FIC Brittana- Nothing else matters - CAP. 31

chann que pasara ahora??????????

mmmmm ............me has dejado con una duda enorme ¿que hara el cretino de Jack con ayuda de su complice?

Saludos, hasta la proxima actualizacion

Aghh!! como odio a Jack e Isabel! espero la actuu!---

SIIIIII. Actualizaste! ^^.No se de como entre a la pagina y me puse feliz. jejejejeje.

Me dejaste con una duda enorme!. ESE JACK. ¬¬. Se trae algo feeeeeoooo entre manos. Lo presiento!!!!!! ¬¬. Actualliza pronto. :D

Feliz Año y besote enorme. ^^

Actualizaste y tengo internet. soy la persona mas feliz del mundo. jaja. Extrañaba mucho este Fic. Que bueno que subiste un capi

Aunque subiste el cap pero me dejaste con mucha duda y miedo. Kack se trae algo malo y su complice lo mismo. Las van a separar. Lo presiento. :\'(: Ojala que el amor que tienen sea mas fuerte. :D

Espero que actualices pronto. Beso.

Hola a todaaas! ¿Qué tal el nuevo año y todas esas cosas? Espero que genial. Bueno, no sé si el día de los Reyes Magos se celebra en todos lados o solo en España o qué, pero ahora os dejo un nuevo capítulo como regalo de Reyes, espero que os guste! Aunque creo que no os gustará mucho, ya sabréis por qué jajaja
Bueno, ahora lo subo, un beso a toooodas!
Y gracias por comentar como siempre, sois geniales :)

CAP. 30



Quedó con el chico en un pequeño árbol que ambos
conocían en Central Park, algo lejos de la escuela. Jack estuvo
esperándola algunos minutos, pero, a pesar del calor que hacía, no
parecía importarle. Esa mañana de julio era especialmente calurosa, por
lo que ambos iban con ropas ligeras y veraniegas.
Cuando por fin Brittany llegó, se sintió un poco culpable por haberle hecho esperar
tanto.

-Perdona Jack, ¿llevas mucho esperando?- preguntó avergonzada.

-No, tranquila, cinco minutos- mintió el chico, que realmente habría esperado horas y horas por ella.

-Bueno, ¿dónde podemos ir? Parece mentira que lleve aquí dos meses y siga sin conocer los sitios de tiendas- bromeó Brittany.

-Bueno, ya sólo te queda un mes de estar aquí, y en Ohio te conoces todas las
tiendas de arriba a abajo- sonrió Jack animándola. Aunque realmente ese
comentario lo único que consiguió fue quitarle la sonrisa a la rubia.

-Ya, bueno, no está tan claro que sea así- contestó Brittany.

-¿El qué no está claro? ¿Acaso piensas quedarte a vivir aquí?- preguntó el chico indignado.

-Es igual, ¿vamos de compras ya?- respondió la rubia, incómoda con la situación.



Finalmente, a sugerencia de Jack, decidieron ir por una calle con bastante ambiente
y con tiendas por cada sitio que miraras. Pasaron toda la mañana de
local en local, buscando algo que fuera lo suficientemente perfecto para
Santana.





Mientras, en la academia, Santana se encontró con Quinn en la cafetería y ambas se sentaron a desayunar.

-¿Qué tal has pasado la noche?- preguntó la morena, pensando que había estado con Rachel.

-Bufff, ni me hables. Tu compañera, la tal Isabel, no me dejó pasar a su habitación- dijo de mal humor.

-Vaya, así que esta noche alguien no ha tenido diversión eh- rió.

-Bueno, digamos que me he sabido divertir igual de bien con otra rubia de ojos
azules- atacó Quinn, riéndose ante la boca abierta de su amiga.

-Es imposible que Britt se rebaje a tanto- contestó ofendida la latina.

