[Resuelto]FanFic BRITTANA "Play With Me" EPÍLOGO

Hola      ……….buenas      noches a todas/os……….después de concluir       con un ciclo de publicaciones de la primera historia que adapté a mi pareja favorita       de Glee (Brittana) (hecho que aún me arranca tanta       nostalgia), hoy pongo a       consideración de ustedes la presente historia (gracias         a todas por sus opiniones valiosas a la hora de escoger esta historia para adaptar).


Asimismo, quiero           preguntarles ¿les gustaría que actualizara 2 veces por semana?, o quizás ¿3? (la historia consta de 28 emocionantes capítulos más un epílogo), dejo la decisión en Uds. Mi primera intención era sólo dejar hoy la sinopsis de la historia, pero luego me dije que no podía ser tan malvada de dejar esperando demasiado por el prólogo……..así que hoy también les pongo el prólogo.


*Próxima actualización: día sábado


Sin más que decir por el momento……….no las aburro más, disfruten del capítulo



Me encantará recibir sus críticas, comentarios, sugerencias, etc.………….así que a escribir.


NOTA DE ACLARACIÓN PERMANENTE E IMPORTANTE.- El presente trabajo es una adaptación a mi pareja favorita de Glee (Brittana)……..La historia original obviamente no me pertenece …………esta obra se titula “Play With Me” de Kristen Proby, la traducción de dicha obra fue realizada por la fabulosa comunidad virtual FALLEN ANGELS (gracias a todos quienes hacen posible que el resto de las personas podamos disfrutar de tantas maravillosas obras) (la obra original traducida la podrán encontrar en distintos blogs)


Aclaro que si bien en la obra, la historia el lugar principal que se menciona es Seattle-EE.UU, tomando en cuenta las características y el contexto en el que se desarrolla Glee así como mi manía personal de preferir Nueva York…….decidí que el lugar donde se desarrollará la historia sea Nueva York y mantendré el nombre de la historia original, es decir, “Play With Me”. Sobre el resto de los personajes, considerando las características de algunos de la obra original y en correlación con los de Glee puse a quienes se ajustaban a estas personalidades, aunque en algunos casos me deje llevar por la emoción del momento y puse a quienes creí conveniente       jejejeje.


Algo más……en la historia original el deporte al que se alude es fútbol americano, sin embargo pensé que lo ideal en el caso de nuestra pareja preferida el tenis se ajustaba mejor


Ahora……….solo queda esperar sus opiniones.


Una de las primeras canciones que se me vino a la mente para identificar e inaugurar de cierta manera la historia fue………..sugiero que la escuchen mientras leen.












Santana López es una jugadora de tenis profesional con éxito y aparentemente, tiene todo en la vida. Ella no está acostumbrada a escuchar un no, y ciertamente no aceptara un no como respuesta. Entonces, cuando lanza todos sus encantos en la sensual amiga de su hermana……Britt, una muchacha de espíritu libre, que no apenas rechaza sus avanzos, más la recibe con una hostilidad abierta, despierta su curiosidad y deseo. Ella está determinada a mostrarle que no es la atleta arrogante que ella piensa, y la llevara a su cama.



Brittany Susan Pierce no está impresionada con Santana López, su contrato millonario, auto de lujo, o su imagen pública arrogante. Ella no tiene tiempo para una relación, y si aprendió alguna cosa en la vida, es que amar significa perder, entonces ella guarda su corazón ferozmente. Mas no puede negar la atracción irresistible que siente por la sexy y latina atleta, y cuando Santana comienza a romper sus defensas y agarrar su corazón, ¿ella será capaz de admitir sus sentimientos por ella, o será que su pasado perturbado hará que pierda a la primera persona que ha amado de verdad?



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Srta. Pierce,



Gracias por su pedido de que Santana López y el resto del equipo visiten el hospital. Nuestra organización recibe millones de pedidos iguales cada año.



Lamentablemente, la Srta. López es incapaz de cumplirlos todos. Ella no está disponible en este momento.



Atentamente,

Mercedes Jones.

