Gleek Latino
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Primer15
Image hosted by servimg.com

Image hosted by servimg.com
Image hosted by servimg.com
Estreno Glee 5x17
"Opening Night" en:
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Coment10
Últimos temas
» Ayudenme a encontrarlos
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyLun Mar 14, 2022 3:20 pm por Laidy T

» Busco fanfic brittana
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyLun Feb 28, 2022 10:01 pm por lana66

» Busco fanfic
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptySáb Nov 21, 2020 2:14 pm por LaChicken

» [Resuelto]Brittana: (Adaptación) El Oscuro Juego de SATANÁS... (Gp Santana) Cap. 7 Cont. Cap. 8
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyJue Sep 17, 2020 12:07 am por gaby1604

» [Resuelto]FanFic Brittana: La Esposa del Vecino (Adaptada) Epílogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMar Sep 08, 2020 9:19 am por Isabella28

» Brittana: Destino o Accidente (GP Santana) Actualizado 17-07-2017
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyDom Sep 06, 2020 10:27 am por Isabella28

» [Resuelto]Mándame al Infierno pero Besame (adaptación) Gp Santana Cap. 18 y Epilogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyVie Sep 04, 2020 12:54 am por gaby1604

» Fic Brittana----Más aya de lo normal----(segunda parte)
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMar Ago 25, 2020 7:50 pm por atrizz1

» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyLun Ago 03, 2020 5:10 pm por marthagr81@yahoo.es

» Que pasó con Naya?
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMiér Jul 22, 2020 6:54 pm por marthagr81@yahoo.es

» [Resuelto]FanFic Brittana: Medianoche V (Adaptada) Cap 31
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyJue Jul 16, 2020 7:16 am por marthagr81@yahoo.es

» No abandonen
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMiér Jun 17, 2020 3:17 pm por Faith2303

» FanFic Brittana: " Glimpse " Epilogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyVie Abr 17, 2020 12:26 am por Faith2303

» FanFic Brittana: Pídeme lo que Quieras 4: Y Yo te lo Daré (Adaptada) Epílogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyLun Ene 20, 2020 1:47 pm por thalia danyeli

» Brittana, cafe para dos- Capitulo 16
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyDom Oct 06, 2019 8:40 am por mystic

» brittana. amor y hierro capitulo 10
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMiér Sep 25, 2019 9:29 am por mystic

» holaaa,he vuelto
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyJue Ago 08, 2019 4:33 am por monica.santander

» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMiér Mayo 08, 2019 9:25 pm por 23l1

» [Resuelto]FanFic Brittana: Comportamiento (Adaptada) Epílogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyMiér Abr 10, 2019 9:29 pm por 23l1

» [Resuelto]FanFic Brittana: Justicia V (Adaptada) Epílogo
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 EmptyLun Abr 08, 2019 8:29 pm por 23l1

Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Encues10
Sondeo

Musical Favorito Glee 5x15 Bash

Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba1011%Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba10 11% [ 4 ]
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba1019%Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba10 19% [ 7 ]
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba1011%Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba10 11% [ 4 ]
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba1024%Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba10 24% [ 9 ]
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba1027%Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba10 27% [ 10 ]
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba108%Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Topeba10 8% [ 3 ]

Votos Totales : 37

Image hosted by servimg.com
Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 Gleeka10
Los posteadores más activos de la semana
No hay usuarios

Disclaimer
Image hosted by servimg.com
·Nombre: Gleek Latino
·Creación: 13 Nov 2009
·Host: Foroactivo
·Versión: GS5
Glee
Image hosted by servimg.com
Publicidad

Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

+3
Tati.94
3:)
monica.santander
7 participantes

Página 6 de 6. Precedente  1, 2, 3, 4, 5, 6

Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por ana_bys_26 Sáb Mar 18, 2017 6:52 am

CAPITULO 39

BRITTANY


Quinn me bombardeó con mensajes de texto antes de que San incluso llegara a casa de su reunión. Aún era extraño recibir mensajes en mi nuevo teléfono. No era para nada la mariposa social que fui una vez en Florida. Pero lo que escribió mi futuro primo político, era todavía más extraño.

Tu padre es la encarnación del mal.

Solté un bufido. Ese era el eufemismo del siglo.

¿Qué ha hecho ahora? El miedo se apoderó de mí. ¿Rechel está bien?

NADIE está bien con ese imbécil aún vivo. Compró Forbidden.

Fruncí el ceño, sin estar segura de lo que quería decir.

¿Qué?

El bar donde tu novia y yo trabajamos. Él LO COMPRÓ. ES EL DUEÑO. ¡ES NUESTRO JODIDO DUEÑO!

Sacudiendo la cabeza, tecleé una respuesta rápida. Eso no tiene sentido.

¿En serio no lo sabías? ¿Qué es lo que planea hacer con nosotros? No me gusta esto.

Por supuesto que no lo sabía, idiota. Pero averiguaré lo que quiere.

Aunque ya lo sabía.

Bueno. Oh, oye. Aún no le digas a Rechel sobre esto. No quiero que na enloquezca.

Oh, pero no tuvo ningún reparo en enloquecerme. Gracias, amigo.


Luego, San entró por la puerta principal. Sus ojos se hallaban cubiertos, pero me envió una cálida sonrisa. —Ahí está mi razón para levantarme cada mañana. —Caminó hacia mí y me besó dulcemente.

Si no hubiera acabado de hablar con Quinn, no habría sabido que algo le molestaba. No me dejaba entrar en sus problemas, así que supuse que no quería que me preocupara más de lo que Quinn quería que se preocupara Rechel.

Chicos estúpidos. Dulces, cariñosos, increíbles, pero definitivamente chicas estúpidos.

—¿Cómo fue la reunión? —le pregunté directamente.

Sus cejas se alzaron. —Inesperada. Nuestro jefe vendió el bar a un tipo rico de fuera de la ciudad.

—Bueno, al menos no mintió. Pero desde luego, tampoco me dijo toda la verdad.

—Oh, ¿sí? —Oye, si se negaba a decirme lo que él sabía, no le diría lo que yo sabía. De esa manera, no teníamos que preocuparnos el uno al otro.

San asintió, sin encontrarse con mi mirada. —También ya contrató a alguien más para que maneje el lugar para él.

Mi teléfono sonó, anunciándome que tenía otro mensaje de texto. San me dejó revisar el mensaje mientras saludaba a los bebés, quienes juntos masticaban sus juguetes en el suelo.

Oh, sí .Y puso a Garrison a cargo. Ella dijo que si renuncio, despedirá a San y también a los otros chicos.
Añadió Quinn.

Mis intestinos se retorcieron y un frío recubrió mi piel. Con las manos temblorosas, escribí en respuesta:

San acaba de llegar a casa.


Tal vez eso callaría a Quinn por un tiempo, porque no podía soportar ninguna otra noticia preocupante. Necesitaba un poco de tiempo para pensar en esto.

Está bien, bueno. Élla puede decirte el resto. Contestó

Pero San no me dijo nada, lo cual me hizo saber que se encontraba tan aterrado como yo.

*****************

Llevamos a los bebés al parque a pasar el resto del día. Al igual que San, fingí que no pasaba nada o que nuestra burbujita feliz no se hallaba a punto de estallar de la forma más fuerte posible. Cuando regresamos al apartamento, le dije que tenía que ir a hacer un encargo a la tienda de comestibles porque tenía una sorpresa para cenar. Lo cual era tan cierto como lo que me dijo sobre su
reunión.

Lo dejé con los bebés, y me dirigí a mi coche, el que comprobó tan a fondo antes de comprar, asegurándose que era lo suficientemente bueno para que yo lo condujera. No comencé a llorar hasta que encendí el motor y estaba de camino a la tienda.

Para este momento, mi padre tal vez sabía todo sobre San, dónde trabajaba, qué conducía, que no tenía ningún derecho sobre Santy. Si no hacía lo que quería Bradshaw, él encontraría una forma de conseguir que a San le quitaran a Santy. Destruiría al hombre que amaba. Sabía que eso era un hecho.

Probablemente Santy sería lanzado a hogares de acogida, y el mayor temor de San se volvería realidad.

Sin embargo, sabía cómo detener al monstruo. Tan pronto como fuera a casa con élla, dándole la fachada de una perfecta familia feliz para que pudiera continuar mostrándole al público el hombre excepcional que era, mientras seguía siendo un bastardo depravado detrás de las escenas, dejaría San Santy tranquilos.

La única manera de mantenerlos juntos era darle a mi padre lo que quería. La idea hizo que mis manos temblaran y un nudo se formara en mi estómago. Pero haría lo que tenía que hacer.

Dejé de llorar para el momento en que llegué a la tienda, gracias a Dios.