-Bueno, más la vale, porque una vez que conozca el poder de Fabray, hazme caso,
no querrá volver a hacer el amor contigo- siguió bromeando la rubia,
riendo a más no poder.

-No lo va a conocer, porque si no “Fabray” se quedaría sin ovarios, porque me encargaría de sacárselos yo con un
destornillador, ¿queda claro?- amenazó Santana medio riendo también por
las bromas de su amiga.

-Sería gracioso ver eso. Aunque no con mis ovarios, obviamente- añadió al ver la ceja levantada de Santana.

-Bueno, dejando tus ovarios de lado, ¿dónde se ha metido hoy Britt?- preguntó mirando a todas las mesas.

-Oh, creo que ha salido, me dijo que desayunaba fuera, pero no sé donde habrá ido- contestó Quinn encogiéndose de hombros

-¿Y tú tienes algo que hacer hoy?- preguntó la morena.

-He quedado con Rach, vamos a ir a ver uno de esos musicales que le gusta a ella, ‘Los Miserables’ creo- contestó la rubia.

-¡Ese musical es genial!- exclamó Santana, ya que era uno de sus favoritos. –os va a encantar.

-Bueno, espero que sí. ¿Tú que vas a hacer?

-Tengo que ir a llevar unos papeles de la academia a no sé qué calle y por la
tarde tengo reunión con los productores del videoclip. Creo que
continuaremos con la grabación dentro de poco, quizá mañana- dijo
resoplando.

-Bueno, que te sea leve amiga, yo voy a arreglarme ya o Rachel me matará- rió Quinn dejando un beso en la mejilla de la
morena, recogiendo su bandeja y marchándose de ahí.



Una vez terminado su desayuno, pensó en si llamar a su chófer o conducir
ella misma hasta allí. Finalmente se decidió por la segunda opción,
asique se dirigió hacia su moto y se puso su casco. Le daba una pereza
enorme ir a entregar esos papeles, pero era lo que le habían pedido, así que tenía que hacerlo.



Condujo hasta el sitio, que tampoco andaba muy lejos. Cuando llegó a la dirección que le habían dado, paró la moto y buscó un poco con la mirada. Se iba a bajar de
ella, cuando vio algo que la dejó helada y totalmente paralizada.




Mientras, en el teatro Apollo, se encontraban Quinn y Rachel. La castaña no podía
evitar que algunas lágrimas rodaran por sus mejillas, mientras miraba
con los ojos vidriosos y totalmente fijos en el escenario. Quinn por su
parte, no prestaba mucha atención a la obra. Prefería fijarse en cada
pequeño gesto que hacía su novia, cada músculo de su cara que movía.
Prefería ver sus ojos brillantes de emoción, o su risa en algunas
escenas. Rachel Berry era para ella como su propio espectáculo.

A todo eso estaba cada una, cuando de repente el móvil de Quinn comenzó a
vibrar. Agradeció mentalmente haberlo puesto en modo vibración, o si no
todo el mundo estaría ahora mirándola. Sacó el aparato del bolsillo de
su chaqueta, leyendo el nombre que salía en la pantalla.

-¿Qué pasa San? Ya sé que te gusta esta obra, pero ya te llevaré a verla otro
día- dijo Quinn susurrando, provocando que Rachel apartara su vista por
primera vez del escenario y la mirara con curiosidad.

-Quinn…creo que Britt me engaña- soltó la latina de golpe.

-¿¡¿QUÉÉÉ?!?- gritó la rubia por la sorpresa, aunque enseguida se arrepintió, porque la miraron muchas personas bastante mal.

-Sí, ¿te acuerdas que me dijiste que había salido esta mañana? Bueno, pues está con Jack y…- comentó aceleradamente.

-A ver, a ver, Santana, relájate- comenzó Quinn, esta vez bajando el tono

–Lo primero de todo, Brittany es incapaz de engañarte, te quiere
demasiado. Y lo segundo, sé que no te vas a quedar tranquila con esto,
asique, simplemente llámala. Pregúntala que qué tal su día, cualquier
chorrada, y ya verás como no tiene problema en contarte que está con
Jack.

