Fic: El Amor nunca es fácil-Roto-Cap. 128

-¿Hasta cuándo te quedaras?-pregunto Blaine con las manos en los bolsillos y mirando al suelo.

-Hasta el viernes en la noche, el sábado debo estar de vuelta en mis clases.

-Oh…

-Bueno, tenemos dos días para disfrutar-dijo con ánimo Kurt mientras tiraba del brazo de Blaine para poder tomarlo de la mano.

-¡Hola! ¿Llego en mal momento?-pregunto Sam al ver a la pareja caminando de la mano.

-No…

-Tú me debes un par de explicaciones-dijo Blaine mirando al rubio.

-Yo le pedí que no dijera nada-interrumpió Kurt.

-¿Ud. tenían un plan?

-En realidad el me llamo para gritarme un par de cosas…-confeso el castaño.

Blaine los miro a ambos sin entender completamente de que estaban hablando.

-Bueno, yo solo le hice ver que no estaba teniendo una buena actitud… y el resto fue todo idea de el-acuso Sam para defenderse.

-Como sea… ¿qué necesitabas?

-¿Solo quería saber si van a ir a la práctica hoy?

-No…vamos a ir por un café…y luego a hacer cosas de novios-dijo Blaine guiñándole un ojo a su amigo.

-Ok…no necesito tanta información…hablamos más tarde entonces.

-Sí.

-Ok, nos vemos, un placer verte de nuevo Kurt.

-Nos vemos mañana.

-Nos vemos…y pónganse al día con sus cosas…el pobre Blaine ha estado con una cara horrible el último mes-le dijo a Kurt quien se sonrojo al instante.

Ambos muchachos se fueron en el auto de Blaine al café, como siempre al llegar Blaine fue directamente a pedir sus órdenes.

-Por fin un café decente-dijo Kurt tomando un poco de su vaso.

-No exageres, en NY debe haber miles de lugares con mejor café que este.

-Blaine, primero, estoy tan lleno de cosas que hacer en la oficina y en la escuela que el único café que he probado desde que estoy allá es el de la máquina del primer piso de la revista y el que prepara Rachel… que esta bastante lejos de ser un buen café… y segundo, gran parte del placer que tiene venir a este lugar tiene que ver con la compañía.

Blaine sonrió avergonzado, se sentía como en las primeras citas que había tenido con Kurt, un poco intimidado con sus coqueteos, pero realmente alagado.

-Bueno, ¿vas a contarme por qué decidiste venir?

-Pensé que te había quedado claro Blaine… vine a pedirte perdón…y a verte porque te extrañaba, además sé que no lo has estado pasando muy bien en los últimos días.

-¿De qué hablas? Yo estoy bien-mintió el moreno intentando no hacer sentir culpable a Kurt.

-Te escuche cantar Blaine.

-¿Qué…cantar?

-Tú estabas cantando ayer, te vi.

-Pero…

-Sam. El me llamo por teléfono ayer en la mañana, para decirme un par de cosas, y me dijo que necesitaba verte.

-¿Entonces era mentira que había estado hablando con Puck cuando ayer llego tarde?

-Si… cuando llego a la sala y empezaste a cantar, nos conectamos, y pude verte.

Blaine guardo silencio observando su taza de café.

-Esa canción… ¿era para mí cierto?

-Perdón Blaine…

-No quiero que te sientas mal, yo solamente…creo que no soy tan fuerte como pensaba.

-Para mí también ha sido difícil-confeso el castaño.

-Lo sé, es solo que…

-¿Que…?

-Yo…, es solo que a veces siento que tú no me necesitas tanto como yo a ti-dijo con un hilo de voz.

-Blaine, yo te extraño y te necesito tanto como tú a mí, yo solo intento parecer fuerte, porque sé que todo esto es mucho más complicado para ti, tu dejaste todo por mí, y ahora yo no estoy contigo, has tenido que hacerte cargo de todos los problemas en el coro…y yo… bueno yo no he sido realmente un gran apoyo para ti… solo no quiero parecer como otro problema con el que tienes que cargar.

-No digas eso…

-Déjame terminar Blaine, yo estoy en la ciudad de mis sueños, haciendo algo que realmente me gusta, y aunque es cierto que el trabajo y las clases me mantienen al borde de la desesperación, sigue siendo la vida que siempre soñé, es por eso que estoy esforzándome el doble, porque sé que tu estas pasando lo más difícil, y quiero que por lo menos cuando podamos estar de nuevo juntos, todo tu sacrificio se vea recompensado, sigo manteniendo mi promesa Blaine, hago todo lo que puedo para que un día cuando vengas a NY conmigo tengamos un lugar propio, algo que yo haya ganado con mi esfuerzo, algo real que ofrecerte.

Blaine tomo la mano de Kurt y la apretó con fuerza, ambos habían tenido semanas realmente difíciles, esperando no incomodar al otro se guardaron cosas que debieron haber dejado salir.

-¿Vamos a casa?-pregunto el moreno sin soltar la mano de su novio.

Kurt asintió con el rostro lleno de paz, se sentía tan bien estar juntos otra vez, era volver al hogar, y nunca ha existido ni existía un lugar mejor que el propio hogar.

Los jóvenes emprendieron rumbo a la casa de Blaine, Kurt planeaba ir a su casa, pero seguramente Finn estaría ahí, y ahora solo deseaba estar a solas con Blaine.

Al entrar en la casa el silencio inundaba el lugar, Blaine le dio una media sonrisa a su novio, estaba feliz de estar nuevamente ahí con él.

Con cuidado el castaño se levantó, y se sentó en el suelo apoyándose contra la cama, observando la luz de la luna que se colaba por la ventana. Podía sentir las hojas moviéndose agitadas por la brisa, miro a sus espaldas, Blaine seguía ahí, con el cabello revuelto, con esa hermosa sonrisa en el rostro.

-Como desearía verte así cada noche-susurro.

Kurt no pudo evitar recordar cómo se sintió la primera noche en Nueva York, la soledad, la tristeza, ahora estaba con Blaine, pero ¿qué pasaría mañana, o dentro de una semana? Estaría solo otra vez, intentando acostumbrarse nuevamente a su ausencia, sintió como las lágrimas caían por sus mejillas, recogió sus piernas y escondió su rostro entre ellas.

El castaño sintió como alguien cubría sus hombros con una manta.

-¿No puedes dormir?-pregunto Blaine haciéndose espacio entre la cama y la espalda de Kurt para rodearlo con sus piernas sentándose tras él.

-Las noches en NY no son tan hermosas…-dijo Kurt apoyando su cabeza sobre el hombro de Blaine.

-Supongo que las luces de la gran ciudad opacan un poco el brillo de las estrellas…-respondió quitando con la palma de su mano una lágrima que caía aun por la mejilla del castaño.

-No es solo eso, todo parece más brillante y más hermoso cuando estoy contigo.

-¿Y luego dices que soy yo el que se vuelve cursi cuando hacemos el amor?-dijo el moreno envolviendo a Kurt entre sus brazos aún más fuerte, procurando que estuviese abrigado.

-Este tiempo que hemos estado separados, me he dado cuenta de eso, hay días en los que camino un poco luego del trabajo, todo está ahí Blaine, las luces, los hermosos parques, los teatros anunciando grandes obras… todas esas cosas con lo que soñaba cuando era niño, pero…

-¿Pero?-dijo pegando sus labios a la nuca de Kurt.

-Simplemente parece que no tienen tanto sentido estando solo, sé que tal vez suene estúpido, pero… NY no es tan grandioso sin ti, es solo una ciudad más.

-No es estúpido Kurt, se perfectamente a que te refieres… yo… sabes que amo cantar, y estar en el club y todo eso pero… pareciera que ya nada tuviese sentido tampoco.

Ambos guardaron silencio durante unos segundos, sus respiraciones resonaban con fuerza en la habitación.

-Yo me cambie de escuela por ti, y no estoy arrepentido de eso en absoluto, pero ahora que tú no estás… siento que permanecer allí no tiene la menor importancia.

-¿Quieres volver a Dalton?-pregunto casi susurrando el castaño.

-No es eso, es cierto que extraño mucho a mis amigos, pero…no dejaría Mckinley, es el lugar donde tengo más recuerdos tuyos, además no podría dejar a los chicos así como así…

-¿Entonces?

-Es extraño, me siento perdido, están todas esas personas a mi alrededor, pero no está ese rostro familiar, el único rostro que necesito ver… y sé que todos se preocupan por mí, pero es algo que no puedo evitar, simplemente hay un vacío que no puedo llenar, las imágenes de nosotros en cada rincón de la escuela siempre vienen a mí, pero luego miro a mi alrededor y tú no estás, eso hace que me sienta como un extraño en el que se supone es mi lugar.

-¿Que se supone que debo hacer cuando me siento así?-pregunto Blaine susurrando en el oído de Kurt quien lo escuchaba en silencio.

-Cuando me siento así, me repito que esta es la única manera de que tengamos un final feliz.

-¿Y funciona? ¿Te sientes mejor pensando en eso?

-Claro que no, pero es lo único que puedo hacer Blaine, no puedo simplemente dejar todo y volver, créeme que lo he pensado, pero luego me detengo, y…

-Es nuestro futuro.

-Así es, es por nuestro futuro.

-No me gusta sentirme así-dijo el castaño envolviéndose en los fuertes brazos de Blaine.

-A mí tampoco Kurt-respondió hundiendo su rostro en el cuello del castaño.

A la mañana siguiente despertaron con el sol golpeando sus rostros.

-Buenos días-dijo Kurt envuelto en los brazos del moreno.

-No sabes cuantas veces quise despertar así durante estas últimas semanas.

-Bueno, ya estoy aquí… no tienes que seguir esperando.

-Pero solo será por hoy…

-Lo sé, ¿crees que yo no quiero seguir despertando entre tus brazos? ¿Sintiendo tu olor en la cama? ¿Sabiendo que solo tengo que estirar mi mano para tocarte, o que en cualquier momento puedo correr hasta donde estés y besarte las veces que quiera?

-Creo que es con lo tendremos que vivir durante los próximos meses ¿no es así?

-Eso creo, ahora solo pienso en que cada vez queda menos tiempo para te mudes conmigo a NY…

-Ok…intentare ser más positivo, veré el vaso medio lleno…

-Así me gusta-respondió Kurt besándolo varias veces.

-Necesitare una dosis extra de besos hoy, quien sabe hasta cuándo no podré probar tus labios otra vez.

-Pero eso puede ser contraproducente…

-¿Por?

-Si te beso mucho hoy, tal vez después ya no necesites ir a verme, quien sabe y ya no extrañes mis besos.

-Eso jamás, tus besos son parte de mi dieta, ¿no ves como he estado por no tenerlos? Creo que incluso estoy más delgado.

-Estás loco Blaine

-Claro que no, mírame estoy casi en los huesos, pronto no tendrás mucho que tocar…-dijo con tono de preocupación.

-Entonces tendré que besarte mucho hoy, de verdad me encanta tocarte.

Blaine le sonrió ampliamente, extrañaba esos momentos juntos, sus bromas y conversaciones sin sentido.

-Tendremos un gran día hoy-comento Kurt acomodándose sobre el pecho desnudo del moreno.

-Sí, ¿me acompañaras al ensayo?…estará Finn.

-Claro que te acompañare-respondió el castaño volviendo a aferrarse al cuerpo de Blaine por última vez antes de prepararse para ir a Mckinley.

Kurt pasó gran parte de la mañana dando vueltas por el colegio mientras Blaine asistía a sus clases, visito a Mr. Schue, a la señorita Pillsbury y a Sue.

-“Soy hombre libre” decía un mensaje que le envió el moreno al terminar sus clases.

-¿Como que hombre libre?, Ud. no es completamente libre, ¿olvido acaso el anillo que lleva en su dedo?-pregunto Kurt esperándolo afuera de su salón.

-Perdón amo… olvide que tengo una cadena atada al corazón y que esta va directamente amarrada a Ud.-respondió haciendo una reverencia.

-Ven aquí…-le dijo tomándolo del rostro para darle un pequeño beso.

Ambos caminaron de la mano por los pasillos llenos de alumnos, algunos recordaban al castaño y lo saludaron con un pequeño gesto, otros alumnos de primer año se sorprendieron de ver a Blaine tomado de la mano de aquel chico al que no conocían.

-¿Vamos a la sala de ensayo?-pregunto Blaine.

-Claro.

Al entrar Kurt se encontró con Finn, quien hablaba con un chico moreno al que no conocía, había también una chica vestida de porrista y otra muchacha que conversaba con un chico rubio que llevaba la chaqueta del equipo de futbol y un rostro familiar.

-¡Kurt!-dijo Finn al ver entrar a su hermano, le dio un fuerte abrazo alejándolo del lado de Blaine, hacía mucho tiempo que no lo veía.

-¡Hey! grandulón, para ahí…tenemos un par de asuntos que conversar.

-Siento no haberme despedido de ti.

-Lo sentirás más cuando me escuches Finn, ¿cómo es eso de que simplemente te marchas sin decir adiós? … creí que me tenías un poco de cariño.

-Mira a quien tenemos aquí…-dijo el chico del mohicano abrazando a Kurt y desordenando su cabello.

-¡Con mi cabello no Puck!-lo regaño de inmediato intentando zafarse de los brazos de su amigo.

-Déjalo tranquilo-intervino Finn solo para unirse a Puck y molestar a su hermano.

-¡Blaine!-grito el castaño pidiendo ayuda.

-Ud. dos no vengan a pedirme ayuda cuando quiera vengarse-advirtió el moreno a sus dos amigos provocando que ambos se detuviesen al instante.

-¿No te vengaras o si?-pregunto Finn.

-¿Tu qué crees?

-Ok-dijeron los dos muchachos levantando sus manos en señal de rendición.

-¿Tu qué haces aquí Puck?-pregunto Kurt mientras arreglaba su cabello.

-Visita familiar…

-¿Entonces es cierto?

-Si… ese de allá, Jake-dijo el moreno apuntando hacia su hermano.

-¡Hola!- saludo Sam seguido del resto de los muchachos del club.

-Kurt… volviste por Blaine…

-Asi es Britt…

-¿Te quedaras aquí para siempre?

-No, tengo que volver esta noche a NY.

-¿Te vas a llevar a Blaine?

-No, él tiene que quedarse aquí.

-¿No vas a dejarlo cierto?

-No Britt, no te preocupes por eso.

La rubia se fue a sentar y comenzó a jugar con su teléfono.

-¿Que le ocurre?-pregunto el castaño a Blaine.

Ni idea, ha estado así durante unos días… Supongo que tiene que ver con Santana-dijo encogiéndose de brazos.

-¿Unique?-dijo Kurt acercándose a ese rostro familiar al que había visto hacia un rato.

-Pero si es mi inspiración-respondió Wade dejando la conversación con su compañera y dirigiéndose al castaño.

-No me dijiste que se había trasladado Blaine-recrimino a su novio.

-Muchas cosas en la cabeza-dijo en defensa.

-Te dije el año pasado que tal vez pensaría en un cambio, necesitaba estar en un lugar donde me aceptaran.

-Como verán tenemos visitas-dijo Mr Schue dejando su maletín sobre el piano de Brad.

-Indeseables…-dijo Jake dándole una mirada a Puck.

-¿Perdón?-dijo ofendido Kurt.

Jake rio ante la reacción del otro muchacho.

-Perdón… no lo decía por ti…

-Más te vale… porque él también es como mi hermano, así que lo respetas-dijo un poco molesto Puck.

-Perfecto, entonces no necesitas de otro hermano… puedes irte.

-Vasta de peleas por favor-intervino Mr. Schue.

-Bueno, ¿pueden presentarse muchachos?, para quienes aún no los conocen-volvió a hablar el profesor.

-Ok… Noah Puckerman… hermano de Jake Puckerman, amigo de Finn Hudson, ex – integrante del club, y casi hermano de este de acá-termino de decir pasando su brazo por el hombro de Kurt.

-Ya saben quién soy, Finn Hudson, ayudante de Mr. Schue, amigo de Puck, ex-integrante del club y hermano de este de acá-dijo riendo e imitando el acto del chico del mohicano.

-Ok…-dijo Kurt zafándose de los brazos de Finn y Puck.

-Soy Kurt Hummel, trabajo en la revista Vogue, tomo algunas clases en la academia de Artes Dramáticas de Nueva York, ex –integrante del club… y al parecer burla de estos dos…y lo más importante…

-Mi novio-interrumpió Blaine parándose junto a él y dándole un beso en la mejilla.

-Por él era entonces que andabas lloriqueando por los pasillos…-dijo Kitty riendo.

-El no andaba lloriqueando-dijo Sam molesto.

-Es una forma de decir…

-Ok…creo que hay una nueva Santana en el grupo-le susurro Kurt a Blaine.

-Peor Kurt… peor.

-Bueno, bueno…todos siéntense-dijo el profesor.

-¿Alguna idea para las seccionales?

Los muchachos comenzaron a mirarse entre ellos, nadie dijo nada.

-Ok…creo que veremos eso más adelante-termino por decir Mr. Schue ante la poca participación.

-¿Qué les pasa?-dijo Kurt un poco molesto mirando a todos en el salón.

-¿Por?

-¡Pareciera que no quieren estar aquí! ¡Tina! Nosotros nos peleábamos por proponer algún tema o por tener un solo en una competencia… ¿qué ocurre? ¿Britt? ¿No quieres hacer algo de Britney? ¿Artie, hacer un video?

-¿No crees que estas exagerando?-dijo Jake.

-No, no estoy exagerando, pronto serán las competencias… ¿y supongo que se presentaran en la obra anual de la escuela también o no?

-En realidad eso es algo de lo que les hable-intervino el profesor.

-El año pasado hicimos West Side Story… ¡adicioné dos veces! ¿Y ud. me están diciendo que ni siquiera están preparándose para la obra?

-Yo les propuse hacer Grease-dijo Finn.

-Buena elección Finn.

-Es cierto muchachos, tenemos que hacer algo pronto-dijo Artie apoyando las palabras de Kurt.

-Bueno, si ustedes no quieren cantar…yo sí, ¿puedo?-dijo buscando la aprobación del profesor.

-Adelante Kurt.

-¿Alguien me acompaña?-pregunto el castaño provocando que se le unieran Blaine, Artie, Britt, Tina, Sugar, Sam, Puck y Finn.

-Perfecto, como en los viejos tiempos-comento Will sonriente sentándose para escuchar a sus alumnos.

-¿Qué? ¿Quiere que comencemos a pelear por las canciones?-pregunto Kitty acercándose a la silla del profesor

-Prefiero que hagan eso a que se peleen por asuntos que no tienen que ver con el coro.

Finn se sentó en la batería, Puck tomo una de las guitarras, Blaine se sentó al piano y el resto acercaron los micrófonos.

Kurt les dijo que cantarían y comenzaron a tocar apoyados por la banda de siempre.

Finn comenzó a dar ritmo con la batería, al instante se unió Blaine en el piano y posteriormente Puck con la guitarra. Kurt y el resto empezaron a hacer las armonías vocales, se les hizo muy sencillo, era como si no hubiesen pasado esos meses sin verse, sin hacer lo que les gustaba, juntos otra vez, como un grupo.

Sus amigos comenzaron a juntarse en parejas o tríos, cada cual sabía perfectamente con quien unir su voz para que el conjunto sonara perfecto. Kurt en la voz principal animaba al resto de sus compañeros a participar, se acercó a Blaine y se sentó junto a él en el piano antes de seguir cantando.

-¿Pueden ver qué es lo que les hace falta muchachos?-les pregunto el profesor a los jóvenes sentados junto a él.

