Fic Brittana- Cambiaste mi vida FINAL ♥

Hola.
Siempre te leo pero es primera vez que comento : )
No entiendo porque san no le cuenta a quinn, esta jugando con fuego y dicen que el que juega con fuego se quema jajajaj
Ahora quiero ver que pasa entre ellas en la fiesta.
Adiós cuídate.

sugar es la mejor, que fastidio con la hanna, y espero que britt entienda!

POV SANTANA

Nunca creí que estaría en esta situación, coqueteándole a alguien a quien detesto solo para salvar mi pellejo. Hasta ahora no descubría si Hanna se estaba creyendo mi amabilidad o todo era una táctica para llevarme con ella a su casa. Tan obsesionada puedes estar por alguien?

–Bueno, después de hablar de cosas sin sentido.- dijo enredando uno sus dedos en mis cabellos, odiaba que hiciera eso. –Puedes decirme que paso por tu cabeza cuando decidiste meter a la niña en tu cama?- tan desagradable podía ser una persona?

–Aún no ha llegado a mi cama, solo la besé.- dije mirándola fijamente, si quería darle la maldita pastilla tenía que besarla, así que no me quedara de otra que coquetearle un poco, solo lo suficiente.

–Dale, en serio quieres que te crea eso?

–Sabes que no miento, no tendría ningún problema en decirte la verdad.

–Es una niña! Cuántos años tiene?

–Importa? A mí nunca me importo la edad.- dije alzando mis hombros de manera casual.

–Ni tampoco te importo que sea la hermana menor de la única amiga que tienes?- me dijo bebiendo su trago.

–Es solo una chica.- mentí.

–Entonces no creo que le importe que nos vayamos ahora no?- dijo alzando su ceja. Me hablaba como si yo fuera un objeto sexual o algo parecido y eso me asqueaba demasiado.

–Es lo único en lo que piensas?

–No, pero cuando te veo a ti sí.

–Ok, sé que soy irresistible, pero tú realmente me subes la moral.

–En serio? Pensé que no te afectaban mis palabras?

–Los halagos los recibo con gusto.

–Vas a tomar algo?

–Me quieres emborrachar?- dije levantando mi ceja sexymente.

–No hagas eso.

–Que cosa?

–Coquetearme.

–Estás segura?- dije acercándome peligrosamente, no podía creer que estaba haciendo esto, pero Sugar me había dado la única solución y no tenía otra opción. Mientras más rápido lo haga, más rápido me libero de todo esto.

–Dale pidamos algo.- dije girando bruscamente dejando su mirada fija en mis labios. Era tan fácil llamar su atención.


POV BRITTANY


Artie me tenía agarrada de la cintura y se movía al compas de la música y simplemente no podía hacer un paso y no sabía cómo soltarme de él. No podía dejar de ver a Santana. Que hacía con Hanna? Y tan pegadas? Osea, confío en ella, pero igual eso me parecía rarísimo, se supone que la odia y ahora le habla con mucha tranquilidad y hasta me da la impresión que le esta coqueteando! Es eso posible? Me estaba empezando a desesperar, ahora estaban tomando algo y Santana le hablaba al oído, no podía creer lo que estaba viendo. Gracias a Dios, la canción acabo y el DJ hizo un pare a la música para decir unos avisos, en ese momento me escape y regrese a la mesa. Estaban solo Sugar y Rachel conversando. Rachel me miraba fijamente, al parecer ella tampoco entendía lo que pasaba ya que giraba a ver a Santana cada segundo con una expresión de total confusión.

–Que les pasa? Porque ven a Santana así?- preguntó Sugar y Rachel y yo nos miramos.

–Me parece raro que hable con ella.- dijo Rachel.

-Es Santana, no debería sorprenderte.- dijo Sugar y en ese momento vi a Santna besarla. Sentí como mi corazón se quebraba y los ojos de Rachel se abrieron como dos platos.

–Me pueden decir que eso es broma?- dijo Artie sentándose con nosotros y Sugar se rió.

–Santana es una genia, en serio la admiro. Lo hizo tan rápido.- dijo y todos la miraron y ella se quedo con una expresión de lamentarse por haber dicho algo que no debía.

–De que hablas?- le preguntó Rachel, yo no podía dejar de ver esa escena. Creo que nada ni nadie me quitarían esta imagen de la cabeza nunca. Los brazos de Hanna rodearon a Santana y ella solo la besaba, en ningún momento la tocó, pero supongo que no era necesario, ya la debe haber tocado bastante.

–Porque todos miran hacia allá?- dijo Quinn llegando y cuando levanto su mirada se quedo igual de sorprendida que Rachel.

–Porque está besando a Hanna?- preguntó Puck.

–No tengo idea.- le contestó Rachel. En ese momento se alejaron y Santana se llevo su trago a la boca mientras que Hanna rodeaba sus propios labios con sus dedos, era ridícula. Santana le dijo algo al barman y en segundos este le alcanzo una copa a Hanna. Ella se lo tomó prácticamente de un sorbo, la bebida era de colores y como la preparo, se notaba que tenía todo tipo de alcohol. En ese momento Hanna acomodo su mano en la mejilla de Santana y la besó, no pude más y me paré rápidamente.

–Que haces?- me preguntó Artie.

–Necesito ir al baño, ya vengo.- dije y prácticamente corrí al baño. Cuando llegue abrí el fregadero y me mojé el rostro, no me había dado cuenta que tenía un par de lagrimas en él. En ese momento se abrió la puerta y rogue con que fuera Santana y me dijera que todo había sido un malentendido o algo por el estilo pero no era ella, era Rachel.

–Estas bien?- me preguntó.

–Sí.- hasta ahora nunca habíamos hablado del tema, pero las dos sabíamos que ella sabía todo.

–Te juro que no sé qué pasó. En un momento Hnna vino, se acercó y le dijo algo al oído y San de la nada se fue. No entiendo esto, se supone que está contigo y aparte ella no soporta a Hanna.- dijo parándose a mi lado y mirando mí reflejo en el espejo.

–No estamos juntas.- dije sintiendo mi corazón partiéndose poco a poco.

–Pero salían, Santana quería estar contigo, ella me lo dijo.

–Supongo que se le olvido.

–No digas eso, hay alguna explicación.

–Sí? Cual?- se que estaba siendo antipática, Rachel no se merecía mi actitud, pero yo no la llame y no me sentía bien como para sonreír y creer en algo que no se asemejaba a lo que vi afuera.

–Debe haber alguna Brittany, conozco a Santana, lo que menos haría es hacerte sufrir.

–Yo también creí que la conocía. Voy a regresar.- dije pasando por su lado y saliendo del baño. Camine hacia la mesa y todos conversaban de manera natural, supongo que en el fondo estaban acostumbrados a verla besar a cualquier tipa en un bar. Volví a alzar la vista por última vez y la situación no había cambiado, me resigne a seguir con la noche. No podía hacer nada más, esperaría hasta la hora de irnos y posiblemente lloraría en mi habitación toda la maldita noche por haber sido tan ingenua y haber confiado en ella.


POV SANTANA

Hanna ya estaba en el punto máximo de la ebriedad, le decía cualquier cosa y se reía, lo único que quería era besarme y insinuarme que quería que la llevara a casa. Cuando me besó, bote a propósito su bolso y ella se giro para recogerlo, en ese momento saque la pastilla de mi bolsillo y me lo puse debajo de la lengua, sabia asqueroso, quizás más que el sabor de los labios de Hanna.

–Ya está.- dijo riendo acomodando su bolso nuevamente en el asiento.

–En que estábamos?- dijo y se me acercó. Su lengua entraba y salía de mi boca y en un momento acaricie su cuello y aproveche en pasarle la pastilla, mis ojos los tenía abiertos para ver si ella se daba cuenta, lo cual no hizo. Después me aleje y hice que tomara de su bebida.

–Dale, te acabas este trago y te llevo a casa.- dije dándole una nueva copa.

–En serio?- me miró.

–Sí, dale tómatelo todo.- dije empujando la copa en su boca. Se lo tomo todo y ya estaba mi trabajo hecho. Le hable unos segundos de lo primero que se me venía a la mente y vi como sus ojos no sabían para donde ver y su cuerpo se balanceaba de un lado a otro, creo que esta droga era más fuerte de lo que pensé.

–Ya nos vamos?- me preguntó.

–Sí, dale vámonos.- dije ayudándola a levantarse. En ese momento vi a la mesa de los chicos y todos conversaban tranquilamente, cuando vi a Brittany vi tristeza en su mirada, no era la misma, estaba apagada y era obvio que me había visto. La besé muchísimas veces porque quería emborracharla antes de darle la pastilla. Su mirada me hizo sentir la peor persona del planeta y unas ganas de correr hacia ella y decirle toda la verdad me embargaban pero tenía que seguir con el plan y así terminarlo. Agarré a Hanna y me la lleve hacia la puerta.

–Llamare a un taxi, préstame tu celular.- dije y cuando lo tuve en mis manos busque la foto y la borré, la muy perra tenía 4 fotos de nosotras. Fingí llamar por celular, al final, ella no se daría cuenta, estaba mirando las estrellas. Lo guardé en su bolso y paré un taxi, el trabajo ya estaba hecho y yo estaba lo suficientemente sobria como para manejar la situación.

–Dale sube, yo ahora subo.- dije agachándome para que crea que estaba recogiendo algo. Cuando subió cerré la puerta.

–Llévela al hotel Fray.- dije y el taxista me miró asombrado. –No me escucho? Llévela al hotel ahora, ahí la van a recibir.- dije y le lance un billete al taxista. Hanna intentó decir algo pero el taxista arrancó. Estaba por volver a entrar, pero sería incomodo estar ahí con todos y ver la mirada de Brittany, así que me apoye en la pared a esperar a que salgan, total ya era bastante tarde así que en cualquier momento saldrían.


POV BRITTANY


Todo fue peor cuando vi a Santana salir con Hanna casi cargándola, ya no podía aguantar más, necesitaba irme.

–Quinn, te molesta si ya nos vamos? Estoy muy cansada.- dije en su oído y ella sonrio y le dijo algo a Puck.

–Dale, vámonos.- me dijo y se levanto. Nos despedimos de todos y salimos del lugar, Puck y quinn agarrados de la mano adelante y yo atrás caminando con el peso de sentirme tan miserable.

