Re: Fanfic Pezberry "Got To Get You Into My Life " Capitulo 12: Confessions ACTUALIZACION! 01/07/14

por **RiveraMyLove** Jue Sep 19, 2013 12:51 pm

¡Me gustó mucho el capítulo!
Estas dos son tal para cual, sin duda, ¡seguí!

por **Twinkle Dani** Sáb Sep 21, 2013 2:00 am

Hasta que consigo tiempo para leer :)
Me moria por saber como continuaba, esta historia me tiene enganchadisima! Me encanta esa cancion, ojala la cantaran ellas en la serie xD
Ademas que su amistad esta super linda.

Bueno Julieta te quedo increible como siempre *-*
Nos vemos en la peroxima actu, un beso!

por Maira_Faberrytana Sáb Oct 05, 2013 10:56 pm

siguelo por favor

por **Julietta St. James** Jue Ene 02, 2014 8:59 pm

Capitulo 6: Too Close.

Como se suponía, Santana Lopez pasó la noche en la casa de Rachel Berry. Hasta el momento todo había ido muy bien, mas que bien. Cantaron unas 10 canciones en karaoke, bailotearon por todo el lugar, y la latina descubrió que, ciertamente, tenía muchas cosas en común con Rachel. No fue difícil que ambas hablaran sin parar por casi dos horas y media, y en realidad fue inevitable que terminaran partiéndose de risa en medio del sótano, en más de una ocasión. Según Santana, Rachel sabía apreciar su humor, entendía lo que quería decir, y lo complementaba con sus propios comentarios; la diva era casi tan sarcástica como ella, tal vez en una forma inocente, pero era divertida. Pasar el tiempo con el “Hobbit” resultaba más relajante que pasar tiempo con Brittany; No era como sí Santana lo hubiera aceptado, pero Britts podía ser algo distraída, y eso arruinaba muchas cosas; Por supuesto, Santana amaba a Brittany de esa forma y no quería que cambiara, solo admitía que Rachel hacia las cosas mas sencillas, porque ella no necesitaba que Santana le explicara cada simple detalle.

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Eran pasadas de las doce de la noche, y Rachel parecía inexplicablemente extasiada, porque ambas podían quedarse despiertas hasta muy tarde ya que al día siguiente no tendría clases; “Incluso podríamos no dormir en absoluto” canturreo, como si se tratara del más grande acontecimiento; Santana puso los ojos en blanco, porque honestamente era algo estúpido, pero pensó que la actitud de la diva ante el asunto, era adorable.

-Sí queremos tener una noche de chicas perfecta, tenemos que ver Funny Girl- dijo Rachel después de un rato, mientras rebuscaba dentro de un cajón.

Las cejas de Santana se arquearon en confusión. – ¿Es eso un reality show de modelos?- pregunto distraídamente. Pero la mirada mortal que Rachel le hecho segundos después atrajo su completa atención.

-¡¿Reality show de modelos?! ¡Que sucede contigo, Santana! Funny Girl es la película más perfecta en el mundo entero, además de ser mi película favorita. Barbra Streisand es la protagonista, y todo el mundo sabe que ella es la persona más talentosa sobre la tierra-

-Bueno, jamás oí de la película; Además el Yentl no me agrada, y la película, ni siquiera suena interesante… Podríamos mirar algo más… dinámico, supongo, algo como Rápido y Furioso, sería más…-

-Veremos Funny Girl, Santana- sentencio la diva con determinación. -Es mi película favorita, y quiero compartirla contigo; Es una película hermosa y muy divertida… Así que la veremos-

La latina hizo una mueca, pero no quiso protestar ni un poco más, no tenía caso; Decirle que no a Rachel se había vuelto prácticamente imposible, y verla sonreír suponía algo más gratificante que mantener un estúpido argumento con ella. Así que, después de que Rachel trajera un bowl con palomitas de maíz y un par de sodas, ambas se sentaron en el sillón y vieron correr la película.

Después de todo, Santana no puso mucha atención en la película; Se sentía idiota confesándolo, pero contemplar la forma en que Rachel veía Funny Girl, era mejor que ver la misma película. La diva sabía cada uno de los diálogos y cada una de las canciones, las cuales canto en voz media sin problemas. Y Santana pensó que era una tontería que Rachel hubiera llorado, tomando en cuenta el sin fin de veces que había visto la película. –Tan conmovedor como siempre- murmuro limpiado las lágrimas de sus ojos.

Pero Santana se había enfocado en detalles más específicos, no sabia porque, pero le resulto dulce la forma en que Rachel repetía los diálogos de Barbra Streisand como si ella misma estuviera dentro de la pantalla, con tanta pasión y dedicación, que parecía que su único deseo era formar parte de esa película; o como se mordía el labio inferior de forma incesante cuando algo malo iba a pasar; o como cantaba cada canción con mas empeño que la anterior; como representaba cada gesto y movimiento de forma precisa en tiempo exacto; e incluso, tal vez, la forma en que las lagrimas llenaron sus ojos chocolate, haciéndolos mas brillantes e hipnotizantes al final de la película. Era agradable y muy entretenido mirarla, memorizar cada cosa que la diva hacia mientras miraba su película favorita, era mas interesante de lo que se podía creer; Santana supo que poco a poco conocía mas de ella, y se sintió orgullosa de eso.

-Te molestaría mirar el contenido especial- susurro Rachel, casi avergonzada, interrumpiendo los pensamientos de la latina.

Santana suspiro con pesadez, no quería mirar otra media hora de material extra, en donde, seguramente, Barbra Streisand aparecería en un sinfín de entrevistas, o en donde, tal vez, habrían mas números musicales sin sentido, la latina pensó que una mejor forma de desperdiciar ese tiempo era mientras ambas hablaban y reían; Pero Rachel tenia esta mirada suplicante, sus ojos lucían mas enormes de lo normal, y el marrón de sus pupilas brillaba aun debajo de las luces apagadas, así que Santana no pudo decir que no. Otra vez.

-No hay problema- murmuro poco convencida con una débil sonrisa, y se dijo una buena amiga cedería de vez en cuando; Porque Rachel y ella eran buenas amigas ahora ¿Cierto?. Además, eso le daba la oportunidad de mirar a hurtadillas a la diva por unos valiosos minutos.

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Era de esperarse, pero a Santana aun le resultaba muy gracioso ver que Rachel se había quedado totalmente dormida mientras el contenido especial pasaba en la televisión. Había observado hasta el ultimo momento la forma en que el sueño abordo la diva; como cabeceaba a su lado, con la esperanza de mantenerse despierta y como sus ojos se cerraban involuntariamente rechazando el empeño que ella ponía en mantenerlos abiertos. Santana soltó una leve carcajada cuando Rachel sucumbió y callo en un profundo sueño. Sin embargo, la latina estaba un poco confundida, porque la cabeza de la diva reposaba suavemente sobre su hombro, y esto, dificultaba su concentración propia. Sentía como la respiración cálida y calmada de Rachel corría por su propio cuerpo, y eso hizo que se estremeciera un poco. Pero la sensación que le trajo aspirar el fresco olor a manzanas que el cabello desordenado de la diva emanaba fue completamente distinta; fue demasiado agradable, fue muy relajante. Así que la latina no se movió, por el contrario mantuvo firmemente la cara tibia y sonrosada de la diva sobre su hombro y, mientras se recargaba en la parte trasera del sillón, se quedo mirándola atentamente atreves de sus obscuros ojos, con el propósito de grabar en su mente cada simple detalle de aquel rostro; No se sentía cansada, pero tener a la diva reposando cómodamente en su hombro la empujo a un punto de ensueño inexplicable y encantador. Finalmente, cuando sus ojos se medio saciaron del rostro que estaba a su lado, el sueño la venció.

Ambas se quedaron dormidas al lado de la otra. Y sin saberlo, compartían un sueño sobre cierto beso en una noche de fiesta.

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Un cálido rayo de sol golpeo su cara, provocando que se despertara en sobre salto. Santana se sentía desorientada ¿Qué era lo que exactamente había pasado? ¡¿Y en donde diablos estaba?! Miro a su alrededor; Estaba medio sentada en un sillón, dentro de un sótano. Mágicamente recordó, con cierta tranquilidad, que estaba en casa de Rachel Berry, su nueva amiga; Se asusto un poco, porque honestamente, la oración completa era perturbadora, pero sonaba bien en las profundidades de su mente, y ella lo sabia.

Sin embargo, le tomo unos segundo darse cuenta de que algo estaba mal… Rachel no estaba en donde la había dejado esa noche; Su cabeza no estaba acogedoramente a su lado, y, según comprobó, tampoco su presencia estaba a lo largo de sótano.

La latina se incorporo lentamente, estiro sus músculos y dio otra mirada alrededor. Estaba completamente sola, y en la casa entera reinaba el silencio. Supuso que tal vez Rachel se había ido dormir a su habitación a la mitad de la noche; Después de todo era su casa, y recargada en su hombro no podía estar muy cómoda. No importaba en donde estuviera, aunque era un poco decepcionante saber que no habían pasado la noche entera juntas; Como fuera, la buscaría para despedirse, y todo este asunto de “Pasar Mucho Tiempo Con El Hobbit” terminaría.

Se puso de pie, y tan pronto como esto paso sintió una incomoda presión, ciertamente dolorosa, en su abdomen bajo; Bueno, tantas sodas habían hecho efecto, le aviso su vejiga llena. Realmente necesitaba ir al baño. Tal vez lo mejor que podía hacer era ir al baño, despedirse de Rachel y después irse. Sí, ir al baño tenia que ser lo primero.

Subió las escaleras del sótano, y de nuevo, percibió el singular y continuo silencio; se dirigió al baño, sabía donde estaba, había acompañado a Brittany la noche de la fiesta. Sin pensarlo mucho, supuso que en una emergencia como aquella no tenia que pedir permiso a Rachel para entrar, y mucho menos cuando ella estaba plácidamente dormida. Jadeando se postro sobre la puerta prácticamente cerrada del baño y la empujo con desesperación. Estaba desabotonando sus pantalones, cuando escucho que alguien gritaba, así que se detuvo en seco.

Levanto la mirada apresuradamente y exactamente ahí, enfrente de ella, estaba Rachel; Pero totalmente desnuda.

Joder, Rachel Berry estaba parada ahí, completamente desnuda, algunas gotas de agua escurrían a lo largo de su cuerpo y una toalla colgaba de una de sus manos. Tenía esta mirada de impresión en su rostro y sus ojos estaban abiertos al máximo.

-¡SANTANA!- chillo la diva.

La latina se dio la vuelta, olvidándose por completo de sus pantalones desabotonados. Sin embargo, pudo sentir que una sonrisa maligna crecía por su rostro, mientras recreaba el cuerpo desnudo de Rachel Berry en su mente. No pudo evitarlo, pero en esos segundos en que sus ojos habían visto el cuerpo de Rachel, había visto y memorizado cada parte; Y tenia que admitirlo, lo que había visto la había dejado jodidamente impresionada.

-¡¿Has oído algo sobre tocar la puerta?! ¡Estas en mi casa y…! ¡Oh Dios!- espeto Rachel, embarazosamente, envuelta en movimientos frenéticos.

Asumiendo que estaba cubierta, Santana se dio la vuelta. –Lo... Lo siento; Pero la puerta estaba entre abierta, y realmente necesitaba ir al baño, yo creí que no había…-

-¡NO ME HE CUBIERTO!- Interrumpió Rachel desesperada; La latina se dio la vuelta otra vez, mientras cerraba los ojos y contenía un sonrisa. Comprendió que se lo estaba tomando muy entretenidamente, y eso no estaba bien, pero no podía detener el sentimiento. Rachel se lo estaba tomando gravemente, y eso por alguna razón, era muy divertido.

-No puedo creer que simplemente hayas entrado aquí- reprocho Rachel a sus espaldas.

Santana soltó una carcajada inevitablemente. –Y yo no puedo creer que dejes la puerta abierta mientras te baños…- tercio la latino.

Rachel soltó un bufido. -¡Es mi casa! Es el tipo de cosas que hago sin preocuparme- dijo notoriamente apenada.

-De acuerdo, de acuerdo; Realmente lo siento ¿Sí? Tenia que ir al baño… Y… Y…- rio de nuevo, ante el recuerdo. –Escucha, no tienes que estar apenada; Sabía que estabas en forma y todo eso… Pero ¡Diablos! Ese cuerpo…-

-¡VETE DE AQUÍ!- espeto Rachel con decisión; Y la latina sintió una par de manos firmes en su espalda empujándola completamente fuera del baño hacia el pasillo. – ¡DEJA DE REIRTE! ¡Y LÁRGATE AHORA MISMO!- Termino la diva, antes de que la puerta del baño se cerrara a las espaldas de Santana. Esta, se encontró completamente sola en el pasillo, y antes de pensarlo dos veces, tomo sus cosas de la sala y salió de la casa, con este extraño sentimiento de un placer lleno de culpabilidad.

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Hola :D Bueno, es un año nuevo, y pensé que continuar el Fanfic, de forma normal, seria buena idea. Tarde mucho en actualizar, lo se, pero mejor tarde que nunca… Como sea, si siguen leyéndome, dejen sus comentarios y opiniones C; Yo Los leo después, si ustedes quieren que siga actualizando; BYE! By: Julietta St. James :3

por **Twinkle Dani** Vie Ene 03, 2014 2:34 pm

Julieta actualizaste! *o*
Este es el único fanfic pezberry que e leído y enserio que me a hecho creerme a la pareja xD
Espero que lo sigas; cuando vi que habías actualizado me alegre mucho, quiero saber que pasa con ellas y si no se matan en el camino xD
Por cierto feliz año nuevo :D

por **Julietta St. James** Vie Ene 03, 2014 7:50 pm

Twinkle Dani escribió:Julieta actualizaste! *o*
Este es el único fanfic pezberry que e leído y enserio que me a hecho creerme a la pareja xD
Espero que lo sigas; cuando vi que habías actualizado me alegre mucho, quiero saber que pasa con ellas y si no se matan en el camino xD
Por cierto feliz año nuevo :D

Que bueno que te gusto :D Pronto veras lo que tengo preparado para ellas e intentere, como tu dices, que no se maten, aunque tal vez se dañan un poquito (;
GRACIAS & Muy feliz año nuevo para ti tambien C: Mi mejores deseos! Nos leemos después Dani :3

por **Julietta St. James** Mar Ene 21, 2014 7:45 pm

Capitulo 7: Make It Work

En vez de irse a su casa, Santana se sentó en la acera frente a la casa de la diva. Sentía esta extraña ola de calor, y su cara estaba totalmente roja; Todavía tenía unas ganas terribles de orinar, pero de pronto, en su mente, había algo más llamativo e interesante en que concentrarse. Joder pensó la latina; Rachel Berry tenia un cuerpo delicioso. Incluso poseía abdominales, y estaba completamente depilada ahí… abajo. Santana se mordió el labio fuertemente para reprimir una carcajada. -Diablos, Rachel es realmente sexy debajo de los suéteres de reno y las faldas plisadas- pensó.