-¿Saben desde cuando ellos no se ven? ¿Desde cuándo no cantan juntos? Miren llevamos un mes ensayando y aun no podemos lograr que una canción termine sin que uno de Ud comience a gritarle al resto.

Finn dejo la batería en manos de uno de los muchachos de la banda de Jazz para poder unirse al grupo que cantaba, Puck le siguió sin soltar la guitarra, Blaine por su parte seguía sentado al piano, esperando un buen momento para dejarle el lugar a Brad y unirse al resto, a Kurt, solo quería cantar a su lado, podía ser esta la última vez en quien sabe cuánto tiempo, y era algo que extrañaría.

En este momento los muchachos se acercaron a los nuevos integrantes del coro, invitándolos a cantar con ellos, porque ahora este era su coro, y tal como lo habían hecho para despedirse el año anterior, debían decirles cuan importantes eran ellos para mantenerlo vivo, debían protegerlo.

Con un poco de temor uno a uno Jake, Kitty, Marley, Joe, Ryder y Wade se unieron, tomaron posición al lado del resto de los muchachos, Mr. Schue los miraba desde su puesto, orgulloso, durante la mañana había tenido una conversación con Kurt, y él le había dicho que podría ayudarlo a unir al grupo, Kurt siempre había sido el alma del coro, ciertamente Rachel era la líder, pero Kurt…el los mantenía unidos, desde el principio se había transformado en uno de los más queridos, luego de todo lo que tuvo que pasar sus compañeros se aferraron más a él, su carácter también hacia que lo respetaran, era un chico especial y todos los sabían.

Blaine miraba a Kurt desde su lugar, con admiración y lleno de amor, se acercó a él y lo tomo de la cintura, el castaño lo beso en los labios antes de seguir cantando, cada cual cumpliendo su rol, en esa enorme máquina que era el Club Glee.

Todo el grupo siguió cantando, ahora si eran un grupo, ahora si comenzarían a disfrutar lo que hacían…

Mr. Shue dio por terminado el ensayo y cada cual emprendio rumbo a su casa.

-Gracias-dijo el profesor al grupo de muchachos que hablaban a la salida en los estacionamientos.

-Para eso estamos-respondió Puck apretando con fuerza la mano de su profesor.

-Espero verlos pronto.

-Nosotros también, recuerde que hay una boda pendiente-dijo Kurt despidiéndose.

Luego de unos instantes Jake se decidió a acercarse al grupo.

-Disculpen por el recibimiento que les di.

-No hay problemas… olvido rápido-dijo Kurt sonriéndole al muchacho, le recordaba al Puck de primer año, un poco agresivo, pero un buen chico en el fondo.

-Gracias por haber venido-le dijo Jake a su hermano.

-Te dije que estaría por aquí si me necesitabas, somos hermanos.

-Es solo que… ya sabes, realmente no te conozco, y para mi es difícil.

-Siempre es difícil acostumbrarse a tener un hermano de un día para otro-dijo Kurt dándole un golpe en el brazo a Finn.

-Mi mama se casó con su papa-aclaro Finn ante la mirada de Jake.

-Oh…

-Es difícil tener un hermano como Kurt…-añadió, provocando una mirada amenazante del castaño.

-Ustedes, se ven realmente diferentes-dijo Jake intentando no sonar ofensivo.

-No creas, somos más parecidos de lo que piensas, a excepción de que a mí no me gustan los hombres, menos Blaine -dijo divertido Finn.

-¡Oye!-reclamo Blaine quien solo observaba a los muchachos hasta ese momento.

-Es extraño, todos ustedes son tan distintos, pero cuando estaban cantando… simplemente…

-Eso es porque somos amigos Jake, mírame, fui un pandillero, estuve en una correccional, cuando nos conocimos te dije que aquí aprendí a ser un hombre de verdad, y ¿sabes gracias a quién? A estos chicos, al futbolista que creyó que podía haber dejado embarazada a una chica sin haberse acostado con ella, gracias a Blaine, quien me demostró que cuando uno se equivoca pero quiere arreglar las cosas no debe dejar de intentarlo, por muy malos que sean los resultados en algunas ocasiones, querer es poder, que el cobarde no es el que llora, es el que deja de intentar cuando las cosas se ponen difíciles y Kurt…, lo vi levantarse cada vez que alguien lo agredía, incluso cuando era yo el que lo hacía, lo vi enfrentarse a un gigante que lo acosaba, lo vi llorar por el idiota de novio que tiene cuando lo dejo, pero también lo vi perdonar y ser lo suficientemente maduro para entender los motivos que tenía, ellos me hicieron ser quien hoy soy, y créeme soy mucho mejor que el tipo que llego a este colegio tres años atrás, me hicieron sentir por primera vez que podía hacer algo bien, ahora es tu turno Jake, esta gente, te dará la oportunidad de demostrar cuanto vales.

Kurt miro a Blaine y le sonrió a el y a sus amigos, estaba orgulloso de ellos, y de lo que habían logrado juntos, cada uno formaría parte de la vida del otro por siempre, aunque las cosas en ocasiones se pusieran difíciles, pero sabia que siempre estarían ahí, siempre, ellos también eran parte de un hogar.

Hola a todos! espero y les haya gustado el capitulo....fue largo lo se...disculpa si se aburrieron, pensaba dividirlo pero después me arrepentí, jajaj no sabia donde cortarlo... Gracias por los comentarios, como siempre se les quiere montones y espero que todos estén bien! Saludos, besos y abrazos psicológicos y virtuales.

-Es hora de partir otra vez…

-Eso parece-dijo Blaine tomando las manos de Kurt entre las suyas.

-Pero esta vez soy yo quien se va.

Blaine se quedó en silencio mirando las manos de Kurt entre las suyas, acariciándolas, evitando mirar al castaño, sabía que si lo hacía comenzaría a llorar.

Kurt puso las manos del moreno alrededor de su cintura y el paso sus brazos alrededor del cuello de su novio.

-No es necesario que digas nada-susurro besandolo.

Blaine solo lo abrazo con más fuerza, respirando profundo por última vez antes de dejarlo partir.

-Te amo Blaine, prométeme que no lo olvidaras por favor.

Blaine sin decir una sola palabra afirmo moviendo su cabeza sin separarse del cuerpo del castaño

-Ok… ¿me visitaras pronto?-pregunto Kurt al oído de Blaine.

-Si…

-Estaré esperándote entonces.

Blaine se separó unos centímetros, y por fin miro a Kurt a los ojos.

-Estas llorando Kurt…-dijo el moreno quitando una lágrima que caía por las rosadas mejillas del castaño.

-Tú también…-respondió Kurt dándole una media sonrisa e imitando el movimiento de Blaine.

-Ok… vamos a estar bien…

-Así es, pronto nos veremos, y luego será navidad y tendrás vacaciones, podrás venir a visitarme con más tiempo y podremos pasear, te llevare a la revista para que conozcas a Rose, estoy seguro que Chris y Dar te agradaran…

-Seguro que si…

-Y podrás dejarle claro a Chase que no tiene ninguna posibilidad conmigo.

Blaine sonrió secando sus lágrimas y observando a Kurt con cariño.

-Solo necesitas mostrarle esa hermosa sonrisa y sabrá que no puede competir-agrego Kurt acariciando la mejilla de Blaine.

-Voy a extrañarte.

-Y yo a ti, pero seguiremos con nuestras conversaciones nocturnas, intentare enviarte más mensajes, y prometo que no volveré a perderme una de tus llamadas.

-No te preocupes Kurt, sé que estarás ocupado.

-Nunca volveré a estar lo suficientemente ocupado como para dejarte de nuevo Blaine, aprendí mi lección, no quiero volver a verte triste por mi culpa.

-Estoy bien.

-Y así quiero que te mantengas, recuerda…

-Lo se, debo estar calmado, después de haberte visto por lo menos me siento más tranquilo.

Los muchachos se despidieron con un dulce beso en los labios, Kurt debía partir ahora o perdería su vuelo.

Esto parecía estar volviéndose cada vez más difícil, cada vez más doloroso, cada despedida era como volver a caer, estrellarse de frente con la realidad, con esta realidad que habían elegido vivir, con la realidad de estar separados.

El tiempo pasó lentamente, faltaban solo pocas semanas para la navidad, NY estaba más frio que nunca, Kurt le mostraba a diario la vista del departamento a Blaine a través de la cámara de la computadora.

-Recuerda salir abrigado por la mañana-dijo Blaine apoyando su rostro sobre su mano al otro lado de la pantalla.

-Sí, papa….

-Solo estoy cuidándote Kurt.

-Ok... eres peor que papa.

-¿Llamaras mañana?

-Claro que si, a la hora de almuerzo, recuerda mañana será nuestro día de espagueti.

-Lo sé, están preparados-respondió Blaine, ambos habían acordado que por lo menos un día en la semana llevarían el mismo almuerzo, a Kurt le parecía romántico hablar por teléfono mientras imaginaban que comían juntos, era como cuando estaban en la escuela, sentados bajo un árbol o en la mesa que compartían con el resto de sus amigos.

-Hablamos mañana Kurt, te amo.

-Te amo, buenas noches.

A la mañana siguiente Kurt miro por su ventana y se encontró con un hermoso paisaje, una delgada capa de nieve cubría los autos estacionados afuera.

-¡Rachel, despierta!-dijo emocionado a su amiga.

-¿Qué pasa?…hoy tengo clases por la tarde Kurt, déjame dormir….

-¿Quieres perderte nuestra primera nevada en NY?

-¿Esta nevando?

-No en realidad, pero anoche si…aunque parece que solo fue un aviso…pero mira los autos.

Rachel se levantó y corrió a mirar por la ventana.

-Es hermoso.

-Me gustaría que Blaine estuviese aquí-dijo con pesar el castaño.

-Piensa en que este es el primer aviso de que navidad se acerca…y con eso las vacaciones…y la visita de Blaine-respondió Rachel abrazando a su amigo.

-Pero aún falta poco más de un mes.

-Pero Blaine dijo que te visitaría.

-Lo sé, pero aún no sabe cuándo, las competencias y sus labores de presidente lo tienen lleno de actividades.

-Estoy segura que aparecerá Kurt, Blaine debe estar desesperado por verte también.

Kurt dio un fuerte suspiro y comenzó a recoger sus cosas, un abrigo y la bufanda que Blaine le había regalado hacia un tiempo.

-¡Kurt tu almuerzo!

-Mi almuerzo…

-¡Blaine se enojaría si no lo llevas!-dijo sacándolo del refrigerador y entregándoselo.

-Lo sé, hoy tenemos nuestro almuerzo compartido.

-Nos vemos en la noche Kurt.

-Nos vemos… y recuerda limpiar el desorden que dejaste anoche en la sala.

-Lo se… señor gruñón.

-Ya te dije, solo aguanto el desorden de Blaine.

La morena le sonrió y le dio un beso antes de que su amigo saliera.


-¿Y, Blaine? ¿Viajaras a ver a Kurt pronto?-pregunto Finn dándole una mirada al moreno.

-Es lo que planeo… pero ya sabes que estoy realmente ocupado con lo de la presidencia, y las competencias y…

-Toma las cosas con calma, yo me encargo del coro, las cosas están mucho mejor desde la última visita de Kurt, delega algo de responsabilidad a Sam, estoy seguro de que el no tendrá problemas, puedes decirle a Artie que le ayude.

-Eso hare…

Los ensayos con ND iban muy bien, Finn les había informado que competirían contra los Warblers nuevamente por lo que todos se esforzaban el doble, aun habían algunas complicaciones entre Marley y Kitty pero realmente habían disminuido en comparación a lo que pasaba un tiempo atrás.

-No puede ser…

-¿Qué ocurre?-pregunto Sam mirando el rostro de Blaine quien miraba la computadora.

-No podré viajar a ver a Kurt hasta la navidad…

-¿Por?

-No quedan boletos hasta navidad… los precios subieron así que se los cupos que quedaban se agotaron, era la última oportunidad de comprar…

-¿Necesitas dinero?, podríamos hacer alguna campaña o tomar los recursos de la presidencia…

-¿Qué? ¡Cómo se te ocurre Sam!

-Pero si Britt uso parte de ese dinero el año pasado para salir con Santana, ¿por qué tu no podrías tomar prestado un poco?

-Sam, el problema no es el dinero… el problema es que yo pensaba visitarlo antes, pero no lo veré hasta dentro de un mes.

-Mmm… pero él podría venir…

-No puede… por eso yo viajaría, tiene mucho trabajo, y como él fue el quien vino la última vez, se supondría que esta vez yo iría, quiere que conozca a sus amigos y a Isabelle.

-Bueno…tendrá que esperar, realmente ahora no está en tus manos poder viajar ¿no es así?

-Si…

-¿Y en tren?

-Perdería mucho tiempo, pasaría más tiempo viajando que estando con él.
***

-¡Kurt! Justo a quien estaba buscando.

-¿Si?-respondió el castaño ante los gritos de su jefa.

-Tengo un serio problema.

Kurt se asustó de solo pensar que el fuera uno de esos problemas, temía que su estancia en la revista hubiese llegado a su fin, y realmente estaba disfrutando su trabajo.

-¿Puedo ayudarte en algo? ¿Hice algo mal?

-No Kurt, es solo que como sabrás hay mucho trabajo estas semana, y…

-¿Y?

-Tengo que viajar.

-¿Y?

-Y necesito que alguien se haga cargo de las reuniones con los fotógrafos, contacte a las modelos para el desfile, organice la recepción de los invitados, envíe las invitaciones, en general que se encargue de que todo salga perfecto.

-¿Y?...-respondió el castaño tomando la carpeta que tenía en las manos y apretándola contra su pecho, sentía que su corazón explotaría en cualquier instante.

-¿Como que y? te necesito.

-¿Yo? ¿Pero si apenas llevo un par de meses aquí?

-Y has aprendido mucho, todos están llenos de trabajo, las ediciones navideñas de la revista, las cenas de beneficio, actualizar nuestro blog…

-¿Cuánto tiempo estarás fuera?-pregunto Kurt un poco asustado pero sin poder controlar completamente su emoción.

-Dos semanas… Kurt eres mi salvación… ¿por favor?

-Bueno, supongo que para eso me contrataste ¿no?

-Si…

-Ok, pero voy a necesitar algunos consejos…-dijo intentando mantener la calma, esta era una gran oportunidad para él.

-Pídele ayuda a Chase, él siempre se encarga de contactar a la gente de producción, así que puede darte una mano, Chris conoce a las personas de la agencia de modelos, sabes dónde están mis agendas, ahí está toda la información que necesitas.

-Ok…

-¿Entonces estas a cargo?-preguntó Isabelle para confirmar que Kurt había entendido bien lo que le acababa de pedir.

-Eso creo…

-Perfecto, yo viajo esta noche así que mañana comienzas.

-Pero…

-¿Qué? Lo harás bien, tranquilo… no es tanto trabajo…

Kurt le dio una media sonrisa y salió de la oficina, se acercaba la hora de almuerzo, tenía que llamar a Blaine para contarle su ascenso temporal.

-¡Hola!-dijo el castaño lleno de energías cuando su teléfono sonó.

-Hola Kurt, ¿listo para almorzar?

-Si…

-¿Tienes tiempo para conectarte por la computadora o solo lo hacemos por el teléfono?

-¿Tienes el computador cerca?

-Si…

-Perfecto, así podré verte.

-Unos segundos más tarde Blaine y Kurt ya estaban mirándose a través de la cámara.

-Kurt, tengo que decirte algo…

El castaño trago despacio un poco preocupado por las palabras de su novio.

-No podré viajar antes de navidad.

-Pero… ¿por qué?

-No hay vuelos disponibles Kurt, debí haber revisado antes y comprar un pasaje con anticipación, perdón, pero estuve con lo del musical…y las competencias y…

-Blaine, calma… está bien… solo tendremos que esperar un par de semanas.

-Pero yo de verdad quería viajar a verte…

-Y yo quería que vinieras, pero si no se puede… no hay mucho que hacer al respecto.

-Pero…

-Blaine, está bien…-dijo el castaño intentando que Blaine dejara de disculparse.

Blaine suspiro y comenzó a jugar con los espaguetis en su plato.

-Blaine mírame por favor.

El moreno miro hacia la cámara con el rostro lleno de frustración.

-Está bien bebe-dijo el castaño dándole una sonrisa.

-Serás mi regalo de navidad ¿sí? Será como cuando era niño y esperaba ansioso a que llegara ese día especia donde recibiría lo que había estado pidiendo durante todo el año.

El moreno le dio una amplia sonrisa, lo observo con los ojos llenos de amor, se sentía infinitamente agradecido por haberse encontrado aquel día en Dalton con este ángel, que lo llenaba de alegría y que incluso en los peores momentos era capaz de sacarle una sonrisa sincera.

-Bueno, ahora es mi turno de hablar-dijo Kurt tomando un poco de su lata de bebida.

-Ok…-respondió el moreno concentrándose en su almuerzo.

-Estoy a cargo en el trabajo.

Blaine se ahogó al escuchar las palabras de Kurt.

-¿Qué? ¿Cómo que estas a cargo?

-Sí, Isabelle va a estar fuera dos semana y voy a hacerme cargo de sus reuniones ¡y de organizar un desfile!-chillo emocionado.

-Felicitaciones Kurt… pero, ¿no crees que mucho trabajo?

-Lo es, pero Blaine es una gran oportunidad para mí, si lo hago bien tal vez podré ayudar más adelante en otros asuntos relacionados, además mis compañeros me ayudaran.

-¿Tus compañeros?-dijo Blaine levantando una ceja.

-Si…

-¿Chase también?

-Si…-dijo casi susurrando.

-Mmm…

-¿Blaine, no vas a enojarte por eso o sí?

-No, está bien, es tu trabajo, solo ten cuidado con él, no me gusta.

-A mí tampoco, pero es trabajo…

-Entonces felicitaciones y estoy seguro de que lo harás muy bien.

-Gracias, eso espero…

-Todo saldrá perfecto Kurt….

Los muchachos siguieron hablando, durante unos minutos, ambos debían volver pronto a sus actividades.

-Tienes salsa en la boca Blaine.

-¿Si?-dijo mirándose en la pantalla como si fuese un espejo.

Inconscientemente Kurt acerco sus dedos a la pantalla, luego la retiro lentamente al darse cuenta de que no podría alcanzar el rostro de su novio por mucho que lo intentara.

-Me gustaría estar contigo Blaine.

-Así podrías limpiar mi cara después de comer…

-Claro…

-Perdón por no poder ir Kurt.

-No te preocupes, estoy bien, pero vas a tener que compensarme luego.

-Con lo que quieras Kurt, hare lo que sea por ti.

-Cuidado con lo que dices Anderson.

-Sé perfectamente lo que estoy diciendo-respondió guiñándole un ojo.

-Que tengas un lindo día.

-Tú también, nos vemos más tarde.

-Nos vemos, te amo.

-Te amo, hasta luego.

-Hasta luego.

-¿Por qué esa cara? ¿Estas asustado por tus nuevas responsabilidades?-pregunto Isabelle al ver a Kurt pensativo caminar por el pasillo.

-No… es solo que…

-¿Qué?

-Nada, es algo personal.

-¿Le ocurrió algo a tu familia?-pregunto preocupada Isabelle tomando del brazo al muchacho.

-No, es solo que esperaba ver a mi novio antes de navidad.

-¿Y?

-No podrá, ya sabes, antes de navidad…todo está vendido, y encontrar tiempo en la escuela es difícil para él.

-Lo siento… ¿es el hijo de Elizabeth no?

-Si…

-¿Blaine?