–No lo puedo creer.- dijo Puck riendo y cuando alce la mirada Santana estaba apoyada en la pared, con un aspecto diferente, como irritada.

–Que haces acá? No te habías ido con Cece?- le preguntó Puck, Quinn solo la miraba decepcionada y yo trataba de no hacerlo, pero no pude. Su mirada intensa y prendida como una fogata me invadió haciendo que mi cuerpo temblara.

–No, solo la acompañe a tomar un taxi.- dijo agachando la mirada.

–Porque no te fuiste con ella?- preguntó Puck.

–Porque no quería.

–Pero si querías besarla toda la puta noche? No querías que te dejara en paz? Ahora ya no lo hará!- dijo Auinn claramente incomoda.

–Cálmate ok, ya está, lo hice y punto.- dijo caminando hacia el estacionamiento. Los tres caminamos detrás de ella y Puck abrió las puertas. Cuando entramos giré para verla y ella no me miraba, su mirada estaba perdida. El viaje fue en silencio, nadie dijo ni una sola palabra. Cuando llegamos me baje y Santana se bajo seguidamente y subió las escaleras, sin mirar atrás.

–Me quedaré con Puck porque mañana iremos a almorzar con su familia, nos vemos en la noche ok?- me dijo Quinn y yo solo sonreí.

–Que la pasen bien.- dije mirando a Puck.

–Brittany, no le prestes atención a Santana. Sabe que ha hecho mal las cosas y estará toda idiota hoy. Solo anda a dormir tranquila.- si claro, dormir tranquila? Ahora tenía que pasar toda la noche solo con Santana y me decía que duerma tranquila?

–Ok.- dije despidiéndome con la mano, ellos se fueron y dude en entrar, tan malo sería dormir en las escaleras por un día? Me entro un aire frio por las piernas diciéndome que era muy mala idea. Me decidí entrar y cuando lo hice Santana estaba sentada en la escalera con sus manos en su cabeza.

–Todo bien?- dije tratando de controlar mis lagrimas, verla así, me dolía, sentía que la odiaba por hacerme sentir así a pesar de todo lo que hizo.

–Todo es una mierda.- dijo alzando su mirada, vi lágrimas en sus ojos. Se arrepentía?


Fran_ci : GRACIAS♥SIGUE COMENTANDO (:

Micky Morales: A SUGAR LA ADORO

Jane0_o: SABES ODIO A HANNA PERO ASÍ ESTA ESCRITO EL FIC

Tatymm: SANTANA ES UN AMOR LO JURO♥

Raxel_vale: HEY YA ACTUALIZE...Y SI HANNA ES UNA LOCA DEL MAL!


GRACIAS POR LEERME UN BESO ♥

no comento siempre, pero siempre leo me gusta mucho tu historia y mas aun que nos consientas tanto subiendo capítulos seguidos gracias :)

holaaaa!!!
e.e.e.e.e.e.!!!!
gracias por actualizar

uuuu pobre britt britt :/
y san algo arriesgado lo que hizo
pero la loca de hanna se lo merecía un poco

saludos es genial el fic

Noo por que lo dejaste ahi?
Uffff
Ya mejor que le digan a quinn!
Saludos y yo tambien odio a hanna!

POV SANTANA


No pude aguantar no llorar, la cara de Quinn de decepción y la cara de Brittany de tristeza simplemente me destruían. Creo que sería capaz de hacer cualquier cosa para verlas sonreír y ahora me miraban de una forma que perforaba el pequeño corazón que tengo. Brittany estaba sola y eso me alegro un poco, Quinn de seguro se quedaría con Puck y por lo menos tendría oportunidad de explicarle todo.

–Estas bien?- me preguntó mirándome y cuando levante la mirada vi su expresión, vi como cambio al verme llorar y eso me produjo una alegría instantánea. Me hizo sentir bien, me hizo sentir que a pesar de haberme comportado como una mierda aun me quería, por más que allá tenido una excusa, eso ella aun no lo sabía y aun así me quería.

–Todo es una mierda.- dije mirándola fijamente.

–Porqué?- me preguntó.

–No viste lo que hice?- pregunté y ella agacho su mirada y dio un paso para subir las escaleras por mi lado, cuando subió dos escalones cogí su mano. –Espera.

–No tengo ganas de hablar.- dijo tratando de soltarse.

–Dame un minuto para contarte todo.

–No estás en posición como para pedirme algo.- dijo mirándome fijamente, estaba molesta.

–Te juro que hay una explicación, solo un minuto.- dije mirándola alzando las cejas, nunca fallaba.

–Un minuto.- sonreí.

–Puede ser en la sala? Estamos en medio de la escalera.- dije tendiéndole mi mano para ayudarla a bajar pero ella me empujo y camino hacia la sala. No pude no sonreír con su actitud, me encantaba, y aparte se veía realmente sexy. Me seque las lágrimas que estaban estancadas entre mis labios y camine detrás de ella.

–Quiero ir a dormirme, así que empieza a hablar.- dijo parándose mientras cruzaba los brazos.

–Hanna nos vio besándonos.- dije, tenía que ser rápida o si no se iría. Sus ojos se abrieron como dos platos y no dijo ni una sola palabra. –Por eso hice todo lo que hice, nos tomo fotos y me chantajeo diciéndome que se las mostraría a Quinn.

–Y la besaste para que no pueda hablar? Eso no tiene sentido!- dijo por fin reaccionando.

–No fue por eso, necesitaba besarla para pasarle algo.

–Que cosa?

–Una pastilla.

–Una pastilla?

–Sí, Sugar me dio una especie de pastilla que te hace olvidar todo. Por eso hice que tomara y la bese todas las veces para que no se diera cuenta.

–La drogaste?

–Sí, eso importa acaso? Te estoy diciendo que yo no quise besarla, solo que no se me ocurrió otra idea.

–La drogaste?- volvió a preguntar asombrada.

– Sí.- dije acercándome a ella, estaba bastante lejos.

–Estás loca? Y si le pasa algo?

-Ahora te preocupas por ella?

–Le diste de tomar un montón y aparte le diste una pastilla? Le pudo haber dado sobredosis!- dijo alterada.

–Te puedes tranquilizar? No le pasara nada.

–Como sabes? La mandaste en un taxi?

–La mande en un taxi, querías que me vaya con ella?- dije y su posición de atacante cambió.

–Porque decidiste drogarla?

–Porque me pidió algo que no iba a darle.

–Que cosa?

–No quieres saberlo.

–Ok, ya entendí. Y porque no?

–Me estas jodiendo no?

–No, porque no querías?- no podía creer lo que me estaba diciendo.

–Porque estoy contigo.- dije mirándole los labios, quería besarla.

–No estamos juntas.- dijo agachando su mirada.

–Si no estamos juntas porque te pone tan celosa que la haya besado?- dije levantando su mentón con una de mis manos.

–No estoy celosa.

–Segura?

–No empieces Santana.- dijo seriamente.

–Dime Tana.

–Basta.

–Te puedo besar?- pregunté.

–Desde cuando preguntas si puedes besar a alguien?

–Desde que quiero que me correspondan el beso.

–No sentiste nada por ella?- dijo mirándome a los ojos y sentí a mi cuerpo derretirse.

–Si.- dije y cerró sus ojos. –Sentí asco.- agregué acariciando su mejilla, ella rió con eso. –Dale, perdóname. Sé que hice mal, pero en serio no sabía qué hacer. Te dije una vez que yo nunca engañaría a alguien y no lo voy a hacer contigo.

–Técnicamente no me engañaste, no somos nada.

–Quieres ser algo?- dije mirándola, por alguna razón no lograba controlar mis palabras.

–No digas algo de lo cual te arrepentirás después.

–Y que pasa si no me arrepiento? No sé qué me pasa contigo, pero tengo la necesidad de tenerte cerca, quiero controlarlo, poder negarlo, pero cada segundo se hace más fuerte, cada segundo siento que eres más importante y me asusta la idea, estoy malditamente asustada, pero no puedo hacer nada más, solo quiero estar a tu lado.


POV BRITTANY

Como podía negarme a semejante declaración? Yo ya lo había escuchado, pero ella no lo sabía, ahora me lo decía totalmente consciente de mi presencia y no pude evitar sonreír y abrazarla, me quise hacer la dura pero sabía que al final no funcionaria, en el fondo la entendía, había entrado en desesperación, su forma definitivamente no fue la correcta pero no la juzgaría por eso.

–Te quiero.- dije abrazándola fuerte. Vi como me soltó por unos segundos al escucharme pero después me volvió a abrazar fuerte.

–Yo también te quiero bebe, por primera vez no me cuesta admitirlo.- dijo besando mi cabeza, justo donde estaba apoyada la suya.

–Pensé que no me dirías nada.

–No lo hagas mas difícil.- dijo riendo. Me soltó y me beso suavemente los labios, sin buscar más, solo el contacto, solo eso era suficiente para hacerme delirar.

–Deseas comer algo? Muero de hambre.- dijo y caminó hacia la cocina.

–No, pedí algo en el bar.

–En serio? Yo me muero de hambre.

–Creo que tú comiste otras cosas.- dije solo para fastidiarla y ella sonrió de lado.

–No empieces Pierce.- dijo abriendo la refrigeradora, saco unos huevos y se los preparó. Mientras comía me conto como hizo para borrar las fotos. No podía creer que la enferma nos haya sacado cuatro fotos, que ganaba con eso? Una noche con Santana?

–En que estas pensando?- me preguntó mientras secaba y guardaba su plato.

–En nada, estoy muy cansada, necesito dormir.- dije saliendo de la cocina, sentí que me siguió así que subí por las escaleras. Cuando llegamos me paré en la puerta de mi habitación y Santana atrás mío.

–En serio quieres dormir ahí cuando tienes la oportunidad de dormir conmigo?- me dijo cuando puse la mano en la manija de la puerta. –Me voy a portar bien, ven conmigo.- dijo envolviéndome con sus brazos por atrás y haciéndome soltar la manija.

–No-no creo que se- sea buena idea.- dije tartamudeando ya que el contacto de sus manos en mi cintura me producía escalofríos.

