[Brittana] - "Hold Me Close" - FINAL Cuarta Temporada Capítulo Nº73 "Leyenda Dorada"

Chicas! Miércoles de Avances! Muchas gracias por los comentarios, me encantaron. Quería destacar la forma en que defendieron la idea de que Blaine no era traidor, mas halla de lo confuso que podría llegar a ser, todas siempre creyeron en que el jamas dañaría a su familia.

Ahora las cosas cambiaron, los chicos lograron salir de ese calabozo pero ahora no son otra cosa mas que fugitivos ¿Pensaron alguna vez que terminarían encerrados en una montaña? ¿Piensan que Jesse va a quedarse de brazos cruzados o los va a buscar por cielo y tierra hasta encontrarlos? ¿Como imaginan un reencuentro Brittana después de semejante tragedia? ¿Como piensan que Brittany reaccionaria ante una morena gravemente herida? ¿Creen que Brittany es capaz de sacar a toda esta familia adelante? ¿Creen de echo, que existe alguna posibilidad de salir del anonimato bajo las montañas? No se, piensen.

Escena 1


Al pasar por la puerta del estudio se dejo caer sobre la silla del profesor, gracias a Dios tenia ruedas. Intento calmarse un poco ya que estaba quejándose continuamente por el dolor.“¿Dónde estas?” Se pregunto examinando la habitación. Estaba demasiado oscuro, eran cuatro paredes completamente pequeñas y compactas. El escritorio y detrás una Biblioteca…. Nada especial.

Busco y busco por horas, se sentía frustrada. Refregó los ojos intentando serenarse y encontrarlo, suspiro fuerte una vez mas y miro hacia el frente… Algo llamo la atención. Un pequeño cuadro, se acercó con la silla para leer… “No hay nada mejor escondido que lo que este a la vista”. Sonrió y supo que esa era la señal, levanto su mano “sana” y con suavidad corrió el cuadro… Instantes después el perfil derecho de su rostro fue iluminado…

Santana – Te encontré.

Escena 2

Camino sintiendo como crujía el piso de madera y al abrir la puerta su expresión cambio…

Brittany – ¿Qué haces acá? – Pregunto despacio.

Blaine – Quería hablar – Respondió mirando sus pies.

Brittany – No quiero hablar con vos.

Blaine – Respiro triste – Por favor…

Brittany – Miro hacia atrás y vio dormir a la niña – Pasa…


Escena 3

Después de unos minutos de arrastrarla hasta el atril, la dejaron frente a un gran papel, un nuevo decreto…

Jesse – Fue caminando hacia ella y disimuladamente apuñalo el costado con una pequeña navaja – Dale San… Desángrate para todos.

Santana se ahogo de dolor realmente no lo esperaba, sus pies comenzaron a aflojarse y su visión a fallar.  Estaba tiritando continuamente, con ojeras, la piel pálida y sin fuerza…

Jesse – Le entrego una pluma de oro – Hacelo

Si en algún momento te sentiste encerrada, seguro me entendes. No es sufrimiento o  tristeza, es literalmente la falta de aire. No es inexistencia de coraje o escasas inspiraciones de valentía, es pánico. Es hasta creer que cometiste algún crimen y muchas veces es aceptar que lo mereces. Es la terrible sensación de saber que no tenes solución o salida, es estar segura de que estas sentenciada a esa vida.

De sensaciones extremas sabes mucho, pero nada como experimentar el ahogo que conlleva respirar todos los días. Nada parece estar en su lugar, las paredes de la realidad se acercan a vos cada vez que avanzan los segundos. Todos hablan y tu mente parece retumbar con sus palabras, no los escuchas sino que les haces caso.

Si tuvieses que decírmelo ¿Cuan largo es un día en la oscuridad?

Si tuvieses que decírmelo ¿Tiene salida ese encierro?

Si tuvieses que elegirla ¿Cual seria?

De todas, la mas fácil es la repetitiva. Yo simplemente creo que la muerte es la salida rápida para escapar de encierro de tu realidad. Yo creo, que el problema esta en perderse de la Luna mientras contamos las estrellas. Yo creo en la libertad como un diamante, pero si tenes la mano cerrada el diamante nunca lo vas a tener.