-Sí, Blaine…

-Mira cómo te cambia la cara cuando dices su nombre-dijo divertida Isabelle apretando la mejilla del castaño.

Kurt se avergonzó, sentía sus mejillas rojas y solo atinó a mirar el suelo.

-Amor adolescente, nada más hermoso… solo tienes que ser paciente Kurt, ya te encontraras con tu novio.

-Lo sé, es que tenía muchas ganas de verlo…

-Bueno, ahora solo tendrás que concentrarte en el trabajo y veras que no te darás cuenta de cómo pasa el tiempo.

Kurt asintió con la cabeza y se despidió para seguir haciendo un trabajo que tenía pendiente.

La semana se volvió cada vez más difícil, Kurt tuvo que comenzar su día una hora más temprano para poder alcanzar a organizar todo, su día estaba absolutamente organizado, cada minuto, tal como lo estaba la vida de su jefa, Kurt se preocupó especialmente de dejar tiempo para sus charlas con Blaine, pero tuvo que sacrificar sus descansos y cada segundo que tenía libre, llegaba cerca de las 11 de la noche a su casa, hablaba con Blaine y trataba de dormir, incluso los ensayos con Rachel habían sido cancelados por esas semanas, Kurt estaba histérico, Rachel tenía que aguantar sus inesperadas explosiones, a veces reía como un loco, otras lloraba y en ocasiones se quedaba como en el espacio, con la mirada perdida en las tantas carpetas que había movilizado desde el trabajo a su casa.

-¿Kurt…?

-¿Si?

-Tienes que dormir…

-No puedo-respondía como un zombie.

-Son las tres de la mañana Kurt, tienes que descansar, debes levantarte a las seis…eso te deja solo tres horas de sueño…

-Tres horas perdidas querrás decir.

-Kurt voy…

-Ni te atrevas Berry, abres la boca y tendrás problemas.

-Pero…

-Nada, Blaine debe pensar que estoy justo a esta hora en los brazos de Morfeo, descansando.

-Pero…

-Nada.

-Estoy bien-dijo dando por terminada la conversación.

Kurt llegaba apenas con los ojos abiertos a la oficina, tomaba las agendas de Isabelle y comenzaba a realizar llamadas, el castaño no entendía como su jefa podía vivir así, era cierto que Chase y el resto eran de mucha ayuda, pero esto parecía imposible, Kurt comenzó a preguntarse si tal vez él no estaba preparado para algo así, ¿en que había estado pensando Isabelle cuando le encomendó a él, un simple principiante esta responsabilidad?

-¿Kurt?… ¡Kurt!-grito Rose haciendo volver a Kurt en sí.

-Si… ¿necesitas algo?

-Te traje un café… ¿te sientes bien?

-Si…

-¿Seguro?, porque no te vez bien…

Kurt desvió la mirada hacia el reloj que había al lado del teléfono.

-¿Esa es la hora?-pregunto el castaño sin entender.

-Sí.

-Pero si acabo de sentarme…como es que…

-Seguramente te quedaste dormido Kurt…

-Claro que no yo estaba…-dijo perdiendo el hilo de la conversación, recordaba haber estado pensando en si estaba o no preparado para esto, luego pestañeo y… ¿se había dormido en realidad?

-Kurt, son las diez.

-¡Las diez! Tengo una reunión en 15 minutos, donde está la carpeta azul que yo traía-comenzó a decir mientras movía un montón de papeles esparcidos por el escritorio.

-Kurt…

-Si llego tarde tendré problemas… no puede ser, ¡donde quedo!

-¡Kurt! ¡Cálmate!, acaban de llamar, pospusieron la reunión para la tarde.

Kurt se dejó caer sobre el escritorio y suspiro con fuerzas.

-No puedo con esto Rose…

-Si puedes, Kurt lo has hecho estupendo…

-¡Claro que no, mira acabo de quedarme dormido!

-Cálmate…descansa, mira acabo de revisar la agenda y con esta suspensión tienes exactamente una hora libre.

-¿Si?

-Si…

-Ok, puedes llamar a Chris para que me ayude con…

-No, solo tomare el teléfono si quieres que llame a tu novio para decirle como estas.

-No, eso no…

-Ok, entonces mira ese suave y agradable sofá que te está esperando, duerme unos minutos, yo vendré dentro de un rato y te despertare si algo sucede.

-Pero…

-¡Nada! A dormir.

-Eres peor que Rachel…-dijo recostándose en cámara lenta sobre el sofá, en cuanto apoyo su cabeza sobre uno de los cojines, cayo profundamente dormido.

El resto de la semana y los días que le siguieron no fueron mejores, era un caos, el desfile se acercaba peligrosamente y aun había mucho que hacer, Kurt llamaba a diario a Isabelle para comentarle como iba todo, y aunque la mujer intentaba calmar al castaño éste parecía estar cayendo poco a poco en la desesperación.

-Tranquilo Kurt, solo llama a otra persona.

-Isabelle, él era el único que podía hacer ese trabajo-decía Kurt abatido.

-Claro que no, busca en mi agenda, ahí aparecen otros distribuidores con los que te puedes comunicar.

-Ok…

-Adiós Kurt…y tranquilízate por favor.

-Está bien… adiós.

-¿Un café?-dijo un muchacho de cabello oscuro asomado en la puerta de la oficina de Isabelle y que temporalmente se había transformado en el cuartel de comunicaciones de Kurt.

-No Chase, estoy ocupado.

-¿Y si yo voy por él y te lo traigo?

-No Chase, gracias.

-¿Seguro? Porque para mí no es problema traerlo…

-Ok, ok… tráeme el café de siempre…

-¿El de siempre?

-Lo siento, generalmente es Blaine quien me ofrece café…y el conoce mi orden.

-¡Ouch!…eso dolió…-dijo colocando una mano en el corazón y poniendo un rostro de dolor.

-Chase, te lo he dicho muchas veces…

-Lo sé, no tengo oportunidad de competir con tal perfección de hombre ¿no?

-Exacto-respondió si despegar la vista de una carpeta.

-¿Entonces? ¿Te traigo un café especial?

-Tráeme lo que sea.

-Por cierto, hoy llamaron a Isabelle mientras estabas con los fotógrafos.

-¿Si? ¿Quién era?

-Un joven… no recuerdo su nombre… quería saber algo acerca de una cita que tenía con ella.

-¿Y no recuerdas como se llamaba? ¿No te dejo un número para llamar? ¿Nada? ¿Cómo fue que no preguntaste Chase?-dijo el castaño molesto.

-Disculpa, yo no soy la secretaria… además están todos tan ocupados que nadie estaba cerca… de todos modos dijo que volvería a llamar.

-Ok… sabes algo… no me traigas ningún café, tengo que salir-dijo levantándose de la silla y pasando por el lado de su compañero intentando esquivarlo.

-Adiós…

-Adiós-respondió Kurt de mal humor.

Chase sintió un zumbido proveniente de la chaqueta colgada de la silla que hace un minuto ocupaba Kurt, dejo que sonara mientras buscaba unos papeles. Luego de unos segundos sintió nuevamente el mismo sonido.

Cuando pensaba en contestar sonó el teléfono de la oficina.

-Ok…creo que ahora si soy la secretaria-se dijo a si mismo tomando el teléfono.

-¿Bueno?

-Buenos días…

-Oficinas Vogue, con quien desea comunicarse.

-¿Se encuentra el señor Kurt Hummel?

-¿De parte de quién?

-Soy Blaine, Blaine Anderson, intente llamarlo al celular pero no logre contactarlo, pensé que estaría allí.

-Blaine… hola, soy Chase, un amigo de Kurt.

-Oh… Chase, si he escuchado un par de cosas de ti.

-Espero que sean cosas buenas-dijo riendo.

-Claro… ¿sabes dónde está Kurt?

-Acabo de estar con él, pero salió y dejo su chaqueta y su teléfono aquí, por eso no contesto.

-¿Sabes si volverá dentro de mucho?

-No lo sé, solo dijo que saldría.

-¿Puedo hacerte una pregunta?

-Claro…

-¿Cómo está el?, digo ¿cómo está llevando esto de estar a cargo mientras Isabelle no se encuentra?

-Bien… digo, creo que no está durmiendo mucho pero llega a la hora, perfecto como siempre, con el rostro un poco agotado, pero bien, y luego están sus gritos y su exageraciones y sus “perdón a todos”… debes saber lo adorable que es.

A Blaine definitivamente no le agradaba este tipo, ahora sabía exactamente a qué se refería su novio con ese extraño sentimiento que le provocaba Sebastian cada vez que lo veía, “ganas de arrancarle la cabeza y dársela a los pájaros”, esa era justo la expresión que el castaño usaba.

-¡Donde están las muestras de telas!-se escuchó a lo lejos.

-Creo que esa es la melodiosa voz de Kurt-dijo riendo Chase intentando asomarse por la puerta.

-Te paso con él, déjame decirle que estas llamando.

-Gracias… por cierto Chase, ¿puedo decirte algo?

-Sí, claro.

-Mantén tus manos lejos de él, Kurt y yo estamos juntos y si me entero de que te acercaste más de lo debido no dudare en ir a NY y partirte la cara.

-Vaya…novio celoso, no sabía que Kurt te había contado tanto de mí.

-Solo quería que supieras que él no está solo, y el hecho de que yo no esté ahí con el no significa que no me enterare de lo que hagas y que no haré nada por protegerlo ¿entiendes?

-Claro… solo deberías asegurarte de no dejarlo solo mucho tiempo, yo no soy el único que nota lo guapo que es Kurt… por cierto aquí viene, adiós Blaine-dijo entregando el teléfono al castaño y susurrándole que se trataba de su novio.

-¡Blaine!

-Hola Kurt, ¿cómo estás? Intente llamar a tu celular pero al parecer lo olvidaste.

-Si… es que salí solo un momento, ¿necesitas algo? ¿todo está bien?

-Sí, solo quería saber cómo estabas, y decirte que te extraño.

-Yo también te extraño Blaine… ¿hablaste con Chase?

-Solo un par de palabras…

-¿Y de que hablaron?

-Solo le aclare un par de cosas y le pregunte como estabas… ¿qué es eso de que no estas durmiendo bien?

-Yo… no es así Blaine… simplemente estoy un poco agotado, hay mucho que hacer aquí…

-Kurt prométeme que te cuidaras.

-Lo hare Blaine…y deja de sonar como mi papa por favor.

-Solo si dejas de comportarte como un niño.

-Está bien señor maduro.

-Bueno, vuelve a trabajar, tengo que entrar a clases.

-Que tengas un lindo día, te amo.

-Te amo.

Dentro de tres días seria el desfile, dentro de cuatro días llegaría Isabelle y dentro de los próximos segundos Kurt pensaba que moriría.

-¿Están enviadas las invitaciones?-dijo Kurt a un grupo de personas sentadas alrededor de una enorme mesa en la oficina de reuniones.

-Todas enviadas y solo faltan tres personas por confirmar, esto será un éxito…

-¿La música Dar? ¿Lograste ubicar a la persona con la que Isabelle quería que trabajáramos?

-Sí, estaba realmente ocupado pero cuando le dije que era para Isabelle acepto de inmediato.

-Perfecto.

-Chase… ¿cómo va lo tuyo?

-Bien… aún tengo una reunión pendiente con las personas de catering…

-¿Como que aún no está listo eso Chase? ¡Te dije hace varios días que hablaras con ellos!

-También me dijiste que viera lo de las luces y te recuerdo que eso no es mi trabajo Kurt, estoy haciendo lo posible por ayudarte pero no puedo hacer todo tan rápido como quisieras.

-Ok, lo siento, Rose, ¿puedes ayudarlo con eso?

-Claro, yo tengo listo mi trabajo.

-Gracias Rose, hazlo sonar como si yo fuese el incompetente-dijo gruñendo Chase.

-Agradece que voy a ayudarte-lo regaño la muchacha.

-Dejen de pelear aún hay mucho que hacer-dijo dando un fuerte suspiro, tomando unas carpetas y abandonando la habitación.

Solo quedaban dos días para que la primera incursión de Kurt en el mundo de la moda se hiciese realidad.

-Kurt…tenemos un problema…-dijo Dar con el rostro lleno de temor.

Kurt dejo caer su cabeza sobre el escritorio.

-Sabía que algo así ocurriría, ¿Que paso?

-La música…

-¿Que paso con eso?

-Creo que la persona que íbamos a contratar está dando un paso al lado.

-Pero si yo mismo hable con él hace unos días y me confirmo que podía ayudarnos.

-Lo sé, pero acabo de hablar y me dice que tiene un problema con el horario y con un par de equipos, cree que sería mejor que contrataran a otra persona.

-¡¿Pero que se cree ese tipo?! me dio su palabra de que trabajaría con nosotros.

-Lo sé, pero ya sabes aun no firmamos el contrato, legalmente podría retirarse sin ningún problema.

-¿Que acaso en NY nadie respeta los acuerdos de palabra?

-No realmente Kurt.

-Voy a llamarlo, no sabe lo que es romper una promesa con Kurt Hummel.

-Ok, yo voy a ver cómo va el resto de las cosas-se despidió el muchacho de risos.


-¿Rachel?

-Blaine, hola.

-Hola, ¿cómo estás?

-Bien ¿y tú?

-Un poco preocupado.

-¿Por?

-Kurt, lo he notado un poco cansado en nuestras últimas conversaciones, ¿tú sabes que le ocurre?

-No…

-¿Rachel? ¿Me estas ocultando algo?

-No, es solo que tengo absolutamente prohibido darte cualquier información al respecto.

-Rachel, hace unos días hable con ese tipo…Chase, me dijo que Kurt estaba muy cansado y que no estaba durmiendo bien, ¿eso es cierto?

-¿Que te ha dicho Kurt exactamente?-pregunto la morena tratando de no dar más información de la necesaria.

-Sabes perfectamente que Kurt jamás me diría si algo está mal, siempre es “todo está perfecto” “esto es más sencillo de lo que pensé” “todos me están ayudando, no te preocupes”…necesito saber cómo esta de verdad, quiero ayudarlo Rachel, por lo menos darle apoyo, pero siento que me está dejando fuera de todo otra vez.

-Blaine, él no quiere preocuparte.

-¿Entonces hay algo que anda mal?

-No realmente, es solo que efectivamente esto era más trabajo del que él pensó, no se detiene en todo el día, trae mucho trabajo a casa, grita, escribe, habla por teléfono, grita, revisa carpetas, llora, grita de nuevo y no duerme.

-Espera ¿dijiste llora? ¿Y que no duerme?

-¿Dije eso?-respondió la morena dándose cuenta de que tal vez había hablado más de lo necesario.

-Lo dijiste Rachel.

-Kurt me va a matar, ¿lo sabes cierto?

-Sí. Pero ya lo hiciste así que habla.

-Bueno, si a veces llora, es solo que se siente sobrepasado por todo, cree que no es capaz de lograrlo, que no tiene el talento suficiente o que simplemente no esta preparado aun para esto, además teme decepcionar a Isabelle, luego se repite, es por nuestro futuro, por cierto no se a que se refiere con eso, pero vuelve a sumergirse en sus papeles y no se detiene hasta que cae dormido sobre el escritorio o hasta que suena la alarma y parte a ducharse para volver a la oficina.

-¿Cuánto lleva así?

-Más de una semana, los primeros días estuvo bien, pero a medida que se acerca la fecha del desfile, está empeorando.

El moreno guardo silencio durante unos segundos, se sentía inútil, tan lejos y sin poder acompañar a Kurt.

-Blaine, el estará bien, solo esperemos a que pase todo esto, el desfile seguramente será un éxito, Isabelle lo llenara de elogios y a Kurt se le olvidara todo este estrés.

-Debería estar ahí con él.

-Blaine, no te atormentes con cosas que están fuera de tu alcance, yo cuidare de Kurt.

-Ok, ¿puedo pedirte un favor?

-Sí, claro, que necesitas.

-No le digas que hablamos, no quiero que ahora empiece a preocuparse porque estoy preocupado por él.

-Eso es tan Kurt….

-Lo sé, por eso por favor no le digas.

-Claro.

-Adiós Rachel.

-Adiós.

-¿Mama puedo hacerte una pregunta?-dijo Blaine colgando el teléfono.

-Claro hijo.

Natty, mujer como extrañe tu fic, esta dosis de Klaine me tenia en un estado de depresion/negacion.
Awmdgahjwsgd se han vuelto a ver *.* Blaine y sus dulces xD! & Pobre Kurt, con toda esa presion.
& el tan Chase, que se cree .___. Blaine ya debe ir a marcar territorio por las oficinas de Vogue.
Blaine debe viajar con el poder de Nightbird hacia NY, para poder pasar más tiempo con Kurt.
Natty ame todo, completamente todo, lo siento po no haber comentado antes.
Pero la finalizacion de año, me hizo sacar todo mi Fua interior *.*
Cuidate mucho, y esperare la actualizacion. ~

Al día siguiente Blaine llego temprano al colegio, llamo a sus amigos del club y los cito a la hora del almuerzo.

-¿Pueden ayudarme con eso?-dijo el moreno bebiendo de su jugo luego de haber estado hablando varios minutos.

-Claro que si-dijo Artie entusiasmado.

-Por supuesto-se unieron todos los demás.

Luego de clases todos se juntaron en el auditorio, Artie comenzó a dirigir, tenían mucho trabajo por hacer y tenía que ser perfecto.

-Kurt… acaban de llamar de vestuario, te necesitan allá…dijo Chris.

-Y tienes que ir a hablar con el tipo de la música también-agrego Rose.

Esa misma noche seria el gran evento, y aun habían cabos sueltos, algo que a Kurt realmente lo desesperaba, no podía fallar ahora, Isabelle había puesto su confianza en él y no podía decepcionarla.

-Kurt, tal vez solo deberías salir a dar una vuelta… tomar algo de aire-sugirió su amiga al ver el rostro del castaño.

-¿Salir y tomar un poco de aire? Seguramente y cuando vuelva ya no tendremos la comida, las luces o las modelos… ¡o quizás no tendremos nada!

-Deja de ser tan pesimista, solo faltan ajustar algunos detalles, la música esta lista, no quiero saber cómo lograste convencer a Thomas de realizar el trabajo… las modelos están confirmadas y los diseñadores estaban felices con las propuestas que hiciste, no entiendo por qué estás tan preocupado.

-Porque esto tiene que ser perfecto Rose, una oportunidad como esta no se me va a presentar dos veces, sé que tu llevas mucho tiempo aquí, eres la mejor en lo que haces… yo llevo solo un par de meses, no tengo ningún tipo de estudio relacionado con todo esto aparte de mi obvio talento natural-dijo bromeando.

-Kurt, has hecho un muy buen trabajo, organizar a toda esta gente no es sencillo a Isabelle le ha llevado años perfeccionarse y ser capaz de llevar este departamento al lugar que ocupa…tu solo estas comenzando.

-Por lo mismo tengo que esforzarme el doble, no quiero que el recuerdo que quede de mi primera aparición en este mundo sea “buen intento”

-Kurt, si Isabelle te dejo este trabajo a ti, es porque cree que eres capaz de hacerlo bien, ¿sabes cuánto tiempo llevo aquí?

-No realmente.

-Cuatro años, Isabelle me dio una oportunidad como esta cuando llevaba dos años, a ti solo te tomo un par de meses ganarte su confianza, ella cree en tu talento.

Kurt cerró sus ojos y respiro con calma.

-Creo que saldré a dar una vuelta.

-No vayas muy lejos, podríamos necesitarte, eres la cabeza de todo esto.

-Solo iré al parque de en frente ¿si?

-Ok.

