Sabor a ti (ADAPTADA)

aqui hay algo raro, espero para la actualizacion!

aparece cesar,.....
y sobre todo TOMAS,... NIÑO,.... Y DE 2 AÑOS???????????????????
espero que no valla para el lado que creo y san se aya equivocado con el nene!!

Sabes?

Pienso & creo que ese niño es de ellas, talvez solo por hacer la maldad dijeron que el niño había muerto & lo conserva ese tipo -.- porque Britt nunca le hizo caso a él.

3/4

Maribel recibe a Santana y a Brittany, saludando a ambas con abrazos y besos.

-S: ¿Y mi hija? ¿Cómo se portó?

-Maribel: Mi nieta es un angelito, ¡no sé porque la desacreditan tanto!

-S: Te quedas con ella por un mes y después ¡te apuesto que cambias tu manera de pensar!

-B: ¿Cómo crees? ¡Un mes sin mi princesa! ¡Eso si que no!

De pronto escuchan las risas de Alexa y a Marcos, quien intentaba imitar el sonido de un caballo. Al entrar dentro del estudio, observan como la pequeña Alexa estaba montada sobre la espalda de su abuelo, mientras que él se encontraba de rodillas, dando vueltas por el cuarto.

-B: Me acuerdo como me encantaba jugar así.

Marco y la pequeña voltean la mirada hacia la puerta. Alexa sonríe y extiende los brazos hacia ellos.

-Marcos: Si pero ya como que mi cuerpo no es el mismo de antes. –Dice. Brittany se acerca y toma entre sus brazos a su hija, besando tiernamente su mejilla. –Ahora te toca a ti.

-B: Si. –Dice sonriendo y besa nuevamente a su niña. Santana se acerca.

-S: Gracias, y ¡perdón si esta señorita te dio mucha lata!

-Marcos: ¡Para nada, sabes que me encanta su compañía! –Dice. Santana sonríe, tomando a su hija de los brazos de Brittany.

-S: Bueno los dejo solos para que hablen.

-Marcos: ¿Hablar de qué? –Pregunta confundido.

-.-

Santana y Maribel se encontraban en la terraza, platicando mientras que Santana le daba de comer a su hija.

Ella le había contado a su mama sobre Cesar y el niño.

-Maribel: No puedo creer que ese tipo haya sido capaz de obligar a Brittany a casarse con él sabiendo que tenía mujeres regadas esperando también hijos de él.

-S: Lo sé… Y mira que ese tipo hueco nunca me cayó bien pero ¡tampoco sabía que era así de zafado!

-Maribel: ¿Qué harán con su matrimonio?

-S: Brittany dice que Cesar le dijo que su abogado se pondría en contacto con ella. –Dice despejando la mirada algo triste.

-Maribel: ¡Mi amor, no te preocupes por eso! Brittany te ama no creo que esto cambie nada entre ustedes dos.

-S: Lo sé mama.

-Maribel: ¿Entonces? ¿A qué se debe esa carita?

Santana no contesta por unos segundos, luego voltea la mirada hacia su madre con los ojos llorosos.

-Maribel: ¿Que sucede mi amor? ¿Por qué lloras?

-S: Mama… No sé qué me pasa, pero desde ayer… ¡desde ayer estoy mal! –Le dice. Maribel se le acerca y la abraza.

-Maribel: ¿Pero qué pasó? ¿Por qué dices eso?

-S: Vas a pensar que estoy loca pero… Vi a un niño mama, me recordaba tanto a Brittany...

-Maribel: Mi reina no te atormentes así…

-S: ¡Lo sé! ¡Pero no puedo evitarlo! Me da tanto coraje… ¡Tanta desesperación pensar como perdimos a nuestros bebés! –Dice secandose unas lágrimas que habían escapado de sus ojos. –¡Es que te juro que no entiendo mama! Yo vi a mi bebe, era hermoso, ¡estaba perfecto! ¡Me dijeron que los dos estaban saludables! ¡No entiendo que fue lo que sucedió! ¡Encima ya teníamos que vivir con que Brittany también había perdido el de ella!

Maribel le seca las lágrimas que aun seguían su viaje por el rostro de Santana.

-Maribel: Yo sé que no hay palabras para consolarte mi vida, pero…

-S: Mama… no me digas nada por favor.

Santana mira a su niña, quien la observaba con la expresión seria. La pequeña extiende una mano hacia su mama, intentando tocar su rostro, como queriendo también secarle las lágrimas. Santana abraza con fuerzas a su hija.

-S: A veces temo perder a mi niña mama… Creo que si eso sucediera... me muero.

-Maribel: No digas eso Santana... Además ese temor es natural, es parte de ser mama.

De pronto escuchan como suena el timbre. Luego suena otra vez y sigue, como si la persona al otro lado de la puerta estuviera desesperado en entrar.

-Maribel: ¿Quién demonios? Espérame aquí.

Ella se para y se dirige molesta hacia el vestíbulo. Al abrir la puerta queda completamente sorprendida.

-Cesar: ¡Hola! –Dice con cinismo. A su lado se encontraba su pequeño hijo quien batallaba por soltar su mano y salir corriendo.

-Maribel: ¡Qué haces aquí!

-Cesar: ¿Se encuentra Marcos?

-Maribel: Con la que debes hablar es con Brittany ¿no crees?

-Cesar: Tu solo hazme el favor en buscarlo y ¡no te preocupes! –Le dice. Maribel respira hondo, intentando mantener la calma.

-Maribel: Si no fuera por el niño, ¡te sacara por las greñas de mi casa!

-Cesar: Eso no me extrañaría de ti, ¡siendo mama de la bestia esa!

-Maribel: Mi paciencia es muy limitada niño y te advierto que…

De repente el niño logra escapar del agarre de Cesar y corre dentro de la casa.