Relaciones Públicas, Organización de Tenis de Nueva York.




Bien.


Esta es la quinta carta de rechazo de la indescriptible Santana López, en los últimos dos años. Mis niños van a estar decepcionados de nuevo.


Quito el email de la pantalla de mi teléfono y lo lanzo en mi cartera, salgo con mi auto y continuo para el Red Mill Burgers, mi lugar favorito para conseguir una gran y suculenta hamburguesa con papas fritas.


Estoy en el final de la línea, pensando en el reciente email, de una serie de largos pedidos rechazados por el equipo de tenis profesional. Soy enfermera infantil en el Hospital de Nueva York, y mis adolescentes adorarían más que cualquier cosa, conocer a una de sus heroínas deportistas. Cuando comencé esta operación, imaginé que ella aceptaría fácilmente. Todo lo que le estoy pidiendo es un par de horas, ¡no tiene que pasar la noche por el amor de Dios!


Miro a mi derecha, y sentada en medio del pequeño restaurant no esta otra persona, si no mi amiga de mi época universitaria, Rachel, y su hermana, Santana Cretina López.


¡Infeliz!


Amo a Rachel. Ella, Kitty y yo éramos buenas amigas en la facultad, por eso educadamente me acerco a decirle hola. Solo me gustaría no tener que hablar con la tonta arrogante de su hermana en el proceso.


Hago mi pedido, y camino hasta mi amiga.


— ¿Rachel? —la llamo, con mi mano en su hombro.


— ¡Britt! —Ella inmediatamente salta y me agarra en un caluroso abrazo—. ¡Oh, Dios mío, no te veo en años! ¿Cómo estás?


Miro nerviosamente a Santana.


—Estoy muy bien, gracias. Es bueno verte. —Ella luce genial como siempre, pero su mirada está un poco triste. Y me pregunto qué está pasando…


—Santana, esta es Brittany Pierce, una amiga de la facultad. Britt esta es mi hermana, Santana.


Santana se levanta, su cuerpo torneado y sexy se endereza con elegancia, ofreciendo su mano.


Joder, ¿tengo que aceptarla? Buscando bien en el fondo, en las raíces de las costumbres dentro de mí, aprieto su mano educadamente.


—Sé quién es.


Ella apenas balancea la cabeza y se sienta en su lugar nuevamente.


— ¿Qué has hecho? —me pregunta Rachel.


—Soy la enfermera jefe en el Hospital Infantil de Nueva York en una unidad de pacientes con cáncer. —Sonrío para ella, consciente de los ojos de Santana sobre mí, corriendo de arriba para abajo por mi cuerpo, sobre mi blusa holgada ajustada con un cinturón, y las calzas negras con mis botas de cowboy rojas. Ella me pone nerviosa.


— ¡Eso es increíble! Me alegro por ti, chica. ¿Todavía cantas? —pregunta con una sonrisa.


—Uh, no. —Balanceo la cabeza y miro para abajo en la mesa—. No desde la Universidad.


— ¿Cantas? —Santana pregunta, con las cejas levantadas.


—Ella tiene una voz fantástica — responde Rachel orgullosamente. Rachel siempre fue tan dulce y siempre me apoyo.


—Gracias, pero sabes cómo es la vida —respondo encogiendo los hombros—. Nos ocupamos en otras cosas, y acabamos dejando algunas de lado.


Y los mejores amigos nos dejan atrás, para comenzar su propia banda.


Santana y Rachel intercambian una mirada, y de repente ella me lanza una pregunta abruptamente.


— ¿Estas casada?


Suelto una carcajada. Lejos de eso.


—Claro que no.


— ¿Me das tu teléfono? —Santana pregunta sin rodeos. Idiota arrogante. Apuesto a que las mujeres caen encima de ella en todos los lugares que va.


Estrecho mis ojos, incapaz de esconder mi desprecio por esta mujer evidentemente atractiva.


—Claro que no.


La boca de Santana cae abierta, y entonces ella sonríe, balanceando la cabeza.


— ¿Disculpa?


