[Resuelto]FanFic: Una historia de instituto

Pero Britt no puede irse :( porque sus padres no se dan cuenta? va a perder el año escolar y eso....
Aunque que hace tan pagadita a Artie que deja a Santana sentada sola en el Glee??o.Ô
El flashback muy bonito, menos por la parte de que esta con Puck :S!!
Espero tu actu ^^

Aww que tierno el final :3. Ehm, te digo que los padres de Britt son el peor ser existente en el mundo por separarlas ¬¬ Osea, dejenlas ser felices por el amor de dios.

Bueno, espero el próximo capítulo ansiosa :)

Ayyy diooos qe lindo flash...
Lei el capi y entre en depresion pero luego tuve una idea, tengo una teoria sobre la "mudanza" Pero mejor esperare a qe publiqe el proximo capitulo XD
Ojala mi idea sea cierta jajaaj
Actualiza prontitoo, lo ame

Aww que lindooo lo del final u.u perooo me rompes es corazon Britt no se puedee irrr nooo u.u

Dios!!!.. Britt con Puck??.. Dios eso no quiero ni imaginarmelo =S.. pobre Santana debe haber sufrido un montón al ver tremenda escena.. aunque no lo aceptó en ese momento ella ya estaba enamorada de Britt.. waaa!!.. no quiero que Britt se vaya.. espero que los papás de Britt no se la lleven por favorrr!!!.. I beging you!!.. el primer beso de mis muchachas hermosas fue WOW!!!.. y tuvo segundo round esa misma noche.. que bonitooo!!!... en fin espero el siguiente cap ^^!

Bueno, aquí dejo otro capitulo! Espero que os guste! La verdad es que tengo un capítulo en mente, pero no sé si me será muy dificil de escribir... ya veré! Un beso muy grande :D