“Rachel llamando” leyó Kurt en su teléfono al sentir que vibraba.

-¿Aló Kurt?

-Hola Rachel-dijo el castaño respondiendo al celular y sentándose en una banca bajo a un gran árbol en el parque.

-¿Dónde estás?

-En el trabajo…

-Llame a la oficina y no estabas.

-Es que estoy en el parque, salí a tomar un poco de aire.

-Oye, llamaba para contarte que esta mañana hable con Artie.

-¿Y cómo está el?

-Bien, dijo que te enviaban una sorpresa.

-¿Una sorpresa?

-Sí, algo en tu computador.

-No tengo mi computador aquí Rachel, te acabo de decir que estoy en el parque.

-Eso no es problema, solo quédate allí ¿sí?

-¿Que estas tramando?

-¿Yo? Puedo darte mi palabra que yo no estoy tramando absolutamente nada.

-Más te vale, tengo muchas cosas en la cabeza como para estar preocupándome de tus locuras.

-Ok, te dejo entonces, besos.

-Nos vemos en la noche.


-Hola… disculpe ¿el señor Kurt Hummel?

-No se encuentra ahora… ¿puedo ayudarte en algo?

-Necesitaba hablar con el… ¿se encuentra Rose?

-Sí, espere un momento y lo comunico.

-¿Rose?-dijo el muchacho asomándose por el pasillo a su derecha.

-Si… ¿tú eres?

-Puedes hacerme un favor-dijo sin dejarla terminar de hablar.

-Claro.

-¿Puedes hacerle llegar esto?

-Si… ¿pero tú no? …

-Solo pásaselo, él sabrá que hacer.

-Ok, nos vemos.

La muchacha fue al parque de inmediato, Kurt no estaría ahí por mucho tiempo, sabiendo lo nervioso que estaba de seguro estaría conectado desde su celular intentando confirmar a alguno de los participantes al desfile.

-Hola Kurt.

-Rose… ¿ocurrió algo? No me digas que hay problemas con algo extra por favor…

-No. Toma te traje esto.

-¿Un computador?

-Sí, me dijeron que te lo diera.

-¿Quién?

-No lo sé, me lo dieron en recepción. Ábrelo.

Kurt tomo el notebook y lo abrió.

-Tiene contraseña-dijo Kurt mirándolo extrañado.

-Qué extraño…

Kurt sintió que su celular comenzaba a sonar.

-¿Te gusta Katty Perry?-pregunto Rose al escuchar la canción de llamada del teléfono.

-Es Blaine…

-¿Aló?

-¡Hola!

-Oye… ¿tú tienes idea de que se trata la sorpresa de Artie? Me acaban de entregar un computador, con contraseña… esto me suena a una idea de él.

-Algo escuche… ¿y no sabes cuál es la contraseña?

-No Blaine… por eso te estoy preguntando a ti.

-Prueba con New Direction.

-¿Crees que Artie sería tan obv…?

-Claro que es así de obvio-se respondió a sí mismo al ver que se iniciaba sesión.

-Adiós Kurt.

-Pero Blaine…- alcanzo a decir antes de que su novio colgara.

-¿Qué ocurrió?

-Me colgó…

-Vaya…

-¡Hola Kurt!-dijo la imagen de Artie quien hablaba a una cámara, al aparecer el computador había comenzado a reproducir un video.

-¿Un amigo?

-Sí, de la escuela en Ohio-respondió Kurt sonriendo.

-¡Hola!-se escucharon otras voces mientras comenzaban a asomarse a la cámara.

-¿Y ellos?

-Son del club Glee, al que pertenecí antes de venir aquí.

-Kurt, nos enteramos de que estas en algo grande… felicidades, estamos orgullosos de ti.

-Si supieran que estoy a punto de colapsar-susurro el castaño.

Rose lo paso su brazo alrededor de los hombros del joven apoyándolo.

-Hablamos con Rachel y nos dijo que estas un poco…ya sabes, ¿Drama Queen?

Kurt comenzó a reír, sus amigos lo conocían, el solía llevar todo hasta el límite, era parte de ser Kurt Hummel.

-Kurt, siento no poder estar contigo, quiero que sepas que desde acá estoy enviándote todo mi amor, confío en ti, sé que puedes hacer esto, sé que serás el mejor y sé que esto será solo el comienzo de tu éxito-dijo Blaine acercándose a la cámara.

-¿Puedes hacernos un favor Kurt?… solo cierra los ojos y escucha esta canción-dijo Jake.

Kurt siguió las instrucciones de su amigo, la música comenzó a sonar, el castaño dejo caer su cabeza hacia atrás, el viento frío golpeaba su rostro, se sentía fresco y relajante, respiro profundo, y desconecto sus pensamientos de todo lo que tenía que ver con la revista.

La música lo llevo a un lugar alejado de NY, a Lima, a su hogar, junto a su familia, junto a sus amigos.

Una sonrisa se formó en el rostro del castaño, Rose lo miro divertida.

-¿Más tranquilo?

-Un poco, la música siempre me relaja.

-Tienes buenos amigos ¿no?

-Los mejores.

-¿Todo parece menos terrible Kurt?

-Así es.

-Te dije que todo iba a estar bien, tiene a todo un grupo de jovencitos entusiastas que confían en ti, me tienes a mí y al resto de la gente de la revista, esto va a ser un éxito Kurt, no tienes por qué estar preocupado.

-Siempre intento que todo sea perfecto, y cuando algo no resulta como lo planeo… yo solo comienzo a desesperar Rose.

-¿Y cómo has sobrevivido todo este tiempo entonces? Las cosas suelen ser bastante distintas a como uno las planea.

Una enorme sonrisa se dibujó en el rostro del muchacho, si, era cierto que solía sobre dimensionar todo, que muchas veces se sentía sobrepasado y que no podía más, pero él tenía una razón, un cable a tierra, una esperanza, su salvación tenía nombre y apellido.

-Sencillo, Blaine Anderson.

-Es todo por él, es el quien siempre me mantiene centrado, el que está en cada paso, el que me recuerda que hay cosas que no puedo controlar, el que me hace sentir bien aun sabiendo que las cosas no van de lo mejor, el que me devuelve la tranquilidad con solo una sonrisa.

-Estas absolutamente enamorado.

-Él es el único para mi Rose, es algo que no puedo describir, cuando estamos alejados… es como si faltara la mitad de mi corazón, y no solo lo digo de la manera cursi, estar lejos de él duele.

-Cuando lo conocí, se transformó en mi mundo, todo a mi alrededor se estaba destruyendo, tenía miedo y fue el quien me rescato, él y mis amigos, volví a tener confianza en mí y en quien realmente soy, Blaine se transformó en mi mejor amigo, luego en mi novio y en amigo de mis amigos.

-Creo que debo ir a la oficina-dijo Rose levantándose de la banca que ocupaban.

-Te acompaño.

-No, quédate aquí, por lo menos hasta que termines de escuchar el regalo de tus amigos, te necesito lo más positivo para terminar con esto de la mejor manera posible.

-Ok… estaré contigo dentro de unos minutos, voy a estar bien.

El castaño volvió a cerrar sus ojos, solo disfrutando de la música, no noto cuando alguien se sentó a su lado y comenzó a tararear.

-Blaine…

-Hola…

Kurt lanzó sus brazos alrededor del cuello del moreno, y se quedó ahí durante unos minutos.

-Disculpa por tardar tanto…

-Dijiste que no podrías venir-dijo Kurt aun sin poder creer que Blaine estuviese junto a el otra vez.

-Bueno, tuve que viajar en tren durante toda la noche, y perderme varias clases, pero aquí estoy.

-No debiste…-susurro sin despegarse aun del cuello de su novio.

-Claro que debía, tú lo hiciste por mí, ahora solo devuelvo la mano, me necesitabas y tenía que estar contigo.

-Gracias.

-Kurt… dime ¿por qué no me contaste que lo estabas pasando mal?

-No quería preocuparte.

-Kurt…

-Lo sé, debí decírtelo perdón…

-No importa, ya estoy aquí.

-¿Me acompañaras al desfile? –dijo tomando su mano entre las propias.

-Estaba esperando a que me invitaras… no podría perderme tu gran debut, ¿dirás un discurso? Porque quiero que me nombres en él.

Kurt rio de buena gana, definitivamente Blaine era el único que podía devolverle la sonrisa, con una sola palabra, con una sola mirada.

-No había pensado en eso, pero si debo hacerlo, ten por seguro que te dedicare unas palabras.

-¿Vamos? Rose debe estar esperándote.

-¿Conoces a Rose?

-¿Quién crees que le paso esto?-dijo apuntando al computador sobre sus piernas.

-¿Ella lo sabía y no me dijo nada?…

-Si… como Rachel, y como los muchachos del club… grabamos esto ayer, antes de viajar.

-Sabía que Rachel planeaba algo…

-En realidad no planeo nada, fui yo…ella por primera vez en la vida solo mantuvo la boca cerrada.

-Eso es difícil de creer…-dijo el castaño.

-Lo sé, ella nunca utiliza su derecho a guardar silencio… pero hablemos de algo importante… ¿vamos a tu oficina?-pregunto Blaine entusiasmado, quería ver como Kurt trabajaba, como disfrutaba de lo que hacía.

-No, ve al departamento, duerme, dúchate y come algo, yo voy a la oficina, termino de arreglar todo y vuelvo al departamento a cambiarme de ropa, luego vendremos juntos, quiero llegar con mi perfecto novio a mi primer desfile, quiero entrar contigo al lugar del evento, te quiero a mi lado y que todos mueran de envidia al verte.

Blaine rio como un niño, los ojos de Kurt brillaban como si hubiese planeado todo esto desde un principio.

-Creo que seré el invitado especial…

-Mi invitado especial.

-¿Nos vemos más tarde entonces?

-Claro que sí.

Kurt beso a Blaine en los labios dulcemente, hundió sus dedos en el cabello del moreno, quien lo tomo fuerte de la cintura acercándolo más a su cuerpo.

-Te amo-susurro sobre los labios del castaño.

-Te amo.

Kurt volvió a la revista con otra actitud, se encerró directamente en su oficina y comenzó a llamar por teléfono, parecía que su suerte estaba cambiando, los detalles que aún faltaban parecía que comenzaban a solucionarse como por arte de magia.

-¿Kurt?

-Sí, adelante-dijo el castaño ordenando un poco la oficina.

-Acaba de llamar Isabelle.

-¿Si? ¿Necesita algo?

-Solo quería avisar que estará aquí por la noche.

-¿Vendrá al desfile?

-Eso parece.

-Dios mío…

-¿Qué ocurre?

-Ella estará aquí, vera todo… ¿y si no le gusta?

-Kurt…no comiences de nuevo por favor, le encantara.

-Ok…calmarme y respirar-se dijo a sí mismo.

-Eso…

-Yo me voy al mi departamento, nos vemos a las nueve en el galpón.

-Sí, ahí estaremos todos.

Kurt llego al departamento varios minutos más tarde, traía consigo ropa para él y para Blaine, en bodega había mucho de donde escoger, esta última semana aparte del desfile la revista había organizado una sesión de fotos y la ropa de los modelos aún seguía allí.

-¿Blaine?...

Kurt no recibió respuesta, camino directamente hacia donde estaba su cama y se encontró con una hermosa imagen, el moreno dormía abrazado a su almohada, con el rostro hundido en ella.

-Puedo acompañarte unos minutos-susurro al oído de Blaine mientras se metía en la cama.

El moreno aun con los ojos cerrados se giró para abrazar a Kurt, acercándolo a su cuerpo, apoyando su mejilla sobre el pecho del castaño.

-¿Eso es un sí?-pregunto Kurt besándolo en la cabeza.

Blaine levanto su rostro y le regalo una sincera sonrisa, Kurt se deslizo más abajo en la cama para que su rostro quedara de frente al de Blaine.

-Podría quedarme aquí y olvidarme del desfile…

-Podríamos ¿pero cuando podrás presumir a este? … ¿Cómo fue que dijiste… “Perfecto novio”?

-Eso fue exactamente lo que dije-respondió Kurt riendo y atrapando luego con sus dientes el labio inferior de Blaine.

El moreno comenzó a besarlo con pasión, enredando fuertemente sus brazos y piernas alrededor del cuerpo del castaño, unos minutos más tarde ambos muchachos se encontraban ya sin sus camisas, Blaine había dejado a Kurt completamente inmovilizado, tenía las manos de su novio tomadas con fuerza entre las suyas, dejaba pequeños besos en su pecho y su cuello, Kurt solo disfrutaba de tal sensación, por más que quisiera deshacerse del agarre de Blaine y contraatacar, simplemente no podía, cada beso y cada caricia parecía llevarse poco a poco sus fuerzas dejándolo rendido al control del menor.

-¿Me extrañaste?-pregunto Blaine sonriéndole.

-Demasiado… ¿y tú?

-No podía sacarte de mi mente, te necesitaba tanto, no sabes cuánto…

-¡Hola chicos!-dijo una voz chillona asomándose en la habitación de Kurt.

-¡Rachel!-gritaron al unísono ambos muchachos.

-¡Lo siento, lo siento! ¡Yo no vi nada… de verdad! solo tu espalda Blaine…-decía la pequeña tapando sus ojos y corriendo hacia la cocina.

-¡¿Por qué demonios no avisas que llegaste Rachel?!-grito Kurt aun desde la cama.

-¡Kurt no te vi, de verdad discúlpenme! Kurt de verdad que no te vi…porque ya sabes…Blaine estaba sobre ti…

-¡Rachel deja de hablar!-dijo Blaine mientras buscaba su camisa entre las sabanas.

-Yo no sabía que estarían aquí… nadie me aviso que ya habías llegado, ¡pensé que irían al desfile!

-Bueno, queríamos ir dentro de un rato.

-Los interrumpí, perdón…

-¡Es un poco tarde para eso!-dijo Blaine, quien paso corriendo hacia el baño, con la camisa a medio abrochar y descalzo.

-Kurt….¿estas vestido?-pregunto la morena aun desde la cocina.

-¡Si…gracias a ti!

-Kurt…de verdad no sabía…

-¡Está bien, está bien! De todos modos se nos hacía tarde para el desfile…

-¿Cómo puedo compensarte?-pregunto Rachel intentando solucionar lo que había provocado.

-Créeme, no hay forma en que tú, puedas compensar lo que arruinaste.

-Ya se…que tal si… toma esto-dijo corriendo hacia su cama y sacando un frasco desde debajo de la misma.

-¿Qué es eso Rachel?

-Son mis ahorros para navidad.

-¿Guardas tus ahorros en un frasco bajo el colchón? ¿En qué siglo crees que estamos? ¡Existen los bancos!

-Como sea Kurt, ocúpalos… pueden pasar la noche en un hermoso hotel y cenar…

-Rachel, son tus ahorros no puedo ocuparlos.

-Claro que sí, yo lo arruine, además puedo pasar navidad aquí… ¡Vamos! Todos dicen que Nueva York es el mejor lugar para pasar navidad ¿no? O puedo pedirles dinero a mis papas…

-Pero…

-Nada Kurt, ten, ocúpalo…si quieres me lo puedes devolver después.

Kurt miro el dinero, realmente podría devolvérselo dentro de un mes… y podría pasar la noche en un lindo lugar con Blaine, hace tiempo que no se dan un regalo como ese…

-Ok…

-Gracias Kurt…y perdón otra vez…

-Deja de disculparte, ya lo olvide…mejor ve a arreglarte.

-¿Para qué?-pregunto la pequeña sentándose en su cama ya un poco más tranquila.

-¡Como que para que! Hoy es el desfile, ¿vas a ir no es así?

-Pensé que irías con Blaine…

-Claro que iré con él, pero eso no significa que tú no tendrías que ir, me has aguantado todos estos días, mereces una recompensa, ve a cambiarte.

-Hola Rachel…perdón por el espectáculo…-dijo Blaine, ahora más avergonzado que molesto.

-Discúlpame tú, yo debí llamar o… no sé, de todos modos no tienes nada de qué avergonzarte… ¿has estado haciendo ejercicio?

-¡Rachel!…no hagas que me arrepienta de llevarte al desfile -dijo Kurt dándole una mirada asesina.

-Era solo un piropo…-se defendió la muchacha comenzando a buscar un vestido.

-Vamos Blaine, pruébate esto…-dijo pasándole un estuche negro.

-Yo también traje ropa-respondió Blaine apuntando a uno bolso que traía consigo.

-Blaine… ¿de verdad crees que tienes algo mejor que esto?-pregunto el castaño mostrándole el traje que le había escogido.

-Pero Kurt, esto debe costar mucho dinero…

-Así es, y te lo vas a poner esta noche, estoy seguro que serás el mejor vestido…después de mi claro-dijo dándole un vistazo a su propia ropa.

Luego de unos minutos los tres muchachos estaban listos para partir.

-¿Llamaste un taxi?

-Rachel… ¿recuerdas que soy el organizador? Tengo un par de privilegios…-Kurt reviso su teléfono.

-Ya podemos irnos.

Una limusina los esperaba a la salida del departamento.

-¿Esto es para nosotros?

-¡Claro Blaine!

-Ok…sácame una foto-chillo Rachel.

-Rachel…cuando lleguemos tendrás todas las fotos que desees, estará Isabelle y muchas otras personas importantes, créeme sacarte una foto al lado de la limusina parecerá ridículo.

En 30 minutos estaban fuera de un gran galpón, cercano a la revista.

-Parece que hay alguien importante allá afuera-dijo Rachel pegada a la ventanilla viendo como los flashes no dejaban de dispararse.

Los tres jóvenes bajaron del automóvil pasando desapercibidos.

-¿Por qué no nos ponen atención?-dijo Rachel molesta.

-Rachel…nadie aquí nos conoce realmente-respondió Blaine.

-¡Claro Rachel! ¿Qué esperabas?

-Pero tú organizaste esto…

-Pero nadie me conoce…

-Aun nadie te conoce-corrigió Blaine.

-¿A dónde crees que vas?-dijo una vocecilla tomando a Kurt del brazo.

-¡Isabelle!

-Hola jovencito… ¿pensabas dejar a la prensa aquí esperando?

-¿La prensa? Pero yo no…

-Ven a aquí-dijo arrastrándolo hasta donde estaban los periodistas quienes al verla aparecer comenzaron a disparar nuevamente los flashes.

-Disculpen…un poco de atención.

Varias grabadoras y micrófonos se acercaron.

-Como saben, este desfile mostrara parte de los nuevos diseños con los que estamos trabajando en la revista, además los fondos que se recauden irán a beneficencia, así que esto es muy importante para nosotros.

Kurt apenas podía ver con las luces sobre su rostro, escuchaba que la gente comenzaba a preguntar, pero él no entendía nada, todos parecían haberse coordinado para hablar al mismo tiempo.

-Quiero presentarles a alguien-retomo Isabelle.

-El es Kurt Hummel, se integró a la revista hace un par de meses y es quien organizo todo esto ya que yo estaba de viaje, el crédito es todo suyo, pueden hacerle las preguntas que quieran, sabe mejor que yo de que se trata todo esto-dijo antes de despedirse y entrar corriendo al galpón donde la esperaba Rose.

-¿Presentación en sociedad?-dijo la muchacha divertida al ver el rostro de Kurt desde lejos.

-Claro que sí, estaba entrando sin que nadie lo viera… merece recibir un poco de atención después de todo el trabajo ¿no es así?

-Claro que sí.

-¿Sabes si estaba bien?-pregunto Isabelle mirando la decoración del lugar.

-Más o menos… bueno hasta hoy, llego Blaine.

-¿Su novio? Creí que no podría venir hasta dentro de un mes.