4/4

-S: A ver mi amor, una cucharada mas y terminamos.

Alexa aprieta los labios y voltea la cabeza.

-S: Esta bien pero…

Santana se queda helada al ver a un pequeño niño frente a ella. Era el mismo del almacén. Ella siente que su cuerpo estaba paralizado y por un instante hasta pensó que estaba viendo visiones. El niño se acerca, subiéndose en la silla a su lado y le regala una sonrisa.

-A: ¡Niño! –Dice Alexa, apuntando hacia el pequeño. Santana sonríe, sintiendo una ternura inexplicable en el alma.

-S: Si mi amor… Es un niño… Un niño precioso…

Son tantos los sentimientos que ella en ese momento estaba experimentando. Había algo en ese niño...Algo especial.

-S: ¿Qué haces aquí papito?

Ella le acaricia el rostro, luego su cabello. Su mirada estaba enfocada sobre esta criatura. Ella solo lo observaba admirando su sonrisa, sus gestos, le recordaba tanto a Brittany. Por más absurdo que fuera.

-Cesar: ¡Me haces el favor en quitarle la mano de encima a mi hijo!

Los tres alzan la mirada hacia la entrada.

-Cesar: ¡¿Me escuchaste?!

Santana voltea la mirada nuevamente hacia el niño, luego hacia Cesar.

-S: ¿Es… Es tu hijo?

-Cesar: ¡Obvio! –Dice levantando al pequeño bruscamente. –El que mi mujer no pudo darme.

Santana siente un hueco en el estomago, junto con unas ganas inmensas de llorar.

-Cesar: ¡De hecho se llama como ella quería ponerle, Tommy!

Santana mira hacia el niño quien parecía estar a punto de soltar en llanto. El parecido con Brittant era más que evidente.

-Cesar: ¡No me digas que esta es tu niña López! ¡Si esta preciosa! –Dice cínicamente. Él estaba a punto de acariciar a la niña pero Demi le toma la mano con fuerza.

-S: ¡A mi hija no la toques! –Dice con la voz firme y la mirada desafiante.

-Cesar: ¡Suéltame!

En eso vienen entrando Marcos y Brittany, quienes habían escuchado los gritos.

-B: ¡Cesar! ¿Qué haces aquí?

Él sonríe hipócritamente, acercándose a ella.

-Cesar: Vine para que mi hijo conozca a su madrastra.

Él prácticamente tira el pequeño entre los brazos de Brittany. Ella se queda pasmada al ver como el niño se le parecía bastante.

-B: ¿Y este bebé?

-Cesar: Tu hijastro Tommy.

-B: ¿De qué hablas? Y Tomás… El otro bebé que…

-Cesar: Bueno, uno de ellos. Ya te dije querida, no fuiste la única con la que me acosté.

Brittany lo mira desconcertada. Jamás había visto a este niño… Pero era increíblemente parecido a ella.

-Cesar: Creo que tenemos mucho de que platicar.

Brittany mira hacia Santana, quien la observaba seriamente. Luego despeja la mirada.

-.-

Brittany y Santana se encontraban juntas en la tina. La morena estaba recostada de espaldas sobre el pecho de Brittany, mientras que esta tenía los brazos rodeados por su cintura.

-S: ¡¿Como pudo pedirte semejante cosa?! Pedirte que te alejes de tu familia, ¡de tu hija! Está bien loco ¿sabes?

-B: Si. –Dice soltando un suspiro. –Él no puede obligarme a nada ¡Voy divorciarme!

-S: ¡Claro que sí! –Dice sonriendo. –Esta chulísimo ¿verdad?

-B: ¿Quién mi amor?

-S: Su hijo… ¡Es idéntico a ti Britt!

-B: Jajá sí, ¡Solo por eso!...

Santana se ríe, acariciándole los brazos por debajo del agua.

-S: Por lo menos no salió a su padre, pobrecito lo compadezco, ¿quién será su madre?

-B: No lo sé…

-S: ¿Quien es Tomás? ¿Por qué le preguntaste que quien era ese niño si se supone que ya lo habías visto?

-B: Ese es otro bebé que tuvo con otra mujer… Tomás… Ese niño de la misma edad… Tan parecido a…

-S: ¿Quién?

Brittany se queda pensativa. No sabía si decirle o no… No sabía si eso le afectaría o no… Solo quería que ella esté bien y despeje su mente.

-B: A ti.

-S: ¿A mí?

-B: Sí, era hermoso…

-S: Igual que Tommy… Es precioso.

Santana sonríe pensando en el pequeño Tommy. Mientras Brittany y Cesar platicaban a solas en el estudio, ella aprovechó para estar junto al niño. No podía dejar de mirarlo… Sentía una ternura inexplicable hacia ese niño.

-B: ¿En qué piensas? –Pregunta, dándole pequeños besos en el cuello. Santana cierra los ojos y sonríe.

-S: Mmmm… No pares… –Murmura ella, rozando las piernas de la rubia.

-B: ¿Esto?

Brittany desliza la lengua lentamente, acariciando el oído de ella. Santana gimió al sentir la humedad y el placer de sus rozos.

-B: ¿Qué quieres preciosa? –Pregunta besando su cuello y saboreando con su boca. Santana voltea el cuerpo hacia ella, acercando los labios lentamente. Pero antes de sus labios hicieran contacto se detiene.

-B: San… ¿Qué haces? –Pregunta con los ojos cerrados, anhelando sentir el roce de su boca. Santana no contesta. –San...

Las palabras se le atragantaron al sentir como la morena comienza a penetrarla con los dedos lentamente.

-S: ¿Vas a gritar para mí Cariño?

