Brittana: "La Laguna Azul" G!P (Adaptación) Capitulo 20 (08/10/17)

Espero que las encuentren antes de que se vallan...
Nada mejor que selebrar asi el noviasgo!!!
Mmmm a ver si no sale un minimo heredero jajaj

Pues si se siguen tardando puede que se hagan abuelos jajajaja, ya se acabaron los condones :P
Yo creo que la familia de ambas tomara muy bien su relación porque ya sabían que las chicas sentían algo solo era cuestión de tiempo....
Y que San se porte bien saliendo de la isla porque sino le tocara la Britt celosa y ya dijo que no va a compartirla jajaja

NUEVO CAPITULO
LE PIDO AYUDA A QUE DEN NOMBRES PARA EL : MIEMBRO DE SANTANA
NO SE ME VINO NINGUNO A LA MENTE Y ME GUSTARÍA QUE ME DIGIERAN ALGUNOS Y ASÍ PODER ESCOGERLO POR SI SALE OTRA VEZ EN LA ADAPTACIÓN.
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-11-

Habían pasado 8 días desde que empezaron a buscar a las chicas Michael y Kevin estaban preocupados, hace dos días sus familias habían regresado a Miami, mientras ellos seguían esperando noticias de sus hijas

-Señor hemos encontrado el yate

-Gracias a dios- exclamo Kevin –Y nuestras hijas- pregunto

-Lamentablemente no están ahí. Pensamos que pudieron haber encontrado una isla y se decidieron refugiarse en ella, lo que me parce correcto ya que no hubiesen soportado todos esos días sin alimento y agua

-Bien- exclamo Michael

-Sí, ahora enviaremos a los aviones a explorar las islas, seguramente deben tener las bengalas ya que no encontramos la caja en el yate y tampoco estaba el bote inflable

-El yate si contaba con esas cosas verdad señor- pregunto Kevin a Dave

-Claro que sí señor- respondió Dave

-Bueno y donde encontraron el yate- pregunto Michael

-El yate fue encontrado en………………………….


-Sany ten cuidado amor- Brittany observaba a su novia trepar una mata de coco

-Estoy bien cariño, no te preocupes- respondió la morena con una sonrisa

-Ok

Santana alcanzo a tomar dos cocos y los lanzo con cuidado de no golpear a su novia

-Cuidado amor- advirtió al lanzar el segundo coco

-Estoy bien

-Ok mi amor, voy a bajar- aviso la morena

-Bien cariño, pero con cuidado.

-Si Britt, a veces eres un poco exagerada

-¡¿Yo exagerada?! Bueno ya, baja. Si te cae o golpeas, no me pidas que te ayude

-Ya amor tranquila

Brittany se cruzo de brazos y giro su mirada, concentrándose en la hermosa selva. Escucho un crujido y luego un golpe. Santana se había caído a pocos metros del suelo, golpeándose la cabeza y espalda.

La rubia negó, para luego correr a su novia y sentarse a su lado

-Te lo dije- la regaño Brittany

-Ya, okay. Ya entendí amor, te hare caso

-No lo digo por molestarte mi amor

-Lo sé cariño, ahora levantémonos y vamos a tomar esos cocos

-Vamos

Santana y Brittany caminaron juntas a la playa. La morena partió las frutas entregándole una a su rubia. Se sentaron en la arena. Santana se recostó en el árbol de siempre y Brittany se recostó en el pecho de su novia. La morena abrazo a su amada con un brazo, mientras que con el otro sostenía la fruta y tomaba su agua dulce.

Pasaron toda la tarde recorriendo la selva como todos los días, al igual que darse un baño en el lago, y disfrutar de la compañía y presencia de la otra persona, dándose cariños, abrazos, besos y susurrándose muchos te amo. Entregándose la una a la otra, en cuerpo y alma.


Santana acariciaba la espalda desnuda de su novia, la cual aún dormía después de una larga sesión de sexo y entrega total. Ambas recostadas cerca del lago como siempre, se habían vuelto a entregar y sumergido en su amor. Pero ya se estaba haciendo tarde, así que Santana decidió despertarla

-Bebé, despierta. Debemos regresar a la playa, se está haciendo tarde- susurro la morena en
el oído de la ojiazul, con esa ronca voz que la excitaba

-Déjame dormir un rato más- pidió la rubia, volteándose para abrazar a su novia

Sus pechos se tocaron y ambas sintieron un grado de excitación bastante alto. El pene de la morena despertó enseguida, haciéndose notar ante la morena.

-Parece que alguien está despierto- ronroneo la rubia, separándose un poco de su novia para ver a (*Nombre del miembro de Santana*), completamente activo para el ejercicio -¿Sabes algo?- pregunto Brittany, besando a su novia. Santana negó –Se me quito el sueño- Tomo salvajemente los labios de la morena, sentándose a horcajadas sobre su novia, mientras seguía besándola.

Santana se sentó sosteniendo el cuerpo de su rubia. La abrazó fuerte de la cintura, y la pegó más a su cuerpo, sin dejar un solo espacio libre entre ellas. Brittany se movía de adelante hacia atrás, creando una excitante fricción. La morena no podía resistirse más, su novia la estaba llevando al límite.

Con fuerza, Santana dio la vuelta, quedando encima de la rubia. Acerco su mano a la camisa que estaba cerca de ellas, donde estaba el último condón. Se separó de los labios de Brittany para poder acomodarse el condón. Una vez puesto el látex, se acomodo entre las piernas de su amada, tomo ambas manos de la morena y entrelazo sus dedos.

De una sola embestida, Santana entro en Brittany, quien arqueo la espalda de placer.
Brittany halo a Santana, para que cayera encima de ella y poder besarla. Sus bocas se movían sin cesar, y sus lenguas danzaban a un ritmo que solo ellas conocían.

Por falta de aire, la morena se separó de los labios de su amada, mientras la embestía. Tomo unos de sus senos entre sus labios, y empezó a succionarlo. Le dio un pequeño mordisco, y luego se pasó al otro para darle atención.

La rubia gemía cada vez más fuerte, sus manos recorrían la espalda de la morena dejando pequeños rasguños en ella.

-¡Oh Dios! ¡San! Más… más rápido amor. Más rápido…- la morena obedeció a la orden de su amada, y acelero sus embestidas. Brittany sin previo aviso, y como pudo giro a la morena, quedando encima y comenzó a cabalgarla.

-¡Ahh! ¡Britt, Dios! Si, nena.

-¿Te gusta amor?- pregunto Brittany haciendo movimientos en circulo

-Si cariño, me encanta.

-Te amo Santana López

-Yo también te amo mi amor- Brittany acelero sus movimientos, y Santana la ayudo, poniendo sus manos en la cintura de la rubia.

Después de unas embestidas más, ambas se corrieron, llegando al inevitable orgasmo y gritando sus nombres. Brittany se recostó en el pecho de Santana, sus pechos subían y bajaban. Su pulso acelerado y sus cuerpos llenos de sudor. Habían estado la mayor parte del día haciendo el amor.

La morena abrazaba protectoramente a su novia y acariciaba su espalda, mientras la rubia hacia círculos en el abdomen de la morena.

Estuvieron en esa posición por aproximadamente 20 minutos. Brittany se acostó junto a su novia y esta la abrazo de la cintura, quedando sus rostros a una muy corta distancia.

-Te amo- dijo la morena, mientras acariciaba la piel desnuda de la rubia

-Yo también te amo mi amor. Eres el amor de mi vida Santana López, eso nunca lo dudes.

-Lo sé cariño

-Creo que ahora si debemos regresar a la playa, estoy muy cansada y quiero dormir

-Bueno, pero antes, démonos un último baño ¡Hueles mal!

-¿A si?- pregunto la rubia, la morena asintió –Con que huelo mal.

-Mucho.

-Tú no te quedas atrás.

-Pues este es el olor de tus múltiples orgasmos

-Já, que graciosa

-Bueno ya, vamos. Un último baño

-Okay, pero no creo poder levantarme

-De eso no se preocupe mi princesa, yo la llevo- dijo la morena, tomando a la rubia en brazos y levantándose con ella

Brittany enredo sus brazos en la nuca de Santana. La morena camino con su novia en brazos hasta el lago y se lanzó, después de 5 minutos, salieron del agua, tal y como entraron. Santana cargando a su novia, la llevo hasta donde estaban sus cosas y la bajo. Rápidamente tomo la toalla de la ojiazul y la rodeo con esta, secándole el cuerpo y el cabello. Brittany sonreía por la atención que diariamente le daba su novia.

-Amor ¿Me puedes pasar la ropa?

-Claro

La morena camino hasta el pequeño bulto de ropa que estaba cerca de un árbol, tomo su ropa y la de su novia y regreso a su lado. Brittany se puso sus bragas y una camisa que le quedaba grande, dejo el brasier y el short a un lado. Santana ya estaba vestida, ordenando las cosas para regresar al campamento. Cuando termino de ordenar, se acerco a su novia con las cosas en una mano.

-¿Aun no puedes caminar?- pregunto con una sonrisa

-No, todo por tu culpa

-Hey, tú eras quien despertaba a (*Nombre del miembro de Santana*)- dijo, haciendo comillas

-Bueno ya, ahora tendrás que llevarme

-No hay problema- Santana tomo a su novia y camino con dirección a la playa

Al llegar, Santana bajo a Brittany de sus brazos. Arreglo una manta en la arena y volvió donde su novia, llevándola hasta la manta

-Ya vuelvo- aviso la morena

Fue en busca de leña, luego de eso Santana ya había conseguido hacer la fogata. Se giró y le regalo una sonrisa a la rubia, que también sonreía y la veía con cara de enamorada, mordiéndose el labio. Santana el guiñó un ojo y se acercó a ella para sentarse a su lado, le dio un beso en los labios y la abrazo por lo hombros. La rubia la abrazo de la cintura y se pegó más al cuerpo de su amada

Se quedaron observando el hermoso atardecer, mientras escuchaban el crujir de la leña

-Te amor- susurro Santana

-Y yo a ti- respondió Brittany, sellando su amor con un beso.

Día Once…

Hace doce días que habían visto por última vez a sus familiares. Hace once días habían llegado a aquella isla, y aunque de estar juntas, Brittany y Santana extrañaban mucho a sus familias. Por otra parte, Michael y Kevin estaban haciendo todo lo posible por encontrar a sus hijas y regresar junto a ellas sanas y salvas a Miami, con sus familias.

-¿Qué descubrieron?- pregunto Kevin -¿Ya saben porque el yate se detuvo?

Después de realizar una larga revisión del yate, lo encargados de la “guardia costera”, junto con los mecánicos, fueron a informarles a los padres de las chicas lo que habían conseguido.

-Según los registros, desactivaron el GPS un día antes… o más bien, unas horas antes, al parecer en la madrugada. Hemos encontrado huellas en el motor, el cual por cierto, fue manipulado, razón por la cual el yate se detuvo. Ya enviamos a analizar las huellas al laboratorio, apenas nos entreguen los resultados se los haremos saber.


Mientras, en la isla, Santana y Brittany se entregaban la una a la otra como muestra de su amor. La rubia de ojos azules estaba aferrada a su amante, quien la embestía con pasión, lujuria, delicadeza y amor. La morena se excitaba con cada gemido que brotaba de los labios de su amada, al igual que con los arañazos que le propinaba debido al placer que ambas se otorgaban mutuamente.

-¡Oh, Dios!... ¡Santana!... ¡Oh! Dios, amor… ¡Más rápido!- gemía la rubia en el oído de su amante

-¡Britt! No sabes lo delicioso que estar dentro de ti- declaro la morena, penetrándola con más rapidez

-¡Bésame!- exigió la rubia

Santana sin esperar a que se lo repitiera, se apodero de los labios de su novia, Brittany le dio un leve mordisco al labio inferior de su amada, los gemidos de ambas se fueron interceptados por sus bocas unidas. Santana cada vez la penetraba con más fuerza.

Su miembro salía completamente de ella, para después entrar de golpe, tocando el punto de placer de su amada rubia, las paredes de Brittany comenzaron a apretar el pene de Santana, lo que avisaba a la morena que su novia estaba por llegar. Brittany se separo de los labios de su novia, para soltar un fuerte gemido

-¡Santana!-grito Brittany, al momento en el que un fuerte orgasmo la sacudió

La morena dio un par de embestidas más, y tuvo su liberación gritando el nombre de su novia

-¡Brittany!- exclamo la morena, llenando el condón con su semen

Santana se recostó en el pecho de Brittany, mientras ambas recobraban el aliento. La rubia acariciaba el cabello de la morena, mientras que esta le propinaba besos en el pecho.

-Te amo- susurro Brittany

Santana levanto la cabeza, para poder ver mejor a su novia.