Santana quería regresar a su casa, recostarse en su cama y pensar en el cuerpo aparentemente perfecto de Rachel, pero una parte de ella no soportaba la culpa; Quería hacer lo correcto. Berry era sensible y recordando lo apenada y molesta que se veía antes de que se fuera, la latina supo que no era un asunto del cual burlarse, o del cual sacar provecho. Si quería mantener a su nueva amiga, tenia que hacer las cosas bien. Así que antes de poder detenerse, estaba tocando la puerta de los Berry.

-¡Rachel!- exclamó mientras tocaba con más fuerza; después de unos minutos, la diva apareció. Su mirada asesina perforo a Santana de inmediato, y el tono agresivo de su voz al hablar fue, ciertamente, inesperado. Por lo menos ahora estaba vestida. Unos pantalones cortos, muy cortos, una camiseta, sus sandalias, y su asombroso cabello castaño, aun mojado, cayendo alrededor de su rostro; Y eso era todo. La latina pensó que no estaba cubierta de forma suficiente.

-¡TE DIJE QUE TE LARGARAS, SANTANA!-

-Vamos, Rachel- dijo la latina calmadamente; Entrado, sin permiso alguno, a la casa. Rachel soltó un bufido, fastidiada. -No tienes que estar molesta por esto. No es tan terrible. Además, ya te pedí disculpas- dijo la latina en un intento de calmar a Rachel, pero esta se había dado la media vuelta y estaba subiendo las escaleras. -¡De acuerdo, de acuerdo! Si te hace sentir mejor, podría mostrarte mi cuerpo, así como tu me has mostrado, involuntariamente, el tuyo; Estaríamos a mano-

Sobre el decimo escalón, la pequeña figura de la diva se dio la vuelta, mostrando su cara contraída y roja de rabia. -¡NO ME VAS A MOSTRAR TU FORMA DESNUDA, SANTANA LOPEZ! ¡ESO NO ME HARA SENTIR MEJOR!- Rachel gritaba a todo pulmón y pequeñas descargas recorrían su cuerpo endurecido; De acuerdo, ahora, además de estar apenada, estaba jodidamente molesta. -¡SIMPLEMENTE VETE DE AQUI!-

La diva estaba apunto de correr escalera arriba, cuando la mano de Santana se enredó en su muñeca, la detuvo y comenzó a hablarle con los ojos obscuros mirándola de forma directa; Sin embargo la diva no quiso verla a la cara. – ¡Por favor, Rachel! No seas estúpida, no es para tanto. Creo que ahora somos amigas, y no quiero perder eso por un accidente sin sentido. No tienes que estar avergonzada ¿De acuerdo? No es el primer cuerpo femenino que veo, uno de los mejores, claramente; Porque, ¡Diablos!, tienes un cuerpo increíble y tu abdomen es…-

-¡Cállate!- grito Rachel, volteándose por fin para ver a la latina a los ojos; La chica estaba mas tranquila y había dejado su mirada asesina por completo. – ¡No digas cosas buenas sobre mi cuerpo desnudo! ¡Ni siquiera te atrevas a pensar en el de nuevo! ¡Dios! Me siento tan avergonzada- gimió la diva cubriendo su rostro.

Santana sintió pena por la chica. Vio como se soltaba de su muñeca y con la cara hundida se encaminaba al sillón. Pero aunque la latina se esforzó con todas sus fuerzas termino mirando las largas piernas de la diva y gracias a la reacción de sus senos ante el aire, Santana pensó que tal vez no se había vestido totalmente. Se mordió el labio una vez más. –No tienes que… No tienes que…- Y por alguna razón, Santana no pudo terminar la frase; Sus ojos seguían clavados a la altura del pecho de Rachel, y esta, con la cara roja, de pura vergüenza, doblo sus brazos frente de su pecho a la defensiva.

-¡Diablos, Santana! Quieres dejar de mirarme como una pervertida-

La latina sacudió la cabeza rápidamente. -¡Lo siento, en verdad! No tienes que estar avergonzada; En realidad no vi nada- Mintió. –Me di la vuelta de inmediato, te lo juro, no vi mucho-

-¡Carajo, Santana! ¡No me mientas! Acabas de decir que tengo un cuerpo increíble-

-Es porque lo tienes; Lo tienes incluso con ropa encima- dijo la latina apresuradamente; Pero un segundo después, supo que fue una mala idea. ¡Genial! Ahora Rachel sabría que pasaba mucho de su tiempo mirándole el trasero. -¡Te lo juro, no vi nada importante!-

Rachel levanto la cara lentamente y durante un rato evaluó la cara de Santana. –Se que me estas mintiendo…- Santana sacudió su cabeza apresuradamente, iba a negarlo, pero la diva no la dejo. -Lo estas inventando para hacerme sentir mejor- susurro tranquilamente. –Realmente aprecio tu esfuerzo- Dijo al final con una de esas sonrisas que se llevaban el corazón de Santana por un milisegundo.

-Así que… ¿Estas bien con ello? ¿Soportaras mi pervertida mirada?- dijo la latina alegremente, mientras, prácticamente saltaba al lado de Rachel.

-No, no estoy bien con ello; Con ninguna de esas cosas- Dijo la diva, tensándose levemente cuando sintió que Santana se sentaba a su lado. –Solo prométeme que no pensaras en mi cuerpo desnudo y que no me miraras así de nuevo, y yo misma hare que funcione-

-Te lo prometo, Berry- dijo Santana, sin pensarlo muy bien. A quien le importaba si la imagen desnuda de Rachel ya estaba en su mente para ese instante.

-De acuerdo- murmuro Rachel con una media sonrisa.

-Ok, si todo esta bien… ¿Puedo, finalmente ir a orinar?-

Rachel soltó una carcajada. –Supongo que sí- dijo encogiéndose de hombros, mientras la latina corría hacia el baño.

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-¿Sabes, Berry? La comida vegana no esta tan mal- dijo Satana mientras engullía con su tenedor un pedazo del pay de vegetales que Rachel había preparado.

La diva sonrió ampliamente desde el otro lado de la mesa. –Es bueno saber que te gusta- dijo; Y ágilmente le sirvió un vaso de jugo de naranja a la latina.

-Gracias- murmuró la latina y después tomó un sorbo del jugo natural. –No sabía que cocinabas- añadió mirando con suspicacia a la diva.

-No sabes mucho de mi- dijo Rachel poniendo los ojos en blanco. –Pero sí, cocino; Tomando en cuenta que soy la única vegana en esta casa, tuve que aprender-

-Supongo que le cocinabas mucho a Frankenteen- intuyo Santana como no queriendo.

-No, en realidad no- Rachel corto un poco de su pay y lo mastico pausadamente. –Los vegetales no son lo suyo; Y solía olvidar continuamente que yo era vegana- La diva negó con la cabeza ligeramente molesta.

Santana rio levemente. –Buena decisión para enamorarte- dijo con una superioridad recriminatoria.

-Aunque lo dudes, es un buen chico- Santana contuvo una carcajada burlona antes de que Rachel continuara con determinación. -Además, no puedes criticarme, porque Brittany es tan mala opción como lo es Finn-

La latina dejo de reír en cuanto el nombre de aquella rubia se hizo presente, y casi se atraganto con el jugo. –Lo siento, no quise decir eso- dijo Rachel apenada, al ver la reacción de la morena.

Santana bajo la mirada, suspiro y después de unos segundos en silencio se enderezo para mirar directamente a la diva. –No tienes que disculparte; Tienes razón. Brittany quería tener una relación segura, y yo no pude dársela; Es por eso que me dejo por el idiota de las ruedas. Tal vez ella nunca me amo de verdad; Por lo menos nunca se enamoro de mí-

Rachel aparto la mirada incómodamente. –Si es el momento de ser honestas, tengo que decir que Finn no es una buena opción en absoluto. Él simplemente me quiere cuando no tiene a Quinn. Soy su premio de consolación, y él ni siquiera sabe valorar eso-

Se quedaron en silencio durante un buen rato, ninguna de las dos quiso hablar al respecto; Solo se escuchaba el sonido de sus tenedores chocando con los platos y de un momento a otro habían terminado su desayuno.

-Esto es una locura- espeto Santana molesta. Rachel le lanzo una mirada dudosa.

–Estamos enamoradas, somos devotas y somos suficientemente lindas; Mejor que cualquier opción que puedan tener. Es una locura que esos dos idiotas no valoren eso. Y ¿Sabes que es mas ilógico?-

Rachel puso una mueca. –Que sabemos eso pero aun así seguimos detrás de ellos-

-¡Diablos, Sí! Tal vez ame a Brittany, y tal vez ames a Finn, pero la realidad es que ninguno de los dos nos ama, no nos toman en cuenta, y ni siquiera nos merecen; Es tiempo de que lo aceptemos y lo dejemos ir-

Rachel suspiro y asintió lentamente. –Tienes razón-

-Y ¿Sabes que es lo mejor de hacer eso en este preciso momento, Rach?-

-¿Que nos tenemos la una a la otra para sobrellevarlo?- pregunto la diva encogiendo se de hombros.

Santana sonrió ampliamente y sus ojos se iluminaron discretamente. –Bueno, en parte sí- Sí, estamos juntas en esto pensó la latina con el corazón palpitante. –Pero, lo que quiero decir es que esta es la oportunidad indicada para armar nuestro dueto-

Rachel entorno los ojos sin comprender lo que la latina quería decir. –No veo la relación entre una cosa y otra-

Santana puso los ojos en blanco antes de explicar su punto. –Escucha, estamos despechadas y queremos decirles a esos idiotas que no estaremos detrás de ellos nunca más; Queremos olvidarlos. ¿Qué haces cuando quieres explicarle a alguien algo tan complejo?-

-Lo cantas- Rachel prácticamente grito la obvia respuesta con emoción.

-Eso es, Berry- confirmo Santana con una amplia y malévola sonrisa.

-Creo que tenemos la canción perfecta ¿Cierto?-

Santana rio con entusiasmo compartiendo una mirada cómplice con la otra chica.

–Totalmente- coincidió con un guiño de ojo.

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-¿No te parece extraño que hayamos pensado en la misma canción?- pregunto Rachel con el ceño fruncido. Ambas habían ensayado la canción que habían elegido por un largo rato y ahora se encontraban sentadas en medio de la sala de los Berry.

-No; Por dos razones simples: Primero, es la canción perfecta para alguien despechado que esta apunto de dejar atrás una relación. Y segundo, he llorado en frente de ti; Deje al aire mis sentimientos; Te vi desnuda; Nos hicimos amigas y todo eso en un fin de semana. Ya nada me resultara extraño, nunca-

Ambas comenzaron a reír, pero la suave carcajada de Rachel fue más llamativa. –Tal vez estas en lo correcto- dijo entre risas.

Santana sonrió levemente sin apartar sus ojos de Rachel; La castaña tenía esta hermosa risa que inmediatamente inundaba la habitación y se colaba por sus oídos de una forma relajante. La latina pensó que para ser la descripción de la risa de una amiga, estaba siendo muy profunda.

Entonces, interrumpiendo los pasivos pensamientos de ambas, un sonido repetitivo se escucho desde el bolso de la latina. Su teléfono. Santana contesto la llamada mientras se alejaba un poco hacia el corredor para hablar con más naturalidad.

Mientras tanto, Rachel miro continuamente la forma en que la chica al teléfono se paseaba alrededor de su casa mientras escuchaba lo que le decían al otro lado de la bocina; noto como se mordía el labio y lo extrañada que lucia ante la llamada, como si hubiera olvidado algo. Y al ver lo frágil, pequeña y llena de culpa que se veía la latina en ese momento, Rachel pensó cuan dulce era que una simple llamada le trajera esta reacción. Cuando Santana colgó el teléfono y se quedo parada en el pasillo, la diva reprimió el deseo de ponerse de pie tomar la mano de la latina y preguntarle si todo iba bien.

Cuando la latina estuvo de vuelta miro a Rachel con una sonrisa.

-¿Todo bien?- pregunto la diva, sin tomar su mano.

Santana asintió. –Era mi padre; Tengo… tengo que irme. He olvidado por completo que hoy es domingo; Algunos días a la semana voy al hospital donde trabaja mi papa y… bueno, paso tiempo con los niños en etapa terminal; Ya sabes, les leo historias y ese tipo de cosas- Su voz se había apagado y su mirada estaba perdida en el suelo.

Rachel se levanto lentamente y puso una mano sobre el hombro de Santana, esta salió del trance y la miro. En los labios de la diva se formo una sonrisa de pura admiración. –Eso es realmente lindo de tu parte, Santana-

-Supongo- dijo la morena encogiéndose de hombros. –Al principio, solía hacerlo junto con Brittany; Pero sucedió lo que sucedió y sin embargo no pude dejar de ir. Esos pequeños son increíbles; Realmente lo disfruto, aun haciendo yo sola-

La diva asintió con efusividad. –Los niños pequeños son encantadores; Debe de ser muy grafíticamente pasar tiempo con ellos-

-Lo es- dijo Santana con un leve suspiro; Segundos después esbozo una sonrisa que le llego hasta los ojos. -¿Sabes? Deberías venir conmigo;. Realmente ayudaría tenerte ahí; Quiero decir, si tú quieres. Los chicos te van a adorar… ¿Qué dices?-

-Por supuesto que sí, Tana. No tienes que preguntarlo dos veces- susurro la diva con una enorme sonrisa.

Santana se quedo totalmente helada. La forma en que Rachel la había llamado “Tana” por primera vez, fue simplemente demasiada información para procesar. Salió de sus labios suavemente en un tono tan cariñoso y abrazador que una corriente recorrió su espina dorsal, y llego a sus oídos melodiosa y agradablemente; De la misma forma en que las canciones de la diva lo hacían.

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Rachel se ofreció a conducir hasta el hospital, y rápidamente estaban aparcando en el lugar. -Ven; La habitación no esta muy lejos de aquí- indico Santana, cuando ambas estaban en el vestíbulo del hospital; Así que juntas se encaminaron a la sala.

Cuando llegaron Rachel comenzó a mirar a su alrededor. Era un cuarto bastante grande; Había unas veinte camas de metal, todas con sabanas infantiles, almohadas a juego, muñecos de felpa u otros juguetes, sueros y medicamentos al lado y un niñito encima vestido con una bata de hospital; Ninguno tenia mas de diez años. La mayoría de ellos sonrieron cuando sus ojos reconocieron a Santana; Sus caritas pálidas se iluminaron, y sus labios amoratados se curvaron en enormes sonrisas, algunos de ellos gritaron de pura emoción. Rachel sintió que el corazón se le derretía cuando vio que los pequeños también la recibían con una inocente y honesta sonrisa; Y que otros incluso le susurraban un –Hola-.

-¿Estas bien, Rach?- pregunto la latina; Y en ese instante Rachel se dio cuenta de que sus ojos estaban ligeramente humedecidos, de pura emoción positiva. La castaña asintió mientras secaba las lágrimas.

