. Quinn llevaba mucho tiempo soltera para ser exactos desde que habían salido de la secundaria jamás le había conocido ni una sola pareja y si le sumaba que Quinn parecía jugar para los dos bandos…eso le parecía lo más extraño pues como fuera su amiga no era nada fea de hecho le parecía un sex simbol digno de admirar.

-A ver… rebobina y dime ¿Cómo que crees que estas enamorada? ¿De quién? ¿Hay alguien en tu vida?- la rubia cansada se dejó caer sobre el sofá de su sala mientras estiraba sus piernas sobre la mesa de centro

-De Rachel… estoy enamorada de Rachel…-


-¿Cómo fue que te diste cuenta de que con quien realmente querías estar era con Santana y no con Artie?- pregunto una Rachel ya más calmada de lo que había llegado hacia menos de media hora. Su rubia amiga se cruza de piernas y le lanza una mirada estilo psicoanalista


-¿De Berry?... ¿De Rachel Berry?- pregunto perpleja la latina al otro lado de la línea mientras Quinn suspiraba con pesadez y cerraba los ojos con fuerza como intentando retener esas lagrimas que no había dejado caer ni en el funeral de su inseparable amigo Finn

-No lo sé… No sé qué es estar enamorada… Yo pensé estar enamorada de Finn pero lo engañe con Puck… Luego creí estar enamorada de Sam pero lo engañe con Finn y también creí amar a Puck pero luego me di cuenta de que solo me atraía su apariencia de malote… Desde que supe que trabajaba para los dos equipos no he tenido una sola cita de verdad, una cita que implique sentimientos y lo sabes- argumento Quinn con una gran depresión explicita en su tono de voz

-… Estar enamorada… Creo que solo una vez me enamore en mi vida… Aun lo recuerdo bien…-

-Exactamente… tú te has enamorado, sabes que es enamorarse de una chica… de tu mejor amiga-

-Quiero hablarte de una cosa. De verdad me gusta cuando nos besamos y esas cosas- la latina acababa de acomodar el cabello de la rubia en la coleta que de costumbre llevaban como peinado. Era una tarde de martes, acababan de terminar con su sesión de “tijeretas”

-Lo cual no es engañar… ¿Por qué?- Santana no tomaba muy bien aquel comentario, dado por terminado su trabajo había decidido retocarse el lipstick mientras miraba perpleja a la rubia sentada a escasos metros de ella

-La tubería es diferente- respondió la rubia mientras suspiraba con un deje de tristeza

-Aja…- respondió la latina mientras abría su brillo labial y se veía al espejo

-Pero cuando Artie y yo estamos juntos hablamos sobre cosas… como lo que sentimos- comento Brittany un tanto decepcionada de que las cosas no le salieran como ella había planeado una tarde anterior

-¿Por qué?- pregunto la latina un tanto molesta mientras retocaba el brillo sobre sus labios, el cual se había corrido con los besos apasionados que había compartido con la rubia porrista

-Porque con sentimientos es mejor- contesto Brittany como si se tratara de lo más obvio en el mundo

-¿Lo dices enserio?- pregunto la latina mientras le miraba con reproche a través del espejo –Es mejor cuando no se relaciona a los sentimientos. En realidad creo que es mejor cuando no involucra contacto visual- dijo de manera determinada la latina mientras se daba vuelta para percatarse del tiradero que habían provocado con sus movimientos minutos antes

-No lo sé, supongo que no sé cómo sentirme sobre “nosotras”- respondió la rubia un tanto decepcionada

-Mira… vamos a ser claras. No estoy interesada en ninguna etiqueta a menos que sea de algo… Robo en tiendas- contesto seria la latina mientras recogía un par de cosas del suelo y las ponía sobre la cama

-No lo sé, Santana. Creo que deberíamos hablar con alguien como un adulto. Esta relación realmente está confundiéndome- se excusó Brittany muy poco convencida de que la situación fuese a resolverse como ella lo pretendía

-El desayuno es confuso para ti- argumento Santana un tanto exasperada de aquella conversación

-Bueno, a veces es dulce y a veces es salado. Por ejemplo, ¿Qué sucede si ceno huevos? ¿Entonces qué es eso?-

-Ven acá… Ya lo arreglaremos… O al menos lo intentaremos- comento Santana mientras se acercaba a la rubia para abrazarla por los hombros

~POV Santana~

Abro los ojos, miro el cielo que se proyecta sobre los tragaluces que hay sobre mi techo. Ya ha anochecido, siento el sedoso cabello con olor a vainilla que solo reconocería en mi dulce amiga Brittany. Volteo a verla, su cabeza reposa sobre mi pecho mientras su cabello se esparce por todo mi pecho y cuello; sus manos se enredan en mi cintura y nuestras piernas se encuentran entrelazadas… Podría levantarla, pero hoy mis padres no vendrán a casa. Estiro mi mano y toco con los dedos mi celular que se encuentra sobre la mesita de noche que tengo a mi derecha. Abro el teléfono y escribo un mensaje *Britt está en mi casa… Se quedara a dormir, ha quedado agotada con toda la actividad de hoy… No quisiera despertarla* y se lo mando a su madre que seguramente estará aun en el supermercado cubriendo el doble turno que menciono cubriría ese día. No pasa mucho tiempo y veo a mi celular lanzar algunas luces y antes de que comience a sonar lo tomo y abro con rapidez *No me parece la mejor idea… Pero supongo que contra ustedes dos nadie puede. Cuídense y espero verlas mañana después de clases* sonrió ante el mensaje de Susan, la madre de Brittany, y después apago el teléfono para volverlo a poner sobre la mesita de noche.

La luz que entra por los tragaluces de la habitación iluminan el perfil de la Brittany desnuda que se haya sobre mí. Sonrió de medio lado mientras con mis pies me alcanzo la sabana que cubría mi cama justo antes de nuestra entrega arrolladora de amor. Nos cubro con la sabana y comienzo a pasar mis manos sobre su cabellera enredando mis dedos en sus finos cabellos rubios, los aparto todos con delicadeza de modo que su rostro queda libre y puedo ver que en su rostro surca una sonrisa que la hace ver más hermosa de lo que de por sí ya se me hace.

Han pasado muchas noches que hemos compartido en esta habitación… noches en las que no nos dedicamos precisamente a ver películas y comer galletitas. Brittany ha sido mi amiga desde el primer bimestre en McKinley, cuando nos topamos por casualidad el primer día de entrenamiento con Sue en los casilleros justo después de la ruda rutina con la que la entrenadora nos había dado la “bienvenida”.

–Ehm… disculpa… no quería… no pretendía- comenzó a balbucear una rubia de más alta estatura que la mía, frente a mí. En mi mente había comenzado a generar un montón de buenos insultos para poner en su lugar a la chica que se había atrevido a atravesarse en mi camino de modo que me había hecho tropezar contra una hilera de casilleros

-Pero que…- de pronto la chica alzo la vista y nuestras miradas conectaron de inmediato, pude notar que sus ojos eran azules y que su sonrisa parecía la más resplandeciente sonrisa que había visto jamás – ¿Estas bien?- fue lo único que salió de mi interior mientras le ofrecía una mano, puesto ella había caído de bruces al suelo mientras que yo solo me había golpeado contra unos casilleros

-Sí, gracias… ¿Y tú?- pregunto amablemente mientras ponía una de sus manos sobre el hombro con el que había amortiguado el golpe contra los casilleros

-Perfecta…- comente con una sonrisa

-Eres perfecta diría yo…- dijo entre una sonrisa la rubia mientras comenzaba a recoger la toalla con la que seguro se había secado el cabello y el termo del que bebíamos nuestra bebida milagrosa Silvester

-¿Qué dices?- pregunte un tanto cohibida, en mis 14 años había escuchado cientos de halagos hacia mi… pero jamás había escuchado un halago de parte de una chica… y menos de una chica tan hermosa como la rubia que había frente a mi

-Que eres perfecta… te he visto en el entrenamiento eres ¡wow! Me has dejado impresionada- sonreí con autosuficiencia mientras ponía mis manos sobre mis caderas

-Años de práctica…- conteste como si fuera lo más obvio del universo

-¿Me ayudarías con mi rutina? soy un asco con eso de las vueltas- sonreí como si de pronto encontrara la olla de oro al final del arcoíris, ella correspondió mi gesto con otra sonrisa.

Desde ese día jamás nos habíamos convertido en las mejores amigas del mundo, no nos despegábamos a menos que nuestros horarios lo ameritaran pero buscamos la manera en que con un par de chantajes nos cambiaran dos o tres materias para que estuviéramos juntas. Ella pasaba casi todo el día en mi casa y viceversa conmigo, aunque Quinn también era nuestra amiga, nosotras dos compartíamos casi el 75% de nuestros días una con la otra.