–Dale, no me hagas rogarte, me portaré bien, te despertaras y tendrás el desayuno.- dijo pasando su nariz por mi cuello. –Aparte soy bastante caliente, en el buen sentido de la palabra.- dijo sonriendo. –No tendrás frio conmigo.- agregó.

–Estás segura?- pregunté.

–Tan segura como que me llamo Tana Lopez.- dijo girándome y poniéndome cara a cara con ella.

–Te llamas Santana.

–Para ti soy Tana. Anda a cambiarte, te espero.- dijo y me beso rápidamente antes de irse a su habitación. Entré a mi habitación, me asee rápidamente y me puse la mejor pijama que tenía, un short con una polera que dejaba en descubierto parte de mi abdomen. Fui a su habitación y cuando toque la puerta escuche su voz.

–Pasa, estoy adentro.- dijo y cuando entre vi que estaba en el baño lavándose los dientes. Ya tenía puesta su pijama o algo así, era casi igual que el mío pero de otro color.

–Me la regalo Quinn.- dijo tocándose la polera y reí.

–A mi también.- dije y las dos reímos, podríamos quizás habernos quedado calladas, pero ya nada más arruinaría la noche.

POV SANTANA

La situación era rara, pero en serio no tenía otra intención más que dormir, el día ya había sido bastante largo y tedioso. Aparte le había dicho que quería que cuando pasara recordara todo y seria feo que recordara el día como el mismo día en que bese y drogue a otra tipa. Ahora que lo pienso bien, si hice mal, no debí dejarla así, osea estaba totalmente borracha y aparte la drogué, pero se lo merecía por chantajista así que decidí no pensar en eso. Abrí las frazadas de mi cama y me acomode en ella, Brittany estaba parada mirando mis movimientos desde la puerta.

–Vas a dormir parada?- le pregunté abriendo mis brazos para que se acomodara en mi cuerpo. Sonrió y se acomodo en la cama, estaba nerviosa y me parecía super tierno, yo también lo estaba, pero sabia disimularlo. Jamás pase esta situación, desde que todo comenzó con Brittany supe que todo sería diferente, que aprendería y viviría nuevas cosas. La jale con mis brazos y acomodé su cabeza en mi cuello. –Mucho mejor.- dije pasando mis labios por sus cabellos, me encantaba su olor. –Sabes, a pesar de todo fue un buen día.- dije apretándola un poco más fuerte.

–Si te pones a pensar ya es un nuevo día.- dijo acomodándose.

–Entonces será perfecto.

–Hasta más tarde.

–Duerme.- dije besando su mejilla. Vi como cerraba sus ojos, se notaba que estaba cansada. Me quede un rato observándola, no sé en qué momento perdí la batalla contra Morfeo, el cual no quería que siga contemplando la compañía de mi bella durmiente. Me levanté porque un brillo me invadió, refregué mis ojos con una sola mano porque la otra rodeaba a Brittany, la cual seguía durmiendo. Me incliné para ver el reloj y ya era medio día. Como dormí tanto? Ni en la peor de mis noches he dormido tanto, y ayer casi ni tome nada. Regrese a mi posición y vi a Brittany con su mejilla apoyada en mi hombro, sus labios a poca distancia y su mano rodeando mi cintura, entonces comprendí porque había dormido tanto, porque esta vez si quería seguir en la cama, no necesitaba huir o olvidar la noche anterior, esta vez quería quedarme, quería quedarme con ella. Bese su nariz delicadamente para no despertarla y después seguí mi camino por su mejilla llegando a sus ansiados labios. Ella arrugo la nariz como un cachorrito y fue la imagen más perfecta que tuve en mi vida.

–Hola.- dijo abriendo los ojos lentamente.- estaba equivocada. Esta era la imagen más perfecta de mi vida, ella recién despertando, abriendo esos ojos azules.

–Buen día amor.- dije besando nuevamente pero de manera suave sus labios.

–Dijiste que me despertaría y tendría desayuno.- dijo sonriendo y reí.

–Me acabo de despertar.

–No era que tú te levantabas siempre temprano?

–Viste? Estas cambiando mi vida.- dije con una sonrisa y vi sus ojos brillar.

–Eso es bueno o malo?

–Muy bueno, me gusta.- dije acariciando su mejilla con una de mis manos.

–Iré a preparar algo, ya es medio día.- su brazo que me rodeaba lo acomode en la almohada y me salí de la cama. –Te parece si almorzamos algo y después vamos a caminar un rato por la playa?- pregunté y asintió con una gran sonrisa. –Ya vengo.- dije estirándome y besando sus labios, esta vez mi lengua inquieta no se aguanto y pidió entrar, ella aceptó y se encontraron las dos. Odiaba al aire por hacerse necesario y hacer que tenga que separarme de ella. –Ya vengo.- dije saliendo del cuarto. Baje a la cocina y nada me quitaría la sonrisa que tenía, había dormido con la persona más hermosa en mis brazos y tuve el privilegio de verla despertar y ser yo la causante de su primera sonrisa del día. Todo era diferente a su lado, ella realmente me estaba cambiando la vida y me gustaba, realmente me gustaba.


Jane0_o: Ya esta ya actualice

Raxel_vale : Espero que te guste este capitulo

Camila18: Deberías comentar mas :( (por cierto me encanta tu nombre)


GRACIAS DE NUEVO UN BESO HASTA LA PROX♥

Me encanto este capitulo
Que bueno que ya se
Arreglaron!


Saludos

Hola que tal!!! wowwww por un momento crei que se iba a poner muy fea la cosa, pero por suerte no jajaja!!
Me encanto el ultimo capitulo!!
Saludos

Ohhh se que llevo varios capitulos sin comentar pero amo este FF jajaja San super tierna y Britt pues si que la hecho cambiar a Hanna la odio es una arpia pero nada puede contra ese amor espero tu próxima actu saludos

aaaaaaaaaaaaaaawwwwwwwwwwww ame los cap son tan tiernas!! que bueno que san le explico como eran las cosas y britt entendio! pero ya es momento que quinn sepa la verdad por que asi se vana evitar mas lios y malos entendidos. besitos amo el fic!!! ojala actualices pronto y mi san es hermosa jajajajajaj

son tan tiernas, las adoro.

prometo comentar mas seguido lo juro!! te gusta mi nombre? jaja es tan común, el tuyo es mucho mas interesante. gracias por escribir

POV BRITTANY


Me quede un rato acostada en la cama solo para memorar este momento, para no olvidar este aroma que te decía “quédate acá toda la vida” y lo haría feliz, sin dudarlo me quedaría acá. El inminente sol irradiaba la habitación indicando que hoy sería un día soleado y que tenía que despertar. Me levanté y fui a mi habitación, me duche y cambie, me vi al espejo unas cuarenta veces y baje las escaleras. Santana estaba con su pijama gris probando lo que había cocinado.

–Esto estará en un minuto, lo puedes apagar y después colarlos?- me preguntó mientras lo removía, creo que eran fideos, no debe ser muy difícil no? Así que asentí.

–Ya listo, me dare una ducha rápida para irnos bien terminemos.- dijo dejando el cucharon. Cuando paso por mi lado acaricio una de mis mejillas y subió corriendo las escaleras. Caminé para ver los fideos y los removí, paso un minuto y aun no estaban listos así que los deje un segundo más, no les quite mi mirada ni un segundo, no tengo idea de cómo se cocina ni nada que tenga que ver con ella, pero he visto a mi madre muchas veces y alguna idea tengo. Pasaron unos minutos y los volví a probar, ya estaban listos así que los escurrí y los serví en dos platos. Revisé la otra olla y tenía una salsa de carne, como hizo para haberlo preparado tan rápido? Lo calenté con mucho cuidado para no quemarlo y después lo apague y serví. Estaba por sentarme en la mesa y se escucho la puerta de Santana. Ella bajo las escaleras y aun tenía el cabello mojado viéndose demasiado sexy. Como hacía para verse sexy las 24 horas del maldito día? No era normal, debería ser ilegal verse siempre tan perfecta.

–Ya lo serviste? Me demore mucho?- preguntó un poco apenada mientras se sentaba en su sitio de siempre.

–Fue bastante rápido, yo me demoro por lo menos 30 minutos para verme decente y tú en 5 te ves así.- dije señalándola con mis manos y ella sonrió.

–Como es así?- preguntó.

–Así, linda.- dije ruborizada.

–Te parezco linda?

–Dale Tana, te lo deben haber dicho miles de veces.

–Y? Es mil veces más especial si me lo dices tú.- dijo inclinándose en la mesa para estar cerca a mí. Me incliné y bese sus labios suavemente viéndola sonreír. Me encantaba su sonrisa, y más cuando era yo la causante de ella.

–Hay que comer para no desperdiciar el sol.- dijo regresando a su sitio. Mientras comíamos me conto sobre como conoció a Hanna y porque ella hacia todo lo que le hizo hasta ahora. La tipa estaba loca, eso ya lo sabíamos, pero creo que lo de anoche fue demasiado. Terminamos de hablar de ella y me conto sobre la familia de Puck y como eran sus almuerzos familiares, según entendí su familia era muy convencional y siempre se reunían, sus padres vivían bastante lejos así que ellos regresarían en la noche. Terminamos de comer, lavamos y guardamos todo. Salimos y nos subimos a la camioneta.

–Te presentaré mi lugar favorito de Los Angeles.

–Tu lugar favorito no era ese al que me llevaron con Quinn y Rachel?- pregunté.

–Ese es mi lugar favorito con las chicas, mi lugar favorito personal nadie lo conoce.- dijo mirando fijamente la pista. Vi que entramos a la carretera.

–Y me lo vas a mostrar a mi?- pregunté emocionada.

–Siéntete privilegiada.- dijo dándome una sonrisa ladeada. Ella dijo que iríamos a la playa a caminar así que supongo que su lugar favorito era una de ellas. Me concentré en ver el paisaje, Los Angeles era hermoso, por donde lo vieras, y aún más cuando tenías de acompañante a alguien tan especial como Santana.