-Uff…vale, gracias Quinnie, eso haré. Por cierto, ¿eso que
estoy escuchando es Fantine’s arrest? Esa es la parte en la que
arrestan a Fantine porque un hombre asqueroso dice que…

-Sí, sí, San, estoy viéndolo, no hace falta que me lo cuentes, corre a llamar a
Britt y luego me cuentas- la interrumpió Quinn riéndose.

-Sí, perdón, ahora te cuento- dijo la latina colgando la llamada y marcando
apresuradamente a su novia, escondiéndose un poco para que no la viera.

Mientras, Brittany acababa de salir de un establecimiento. Por fin había
encontrado el regalo de Santana, y estaba muy contenta por ello. Era un
regalo genial, tampoco muy caro, ya que seguía sin contar con el dinero
de su padre, pero algo tenía ahorrado.

Estaba con su cabeza en las nubes pensando en la cara que pondría su novia al verlo, cuando de repente su móvil comenzó a sonar. Sonrió enormemente al ver el nombre de quien la llamaba, y descolgó rápidamente.

-Hola amor- saludó tiernamente la rubia.

-Hola Britt- respondió la latina sonriendo también de manera tonta, aunque
duró escasos segundos su sonrisa, solo hasta que volvió a ver al
estúpido de Jack al lado de su novia. –Oye cariño, ¿dónde estás? No te
he visto esta mañana en el desayuno.

-Eh…esto…pues…- balbuceó la rubia, que no había preparado ninguna excusa y tampoco podía decirle que estaba comprando su regalo.

-¿Qué pasa Britt?- preguntó ante la falta de respuestas.

-Estoy…ensayando, eso es, estoy ensayando muy duro- dijo por fin con firmeza.

-Ah- logró articular Santana, que no se creía que de verdad la estuviera mintiendo de esa manera.

-Si quieres voy hoy a tu habitación y comemos juntas allí, puedo llevar
algo de comida. Ya sé, puedo llevar nuddles de esos que tanto te gustan,
¿te parece?- preguntó ilusionada.

-Déjalo, tampoco tengo mucha hambre hoy, y tengo planes ya- dijo evasiva la latina y con un deje de molestia.

-Oh… ¿y por la tarde?- intentó una vez más la rubia, que quería darle su regalo cuanto antes.

-Tengo una reunión para el tema del videoclip, y supongo que saldré tarde.
Bueno, te dejo, ya hablaremos- se despidió Santana secamente, colgando
el aparato.



Brittany miró su teléfono confundida, sin saber muy
bien que le pasaba a su novia. Ella estaba casi segura de que no se
acordaría de que hacían dos meses, pero aún guardaba alguna esperanza.
Desde luego, después de esa llamada, se desvanecieron todas.
Después de esa conversación, pidió a Jack que la llevara a la escuela.





Quinn y Rachel salieron de la mano del teatro. La castaña iba todavía con los
ojos brillantes de ilusión, comentando todo el musical, cada pequeño
detalle, hasta el vestuario de los actores. La rubia solo la escuchaba y
sonreía, admirando la capacidad que tenía de fijarse en todo, y también
la capacidad de soltar mil palabras por segundo. En eso, se acordó de
que Santana no había vuelto a dar señales de vida, así que,
interrumpiendo el monólogo de su novia, decidió llamarla. Espero
pacientemente cada tono de llamada, hasta que finalmente saltó el buzón
de voz. Lo intentó dos veces más, y el resultado siempre era el mismo.
Frunció un poco el ceño, ya que el móvil personal de la latina siempre
estaba disponible. Tenía dos móviles, uno de trabajo y otro para su vida
privada. Este último lo conocían muy pocas personas, y cuando la
llamaban ahí era por algo importante, por eso siempre contestaba. Pero
esta vez no.