—Creo que escuchaste bien —respondo enseguida, coloco la mano en el hombro de Rachel y fuerzo una sonrisa para mi amiga—. Fue genial verte. Te cuidas, chica.


—Tú también, Britt.


Cuando me volteo para irme, la escucho murmurar.


— ¿Qué diablos fue eso?


Idiota.


Tomo la bolsa de papel marrón con mi hamburguesa y las papas fritas para el viaje, y salgo del restaurant para regresar a casa y aprovechar mi única noche de descanso de esta semana. Rezo para que no me llamen del trabajo.

Hola      ……..buenas noches       a todas/os……aún me cuesta       creer que la primera historia que adapté haya concluido, la nostalgia       es terrible       jejejeje……..veo que esta historia ha causado revuelo, lo admito: eso me deja muy       satisfecha agradecida a todas uds. por seguir la presente historia que apenas empieza….sobre la cantidad de actualizaciones en la semana decidí que (redoble de tambores) serán 3 veces…….y continuando con una vieja costumbre adquirida en el anterior fic: al final de cada capítulo pondré unos breves adelantos del siguiente. ¿Qué les parece? ¿Lo hago o no?      



*Para quienes no hayan leído la historia anterior, esta es la dirección:


http://www.gleeklatino.com/t20759p300-resueltofanfic-brittana-5ta-avenida-neoyorkina-2da-parte-primero-viene-el-amorluego-viene-el-matrimonio-epilogo



*Próxima actualización: día lunes o martes a más tardar.



Sin más que decir por el momento……….no las aburro más, disfruten del capítulo



Me encantará recibir sus críticas, comentarios, sugerencias, etc.………….así que a escribir.



Y la canción del día es……….







NOTA DE ACLARACIÓN PERMANENTE E IMPORTANTE.- El presente trabajo es una adaptación a mi pareja favorita de Glee (Brittana)……..La historia original obviamente no me pertenece …………esta obra se titula “Play With Me” de Kristen Proby, la traducción de dicha obra fue realizada por la fabulosa comunidad virtual FALLEN ANGELS (gracias a todos quienes hacen posible que el resto de las personas podamos disfrutar de tantas maravillosas obras) (la obra original traducida la podrán encontrar en distintos blogs)


Aclaro que si bien en la obra, la historia el lugar principal que se menciona es Seattle-EE.UU, tomando en cuenta las características y el contexto en el que se desarrolla Glee así como mi manía personal de preferir Nueva York…….decidí que el lugar donde se desarrollará la historia sea Nueva York y mantendré el nombre de la historia original, es decir, “Play With Me”. Sobre el resto de los personajes, considerando las características de algunos de la obra original y en correlación con los de Glee puse a quienes se ajustaban a estas personalidades, aunque en algunos casos me deje llevar por la emoción del momento y puse a quienes creí conveniente       jejejeje.



Algo más……en la historia original el deporte al que se alude es fútbol americano, sin embargo pensé que lo ideal en el caso de nuestra pareja preferida el tenis se ajustaba mejor



Ahora……….solo queda esperar sus opiniones.

Capítulo 1

- Por Quinn y Rachel. —Artie Abrams levanta la copa de champagne en el aire y mantiene el brazo alrededor de su bella esposa, Kitty. Todos siguen el gesto, brindando por la feliz pareja.


—Que el amor continúe creciendo. No deseamos nada especial, apenas toda la felicidad del mundo.


— ¡Por Quinn y Rachel! —repiten los invitados y saborean sus bebidas por la celebración. Quinn Fabray, reconocida abogada, rubia y muy atractiva, dobla a su deslumbrante novia castaña en sus brazos y la besa profundamente enfrente de todos, en medio de silbidos y aplausos, Santana López, la hermana de Rachel, grita:


— ¡Busquen un cuarto!


Tomo un trago de mi champagne rosado, y miro alrededor de la extravagante sala olímpica del Hotel Waldorf Astoria. Por centésima vez, me pregunto que estoy haciendo aquí.


Quede sorprendida al recibir la invitación para la fiesta de compromiso de Rachel B. Berry.