-No tengo muy clara toda la historia, porque aún no hablo con Kurt, solo sé que llego hoy a la oficina a buscarlo y yo le dije dónde estaba, luego hubo hasta una canción-relataba emocionada Rose.

-Son muy dulces.

-¿Esta aquí?... ¿Blaine?

-Eso supongo, pero no lo he visto.

-Tal vez siga afuera con él.

-Puede ser, creo haber visto a su amiga Rachel.

-No sé.

-Vaya…esto quedo hermoso-dijo Isabelle al ver los detalles en la pasarela.

-Idea de Kurt… espera a que veas el desfile, hizo unas propuestas, por decir lo menos…innovadoras, a los diseñadores les encanto.

-Sabía que lo haría excelente.

-Así es.

***

-Señor Kurt… ¿cuál era su apellido?-pregunto un hombre mientras anotaba en una pequeña libreta.

-Hummel, Kurt Hummel.

Luego de varias preguntas relacionada con la propuesta del desfile y que diseñadores habían participado comenzaron las fotografías.

Kurt se sentía como una estrella, estaba realmente agradecido de haber escogido un buen traje.

-Disculpe señor Hummel, ¿viene acompañado?

-¡Claro que si!-dijo girándose para buscar donde habían quedado Rachel y Blaine, cuando logro verlos les hizo una seña con la mano para que se acercaran. Rachel corrió en seguida mientras Blaine un poco reacio la siguió desde atrás.

-Bueno… ella es mi amiga Rachel…-dijo antes de ser interrumpido por la misma.

-Rachel Berry, estudiante de NYADA… artes dramáticas-termino de presentarse posando a las cámaras junto a Kurt.

-¿Su novia?-pregunto una muchacha.

Kurt casi se ahoga con la pregunta.

-En realidad… ¿dónde está?-dijo girándose.

Blaine se había quedado unos pasos atrás observándolo, Kurt se veía tan contento, y él estaba orgulloso que estuviese recibiendo la atención que merecía, todos debían saber que él era quien había hecho todo esto, se había esforzado mucho, y definitivamente se lo había ganado.

-¿Blaine?-dijo el castaño sacándolo de sus pensamientos y arrastrándolo hacia donde aún estaba Rachel posando, e intentando captar la atención de la gente.

-El es Blaine Anderson, mi novio-dijo tomando de la mano al moreno.

Los flashes comenzaron a dispararse otra vez. Blaine intento sonreír pero las luces estaban casi dejándolo ciego.

-Bueno, muchas gracias por venir, pueden pasar, hay una recepción para ustedes también-dijo antes de despedirse y entrar.

-Kurt…creo que nací para esto-decía emocionada su amiga.

-Si Rachel… ya serás famosa y tendrás toda la atención que necesitas.

-Lo se…-respondió mientras comenzaba a perseguir a un camarero que llevaba copas de champagne.

-¿Estas bien? Te ves un poco descompuesto-dijo Kurt al ver el rostro de Blaine.

-Estoy bien…ya sabes tantas luces… solo creo que perdí parte de la visión.

-Lo siento…

-Está bien…mereces toda la atención-dijo tomándolo de la cintura.

-Tú debes ser Blaine-dijo Isabelle acercándose a la pareja.

-Blaine Anderson.

-Hola… lograste venir… Kurt estaba un poco triste porque no te vería hasta dentro de varias semanas.

-Si… estaba un poco colapsado, así que hice un pequeño viaje.

-Tuvo que venir en tren y perderse unas clases-aclaro Kurt.

-¿Supongo que Elizabeth sabe de esto no?-dijo dándole una mirada acusadora.

-Claro, hable con ella, incluso me excuso en la escuela.

-¿Cómo esta ella? Y tú papa…

-Bien, ahora están en Lima, pero vendrán dentro de unas semanas, papa tiene una reunión o algo… y como siempre mama lo acompañara.

-Dile que pase a visitarme, bueno a visitarnos-corrigió dándole una sonrisa a Kurt.

-Lo haré.

-Se ven realmente bien juntos.

-Gracias.

Bueno, disfruten, ¿esto debe estar por comenzar o no?-pregunto.

-Si… yo voy a ver como esta todo atrás, ¿me acompañan?

-Claro-respondieron ambos mientras iban tras bambalinas.

-Esto es un caos-dijo Blaine al ver a toda la gente corriendo de un lado a otro tras el escenario.

-Siempre es así, no te preocupes-dijo Isabelle saludando a todos.

-Kurt… estamos listos para comenzar-dijo Chris seguido de Rose.

-Ok… Chris, él es Blaine, mi novio. Rose, tú ya lo conocías.

-Tu eres el famosos Blaine…Kurt no deja de hablar de ti-dijo riendo Chris saludándolo.

-Él también me ha hablado de ti, de ustedes-dijo apuntando también a Rose.

-Estamos listos... ¿Isabelle? ¿Abres tú?

-No, que lo haga Kurt-dijo entregándole el micrófono al castaño.

-Pero…

-Solo di lo mismo que dijiste afuera-animó Rose al muchacho.

-Estaremos afuera-se despidió Isabelle tomando el brazo de Blaine y llevándolo al salón.

-Suerte-dijo Blaine antes de desaparecer tras las cortinas.

-Vamos Kurt, tienes que salir-dijo Chris dándole un empujoncito.

El desfile fue todo un éxito, Isabelle estaba gratamente sorprendida con todo lo que Kurt y el resto de sus compañeros había realizado.

-Esto fue perfecto Kurt, felicitaciones.

-Gracias, pero esto no es solo mi trabajo… todos me ayudaron.

-¿Te gusto?-pregunto Kurt a Blaine quien lo esperaba junto a Rachel.

-Claro que si-respondió tomándolo de la cintura y besándolo tiernamente.

-Kurt, esto es genial… mira toda esta gente…esto es un éxito…-decía Rachel mirando a su alrededor y perdiéndose en las luces y la música que había comenzado a sonar..

-¿Ha bebido mucho?

-Más o menos-respondió riendo Blaine.

-Ven, quiero presentarte al resto de mis amigos.

Kurt saludo a un grupo que estaba cerca al escenario.

-Chicos… quería presentarles formalmente a alguien…-dijo emocionado.

-El es Blaine mi novio…

-Blaine, ellos son Tabata, Rose, July, Camille, Beth, Chris, Michael, Dar y Edward…

-Hola a todos…-dijo riendo.

-Kurt nos ha hablado mucho de ti, ¿Blaine Warcler?-dijo Dar intentando recordar exactamente cuál era el nombre que Kurt les había dicho.

-Blaine Warbler- corrigió Chris dándole un codazo.

-Discúlpalo no pone mucha atención…

-Bueno, cuéntanos ¿cómo fue que llegaste aquí? Pensé que no podrías venir hasta navidad-dijo Rose bebiendo de su copa.

-Si… Kurt nos contó eso-agrego Beth.

-Tuve que viajar en tren, Kurt me necesitaba aquí con él.

-¿Pero no se supone que tu aun estas en la escuela?-pregunto un muchacho de tez clara y ojos color ámbar.

-Si, debería haber estado en clases hoy, pero bueno, no afectara tanto.

-Mira quien viene ahí…-dijo Dar dándoles una mirada a sus compañeros.

-¿Quién es?-pregunto Blaine girándose.

-Ese es Chase-le susurro el castaño.

El muchacho se acercó al grupo, vestido de negro y con una sonrisa en los labios.

-¿Reunión de grupo y no me invitan?-dijo riendo.

-No, solo estábamos conociendo al novio de Kurt-dijo Chris.

-¿Así que tú eres Blaine?

-Sí, un placer…-respondió ofreciéndole la mano.

-Pensé que el novio de Kurt sería más alto-dijo mirándolo de pies a cabeza.

Kurt se sorprendió por la actitud de Chase, no pensaba que sería así de grosero.

-No necesite ser más alto para conquistarlo, ¿no es así?-le respondió mirando a Kurt.

-Claro que no, además fue tu sonrisa y tus ojos los que me enamoraron… además de tu voz… claro-le dijo dándole un pequeño beso en los labios.

-¿Te quedo claro?-susurro Dar riendo.

-1-0 gana Blaine…-añadió Chris dándole una mirada cómplice a su compañero.

-Se quedan al resto de la fiesta?-pregunto Rose intentando calmar un poco los ánimos.

Blaine miro a Kurt buscando una respuesta a esa pregunta.

-No, solo un baile y partimos…

-¿A si? ¿Alguna mala cara?-pregunto Chase

-No es eso, tengo una pequeña sorpresita para este caballero… nos espera una larga noche…-respondió tirando a Blaine de la mano hacia la pista de baile.

-¿Una sorpresa?

-Claro…tendremos una hermosa noche juntos.

Kurt abrazo a Blaine comenzando a moverse al ritmo de la música.

-Perdón por lo de hace un instante con Chase.

-No importa, no quiero que esta noche se arruine, todo ha sido perfecto, todo tu trabajo fue maravilloso, tus amigos son muy agradables y ahora puedo tenerte aquí junto a mí, muy cerca-dijo susurrándole al oído.

-Eso es lo único que de verdad me importa ahora-respondió acomodando su cabeza en el hombro del moreno.

-Gracias por estar aquí Blaine.

- Kurt, incluso cuando el cielo se caiga, estaré aquí para ti.

-¿Cómo la canción?

-Justo como la canción…

Kurt se detuvo, beso a Blaine con todo el amor que sentía, lo tomo de la mano y se lo llevo afuera.

-¿Ya nos vamos?

-Si…

Kurt llamo a un taxi y en menos de 20 minutos se encontraban en una acogedora habitación.

-¿De dónde sacaste dinero para pagar esto?

-Digamos que alguien tenía una pequeña deuda conmigo.

Blaine le sonrió y dejo de preguntar, quería aprovechar este tiempo que tenían juntos, Kurt lo beso con ansias, había estado tan preocupado y nervioso durante estas últimas dos semanas, sentía que por fin se había quitado un peso de encima, y Blaine era ese respiro que necesitaba.

-Estoy orgulloso de ti Kurt-dijo el moreno entre besos.

-Cada cosa que hago es por ti Blaine, ¿recuerdas?

-Por nuestro futuro.

-Así es, no me daré por vencido, no cuando se trate de nosotros, voy a seguir haciendo todo lo que tenga en mis manos para ofrecerte algo cuando vengas a vivir aquí…

-Cada vez falta menos…

-Cada vez falta menos-dijo dejándose caer en un profundo beso.

Blaine podía sentir la piel de Kurt quemando bajo el, suave como siempre, perfecto como siempre, su dulce fragancia desprendiéndose de cada centímetro de su cuerpo.

-Te amo Blaine…

-Y yo a ti mi pequeño ángel…

-Deja de llamarme así.

-Jamás, mírate, eres hermoso Kurt, es lo que eres para mí, un ángel, con el que me encontré por accidente y al que nunca dejare escapar.

-Nunca es mucho tiempo…

-Nunca lo haré, ¿quién dejaría escapar un ángel?

-¿Alguien demasiado distraído?

-Deje de ser distraído cuando me di cuenta que podía perderte.

Kurt lo abrazo con fuerza-Tú también eres un ángel para mí.

Blaine recorrió la figura de Kurt con delicadeza, creía poder recordar cada centímetro de ese cuerpo, cada vez que lo tenía desnudo frente a él intentaba encontrar algo nuevo y el cuerpo de Kurt siempre lo sorprendía, parecía que cada vez se volvía más perfecto a sus ojos, pequeños detalles que lo cautivaban.

Kurt se perdía en la mirada de Blaine, siempre era igual, los ojos del moreno parecían hipnotizarlo, sus largas y oscuras pestañas lo hacían caer en un profundo trance, amaba la manera en que Blaine lo veía, llenándolo de tranquilidad y seguridad.

Kurt acariciaba el rostro del moreno mientras este lo besaba, sus manos comenzaron a bajar, por su cuello, sus hombros, sus fuertes brazos, podía sentir sus músculos contrayéndose al sostener su propio peso para no caer sobre su cuerpo, como desearía que sus brazos fuesen así de fuertes, podría obligarlo a estar más cerca, pero sabía que no necesitaba brazos fuertes para aquello, solo necesitaba deslizar suavemente la yema de sus dedos por la espalda de Blaine, sabía perfectamente lo que esto provocaba, Blaine dejaría se sostenerse, se rendiría a la gravedad que los atraía, lo hizo, pocos segundos más tarde podía sentí todo el peso del cuerpo de Blaine sobre el propio, el roce de su piel, sus movimiento, como se presionaba sobre él, como lo necesitaba, como su pulso se aceleraba, con cada beso, con cada toque.

Adaghwfdgfahwgfd Blaine fue *.* yupi (?) Jujú ahora le quedara más claro a Chase que Kurt es de Blaine-sexy-hot-Anderson.
Oh god, morí cuando Rachel los encontro en plena acción. Mataria por ser ella, #Klainesex e__e
Jujú, Kurt obtuvo una buena recompensa :BB Amé el capitulo Natty.
Extrañaba tus actualizaciones, espero que estes bien (: gracias por actualizar.

Amigo secreto

Los días pasaron rápido, Blaine había vuelto nuevamente a Ohio, y los planes de navidad habían cambiado, ambos terminaron acordando que navidad era un momento para disfrutar en familia, por lo que sería Kurt quien viajaría esta vez, la misma noche en que Blaine partió Kurt reservo su boleto, sería una navidad con Burt, Carol, Finn, Elizabeth y William.

Rachel por su parte se quedaría en el departamento, sus padres viajarían a verla, serian unas pequeñas vacaciones para ellos, hacia bastante que no estaban en NY y Rachel tenía planeado toda una excursión por las calles de la ciudad.

-Entonces esta todo arreglado…navidad en familia-dijo Rachel colocando la mesa mientras que Kurt terminaba de cocinar.

-Así, es….

-Kurt… no es que quiera estropear toda la alegría pero…

-¿Pero?

-¿Has tomado una decisión?

-¿Decisión? ¿Con respecto a qué?-pregunto distraído el castaño.

-¿A qué? El sábado… es tu oportunidad de adicionar para entrar a NYADA, ¿lo harás o te quedaras en la revista?

Kurt guardo silencio y siguió revolviendo con lentitud la olla en la que preparaba la salsa.

-No lo sé… ¿qué tal si nuevamente me rechazan?...la revista es algo seguro para mi ahora… más aun después de lo del desfile.

-¿Pero es lo que realmente quieres hace por el resto de tu vida? Pensé que tu sueño era cantar, y actuar…

-Lo es… pero no sé si podría aguantar otra decepción, todo está yendo tan bien ahora.

-Kurt, se supone que la revista era solo un trabajo para reunir dinero, ya sabes para cuando Blaine viniera, por eso tomaste las clases en la escuela, porque ese era tu real objetivo, NYADA no era tu “plan B”, no vas a decirme que ya no amas cantar…

-Es lo único que quiero hacer Rachel, lo sabes, por algo te pedí que me enseñaras lo que aprendieras en tus clases…

-¿Entonces? No entiendo cuál es tu temor.

-Fracasar.

-Kurt, no puedes vivir con miedo al fracaso, mira, la última vez no lo lograste, y estabas triste y creías que ibas a estar perdido en Lima un año completo, mírate ahora, vivimos en NY, las cosas con Blaine van muy bien, tienes un trabajo, tomas clases y tienes esta oportunidad nuevamente, es tu sueño, no lo dejes ir.

-Pero…

-¿Pero?, ¿olvidas quien te ayudo para que tuviese esas clases? ¿Recuerdas que fue el papa de Blaine quien hizo las averiguaciones? Vas a decepcionarlos…

-Se decepcionaran de todos modos si no quedo.

-Pero por lo menos sabrán que lo intentaste Kurt, no hay peor intento que el que no se hace…

-No lo sé…

-Habla con Blaine, también puedes hablarlo con tu papa… él siempre te ayuda a aclarar esa cabeza que tienes.

-No será necesario-dijo Kurt con determinación.

-Lo hare, Kurt Hummel jamás ha sido un cobarde.

-¿Qué? ¿Estás seguro?-pregunto su amiga ante el repentino cambio.

-Tú lo dijiste, NYADA nunca fue el “plan B”, no vine a NY solo para ver como mi sueño se aleja, voy a entrar a esa escuela, seré el mejor, y Blaine estará orgulloso de mí, tendremos un departamento, luego nos casaremos, tendremos dos hijo y viviremos en este sueño por siempre.

-Vaya que si tienes todo planeado…

-Ok, puede que me haya dejado llevar, sabes que me cuesta dormir a veces….y mi mente solo vuela….

-Los resultados estarán para navidad-dijo la pequeña sentándose a la mesa.

-Entonces tendrás que hacerme un favor…

-Claro.

-Otra cosa Rachel…

-¿Si?

-Tendremos sesiones de ensayo extras esta semana.

-Como digas.

Al día siguiente Kurt tomo su abrigo y fue a trabajar un poco más temprano de lo acostumbrado, tenía muchas ideas en su cabeza y quería tomar aire fresco.

-¡Hola!-dijo saludando a todos, lleno de ánimo.

-¿Buen fin de semana?-pregunto Rose guiñándole el ojo.

-El mejor…

-¿Vendrá para navidad?

-No, yo viajare, ya sabes, necesito un poco de calor de hogar, extraño a papa, a Carole y a mi hermano.

-¿Tienes un hermano? ¿Por qué no lo habías mencionado?-pregunto Rose entusiasmada.

-Sí, tengo un hermano… tiene mi edad, creo que sería ilegal Rose…

-Mira quien lo dice, eres tu quien tiene un novio escolar, ¿tu hermano no está en la escuela o sí?

-No, pero no creo que piense en tener una relación en el corto plazo, era novio de Rachel.

-¿Tu amiga? ¿La que estuvo en el desfile?

-Si…

-Vaya… supongo que tendré que seguir buscando aquí en NY.

-Eso creo…

-¡Reunión!-grito Isabelle desde su oficina provocando que todos corrieran hasta la sala de reuniones.

-Buenos días… como sabrán se acerca navidad, reuniones, sesiones fotográficas, actualizaciones del blog… Kurt te quiero pendiente de eso esta semana…

-Anotado…-respondió en voz baja.

-Pero lo más importante…es Navidad, como todos saben la revista organizara una cena al final de la semana, y como cada año nosotros haremos una pequeña actividad para incentivar el espíritu de amistad.

-¿Intercambio de regalos?-susurro Kurt a Chris quien se sentaba a su lado.

-Desafortunadamente.

Kurt frunció el ceño ante la negatividad de la respuesta.

-Me encanta esto de los intercambios de regalo…-dijo entusiasmado, provocando que todos sus compañeros les lanzaran una mirada mezcla de miedo y algo que Kurt interpreto como ¿una advertencia?

-¡Perfecto, ven… ese es el espíritu! Kurt estas a cargo…

-¿Como que a cargo?

-¡Wow! ¡Eres un suertudo! –animo Chase riendo desde su lugar.

-Kurt, solo tienes que organizar una pequeña actividad, solo para nosotros-dijo apuntando a los presentes.

-Pero tú misma dijiste que hay mucho que hacer y yo…

-Y tú te encargaste del desfile y sé que debes estar agotado, pero también sé que lo harás maravilloso…

Chase rio dejándose caer sobre el respaldo de su silla.

-Y como veo que Chase se divierte muchísimo con esto, creo que él te ayudara.

-¿Yo? Pero…

-¿Pero qué? Vi como celebraste cuando Kurt fue elegido para realizar esto, así que tú lo ayudas-dijo Isabelle con una sonrisa de victoria en el rostro, siempre era un problema buscar a quien organizara esta actividad, por alguna extraña razón que ella no alcanzaba a comprender todos se rehusaban, pero Kurt no lo haría, lo sabía.