-Hola, Santy- dijo una vocecita detrás de ellas; Una pequeña de unos 6 años, jalaba la blusa de la latina para llamar su atención.

Santana sonrió ampliamente. –Hola, Emma- dijo suavemente, mientras la elevaba en sus brazos. -¿Cómo va todo, linda?-

-Bien; El doctor Miles dice que mis huesos están poniéndose fuertes y que podre derribar un oso pronto- respondió Emma con una sonrisa enorme.

-Esa es mi chica. Ahora, recuéstate, Em, quiero presentarte, presentarles a todos, a alguien- dijo Santana tomando la mano de la diva y acercándola a su lado. –Chicos, ella es Rachel Berry, es mí amiga y realmente tenia ganas de conocerlos así que se lo he permitido-

Rachel dio un paso hacia adelante y les sonrió a los niños. –Hola- murmuro tímidamente.

Un coro respondió con un: –Hola, Rachel Berry- bastante animado.

La diva rio sonoramente -Pueden llamarme Rachel o Rach; Así me llaman mis amigos ¿Cierto, San?- Santana asintió con una sonrisa. –Ahora, porque no me dicen su nombre para que estemos a mano- propuso. Y de esta forma todos los niños se presentaron con entusiasmo. Rachel hizo pequeños cumplidos a los niños, e incluso bromeo con ellos a lo largo de la presentación. Todos reían y parecía que realmente les agradaba la diva. Santana se quedo en el fondo, simplemente mirando la conexión instantánea; Tenía una sonrisa en el rostro y supo que había sido una buena idea traer a su amiga.

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-¡Cuéntanos una historia, Rach!- dijo un niño de enormes ojos azules. Al resto de los niños les agrado la idea y le suplicaron a Rachel con dulces miradas que lo hiciera.

-Vamos, Rach, un cuento- dijo Santana con la misma mirada suplicante de los demás.

La diva no era muy buena inventando historias, pero pensó que se las arreglaría de alguna forma. Además, no podía resistirse a todas esas hermosas miradas. –De acuerdo-

Los niños gritaron emocionados, y pronto todos ellos formaron un círculo alrededor de Rachel, dispuestos a escuchar. Ella comenzó: -En un bosque encantado, dentro de una enorme torre, vivía una chica, ciertamente, atemorizada. Ella había pasado toda su vida encerrada, y no podía salir da ahí, porque un terrible dragón custodiaba la torre y se encargaba de asustar y atormentar a la chica-

-¿La chica es una princesa?- pregunto Emma. Rachel sonrió y negó levemente con una cabeza.

-Sí- contesto Santana, ignorando lo que Rachel tenía que decir. –Solo, que no lo sabe aun- dijo, y alejando la mirada de Emma, se enfoco en dedicarle una dulce sonrisa a Rachel. La diva pudo los ojos en blanco, pero estaba levemente sonrojada. –Continua, Rach- La diva asintió.

-La chica estaba muy segura de que el dragón era malo; Siempre se la pasaba lanzando fuego, gruñendo y echándole miradas atemorizantes a través de sus ojos negros, sin embargo, ella nunca había hablado con él. No se atrevía a hacerlo. Pero un buen día, después de que una tormenta eléctrica cayó en el bosque, la chica se dio cuenta de que el dragón no estaba a los alrededores de la torre. Y pensó que tal vez, esa era su oportunidad de huir; La chica quería vivir su sueño en Broadway y quería cantar por el resto de su vida ahí, pero atrapada no lo lograría jamás.- Santana no pudo evitar soltar una carcajada mientras miraba a Rachel de forma cómplice. La diva la fulmino con la mirada y continúo:

-Así que bajo los mil escalones de la torre y abrió la puerta; Nadie se lo impidió, como las veces pasadas. Cuando estuvo afuera el silencio era total, y al alzar la mirada no vio nada; Ningún dragón rondaba por ahí. Era libre. Sin embargo, antes de irse, dio una vuelta alrededor de la torre en busca de algún peligro, y sí que lo encontró. Escondido entre unos arbusto, tirado en el suelo y con los ojos cerrados, estaba el enorme dragón. La chica se alejo instintivamente, pero el dragón no se movió. Ella comenzó a asustarse, temiendo lo peor y sin pensarlo mucho, se acerco al enorme gigante rojo. Puso una de sus manos en el ala del dragón, y este gruño de puro dolor. La chica comprendió que estaba herido; Tal vez uno de los rayos rubios de la noche anterior le había dado. Así que apiadándose del pobre dragón, la chica se coloco a su lado y se aferro a él con fuerza. No sabía, porque, pero se sentía realmente bien en ese momento; Tal vez era porque el dragón había sido su compañero durante mucho tiempo y ella le había tomado cariño. No importaba, la chica lo abrazo con más fuerza, y supo que no quería que el dragón la dejara nunca. Antes de que pudiera detenerse, ella estaba llorando sobre la rugosa piel del gigante; Y las lagrimas lo empaparon. La chica sintió que algo se sacudía debajo de ella, y con cierto temor levanto la vista; Vio que el dragón abría los ojos y esbozaba algo parecido a una sonrisa. La chica sonrió con fuerzas, tomo el ala del dragón, pero esta se estaba poniendo blanquecina; la chica lo miro extrañada, el enorme ser estaba desapareciendo por completo. Ella pensó que ese era el final del dragón y comenzó a llorar, pero no era así. En lugar del dragón apareció una chica; Ella estaba sonriendo y miraba a la otra chica agradecida. –Gracias- dijo la antigua dragón. La chica miro con más atención a quien había parecido en vez del dragón y distinguió los mismos ojos negros de siempre. Nunca había sido un dragón, simplemente era una chica asustada que convirtió su miedo en mal humor y se transformo en un ser atemorizante. La chica se abalanzo al los brazos de su acompañante y esta la recibió con felicidad. Ahora eran amigas; E iban a vivir una aventura juntas.- Rachel termino la historia y todos los niños la veían impresionados y felices. Pero cierta latina la miraba con más admiración y cariño que nadie. –Nuestra historia- Pensó Santana encantada.

-¿Les gusto?- pregunto Rachel a los niños; Ellos asintieron y le dieron las gracias a la diva por el cuento. Ella sonrió con más fuerza. –De acuerdo; Chicos, ya casi tenemos que irnos- dijo pausadamente y los niños suspiraron con tristeza. –Pero antes, a Santana y a mi nos encantaría cantarles algo ¿Qué dicen?- Los niños dijeron a coro que sí y la diva miro de forma cómplice a la latina, mientras la llamaba con uno de sus dedos. Santana sonrió y se acerco.

-Buena historia- dijo Santana sonriéndole a la diva.

-¿Te resulto familiar?- pregunto Rachel divertida.

Santana asintió. –Todo un clásico- dijo, y ambas rieron a carcajadas compartiendo una mirada muy larga. Santana se alejo un minuto, y cuando volvió tenía una guitarra en las manos. – ¿Lista para cantar algo, Berry?-

Rachel entorno los ojos con duda. –No sabía que supieras tocar la guitarra-

La latina la miro por unos segundos con una sonrisa juguetona. –No sabes mucho de mi- susurro íntimamente en el oído de Rachel, recordándole que horas antes ella le había dicho lo mismo. La diva rio suavemente y cuando Santana comenzó a tocar, sonrió porque conocía la canción. Ambas se sentaron cerca de los niños y comenzaron a cantar.

Suena “Love Today” de MIKA:

-Buen trabajo, Berry- murmuro la latina, cuando estaban a punto de irse.
-Digo lo mismo con respecto a ti- respondió Rachel. -Y gracias por traerme aquí- añadió con un gesto de agradecimiento.
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Hola (: No se, tenia ganas de escribir, por eso el capitulo quedo algo largo. Espero les guste. En el próximo capitulo podrán, por fin, ver el dueto :D Déjenme sus comentarios y sugerencias. Los leo después. BYE!

por YoyoMay Miér Ene 22, 2014 2:02 pm

Me encaaanta tu historia! Ya te había leído antes, pero no te había podido comentar. Además, muy triste, pensé que ya no actualizarías. Es el Pezberry más bonito que he leído, además de "sobreviviendo". Me encanta. Adoro cómo escribes, y adoro cómo desarrollas la historia. Me encanta, y, sonará realmente extraño quizás, pero me alegro que Santana y Rachel se tomen el tiempo para enamorarse. Me encanta porque construyen su relación poco a poco, y eso es tan hermoso. Me encaaaanta!

Ojalá puedas continuar pronto y te den estas ganas de escribir más seguido! Siempre me quedo con ganas de más.

Gracias por esto! En verdad :).

por **Julietta St. James** Lun Ene 27, 2014 8:30 pm

YoyoMay escribió:Me encaaanta tu historia! Ya te había leído antes, pero no te había podido comentar. Además, muy triste, pensé que ya no actualizarías. Es el Pezberry más bonito que he leído, además de "sobreviviendo". Me encanta. Adoro cómo escribes, y adoro cómo desarrollas la historia. Me encanta, y, sonará realmente extraño quizás, pero me alegro que Santana y Rachel se tomen el tiempo para enamorarse. Me encanta porque construyen su relación poco a poco, y eso es tan hermoso. Me encaaaanta!

Ojalá puedas continuar pronto y te den estas ganas de escribir más seguido! Siempre me quedo con ganas de más.

Gracias por esto! En verdad :).

Gracias a tí! *0* Enserio, significa mucho para mi que te guste lo que escribo (; Actualizare lo mas pronto posible. Y otra vez, mil gracias <3

por **Twinkle Dani** Lun Ene 27, 2014 10:05 pm

Julietaaaaa :D
Actualizaste *o*
Me encanto! Cada vez estan mas unidas :3
No puedo esperar a que aparezcan en Mckinley, seran toda una sorpresa jijij
Gracias por la actu! Hasta la proxima, un besooo :*

por **Tat-Tat** Vie Feb 07, 2014 3:04 pm

He esperado tanto por ese dueto.
Debo reconocer que amo la relación PezBerry
Porfa.siguele.pronto.

saludillos

por Maira_Faberrytana Jue Feb 20, 2014 10:50 pm

Tu fic es super bueno, espero tu actualizacion ;)

por **Julietta St. James** Sáb Mar 22, 2014 4:07 pm

Twinkle Dani escribió:Julietaaaaa :D
Actualizaste *o*
Me encanto! Cada vez estan mas unidas :3
No puedo esperar a que aparezcan en Mckinley, seran toda una sorpresa jijij
Gracias por la actu! Hasta la proxima, un besooo :*

Muchas gracias Dani (: Ya veras en el próximo capitulo las reacciones que las PezBerry provocaran; Algunas buena y algunas malas. Sí sera sorpresivo. Besos linda C:

Tat-Tat escribió:He esperado tanto por ese dueto.
Debo reconocer que amo la relación PezBerry
Porfa.siguele.pronto.

saludillos

Esta vez en verdad viene el dueto; Es que lo he alargado un poco porque queria establecer mas la relación *3* ñañañaña pero en el próximo capitulo sí van a cantarlo. Yo también amo PezBerry, y como no :D Nos leemos

Maira_Faberrytana escribió:Tu fic es super bueno, espero tu actualizacion ;)

Que bueno que te gusta; Estaré actualizando muy pronto. Saludos :D
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Hola (: Pues sí, tarde años en actualizar, perdón. La escuela me quita todo el tiempo; Ademas de que gracias a que Ryan rompió PezBerry en la serie yo perdí un poco la inspiración. Como sea la he recuperado, e intentare escribir en mis tiempos libres para así actualizar pronto. MUCHAS GRACIAS POR SUS HERMOSOS COMENTARIOS! <3
Por otro lado, ayer subí en capitulo 8, pero cuando lo estaba releyendo, me di cuenta de que me falto una parte y tengo un par de errores, por eso lo borre S: Sí lo leyeron, no importa, pero discúlpenme porque se han perdido una parte. Me tomara un tiempo corregirlo, así que supongo que el domingo o el Lunes lo volveré a subir; Gracias por seguir leyéndome ((: y por tenerme paciencia. Los leo muy pronto. BYE! y muchas Gracias.

por **Tat-Tat** Lun Mar 24, 2014 10:52 am

Hey!!! Ya estamos a Lunes y no hay ni luces de ls conti...
Ya pues!! que yo no ancance a leer el capítulo 8...

Y si...sufrí tanto cuando el pelón me rompió la amistad/relación Pezberry... :C

Esperando... saludos

por **Julietta St. James** Lun Mar 24, 2014 9:55 pm

Tat-Tat escribió:Hey!!! Ya estamos a Lunes y no hay ni luces de ls conti...
Ya pues!! que yo no ancance a leer el capítulo 8...

Y si...sufrí tanto cuando el pelón me rompió la amistad/relación Pezberry... :C

Esperando... saludos

PERDON!! Apenas salí de la escuela y hasta ahora me ha dado tiempo; Aun es lunes, So... Ojala te guste. (:

Capitulo 8: Since U Been Gone

-Gracias, Santana… pero no tenías que haber hecho esto- murmuro la castaña más pequeña con la cabeza agachada; estaba sentada en el lado del copiloto y tenia una mochila sobre las piernas.

-¿Hacer exactamente que, Rachel? Pasar por ti y darte un aventón hacia la escuela. ¿Cuál es el gran asunto? Solo te estoy haciendo un favor- dijo amablemente la latina mientras se miraba vanidosamente en el retrovisor y apagaba por completo el motor del auto.

-Sí… pero no me molestaría tomar el autobús- comento la diva avergonzada.

-¡Suficiente, Berry! Es el tipo de cosas que hago por mis amigas; Lo hacia por Brittany, incluso aunque ella vive al otro lado de la ciudad. Y lo voy a hacer por ti porque vives a unas calles de mi casa y porque ni siquiera me desvió del camino haciéndolo. ¡Te estoy haciendo un jodido favor, porque eres mi amiga; Y quiero que por primera vez en tu vida cierres la boca y simplemente me des las gracias!- Espeto la latina perdiendo la paciencia por completo mientras elevaba la voz y clavaba una mirada de muerte en la diva.

-Mu… muchas gracias, Santana- balbuceo Rachel aun más nerviosa.

-De nada, Rachel- dijo la latina con una enorme sonrisa en el rostro. -Ahora saca tu trasero del auto, que vamos tarde- ordeno mientras abría su puerta.

-¡No, Santana! ¡Espera!- la llamo la diva desesperada.

-¿Ahora que, Berry?-

-Es solo que no creo que sea buena idea que entremos juntas… Quiero decir, puedes entrar primero mientras yo espero afuera unos…-

-¡¿Qué?!- pregunto Santana con el ceño fruncido.

-Escucha, cada día es lo mismo para mí- comenzó a decir la diva con una hilo de voz; Su cara estaba un poco pálida y su mirada desorbitada se fijo en la latina. -En cuanto pongo un pie en los pasillos de McKinley, todos los idiotas del equipo de futbol e incluso algunas porristas empiezan a gritarme cosas, me insultan, me llaman por apodos y cuando es un mal día, y usualmente esto sucede mucho, recibo un slushie. Es un infierno; Por supuesto yo estoy acostumbrada, pero realmente no me gustaría que todos se te echaran encima a ti- termino y un tono de preocupación inundo su voz.