-Yo también te amo- afirmó, acercándose a ella, besándola profundamente en los labios.


-Hemos encontrado a los responsables, gracias a que él señor Karofsky, nos proporciono las huellas de sus trabajadores

-¿Quiénes son?- pregunto un desesperado Michael

-Sus nombres son Jesse St. James y Sebastian Smythe. Ambos son trabajadores del señor Karofsky.

-Aquí están todos los datos de mis trabajadores- dijo Dave, entregando a la policía unas carpetas –Lamento todo esto, no tenía la menor idea de que ellos me hayan querido robar

-Está bien, ahora lo que importa es encontrar a nuestras hijas y mandar a esos maleantes tras las rejas- dijo Kevin

-No se preocupen señores, así será. Enviaremos las fotos de estos hombres a la central, y también haremos que sean vistos por la televisión y el aeropuerto, por si acaso hayan huido…- informo el policía -¿Cuándo fue la última vez que los vio señor?- Pregunto a Dave

-Ayer, después de que encontraron el yate, ambos desaparecieron antes de que sus turnos acabasen y hoy no vinieron a trabajar.

-Bien… significa que aun deben estar por ahí, esperemos que no hayan podido escapar.

-¿Cómo ha estado la búsqueda aérea?- pregunto Kevin

-Aún no hemos encontrado nada, pero siguen buscando. No se preocupen señores, sus hijas aparecerán.

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Pues si se siguen tardando las chicas saldrán embarazadas de la isla jajaja
Lo bueno es que están bien, tienen comida y todo lo necesario para sobrevivir , mientras las brittana disfrutando al máximo el tiempo juntas ;) jajajaja

Y de propuesta no se Jr. ??? Jajajaja Sanny jr no lo se jajaja

P.d Que bueno que volviste !!!
No tardes en actualizar por fis y gracias :)

Me parece a mi o el hermano de san en la mochila le puso un suministro de condones para un batallón? ??
A ver si las encuentran y cuanto más tardan??? A ver si no llegan los nietos!!!

HOLA A TODOS

Siento no haber actualizado pero para los que no saben esta adaptación es de CAMREN
y como sabrán en este momento el Fandom Harmonizer nos encontramos mal por los últimos sucesos que han habido.
Al ir adaptando y leer el nombre de Camila me recuerda que ella no va a estar más en el grupo y que no van haber más momentos de ella y las demás chicas, espero que entiendan lo que estoy sintiendo y espero que esta tristeza e Ira que siento se alejen luego para así poder seguir adaptando esta impresionante historia y que ustedes la puedan disfrutar en versión BRITTANA.

Espero estar subiendo los próximos capítulos en un breve tiempo.

Por último

FIFTH HARMONY 4EVER

Día 14

-Hemos encontrado a los hombres, señores- informaron a Michael y a Kevin

-¿Enserio?- pregunto Kevin

-¿Podemos ir?- pregunto Michael

-Claro, he venido a buscarlos.

Los padres de las chicas fueron escoltados hasta la comisaría, donde se encontraban Jesse y Sebastian. Ellos estaban en la sala de interrogatorios, sentados con un agente de la policía quien les hacia las preguntas y ellos contestaban. Mientras que, Michael y Kevin observaban y escuchaban tras el vidrio.

-Bueno, saben porque están aquí ¿verdad?- pregunto el policía, caminando de un lado a otro dentro de la sala

-No señor, no tenemos idea de lo que ha pasado- respondió Jesse, con cara de inocente

-¡Oh! Con que no saben lo que ha pasado…

-No señor- esta vez fue Sebastian

-Bueno ¿Les suena Dave Karofsky?

-Claro es nuestro jefe- respondió Jesse

-Pues nos ha informado que no han ido a trabajar durante ya tres días

-Mmm… Pues…- Jesse trataba de contestar

-¿Les suenan los apellido López y Pierce?

-No, para nada. No tengo idea de quienes son- dijo Sebastian

-¿Seguros?- pregunto nuevamente el policía

-Sí señor- respondió Sebastian nuevamente

-Bueno, resulta que la señorita Santana López rento un yate en la compañía en la que ustedes trabajan. Desafortunadamente, ese yate sufrió un pequeño problema en altamar, pero ese pequeño problema fue intencional, debido a que desactivaron el GPS y manipular el motor, razón por la cual las chicas quedaron varadas en medio del mar. Ahora se nos es imposible encontrarlas ya que, como saben, ha habido grandes tormentas en estos días. Encontramos el yate, pero ellas no estaban dentro. Gracias a las tormentas este se debió haber alejado del paradero de las chicas, y ahora no podemos encontrarlas…

-¿Y nosotros que tenemos que ver?

-¿Qué que tienen que ver?- pregunto enojado el policía, viendo a Sebastian con el ceño fruncido –Te diré que tienen que ver, cara de bebé- tomo la silla, le dio la vuelta y se sentó en ella. Dio un fuerte golpe a la mesa, lo cual provoco que los chicos se exaltaran –Ustedes desactivaron el GPS y manipularon el motor para que cuando las chicas estuvieran en el mar poder raptarlas. Pero no contaron con que hubiera una tormenta, ya que los pronósticos del día eran soleados ¿No es así?- pregunto desafiante

Jesse miro de reojo a Sebastian, los habían descubierto, estaban perdidos

-¿Por qué haríamos eso?- pregunto Jesse, indispuesto a ir a prisión

-Porque claramente, sabían quiénes eran esas chicas. Revisamos su departamento y sus computadoras. Decían no conocer a las señoritas, pero el historial de su computadora dice lo contrario- comento, sacando la laptop y mostrándoles el historial –Aquí podemos ver que estuvieron averiguando sobre ellas, y sabían muy bien que sus padres eran adinerados, así que, planearon secuestrarlas para recibir una buena recompensa…

-¡Todo fue su idea!- grito Sebastian a Jesse antes de que el policía terminara de hablar

-¡¿Qué?!- grito el moreno - ¡¿Ahora es mi plan?! Tú estuviste de acuerdo, yo no la había reconocido hasta que tú me lo mostraste en internet.

-Sí, pero mi plan era seducirla y robarle, no secuestrarla ¡ese fue el tuyo!– grito el rubio

-¡Pero tú estuviste de acuerdo!- estaban en una pelea de quien era el culpable

Ellos terminaron declarando todo como lo habían planeado. Habían ido antes de que amaneciera al puerto, desactivaron el GPS y dañaron el motor para que dejara de funcionar en medio del mar. Tenían un pequeño bote en el cual las seguirían, pero debido a que estaban atareados no pudieron ir. Después de que se desocuparon, partieron a la isla, pero ellos no sabían que Santana había tomado otro rumbo. La tormenta los tomo por sorpresa cuando regresaban al puerto, y se les había escapado de las manos su tan magnífico plan.
Después de escuchar su declaración entre la pelea, los dejaron tras las rejas.

-Bueno, ahora solo queda encontrar a sus hijas. No se preocupen, las encontraremos- repitió el policía.

Ahora solo queda esperar a que las encuentren, pensaban ambos, con la ilusión de que sus pequeñas aparezcan pronto.

Día 28

Había pasado casi un mes y aun no lograban encontrar a las chicas, pero aun así, no se daban por vencidos. Hace dos semanas encontraron a los responsables de la desaparición de las jóvenes estadounidenses, y estos estaban tras las rejas por intento de secuestro y posesión de de armas ilegales y de drogas, ya que al revisar bien su casa, encontraron varias de estas cosas, al igual que la dirección de un almacén donde tenían más mercancía y repuestos de yates. Al parecer estuvieron robando también a su jefe.

Mientras tanto en la isla, una joven rubia se retorcía en la arena, Brittany estaba recostada y tenía un fuerte cólico menstrual, se había enfermado hace dos días y había estado mal desde entonces. Los cólicos la habían atacado con gran fuerza y junto a este una fuerte fiebre que tiene desde hace seis días atrás, cosa que preocupaba mucho a la morena, quien gracias a su condición no sufría ese tormento menstrual.

Santana trataba de calmar a su novia, pero no tenía idea de que hacer. Recordaba cuando Rachel tuvo su primer cólico, su madre le hacía tés, y le colocaba paños calientes en el vientre.

La morena desde el día en que su novia empezó con la fiebre había tomado la caja donde venían las bengalas y la linterna, dejando esas cosas necesarias en su mochila, y uso esa pequeña caja de metal para calentar el agua y hacer compresas caseras. Se mantenía todos los días al lado de su novia, tenían ya siete días sin hacer el amor, pues antes de que la fiebre empezara, la rubia ya se sentía mal. Lo único que la morena quería en esos momentos era que su novia estuviera sana.

También era la morena la que se encargaba de los paños que usaba Brittany para no manchar la ropa que usaba

Santana regresaba del lago donde diariamente lavaban su ropa o se bañaban. Ahora, ella regresaba con los paños usados por Brittany y los llevaba a tender para que su novia los pudiera usar luego de que estuvieran secos.

Santana dejo los paños donde tienden normalmente la ropa y fue a la fogata donde estaba hirviendo el agua. Preparo una compresa y camino a donde su novia, se acomodo a su lado y le paso el paño de agua caliente, cambiando el que tenía en su vientre.

La rubia estaba sudando mucho, la fiebre poco a poco iba disminuyendo, pero Brittany aun sentía sus músculos contraídos y dolor en los huesos, no tan fuertes como al principio, pero si lo suficiente como para no dejarla ponerse de pie.

Verla en ese estado le dolía en el pecho a la morena e inconscientemente dejaba que escapara una lágrima de sus ojos. Brittany rápidamente limpio la lágrima que bajaba por las mejillas de la morena y le dio un beso en los labios.

-Es solo un cólico menstrual amor. No te niego que esto me mata de dolor, pero no pasa nada malo

-Sí, pero la fiebre…

-Amor, estaré bien. La fiebre ya no está como hace tres días… además, ya me puedo mover más- la beso –No te preocupes.

-Okay, te amo

-Yo también

Santana abrazo con fuerzas a su novia, le panto un beso en la mejilla. Brittany se quedó dormida en los brazos de su amada

Santana empezó a recordar las cosas que había vivido junto a su amada desde que habían llegado a esa isla, y sin duda fue una de las mejores cosas que le había pasado, pero ya se iba cumplir un mes desde que vio por última vez a su familia y el hecho de que Brittany estuviera en ese estado la asustaba cada vez más

También recordó su primera vez junto a su amada rubia, estaba feliz de que haya sido con ella y de que esta la haya aceptado. Recordó el obsequio de su hermano, el cual al inicio creía que no usaría, pero ahora agradecía de que se lo haya enviado, aunque debió haberle escondido unos tres paquetes de esas cajas, ya que la que tenían se había acabado, una de las razones por la que no habían vuelto a tener intimidad.

Sin darse cuenta, la morena había caído en un profundo sueño, mientras recordaba todos esos momentos junto a su ojiazul. Temía lo peor, temía que no volvieran a casa y que algo malo le pasara a su novia, ese era su más grande miedo, perder al amor de su vida.

Tres horas después, Brittany se removía entre los brazos de Santana, lentamente abrió los ojos y noto que aun estaba el sol. Se giró a ver a su novia dormida, abrazándola. Sonrió y se acercó a sus labios plantándole un dulce beso que obligo a la morena abrir los ojos.

-Buenas tardes dormilona- susurro la rubia, más animada

-Hola amor, ¿te sientes mejor?

-Sí, ya me siento mejor- la morena coloco su mano en la frente de su novia y verifico que la fiebre por fin había desaparecido. Sonrió y le dio un beso a su amada.

-Bueno, la fiebre desapareció. Pero… ¿Qué tal el cuerpo, aun duele?

-No te miento, si me duele pero ya no tanto como antes, y el cólico ya se está pasando

-¡Gracias a Dios! Me has tenido asustada toda esta semana.

-Lo siento

-No te preocupes, yo estoy aquí para cuidarte. Te lo prometo- susurro besándola amorosamente –Te amo

-Yo también te amo Sany

Sonrieron y se dieron un tierno y casto beso

-¿Quieres bañarte?- pregunto la morena

-¡Sí!- chillo animadamente Brittany –Estoy toda sudada y necesito un baño

-Bien, te llevare al lago

-Okay

Santana tomo en brazos a su novia y la llevo hasta el lago. Al llegar la dejo en piso, y le ayudo a quitarse la ropa, dejándola en ropa interior. Acerco a Brittany al lago, tomo el mate que había hecho con la cascara de un coco, y un pañuelo. Mojo el pañuelo y la paso por el cuerpo de su novia. Siguió así, hasta el final, donde le hecho un poco de agua, mojándola por completo.

Le dio tiempo para que se aseara mientras ella iba por ropa interior y uno de los paños que ya estaban limpios. Santana tomo la toalla, la camisa y pantalón de dormir de Brittany, y camino hasta donde estaba ella. Después de ayudarla a vestirse, Santana la llevo hasta el árbol donde siempre se recostaban cuando iban al lago.