Rachel, Kitty y yo éramos inseparables en la universidad, pero terminamos perdiendo el contacto, y fue genial el reencuentro hace algunos meses, pero ciertamente no estaba esperando una invitación para venir a mezclarme con su familia y amigos íntimos.


Estoy en una sala con Artie Abrams, por el amor de Dios. El famoso director de cine.


El salón está decorado en azul y blanco, con simples arreglos de flores blancas sobre las mesas, manteles y servilletas en blanco y azul, algunos otros toques en ese color. Es increíblemente elegante.


Es completamente Rachel.


Es el comienzo de una bella noche de verano, y no está muy oscuro todavía, tenemos una increíble vista de Central Park, y el cielo comienza a cambiar de color entre el rosa y el naranja, reflejándose en el agua. Las puertas de vidrio están abiertas, para que los invitados entren y salgan a voluntad, disfrutando de la bella vista del final del verano desde el balcón, o entren a bailar.


—Britt, estoy tan feliz que vinieras. —Kitty golpea mi hombro y me toma en un gran abrazo—. Te extrañe, chica.


—Yo también —respondo abrazándola, enseguida, me alejo para admirar a la linda mujer frente a mí—. Estás fantástica. Matrimonio y maternidad combinan contigo, amiga.


Y es verdad. Los ojos color miel de Kitty brillan con felicidad y alegría, su cabello rubio oscuro esta peinado para atrás en ondas, y está usando un magnífico vestido negro sin mangas.


—Gracias. Amo tu vestido. Tu estilo no cambió nada —ella responde con una sonrisa. Miro para mi vestido color plata, sin tirantes, con la falda fluida y sandalias de tiras plateadas.


—No, muchas cosas cambiaron —respondo encogiendo los hombros.


—Excepto tu cabello, como de costumbre. —Kitty ríe, señalando mi cabello rubio, con algunas mechas rojizas, y rio con ella.


—Mi cabello siempre cambia, es difícil domesticar esta manía. Los niños se divierten, y bien, sabes… una chica rockera, siempre es rockera.


—Sabes —sonríe Kitty presuntuosamente— todavía tengo las fotos que hicimos con tu guitarra, y nada más.


—Oh Dios. —Rio con el recuerdo de bromear en el estudio de Kitty, en la época de la facultad años atrás—. Puedes quemarlas.


—No, estoy pensando que deberíamos programar una nueva sesión. No tenías esto en aquella época. —Ella señala la parte interna de mi brazo y sigo su mirada para mi tatuaje.


—Tal vez algún día.


—Entonces… —ella comienza pero es interrumpida por la llegada de su esposo—. Oh, Britt, este es mi esposo, Artie. Artie me gustaría que conocieras a una vieja amiga mía y de Rachel, Brittany Pierce.


—Hola, Brittany, es un placer conocerte. —Él me ofrece su mano derecha y siento mi rostro calentarse un poco antes de colocar mi mano en la suya para saludarlo. Pero en vez de eso, la levanta hasta sus labios y besa mis dedos.


—Hum, es bueno conocerte también, Artie.


Él me ofrece su sonrisa de director de cine, que utiliza para aparecer en las portadas de cada revista en el país, y después se disculpa, cuando Caleb, otro de los parientes de Rachel lo llama.


—Hum, ¿Kitty?


— ¿Sí? —responde con un suspiro de satisfacción.


—Estas casada con Artie Abrams.


Ella ríe y balancea la cabeza.


—Lo estoy.


— ¿Cómo diablos pasó eso?


—Es una larga historia. Te voy a llenar de vino una noche y te lo cuento.


—Tenemos una cita.


— ¡Allí estas! —Rachel exclama y envuelve a cada una en sus brazos, en un abrazo de grupo—. ¡Britt, estoy tan feliz que vinieras!


—No me lo perdería por nada. Sin embargo, me quede sorprendida al recibir la invitación.


—Eres mi amiga. Yo te quería aquí. —Rachel sonríe y observa el salón, hasta donde se encuentra su prometida.


—Ella es muy bonita, Rachel. Y está completamente enamorada de ti —murmuro y sigo su mirada.