Yo creo en el amor, y en la ambición que nace del ahogo en busca de la libertad.

Yo se,  todo ser humano puede vencer el encierro. Yo se, que se puede transformar la esclavitud en libertad... Y nadie puede escapar de su sentencia, todos debemos en algún momento cumplir la unica sentencia de nuestra existencia...

La sentencia de nuestro destino.

Libertad.

Se fueron a dormir instantáneamente después de que terminaron la cena. Se dispersaron por las distintas y espaciadas habitaciones de la gran mansión de piedra. Ella opto por hacer lo que la morena hacia cuando solo eran tres… Vigilar que todos estén durmiendo tranquilos. Camino por toda la casa y se freno en la biblioteca al ver a la rubia acunando a su hija en brazos.

Quinn – Britt – Dijo despacio entre la oscuridad.

Brittany – Levanto la vista hacia la chica – Hola…

Quinn - ¿Esta dormida? – Pregunto mientras se acercaba.

Brittany – Si – Respondió mientras miraba a su hija – Hace un rato ya – Comento sin dejar de admirarla.

Quinn - ¿No crees que deberías ir a descansar?

Brittany – No teno sueño – Dijo rápido -  Puedo quedarme.

Quinn – Si tenes sueño – Contradijo mirándola – Se que la estas esperando.

Brittany – Ella va a venir… Yo lo se.

Quinn – Yo también lo se… Pero no vas a ganar nada quedándote despierta… - Dijo mirándola con cariño.

Brittany – Lagrimas aparecieron en sus ojos – Pero… ¿Si viene y yo no estoy despierta? ¿Qué va a pensar de mí? ¿Que vamos a hacer sin ella?

Quinn – La vio muy cansada y angustiada – Brittany...

Brittany – No quiero fallarle – Susurro mirando a Samantha – Simplemente siento que no hice nada por ella, en ningun momento.

Quinn – Sonrio casi triste mirándo a su amiga – Nos sostenes – Aseguro bajando su mirada  a la bebe – A todos nosotros, las palabras en la cena... Fue todo lo que necesitabamos para levantarnos y pelear.

Brittany - ¿Eso crees?

Quinn – Estoy  segura – Dijo tomando mano – Y Brittany, no estas haciendo otra cosa mas que cumplir tu promesa.

Brittany – Intento – Susurro mirando a su hija.

Quinn – Ella esta orgullosa de vos – Aseguro corriendo un mechon detras de la oreja – Todos, lo estamos.

Brittany – Sonrio con lagrimas en los ojos – Gracias Quinn.

Quinn - ¿Vendrias conmigo? – Pregunto parándose y tendiéndole la mano.

Brittany acepto con una triste sonrisa y juntas comenzaron a caminar despacio por la gran casa. La rubia miraba oberbando la oscuridad y lo rustico de la construcción, no pudiendo imaginar los años de sufrimiento de esos tres jovenes en aquella mansion. Quinn instantáneamente recordó su conversación con Santana en día que ingresaron en ese lugar, pidiendole desconsolada que Santana fuese su mejor amiga.

Brittany –  ¿Es muy grande?

Quinn – Lo suficiente como para acobijar a  toda nuestra familia – Dijo mientras llegaban a una puerta de madera oscura.

Brittany – Vas a tenerlo acá – Comento mirando su panza.

Quinn – Lo se – Miro su cuerpo – Veni… Esta es tu habitación –  Dijo mientras habría la puerta.

Brittany – Entro y al hacerlo pudo aspirar el perfume de su morena… Sintió estremecerse – ¿Ese es el…?

Quinn  - Si… Es su habitación - Respondió mientras abría las cobijas – Veni acóstate, dale… Con Sammy.

Brittany – El lugar la hacia parecer como si la morena estuviese con ella – Bueno.