Después de terminar con lo que hacía, Santana tomo un rápido baño en el lago, para después vestirse y regresar con Brittany en los brazos a la playa. Santana tomo una manta, camino hasta donde su novia y se sentó a su lado, arropándose, y juntas observaron el atardecer.

joder ya llegan al mes y todavía no las encentan,...
espero que ninguna llegue a sufrir algo peor de lo que tubo britt,..
a ver como siguen las cosas??

Pues no creo que tarden en encontrarlas ahora que ya dieron con los tipos estos. Además de que a paseo el tiempo muy rápido! Lo bueno es que dentro de lo que cabe están bien, y también esperó las encuentren antes de que se dejen llevar de nuevo por la pasión y ahora si agotaron los condones jajaja

P.d. Entiendo lo de fifth, también me gustan, lo único bueno es que seguirán haciendo música que es lo que les gusta. Y mientras hay que acostumbrarnos a la idea :/

-14-

Día 39

Había pasado semana y media desde que Brittany tuvo su menstruación, en esos momentos la rubia se encontraba mejor. Santana no paraba de tocar su frente, verificando si la fiebre volvía. Estaba atenta a cada cosa que le sucediera a la rubia. Brittany ya podía levantarse por sí sola y caminar, estaba casi recuperada, solo por un pequeño dolor en los huesos que ya casi ni sentía.

Habían pasado casi tres semanas desde la última vez que hicieron el amor y, sinceramente, la morena lo extrañaba. Pero había dos factores que le permitían aguantarse, uno de ellos era que Brittany recién se estaba recuperando, y la otra era que los condone se les habían acabado, y no quería cometer el error de dejar embarazada a Brittany. Aunque ella quería formar una familia junto a su amada rubia, ese aun no era su momento.

Santana estaba caminando hacia la playa donde estaba su novia, llevaba frutas para desayunar. Al llegar, le ofrecía a Brittany lo que llevaba en sus manos, la rubia sonrió y gustosa tomo las frutas, mientras la morena se sentaba a su lado y juntas comenzaban a desayunar.

(…….)

Mientras tanto en el hotel en Punta Cana, Kevin se encontraba en su habitación sentado sobre su cama revisando la foto de su pequeña y risueña hija. Temía no volver a verla, ya habían pasado treinta y nueve días desde que se perdieron, y cuarenta días desde la última vez que la vio y la tuvo en sus brazos.

Michael estaba en la misma situación, Santana era su hija mayor, su mayor logro y orgullo, y estaba volviéndose loco. Tenían que encontrar a las dos jóvenes, sino sus padres enloquecerían de la desesperación.

(……)

Santana y Brittany había decidido recorrer la isla como solían hacerlo antes que la morena enfermara, y ahora que se sentía mejor, tuvieron la necesidad de volver hacerlo. Estuvieron aproximadamente tres horas en la selva, comiendo las frutas que encontraban, jugando, besándose, acariciándose y diciéndose cuanto se amaban mutuamente.

Regresaron a la playa cuando les dio hambre, pues ya era la hora de almorzar. En el camino recogieron leña para la fogata. Brittany se encargó de encenderla mientras la morena pescaba.

Prepararon su almuerzo y comieron, luego de eso se quedaron abrazadas un momento en el mismo árbol de siempre.

-¿Quieres ir al lago?- pregunto la morena

-Si- respondió la rubia

-Bueno, vamos

Ambas se pusieron de pie y caminaron juntas al lago, como de costumbre. En el camino se abrazaban, besaban, se daban cariño, demostrándose lo mucho que se amaban.

Al llegar, Brittany se saco la gran camisa que tenia encima, dejando a la vista su perfecto cuerpo en traje de baño. Santana por su parte, se saco la musculosa, quedando en un top y su short de baño. Se tomaron de las manos y juntas caminaron hasta la orilla del lago, para luego proceder a lanzarse.

Empezaron a nadar de un lado a otro, disfrutando de su amor. Jugaron, rieron, entre otras cosas… hasta que Brittany se puso más coqueta. Acercándose peligrosamente hacia la morena, la ojiazul enredo sus brazos en el cuello, y sus piernas en la cintura de su novia, para luego apoderarse de sus labios. Santana estaba en shock, enseguida sintió los labios de su novia le correspondió el beso, dejándose llevar por la excitación. Su miembro reacciono enseguida, poniéndose duro al sentir la intimidad de Brittany sobre él.

La morena abrazo a su novia por la cintura, pegándola más a su cuerpo y hacerla sentir lo dura que la ponía. Brittany por su parte soltó un sonoro gemido, al sentir lo duro que estaba el miembro de su novia. “Listo para la acción”, pensó Brittany

Santana estaba deseosa por estar dentro de Brittany, había pasado casi tres semanas y se sentía vacía. Y ahora, estaba a punto de volver a hacerle el amor a su amada. Sentir a Brittany tan cerca y lista para el momento era placentero, sus gemidos era placentero, sus gemidos la llevaban a otro nivel.

Santana dejo los labios de la rubia, pasando por su mandíbula y dando pequeños besos húmedos hasta llegar a su cuello, donde empezó a besar y morder.

-Amor, sácame del lago- pidió Brittany entre gemidos

Santana obedeció enseguida a la petición de su novia y la saco, llevándola hasta la arena, y recostándola ahí. La morena se coloco entre sus piernas, mientras seguía besándole el cuello. Lentamente, descendió a los pechos, acariciándolos por encima de la tela del traje de baño

Con sus labios atendió unos de los pechos por sobre la tela, mientras una de sus manos descendía hasta el nudo del sostén, deshaciéndose de la estorbosa prenda y apoderándose del pezón de la rubia.

Brittany arqueo su espalda al sentir la húmeda lengua de su novia en su pecho, y su mano jugando con el otro. Fue bajando más y más, pasando por el abdomen de la rubia, Santana se detuvo un momento, jugando con su ombligo, para luego seguir bajando hasta llegar al dobladillo del interior.

-Sácalo- pidió Brittany

Santana enseguida se deshizo de la prenda, y se arrodillo para poder observar a su novia.

-Eres hermosa- dijo la morena sonriendo. Nunca se cansaría de ver a su novia desnuda, cada vez le transmitía sentimientos diferentes -Nunca me cansare de decirte lo hermosa que eres… nunca me cansare de verte así, desnuda y completamente entregada a mi… nunca me cansare de besarte y hacerte el amor… y sobre todo, nunca me cansare de amarte- susurro, mientras se acercaba a la rubia para apoderarse de sus labios -¡Te deseo!- murmuro contra los labios de su novia.

-San, te necesito. En serio te necesito ¡ya!- dijo la rubia, mientras deslizaba su mano por la espalda de la morena y se deshacía del top, provocando que sus se rocen y creando un escalofrío en el cuerpo de ambas –Te deseo tanto mi amor, necesito que entres en mi o me volveré loca

-Está bien amor- Santana se separo de ella un momento, y se deshizo de su short de baño. Su pene estaba erecto y listo para la acción.

Ambas estaban sumergidas en el placer y la excitación, casi tres semanas sin sentirse las estaba consumiendo, la falta de tenerse en cuerpo y alma las hizo olvidar todo a su alrededor, sobre todo un pequeño detalle que probablemente, traería grandes consecuencias.

Sin esperar más, Santana tomo su miembro con una de sus manos, y lo guio hasta la entrada de Brittany. Lentamente se recostó sobre su novia, a medida que entraba en ella, introduciéndose con cuidado hasta que estuvo completamente en su interior

Ambas gimieron de placer al sentirse tan íntimamente, nuevamente. Santana empezó con suaves movimientos de caderas, para luego acelerar su penetración, y embestirla con más fuerza, mientras la rubia rodeaba con sus piernas la cintura de la morena para poder sentirla más. Sus manos rodeaban el cuello de la morena, mientras esta escondía su rostro en el hueco del cuello de Brittany y aspiraba su olor, ese dulce olor que desprendía su cuerpo sudoroso.

Cada vez, Santana la embestía con más fuerza. Saliendo completamente de su novia, para después penetrarla con fuerza y tocar ese punto que le encantaba a la morena. Ambas gemían, sus sudores de mezclaban, sus respiraciones eran entrecortadas, sus cuerpos de acariciaban…

-¡Bésame!- pidió Brittany

Santana salió de su escondite y se encontró rápidamente con los hambrientos labios de su novia. Se besaron apasionadamente, mientras sentía las paredes de Brittany apretarse alrededor de su miembro. La rubia estaba a punto de llegar al orgasmo, solo faltaba poco, al igual que la morena.

Santana condujo su mano hacia la intimidad de Brittany y comenzó a frotar su clítoris, ayudándola a llegar al orgasmo. La rubia no se quedo atrás, bajo una mano y comenzó a apretar los testículos de la morena, provocando que se corriera más rápido.

Ambas jadearon al sentir la llegada del orgasmo. Gritaron sus nombres al momento en el que el fuerte clímax las sacudió a ambas al mismo tiempo. Santana se dejo caer sobre el cuerpo de la rubia luego de correrse dentro de su novia.

Aun estaba dentro de Brittany mientras recuperaban el aire. Cuando por fin lo lograron,
Santana salió de ella y se acostó a su lado, acurrucándose con el cuerpo de Brittany. Sin duda alguna estar dentro de su novia sin látex de por medio, fue la sensación más placentera para Santana.

Mientras que Brittany estaba contenta de sentir por primera vez toda la carga de Santana, aquel liquido caliente que se sintió tan bien. Sentir su esencia dentro de ella era placentero, y sobre todo sentirla por completo, sin el látex de por medio.

Se quedaron recostadas por más de una hora, admirándose una a la otra. Después de eso, hicieron el amor nuevamente.

Todo lo que restaba de la tarde y la noche se amaron completamente. Ambas se entregaron sin duda alguna, sin recordar las grandes consecuencias que eso podría causar.

cada ves mas interesante el tiempo en la isla,..
espero que cuando las vea los padres,.. no lleguen ya con nietos,..
cuanto mas van a tardar en encontrarlas???

-A LLEGADO EL GRAN MOMENTO
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Día 50

Habían pasado 11 días desde que volvieron a hacer el amor por última vez, aquella tarde en el lago.

Santana y Brittany estaban dentro de la carpa dormidas, era muy temprano. Ambas estaban acurrucadas, la morena abrazaba a la morena por la espalda.

Un fuerte ruido hizo de Brittany abriera los ojos. Era el sonido de una avioneta, se movió y comenzó a mover suavemente a la morena, que dormía plácidamente.

-Santana una avioneta. Amor, despierta- susurraba, tratando de despertarla -¡Santana!- grito

La morena abrió los ojos de golpe.

-¿Qué sucede Britt?- pregunto fregándose los ojos

-¡Escucha!- pidió la rubia

Ambas hicieron silencio, el sonido de una avioneta se escuchaba cada vez más cerca.

-Es una avioneta.

-Parece que si- asintió Santana, empezando a buscar entre las cosas, la pistola de bengala.

Cuando la encontró, salió de la carpa rápidamente. Santana alzo la mirada en el momento en el que la avioneta pasaba sobre ellas. Recargo la pistola, la elevo, apuntando al cielo y disparo.

Enseguida el piloto vio la señal y envió un mensaje a la central, para luego darse la vuelta y llegar a aterrizar a la isla. Brittany corrió tras Santana y la abrazo. Por fin después de cincuenta días eran rescatadas y podrían volver a ver a sus familias.

El piloto salió con un botellón de agua y se acerco a las chicas.

-Tomen señoritas.

-Gracias- respondió Santana, tomando la botella y cediéndosela a Brittany –Bebe- pidió.

La rubia tomo la botella y comenzó a beber de ella, cuando termino, se la paso a la morena quien rápidamente comenzó a beber.

-¿Ustedes son Santana López y Brittany Pierce, verdad?- pregunto el hombre

-Así es- respondió la rubia

-Las hemos estado buscando por más de un mes, avisare que son ustedes. Sus padres estarán felices.

-Gracias señor- respondieron ambas.

-Recojan sus cosas- pidió el hombre, mientras regresaba a la avioneta para dar aviso de que las chicas habían sido encontradas.

Mientras tanto, Santana y Brittany estaban recogiendo las cosas las cosas que llevarían. Sus ropas era lo único que guardaron, no tenían tiempo de desarmar la carpa ni nada por el estilo. Tomaron lo necesario y se dirigieron a la avioneta, donde el piloto las esperaba.

-Amor, ¿Cómo crees que nuestros padres tomen nuestra relación?- pregunto la rubia mientras caminaban de la mano hacia la avioneta.