—Sí, lo está. Y es recíproco.


—Estoy feliz por ti. —Saboreo una vez más el delicioso champagne.


—Gracias. —Su sonrisa es grande, feliz y verdadera, y estoy feliz de que ella encontrara su otra mitad. Ellas quedan bien juntas.


— ¿Cuándo es que vamos a comer? —Santana pregunta desde una mesa no muy lejana de la nuestra.


Hice mi mejor esfuerzo para ignorar a Santana López, también conocida como la arrogante, líder de la organización de tenis de Nueva York. Conseguí ignorar a aquella altanera toda la noche.


Conseguí quedarme fuera de su camino y evite cualquier conversación con ella, pero sentí sus ojos en mí toda la noche, lo que no entiendo. No soy, ciertamente, su tipo, y no es secreto que no estoy interesada en ella.


—El buffet está listo para comenzar, señorita Berry. —Una castaña, camina hasta Rachel con una gran sonrisa—. La cena puede ser servida en el momento que quieras.


—Perfecto, gracias, Marley. Asegúrate que tu asistente y tú también coman.


—Oh, lo haremos. —Marley ríe y se va, consultando su iPad.


—Dios, amo a esa mujer —Rachel exhala y apoya sus manos en su vestido de chiffon rojo sin tirantes.


—Ella es increíble —concuerda Kitty.


— ¿Quién es? —pregunto.


—Ella organiza fiestas —responde Rachel—. La conocí cuando organicé el baby shower de Kitty algunos meses atrás. También está organizando mi boda. Es un genio.


—Es mi maldita heroína — refunfuña Santana, y sigue a Marley—. Me estoy muriendo de hambre.


— ¡Siempre te estás muriendo de hambre! —Rachel exclama y da una carcajada.




Cómo terminé en la mesa de Santana, es un misterio para mí. La verdad, es que estoy sentada con todos los increíblemente bonitos parientes de Rachel, una mujer dulce llamada Maribel, y la cuñada de Rachel, Stacy, que es adorable y está muy embarazada. Como si fuese a tener al bebe en cualquier momento.


Todo el mundo está riendo, bromeando unos con los otros, y todos ellos parecen increíbles. ¿Por qué diablos no traje un acompañante? Lo más probable, es porque la última vez que fui a una cita, un tsunami azoto a Japón.


—Entonces, Brittany, ¿qué haces? —Puck, el amigo de Rachel, me pregunta.


—Soy la enfermera jefe del Hospital Infantil de Nueva York.


— ¿En qué departamento? —pregunta y corta el bistec.


—Trabajo con adolescentes en el piso de pacientes con cáncer. —Doy una mordida a una batata asada y tomo un trago de vino. Voy a necesitar más de eso.


— ¿Hace cuánto tiempo haces eso? —pregunta Puck y veo a Santana hacer una mueca. ¿Cuál es su maldito problema?


—Soy enfermera hace cerca de seis años, en ese puesto hace dos.


Puck llena mi copa de vino y me ofrece una sonrisa amable y yo me veo devolviéndosela.


—Eres joven para tener un trabajo tan importante —comenta Santana amablemente pero yo ruedo los ojos y la ignoro, ganando una mirada brillante de ella.


—Entonces, si Stacy entra en trabajo de parto, puedes salvar el día —sugiere Caleb y todos ríen.


—No, no soy una enfermera obstetra. Pero puedo llamar una ambulancia —respondo.


Stacy se frota la panza y sonríe.


—Está bien, gente, todavía tenemos aproximadamente un mes para el gran evento.


Isaac se inclina y besa la mejilla de su esposa, y susurra algo en su oído, haciéndola sonreír.


Todas estas personas son absolutamente maravillosas. Rachel y los otros miembros de su familia tienen una genética impresionante. Puck me sirve otra copa de vino, e inmediatamente tomo un trago, empujando mi plato a un lado. Estoy muy nerviosa para comer.


En medio de una conversación con Stacy, me doy cuenta que estoy por comenzar a sentir una leve puntada de dolor de cabeza, entonces me disculpo, y me levanto para ir hasta el baño para presionar un paño frio en mi frente y retocar el gloss.