En piloto automático, empujé el carrito por los pasillos, eligiendo las cosas para hacer pollo a la parmesana; el platillo favorito de San. Luego lo rodé más allá, hacia la sección de ropa de cama para echar un vistazo.

San me detalló cada una de sus visiones. Si rompería mi promesa para con élla y termino dejándolo al día siguiente para volver con mi padre, entonces, al menos podía hacer que una de sus visiones se vuelva realidad esta noche.

***********************




Tuvimos una cena tardía, esperando hasta que los bebés estuvieran dormidos antes de que comiéramos. Los colocó sobre la cama mientras yo cocinaba. La comida que preparé lo complació. Sus ojos se iluminaron tan pronto como entró en la cocina y vio su platillo favorito. Sacudiendo la cabeza, me sonrió mientras sostenía la silla para que me sentara.

—Me consientes más de lo que merezco.


Nunca podría consentirlo lo suficiente. Un nudo en mi pecho hizo que apartara la mirada. Podría pasar el resto de mi vida cocinando su cena favorita cada noche, y eso aún no sería suficiente.

Si solo tuviera el resto de mi vida para demostrarle eso.

Demasiado observador para su propio bien, tocó mi barbilla. —Oye. — Su mirada se suavizó y formó un ceño confundido mientras observaba todo mi rostro—. ¿Estás bien? Pareces más silenciosa esta noche.

Froté mi mejilla contra su mano y luego abracé sus piernas, apoyando mi barbilla sobre su abdomen para poder mirarlo. —¿Cómo puedes preguntar eso? —murmuré, pasando la mano por su firme trasero—. Estoy aquí contigo.

Mi vida es perfecta.

Se rió y se inclinó para besar mi cabeza. —Sigue tocándome así y puede que tengas suerte esta noche, mujer.

—Mmm. Suena bien. Pero qué si te toco aquí. —Corrí mis dedos hasta llegar a sentir qué tan excitada ya se había puesto.

Contuvo su aliento. —¿Comemos ahora o más tarde?

—Más tarde —dije.

Gimió, sus ojos marrones mostrando su necesidad. —Dios, te amo.

Levantándome, me llevó hacia la habitación, donde esta noche, sería tan fuerte como me fuera posible ser.

Me colocó suavemente sobre la parte superior del edredón, pero negué con la cabeza. —Lo quiero entre las sábanas.

Los ojos de San se entrecerraron con sospecha pero me complació. Sacó las mantas para revelar la sorpresa final que tenía reservada para élla.

Se tambaleó hacia atrás cuando las vio, como si fueran una serpiente esperando golpearlo en lugar de sábanas nuevas. —¿Qué demonios?

No fue fácil mantenérselas ocultas ya que estuvo en casa todo el día. Tuve que esconderlas bajo una pila de calcetines en el cesto de ropa para poder lavarlas y tenerlas lista. Luego, coloqué a los bebés con él en la sala de estar, para mantenerlo ocupado, mientras hice la cama.

—Jódeme —dijo en un suspiro.

Me levanté y mordí mi labio, sin estar segura de si se asustó de la cama, o simplemente le asombraba. Me moví nerviosamente. —Nunca mencionastes de qué color eran.

—Este... —Su voz sonó ronca antes de que se aclarara la garganta y señalara las sábanas—. Este color —dijo—. Exactamente este mismo color azul pálido. Oh por Dios. —Se giró hacia mí, luciendo aturdido—. Tú...

Por alguna razón aún me encontraba nerviosa. —No son de seda. Dijiste seda. Pero no tenían sábanas de seda genuina en la tienda, así que tuve que conformarme con unas de imitación.

San dio unos pasos hacia la cama y vaciló al extenderse para pasar sus dedos temblorosos sobre el colchón. Poniendo la mano de nuevo en su pecho, se giró hacia mí, aún mirándome asombrado. —No, está bien. Así es como se sentían. Cristo, no puedo creer que encontraste las sábanas exactas de mi... —
Negó con la cabeza, todavía atónito—. Eres la mujer más increíble de mi vida.

De repente, ya no me sentía nerviosa. En la cima del mundo, me le acerqué y tomé el dobladillo de su camiseta. —Entonces, señora Lopez — murmuré, levantando la tela por encima de sus perfectos abdominales y pecho—. Nuestros bebés están durmiendo, y tenemos esta habitación toda para nosotros. ¿Estás listo para que una visión se haga realidad?

—Oh, Dios mío. Sí. —Me cogió por la cintura y me tiró sobre la cama.

Reí mientras rebotaba. Quitando completamente su camisa y su sujetador, Santana se apresuró a quitarse, a continuación, sus pantalones. Todo el tiempo, su mirada hambrienta seguía en la mía.

Tan hambrienta de élla, levanté las caderas del colchón y me quité mi propia ropa. Se detuvo antes de colocarse sobre mí. Se arrodilló encima de mí, encarcelando mis caderas con sus piernas desnudas. Observé burlándose de mí al acaricias el clitocis frente de élla, directamente por encima de mi rostro, así que tenía una vista muy íntima del espectáculo que presentaba. Más arriba en su cuerpo, su aro de pezón brillaba por la luz del techo.

El calor y la humedad se congregaron entre mis piernas. Junté mis muslos, sin hallarme lista a estar tan excitada. Quería hacer que nuestra última noche durara el mayor tiempo posible.

Pero San, la Señora Súper Amante, tenía otras ideas. Tomó mis muslos y los separó, mirándome extendida, abierta y palpitante ante élla. —Eres la mujer más hermosa que he conocido. Por dentro y por fuera. —El amor en sus ojos era tan profundo que podía sentir que mi propio pecho se hinchaba, al igual que entre mis piernas.

Hundiendo su cara, se dio un festín. Me sorprendí por lo bien que se sentía, r incluso aunque sabía qué esperar, me sacudí bajo su boca, palpitando y necesitada. El aro de su lengua no me dio misericordia.

Apenas introdujo un dedo dentro de mí, antes de que mi vientre se contrajera y mi cuerpo explotara. Grité con rabia porque no estaba para nada preparada para que terminara, y también con pasión porque se sintió tan malditamente perfecto.

—Guau, estás sensible esta noche. —San sonrió mientras alzaba su rostro. Era una de esas sonrisas arrogantes y presuntuosas; me encantó ponerla ahí.

Me extendí, tomé su cara y lo jalé hacia mí. Este beso fue cálido y carnal, aún enlazado con más adoración de la que nunca sentí por nadie. Probándome en su lengua, gemí y me aferré a élla desesperadamente, necesitando sentirla profunda y completamente dentro de mí.


—Necesito... Necesito...

—Lo sé —me tranquilizó, bajando sus caderas hacia las mías—. Te tengo, cariño.

Su movimientos de caderas fue lenta y tan torturantemente increíble, que empecé a tener un orgasmo, antes de que incluso llegara hasta el fondo. Comprendiendo lo que yo hacía, sus ojos se abrieron con sorpresa. —Joder, Britt. —Hizo la

El movimiento mas rapido, dejándome palpitar a su alrededor.

Esperó hasta que terminé, dejó escapar un suspiro y luego alejó su rostro para mostrarme su expresión de asombro. —¿Tomaste algún afrodisíaco? Sudor corrió por mi frente mientras trataba de recuperar mi aliento. —Tú eres mi única droga —dije jadeando—. Simplemente... te quiero tanto.

—Estoy aquí. No hay prisa. Me tienes por el resto de la noche. —Moviendo sus caderas, me besó en la mejilla y susurró—: Por el resto de nuestras vidas.

Cerré los ojos y me mordí el labio. Ojalá.

Mientras seguía moviendose, flexionando sus caderas y, cada vez, golpeándome en el lugar correcto, no pasó mucho tiempo para que mi cuerpo se encendiera de nuevo con excitación. —Tendrás un tercer orgasmo, ¿cierto? —bromeó, sus ojos luminosos y orgullosos.

—Cállate. —Le di una nalgada y luego gemí debido a que el sonido erótico me hizo aún más sensible—. A nadie le gusta un fanfarrón.

Su boca bajó a mi oído. —Oh, pero creo que a ti te gusta éste... Un poco.

Entonces gimió y tembló encima de mí cuando apreté mis músculos internos alrededor de élla.

—Descarada —murmuró, moviéndose más rápido ahora.

Me gustó más cuando nuetros clitoris se rozaron, hasta el fondo, y tomé su trasero y le clavé mis uñas, tratando de mantenerla ahí. Mis músculos internos se estremecían de placer. San deslizó sus dedos por mi cabello y elevé mis pestañas para encontrarlo atento a mi rostro. Nuestros ojos se encontraron, y no
tenía que preguntarle para saber cómo se sentía esto para élla.

—Campanita —dijo, excepto que lo que escuché fue: Te amo.