Escasos minutos después, otro teléfono comenzó a sonar.

-Isabel, soy yo. La primera parte ya está hecha, demos paso a la segunda parte del plan.

Hace un rato me despierto, despues leo este cap y NOOOOO, me hubiera quedado dormida. (? Ok, no tanto!. Pero el drama esta asomando sus narices. jejeje. Lo tenia que poner. e.e. Me parecio gracioso. Ok, me concentro!

El cap! no te lo puedo creer, que justo que la vio con Jack, pero no estaban haciendo nada, pero Britt le mintió por no querer decirle que estaba comprando su regalo, y San se enojo y todo se fue a la bosta!. u.u. No puede ser. :(. Pero dejo que todo fluya porque todo tiene un motivo!. Espero que San no haga nada raro. O.o.

Besote

pq siempre tienen que pasar cosas buenas que parecen malas?

Actualizaste! :\'(: No sabes lo feliz que soy.

Aunque este cap me puso trsite a la vez. Media bipolar me senti. Ese Jack tiene intenciones malas. Britt no se puede confiar en él. Por que cuando alguien hace algo bueno, pareciera que fuera malo?. Lo que mas deseo es que San le pregunte algo o que conteste el telefono. Pero la entiendo, debe estar dolida.

Espero que actualices pronto. Se que se viene el drama, pero lo voy a leer con la frente en alto. jaja.

Beso.

maldito jack!! y que san no flashee al vicio!! besos!

Actualizaste!!! Me gustó mucho el capitulo, estuvo muy bien pero no me gusta ese jack, cada dia lo odio mas aghhhh
Y santana no cambia mas, haciendose ideas locas en la cabeza tiene que dejar que britt se explique!!
Parecerá una tontería pero quiero saber que le compró a San, asique actualiza dalee
un beso :)

hola.... estoy leyendo tu fic y esta increible.. felicitaciones... :)

Hola a todaaaaas!
He vuelto, por fin, después de bastante tiempo. Perdón por la espera.
Gracias a todas por los comentarios, que me encantaría responderos pero no tengo nada de tiempo, pero que sepáis que los leo siempre todos, y me ayudan muchísimo, asique graciaas :)

Bueno, no me puedo enrollar mucho más, tengo ya el 31, que lo subiré ahora mismo y el 32 lo tengo por la mitad ya, así que no creo que tarde mucho en subirlo. Espero que os acordéis todavía de la historia jajajaja

Aquí va el capii, un beso :D





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CAP. 31


Eran ya las 15:30, y Santana tenía que estar en el despacho de Mike en media hora para la reunión con los productores, pero no tenía ninguna intención de salir de la bañera. No había ido a la academia para no encontrarse allí con Quinn ni mucho menos con Brittany. Necesitaba un tiempo a solas, para meditar todo lo que había sucedido. Intentó mantener su cabeza fría y pensar las cosas con objetividad: Brittany estaba con Jack, pero tampoco les había visto con ninguna actitud cariñosa. Quizá estaba exagerando bastante las cosas y no era para tanto, simplemente dos amigos pasando un buen rato por el centro de Nueva York. Pero entonces… ¿por qué la rubia la había mentido? ¿Por qué no la había dicho que estaba con él?

Su cabeza era un continuo torbellino de pensamientos y emociones, aunque una parte de su mente sabía que debería preguntarle a Brittany antes de sacar sus propias conclusiones, pero tenía demasiado miedo a la respuesta.

Había decidido irse a una de sus casas a las afueras de Nueva York, y había pasado ahí toda la mañana. Por fin consiguió salir de la bañera de hidromasaje, quedándose un poco más relajada, y acordándose de pronto que tenía ambos móviles apagados, tanto el del trabajo como el personal.

Se puso la toalla y se secó rápidamente, para después encender ambos aparatos, llegándole en los dos más de veinte llamadas perdidas de Quinn. Se preocupó bastante por esto y decidió llamarla inmediatamente, quizás había pasado algo importante.