—Britt, espera.


Mierda.


Trato de entrar rápidamente en el baño femenino, pero ella apenas me sigue y tranca la puerta.


— ¿Qué diablos estás haciendo? —le pregunto con una ceja levantada.


— ¿No te caigo muy bien, no? —Se inclina un poco apoyándose por un instante en la pared para después cruzar sus brazos sobre el pecho. Se quitó la chaqueta que llevaba, mostrando que llevaba un atuendo precioso de diseñador, que luce increíblemente sexy en ella, y pantalones negros. Las mangas están dobladas, mostrando sus brazos. Su cabello negro está demasiado largo y desordenado, y sus ojos marrones están corriendo por encima y por abajo de mi cuerpo, antes de concentrarse en mi rostro.


—No te conozco lo suficiente para gustar de ti o no.


—Estas mintiendo —dice tranquilamente.


—Eso no importa. —Encojo los hombros y regreso al lavamanos y me aplico el gloss, sin que los ojos de Santana me dejen —. ¿Qué? —pregunto y me volteo.


— ¿Por qué no me dices que hice para molestarte, para que pueda ir de frente y disculparme?


Comienzo a reír, haciéndole fruncir el ceño, lo que me hace reír todavía más.


—Realmente eres una idiota arrogante, ¿no?


—No, yo no lo soy. —Ella está muy seria, sin encontrar la situación ni un poco divertida.


—Sí, lo eres. No quiero que te disculpes conmigo.


Ella encoje los hombros como si eso no alterase nada en su determinación.


—No soy una cretina, Britt. ¿Qué hice para ofenderte tanto?


Paro de reír y aclaro mi garganta, y entonces me quedo un momento realmente mirándola. Parece sincera. Pero nunca voy a conseguir olvidar la mirada decepcionada de mis pacientes.


—Eso no importa —repito.


Santana se aleja de la puerta y camina en mi dirección, acorralándome en el baño, con las manos descansando en el granito, una de cada lado de mi cuerpo. No me toca, pero baja su nariz hasta apenas doce centímetros de la mía.


—A mí sí me importa —murmura.


— ¿Por qué? —Mi corazón simplemente se acelera a su velocidad máxima y, oh, Dios, ella huele tan bien. Estoy culpando por la confusión en mi cabeza al exceso de vino que tome sin comer casi nada.


—Necesito que me digas que hice para molestarte tanto, para que pueda disculparme. —Se aleja apenas unos centímetros, y sus ojos viajan por mi cuerpo. Puedo sentir el calor de su mirada, y siento mi piel caliente. Sus ojos viajan de regreso a mi rostro y me enfrenta con sus ojos marrones calientes.


—Estás maravillosa en ese vestido, con tu cabello rubio y todo desordenado alrededor de tu lindo rostro.


—Hum… — ¿Cuál fue la pregunta?


—Dime —insiste.


Sonríe y susurra.


— ¿Qué hice para molestarte, Britt?


—Llevo enviados repetidos mensajes a tu departamento de relaciones públicas en los últimos dos años, pidiéndote que vayas con tus compañeras a visitar a los niños. A cada pedido recibo una respuesta negando la visita, diciendo que no estás interesada.


Ella arruga la frente y balancea ligeramente la cabeza.


—Nunca recibí nada de Relaciones Públicas sobre ir al departamento infantil del hospital.


—Cierto —respondo con sarcasmo y trato de alejarme para no sentir su olor terriblemente irresistible. Está haciendo cosas conmigo, como querer lamer su cuello.


—No estoy mintiendo. Ellos pasan un montón de pedidos para mí. Ese nunca fue pasado.


Oh.


Bien, que mierda.


— ¿Por qué simplemente no le pediste a Rachel hablar conmigo sobre eso? ¿O le pediste mi número?


—Cierto. —Inhalo su perfume—. Primero: ella es mi amiga y no voy a usarla para cosas como esas y, segundo: ¿por qué te llamaría? Ni siquiera te conozco.