Suspiré con asombro, aturdida, sabiendo que sin importar a donde la vida me lleve a partir de aquí, siempre atesoraría a este hombre increíble.

Sonriéndole, tuve que decir—: Te amo.


Se estremeció y sus ojos se desenfocaron mientras su critoris se hinchó mas. Y eso fue todo; tuve mi tercer orgasmo, echando mi cabeza hacia atrás y empujando mis senos contra sus pechos. Élla gimió, con los músculos tensándose antes de empujarse profundamente y mantenerse ahí, liberando su amor.

Después, jadeamos juntas mientras se desplomaba sobre mí como unyunque pesado y lánguido. Lo abracé fuertemente, disfrutando estos tranquilos momentos de perfección. Luego, no pude evitar preguntar—: Así que, ¿qué tan parecido lo hicimos?

Se rió, sabiendo que hablaba de su visión, y sacudió la cabeza. —Cada jodido detalle fue perfecto.

Suspiré, satisfecha. —Bien.

Se alejó para mirarme. —Todo estará bien ahora, Eva. No importa lo que suceda después. Todo estará bien. Lo sé.

Asentí, contenta por lograr mi trabajo de darle esa tranquilidad mental, porque me aseguraría que todo estuviera bien; para élla y para todos los demás que amaba.
ana_bys_26
ana_bys_26
---
---

Femenino Mensajes : 555
Fecha de inscripción : 21/11/2015
Edad : 33
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por 3:) Sáb Mar 18, 2017 9:57 am

Mmmmmm no me gusta lo que va a pasar...
Todo perfecto da para desconfía....
Y mas con el maldito bastardo serca peor!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por micky morales Sáb Mar 18, 2017 12:43 pm

No pde ser Britt va a abandonar a San para salvarla de su padre, pero entonces sera ella la presa facil del violador, creo que hoy no debi leer las actualizaciones pq en todas las historias las cosas van de la patada!!!!!! Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 2414267551 Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 4065562827 Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN - Página 6 3287304868
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por JVM Sáb Mar 18, 2017 1:06 pm

Pues parece que vienen cosas horribles después de unos días de paz....
Britt va a regresar al infierno por salvar a San y a su pequeño Santy ....
Aunque cuando lo haga y San se entere no se quedaran las cosas así :/
JVM
JVM
-
-

Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por monica.santander Sáb Mar 18, 2017 11:05 pm

Si Britt deja a San se va a equivocar feo!!!
Que embole que esos hdp.... se salgan con la suya!!!!
Saludos
monica.santander
monica.santander
-*-*-
-*-*-

Femenino Mensajes : 4378
Fecha de inscripción : 26/02/2013
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por mayre94 Sáb Mar 18, 2017 11:19 pm

Enserio que la noche fue maravillosa para ellas PERO no fue por el motivo adecuado, osea le esta endulzando la bomba que le va a soltar y el corazón destrozado que le va a dejar a San aunque sea por una razón sumamente buena :( no me gusta nada como se ven las cosas para ellas, y enserio quiero que se muera ese bastardo!! lo detesto :( en fin ... amo tu historia! estuve sufriendo porque no actualizabas.. pero fue genial!! gracias y saludos :)
mayre94
mayre94
**
**

Mensajes : 52
Fecha de inscripción : 24/02/2015
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por ana_bys_26 Mar Mar 28, 2017 11:08 am

CAPITULO 40

Brittany


Al día siguiente, esperé hasta después de que San  se fuera a su trabajo en el taller. Le di un beso en la puerta, tratando de no revelar que podría ser el último, y sin embargo, también intentaba obtener la mayor cantidad de ello como fuera posible.  

Y luego se fue.

Solté un suspiro tembloroso, obligándome a no llorar. Era el momento de desenterrar a Brittany  Perra y recuperar mi actitud. Dejando a los bebés con  Rachel , le di la excusa de que quería cortar y peinar mi cabello. Aceptó toda la historia, dispuesta a ayudarme a cuidar de mis pequeños.  

Sin embargo, Quinn no lo creyó. Agarró mi brazo en la puerta antes de irme y se acercó para susurrarme—: ¿Qué vas a hacer realmente, Britt .?  

Le di unas palmaditas en la mejilla con una sonrisa. —No te preocupes  por eso. Me voy a encargar de todo. Recuerda que todo de lo que necesitas preocuparte es de hacer locamente feliz a mi mejor amiga.  

Negó con la cabeza, con los ojos entrecerrados. —No, en serio. ¿Qué vas a hacer? ¿Tengo que ir contigo?  

Suspiré, exasperada y finalmente conseguí liberarme de su agarre. —No, no es necesario que vengas conmigo. Nada malo va a suceder.

Solo le iba a vender mi alma al diablo.
 

*******************

Me temblaban las manos cuando entré a Forbidden veinte minutos más tarde. No abriría en unas ocho horas, pero todas las luces en el interior del club vacío se hallaban encendidas y una de las melodías favoritas de mi padre sonaba a desde la máquina de discos, causándome piel de gallina.  

La incertidumbre se elevó mientras la voz de San  llenó mi cabeza junto con todo lo que diría si supiera lo que hacía: “¿En qué piensas, Campanita? Date la vuelta y sal de allí ahora mismo. Este plan no va a funcionar. Piensa en tus bebés. Necesitan a su madre. Piensa en mí. Te necesito. Iré contigo a dondequiera que vayas.”  

Pero no podía pensar en nada más que pudiera hacer para salvarlos. Así que me dirigí deliberadamente por el pasillo hasta llegar a la puerta que decía “Administrador”. Cuando empujé la puerta, sin tocar, lo primero que vi fue a   Emily,con la espalda presionada en la pared. Alejaba la cabeza de la señora
Garrison mientras ella se apoyaba en élla, alcanzando su cara.  

Resoplé. —Perra, eres patética.

Dio un salto y se giró.  Emily, inmediatamente serpenteó entre ella y la  pared. Se apresuró a mi lado, luciendo aliviada de que lo hubiera salvado.

—Bueno, bueno, bueno —murmuró la señora Garrison, mirándome—. Si no es la chica especial de papá. ¿No te enseñó a tocar?

Levanté la barbilla y crucé los brazos sobre mi pecho. —Por supuesto  que no. Me enseñó a hacer lo que yo quiera.

Desde la puerta abierta de la oficina detrás de mí, una risa familiar llegó  a mis oídos e hizo que mi corazón latiera fuerte y rápido en mi pecho. —Esa es mi chica —murmuró Bradshaw con aprobación.  

Me volví y levanté una ceja, acercándome a  Emily, sin querer. —Querías mi atención —le dije al hijo de puta—. La tienes. Aquí estoy.  

—Sí, aquí estás. —Mirándome con admiración, se movió por la oficina. Su mirada parpadeó a la señora Garrison, y luego a  Emily,—. Déjennos.  

La señora Garrison resopló con desaprobación, pero se dirigió a la salida.  

Emily, no se movió. Me miró, con preocupación. —San le advirtió a todas las camareras que no se quedaran a solas con él. Nunca me perdonaría si me voy ahora mismo.

No me encontraba segura de de cuál mujer debía estar más orgullosa: San, por cuidar de todas las chicas con que trabajaba, o , por quedarse con firmeza a mi lado.  

Le toqué el brazo. —Está bien. Es mi papá.

Los ojos de Emily,  se dilataron de horror. —B-b-bueno, si San dijo eso  después de saber quién es, definitivamente no te dejaré a solas con él. Solo... solo pretendan que no estoy aquí.  

Después de alcanzar su bolsillo, sacó un cable de auriculares de un teléfono celular y los enchufó. Luego se apoyó contra la pared, dándome tanta intimidad con Shaw como lo permitiría.  


Le sonreí, agradecida de que no fuera a dejar que me enfrentara sola a mi mayor temor. —Supongo que se va a quedar —dije.  

La señora Garrison resopló. —Bueno, si élla se queda, entonces yo me quedo.  

—Está bien. —Miré a mi padre, riéndome porque probablemente tenía la mitad de sus nefastos planes acabados—. No me importa una audiencia.

Gruñó con descontento y fue a sentarse en su escritorio, probablemente esperando que el trono de cuero impecable le diera un aire de superioridad.  

—Estoy lista para negociar —le dije, sin esperar que él tomara el control de la conversación.  

Una sonrisa espeluznante se extendió por su cara. —¿Sí? Tenía la sensación de que cambiarías de opinión.  

Asentí. —Si quieres que vuelva contigo, entonces firma la escritura de este lugar para San . Ya mismo.

Levantó una ceja. —¿Y vas a volver conmigo? ¿Así como así?

—Tengo unas cuantas condiciones.

Sus ojos se estrecharon ligeramente. —¿Como cuáles?