-¡Dios, Rach!- susurro Santana, cubriendo la mano de la diva con su propia mano, y clavando una mirada cálida en la castaña. –Tú misma me has dicho que no debo de estar asustada, tú me has dicho que soy suficientemente fuerte para afrontar las peores cosas; Y eso es lo que quiero hacer desde hoy. Pero sobre todo quiero hacerlo contigo, quiero que tú también lo hagas. Así que no importa cuan feo pueda ponerse ahí adentro, porque voy a estar a tu lado, voy a entrar contigo, y juntas vamos a terminar con cualquier cosa que venga ¿De acuerdo?- Rachel asintió y esbozo un intento medio de sonrisa sin estar totalmente confiada. –Vamos- Ambas bajaron del auto y se encaminaron a la entrada de McKinley; Pero entre más cerca estaban de su destino, mas preocupaciones tenía Rachel. La diva realmente se odiaría a si misma si algo le sucedía a Santana por estar a su lado. No sabia porque, pero últimamente lo que le sucediera a la latina, le importaba demasiado; No quería verla sufrir, y mucho menos si era por su culpa. –Tranquila- susurro Santana con una sonrisa, y sin haberse dado cuenta, la diva había comenzado a temblar –No me importa recibir un slushie, no me importa en lo absoluto; Estaremos bien-

Pero, como Rachel suponía, no estarían bien. En el instante en que cruzaron la puerta, un par de chicos del equipo de Futbol se acercaron de forma intimidante. -¡Mira eso! Lopez y Rupaul, eso si que es nuevo- exclamo uno de ellos burlonamente; Rachel bajo la mirada y palideció un poco mas; A Santana se le endureció el cuerpo entero. -Primero te sacan del escuadrón de porristas y ahora comienzas a juntarte con el Fenómeno de estatura media. ¡Has tocada fondo de verdad! -

-Cierra tu estúpida boca, Azimio- dijo Santana desafiante. Probablemente lo mejor hubiera sido que se quedara callada, pero no pudo; Ella y Rachel había llegado tan lejos, y ahora eran amigas, y claramente no era esa la forma en que nadie podía tratar a sus amigas, o a ella misma. –O si prefieres, puedo partir tu inútil rostro. Rachel, porque ese es su nombre, y no vas a llamarla de otra forma mientras yo te oiga, es mi amiga, y además de que tiene un cerebro un millón de veces más grande que el tuyo, es una persona asombrosa; Así que deja de decir todas esas cosas malas de ella, o incluso de mí, porque, para tu información, ambas podemos tomar mejores decisiones de las que alguna vez imaginaste, y a ti no debe importarte un carajo- La latina estaba roja de puro coraje y sus puños estaban cerrados con fuerza; Mágicamente el pasillo se había quedado en silencio, sin embargo unos quince chicos observaban lo que estaba sucediendo. -¡¿Me escuchaste?!- dijo firmemente, mientras empujaba, con todas sus fuerzas, el enorme pecho del jugador de Futbol.

-Sí, Lopez, te he escuchado. Por eso mismo hare algo al respecto- dijo Azimio bastante molesto. Y en una fracción de segundo, se giro un poco y como todos vieron, uno de sus compañeros le paso un vaso lleno de Slushie. Inmediatamente después balanceo el vaso con decisión mientras apuntaba a Santana y se lo tiro todo encima; Directamente en la cabeza, sin compasión alguna. –Esta vez te has salvado, Rachel- añadió con sarcasmo mirando a la diva, después se dio la vuelta y riéndose se alejo por el pasillo.

-¡Dios!- gimió la latina con desdén. El líquido azul comenzó a escurrir por su cuerpo helándolo por completo. Su cabello, que estaba atado en una coleta, estaba empapado y pegajoso, su cara estaba oculta detrás del líquido y de algunos pedazos de hielo, además de que el Slushie escurría por su espalda y por su pecho, y se le metía en las fosas nasales. Con los ojos cerrados y sin posibilidad de abrirlos, Santana pensó que esa era, probablemente, la peor sensación del mundo entero. –Rachel, creo que si me importa lo del slushie, mucho- murmuro la latina con un hilo de voz.

-¡Oh Tana! Lo siento, lo siento mucho; Esto ha sido todo culpa mía- dijo la diva apenada mientras apretaba el húmedo brazo de la latina.

-Esta bien, Rachel; No comiences a hablar de culpas. Solo… Solo, llévame hacia mi casillero, para tomar la ropa limpia que tengo ahí y después al baño para que pueda limpiarme ¿De acuerdo?-

-Sí- respondió Rachel. Pero por alguna razón no se movió durante unos segundos y se quedo contemplando la figura azul, pegajosa y helada en que Santana Lopez se había convertido, y le asusto que esta versión de la latina le gustara más, mucho más de lo que hubiera admitido.

-¡AHORA, BERRY! ESTO ME QUEMA LA PIEL- exclamo la latina irritada. -ASÍ QUE SI NO QUIERES QUE TRAIGA UNO DE ESTOS Y TE LO DERRAME YO MISMA, HAZ ALGO AHORA… Sigues ahí ¿Cierto?-

-Claro que estoy aquí- dijo la diva con un suspiro; tomo a Santana del antebrazo y paso una mano por su espalda, de esta forma ambas caminaron a lo largo del pasillo, hacia el casillero de Santana, dejando un charco azul brillante.

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-La primera experiencia siempre es la peor- murmuro Rachel con una media sonrisa; La latina se había cambiado de ropa y la diva había limpiado su cara de por completo, ahora limpiaba su cabello en el lavabo. -Si sirve de algo decirlo, tuviste suerte. El de mora azul, siempre tiene menos hielos; Y gracias al cielo no te han dado con uno de cereza, es el peor- decía la diva intentando hacer el momento un poco mas ameno. Pero Santana resoplo sin mucho entusiasmo. –Realmente siento lo que paso- soltó por fin sintiéndose horriblemente culpable.

Santana miro a la diva con condescendencia. -No tienes que sentir absolutamente nada, Rachel, y por favor no lo hagas más grande; En todo caso yo tuve la culpa. Fui yo la que abrió la boca e hizo esa estúpida impresión de la chica valiente enfrente de Azimio-

-Que por cierto, fue realmente impresionante; Gracias por defenderme, por defendernos-

-El placer fue mío- dijo la latina mirando a Rachel fijamente, y por unos segundos no hubo nada más que ellas dos. Esa mirada fue más que mil palabras, Santana estaba bien con ello, y Rachel se sentía profundamente agradecida. Probablemente ahora sí eran amigas. –Quiero decir, Azimio es un imbécil- dijo la latina renovando la atmosfera; Rachel sonrió levemente y continúo con la limpieza del cuero cabelludo.

-He terminado- dijo la diva después de uno rato mientras secaba el cabello de Santana con un toalla. –Con tu cabello, quiero decir-

Santana asintió, con una tímida sonrisa, mientras se miraba al espejo. –Eres buena en esto-

-La practica hace al maestro- murmuro la diva encogiéndose de hombros.

La latina puso los ojos en blanco. –Salgamos de aquí; Tenemos que ir a nuestras clases-

-Cierto, pero no olvides que hoy presentamos nuestro dueto en el Glee Club- dijo Rachel con una amplia sonrisa, mientras ambas salían del baño.

-No lo olvidaría por ningún motivo, Rach- dijo la latina entusiasmada, golpeando juguetonamente el hombro de la diva. -Te veo después- añadió; Rachel la despidió con un gesto de mano y ambas tomaron su camino.

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-¿Estas lista?- pregunto la latino mientras retocaba su maquillaje. Se estaban preparando, para finalmente ir al Glee Club.

-Sí, lista- murmuro la diva mientras se miraba impetuosamente en el espejo con una expresión de disconformidad.

-Genial…- decía la latina con la boca entreabierta ya que estaba aplicándose labial. –Vamos a ganar esta estúpida competencia; Y si tenemos suerte, Brittany tal vez termine llorando, y Hudson ponga esa cara extraña que suele poner cuando esta confundido… Vamos a matarlos-

-¿Tana?- la llamo Rachel insegura.

-¿Si?- respondió la latina, había dejado el lápiz labial de lado y miraba atentamente a Rachel; La dulce forma en que la llamaba “Tana” seguía tomándola por sorpresa.

-¿Estas segura de que es necesario que use… esto?- pregunto la castaña mas pequeña con el ceño fruncido. Contemplaba su reflejo y señalaba la entallada falda de cuero, la blusa ajustada y blanca y los tacones rojos que tenia puestos.

La latina suspiro sin darle mucha importancia. –Sí, Rachel, tienes que usarlo- respondió secamente.

-Exactamente, ¿Por qué?- cuestiono la diva mirando el conjunto con desagrado.

-Porque por primera vez en la vida vas a mostrarle a Frankenteen lo que ha dejado ir; Porque es una canción que exige este vestuario y además porque la tarea va de esto, de formar lazos-

-¿Y como es que vestirme como prostituta nos hará formar lazos?- pregunto Rachel aun mas confundida.

-¡ES SUFICIENTE, BERRY! ¡Te estoy prestando mi ropa; Y eso se llama compartir y compartir forma parte de la amistad! ¡¿Entendido?!- Rachel agacho la mirada y asintió lentamente, murmurando un leve –Sí-

-Sea como sea, no pareces una prostituta, te ves sexy; Te lo dije antes, tienes buen cuerpo- murmuro Santana mientras volvía su mirada al espejo y continuaba con la aplicación del labial.

Rachel levanto la mirada sorprendida al escuchar el cumplido y aunque no lo hubiera admitido se había sonrojado. -Bueno, supongo que gracias; Pero esto apenas y me cubre-

-Lo que, por cierto, es bueno y juega a tu favor; Así que deja lo pretextos-

La diva puso los ojos en blanco y jalo la minifalda para abajo en un intento de que cubriera por lo menos una tercera parte de sus muslos, sin resultado alguno puso una mueca.

-Chicas, Mr. Schue…- una voz se escucho desde la puerta; Santana y Rachel levantaron la mirada y encontraron a Finn Hudson, quien tenía la mirada fija en la diva, lo que, claramente la puso nerviosa. Santana se levanto con rudeza y se interpuso entre Finn y el objetivo de sus ojos.

-¿Se te perdió algo en las piernas de Rachel, o en su trasero, Hudson?- Cuestiono secamente la latina; Con estas palabras, Finn reacciono.

-No, no, por supuesto que no- balbuceo el chico, apenado. –Yo solo… yo… Quiero decir, Mr. Schue me ha pedido que les diga que en cinco minutos será su turno-

-Ya sabíamos eso, Frankenteen; Dile que estaremos ahí en un rato. Y gracias por nada- sentencio Santana molesta.

-Claro… Am ¿Rachel? – llamo a la castaña; La diva asomo la cabeza detrás de la protectora latina.

-¿Sí, Finn?-

-Te ves Hermosa- dijo él esbozando una de esas sonrisas que ha Rachel le robaban el Corazón.

-Gracias, Finn-

El chico sonrió más ampliamente, y dirigiéndose a ambas murmuro un –Suerte- Y salió de ahí.

-Estas siendo débil, Berry- dijo la latina disparando una mirada asesina hacia la pequeña castaña.

-¿Qué?-

-Hudson sonrió, y tú ya estabas prácticamente lanzándote a sus brazos; Así no es como funciona. Prometimos que los íbamos a superar, a él y a Brittany, pero si tu estas siendo tan débil, dudo que logremos algo- aclaro Santana realmente alterada.

-¡No, No, Santana! Yo solo… Es… aun es… es complicado ¡De acuerdo! No puedo decirte que Finn no me interesa en lo absoluto porque te estaría mintiendo; Pero… pero lo estoy intentando, y se que cuando estemos cantando esa canción en unos minutos, voy a sentir cada palabra y voy a hacer que Finn Hudson comprenda el mensaje- explico Rachel decidida.

-Eso espero, Berry- contesto la latina secamente, dispuesta a irse del lugar.

-Tana, no te enojes- suplico la diva tomando la muñeca de la latina para atraer su atención. –Tienes que creerme, voy a hacerlo bien-

Santana cedió ante la suplica; Posiblemente porque la había llamado Tana, o tal vez porque su tibia mano envolvía su muñeca, pero la latina sonrió mientras asentía. –Te creo-

Se quedaron en silencio unos minutos hasta que Rachel dijo: -Además, tenías razón, verme con esta ropa casi le provoca un infarto a Finn-

Santana soltó una carcajada divertida. –Te lo dije, te ves sexy-

-Tu también te ves bien- dijo la diva mirándola de arriba abajo. –Los vestidos ajustados son lo tuyo- añadió con una sonrisa provocativa.

La latina se mordió el labio. –Si tú lo dices-

-Sí, lo digo…- Ambas sonrieron y en ese momento comprobaron que la mano de la diva seguía engancha en la muñeca de la latina. La diva negó con la cabeza y se aclaro la garganta -Ahora, vayamos al Glee Club, ganemos esa competencia, matemos esa canción y de paso a nuestros ex- añadió malévolamente.

-Tú lo has dicho- murmuro Santana sonriendo.

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-Estas lista ¿Cierto?- pregunto Santana mientras caminaba a las afueras del salón.

-Sí- respondió la diva.

-Genial… No olvides mirarlo en todo momento, y ya sabes, hazle sentir la letra; Como sea hay que movernos por todo el salón y disfrutar el momento, no olvides eso; Y entra a l salón después de mí, cuando te llamo. Por supuesto que…-

-¿Estas nerviosa, Tana?- pregunto Rachel confundida.

-Sí, mis manos están sudando e incluso debajo de mis senos hay sudor, y eso significa algo: PANICO-

-Tranquilízate, lo haremos bien- murmuro la diva con una sonrisa reconfortante.

-Sí, tienes razón; Es tiempo- Rachel asintió, ambas chocaron los puños y Santana se encamino al salón, porque ella seria la que abriría la canción.

Comienza a sonar SINCE U BEEN GONE:

Santana le toma la mano a Rachel, le levanta el brazo y juntas hacen una reverencia. El resto de los chicos comenzaron a aplaudir y a animarlas.

-¡Bien hecho chicas! ¡Eso estuvo muy bien! ¡Buena elección!- exclamo Mr. Schue.

-Gracias- murmuro Rachel con el poco aliento que le quedo después del espectáculo.

-Y después de ver a todos los demás, creo que tenemos unas claras ganadoras; No solo por su asombroso desempeño durante el dueto, si no también por la forma en que lo llevaron. Veo que se relación es mucho mejor ahora, y ese era el objetivo de la tarea. Santana, Rachel, ¡Felicidades!- dije el profesor con una enrome sonrisa, y todo el salón estallo en aplausos, lo que quería decir que pensaban igual.

Santana no se pudo contener y abrazo a la pequeña diva con todas sus fuerzas, y murmuro un: –Lo hicimos- en su oído; Rachel le devolvió el abrazo y sonrió ampliamente –Por supuesto que sí; Yo te dije que lo haríamos- le dijo con superioridad. Santana soltó una leve carcajada e inmediatamente después puso los ojos en blanco.