-No lo sé, pero, pase lo que pase, nunca te dejare. Ya tendremos tiempo para pensar en eso, ahora lo importante es que estamos juntas y volveremos a casa con nuestras familias- dijo Santana, mientras subía las cosas a la avioneta y ayudaba a subir a su novia

-¿Listas para regresar?- pregunto el piloto una vez que todos estaban a bordo

-Listas- respondieron ambas, tomándose de las manos

(……..)

-Bien, las hemos encontrado- aviso el jefe, el oficial –Debemos avisarle a los padres. Oficial, ve al hotel y trae a los señores.

-Enseguida- respondió el joven, saliendo del lugar

Rápidamente llego hasta el hotel, en donde se encontraban los padres de las chicas
Michael y Kevin estaban en la habitación del primero, hablando por Skype con sus esposas e hijos, e informándole las cosas que pasaban a diario en Miami. El hecho de que cada vez, estaba más pronto la fecha de regreso a clases. Ese sería el último  año de Brittany y Santana.

Escucharon leves golpes en la puerta, Kevin se levantó de su lugar y camino hacia la puerta.

Al abrirla se encontró con uno de los oficiales a cargo de la búsqueda de las chicas.

-Buenos días señores- saludó, ingresando a la habitación

-Buenos días oficial- respondieron Michael y Kevin

-¿Qué sucede? ¿Hay alguna noticia?- pregunto Michael

-Si señores, una excelente noticia- contesto sonriendo –Deben acompañarme, sus hijas han sido encontradas y la avioneta ya está de regreso con ellas a bordo.

-¡Dios! Esa es una excelente noticia- dijo Kevin, feliz, acercándose a abrazar a su amigo.

Ambos les avisaron a sus familias lo que ocurría, se despidieron y salieron del hotel junto al oficial.

(……)

-Ya estamos por aterrizar señoritas- informo el piloto, y las chicas apretaron la mano de la otra

En menos de veinte minutos, ya estaban fuera de la avioneta abrazando a sus padres.

-¡Oh! Mi pequeña, estaba muy asustado- dijo Kevin a su hija, abrazándola

-Yo también estaba muy preocupado por ti Santana- dijo Michael, acunando el rostro de su hija y viéndola fijamente a los ojos, para después depositar un tierno beso en su frente.

-Yo también te extrañe papá, y a usted también Kevin- dijo la morena

-Igualmente San- asintió Kevin

-¡Oh! Pequeña, ven a mis brazos- dijo Michael a Brittany, quien gustosa corrió a los brazos de su, ahora, suegro

-Ven Santana- pidió Kevin, enrollándola en un tierno abrazo –Espero hayas cuidado a mi pequeña

-Si lo hizo- respondió Brittany

-Y ella cuido de mí- dijo la morena

-Que bien, lo bueno es que estuvieron juntas para cuidarse mutuamente, y que ahora están con nosotros- dijo Michael

-Michael tiene razón, ahora será mejor que vayamos al hotel. Debemos regresar a Miami, los demás  ya están allá, Susan y Maribel las quieren ver pronto, así que es mejor que no hagamos enojar a las mujeres y regresemos pronto. El Jet estará listo para mañana- informo Kevin

Los cuatro se dirigieron al auto que los esperaba. En treinta minutos ya estaban en el hotel.

Las chicas estaban cada una en su habitación, duchándose y poniéndose ropa cómoda que sus padres les habían mandado a comprar. La primera en estar lista fue Santana, así que decidió ir a la habitación de Brittany. Cuando entro, observo que no había nadie, se acerco al baño y escucho el agua correr, decidió acostarse en la cama y esperar a su novia ahí. Diez minutos después, la rubia salía del baño con una pollera y shorts de dormir. Estaba exhausta y quería descansar en una cama. Cuando salió, se encontró con su novia recostada en la cama, sonrió y se acerco a ella.

Al llegar, se dio cuenta que estaba dormida. Brittany saco las sabanas y cubrió el cuerpo de su novia, para después meterse entre ellas y acurrucarse contra el cuerpo de la morena.

Santana abrió los ojos al sentir el cuerpo de su novia a su lado y sonrió.

-Te estaba esperando, pero el cansancio me ha vencido.

-Me di cuenta- respondió dejando un dulce beso en sus labios –Amor ¿Qué haremos?

-Se lo diremos cuando regresemos a Miami. Papá me comento que harían una comida en tu casa mañana por la noche, será una cena entre tu familia, la mía y nuestros amigos, ya sabes los chicos de siempre.

-Ya entendí

-Okay

-Okay, entonces ahí les diremos.

-Sí

-Bueno, ¡ahora abrázame, que estoy muy cansada y el sueño me vence!

-Sus deseos son órdenes, mi hermosa princesa- respondió la morena

Dos horas después, Michael y Kevin entraron a la habitación de la rubia, encontrándose con una tierna escena. Dejaron el lugar sin hacer ruido  y se dirigieron a sus habitaciones a descansar. Ahora si podían descansar sin temor, ya sus hijas estaban a salvo.

Al día siguiente…

Los dos López y los dos Pierce, ya habían abordado el jet privado de la familia López, que tenía como destino Miami, donde su familia ya estaba esperándolos con ansias, sobre todo a las chicas.

En la mansión Pierce, Susan con ayuda de Maribel, Alexa, Rachel, Blaine y los amigos de las chicas, estaban preparándoles una bienvenida. Sería una cena en la cual estarían invitados los amigos de las chicas, pues se trataba de algo intimo. Únicamente la familia y los mejores amigos de las chicas.

El jet aterrizaba en la pista del aeropuerto en Miami, fuera de él, estaban sus familiares esperándolo, quienes al ver a las dos jóvenes corrieron a su encuentro.

Las primeras en llegar hasta las chicas, fueron sus madres, quienes las abrazaron y lloraron juntas de felicidad por volver a casa. Después de estar por casi diez minutos abrazadas a sus madres, sus hermanos fueron los siguientes.

La pequeña Alexa con lágrimas en los ojos, corrió abrazar a su hermana mayor, que la esperaba con los brazos abiertos arrodillada en el suelo. Las hermanas Pierce se fundieron en un cálido abrazo.

-Te extrañe tanto Britt, tuve mucho miedo de no volver a verte- sollozo la pequeña

-Yo también te extrañe pequeña. No te preocupes, ya estoy aquí y no me volveré a ir

-Me lo prometes

-Te lo prometo

Mientras las hermanas Pierce charlaban, Santana era asfixiada por el abrazo de sus dos hermanos menores, Blaine y Rachel, quienes lloraban junto a ella.

-No sabes la falta que nos hiciste Santana- sollozo Rachel –Te extrañamos tanto.

-Lo siento chicos, no volverá a pasar. Se los prometo.

-Te quiero mucho San. Estoy feliz de volver a verte- dijo Blaine, separándose del abrazo y sonriéndole mientras limpiaba las lágrimas que corrían por sus mejillas –Y dime San ¿Disfrutaste de mi regalo?- pregunto con una sonrisa pícara.

-Nunca creí que diría esto, pero… te lo agradezco hermano

-¡Oh por dios!- exclamo el joven asombrado

-No diré más. Tampoco le dirás a nuestros padres, ni a los de Britt

-Claro- respondió Blaine

-¡Sera mejor que vallamos a casa! Brittany vendrá con nosotros, su madre mando su ropa, iremos a casa de ella en la noche para la cena- informo Rachel.

Caminaron hasta donde se encontraban las dos jóvenes aun abrazadas. Santana se puso al nivel de las chicas para incluirse al abrazo, seguida por sus hermanos. Estuvieron abrazos pon un rato más hasta que separaron.

Santana ayudo a ponerse de pie a Brittany.

-Vendrás con nosotros. Tu madre envió ropa a la casa para que te cambies ahí, iremos a tu casa en la noche- informo la morena

-Okay- respondió la rubia

-Yo también iré con ustedes- dijo Alexa

-Así es Alexa- respondió Rachel –Ahora, vamos al auto

Los chicos se dirigieron al auto y lo abordaron, en otro auto iban los padres de la morena y en otros los padres de la ojiazul, quienes se dirigían a su mansión.

Al llegar a la mansión López, los chicos bajaron e ingresaron rápidamente. Santana dirigió a Brittany a su habitación, Blaine se fue a la suya y Rachel llevo a Alexa con ella. Al entrar a la habitación de la morena, Brittany no tardo en rodear su cuello con sus brazos y unir sus labios en un apasionado beso.

-¡Extrañe tus labios!- murmuro la ojiazul, mientras se besaban

-Yo también- dijo la morena al separarse.

Santana sonrió y planto un dulce beso en los labios de su novia antes de tomar su mano y conducirla a la cama, se recostaron de lado, mirándose fijamente la una a la otra. Sonriendo y compartiendo caricias y besos, se pasaron por casi una hora, hasta que Brittany decidió ir a ducharse.

Antes de eso, ambas fueron hasta donde estaba Maribel para que le entregara la ropa que Susan le había enviado. Una vez tuvo el vestido en manos, junto a su ropa interior y los zapatos que usaría, fueron a la habitación de la morena.

Santana le cedió una toalla y salió de la habitación y mientras Brittany se duchaba, fue al jardín, donde se encontró a su padre.

-Hola papá

-Hola San

-¿Cómo estás?

-Mucho mejor ahora que estas en casa

-Yo también, me alegra estar aquí. Tenía miedo de no volver… no volver a verlos

-Lo importante es que ya están aquí y que nada malo les paso

-Sí, lo sé

-¿Santana?

-¿Si papá?

-Entre tú y Brittany… ¿Hay algo que debamos saber?

-No te lo puedo decir ahora

-Bien, pero prométeme que tendrán cuidado

-Te lo prometo papá

-Okay, me haría muy feliz que estuvieran juntas

Ambos sonrieron.

Estuvieron conversando por un rato más hasta que escucharon que alguien detrás de ellos se aclaraba la garganta. Voltearon, encontrándose con la rubia, quien lucía un hermoso vestido rojo al cuerpo, junto a unas zapatillas de tacón color negro. Ambos López se quedaron anonadados por la belleza que destellaba la rubia, pero quien más disfrutaba de la vista fue la morena.

Michael al darse cuenta de la miradas que se regalaban, decidió dejarlas solas.

-Te ves hermosa- dijo Santana, acercándose a Brittany, y tomando su mano para darle una vuelta.

-Gracias, será mejor que vayas a arreglarte- respondió Brittany, observando a los lados. Al ver que nadie estaba cerca, tomo el cuello de la morena y la acerco, hasta unir sus labios en un tierno beso.

Mientras ellas se besaban, los padres de la morena presenciaban el momento y sonreían. Sin duda, estaban felices de que las chicas se correspondían.

-Iré a alistarme- susurro la morena, después de separar sus labios.

La morena corrió a su habitación, busco ropa, tomo la toalla y se metió al baño a ducharse. Mientras tanto, la ojiazul camino a la habitación de su cuñada donde se encontraba su hermanita. Al entrar, vio a Alexa lista. La pequeña vestía un hermoso vestido blanco. Rachel tenía un vestido negro ceñido al cuerpo, y estaba sentada en el taburete de tocador maquillándose. Brittany se acercó y la ayudo con el trabajo. Aprovecho y retoco su maquillaje.

Quince minutos después, notaron la presencia de alguien en la habitación. Se dieron la vuelta y sonrieron al ver a Santana recostada en el marco de la puerta. La morena tenía un pantalón de tela tubo, una camisa blanca mangas largas ceñida al cuerpo y encima de esta, un blazer, acompañado por un par de zapatos negros.

Santana sonreía con la pequeña Alexa en brazos. En el rostro de Brittany se dibujó una sonrisa al ver a su novia y a su hermana abrazada bajo el umbral de la puerta.

-Papá me mando a avisarles que se apresuren, debemos irnos- dijo la morena

-Ya bajamos San- respondió Rachel, revisando su maquillaje.

Brittany camino hacia Santana y tomo su mano. La morena bajo a Alexa y tomo su pequeña mano. Juntas, las tres caminaron hacia la sala, detrás de ellas iba Rachel. En la sala ya estaban Blaine, Maribel y Michael. Cuando vieron a las chicas sonrieron.

Salieron de la mansión en la limosina, y fueron a la mansión de los Pierce.

Al entrar en la casa, se encontraron con sus amigos, quienes corrieron a su encuentro. Se abrazaban y lloraron juntos. Estaban felices de volverlas a ver y de que estuvieran sanas. Michael y Maribel se acercaron a Susan y Kevin, y les contaron lo que habían presenciado en la tarde. Los padres de Brittany se pusieron felices al igual que los padres de Santana.