—Mi hija no viene conmigo. Se queda aquí con  Rachel. Y nunca tendrás  nada que ver con ninguno de ellos, ni los dejarás tener ningún contacto conmigo.  

Me mordí el interior del labio con fuerza para evitar que la barbilla me temblara y mis ojos se llenaran de lágrimas. Pero eso sería lo más difícil de dejar ir. Mi Skyle. Iba en contra de todo instinto dejar a mi bebé atrás. Pero de ninguna manera la dejaría crecer en cualquier lugar cerca de él. Y la única
manera de sacarla de su vida para siempre era sacrificarme. Esto sería lo mejor para mis dos bebés.  Rachel  y Santana , e incluso Quinn , se encargarían de ellos, y los amarían tal cómo yo quería que fueran amados. Y ninguno jamás tendría que volver a preocuparse de Bradshaw o Garrison. Serían libres de vivir el resto de sus vidas en paz.

—Hmm —murmuró, retorciendo los dedos mientras me estudiaba—. No esperaba eso. Pensé que te habías encariñado bastante con tus mocosos, pero bueno, con mucho gusto permitiré esa condición. —Sus labios se arquearon

con aire de suficiencia—. ¿Siguiente?  

—Echa a la perra que contrataste para atormentar a Quinn . Y mantenla alejada de élla.

Bradshaw lanzó una mirada divertida a la señora Garrison. —No se va a ir de buena gana, pero voy a disfrutar de echarla. ¿Algo más?  

—Sí. Asegúrate de que San  conserve a su hijo.

Mi padre levantó las cejas. —Me temo que no sé de lo que hablas.  

Bufé. —Pura mierda. Sabes todo lo que hay que saber sobre él. Y sabes  lo qué significa Santiago  para élla.

—Ah, te refieres al bebito de la puta drogadicta. Ese hijo. Sí, soy muy  consciente de que podría perder al niño si hago una llamadita telefónica a los Servicios Sociales. Es una pena, de verdad. Dudo que a cualquier madre adoptivo le importara el niño tanto como a tu chica. Aunque nunca permitiría
que tal personaje permaneciera asociado con mi hija, parece ser un buen madre.

Era la mejor madre.

Dios, perdería a San, Skyle,Santiago,Rachel maldita sea, incluso a Quinn .


Pero haría esto. Al tener la oportunidad de mantenerlos a salvo, haría esto en un segundo.  

—Entonces ayúdala a seguir siendo una buena madre.

Bradshaw se rió y se echó hacia atrás en su silla. —En serio, querida. No veo cómo podría hacer eso.

—No me importa cómo lo hagas. Falsifica un certificado de nacimiento  con su nombre. Crea registros de adopción. No me digas que no puedes hacerlo. Te conozco.

—Bueno, de acuerdo. Tienes razón. Puedo hacer algo así. —Su pecho se ensanchó, mostrándome lo orgulloso que se hallaba de sus poderes ilegales.  

Rodé los ojos. —Entonces hazlo.

—¿Y volverás?

Cuando asentí,  Emily, hizo un sonido desde su posición en la pared. Le  eché un vistazo, pero parecía preocupado con lo que hacía en su teléfono.

La señora Garrison hizo un sonido áspero. —Oh, por favor. Dime que no  es en serio lo de cumplir todas sus condiciones tontas.

Mi padre la miró. —Lo digo en serio, Patricia. Esto es exactamente por lo que vine aquí.

Garrison resopló, solo para que su cara quedara desprovista de color  cuando pareció darse cuenta de la seriedad de mi padre. —No —susurró—. Bradshaw, por favor, no hagas esto. —Corriendo a él, cayó de rodillas delante de su silla y pasó las manos por sus muslos hacia su regazo.  

Él agarró sus muñecas y apartó sus garras, chasqueando la lengua. —En serio, Patricia. No seas tan indecorosa. Además, no eres tan buena follando como para influirme en esto.

Después de que la empujara a un lado, despidiéndola abiertamente, desdobló lo que supuse era la escritura del club. Agitando su pluma, sonrió. — Ya sabes, asumí que pedirías tener el club a tu nombre. Pero supongo que tu corazón es más suave de lo que creí. Eso es... decepcionante. Sin embargo, no me importa de quién sea. Tenerte otra vez bajo mi techo es lo único que me
importa.  

Mientras firmaba la propiedad de la discoteca paraSantana , la señora Garrison se agarró el pelo y gritó—: ¡No! No puedes hacer esto. Me hiciste una promesa. Te dejé hacerme toda esa mierda. ¿Qué pasa con Quinn,?

Bradshaw suspiró y rodó los ojos como si estuviera extremadamente cansado de su teatralidad.

—Fuiste un medio para un fin, Patricia. Y no me importa una mierda tu prostituta. Mi hija quiere que te quedes lejos de él, por lo que permanecerás lejos de él.

—Pero…

—Puedes irte —interrumpió él, mirándola—. Sal.

Con un grito inhumano, Garrison caminó por la habitación hacia su bolso.

No tenía ni idea de lo que pretendía hasta que abrió la cremallera y sacó un arma.

Abrí la boca para gritar. Bradshaw abrió la boca para gritar. Emily, se  apartó de la pared, con los ojos muy abiertos por el horror. Y la señora Garrison levantó el cañón, apuntando a la cabeza de mi padre.  

—Nadie me dice qué hacer, hijo de puta.

—No —gritó él justo antes de que apretara el gatillo.

La imagen de su cabeza explotando quedó impresa en mis retinas. Era  algo que nunca sería capaz de olvidar. La señora Garrison se giró hacia mí, sus ojos enloquecidos y lívidos. Levantó el arma en mi dirección, y mi vida pasó ante mis ojos. San, Skyle, Santiago Rachel  Eran finalmente libres.  

Pero mierda, no quería morir.

Ciento ocho kilos de jugador de fútbol me abordaron desde el costado, llevándome al suelo cuando el arma se disparó. Grité y aterricé con fuerza, dándome la cabeza contra la baldosa fría con  Emily, encima de mí. Mientras élla apretaba sus brazos a mi alrededor, protegiéndome de pies a cabeza, mis
oídos resonaban, mi cabeza daba vueltas, y mi visión se volvió difusa.  

Justo mientras  Emily, era un peso muerto, una voz gritó—: ¡Patricia!  

Aunque yo seguía viendo estrellas y no podía enfocar correctamente, vi una imagen borrosa de la señora Garrison sobre el hombro deEmily, mientras se giraba hacia la puerta de la oficina.  

—¿Quinn ? —jadeó, su voz sorprendida mientras su arma lo apuntaba.

—Jesús, Patricia. ¿Qué acabas de hacer?

Élla había retrocedido de nuevo al pasillo, pero se quedó fuera de la puerta con la pared pegada a su espalda. Pude ver la esquina de su hombro desde donde me encontraba.  

—Yo... Yo... él me hizo hacerlo. Te apartaba otra vez de mí. Alejándome de este bar. He trabajado mucho para conseguir que comprara este lugar y que me dejara administrarlo. Lo dejé… lo dejé hacerme mucho. Y ahora lo único que quiere es llevárselo todo. ¿Apartarte de mí? ¿Así como así? De ninguna manera, maldita sea.

—Pero acabas de dispararle a alguien. ¿Estás loca?

—Estaba tan cansada de esperar. Te extrañé. —La barbilla de la señora  Garrison temblaba y las lágrimas llenaron sus ojos—. No sabes lo que me hizo.

Oh Dios, Quinn . Las cosas que me hizo hacer para poder llegar a ti…  

La respuesta de Quinn fue seca y poco impresionada. —¿Fueron como las cosas que me hiciste hacer contigo? Sí, discúlpame si no sient o lástima por ti.  

La boca de la señora Garrison quedó en estado de shock. —Eso... Eso no es igual. Te gustaba lo que hacíamos. —Cuando él no respondió, ella soltó un sollozo—. ¿No?  

—¿Por qué no bajas el arma, y luego vienes aquí a hablar conmigo?

—¿Por qué no contestas mi maldita pregunta? —gritó la señora Garrison  y pataleó.

Sobre mí, el peso de  Emily, parecía aumentar. Cuando sentí que algo  goteaba y mojaba mi brazo, miré su cara, pero sus ojos se hallaban cerrados.

Oh, mierda. No,  Emily,.

Volviendo la mirada hacia Quinn , se movió lo suficiente para que viera su rostro. Me miró y respondió a la señora Garrison—: No, no me gustaba.

—¡Sí! —gimió ella, pataleando un poco más y bailando como la chiflada que era—. Te gustó. Te encantó. Te encantó tanto como a mí.  

En el escritorio, Bradshaw quedó desplomado hacia atrás en su silla, con más de lo que nunca había querido ver de sus entrañas salpicadas en la pared detrás de él.  