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¿QUE LES PARECIO LA MARATON?
SALUDOS COMENTEN QUE LES PARECIO

holap,..

me encanto la maratón!!!
que cesar tiene un kinder para sacar a niños por todos lados,...
lo que me intriga es tomas????

nos vemos!!!

mmmmmm esta es mi teoria corrgime si me equivoco
1.-no recuerdo funeral del pequeño de san
2.-se hablo del aborto de britt pero mmm me parecio extraño
3.-yo creo que los bebes son de las chicas y q este les va a decir algo o lo van a descubrir ya que todos tienen la misma edad y son iguales a ellas

muy buena la maraton pero sigo pensando que ahi hay algo raro! hasta luego!

OMG esto es un enredo muy interesante. .. ojala se arregle todo! Como lo dejas ahi?! No tardes

Pero que ganas de leer el siguiente cap que enredo

vamosssssssssssssssss regresaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

casualidad que los pequeños se parescan tanto a las chicas ? no lo creo !!!!!

Vuelveeeeee

vuelve porfavoooooooooooo

Holaaaaaa lectoras, enserio lo siento por tardar tanto en actualizar pero la escuela me tiene al borde de una locura :( pero he aqui la actualizacion!! espero les guste!!

capitulo cuarenta

Había pasado una semana desde el regreso de Cesar y el reencuentro con los “hijastros” de Brittany.

Brittany despierta lentamente. Entre sus brazos y recostada sobre su pecho se encontraba la morena, aun dormida. Ella estaba desnuda al igual que la rubia, cubierta únicamente por una sabana. Ella sonríe y besa su frente cuidadosamente, Santana suelta un leve gemido al sentir el tacto pero no despierta.

-B: Tu sigue durmiendo preciosa…

Susurra besando nuevamente su cabeza. Ella logra pararse de la cama sin que la morena despertara. Después de bañarse y vestirse Brittany se dirige hacia el cuarto de su pequeña. La puerta se encontraba abierta, pero tenía una verja bloqueando la entrada.

Alexa estaba despierta, jugando en el piso con sus juguetes, pero al notar la presencia de su madre ella sonríe y corre hacia ella.

-B: ¡Hola princesa! –Ella la carga y besa tiernamente su mejilla. –¿Qué te parece si hoy le damos la sorpresa a tu mami? –Le pregunta. La niña asiente. –Pues ven señorita, ¡A bañarte y a ponerte hermosa!

-.-

Santana sale de su habitación y se dirige hacia el cuarto de su hija como siempre hacía todas las mañanas. Ella se asoma en la entrada y sonríe, observando cómo Brittany peinaba a su niña, mientras la pequeña pasaba las páginas de un libro, dictando su propia historia, como si en verdad lo estuviera leyendo. Sus palabras eran limitadas, pero para su edad su vocabulario era bien avanzado.

-S: Buenos días.

La rubia alza la mirada, pero en vez de sonreír, se molestó.

-B: Mi amor, ¿qué haces despierta? ¡Te quería preparar el desayuno!

Santana se ríe mientras se acercaba a ellas.

-S: Gracias bebe, pero no te preocupes. –Dice tomando su rostro y la besa. –¡Hola mi vida! –Dice abrazando con fuerzas a su niña. –¡Mira lo hermosa que te ha puesto tu mami!

-B: ¡Si pero mira como quede yo!

Su playera estaba completamente empapada. Santana se ríe.

-B: No me fue muy bien en el baño. –Dice. La niña mira hacia ella y se ríe. –Ah y te ríes ¡eh! –Dice tomándola entre sus brazos y le empieza hacer cosquillas, mientras la pequeña se reía e intentaba escaparse. De pronto suena el timbre.

-S: ¿Esperas a alguien?

-B: No… ¿Tu?

-S: No. –Dice. La rubia suspira.

-B: Ojalá no sea Cesar.

-S: No lo creo Britt, él no sabe donde vivimos.

El timbre suena de nuevo y de repente, Alexa corre fuera del cuarto.

-S: ¡Alexa!

Ambas corren atrás de ella.

-B: ¿Adonde crees que vas señorita? –Ella la carga, justo cuando empezaba su descenso hacia abajo.

-Hola, ¿se encuentra Santana?

Era la voz de Santiago. Hace más de un año que él había partido nuevamente hacia Francia.

-S: ¡Es Santiago!

Dice con una gran sonrisa. Brittany solo la mira algo seria, pues su presencia aun le provocaba una especie de incomodidad. Ambas se dirigen hacia abajo.

-S: ¡Santiago! –Dice abrazándolo con fuerzas.

-Santiago: ¡Hola muñeca! –Le dice. Brittany solo observa algo molesta. –Hola Brittany. –Dice extendiendo su mano hacia ella.

-B: Hola. –Dice tomando su mano, pero su expresión seguía igual.

-Santiago: ¿Te acuerdas de mí preciosa?

Dice mostrándole una gran sonrisa a Alexa. Ella niega con la cabeza y esconde su rostro entre el pecho de Brittany.

-B: Algunas veces se pone así con extraños.

-S: Santiago no es un extraño mi amor. –Dice tomando a su hija. –Chiquita él es Santiago, es como otro tío para ti. –Le dice. La niña solo recuesta la cabeza sobre el hombro de la morena.

-Santiago: ¿Tan feo soy?

-S: Perdón, es que era muy pequeña cuando te fuiste.

De pronto se acerca la sirvienta.

-Señora, tiene una llamada…Es su abogado.

-B: Gracias.

-S: ¿Por lo del divorcio verdad?

-B: Si… Ahorita vengo.

Antes de irse, Brittany mira seriamente a Santiago. Como advirtiéndole a través de una mirada lo que estaba pensando. Ella confiaba ciegamente en Santana, pero no puede evitar sentirse molesta por la presencia de Santiago…y mas sabiendo el pasado de ambos.