Las chicas estuvieron junto a sus amigos conversando lo que habían vivido esos días sin ellas. La preocupación que tenían y el miedo de no volver a verlas, por otra parte, las chicas contaron cómo fue su estadía en aquella isla, omitiendo las escenas íntimas. Les comentaron como sobrevivieron, que comieron. También Brittany les conto como Santana cuido de ella cuando estuvo enferma, y que en ningún momento se separó de su lado, recibiendo un suspiro de parte de las chicas y “Aww”  de parte de sus amigos y familia.

Fueron llamados a cenar y todos se dirigieron al comedor.

Al llegar, se sentaron y esperaron a que les sirvieran. Pero antes de eso, harían el brindis, en donde Santana y Brittany les contarían a todos sobre su relación. Michael fue el primero en hablar, agradeció que las chicas estuvieran a salvo y con ellos en casa. Soltó unas cuantas lágrimas al igual que los demás. Kevin fue el siguiente.

Puck también pidió la palabra, al igual que Quinn y Emily. Cuando todos habían terminado, Santana pidió la palabra antes de que bebieran en champagne.

Brittany tomo su mano y le dio un leve apretón.

-Antes de que todo quisiera contarles algo. El tiempo que estuvimos en la isla fue genial, también pusimos en prácticas lo que aprendimos en los Scout y esas cosas… encontramos un hermoso lago y vimos lo hermoso que es la naturaleza. Brittany y yo no unimos más…- balbuceaba Santana.

-Lo que quiere decir es que, somos novias- dijo la rubia, interrumpiendo a su novia que estaba dándole vueltas al asunto.

Santana se giro a ver a su novia con los ojos abiertos.

-¿Así no más, sin anestesia?-  pregunto la morena

-Quedamos en que sería rápido- respondió Brittany

-Chicas no se peleen, nosotros estamos felices por ustedes- dijo Kevin.

-¿En serio papá?- pregunto la rubia

-Si hija- la rubia corrió a abrazar a su padre

-¡Al fin!- grito Quinn –Ya te estabas tardando López- dijo la rubia para luego abrazar a la
morena.

Todos los amigos y familiares felicitaron a las chicas por su relación, estaban muy felices por ella.

A los pocos minutos sirvieron la cena, la cual se fue dando entre conversaciones, y una que otra mirada de las chicas. Cuando terminaron de cenar, las chicas se robaron a Brittany junto a Rachel y Alexa, mientras los chicos se llevaron a Santana junto a Blaine.

Ellos estuvieron hablándole a la morena sobre las cosas que habían pasado en su ausencia, las fiestas a las que habían ido para distraerse un poco, pero regresaban a sus casas antes de que comenzara lo bueno, ya que no podían estar de fiesta cuando sus amigas estaban perdidas.

También hablaban de los partidos que jugarían ese año, entre otras cosas. Mientras tanto, las chicas estaban contándole a Brittany acerca de Dianna, la cual estaba feliz cuando se entero que estaba perdida, pero que se había enfurecido cuando se había enterado que
Santana estaba junto a la rubia. Quinn le pidió a Rachel que se llevara a Alexa porque hablarían de temas importantes, y de gente grande.

Brittany ya se imaginaba de lo que hablarían así que solo se sonrojo, lo cual la delato y a Quinn no le pasó desapercibido.

-Aja- grito Quinn –Kitty, Hanna y Emily nos contaron del pequeño secretito de la morena.

-El cual según los chicos no es tan pequeño- dijo Mercedes.

-Hey ¿Por qué le contaron eso?- pregunto la rubia a las chicas antes mencionadas

-¡Se nos escapo!- se disculpo Hanna

-Sí, es que estábamos hablando y se me escapo decir que no llegaras a quedar embarazada…- dijo Emily

-Y bueno, tuvimos que explicarles- dijo Kitty

-Y Puck dijo que no es para nada pequeño- Marley

-Okay chicas ¡Basta! Esto es desagradable, no hablen de mi novia así.

-Bien, bien. Pero, dinos ¿Lo hicieron?- pregunto su rubia amiga. Brittany se sonrojo –Eso significa que si- la rubia intento protestar -¡No me digas que no! Cincuenta días, las dos solas en una isla y una caja de condones que nos conto Blaine que le obsequio a Santana…

-Bueno ¡ya! Si lo hicimos- susurro la rubia -¿Contentas?

-¡Oh por dios! La pequeña Britt ha crecido- aplaudió Quinn y fingió secarse una lágrima.

-¿Te entro todo eso?- pregunto Emily, con los ojos abiertos del asombro.

-¡Emily, que preguntas!- reclamo la rubia

-¡Bueno, ya! Ambas sabemos que es muy grande ¿No te asustaste al verlo? Porque yo si- dijo Emily

-¡Emily!- la reto Hanna

-Bueno ya… ¡no me griten!

Las chicas siguieron conversando un rato más. Luego fueron donde estaban los chicos, se sentaron junto a ellos y siguieron conversando hasta que se hizo tarde. Todos se despidieron de las familias Pierce y López, y se fueron a sus casas.

Los López esa noche se quedarían en la mansión Pierce, así que todos los chicos se dirigieron a la habitación de Brittany, donde vieron una película hasta quedarse dormidos, Brittany en los brazos de Santana, Rach y Alexa en el suelo, encima de  unas sabanas que habían ubicado en el lugar y Blaine en mueble.

-Te amo Britt-Britt- susurro Santana entre sueños.

Por fin las encontraron y era obvio que no resistirían sin hacer el amor y bueno parece que viene en camino un pequñin
Y las amigas de Britt jajajaja enterándose den pequeño gran secreto de San jajajja

al fin las encontraron,...
ya se caía de maduro que las dos se querían solo faltaba que den el paso jajaj
a ver como van las cosas..???
y de esa isla no hayan venido tres??

Ya se iba haciendo raro que nunca se les acabaran los condones jajaja

-16-

Había pasado un mes y dos semanas desde el regreso de las chicas a Miami. En los últimos días, Santana se había estado sintiendo un poco extraña. Había tenido muchos mareos y se pasaba vomitando en algunas ocasiones. A diferencia de Brittany, quien últimamente tenía un apetito voraz, el triple de lo normal.


Las chicas estaban reunidas con sus amigos en la mansión López, disfrutando de su última semana de vacaciones.

Mientras en la piscina se encontraban los mejores amigos de la pareja, Santana y Brittany se habían escapado un momento y se habían encerrado en la habitación de la morena, pues últimamente la rubia, había estado insaciable en todos los aspectos.

-¡Oh Dios!... ¡San, más rápido cariño!... ¡Más rápido!- gemía agitadamente la rubia. Para suerte de ambas los padres de la morena no se encontraban en casa, y mucho menos Blaine y Rachel.

-Shh… bebé, nos van a escuchar- le dijo la morena, mientras la penetraba más fuerte y rápido tal y como su novia se lo pedía.

-No importa, tú solo hazme el amor- exigió la ojiazul.

-Eso hago cariño- susurro sobre sus labios, para después apoderarse de ellos y atrapar los gemidos emitidos por su novia.

Un par de embestidas más y sintió como las paredes de su novia apretaban su pene, dándose cuenta que la morena estaba por llegar a su orgasmo. Brittany se mordió el labio inferior, sintiendo el maravilloso orgasmo aproximarse.

Queriendo que la morena llegara al mismo tiempo que ella, se contuvo un momento y llevo sus manos a los testículos de la morena dándoles un pequeño masaje.
Santana sintió un tirón en su estomago y acelero las embestidas. Los gemidos eran insaciables. Después de cinco embestidas, la rubia se corrió, seguida por la morena, quien se vacío dentro de ella.

-Me encantan sentirte llenándome- confeso la ojiazul.

-Para mí no hay nada mejor que estar dentro de ti- susurro, seguido de un beso

Después de tan placentero momento, las chicas se arreglaron y bajaron a la piscina con sus amigos, quienes empezaron con sus incómodos comentarios, haciéndolas sonrojarse.
Pasaron la tarde entre juegos, risas, anécdotas, recuerdos… y una que otra cosa. Pasada las cuatro de la tarde, los chicos se cambiaron de ropa y se dirigieron al living, ya que habían quedado en ver una película.

Arreglaron la sala, conectaron el portátil de Santana, Blaine –quien recién llegaba- se encargo de pedir las pizzas. Brittany junto a Quinn, Marley y Mercedes, hicieron palomitas y las llevaron al living. Hanna, Emily y Kitty llevaron los vasos y la soda. Tras la llegada de las pizzas, todos se acomodaron en el enorme salón de los López mientras iniciaba la película: “Avengers 2”.

En el transcurso de la película, Santana y Brittany pasaron robándose besos, miradas, caricias… y esas cosas no pasaban por alto para las chicas.

A las diez de la noche todos se habían ido. Brittany llamo a su casa para avisar que se quedaría a dormir con Santana, y sus padres aceptaron. Blaine y Rachel se colaron a la habitación de la morena y entre todos vieron otra película.

Esa noche no hicieron el amor, pero durmieron abrazadas, sintiendo sus cuerpos juntos, algo totalmente placentero para ambas, pues su relación no se basaba únicamente en besos, y momentos como ese, para ellas eran estupendos.

Ese día las chicas regresaban a clases. Su último año de secundaria. Brittany sentía uno que
otro malestar, y un insaciable deseo de comer mucha comida, y por supuesto, a la morena.

Mientras que, Santana tenía nauseas. Desde que regresaron de la isla ambas habían tenido sus momentos de placer, pues Brittany se había vuelto muy difícil de complacer, y la morena por su parte, disfrutaba de hacer el amor con su novia.

Hace dos días sufrió un pequeño desmayo, del cual solo estuvieron presentes Quinn y Emily, a quienes les hizo prometer que no le dirían nada a la morena. Ambas chicas a regañadientes aceptaron después de que Brittany les hiciera su famoso, pues ni ellas eran inmunes a esa cantidad de ternura.

En esos momentos, Brittany llegaba a la secundaria junto a su novia en el auto de la morena.
Santana detuvo el auto en el estacionamiento, en su lugar de siempre. Bajo, para luego rodear el auto y ayudar a su novia a salir de él.

Entraron al instituto y se dirigieron a sus ya conocidos casilleros. Ambas dejaron sus cosas y tomaron lo necesario. Después de tener todo listo, la morena tomo el bolso de su novia, para que así ella no cargara nada, y se dirigieron al patio de comidas, donde sus amigos las esperaban con una gran sonrisa.

Conversaron felizmente por un tiempo hasta que el timbre toco, lo cual les indicaba la entrada a clases. La morena acompaño a su novia hasta su salón, junto a Quinn. La ojiverde entro primero al salón, para así darles privacidad a las tortolitas.

-Bueno amor, nos veremos en el receso

-Okay… te amo- dijo la rubia, acercándose a los labios de su novia

-También te amo- respondió Santana

Brittany vio de reojo a su maestro acercándose. Le dio un piquito a su novia.

-Amor, ahí viene Fox. Nos vemos, te amo- dijo la ojiazul, para luego voltearse y adentrarse a su salón.

Santana sonrió y se dio vuelta para irse a su salón, topándose con Puck y Ryder en el camino.

Las clases pasaron sin mayor novedad, los maestros saludando a los chicos y felicitándolos por su último año, al igual que a los jugadores del instituto, al los cuales se les acercaba un gran partido. También se acercaron a saludar a la rubia y a la morena, expresándoles lo preocupados que habían estado por su desaparición, y felicitándolas por su relación, algo que no sorprendió a mucho en el instituto, pues ya veían venir que es esas dos terminarían juntas.

A muchos en la escuela les encanto la noticia del noviazgo, por no decir a todo, ya que se les veía muy bien juntas y muy enamoradas. Pero había una persona a la cual le disgustaba verlas juntas, y quería hacer algo para separarlas. Enterarse de la condición de la Santana, y descartar que fueran solo rumores, la hizo tramar un plan, decidiendo tomar su “estado” como ventaja.

La rubia estuvo tramando su actuación durante las primeras horas de clases y decidió llevar a cabo su plan ese mismo día, en la hora del receso. Acabaría con la relación de las chicas, o al menos lo intentaría.

Santana salió de su salón a toda velocidad, esquivando a todos los alumnos y profesores que se le atravesaban en el camino y así poder llegar a tiempo al salón de su amada, quien se encontraba con la compañía de Emily y Hanna.

Brittany sonrió al ver a la morena correr por los pasillos para llegar hasta ella. Sus amigas le dieron una sonrisa cómplice y esperaron juntas a la morena. Santana, al llegar, saludo rápidamente a sus amigas para luego dirigir su atención a su ojiazul, y agarrándola de la cintura le planto un delicioso y amoroso beso.

Brittany por inercia, rodeo el cuelo de su novia, devorándose las bocas, y encerrándose en su propia burbuja. Después de unos minutos de un apasionado beso, las chicas se separaron y unieron sus frentes, mirándose fijamente a los ojos, transmitiéndose todo el cariño, amor y todos los sentimientos que tienen hacia la otra.