Cerré los ojos y me estremecí, sosteniendo a  Emily, un poco más fuerte y con la esperanza de que estuviera bien. Me envolvía una sensación irreal, haciendo todo difuso y onírico, incluso los desvaríos de la señora Garrison mientras sollozaba—: Te encantaba, y me amas.  

La voz de Quinn fue firme cuando dijo—: Amo a  Rachel  .

—¡No!

No estoy segura de lo que intentaba de lograr, pero si quería inquietarla  y volverla cada vez más loca y delirante, tenía éxito. Como que me pregunté si Quinn  se encontraba en una misión suicida, tratando de hacer que nos mataran.

Pero por lo menos sería capaz de decirle a Rachel  más tarde sobre cómo nunca ignoró sus sentimientos hacia ella, ni siquiera por una loca y salvaje mujer.  

Eso, si sobrevivía lo suficiente para ver de nuevo a Rachel.

Cuando sonaron las sirenas de policía desde afuera, la señora Garrison  se asustó. —Oh, Dios. Oh, Dios. Oh, Dios. —Apuntó el arma hacia Bradshaw, pero se había ido ya hace mucho tiempo. Arrastrando los pies, con indecisión, me miró, pero creo que solo vio el cuerpo tendido de Quinn encima de mí y la acumulación de sangre debajo de nosotros—. Oh, Dios —gimió—. ¿Qué debo
hacer? .
 
—Patricia —dijo Quinn  con calma—, se acabó. Solo... baja el arma.

No lo hizo. La llevó a su cara, metió el cañón en su boca y apretó el gatillo

*********************

Quinn  se apresuró y se arrodilló junto a nosotros. —¿Britt .? ¿Estás bien?

—Te dije que no me siguieras —me quejé.

—Cierto. Como si te escuchara. —Con un bufido, negó con la cabeza,  solo para aspirar una bocanada de aire y volver su atención a  Emily,—. ¿Está...?

—No, está viva —Acaricié el pelo de mi salvadora—. Puedo sentir su  aliento en mi cuello.

—Oh, gracias a Dios. —Agarrando el hombro de Quinn ,Emily, apretó los  dientes mientras rodaba la masa de ladrillos de encima—. Maldita sea, es puro músculo, ¿eh? Jodidos jugadoras de fútbol.

Aspiré el aire tan pronto como Emily, estuvo fuera de mí. Guau, se sentía bien respirar de nuevo. Cuando Quinn colocó suavemente a nuestra amiga de espaldas a mi lado, me senté y me arrastré hacia ellos.  

—Hay una mucha sangre. —Cuando bajé la mirada, me di cuenta de que me hallaba manchada por todo el cuerpo, así como el lado izquierdo de  Emily,.

—Sí. —Quinn  tragó saliva con tristeza, y levantó el brazo de Emily, para encontrar la fuente de la herida—. Aquí. Le dio en el brazo.

Me saqué la camisa que llevaba hasta quedar en una camisola manchada de sangre. Cuando hice un poco de presión al brazo de  Emily, contuvo el aliento.  

Oscuras pestañas largas revolotearon antes de que negara con la cabeza y abriera los ojos. Se centró en mí, y luego volvió la cabeza ligeramente para ver a Quinn  antes de volverse de nuevo a mí.

—¿Qué pasó?

—Te negaste a dejarme sola en la oficina con mi padre, dulce y noble idiota —le dije.

—Y te dispararon por eso —añadió Quinn.

—¿En serio? —Emily, frunció el ceño mientras trataba de incorporarse—.  No me siento disparado. No duele nada. —Cuando hice una seña a la sangrienta herida en el brazo que presionaba con mi camisa, tomó aire, y su rostro de inmediato palideció—. Bien, ahora lo siento.  

Su voz se hizo más débil, y se tambaleó.

Quinn cogió su hombro, estabilizándolo. —Tal vez deberías recostarte  antes de desmayarte de nuevo.

Horror inundó la expresión de Emily,. —¿Me desmayé? Oh, hombre. No  vas a decirle a Puck, ¿verdad? Nunca me dejaría olvidar eso.

Contuve una carcajada sorprendida, a pesar de que el sonido salió al final en una extraña especie de sollozo. —Sí, creo que soy capaz de omitir eso y centrarme más en la parte donde te metiste en frente de una bala para salvar mi vida.  

 Emily,asintió, sin entender mi broma. —Gracias. Lamento desmayarme encima de ti. Qué mortificante. —Sus ojos eran tan sinceros; Le disparé una mirada incrédula aQuinn . Pero en serio, ¿este chico se disculpaba después de arriesgar su propia vida para salvar la mía?  

—Creo que va a encontrar una manera de perdonarte, hombre. —Los labios de Quinn  se apretaron mientras trataba de ocultar su propia sonrisa.  

—Bien. — Emily, se sentó de nuevo, solo para detectar los cuerpos de mi padre y la señora Garrison en la habitación—. Oh —dijo, con los ojos muy abiertos mientras iba de blanco a verde—. ¿Están...?


—Sí. —Me mordí el labio, negándome a mirarlos. Mi estómago protestó y me tapé la boca—. Salgamos de esta habitación.  

—Buena idea.

Ayudamos a Emily, a ponerse de pie. Todavía parecía mareado, pero  podía estar parado sin ayuda.

Tan pronto como despejamos la oficina, un grito desde el frente del club nos dijo que la policía había llegado. Quinn  respondió, diciéndoles que íbamos saliendo.

No sé cuánto tiempo paso después de eso, pero las tres nos aferramos juntos cuando nos preguntaron lo que pasó y un paramédico miró el brazo de  Emily,. la pobre se encontraba aún más avergonzado de desmayarse cuando se dio cuenta de que la bala apenas había rozado su bíceps. Era tan pequeña la herida que los asistentes médicos decidieron vendar el corte allí en el bar sin
siquiera llevarlo al hospital.  

Herida superficial o no, yo todavía pensaba que era muy valiente, y se lo dije mientras le daba un beso de agradecimiento en la mejilla. Luego me pegué a él, sintiéndome segura con él a mi lado.
Cuando se sonrojó tímidamente y bajó la cara, el oficial asintió en su dirección. —¿Y qué hacía aquí, señora Fils?

No sabía que era posible que la cara de  Emily, se pusiera más roja, pero
lo hizo.

Mirando rápidamente a Quinn , balbuceó—: La señora Garrison me llamó temprano antes de mi turno. Dijo que necesitaba que movieran algunas cajas.

Pero… eso no es lo que quería realmente. —Después de aclararse la garganta, continuó—: CuandoBrittany a apareció para hablar con el… eh… señor  Pierce , me quedé porque no confío en él. Mientras estaba con el teléfono, fingiendo escuchar música, le envié un mensaje a su novia, San , diciéndole lo que sucedía.

—¿Le enviaste un mensaje a San? —Me senté más derecha y miré el club, buscándola.

Emily, asintió, haciendo una mueca, como si me pidiera disculpas por su engaño. —No tenía ni idea de que la señora Garrison sacaría un arma, pero mi intuición me dijo que algo no iba bien. Así que seguí mis instintos.

—Gracias a Dios —dijo el oficial. No hizo más preguntas después de eso, y se alejó para tener más información de la oficina.

Miré a los dos hombres que me rodeaban, agradecida de que estuvieran ahí. Si no fuera por su presencia, seguramente estaría hecha un lio, irracional e histérica.

Resoplé, necesitando algún alivio cómico. —Sabes, esta es la segunda vez que me disparan en un año. Esta mierda está pasando de moda.

Quinn, resopló y agitó su cabeza. —Sí, bueno, es la segunda vez que he
tenido que quitarle la pistola a la persona que te disparó.

Resoplé en respuesta, no impresionada por sus pequeños problemas, pero levanté mi dedo al ocurrírseme una idea. —Ah, por cierto, eres un pésimo Negociador.

Echó sus manos al aire, dándome una mirada incrédula. —¿Qué querías que le dijera, que también la amo?

—Sí —repliqué—. La mujer tenía una pistola, tonto. Podría haberte disparado por decirle que amabas a  Rachel . Oh, mierda. ¿Has llamado a Rachel ?

—Sí. —Rodó los ojos—. Se está volviendo loca porque está cuidando a los niños y no puede venir con nosotros.

—Pobrecita. —Palmeé su brazo, y le observé un segundo más cuando sentí sus músculos temblar con mi toque. Seguía bastante nervioso por todo.

Pero, bueno, no era el único—. ¿Estás bien?

Me miró con sus cejas elevadas. —Claro. ¿Por qué? Nadie me disparó.

Qué mentiroso.