-Santiago: Perdón por mi curiosidad pero ¿qué divorcio?

-S: Hay Santiago, sabes cómo Cesar desapareció… Sin darle el divorcio a Britt Pues hace unos días volvió ya siendo padre y quiere que ella siga siendo la madrastra.

-Santiago: San esa es precisamente unas de las cosas que venía a decirte…

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¿QUE LES PARECIO EL CAP?
¿AUN LEEN MI ADAPTACION?

claroooooooooooooooo que la leo que piensas??? que no soy fiel lectora pero por favor regresa pronto

Siiii...! es sorprendente leerte de nuevo :) Y te lo agradezco :)!!!!

que si la leo? por supuesto, aunque mas de una vez sienta el inicio de una convulsion al no ver la actualizacion, pero aqui sigo, que sera lo que vino a decir santiago?

Por favorrrr claro que la leo! Actualiza pronto no nos dejes con esta intriga jajajaja :)

una de las cosas que quiere decirle?? eso huele a drama por todos lados y claro que seguimos leyendo! Es un fic entretenido espero no pienses dejarlo saludines y porfa actualiza pronto suerte en la escuela

claro que te seguimos leyendo  
actualiza pronto
cuidate

Claro que la leemos! Tatdaste un poco pero aca estamos fiel! Siguela

holaa!! que tal? llevo mucho tiempo sin actualizar pero lo haré mas seguido, se los aseguro, bueno les dejare dos capitulos para que no tengan tanta intriga saludos!!1

capitulo cuarenta y uno

-S: ¿Decirme que?

-Santiago: Que la ex de Cesar nunca tuvo a su bebe… De hecho lo perdió unos dos meses antes de que tu regresaras con Brittany… –Le dijo el chico. Santana siente como la presión pareció bajarle y como su corazón parecía detenerse.

-S: A ver Santiago… ¿Que estás diciendo?

-Santiago: Mira, hace unos días… resulta que mi padre se encontró con el doctor que era el de la ex de Cesar… Y pues no sé como surgió pero eso dijo, que un día su ex llego con fuertes dolores y que ya cuando le practicaron unos estudios… El bebe lamentablemente había muerto…

Santana se queda boca abierta. No podía asumir las palabras de Santiago… Era imposible…

-S: No puede ser… ¡Ella tiene a su hijo! ¡Es de Cesar! Bueno… Son, ¡porque son dos!

-Santiago: ¿Qué? Deben ser otros porque…

-S: ¡No Santiago! ¡Son ellos, son hijos de Cesar, está comprobado! De la misma edad, ¡dijo que eran de diferentes madres!

-Santiago: Santana... Te digo que no hubo bebé… Por lo menos por parte de la mujer que yo conozco, él nos estaba engañando a todos, incluso a su padre… ¿Además donde está la mamá del otro niño?

Santana solo niega con la cabeza… ¿Cómo era posible semejante cosa? Los niños comprobaron ser hijos de Cesar mediante ADN.

-S: Santiago, ¡tienes que estar equivocado! ¡son hijos de Cesar!

-Santiago: ¿Le probaron la sangre?

-S: ¡Sí! –Le dice. Santiago se queda pensativo.

-Santiago: Es que no entiendo nada… ¿Qué razón tuviera el doctor en mentir con respecto a eso?

-S: ¿Entonces?… ¿Y los niños? –Pregunta con la voz entrecortada.

-Santiago: No tengo explicación, la verdad que no entiendo. –Dice mirándola, viendo como lagrimas se habían acumulado en sus ojos. –Santana, ¿Que sucede? ¿Porque te afecta tanto? –Le pregunta preocupado.

La morena no puede pronunciar palabra. Habían tantos sentimientos y pensamientos atormentando su alma. Escenas de los ultimo dos años empiezan a recorrer por su cabeza. Ella recuerda la reconciliación con Brittany, las amenazas de Cesar, su pequeño bebe el día en que nació. Lo perfecto y saludable que estaba.

-Santiago: Santana... –Le dice. La morena se pone de pie y le pasa la niña a él. –¡¿Adónde vas?!

Alexa empieza a llorar y a llamar a su mama una y otra vez. Pero a pesar de las suplicas de su hija, Santana agarra sus llaves y sale por la puerta. Dentro de su alma ella podía escuchar los gritos de otros.

-.-

Brittany entra a la sala corriendo tras oír los gritos desesperados de su hija.

-B: ¿Qué pasó? ¿Dónde está Santana? –Pregunta. La niña extiende los brazos frenéticamente hacia su madre.

-Santiago: ¡No sé! ¡Se fue!

La rubia toma su a hija e intenta tranquilizarla. La pequeña entierra la cabeza entre el pecho de su madre mientras se aferraba con fuerzas a ella.

-B: ¡¿Como que se fue?! ¿A dónde?

-Santiago: ¡Le dije lo de Cesar y empezó a llorar! ¡Luego agarro sus llaves y se fue!

-B: ¡Habla claro por el amor de Dios! ¡¿Qué demonios le dijiste?!

-Santiago: ¡Que la ex de Cesar nunca tuvo un hijo! ¡Que su bebe murió aun en su vientre! –Le dice. Brittany se queda paralizada.

-B: ¿Qué? ¡¿Como que murió?! ¡Eso no puede ser! Son dos mujeres ¿de qué demonios hablas?

-Santiago: Así es Pierce… Él te mintió estos días. De la mamá del otro bebé que Santana mencionó no sé nada…

Brittany siente como su corazón estremece y como una ola de escalofríos sacude su cuerpo.

-B: ¡Esto no puede ser!

-Santiago: ¡¿Adonde crees que haya ido Santana?!

-B: ¡Maldita sea! ¡¿Como la dejaste ir?!