-Te extrañe- susurro la morena, provocando que la rubia se sonrojara y sus amigas la vieran divertidas.

-¡Oh, vamos López! Ni que haya sido tanto, solo fueron un par de horas- dijo Emily, mientras rodeaba la cintura de Hanna.

-Es cierto López, te has vuelto tan cursi- reían ambas, viendo a la pareja sonrojarse.

-¡Oh vamos! Ustedes son iguales o peor. Sobre todo tú, Emily- se defendió.

-San tiene razón- apoyo la ojiazul, mientras seguía aferrada al cuello de su novia.

-Bueno ya, el amor nos pone cursi- dijo Emily defendiéndose.

-En eso tienes razón amor- dijo Hanna –Pero ya, vamos a comer que muero de hambre, y no querrás que me enoje ¿verdad cariño?- pregunto Hanna a Emily

-Claro que no- respondió Emily tomando la mano de Hanna para encaminarse a la cafetería.

-Esas dos no cambian- susurro la morena

-Si bueno, yo también tengo hambre- comento Brittany

-¡Apresúrense par de tórtolas!- grito Emily cuando se dio que sus amigas no las seguían

-Vamos cariño- Santana tomo el bolso de Brittany y camino de la mano de su novia tras sus amigas

Al llegar a la cafetería, se dirigieron a la mesa que siempre ocupaban, y junto a Emily, fueron por la comida para sus chicas. Al regresar con las charolas, vieron como el resto de sus amigos ya habían llegado y estaban conversando y comiendo.

Santana se sentó al lado de su novia y le coloco la comida enfrente. Brittany al ver su comida sonrió y se giró para ver a su novia, quien también tenía una sonrisa en su rostro. La rubia le dejo un beso en su mejilla y comenzó a devorar su almuerzo. Mientras tanto, Santana comía lentamente su comida, llevaba un malestar y sentía ganas de vomitar, como había estado últimamente.

Al otro lado de esta se encontraba Puck, quien la vio extrañado, El había estado presente algunas veces cuando la morena se la había pasado vomitando.

-¿Qué pasa López, estas bien?- cuestiono preocupado por la salud de su amiga

-Si Puck, no te preocupes. Ya se me pasara- respondió con una sonrisa –Más bien cuéntame…

¿Qué tal te va con Kitty?- pregunto esta vez.

El chico sonrió.

-Bien, saldremos este fin de semana ¡Le he preparado algo fenomenal!

-Que bien

-Lo sé, estoy algo mmm… nervioso

-Es normal

-Sí, mejor no me preocupo. Todo saldrá bien.

-Si tienes razón .

-¡Hey, López! Cuando empezaran los entrenamientos, recuerda que tenemos un gran partido acercándose- recordó el chico

-Lo sé Puck, el entrenador me ha hablado esta mañana. En esta semana tendremos que empezar. También hay que buscar nuevos chicos, recuerda que hay que llenar los espacios vacios.

-Sí, lo sé.

-Ustedes dos ya están hablando de fútbol ¿no es así?- interrumpió la rubia.

-Lo siento cariño- se disculpo Santana –Es que recuerda que tenemos un gran partido a la vuelta de la esquina.

-Así es Britt, es muy importante ganar ese partido. Habrá visitantes de las universidades, sabes que es una gran oportunidad para nosotros.

-Lo sé chicos, espero les vaya fenomenal. Las chicas y yo prepararemos una rutina especial para animar a nuestros jugadores favoritos.

-Eso suena genial Britt- dijo Puck, sonriendo.

Santana sonreía viendo a su novia y a su amigo charlar, mientras se abrazaba el abdomen intentando retener las ganas de vomitar. No había probado un solo bocado de su comida y la rubia se dio cuenta, así que se giró y vio fijamente a su novia a los ojos.

-Amor, ¿Por qué no has comido?

-No me siento bien.

-¿Qué tienes?

-Tengo nauseas- confeso Santana

-¿Quieres ir a la enfermería?- pregunto la rubia preocupada.

La morena no alcanzo a responder cuando sintió un fuerte olor invadir sus fosas nasales, obligándola a expulsar todo lo que retenía en su boca. Pero, Santana logro girarse a tiempo y así no manchar, ni a su novia, ni a sus amigos, pero manchando por completo a una rubia que iba hacia ellos con malas intenciones.

Brittany acariciaba la espalda de su novia mientras sostenía su cabello para que no se ensuciara. Todos en la cafetería giraron para ver lo que sucedía, pero nadie se atrevió a sacar fotos o a grabar, por el simple hecho de que era Santana López, y nadie quería problemas con los populares.

-Amor ¿te encuentras bien?- pregunto la rubia una vez su novia ceso de vomitar

-Sí, ya estoy mejor- respondió la morena mientras su novia le limpiaba la barbilla y los labios con pañitos húmedos.

Nadie en la mesa noto la presencia de la rubia hasta que esta dio pisoteadas y pequeños saltitos. Llena de disgusto, se aclaro la garganta. Brittany levanto la mirada para encontrarse con aquella rubia que siempre iba detrás de su novia, mientras que Santana escondía su rostro en el cuello de Brittany y aspiraba su olor, ese único olor que amaba y jamás en la vida podía darle asco.

La rubia seguía acariciando la espalda de la morena, mientras miraba con el ceño fruncido a la chica frente a ella.

-¿Qué quieres Dianna?- pregunto Brittany, fastidiada por la presencia de la chica.

-Vengo hablar con López

-En estos momentos, “mi novia” no se encuentra bien. No sé si lo habrás notado… además, ustedes no tienen nada de qué hablar.

-Claro que tenemos de que hablar

-¿A sí? ¿Qué es tan importante?

La rubia sonrió malévolamente y dirigió su mirada a la morena, quien seguía refugiada en los brazos de su novia.

-Vengo hablar con la madre de mi hijo- soltó Dianna

Brittany frunció el ceño y Santana salió de su escondite un tanto mareada, dirigiendo su mirada a la rubia.

-¿De qué hablas Dianna?- pregunto Santana lentamente, confundida por la situación.

-Cariño ¿no me digas que no recuerdas?- pregunto la rubia, fingiendo indignación

-No sé de que hablas- respondió la morena

-Santana ¿de qué está hablando? ¿Cómo que la madre de su hijo?- pregunto exaltada Brittany por la noticia

Brittany empezó a sentir un calor interno, y no precisamente por el coraje y los celos. La presión se le estaba alterando, y más en su estado. Ella no podía tener esos ataques, mucho menos esas discusiones, ni sorpresas.

-No lo sé cariño ¡Te lo juro Britt-Britt!

-¡Oh Santana! No me digas que no recuerdas esa noche maravillosa, en la que me hiciste tuya- dijo la rubia sin pelos en la lengua y sin importarle las personas a su alrededor.

-No sé de qué estás hablando Dianna- Santana enfrento a la rubia –Amor, te juro que no se dé que está hablando- dijo Santana, mirando de frente a su novia y tomándole la mano, acariciándola –Te amo ¿Okay? Te amo, tú fuiste la primera y única en mi vida ¡lo juro, cariño!- exclamo la morena.

Brittany vio sinceridad en los ojos de su novia. Asintiendo, le demostró que le creía.

-¡Dios mío Santana! No puedo creer que no recuerdes esa noche…

-¡Cállate!- grito Santana, exaltada

Rápidamente se puso de pie, pero se tambaleo un poco por lo débil que se encontraba, y el mareo se hizo más fuerte. Santana llevo sus manos a la cabeza, tratando de controlar el mareo. Puck alcanzo a sostenerla antes de caer.

Brittany veía todo desde su lugar, empezando a sentirse mal. Quinn lo noto, así que se acerco a ella y la sostuvo en sus brazos. Ella había presenciado un desmayo de la ojiazul, y no quería que volviera a pasar. Le lanzo una mirada a Emily, quien entendió rápido y se acerco también, alcanzando a sostener el pequeño cuerpo de la rubia.

Brittany sentía pesadez en su cuerpo y su vista se había vuelto borrosa. Solo alcanzo a escuchar las palabras de Emily: “López, Britt se desmayo” y de ahí, todo se puso oscuro y no escucho nada más.

Santana al escuchar a su amiga, se incorporo rápidamente provocando que Puck terminara en el suelo.

-Lo siento Puck- dijo Santana, extendiéndole la mano a su amigo, quien la tomo rápidamente y con una sonrisa se levantó.


-No te preocupes- respondió

Santana se acerco a su novia, y con las pocas fuerzas que tenía, tomo el frágil cuerpo de su amada rubia entre sus brazos y lo cargo.

-Santana ¿no quieres que te ayude?- pregunto Puck

-No te preocupes Puck. Toma nuestros bolsos y acompáñame

-Okay- respondió el chico

-Nosotros también te acompañamos- dijo Ryder, hablando por sus amigos quienes rápidamente recogieron sus cosas y se dispusieron a acompañarlas hasta la enfermería, sin importarles el berrinche que estaba haciendo la rubia.

-¡López! No te piensas hacer cargo de tu hijo- grito la rubia, enojada por la falta de atención por parte de Santana

Santana detuvo sus pasos y suspiro frustrada. Ella no sabía qué hacer para quitarse a la rubia de encima, era totalmente insoportable. Estaba harta de que no entendiera que no quería nada con ella. La morena se dio para así poder ver a la rubia.

-Dianna, no sé quién será el verdadero padre de ese niño, si es que de verdad existe. Pero estoy cien por ciento segura, que no es mío, porque nunca me involucre, ni me involucraría contigo. Ahora, si me disculpas mi novia está mal gracias a tu espectáculo, y debo llevarla a enfermería.

Al llegar, coloco a su amada sobre la camilla. La enfermera entro rápidamente y le tomo el pulso a Brittany.

-Su presión está alterada- informo la enfermera.

La morena asintió y tomo la mano de su novia.

-¿Estará bien?- pregunto la morena

-Estará bien- contesto la enfermera

Pasando el estetoscopio desde su pecho a su vientre, la enfermera se concentro. Santana la observo sin entender, pero se recordó a si misma que solo hacia su trabajo. La enfermera tenía expresión neutra. Después de unos minutos sonrió y retiro el estetoscopio. Con una gran sonrisa observo a la morena, quien tenía una expresión de no entender nada –No te preocupes Santana, ambos están bien.

-¿Ambos?- pregunto la morena

-Si ambos, él bebé está bien

-¿Bebé?- pregunto la morena nuevamente, mientras se ponía más pálida de lo normal

-¡Oh Dios! Britt está embarazada…

-Así es, felicidades- sonrió la enfermera, mientras Santana sentía que todo le daba vueltas, hasta que se desmayo -¡Chicos!- grito la enfermera, Puck fue el primero en entrar y abrió los ojos como plato al ver a su amiga desmayada.

-¿Qué le paso a Santana?- pregunto el chico a la enfermera, mientras se acercaba su amiga y la colocaba sobre otra camilla con ayuda de Ryder, quien entro detrás del chico, seguido por los demás.

-Nada, solo se entero está embarazadaque Brittany.

-Solo por eso… Santana suele ser tan dramática…- se quedo pensando en las palabras de la enfermera. -¡Que!- grito.

-Que Brittany está embarazada- repitió la enfermera

-Seremos tías- dijo Kitty, sonriendo

-Que noticia más maravillosa- exclamo Marley, con una gran sonrisa

-¡Oh Dios! ¡Habrá una pequeña Santana!- exclamo Puck –Tendré una sobrina- grito emocionado después de unos minutos, causando la risa de las chicas y que los demás salieran del shock.

-¡Esto es genial!- exclamo Emily

-Sí, bueno ahora hay que despertar a Santana- dijo Mercedes

-Oh la bella durmiente acaba de despertar- exclamo Finn

Santana se incorporo lentamente de la camilla y llevo sus manos a su cabeza, tratando de controlar los movimientos de hacían en esta. Puck se acerco a ella, dándole unas palmaditas en la espalda, para luego sentarse a su lado.

Todos la veían sonriendo, a los pocos minutos, entro Luke Hemmings, presidente del consejo estudiantil, y conocido de los chicos. El chico vio a Santana con un rostro que denotaba tristeza y arrepentimiento.

-Hola López, Hey chicos- saludo el chico

-Hola- saludaron los demás.

-Oye, lamento lo que hizo Dianna. Ya hable con ella, prometo que no se acercara a ninguna de ustedes- dijo el chico

Luke vio a la rubia sobre la camilla.

-No puedo creer que ella haya ocasionado esto.

-Sí, bueno… Britt no puede recibir noticias fuertes en su estado.

-¿En su estado?- pregunto el chico

-Lo que pasa es que mis amigas acá… van a tener un hijo- dijo Puck, la morena sonrió al darse cuenta de que no había soñado y que todo era verdad. Tendría un hijo con el amor de su vida.