-¿Pasa algo Quinn?- preguntó nada más escuchar que había atendido al teléfono.

-¿Y me preguntas que si pasa algo? Llevas casi ocho horas desaparecida, sin dar señales de vida, sin responder a ninguno de los dos móviles, y sin pasar por tu habitación de la escuela, ¿y encima tienes la cara de preguntarme que si pasa algo?- casi gritó la rubia, que se encontraba demasiado enfadada. Había estado muy preocupada buscando a la latina por todos lados e intentando comunicarse con ella. Había llamado hasta a Mike, el representante de la morena, y ni siquiera él sabía nada de ella.

-Vale, vale, lo capto. Perdón. Simplemente no me apetecía hablar con nadie, necesitaba pensar- contestó con la poca voz que le salía del cuerpo.

- Perdón por haberte gritado, es que ya no sabía qué hacer para encontrarte. Pero no quiero que pases por esto sola, así que estoy de camino hacia los Hamptons- dijo la rubia con el móvil puesto en manos libres ya que iba conduciendo.

-¿Cómo sabías que estaba aquí?- preguntó con la boca abierta.

-Hace un par de años, dos o tres meses después de que decidieras comprar esa casa, discutiste con tus padres. Fue una discusión bastante fuerte, te dijeron que no querían que siguieras saliendo con aquél guitarrista, y te dijeron que él no era de fiar, que te terminaría haciendo daño, ¿te acuerdas? Tú empezaste a gritarles, diciendo que era tu vida, y que ellos no se tenían que meter en tus asuntos, después de eso saliste corriendo de casa dando un portazo- comenzó a relatar la rubia.

-Me vine aquí y estuve como tres horas seguidas tocando el piano de cola que hay en la sala de estar- dijo la morena acordándose de repente.

-Sí, por ese entonces la casa estaba vacía todavía, solo estaban los baños, el piano y un sofá. Cuando fui a buscarte me dijiste que simplemente el hecho de estar ahí había conseguido relajarte. Estuviste casi un mes sin hablar a tus padres después de aquello, y todo ese tiempo lo pasaste ahí, en esa casa- siguió contando Quinn, haciendo recordar a la morena como había ido comprando los muebles poco a poco durante ese mes que estuvo viviendo allí hasta hacer la vivienda algo habitable. Ahora tampoco es que tuviera muchos muebles, pero la decoración estaba bastante bien, a ella le encantaba. Y por lo menos tenía lo necesario para vivir ahí, aunque no lo necesitara de momento.

-Volví a hablarles justo después de que el estúpido de Kevin me dejara por otra. Ahí me di cuenta de que ellos tenían razón- dijo con voz agria recordando toda la historia.

-Bueno, eso ya da igual, a veces no nos damos cuenta de las cosas por más que las personas que nos quieren traten de abrirnos los ojos San, pero es el misterio de la vida, todos tenemos que equivocarnos, y aprender de esos errores- contestó Quinn, llegando casi a la casa de su amiga.




Brittany daba vueltas por su habitación, la desesperación comenzaba a aflorar en su interior. Llevaba horas sin saber nada de Santana, su teléfono estaba apagado, no estaba en su habitación, y ni siquiera Quinn sabía donde estaba.

La última vez que habló con ella esa mañana, la había notado un poco rara. No puedo evitar sentirse algo triste además de la preocupación, ya que era una fecha especial, por lo menos para ella. Ella sabía que dos meses no eran nada en una relación, que apenas significaba tiempo, pero habían sido los dos meses más felices de su vida, y, de alguna manera, quería darle las gracias a Santana por aquello.

Pero la latina seguía sin dar señales de vida. Había hablado con Quinn hace como una hora, y le había dicho que en cuanto supiera algo de ella la llamaría, pero no lo había hecho. Intentó llamarla ella pero el móvil de la de ojos verdes comunicaba.