—Bueno… —Me moví a través del pasillo a la oficina—. Tu violadora está  muerta al fin. —Eso tenía que significar algo.

Agitó la cabeza como si no quisiera pensar en lo que acababa de pasar,  pero luego me miró. —El tuyo también.

Tragué saliva. —Sí. —Oh, Dios. Yo tampoco quería seguir por ahí—.  Supongo que eso significa que estás pasando más o menos por lo mismo que yo, ¿eh?

—Básicamente. —Tomó mi mano y apretó los dedos en compañerismo, haciéndome saber que todo estaría bien.  

 Emily,miró entre nosotros, con los ojos muy abiertos. —Probablemente debería fingir que nunca he oído nada de eso, ¿eh?  Creí que estaría horrorizada de que otra persona supiera mi profundo, sucio y oscuro secreto, pero la verdad, ya no importaba. San me sacó de todos los horrores que me atormentaban, y ahora podía encontrar una manera de sobrellevarlo.

Pero pensar en San me hizo ansiarle más. Si  Emily, le envío un mensaje de texto de emergencia, ¿por qué diablos no había venido? Necesitaba su…

Y entonces, como si mis antojos lo hubieran arrastrado ahí, lo escuché gritar mi nombre. A la entrada del club, era rodeado por un grupo de policías que le sujetaban, diciéndole que no podía entrar. Cuando me vio, gritó mi nombre otra vez y trató de abrirse paso con más fuerza.

Salté del taburete y me apresuré hacia élla. —Está bien. Está aquí por mí.
Un policía me miró y finalmente lo soltó.

Casi me rompió una costilla al abrazarme tan fuerte contra élla.

—Oh, nena. Mierda. ¿Estás bien? Me he estado volviendo loco desde que  leí ese mensaje. —Mirando la sangre, dijo—: ¿Por qué estas sangrando? ¿Estás herida? ¿Te tocó? ¿Qué pasó?

—Estoy bien. No es mi sangre. Estoy bien. —La abracé, definitivamente sintiéndome mejor porque al fin me encontraba donde más quería estar en el mundo. En sus brazos.

Y ahora que lo tenía donde más le necesitaba, todas las emociones que había estado guardando se escaparon. Apretándolo más fuerte, enterré la cara en su cuello, respirando su relajante olor a coco, y lloré.

—Ya está —murmuró, acariciando mi cabeza y meciéndome—. Déjalo salir, cariño. Solo déjalo salir.

Élla no tenía ni idea de por qué lloraba, o lo que acababa de sobrevivir.

Solo sabía que tenía que dejar salir todo el miedo, el horror, el shock y la angustia que se apoderaba de mi sistema.

No tenía idea de cuánto tiempo me abrazó hasta que se me secaron las lágrimas, pero estaba mareada de lo fuerte que le había cogido, y me dolía la cabeza. Di un paso atrás para mirarle, y me besó la mejilla, y secó mi cara con sus palmas.

—¿Por qué tardaste tanto en llegar? —dije.

Agitó la cabeza, pareciendo aturdida. —Una trabajadora social apareció  en el taller para hablar conmigo.

Oh, mierda. Y yo que salía del shock de lo que acababa de pasar en la  oficina. Esto me metió el miedo en el cuerpo nuevamente. —¿Santiago  ? —susurré, agarrando su brazo.

Gracias a Dios que se encontraba con Rechel. Ningún oficial sabría dónde buscarlo; no serían capaces de llevárselo. A lo mejor Santana  y yo podríamos meternos a escondidas donde Quinn , y huir juntos con los bebés, a algún lugar donde ningún trabajador social nunca nos encontrara.

Santana  asintió, pero no parecía preocupado. —Antes de morir, Eleine escribió en un pañuelo que quería darme su tutela. El estado está teniendo eso en cuenta junto con la declaración de uno de los policías que me vio cuidándolo. Lo van a poner bajo evaluación, pero cree que tengo una gran
oportunidad de ser capaz de adoptarlo.

—Oh Dios mío —chillé y me lancé para otro abrazo—. Eso es increíble.

—Lo sé. —Comenzó a acariciar mi pelo—. El mensaje deFils llegó  mientras hablaba con ella. No lo leí hasta que se fue. Y luego… maldición, Campanita. Nunca estuve tan asustado en mi vida.

—Apretando mi cara en sus manos, me contempló antes de gruñir—: ¿Cómo pudiste ser tan estúpida?

Pestañeé, sin esperar esa pregunta. —¿Qué?

—¿Quieres saber por qué no te dije que él compró este sitio? Porque sabía qué harías algo así. De ninguna manera. Si te hubieras marchado, te habría seguido y no habría parado de buscarte. Me hiciste una promesa. Dijiste que nunca te marcharías. Y juro por Dios, que mantendrás esa promesa.

Asentí, y mis labios temblaron. —De acuerdo.

Se extrañó por mi rápida aceptación. —¿De acuerdo?

—De acuerdo, mantendré mi promesa. Estaré contigo para siempre.

Sus hombros se relajaron. —Sí, lo harás —murmuró antes de besarme y  apretar su frente contra la mía—. Dios, te amo tanto.

Vaya, pensé que ya había terminado de llorar, pero más lágrimas  empezaron a caer. —Yo te amo más,

—Eso no es posible. —Se estremeció y me siguió abrazando. Cuando  escuché un sorbido, miré hacia arriba y vi lo rojo que tenía los ojos.

—Oh, bebé. Está bien. —Pasé los dedos por su cara y besé sus mejillas—. Ya pasó todo.

Agitó la cabeza y cerró sus ojos con fuerza. —No me gustó casi perderte.

—Bueno, ya no tienes que volver a preocuparte de que intente llevarme  otra vez.

Santana sopló antes de acercarse. —Por cierto, ¿dónde está el bastardo? ¿Ya  lo detuvieron?

—Um… —No tenía ni idea de cómo empezar a contarle lo ocurrido.

—¿De quién es este sitio? —preguntó uno de los detectives, irrumpiendo  en mis pensamientos.

—¡Oh! San —Apunté a San . Sí, tenía mucho más que contarle de lo que pensé  en un principio—. Justo aquí

San  me miró. —¿Qué?

—Hay una escritura con tu nombre en la oficina.

Agitó la cabeza, aún confuso. —No entiendo.

Sí, había mucho más que contarle. Y había un montón de problemas  nuevos para mí. Pero al menos ahora, sabía que tenía a gente que me quería y que estaban dispuestos a ayudar a recuperarme. Para mí, significaba que lo tenía todo.
ana_bys_26
ana_bys_26
---
---

Femenino Mensajes : 555
Fecha de inscripción : 21/11/2015
Edad : 33
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por JVM Mar Mar 28, 2017 1:36 pm

Pffff por fin ya no mas horror con los violadores de Q y Britt ....
Ahora todo se va acomodar con la tutela de Santy y ahora tiene nueva dueña en bar!!!!
JVM
JVM
-
-

Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por 3:) Mar Mar 28, 2017 8:17 pm

al fin los bastardos pasaron a mejor vida,.
bueno ya no ahi ataduras para ningunas,.. al igual que quinn!!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por micky morales Mar Mar 28, 2017 8:51 pm

Magnifico, algo bueno hizo esa loca al matar a ese anciano engendro, ahora a arreglar las cosas!!!!
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por Tati.94 Jue Mar 30, 2017 1:37 pm

Bueno los violadores se buscaron ese final. Y que bien que San se quedo con el club, se lo merece ahora podra mantener a su familia.
Tati.94
Tati.94
*******
*******

Femenino Mensajes : 442
Fecha de inscripción : 08/12/2016
Edad : 29
Club Brittana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por monica.santander Jue Mar 30, 2017 5:02 pm

Hola!!!! Jajaajj que buen final para esos dos cerdos!!!!!
Saludos
monica.santander
monica.santander
-*-*-
-*-*-

Femenino Mensajes : 4378
Fecha de inscripción : 26/02/2013
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por ana_bys_26 Mar Abr 04, 2017 5:25 am

CAPITULO 41

EPILOGO Santana

Tres meses más tarde…



Algunos días me sentía agradecido con Brittany por el acuerdo que hizo con su padre. Conforme me volví el nuevo propietaria de Forbidden, solo tuve un trabajo en lugar de dos. Limpiar todo el desastre después del tiroteo tomó tanto tiempo, que tuve que renunciar a mi puesto en el taller, lo que me parecía bien porque ahora que las cosas empezaban a acomodarse, pude estar más con mi familia.

También otras cosas eran mejores. Campanita y yo encontramos un apartamento más grande en un barrio mejor, más cerca Rachel y Quinn . Y no solo un apartamento más grande, sino uno de tres habitaciones, por lo que tanto Santiago como Skyle tenían su propio espacio y sus propias cunas, lejos de nuestra habitación. Podríamos ser tan ruidosas como quisiéramos.