Así que aquí estábamos después de dos años, aun juntas… Aun enredadas en esta extraña pero significativa relación. Yo sabía que no era la mejor de mis decisiones mantener nuestra relación al margen de solo acostones, puesto hasta yo sabía que solo estaba mintiendo… porque cada vez que estábamos juntas, cada que nos llevábamos a ese paraíso orgásmico al que solo llegábamos una en compañía de la otra, inevitablemente le pedía que dijera mi nombre entre sus gemidos, de manera inconsciente la dejaba marcada de una u otra forma como marcando mi territorio bajo el sello de mis chupetones, mordidas o aruños… lo sabía porque el día de San Valentín a la primera que le compraba un regalo era a ella… lo sabía porque prefería pasar un día completo con ella tumbada en una de las hamacas que habían en mi jardín antes de salir con Puck o cualquier otro chico de la secundaria.

Sin embargo tenía miedo de enfrentarme a las consecuencias, Kurt había salido del closet y le había ido muy mal… tan mal que se había tenido que ir a Dalton. Estaba tan asustada de lo que harían los neandertales de la escuela no hacia ella sino lo que podrían hacerle a mi rubia amiga. Pero estaba tan enojada de tener que esconderme para poder ser feliz, porque si la felicidad existe; mi felicidad es cuando estoy con Brittany y puedo sonreír por cualquiera de sus comentarios infantiles que me hacen ver el mundo de otro modo, porque cogida de su meñique el mundo me parecía pequeñito y podía sentirme omnipotente e invencible, porque un solo beso, abrazo o guiño de ella desarmaba mi coraza de hierro se deshacía y de ser Santana López me convertía en Santy.

~POV Brittany~

Santana duerme aun, afuera parece que aún no ha amanecido desde mi posición puedo notar en el despertador digital de Santy que son como las cuatro de la mañana. Sus manos se enredan sobre mi espalda desnuda y mi cabello enredado que cae sobre su pecho, en su rostro una tímida sonrisa se asoma dejando a media vista sus dulces hoyuelos que se le hacen al sonreír.

Santana es más que mi mejor amiga, pero no es nada como mi hermana… Sé que esta relación me confunde porque se supone no debería sentir estas cosas por alguien con quien solo mantengo una relación de acostones y ya… Ella me lo ha repetido una y mil veces que nosotros jamás seremos nada que no sea solo amigas que se hablan con las lenguas pegadas, pero en mi interior sé que ella me ama… confió en que ella me ama. Que una parte de ella siente lo mismo que yo siento al verla aunque sea al otro lado de la cancha de futbol, que una parte de ella sienta ese vacío en el estómago al oír mi voz cuando esta de espaldas, que una parte de ella sienta esa necesidad de oír mi voz antes de dormir y al despertar, que una parte de ella sienta ese escalofrió al verme a los ojos o al tomarme del meñique o simplemente al rozar un centímetro de piel contra la mía, que una parte de ella sienta que no hay persona más maravillosa en este mundo más que yo así como yo hago con ella… Supongo que amor es esto que siento con ella… Porque lo que siento por Artie es como 13 veces menos fuerte que lo que siento con Santana, no solo en la cama sino en todos los aspectos de nuestras vidas… Amor para mi seria como escribir dos palabras Santana López.

-Eso es para mi amor-concluyo Santana mientras Quinn sonreía al haber escuchado todo aquel discurso sobre que era estar enamorada de alguien

-Bueno creo que estoy enamorada… oficialmente de Rachel Berry- argumento Quinn mientras suspiraba con pesadez


-Así que para mí eso fue lo que me hizo entender que amaba a Santana y no a Artie…- susurro Brittany mientras dejaba su vaso sobre la mesa de centro y miraba con una medio sonrisa a la judía que la miraba con ojos cristalinos

-Todo lo que has dicho es hermoso… No entiendo porque no están juntas…-

-Si bueno es cuestión de malentendidos de mala comunicación… Pero dime ¿a qué vino todo esto?-

-Creo que me he enamorado de Quinn…-

uuuuuuu faberry <3 amo a esa pareja pero mas amo brittana ojala se solucionen las cosas entre ellas y que santana no se caseee

Awww.....que hermoso y tierno a la vez la manera en que Quinn y Rachel admiten estar enamoradas una de la otra, o la forma en que San y Britt perciben el amor...........uff, no se como resistire hasta el siguiente capitulo

Saludos, hasta la proxima actualizacion

Britt cantando gimme more es la cancion que escucho en este preciso momento y no dejo de imaginarme como se vera cantandola ya quiero verlo!!!..
en fin en cuanto al capitulo espero y las faberry si hablen de frente y no les pase como a las brittana jajaja me mato eso que dijo britt . Amor para mi seria como escribir dos palabras Santana López. Dios cuando se iran reconciliar!!.. nos vemos bye bye

Hola mis hermosas lectoras… Dios… amo a todas ustedes. Espero que cada uno de los capítulos les guste…. Porque a veces siento que les falta algo -.-‘’ Bueno aparte de eso pues aquí estoy escribiendo a media mañana antes de un día pesado… (bueno a esta hora empecé el fic xD)
Hoy no hay mucho que contar… Tendré un día pesado, tengo taller de literatura y eso me hará pasar todo el día en clase con mi ex… Solo por eso odio los jueves… En fin, no me lamento más y solo les reitero mi afecto hacia ustedes, mis agradecimientos por seguirme y comentar casi al momento que actualizo… Y si hay alguien que me siga pero no comenta también le agradezco por seguir esta historia que a veces se pone tan dramática que hasta a mí me sorprende que mi apodo no sea “Drama Queen”

Creo que ha quedado muy corto en comparación de los capitulos de costumbre pero de verdad que me quedo asi y no quise agregarle mas... Chicas el final se esta acercando... Y habra mucho, muchisimo drama...

-Tenemos que hablar…-

-Si lo se… no he tenido tiempo de pasarme por tu departamento…-

-Tampoco es como si hubiese estado allí todo este tiempo…-

-¿Ah no?-

-No… ¿te apetece quedemos para ir al acuario?-

-No tengo otros planes… ¿a qué hora pasarías por mí?-

-Ehm precisamente estoy en el departamento en New York… deja me arreglo un poco y paso por ti dentro de media hora ¿está bien a esa hora?-

-Perfecto, te veo en media hora…-

-Es tu hora…- dijo Quinn a la rubia que se reflejaba en el espejo frente a ella, comenzó a ponerse un poco de brillo labial y hecho una última mirada a su aspecto en total quedando convencida de que ese era el mejor atuendo para la ocasión: una blusa azul con corte v que en marca de agua mostraba una Y en tanto la frase “Yale” se remarcaba en letras más pequeñas y blancas cubriendo todo el pecho, unos jeans ajustados y unos tenis negros. Sonrió al espejo y suspiro… era hora de hacerle frente a sus sentimientos… hora de aceptar aquello que venía ocultando desde hacía años.


-¿Qué le diré?... ¡Hola Lucy! Creo que estoy enamorada de ti… ¡Rachel Barbra Berry eres patética!- una morena judía caminaba de un lado a otro alrededor de la sala de su departamento, hacia horas que se había cambiado para la cita que había previsto tendría con Quinn.

De pronto el timbre de la casa sonó, haciendo saltar a la morena de la impresión. Se tocó el pecho, noto que estaba tan agitada que seguramente en cualquier momento le daría un paro cardiaco, camino hasta la puerta y conforme se acercaba pudo escuchar a su latido subir cada vez más de velocidad.

-…Hola…- saludo Quinn, parecía nerviosa su pie se movía con insistencia como si estuviera marcando tiempos pero la rubia hacía años que no cantaba

-Voy por una chaqueta y nos vamos…- comento la morena dejando a su amiga en la puerta y entro corriendo al departamento y casi al instante regreso a donde la rubia seguía tal y como la había dejado minutos antes.

-Vamos- indico Rachel mientras salía del departamento y cerraba la puerta tras de sí. Caminaron hasta el ascensor sin cruzar palabras.

-Iremos en autobús…- comento la rubia un tanto avergonzada

-Hace años que no subimos a uno… me parece que ha sido tu mejor opción para nuestra cita- la mención de la palabra “cita” hizo quedar fría a la rubia y la morena al notar lo que acababa de decir comenzó a balbucear –Es decir nuestra cita de amigas…- Quinn sonrió intentando quitar esa presión que se notaba en esa atmosfera que solo compartía con Rachel

-…Llevas mi chaqueta…- comento la rubia con un deje de alegría mientras miraba de reojo a su acompañante en tanto esperaban el autobús

-Si… es mi favorita- susurro avergonzada la morena mientras Quinn le hacia la parada al transporte

El camino hasta el acuario fue silencioso, incómodo y más de una vez fastidioso. La rubia se dedicaba a mirar el paisaje que pasaba a través de la ventana y Rachel con sigilo se dedicaba a ver a su acompañante; denotando que hacía años que había hecho lo mismo… Que hace años no miraba el panorama por la ventana cuando viajaba con Quinn y en su lugar durante todos sus trayectos su mirada se dedicaba a contemplar a su rubia amiga.