CAPÍTULO 13
Me senté en ese mismo banco que había visto empezar algo tan maravilloso como extraño. Dos amigas besándose sin dejar de ser las mejores amigas del mundo. Era confuso incluso para mí.
Cerré los ojos y probé eso que estábamos dando en clase de Filosofía: la introspección. Me concentré en mi misma, en lo que sentía. Vale, sentía un gran amor por Britt, muy grande. Pero lo único que se comparaba a ese amor era el miedo que tenía de lo que dirían.
-Bah, menuda chorrada… -me dije levantándome y dirigiéndome al parking para coger mi coche e irme a casa. En mi coche estaba apoyada Britt, con una cara preocupada.
-Britt, ¿Qué haces? –le dije extrañada.
-Oh, menos mal que estás bien. Te has ido tan rápido y además no has ido a clase de Geografía… y pensaba que podríamos comer en tu casa y luego ir a la mía y me ayudas a empaquetar y todo eso. –dijo con una ceja levantada, esperando mi aprobación.
-Está bien, sube. –como no era extraño en mi vida, mis padres no estaban en casa. Calenté un poco de la carne que sobró del día anterior y comí sin ganas.
-¿Qué te han dicho tus padres? –le pregunté a Britt. La verdad era que esperaba que se tomaran más tiempo para pensarse dejarla o no. Tenía curiosidad por saber que le habían dicho. Por supuesto, que iba a hablar con ellos para saber como se habían apresurado tanto.
-Pues que tenía que empezar a recoger las cosas o no me daría tiempo a irme… -dijo moviendo la comida de su plato sin llevarse nada a la boca.
-Ah… -le dije imitando sus movimientos. Lo normal entre nosotras era que lloráramos de la risa y que hiciéramos locuras sin parar, pero ahí estábamos las dos como dos muermos moviendo la comida para matar el tiempo.
-Britt, no podemos pasarnos la semana así. Sí sólo queda una semana para que… te vayas… la vamos a aprovechar al máximo. No perdamos tiempo y disfrutemos que aún podemos estar juntas. –no podía creer que esa palabras hubieran salido de mi boca, pero lo dicho dicho estaba. Ella levantó la mirada y sonrió. Me cogió de la mano y me guió hasta el salón. Me sentó en el sofá y al instante se colocó encima mía. Últimamente estábamos mucho en esa posición, pero no me importó. Me empezó a besar toda la cara y yo no paraba de reír.
-Esto ya no es perder el tiempo, ¿verdad? –dijo también entre risas, mientras se separaba un poco y cogía un pintalabios rojo y se pintaba sus labios con él.
-Britt, que intentas hacer… -le pregunté adivinando sus intenciones.
-Voy a dejarte la marca de mis besos, así te acordarás de mí… -me dijo inmovilizándome para que no huyera de ella. Empezó otra vez a llenarme la cara de besos, manchándome entera. Nuestras risas se fundían y cuando se cansó de mi cara empezó a bajar a mi cuello.
-Espera, que voy a ponerme más… que ya no dejo marca. –dijo volviendo a inmovilizarme con sus piernas. Yo no intenté huir, quería saber hacia dónde iban esos besos que quería darme.
-¿Lista? –me dijo con sus rojos labios.
-Nunca lo he estado tanto… -le susurré. Se acercó a mi cuello y volvió a dejar marcas por todos los lados. Mis risas se mezclaban con pequeños suspiros. Volvió a repasarse los labios mientras me indicaba que me quitara la parte de arriba del uniforme.
Levanté las cejas pero no me moví. Suspiró y me quitó ella la parte de arriba. Me tumbó a lo largo del sofá y empezó a darme besos por mi tripa, provocando mi risa. Luego pasó a mancharme los brazos y los hombros, viendo que su intención era pasar a mis piernas le dije:
-¿Piensas mancharme en todos los sitios? –le dije con una ceja levantada. Me miró con una sonrisa y asintió. Puse los ojos en blanco, pero me dejé hacer. Sus besos eran cortos y cariñosos, y cada vez que sus labios rozaban mi piel, ésta se estremecía bajo su contacto.
-Voy a acabar hecha una porquería por tu culpa… -le dije riendo con los ojos cerrados. Yo ya estaba en ropa interior y ella estaba acabando de manchar mis piernas.
-Luego te ayudo a limpiarte –me dijo mirándome maliciosamente. Reí y la dejé hacer, otra vez. Al rato, me dio la vuelta y acabó el trabajo dejándome la espalda cubierta de manchas rojas.
-Listo, ya estás toda marcada –sonrió orgullosa de su trabajo. Me fui a mirarme al espejo y ví que efectivamente, me había dejado completamente manchada y marcada.
-Brittany Susan Pierce, ¡te odio! –le dije provocando que me hiciera un pucherito detrás mía.
-Sabes que me quieres y mucho –dijo acercándose una vez más con sus labios pintados y sonriendo.
-¿Qué te queda por manchar? –le dije mirándome entera y viendo que no quedaban casi huecos en mi cuerpo (a parte de los escondidos debajo de mi ropa interior).
-Aquí –dijo señalando mis labios con su dedo. Levanté las cejas y ella de un salto se echó encima de mí. Me rodeó la cintura con sus brazos y me atrajo a ella. Me daba pequeños besos por todo lo largo de mis labios, pero yo quería que me besara bien.
-Britt, besar así es de niñas. Ya sabes como me gusta… -le dije sonrojándome. Y claro que lo sabía, lo sabía mejor que nadie. Sabía como hacer estremecer cada parte de mi cuerpo y como hacerme temblar y sentirme pequeña.
-No, ahora no quiero besarte como niñas mayores, ¡quiero mancharte! –dijo volviendo a dejar pequeños besos en mis labios –luego cuando me toque limpiarte te daré besos de niñas mayores.
Dicho esto, un escalofrío recorrió mi cuerpo y ella se separó y decidió que su obra maestra ya estaba completa. Me sonrió satisfecha y me cogió de la mano para dirigirnos a mi ducha. Empezó a deshacerse de su uniforme mientras yo la miraba divertida, ya que luchaba contra la cremallera de la parte de arriba. Al final tuve que ir a ayudarla.
-No me mereces, soy demasiado buena para ti… -le dije sonriendo. Me miró burlonamente y asintió. Acabamos desnudas la una frente a la otra y la ayudé a entrar en la ducha. Se colocó muy cerca de mí mientras yo iba abriendo el grifo para que el agua caliente saliera.
-Ahora, creo que voy a cobrarme lo que me debes… -le dije acercándome a ella. Cerró los ojos y se acercó a mi cara, pero en mi cabeza estaba la idea de vengarme por el experimento que había echo antes conmigo. Cogí el grifo y le arrojé agua helada, y dejó escapar un grito. No mantuve el agua en su cuerpo más de cinco segundos, pero fue bastante para que la pobre temblara de frío. Me miraba con sorpresa, pero yo le sonreí y la atraje hacia mí, poniéndola debajo del chorro de agua caliente y abrazándola para que volviera el calor a su cuerpo.
-Eres mala, San… -dijo apoyando su cabeza en mi hombro.
-Si fuera mala, no haría esto… -le dije acercándome ahora sí a su boca. La besé con delicadeza y ella cogió una esponja y empezó a lavarme las marcas que había dejado, sin dejar de provocar unos leves suspiros en mí.
Tras media hora de besos y caricias, salimos y nos secamos. La cogí de la mano y nos dirigimos a mi habitación. Ir de su mano sentaba demasiado bien, y una pequeña determinación empezaba a florecer: la quería para mí.