Aunque creo que los niños extrañaban dormir juntos porque a veces Campanita y yo no podíamos calmarlos en la noche hasta que se acurrucaban uno junto al otro.

También contratamos a un abogado para ayudarnos a adoptar a Santiago . El estado nos permitió mantenerlo como madres adoptivos después de pasar por un par de clases. Pero aún no era nuestro para siempre.

No obstante, la mayor parte del tiempo, yo rechinaba los dientes de frustración por todas las molestias que Brittany me hizo pasar al hacer ese acuerdo con su padre. Ahora tenía muchas más responsabilidades; era una locura.

Sentado en mi oficina —que fue completamente rediseñada y trasladada a otra habitación en los pocos meses después del asesinato-suicidio— tratando de solucionar los horarios y arreglar un orden incorrecto, además de llenar todas estos jodidos formularios jurídicos que ni siquiera sabía que existían hasta que
me convertí en propietario de un club, hubo un golpe en mi puerta que me hizo levantar la cabeza.

Era jueves, así que tenía que apresurarme porque todavía no tenía un nuevo barman para reemplazarme en la noche de damas. Ya había perdido a los dos que contraté, ya que ninguno funcionó. Por lo tanto, quedaba atrapado trabajando en el piso todos los jueves.

El chico que hallé merodeando en mi puerta parecía joven, con cabello oscuro ondulado y los ojos brillantes de un color verde hierba.

—¿Estoy buscando a... Santana ? —dijo como si estuviera seguro de que entendió mal mi nombre.

Asentí. —Ese soy yo. ¿Cómo puedo ayudarte?

Cambiando su peso de un pie a otro y pareciendo nervioso, extendió la mano cuando me puse de pie y me le acerqué.

—Señor, soy Asher Hart. Y yo…

—¿Nos hemos visto antes? —Fruncí el ceño a medida que me acercaba más. Se veía tan condenadamente familiar.

Vaciló, incluso más inquieto mientras parpadeaba. —No. No creo.

—Hmm. —Lo estudié con más concentración mientras él continuaba.

—Bien, mis amigos y yo acabamos de comenzar una banda. Somos una de tipo metal pesado con un toque rústico y nos llamamos Non-Castrato. Creo que encajaríamos con el público de Forbbiden.

Arqueé una ceja, haciendo que mi arete en la ceja tirara un poco. —Oh, lo harían, ¿verdad?

Nunca antes tuvimos una banda en vivo, no tenía ni siquiera un discjockey o un área apropiada para música. Pero la semilla que plantó ya hacía girar mi cabeza con una repentina ráfaga de ideas.

—Sí —continuó, luciendo emocionado—. Ustedes han estado volviéndose muy populares últimamente. Imagínate lo que haría tener algunos conciertos de grupos locales. —Luego agregó—: Podemos tocar gratis.

Sonreí y negué con la cabeza. Este chico era muy buen vendedor. Pero aun así... —Lo siento, Hart, pero ni siquiera he considerado traer bandas. En estos momentos, todavía estoy tratando de encontrar otro barman.

—Podría ser barman —dijo amablemente, con los ojos llenos de esperanza. Luego se encogió de hombros, y sus labios se iluminaron con una sonrisa triste—. Quiero decir, si no van a pagarnos por tocar, tendría que ganar dinero de alguna manera. En las noches que no estemos cantando, puedo mezclar bebidas.

Su entusiasmo me animó, pero me senté de nuevo en mi silla de jefa y crucé las manos debajo de la barbilla mientras lo estudiaba. —No debes tener una mujer.

La pregunta pareció atraparlo desprevenido. —Uh, no. ¿Por qué?

—Acabas de prometerme todas tus noches. Eso no va a dejar mucho tiempo para nada más.

Una lenta sonrisa se extendió por su rostro. —¿Estás diciendo que estoy contratado?

—Por supuesto que estás contratado —respondió una nueva voz desde la puerta. Brittany entró en la habitación, viéndose tan increíble, que maldición, casi resplandecía. Se dirigió a Hart, tomó sus dos manos y le sonrió—. Creo que la idea es maravillosa. Podríamos hacer mucho si ponemos un escenario y un
sistema de sonido. Y con tu entusiasmo, ya sé exactamente a quién poner a cargo de eso. Bienvenido a Forbidden.

Cuando fue a abrazarlo, me enojé y me puse de pie. No me molestaba que ella estuviera irrumpiendo aquí y tomando decisiones. Aparte de cuidar a nuestros hijos, hacía también de mi socia en el manejo del negocio. De hecho, por lo general se encargaba de llenar todos los formularios jurídicos que yo odiaba, aunque de todos modos, intentaba aprender a lidiar con ellos.

No, me molestaba porque Asher Hart parecía demasiado entusiasta en devolverle el abrazo. Sus ojos parecían vidriosos cuando ella se apartó y le sonrió.

Tomando su mano, la acerqué a mi costado y puse una mano con decoro alrededor de su cintura. —Ella está comprometida, por cierto.

Hart nos echó un vistazo. —Como que lo imaginé cuando vi tu nombre tatuado en ella.

—¿Qué? —Sorprendido por su declaración, me giré hacia Campanita y agarré su mentón antes de volver su rostro hasta que pude ver detrás de su oreja. Cuando la tinta negra y reciente me devolvió la mirada, deletreando mi nombre, contuve el aliento—. Mierda, realmente lo hiciste.

Ella me guiñó un ojo. —No quería que alguna de tus visiones no se hiciera realidad.

Sonreí ampliamente y la besé por mucho tiempo.

Recordando que teníamos compañía, levanté la vista para encontrar a Hart observándonos con diversión.

—Así que, ¿cuándo puedo empezar? — preguntó.

—Esta noche. —Empezaba a decirle que cada nuevo barman tenía que debutar en una noche de damas, cuando de repente me di cuenta dónde lo había visto. El tatuaje detrás de la oreja de Brittany trajo la visión de nuevo a mi mente. Hart era el disc-jockey que iba a tocar en mi boda.

Al darme cuenta de que tendría un papel más importante en mi futuro de lo que me di cuenta al principio, le sonreí. —Sí, creo que vas a encajar muy bien. Usa una camiseta negra ajustada y vaqueros, y preséntate antes de las seis cuando abrimos.

Una sonrisa se extendió en el rostro de Hart. —Lo haré, jefa. Después de que desapareció de mi oficina, la mujer con los brazos envueltos alrededor de mi cintura me miró con adoración absoluta. —Supongo que no estás enojado conmigo por contratarlo de inmediato. Solo tuve un buen presentimiento con él.

Me agaché para frotar mi nariz a lo largo de la suya. —No te preocupes.

Tuve la misma sensación. Definitivamente tenemos un nuevo chico Forbidden.

—Y definitivamente es lo suficientemente sexy como para encajar — respondió, sus ojos azules únicos brillando con picardía.

Entrecerré los míos. —Oh, piensas que era sexy, ¿eh? ¿Por eso estabas tan ansiosa por abrazarlo?

Se echó a reír, soltando ese sonido que más me gustaba en el mundo. — No, lo abracé así te pondrías toda celosa y cavernícola y me alejarías de él.

—Eres una mujer retorcida —murmuré—. ¿Esa es la única razón por la que viniste hoy? ¿Para qué te demuestre lo loca que estoy por ti? Pensé que te quedarías en casa con los bebés.

—Lo estaba, pero... —Abrió de un tirón su bolso y sacó un sobre de aspecto estatal—. Esto llegó en el correo, así que dejé a los niños con Rachel y vine directamente aquí.

Mi estómago se revolvió con inquietud. Últimamente habíamos tenido demasiadas cartas del estado. Después de la muerte de su padre, su testamento estipulaba que Brittany obtuviera una buena parte de su herencia, que se vio obligada a compartir con su madre recién enviudada. Pero su madre estuvo luchando por más dinero, por lo que contrató a un abogado, entonces tuvimos que poner nuestro nuevo abogado a trabajar más para contraatacar.

Brittany dijo que no quería nada del dinero de su padre, pero pensé que él se lo debía, y más. Por Skyle, Santiago y nuestra futura Chloe, decidió mantenerlo.

—Es de los servicios sociales —dijo, sorprendiéndome.

No pensé que tendríamos noticias sobre Santiago tan rápido. Una nueva preocupación royó mis entrañas cuando metió el dedo en la ranura y abrió la carta. Apretando los brazos alrededor de ella, contuve la respiración mientras ella revisaba rápidamente la única página.


Sus ojos se levantaron a los míos, serios y adustos. Casi empecé a sollozar en ese momento. No nos habían concedido la adopción, ¿cierto? Íbamos a perderlo.