-Ya he comprado las entradas- índico Quinn al ver que Rachel estaba a punto de formarse para comprar tickets

-Perfecto…- las chicas caminaron una al lado de la otra hasta la entrada y allí entregaron sus entradas al vigilante

-Las focas siempre se me han hecho graciosas…- comento la morena, llevaban más de media hora caminando entre las exhibiciones sin decir una sola palabra

-Necesitamos hablar- dijo Quinn muy seria

-Lo sé- contesto la morena con un deje de alivio al no haber sido ella la del primer paso

-Ven… hay un lugar que se es perfecto para que hablemos- la rubia tomo de la mano a la morena y camino rumbo al túnel subterráneo que poseía el parque, donde tomaron un elevador y bajaron a donde el recorrido comenzaba

-La primera vez que venimos aquí fue después de que Brittany se fue y tuvimos que consolar a Santana…- comento Rachel mientras caminaba lentamente y admiraba a un par de morsas nadar con gracia

-Desde entonces ha sido nuestro lugar favorito para enfrentar las adversidades… Es como si este túnel subterráneo fuese una coraza de fuerza en contra del exterior…- respondió Quinn al acercarse a uno de los vidrios y poner una de sus manos sobre el vidrio

-Mi verdadera coraza contra el exterior eran Finn y tu… ahora solo lo eres tu- dijo la morena mientras ponía su mano sobre la mano de la rubia, quien volteo a verla y le sonrió para después tomarle de la mano y comenzar de nuevo su andar

-Ese día…- comenzó a balbucear Quinn

-No quiero que me lo expliques sino estas segura de que quieres hacerlo- le interrumpió la morena mientras le soltaba la mano y se acercaba a la rubia para abrazarla por la cintura

-Quiero explicártelo… Ella solo fue víctima como muchas y muchos en los últimos años de mi fobia al amor… No sé desde cuando soy bisexual solo sé que lo supe cuando después de las fiestas universitarias comencé a amanecer con chicas en lugar de chicos en mi cama… Santana me tuvo que ayudar con la auto-aceptación y casi nadie lo sabe… de hecho solo sabían Santana y Finn-

-¿En que he fallado?- pregunto la morena mientras lanzaba una mirada furtiva a la rubia que parecía especialmente impresionada con los lobos marinos que se encontraban detrás de los vidrios frente a los que estaban paradas

-¿Qué dices?- pregunto extrañada la rubia mientras volteaba a ver a la morena

-Tengo que haber fallado en algo por eso no fuiste capaz de decirme a mi tu “mejor amiga” que te gustaban las chicas también- contesto Rachel mientras jalaba a rubia para poder ver a los pulpos

-No seas tonta… ¿quieres ver a los tiburones? Después podemos ver el resto de animales pero de verdad quiero ver a los tiburones- la rubia rodeo los hombros de la morena con uno de sus brazos y así caminaron hasta el final del pasillo donde se encontraba la exhibición de tiburones

-Los tiburones blancos son los depredadores del océano ¿cierto?- comento Quinn mientras se sentaba en una banca de descanso frente a los cristales por los que se podía observar un tiburón blanco nadando de un lado a otro –Cuando estábamos en la secundaria sentirme el tiburón blanco era mi sueño dorado… Siempre fui la depredadora mientras vestía ese uniforme de porrista… Y de las tantas personas que logre lastimar, tú fuiste una de ellas… Tú la chica que jamás pensé terminaría teniendo por mejor amiga… Han cambiado mucho las cosas ¿no?-

-Sigues siendo un tiburón blanco… pero ya no eres tan violenta… Y es precisamente esa actitud de depredadora la que te ha llevado a la cima de todo lo que haces… La misma actitud que me ha hecho quererte como te quiero, admirarte como te admiro y sentirme como me siento cuando estoy contigo- dijo con firmeza Rachel mientras subía sus piernas a la banca y se sentaba sobre ellas

-¿Qué sientes cuando estás conmigo?- pregunto Quinn mientras miraba a los ojos a la morena

-Seguridad… Confianza…-

-Vale… Rachel… Los tiburones blancos no son del tipo romántico durante la etapa del apareamiento pero estoy segura que cuando un tiburón blanco se enamore se parecerá a los pingüinos… Siempre he soñado con tener una relación igual que esos animales… ¿Sabías que durante toda su vida se aparean con el mismo individuo con el que se aparearon desde su inicio sexual? Y no solo eso son capaces de volver a reconocerle aunque se dejen de ver por un largo año-

-A ver explícame más lento… ¿Me estás hablando sobre apareamiento animal? ¿Qué tiene que ver eso con todo esto?... Tu… estas… ¿enamorada?... ¿te has enamorado de la chica desconocida de la disco? – Quinn pudo notar un repentino cambio de voz en su amiga… era como de decepción, como de tristeza

-No… como ya te dije ella fue víctima de mi fobia al amor… Pero estoy tan cansada de huir… Tan cansada de ir a trabajar y desayunar sola y después regresar de trabajar y cenar sola… No sé si me entiendas- Rachel asintió con una sonrisa de medio lado

-Rachel… Lo que sea que diga cambiara nuestra relación… Pero no puedo, ya no puedo fingir que no pasa nada… Que no siento nada- la rubia inhalo con fuerza y cerró los ojos –Por ti…- Rachel se mostraba sorprendida su quijada parecía pronto se desprendería de su cabeza, la rubia abrió los ojos y miro a su amiga con las cejas alzadas incitándola a responder –Rachel te estoy diciendo que creo que te amo… ¿no piensas decirme nada?-

-Yo… yo… Quinn…- la morena se levantó de la banca de un brinco –Lo siento- fue lo último que susurro antes de salir corriendo de allí

Hola... nunca había comentado pero ya te había estado leyendo

Tenia la oportunidad perfecta... ¿por que no le dijo que ella también la amaba? se lo quería decir pff... espero que pueda hacerlo y bueno quiero ver a las brittana sentarse y hablar aclarar todo...

oooh porque rachel hace esooo???? ojala las brittana aclararan las cosas y se digan lo mucho que se aman y bla bla bla (¿porque no actualizas tu otro fic :( porfa actualisaloo )

Ahmmm..........el momento perfecto irrumpido por algo de temor y sorpresa o no ?, espero ansiosamente como se daran las cosas entre las Faberry luego de esta importante confesion..........que falta muy poco para el final dices.........no es posible, no se si lo resista ........bueno si lo hare a pesar de las dosis anticipadas de drama que anunciaste......solo espero que antes de llegar al final las seguidoras de este fic hallemos algo de tranquilidad y sosiego contemplando la reconciliacion y momentos Brittana..........actualiza en cuanto puedas si ?

Saludos, hasta la proxima actualizacion

Bueno hoy es jueves… Así que significa que no hay mucha tarea para mañana y me puedo pasar un buen rato escribiendo… Es mi manera de escapar de mi propia locura que solo yo me induzco, sé que esto suena como una obsesión pero no sé qué tiene <> que me hace querer estar todo el rato al pendiente de lo que hace… Hoy le dijo a mi novio cual era mi apellido (no se lo sabe el estupidito) mientras el gritaba a todo el mundo preguntando por mi apellido ¿fue solo casualidad o lo ha hecho al propósito?...
Como sea… Creo que es mejor escribir y escribir y escribir hasta que sepa que hare de mi vida… ¿Les ha gustado el capítulo anterior? Lo sé cómo que ha estado un poquito dramático y pensaran que si Rachel ha admitido que cree estar enamorada de Quinn ¿Por qué ha escapado? Bueno, todo a su tiempo mis lectoras hermosísimas… Y antes del capítulo:

-Este es un comercial de asistencia pública en caso de presentarse la situación lucrativa comunícate a 001- Sasi- 1640 xD… Ok no. Pero si quiero agradecer a esas lectoras que se han convertido en personas que espero ver cada que abro el fic: Dtrululu, mel_kung y heathermylove… Pero también les agradezco a esas chicas que se dan el tiempo de dejar sus comentarios de vez en cuando y las animo a seguir participando (ok no…) es decir a seguirme leyendo xD Sin más las dejo con este nuevo capítulo. Por cierto está muy corto… Pero es al propósito es como una introducción a los dos capítulos siguientes


-No me volverás a cerrar la puerta- dijo firmemente la rubia mientras ponía un pie entre el marco de la puerta y la puerta misma. Rachel la miro suplicante pero Quinn no accedió, entonces la judía se dio por vencida y dejo la puerta abierta mientras entraba de vuelta al departamento

-Arréglate…- ordeno Quinn a la judía que estaba dispuesta a volver a tirarse sobre el sofá de la sala

-¿Qué demonios?-

-Arréglate… Hoy es la despedida de soltera de Santana… La han organizado aquí ya que Brittany es la dama de honor…- dijo Quinn como si lo que decía fuera lo más lógico en el mundo y todos lo supieran

-¿Por qué nadie me ha dicho nada?-

-Bueno llevas casi dos semanas reclutada aquí… Desconectaste el teléfono…- la rubia tomo el cable que conectaba la línea telefónica y se la mostro a la morena que solo se mordió los labios –no contestas el celular y ahora veo porque…- argumento Quinn mientras se percataba que el celular de Rachel estaba sin batería –Y a todos les has cerrado la puerta en la cara… Estas peor que durante el duelo por Finn…-

-Lo siento… Seguramente te he hecho pasar un infierno y…-

-No lamentes nada… Olvida todo y hacia adelante, lo que nos incumbe ahora es ir a ese evento porque si no Britt la pasara muy mal- la morena asintió y se desapareció tras la puerta que pertenecía a su habitación, en tanto la rubia miro a su alrededor; el departamento era un total desastre cajas de pizza por doquier, envolturas de barras nutricionales, vasos térmicos de slushies y algunas cajas de chocolates vacías. Sonrió de medio lado y comenzó a quitarse el saco rayado que llevaba para después buscar en la cocina una bolsa donde poner la basura, después se puso a sacudir los muebles y al último saco la aspiradora de debajo de las escaleras y comenzó a aspirar un poco el lugar.