-Pero yo…

-¡Dije que tú lo ayudas!

-Ok…-respondió de mala gana.

-Perfecto, lo que me faltaba-susurro Kurt dándose golpecitos contra la mesa.

-¿Algún problema Kurt?-pregunto Isabelle dándole una mirada de reprobación.

-No nada…

-Qué bueno, porque esto se trata de compartir, llevarnos bien…y esas cosas que implican la navidad, todos a trabajar, cada uno sabe qué hacer, Chris, Beth y Kurt, pasen por mi oficina para que comencemos a organizar lo del blog, el resto a ver lo de la sesión de fotos, Chase y Dar recuerden llamar a la agencia de modelos y a los fotógrafos.

-¡¿Qué, tendrás que hacerlo con Chase?!-grito Blaine al otro lado de la pantalla.

-Así es Blaine… yo no quería, pero tampoco podía decirle que no a Isabelle.

-Ese tipo…

-Sé que no te agrada, y créeme que después de lo de la última vez a mí me gusta menos que antes…no es que antes me gustara…es decir…

-Entiendo Kurt…-se apresuró en decir el moreno al ver como su novio comenzaba entrar en desesperación dándose a entender.

-¿Tendrás que pasar mucho tiempo con él?

-Espero que no, solo tenemos que comprar la comida y la decoración…

-Cuídate ¿sí?

-Claro… restringiré nuestra interacción al mínimo.

-Kurt no quiero que te lleves mal con tus compañeros, solo digo que te cuides.

-Ok… es que en realidad no me interesa tener mayor contacto con el Blaine.

El resto de su conversación giro entre lo que harían en el club Glee ahora que su participación había acabado y sus planes para navidad.


-Rachel…

-¿Si?

- Creo que tengo la canción perfecta para mi audición…

-¿Si?

-Si…

-Perfecto, a ensayar entonces.

-¿Cuándo se supone será el asunto de intercambio de regalos?-pregunto Kurt a Beth mientras esperaban para su orden de café como cada mañana.

-Generalmente el mismo día de la cena que organiza la revista, muchos se van de vacaciones a la semana siguiente por las festividades.

-Eso quiere decir que me quedan exactamente tres días para preparar la celebración y comprar el regalo…

-Así es.

-¡Hola Kurt!

-Chase…hola.

-¿Cuándo nos juntaremos para ir de compras?

-Yo me encargo de eso, tu puedes…que se yo, hacer lo que quieras.

-Esa es una pésima actitud Kurt, Isabelle ama que todos estén unidos en estas fechas-extrañamente Chase parecía haber cambiado de opinión en cuanto a organizar el evento.

-Cosa que nunca ocurre, porque esta “celebración” por lo general termina mal.

-¿Por?-pregunto el castaño extrañado.

-Nadie quiere que Isabelle sea a quien debes regalarle algo… ¿sabes lo complicada que es?

-Ok… ese es un punto…

-Además… ya somos adultos, lo único que queremos en navidad es largarnos del trabajo, y tenemos que estar perdiendo el tiempo comprando regalos, cuando podríamos estar… ¿qué se yo? ¿Descansando? sin contar con que comienza la competencia por quien recibirá el mejor regalo y quien el peor… al final siempre estamos todos enojados para cuando es la cena.

-Ok… ustedes definitivamente no tienen ni un poquito del espíritu navideño-dijo Kurt dándoles una mala mirada a sus compañeros.

-Chase, ¿podrías hacerme un favor?-dijo Kurt recibiendo su café.

-Claro…

-Diles a todos que nos juntamos dentro de 20 minutos en la sala de reunión, diles que es algo acerca de esta actividad.

Veinte minutos más tarde todos estaban en la oficina, bebiendo su café y bebidas, pegados a sus teléfonos seguramente comunicándose entre ellos, cosa que a Kurt siempre le pareció gracioso, no es como si él y Mercedes jamás hubiesen hecho eso en el colegio, ¿pero vamos cuantos años tienen estos tipos?

-Bueno y ¿para qué es la reunión?-pregunto Isabelle con una sonrisa en el rostro.

-Sencillo, he tomado una decisión, vamos a hacer unos pequeños cambios…

-¿Cambios? ¿Qué tipo de cambios?-pregunto Rose.

-Sencillo-dijo Kurt levantándose de su asiento.

-Los regalos este año, serán fabricados por nosotros mismos.

-Como que…-comenzaron a protestar.

-Así, debe ser algo sencillo, hecho por nuestras propias manos, además, quien haga el regalo deberá contar como es que llegaron a hacerlo, y decir porque hicieron ese regalo y no otro.

-¿No es más sencillo comprar algo y ya?-dijo Dar al resto buscando apoyo de sus compañeros.

-Creo que está bien… me gusta tu idea-apoyo Chris.

-A mí también, así todos están obligados a pensar realmente en la persona a quien se supone deben regalarle algo-dijo Isabelle entusiasmada.

-Perfecto…más trabajo-dijo Chase.

-¿Algún cambio más Kurt?-dijeron Camille y Edward con cara de pocos amigos.

-No por ahora-respondió sarcástico el castaño.

-Y antes de que se vayan, todos escriban sus nombres porque haremos el sorteo de inmediato, ya saben, necesitaran tiempo para fabricar sus regalos.

Todos hicieron lo que el castaño dijo, Chase busco una bolsa para que todos sacaran su papel.

-Ok, ¿todos tienen el suyo?

-Si…-respondieron al unísono.

-¿Alguien tiene su propio nombre como persona a quien regalar?

-No…

-Perfecto, entonces usen su imaginación y sean observadores-dijo antes de partir.

-¡Kurt!-grito Chase corriendo tras su compañero a la salida de la oficina.

-¿Si?

-Tenemos que ir de compras… ¿mañana después de almuerzo? No creo que Isabelle se enoje si nos tomamos un par de minutos extras…

-Claro.

-¿Tenemos una cita entonces?

-No Chase, esto no es una cita…

-Perdón por intentarlo-dijo riendo y tomando otro rumbo.

-¿Quién te toco?-pregunto Rose alcanzándolo y tomándolo del brazo.

-¡Es una sorpresa hasta el viernes!

-¡Kurt! Me toco Isabelle-dijo susurrando para que nadie escuchara.

-¿Y?

-Como que ¿y? que le voy a dar, ¡ella es la jefa!-dijo pareciendo estar al borde de la desesperación.

-Por lo mismo pensé que era mejor que cada uno hiciese su regalo, todos aquí tenemos un talento ya sea diseñando, dibujando… ¿qué se yo? ¿Todos tenemos algo que hacemos bien o no? Especialmente tu Rose, eres talentosa y muy inteligente, estoy seguro que encontraras algo que darle.

-Pero…

-Nada Rose, piensa en esto como una oportunidad para sorprenderla con tu talento.

-¿Quién te toco?-volvió a intentar la muchacha.

-¡Rose! no te diré-le respondió dando por terminada su conversación antes de tomar el ascensor.

Esa misma noche Kurt le contó a Blaine sobre su innovación, el moreno parecía igual de entusiasmado que él, y comenzó a darle sugerencias sobre que dar como regalo.

-Ahora solo tengo un problema-dijo Kurt jugando con la comida que aún le quedaba en el plato.

-¿Cuál?

-Tengo que ir de compras con Chase…

-Vamos Kurt, mira estoy lleno de espíritu navideño gracias a ti, ve, haz lo que tengas que hacer y no te sientas mal, si es que lo que te preocupa es que yo me vaya a molestar.

-¿De verdad no te molesta?-pregunto Kurt dándole una media sonrisa y con un claro dejo de preocupación en su mirada.

-Claro que no, además me encargue de dejarle claro a ese Chase, que no voy a dejar que se te acerque demasiado.

-¿Lo amenazaste?-pregunto el castaño con un pequeño toque de emoción en su voz.

-No… es decir más o menos, solo una advertencia…-dijo quitándole importancia al asunto.

-¿Desde cuándo te volviste tan celoso?

-Desde que me di cuenta de que un error podría llegar a separarnos…

-Sabes que ese error nunca nos separó realmente ¿cierto?

-Pero casi… ¿qué tal si no hubiese logrado reconquistarte? ¿Qué tal si lo que sentías por James hubiese sido más fuerte?

-¿Qué tal si?…. ¿Qué tal si?… eso no ocurrió, yo te amé, te amo y te amare siempre, eso es algo que no cambiara.

-Bueno, pero déjame asegurarme de disminuir al máximo los factores extras que aparezcan.

-Ok… estas cada día más loco Blaine.

Luego de unos minutos se despidieron para ir a la cama.

-¿Le dijiste algo acerca de NYADA?-pregunto Rachel metiéndose en la cama de Kurt cuando éste apago si computador.

-No aun, será en navidad… cuando sepa cuáles fueron los resultados.

-¿La canción será para él no es así?

-Blaine me dijo hace tiempo que se había dado cuenta de lo que sentía por mí cuando cante Blackbird, dijo que por primera vez me había visto tal cual era, solo en un instante pudo ver exactamente que había en mi interior…

-Como cuando le cantaste a tu papa…

-Supongo…

-Estoy segura que esta canción te llevara directamente a NYADA.

-Eso espero.

-Buenas noches-dijo Rachel besándolo en la mejilla y volviendo a su propia cama.

Al día siguiente Kurt llego a la oficina un poco más tarde de lo normal, ya que se entretuvo con Rachel pidiéndole que lo ayudara con un par de compras.

-¿Te quedaste dormido?-pregunto Dar desordenándole el cabello.

-Con mi cabello no te metas…-respondió comenzando a luchar contra las manos del muchacho que insistía en despeinarlo.

-Déjalo tranquilo-lo regaño Rose.

-¿Ya pensaron en un regalo?-dijo Kurt curioso.

-Yo si…-respondió Dar sonriente.

-Yo aún sigo trabajando en eso-agrego sin animo Rose.

-¿Almorzamos juntos?-pregunto Chase asomándose al escritorio que usaba Kurt.

-Mmm…

-Vamos Kurt, tenemos que ir de compras luego…

-Está bien, ¿nos vemos a las 13.30?

-Perfecto.

Unas horas más tarde ambos se encontraban comiendo en un pequeño parque que se encontraba afuera de la revista.

-¿Que trajiste de almuerzo?-pregunto Chase al ver las tres cajas de comida que tenía Kurt en sus piernas.

-Espagueti con salsa blanca, ensaladas y algo de fruta-dijo apuntando a cada uno de los envases.

-¿Eso es mucha comida no crees?

-Claro que no, es lo justo y necesario para tener energía toda la tarde… ¿qué trajiste tú?

-Un hot-dog y una soda.

-Comes peor que Blaine…-dijo el castaño dándole una mirada a su comida.

-Con respecto a tu novio… quería disculparme, no fui muy agradable el otro día…

-¿No fuiste muy agradable? Fuiste grosero Chase, apenas lo conoces-dijo molesto.

-Sabes que a vece no pienso las cosas que digo…

-Como sea, no es a mí a quien le debes una disculpa, es a Blaine.

Ambos guardaron silencio durante unos segundos.

-Toma un poco de mi ensalada-dijo Kurt pasándole la pequeña cajita transparente.

-¿Por qué sigues comportándote así conmigo?

-¿A qué te refieres?-contesto Kurt sin entender.

-He sido molesto, grosero y quizás un poco agresivo… pero tú sigues siendo agradable conmigo, no lo entiendo.

-Acabas de pedir disculpas, ¿por qué no tendría que confiar en ti o comportarme diferente?

-¿Eres extraño sabes?

-Claro que no… y será mejor que te apures, Isabelle no estará muy feliz si nos demoramos demasiado.

-Está bien-dijo volviendo a su almuerzo.

Ambos muchachos se fueron de compras unos minutos más tarde, aunque tuvieron un par de discusiones, su salida fue bastante agradable, Kurt se enteró de cómo había llegado Chase a la revista y este último se enteró de como Blaine había convencido a Kurt de seguir sus sueños, y lo difícil que había sido para ambos separarse después de lo que había pasado entre ellos.

-Ustedes parecen tener una gran historia…

-Una historia complicada-dijo sonriendo el castaño perdiéndose en sus pensamientos.

Cuando volvieron a la revista llevaron la comida al casino y las decoraciones a la oficina de Chase.

-¿No ha sido tan malo o sí?-pregunto el muchacho sentándose tras su escritorio.

-Creo que no…

-Bueno, ¿el viernes ordenamos y decoramos todo?

-Claro, nos juntamos a medio día para que este todo listo a la hora de almuerzo.

-Nos vemos entonces.

-Nos vemos.

El día viernes por fin había llegado, en la noche tendrían una cena y a mediodía del sábado concluiría lo que quizás era su única razón de estar en NY, luego de eso Kurt estaría listo para partir a Lima, esa misma tarde llegarían los papas de Rachel para pasar las festividades con ella, por lo que Kurt viajaría una vez dada su audición, Burt lo pasaría a buscar al aeropuerto, Blaine estaría en casa esperándolo para salir a comer afuera con Finn y Carole.

Todos habían dejado sus presentes bajo un pequeño árbol de navidad que Isabelle había traído.

-Todos por favor, tomen asiento… ya vamos a comenzar-dijo emocionado Kurt dándole la bienvenida a sus amigos.

Todos tomaron asiento y esperaron a que Kurt y Chase dieran por iniciada su celebración.

-¿Alguien quiere comenzar o sacamos uno al azar?-pregunto Chase viendo la cara de sus compañeros.

Todos comenzaron a mirarse hundiéndose en sus sillas.

-Ok… comenzare yo supongo-dijo Kurt buscando la caja que esa misma mañana había dejado bajo el árbol.

-Aquí esta-dijo levantándose y dándole una mirada a su regalo.

-Este es el mío, y es para… ¡Dar!... ten-dijo entregándole una caja perfectamente envuelta y con un enorme moño rojo en la parte superior.

-Gracias Kurt, ¿qué es?

-Ábrelo, ábrelo…

-¡Delicioso! Son galletas-grito mostrándoselas a Chris.

-Si, las prepare yo, y son muy especiales…

Dar tomo una con la forma de una estrella y la probo.

-¿Te gustan?-pregunto Kurt esperanzado.

-Exquisitas, tienes talento…

-Gracias, pero la receta no es mía, es de Blaine… él fue quien me dio la idea, hace tiempo le conté de ti y de como siempre estabas robando la comida a todos… así que pensó que sería una buena idea darte algo que el resto pudiese robar…, además es parte de una tradición que tenemos, algo que me prometió hace un tiempo.

-¿Blaine las prepara para ti? Es un buen cocinero-comento con la boca llena de galleta.

-En realidad es lo único que sabe cocinar solo, sin que exista la posibilidad de un incendio…

-Pero no le digan que se los dije-susurro como si Blaine pudiese escucharlo.

-Muchas gracias…-dijo Dar escondiendo sus galletas ante las miradas de Rose y Chris quienes eran generalmente victimas de sus robos.

-Bueno Dar, es tu turno…-dijo el castaño.

El muchacho se levantó y comenzó a buscar entre los regalos que quedaban.

Aclaro su garganta y sin decir nada le paso su regalo a Chris. Una enorme sonrisa se dibujó en el rostro del joven quien comenzó a deshacerse del papel lo más rápido posible.

-Es… hermoso-dijo antes de darle un fuerte abrazo, lo que provoco que Dar se sonrojara.

-¿Te gusto?

-Es adorable…

Chris tomo su regalo y se lo mostro al resto de sus compañeros. Era un muñequito, un Chris en miniatura, de unos diez centímetros.

-¿Lo hiciste tú?-pregunto Rose sorprendida.

-Si…y me costó mucho.

-Eres tu-dijo casi susurrando el moreno.

-Está hecho con trozos de tela del departamento de costura, lo rellene con algodón para que fuese suave como tú, lo que más me costó encontrar fueron los botones-dijo apuntando a los ojos del muñequito.

-Quería que se parecieran al color de tus ojos, pero no encontré ninguno aquí que se pareciera, así que hice trampa…tuve que comprarlos, ¿saben que en esta ciudad hay muy pocos lugares donde comprar botones?

-¿Que dice su camiseta?-pregunto Kurt mirando con detalle el muñeco.

-Dris…

Chris le dio una mirada cómplice y le sonrió a su compañero.

-¿Qué es eso?-volvió a preguntar Kurt.

-La mezcla de nuestros nombres-respondió Chris.

-Sweet…-dijo Kurt feliz.

-Chris es tu turno…-dijo Chese rompiendo el momento romántico.

El muchacho se levantó sin soltar su regalo.

-Este es para ti Rose-dijo entregándole un papel enrollado con una cinta de colores.

Rose lo abrió con cuidado, al extenderlo se encontró con un retrato suyo.

-¿Lo dibujaste tu Chris?-pregunto la muchacha sorprendida.

-Sí, sabes que nos conocemos hace mucho… y siempre he pensado que eres hermosa, quise que te vieras tal como te veo yo.

-No sabía que podías dibujar.

-Es algo que hago en mis ratos libres…-dijo un poco avergonzado Chris.

-Déjame verlo-dijo Isabelle pidiéndole el dibujo.

-Claro…

-Chris, tienes mucho talento, ¿cómo es que nunca nos dijiste que podías hacer esto?-dijo Isabelle asombrada con la calidad del dibujo.

-Se lo he dicho muchas veces…-agrego Dar dándole una sonrisa a Chris.

-Ok… un montón de ideas se están cruzando por mi mente ahora…-dijo Isabelle dándole otro vistazo al trabajo.

-¿Podría ayudarnos con algunos bocetos para el blog no crees Isabelle?-dijo Kurt sonriendo.

-Claro que si… pasa más tarde por la oficina Chris.

-Claro…-dijo contento el muchacho.

-¿Te gusto Rose?

-Es hermoso- Rose nunca se había sentido como si fuere realmente linda, vivía rodeada de modelos, era difícil sentirse especial en esas condiciones, pero había algo en ese dibujo, algo en sus ojos, algo que no había visto, ¿en realidad ella se veía así? Rose le devolvió una sonrisa a Chris susurrándole un gracias.

-Ok… me toca a mí entonces-dijo la muchacha saliendo de sus pensamientos.

-Esto es para ti Isabelle.

-Déjame verlo…

Rose entrego en sus manos una cajita que en su interior contenía un avecilla hecha con retazos de género.

-¿Cómo hiciste esto?-pregunto Isabelle mirando con detenimiento cada detalle.

-¿Recuerdas que hace unos días me dijiste que botara un muestrario de telas que no te gusto? Dijiste que no se podría diseñar nada bueno con ellas… bueno yo diseñe esto…

-Ok…entonces puedo retractarme de lo que dije… definitivamente se podía hacer algo hermoso con ese muestrario…

Rose le dio una mirada a Kurt quien le sonrió.

-¡Es mi turno!-dijo Isabelle.

-Esto es para ti Chase…no lo envolví porque sería un poco peligroso-dijo riendo.

-¿Un cactus?

Varios de sus compañeros rieron.

-El cactus lo saque de mi casa… y el masetero lo diseñe yo misma, le coloque todas estas piedrecillas de colores…puedes decir que tienes un Isabelle Wright Original en tus manos, es para que le des un poco de alegría a tu oficina, mira los cactus son plantas muy especiales, aunque no siempre son muy valoradas, se ven simples, y tal vez un poco molestas, ya sabes por todas esas espinas… pero si tienes paciencia, puedes verlos florecer, tu generalmente tienes una actitud un poco distante, y en ocasiones agresiva, pero sé que en el interior hay una pequeña flor que está esperando a que alguien se dé el tiempo suficiente para observarla. Además sé que eres muy descuidado, y esto será algo que no morirá aunque a veces olvides regarlo…

-Gracias Isabelle, no sabía que pensaras eso de mi-dijo un poco avergonzado.