Entonces las lágrimas irritaron sus ojos. —Dijeron que sí. Oh, Dios mío. Dijeron que sí. Podemos adoptarlo.

—¿Qué?

—De verdad podemos quedarnos con él. —Abrazándome, riendo y llorando al mismo tiempo, Brittany empezó a saltar y chillar de emoción.

—Oh, mierda. —En una fracción de segundo, lloraba con ella, por lo que las lágrimas de alegría corrían por mi rostro.

Levantándola del piso, giré a mi mujer en un círculo y sollocé en su cuello. Mientras nos abrazábamos con fuerza, me pregunté por qué este momento no había estado en ninguna de mis visiones. No sabía si alguna vez sentí esta felicidad y este alivio.

Pero supongo que Madam LeFrey no quería que yo viera demasiado. La maldita bruja me había hecho sufrir. Lo que me hizo apreciar más el momento.

—Te amo tanto —le dije Brittany , creando un camino de besos de su cuello a su boca.

Encontró mis labios y me devolvió el beso. —Yo también te amo.

—Sin embargo, antes de que lo adoptemos tienes que hacerme un favor.

—Cualquier cosa —prometió, solamente para hacer una pausa y darme una mirada recelosa—. Espera. ¿Qué tengo que hacer?

Le guiñé un ojo. —Cásate conmigo.
ana_bys_26
ana_bys_26
---
---

Femenino Mensajes : 555
Fecha de inscripción : 21/11/2015
Edad : 33
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por ana_bys_26 Mar Abr 04, 2017 5:33 am

CAPITULO 42


EPILOGO BRITTANY




Ocho años después de eso…


—¿Segura que estás lista para esto?

Le sonreí a mi esposa mientras giraba en el largo sendero de nuestro camino de entrada. Los árboles en el patio delantero proyectaban una sombra agradable antes de revelar nuestra casa estilo rancho de cuatro habitaciones.

—¿Por qué estás tan preocupado? No veo porqué esta vez es diferente a la última.

Me lanzó una mirada seca. —Los gemelos no existían la última vez que viniste del hospital después de dar a luz —dijo los gemelos como si en realidad quisiera decir engendro maligno del demonio.

Me reí y sacudí la cabeza. —Estoy segura de que no destruyeron tanto la casa.

San resopló. — Rachel probablemente está tratando de bajarlos del techo en este momento. Te lo dije, dejar que ella y Quinn cuidaran de nuestros niños mientras estuviste en el hospital fue una mala idea. Quién sabe qué clase de hábitos ya le han enseñado sus locos gemelos a nuestros angelitos.

—Mi Dios. Estás volviéndote dramática en tu vejez, Santana Pero tenía razón.

Los niños de dos años de Quinn podían ser todo un terror. Iban a toda velocidad durante todo el día, curiosos por todo y siempre dispuestos a jugar.

Escuchamos la conmoción desde el interior tan pronto como San apagó el motor y abrió la puerta del auto.
Mirándome con los dientes apretados, murmuró—: ¿Todavía crees que estoy exagerando?

Rodé los ojos. —Estoy segura que Rachel pagará por cualquier cosa que Rompieron.

—¡Qué lindo! —Se bajó del auto y abrió la puerta de atrás para sacar con cuidado a nuestro hijo de dos días de vida, dormido. Haciendo una pausa para mirarlo, su rostro se suavizó de inmediato—. Maldita sea, es perfecto.

Me apresuré alrededor del auto para pasar mis dedos por su espalda. — Porque se parece a su mamá.

San me guiñó un ojo mientras liberaba el portabebés. —Ten cuidado, Campanita. O estaré lista para intentar a hacer el bebé número cinco.

Gemí. —Creo que cuatro es suficiente.

—Oh, vamos. Todavía ni siquiera tenemos un equipo de baloncesto. —

Cuando le lancé una mirada fulminante, se echó a reír.

Aún irritaba a San el nunca haber tenido una visión del bebé número cuatro. Después de que nació Chloe, estaba tan segura de que era todos los niños que tendríamos. Pero entonces fui a una rebision con el ginecologo y por un error me esiminaros con lo obulos de santana quedé embarazada otra vez, y la verdad, me emocionó que estuviera tan impactado. Los primeros años de nuestro matrimonio fueron sumamente injustos. Élla sabía cada cosa importante que iba a pasar. Supo que Chloe iba a ser una niña, supo que esta sería nuestra casa desde el momento en que hicimos un recorrido y entramos en el patio trasero.

Pero ahora se encontraba tan desorientado sobre el futuro como yo. Y se sentía bien finalmente saber tanto como élla.

La puerta de la casa se abrió antes de que llegáramos a ella.

—¡Cargo al bebé! ¡Cargo al bebé! —chilló un pequeño borrón que sabía que era Gracen, Cosa Uno del terrible duo Quinn —. Bebé.

San agarró el hijo de Rachel por la cintura con un brazo, mientras siguió llevando al nuevo bebé en su portabebés con la otra.

—Ni hablar, amigo —le dijo a Gracen.

Cuando el niño comenzó a patalear, San lo empujó hacia su madre cuando ella también se apareció, con una gran sonrisa. —Toma. Controla a tu hijo.

—Oh, ¿él salió? — Rachel alzó el chico muy alto en sus brazos y lo hizo chillar de risa.
—Cargo bebé —exigió Gracen.

Rachel se echó a reír y le besó la nariz.

—Yo primero, enano. Santiago fue el primero en abordarnos cuando pasamos a través de la puerta.

—¡Mamá! Estás en casa. Nadie nos dijo que ya estabas en casa. ¿Estás bien?

—Estoy estupenda. —Lo abracé a mi cintura y revolví sus rizos oscuros— . Contenta de estar en casa de nuevo con ustedes. ¿Cómo están las cosas... aquí?

Guau, había algo no identificable y azul goteando de nuestro techo.

Me miró y sonrió, sus ojos oscuros cálidos con adoración. —Íbamos a hacerte una cena especial.

—Y a limpiar —añadió Rachel con tristeza.

Eché un vistazo alrededor de la habitación del frente, solo para que mi mandíbula cayera. Detrás de mí, murmuró—: Oh, Dios mío. ¿Acaso una bomba explotó aquí?

—Nop. Solo tres niños de dos años y dos niños de ocho —respondió

—Yo no hice nada de este desastre —anunció Skyle mientras se dirigía hacia San para echar un vistazo a su nuevo hermanito—. Oh, Dios mío — murmuró, con los ojos abiertos de asombro—, es tan pequeño.

San revolvió su cabello y la jaló contra su costado. —Créeme, eras mucho más pequeña cuando naciste.

—De ninguna manera. —Sus ojos se encontraban muy abiertos y se inclinó para mirar más de cerca.

Quinn apareció en la puerta desde el pasillo de la cocina, con los brazos ocupados con Chloe. Mi hija menor era una chica consentida de tía y se pegaba la pobre Quinn cada vez que se encontraba cerca.

Al verme, sonrió y señaló. — Mamá. —Pero parecía satisfecha con quedarse donde se encontraba.

—¿Dónde está Cosa Dos? —preguntó San buscando con desconfianza a la señorita Isabella, la segunda gemela. Cuando se hallaba cerca, hacía que Gracen pareciera tranquilo.

—Dormida —respondió Quinn Entonces señaló con la barbilla hacia el portabebés—. ¿Qué tienes ahí,San ?

San me miró y sonrió, y me sentí tan llena de amor, rodeada de mis personas favoritas en la tierra.

Levantando a su hijo, San anunció—: Atención todo el mundo, conozcan a Patrick Mason López .


Fin

ana_bys_26
ana_bys_26
---
---

Femenino Mensajes : 555
Fecha de inscripción : 21/11/2015
Edad : 33
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por 3:) Mar Abr 04, 2017 9:51 am

Definitivamente que si se le cumplió la visión a san... O mas de lo que uva a ser jajaja
Es un batallón de niños jajaja
Me gtsto la historia!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por JVM Mar Abr 04, 2017 6:29 pm

Creo que tuvieron mucho más de lo que la visión les dejo ver pero se lo merecen !
Y pobres faberry con esos hijos jaajaja
Gracias por la historia!!
JVM
JVM
-
-

Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por micky morales Miér Abr 05, 2017 1:06 am

Gracias, magnifica historia con un gran final!!!!!
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por monica.santander Miér Abr 05, 2017 2:17 am

jajaaj 4??? Hermoso final!!!!
Gracias por la historia????
Saludos
monica.santander
monica.santander
-*-*-
-*-*-

Femenino Mensajes : 4378
Fecha de inscripción : 26/02/2013
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Activo Re: Brittana Be my hero capitulo 41 y 42 FIN

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Página 6 de 6. Precedente  1, 2, 3, 4, 5, 6

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.