-¿Qué haces Quinn?- pregunto la morena mientras atravesaba la sala en tanto se ponía sus zapatillas

-¿Por qué me dices Quinn?...- le cuestionó un tanto dolida la rubia mientras desconectaba la aspiradora

-Perdón… Pensé…- comenzó a excusarse la judía pero la rubia poso su dedo índice sobre los labios de Quinn

-Todo sigue igual entre nosotras y ahora vamos allá- ordeno la rubia mientras caminaba a la puerta y salía seguida de Rachel del lugar

-¿A dónde vamos?- pregunto la morena mientras se colgaba del brazo de la rubia justo antes de subir al elevador

-No te diré sino capaz que te regresas a tu casa…- respondió Quinn mientras le dedicaba una mirada a Rachel, entonces se percató del agarre y le lanzo una segunda mirada perpleja que Rachel contesto con una sonrisa amplia mientras afirmaba más sus manos alrededor del brazo de la rubia

-¿Me abres la puerta?- sentencio la morena a la rubia que había olvidado hacer el gesto que acostumbraba hacer siempre para con la morena, Quinn la miro perpleja y entonces Rachel solo le lanzo una mira retadora la rubia sonrió y se acercó para abrirle la puerta

-Parece que de nuevo se te están olvidando los modales Lucy…- comento la judía justo antes de que Quinn pusiera en marcha el vehículo


-¡Vamos Santana muévete!…- grito Brittany al otro lado de la puerta

-¿Cómo me veo?- pregunto Masha mientras se daba una vuelta y lucia su recién estrenado vestido

-Hermosa… como siempre- contesto animada la rubia mientras se dejaba caer sobre un sofá que había a mitad de la suite que ocupaba Santana durante su corta estancia en New York

-¿Harás algo?- susurro la castaña mientras se sentaba sobre las piernas de la rubia puesto no había otro sofá disponible

-No lo sé…- contesto con seriedad Brittany justo cuando la latina salía del baño

-…Ya estoy…- susurro avergonzada la chica mientras tiraba sobre la cama el vestido que se acababa de cambiar

-Te ves muy bien Santana- elogio Masha a la morena quien solo le agradeció el elogio con una medio sonrisa

-¿Tu que dices Britt?- pregunto un tanto emocionada Santana a la rubia que luchaba por no babear al verla y desviaba su mirada a otro lado que no fuera donde estaba la latina

-… Perfecta como siempre…- contesto la rubia viéndola fugazmente mientras picaba las costillas de Masha para hacerla levantarse

-Pero ni siquiera me has visto…- susurro Santana decepcionada pero Brittany no la oyó puesto ya estaba afuera con Masha quien parecía hacerla reír a cada segundo


-Ah no… no… no… La última vez que estuve en un bar así casi término violada en uno de los baños- protesto Rachel mientras retrocedía sobre sus pasos evitando poner un pie dentro del lugar

-Vamos Rachel… Es importante que estemos aquí… Por Santana y por Brittany, por ambas- argumento Quinn jalándola del brazo pero la morena se acababa de abrazar a un poste y el trabajo de jalarla se había vuelto más difícil, la rubia resoplo con disgusto y soltó el brazo que había estado jalando –Vamos Rachie… Esta vez prometo no esfumarme con ninguna mesera-

-Hay no… ¿con una mesera? ¿enserio?... Me abandonaste por una mesera… Ya entiendo porque Puck y tu tenían tanta química son tal para cual-

-Ya, vale que no fue nada cool… Pero vamos esta vez solo estaré contigo… Anda di que si Sweetie-

-Solo si me invitas las bebidas… Bailas conmigo toda la noche y prometes quedarte a dormir en mi casa- Quinn la miro con incredulidad y sonrió de medio lado –Perfecto eso lo tomo como un si…- dijo Rachel antes de que la rubia dijera una palabra más, se acercó a su amiga y le dio un corto beso en la mejilla

El par de chicas entro al lugar tomadas de la mano, Quinn siendo la de mayor estatura busco a lo lejos algún indicio de sus amigas y no fue hasta que vio a lo lejos una cabellera rubia como la suya, supo que las Brittana ya estaban allí.

-Hola chicas…- saludaron Quinn y Rachel al unísono mientras la rubia retiraba una silla de la mesa y dejaba que la morena se sentara allí

-Hola…- respondieron las chicas sin mucha alegría

-¿Por qué esas caras tan largas?- pregunto Rachel al ver a sus amigas tan desanimadas, pero ambas se limitaron a encogerse de hombros

-A bailar se ha dicho que estamos aquí para celebrar no para calentar los bancos- dijo Quinn mientras se levantaba con decisión de la mesa jalaba a Rachel de la mano para hacerla levantarse también y caminaba decidida hasta la pista de baile

no entiendo a rachel despues que le dijo quinn que la ama se encierra 2 semanas en su cuarto y ahora como si nada? mm porque lo hizo...

en fin espero y pase algo bueno en esa despedida siempre suele ser asi
gracias por actualizar y dejar 3 capítulos en un solo día..

Comparto con Heatermylove porque Rachel se pone asi si supuestamente tambien esta enamorada de Quinn?

Uff....espero que esta vez Rachel no huya cuando este bailando con Quinn, es quizas mi mente paranoica pero ¿sera que Rachel esta vez cae redondita ante Quinn y por fin admite lo que siente por ella?, creo que me pongo a divagar y dejar volar mi imaginacion cuando algo me llama la atencion..............ya estoy ansiosa por un nuevo capitulo

Saludos, hasta la proxima actualizacion

Bueno chicas aquí estamos de nuevo, nuevo capítulo… Nueva situación y si, a menos capítulos del final… ¿Sera que Britt alguna vez se coma su orgullo y le diga a Santana que no se case? ¿Rachel dejara de ser una miedosa judía gritona y decidirá decirle a Quinn que también le ama? Son preguntas que hasta yo me hago… Haha ok no… Pero si prepárense no se una caja de kleenex para el final…

Por otra parte hay quien me ha pedido actualice mi otro fic http://www.gleeklatino.com/t14564-digale-brittana-faberry-y-parejas-adicionales bueno pss espero actualizar entre mañana por la tarde y mañana por la noche… Es que perdí la hilaridad ya que me termine más emocionada escribiendo este… Pero juro, juradito, jurado que actualizare lo más pronto posible. Sin más por el momento, les dejo el nuevo capítulo… Que por cierto creo que será el último capítulo centrado especialmente en nuestras Faberry

Por cierto, quisiera saber... ¿como les gustaría que publicara la segunda parte de este Fic? ¿en otro post o en este mismo post? Es que sigo indecisa por aquello de que el titulo va a cambiar...


-Lu… ¡cómo me he divertido!- dijo Rachel con ese arrastre de palabras que Quinn conocía muy bien

-Ya lo noto, vamos entra al auto- dijo Quinn mientras la ponía sobre el asiento trasero, cerró la puerta de su automóvil y camino unos metros adelante donde un deportivo negro vivía una situación casi equivalente

-Parece que somos las únicas maduras por aquí…- comento Brittany sonriente mientras veía acercarse a su amiga

-Yo creo que si… ¿Segura que estarás bien llevándola al hotel?- pregunto preocupada Quinn mientras ponía una de sus manos sobre el hombro de su amiga que sonrió de medio lado, soltó un lánguido suspiro y le sonrió de medio lado

-La que tendrá problemas sino te tiene al tanto de ella será Rachel… Sera mejor que vuelvas a verla puede ya se haya vomitado sobre tus asientos de piel- bromeo Brittany con Quinn quien sonrió con simpatía, dio un par de palmaditas al hombro de su amiga y después se despidió con un ademan en tanto se alejaba a su vehículo

-Seguro volviste a pedirle el número a una de las meseras ¿verdad?- sentencio una judía muy enojada desde el asiento trasero del vehículo de Quinn

-Que tonterías dices Rachel… Fui con Britt necesitaba asegurarme de que este bien estando con Santana-

-Pues si tanto te preocupa Brittany te hubieras largado con ella…- susurro aun enojada la morena mientras su voz comenzaba a quebrarse como si fuera a llorar

-Rachel Berry, sí que a veces estas loquita ¿eh?- la rubia se acomodó de rodillas sobre el asiento del piloto, tomo el rostro de la judía entre sus manos y le regalo una mirada pura y relajada–Con la única que quiero estar en este preciso momento… es contigo- Rachel la miro con dulzura y puso sus manos sobre las de Quinn, que sujetaban con fuerza y ternura su rostro

-Y yo contigo…-

-Perfecto… entonces hora de ir a casa- concluyo Quinn mientras soltaba a la morena y se acomodaba sobre su respectivo asiento

-Hemos llegado…- anuncio animada Quinn mientras estacionaba su vehículo, pero al ver por el espejo retrovisor se dio cuenta de que la morena iba más que dormida y casi se caía del asiento.