–Su premio, señoritas- interrumpió Mr. Schue, extendiendo el ticket para la cena doble con todo pagado en Breadstix; Rachel lo tomo agradecida. –Ahora, antes de irnos, Finn y Kurt tienen algo que decirnos- Ambas se fueron a sentar, mientras Finn y Kurt pasaban al frente del salón.

-Solo queremos decirles, que la madre de Finn y mi padre, se van a casar el fin de semana próximo- todos los chicos sonrieron, aplaudieron y animaron ante la noticia. –Así que nos gustaría que nos ayudaran a preparar un par de números musicales para animar la fiesta ¿Qué dicen?- Los demás estuvieron de acuerdo.

-Gracias, chicos; Nos ponemos de acuerdo esto en la semana ¿Sí? Eso es todo- dijo Finn; Y después de eso todos se fueron yendo, exceptuando a Rachel y a Santana que estaban guardando sus cosas, y a Finn quien las miraba intrigado.

EL chico se acerco a ellas decidido. -¿Podemos hablar, Rach?-

La castaña levanto la vista confundida. –Rachel no quiere hablar contigo, no ahora Hudson- respondió Santana en su lugar.

-Creo que Rachel puede decidirlo- dijo Finn sin dejar de mirar a la diva.

-Escucha Frankenteen, simplemente no es el momento, y tal vez nunca lo sea, así que deja a Rachel en paz-

-Que me lo diga; Tu no puedes hablar por ella, Santana. Si Rachel no quiere hablar conmigo, puede decírmelo ella misma y la dejare en paz. No creo que necesite a alguien que se haga pasar por su amiga como secretaria-

Santana frunció el ceño y entreabrió la boca y dando un paso al frente hacia el chico comenzó a gritarle. -¡SOY SU AMIGA! NO SE PORQUE TE CUESTA TANTO CREERLO, PERO NO ME IMPORTA; ESTOY PROTEGIENDOLA, ESTOY INTENTANDO QUE TÚ NO TE APROVECHES DE ELLA POR CENTESIMA VEZ. ESO ES LO QUE UNA AMIGA HACE. ASÍ QUE MEJOR, LA DEJAS EN PAZ, GRANDISIMO IDIOTA, PORQUE…-

-Tana, es suficiente- murmuro la diva por primera vez poniendo una de sus manos en el hombro de la furiosa latina. Santana enrojeció más y soltó un bufido.

-¿SABES QUE, BERRY? SI ES ESO LO QUE QUIERES, PUEDES TENERLO- sentencio molesta; Tomo sus cosas y salió del salón de coro. Rachel suspiro entristecida mientras la miraba irse.

-¿Qué es lo que quieres hablar conmigo, Finn?- cuestiono la diva.

-¿Desde cuando la llamas Tana?- pregunto el chico con el ceño fruncido.

-Es mi amiga; Puedo llamarla así si se me antoja-

-Así que también tú te has tragado esa mentira- susurro él en voz baja, pero Rachel lo escucho.

-¡No es una mentira, Finn! No se porque te cuesta creer que Santana es mi amiga ahora; Es una persona increíble, y me ha estado ayudando mucho últimamente-

-¡Vamos, Rach! Hace una semana ni siquiera se hablaban, y si se hablaban era para insultarse. Ella te odia y dedica buena parte de su tiempo en molestarte. No me parece posible que tú y Santana Lopez…-

-¿Sabes, Finn? Las cosas cambian y Santana tiene razón, eres un grandísimo idiota- interrumpió Rachel y pasando su mochila por los hombros salió del lugar dejando a Finn completamente solo.

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-¡SANTANA- gritaba la pequeña castaña mientras corría por el pasillo. –PODRIAMOS POR LO MENOS HABLAR- solicito con la respiración entrecortada.

La latina se detuvo a la mitad del pasillo, se giro para verla y con hipocresía le dijo: -Creí que estabas hablando con Finn-

Rachel bajo la mirada. –No quiero hablar con él. Quiero hablar contigo- murmuro mientras se sentaba y se recargaba enfrente de un casillero, estaba realmente agitada; Santana se sentó a su lado sin muchas ganas.

-¿Qué?- pregunto tranquilamente; Santana sabia que si hubiera sido cualquier otra persona, la hubiera dejado ahí y se hubiera ido. Pero con Rachel, las cosas que usualmente haría, no funcionaban. Así que ahí esta, sentada a su lado dispuesta a escuchar lo que iba a decirle.

-Realmente aprecio lo que estas haciendo por mi, y todo lo que has dicho; Se que estas preocupada, y eres la única persona que se ha preocupado por mi, a excepción de mis padres, así que es realmente conmovedor que te comportes así. Quiero agradecerte, no solo por lo que dijiste enfrente de Finn, si no tambien por lo que has hecho y dicho enfrente de Azimio. No me interesa que el resto del mundo no nos pueda ver como amigas, porque yo se que lo somos, y estoy contenta por ello-

La latina tenía una media sonrisa embobada. –Eso fue lindo- murmuro. -Gracias por decirle lo que le has dicho acerca de mi a Finn; Quiero decir, estaba escuchando, jamás me fui de verdad…- acepto apenada.

Rachel rio divertida. -Esta bien; Es lo que las amigas hacen ¿Cierto?... Y aunque algunas veces, preferiría que midieras tu genio, esta bien si prefieres expresarte así, intentare seguirte el paso, estoy segura de que lo disfrutare-

-Es lo que quiero…. Así que… ¿Estamos bien?- pregunto seriamente.

-Sí, si que lo estamos- dijo la diva mientras formaba un puño con su mano, Santana lo choco con el suyo, y ambas sonrieron.

Después de unos minutos la diva rebusco en su bolsillo y saco el ticket de Breadstix. –Santana, esto es tuyo-

Santana miro a la diva confundida. -¡¿Qué!? No, no, no es justo que yo lo tenga, quiero decir no creo que…-

-Amas ese restaurante, además desde el primer momento dijiste que iba a ser para ti, es lo justo- insistió la diva con una sonrisa.

-No, Rach, de verdad; No quiero que…-

-Tómalo, Santana Lopez- dijo la diva amenazadoramente.

-¡No! ¡No seria justo!- exclamo la latina negando con la cabeza impetuosamente.

-Vamos Santana, realmente no me importa- Rachel tomo la mano de la latina, abrió su palma y puso el ticket ahí. –Lo tienes ahora- dijo la diva orgullosa.

Santana se quedo mirando el boleto por unos minutos, y después levanto la mirada y la fijo en Rachel de una forma especial. -De acuerdo, si quieres que lo acepte, tienes que venir conmigo- sentencio como si hubiera sido la idea mas asombrosa del mundo.

-¿Qué?-

-¡Vamos, Rach! Sea como sea no tengo con quien ir, y no puedo comer lo que dos personas comen. ¡Ven conmigo! ¿Sí?- suplico la latina inclinando la cabeza y mirando a Rachel; La diva dudo un poco. –Sera divertido, Berry; Seguramente hay un montón de cosas veganas que puedes comer- añadió Santana un poco exasperada.

Finalmente Rachel cedió. –Esta bien- dijo con una tonta sonrisa.

-¡Bien! Pasare por ti a las seis-

-No… no tienes que pasar por mi, puedo conducir hasta ahí o incluso ir a pie; No es necesario que…-

-¡He dicho que voy a pasar por ti, Berry!- interrumpió la latina secamente. –Y mas te vale estar lista- Rachel asintió sin protestas. –Ahora, vámonos de aquí porque te llevare a casa ¿De acuerdo?-

La diva iba a negarse y a darle un montón de motivos para que no la llevara, pero sabía que no iba a poder evitarlo. –Supongo- murmuro encogiendo los hombros. Santana sonrió, ambas se levantaron y salieron de McKinley.

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Hola (: Ahora sí, ya por fin el dueto *0* Ojala les guste, yo amo esa canción; Escúchenla y lean el performance, porque yo así lo he escrito. El siguiente capitulo a lo mejor no voy a hablar mucho de la cena, pero sí de la boda de los Hudson-Hummel; Vienen cosas interesantes. Si siguen leyendo, dejen sus comentarios y sugerencias. Los leo después. BYE!

por **Tat-Tat** Mar Mar 25, 2014 9:38 pm

waaaaaaaaa... espere taaanto por el dueto. Definitivamente valió la pena.
h
Así que boda Hudson-Hummel? será interesante ver que harán.

Sigue pronto.

p.d: no lo leí el Lunes xD

por Maira_Faberrytana Sáb Mar 29, 2014 8:03 pm

Buenisimo quiero que esa cena sea fenomenal!!! besos :)

por **Julietta St. James** Vie Abr 18, 2014 6:29 pm

Tat-Tat escribió:waaaaaaaaa... espere taaanto por el dueto. Definitivamente valió la pena.
h
Así que boda Hudson-Hummel? será interesante ver que harán.

Sigue pronto.

p.d: no lo leí el Lunes xD

Maira_Faberrytana escribió:Buenisimo quiero que esa cena sea fenomenal!!! besos :)

Que bueno que les gusto chicas (: Ha pasado algún tiempo desde que estuve aquí la ultima vez, pero sucede que mi computador murió y no tuve ninguna otra opción mas que dejar de escribir D: Sin embargo ya tengo mi computador salvo y sano y como plus estoy de vacaciones, así que me tendrán escribiendo como loca. En estos días subiré el capitulo 9 (: Pero para que no se desesperen les dejo unos spoilers:
*Momento Finntana
*Beso Pezberry (No estará influenciado por el alcohol)
*Momento "hot" de las Brittana
*Posible pelea Pezberry
Los leo bien pronto chulos y chulas (:

por **Julietta St. James** Jue Mayo 01, 2014 2:52 pm

Capitulo 9: Wedding Time

Se despertó sintiéndose contenta. Su corazón dio un vuelco al recordar el rostro de Santana. Había pasado el fin de semana, después de la cena, así. Parecía tonto que una simple cena con una amiga la hiciera tan dichosa; Pero para ella había sido muy especial. Suspiro y miro hacia el techo, recordando cada momento que habían pasado juntas en Breadstix.

FLASHBACK

Al principio se sintió estúpida por esforzarse tanto. Poniéndose su vestido de coctel más bonito. Esparciendo su perfume favorito por todo su cuerpo. Peinando su cabello unas diez veces hasta que por fin estuvo conforme con el resultado. Maquillándose delicada y naturalmente. Pensando en temas de conversación. Se lo estaba tomando muy enserio, y después de todo, solo iba a cenar con una amiga.

Frente al espejo, le hecho un vistazo a su reflejo; Se mordió el labio inferior y se sintió ridícula. Tal vez Santana pensaría lo mismo. Quiso quitarse el maquillaje; Cambiarse el vestido y ponerse unos pantalones de mezclilla y una camiseta con un estampado divertido. Pero antes de que pudiera hacerlo, llamaron a su puerta. Se puso muy nerviosa, pero tenía que calmarse. Suspiro y abrió la puerta.

Ver a la latina le quito mucho peso de encima. Se tranquilizo al ver que Santana también llevaba un vestido; Rachel no reprimió la sonrisa al verla, porque el azul siempre había quedado bien con su color de piel, y la chaqueta negra de cuero le daba personalidad propia.

-Hey- murmuro la latina un poco nerviosa. -¿Lista para cenar?- le pregunto animada, en un intento de hacer el momento menos incomodo.

-Seguro; Voy por mi bolso- murmuro ella ampliando su media sonrisa.

Cinco minutos después estaban en el carro de Santana con rumbo a Breadstix. No hablaron mucho durante el camino, Rachel incluso evito las miradas que Santana le lanzo a lo largo del trayecto. Cuando llegaron al restaurante, que estaba prácticamente solo, le dieron su ticket de comida gratis a la recepcionista y esta las coloco en una mesa.

Rachel comenzó a mirar a su alrededor, ya que al parecer ninguna tenia muchas ganas de hablar con la otra, y se había formado un atmosfera ligeramente incomoda, que se extendió hasta que un mesero se acerco a pedir su orden.

La diva miro el menú una vez más, y finalmente se decidió. –Para mi un plato de sopa de zanahoria, y lasaña a la boloñesa; Menú vegano, por favor- aclaro con un sonrisa.

-¿Y para usted, señorita?- pregunto el mesero mirando a Santana. La latina ni siquiera había abierto el menú.

-Lo mismo que a ella- dijo decidida; El mesero asintió y se alejo. Rachel la miro confundida, pero la latina parecía divertida.

-¿Por qué razón en el mundo has pedido lo mismo que yo? ¡Soy vegana, Santana; Por consecuencia ordeno comida vegana!- Exclamo la diva exaltada.

Santana soltó una leve carcajada. –Es solo que he estado pensando en tus hábitos alimenticios; Y creo que ha abierto una puerta para mí- Rachel frunció el ceño aun mas confundida. –No puedo dejar de pensar en tu obsesión por no sacar provecho de los animales. Y después comienzo a pensar en cuantos animales inocentes he torturado, y me siento horriblemente culpable. Es por eso, y por el exquisito pay vegetariano que preparaste el otro día, que he decidido introducir la comida vegana en mi vida- explico la latina mientras se encogía de hombros.

Rachel se inclino con los ojos muy abiertos, mientras doblaba sus brazos enfrente de su cuerpo; Sintió una oleada de confusión. –Bueno… Supongo que te felicito. Es realmente considerado de tu parte- declaro de forma insegura.

-No estoy diciendo que no comeré carne otra vez, Berry- aclaro Santana al ver la reacción dudosa de la pequeña castaña. –Es solo que no comeré tanta-

-Sigue tomándose en cuenta tu esfuerzo- aseguro Rachel; La latina sonrió mientras ponía los ojos en blanco. Otro silencio incomodo apareció, ambas se miraron inquisitivamente hasta que Rachel dijo: -Cuéntame algo sobre ti; Cualquier cosa- solicito ansiosa.

Santana frunció el ceño. -¿De que hablas?-

-De alguna anécdota; De algo que te haya sucedido. ¡De cualquier cosa!-

-Pues no se me ocurre nada. Sugiere un tema-

Rachel se lo pensó un poco y segundo después taba mirando a la latina con una sonrisa maliciosa. -¿Qué hay de tu primer beso?-

Santana levanto una ceja. -¿Quieres que te cuente como fue mi primer beso?- La diva asintió emocionada; Santana suspiro. –Antes que nada debes saber que fue con un chico. Estaba en Elemental, tendría unos 7 años, y este chico de ensueño, quien era mi compañero de clases, con ojos azules y cabello rizado, tenia un estúpido amigo que estaba obsesionado conmigo.- Rachel sonrió divertida al ver que Santana ponía los ojos en blanco asqueada. -El chico lindo, Daniel Rivers, me convenció de besar a su amigo, Nick Carter, a cambio de que él me diera su automóvil de control remoto. A los siete, es una oferta que no puedes rechazar; Así que lo bese. Me arrepiento, porque si cierro los ojos y pienso en ello- relato la latina cerrando los ojos y concentrándose. –Puedo sentir su inmunda lengua recorriendo mis dientes y su baba escurriendo por mi barbilla- Abrió los ojos con un gesto de repulsión; La diva la miraba impresionada. –No fue una buena historia, ahora que estamos a punto de cenar ¿Cierto?-

Rachel sonrió. –Yo creo que fue una forma muy romántica de compartir tus labios- murmuro con sarcasmo.