POV SANTANA

Me encantaba ver como Brittany apreciaba cada lugar por donde pasábamos, Los Angeles era mi hogar, jamás me sentí tan en casa como estando acá y especialmente en el lugar a donde estábamos yendo. Conocí esta playa en uno de los tantos viajes que hice cuando lo único que quería era escapar, amaba esta playa por dos razones. La primera, era que siempre estaba sola, era una de las últimas y como no había muchas olas no llamaba la atención de la gente. La segunda, la arena era realmente suave, sentías que flotabas literalmente. Me estacioné y Brittany observaba toda detenidamente. Sabía que cada vez que iba a un lugar nuevo le costaba asimilar el ambiente y me encantaba ver sus gestos y sentir su respiración algo agitada, era algo que disfrutaba de ella, me parecía especial.

–Te gusta?

–Esta playa es genial! Porque no hay mucha gente?- me preguntó bajando de la camioneta y yo salí rápidamente para alcanzarla.

–No hay muchas olas.- le respondí tomando su mano para llevarla hacia la arena para que sienta verdaderamente porque esta playa es especial. Sus dedos se entrelazaron rápidamente con los míos provocándome una gran sonrisa.

–Hay que sentarnos.- dije y me senté. La observé detenidamente, ella miró el lugar y se apoyo para sentarse a mi lado, cuando su mano toco la arena su expresión cambio, y cuando se sentó, una sonrisa la invadió.

–Wow, es como estar en el cielo.- dijo dejando caer la arena entre sus dedos.

–Por esa razón, esta playa es especial para mí.- afirmé atrayéndola para que su cuerpo se apoyara al mío.

–Como conociste este lugar?- me preguntó.

–Hace unos años necesitaba huir, no llegue tan lejos, pero llegue hasta acá, y me quedé.- dije sintiendo los recuerdos volver, eso no era bueno. Brittany se alejo de mí para verme, supongo que sintió mi voz diferente.

–Porque necesitabas huir?- me preguntó y hice una mueca, tenía miedo de hablar y contar más de lo necesario, no quería que se asustara de mí.

–Necesitaba espacio, tiempo, no sé, pero necesitaba algo.

–Y lo encontraste?

–No, pero encontré este lugar, de algo sirvió.- dije con una tímida sonrisa.

–En qué año conociste este lugar?- me preguntó.

–En el segundo año.

–Entiendo.

–Que entiendes?- pregunté.

–Quinn me contó que los dos primeros años fueron bastante difíciles para ustedes, supongo que en una de esas escapadas llegaste hasta acá.- supuso mirándome para descubrir si estaba en lo correcto.

–Este lugar es lo mejor que hice en esos dos años. Venir fue la mejor decisión que tomé.

–A que te refieres con eso? Qué pasó? Osea, se porque te fuiste, pero ya estabas acá, ya estabas lejos, porque sufrieron tanto?- preguntó y vi su mirada preocupada, le importaba, le importaba saber de mí y eso me hacia feliz.

–Pensé que yéndome todo estaría solucionado, que ya no sentiría dolor, ni rencor y que todos mis miedos ya no existirían, me equivoqué. Me choque duro contra la pared cuando llegue y sentía todo igual.- dije mirando el mar, sabía que ella me estaba viendo, sabía que no me había escapado del todo con esa respuesta.

–Pensaste que huyendo las cosas iban a cambiar.- dijo y asentí. –Te hiciste daño?- me preguntó colocando un mechón de mi pelo detrás de mi oreja.

–Me choque contra el muro del alcohol, de las drogas, de la vida salvaje, de la vida en donde no existe el autocontrol.- admití, era la primera vez que lo hacía. Solo Quinn y Rachel sabían que consumí drogas, decirlo y ver su expresión totalmente horrorizada hizo que mi corazón se sintiera avergonzado, sentía vergüenza de mi misma, de lo que me había convertido.

–Te drogabas?- me preguntó después de unos minutos de silencio pronunciado.

–Durante el primer año.- respondí con sinceridad.

–Lograste dejarlo?

–Fue difícil, pero lo logré, no volvería a consumir nunca más.

–Como así llegaste a ese nivel?

–Necesitaba olvidar, estaba perdida, quería no ser como mi padre y terminé siendo como él.- dije mirándola fijamente, sus ojos azules estaba totalmente sorprendidos.

–No eres como tu padre, tú no mientes y también puedes dejar de pensar en ti para pensar en los demás.

–Eso solo me pasa contigo, yo solo pienso en mí. Nunca me importo nadie, nunca me importo como se sentía la otra persona, para mí todo era diversión, hasta ahora lo seguía siendo solo que con autocontrol.

–No digas eso, no solo es por mí, me gustaría saber que soy tan especial, pero no es solo conmigo.- dijo sonriendo.

–Eres especial.

–Gracias.- dijo acariciando mi mejilla.

–Como así lograste dejar las drogas?- me preguntó nuevamente.

-Quinn me ayudó mucho y aparte conocí a Emma y no sé, ella confiaba en mí, y me hizo tener sueños, me hizo trazarme una meta. Fue todo un proceso.- dije recordando que cuando Emma llego a mi vida, llego como un angel, ese angel que me salvó.

–Sabes, estoy orgullosa de ti.- dijo y la mire extrañada, le había admitido que había sido una drogadicta y me decía que estaba orgullosa? –Me siento orgullosa de saber que lograste afrontarlo, sabes la cantidad de personas que desearían salir? Hay muchas que cuando entran, ya no salen.

–Lo sé.

–Fuiste muy valiente.

–Digamos que se lo debo también a tu hermana, posiblemente me habría abandonado si seguía consumiendo.- dije con una sonrisa.

–Es muy probable.- admitió también sonriendo.

–Como lo haces?- le pregunté.

–Hacer qué?

–Esto! Lograr que te cuente todo, lograr sacarme todo y sin necesidad de obligarme, hacer que sea tan sencillo.- dije tomando una de sus manos y entrelazando mis dedos con los suyos.

–No sé, supongo que es porque te hablo del corazón, porque realmente me importas, todo lo que tenga que ver contigo me importa.- dijo mirándome y mi corazón latió, latió como quizás nunca lo habría hecho.

–Gracias, gracias por darme el placer de estar a tu lado.- no sé porque lo dije, pero tenía la necesidad de agradecerle y lo hice.

–Siempre estuviste a mi lado, crecí viéndote.- dijo sonriendo.

–Pero esto es diferente, antes eras la hermana menor de mi mejor amiga.

–Y ahora que soy?- me interrumpió.

–Eres la chica con la que quiero estar en estos momentos.- dije tomando su otra mano.

–Esa es una declaración?- preguntó alzando una ceja.

–Tómala como tal, soy cero romántica e hice mi mayor esfuerzo.- dije sonriente, ver sus ojos brillar era más que suficiente para saber que estaba haciendo lo correcto.

–Me estás hablando en serio?

–Sí, será difícil, no te prometo un paraíso, pero hare lo posible para que lo sea. Solo necesito un poco de tiempo más y hablare yo misma con Quinn. No quiero que creas que estoy jugando contigo, nunca haría eso.- dije rápidamente y nerviosa ya que Brittany no me respondía y estaba asustándome. No podría salir corriendo porque estábamos bastante alejadas y las llaves de la camioneta estaban en mi poder. –Vas a decirme algo?- pregunté cerrando los ojos con miedo, esto era ridículo, yo jamás tenía miedo, aparte nunca me dirían que no, no? Sería lo peor del mundo, aunque me lo merecería por haber hecho sufrir a tantas mujeres, me niego a creer que ella me diga que no. Estaba a punto de abrir los ojos cuando sentí sus labios sobre los míos. Los besé, los acaricié, haciéndole entender toda la emoción que sentía. Se podría decir que tengo novia?Santana Lopez de novia? Estoy completamente loca, pero loca por ella, eso es seguro.

–Esto es un sí?-pregunté apoyando mi frente en la suya y acomodando sus cabellos para por ver sus ojos.

–Creías que te diría que no?- pregunto besándome nuevamente.

–La verdad me estaba empezando a asustar, no me decías nada.- dije mirándola, ahora nada me impedía besarla, acariciarla, mirarla, disfrutaba con solo mirarla.

–Me quede en shock, no me esperaba esto. Aparte, siempre nuestros temas terminan variando drásticamente.- dijo riendo.

–Voy a hacerte feliz.- dije tratando de convencerme a mi misma de que si era capaz.

–Lo dices para mi o para ti?

–Para las dos, tengo miedo amor, no podría vivir sabiendo que te lastimé.- admití juntando mi frente con la suya y cerrando mis ojos. Había dado un paso importante, y sabía muy bien las consecuencias que vendrían. Nunca estuve en algo pactado con alguien, mi única relación si se podría llamar así, fue muy libre, sin prototipos, sin nada que nos hiciera sentir amarradas, y así como empezó, terminó. Porque en el momento en el que teníamos que decidir yo no pude y hui, y le hice daño, después me perdono, pero siempre cargue con el hecho de haberla hecho sufrir, era una gran persona. Ella merecía a alguien mil veces mejor que yo, alguien que si supera comprometerse, y Brittany también, Brittany merecía a alguien mejor, lo malo es que me negaba a verla en otros brazos, no podría.

–Que estás pensando?- me preguntó.

–En que necesitas a alguien mejor que yo.

–Porque no dejas que eso lo decida yo? Siempre decides todo tú, si estaremos juntas las cosas tienen que cambiar. Yo también pienso, yo también tengo ideas y miedos. Yo también creo que mereces a alguien mejor que yo, a alguien más madura, más mujer, pero no te diré que te vayas, prefiero ser egoísta, quiero que te quedes conmigo, quiero disfrutarte yo.- mis ojos se abrieron al escucharla, ella sentía lo mismo que yo.

–Eres la mujer más madura que conozco, en serio lo eres.- dije acariciando su mejilla. –Te quiero.- admití y sus ojos brillaron

–Yo a ti, no te imaginas cuanto.- dijo y sello sus labios con los míos. Una gran forma de empezar, una gran forma de decirme “no tengas miedo, estoy yo”. Y ella estaba, era real, lo que sentía era real.