Sonrió con simpatía y aprovecho para acomodar el espejo para mirar un poco mejor a Rachel, la contemplo unos segundos y no pudo borrar esa sonrisa de su rostro… a pesar de todo no podía odiarla, cualquier persona en su lugar hubiera puesto distancia y desaparecido pero ella no era capaz de vivir cinco minutos sin la llama de la esperanza de que tarde que temprano la volvería a ver. Así que se había tragado su amor no correspondido, la vergüenza de haberse quedado plantada en el acuario y todo ese rollo de complejos provocados por esas confesiones amorosas insatisfactorias de la vida; para así poder seguir siendo la misma Lucy que era para Rachel: la amiga incondicional, el paño de lágrimas y muchas veces la única que podía acompañarla en su soledad. Suspiro fuertemente, se desabrocho el cinturón de seguridad y bajo del vehículo, abrió la puerta de la parte en la que iba la judía y la contemplo unos segundos antes de quitarse el saco y ponérselo encima. Tomo aire y cargo con el cuerpo de Rachel, cerró la puerta con un empujoncito de caderas y camino rumbo al elevador que tenía el estacionamiento.

-Buenas noches, Harry- saludo la rubia al joven portero del lugar, dejo las llaves de su vehículo sobre el escritorio y sonrió de medio lado -¿Puedes cerrarlo por favor?- el castaño sonrió y asintió con una cabezada

-Claro señorita Quinn… ¿La señorita Berry se ha divertido mucho?- pregunto el chico mientras apretaba el botón para llamar al elevador

-Sí, pero nada que no se pueda controlar… Hasta luego Harry- se despidió la rubia mientras entraba al elevador. Lo único que podía agradecer era que el elevador fuera rápido y no tener que cargar con la morena escaleras arriba como muchas veces en el pasado había hecho. Bajo la mirada y la centro al cuerpo que yacía entre sus brazos, la morena dormía cual Bella Durmiente y de manera casi invisible una sonrisa surcaba su rostro

-¿Que estarás soñando?- pregunto la rubia con curiosidad, entonces un sonoro pitido la hizo salir de su concentración mientras las puertas se habrían para dejarla salir en el piso número ocho. Camino el largo pasillo y justo frente a la puerta con el número 154 se detuvo, lucho un poco para sacar las llaves de las bolsas de la chaqueta que llevaba su amiga pero al final las consiguió y al final abrió la puerta

-En casa… sana y salva como siempre…- susurro la rubia mientras entraba al vestíbulo del departamento daba una ligera patadita a la puerta para cerrarla y dejaba las dos bolsas de mano en una mesita que decoraba esa parte del lugar. Siguió caminando atravesando el resto del departamento, entrando a la sala donde vio un retrato de Finn… sonrió de medio lado, mientras dejaba el cuerpo de Rachel sobre uno de los sillones

-Aquí esta… sana y salva como siempre te prometí estaría- dijo Quinn dirigiéndose al Finn sonriente del cuadro que adornaba la sala, tomo el cuadro entre sus manos y lo miro fijamente –Le he dicho nuestro secreto… no lo tomo muy bien… Supongo que después de todo no lleno tus zapatos ¿eh?... Como sea yo seguiré cuidando de ella, tal y como lo prometí y si al final del cuento Sam es el que la merece también dejare que sea feliz igual que tú lo hiciste- la rubia suspiro y dejo de nuevo el cuadro en donde estaba, se levantó del sofá y se dirigió a la cocina en busca de agua y un par de pastillas para dárselas a la judía.
Rachel, que se había despertado en el transcurso del estacionamiento al departamento, abrió los ojos y se levantó para coger la foto de su ex novio de la misma manera que segundos antes lo había hecho Quinn. Paso sus dedos alrededor del contorno de sus ojos y labios.

-¿Conque tú también lo sabias?- sentencio la morena al Finn de tinta y papel, en ese preciso momento llego la rubia que llevaba dos vasos de agua y un par de pastillas

-¿Desde cuándo estas despierta?- pregunto Quinn impresionada

-Justo después de que te preguntaste que soñaba…- susurro avergonzada la morena dejando de nuevo la fotografía sobre el esquinero donde siempre estaba

-Toma… hay que beber agua y un par de pastillas para evitarnos la jaqueca de la mañana- argumento la rubia entregándole un vaso de agua y dos píldoras blancas a Rachel, la judía tomo ambas cosas y después las dejo sobre la mesa de centro

-Siéntate… tenemos que hablar- pidió Rachel son una sonrisa tímida dibujada en su rostro, la rubia no entendiendo del todo su petición no hizo un ademan de obedecer entonces Rachel se levantó tomándola de la mano y la sentó consigo. La morena se dedicó a verla a los ojos fijamente un par de segundos y después le regalo una dulce sonrisa –Cierra los ojos- le ordeno mientras se mordía los labios

-¿Pero qué?-

-Shh… hazlo- contesto la judía depositando su dedo índice sobre los labios de la rubia, que termino por obedecer las raras peticiones de su amiga.

Rachel, la miro un par de segundos con ternura mientras con sus dedos removía los mechones de cabello rubio que caía sobre el rostro de su amiga. Sonrió de medio lado y con su dedo índice comenzó a delinear primero los pómulos de la rubia, después su nariz y al último sus labios.

-Rachie ¿a que estás jugando?- pregunto Quinn un tanto nerviosa de la situación a la que la había orillado su amiga

-Tú me dijiste algo… algo que jamás pensé oír de ti… Y hui… por miedo… Y porque necesito aclarar mi cabeza…- susurro Rachel, mientras se acercaba con cuidado al rostro de su amiga… paso su lengua alrededor de sus labios y finalmente estampo sus labios contra los de la rubia. Quinn no podía creérselo, ¿Qué se suponía que tenía que hacer? Pero Rachel fue quien le indico que era lo que tenía que hacer cuando su lengua pedía ir mas allá, la rubia se dejó de sus complejos y solo accedió… en el encuentro sus lenguas comenzaron una danza completamente sincronizada, era como si todo el tiempo hubieran sabido que bailarían la una con la otra y desde siempre hubiesen estado esperando ese momento. Quinn ya no podía estar simplemente quieta y enredo sus manos alrededor de la espalda de la morena, quien al instante sonrió entre el beso y comenzó a empujar hacia atrás a Quinn de modo que quedaron recostadas sobre el sofá. Pero el aire les hacía falta y tuvieron que separarse. La primera que abrió los ojos fue Quinn que era presa de una extraña mezcla de impresión, miedo y felicidad.

-Ahora definitivamente tenemos que hablar…- dijo Quinn mientras se sentaba de nuevo en el sofá

-Hay muchas cosas que me debes aclarar… antes de hablar de lo que acaba de pasar- comento firmemente Rachel –Como por ejemplo el que Finn supiera de tus sentimientos hacia mí… O que el fuera una de las dos únicas personas que sabían sobre tu sexualidad…- la rubia se mordió el labio inferior, era hora de la verdad, de bajar todas las cartas para mostrar su juego y ver si ganaba

Finn había viajado ese fin de semana a New Heaven ya que Rachel se encontraba de viaje escolar en Paris y no regresaría hasta las próximas dos semanas, así que había hecho planes con Quinn para ir por allí a dar la vuelta.

-¿A dónde iremos?- pregunto animado el castaño mientras caminaba al lado de la rubia, rumbo al estacionamiento del edificio en el que vivía la chica

-Es una fiesta universitaria… de esas que organizan los de las facultades cada fin de semana… Esta es de los estudiantes de leyes, sus fiestas son las que más onda tienen y allí pasa de todo… ¡va a ponerse de locos!- contesto animada la rubia mientras subían a su automóvil. Quinn manejo alrededor de media hora hasta el otro lado de la ciudad, se estaciono frente a una mansión que parecía de lo más lujoso que Finn habría podido ver en su vida. Bajaron del vehículo y caminaron rumbo a la entrada.

-¡Eh! ¡Quinnie! Vamos mueve tu trasero que las bebidas se están acabando- dijo una chica castaña que se colgó del cuello de la susodicha en cuanto esta y Finn entraron a la casa

-Gracias Selena, ahorita mismo me pongo a eso…-

-Vaya Fabray… pensé no venias…- comento esta vez un chico moreno con un afro muy exuberante, le tendió dos cervezas y la rubia las tomo dándole una a su acompañante

-Gracias Gospel- contesto Quinn, mientras el susodicho los guiaba hasta una terraza donde había un par de mesas extendidas; allí el montón de chicos que se encontraban bebiendo saludaron con gritos y ademanes a la rubia que con una sonrisa saludo a todos con un ademan de mano mientras se sentaba en un lugar donde su amigo le indicaba y a su lado se sentó un Finn extrañado y asustado de la situación en la que se encontraba

-¿Qué ya probaste a todos los de las facultades y has empezados con los del exterior?- pregunto la misma castaña de la entrada mientras se sentaba a su lado

-No… él es Finn Hudson… es mi mejor amigo de la secundaria- contesto Quinn presentando a su castaño acompañante –Y es el novio de Rachel…- agredo la rubia para marcarle límites a su amiga, que ya conocía muy bien.