Santana abrió la valla de fuera de la casa a Quinn cuando la vio llegar. No tenía asistentas ni personal de limpieza en ninguna de sus casas, no le gustaba demasiado eso de tener criados. Simplemente había un jardinero encargado de cuidar el jardín una vez a la semana.

Al verla, la rubia la abrazó fuertemente, fijándose en sus ojos hinchados y rojos. No quiso preguntar qué había pasado porque podía imaginarse que se trataba de Brittany. Alomejor no había sido buena idea aconsejarla que llamara ala de ojos azules. Pero bueno, ya no podía hacer nada para evitarlo, simplemente tenía que estar ahí, con su amiga, apoyándola.

-Quinn, tengo reunión en quince minutos, ¿vienes conmigo? Por favor- pidió Santana, que no se sentía en condiciones de aguantar una aburridísima reunión ella sola.

-Claro que sí San, ¿coche o moto?- preguntó la rubia entrando en el garaje de la casa, donde había una gran variedad de vehículos.

-Moto, así me despejo un poco- contestó señalando una amarilla y montándose en la parte de atrás para que Quinn condujera.

Además de las llamadas de Quinn, había otras muchas llamas de otro número. Otro número que se sabía de memoria. Igual que se sabía de memoria a la persona a la que pertenecía dicho número. Pero simplemente ignoró las llamadas, no le apetecía hablar con ella ahora. Quizá cuando saliera de la reunión le pediría alguna explicación, ahora no.





-Vas a hacer un agujero en el suelo de tanto da vueltas- dijo riendo Rachel mientras entraba a la habitación de Brittany y Quinn. La rubia se sobresaltó al escucharla y corrió a su encuentro.

-¿Sabes algo de Santana? ¿Te ha llamado Quinn?¿Dónde está?- comenzó a preguntar rápidamente.

-Hey Britt, para, para, relájate. Te estás pareciendo a mí en estos momentos, y eso me asusta- comentó Rachel sin poder evitar una risa.

-Puff….ya no sé qué más hacer. No sé qué la pasa. Sé que está enfadada pero no logro averiguar el por qué- contestó la rubia resignada y sentándose sobre la cama, cubriéndose la cara con las manos.

-Ven aquí- dijo la castaña acercándola hacia sí y abrazándola con fuerza. La separó un poco de sí, le quitó las manos de la cara y dejó un suave beso sobre su frente.- Yo lo único que sé es que esta mañana llamó a Quinn bastante preocupada. Creo que escuché como decía algo de que tú la engañabas o algo así, pero no sé por qué lo decía.

-¿C-c-cómo?- atinó a responder Brittany que se había quedado con la boca abierta y los colores se habían ido de su cara, dejando su piel más pálida aún. – No puede ser. Esto debe de ser una broma.






La reunión fue más aburrida de lo esperado, dejaba que Mike se encargara de todo, y de lo único que se enteró fue de que la grabación del videoclip la retomaban en dos días.

Una vez que hubo acabado, se despidió de su agente con un beso en la mejilla y se fue con Quinn. Fueron a un Burger King que había por esa zona, y comieron tranquilamente, sin importarles que todo el mundo las mirara o se les acercara para pedirles autógrafos. El caso es que a Quinn eso le hacía mucha gracia, porque ella no era famosa por nada, pero simplemente por el hecho de ser la mejor amiga de San se convertía en algo que la gente consideraba como un ídolo. Nunca entendería la compleja mente de los seres humanos.

En uno de los pocos minutos de tranquilidad que le dieron sus fans, Santana vio como su móvil vibraba en el bolsillo. Lo sacó y se quedó mirando a la pantalla, pensativa. La rubia miró la cara de su amiga y no lo dudó.

-San, tienes que hablar con ella. Le tienes que dar el derecho por lo menos a que te dé una explicación- dijo Quinn señalando con la mirada al móvil que la latina había dejado encima de la mesa como intentando apartarlo de ella.