La rubia camino practicamente arrastrando los pies, se recosto despacio mientras Quinn se encargo de arroparla. Sammy quedo recostada a un lado de su madre, ninguna de las dos podia quebrar esa mirada. Quinn beso la frente de la rubia, susurrando un “te quiero”.

Brittany -  Quinn – Llamo mientras las tapaba.

Quinn - ¿Qué pasa rubia? – Pregunto mientras acomodaba a la beba en los brazos de la joven.

Brittany – ¿Puedo preguntarte algo? – Dijo con timidez.

Quinn – La miro entrecerrando los ojos - Claro que si

Brittany – ¿Realmente va a venir?

Quinn – Pensó mirándola seriamente, la situación era demasiada complicada… La morena herida, encerrada y sin salida. Estaba todo perdido, pero aun así… No dejaría bajo ninguna circunstancia que la esperanza se disperse ente fantasmas del pasado – Claro que va a venir Brittany – La joven sonrió lento mientras dejaba un beso en su mejilla – Estoy al final del pasillo… Me llamas cualquier cosa.

La rubia escucho como se cerraba la puerta mientras miraba a su hija, paso su mano acariciando su bracito mientras la pequeña sonreír en respuesta. Era el ser mas adorable, incluso más que Santana. Toda la habitación era igual a ella… Sobrio y serio. Se acomodó sobre la almohada disfrutando de su aroma y poso la palma de su mano sobre la panza de la pequeña. Tenía un fuerte dolor de cabeza… Dolía absolutamente todo… El cuerpo y el alma…

Después de unos segundos sus ojos comenzaron a cerrarse y después de mucho tiempo y junto con sus sentidos… Logro estar con Santana.



Entre arrástranos y llevándola de los brazos, llegaron hasta la puerta del estudio del profesor Schuester.

Cooper – Abrió la puerta – Déjenla acá – Ordeno a los oficiales.

Oficial -  La recostaron sobre un sillón y vio como lo manchaba de sangre - ¿No vamos a ayudarla? – Pregunto mirándola – Es decir, Señor… Mírela.

Cooper – Que se las arregle sola vos ocúpate de lo tuyo – El hombre asistió dejándolo solos – Báñate… Cambiante… Hace lo que quieras – Dijo mirándola – No intentes nada estúpido - La morena asistió – Vas a pasar la noche acá, mañana a primera hora es la coronación - miro el lugar y pudo ver que no había ventanas… El estudio estaba casi en el centro de la
Academia – Los guardias están en la puerta – Aviso para luego encerrarla.

Una vez en soledad, la morena respiro profundamente y echo su cabeza apoyándola sobre el sillón. El dolor… Ardor e intensidad aumentaban haciéndose insoportable y dificultoso respirar. Con su mirada comenzó a examinar toda la habitación, era el lugar donde se habían establecido para planear la venganza. Miro las puertas de las habitaciones y conto los pasos hasta llegar al estudio… Su astucia le permito con la pierna acercar una silla y con un esfuerzo sobrehumano comenzó a hacer fuerza para levantarse. Un balazo en la rodilla y otro en el hombro… Había tenido ayuda de Blaine pero luego revivió una fuerte paliza por parte de Jesse… Avanzaba hacia el estudio jurando seguir escuchando sus palabras “Esta noche… Ella va a ser mía” Una y otra vez…

Al pasar por la puerta del estudio se dejo caer sobre la silla del profesor, gracias a Dios tenia ruedas. Intento calmarse un poco, estaba quejándose continuamente por el dolor… “¿Dónde estas?” Se pregunto examinando la habitación. Estaba oscuro, eran cuatro paredes completamente pequeñas y compactas. El escritorio y detrás una Biblioteca, nada especial.

Busco y busco por horas, se sentía frusn trada y sin salida. Refregó los ojos intentando serenarse y encontrarlo, suspiro fuerte una vez mas y miro hacia el frente. Algo llamo la atención… Un pequeño cuadro sobre la pared, se acercó con la silla para leer… “No hay nada mejor escondido que lo que este a la vista”. Sonrió y supo que esa era la señal… Levanto su mano “sana” y con suavidad corrió el cuadro… Instantes después el perfil derecho de su rostro fue iluminado...