La noche siguió su curso, los amigos de Quinn eran amables con Finn y este de apoco se sintió en confianza tanto que hasta fue convencido por un par de chicas de ir a bailar. Por su parte, la rubia se enrollaba cada dos por tres en algún concurso de shots de bebidas extrañas que traía su amigo Gospel de la barra de bebidas. El alcohol ya estaba haciendo de las suyas en los universitarios y no era raro que se viera a una parejita por aquí o por allá, comiéndose a besos.

-Vamos Fabray… debe haber alguna que no te hayas llevado ya a la cama…- comento animado un rubio al lado de la chica que bebía rápidamente la cerveza que acababan de darle

-Enlistemos… Las de nuestra facultad… ¡ya!... Las de la facultad de ingenierías ¡ya!... Ya se no te has echado a ninguna de la facultad de leyes- contesto Gospel sentándose al otro lado de la rubia

-Vamos que la noche está acabándose…- dijo el rubio levantándose de un brinco de la banca en la que había estado sentado segundos antes, tomo por la mano a la rubia y la hizo levantarse. Después, caminaron entre los pocos chicos que bailaban en el lugar.

Entonces la vio el castaño, la rubia bailaba con una pelirroja de manera muy sugerente y a sus lados el chico del cabello afro y un rubio le hacían compañía con otro par de chicas… parecían divertirse a lo grande puesto Gospel y el rubio cada tanto se acercaban a la rubia y le decían algo al oído y esta solo asentía con una cabezada o les respondía al oído también. Finn siguió observando desde el sofá donde minutos atrás se había sentado a descansar, la rubia se movía con agilidad mientras la pelirroja parecía acercarse más y más al cuerpo de la rubia que no parecía incomoda con la situación y entonces sucedió… la pelirroja se acercó a Quinn y le planto un beso, el cual la rubia contesto… parecía que se comerían y cuando se separaron solamente pudo ver como la pelirroja tomaba a su amiga de la mano y la llevaba lejos de allí, perdiéndose por un pasillo.

-Esa pelirroja estaba muy bien…- comento a la mañana siguiente Finn, mientras le ofrecía un vaso de agua fría a una Quinn completamente devastada sobre el sofá de la sala de su apartamento

-¿De qué hablas?- pregunto extrañada la rubia como quien no quiere la cosa, bebió su vaso de agua de un solo y después se tragó dos píldoras blancas

-Te vi… así que no hay manera de que lo niegues… Te desapareciste como por dos horas con esa pelirroja con la que bailaste como media hora sin despegarte de su cuerpo-

-… ¿Viste?...- el castaño asintió con una cabezada mientras se sentaba enfrente de la rubia

-Ya sabes que no te quiero juzgar… solo que pienso que sería bueno me dijeras desde cuándo es que eres una depredadora de chicas… porque por lo que pude informarme en esa fiesta. En tu cama han estado al menos el 35% de las chicas de todo el campus universitario de Yale-

-Fue un par de meses después de llegar a Yale, en esas fiestas es fácil experimentar con tu sexualidad… Un par de cervezas, un poco de baile y la chica era mayor que yo… Pensé que había sido el momento pero después me sorprendí pensando en que me era más satisfactorio estar con una chica que con un chico… No sé qué sea esto pero…- la rubia se encogió de hombros

-¿Quién más lo sabe?-

-Santana… se lo he dicho porque ella es la única chica fuera del closet que conozco… Bueno no la única sino es la única que conozco desde hace años-

-Y ahora yo…- la rubia asintió con una seca cabezada –No te preocupes Quinn, es un secreto de amigos pero creo que deberías controlarte… Eso de acostarse con cualquiera… ya sea chico o chica no está del todo bien-

-¿Así que te acostaste con todas las chicas de Yale?- pregunto indignada la judía

-Si… no… digo no tantas… Mira no fue mi intención…- contesto avergonzada la rubia

-¿Cómo fue que supo que sentías algo por mí? ¿Por qué aun así permitió que estuvieras cerca de mí?-

Desde aquella fiesta en la que habían hablado en el baño, habían pasado un par de meses. Finn se había marchado al campo de concentración pero al fin regresaba después de esa larga temporada, así que lo primero que hizo fue pasar por Washington (lugar donde ya vivía la rubia).

-¿Quinn piensas responder mi pregunta?- cuestiono el castaño a la rubia que bebía te frente a él, se habían citado en un restaurante muy famoso en la ciudad y el cual quedaba cerca de la oficina en la que trabajaba Quinn

-¿Qué pregunta?- pregunto extrañada la rubia

-La que te hice la noche de la fiesta en New York… hace un par de meses, en el baño- contesto exasperado el castaño

-¿Quieres saber enserio si estoy enamorada de tu novia?- el castaño asintió mientras entrelazaba sus dedos y recargaba su mentón sobre estos –No lo sé, solo sé que me gusta pasar mi tiempo con ella… Tontear con ella es la mejor parte de mi semana, cuento los días desde el lunes hasta el viernes para que al fin sea sábado y pueda ir a New York y verla un par de días… Me alegra el día escucharla por el teléfono… Cuando estoy con ella el tiempo pasa tan rápido que he comenzado a odiarlo y por ella sería capaz de cualquier cosa… solo por verla sonreír una vez más soy capaz de cualquier cosa incluso llevarme bien contigo- Quinn se encogió de hombros mientras Finn la miraba con atención

-Ella también está enamorada de ti… aunque no lo sepa…- argumento el castaño mientras bebía un poco del café que tenía frente a si

-Estas enloqueciendo Finn… para mí que lo que quieres es cumplir con la típica fantasía de todo chico: un trio y piensas que haciendo esto lo lograras… Déjame decirte algo… estas equivocado- contesta firmemente la rubia con un deje de enfado

-No… pareciera no me conocieras Quinn… pero como te lo he dicho muchas veces… Rachel y yo hemos intentado tantas veces casarnos y ninguna se ha logrado que comienzo a pensar que quizá no estamos tan destinados el uno para el otro… Además ella pasa últimamente muy pendiente de ti, estando conmigo de pronto se le va la noción y me llama por tu nombre… Hace mucho me pregunto algo que me hizo sentir incomodísimo… Me pregunto acerca de lo que se sentía besarte… Y te resultara depravado porque se supone que en este preciso momento debería advertirte que te alejaras de mi novia, pero no estoy enojado solo que pienso que con el trabajito que tengo tarde o temprano estas expuesto a la muerte y odio la idea de que Rachel quede sola-

-Estás loco… tu vivirás más que una tortuga, además tú y Rachel se casaran yo seré la dama de honor y le entregare el anillo con el que te prometa amor eterno… Así que en conclusión yo aquí solo soy la mejor amiga-

-Este es el trato… tu prometes cuidar de ella todos los días de tu vida y en el momento en que yo falte lucharas por llenar mi lugar en su corazón- la rubia lo miraba perpleja casi al borde de la exasperación por las peticiones tan ilógicas que le hacia su amigo –Vamos promételo…-

-Eso ha sido lo que he hecho desde hace mucho… la he cuidado por ti mientras no estas…-

-¿Entonces?-

-Lo prometo… pero si ella se enamorara de alguien más, también me haría a un lado para que fuese feliz-

-Parece que Finn supo que pasaría…- contesto la morena limpiándose un par de lagrimillas que amenazaban con desbordarse

-Siempre dijo que por mucho que me esforzara terminaríamos juntas…- susurro la rubia también un tanto triste

-No sé cómo debo sentirme en cuanto a ti…- argumento la morena mientras tomaba una de las manos de la rubia

-¿Qué te parece si lo descubrimos juntas? Sera como esa leyenda urbana de los pos noviazgo… Ya sabes citas, regalos y detalles… Las cosas se irán dando- propone una Quinn sonriente mientras le regala un apretoncito a las manos de Rachel

-Pero aun así te quedaras a dormir ¿verdad?-

-Lo prometí… no hay solución…- entonces la morena se acerca a la rubia y la besa cortamente

-Hora de dormir- susurra Rachel mientras jala consigo a la rubia para ir a la habitacion

Owwww que lindoooooo.....! primero se arreglan las Faberry y despues las Brittana siiii! :) Quinn por Dios es mi ejemplo a seguir! el 35% de el campus universitario?