Santana sonríe suavemente y levanta la mano hasta mi rostro, sosteniendo mi barbilla por encima de su dedo índice, haciéndome mirar sus ojos. Ella es tan hermosa (pero, ¿Qué estoy pensando?), no puedo negarlo y más ahora que está cerca de mí. Sus ojos marrones brillan observándome mientras lamo mis labios, y cuando muerdo el labio inferior, ella inhala bruscamente y observa mis ojos azules consumiéndose por el deseo y la pasión.


Su mano sostiene levemente mi barbilla, mientras la otra acaricia mi cabello, y yo estoy perdida en aquellos ojos. No me puedo mover. Debería empujarla. No lo hago. No dejo que personas extrañas me toquen en baños públicos, mientras su familia entera está afuera conversando, riendo y comiendo.


Pero no puedo desviar la mirada. Acerca su rostro hasta el mío, pasando sus labios levemente sobre los míos, siempre muy gentil, y me sonríe de aquella manera arrogante con la que es conocida, y entonces profundiza el beso, enterrando sus manos en mi cabello, sosteniendo mi rostro para que pueda mover su boca contra la mía.


¿Qué me sucede?………ella es buena en esa cosa de besar. Sus labios son suaves, firmes, y de alguna manera hace que todo tenga sentido para mí. Sus labios se mueven con precisión sobre los míos. Suelto un gemido, y mis brazos envuelven su cintura, y Santana gime contra mí, y de repente el beso se transforma en algo más que deseo, en una necesidad.


Su lengua invade mi boca, girando y bailando contra la mía. Me acerco más, mis brazos alrededor de su cuello y tuerzo mis dedos en su cabello suave y es glorioso, prácticamente subo en ella, tratando de acercarme.


Finalmente, ella sostiene mi trasero en sus manos y me levanta. Mis piernas alrededor de su cintura, y antes de que me dé cuenta, mi cuerpo está apoyado contra la puerta, Santana me sostiene firmemente en el lugar, y todavía está besándome y volviéndome loca.


Puta mierda, esta mujer sabe besar.


—Dios, eres dulce —murmura y da varios besos en mi barbilla hasta mi oreja, llegando a mi cuello—. Podemos tener un montón de diversión juntas, bebé.


¿Bebé? Y así es como si alguien me hubiese lanzado un balde de agua fría, mis sentidos regresan. Estoy a punto de follar en un baño público. ¡Ew! Con Santana López.


¡No!


— ¡Para! —exijo con mi voz firme.



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Breves adelantos – Capítulo 2


Wow, es tan bonita. Paso la lengua por mis labios, todavía saboreándola en mí.


—Si te haces a un lado, voy a dejarte a solas. —De repente odio esa frialdad educada con la que nos estamos tratando. Me gustaría que me tomara en sus brazos de nuevo, me bese, y mi odio por ella ahora, no es tan grande.

*****

— ¿Morena, la tienes? —pregunta Caleb.


—Sí, la tengo —Santana confirma.


— ¿A quién tienes? —pregunto.


—A ti chica, borracha. Vamos. —Se voltea para llevarme a la salida y yo comienzo a seguirla, pero por alguna razón mis pies no funcionan muy bien.


—Hum, ¿Santana?


— ¿Si?


—Perdí mis pies.

*******

— ¿Qué tipo de auto es ese? —pregunto.


—Es un Shelby.


— ¿Shelby es tu novia? —pregunto mortificada. ¡Rayos! ¡Estuve con una mujer que tiene novia!


—No, este auto es un Mustang Shelby, Brittany.


—Ah. Entonces, ¿quién es tu novia?


—No tengo novia.

********

Me pregunto que será necesario hacer para hacerla reír más, y confiar en mí.


Porque tengo que verla de nuevo.


Britt llora bajito y se lanza a mis brazos, apoyando su rostro en mi pecho, y levanta un brazo alrededor de mi cintura, sosteniéndome firme. Acaricio su cabello en su mejilla y beso su frente antes de quedarme dormida.


Claro que sí………yo voy a verla de nuevo.