*___* I will always love you por este capitulo!!! te quedo perfecto, me encanta enserio, ahora mismo tengo esta cara por culpa del capitulo jajaja espero que lo que hand icho los padres de Britt"Haz las maletas que si no no te dara tiempo a irte" sea " a irte a casa de Santana" XDXDXD
No nos tenga mucho tiempo con la intriga por favoor =P!!

La cogí de la mano y nos dirigimos a mi habitación. Ir de su mano sentaba demasiado bien, y una pequeña determinación empezaba a florecer: la quería para mí.

Por faaaaaaaaavor que solo se vaya a la casa de Santana. Asi Santana por fin comienza a luchar por ella.

Siiiiiiiiii me unire a los pedidos de las chicas!! Qe vaya a lo de Sann :(
Ame el capi, fue perfecto

Soy nueva lectora y me encantan los fic brittana y heya .
te quiero decir que es fantastico y que me gustaria que los padres de britt le digan que se quede en la casa de santana como que tengo esa sospecha

Heeey que se la robeeeeee x3 no quieroo que se separeeeen ):

Bueno, tras unos cuantos días... volví! jajaja! Nada, que espero que os guste y ya veremos que pasa con Britt! Este capítulo no sabía muy bien como cortarlo, ,así que mañana mismo subo la siguiente parte porque si no este quedaba muuuy largo... un beso :)