-.-

Santana estaba conduciendo hacia la casa de Cesar. No sabía porque, pero necesitaba saber la verdad… Una verdad que por años ha atormentado su alma y sus sueños.

-S: No puede ser lo que estoy pensando… ¡Dios no puede ser!

Pero el destino parece estar empeñado en mantenerla alejada de esa verdad, porque de repente ella pierde el control del vehículo y se estrella contra un árbol. Santana por suerte sale ilesa del impacto. Ella se desmonta del carro y ve el causante de su accidente. Las llantas fueron perforadas por un objeto desconocido sobre la carretera.

De repente un auto que iba pasando, se detiene tan bruscamente que se escuchó el fuerte chirrido de sus frenos.
Santana respira alivianada, pero al salir el ocupante del auto… Ella queda horrorizada… Era Kevin...

-K: Vaya, vaya… ¡Mira que agradable sorpresita!

-S: ¡Mejor vete por donde viniste!

-K: ¿No crees que no estás en ninguna condición de exigirme algo así?

-S: ¡No necesito de tu maldita ayuda! ¡Lárgate!

Kevin de repente la toma por la cintura con una mano, luego con la otra le tapa la boca.

-K: ¡Cállate! ¡No sabes cómo he deseado este momento!

Santana intenta desesperadamente en zafarse pero Kevin obviamente era más fuerte.

-K: Tranquila preciosa… Tu y yo vamos a pasárnosla bien, de eso te aseguro…

Santana empieza a llorar e intentar gritar pero Kevin solo se reía con malicia, mientras la arrastraba rápidamente hacia su carro, antes de que alguien los viera.

-.-

Brittany y Santiago llegan desesperados a casa de Cesar. Ella había tomado una carretera distinta, para así llegar mas rápido.

-Cesar: ¿Qué te pasa? ¡¿Por qué diablos tocas así la puerta?!

Brittany lo toma fuertemente por la camisa y acorrala su cuerpo contra la pared enfurecida.

-B: ¡¿Donde está Santana?!

-Cesar: ¡Primero suéltame! ¡Qué voy a saber yo, donde anda tu perra!

-B: ¡Cállate! –Grita aumentando su agarre..

-Cesar: ¡Pierce suéltame no me hagas lastimarte!

-B: ¡¿Donde está Santana?!

-Cesar: ¡Santana no esta aquí maldita sea!

El pequeño Tomas corre hacia ellos. El parecía estar asustado por todos los gritos.

-Cesar: ¡Estas alterando a mi hijo!

-B: ¡¿Tu hijo?! ¡¿Por qué no dices la verdad maldito?! ¡Sé perfectamente que tu ex perdió tu hijo!

Cesar se queda boca abierto. No podía creer que había sido descubierto.

-B: ¡Admítelo!

-Cesar: ¡¿Sabes porque lo hice?! ¡Porque yo te amaba! ¡Y no soportaba ver como estabas loca por esa tipa! ¡No tienes idea de cuánto es el odio! ¡Ojala que hayan sufrido cuando creyeron muertos sus malditos hijos!

Brittany se queda pasmada, sin poder creer las palabras que acababa de escuchar.

-B: ¿Que dijiste?

Cesar la mira fijamente a los ojos, dándose cuenta de su error.

La rubia siente como la sangre le hierve y como el pulso se le acelera. Esa idea aun no se le había cruzado por la mente, pero tras sus palabras todo era más que evidente. La furia en sus ojos y esa mirada penetrante con la que miraba a Cesar, lo hizo estremecer de miedo. Pero antes de que él pudiera decir media palabra más, la rubia lo pateó con fuerzas en su entrepierna.

-B: ¡¿Que dijiste?! ¡¿Creímos?! ¡¿Creímos que habían muerto?!

Cesar intenta desesperadamente pararse y tomar aliento, pero Brittany le aprieta el cuello con fuerzas, el intenta zafarse pero ella mantiene el agarre sobre su cuello, olvidándose por ese instante de todo, dejándose llevar por la ira que se había apoderado de su cuerpo.

-B: ¡Maldito! ¡¿Cómo fuiste capaz?! ¡No tienes idea cuanto nos afecto tu maldita mentira!

Ella mantiene su agarre pero cada vez más fuerte, Cesar intenta zafarse de sus manos histéricamente, sintiendo como poco a poco la vida se le iba.

-Santiago: ¡Brittany! ¡Suéltalo! ¡¿Te has vuelto loca?!

Santiago intenta detenerla, pero la rabia de la rubia era más fuerte. La realidad y la razón en ese momento no existían. Ella solo veía todas las lagrimas y todo ese sufrimiento que ambas pasaron tras las supuestas muertes de sus bebés.

-B: ¡No sabes cómo deseo matarte! ¡Eres un bastardo! ¡Muérete maldito!

Santiago toma las manos de la rubia e intenta con todas sus fuerzas hacerla reaccionar. Los ojos de Cesar se habían echado hacia atrás, mientras él perdía el conocimiento.

-Santiago: ¡Brittany! ¡Por el amor de Dios! ¡No te conviertas en asesina! Piensa en Santana… ¡En tu hija! –Le ruega, mientras lagrimas empiezan a caer de los ojos de la rubia. –Mira a tu hijo Brittany... –Le dice. El niño se encontraba llorando, observando la escena horrorizado. –A pesar de todo… Él ha sido su padre durante estos años… ¿Lo vas a matar enfrente de él? Por favor, Brittany… suéltalo.

Brittany agacha la cabeza, soltando en llanto, mientras deja el agarre que tenía sobre el cuello de Cesar. Al soltarlo, el echa la cabeza hacia atrás, tomando pequeños alientos y volviendo lentamente en si.