Monica.Santander: Solo queria darle un poco drama

Keiri Lopierce: No te desaparezcas,San es supeeeeeeeer tierna

Tatymm: Te juro que quiero que San le diga a Quinn,pero tengo miedo de como vaya a reaccionar...tu sabes Quinn siendo sobreprotectora

Monicagleek: Yo te adoro a ti por comentar

Camila18:Si comenta comenta! Es común pero es bonito (:


HASTA LA PROX ACTUALIZACION UN BESOOO A TODAS ♥

Este capitulo fue genial!!!
Espero que Quinn se lo tome bien y confie en San!! Saludos

Ame el cap ya son novias!! si me imagino que para quinn va a ser dificil en un principio pero cuando vea cuan enamoradas estan yo se que lo va a aceptar!! aaaww ya quisiera conocer esa playa yo! Pero me encuentro enferma y en cama jaja ojala actualices pronto besotes!!

hola!!!

aaw que ternura al fin dejando se llevar
por los sentimientos ....

buen capitulo!!

saludos

Hola!
Por tener un grandioso Fic te has ganado una Fiel lectora!
La verdad es que me tienes en tus manos, me lei este fic en tan solo un dia...
Espero y actualices pronto!
Porque esto se esta poniendo bueno..
Nos leemos hasta la proxima(:

jaja gracias :$. como tu, también tengo miedo de la reacción de quinn me la imagino bien dramática, santana fuera de la casa, ley del hielo a britt cosas así ajaja pero creo que es hora de que sepa.

estos dos capitulos fueron de lo mejor, me encanta santana, se ve que si quiere a britt de verdad!

POV BRITTANY


Nos quedamos toda la tarde en la playa, sentadas, compartiendo ese placer que sentíamos al estar juntas. Escucharla decir que quería estar conmigo y que quería hacerme feliz era sin duda lo mejor que me habrían dicho en mucho tiempo. Besos, caricias, miradas, risas, pequeños golpes en los hombros cuando nos ofendíamos o acciones como esas, nunca las olvidaría. Ella me hacía sentir especial y escucharla decir “te quiero” estando despierta, era lo mejor. Todo a su lado era mejor.

–Amor, ya está haciendo frio, vamos a casa?- me preguntó, ya había escuchado el “amor” un par de veces de sus labios durante las horas que estuvimos ahí, pero aún así seguía sintiendo las mariposas en mi estomago revolotear.

–Aun no hace mucho frío.- dije haciendo una mueca, no quería regresar.

–No va a cambiar nada si volvemos, solo unos días, te lo prometo.- dijo alzando mi mentón para depositar un suave beso en la punta de mi nariz. Se paró y me tendió su mano para ayudarme a pararme. Caminamos hacia la camioneta de la mano. Cuando ya estábamos adentro prendió el estéreo y puso Lana Del Rey.

–Sabes, yo no sé nada de relaciones ni esas cosas, pero te daré un consejo.- dijo mientras manejaba y yo giré para verla. –Solo debes tenerle celos a una persona.- dijo alzando su dedo y levante una de mis cejas, ella me vio y rió.

–A quién?- pregunté curiosa.

–A la persona que está cantando en este momento.- dijo riendo y la acompañe.

–Tienes una obsesión con Lana no?

–Obsesión es poco, realmente estoy enamorada de ella.- dijo haciendo un gesto dramático.

–Me cambiarias por ella?- pregunté y hizo una mueca como si estuviera pensándolo y le golpee el hombro.

–Auch!- exclamó exageradamente.

–Lo pensaste? Es en serio?- dije mirándola riendo.

–No te cambiaria por nadie.- dijo con su sonrisa ladeada. Perfecto, ahora me decía algo tierno con esa sonrisa que lograba destruirme. El camino era largo y hablamos todo el trayecto sobre de Lana Del Rey,Santana realmente la idolatraba, sabía toda su vida y todas sus canciones, ahora entiendo el porqué de los CD de vinilo colgados en su estudio. Cuando llegamos al departamento ya estaba empezando la noche.

–Quieres ver una película? Tengo chocolates en la alacena.- dijo caminando hacia la cocina.

–Ya!- dije emocionada.

–Elige la película, ya voy.- me dijo y busque una que llamara mi atención, cuando la encontré la puse y me senté en el sofá.

–Ya estoy.- dijo sentándose a mi lado, con sus brazos me apoyó en su cuerpo, apoyando mi cabeza en su pecho, muy cerca a su corazón. La película comenzó, al igual que el corazón de Santana, sus fuertes latidos me mantenían desconcentrada. Tengo que admitir que era lindo saber que latía por mí, ya que con cada caricia que hacían sus dedos latía más fuerte. Una de sus manos estaba entrelazada a la mía acariciando mis dedos con suavidad y la otra recorrió mis cabellos, mejillas y dejo inocentes caricias en mi abdomen. Cuando la película terminó me senté de frente como una india para mirarla.

–El soundtrack estuvo bueno, me gustó la última canción.- dijo sonriente, me encantaba que siempre hable de la música de las películas.

–No le presté mucha atención a la canción.- admití.

–Porqué? Estuvo realmente buena.

–Porque tu corazón latía fuertísimo, mi mente se concentró en ese sonido, era mil veces mejor.- dije y ella se sonrojó, era la primera vez que lograba sonrojarla y se veía excesivamente tierna.

–Pensé que no te habías dado cuenta.- dijo mirando el suelo.

–Fue lindo.

–Lo que tú me haces sentir es lindo.- dijo levantando su mirada sonriente. Con una mano me jalo un poco y me besó, era un beso distinto, lleno de amor, cada beso era distinto. –Por la mierda Brittany, besas excelente y tienes 19 años.- dijo con la respiración entrecortada mientras apoyaba su frente con la mía.

–Casi 20, faltan dos meses.- dije tomando aire para volver a besarla, me dijo que necesitaba unos días más así que no podría besarla cada vez que me diera la gana por unos días más, tenía que aprovechar esta oportunidad. Nuestras lenguas se acariciaban y sus manos se fueron a mi cintura llevándome hacia ella, tiro su cuerpo hacia atrás, acostándose en el sillón y llevándome con ella. Estaba encima de su cuerpo, sus brazos me rodearon y una de sus manos entró por debajo de mi polera acariciando suavemente mi espalda, sus manos me quemaban, era una simple caricia pero yo estaba completamente complacida. Solté sus labios y pase los míos por su cuello, Santana dudo en estirar su cabeza pero cuando empecé a morderlo levemente me accedió un mayor acceso a su cuello.

–Mierda Britt.- dijo haciéndome regresar a sus labios, capturando los míos con desesperación. Sus traviesas manos subieron por mi espalda y jugaron con el cierre de mi ropa interior superior, sin desabrocharlo. Sonrió durante el beso y mordió mi labio inferior. Sus dedos pasearon suavemente haciéndome vibrar.

–Santana!- se escucho un grito desde afuera y ella me soltó rápidamente. –Abre la puerta que esto nos pesa!- volvió a gritar y era la inconfundible voz de Quinn. En ese momento odie un poco mucho a mi hermana.

–Puede ser tan inoportuna.- susurro Santana mientras acomodaba su cabello.

–Tienes mi labial.- dije pasando mis dedos por su cuello. –Ya está.- dije y se levantó.

–Te salvó el timbre.- dijo con su sonrisa ladeada antes de caminar hacia la puerta.

–No quería que me salvará.- dije y ella rió.

–No me tientes, Pierce.- dijo mordiéndose el labio inferior antes de abrir la puerta. Una de las imágenes más sexys que he visto en mi vida, me volverá loca, estoy segura. –Estábamos viendo una película, sorry por la demora.- dijo Santana anticipadamente, era muy seguro que Quinn nos lo preguntaría.

–Hola chicas.- dijo Puck entrando con bolsas y dejándolas en la cocina. –Ya estás en casa, hablamos mañana.- dijo Puck depositando un suave beso en los labios de mi hermana. –Chau.- nos dijo a nosotras y salió.

–Me ayudas a guardar todo esto?- le preguntó Quinn a Santana y esta asintió. Supuse que tenías que hablar, ya que no pidió mi ayuda.


POV SANTANA

Entre a la cocina para guardar las compras, sabía que Quinn me pediría explicaciones por lo de anoche y no se me ocurría que decirle. Aún tenía en mi cabeza los labios de Brittany y la suavidad de su cuerpo impregnado en mis manos.

–Todo bien? Cómo estás?- me preguntó mientras guardábamos las cosas.

–Bien, tu? Como estuvo el almuerzo?- pregunté.

–Muy bueno, la pase increíble.- dijo y se acomodo en la alacena.

–Dale, dime, sin rodeos.- dije mirándola.

–Porque lo hiciste? Porque la besaste?- me preguntó y sentí decepción en su voz, ella realmente odiaba a Hanna.

–Solo pasó, tomé mucho y no me controlé.- dije mirando el suelo, no me gustaba mentir, y menos a ella, pero no estaba lista para decir la verdad.

–Porqué? Íbamos bastante bien , hace tiempo que te estás portando mas civilizadamente, porque todo se fue a la mierda?- me dijo y sentí ganas de llorar. Quería decirle que si me civilice era porque estaba enamorada de su hermana, pero no podía, un nudo en mi garganta me lo impedía.

–Lo siento.- fue lo único que pude decir.

–No tienes que decirme eso a mí, tienes que sentirlo tú.

–No logré controlarme, después me di cuenta y la dejé, en serio quería seguir bien, estoy bien como estoy, sola.- dije clavando otro puñal más, otra mentira.

–Eso estuvo bien, si hubieras terminado como siempre, sería peor. También creo que tienes que estar un tiempo sola, la soledad no es mala San, a veces te ayuda a aclarar tus ideas.- dijo sonriendo y le devolví la sonrisa. –Tienes algún plan para mañana?- me preguntó y negué. –Te parece si vamos al gimnasio temprano? Hace tiempo que no voy.

–Dale, yo te despierto.- le dije. Terminamos de guardar todo mientras me contaba sobre el almuerzo con Puck, tengo que admitir que por primera vez no la escuche, mi conciencia me estaba matando, nunca mentía, y menos a Quinn

–Será mejor que ya vayamos a dormir.- dijo saliendo de la cocina.

–Creo que Brittany se nos adelantó.- dijo subiendo las escaleras. Me despedí de ella y entre a mi habitación. El día había sido casi perfecto, cada minuto con Brittany era perfecto, pero nada me quitaría que le mentí a mi mejor amiga, quizás la única que por muchos años fue mi vida entera.