CAPÍTULO 15
-San, tenemos que… -empezó a decir, pero la silencié con un “shh” y seguí acariciándole la cabeza.
Estábamos en mi cama abrazadas. Ella con su cabeza sobre mi pecho y yo acariciándole el pelo con suavidad. No sabía si llevábamos minutos u horas, pero me quería quedar ahí toda mi vida. Nuestras respiraciones iban acompasadas y nuestras caricias eran simétricas.
Sabía que tenía que ir a su casa para ayudarla, se lo había prometido. En un momento dado, le dejé pequeños besos por su cabeza, aspirando el aroma de su cabello.
-Me encanta que estés tan cariñosa conmigo –me dijo mirándome a los ojos. Aparté rápidamente mi mirada, no quería que se hiciera ilusiones conmigo pero me miraba desde mis brazos con esa carita que me derretía entera.
-Tengo que aprovechar mi tiempo contigo –le sonreí cohibida. Sonrió al notar mi atención en ella otra vez y me empezó a dar pequeños besos por mi cuello, provocando que cerrara los ojos y la estrechara más.
-San… -dijo entre besos.
-Hmm…?
-Si vamos a mi casa y me ayudas, me quedo esta noche contigo y te doy todos los besos que quieras –dijo parando la operación. Abrí los ojos como platos, sorprendida con la situación: me estaba haciendo chantaje.
-No es justo… -dije poniendo mi cara de pena, mientras ella ponía su mejor cara de súplica. Fue una lucha de titanes para ganar, pero al final la opción de Britt besándome toda la noche era demasiado tentadora.
-Está bien –pegó un pequeño salto triunfal –Pero a cambio serás mi esclava esta noche.
Me guiñó un ojo y me susurró:
-Ésta noche y siempre que quieras –me miró y noté que estaba sonrojándome hasta la raíz.
Rió por mi expresión y le propiné un cariñoso golpe en el hombro.
Recogimos todo y nos dirigimos a mi coche. Llegamos a su casa en cosa de 10 minutos, y mi ánimo iba cayendo con cada minuto que pasaba.
-Tranquila, San. Lord Tubbington no te hará nada.
Sonreí un poco ante su ocurrencia y entramos en su casa.
-No están aquí –dijo respecto a sus padres al notar el silencio. Me encogí de hombros y me dirigí a su habitación dispuesta a acabar cuanto antes.
-¿Qué es lo que tengo que hacer? –pregunté mirando toda la habitación. Parecía mentira que estaba a punto de ayudar a destruir ese espacio donde tantos momentos habíamos vivido. Pero solo uno me venía a la mente en ese instante.
FLASHBACK
-San… -dijo Britt mirándome mientras me ponía el pijama.
-Dime –le dije sin girarme. Suponía que me preguntaría sobre algún final de una película de Disney que no entendía.
-¿Tú te has acostado con alguna chica? –preguntó casi en un susurro. La pregunta me pilló fuera de juego durante unos segundos, pero me recompuse.
-No… ¿a qué viene esa pregunta? –ahora sí que me había girado a mirarla.
-Es que… Verónica, una animadora nueva me ha preguntado si me quiero acostar con ella… -dijo mirándome a los ojos. Sentí mi sangre empezando a hervir como si fuera un volcán en erupción. “¿Pero quién se cree la come-mocos esa? No tiene ningún derecho a estar con MI Britt”.
-¿Y qué le has dicho? –pregunté rezando a Dios y a todos los ángeles y santos para que hubiera dicho no.
-Que tenía que pensarlo… es que para nosotras el s-e-x… no significa nada con los chicos, y tú y yo no hemos llegado ahí… puede que no sea mala idea intentarlo con una chica… -dijo bajando la mirada confusa. Me prometí que al día siguiente me encargaría de hacer un infierno en vida de esa boba.
-Britt… ¿Tú quieres que lleguemos ahí? –no se lo pregunté con miedo, teníamos bastante confianza para eso.
-¿Estaría mal? –preguntó con una nota de temor en su voz.
-No, claro que no… pero Britt. Sólo las mejores amigas pueden llegar hasta ahí, y eso con una chica no es engañar –le dije arrodillándome en el suelo para mirarla fijamente. Ella asintió –Entonces, ¿es eso lo que de verdad quieres? –una extraña alegría me empezaba a invadir.
-Sí, San… Sí quiero. Quiero que seas tú la primera –me dijo mientras nos mirábamos largamente.
Poco a poco nos fue sobrando la ropa, y para mi fue como mi primera vez: con nervios y miedos, pero con un resultado distinto: me entregué completamente a ella.
FIN FLASHBACK
-Sé de que te estás acordando. Pobre Verónica, le hiciste la vida imposible –dijo mientras reía.
-Se lo merecía la muy guarra –la verdad era que mi venganza había sido enorme. Al día siguiente la acorralé y la amenacé diciéndole que se apartara de mi Britt, pero eso no fue suficiente para mí. Conseguí que la echaran de las animadoras y al final tuvo que cambiar de instituto. Cuando se fue, una paz inmensa me inundó.
Nosotras estábamos con chicos, y eso en parte lo podía aguantar, pero lo que no podía permitir era no ser la única chica para Britt.
-¿Empezamos? –dijo ella. Yo asentí y nos pusimos a ello. Se respiraba un ambiente melancólico, había demasiados recuerdos y empezar a ponerlos todos en cajas me deprimía de sobre manera.
-Creo que ya hay bastante por hoy… -dijo Britt, y yo asentí y salí de esa habitación. Una lágrima indiscreta rodó por mi mejilla y noté unos brazos rodeándome la cintura.
-No estés triste, porque sino yo me pongo triste y acaba triste hasta Lord T –me dijo muy cerca de mi oído.
-Esto es mucho para mí –noté mi voz temblar con cada palabra dicha.
-San, si tú no me ayudas no podré. Necesito que estés a mi lado y me apoyes –colocó su frente sobre mi hombro. Parecía que éste estaba diseñado solo para que su cabeza encajara ahí.
-Está bien… -apretó un poco más el abrazo –Pero vayámonos a mi casa, que tienes unos trabajos forzosos pendientes.
Nos dirigimos con un tranquilo silencio en el ambiente. No notaba la necesidad de hablar y cuando bajé noté su meñique cogido al mío y le sonreí.
-¿Qué quieres cenar? –le grité desde la cocina.
-¡A ti! –chilló entre risas y puse los ojos en blanco. Fui a mi habitación y la ví tumbada en mi cama.
-Si me cenas a mí, luego no tendrás más Santana. Además de que es canibalismo –dije con aparentada seriedad.
-Ay, como eres… iba en broma. Si ya me parece mal comer pollo, ¿cómo iba a comerte a ti? –dijo moviendo la cabeza. Suspiré, nadie sabe por donde puede salir ésta chica.
Me tumbé junto a ella y enredé mi brazo con el suyo, apoyando mi cabeza en su hombro.
-¿Te parece si llamamos y pedimos comida china? –dije tras unos instantes.
-Jo… tardarán mucho en llegar y tengo hambre…
-Britt, h an puesto una embajada de comida china a tres manzanas de aquí, no tardarán nada.
-Entonces bien. Quiero spaghettis chinos, patatas chinas, arroz chino… -empezó a enumerar.
-¿Vamos a comer tú y yo o toda la población asiática? Además de que toda la comida es china –dije entre risas –Y en estos cinco minutos hemos dicho la palabra “china” más que en toda nuestra vida.
-Calla y llama, ¡que me muero de hambre! –dijo pegándome un empujón.
-Brittany… la venganza será cruel –le advertí con un dedo mientras iba a por el teléfono.
-Tengo ganas de ver como piensas vengarte… -dijo sonriendo pícaramente. Me fui antes de que viera que me había sonrojado levemente.