-B: No puede ser cierto… –Dice, ella mira hacia su hijo quien se encontraba llorando sobre un escalón. Ella se acerca al niño y lo toma con fuerza entre sus brazos. –¿Como pudo hacer esto? ¿Cómo? –Dice. Intentando controlar los sollozos pero el dolor y la alegría que sacudía su cuerpo era indescriptible. –Todas las veces que te lloramos… Todo ese dolor... ¿Cómo es posible? –Se pregunta. El niño deja de llorar para mirar a la rubia. El pasa sus pequeñas manos por el rostro de ella. –¡Mira lo grande que estas!

Dice la rubia con una gran sonrisa y con lágrimas rodando por sus mejillas. Ella le besa las manos, luego le besa tiernamente el rostro.

-B: ¿Dónde está tu hermanito mi amor? –Le pregunta ella, el niño solo apunta hacia arriba con el dedo, Brittany sonríe y sube con el nene en brazos algo apresurada. –Tommy... –Susurra.

Su pequeño se encontraba durmiendo, parecía un angelito. Ella sintió desmoronarse… No le entraba en la cabeza tantas cosas pero a la vez todo encajaba perfectamente. No podía creer que tenía a su hijo en frente.. Sí, el niño que tuvo casi 7 meses en su vientre, y que supuestamente había muerto. Ella deja en el suelo lentamente a Tomás y camina con él de la mano por la habitación hasta llegar al borde de la camita de Tommy.

-B: Precioso… Despierta…

Ella no puede evitar soltar un fuerte sollozo al ver como su niño abre los ojos lentamente. Ella lo acaricia y lo carga a un costado, el niño instintivamente se apoya sobre su hombro y sigue durmiendo. Toma de la mano a Tomás y se dirige hacia abajo.

-Cesar: Mal…dita… –Dice, Cesar aun batallaba por recobrar el aliento. Brittany mira hacia él con ojos de pistola.

-B: ¡Me llevo a mis hijos! ¡Te vas a podrir en la cárcel! ¡¿Me oyes?! –Grita mientras sale por la puerta con sus hijos.

-Cesar: ¡Es…pera! –Él intenta parase pero su cuerpo aun estaba débil, le dolía la entrepierna y tampoco había dejado de toser.

-Santiago: ¡Brittany! ¡Santana todavía no ha llegado! –Le dice. Brittany mira su alrededor.

-B: ¡Hace tiempo que debió haber llegado!

-Santiago: Esta raro ¿no?

-B: Espera tú aquí... ¡Yo voy a ver si la encuentro en el camino!

capitulo cuarenta y dos

Brittany busca desesperada en la carretera a los carros que iban pasando por la vía contraria. Hasta que ve en la distancia una auto chocado que parecía ser el que le había regalado a Santana. Al acercarse la rubia queda horrorizada al ver que en realidad era suyo. Ella cruza la carretera hacia el vehículo y se estaciona a su lado.

-B: ¡No mi amor! ¡No me hagas esto! –Ella abre frenéticamente la puerta del auto… Pero para su sorpresa, estaba vacío. –¡¿Donde estas?!

Brittany le marca a su celular, pero de pronto escucha como este, empieza a sonar en la distancia. Ella sigue el sonido hasta por fin encontrarlo justo al lado de unas marcas de llantas sobre el pavimento. El carro que las había provocado, parecía detenerse de repente tras ir a una alta velocidad. La rubia busca con la mirada su alrededor a Santana, buscando signos de vida.

-B: ¡San! –Ella siente como escalofríos corren por todo su cuerpo. –Algo no está bien... ¡No Dios por favor! ¡Santana! –Ella grita su nombre una y otra vez, mientras lágrimas inundaban sus ojos.

-.-

En un lugar desconocido, dentro de un cuarto oscuro se encontraba el cuerpo débil de la morena. Ella estaba boca arriba, con las manos sobre su cabeza, amarradas hacia los hieros de una cama. Su rostro estaba ensangrentado pues para poder tranquilizarla, Kevin le pego con fuerza, dejándola inconsciente. Santana poco a poco va despertando.

-S: Mi…cabeza… –Dice. Al abrir los ojos y ver solamente unos rayos de luz ante la oscuridad, su respiración empieza a agitarse. –Dios… ¿Dónde estoy? –Se pregunta. Ella intenta mover los brazos, pero rápidamente se da cuenta que su manos estaban atadas. –¡No!… ¡No! –Su rostro se inunda de lágrimas, mientras que su cuerpo temblaba de temor, recordando lo sucedido. –¡No! ¡Ayúdenme!… ¡Brittany!

Santana intenta con todas sus fuerzas zafarse, pero era inútil y más cuando cada movimiento le provocaba un dolor imperdonable, pues Kevin había apretado las esposas demasiado.

-S: ¡Brittany! Brittany ¡Ayúdame!

-K: ¡Brittany, Brittany! –Dice, imitándola de una manera burlona.

-S: ¡Maldito!… ¡¿Porque me haces esto?! –Le pregunta exaltada. Kevin se echa a reír con malicia. –Por favor Kevin, te lo suplico… déjame ir… por favor… –Le suplica. Kevin detiene su risa y la mira fijamente.

-K: San, preciosa… –Dice mientras se sube sobre su cuerpo de rodillas y pega su rostro junto al de ella. –Tal vez… Aun no lo sé…

-S: ¡Por favor! –Le suplica. Kevin roza los labios contra los de ella.

-K: Si te dejo ir… Iras corriendo a denunciarme. Y eso, preciosa, no lo voy a permitir.

-S: Kevin por lo que más quieras… ¡Déjame! ¡Tengo una niña! ¡Ella me necesita! ¡¿Por qué haces esto?!

Kevin toma su rostro con fuerzas, haciendo que sus miradas se encuentren. Él la mira con un odio profundo.