-Creo que ese derecho lo perdió al mentirme- contestó tercamente.

-Vamos a ver, todo el mundo se equivoca, y todo se puede sacar de contexto muchas veces. No sabes por qué Brittany te mintió, y sí es cierto que mentir está mal, pero a lo mejor tiene sus razones. Tienes que dejar que se explique. Tú la quieres, demasiado, y ella también te quiere muchísimo a ti, así que no dejes que todo se estropee por un posible mal entendido, ¿de acuerdo?- soltó la rubia de ojos verdes mirándola seriamente. Odiaba ponerse así con la latina, pero era la única forma de hacerle entrar en razón. Conocía perfectamente a su amiga y sabía lo cabezota que podía llegar a ser.

-Tienes razón Fabray- dijo la morena poniéndose de pie.

-Siempre la tengo- contestó orgullosa la rubia- Oye San, pero…

-Dime- contestó la morena.

-¿Nos vamos ya?- preguntó.

-Sí, quiero hablar con Britt en persona, ¿por qué?- dijo con curiosidad.

-Entonces… ¿me puedo comer lo que queda de tu hamburguesa?- rogó la rubia poniendo mirada de cachorrito.

-Quinn, te has comido ya tres, eres de lo que no hay- contestó Santana poniendo los ojos en blanco y dándosela. –Voy al baño, espérame aquí un segundo.

-Vale, no tardes- pidió, sabiendo que la morena podía pasarse horas y horas en el baño, aunque fuera un baño público.


Diez minutos después, Quinn seguía sentada en una de las sillas esperando a Santana. Sacó su móvil y comenzó a leer las revistas a las que estaba suscrita. Le encantaba eso de leer revistas desde el móvil, le resultaba súper cómodo, además que siempre salían noticias de última hora sobre los famosos. Se debatió un poco entre cuál abrir, pero finalmente se decidió por Vanity Fair.

Esperó pacientemente a que se cargara la página, y cuando por fin lo hizo su boca no pudo abrirse más de la impresión y sus ojos iban a salirse de sus órbitas. Leyó la noticia rápidamente, debatiéndose internamente entre contárselo a Santana o no. Sabía que enloquecería cuando lo leyera, así que decidió esperar a que estuviera más relajada.

Pero era demasiado tarde, la morena se encontraba justo detrás de ella, intentando leer por encima de su hombro lo que había dejado en estado de shock a la rubia.

-¿Qué estás leyendo Quinnie?- preguntó, causando que la de ojos verdes se asustara y escondiera el móvil detrás de ella inconscientemente.

-Nada, nos vamos ya, ¿no?- intentó disimular, pero esto solo consiguió causar más intriga en la morena, que la conocía demasiado bien.

-¡Madre mía, no me lo puedo creer, es Katy Perry!- exclamó la latina señalando hacia el otro lado del establecimiento, provocando que Quinn girara la cabeza tan rápidamente que casi se oye un chasquido proveniente de su cuello.

Santana aprovechó la distracción para quitarle el móvil de las manos. La rubia en cuanto se dio cuenta intentó quitárselo de nuevo, pero Santana era más ágil y no se lo permitía. Una vez que Quinn se dio por vencida, Santana comenzó a leer.

Cuando terminó de hacerlo, habría deseado no haber empezado, ya que una espiral de rabia, frustración y decepción crecía en su interior. Tuvo que releer el artículo una y otra vez, por lo menos cuatro veces para asegurarse de que era real. Quinn observaba atenta todas sus expresiones, sin saber como iba a reaccionar.
Santana salió rápidamente del Burger King, estrellando el aparato contra una de las paredes.

-Genial, ahora me he quedado sin móvil- suspiró Quinn mientras seguía a la morena a toda velocidad.

-Dame las llaves- gruñó Santana cuando llegaron a donde habían aparcado la moto.