Tardé en leerme todos los capítulos unos días, con tanto que tengo que estudiar, pero al fin me puse al día. Está genial el fic y me encanta que lo narres desde el punto de vista de Santana, así podemos saber todo lo que piensa detrás de esa fachada de dura que tiene.
Me da mucha pena que Britt se tenga que ir, espero que ocurra algo que lo impida o que San se vaya con ella jajajajjajajajaja Me encantó la escena de lo de Verónica, me la imagino, pensar en otra tocando a su Britt, eso si que sacaría toda su furiia xDD

Espero que continúes pronto :)

Que triste :/ me imagino como a de sufrir Santy; y como a de gozar en su habitación jajaja :/ sigo triste

Aww estubieron super tiernasss !! NOO brit no puede irseeee !! Nooo san debe detenerlaaaa !!
ME enkantan los flaskback !!
Y la ternura de britt dejandoo sus marcass
fueee mUy bonitooo!!

Yo tambien tengo ganas de saber como piensa vengarse jajajaja!!
Me rei mucho con este capitulo, al menos con la parte del final jajaja me encanta, enserio!!
-¿Qué quieres cenar? –le grité desde la cocina.
-¡A ti! –chilló entre risas y puse los ojos en blanco.
Me las imagina gritandoselo por la casa XD algo asi deberian hacer en la serie jajajaja =)
Actualiza pronto por favor^^!!

me da mucha pena que Britt se tenga que ir si son perfectas juntas .
y Britt no tiene nada de inosenta cuando esta Santana

Aun sigue la incongnita.. hasta ahora mi qerida britt se va! :(
Dios todavia tengo la esperanza de qe se qede, pero cada vez se hace mas debil
No me las separes :(
Actualiza prontito, un saludo

Dejo el siguiente capitulo... que la verdad, aún sigo indignada por lo que le hicieron a mi pobre Quinn en la serie, pero bueno... y no me odieis por la parte final... el drama es NECESARIO! ahahhaha