Santana – Te encontré.


Ella apenas durmió unos minutos. Brittany no recordaba cuando fue la última vez que decidió permanecer despierta en la noche, ese pacto para no tener miedo. Sonrió al recordar que una morena se hizo dueña de sus noches… Que lindo fue desvelarse sobre su cuerpo.
Se levanto despacio para no despertar a la pequeña y comenzó a recorrer la habitación.
Miro hacia el espejo sabiendo que ese era el objeto donde Santana pedía todos los días, durante poco menos  de cinco años…  Que terminara el infierno. La habitación tenía todo tamaño grande, ella miro hacia el baño y decidió no entrar porque algo llamo su atención… El armario.

Camino hacia él y lo abrió sorprendiéndose una vez mas de lo ordenada que es su morena. Con curiosidad tomo una blusa azul oscuro y la rodeo con sus brazos… Inspirando una vez más el perfume da la encantadora piel canela, sorprendiendose como un simple aroma puede dejarla sin aliento.

Esa noche era un tanto especial, después de haber prometido permanecer juntas, después de tantos momentos buenos y malos… Sintió pensamientos extraños en su mente y sobre todo recuerdos del pasado que acechaban el presente. Sintió angustia enredando un nudo en su pecho. Santana dijo que confiara… Pero era difícil tener que quedarse ahí sin saber, nada.

Por alguna razón miro el espejo y la vio a ella. Samantha López – Pierce, Su hija.
Unos veinte días de vida y tanto terror a su alrededor. No podía hacer mucho por Santana pero cuidar a su hija seria mucho más de lo que ella pensó que significaría.

Más halla de la vida y la muerte, más halla de lo bueno y lo malo, más halla del prestigio los títulos o puestos, Coinciden solo en una cosa… Samantha fue el mejor regalo que les pudo dar la vida.

Brittany se arrodillo a un costado de la cama mirado a su pequeña dormir, erittany sonrió mientras pensaba “No des vueltas  al pasado, no lo podes cambiar. No le tengas miedo el fututo, no sabes si va a llegar. Desfruta del presente, no dejes de escapar, porque cuando se valla… No va a volver jamás”

Tres golpes seguidos en la puerta la sacaron de sus pensamientos, rápidamente se limpio las lágrimas y miro el reloj… Cuatro y cuarto de la mañana, era demasiado extraño. Camino sintiendo como crujía el piso de madera y al abrir la puerta su expresión cambio…

Brittany – ¿Qué haces acá? – Pregunto despacio.

Blaine – Quería hablar – Respondió mirando sus pies.

Brittany – No quiero hablar con vos.

Blaine – Respiro triste – Por favor…

Brittany – Miro hacia atrás y vio dormir a la niña – Pasa…  – Dijo desganada mientras se corría para darle espacio.

Los dos no se miraron, Blaine camino sin mirarla hasta sentase al borde de la cama. Brittany avanzo detrás de el con los brazos cruzados.

Brittany – ¿De que querías hablar? – Pregunto sentándose en el suelo, quedando alado de su hija quien dormía entre almohadas sobre la cama.

Blaine – Jugaba nerviosamente con sus manos – Yo solo… Quería saber… Si el… Ósea cuando yo entre… Vos estabas - Explicaba nerviosamente – Yo… ¿Entre justo o el…? – La rubia se puso nerviosa y pálida – No puedo dormir… - Explico angustiado – Kurt no me
habla… No me mira… Vos… Estas odiándome… Y me atormenta no saber si el… Si Jesse…. – No podía decirlo – Osea si el te...

Brittany – No… - Dijo mirando sus manos – No lo hizo Blaine - El joven la miro muy angustiado – El solo… Rompió la ropa… Llegaste justo – Dijo deslizando su mirada nuevamente a sus manos – Me salvaste – Blaine respiro como si no lo hubiese hecho por varios minutos – Gracias.

Blaine – Sonrió disimuladamente al escucharla – Te lastimo.

Brittany – No es nada… Ya paso.