-K: ¿Por qué? Déjame aclararte la memoria… –Dice apretando más su agarre y ella empieza a llorar más fuerte. –¿Te acuerdas del viaje? ¡¿Te acuerdas?! –Grita aun mas fuerte. La morena cierra los ojos, mientras sollozaba de miedo. –¡Tu maldita novia me hizo quedar de ridículo! ¡Quería hacerla pagar por lo que me hizo! ¡Pero mi padre no me dejo! ¡¿Sabes por qué?! –Le pregunta.

-S: Déjame por favor…

-K: Porque prefirió volver a los negocios de Marco Pierce ¡¿Te das cuenta?! ¡Prefirió el dinero que la dignidad de su propio hijo!

-S: ¡Maldito! ¡Todo fue tu culpa!… Tú fuiste el que me… –Kevin la cachetea fuertemente, haciéndola sangrar de los labios, mientras ella suelta en llanto.

-K: No me hagas enojar… No quisiera agredirte. –Dice. El voltea el rostro de Santana nuevamente hacia él. –Solo tienes que cooperar conmigo preciosa. –Le dice. El procede en besar sus labios, la morena rechaza su beso y llora aun mas fuerte. –Voy a dejar que te tranquilices. –Le dice mientras besa su frente. –Hasta luego, mi amor.

Santana se queda llorando histéricamente entre la oscuridad de ese cuarto. Pidiendo a gritos ser rescatada… Presintiendo el plan macabro de Kevin.

-.-

La noche cayó sobre la cuidad. Habían pasado más de 8 horas desde la desaparición de Santana. La rubia se encontraba destrozada, pensando lo peor. Ella había denunciado a Cesar por el crimen de haberse robado a los niños, pero por desgracia, tendrá que esperar los resultados de la prueba de ADN que le practicaron para poder encerrarlo, pues este niega todo lo sucedido. Brittany siente una inmensa impotencia en no tener noticias de su castaña, y más porque los agentes de policía no moverán un dedo para buscarla, antes de 24 horas.

-B: San ¡¿donde estas?! ¡¿Donde estas?!

La rubia se aferra a la almohada de la morena, mientras lloraba como una niña. Ella sabia que algo malo le había sucedido. Que Santana jamás hubiera desaparecido dejando abandonada a su familia, a su pequeña hija. Eso era lo que más le dolía, la posibilidad que ella estuviera lastimada, secuestrada… O peor, muerta...

-B: ¡No!

Brittany se retuerce en su cama agonizando de tan solo pensar en la idea de nunca volver a verla. No se podía imaginar la vida sin ella... Sería imposible…

-B: ¡San! ¡Mi amor! ¡Llámame! ¡Déjame saber que estas bien!

Brittany Escucha como tocan el timbre repetidas veces se levanta como puede y corre por las escaleras con las esperanzas de que sea la morena pero al abrir la puerta se dio cuenta que no.

-Michael: Britt, preciosa mía…

Ella no le contesta y se larga a sus brazos y llora desconsoladamente, él la levanta con fuerzas y ella lo aprieta más rodeando sus piernas por su cintura, el entra y cierra la puerta, asienta a la rubia en el sofá y se sienta a su lado y la abraza.

-Michael: Tranquila preciosa todo estará bien, ya verás que sí está bien…

-B: Sé que no Mike, sé que ella no está bien…

Ella sigue llorando, Michael no sabe qué hacer no soporta ver a su prácticamente hermana llorar como una niña, el trataba de consolarla pero sabía muy bien que la rubia no exageraba, Santana no desaparecería así por así…

-B: ¿Cómo te enteraste? –Dice con la voz entrecortada intentando calmarse. Él le acaricia el cabello y la aprieta más.

-Michael: El papá de Santiago, es amigo de mi papá, me contó también todo lo de Cesar y los niños… De eso quería hablarte…

-B: ¿Eres amigo de Santiago?

-Michael: Conocido. Britt…

-B: Ah… Igual no entiendo… ¿De qué querías hablarme?

-Michael: Yo… Bueno es que…

-B: ¡Dime!, ¡demonios!

-Michael: Mi tío dijo que esa noche que te traje a tu casa, entramos a mi departamento antes…

-B: No lo recuerdo, pero… ¿Qué tiene que ver eso?

-Michael: Yo recordaba todo… Recordaba que entramos a mi departamento… Y más, pero pensé que habían sido solo delirios porque… Bueno, tú no me mencionaste nada nunca.

-B: ¿De qué hablas?

-Michael: Estoy seguro… Que el papá de tu bebé soy yo, no Cesar…

-B: ¡¿Qué?! pero si yo salí con él.

-Michael: Sí pero no recuerdas que te quiso forzar a subir a su vehículo y tú no quisiste, en eso salía yo y te dije que vengas conmigo, y lo hiciste.

-B: No… Es más, me preguntaba como terminé en tu auto… Si había salido con él…

-Michael: Estaba algo borracho cuando llegamos a mi departamento Britt, pero sí me acuerdo perfectamente de todo... Nunca, jamás pensé que fuese verdad… Hasta que supe lo del engaño de Cesar… Se aclaró todo… Además el niño está vivo…

-B: No puede ser… ¿Me acosté contigo?

-Michael: Sí, que asco. –Le dice provocandole una risa a la rubia. Ella no puede evitar reír y abrazarlo.

-B: Por lo menos me alegro que seas tú y no él, el niño es idéntico a mí pero, ¡igual no dejaba de molestarme que llevase sangre de ese bastardo!

-Michael: Te adoro Britt, y no te preocupes… No me meteré con el niño, ni te pediré que le pongas mi apellido ni nada… Solo quiero una prueba de paternidad y que me lo dejes ver y me reconozcas como su tío, nada más.