La latina soltó un bufido. -¿Qué hay de ti? ¿Quién beso los labios de Rachel Berry por primera vez?- pregunto interesada mientras apoyaba sus codos en la mesa y ponía su cabeza entre sus manos.

Rachel tomo aire. –Su nombre era David Lynn. Estábamos juntos en un campamento de verano; Teníamos 9 años. Pero él no estaba detrás de mí. La cosa era que Amy Rose, no dejaba de molestarme sobre el hecho de que aun no había besado a nadie. Nunca dejo de fastidiarme con eso; Ni siquiera después de que la avente a rio-

-Wanky- murmuro Santana, mirando atentamente a la diva.

Rachel puso los ojos en blanco y continuo su historia. –Quería que se detuviera, quería probarle que podía dar mi primer beso si quería hacerlo. David estaba conmigo en el club de Artes Escénicas; Así que le ofrecí veinte dólares, a cambio de que me besara enfrente de Amy. Veinte dólares si me besaba romántica y convincentemente enfrente de esa bruja. Él era un chico muy amable, así que acepto. Puedo decir que era un buen besador, pero no sentí nada, a excepción del placer que me dio ver la expresión de Amy- termino sonriendo ante el recuerdo.

-¡Dios!- exclamo la latina. -¿Qué diablos sucede con nosotras?- Rachel la miro confundida. –Ninguna de nosotras ha besado por amor ¿O que?-

Rachel rio suavemente. –Supongo que seria difícil de decir; Tenemos el terrible habito de enamorarnos de la gente incorrecta o de besar gente ebria durante juegos de botella clandestinos- murmuro ella mientras miraba a Santana, podía sentir el enrojecimiento de sus mejillas.

Santana detecto la indirecta. La pequeña diva estaba hablando de ellas; De su beso durante la fiesta en su casa. Noto que Rachel se sonrojaba y sonrió enternecida. –Bueno, algunas veces encuentras el amor en el lugar menos esperado ¿No es así?- le dijo guiñándole un ojo.

-Su orden señoritas- interrumpió el mesero dejando sus platas en frente de cada chica. Santana le agradeció y por fin las dejo solas, pero ninguna tuvo el valor de tocar el tema otra vez, en lugar de eso se dedicaron a comer hasta hartarse, a bromear y conversar, y a terminar la velada.

Santana dejo a Rachel en la puerta de su casa. –Te veo en la boda de los padres de Finn y de Kurt. Y no olvides que estamos yendo juntas, no tienes que preocuparte por buscar pareja de baile- le había dicho en forma de broma; Pero aun después de su risita nerviosa, Rachel se sintió ligeramente especial. –Ponte un vestido lindo, Rach; Nada de tu guarda ropa de profesora- Rachel puso los ojos en blanco y la miro severamente. –Por cierto, hoy luces bien- le dijo y la diva se sonrojo mientras apartaba la mirada.

-Tu también te ves bien- le había dicho sin el valor de mirarla a los ojos.

-Siempre me veo bien, Berry- murmuro con orgullo. –Bueno nos vemos- habían sido sus últimas palabras. Se había subido a su camioneta y se había ido.

FIN DEL FASHBACK

Era el día de la boda. Se arreglo entusiasmada; El simple hecho de volver a verla, la ponía feliz. Se puso el vestido rojo que estaba en su armario. No era su color favorito, pero ella y las chicas de New Directions eran damas de honor y Carole había elegido ese color, así que no tenía otra opción. De todas formas sonrió, porque a Santana le quedaba bien el rojo. Se avergonzó un poco al notar lo mucho que pensaba en la latina los últimos días. Aparto el pensamiento de su mente, con el pretexto de que no tenia nada de malo pensar en su amiga. Y de esta forma salió de su casa con rumbo a la fiesta, porque ya iba tarde.

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Santana Lopez ya estaba en el salón donde los HummelHudson festejaban. Estaba en el baño mirándose vanidosamente, retocando su maquillaje. Sintió una oleada de desesperación; ¿Por qué no había llegado Rachel aun? Se suponía que estarían juntas durante la fiesta, pero era imposible si ella ni siquiera se había dignado a llegar. Miro su teléfono otra vez; No, no la había llamado, ni tampoco le había mandado un mensaje de texto.

La molesta y ansiosa latina soltó un bufido, mientras seguía el camino devuelta a la mesa en donde todo el Glee Club estaba sentado. Pero en la entrada de los baños, se topo con alguien; Ni más ni menos que con Finn Hudson.

-Quítate de en medio, Hudson- espeto secamente.

-¡Espera, Santana!- la llamo el chico suplicante. –Quiero hablar contigo-

La latina lo miro confundida. –No tengo idea de donde este Rachel-

-No quiero saber donde esta Rachel; Mas bien sí quiero saber en donde esta, pero no iba a preguntártelo- aclaro Finn. La latina frunció el ceño aun mas disgustada. –Quiero disculparme por haber dicho todo lo que dije antes-

-No tienes que hacer…-

-Tengo que hacerlo- La interrumpió seriamente. -Estuve pensando en ello, y la verdad es que me comporte mal. Ahora creo que tu y Rachel son amigas, y no me molesta en lo mas mínimo; En realidad estoy contento por ustedes- La latina aparto la mirada. Después de todo era cierto; Rachel solamente era su amiga. –Quiero pedirte un favor Santana-

La latina suspiro sin muchas ganas. -¿De que hablas?-

-Tú y Rachel están tan cercanas, que se me ha ocurrido algo. Tal vez… tal vez tu podría decirle a Rachel lo mucho que la hecho de menos. Que quiero volver a su lado, que hare cualquier cosa para tenerla de vuelta. Que soy un buen partido…-

-No- espeto Santana de forma cortante. No iba a hablarle a Rachel de él; Ella sabia que no podía hacer feliz a la diva, que iba a lastimarla. –Ni lo sueñes- dijo dispuesta a irse.

-Se que no te agrado, y tal vez no obtenga tu ayuda. Pero voy a recuperarla, Santana. Rachel y yo estamos destinados a estar juntos; Así es como debe de ser-

Santana rio en un intento de evitar sonar preocupada y salió de ahí. Justo al llegar al medio del salón, vio a Rachel llegando. Sonrió sintiéndose mas tranquila, y se acerco a ella.

-¿Dónde diablos has estado, Berry?- le riño fingiendo molestia. Sin embargo estaba tan feliz de verla.

-Había mucho tráfico- respondió la diva con una sonrisa condescendiente.

-Mas bien creo que tu no puedes llegar puntual a un lugar desde que voy por ti a todas partes- le dijo con la toda intención de enfadarla.

-¡Vamos, Tana! Apenas y he llegado unos diez minutos tarde- dijo la diva con un gesto de exasperación.

La latina puso los ojos en blanco. –Como sea, he preguntado en la cocina, y me has dicho que lo único cien por ciento vegano que tienen es la ensalada. Así que supongo que tendrás que llenarte con lechuga- comento mientras se encaminaban a la mesa de los New Directions.

-No tienes que preocuparte; He comido algo antes de venir aquí. Así que ni siquiera estoy tan hambrienta- respondió Rachel sin darle mucha importancia. Santana asintió aliviada. -¿Qué hay de ti? ¿Qué comerás tu?-

-Dije que no comería tanta carne, no que dejaría de comerla por completo; Hay cordero y no pienso perdérmelo- Rachel soltó una carcajada mientras la miraba divertida. –No te rías de mi, Berry. Aun me preocupo por los animales-

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Rachel’s POV:

-Vamos a bailar, Berry- solicito Santana extendiéndome la mano, después de un rato. No pude negarme; La forma en que me veía, y esa sonrisa nerviosa que se dibujaba en su rostro me hicieron tomar su mano de golpe y saltar hacia la pista de baile sin pensármelo.

Estaba sonando “Moves Like Jagger” de Maroon 5, así que la pista estaba muy animada. Comenzamos a bailar, nada muy íntimo o cercano; Saltábamos de un lado a otro y nos movíamos al ritmo. Simplemente nos estábamos divirtiendo debajo de los coloridos focos a nuestro alrededor.

Pero cuando la canción término apagaron las luces, y comenzó a sonar “You Really Got a Hold On Me”.

Canción:

Santana y yo nos miramos sin saber muy bien que hacer. Después ella me sonrió con seguridad. –Me encanta esa canción- dijo mientras se acercaba a mi. –Bailemos-

Contuve la respiración un segundo. –Nunca he bailado una canción lenta con una chica- explique nerviosa.

-No puede ser tan diferente a bailar con un chico- murmuro. Tomo mis manos y las coloco en su cintura, un segundo después enredo sus brazos alrededor de mi cuello y comenzamos a balancearnos al ritmo de la canción.

Santana me sonrió cuando noto que me relajaba notablemente debajo de su cuerpo; Inclino su cabeza hasta quedar muy cerca del espacio entre mi hombro y mi cuello. –Estamos teniendo un momento extraordinario ¿Cierto?- susurro y pude sentir su cálido aliento estampándose en mi mejilla mientras asentía. -I don't like you; But I love you. Seems that I’m always; Thinking of you- Comenzó a canturrear dulcemente en mi oído; Podía sentir sus labios rozando mi lóbulo. Tarareo la canción un largo rato y después volvió a cantar. - I don't want you; But I need you. Don't wanna kiss you; But I need to-

Un escalofrió recorrió mi espina dorsal; Incline un poco la cabeza para verla, y me encontré con su rostro. -Oh, ho, ho You do me wrong now; My love is strong now- canto mirándome directamente a los ojos con una tierna sonrisa.

Lo que supe después fue que mis labios estaban sobre los de ella. Al principio sentí como sus labios se movían impacientemente sobre los míos; Me besaba casi con el mismo deseo con que yo lo hacia. Pero una milésima de segundo después dejo de moverse, era como si se hubiera quedado congelada ahí mismo; Por fin desenredo sus brazos de mi cuello y me alejo de ella suavemente, con ayuda de sus manos sobre mi clavícula.

-No, Rachel- murmuro antes de irse y dejarme sola en medio de la pista de baile.

Mire a mi alrededor; Supuse que nadie nos había visto. Porque el lugar estaba completamente obscuro y porque todo el mundo tenia puesta su atención en la pareja con quien bailaban. Pero en realidad no me importaba si alguien nos había visto.

Me mordí el labio; Había hecho algo realmente estúpido. Realmente no sabía porque había actuado de esa forma, supuse que toda la situación me había orillado a besarla; Pero no había sido muy inteligente de mi parte. ¡Dios! Me bastaba con recordad su rostro al alejarse de mi; Me miraba como si fuera un monstruo, como si acabara de cometer un crimen. ¿Realmente había sido una experiencia tan desagradable la de besarme? Quiero decir, después de todo me había devuelto el beso, los primeros segundos me había besado ella también.

Sin embargo, Santana no era más que mi amiga, y realmente me sentí mal por haber arruinado lo que teníamos de esa forma.

Mire a mi alrededor otra vez; Sentí la urgencia de ir a buscarla, de hablar con ella, de decirle que había sido estúpida, que no quería que las cosas cambiaran entre nosotras por un estúpido desliz. Pero, ¿Podría realmente decirle todo eso? Iba a ser una situación embarazosa; El simple hecho de volver a mirarla a los ojos me revolvía el estomago. Probablemente ni siquiera sabría que hacer al estar enfrente de la chica a la que acababa de besar, enfrente de mi amiga.

Me lo pensé un poco, y decidí que me asustaba más el hecho de perderla, que la posibilidad de que me mirara con desagrado; Por lo menos tenia que intentarlo. Comencé a correr en la dirección en que ella se había ido. Pero el salón era enorme, y aun después de buscar en todas partes, no pude encontrarla. Tal vez estaba tan molesta, que se había ido de aquí. Y seguramente jamás volvería a hablar conmigo; Sentí un golpe de remordimiento en el estomago.

Llegue al pasillo que daba al jardín trasero; Necesitaba aire fresco, necesitaba pensar las cosas para encontrar una forma de resolverlas. Pero cuando entre al jardín encontré un problema más al cual enfrentarme.

En la esquina mas alejada de la puerta pude ver a Brittany, pero la rubia no estaba sola; El rostro iluminado de Santana, también estaba ahí. Me detuve en seco sobre el marco de la entrada. Ambas estaban tan cerca, y Santana incluso tenia una mano sobre la pierna de Brittany, su otra mano acariciaba su cadera. Lo siguiente que vi, me provoco lo más cercano que alguna vez había sentido a un encogimiento de corazón.

Santana se abalanzo hacia Brittany y estampo sus labios con los de la rubia. Acaricio su mejilla y llevo su mano hasta el cuello de la otra chica, mientras formaba suaves círculos en su espalda. Brittany entrelazo sus dedos en el pelo de Santana y la atrajo hacia ella un poco más. La rubia escalo hacia el regazo de la latina con facilidad y enredo sus piernas en la cintura de Santana. La morena jadeo y dejaron de besarse para tomar aire; Un segundo después Santana comenzó a besarle el cuello a la rubia con impaciencia. Mientras recorría la mandíbula de Brittany, de forma inesperada, nuestras miradas se encontraron; Pero a ella no le importo en lo más mínimo. Alejo la mirada con indiferencia y continúo con sus asuntos. Siguió besando a la rubia por los hombros, quitándole los tirantes del vestido. La mirada de Santana no era ni siquiera similar a su mirada después de que yo la besara, era totalmente distinta, llena de placer, de anhelo.

Me di la vuelta, con deseos enormes de salir de ahí; De no volver a ver a ninguna de las dos, porque, por alguna razón me estaba lastimando. Y fue en ese momento en que me percate de que mi ojos estaban húmedos.

Santana’s POV:

Ciertamente estábamos teniendo un momento encantador. La hermosa melodía, la obscuridad envolviéndonos, el calor que irradiaban sus dedos a través de la tela de mí vestido mientras presionaba mi cintura, y el aroma que impacto mis sentidos cuando acerque mi cabeza a su cuello.

Primero comencé a cantar en voz baja, porque en verdad le tengo afición a esa canción; Pero mientras analizaba la letra, encontré que esas eran, probablemente, las palabras que le diría a Rachel en un momento con ese. Si por lo menos ella fuera mi chica.

Aspire su aroma una vez más, sin dejar de cantar, sin dejar de mirarla. Y de pronto encontré sus ojos sobre los míos. Le sonreí, porque en ese momento, no podía pensar en estar en un lugar mejor que a su lado.