Blaine – Britt, vos no entendes… Si algo te pasara… Yo… - Dijo apretando sus puños – Te quiero tanto… Sos mi mejor amiga… Y cuando te vi… No se como hice para permanecer así – Explico angustiado -  Jamás voy a perdonarme por haberte tratado de esa manera.

Brittany – Sintió angustia y emoción simultanea al verlo hablar de esa manera – Me sostenías Blaine.

Blaine - ¿Qué?

Brittany – Cuando estábamos en el salón… Vos me sostenías – El joven la miro confundida – Cuando lloraba apretabas mis brazos… Cuando gritaba me abrazabas… Cuando Santana – Se trabo entre lagrimas – Cuando ella se desmayo… Vos me dijiste que no iba a matarla… Vos me sostuviste Blaine – Dijo emocionada – Fuiste quien me contuvo en el peor momento.

Blaine – Entonces… ¿No me odias? – Pregunto tímidamente.

Brittany – Por supuesto que no Blaine… Es solo que… Tengo que sacar de mi mente la horrible imagen de verte como mi enemigo… Lo hiciste demasiado bien... – Los dos sonrieron – Cuando te mire a los ojos sentí que había perdido a mi hermano… - Dijo entrecortadamente.

Blaine – Al verla tan mal avanzo sentándose en el suelo frente a ella – Yo soy tu hermano – Aseguro tomándola de las manos mientras buscaba su mirada.

Brittany – ¿Lo sos? – Pregunto al sentir sus lagrimas resbalando fríamente en sus mejillas.

Blaine – Con cada celula de mi cuerpo... Soy tu hermano – Aseguro emocionado mirando sus ojos.

Brittany –  Blaine... – Susurro al escucharlo - Es que es muy difícil sacarme el pensamiento.

Blaine - Intentar escapar de los malos pensamientos es ir a buscarlos - Brittany levanto la vista lentamente – Solo… Mírame…  Trata de verme con los mismos ojos con los que me conociste.

La rubia respiro angustiada mirándolo fijamente y se tiro rápidamente hacia su amigo, envolvió su cuello entre sus brazos y escondió su rostro. La rubia lloro con todas sus fuerzas, descargando angustia, dolor y agonía. Blaine por su parte hizo lo que mejor sabe, sostenerla… El abrazo con fuerza, pero pocos segundos después sintió como se desataba la impotencia que había cargado los últimos días… Los dos lloraron… Abrazados.
Después de varios minutos en esa misma posición de desahogo, fueron retirándose despacio. Ambos limpiaron las lágrimas de las mejillas de su amigo y sonrieron aun emocionados…

Brittany – Te quiero mucho – Dijo tomando el rostro entre sus manos haciendo que el joven intensificara su llanto – Para de llorar… - Pidió al ver que se contagiaba.

Blaine – Espero hasta calmarse un poco y sonrió – Yo también te quiero.
Se quedaron apoyados contra el filo de la cama mirando a Samantha, con sus mentones sobre  sobre la cama… Acariciando despacio los piecitos de la niña.


Brittany – ¿Como hiciste? – Pregunto curiosa pasado el dedo por la planta del pie de Sammy.

Blaine – ¿Para que?

Brittany – La sangre… De… Sammy – Dijo curiosa.

Blaine – Oh… Acá – Se enderezo y subió su remera.

Brittany – Lo miro y vio un corte – ¡Blaine!

Blaine – Tenia que hacerlo… ¿Qué  hubiese pasado si salía de esa habitación sin rastros de asesino? – La rubia miraba la herida – Era mas creíble… Tenia que ganarme su respeto.

Brittany – Estas loco.

Blaine – Por mi familia – Dijo sonriendo.

Brittany – ¿Y Ella? – Pregunto sin mirarlo – Kurt dijo que no sobreviviría, dijo que estaba demasiado mal… ¿Cómo…?

Blaine – Kurt tenia razón – La rubia sintió cortar su respiración – Pero me ocupe de eso.

Brittany - ¿Qué hiciste?