-Tienes un problema de actitud Chase, pero eres agradable, y muy eficiente por cierto-dijo bromeando.

-Creo que ahora es mi turno…-dijo Chase aclarando su garganta.

-Esto… es para ti Kurt…

-¿Para mí?

-Si…-Chase le entrego una caja de color amarillo con una cinta rosa en el centro.

Kurt saco lo que había en el interior y lo observo con cuidado.

-Supongo que no sabes lo que es… así que tendré que explicarlo-dijo complicado.

Kurt lo dejo sobre la mesa donde todos pudieron observarlo, varios se acercaron para mirarlo con detenimiento.

-Dos de tus galletas a que es un perro con alas…-se arriesgó a decir Rose a Dar.

-Rose…esa cosa que está ahí no es más que un claro caso de como el cambio climático y la radioactividad puede afectar a animalitos inocentes-respondió a la muchacha, recibiendo como respuesta un golpe y una mirada amenazante de Chris.

-Graciosos… ¿pueden dejarme explicar el regalo por favor?

-Adelante-dijo Isabelle intrigada por saber que era aquel adefesio.

-Aunque Ud. no lo crean esto es un hada… Kurt tu… eres alguien delicado, y que vive saltando y cantando por todos lados, hace un par de días me contaste acerca de tu vida y tus sueños y creo que los lograras, porque eres especial, en cierto modo me recuerdas a campanita, de Peter Pan…

-¿Por qué necesito de los aplausos para poder brillar?-dijo recordando un comentario que hacía mucho tiempo Rachel había hecho.

-Más o menos… eres adorable, ya te lo había dicho… pero cuando te enojas tienes un genio de los mil demonios… aun así, todos parecen enamorarse de ti en cuanto te conocen, es algo que me gustaría tener, solo un poco…

-No se parece en nada a campanita-dijo Dar apuntando a la figura en la mesa.

-Deberías ver los otros treinta intentos frustrados que tengo en mi departamento…este fue el que mejor quedo, además mi trabajo tiene que ver con las relaciones publicas, no con el arte-se defendió Chase.

-Estoy en las mismas condiciones que tú y mi regalo es mucho más bonito-contraataco Dar, recibiendo otro golpe de Chris.

-Es muy bonito-dijo Kurt tomándolo entre sus manos y mirándolo más de cerca.

-No seas mentiroso, es horrible, pero es lo mejor que pude hacer-dijo Chase sintiéndose bastante frustrado, generalmente era el que hacia el mejor regalo ya que no escatimaba al momento de gastar su dinero.

-Y eso lo hace perfecto Chase-dijo Kurt sonriéndole y acariciando su mano en señal de agradecimiento.

El resto de sus compañeros terminaron de entregar sus presentes, la reunión resulto más larga de lo esperado, cada uno comentaba acerca de lo difícil que había sido hacer su regalo, pero al final todos estaban contentos con el resultado.

Kurt despertó temprano la mañana del sábado, tratando de mantener la calma y controlar su miedo, pero estaba siendo una tarea realmente difícil, desde que llego a NY se había estado preparando para este día, no solo con sus clases, sino también con la ayuda de Rachel.

-¿Estas nervioso?-pregunto su amiga observándolo con preocupación.

-Claro que sí, es algo que llevo medio año esperando…

-Kurt, tienes que estar calmado, recuerda respirar….

-Disfrutarlo-término de decir Kurt.

-Así es, recuerda que esto es por ti.

-Y por Blaine-agrego el castaño.

-Y por Blaine…-repitió con confianza Rachel.

Kurt llego a la escuela 15 minutos antes de que comenzaran las audiciones, él era el tercero en la lista por lo que debería esperar por lo menos una hora antes de que fuese su turno.

-¿Quieres que te traiga un jugo o algo?-pregunto Rachel quien se empecino en acompañarlo.

-No, estoy bien, solo un poco ansioso.

-Kurt Hummel… adelante.

El mismo grupo de profesores que lo habían recibido hacia unos meses estaban nuevamente sentados tras esa enorme mesa frente a él, pero ahora se les unían otro grupo de tres profesores y un pequeño grupo de 10 jóvenes, alumnos seguramente.

-Sr. Hummel, como vera en esta ocasión tiene un público mayor al de la última vez que canto para nosotros-dijo Carmen Tibideaux.

-Mi nombre es Kurt Hummel, y voy a audicionar para el rol de… Estudiante de NYADA.

http://www.goear.com/listen/2059aad/being-alive-kurt-hummel



Kurt cerró sus ojos y respiro profundamente, miro en su interior, sus temores, sus esperanzas, ahí estaba, era su oportunidad, y como siempre ahí estaba también Blaine, mirándolo con esos hermosos ojos.

“…Someone to hold you too close,
Someone to hurt you too deep,
Someone to sit in your chair,
To ruin your sleep…”
“…Someone to need you too much,
Someone to know you too well,
Someone to pull you up short
And put you through hell…”

Ese alguien era Blaine, la única persona capaz de hacerlo feliz, pero también la única persona capaz de hundirlo, la única persona que podía destruirlo por completo, con una sola palabra, con una sola mirada.

Pero esto no era solo por él, era por su padre también, por ese amor incondicional que le había brindado todos estos años, aceptándolo, y empujándolo a sobrellevar cualquier cosa, enseñándole a estar orgulloso de quien realmente era. También vivía por él.

“…Someone to crowd you with love,
Someone to force you to care,
Someone to make you come through,
Who'll always be there,
As frightened as you
Of being alive,
Being alive,
Being alive,
Being alive…”

Gracias a Blaine se sentía vivo, dolor o amor, desilusión o esperanza, cada sentimiento lo había tenido con él, ¿eso era estar vivo no? Sentir, bueno o malo, pero ser capaz de sentir, sentir lo que sentía por Blaine.

-Gracias Sr. Hummel, dentro de poco tendrá una respuesta a su solicitud.

Rachel lo esperaba afuera con sus maletas.

-Estas llorando… ¿Ocurrió algo malo?

-No, solo necesito hablar con Blaine-dijo secando sus lágrimas y tomando su celular.

-¿Kurt? ¿Estás en el aeropuerto?

-No aun.

-Te sientes bien, suenas extraño.

-Estoy bien, pero necesitaba escuchar tu voz.

-¿Estás seguro de que estas bien?

-Sí, solo tuve un momento, ya sabes que a veces me ocurren esas cosas-dijo riendo.

-¿Sabes cuánto te amo?

-Mucho espero.

-Demasiado. Quiero verte.

-Yo también, quiero sentirme vivo.

-¿A qué te refieres?

-Nada, no me hagas caso.

-Todos estamos esperando por ti.

-Tendremos un feliz navidad ¿no es así?

-Claro que sí, estaremos juntos.

-Extraño tu olor.

-¿Ocurre algo que no me estás diciendo?

-No, ¿nos vemos más tarde?

-Claro.

Kurt abordo el avión una hora más tarde, si el vuelo no se retrasaba estaría en casa para cenar junto a toda su familia.

-¡Kurt!-grito Burt al ver a su hijo llegar arrastrando una maleta y un pequeño bolso.

-Papa…-respondió el castaño corriendo hacia sus brazos para darle un fuerte abrazo.

-Tanto tiempo sin verte pequeño…-dijo Burt revolviendo su cabello.

-Lo sé, perdón por no haberte avisado la última vez que vine-dijo aun con su rostro pegado al hombro del hombre.

-Está bien, hijo, siempre habrá tiempo para nosotros, ¿lo sabes cierto?

-Claro, disculpa de todos modos papa.

-Basta de disculpas, ya estamos aquí, juntos.

-Sí, es tiempo de celebrar.

-Mejor vámonos rápido o Blaine tendrá un ataque, llego hace un rato para preparar todo con Carole y Finn, todos están ansiosos de verte.

-Yo también quería verlos papa, no sabes cuánto-respondió volviendo a abrazarlo aun con más fuerza y dando un fuerte suspiro.

-¿Estas bien?-dijo Burt tomando de los brazos a su hijo para mirarlo fijo a los ojos.

-Mejor que nunca.

Ambos se dieron una sonrisa antes de partir.

-¿Y qué tienen que preparar? ¿Pensé que comeríamos afuera?

-Así es, me refiero a las cosas navideñas, ya sabes, el árbol, las luces…

-¿Aun no tienen eso listo?

-Claro que no, teníamos que esperarte a ti, Blaine y Carole fueron de compras ayer, y Finn se encargó de ir por el árbol. Pero aún hay que organizarlo todo, y Blaine insistió en que quería que fuese esta noche.

-Yo que quería desconectarme de cualquier tipo de “organización” por estos días.

-Bueno, eso se lo tendrás que decir tú a Blaine-dijo su padre riendo.

-Papa… a veces no sé si amas a Blaine o lo odias…

-Tenemos una relación especial, vamos el chico es gracioso, se ha vuelto tan… ¿sentimental?

-Papa…

-Pero lo quiero, de verdad, te hace feliz, así que para mí está bien, lo hubieses visto ayer, parecía un niño mostrándonos todo lo que habían comprado.

Una vez llegaron a la casa Kurt se encontró con Finn, Carole y Blaine esperándolo en la entrada.

-¡Por fin llegan!-dijo Finn siendo el primero en ir a saludar.

-Ven aquí-dijo el mayor abrazando a su hermano y elevándolo un par de centímetros sobre el suelo.

-Bájame Finn…me estas ahogando…

-Oops, los siento-respondió soltando un poco el agarre.

-Se más cuidadoso Finn-lo regaño Carole dándole un golpecito en el brazo a su hijo.

-Hola cariño… déjame verte… creo que estas más delgado Kurt, ¿has estado comiendo bien?

-Si… ¿no es así Blaine?-dijo mirando a su novio quien reía divertido desde la puerta.

-Sí, come bien, Rachel y yo lo mantenemos controlado…

-¿No vas a venir a saludarme?-pregunto Kurt extendiendo sus brazos hacia la dirección donde el moreno se encontraba.

Blaine respondió a la invitación con una enorme sonrisa.

-Te extrañe…-dijo abrazándolo con fuerza.

-Nos vimos hace un par de semanas, y hemos hablado todos los días Blaine…

-¿No me has extrañado?

-Claro que si…-respondió besándolo, era cierto que hablaban varias veces al día, pero el contacto físico era algo de lo que no podían disfrutar, sentir su aroma, los brazos del otro rodeándolos, besarse, acariciarse, eso era algo que no podían compensar aunque estuviesen viéndose durante todo el día a través de la computadora.

-Ya… sepárense… tengo hambre-dijo Finn metiéndose entre ambos y rodeándolos con sus brazos por el cuello.

-¡Finn!

-¿Qué?, yo también necesito cariño….

-Finn déjalos tranquilos… ve por las llaves del auto-dijo Burt salvando la situación.

Burt y Carole se quedaron afuera mientras los muchachos entraban a dejar las cosas de Kurt en su habitación.

Blaine comenzaba a desempacar cuando Finn los llamo para que bajaran.

-¡Dense prisa, tenemos hambre!

-¿Puedes sacar la cámara Blaine? Quiero muchos recuerdos de estas vacaciones…

-Claro, ¿dónde está?-pregunto el moreno comenzando a revisar el bolso.

-Está en el bolsillo pequeño…

-Aquí la tengo…

-Bajemos antes de que suban por nosotros.

-¿Listos?-pregunto Burt a todos.

-¡Claro!

-¿Que tienes ahí?-pregunto Finn quitándole el estuche de la cámara a Blaine.

-Eso es de Kurt, Finn…

-Sí, pero somos hermanos así que es como si fuese mía también-dijo encendiéndola y tomándose una foto con ella.

-Finn…-reclamo Kurt.

-Lo se… quieres una foto de los tres-respondió lanzando su cuerpo sobre el de Blaine para que los tres cupieran en el cuadro.

-¡Digan Finn es perfecto!-grito antes de sacar la foto.

-Salimos horribles Finn-dijo Blaine mirando la pantalla de la cámara.

-Kurt miro la pequeña pantalla y tanto Blaine como el aparecían con cara de “¡que rayos!”.

-Es espontanea-dijo Finn quitándosela de las manos otra vez.

-Veamos que tienes aquí…

-Rachel…-susurro Finn quedándose detenido en una de las fotos.

-Si… es de hace uno días, una presentación en NYADA.

-¿Cómo esta ella?-se atrevió a preguntar Finn sin despegar la mirada de la cámara.

-Bien…

-Ella esta con…

-Si Finn, pero solo son amigos, nada serio que yo sepa-dijo Kurt intentando tranquilizar a su hermano aunque sabía perfectamente que las cosas entre su amiga y Brody desde hace un tiempo estaban tomando otro rumbo muy distinto al de “solo amistad”.

-Mejor dame eso-dijo Blaine dejando a su cuñado perdido en sus pensamientos.

-¿Que es esa cosa que tienes en las manos Kurt? ¿Un animal muerto?-pregunto Blaine mirando en la cámara.

-¿En tu trabajo visten cosas muertas?-dijo Finn volviendo a la conversación.

-¿De qué hablan?-pregunto el castaño intentando entender a que se referían los otros dos.

-Esta mira…

-Oh… no, eso es mi regalo… es decir el que me dieron en la revista.

-¿Vogue está en quiebra? ¿Por qué te dieron algo tan feo?-pregunto Finn aumentando la imagen para ver exactamente lo que Kurt tenía en sus manos.

-No, lo hizo un compañero…

-Por cierto, nunca me dijiste quien tuvo que hacerte el regalo-dijo Blaine dándole una sonrisa al castaño.

-Fue Chase…

-¿Quién es Chase?-pregunto de inmediato Burt y Finn al ver el rostro de Blaine.

-Un compañero…que invita a Kurt a salir…

-Y al que he rechazado en cada ocasión-acoto Kurt.

-Blaine, Blaine, Blaine….

-Finn, Finn, Finn… ¿qué pasa?-dijo de mal humor

-Blaine, Blaine Blaine….

-¡¿Qué?!

-¿Es guapo?-pregunto Finn.

-No-se apresuró a responder Kurt.

-¿Es más alto cierto?... ¿es eso? ¿Es más alto que Blaine no?

Blaine le dio una mirada de pocos amigos a Finn, lo que provoco la risa de Burt quien los miraba por el retrovisor, lo que a su vez provoco que Carole le diera un golpe en el brazo a su esposo.

-Si es más alto-respondió el mismo Blaine.

El mayor negó con la cabeza y se cruzó de brazos.

-Tendremos que hacer algo…

-No hay nada que hacer Finn, él tiene claro que estoy con Blaine, que lo amo, que no saldré nunca con él y eso es todo, no hay nada que hablar de Chase, por cierto…me pidió disculpas y dijo que te las hiciera llegar a ti también Blaine… por lo de la otra noche.

-¿Que paso la otra noche?-pregunto Burt con un tono inquisitivo.

-Nada… solo me llamo enano-respondió Blaine cruzándose de brazos también.

-No dijo eso Blaine… solo que él pensaba que mi novio sería más alto que yo.

Finn soltó una pequeña carcajada pero se controló al instante, frunciendo el ceño al ver la mueca en la cara de Blaine.

-¿Ahora lo defiendes?-pregunto el moreno.

-No… es solo que estos últimos días hablamos y no es tan malo…

-¿Perdón?

-Blaine él se disculpó…

-¿Todo es así de sencillo no? Me ofende, te acosa, una pequeña disculpa y todo está arreglado, que ¿ahora son amigos?

-No Blaine, solo dije que no era tan desagradable…

Finn le dio una mirada reprobatoria a su hermano.

-¿Pueden dejar de discutir por favor? Vamos a comer y no quiero malas caras, se supone que estamos aquí para celebrar-dijo Burt dando por terminada la pelea.

-Ok…-dijeron los tres.

-Finn cariño, déjalos solos un instante-dijo Carole tomándose del brazo de su hijo y caminando junto a Burt hacia el restaurante.

-¿Estás enojado?-pregunto Kurt dándole la mano a Blaine.

-No.

-Estás enojado-concluyó Kurt mirando al suelo.

-No estoy enojado.

-¿Y entonces por qué no me miras?

Blaine guardo silencio y detuvo su andar.

-Sabes que no me agrada Chase.

-Lo sé, y aun no tiene mi confianza, es solo que estos días hablamos por el asunto de la organización de nuestra pequeña celebración y me pareció que no es tan desagradable.

-¿Aun después de lo que me dijo?-pregunto Blaine sabiendo que esto era una estúpida discusión, él mismo le había dicho hace unos días que podría ir de compras con Chase y que no se enojaría, y ahora estaba ahí, completamente molesto por la situación, y se sentía estúpido, pero aun así esa sensación en su estómago lo hacía decir cosas que no quería, estúpidos celos.

-El parecía sincero cuando se disculpó, además le dejaste claro que tú me habías conquistado… y yo le conté nuestra historia, y de porque no había nada que el pudiese hacer que se interpusiera en lo que siento por ti.

-Disculpa, me estoy comportando como un tonto Kurt, vienes de visita y lo primero que hago es enojarme.

-Claro que no, solo estas preocupado por mí, sé que no confías en el, pero no me hará nada.

-Eso espero.

-¿Me das un beso?-pregunto Kurt haciendo un puchero.

-Eso no tienes que pedirlo-respondió besándolo y tomándolo fuerte de la cintura.

-¿Vienen o se siguen besando?-grito Finn desde la entrada del restaurante.

-¡Deja de gritar! pareces un loco Finn.

-¡Por si no te habías dado cuenta también me estas gritando Kurt…!-dijo burlonamente.

-Deja que te alcance-dijo el castaño comenzando a correr arrastrando a Blaine tras el para alcanzar a Finn quien se escondía tras Burt quien acababa de salir al parecer para preguntar lo mismo que su hermano.

-Dejen de comportarse como niños ustedes tres por favor-regaño Burt.

Todos guardaron silencio y entraron al lugar con su mejor sonrisa hasta donde estaba Carole.

-Por fin llegaron, estaba a punto de salir a buscarlos.

-No te preocupes mama, ya estamos aquí, somos niños buenos…

-Si seguro…-susurro Burt dándole un pequeño beso a su esposa al tomar asiento a su lado.

-¿Que van a comer?-pregunto un mozo que se acercó a su mesa.

-¿Nos puede tomar una foto primero?-dijo Finn sacando la cámara de su bolsillo.

-¿Cuando la sacaste?

-Mientras ustedes discutían…

-Finn ese no es trabajo de él-dijo Kurt avergonzado.

-No es problema-respondió el muchacho quien se apresto a fotografiarlos.

-¡Digan Finn es un genio!-grito Finn logrando nuevamente una pésima foto.

-¡Finn!-dijo Carole a su hijo.

-¿Qué?

-Mira como salimos.

-¿Les tomo otra?-pregunto el mozo al ver la decepción de sus clientes.

-No, esta es perfecta-dijo riendo Finn.

-Pero…

-¿Qué? Miren… ¿qué recordaremos más? ¿Una sosa foto todos sonrientes o está en que todos tienen esa cara tan graciosa?-decía riendo y apuntando a los rostros de todos.

-Ok… mejor pidamos algo de comer-dijo Burt negando con la cabeza.

Eran cerca de las 22.00 hrs cuando volvieron a casa.

-Estoy agotado…-dijo Burt dejándose caer sobre el sofá y encendiendo el televisor.