-¡Felicitaciones! Bueno, lo que pasa es que me entere lo que había hecho Dianna y venía a pedirles disculpa por el mal momento que les hizo pasar.

-Bien, gracias- respondió Santana -¿Pero porque te vienes a disculpar tú?

-Lo que pasa es que… yo soy el padre- dijo el chico

-¡Woow!- exclamo Puck –Bueno ¿felicitaciones? Esa mujer, hermano, uff… sí que está loca.

-Sí, lo sé, pero no puedo hacer nada, es mi hijo.

-Sí igual no es culpa del bebé- dijo la morena.

-Lo sé. Bueno espero que tú, Brittany y él bebé que viene en camino, sean felices.

-Gracias Luke.

-No hay de qué. Bueno, será mejor que me vaya. Tengo otra reunión, y luego hablar con los padres de Dianna.

-¡Los suegros! Cuidado te matan por embarazar a su niña.

-Ellos ya lo saben.

-Bueno, gracias por todo

Santana soltó un suspiro de alivio al saber la verdad, se bajo de la camilla y se acerco a su amada, quien aun dormía plácidamente. La morena levanto un poco la blusa de la chica y acaricio su vientre, para luego dejar un dulce beso en este. Sonrió y acomodo la blusa de su novia.

-Ahora entiendo porque Santana vomitaba. Seguro a ella le dio esa parte del embarazo… ya saben, la del asco- comento Puck

Quinn dirigió su mirada a Emily, al mismo tiempo que esta se giro a verla, ambas soltaron un suspiro.

-Hace dos días Britt se desmayó- dijo Emily

Santana volteo rápidamente a ver a su amiga con el ceño fruncido, y un poco enojada al saber que se lo habían ocultado.

-¿Qué? No me veas así López, que tu mujer uso sus famosos pucheros con nosotras- se defendió Emily, mientras Quinn asentía con la cabeza.

-¡Bueno, ya! Será mejor que regresen a clases- dijo la morena

-Santana tiene razón. Ya se va a cavar esta hora, alcanzamos a llegar a la siguiente- dijo Emily

-Es verdad. Bueno, nos vemos… Santana, avísanos cualquier cosa- pidió Puck

-Entendidos vayan clases- respondió la morena

Los chicos se despidieron de la morena y salieron de la enfermería dándoles espacio. Santana tomo la mano de la rubia y se recostó en el pecho de esta, escuchando los latidos de su corazón, mientras le acariciaba el vientre.

-Amor, estoy tan feliz… tú me haces tan feliz- dio un largo suspiro – ¡Dios! No puedo creer que estés embarazada. Tendremos una pequeña Brittany corriendo por la casa de tus padres y de los míos… te prometo empezar a trabajar para darte lo mejor a ti y a nuestro bebé, porque te lo mereces, se lo merecen amor ¡Estoy tan emocionada! Ya quiero tenerlo entre mis brazos mi amor… serás una gran madre, de eso estoy segura, y yo estaré contigo en cada momento, lo prometo. Nada me alejara de ti y de nuestro bebé. Hoy mismo hablare con tu padre, así el me quiera matar cuando se entere, no me importa. De ahora adelante seremos una familia, tú, nuestro bebé, y yo- se acercó y le dio un beso en los labios, regreso a su posición anterior y se quedo dormida en los brazos de su novia, en los brazos del amor de su vida.

jaja que buena forma de somatisar las dos con el bebe!!!
en serio dianna y su show barato jajaja!!!
serca estuvo san va a tener un bebe!!! a ver como van las cosas???

Jajaj a San le toco pasar por los síntomas.
Y que bien, un bebé brittana!!! Me encanta.
Como reaccionar sus pradres?

Brittany empezó a abrir lentamente los ojos. Ella aún se sentía un poco mareada, y confundida por lo ocurrido. Bajó la mirada para encontrarse con su novia dormida sobre su pecho, sus manos entrelazadas reposaban en su vientre.

La rubia recordó lo de la cafetería y la rubia. No podía creer que la morena se haya acostado con la rubia, y si fue así debió ser antes que ella. Por otra parte, la rubia tenía muy en claro que su novia la amaba y jamás haría algo que la lastimara. También sabía muy bien que la rubia estaba dispuesta a todo, con tal de separarla de su morena.

Brittany espero por mucho para poder estar con Santana y una rubia tonta no arruinaría su relación. La rubia toco levemente el hombro de su novia con su mano desocupada.

-Cariño despierta… amor levántate- susurro la rubia, pero su novia seguía dormida, soñando quizás con su bebé.

Brittany sonrió al ver lo tierna que se veía su novia, y no pudo evitar hacerle una maldad para así despertarla -¡Santana, una araña!- grito, sabiendo el miedo que la morena les tenia.
Santana enseguida abrió los ojos. De golpe, se puso de pie y en menos de un minuto se encontraba sacudiendo todo su cuerpo, intentando quitarse la “araña”. Brittany no dejaba de reír. La morena no entendía porque esta se reía, así que se detuvo mirándola fijamente y con el ceño fruncido.

-¿Qué es tan gracioso?

-Es que saltaste como una niñita, creyendo que tenías una araña

-¿Así que no tengo una araña?

-No… perdón amor- Brittany se ahogaba de lo fuerte que reía -… pero no despertabas…

-Bueno, te perdono porque te amo- respondió la morena, tomando nuevamente su lugar y entrelazando sus dedos con la rubia –Amor, lo que Dianna dijo…

-No quiero saber San. Estoy segura que fue un plan de ella para separarnos… porque tú me dijiste que yo fui la primera, y yo te cre…- Brittany fue interrumpida por los labios de su novia.

-¡Te amo Britt-Britt!- exclamo la morena

-¿Verdad que lo que Dianna dijo es mentira?- pregunto la rubia, con miedo a la respuesta.

Santana la vio a los ojos, sonriente.

-Lo es amor, Luke Hemmings me explico todo.

-¿Qué tiene que ver él?

-Bueno… lo que pasa es que la señorita si está embarazada, y al parecer se entero de mi condición y me lo quería “chantar” a mí, cuando el verdadero padre estaba cerca.

-Eso quiere decir que Dianna está de Luke.

-Así es cariño.

-¡Dios! Pobre bebé, y pobre Luke. No se merecían eso- la morena no pudo evitar reír junto a su novia -¡Hey! No te rías, es enserio. Esa chica está loca y obsesionada contigo, aunque no la juzgo….- susurro la ojiazul mordiéndose el labio inferior –No es por nada amor, pero estas como quieres. Tienes lo mejor de los dos mundos ¡pero eres solo mía!

-Solo tuya, mi amor.

La rubia sonreía viendo a su novia, pero su sonrisa se desvaneció recordando que quizás se habían saltado todas las clases.

-San ¿Qué hora es?

Santana saco su teléfono y observo la hora.

-Bueno, en 15 minutos salimos de clases.

-¡Dios! Nos saltamos las últimas horas.

-Sí pero no importa. Lo importante ahora es que descanses, estés tranquila, no te alte…-
Santana fue interrumpida por la enfermera.

-¡Hey! ¿Cómo está la futura mamá?... ¿Cómo te sientes Brittany?- pregunto la enfermera.

-¿Q-Qué?- pregunto sorprendida la rubia. Ella no entendía lo que pasaba.

-Mmm… aun no le digo

-Ups lo siento. Brittany no te desmayes, que cuando Santana se enteró se desmayo.

-Sany ¿Qué pasa?

-Mmm… ¿Cariño?

-¿Si?

-Estas embarazada ¡vamos a tener un bebé!- conto la morena, sonriente.

-¿Vamos… vamos a tener un bebé, san?

-Sí.

-¡Oh por dios!- susurro la rubia, recostándose sobre la camilla nuevamente y mirando el techo. Una lagrima rodo por su rostro –Vamos a ser mamás- comento con alegría.

-No llores, amor

-Lloro de felicidad San. Voy a tener un bebé del amor de mi vida ¡Estoy tan feliz!

-Yo igual cariño. Mi amor, esta es la mejor noticia, los chicos ya lo saben, y hoy mismo hablare con Kevin y mi padre.

-¡Dios! Mi padre te va a matar.

-No me importa es mi familia. Correré el riesgo por ustedes.

-Son tan tiernas ¡siempre supe que estarían juntas!- comento la enfermera mientras se secaba unas cuantas lágrimas.

-Gracias- agradeció la morena

-No hay de que, solo trata de que Brittany no se altere y que no reciba noticias fuertes, eso le puede afectar a ella y al bebé. Además los problemas de la presión, tienen que empezar a visitar al doctor. Santana debes llevarla a chequeo.

-Lo hare, no te preocupes.

-Okay, yo les daré un poco más de tiempo. En unos minutos salen de clases y me tope con Puck, dijo que vendrían para que se vayan todos juntos.

-Okay, ya falta poco para que salgan.

-Bueno chicas las dejo.

-Gracias- agradecía la rubia

La morena poso su mirada en su novia y la observo con el ceño fruncido, había recordado lo que Emily le había dicho.

-¿Así que no es la primera vez que te desmayas, verdad?

La ojiazul enseguida reacciono y abrió los ojos. Maldijo internamente a Emily y a Quinn, quienes seguramente fueron las chismosas.

-¿Por qué le pediste a las chicas que no me dijeran?

-Porque te preocuparías.

-Si me lo hubieras dicho, te habría llevado al médico y seguramente él nos hubiera dicho que estabas embarazada.

-Si bueno, eso ya no importa. Ya lo sabemos, y eso explica mi apetito…

-Amor, ni eso explicaría tu apetito.

-¡Oye!- la regaño -¡Claro que sí! Comía el doble y mis ganas de hacer el amor a cada momento…

-¡Hey! Eso es porque soy demasiado sexy, que no te resistes a mí.

-Si amor, lo que digas.

-Igual, creo que por eso era que yo vomitaba a cada momento y la comida me daba nauseas, al igual que algunas otras cosas.

-Sigo sin poder creerlo San ¡esto es fantástico! Seremos una familia ¡Tendremos un bebé!

-Así es amor. Le diré a mi padre, y le pediré trabajo en la empresa, porque ni a ti, ni a nuestro bebé les faltara algo mientras yo viva. Te amo Brittany Pierce.

-Yo te amo a ti Santana López.

Santana se inclino y selló su amor con un beso, a los pocos minutos fueron interrumpidas por alguien que se aclaraba la garganta. La morena se separo de su novia para encontrarse con sus amigos en la entrada de la enfermería.

Todos sonrieron y se acercaron a la pareja. Las futuras madres fueron felicitadas por sus amigos, quienes prometieron estar con ellas en cualquier momento, como siempre lo hacían y que amarían a ese bebé. Puck y Finn lloraban de felicidad.

Brittany no quería imaginar cuando naciera su bebé, esos dos no pararían de llorar, ni siquiera su novia estaba así. Ella estaba feliz y lo demostraba con su gran sonrisa, y su mirada le decía todo lo que la rubia necesitaba saber. La amaba a ella y a su bebé y en los brazos de su morena estaría a salvo. Nadie nunca podría arruinar su relación, ni siquiera sus padres.

si que britt si sabe como despertar a san jajajaj
bueno los chicos felices por la noticia,...
a ver como lo toman los padres cuando se enteren!!!???

Quiero saber que pasará. Como reaccionaran los padres?

Hola lamento la tardanza pero mi tablet se hecho a perder y no tenia de donde ver la historia pero aquí está el Capítulo, espero que les guste y nos vemos para la próxima.

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-19-

-¿Te gusta?- le pregunto la morena a la rubia

Brittany observaba todo a su alrededor. Estaban en un departamento grande, muy espacioso… tenía tres habitaciones, y cada con su baño. Un baño común, una enorme sala, comedor y una linda cocina. Todo amoblado. Era un lindo lugar, y ni que decir de la vista.

Se podía ver todo Miami desde ahí.

-¡Me encanta!- respondió la rubia, dando vueltas alrededor –Es hermoso- dijo, acercándose al gran ventanal –Tiene una hermosa vista.

La morena se acercó y la abrazo por detrás, recargando su barbilla en el hombro de la ojiazul.

-Me alegra que te haya gustado, porque esta será nuestra casa- aseguro Santana -La comprare.

-Amor..

-Brittany, quiero que tengamos nuestro propio lugar, donde estemos solo tú, yo y nuestro bebé ¿Okay?

-Está bien.

-No te preocupes, tengo dinero guardado. Además ya había pensado en comprarlo, el lugar me encanto. Debo agradecer que aun este a la venta, llamare hoy mismo para comprarlo.

Brittany se giró para poder ver a su ojiverde a la cara, enredo sus brazos alrededor del cuello de su novia y le sonrió, para luego plantar un beso en sus labios.