Awww.....que tierno y comprensivo resulto Finn (a pesar de que su participacion en la serie me es indiferente), por cierto el capitulo te ha quedado sorprendente y con el titulo PERFECCION TOTAL.....jejeje, mi lado mal pensado me hace imaginar todo tipo de situaciones entre lo que podria pasar entre Britt y San mientras la primera se ha encargado de cuidar de San luego de la fiesta...............ojala el momento sirva para que al menos hablen tranquilamente si ?, espero ansiosamente un nuevo capitulo

Saludos, hasta la proxima actualizacion

parece que las faberry ya se arreglaron espero y todo marche bien!! ahora solo queda ver como las brittana se arreglan si es que lo hacen xD..

Por cierto a lo que preguntaste creo que lo mas fácil es que pongas la segunda parte aquí mismo o no? bueno al final lo harás como mejor te parezca, el chiste es que lo pongas jejeje.. nos vemos chao

Bueno chicas, este es ese capítulo que todas esperaron… El capítulo por el que me siguieron… Y por el que me dejaran de seguir en cada actualización o quizá esperen con más ansias la siguiente actualización este es el penúltimo capítulo… No puedo creer lo mala que soy, pero sé que vale la pena… En tanto… Disfruten…
Como siempre las quiero mil… Son las mejores lectoras del universo y espero que les agrade lo que les he escrito

AVISO: Contiene muchas escenas explicitas sexuales...


Brittany subió al automóvil después de que Quinn desapareciera del estacionamiento, Santana parecía especialmente parlanchina en ese momento… Aunque no lograba comprender del todo lo que dijera y las pocas veces que se dirigía a ella solo le contestaba con monosílabos para evitarse una pelea… Ya había peleado mucho con ella por esa noche, había sido toda una guerra convencerla de que fuese ella quien la llevara de vuelta al hotel y ahora estaba en la parte trasera de su vehículo recostada sobre el vidrio de la puerta.

-Te has divertido mucho esta noche ¿eh?- comento animada la rubia mientras arrancaba el automóvil, la latina no respondió y solo le lanzo una mirada fulminante –A… vamos San… deja esos pucheros infantiles mira que Quinn tenía que cuidar de Rachel y haberla dejado que cuidara de ti también hubiera sido injusto… Además yo soy la madrina debo cuidar de la novia…- el resto del camino fue silencioso, solo de vez en cuando la rubia echaba un vistazo a la latina por el espejo retrovisor.

-¡Llegamos!-

-Manejas peor que una tortuga… pensé que llegaríamos hasta después de mi boda- contesto la morena de mala gana mientras abría la puerta e intentaba salir del vehículo. Pero cuando el aire le pego de lleno en la cara, se sintió incapaz de mantenerse en pie. Brittany que en ese momento ya había bajado de su automóvil, corrió a ayudarla y la abrazo por la cintura evitando que cayera de bruces al suelo.

-Anda parece que no puedes sostenerte por ti misma… ¿Qué tanto te embutiste Santana?- pregunto preocupada la rubia mientras cerraba la puerta de la parte en que iba la latina

-¿Qué te importa?- contesto enfadada la latina mientras se jaloneaba e intentaba soltarse del agarre de la rubia

-Vaya que el alcohol ya no te pone de buenas como lo hacía en la secundaria…- la latina por fin se había librado de aquel agarre e intento por segunda ocasión caminar por si misma pero de nuevo las piernas le flaquearon y otra vez la rubia la salvo de una caída inminente. Entonces Brittany suspiro, cogió a Santana por las piernas y la espalda y cargo con ella, cual bebe.

- Anda… bájame… no te necesito cargándome-

-Calla que levantaras a todos mis vecinos…-

-¿Eh?... Espera este no es mi hotel… Me has traído a tu departamento… No seas descarada tu noviecita ha de estar esperándote y tú me has traído aquí…- Santana pataleaba cual niña pequeña pero lo único que lograba era que la rubia la sostuviera más fuerte, al final se dio por vencida y dejo caer todo su peso sobre los brazos de la rubia que no parecía sentir cansancio

-¿Qué eres tu una especie de Super-Man?- pregunto con desdén la latina mientras salían del ascensor y la rubia seguía llevándola en brazos

-He cargado chicas con casi el doble de mi peso… tú no eres ningún problema para mí- contesto sonriente la rubia mientras caminaba el largo pasillo que las llevaba hasta su departamento

-Eh, que tu edificio es muy lindo… Parece que ya te puedes pagar algo mejor que un departamento de seis metros cuadrados- susurro la latina a medida que la rubia detenía su paso hasta detenerse frente a una puerta con el numero 34

-Te quedas aquí esta noche y en cuanto amanezca si así lo deseas voy a dejarte a tu hotel… Pero en tu situación me preocuparía dejarte sola allí en el hotel… Aquí en cambio te puedo cuidar toda la noche- comento la rubia mientras ponía el cuerpo de Santana sobre un sofá

-Da lo mismo… Al parecer para ti y Quinn sigo siendo una niñita que necesita la cuiden… Ya casi me caso… ¿Sabes qué es eso?... Soy mayorcita para cuidar de mí y de otra persona- las palabras de Santana provocaron que la rubia hiciera una mueca como de dolor

-Vale… ya he entendido pero sigues siendo mi mejor amiga… Tengo que cuidar de ti…- la rubia se encoje de hombros y se esfuma detrás de la puerta de la cocina, de donde minutos después sale con un par de botellas y un pequeño frasco blanco de platico

-¿Y ahora harás la misma escena que Maribel cada que volvíamos de fiesta?- reprocho la morena mientras la rubia se sentaba en una orilla que quedaba libre del sofá

-Vamos esto es el mejor remedio… Te has bebido casi cuatro botellas de whisky tu sola…- comento la rubia mientras le entregaba dos píldoras blancas a la morena, quien solo se encogió de hombros y se las trago de un solo mientras la rubia le destapaba la botella de agua y se la entregaba de inmediato

-Gracias…- susurro Santana mientras le devolvía la botella de agua

-No hay de que…- contesto la rubia mientras tomaba de la mesa de centro algo que parecía ropa –Toma póntelo dormirás más cómoda… Yo iré a revisar que Masha haiga sacado a Lord T. Junior- la rubia dejo a Santana sola en la sala mientras desapareció por un pasillo que abarcaba gran parte del lugar. Cuando volvió la morena ya vestía una camiseta con un “JUILLIARD 2012 SCHOOL” estampado en el pecho y un short color blanco.

-Tu ropa aun me queda…- dijo la morena un tanto avergonzada mientras modelaba la ropa que llevaba puesta

-Si… definitivamente… Te queda mejor que a Masha- elogio Brittany sonriente, pero Santana no devolvió el gesto

-Masha aquí…Masha allá… Masha esto… Masha aquello… ¡Ya Brittany! ¡Basta de esa estúpida castaña!... No puedes solo estar cinco… ¡cinco malditos minutos conmigo sin mencionar su nombre!- Brittany estaba segura de que esa ya no era Santana sino Snixx –Estoy cansada… Cansada de verte feliz con ella y de…- la rubia había acortado de pronto la distancia que las separaba y la había callado con un beso urgido.

Santana se jaloneaba, pero la rubia la agarro con firmeza encajando sus dedos en los brazos de la morena sin darse cuenta en ese momento de si le hacía daño o no… Lo único que le importaba a Brittany era besar a la morena. Pero Santana pudo zafarse del agarre y empujo a la rubia alejándola; la miro un par de segundos y justo después la acerco jalándola de una muñeca, la rubia llevo sus manos al rostro de la morena tomándolo entre sus manos con un poco de rudeza y ternura impregnados en ese roce. Santana se separó para respirar un poco y después de un par de segundos la rubia ataco los labios de la morena quien correspondió sin chistar el gesto. La rubia mordió los labios de Santana con un toque de rabia impregnada en la acción, entonces Santana envolvió la cintura de Brittany con sus manos y la apretó contra si con fuerza. La rubia dio un paso hacia delante provocando que cayeran sobre la alfombra de la sala, sin embargo la caída no fue suficiente para que rompieran el beso. La latina puso sus piernas alrededor de la rubia abrazándola, Brittany tomo las manos de la morena y las puso por encima de la cabeza de la susodicha. La agresividad era la dinamita que hacia estallar toda esa situación.

La rubia empujo su cuerpo contra el de la morena provocando en la segunda que el estómago le saltara, la morena sintió una calidez entre sus piernas e instintivamente levanto sus caderas correspondiendo el movimiento de Brittany. Santana mordió el cuello de la rubia de una manera que le dejaría una marca demasiado notable, Brittany soltó a la latina y su mano emprendió la retirada hasta instalarse sobre el seno izquierdo de la morena; lo presiono intensamente y la latina dejo escapar un gemido de entre sus labios. La morena empujo con fuerza a la rubia con fuerza hasta tirarla a un lado de ella, se subió sobre su pecho y le levanto la blusa, beso y mordió el abdomen terso y blanquecino de la joven bailarina que se retorcía de puro gusto debajo de la piel morena, en tanto Brittany dejaba escapar un quejido pero no detuvo a la morena aun cuando parecía que la lastimaba.