CAPÍTULO 16
A los veinte minutos ya llamaban a la puerta y salió Britt a coger la comida.
-Hola –dijo sonriendo, pero cuando se fijó de que el repartidor no era asiático la cara le cambió -¿Por qué no tienes los ojos así? –dijo mientras se estiraba los ojos para imitar la forma.
-Porque soy de aquí, rubia –cuando dijo “rubia” empecé a prestar más atención a esa conversación.
-Jo… -dijo ella empezando a sacar el dinero para pagar.
-Eh guapa, que yo por ti soy quién tú quieras… -noté como se empezaba a acercar a Britt que no sabía que hacer. Fue demasiado y me acerqué a ella y la cogí de la cintura mientras la apartaba de aquel sujeto.
-Eh, baboso asqueroso. Cóbrate lo que tengas que cobrar y lárgate –empecé a apretar a Britt más contra mi cuerpo en actitud posesiva.
-Vale, vale morena –dijo el tío mientras nos miraba babeando.
-Mira, me das ASCO. Y no quiero que me sepa mal una comida por la que he pagado, así que lárgate y reza para que no vuelva a verte y te ponga los ojos achinados –dijo mirándole con odio y veneno en mis palabras. Más bien hablaba Snix, no yo. Pareció finalmente captar el mensaje y se fue. Noté un beso en mi mejilla.
-Gracias, San –dijo ella sonriendo, esa sonrisa consiguió volver a encerrar a Snix y volví a sentirme feliz.
-Vamos –cogimos la comida y entramos en la cocina aún cogidas por la cintura.
-Vaya, ya has puesto la mesa. ¿Me libro de ser tu esclava? –dijo Britt con la ceja levantada.
-No quería cansarte, prefiero que seas mi esclava luego… -mientras decía eso noté el calor subiendo a mis mejillas y como las encendí con fuerza.
-Me encanta cuando te sonrojas, ¡vamos a comer! –dijo soltándose y al separarse mi cuerpo extrañó su contacto.
Cenamos animadamente, y yo no podía parar de reír al ver los esfuerzos de la rubia para comer con los palos. Su ceño fruncido, sus bufidos de exasperación y sus pataletas eran adorables. Al final acabé dándole una cuchara con dibujitos que le regalé por su cumple y que siempre usaba.
A la media hora ya estábamos encima de mi cama, tumbadas y con la tripa llena.
-Creo que voy a explotar… -dije poniendo una cara de dolor.
-No, San… ¡no! ¡No te mueras! Yo no puedo estar sin ti… Hay que llevarte a un hospital o a un sitio donde desactivan bombas como en las pelis –su cara de pánico era para grabarla.
-No hace falta que vayamos a ningún sitio, tú me puedes curar –dije haciendo teatro.
-¿Cómo? Dímelo rápido, que cada vez queda menos… -dijo acercándose a mí y sentándose a mi lado.
-Primero tienes que darme un beso en la tripa y luego por el cuello para desactivar el tiempo atrás –dije con fingida seridad. No quería tomarle el pelo, pero era una buena oportunidad para que empezara con “sus trabajos forzosos”.
-Vale, bien –levantó rápidamente mi camisa y me dio varios besos por toda la tripa -¿Así está bien?
-Sí, perfecto… ahora el cuello –dije con los ojos cerrados y apartándome el pelo. Noté su boca en mi cuello y una sonrisa floreció en mi cara. Al principio besaba, luego empezó a atrapar mi piel entre sus labios. Estuvo así por varios minutos hasta que decidí colocar su boca sobre la mía. Empezamos a movernos con simetría y jugando con nuestras lenguas, que parecían bailar.
-San, San… -dijo levantándose de repente -¿Ya estás bien?
-Sí Britt. Mientras estés conmigo todo está bien –coloqué una mano sobre su mejilla y la acaricié hasta que noté una lágrima sobre mis dedos.
-Eh, ¿por qué lloras? –dije limpiándole todas las lágrimas que caían por sus mejillas.
-Ya sabes porque, tú me puedes leer la mente cuando quieres…
-¿Eso quién te lo ha dicho?
-Muchas veces sabes que voy a hacer antes de que yo misma lo haga, eso són superpoderes –dijo encogiéndose de hombros.
-Ya me gustaría a mí tener superpoderes, pero eso pasa porque te conozco desde hace mucho tiempo. Sé cuales són tus películas favoritas, que te gusta leer cuentos de hadas, también que tomas helado antes de dormir y que tienes muchos pijamas de animales –dije sin parar de acariciarle la mejilla –Además que sé que tienes dos peluches con los cuáles tienes que dormir siempre.
Sonrió como nunca la había visto sonreír desde que le regalé la edición especial de Blancanieves. Se dejó caer a mi lado y se acurrucó con fuerza a mí.
-Nadie me conoce como tú. No sé como lo haré para adaptarme a un nuevo sitio… no habrá nadie que me proteja –mirándome a los ojos me dijo –Sin ti no soy nada.
Cada parte de mi cuerpo tembló al escuchar esas palabras. Como unas palabras tan simples y banales podían hacer ese efecto…
-¿Sabes? Hay una canción en español que se llama así –dije cambiando de tema, si no acabaríamos llorando como magdalenas.
-Cántamela, San –dijo sonriendo. Era capaz de sonreír 30 segundos después de haber estado llorando.
-No la entenderás…
-Me da igual, luego me dices que significa.
-Está bien, vale… -dije levantándome de la cama para encender el ordenador y buscar la música. Al encontrarla me puse de rodillas frente a ella, que estaba sentada al borde de la cama para cantarle solo a ella.