-Te amo- suspiro la rubia, sonriendo

-Yo te amo a ti- dijo Santana

Brittany vio la hora en su reloj.

-Sera mejor que nos vayamos, mi padre debe estar por llegar y mi madre debe estar preocupada porque no he llegado a casa aún.

-Bueno, vamos entonces. Debo hablar con Kevin.

-Mi amor ¿Estás segura?- pregunto la rubia –Tengo miedo que mi padre te haga algo.

-No te preocupes amor, todo saldrá bien. Lo prometo.

(…)

Las chicas habían llegado a la casa de Brittany. Ellas aun estaban en el auto, la morena trataba de tranquilizar a su novia, quien estaba nerviosa, tenía miedo de lo que le pudiera pasar, sobre todo de lo que su padre le haría a su novia, al amor de su vida.

-Amor, no te preocupes. Todo saldrá bien- susurro Santana.

-Tengo miedo que mi padre te haga daño- susurro Brittany.

Santana acuno el rostro de su novia y la beso.

-Todo estará bien cielo, tu padre no me hará nada.

-Pero San…

-Pero San nada ¡Okay! Tu padre es un hombre racional, sabrá comprender- dijo la morena –Aunque si intenta hacerme algo ¿podrías fingir un desmayo? Quiero conocer a mi bebé, no quiero morir, además soy muy joven aun.

-Okay cariño, si mi padre intenta tocarte siquiera una hebra de cabello, se las verá conmigo. No quiero ser madre soltera, además no creo resistir sin “Sanny Jr.”- dijo la ojiazul, haciendo reír a su novia.

-Te amo tanto Britt-Britt- susurro la morena, mientras juntaba sus labios en un dulce beso.

-Yo también te amo, Boo- ambas sonrieron.

Santana salió del auto, lo rodeo y abrió la puerta a su amada, le brindo una mano y Brittany gustosa la tomo. Al salir del auto Santana cerró la puerta luego de tomar las mochilas. Aseguró el auto y con las manos entrelazadas, caminaron hasta la entrada de la casa.

Santana abrió la puerta con las llaves de la rubia. Antes de entrar se giró, le dio una seria mirada a la rubia.

-¿Lista?

-Lista- respondió Brittany

Ambas entraron a la casa, topándose con la madre de de la rubia en la sala, la saludaron y avisaron que llevarían las mochilas a la habitación de Brittany. Susan les informo que Kevin estaba en camino para hablar de eso tan importante que la rubia le había dicho por teléfono.
Las chicas asintieron y subieron a la habitación, dejaron sus mochilas en la cama y se acostaron un momento.

Brittany tenía la cabeza recargada en el pecho de Santana, mientras esta rodeaba los hombros de la ojiazul con sus brazos. En la cabeza de Santana, había una pregunta divagando desde que se enteró del embarazo de la rubia. Tenía que preguntarle a su novia para sacarse las dudas.

-¿Amor?- pregunto la morena

-Dime cariño

-¿Cómo que no te diste cuenta antes de que estabas embarazada?- susurró –Digo, que yo sepa, cuando una mujer está embarazada, deja de menstruar ¿No tuviste un retraso?

-El problema San, es que si menstrué. Pero se me hizo un poco raro que esta vez no fue como las anteriores, esta vez me bajo muy poco…

-¿Qué?- pregunto la morena sentándose de golpe – ¿Será que algo malo le paso al bebé? Britt, debemos ir enseguida a la ginecóloga para que te revise. No quiero que nada malo le pase a mi hijo.

-Amor tranquilízate.

-¿Cómo quieres que me tranquilice Britt? A mi hijo le pudo haber pasado algo ¿Será por tus entrenamientos? Debes dejar las porristas por un tiempo, por el bien de nuestro bebé.

-Okay, lo hare. En realidad, ya lo había pensado. No pondré en riesgo la vida de nuestro hijo, no te preocupes.

-Está bien.

-Amor… ¿Qué tal si vemos en internet, si es normal la menstruación durante el embarazo?

-Está bien, pero no me fio mucho. Será mejor que lo veamos con la ginecóloga.

-Bien, mañana vamos con mi ginecóloga, la llamare en un momento, pero de todas formas, para quitarnos la preocupación revisemos en internet.

-Okay.

Santana se levantó y tomo el portátil de Brittany que estaba en el escritorio, y una vez que entraron a internet, buscaron lo que quería saber.

-“Tener sangrado vaginal y estar embarazada es posible y muy común, especialmente durante las primeras 12 semanas de embarazo, sin embargo este sangrado es distinto a la menstruación”…- leyó la rubia en voz alta.

Ambas soltaron un suspiro.

-Bueno ahora sabemos que es normal por ahora- dijo la morena

-Sí, nuestro bebé está bien- dijo Brittany, viendo a su novia con una gran sonrisa.

-Así es- dijo Santana, sin romper el contacto visual.

-¡Britt!- la pequeña Alexa interrumpió el momento

-¿Qué sucede Alex?- pregunto la rubia.

-Papá ya llego, está en su despacho.

-Gracias pequeña- agradeció la rubia.

-¡Hey, peque! ¿No me vas a dar mi beso?- pregunto la morena

-¡San!- grito, corriendo a los brazos de su cuñada.

La morena la tomo en brazos y la sentó en su pierna, Alexa le dio un beso en la mejilla y un fuerte abrazo.

-Bueno pequeña, bájate que tenemos que hablar con tú padre.

-Okay, nos vemos luego San.

-Sí peque- Alexa salió corriendo de la habitación de su hermana

Santana empezó a sentir nervios. Tendría que hablar con su suegro y decirle que embarazó a su hija, no tenía escapatoria, era su familia y haría lo que fuera por ella.

-¿Estas nerviosa?- pregunto la ojiazul.

-Un poco- respondió.

-No te preocupes amor. Mi padre no te hará nada, porque si lo hace, se las tendrá que ver conmigo.

-Bien será mejor que vayamos rápido. No hagamos esperar a tu padre.

-Okay- las chicas se tomaron de las manos y caminaron hacia el despacho de Kevin.

Al llegar Brittany toco la puerta, escuchando una “adelante” como respuesta. Las chicas se adentraron a la habitación. Kevin las observo y las invito a tomar asiento. Santana ayudando a su novia a sentarse, abriéndole la silla. Una vez que la rubia estuvo cómoda en su lugar, la morena tomo asiento.

-¿Y bien chicas? ¿De qué quieren hablar?- pregunto

Antes de que las chicas pudieran responder, Susan entro al despacho ubicándose detrás de su esposo.

-Bien- empezó Santana, respirando fuerte –Bueno, no sé cómo empezar.

-¡Habla de una vez López!

-Mmm… vera, lo que… Lo que s-sucede. Lo que sucede es que… que Britt… Britt- tartamudeaba la morena.

-Britt… Britt… ¿Qué López, mi hija qué?- pregunto Kevin desesperado.

Quería saber que le sucedía y esperaba que no fuera los que se imaginaba, porque de ser así, la morena debería cavar su propia tumba de inmediato.

-Estoy embaraza- soltó la rubia de repente. A ella también le mareaba las palabras de su novia.

-¡¿Qué estás qué?!- pregunto Kevin desconcertado, mientras su esposa sonreía en shock.

-Estoy embarazada papá, y si te atreves a hacerle algo a la madre de mi bebé ¡te las veras conmigo! Porque no te permitiré que me dejes como madre soltera.

-López ¡¿Embarazaste a mi hija?!- pregunto Kevin enojado, mientras arrugaba unos papeles que tenía en las mano, intentando calmar su enojo, Susan apretaba fuertemente los hombros de su esposo, para que no se saliera de control.

-Kevin…

-¡Señor Pierce!- corrigió Kevin.

-Bien, Sr. Pierce. Como iba diciendo… bueno, como Brittany dijo, está embarazada…

-¿Y?- cuestiono el hombre

-¡Deja de interrumpir Kevin! No ves que la pones más nerviosa.

-¡Eso es lo que quiero mujer! ¿Cómo se atrevió a embarazar a mi hija? ¡A quitarle su pureza!

-Papá lo hicimos las dos ¿okay? Yo la amo, es la madre de mi bebé. Esto iba a pasar en algún momento.

-Sí, pero aun estás muy pequeña.

-Papá, por favor…

-Sr. Pierce, yo me hare responsable de todo. Solo estoy aquí para que se entere ¿bien?

-Mira Kevin, Santana está aquí para demostrarte que ama a nuestra hija. Ella te conoce y sabe cómo eres cuando te alteras, sobre todo cuando se trata de de Brittany o Alexa, por favor cálmate y escucha… ¿Preferirías que sea cualquier otro idiota que la embarace y luego la abandone y ella quede como madre soltera? Agradece que no fuera así, y que Santana sea una muchacha centrada y consciente de sus acciones. Ambas son responsables y vienen a asumir sus responsabilidades ¿No es así chicas?- pregunto Susan a las dos jóvenes.


-Así es Susan. Kev… digo, Sr. Pierce. Quiero que sepa que no debe preocuparse por nada, yo me hare cargo de todos los gastos. Hablare con mi padre y le pediré trabajo en la empresa, además tengo un dinero guardado, bueno, es una gran cantidad… y con eso nos es suficiente por ahora. Encontré un departamento, de hecho acabo de hablar con el dueño y mañana después de ir con Brittany a la ginecóloga, iré con el señor para comprarlo. No es enorme, pero es cómodo para nosotras y el bebé, eso lo que importa. Solo le puedo asegurar que ni a su hija, ni a su nieto les hará falta algo, mientras yo esté con ellos, y le aseguro que no me pienso alejar de ellos nunca.

-¡Ya ves Kevin! Dime, elegirías mejor nuera que Santana- Susan rodeo el escritorio y se acerco a su hija –Ven acá mi pequeña, sé que serás una gran madre- susurro a su hija, mientras la abrazaba.

-Gracias mamá.

-De nada mi pequeña. Ahora, tú Santana, ven acá hija- Santana se puso de pie y camino hacia su suegra, quien la recibió con un fuerte abrazo –Sé que mi hija y mi nieto estarán bien mientras estén contigo.

-Gracias por confiar Susan.

-No te preocupes, dale tiempo al testarudo de tu suegro, es un poco enojón y orgulloso ¡ya lo conoces!- la ojiazul escuchaba la conversación de su madre con su novia.

Se giro a ver a su padre, quien aun procesaba el momento. Su pequeña ya no era más su pequeña, estaba embarazada y en menos de nueve meses seria madre y él, abuelo.
Por una parte estaba feliz, que digo por una parte. El hombre brincaba de felicidad internamente, pero no quería aceptarlo, no ante su hija, esposa y nuera.

-Papá, ¿no dirás nada?- la dulce voz de su hija lo saco de su trance.

El hombre se puso de pie y se echo a caminar, al estar frente a su hija no pudo evitar llorar. Abrazo a su pequeña y lloro en su hombro. La rubia correspondió el abrazo y acaricio la espalda de su padre, tratando de tranquilizarlo.

-Tranquilo papá, siempre seré tu bebé.

-Lo sé.

Kevin se separó de su hija y la vio a los ojos, transmitían felicidad, alegría, amor… él entendía, no podría hacerle nada a la morena, a menos que quisiera ganarse el rencor de su pequeña.

-Sr. Pierce…

-Santana, sabes que puedes decirme Kevin- dijo, con una sonrisa mientras abrazaba a su hija de lado, con los brazos rodeando su hombro.

Santana sonrió.

-Kevin, cuidare de Brittany y mi bebé, eso no lo dudes. ¿Está bien?

-Bien- aceptó –Es lo único que te pido, hazla feliz.

-Eso no es necesario que lo pidas.

-Gracias papá.

-De nada pequeña.

-Te amo papá.

-Yo a ti Britt- dijo Kevin.

Kevin se acerco a su esposa, quien lo abrazo. La morena se movió al lado de su novia abrazándola por la cintura.

-Chicas las dejamos. Santana debes hablar con tus padres, Brittany ¿llamaste a la ginecóloga para que vayan mañana?- las chicas asintieron –Bien, entonces me llevo a este llorón a la habitación. Santana si deseas puedes quedarte a dormir.

-Gracias Susan.

-Sí, ya no es necesario que les prohíba nada ¡igual, ya estas embarazada!- dijo Kevin, llorando más fuerte.

Los padres de la ojiazul salieron del lugar, dándoles privacidad a las chicas.

-Si ves. Te dije que tu padre era un hombre razonable.

-Sí, igual te morías del miedo.

-Te amo Britt-Britt.

-Y yo a ti Sany.

bueno no fue tan malo que se entere kevin de que va a ser abuelo jajaja
san ya tiene todo preparado para su famila,..
a ver como van las cosas???