-Nada de descansar papa, tenemos que decorar-dijo Kurt tomándolo del brazo y tirando de el para animarlo.

-¡Sí! Todos arriba-se unió Blaine.

-Pero…

-Nada de “pero”, ayer fuimos de compras y tu Finn trajiste el árbol, Kurt ya está aquí así que no hay más excusas para comenzar a decorar-dijo Carole comenzando a sacar de las cajas todo lo que habían comprado.

Kurt pasó el resto del fin de semana en su casa, el día lunes todos irían a la casa de Blaine a celebrar las festividades.

Carole y Kurt llegarían temprano a la casa de los Anderson, Elizabeth quería preparar algo especial, y pidió ayuda a Carole para hacerlo, cuando esta le comento a Kurt quiso de inmediato unirse a los preparativos.

-¿Puedo ayudar a cocinar?-dijo entusiasmado Kurt a Elizabeth y Carole.

-Claro cariño…

Los tres cocinaban alegres cuando Blaine bajo las escaleras en busca de su novio. Se detuvo en la cocina viendo esa hermosa imagen, su madre, Carole y Kurt felices cantando mientras daban vueltas por la habitación.

-Hola hermoso…-dijo al oído de Kurt abrazándolo por la espalda.

-Cuidado Blaine, puedo quemarte.

-Eso no estaría mal.

-Blaine… te acabo de escuchar jovencito-dijo Elizabeth sin mirar a su hijo, lo que provoco que ambos jóvenes se ruborizaran.

-¿Por qué no mejor ayudas a tu papa a preparar la mesa?-dijo Carole dándole una mano.

-Claro… ¿dónde están Burt y Finn?

-Fueron a comprar algo creo…-respondió Kurt sin perder la atención de lo que estaba haciendo.

-¡Llegamos!-dijo Finn entrando a la cocina.

-¡Deja de gritar Finn, compórtate!-regaño Carole.

-Déjalo, no sabes desde hace cuánto tiempo no había tanta alegría en esta casa para una fiesta-respondió Elizabeth dándole una sonrisa complacida a Finn.

-¿Puedo ayudar en algo?-dijo Burt.

-Vayan por algo de leña para la chimenea, no hay nada que conforte más una navidad que un poco de fuego.

-¿Hace mucho frio afuera?-pregunto Kurt mirando por la pequeña ventana que daba al jardín.

-No aun… pero creo que comenzara a nevar esta noche.

-Entonces será mejor que vayamos ahora por la leña, ¿nos acompañas Blaine?

-Claro…

Media hora más tarde todos estaban sentados frente a una hermosa mesa, delicadamente decorada, con pequeñas velas que daban un ambiente cálido.

-¿Puedo tomar una foto?-dijo Finn sonriendo.

-Solo si dejas de decir frases extrañas para que salgamos mal en ella.

-Ok…

Esta vez Finn hizo caso, por fin tenían una foto decente que mostrar a sus amigos.

-¡Ahora digan Finn es el jefe!-grito antes de tomar una segunda foto provocando la risa de todos.

-¿Puedo hacer un brindis?-dijo Blaine mirando a su padre y a Burt.

-Adelante.

-Ok… quiero brindar, por mi familia, todos presentes en esta mesa, porque es la primera navidad familiar desde que era un niño, porque estoy feliz, porque tengo absolutamente todo lo que puedo pedir, porque tenemos salud y porque esta no sea la última de nuestras celebraciones.

-Salud hijo-dijo William sonriéndole y tomando la mano de su esposa.

-Salud por todos los que no están, porque ellos también estén felices-dijo Finn.

La cena fue tranquila, entre anécdotas de Kurt y las historias de Finn y Blaine en la escuela.

-Ok… les tengo una sorpresa-dijo Finn levantándose de su asiento.

-¿Si?

-Sí, todos afuera-invito el muchacho mirando su teléfono.

Finn corrió hacia la puerta y se encontró con un grupo de jóvenes.

-Ellos quisieron venir a regalarles una canción, en realidad estamos juntando dinero para el club, ya saben que lo cerraron por esta temporada.

-¿Listos?-pregunto Finn.

-Si quieren se nos pueden unir-dijo Puck a Kurt y Blaine.



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Blaine extendió su mano ofreciendo una pieza de baile a Kurt, este gustoso acepto abrazándolo y posando su mejilla sobre el hombro del moreno.

“…Have yourself a merry little Christmas
Let your heart be light
From now on our troubles will be out of sight…”

Ambos bailando bajo el umbral de la puerta, no necesitaban nada más, un momento privado, aun rodeados de curiosas miradas, pero eran solo ellos esa noche.

-Se ve tan feliz-susurro Elizabeth mirando a su hijo bailar.

-Siempre que están juntos se ven así-dijo Finn dándole una sonrisa a la mama de Blaine.

-Hace mucho tiempo Kurt pensaba que jamás tendría algo así, tenía tanto miedo y estaba tan frustrado pensando que jamás encontraría a alguien con quien caminar de la mano, con quien ser feliz…hasta que conoció a Blaine-dijo Burt sin dejar de mirar a su hijo.

-Pronto no tendremos que volver a separarnos-susurro Blaine al oído del castaño.

-Así es… no más despedidas para nosotros-respondió Kurt mientras cerraba sus ojos e imaginaba su futuro junto a Blaine.

Ambos se separaron unos centímetros para cantar juntos, esto era una promesa entre ellos.

“…Through the years we all will be together and
If the fates allow
Hang a shining star upon the highest bow…
And have yourself a merry little Christmas now…”

Ambos giraban al ritmo de la música, lentamente, disfrutando de la compañía, con sus fieles amigos, tal como decía la canción.

-Podría bailar contigo toda la noche-susurro Kurt respirando profundo, recorriendo son sus dedos la espalda de Blaine quien respondió acercándose aún más.

-Si eso es lo que quieres, así será, siento que podría cumplir cualquiera de tus deseos esta noche.

-¿Sabes que deseo?

-No lo sé, pero espero que ese deseo me involucre a mí…

-Lo único que puedo pedir ahora es tener un futuro contigo.

-Lo tendremos, yo me encargare de eso, haré lo que sea para poder darte todo lo que necesites, prometo trabajar duro para eso.

-Ambos lo haremos, porque será nuestro futuro Blaine, todo nuestro.

“…And have yourself a merry little Christmas
Now…”

Kurt y Blaine se besaron dulcemente al terminar la canción, se observaron durante unos instantes y solo sonrieron, no había mucho que decir, sabían que compartían la misma sensación de plenitud en ese instante, y ambos querían que fuese eterno.

Un sonido hizo salir a Kurt de sus pensamientos. Era su teléfono sonando.

-Me disculpas, creo que es Rachel.

-Claro, dale mis saludos y deséale feliz navidad.

-Sí…

-¿Kurt?

-Sí, soy yo.

-He estado llamándote durante todo el día, ¿dónde estabas?

-En casa de Blaine, Finn trajo a ND, y cantaron un villancico para nosotros.

-¿Finn está contigo?-dijo la morena casi susurrando.

-Está afuera con los demás.

-Dile que tenga una feliz navidad.

-Lo hare.

-Kurt…

-¿Si?

-¿Estas cerca de tu computador?

-No, ¿por qué?

-Necesito hablar contigo un asuntito.

-Pero estamos hablando Rachel…

-Tiene que ser cara a cara, dile a Blaine que te pase su computador.

-Ok… dame cinco minutos y nos conectamos.

-Blaine, ¿podría usar tu computador?

-Claro, pero es navidad Kurt…

-Es Rachel, quiere decirme algo y según ella tiene que ser “cara a cara”.

Kurt había olvidado por un instante el por qué había traído regalos extras, y como tal vez esto podría tener que ver con lo mismo.

-Ok, subamos y así puedo saludarla personalmente.

Blaine encendió el computador y Kurt se conectó con Rachel que parecía estarlo esperando desde hacía un rato.

-¡Hola!-saludo Blaine al ver el rostro de la muchacha.

-Blaine… feliz navidad.

-Feliz navidad Rachel!, espero que estés disfrutando con tus papas.

-Estas son más bien unas vacaciones para nosotros…

-Cierto…-dijo recordando que Rachel era judía.

-Bueno los dejo hablar tranquilos-dijo Blaine despidiéndose de Rachel.



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-Espera, creo que deberías quedarte…

-Rachel…

-Si Kurt-dijo afirmando con la cabeza de manera nerviosa.

-¿Qué ocurre? ¿Me estoy perdiendo de algo?

-Llego la carta de NYADA para Kurt-soltó la pequeña de una vez.

-¿Qué? Pero…nunca me dijiste que ya habías audicionado.

-Fue el sábado en la mañana, antes de viajar.

-¿Por qué no me contaste?

-Se suponía que se los diría cuando supiese el resultado-dijo regañando a Rachel.

-Bueno ahora lo sabremos…

-Pensé que ya la habías abierto.

-Claro que no, es tu carta, por eso quería que me vieras, así la abro y te la muestro, debes ser el primero en verla.

Blaine tomo a Kurt de los hombros apretando suavemente.

-¿Estás listo?-dijo Rachel comenzando a abrir el sobre.

-Espera…

-¿Qué ocurre?

-Y si no me aceptan-pregunto mirando a Blaine.

-Si no te aceptan, deben estar locos…-dijo la pequeña.

-Te aceptaran Kurt.

-¿Y si no lo hacen Blaine?

-Kurt, sea lo que sea que diga esa carta, nada cambiara, tu seguirás en la revista, postularas otra vez si es lo que deseas y yo viajare a NY cuando me gradúe, viviremos juntos y seremos felices-dijo tomándolo de las mejillas y besándolo.

-Chicos... no quiero interrumpir, pero quiero saber lo que dice la bendita carta…

-Ok, ok… ábrela.

Rachel termino de abrir el sobre y con cuidado saco la carta.

-¿Listo?

-Sí.

Rachel giro la carta para que Kurt pudiese leerla a través de la pantalla.

-Sr. Hummel…

-Rápido que dice-repetía Rachel quien era la única que no veía lo que aparecía en la carta.

-Usted…

-Ha sido aceptado-dijo casi susurrando Blaine.

Kurt tenía los ojos llenos de lágrimas, ni siquiera podía distinguir con claridad lo que estaba mirando.

-¡Entraste!-grito Rachel leyendo ella ahora el papel.

-¡Si Kurt, dice que entraste!-repitió confirmando la noticia.

El castaño no decía nada, solo miraba la pantalla, se llevó una mano a la boca intentando ahogar un grito, estaba tan contento, por fin sentía que su sueño estaba haciéndose realidad.

-Te lo dije, podrías pedir lo que quisieras, esta noche es mágica-susurro Blaine besando el cabello de Kurt.

-Nuestro futuro Blaine.

-Así es, tu sueño ya no es un sueño.

Kurt se levantó y abrazo con fuerza al moreno, comenzando a llora en su hombro.

-No llores Kurt, tenemos muchas razones por las cuales estar contentos.

-Lo sé, es solo que… espere tanto por esto.

-Te lo mereces Kurt-dijo Rachel al otro lado de la pantalla.

-Muchas gracias Rachel-dijo Blaine mirándola a través del computador.

-No hay nada que agradecer-respondió con una enorme sonrisa.

-Gracias por apoyarme, y por ayudarme con la canción-dijo Kurt secando sus lágrimas.

-Es lo que hacen los amigos, no tienes nada que agradecer… ahora, ¿podrían hacerme un favor?

-Si claro.

-¿Podrían decirle a Finn que quiero saludarlo?

-Sí, de inmediato…-respondió Blaine.

-Kurt… recuerda los regalos, ya no tendrás que quemarlos-dijo riendo Rachel.

-¿Que regalos?

-Se suponía que hoy o mañana llegaría la carta… así que tenía que estar preparado por si quedaba o no…, solo ve a buscar a Finn y no le digas nada a papa ¿si?

-Claro.

Blaine bajo corriendo hasta donde estaban sus padres y los de Kurt, busco a Finn y lo vio sentado bebiendo un poco de ponche.

-¿Qué ocurre?-dijo golpeándolo en el hombro.

-Nada… es solo que... todos están felices, tus papas, Burt y mama, tu y Kurt…

-¿Rachel?

-Si…

-Bueno, creo que deberías subir a mi habitación, hay alguien que podría subirte el ánimo. ¡Vamos sube!

Finn hizo lo que Blaine le dijo y fue hasta el segundo piso.

-¡Hola Finn!-dijo lleno de energía Kurt dándole un abrazo a su hermano.

-¿Qué ocurre? Blaine me dijo…

-Si, te está esperando-dijo apuntando hacia la computadora.

Kurt llego a la sala sonriente como nunca, Blaine lo vio y fue a ayudarlo con los regalos.

-¿Llego Santa?-pregunto Burt al ver a los muchachos.

-Algo así…

-Esto es especial, todos tiene sus regalos, pero esto es diferente-dijo Kurt nervioso.

-Ok… este es para ti papa-dijo dándole un abrazo y un beso.

-Y este es para Ud. William-dijo entregándole un regalo y sonriéndole.

-¿De qué se trata?-pregunto William dándole una mirada a Burt.

-Ni idea-respondió el hombre.

-Ábranlos…

Ambos abrieron sus regalos al mismo tiempo, Burt saco una gorra y William una camiseta.

-Esto…

-Kurt tu…

El castaño asintió mirando a Blaine quien estaba absolutamente feliz.

-Cariño… ¿entraste?

-Sí, Rachel acaba de darnos la buena noticia.

-Ven aquí hijo-dijo Burt abrazando al castaño-Siempre supe que lo lograrías.

-Gracias papa… gracias por seguir empujándome a seguir mis sueños.

-Teníamos plena confianza en ti-agrego William.

-Sr… yo quería agradecerle… bueno, sin su ayuda yo no hubiese podido tomar las clases, y todo lo que hicieron por Blaine y por mi durante las vacaciones, muchas gracias, todo esto es en gran parte por ustedes., por ti Carole, porque me animaste a seguir.

-Por ti Blaine…-dijo girándose y mirando a su novio.

-Si no hubiese sido por ti, tal vez yo ni siquiera hubiese llegado a NY

-Ven aquí Kurt-dijo Finn abrazándolo y elevándolo del suelo.

-Finn…me estas ahogando.

-Rachel me acaba de contar, que entraste a NYADA.

-¡Si Finn! Por fin lo hice

-Felicidades, ¿ahora supongo que tendremos que seguir celebrando no es así?

-Claro que si-dijo William yendo a buscar las copas.

Eran pasadas las dos de la mañana cuando todos partieron a sus habitaciones, afortunadamente en la casa de Blaine había espacio suficiente para todos, ninguno estaba en condiciones de conducir esa noche.

Kurt y Blaine estaban acostados en la cama del moreno, ninguno de los dos podía dormir, Kurt estaba demasiado contento haber entrado a NYADA y Blaine estaba demasiado orgulloso porque Kurt había alcanzado ese sueño que había sido tan esquivo con él.

-¿Que harás con el trabajo en la revista?-pregunto Blaine a Kurt girándose para poder observarlo mejor.

-Hablare con Isabelle, me gustaría ver la posibilidad de trabajar medio tiempo, de todas maneras las clases en la escuela aun no comenzaran, y lo que estoy haciendo en la revista realmente me gusta, además necesito el dinero.

-Sabes que yo puedo ayudarte con eso si es necesario…

-No Blaine, quiero hacer esto yo, tú ya me has ayudado mucho.

-No me molestaría seguir haciéndolo.

-Lo haré yo, no te preocupes.

-Estoy orgulloso de ti-dijo acariciando el rostro de Kurt obligándolo a que este lo mirara.

-Me encanta verte cumplir cada una de las metas que te propusiste.

-Eso es porque tengo el mayor de los incentivos-dijo el castaño jugando con uno de los rizos de su novio.

-¿Si?

-Claro, si tú no estuvieses conmigo, tal vez hubiese dejado de intentar hace mucho.

Kurt se acercó a Blaine y se acomodó en el pecho de este.

-Me encanta estar así contigo-dijo el castaño metiendo su mano bajo la camiseta de Blaine y acariciando su pecho con la yema de los dedos.

El moreno lo abrazo fuerte y dejo un pequeño beso sobre el cabello de Kurt, quien luego de unos minutos ya estaba durmiendo.

-Kurt…

-Kurt, despierta, no querrás perderte esto-susurro al oído del castaño quien estaba cómodamente durmiendo sobre su pecho.

-¿Qué ocurre? ¿Ya amaneció?

-Aun no…

-Entonces déjame dormir un poco más-reclamo apretándose más sobre su cuerpo y enredando sus piernas entre las de Blaine.

-Kurt, creo que comenzó a nevar.

-¿Qué?-dijo despertando de inmediato, si había algo que Kurt adoraba más que cantar y probarse ropa era a nieve, blanca y suave, tal como recordaba a su madre.

-¿Podemos ir afuera?-suplico Kurt.

-But Baby it’s cold outside…-respondió sonriéndole y dándole un pequeño beso en la nariz.

-¿Por favor?

-Ok, pero ponte el abrigo, después de todo para eso te desperté.

-Por eso te amo…

-¿Por despertarte cuando hay nieve?

-No, por saber exactamente cuáles son las cosas que no quiero perderme, y por siempre rendirte a mis peticiones-dijo arrugando la nariz y sacándole la lengua.

Ambos bajaron corriendo para ir al patio trasero.

-¿Podremos hacer un muñeco de nieve?

-Kurt, comenzó a nevar hace cerca de una hora, aun no hay suficiente, tal vez por la mañana.

-Ooo…

Blaine tomo la mano de Kurt para sentir la nieve caer sobre ellos.

-De verdad hace frio-dijo el castaño acercándose al cuerpo de Blaine y abrazándolo con fuerza.

-Te lo advertí…

-Hace unas semanas nevó en NY, solo fue un poco, y lo único que quería era estar contigo.

-Bueno ahora tenemos nieve en Lima y estamos juntos…

-Es perfecto…

-¿Sabes que es aún mejor?

-¿Qué?

-Esto-dijo levantando su rostro hacia el cielo y sacando la lengua para poder atrapar con ella los pequeños copos de nieve que caían.

-Yo hacía eso cuando era niño, ni siquiera recuerdo que sabor tenia-dijo Kurt con nostalgia.

-¿Y por qué dejaste de hacerlo?

-No lo sé, simplemente deje de hacerlo…

Blaine guardo silencio y siguió atrapando nieve, luego miro a Kurt y lo beso dulcemente, intensifico el beso y Kurt dejo que la lengua de su novio jugueteara con la suya.

-Definitivamente cuando niño no sabía tan bien-dijo riendo Kurt sobre los labios del moreno.

-Creo que tendré que sumar esto a mi lista de cosas que me encantan hacer contigo.

-¿Tienes una lista?

-Claro que si…

-Mmm… supongo que el primer lugar de tu lista es algo poco decoroso…

-¿Por qué siempre piensas lo peor de mí?-dijo haciéndose el ofendido.

-Porque sé qué tipo de cosas dan vueltas por tu cabeza Blaine.

-Bueno, déjame decirte que estas muy equivocado, en mi lista el primer lugar lo ocupa algo muy simple-dijo casi susurrando.

Kurt tomo la solapa del abrigo de Blaine y lo levanto para que el calor que emitían sus rostros por la cercanía no se perdiera.

-¿A si? ¿Y que cosa es?

-Perderme en tu mirada, siento que puedo ver tu alma en ella.

-Te amo Blaine-dijo dándole un beso y sintiendo su aliento cálido sobre el rostro.

-Te amo, Feliz navidad Kurt.

-Feliz navidad.