Sin ti no soy nada,
una gota de lluvia mojando mi cara
mi mundo es pequeño y mi corazón pedacitos de hielo
solía pensar que el amor no es real,
una ilusión que siempre se acaba
y ahora sin ti no soy nada
sin ti niña mala,
sin ti niña triste
que abraza su almohada
tirada en la cama,
mirando la tele y no viendo nada
amar por amar y romper a llorar
en lo más cierto y profundo del alma,
sin ti no soy nada
los días que pasan,
las luces del alba,
mi alma, mi cuerpo, mi voz, no sirven de nada
porque yo sin ti no soy nada
sin ti no soy nada
sin ti no soy nada
me siento tan rara,
las noches de juerga se vuelven amargas
me río sin ganas con una sonrisa pintada en la cara
soy sólo un actor que olvidó su guión,
al fin y al cabo son sólo palabras que no dicen nada
los días que pasan,
las luces del alba,
mi alma, mi cuerpo, mi voz, no sirven de nada
qué no daría yo por tener tu mirada,
por ser como siempre los dos
mientras todo cambia
porque yo sin ti no soy nada
sin ti no soy nada
sin ti no soy nada.

-No sé que me has dicho, pero es muy bonita… -dijo saltando encima de mí y abrazándome. Como consecuencia acabamos rodando por el suelo y riendo.
-¿Quieres que te la traduzca? –dije cuando acabamos de rodar.
-Claro que sí.
Se la traducí, y nos quedamos mirándonos. Quería decirle que la quería, sentía que ese era el momento, pero…
-San, ¿sabes que Artie me ha invitado a salir? –la sonrisa se me borró de repente y esas palabras fueron como un jarro de agua fría.
-Ah si, y que le has dicho –ni siquiera puse ganas en hacer una interrogación a esa frase.
-Quiero, me hace sentir bien… pero no quiero empezar nada para luego irme… ¿no crees?
Sí que lo creía, por eso en ese momento decidí guardarme los puñeteros sentimientos para mí, y no decir nada. Todo era más fácil sin decir nada, así que se acabaron por mi parte las cursilerías y el cantar canciones bonitas. Volvía a ser Santana “Bitch” López, la despiadada latina del McKinley.
-Haz lo que quieras –puse un tono neutro y me levanté y me fui al baño a ponerme el pijama y lavarme los dientes. Noté unas manos en mi espalda, pero me aparté de su contacto rápidamente.
-Voy a acostarme, cuando vengas apaga la luz –y la dejé en el baño con una cara de confusión. Me puse a mirarme en el espejo de mi habitación para hacerme una coleta y al levantarme el pelo ví una gran marca morada en él. “Al parecer se ha tomado muy en serio eso de besar”. Me pasé la mano por encima de él, era un pequeño recuerdo de la buena tarde que habíamos pasado hasta que habló del tullido.
Ya estando acostada, las luces se apagaron y noté un cuerpo acercándose a mí, que estaba de lado dándole la espalda. Se abrazó a mí y solté un pequeño gruñido. No podía ser fría teniéndola tan cerca.
Cerré los ojos rogando que el nuevo día llegar pronto.