-B: Hay Mike ¡obvio!, serás su tío preferido…

Ellos se vuelven a abrazar. Pero la rubia vuelve a la realidad. Santana aún no estaba ahí… Ella suelta un fuerte sollozo, Michael la abraza más fuerte.

-Michael: Tranquila mi reina, ya pasará…

Ellos escuchan como la pequeña llamaba a su mama una y otra vez. Ellos se paran del sofá y se dirigen hacia su habitación. Alexa se encontraba parada contra la pequeña verja en su cuarto, con los brazos y la cabeza recostada en ella.

-B: ¿Que tienes princesa? –Le pregunta. La pequeña alza su cabecita hacia la rubia.

-Alexa: Mami.

Brittany utiliza todas sus fuerzas para no soltar en llanto frente a su pequeña.

-B: Mi amor… Tu mami no está. –Dice con la voz entrecortada y cargando a su pequeña.

-Alexa: Mami. –Dice otra vez, apuntando hacia la habitación principal y mirando atenta, como esperando ver a la morena, quien siempre respondía a sus suplicas.

-B: No chiquita… Mama… no está…

-Alexa: ¡Mami! –La niña grita más duro y mira de nuevo hacia la habitación de su mama, esperando su aparición. Lagrimas rodaban por las mejillas de Brittany como cascadas. –¡Mami!

-B: Mi amor… vas a despertar a tus hermanitos.

La niña logra zafarse de los brazos de su Brittany y corre hacia la habitación principal. La rubia la sigue y se queda parada en la entrada del cuarto, observando cómo su niña parecía buscar a Santana desesperadamente. La pequeña busca dentro del armario, en el baño, mientras llamaba a Santana una y otra vez.

-B: Alexa…

La rubia suelta en llanto desde la puerta, cuando ve como su princesa se pone de rodillas y busca debajo de la cama. Sin dejar de pronunciar su nombre… Pues desde el día en que nació Santana nunca le había faltado… Siempre estuvo ahí a su lado. Al despertar, durante el transcurso del día y nunca se acostaba sin darle las buenas noches a su pequeña.

-Michael: No llores pequeña… –Dice abrazando a la rubia por atrás rodeando su cintura con las manos y apoya su cabeza en su espalda.

-Alexa: Mami. –Dice encogiendo sus hombros, con la expresión melancólica.

Brittany agacha la cabeza y llora mientras seca las lágrimas que caían a los brazos de Michael. Él la suelta mientras Brittany se dirige hacia su pequeña hecha un mar de lagrimas y la carga, aferrándose a su niña mientras temblaba. Ella ya no podía pronunciar palabra. Solo se acuesta con su pequeña en brazos y llora junto a ella, viendo como pasaban las horas, y llora hasta gastarse las lagrimas. Michael permaneció con ambas sentado en la mecedora, alguna que otra lágrima le brotaba, le dolía todo esto, era su familia, Brittany era su pequeña, siempre la cuidó, eran prácticamente hermanos… él solo quería su felicidad. Él las observa perdido en pensamientos hasta quedarse dormido.

-.-

Kevin entra despacio dentro del cuarto. Aun se podía escuchar los sollozos de Santana en la oscuridad.

-K: ¿Todavía preciosa?

-S: ¡Kevin! ¡Por favor suéltame!

Kevin se sube nuevamente sobre ella y acaricia su rostro, interrumpiendo el camino de sus lágrimas.

-K: Te aseguro que te va encantar… ¿Que ya se te olvido lo nuestro?

Ella grita desesperada sintiendo asco y repugnancia ante su tacto y ante la idea de lo que él era capaz de hacerle.

-K: No me hagas enojar por Dios… ¡No quiero pegarte!

-S: Kevin… ¡Por favor! ¡Te lo suplico!

-K: Mmm… ¿Que quieres chiquita? –Dice deslizando una mano hacia su entrepierna. Santana grita apretando sus piernas e intentando patalear.

-S: ¡Déjame!

-K: ¿Qué te parece si recordamos viejos tiempos? –Dice. Arrancando la blusa bruscamente, rompiendo los botones.

-S: ¡No! ¡No por favor!

Kevin empieza a besar su cuello salvajemente, ascendiendo hacia sus labios. El procede en meter una mano entre sus piernas y la manosea. Ella grita histéricamente.

-S: ¡No! ¡Déjame! ¡Suéltame!

El ahoga sus gritos con otro beso salvaje.

-K: Lo vas disfrutar, te lo prometo… –Le dice mientras se desabotona los pantalones y se posiciona entre sus piernas.

-S: ¡No! ¡No! ¡Déjame! Brittany… ¡Brittany!

La morena llora desconsoladamente, retorciendo su cuerpo en agonía sobre la cama. Kevin la mira con odio y vergüenza, abrochándose los pantalones.

-K: ¡Maldita sea! ¡Esto nunca me ha pasado antes! –Le dice mientras sube sobre su cuerpo nuevamente. –Esto es por tu culpa ¡¿sabes?! –Le dice. La morena solo cierra los ojos y llora con más fuerzas. –¡Mírame! –Le dice. El toma su rostro, apretando con sus manos las mejillas de la morena. –Te salvaste por ahora…

-S: ¡Maldito! ¡Suéltame! ¡Déjame ir!

-K: Solo te digo una cosa… ¡Nunca! ¡¿Me oyes?! ¡Nunca volverás a ver a tu Brittany! ¡Y menos a esa mocosa!

-S: ¡Eres un maldito! ¡Muérete!

Ella lo patea con todas sus fuerzas en la entrepierna. Kevin suelta un fuerte grito y cae al piso debilitado.

-K: ¡Me la…Vas a…pagar! –Logra decir con la voz entrecortada, mientras se retorcía en el piso agonizando del dolor.

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