POV BRITTANY

Cuando me levanté, me di una ducha rápida y salí de la habitación. Las puerta de Quinn y Santana estaban abiertas, entre a ambas y la cama estaba vacía, era mediodía, era normal que Santana no esté, pero Quinn? Baje las escaleras y mi desayuno estaba listo en la mesa, al lado de la taza de café una pequeña nota. “Nos fuimos al gimnasio, estaremos de regreso para el almuerzo. Disfruta tu desayuno. –Quinn” Termine de leerlo y me senté a la mesa. Comí lo que me habían dejado y agradecí que no me hayan invitado al gimnasio, el deporte y yo simplemente no nos llevamos bien. Terminé el desayuno, lavé y guarde lo que usé. Tenía que ensayar mi parte de la canción que habíamos preparado con Marley, así que saque la guitarra y empecé a practicar, aprovecharía la soledad para concentrarme, con Santana rondando era imposible. Escuche las voces de Quinn y Santana, no sé cuanto rato había pasado, pierdo el sentido del horario cuando practico.

–Hola, hermanita.- dijo Quinn abriendo la puerta.

–Hola!- dije poniendo la guitarra a un lado.

–Hola.- dijo Santana con una sonrisa. Mi mirada la recorrió completamente, estaba toda sudada por el ejercicio, completamente sexy.

–Hemos traído pizza!- dijo Quinn sacándome de mis fantasías.

–Van al gimnasio y comen pizza?- pregunté.

–Yo dije lo mismo!- dijo Santana caminando hacia la cocina.

–Querías ensalada?- me preguntó Quinn y negué con la cabeza. –Entonces no digas nada.- dijo riendo y abriendo las cajas de pizza. Nos sentamos a comer y Quinn y Santana discutieron sobre sus rutinas todo el almuerzo, era lindo verlas conversar tan animadas, creo que ellas conocían más a la otra de lo que quizás se conocían a sí mismas. Terminamos de comer y Santana se levanto y llevo los platos al lavadero.

–RING RING RING.- se escucho el teléfono de la casa y me levanté para contestas.

–Alo?- dije.

–Hola.- dijo una voz dudosa, al parecer no reconocía mi voz.

–Hay alguien ahí?- pregunté ya que se quedo callada.

–Sí, solo que creo que no te conozco.- dijo y cuando estaba por hablar me interrumpió. –Se encuentra Quinn?- me preguntó.

–Sí, de parte de quién?- le pregunté, tenia curiosidad.

–De parte de Demi, puedes pasarme con ella.- pidió, tenía un voz hermosa, tengo que admitir.

–Sí, ahora te paso.- dije y caminé hacia Quinn que estaba recostada en la barra del desayuno hablando con Santana.

–Es para ti.- dije alcanzándole el teléfono.

–Quién es?- me preguntó tomándolo y tapándolo con su mano para que no se escuchara.

–Una tal Demi. –BUM.- un vaso se reventó en el lavadero y Santana se quedo quieta al igual que Quinn.

–Mierda.- dijo Santana apoyándose en el lavadero, mientras sujetaba su mano. Quinn giró y vio rápidamente a Santana llevándose el teléfono al oído. Caminé hacia Santana y tenía su mano sangrando.

–Estas bien?- le pregunté tomando su mano. Ella solo miraba a Quinn, concentrada en sus palabras sin tomarle importancia a su mano ensangrentada.

–Alo?- preguntó Quinn.

–Hola, que raro escucharte… Sí, estamos bien… Ah entiendo… Si claro, no tengo ningún problema… Te parece si te lo envió mañana?... Ok , un abrazo. Cuídate… Yo también espero verte pronto.- dijo y colgó. En ese momento Santana recién volvió a la vida por decirlo así y metió su mano en el fregadero dejando caer la sangre.

–Estas bien?- volví a preguntarle.

–Sí, no te preocupes. Iré a mi habitación a ponerme una venda.- dijo y tomo un secador y lo apretó en el corte subiendo las escaleras rápidamente. Mire a Quinn la cual miraba como Santana se iba.

–Está todo bien?- pregunté sin entender.

–Creo que no, iré a ver cómo está esa herida.- dijo Quinn y subió las escaleras. Estaba totalmente desconcertada con lo sucedido, las dos tenían un aspecto extraño, actuaron como si hubiesen visto o mejor dicho, escuchado, a un fantasma. No ganaba nada mirando las escaleras, ya se habían encerrado en la habitación de Santana, supongo que era cosa de ellas. Regresé a la cocina a arreglar el desastre que había hecho Santana.




CAP46

POV SANTANA

Porque me tenían que pasar estas cosas a mi? La última vez que estuvo aquí fue hace 6 meses, y su anuncio fue por una llamada como la de hace unos minutos. Por fin me había decidido y ahora tenía que llegar? Ella no cambiaría nada de todo lo que sentía por Brittany, pero era Demi, y su simple presencia siempre alborotaba mi existencia. No podía creerlo aún, y el dolor en mi mano no ahogaba nada, recuerdos, pensamientos, momentos, todo en mi cabeza junto al desagradable olor de la sangre. Se habían roto dos vasos, felizmente fueron solo vasos, la ultima vez rompí un vodka, eso dolió más, a mi mano y a mi garganta que ansiaba tomarse un shoot.

–Estas bien?- me preguntó Quinn desde el marco de la puerta del baño.

–Cuando deje de sangrar, lo estaré.- dije remojando la herida.

–Sabes que va a demorar.- tenía razón, cada vez que me hacia alguna herida derramada baldes de sangre, un poco exagerada quizás pero en serio sangro mucho.

–Solo quería una información.- dijo mirándome. –No es que va a venir ni nada por el estilo.- dijo y levante mi mirada para verla. –Aparte, no entiendo porque te pones así? Es solo Demi, estamos acostumbradas a que llegue.- agregó y camino hacia mi cama, en donde se sentó mirándome de frente.

–Esta vez no quiero que llegue.- admití.

–Porqué? Dale San, en el fondo sabes que terminarás con ella, es la única que te aguanta todas tus estupideces y a la única que verdaderamente has querido.

–Porque tan ruda?- dije riendo, su tono era diferente.

–Porque siempre rompes cosas! La ultima vez rompiste un vodka y ahora dos vasos! No entiendo porque te haces tanto problema si al final sabes que no puedes negarte a nada cuando ella está.

–Hay cosas que han cambiado.- dije sin mirarla.

–Que cambió? Te gusta otra persona?- me preguntó.

–No, pero ya no puedo hacerle daño.

–Daño? No te has dado cuenta que ella es feliz con solo tenerte un segundo a su lado?

–Eso es penoso, no debería ser así.

–Pero lo es, porque no aceptas que es a la única a la que vas a amar?- “no es la única, a ella nunca la amé” quise decir.

–Porque te pones así?- pregunté. Siempre teníamos esta conversación, Quinn siempre defendía a Demi era la única mujer con la que estuve que en serio le caía bien.

–No sé, me gustaría que ya te la tomaras en serio. Ya no eres una niña.

–A que te refieres con tomármela en serio?

–A que ya empieces algo serio, te vas a conformar a tenerla unos días y después dejarla ir?

–No crees que eso tendría que decidirlo yo? Deja de meterte en mi vida.- dije molesta. Antes no tenía problema con aguantar esto, pero ahora no, lo que menos quiero en este momento es comprometerme con Demi, quiero hacerlo con Brittany, y eso ella no lo sabe.

–Ha pasado algo? Te siento extraña.- dijo parándose.

–Quiero estar sola y sanar esta puta herida.- dije y ella solo me miró y se fue. Lo mejor era decirle que se vaya, si no seguiría mintiéndole en la cara y ya no aguantaba más hacerlo. Estuve parada unos minutos más apretando la herida y cuando se sanó me acosté en mi cama. Necesitaba estar lista ya, necesitaba contarle la verdad, en realidad no sé porque no lo hago, no tengo dudas, osea quiero estar con Brittany, en serio me gusta. Creo que el mayor temor es a su reacción, es a como se lo tome, ella no sabe que a su hermana le gustan las mujeres, y menos que esa mujer soy yo. Quinn me conoce como nadie, y sé que pensara que no soy lo suficiente para su hermana, ni yo misma me creo suficiente para Britt, pero como ella misma me pidió, dejaré que eso lo decida ella.

POV BRITTANY

Estuve arreglando la cocina y después me senté a seguir practicando, después de unos minutos Quinn salió claramente incomoda, tomo un vaso de agua y se encerró en su habitación sin decir ni una palabra. Hasta ahora nunca las había visto discutir, era claro que lo hacían, vivir con alguien no es fácil, pero igual me parece extraño que discutan por una llamada, porque por eso fue no? Quien será la tal Demi? Me quede unas horas más, sentada, esperando para ver si alguna de las dos bajaba, pero al parecer no lo harían así que subí a mi habitación a dormir, ya era bastante tarde. El sonido del despertador invadió mi sueño, un día más de clases. Ya quedaba menos de 1 mes para acabar con todo y el ambiente en la academia ya se sentía ansioso por el concierto final. Me levanté, bañe y baje a tomar desayuno, para mi sorpresa, solo estaba Santana sentada.

–Buenos días.- dije acercándome a la mesa.

–Hola amor.- dijo con una sonrisa, su mano estaba vendada.

–Y Quinn?- pregunté.

–Ya se fue, así que puedes venir a darme un beso mañanero.- dijo estirando su mano para que la tomará, lo cual hice sin pensarlo dos veces. Me envolvió por la cintura con uno de sus brazos y provocó mis labios rozándolos suavemente. –Me encanta tu olor.- dijo matándome completamente ya que con cada palabra mis labios y los suyos rozaban, tentándome.

–A mi me encantas tú.- dije acortando la distancia, ella rió en el beso. Mis dos antiguas relaciones fueron tan diferentes a esta, siempre estaba avergonzada, para el primer beso pasaron unos cuantos días, y para hacer este tipo de juegos provocativos o yo misma tomar la iniciativa pasaron… nunca pasó, nunca hice este tipo de cosas, siempre terminaba ruborizada por todo, en cambio con Santana no, igual me ruborizo, pero si tengo la oportunidad, la aprovecho, no pienso en nada más que besar sus labios, es adictivo.

–Que linda forma de empezar un lunes.- dijo besando mi nariz, cuando el aire ya era necesario para ambas.

–Como amaneciste?- le pregunté.

–Ahora bien.- dijo con una sonrisa. –Ven siéntate.- dijo jalando la silla y poniéndola a su lado.