Desperté aún con su abrazo, pero en cuestión de segundos ya me había liberado y la zarandeaba suavemente.
-Brittany, despierta o llegaremos tarde –solo decir su nombre entero provocó que frunciera el ceño. Ignoré ese gesto y me empecé a vestir, al mismo tiempo que notaba que ella me imitaba. No le dirigí ni una mirada, porque sabía que si lo hacía quedaría prendada otra vez de sus ojos azules y no podría volver a poner esa muralla alrededor de mi corazón.
-Voy a preparar el desayuno –cuando tuve la coleta hecha y todo, bajé a la cocina y preparé tostadas, que comí sin esperarla.
-San, ¿qué te pasa? –preguntó extrañada al ver que ni la había esperado a desayunar ni le dirigía la palabra.
-Nada, no tardes. Te espero en el coche –cogí mis cosas y salí con la cabeza agachada de mi casa. Estaba muy confundida. Por una parte no quería estar así con ella, sabía que era mi punto débil y que si la trataba mal se ponía triste… pero por otra parte estaba el miedo a ser dañada. Los anteriores días me había expuesto mucho a los sentimientos, y había sido bonito, pero no me sentía segura. No podía decir todo lo que tenía guardado para que se fuera y tuviera que lidiar con todo sin ella dándome la mano y sonriendo. “Así, que lo mejor es que no diga nada, y todos felices”.
Subió al coche y nos dirigimos al instituto, yo iba con mis gafas de sol y puse la música bastante fuerte como para evitar cualquier tipo de conversación.
Bajamos y noté sus intenciones de coger mi meñique, pero sencillamente me puse las manos en los bolsillos y me adelanté a sus pasos.
-Buenos días, San –dijo apareciendo a mi lado una rubia.
-Fabray –dije simplemente.
-Oh oh, creo que ha vuelto la antigua Santana –dijo a modo de broma, pero al ver que no hacía comentarios se paró y me retuvo -¿Ha vuelto la antigua Santana?
-La antigua Santana nunca se fue –dije sonriendo amargamente.
-San, ¿qué ha pasado? –dijo amablemente.
-Joder, ¡¿por qué no me dejáis todos?! –no quería contestarle así, lo prometo… ella no tiene la culpa de nada, pero estaba consiguiendo hacer una pequeña fisura en mi reciente muralla.
-San, ven… -me arrastró prácticamente a un aula vacía.
-Fabray, ¿qué hacemos aquí? No abuses de mí… -dije con intención de irme.
-Tú no te vas, y si hace falta no vamos a primera hora. No estoy dispuesta a perder a mi recién recuperada amiga para que vuelva la zorra de antes… no te ofendas –dijo mirándome a los ojos, con seriedad pero sobre todo con preocupación.
-No lo hagas, por favor… -dije en una pequeña súplica, aunque sabía que era Fabray, y que era la única que se podía comparar a mí hablando de cabezonería.
-Puedes confiar en mí –me soltó el brazo y yo prácticamente me arrojé en los suyos para buscar consuelo.
-¿Por qué todo es tan difícil? –dije apretándome a ella.
-Shh… tranquila… Puedes contar conmigo.
-Nunca has sido tan buena conmigo… ¿qué ha cambiado? –dije evitando las lágrimas.
-Que tú me has demostrado la gran persona que eres y que vale la pena aguantar tus insultos sólo para conocer un poco más de ese complejo corazón que tienes –dijo acariciándome la espalda. Esas palabras fueron la perdición… el muro se vino a mis pies. Decidí abrir mi corazón a la persona que menos esperaba abrírselo: a mi ex archienemiga Quinn Fabray.

Dios!!.. porque dime porque??.. Britt porque tuviste que hablar de Artie con Santana??.. aishh.. y porque Santana tuvo que tratar así a Britt??.. si todo iba tan bien.. la cancion es hermosa Amaral es de mis grupos favoritos.. y la letra creo que dice exactamente lo que sienten mis Brittana.. ojala que Quinn ayude a que esto se arregle.. Britt NO TE VAYAS POR FAVOR!!!!!!!!!.. espero el siguiente ^^!

Por que Brit pensó en salir con Artie >.< eso no me agrada
Mi San otra vez sufriendo :/

Noooooooooooo santana no puede ser dura con briitt eso no
arreglara nada aparte ya kasi se va a mudar !!
Noo se pueden pelear ahora

diooos me lei todos los capitulos en unas horas jaja debes pensar que estoy loca pero no me podía detener, muchas felicidades! es buenisima la historia, me has hecho sentir de todo, tristeza, alegría, amor todoo, el último capítulo me apachurró el corazón de verdad, la forma como Santana comenzó a ser fría nuevamente con Brittany, uff, increíble, siguelo pronto! =D

Y el siguiente capitulo?donde esta? jajaja
Porque Britt ha dicho eso ??? U,U con lo bien que estaban las cosas.....se supone que esta enamorada de San o algo no?? deberia pasar de una vz de Artie!!!
I love Quinntana jajja

LIndo capitulo ♥ lo ame SANTANa estan lindaaacon Britt
no entiendo a Britt quiene en su sano jucio teniendo a Santy , ve a Artie ajjajaja Bueno espero k mejore , Actualizaaa prontito