Blaine – Antes de ir a buscarlos pase por su celda… Aun era el encargado de vigilar a Santana.


El camino acompañado hasta la puerta de la celda con su terrible expresión facial… Causando escalofríos a todo aquel que lo mirara a los ojos.

Blaine – Desaparezcan… - Ordeno a los oficiales - ¡Ahora!  - Grito enojado y los oficiales desaparecieron. El joven entro junto con el hombre a la celda, Blaine se acercó hasta la morena y se agacho frente a ella… Evidentemente no estaba bien.

Blaine – San… - Dijo levantándola para poder verla – San…  ¿Podes hablarme?

Santana – Abrió despacio los ojos y se encontró con una mirada dulce y preocupada – Sos un buen actor – Dijo sonriendo.

Blaine – Una sonrisa se surco en su rostro – Acá traje ayuda - Comento mirando hacia arriba – El doctor Hummel… Él va a curarte.

Santana – Entrecerró los ojos y volteo despacio para verlo – Un gusto – Dijo mientras Blaine la recostaba sobre la cama de la celda - ¿Cómo están los demás? – Pregunto quejándose y suspirando por el dolor.

Blaine – Están todos bien… - Dijo para tranquilizarla – Ahora te dejo  con el doctor… Ya vengo.

El joven los dejo a solas.  Las horas pasaron y el doctor permanecía atendiendola en silencio, algo inquiero y nervioso.

Santana – ¿Todo bien? – Pregunto mientras se acomodaba sobre su espalda.

Burt – Si…. Si… Es solo que – Respondió mirándola - ¿Es usted?

Santana – Sonrió asistiendo con la cabeza – No sea tímido.

Burt – La sonrisa de la morena quito tención – Siempre supe que Jesse no era merecedor de ese puesto – Cometo mientras se ocupaba de la pierna de la morena – No puedo creer que este atendiendo a el mismísimo Líder.

Santana – Sonreía con los ojos cerrados para sobrepasar el dolor – Hagamos como si nos conociéramos de toda la vida ¿Le parece? – Pregunto sintiendo una puntada - ¿Tiene hijos? – Pregunto sabiendo la respuesta.

Burt – Así es… - Respondió encontrando la bala – Kurt… Kurt Hummel -  Contesto orgulloso.

Santana – ¿Cómo es?

Burt – Pensó unos segundos – Lo definiría como un alma libre, hace mucho tiempo que no nos vemos… Casi dos años ya sabe… Es joven… Esta cumpliendo su destino – Santana lo miro atenta – Vamos a volver a vernos… Debe ser todo un hombre.

Santana – Debe serlo – Dijo recordando a su amigo - ¿Qué es lo que usted quiere para su futuro? ¿Con que espera encontrarse?

Burt – Se dedicaba ahora al hombro – Quiero que sea Libre… Solo eso… Las cosas estos últimos años cambiaron mucho debe estar enterada… El gobierno de Jesse – La morena asistió – Ser homosexual en este momento nos lleva a los siglos veinte y veintiuno… No debe ser fácil.

Santana – Espero que pueda volver a verlo y cumpla con sus expectativas – Deseo contenta - ¿Sammy? – Pregunto con lágrimas en los ojos.

Blaine – Se acercó con la niña y la dejo sobre el pecho de la morena – Quería que la vieras antes de huir.  

Santana – Gracias – Dijo abrazando son el brazo sano a su niña – Sammy… Este es Burt
Hummel – Presento mirándola – Es mi hija.

Burt – Sonrió al ver la imagen – Creo que así ya estamos - Dijo revisando nuevamente las heridas – Usted esta muy mal… - Comento mirándola – Perdió mucha sangre y no puede continuar en este estado… De no haber venido - Blaine lo miraba escuchando atentamente – Le quedaban horas… Usted no puede seguir así.

Santana  - Gracias… Por haber venido – El hombre asistió con la cabeza y camino hasta la puerta de la celda – Y a vos más que gracias Blaine… ¿Esta todo listo? ¿Te acoras donde tienen que ir?