–Porque dices “ahora”?

–Porque contigo no puedo estar mal.

–Pero porque amaneciste mal? –Porque ayer dormí muchísimo y me está doliendo un poco la espalda.- dijo mientras se acomodaba en la silla.

–Ah entiendo, y como está tu mano?- pregunté.

–Bien, lo vende para que no se infecte la herida.

–Que pasó ayer? Porque se pusieron así?- pregunté, no aguantaba más, tenia curiosidad.

–No te preocupes por eso, es como una rutina que tenemos, todo está bien en serio.- dijo mirándome fijamente, pasándome esa paz que sus ojos transmitían.

–Y porque Quinn ya se fue?

–Tenía cosas que hacer.- dijo mientras me preparaba unas tostadas. –Toma, come.- dijo y puso la tostada en mi boca. Su sonrisa me encantaba, podría vivir viéndola solo sonreír y sería feliz. Era de esas sonrisas sinceras, esa sonrisa encantadora, esa que si venía con algún pedido, sin lugar a dudas lo tendría, yo no podría decirle que no a esa sonrisa.

–Qué pasa?- me preguntó y supuse que me había colgado mirándola.

–Me gusta verte sonreír.- dije y se ruborizó, era increíble como una persona como ella se ruborizara cada vez que le hacia un elogio.

–Porque te sonrojas?- le pregunté.

–No sé, no puedo controlar a mis mejillas.- dijo riendo. El desayuno fue lindo, conversamos de cualquier cosa sin sentido, riendo, disfrutando de cada segundo. Terminamos y nos fuimos a la camioneta. En el camino me contó sobre como ya estaba casi terminado el proyecto Europa, y que ya iban a empezar a construir.

–Y tú iras a Europa?- le pregunté.

–No, ya hablamos sobre esto, y Puck se encargará de eso.

–Puck se irá?- pregunté.

–Va a ir y va a venir, no es necesario que se quede.

–Ah ya, pensé que se quedaría a vivir ahí mientras estén en construcción.

–Quizás se quedara unas semanas y después regresará, no creo que quiera quedarse, aunque sería lo más conveniente, supongo que eso lo hablará con Emaa, yo no sé mas del tema.

–Y que vas a hacer cuando termines con ese proyecto?

–Supongo que otro, Emaa dijo que tenía nuevas propuestas.

–Y para eso ya tendrás tu titulo no?

–Sí, estoy super emocionada, ya quiero terminar con todo en la universidad.

–Estoy orgullosa de ti.- dije y ella giró un segundo para verme.

–Gracias, pero porque lo dices?

–Porque trabajas, estudias, te encargas de una casa, eres madrina de una niña, la cual te adora, y todo eso teniendo tan solo 25 años.- una sonrisa ladeada se formó en su rostro.

–No es la gran cosa, solo disfruto lo que hago, creo que ese es el secreto.

–Secreto?

–Sí, tengo todo eso porque cada cosa que hago lo hago porque yo quiero, nada ni nadie me obliga, esa es la parte buena de estar sola.

–No te entiendo.

–Es que es extraño, pero cuando tienes una familia, piensas en todo, por ejemplo yo he visto a Quinn, cada vez que toma una decisión se basa en ustedes, en buscar el bien también para ustedes, yo no, digamos que soy un poco más egoísta, busco mi bien, si yo me siento bien, el resto también se sentirá bien, no sé, así pienso yo.

–Tiene lógica, al final, todo lo que hagas terminara siendo para ti, si no lo disfrutas, de nada sirvió.- dije entendiéndola.

–Exacto, la vida es corta, hoy tienes algo y mañana puedes no tenerlo, es cosa de disfrutar cada cosa, yo vivo así y hasta ahora no me ha ido mal.

–No piensas en el futuro?

–No, para que pensar en el futuro si tienes el presente más cercano?- dijo estacionándose, ya habíamos llegado a la academia. Entendía su punto, pero a mi si me importaba el futuro, no le tomaba toda la importancia, pero si me parecía importante proyectarse un poco. –Te has quedado pensando, no tienes que pensar igual que yo, supongo que yo lo hago porque nunca tuve a alguien que estuviera pendiente de mí, como lo hace tu mamá, ustedes tienen todo el derecho de pensar en ella también.

–No me parece mal tu punto, solo que siento que es bueno proyectarse, ese sentimiento de querer algo o a alguien a tu lado por mucho tiempo más y proyectar tus cosas a la de esa persona, no sé, suena anticuado quizás.- dije mirándola.

–No suena anticuado, suena a una persona enamorada.- dijo sonriendo mientras se poyaba en el timón para mirarme de frente.

–No entiendo.

–“Querer algo o a alguien a tu lado por mucho tiempo más”- dijo imitando mi voz y riendo al final por lo ridícula que le salió mi voz.

–Tu voz es demasiado madura como imitarme.- dije riendo ya que en serio había sido muy gracioso.

–Voz madura? Qué significa eso?

–Es una voz mayor, de alguien adulto.

–Una voz sexy?- preguntó alzando su ceja izquierda. Acaso no tiene noción de lo sexy que es? O lo hace apropósito?

–Te tildaste.- dijo riendo acariciando mi mejilla.

–Lo siento.

–No hay problema.

–Será mejor que ya vaya.- dije señalando la academia.

–Sí, mejor anda, que yo podría quedarme tranquilamente toda la mañana acá mirándote.- dijo sonriendo mientras se acomoda en su sitio nuevamente.

–Nos vemos en el estudio?- le pregunté.

–No, qué tal si te recojo y nos vamos a almorzar? Todo está tranquilo en el estudio así que ni notaran nuestra ausencia.

–Estás segura? No quiero que tengas problemas.

-Emma me debe un par de favores, no pasará nada. Vengo por ti a la 1 ok?

–Ya, te espero.- dije sacándome el cinturón. Cuando estamos acá casi nunca nos besamos así que estaba abriendo la puerta cuando ella me jalo del brazo y me hizo girar un poco bruscamente.

–Hey.- dije sin darme cuenta.

–No me has dado mi beso.- dijo haciendo puchero. Ok, esto era mucho para mí.

–Acá?- pregunté mirando a los lados.

–No, acá.- dijo y de un impulso sus labios ya estaban en los míos. Entre abrí mis labios para profundizar el beso, pero ella lo cortó y mordió mi labio inferior, abrí los ojos y una sonrisa de superioridad invadió su rostro. Ella tenía el control, eso estaba clarísimo.

–Auch.- dije por reflejo llevándome los dedos al labio.

–Te ha quedado rojo.- dijo riendo.

–Gracias, por avisarme.- dije irónicamente abriendo la puerta.

–A la 1! No te demores.- dijo y le sonreí forzadamente haciéndola estallar en risa. No pude evitar sonreír realmente al verla reír. Me despedí desde la puerta con la mano y vi como se fue. Las clases ya habían empezado ya que no había mucha gente afuera. Estaba llegando tarde, pero verdaderamente no me importaba. Entre con una sonrisa mientras acariciaba mi labio, realmente me había mordido fuerte.



Les traigo dos capitulos porque estoy muy feliz ♥ Gracias por los comentarios un besoooooooooooo!

Uff ya quiero leer la parte donde se lo dicen a quinn
Y que bueno que estes feliz!

Saludos
)))):)

Me encanto el cap lo ame!!! mas tiernas las chicas y entiendo tanto a san que mentirle a su mejor amiga no es nada facil! y lo de demi la re descoloco pero deberia haberle contado a britt las cosas!! ame el cap espero el proximo pronto! me alegra que estes tan feliz y nos hagas felices a tus lectores ajjajajaj besos!

Hola!
Estoy que me come la ansiedad de saber que pasara en el proximo capitulo!
Las chicas estan que riegan miel y yo que me las quiero comer jaja
Ya quiero leer el capitulo donde santana le dice a quinn el amor que le tiene a su hermana...
Creo que no te salude... Como estas? Cuidate(:
Nos leemos hasta la proxima

POV SANTANA

Llegue al estudio y decidí ir a fastidiar un rato a Sugar, no hablamos desde ese día en el bar y en serio quería saber porque ella tenía esas pastillas. Sabía que se drogaba de vez en cuando, pero llegar al extremo de tomar eso tan fuerte solo para olvidar me parecía mucho.

–Puedo?- pregunté.

–Dale maestra, pasa.- dijo con tono burlón, sabía que lo decía por lo de Hanna.

–Cómo estás?- pregunté sentándome.

–Sobrevivo, tan mal no me va.- dijo sin quitar la vista de lo que hacía en la computadora.

–Quería hablar contigo.

–Lanza tu pregunta.- dijo mirándome rápidamente. Nos conocíamos bien, en el fondo éramos iguales.

–Qué era eso que me diste, y porque las tenías?

–No sé exactamente que eran, solo las compré.- dijo y no podía creerlo. Lo había comprado por comprar, sin saber que era?

–Te volviste loca? Qué tal si era dañino? O si tenía algo extraño.- dije preocupada.

–Yo estoy bien, así que no hay problema.- dijo como si nada.

–Que es lo que quieres olvidar?- pregunte y ella no me miraba. –Me vas a ver a los ojos?- le pregunte nuevamente, odiaba cuando hablaba y no me miraban.

–Estoy ocupada ahora, te parece si hablamos de esto luego?- me dijo por fin mirándome, sus ojos tristes, no era la Sugar que conocía.

–Sabes que cuentas conmigo no?

–Lo sé San, solo dame tiempo, no es fácil.

–Cuando termines me buscas, no importa el lugar ni la hora, estaré para ti.

–Dale, yo te busco.- dijo y volvió a perderse en su computadora. La observe por unos segundos y me fui a mi oficina. No tengo la menor idea de lo que le pasa, pero jamás la vi así, ella era una persona alegre, sin problemas, eso me gustaba de ella, que para todo era una sonrisa, y esta Sugar que acabo de ver no es así, se ve triste. Me quede lo que quedaba dela mañana viendo mi proyecto, cuando ya era la hora de ir por Brittany cerré todo y salí sigilosamente para no llamar la atención. Mi plan no funciono ya que cuando estaba por llegar a mi camioneta victoriosa llega Emma con Artie.

–Hey San, a dónde vas?- me preguntó Artie y lo maldecí. En realidad siempre lo quise, pero tenía aun la imagen de él bailando con Brittany y eso no era nada bueno, para él.