La rubia jalo por los hombros a la morena; enredo sus dedos entre el cabello negro y sedoso y regreso sus labios a los labios de la latina, con su mano izquierda recorría toda la piel canela mientras que con la derecha evitaba que se alejara de ella. Santana coloco su pierna izquierda entre las de ella y la empuje contra su cuerpo; provocando que Brittany gimiera e imitara el movimiento que Santana minutos antes había hecho con su cadera. Los labios rosados de Brittany se desviaron hacia la oreja de la latina y la mordisqueo de una manera menos agresiva, la respiración de la morena se aceleró al igual que el movimiento de los cuerpos de ambas chicas. La mano derecha de la morena pudo de estar sobre la alfombra a encontrar el mismo calor pero bajo la blusa de la rubia justo sobre su seno, la rubia tembló ante el contacto y Santana pudo sentir su pezón rígido entre sus dedos. El camino seguido por la mano de la rubia finalmente llego hasta entre las piernas de la latina y entre los cuerpos de ambas. Brittany oprimió la intimidad de la latina causándole un gran placer que hacía años no había sentido, Santana se estaba volviendo loca ante la necesidad de tenerla, de hacerla suya, de sentirla dentro de sí.

Brittany se levantó del suelo y tomo la mano de la morena. Santana sabía perfectamente a donde se dirigían, caminaron hasta el inicio de aquel zendo pasillo que guiaba hasta la habitación de la rubia y mientras llegaban a la habitación la pasión y el deseo aumentaron. Justo al lado de lo que parecía un archivero, Santana beso con intensidad a Brittany mientras ponía sus manos debajo de su cintura y la cargo colocándola contra la pared en tanto volvía a aquel vaivén que habían mantenido durante su encuentro en la sala. La morena soltó a la bailarina y esta apresurada desabrocho los botones del vestido que llevaba puesto la morena. Siguieron su camino hacia la habitación sin dejar de besarse, al llegar a esta Santana empujo rápidamente un par de cosas que habían sobre la cama. Brittany jalo a la morena y de nuevo sus labios se juntaron, cayeron sobre la cama eliminando por completo cualquier espacio que pudiese haber entre ellas, la rubia se levantó y de un tirón saco por completo el vestido de la latina; para después despojarse del suyo también. La rubia se posó sobre Santana y la miro directo a los ojos, la latina supo precisamente en ese instante que ya no había marcha atrás que en ese momento era tan de Brittany como lo había sido desde el primer día en que la había conocido… aunque se negara a aceptarlo. Por alguna razón el coraje en Santana no desaparecía y se acrecentó aún más, clavo sus uñas en la espalda nívea y Brittany apretó fuertemente los ojos tratando de aguantar el dolor; la latina volvió a empujarla fuertemente y forcejearon has que de nuevo las manos de Santana se vieron encerradas por las de la morena mientras las hundía en la cama por encima de la cabeza de la latina.

-¡Basta!- dijo Brittany apretando los dientes, pero Santana no respondió y dejo que le mordiera el hombro.

La mano nívea se escabullo por debajo de la ropa interior de la morena. Santana había perdido el interés en seguir luchando en contra de sus sentimientos y decidió buscar la mirada celeste de su acompañante cuando fue capaz de establecer contacto con esta lo que pudo ver en ellos era una mezcla extraña de deseo, amor y también miedo… pensó que quizá era lo mismo que los suyos proyectaban y ya que la rubia soltó sus manos, llevo de nuevo sus manos al pecho de la rubia mientras le quitaba el sostén, en tanto enredaba sus piernas alrededor de la cintura de Brittany y la apretaba contra su cuerpo. La rubia besaba el cuello de la morena mientras lidiaba con el sostén de la latina. Las manos morenas recorrieron cada centímetro de la perfecta anatomía de la rubia, acariciando las piernas que habían a sus costados mientras besaba la mandíbula de la rubia deslizándose suavemente hacia el sur mientras tanto Brittany se dejaba llevar por la boca de la morena. Ambas jugaban a seducirse mutuamente.

Santana tomo los hombros desnudos de la rubia y la atrajo hacia si, después la beso con necesidad se separaron un poco y la latina aprovecho para acariciar el brazo de la rubia mientras lo atraía hasta su boca, depositando besos a todo lo largo y al llegar a los delgados dedos de la rubia, los lamio excitando a la bailarina más de lo que ya estaba, si eso era posible. Brittany ataco de nuevo los labios de la latina, pero esta vez fue de una forma más amable y sin una pizca de sadismo en ello, entonces el vaivén de caderas comenzó de nueva cuenta y las respiraciones se convirtieron en pequeños gemidos, Santana se dio vuelta quedando encima de Brittany.

-San… yo…-

-No importa…- contesto Santana mientras ponía uno de sus dedos sobre los labios de la rubia. La morena despojo a la rubia de la única prenda que la cubría de la total desnudez, después Santana emprendió la retirada desde sus labios, pasando por su cuello, sus senos, su abdomen y llego al fin a las largas y bien torneadas piernas de la bailarina. La morena se entretuvo en acariciar y besar la piel de los muslos de la rubia y con sus manos separo sus rodillas. Creo un camino de besos hasta llegar a su sexo, donde se embriago de aquel olor, de aquella pasión y tacto que conocía tan bien que hubiera sido capaz de llegar a ellos con los ojos vendados. La legua de Santana cruzo la intimidad de la rubia separando los pliegues de su piel, en tanto Brittany se aferraba a las sabanas y emitía gemidos cada vez más fuertes. La rubia enredo sus dedos entre el cabello de la latina y la atrajo así apretándola contra su piel tersa y húmeda; para después volverla a atraer a sus labios.

-Solo hazlo y deja de jugar- pidió en un susurro la rubia

-Shh- contesto Santana poniendo un dedo sobre los labios de la rubia, en tanto adentraba su mano izquierda en la rubia; justo después comenzó a deslizarse hacia dentro y hacia afuera.

-¡San!- gimió la rubia mientras apretaba sus puños alrededor de las sabanas, luego el entrar y salir de la morena se hizo cada vez más rápido y la espalda de la rubia se arqueo mientras con sus manos se aferraba a la espalda de la latina. Hubo un instante en el que pareció que el aire se había ido por completo del interior de la rubia y justo después volvió a la vida con un gemido largo y profundo; entonces Santana se dejó caer sobre la rubia agitada y cansada… el sueño no tardó mucho en atacarlas y en silencio quedaron entrelazadas cubiertas solo por la oscuridad de la habitación y aquel aroma a amor que acababan de destilar.

La luz golpeaba de lleno el rostro de la bailarina, abrió los ojos lentamente y se cubrió de la luz solar con una mano. De pronto el montón de imágenes de lo que había ocurrido la noche anterior se agolparon en su interior y comenzó a mover su mano tentando el otro lado de la cama… pero esta estaba vacía. Se levantó de un salto y miro el tiradero de cojines y sabanas que seguramente habían hecho la noche anterior también en el suelo pudo ver un brassiere que supuso seria de la latina… Salió de la habitación pensando que quizá Santana estaría en el cocina preparándole algo de desayunar como en los viejos tiempos… Pero tampoco estaba allí… Frustrada Brittany se dejó caer sobre un sofá y justo entonces vio una nota pegada a la contestadora que descansaba en un buró de la sala.

La boda será dentro de cuatro días… Tú y Quinn tendrán que llegar un día antes… Hasta entonces

' ¡Madre mia! ¡Pero que capitulo!... Santo Dios, haber, haber por donde empiezo... ok antes que nada no tienes idea de cuanto lamento haberme perdido 4930253 capitulos... jjaja ok no tantos, pero si fueron bastantes..:( me los eh leído todos en este rato, me duelen los ojos ya pero ahh no podia despegarme.. ¡me encanta tu fic! Desde que iniciaste y estabas dudosa se seguirlo, pff yo me declaro enamorada de el... jajaa..

Bueno .. lo de las faberry es lindo, me parecen una pareja de lo mas tierno que al parecer ya todo mejor ¿Cierto?... Solo faltan las otras dos aunque vamos... Te has lucido con este capi, me ah encantado, ah sido todo tan, pues tan explicito jajaja que Dios! chica seguro te acaloraste cuando lo escribias.. jaja ok ya has como que no dije eso... pero bueno que todo iba perfecto, si iba.. por que o sea ¡Que jodidos tiene Santana en la cabeza!

Estuvieron juntas y... e_e o sea.. se va ¿Asi? hay nooo... Que la rubia haga algoo que no se case, que no se case... Ahora ¿Como que ya casi se termina?... No me digas esoooo... ¿Haras otra parte?...xD Bueno mas te vale, acá espero, ya no me iré lo prometo, estaré super pendiente de la actu jajaa..

Bueno chica besos y por lo que percibo ya estas mas tranquililla que te lees mas animada, eso es grandioso.. Que estés muy bien.. ¡Hasta luego!..

queeeeee como que en 4 días!!!! :'(:

sii es todo lo que una esperaba ese momento!! muy a lo salvaje jajaja... estuvo excelente.. hay amo tu fic enserio!! me encanto pff!!

ok lo único que no me gusto es que santana se haya ido y la boda sea en 4 días porque?? en serio se va a casar? yo que britt no me presento a esa boda ¬¬ ...

actualiza pronto por favor!! xD