Estaba distraída, pero un segundo después sentí que sus labios se estampaban con decisión sobre los míos; Sus dedos ejercían una presión mas grande sobre mi cintura mientras me atraía a su cuerpo. Por un momento creí que estaba soñando, pero la forma en que nos besábamos, me comprobó que era muy real; Después de todo, la había besado antes, y el sentimiento era conocido.

Pero entonces algo me golpeo. ¡Por dios santo! En que estaba pensando. Deje de besarla de inmediato. Estábamos en un lugar lleno de gente, en medio de una pista de baile, cualquiera podría habernos visto. Sin embargo lo que me hizo alejar a Rachel de mi, fue el recordar las palabras de Finn: -Voy a recuperarla, Santana. Rachel y yo estamos destinados a estar juntos; Así es como debe de ser-

Tal vez él tenía razón. Tal vez ella si le pertenecía a él; Tal vez, al final de todo este embrollo, yo iba a terminar lastimada. Y con tantas cosas arriesgándose sabia que no seria capaz si quiera de intentarlo; ¿Qué derecho tenia yo de interponerme en su felicidad?

La aparte de mis labios y sus dedos soltaron mi cintura, dejándome el área helada por un segundo. –No, Rachel- balbucee mientras me iba de ahí. Probablemente porque no encontré algo mejor para decir.

Me aleje sin un rumbo definido. Cuando me di cuenta, estaba en el jardín trasero. Me encamine hasta el fondo y me senté en una banca. Repase todo lo que había pasado y me encontré mas confundida que al principio. Rachel me había besado ¿Cierto? Fue ella la que me atrajo a sus labios; Y por la forma en que me besaba, puedo decir que se notaba su entusiasmo por hacerlo. Sacudí la cabeza fastidiada. No tenia ningún propósito ilusionarme; Rachel nunca se podría sentir de esa forma con respecto a mi.

-San ¿Estas ahí?- llamo una voz desde la entrada.

Al volverme vi a Brittany y le sonreí débilmente. Brittany sí podía amarme de esa forma, ya lo había hecho antes; Fui yo quien la alejo. –Hola- murmure.

-Te he visto venir hasta acá; No te ves muy bien. ¿Ha sucedido algo?- pregunto mientras se sentaba a mi lado y colocaba su tibia mano sobre mi hombro.

Negué con la cabeza; No quería involucrar a mas gente en lo que sucedía entre Rachel y yo. –Todo esta bien, más que bien- mentí.

-Te he extrañado ¿Sabes?- dijo acercándose un poco mas hacia mi, y de pronto lanzándose hasta mis brazos.

-Sí, lo se. También me has hecho falta- le dije con un suspiro. También la abrace, con mucha fuerza, como si temiera perderla a ella también. Pero de alguna forma no fue tan reconfortante tenerla entre mis brazos; No como había sido tener a Rachel hace un rato. Coloque una mano en su pierna mientras nos separábamos, sin soltar su cadera.

Estuvimos unos minutos en silencio, simplemente mirándonos. –Artie y yo ya no estamos juntos, San- me informo con una sonrisa coqueta. Le sonreí de vuelta, sabiendo muy bien lo que venia. Me acerque a ella, muy cerca, hasta que nuestros labios se encontraron. Besarla solía ser familiar, pero en ese instante sus labios se sentían fríos y desconocidos. No le di importancia; Ella era la chica que amaba.

Comencé a acariciar su mejilla, su cuello, su espalda, mientras ella entrelazaba sus dedos en mi cabello y profundizaba el beso. Sentí como ella se subía a mi regazo y gemí un poco por la falta de aire. Nos separamos, la mire y supe que estar con ella era la mejor decisión que podía tomar. Quería olvidar un par de cosas, y no había una mejor forma.

Comencé a basarle el cuello, y me encamine con mucha paciencia a su mandíbula. Pero a la mitad del camino, detecte unos ojos marrones en la entrada de la puerta, nos estaban mirando. Me tense un poco cuando descubrí lo que temía. Sí, era Rachel Berry.

Sentí una pulsada de culpabilidad cuando nuestros ojos se encontraron; Ella estaba pálida, podía apreciar que sus manos temblaban y note lo alterada que se encontraba al ver las lágrimas de sus ojos. Sin embargo, aparte la culpabilidad al pensar que ella no seria mi problema nunca más. Aleje la mirada de sus insistentes ojos avellana y volví a mis asuntos.

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Atuendos:

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Hola (: Les dejo el nuevo capitulo. Espero les guste. Y sí, lo siento por romper Pezberry. Pero después de la tormenta viene la calma ¿No? Como sea, esta inspirado en todos los rumores de Naya fuera de la serie por culpa de Lea, que rompen mi corazón. No olviden escuchar la canción mientras bailan, que según yo, es perfecta para ellas y vean los outfits de las chicas (: Si siguen leyendo, déjenme sus comentarios y sugerencias. Los leo después.

por monicagleek Sáb Mayo 03, 2014 2:40 pm

Creo que no havia comentado antes en este fic.
Detodas formas lo he seguido fielmente y me alegro de que al fin hayas actualizado ^_^
espero que actualices pronto

por monicagleek Sáb Mayo 10, 2014 3:16 pm

Actualiza pronto porfa :'( :'(

por **Julietta St. James** Mar Jun 03, 2014 4:47 pm

monicagleek escribió:Creo que no havia comentado antes en este fic.
Detodas formas lo he seguido fielmente y me alegro de que al fin hayas actualizado ^_^
espero que actualices pronto

Hola; Muchas gracias por leer, me da gusto que aun me sigan leyendo *-* y que bueno que la historia te gusta. Perdón si he tardado un poco en actualizar xd Sea como sea, disfruta este capitulo (; Besos y saluditos :3

Capitulo 10: Another Girls
Habían pasado casi dos semanas desde la boda, desde su estúpido error, y seguían sin hablarse.
Rachel sabía que todo había sido su culpa; Sabia que ella se había ilusionado en sobremanera con la latina, y que no tenia ningún derecho de obligarla a que correspondiera sus sentimientos. No podía esperar que Santana se enamorara de ella después de un beso forzado; Y no podía exigirle más que una amistad, aunque eso fuera lo que ella más anhelaba.
Por que sí, como si todo el asunto por si solo no fuera suficiente, Rachel tenía que aceptar que tenía sentimientos grandes por la latina; Estaba enamorada, y cada que su subconsciente se lo recordaba una punzada de culpa la golpeaba.
Porque el sentimiento la estaba lastimando. Le dolía ver que Santana se había distanciado de ella con tanta facilidad. Era duro verla tan cerca de Brittany, quien por cierto ya no salía con Artie; Últimamente estaban tan unidas, siempre mirándose, riéndose, tomándose de la mano, tocándose. Haciendo todas las cosas que ha Rachel le hubiera gustado hacer con la latina, pero que jamás podría hacer. Intentaba ignorarlas, pero era complicado, tomando en cuenta que, inconscientemente, siempre estaba buscando a la latina con la vista.
Por su parte, Santana parecía haberla olvidado por completo; Como si no hubieran sido amigas un mes entero, como si no hubieran llorado enfrente de la otra, como si no la hubiera visto desnuda, como si no se hubieran besado, dos veces. Como si Rachel jamás le hubiera importado en lo mas mínimo. Tal vez Finn tenía razón; Tal vez alguien como Santana Lopez jamás podría llegar a ser su verdadera amiga, ni hablar de algo más.
Sin embargo, la diva estaba muy consiente de algo, no podía culpar a la latina cuando había sido su propio error. Se lo había pensado mucho durante la última semana, y había llegado a una conclusión. Era la única culpable y seria ella quien, por lo menos, intentara remediarlo. Tenia que hablar con Santana al respecto, disculparse y recuperar su amistad, si era posible. Por lo menos lo intentaría. El corazón se le aceleraba ante la idea de hablar con ella; En parte de emoción, en parte de nervios. Después de todo, no sabía muy bien que iba a decirle ¿Debía mencionar el beso? ¿Tendría que mentirle, y decirle que no había querido besarla? ¿Iba a renunciar a ella? ¿A decirle que si quería estar con Brittany, tenia todo su apoyo? No le importaba que al final de la conversación su corazón terminara roto en mil pedazos, si tenia la amistad de la latina de vuelta, habría valido la pena soltar una ilusión imposible. De todas formas, tarde o temprano tendría que hacerse a la idea de que Santana no la vería jamás de esa forma; Y entre mas rápido mejor para ambas.
La mañana siguiente, se armo del valor suficiente como para, por fin, hablarle. Tuvo suerte de encontrarla en su casillero organizando algunas cosas; Y fue aun más afortunada, ya que Brittany no estaba cerca.
Tomo aire he ignoro que sus piernas le temblaban mientras caminaba hacia el casillero de Santana.
-Hola- murmuro inaudiblemente cuando la latina cerró la puerta y la vio. Santana palideció ligeramente, pero no dejo que le afectara; Aparto la mirada, ignorándola, como si la diva no estuviera enfrente de ella, y se dio la media vuelta dispuesta a irse. –No, Santana- susurro Rachel suplicante. -¿Podríamos por lo menos hablar?- Intento que la petición sonara natural, pero, incluso para sus oídos, parecía que estuviera rogando por ello. -En realidad me gustaría arreglar las cosas entre nosotras- dijo Rachel agachando la mirada con vergüenza.
-Las cosas van bien entre nosotras- espeto Santana secamente, volteándose para encararla, pero su mirada estaba clavada en el suelo.
-¿Ah sí?- cuestiono la diva. –Porque yo no lo creo-
-Están como deberían de estar, Rachel-
-Ni siquiera hablamos; Mas bien es como si tú me ignoraras- dijo la diva dolida, mirando a Santana a los ojos, rogando porque ella la mirara también.
-Hago lo que se supone que debo de hacer- aclaro la latina sin mirarla aun.
-Pero Santana…-
-No, Rachel- interrumpió Santana mirándose las manos nerviosamente. –Llegamos muy lejos. Todo este asunto de ser amigas se salió de control; Y lo siento, pero no puedo verlo de la forma en que tú lo ves. He llegando al límite- susurro con un hilo de voz.
-Lo siento mucho, Santana- dijo la diva desesperada. –Fue un error; Lo estropee y lo siento mucho-
-Rachel yo…-
-No quiero que las cosas cambien entre nosotras, Santana- interrumpió Rachel y sus ojos se humedecían con cada una de sus palabras. –Hecho de menos el hablar contigo; Extraño nuestra amistad. Y me siento como una idiota por haber estropeado todo. Tienes que saber que fue un error, que no era mi intención hacerlo. No quería hacerlo; Me deje llevar por el momento, y me arrepiento. No se si lo comprendas, no se si puedas perdonarme. Es solo que no quiero dejarlo ir con tanta facilidad- murmuro y las lágrimas ya estaban corriendo por sus mejillas. Se odio a si misma por abrirse tanto en frente de la latina, por dejarle ver lo mucho que le importaba. Y en parte, también, porque sentía que el alma se le salía por la boca al pronunciar cada una de sus palabras; Porque, en gran parte, le estaba mintiendo. No se arrepentía, quiso hacerlo con tantas ganas, que ni el sentido común la había detenido.
Al escuchar sus suspiros, Santana finalmente la miro, percatándose de su llanto. –No llores, Rach- le dijo tomándola por el hombro. –No me gusta cuando lloras- susurro. –Mucho menos cuando es por mi culpa-
-No es tu culpa- le aseguro la diva. –Todo ha sido mi culpa, Tana. Lo siento mucho-
Fue como si al disculparse por algo que no sentía realmente, se rompiera todo lo que seguía en buen estado. Chillo con más fuerza, cubriéndose el rostro con las manos, y sintió que Santana la abrazaba torpemente, como si no lo hubiera hecho antes, como si hubiera olvidado como hacerlo. Se la llevo a una esquina del pasillo y la abrazo con más fuerza.
-Esta bien, Rach- le susurro en el oído. –No llores, estamos bien- le dijo de forma reconfortante trazando círculos en su espalda, enviándole su calor. –Eres mi amiga, Rachel; Siempre vas a serlo- le prometió estampando sus labios, muy rápidamente, en el cabello de la diva.
Rachel sintió una oleada de felicidad; Tenía a su latina de vuelta. La envolvió con sus brazos con mucha fuerza, como si temiera que otra cosa las separara, y durante unos minutos descanso su cabeza en el pecho de la latina sin mirarla, sintiendo como ella jugaba con las puntas de su desordenado cabello; Como si después de todo, también la hubiera extrañado.
Rachel fue quien se alejo un poco para mirarla con más claridad. –Esta bien si quieres estar con Brittany; Tienes mi apoyo, Santana. Estaré muy contenta por ustedes- le dijo, y se sorprendió a si misma porque su voz no se rompió.
Al principio, Santana la miro confundida, después como si le doliera, al final soltó una media sonrisa. –Creo que la amo- confeso sin mirar a Rachel a los ojos. –No puedes alejarte de alguien a quien estas destinado a amar, supongo- explico encogiéndose de hombros.
Rachel forzó una sonrisa. –Por supuesto que no- dijo, y la decepción en su voz fue muy clara. –Deberías hablar con ella al respecto- le aconsejo apresuradamente, como si no quisiera decirlo.
-Sí, lo he estado pensando; Quiero que comprenda lo mucho que la amo, pero también me gustaría que me diera su apoyo al enterarse de que no estoy lista para enfrentar a todos y decirlo en voz alta-
-Lo entenderá, Santana. Se que también te quiere- le dijo la diva sinceramente.
Un silencio se formo y ninguna de ellas quiso cruzar miradas durante ese rato. –También me has hecho falta, Berry- dijo la latina rompiendo el silencio. –Incluso he extrañado cuando te pones molesta y comienzas a hablar sin parar-
Rachel puso los ojos en blanco, pero no pudo evitar sonreírle, una sonrisa genuina. -¿Quieres ir a la cafetería a comer algo?-
Santana asintió. –Seguro, tengo este periodo libre-
Ambas se colgaron sus mochilas y caminaron hacia pasillo abajo mientras conversaban animadamente; Y les sorprendió lo mucho que lo habían echado de menos.
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-Estoy muy emocionada por las nacionales- murmuro Rachel con una sonrisa soñadora en el rostro. Su día de clases había terminado; En la última clase, que era en el coro, Mr. Schue les había informado que este año las nacionales iban a ser en Nueva York.
Santana se había ofrecido a llevarla, como lo hacia antes, así que amabas salían de McKinley con rumbo al auto de la latina.
-Lo se, será grandioso. ¿Sabes? Será mi primera vez en Nueva York- confeso la latina.
Rachel la miro con una ceja arqueada. –Entonces lo haremos especial- le propuso con entusiasmo. -Tal vez podamos escabullirnos para ir a Central Park- dijo dando palmaditas.
La latina sonrió animada. –Tal vez- susurro con esperanza. -Pero eso sí, estoy segura de ya será especial, porque ganaremos-
-Eso espero- concordó la diva con la mirada perdida. -Es solo que…- comenzó a balbucear insegura.
-Tendrás el solo, Rach- interrumpió la latina. -Nos harás ganar, simplemente lo se- le aseguro mientras la miraba reconfortantemente.
Rachel esbozo una sonrisa tímida. –A ti también te vendría bien un solo-
Santana negó con la cabeza. –No creo que este lista para ello- hizo con una mueca de desagrado. –Por otro lado, estoy considerando cantar algo pronto- le confeso apartando la mirada.
-¿Algo para el Glee Club?- pregunto la diva.
-No- dijo Santana rápidamente. –Algo para Brittany-
-Ah- suspiro Rachel.
-No se si pueda hablar con ella al respecto de lo que tu ya sabes; Es por eso que lo he pensado y creo que me seria mas fácil cantarle algo- explico jugueteando con sus dedos.
-Es una muy buena idea, Santana- le dijo la diva en forma de apoyo.
-Sí, eso creo. Sin embargo me gustaría pedirte algo-
-¿A mi?- cuestiono la diva asombrada.
Santana asintió. –Me gustaría que cantaras conmigo; Ya sabes, me haría sentir mas segura-
Rachel sonrió enternecida. –No tienes que pedírmelo dos veces, Tana-
-Gracias por ayudarme con todo esto, Rach. Eres una gran amiga- le aseguro mirándola directamente a los ojos.
Rachel iba a decirle que ella también era una gran amiga, que era, tal vez, su única y verdadera amiga, pero antes de que pudieran hacerlo, se percato de que habían llegado al auto; Y se llevo una sorpresa cuando levanto la mirada y se encontró con la rubia distraída, que estaba sentada sobre el cofre del auto de Santana. Brittany S. Pierce.
-¿Qué haces aquí, Britts?- cuestiono la latina, casi tan confundida como Rachel.
-Estaba esperándote- dijo Brittany encogiéndose de hombros. -Quería que me llevaras a casa; Ya sabes, la otra vez, me prometiste helado; Además hoy no te he visto, San. Y te he súper extrañado- dijo haciendo un puchero.
Santana abrió la boca desconcertada. –Escucha Britt, me gustaría hacer todo eso, pero le he dicho a Rachel que la llevaría, y es lo que voy ha hacer- sentencio apenada. –Tal vez otro día…-
-Pero, que hay de nuestros dulces besos de chica, Sany. Realmente quiero pasar la tarde contigo.- interrumpió la rubia suplicando. -Por favor-
La latina se sonrojo notablemente. -No, Britt; No puedo…-
-Esta bien Santana- interrumpió Rachel con una sonrisa forzada. –Lleva a Brittany, yo puedo caminar hasta mi casa; No hay ningún problema- aseguro, pero la desilusión se presento en su rostro.
-¡Gracias, Rachel! Eres súper increíble- exclamo Brittany entusiasmada.
-Pero…- comenzó a decir Santana mirando a la diva con desdén.
-La has escuchado, San; Rachel esta de acuerdo ¡Vamos!- insistió la rubia jalando a la latina hacia el auto.
Santana sacudió la cabeza desesperada, mientras miraba a la diva. –No tengo que…-
-Esta bien, Santana. Te veo mañana- espeto la diva dolida. Se dio la vuelta y se encamino hacia su casa sin mirar atrás.
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Si en algún momento pensó que tendría a Santana de vuelta por completo, estaba muy equivocada. Ahora, la latina le pertenecía, en gran parte, a Brittany. Le dolía dejarla ir, pero era lo mejor que podía hacer; No podía acostumbrarse a tenerla tan cerca, para después verla irse con la rubia y sentirse peor, de alguna forma mas vacía.
Toda la tarde se la había pasado pensando en Santana y en Brittany; En todo lo que estarían haciendo, en lo que no estaba haciendo ella. Le molestaba pensar en eso, porque la hacia sentir desdichada. Pero, ¡Diablos! Estaba muy celosa.
Intento distraerse mientras hacia su tarea, pero fue estúpido, no podía concertarse. Después tomo un libro y comenzó a leerlo, pero las palabras no tenían coherencia. Se puso ha ensayar una rutina de baile, pero fallo tantas veces que le dieron ganas de gritar. En el momento justo en que pensó que perdería la cabeza, sonó su celular y eso pareció llevarse toda su atención.
Tomo el teléfono y miro la pantalla, era un texto de Santana. La diva sonrió nerviosamente, como si la misma latina la estuviera viendo. Abrió el mensaje.