-Creo que no debería conducir en este estado San…-comenzó Quinn

-¡Que me des las llaves!- gritó la morena fuera de sus casillas, provocando que la rubia abriera mucho los ojos. Pocas veces había visto a Santana tan enfadada.

-Sí, mi general- contestó haciendo un saludo militar y dándole las dichosas llaves de la moto.



Llegaron a la escuela en tiempo récord, aunque era lógico, ya que la latina iba a una velocidad que triplicaba casi lo permitido. La rubia realmente llegó a temer por su vida durante todo el trayecto.

Cuando bajaron de la moto, Quinn apenas sabía andar, incluso estaba ligeramente mareada. Sin embargo Santana se bajó rápidamente, tirando el casco por ahí, y andando a gran velocidad hacia la recepción para subir después las escaleras de tres en tres hasta la habitación que tan bien conocía.

-Dios mío, Snixx is ON- susurró Quinn siguiendo apresuradamente a la chica.


Al cabo de unos segundos ya estaba en la planta indicada, y abrió la puerta con bastante rabia.

-¡San! ¿Dónde has estado? Estaba preocupada- dijo rápidamente la rubia al verla entrar por la puerta. Aunque su tono cambió levemente al ver la expresión de la morena.

-¿Cómo puedes tener la poca vergüenza de encima hacer que te preocupas por mí? Si total, nunca hemos tenido una relación, simplemente lo nuestro era una manera de pasar el tiempo mientras yo descubría mi sexualidad y tú tratabas de olvidar a Jack ¿no es eso?- dijo Santana con dolor.

nooo que no peleen y aclaren todo que esten juntas siii por favor actualiza prontos

pero pro... q sucedió......
por q se meten en la relación de las Brittana ?, i hate Jake... ....
ojalá Santana no se porte muy mal con Britt.... y q Britt se sepa explicar... si no este se va a poner muy feo... ...

hola.... este cap estuvo .. i like it... espero q estés bien, saludos

Qe buen capitulo!!! aunque creo que no me va a gustar eso que Santana leyo en la revista, ya quiero saber que ponía y por que se enfado asi con britt.
Escribes muy bien, da gusto leerte. un saludoo

ohhh Dios........ya me entro la ansiedad por saber ¿que fue lo que leyo San para que se pusiera de esa manera?.........desgraciado de Jack y su complice

Saludos, hasta la proxima actualizacion
*Te invito a leer mi fic. Me gustaria contar con tus opiniones, criticas, sugerencias........
http://www.gleeklatino.com/t16799-fic-brittana-it-started-in-my-dreamsnow-staying-and-you-re-forever-in-my-heart

por dios actualiza q me va a dar algo.....nueva lectoraaaaaaaaaaaa

muy bueno la vdd

No sabia que habias actualizado.. :(.. Pero que capitulo mas picante.. Espero que San no se vuelva loca y primero hable bien aunque me parece que ya reacciono mal.. u.u.. Se viene el drama nomas..

Actualiza prontoo.. besoo.. n.n...

que carajo leyo san que le hizo tanto mal??? me encanto el comentario de quinn genial ahora yo me he quedado sin movil jaja colgadisimo em encanto besos!!

nueva lectora espero que no lo dejes hasta aca por favor y que habra leido san para que se haya pueste asi??? ojala puedan arreglarlo y que no se separen por favorrrr

Hola! Soy nueva comentando, pero te vengo leyendo de hace un tiempo. Tengo que decirlo ¡Me encanta tu fic! es que es tan asdfghjklñgdsa(? de verdad que me encanta y porque no decirlo, odio a Jack y a la bruja esa que tiene de cómplice ¬¬
porque tiene que a ver tanta maldad :c asdfg y tu! tu también eres mala, porque tienes que hacernos esperar tanto? no ves que sufro? :c

pero bueno espero que actualices pronto y una ves mas... me encanta tu fic!