–Hola.- dije con un tono cortes, bastante falso.

–A donde te vas? Aun no es ni la 1!- dijo Emma mirando su reloj.

–Iré a almorzar.- dije mirando mi reloj como si no me hubiese dado cuenta de la hora. –Espéranos y vamos contigo, que estamos con hambre y justo estábamos diciendo para ir a algún restaurante.- dijo Emma.

–No!- dije nerviosa y los dos me miraron. –Es que ya quede con alguien.- agregué y ambos sonrieron maliciosamente, estaba segura que creían que era un conquista o algo parecido.

–Ahora entiendo tanto apuro.- dijo Artie y le hice una mueca.

–Ok anda, no vaya a ser que te deje.- dijo Emma burlonamente.

–Emma, a mi nunca me dejan.- dije despidiéndome. Me di la vuelta y camine hacia mi camioneta.

–Oye! Brittany va a venir?- preguntó Artie.

–No, tiene cosas que hacer.- dije sin mostrar mi incomodidad por su interés. A el que le importaba si ella venia o no? Si igual ella nunca lo ayudaba! Respiré profundo y subí a la camioneta, ya solo tenía 15 minutos para llegar y hay muchos semáforos así que tenía que irme rápido.


POV BRITTANY

Habían pasado 4 minutos cuando vi la camioneta de Santana estacionarse al frente de la academia. Crucé rápidamente y abrí la puerta para entrar.

–Llegas tarde.- dije solo para fastidiarla, ella es de las personas que son demasiado puntuales.

–Lo sé, lo siento. Artie y Emma me detuvieron con sus preguntas y se me hizo tarde.

–Todo bien?

–Sí, solo que estaba escapando y justo ellos llegaron, no pude salvarme del interrogatorio.

–Que les dijiste?

–Que iría a almorzar y que no podían venir conmigo.- dijo riendo.

–Preguntaron por mí?

-Si, ARtie.- dijo incomoda. –Pero les dije que tenías cosas que hacer.- dijo rodando sus ojos.

–Ah ok.

–Ahora que ya te conté la historia, dame un beso.- dijo jalándome de la mano y plantando sus labios suavemente sobre los míos, sin buscar más que el simple roce de estos. –Ahora sí, vámonos.- dijo animada mientras se ponía el cinturón nuevamente, yo hice lo mismo. Durante el camino le conté sobre las clases, cuando le pregunte por su día me dijo que no hizo nada interesante, solo se sentó en su computadora e intento concentrarse, era gracioso verla hablar tan despreocupada, supongo que el hecho de ya tener todo el trabajo listo la hacía sentirse relajada. No me dijo a donde iríamos, pero cuando llegamos ya lo sabía. Era el lugar a donde fuimos con Rachel y Quinn, el segundo día de mi llegada.

–Vamos a almorzar acá?- pregunté.

–Sí, no te gusta?

–Si me gusta, solo que como acá te conocen y también a Quinn, no crees que será incomodo?- pregunté.

–Porque? No me importa que sepan que estoy enamorada de ti, en cualquier momento el mundo entero lo sabrá.- dijo acariciando mi mejilla. Ahí estaba la Santana tierna, derritiéndome completamente. –Vamos?- preguntó y asentí. Entramos y estaban Mercedes y su novio sentados conversando, tengo buena memoria para los nombres, pero el nombre de él no lo recordaba.

–Santana! Que milagro tenerte por aquí.- dijo Mercedes saludándola cariñosamente.

–Sí, venimos a comer.- dijo parándose a mi lado y Mercedes me observo tratando de recordar en donde me había visto antes. –Es la hermana de Quinn.- le dijo Santana antes de que preguntará.

–Ah! Ya te recordé, sabía que te había visto, pero no recordaba donde.- dijo nerviosamente mirándonos a ambas tratando de descubrir que hacíamos juntas. Su novio se dio cuenta del silencio incómodo y habló.

–Suban.- dijo abriendo el ascensor con un control.

–Gracias Sam.- le dijo Santana. Sam! Sabía que sus labios eran extraños. Subimos al ascensor y cuando la puerta se cerró Santana comenzó a reírse escandalosamente.

–De te ríes?- pregunte sonriendo.

–Viste como nos miró?- dijo entre risas.

–Creo que quería saber que hacíamos juntas.- dije uniéndome a su risa.

–Fue gracioso.- antes de que dijera algo más ya habíamos llegado. Nos sentamos en una de las mesas y pedimos nuestros platos. Era increíble como la conversación fluía cuando estábamos juntas, era como si quisiéramos ponernos al día sobre todo lo que hicimos mientras cada una estuvo por su lado.

–Vamos a ir a casa?- le pregunté cuando ya habíamos terminado y estábamos a punto de levantarnos.

–No, tengo que ir un rato al estudio y después tengo clases. Te dejare en la casa.- dijo mientras buscaba su billetera en su bolso. Se negó a dejarme pagar.

–Porque no puedo acompañarte?- le pregunté.

–Porque hoy si me demoraré, tengo que entrar a una charla.

–Ah ok.- dije algo triste, pensé que pasaríamos la tarde juntas.

–Ya voy a terminar con la universidad y tendré mucho tiempo libre para estar contigo.- me dijo sonriendo.

–Yo también ya voy a terminar con la academia.- dije agachando la mirada y cuando estaba a punto de hablar llego la mesera para cobrar la cuenta. Santana pago y bajamos en silencio, sabíamos que en el algún momento tendríamos que hablar sobre eso. Santana se despidió de Mercedes, la cual esta vez nos observo con una sonrisa enorme. Nos subimos a la camioneta y antes de arrancar Santana se giro para verme de frente.

–Se que nos queda menos de un mes, no pensemos en eso ahora de acuerdo?- preguntó y vi cierto dolor en sus ojos, me gustaría decirle que me quedaría, que me quedaría con ella, pero tenía que ser sincera conmigo, quería estudiar música, y no podría hacerlo acá.

–De acuerdo.- asentí y ella beso delicadamente mis labios. Prendí el estéreo y nos fuimos cantando, ella lo hacía muy bien. Llegamos a la residencial y me despedí de ella con un beso muy prolongado y baje para caminar a casa. Llegué y me di una ducha, cuando bajé Quinn ya había llegado y estaba con Rachel conversando en la sala.

–Hola pequeña.- dijo cariñosamente.

–Hola, te fuiste temprano hoy.- dije saludando a Rach y sentándome al lado de mí hermana.

–Sí, tenía unas cosas que hacer y tenía que llegar más temprano.- dijo sonriendo, así que supuse que todo estaba bien.

–Y Santana?- preguntó Rach.

–Dijo que tenía una charla en la universidad.- dije y Rachel sonrió de manera cómplice y
Quinn miraba a su celular así que no lo noto. De la nada se paró y sonó el teléfono de la casa.

–Yo contesto.- dijo. –Hola… no, no está… te sirvió lo que te envié?... Qué bueno! Sabes que cuentas conmigo para lo que necesites… Listo, un abrazo… dale, me avisas… chau…- dijo y colgó caminando hacia el bar. –Desean algo?- preguntó.

–Sí, sirve dos.- dijo Rachel levantándose.

–Sirve tres.- agregue yendo detrás de ella. Nos sentamos en la barra y Quinn nos alcanzo las copas.

–Oye, quien era ah?- pregunto Rachel llevándose la copa a la boca.

–Demi.- dijo Quinn y Rachel casi escupe todo lo que tomó.

–Mierda.- dijo y empezó a toser.

–Por la mierda! Tu también? Es solo Demi, que pasa con ustedes?- dijo Quinn yendo a la cocina y regresando con un trapo para limpiar lo que Rachel había escupido.

–Lo siento, es que no esperaba que me dijeras su nombre.- no entendía muy bien que pasaba, pero Rachel me miraba extraño. –Que quería?

–Unas cosas de la oficina, llamo ayer y yo recién se las envié, llamaba para agradecer.- dijo tomando de su bebida.

–Ah ok, va a venir?- pregunto Rachel con miedo. No sé quien era la tal DEmi, pero Rachel y Santna actuaron extraño con solo escuchar su nombre.

–No creo, no me dijo nada de eso.- Rachel se tranquilizo con esas palabras, ya que suspiro como si estuviese cargando algo pesado. Después de eso el tema cambió, Rachel hablo sobre su trabajo y Quinn y yo no parábamos de reír con sus historias. Y era casi media noche y llego Santana con un aspecto cansado, como si hubiese estado durmiendo por horas.

–Hola.- dijo caminando hacia la cocina.

–Hey! Como estas?- le preguntó Rach.

–Cansada, me quede dormida en la charla y me duele todo el cuerpo por la posición.- dijo y Quinn se rió.

–Tan aburrida la charla?- preguntó.

–Aburrida es poco, nada de arquitectura, pura ingeniería, no sé porque el profesor nos obligo a estar ahí.- dijo acostándose en el sillón mientras comía unas galletas que sacó de la cocina.

–Cuando acaban las clases?- preguntó Rachel.

–Dos semanas y acaba la tortura.

–Cinco años y medio en la universidad, eres valiente, a las justas pude aguantar cinco años.- le dijo Rach mientras se sentada a su lado.

–No la hacía si terminaba en cinco, de seguro mi promedio bajaría y no quería arruinarlo.

–sigues siendo primer puesto?

–Por supuesto, no dejaría que Emily me ganara.- dijo riendo.

–Que es de su vida?

–Lo mismo de siempre, jodiendo la del resto.

–Sigue igual de antipática?- preguntó Quinn haciéndome un gesto como para que vayamos a la sala, lo cual hicimos.

–Cada día es peor.

–Hace mucho que no la veo en el bar, debe estar yendo a otros lugares.- dijo Rachel.

–Me alegro por ti.- dijo Santana sonriendo. Seguimos conversando un rato más y después nos fuimos a dormir. Quinn subió con nosotras y lo único que pude recibir de Santana era una sonrisa y un “Duerme bien”. Habíamos tenido un buen día juntas así que me sentía satisfecha.

AndyexD :Las chicas estan que riegan miel y yo que me las quiero comer JAJAJAJAJAJAJA BUENA FRASE :)



Tatymm:USTEDES ME HACEN FELICES


Jane0_o: ♥♥