Hey, Berry, estoy libre ahora; ¿Qué tal si vamos a tomar algo a Cheep Cherry? Te veo ahí a las 6:00 Santana.

La diva le sonrió a la pantalla del teléfono y tecleo un –Seguro- rápidamente, antes de levantarse y alistarse para salir a la fuente de sodas.
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Cuando llego al lugar se sintió insegura, porque se percato de que la latina no había llegado; Sin embargo estaba muy entusiasmada por verla. El corazón se le aceleraba con el simple pensamiento, y se reprendió a si misma ante la sensación; Porque en este punto, ya debía de tener muy claro que Santana Lopez no la quería, ni la iba a querer en esa forma, nunca. Mejor saberlo desde ahora.
Se mordió el labio ante el pensamiento, que la lastimaba levemente; Sacudió la cabeza con hastió e impacientemente fue y se sentó en una mesa, para así, esperar a la latina.
Había estado en aquel restaurante de comida rápida antes, pero nunca se había sentido tan emocionada. Por primera vez noto que era un espacio moderno y retro; Las meseras enfundadas en vestidos simpáticos de un rosado intenso y un delantal de un rosa mas claro, andaban alrededor de la pista en patines, todas cargando charolas, y entregándolas hábilmente a las diferentes mesas. Había una música en el fondo y unas luces neón cubrían el lugar, que, por cierto estaba lleno de chicos.
Eran pasadas de las seis y Santana no había llegado; El tiempo parecía ir mas lento de lo común. Rachel comenzó a dar golpecitos en el piso con desesperación mientras jugaba con sus dedos nerviosamente ¿Por qué diablos había llegado tan temprano? La música del fondo la estaba angustiando cada vez mas, no sabia porque, pero era exasperante escuchar canciones de desamor.
El tiempo paso y paso, y las chicas en patines también pasaban incontrolablemente frente a ella; Incluso les había dicho que no era tiempo, porque estaba esperando a alguien, cuando varias de ellas se ofrecieron para tomar su orden.
Miro su teléfono, 7:10, sí, ya había tenido suficiente. Soltó un bufido, mientras marcaba el número de la latina. Timbro una vez, dos veces, tres; Nadie respondió. Rachel sintió que el enojo la abordaba. Colgó y en cuanto lo hizo recibió un mensaje.
Lo siento mucho, Rachel. Realmente quería llegar a Cheep Cherry, pero Britt me ha convencido, de alguna forma, de llevarla a este especial de tres horas de dibujos animados, y se me ha pasado el tiempo; Me olvide de decírtelo. Lo siento muchísimo.
Santana.
La diva tuvo que morderse la lengua y que apretar los puños para no lanzar el celular a través de la mesa. Sí, se lo había hecho otra vez, poner a Brittany antes que a ella. Dolía, pero no podía culparla, no podía culparla por elegir a la rubia en su lugar. Suspiro fastidiada, y se dijo a si misma que tendría que acostumbrarse si quería tener la amistada de la latina; Acostumbrarse a quedar en segundo plano. La rabia que la abordaba al darse cuenta de que Santana no había tenido la suficiente decencia como para cancelar los planes unas horas antes, era tanta que le dieron ganas de echarse a llorar. No iba a ser igual otra vez, después del beso, ella misma la había empujado hacia Brittany y se sintió como una idiota por hacerlo, por arruinar las cosas para siempre.
-Eh, disculpa ¿Puedo tomar tu orden?- interrumpió una voz femenina mientras le pasaba una mano frente a los ojos.
Rachel sacudió la cabeza, regresando al presente, y volvió la mirada hacia donde provenía la voz. Una mesera nueva, quien tenía un delantal rosa y unos patines como el resto, estaba parada a un lado de la mesa y la miraba confusa. Era una chica alta, delgada, y con el cabello castaño sostenido en una cola de caballo.
-Oh- susurro la diva avergonzada. –Lo siento, estaba distraída- se disculpo apartando la mirada.
La camarera rio divertida. –Esta bien, no hay ningún problema- aseguro encogiéndose de hombros. -¿Qué te traigo?-
-Lo… lo siento, pero nada- murmuro la diva avergonzada. -De hecho creo que me voy a ir. Estaba esperando a alguien, pero ese alguien no va a venir- explico encogiendo los hombros.
-Así que es por eso que luces tan desanimada, eh?- cuestiono la mesera con una sonrisa tímida. –Escucha, esto es lo que haremos- propuso entusiasmada. -Voy a traerte un batido, porque eso siempre anima a la gente, y después si es que te sientes mejor, puedes irte ¿Cómo suena eso?-
Rachel miro a la chica con una media sonrisa. –Supongo que esta bien; De todas maneras, no tengo nada mas que hacer- dijo encogiéndose de hombros.
-De acuerdo- murmuro la mesera mirando a la diva con demasiada atención por un momento. Rachel sintió como el rojo se apoderaba de sus mejillas, no le era usual tener esa atención. -¿Qué sabor?- pregunto con un suave tono de voz.
-El que sea, realmente no importa- susurro la diva con un hilo de voz.
-Por supuesto que importa, mujercita. Si te traigo un sabor que te parece desagradable, voy a sentirme culpable- dijo la camarera con una fingida preocupación.
-Bueno entonces tendrás que elegir bien, porque confió en tus habilidades- murmuro la diva esbozando una sonrisa.
La castaña más grande hizo una mueca. –Esta bien, entonces; Hare lo mejor que pueda- dijo tímidamente. –Solo si prometes que si te traigo un sabor que te desagrada, me lo tiraras todo sobre la cabeza, ¿De acuerdo?- Rachel soltó una carcajada en lo bajo. –Vamos prométemelo; No me importa agacharme para que tengas que hacerlo- provoco la chica con una sonrisa maliciosa.
-No soy tan pequeña- espeto la diva a la defensiva, pero su sonrisa seguía ahí. –Podría subirme en una silla-
La mesera sonrió ampliamente. -¿Entonces, es una promesa?- cuestiono. Rachel rio levemente y asintió divertida. –De acuerdo; Vuelvo en un minuto- le dijo y después de lanzarle un guiño coqueto a la diva se dio la vuelta y salió de ahí.
Rachel se quedo mirándola hasta que desapareció; Sintiendo una extraña corriente eléctrica en todo su cuerpo. Inconscientemente se sonrió a si misma, pensando en como aquella desconocida la había puesto de mejor humor, aun después de lo que Santana había hecho.
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-Aquí tienes- dijo la mesera cuando estuvo de vuelta, depositando el vaso de batido en la mesa de la diva.
Rachel le sonrió con simpatía. –Gracias- murmuro tomando el vaso.
-Es de…-
-Déjame adivinar- pidió Rachel tomando un largo trago del batido. -¿Mora azul?-
La chica sonrió. –Sí, así es. Es mi favorito, así que si no te gusta, al menos disfrutare tenerlo en la cabeza- explico encogiéndose los hombros.
Rachel negó apresuradamente. –En realidad me gusta-
-Genial, no tendré mora azul escurriéndome por el cabello- murmuro la chica aliviada.
-No, ciertamente, no- concordó la diva con una sonrisa, volviendo a beber de su vaso.
Pero la mesera se quedo ahí un momento, simplemente mirándola, como debatiéndose algo. –Soy Alexis, por cierto- se presento nerviosamente. –Alexis Madden-
-Rachel Berry- murmuro la diva.
-Linda- susurro Alexis mirando a Rachel con una sonrisa boba. –Lindo- se corrigió apresuradamente. –Lindo nombre-
-Gracias- susurro apenada la castaña mas pequeña.
-¡LEX, VUELVE AL TRABAJO!- grito alguien desde la parte trasera, dirigiéndose a Alexis, interrumpiendo su conversación.
Ella se miro las manos avergonzada. -Cierto, estoy trabajando- se recordó en voz baja. –Voy… Voy a… a seguir con… con mis asuntos- se excuso frente a Rachel.
La diva le sonrió comprensiblemente. – ¿Cuánto va a ser del batido?- pregunto mientras sacaba su cartera.
Alexis la detuvo. –No es nada, Va por mi cuenta- le dijo con una media sonrisa.
Rachel negó apresuradamente. –Tengo que pagarte- insistió.
-No, Rachel, en verdad, te lo estoy invitando- le aseguro rechazando el dinero. –Solo quería hacerte el día un poco mas agradable ¿Lo he logrado?- cuestiono interesada.
Rachel esbozo una media sonrisa. –Vaya que lo has hecho- le dijo. –Me siento mucho mejor ahora- aseguro apartando la mirada.
-Entonces, esta bien; He logrado mi cometido- dijo Alexis soltando una risa nerviosa.
Un incomodo silencio se sobrevino; Ambas se quedaron ahí, compartiendo una mirada inquisitiva. La diva suspiro. –Vamos, Alexis, déjame pagarte- suplico.
La castaña más grande negó con la cabeza. –No lo creo- sentencio. –Escucha, si no vuelvo a trabajar van a despedirme, y eso es lo ultimo que quiero- murmuro acercándose a la diva, para que no la escucharan. -Así que no me pelees más; Tómalo como una cortesía tonta- le aclaro sin darle mucha importancia.
-Gracias- susurro la diva.
-No es nada- Alexis le sonrió de una forma tan peculiar y sincera, con las comisuras levantadas en una extraña forma y los hoyuelos tan perfectamente marcados en sus mejillas; Sus ojos marrones iluminados completamente, que Rachel sintió un golpe de emoción. Le devolvió la sonrisa; Y se vino otra larga mirada entre ambas. Alexis fue la que aparto la mirada, mientras pasaba un mechón de cabello detrás de su oreja y reía deleitada. –Realmente tengo que irme- susurro entre risitas tontas.
Rachel asintió ampliando su nerviosa sonrisa. –Cierto-
-Adiós- murmuro la castaña en patines, antes de guiñarle un ojo a la diva y salir hacia el lado contrario rodando.
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Hola! Ahora sí, y por fin, me toco actualizar xD Ojala les guste el capitulo. Se me ha venido a la cabeza una idea encantadora. Seguí el consejo de alguien y ahora estoy introduciendo a Alexis Madden (: Quien nos tiene preparadas algunas cosas. Sepan que Alexis en mi mente es Nina Dobrev, así de sencillo (Es de mis actrices favoritas junto con Lea) Ella será la manzana de la discordia, junto con Britt, entre San y Rach. Ojala la disfruten, o no. Déjenme sus comentarios y opiniones, si es que todavía me leen xc Jaja BESOS.

Alexis Madden:

por gleebang Mar Jun 03, 2014 9:07 pm

actualiza porfavorr !!!:(

por monicagleek Jue Jun 05, 2014 4:22 am

La manzana de la discor dia jajajaja
al menos ambas ha ablado y se han perdonado.
Ahora no tardes hen actualizar jeje

por gleebang Jue Jun 05, 2014 8:40 pm

actualiza plis

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