Blaine – Si quédate tranquila esta todo listo – La morena beso la cabeza de su hija y luego el joven la cargo – Ya mismo voy para halla - Acomodo a la pequeña en sos brazos – Cuídate mucho… Ahora a huir.


Santana – Para… Toma – Dijo dándole en anillo de promesa – Y Blaine… El retirarse no es huir, ni el esperar es cordura cuando el peligro sobrepuja a la esperanza… No esta todo perdido - Dijo mirándolo con una sonrisa – Te quiero mucho, ahora... Escapa.

El joven sonrió y desapareció junto con el doctor… A los pocos minutos apareció Jesse con un fierro en la mano y un latino en sus manos.


Blaine – Y eso fue lo último que me dijo.

Brittany – Sonrio en lagrimas tomando el anillo de su mano – Gracias, ahora estoy segura.

Blaine - ¿De que?

Brittany se quito una cadenita de su cuello y paso el anillo por ella. Blaine sonrio mirando la escena, obervando como Brittany colocaba el collar con el anillo de Santana, en el cuello de su hija.

Brittany – Santana va a volver.


El entro y se desespero al no verla… La busco desesperado y respiro profundamente al verla sentada sobre un sillón.

Santana - ¿Qué pasa Cooper? – Dijo ya pálida y enferma – No me fui a ningún lado.

La morena estaba aun peor, ya gravemente deshidratada y con señales visibles de debilidad.  Tuvieron que ponerle una campera oscura para ocultar las manchas de sangre y la llevaron hasta lo parecía ser un centro de conferencias.  Todos lo ministros reunidos alrededor de un atril, había más de quinientas personas… Todos influentes en el mundo actual esperando por el paso legitimo Líder.

Después de unos minutos de arrastrarla hasta el atril, la dejaron frente a un gran papel, un nuevo decreto…

Jesse – Fue caminando hacia ella y disimuladamente apuñalo el costado con una pequeña navaja – Dale San… Desángrate para todos.

Santana se ahogo de dolor realmente no lo esperaba, sus pies comenzaron a aflojarse y su visión a fallar. Estaba tiritando continuamente, con ojeras, la piel pálida y sin fuerza…


Jesse – Le entrego una pluma de oro – Hacelo

Las quinientas personas estaban con los ojos sobre el papel, esperando la ansiada firma. La sonrisa en el rostro de Jesse se forma en la medida que la tinta aparecía sobre el papel, pero algo inesperado sucedió, por un segundo miro a la morena y pudo ver una sonrisa

Una sonrisa de victoria.

Jesse intento hablar pero fue demasiado tarde, las luces se apagaron y la sala entro en desesperación…. Los gritos de la gente se hicieron presentes y Jesse se estremeció. El lanzo una mano en el aire intentando agarrar a la morena, pero no sintió nada… Pidió a gritos que prendieran las luces.

Pasaron quince segundos, cuando la luz volvió Santana López… Había desaparecido.


El la cargo y camino tan rápido como pudo, podía sentir sus brazos mojándose con la sangre de su amiga, encontró un coche y la apoyo como pudo. Con fuerte golpe rompió el virdrio de la puerta y la abrió. Lo primero que hizo fue acomodarla, la morena deliraba y temblaba continuamente. Se quieto la campera y la tapo…

Sus habilidades le permitieron encender el coche y desaparecer rápidamente. No había tiempo que perder, estaba muriendo… El tomo su mano  y ella abrió un poco los ojos…

Santana – Sam…

Sam!!!   Me he quedado en shock completamente ¿Como...? ¿Él no estaba...? Se supone que estaba en como ¡La salvó! wow Flor, eso sis fue inesperado xD y de ahora en adelante no más drama (por ahora). 

Aww, que hermosa la reconciliación entre Blaine y Brittany, entiendo debe ser difícil lidiar  con una supuesta traición, pero en parte fue eso lo que le salvo la vida a Santana. 

Me imaginó la cara de Jesse cuando se dio cuenta que Santana ya no estaba :3 por cierto, alguien debe darle una pliza a él también...se lo merece. 

Mi frase favorita en este capítulo fue: