[Resuelto][Brittana] - "Hold Me Close" - Cuarta Temporada + Capítulo Nº 67 "Ángel"

Gente Linda! Primero que nada gracias por la buena onda! Son todas maquinas de dar amor! ¿Que bueno no?

Veo que están así como re intrigadas... Aviso desde ya que faltan pocos capítulos para saber que fue lo que sucedió... Créanme yo no miento! Estamos recién en la primera parte de la Temporada... Es importante para mi poder presentar la historia y los personajes ya que al conocerlos bien y por separado... El día que se crucen las van a conocer mas ustedes que entre ellas.

Y créanme que el día que se crucen... La historia toma un vuelco inesperado... Pero como ya les mencione... Por ahora es importante que sepamos que sienten y piensan ellas.

Se va a poner lindo..


El capitulo de hoy es un tanto fuerte... Los chicos se enfrentan a algo conocido... Algo nuevo y con noticias terribles... Se empiezan a asomar nombres y fantasmas del pasado... De a poco... De a poco... Se acercan...

En cuanto a Britt... Bueno... Mejor leanlo!

No sabemos muchas cosas sobre la vida… Sobre nosotros… Pero hay algo que se seguro… Y tenelo en cuenta.

A los seres humanos hay que acariciarlos o destruirlos, ya que vengarán un insulto leve, pero quedarán indefensos si se les aplica un golpe duro.

Muchas veces sentimos los impactos a nivel… Físico. Golpes… Tropezones… O simplemente nos distraemos y nos llevamos algo por delante. Es subjetivo pero casi siempre podemos describirlos… Ya sea por intensidad, duración o inicio. Simplemente lo percibimos… A través de los sentidos.

Pero… ¿Alguna vez pudiste poner en palabras a un impacto emocional? También lo sentís pero es más difícil describirlo… Porque todos somos distintos y sentimos diferente. No se… Algo que te sacude de repente y que causa algo en tu interior…. Pero no sabes que. Cuando aparece pueden sucederte muchas cosas….
Como por ejemplo cuando descubrís una mentira… El impacto hace que te quedes quieto y un nudo se forme en el pecho. Cuando te enfrentas con una linda sorpresa… Esperas unos segundos para asimilar lo que esta pasando... Sonreís y te relajas. Un impacto emocional aparece cuando te dicen que alguien a quien querías mucho… Ya no esta… El impacto es muy fuerte y a partir de eso se desencadena un duelo… Y dura mucho. O también sentimos un impacto cuando alguien nos deslumbra… Nos quedamos paraditos como si nada sucediera a nuestro alrededor solo mirando… Todo es perfecto… Si el corazón responde y es verdadero… Ese impacto dura por siempre.

Pero solo pregúntate… ¿Cómo seria el impacto si descubrís que alguien a quien creíste muerto, este vivo?


***

Varias horas habían pasado desde que dejaron la mansión, pocas veces hablaban, permanecían serios, expectantes, con la guardia en alto, debían permanecer atentos.

Cuando las edificaciones se dejaron ver, los tres se quedaron helados y se estremecieron… Solo miraban hacia adelante, nadie soltaba una palabra, solo avanzaban pidiendo por más. A pesar de observar todo lo que aprecia frente a ellos, Santana pudo notar como sus amigos comenzaban a inquietarse, estaban realmente ansiosos por ver con que se encontraban… Pero ella sabia muy bien… Tenían que permanecer ocultos, nadie debía notar su presencia…. Al menos… No todavía.

Sus caras comenzaron a cambiar de color al ver el paisaje con el que se enfrentaban. Las edificaciones desgastadas, por mas de que estaban en la periferia de la Nación esos eran monumentos históricos, símbolos de la Quíntuple Alianza aquella que desde hacía mas de mil años… Había vivido manteniendo la paz y brindando prosperidad a la humanidad. El monumento a los elegidos… A la generación… Aquella de la que ellos fueron miembros alguna vez.

Tomaron caminos ocultos para adentrarse en la cuidad, caminos que solo ellos conocían… Aquellos que una vez los salvaron de la destrucción. Salieron por una calle que daba directo a el centro de la cuidad… Cuando la inmensidad de la Nación se dejo ver, cruzaron las miradas y no entendían lo que estaban viendo… Era un mundo completamente diferente a aquel en el cual ellos habían vivido hacia tan solo cinco años.

Miles de personas estaban en las calles, eso era normal, pero lo que llamo realmente la atención a los jóvenes fue ver las caras de tristeza y miedo que había en las personas, algunos descalzos, otros borrachos. A medida que avanzaban podían apreciarse en las esquinas, oficiales uniformados con un semblante de autoridad y poder. La vegetación que caracterizaba a la Nación estaba ampliamente reducida, descuidada. Todo era diferente, la realidad estaba dando su veredicto.

De a poco comenzaron a sacar conclusiones, probablemente estarían en lo cierto y alguien a quien ellos conocían muy bien… Tenía que ver con todo lo que estaban viendo.

Mike – No puedo creer esto - Dijo seriamente observando todo a su alrededor.

Quinn – Allá hay un hotel… Esta bien escondido… Podemos ir ahí. . – Señalo un edificio escondido entre los demás, su apariencia era parecida a la de una taberna.

Santana – Bien Quinn… vamos a ese.

Dejaron el coche en el estacionamiento del hotel y fueron directo a pedir una habitación. Por el momento nadie los había visto, era imposible reconocerlos, eran otros.

Una vez en la habitación:

Quinn – Por dios… - Decía mientras observaban el exterior por las rendijas de la persiana.

Mike – Es increíble, parece que hubieran pasado una guerra.

Quinn – Estoy segura que ellos están detrás de todo esto – Dejo la ventana y se tiro en la cama.

Mike – Si yo pienso igual… Cuanto antes debemos informarnos sobre todo lo que esta pasando.
Santana irrumpió en la oscura habitación de manera violenta, los demás dirigieron su atención a la morena quien tiro sobre la mesa un periódico y se sentó en silencio.

Mike – Parece que te pusiste al día – Dijo volviendo a poner su mirada en la ventana.

Quinn – ¿Que sucede? – Agarro el periódico e instantáneamente se puso pálida – No puede ser…

Santana – Si puede ser.

Mike – ¿Que pasa? – Dijo sin quitar atención a la cuidad.

Santana – Pasa que Arthur es el ministro de las Cinco naciones.

Mike – Imposible… eso es imposible.

Santana – No lo creo… No se di te diste cuenta pero esos oficiales estaban armados… Tenían armas de fuego… Eso también es imposible… Pero ahí están – Dijo señalando a la cuidad.

Mike – Pero no entiendo, ¿que hay de los otros ministros?

Quinn – Esperen – Interrumpió – ¿Eso quiere decir que cambiaron las leyes?

Santana – No lo se, para eso se necesita un nuevo decreto ente todos los ministros y …

Mike – El Líder – Dijo interrumpiendo a la morena.

Quinn – No sabemos quien es.

Mike – Jesse, debe ser el – Susurro, apretando el periódico con sus manos

Quinn – No… pero ¿Quien lo proclamo?

Santana – No lo sabemos, hay algo que nos estamos perdiendo.

Mike – Necesitamos información – Afirmo.

Santana - Lo que necesitamos es descansar… - Interrumpió mirándolos seriamente - Tenemos que ir lento… Creo que con todo lo que vimos desde que llegamos es suficiente por hoy – Sentencio – Traten de no llamar la atención, yo voy a buscar algo de comer – Tomo su tapado y se dirigió a la puerta.

Quinn – Santana – llamo la atención de su amiga y este volteo. – Tene cuidado... – La morena asistió y desapareció.

Al descender por las oscuras escaleras del viejo hotel, la morena se encontró con gran número de personas bebiendo cerveza, repartidas entre la barra y las mesas donde se jugaba a los naipes. Se acercó lentamente a el camarero y pidió que preparara comida para llevar… Mientras esperaba se quedo en uno de los extremos de la barra, observando a las personas. Nadie parecía notar su presencia… Todos estaban concentrados en tomar y jugar. En un momento la puerta se abrió y dejo ver a un viejo con la ropa desgastada, quien entraba para pedir limosna a los gritos como un loco… La mirada de Santana se quedo con ese hombre, lo examino varias veces intentando que su conciencia le dijera que lo que estaba viendo era verdad.

Camarero – Aquí tiene señorita – El pensamiento de la morena fue interrumpido con el joven quien traía el pedido encargado.

Santana – Gracias… Perdón que pregunte pero ¿Quien es ese hombre? – Dijo señalando al viejo quien había cautivado su atención.

Camarero - ¿Mr. Schue? Viene todos los días a esta hora desde hace cuatro años a pedir monedas, pobre viejo – Dijo el joven mientras refregaba sus manos con un trapo – Se quedo en la miseria después de la explosión… Esta medio loco, tiene visiones y dice que los desaparecidos van a volver Dicen que aun trabaja en la Academia pero no creo que sea verdad… Tan solo mírelo… Perdió la cabeza.

Santana – Tenga – Le dio dinero – Quédese con el cambio – Tomo las cosas y se fue directo a la habitación.

Subió tan rápido como pudo… Al verla… Sus compañeros comprendieron instantáneamente que algo había sucedido.

Mike – ¿Estas segura que era el?

Santana – Si… Totalmente segura… Además como ya les dije, el camarero lo conoce, hace años que esta así… Además esta envejecido, abandonado.

Quinn – Es increíble, no puedo creer que este de esa manera… Tengo que verlo para creerlo
.
Mike – ¿Que pretendes? Salir de acá y decirle ¡Hey! ¡Querido profesor! ¡Mírenos estamos vivitos! – Dijo burlándose de la rubia.

Santana – ¿Que tendría de malo? Es evidentemente él no tiene nada que ver… Además se supone que él también estuvo en la explosión.

Quinn – ¿Que estas queriendo decir?

Santana – Que si él se salvo de la explosión… Quizás alguien mas se allá salvado con el – Esa hipótesis dejo atónitos a los jóvenes pero la morena continuo – Nosotros dimos por muertos a los que vimos y a los que no vimos – Seguían mirándola atentamente – La explosión fue lo suficientemente fuerte como para matar todo lo que estaba cerca… Pero nosotros logramos escapar y al parecer Mr. Schue también ¿Que nos dice ahora que alguno de los que no vimos también se pudo haber salvado?

Sin querer la morena había sembrado en ella y sus amigos una pequeña ilusión. La posibilidad de recuperar a algunas de las personas que creyeron pérdidas era sin duda una buena noticia, pero debían comprobar primero si aquel hombre no había tenido nada que ver con la trampa que le tendieron a los chicos… Debían saber si él no era parte de la traición.

Mike – Puede que tu hipótesis sea real – Dijo mientras acercaba a la morena una taza con café – ¿Pero que es lo que debemos hacer? Quiero decir… Ya bastante tarea tenemos con ocultaros como para tener que ocultar a uno más.

Quinn – ¿Uno más? – Pregunto confundida.

Mike – Si él se entera de que estamos vivos, seria uno más.

Santana – No – Dijo cortando a su amigo – No seria uno mas.

Quinn – ¿Por qué no?

Santana – Simplemente porque no se quien es ahora… Porque no confió en el y porque el hecho de que lo allá visto pobre y medio loco no quiere decir que no allá sido parte de lo que nos paso… Antes de ser uno mas tenemos que saber que fue lo que paso mientras nosotros estuvimos en la mansión.

Quinn – Entiendo coincido pero ¿Cual es el paso a seguir? ¿No seria bueno usarlo como una herramienta? Si decís que esta tan loco como nos contaste… Entonces podemos tantear terreno… Desaparecer y hacernos pasar como su imaginación.

Mike – No es mala idea… Además no podemos quedarnos acá mucho tiempo más.

Santana – Bien pensado Q, pasamos la noche acá… Mañana vamos a ir por el… Tengo una idea.

Pasaron la noche en tranquilidad… Las cosas que habían vivido ese día eran muy fuertes, pero sin duda la frutilla del postre fue Mr. Schue. Aquel profesor el cual querían como un padre o por lo menos antes era así. El los vio crecer, prácticamente los crio y gran parte de lo que son hoy tiene que ver con ese hombre.

Quinn – ¿Esta todo? – Pregunto con las manos en su cintura.

Mike – Si rubita… Prácticamente no desempacamos nada.

Santana – Bien… ¿Están listos? – Dijo mientras miraba su reloj – Ya es hora… Debe estar por venir, bajemos y quedémonos a un lado… Nadie puede notar que estamos ahí.

Los jóvenes bajaron hasta la barra y pidieron una cerveza… Solo para disimular ser mas del montón… Se ubicaron en uno de los extremos detrás de toda la multitud. Minutos después un viejo loco entro gritando… Los ojos de Quinn y Mike se desorbitaron al ver a su profesor.

Mr. Schue – ¡Los buenos tiempos llegaron! ¡Ellos están cerca! – Grito alegre - ¡Nuestros elegidos están de vuelta! ¡No perdamos la esperanza! – Al pasar por una de las mesas el profesor golpeo la cabeza de un hombre el cual parecía estar pasado de copas.

Borracho – ¿Que haces loco? - Se llevo su mano a la cabeza y se levanto bruscamente.

Mr. Schue - ¿Estoy loco yo o los locos son los demás? – Frente a esto el hombre en frente suyo lo levanto por el aire a las trompadas… Y para variar… La gente comenzó a alentar al borracho.

Mike salió disparado a la calle, estaban golpeando a su viejo profesor en el fondo del estacionamiento del hotel. Prácticamente el joven se metió en la pelea, las chicas lo seguían y ayudaron a su amigo a terminar con los golpes… Eran buenos… Superiores… Elegidos.

El borracho al ver el estado físico de Mike se retiro junto a sus compañeros al interior de la taberna... Una vez que termino el enfrentamiento… Los tres voltearon y vieron a su querido profesor en el piso… Con la cara golpeada. Mike cruzo la mirada con sus amigas…. Y estas asistieron con la cabeza… El chico… Respiro profundamente y se agacho a ayudar a Mr. Schue.

Mr. Schue – No debería haberse metido – Decía mientras intentaba levantarse - Yo puedo solito con ellos… - Se quito la sangre de su cara y al levantar la vista, pudo observar al joven que intentaba ayudarlo… Un golpe estremecedor lo recorrió por completo… Sintió el impacto – No puede ser.

***

Ella se despertó sintiendo un fuerte golpe… Miro el reloj… Tres y media de la mañana. Instantáneamente supo que sucedía y no dudo en salir disparada hacia su habitación. La madera crujía con sus rápidos pasos… Medito unos segundos con su mano en el picaporte de la puerta… Pero al escuchar los sollozos… Entro.

Respiro con tristeza al verla… Habían pasado años desde que la rescato… Pero aun así y luego de presenciar muchas cosas… Verla sufrir de esa manera… Se sentía como el impacto del primer día. Su querida sobrina… Se había quedaron dormida… En medio de la noche. Eso solo significaba terror… La joven rubia estaba tendida sobre la cama… Temblando… Siendo victima de sus espantosas pesadillas.

Las pesadillas de Brittany son un tanto particulares… Porque todo lo que sueña… Siente. Es como si estuviesen torturándola en vivo…. Nuevamente. No pasaba muy a menudo… Pero cuando sucedía… Costaba días recuperarse.

Holly sabia que no debía hacerlo… Pero no quería verla sufrir de esa manera. La mujer se acercó y simplemente… Con su mano… Toco su muñeca. Por lo menos eso fue lo único que recordó… Ya que cuando se dio cuenta… Estaba en el suelo.

Brittany despertó ciega y reacciono atacando a su tía. Estaba agitada… Intentando asimilar lo que sucedía… Escuchó el golpe y luego el impacto de varios jarrones cayendo contra el suelo. La joven estaba pánico… Refregó sus ojos y vio lo que había echo.

Holly – Vio los ojos de su sobrina llenos de lagrimas – Brittany… - La chica estaba asustada y avergonzada – Estoy bien… - Mintió – No te preocupes… - Dijo al ver como entraba en desesperación – Brittany no… - Pidió sabiendo que la joven iba a huir.

Brittany desapareció en la maleza… En el medio de la noche. Corría escuchando su agitada respiración…. Despejando con sus manos las hojas que se interponían… Queriendo desaparecer… Huir del terror… Aunque sea por una noche.

Corrio hasta llegar al borde del conocido rio… Apoyo sus manos sobre las rodillas intentando recuperarse. Llevaba tiempo… No era fácil.

Brittany - ¡Basta! – Pidió haciendo eco en las montañas - Por favor… No puedo con esto… - Ella no sabia ni siquiera con quien estaba hablando – Déjame en paz… Solo por una noche… Por favor – Dijo entrecortadamente sintiendo desvanecer su voz - ¿Dónde estas? – Pregunto entre lágrimas – Te necesito… - Susurro intentando calmarse – Ahora…

Se quedo en silencio mirando el paisaje… Parada sobre la piedra al borde del rio… No había viento… La naturaleza no emitía ningún ruido… Ella solo escuchaba su respiración… Por dos segundos cerro los ojos… Y sintió estremecer todo su cuerpo… Su respiración se paralizo en una aspiración… Como si se hubiese quedaron sin aire… Se asusto pero al abrirlos el espiral en su espalda no cesaba… Era extraño, nuevo y especial. Sus piernas parecían haber desaparecido… y La parte baja de su estomago se revoluciono con golpe de hormigueo…

Al cerrar los ojos por dos segundos… Y sin imaginar nada… Ella sintió el impacto… Ella se enfrento con la mirada oscura… De su destino.

Buenas Gente Linda! Una vez mas a gradecer por todo ese cariño y dar la bienvenida a todos los que comienzan a leer esta historia!

De a poco ya nos vamos acercando.. No falta nada y en los próximos capítulos vamos a tener muchas revelaciones del pasado de Santana... Pero sobretodas las cosas el imán empezó a hacer su efecto y el destino esta y cerca de juntarlas... ¿Se imaginaron como seria su primera conversación?

Ahora... El capitulo de hoy es bastante revelador... Varios nombres comienzan a dar vuelta y e esclarecer el dolor.. Como siempre... Cualquier duda me dicen...

Un nuevo año en la Academia esta a punto de comenzar...

¿Alguna vez te quedaste parado en un punto y te pusiste a pensar en las cosas te suceden mientras estas quieto? No se si te pasa…. Pero es muchas veces como vivimos. Los días pasan… Pasan… Pasan y ahí estas… En el mismo lugar… “Viviendo”.
El problema esta en que para la mayoría de la gente… Vivir… es despertar…. Comer… Respirar… Dormir… Pero no tiene nada que ver con eso. Es por esa razón que desgastamos en “vivir”. Creyendo siempre que los sueños vienen a nosotros… y nosotros tenemos que vivirlos. Déjame decirte que eso es cualquiera.
Un atleta marca una meta y no se queda parado esperando a que la meta llegue a el… Sale corriendo hacia su objetivo… y eso le permite quizás la oportunidad de ganar.

Vivir es moverte… Vivir es despertar para buscar tus sueños… Y sentirse plano cuando los alcanzas… Vivir es mucho más que pasar los días… Vivir es llevarse una sorpresa cuando te enfrenta con el amor… Simplemente porque el destino te cruzo con la oportunidad de amar…

Yo simplemente te digo esto para desearte que puedas vivir todos los días de tu vida… Porque si no la caminas… No llegas a ningún lado. Ósea… No estas vivo.

Si yo no te di una mano… Deja que Brittany te de un ejemplo… Ella no espero a Santana… La fue buscar.

Ella abrió la puerta intentando pasar desapercibida… Dio unos cuantos pasos y salto asustada al ver como la luz de la sala se encendía… Las dos rubias se quedaron mirando hasta que la mayor rompió el silencio.

Holly - ¿Estas bien? – La chica asistió mirando sus pies – Brittany… Vas a estar bien.

Brittany - ¿Y que si no? – Pregunto rápidamente angustiada – Lo siento… De verdad es solo que…

Holly – Ya se cariño… No hace falta.

Brittany – Perdón por… Ya sabe.

Holly – No te hagas problema… No debí hacerlo.

Brittany – Pensó unos segundos – Me alegra que lo haya hecho…

Holly – ¿Como es eso?

Brittany – Es que… Me di cuenta o creo que me di cuenta…. – Dijo dudando – Que no voy a ganar nada quedándome acá.

Holly - ¿Qué estas querido decir?

Brittany –Miro sus pies aun dudado y recordó el suceso de anoche - Amar y sufrir es… A la larga… La única forma de vivir – Su tía la miro atentamente - Ahora estoy sufriendo… Pero las oportunidades no bien solas… No caen del cielo… - Hizo una pausa aun dudando – Es como estar muerta en vida… Y no quiero… No más.

Holly – ¿Vas a continuar en la Academia? – Pregunto con ilusión.

Brittany – Si… - Respondió con seguridad mirando a su tía – Voy a buscarlo en realidad.

Holly - ¿Qué vas a buscar? – Pregunto confundida.

Brittany – Levanto la mirada y la clavo en lo ojos de su tía – Mi destino.

***

El hombre se quedo tendido en el suelo, observando detenidamente cada centímetro del rostro del joven que intentaba levantarlo. Mike lo tomo de los brazos y lentamente lo puso de pie… El viejo no apartaba su mirada de él. Una vez de pie, el joven dio un paso atrás quedando al mismo nivel que sus amigas. Cuando el profesor pudo divisar a las tres personas delante suyo comenzó a examinarlos detenidamente con la mirada. Lentamente el semblante de “viejo loco” desapareció y volvió aquel hombre serio y decidido que los jóvenes conocían. Los chicos notaron el cambio y permanecieron alertas… Sin decir nada… Se quedaron quietos esperando que el viejo se diera cuanta quienes eran. Finalmente Mr. Schue pudo reconocerlos y sin poder evitarlo, pequeñas lágrimas de felicidad comenzaban a correr por sus mejillas.

Mr. Schue – No puedo creer lo que estoy viendo – Se cubrió la cara con sus manos y negó con la cabeza – Siempre lo supe, siempre – Los chicos cruzaron las miradas y sonrieron – Michael… Quinnie… Santana… - Los señalo a cada uno mientras los nombraba. Esos ya no eran aquellos adolecentes pequeños… Era totalmente diferente a lo que recordaba, sus cuerpos ahora habían cambiado… Eran adultos, grandes, altos. Abrió a sus brazos y camino hacia Mike quien estaba en el medio, lo envolvió entre sus brazos y abrazo a el chico con fuerza. A Quinn se le humedecieron los ojos al ver el abrazo… Pero más fue la emoción cuando el viejo levanto su mirada y las llamo para que se unieran.
Quinn dudo… Pero algo hizo que se acercara al abrazo… Por otro lado… Estaba Santana quien miraba de lejos. Ella observo sonreír a sus amigos y supo que esa sonrisa era verdadera… A pesar de eso, se quedo a un costado… Ese hombre lo quiso como un padre… Pero aun no sabía si era traidor.

Luego de el abrazo grupal, el profesor se dedico a mirarlos de cerca a cada uno, abrazándolos de vez en cuando para comprobar que lo que esta viviendo no era un sueño.

Mike – Somos nosotros Señor – Dijo mientras el profesor tomaba de las manos a su pequeña Quinnie.

Mr. Schue – Si… Lo son – Soltó las manos de la rubia y fue directo a la morena. La examino de los pies a la cabeza - Santana… - La miraba con amor, ella lucho por no sonreír – Estas… Precio...

Santana – El ruido de un coche llamo su atención – Tenemos que irnos, ya llámanos demasiado la atención – Rompió el clima que se había creado… La morena tenía razón, los oficiales estaban por todos lados, debían salir de allí.

Mr. Schue – Vengan conmigo – Todos miraron a Santana esperando su orden – Vengan a mi casa, no esta muy lejos… Ahí van a estar seguros – Las intenciones de el profesor quizás eran buenas, pero Santana y sus compañeros no confiaban del todo en el.

Santana – Esta bien, subamos al coche – Ordeno.

Rápidamente cargaron las cosas y se fueron a la casa de su profesor. Durante el camino, los chicos iban atentos a todo. El hombre no paraba de mirarlos y sonreír.

Mr. Schue – Pasen… Vengan… Pasen – Decía mientras los arrastraba al interior de su hogar.

Una vez dentro, el profesor se puso a preparar algo para comer. Los chicos se acomodaron en la pequeña sala de estar de la casa y se dedicaron a inspeccionar el lugar. Sobre la pequeña mesa que se encontraba frente al sillón, el profesor puso varios platos de comida… Se veían muy bien, los tres se tiraron prácticamente encima de ellos, estaban muertos de hambre.
Mr. Schue – ¿Tenían hambre? – Estaba realmente sorprendido, ellos asistieron mientras comían desaforadamente.

Quinn – Esta todo muy rico – Dijo mientras se limpiaba la boca.

Mike – Si, me estaba muriendo de hambre – Dijo mientras se apoyaba en el respaldo del sillón, satisfecho después de la cena.

Mr. Schue – ¿Y bien? ¿No me van a decir nada? – Esas preguntas los tomaron por sorpresa… Instantáneamente miraron a la morena. El hombre estaba realmente feliz, pero tenía muchas preguntas.

Santana – Creo que ya va a haber tiempo para eso… – Dijo seriamente – Fueron demasiadas emociones por hoy y necesitamos descansar, gracias por ofrecernos su casa – Santana no estaba segura aun de la lealtad de su profesor, no hablaría al menos que confiara en el.

Mr. Schue – Es cierto, fue mucho por hoy – No quiso presionarlos - Tengan hace mucho frio – Les ofreció mantas a los chicos – Pueden acomodarse en el sofá – Señalo el mismo donde estaban sentados – Voy a prender el fuego ¡Aunch...! – Intento agacharse y su cuerpo le recordó la paliza que le habían dado.

Quinn –Déjeme ayudarlo Señor – La rubia se agacho para levantarlo – Lo golpearon fuerte.

Mike – Permítame esto a mí – El chico prendió el fuego y la sala se ilumino dejando apreciar todo
a su alrededor.

Los tres se acostaron en el mismo sofá, el varón se acomodó en el medio de sus amigas y apoyo su cabeza en el hombro de la rubia.

Mr. Schue – Antes de irse a su habitación, los miro por última vez. – Mis chicos… - Se apoyó sobre el marco de la puerta – Nunca perdí la esperanza.

Santana – La esperanza es el sueño de los que están despiertos – Corto.

Mr. Schue – Lo es…. Pero si asumís que no existe esperanza, entonces garantizas que no habrá esperanza – Los tres lo miraron seriamente… Como aquellos pequeños alumnos que fueron algún día - Si asumís que existe un instinto hacia la libertad… Entonces existen oportunidades de cambiar las cosas.... – Los años no habían pasado para el profesor, seguía siendo el mismo hombre de que ellos conocían – Ahora descansen… Acá están seguros – Dijo mientras se dirigía hacia su habitación.

La frase del profesor quedo retumbando en la cabeza de los chicos. ¿Qué habrá querido decir? ¿Acaso pensara que ellos vienen a solucionar algo? De ser así el hombre estaba equivocado ya que el los planes de esos tres jóvenes no había otra cosa mas que venganza.

Mike – La dejo picando – Comento mientras acobijaba a la morena.

Quinn – Totalmente.

Santana – Típico de él.

Mike – Mañana va a ser un día de muchos recuerdos – Dijo mientras cubría a sus a las mujeres con las mantas.

Quinn – ¿Confiamos en el? Es decir, no se si soltar todo apenas lo vemos… Me parece precipitado.

Santana – No hasta que él hable primero… – Se levanto del sofá y comenzó a inspeccionar la sala – No vamos de decir nada, ni mucho menos… – Comenzó caminar por la habitación – No hasta estar completamente segur… - Mientras recorría el lugar algo llamo su atención.

Quinn – ¿San? ¿Que pasa? – Dijo al notar a reacción de su amiga

Santana – Vengan.

Los chicos obedecieron automáticamente y se fueron hasta donde estaba su amiga. Al ver con lo que se encontraron supieron que el profesor no había sido nada más que otra victima de aquellos que destruyeron la vida sus amados. Frente a ellos se encontraba un mueble lleno de portarretratos, en ellos se encontraban todos los caídos el día de la explosión. Un escalofrió recorrió a los chicos al ver sus propios rostros entre las fotos de los caídos. Quinn se acercó más y tomo la foto del chico que había sido su esposo. Los chicos la observaron y volvieron su mirada a las fotos. Mike comenzó a llorar en silencio… Recuerdos, imágenes, gritos, llantos, venían a su mente. No paso mucho tiempo más para que Santana clavara su mirada en una fotografía, no se le movió un pelo, solo la observaba a ella, su prometida… Su Rachel.

Mr. Schue – Voy a tener que quitar algunas ¿No creen? – Los chicos dieron un salto apenas escucharon su voz. Se acercó hacia ellos y quito las fotos de Mike, Quinn y Santana. – Sabia que tarde o temprano iban a encontrarse con esto… Me alegra mucho que sean menos – Se quedaron en silencio contemplando las imágenes – No encuentro las palabras adecuadas para expresar la felicidad que siento por verlos con vida.

Santana – Al observar las fotografías cayo en la cuenta de que no faltaba nadie, su hipótesis de que alguno de sus compañeros quizás habría sobrevivido, se esfumo completamente, estaba decepcionada - ¿Vida? – Interrumpió - Me alegra haberlo encontrado – Dijo quitando su mirada de las fotos y clavándola en los ojos de su profesor – Usted es uno mas, una victima mas de ese día.

Mr. Schue – Claro que lo soy, ¿Acaso piensan que yo tuve algo que ver?

Santana – Dígamelo usted, ¿Debo confiar? – Los otros miraban expectantes ese duelo de palabras.

Mr. Schue – Sos astuta Santana, siempre lo fuiste.

Santana – No Señor…No lo soy – Interrumpió enojada - De haberlo sido esto no hubiese pasado nunca – Dijo mientras señalaba las fotos.

Mr. Schue – La mirada de la morena causaba escalofríos… Se notaba por demás su tristeza – Santana… - Susurro su nombre asombrándose de verla con vida - No dejes que la decepción mate lo poco de esperanza que queda dentro de vos… Puedo verlo en tus ojos… Nosotros no somos los culpables.

Santana – La esperanza la perdí hace años – Insistió - Nosotros podríamos haber hecho algo.

Mr. Schue – No… No podríamos haber hecho nada… De ser así lo habríamos hecho Santana... ¿No es eso cierto? – La chica se quedo callada y devolvió su mirada a la foto de su prometida.

Santana – Confió en usted profesor… - Aseguro sin dejar de mirar la foto - Pero no me pida que viva una utopía teniendo esperanza de un futuro mejor… Ya no creo en esos sueños perfectos y maravillosos... – Con aquello se despidió junto con sus compañeros y se fueron a dormir.

Mr. Schue - Si ayudas a una sola persona a tener esperanza…No habrás vivido en vano – Susurro mirando las fotos.

Él lo sabia, lo supo desde el principio… Los nombres eran los mismos pero detrás de toda identificación… Sus alumnos… Habían cambiado. Los gestos, las miradas, las palabras que utilizaban… Esos jóvenes que conocía habían muerto. Costaba resignarse, pero ni él era el mismo, ¿Como serlo después de tanto sufrimiento? En sus alumnos, habían sembrado la semilla del rencor. El prácticamente los crio… Bajo ninguna circunstancia iba a abandonarnos… Quería cambiarlos… Pero las palabras de Santana habían sido claras… Para ellos no había futuro.
Debía al menos intentarlo… Sin que ellos supieran… Su querido profesor los salvaría de su agonía, a fin de cuentas ese hombre fue quien les enseño que la esencia de la vida es seguir adelante.

Quinn – Buenos días señor – Saludo, sentándose en una butaca.

Mr. Schue – Solo se quedo sonriendo – ¿Como durmió?

Quinn – Mike patea mucho.

Mike – Te pateo porque me destapas… Buenos días – Refregaba sus ojos para despejarse. – ¿Donde esta Santana?

Quinn – Cierto… Se levanto antes que yo.

Mike – Voy a buscarla.

Mr. Schue – No señor… Usted desayuna, yo voy por ella – Dijo mientras les ofrecía comida. Comenzó a buscarla, minutos después la encontró… Estaba sentada frente a las fotografías, solo las contemplaba y meditaba con su interior. – ¿Santana?

Santana – Respiro profundamente al escuchar su voz - Al verlo con vida Señor… Yo pensé que quizás – El hombre se acercó hasta quedar a su lado – Solo por un momento pensé que alguno podría haber sobrevivido – Hizo una pausa mirando sus manos – Nunca supe quien murió primero, nunca supe quien murió antes de la explosión… Solo aquellos que cayeron en mis brazos y dieron su ultimo respiro a mi lado.

Mr. Schue – Tampoco lo se querida… Pero buscar la respuesta no soluciona nada.

Santana – Eso no es cierto.

Mr. Schue – ¿Por qué no? – Pregunto seriamente.

Santana - Es que usted no lo entiende… No lo entendería – Se levanto bruscamente y volteo hacia el profesor – Si me hubiese apurado quizás hubiera salvado a otro... Estaba herida pero aun así logre sacar a Quinn y Mike… No sabía donde estaban los demás, ¿Qué si estaban vivos y yo no fui por ellos? - El hombre no dijo nada, dejo que ella continuara - Cuando vi el fuego no volví a entrar, Quinn estaba en pánico y Mike se desangraba – Ella no lloraba solo se dedicaba a revolver los recuerdos, buscando su error.

Mr. Schue – Eso quiere decir que hiciste todo lo que pudiste – Dijo intentando cesar su dolor.

Santana – No lo se Señor y eso me atormenta.

Mr. Schue – Pues yo si – No lo habían notado pero Mike y Quinn se encontraban junto a ellos.

Santana – ¿Que es entonces? Usted estuvo ahí yo lo se, ¿Que fue lo que sucedió? – El hombre suspiro, era en primero en hablar… Romper el hielo, decidido a contar su historia.

Poco a poco se fueron acomodando en la sala, preparándose para lo que seria una de las conversaciones mas dolorosas, preparados para recordar.

Mr. Schue – Después de el entrenamiento… Estaba decidido a irme… Pero al buscar mi abrigo note que Rory había olvidado su camisa, asique fui a devolvérsela… Camino a el vestuario se escucho el primer disparo... – Los tres cerraron los ojos automáticamente, un escalofrió los recorrió por completo y el estruendo volvió a retumbar en sus oídos como si fuera la primera vez.

Les propongo para concocernos mejor! Que hagan preguntas para despues del capitulo Decepciones! Puede ser sobre lo que quieran! Pero de verdad me gustaria conocerlos mejor! A partir de Decepciones empieza lo que verdaderamente seria la primer temporada ya que cabe la posibilidad... Ya saven... Que a partir de ese momento Britt y San se encuentren en el mismo lugar... Es decir... Ya estamos cerca de BRITTANA.

El capitulo que les presento hoy.. Consta de tres partes... Es un capitulo especial que contempla el Frash - Back... Esto es todo lo que recuerdan Mike, Quinn, Mr. Schue y Santana.

Como siempre cualquier duda me preguntan! Y disfruten!

Abrazos de oso y besos para todos!

¿Cuál es tu mejor recuerdo? ¿Cuál el peor? Seguramente los tenes bien presentes… Pero ¿No te diste cuenta que cada vez que miramos para atrás el recuerdo tiene una mirada diferente? Nunca recordamos lo mismo… Ni lo significamos de la misma manera.

Como por ejemplo una caída… De esas que se te pelan las rodillas y no lloras de dolor… Sino de la vergüenza y el susto que te pegaste. Pasa el tiempo y no queremos recordarlo porque seguimos avergonzados de ser tan torpes. Pasa el tiempo y miramos atrás… Recordamos el ardor y lo agiles que fuimos para levantarnos. Pasa el tiempo… Y nos terminamos riendo hasta las lágrimas con nuestros amigos… Ese recuerdo queda en anécdota… ¿No es eso cierto?

Pero el recuerdo de Santana nunca va a llegar a ser una anécdota… Siempre que se mire hacia atrás va a ser significado como el peor día de su vida.

***

Esos diez jóvenes formaban una de las mejores generaciones jamás vistas. Desde el día que los eligieron mostraron ser más que superiores. Tres años te entrenamiento ininterrumpido…

Por fin el año se estaba terminando, estaban agotados pero todo daba sus frutos. Faltaban pocos días para saber quien seria el nuevo Líder, era una competencia pero para estos chicos no significaba nada mas que un nombramiento. No importaba quien gane, ellos seguirían cumpliendo con su tarea, aquella para la cual habían sido elegidos y preparados. Eran los mas capaces de toda la comunidad, jóvenes y talentosos, la gran promesa para el futuro. La gente los llamaba “La Clase” nunca se había visto tanto potencial en chicos tan jóvenes, pero los ministros pusieron el ojo encima de ellos, sabían muy bien que allí estaban los sucesores, los protectores de la humanidad.

Estaba atardeciendo, el entrenamiento concluiría luego de sus ejercicios en el gimnasio, algunos hacían pesas y otros practicaban boxeo.

Sam – ¡Creo que estoy más nervioso por la boda de las chicas que por ver quien es el Líder de las Naciones!

Joe – Jajaja Es cierto, ¿sabias que voy a entregar a Rachel? Eso me pone mas nervioso que en mi propia boda.

Sam – ¿Quien entrega a Santana?

Mike – No lo se… - Dijo seleccionando el peso - Creo que hoy iba a hablar con su padre – Intentaba levantar las pesas pero no tenia suficiente fuerza.

Joe – ¡Aflójale que te vas a lastimar pequeño Mike! – Dijo haciendo referencia a su cuerpo.

Rory – ¡Hey! ¡Despacio Artie, no me querrás lastimar para mi coronación! - Dijo esquivando los golpes de su compañero.

Artie – Primero me llamo Arthur y segundo ¿No creerás que vos vas a ganar?

Rory – Todo puede ser, eso me lo dijo Sugar – Dijo con una sonrisa atrevida.

Artie – ¿Estuviste hablando con ella de vuelta? – Comenzó a acelerar los golpes.

Jesse – Uh... Rory te pasaste, yo no estaría muy feliz con eso – Dijo mirando hacia Artie.

Sam – ¿Tu chica? ¿Para cuando la boda? – Intento cortar el mal clima que se había generado pero Rory no pudo evitarse sentirse mal por la pregunta del rubio.

Artie – Lo tomo por sorpresa, claramente se puso nervioso - Emm... - Se quedo pensativo y agradeció ver a las chicas entrando por la puerta del gimnasio. – Miren ahí vienen ellas – Señalo

Las muchachas cruzaron la puerta. Sugar y Quinn fueron a los brazos de sus hombres, no se habían visto ya que el entrenamiento del día lo hacían separados. Rachel y Santana dieron un abrazo a todos y se fueron a entrenar cada una por separado, no traían buenas caras.

Quinn – Apenas cruzo la puerta salió corriendo a sus brazos - ¡Hola! ¡Te extrañe! – Dijo a su esposo con una gran y hermosa sonrisa.

Joe – Se aseguro de apretarla con fuerza - Ya lo sabia – Se gano un golpe de la rubia y luego un fuerte abrazo - ¿Todo bien? – Pregunto al ver como cada una iba en distinta dirección.

Quinn – Fueron a hablar con el Padre de Santana, no sabemos lo que sucedió están así desde que llegaron – Dijo mientras se disponía a agarrar las pesas.

Jesse – Debe de hacerse suspendido la boda, ya me lo veía venir – Dijo con malicia.

Mike – ¡Por Dios! Es una de las mejores bromas que escuche en mi vida - Todos sonrieron al ver que aun no podía levantar las pesas - Esas dos no pueden estar separadas, espera dos minutos más y vas a ver como están pegadas de vuelta.

Joe – Totalmente – Agrego mientras pasaba su brazo rodeando a su mujer - Yo no se como pude estar todo el día separado de mi rubita.

Sam – ¡Por favor! No sean tan…. Dios ¡Delante mio no! – Dijo ocultando su cara.

Quinn – ¡Y vos que tanto te quejas! ¿Para cuando una chica?

Jesse – ¡Cierto Sam, fíjate que hasta Rory consiguió una!

Sugar – ¡Jesse no sigas!

Jesse – Solo bromeo – Dijo levantando los brazos

Sugar – Lo se pero ellos se lo toman en serio… Ahora… Sam contesta, ¿Para cuando una chica?

Sam – Pensó unos segundos - Yo solo espero que aparezca la correcta.

Jesse – Apúrate entonces porque se te acaba el tiempo – Sin querer se le escapo, todos lo miraron con cara de interrogación, el solo miro a Artie y este lo salvo.

Artie – El solo se refiere a que cuando seamos coronados las chicas se van a volver locas por vos.

Jesse – Claro, a eso me refería ¿Que pensaron? – Se fue rápido del gimnasio.

Joe – Deberías ir a hablar con ella – Noto que su esposa tenia la mirada en su mejor amiga.

Quinn – Lo se – Dijo dudando.

Joe – Entonces anda amor, yo te espero en la casa con los demás – La beso y fue con sus amigos hacia los vestuarios.

Mr. Schue – Mañana temprano mis chicos - Uno por uno fue despidiéndolo con un abrazo

Quinn – Hey amiga – Apretó con sus manos los hombros de su amiga quien dio un salto al verla

Rachel – Hola rubita - Dijo algo desaminada.

Quinn – ¿Esta todo bien?

Rachel - ¿Vos que crees? – Dijo observando a lo lejos a su morena.

Quinn – Creo que son dos estúpidas – Logro con esto sacarle una sonrisa a su amiga.

Rachel – Ella es más estúpida que yo.

Quinn – ¿Que paso? ¿Fue su padre no? – Dijo sentándose a su lado.

Rachel – Si, prácticamente enloqueció cuando se entero que nos íbamos casar.

Quinn – ¿Y eso que importa? – Preguntó confundida.

Rachel – Deberías haberlos visto – Comento apoyándose contra la pared - San estaba furiosa… Casi se lo come cuando le dijo que no quería que estemos juntas.

Quinn – Por dios Rachel, ese hombre es un fracasado… De no ser por ella estaría en la ruina. ¿Que derecho tiene de exigir? Prácticamente vive de la fortuna de tu morena.

Rachel – Lo se pero es su padre – Insistió - Ella no tiene a nadie mas… Es por eso que le dije de posponer la boda y se enojo conmigo.

Quinn – La miro unos segundos - Definitivamente la más estúpida sos vos.

Rachel – No quiero que pierda a su padre por mí.

Quinn – Rachel mira – Dijo preparándose por lo que iba a decir – Ese hombre no es su padre es un vividor, un vago.

Rachel – Lo se, pero es su familia.

Quinn – Rach… Y a sabes que Santana y yo no somos tan amigas o cercanas como Joe y Ella o Yo i vos… Pero tenes que entender que nosotros somos la familia de Santana – Hizo una pausa - Sabes muy bien que lo hizo para que el hombre ese no este solo y sea parte de la vida de su hija – Puso su mirada en Santana - Y no esta así porque él no quiere que estén juntas, esta molesta porque no quiere perder la oportunidad de pasar el resto de su vida con vos.

Rachel – Soy una estúpida.

Quinn – Lo sos – Dijo sonriendo - Esa chica te adora Rachel, a veces pienso que lo hace más que Joe a mí.

Rachel - ¡Por Dios Q! Se pone súper tonto cuando estas con el.

Quinn - Cierto – Dijo levantándose y ayudando a su amiga a hacer lo mismo – No sé que haría sin Joe.

Rachel - Gracias Quinn, sos la mejor amiga de todo el mundo – La envolvió con los brazos bien fuerte como para que sintiera el “Gracias”.

Quinn – Ahora anda con tu prometida y deja de ser tan estúpida, nos vemos en la cena. – Dijo mientras se separaban.

Rachel – ¡Quinn! – La llamo antes de que pudiera irse – Te quiero mucho.

Quinn – Sonrió – Yo también – Volteo y se fue hacia la casa.

Camino prácticamente arrastrando los pies. Sabia que la morena estaba enojada, se le notaba a kilómetros… Pero también sabía que la amaba y no tardaría en perdonarla.

Rachel – Hola – Dijo tímidamente sentándose tímidamente a su lado.

Santana – Suspiro enojada - Hola – Contesto sin mirarla.

Rachel – ¿Que haces? – Intentaba de todas formas que la conversación comience.

Santana – Nada – Dijo mirando hacia el suelo.

Rachel – Podía ver las mejillas rojas de la morena - Santana yo…

Santana - ¿Cómo estas? – Pregunto casi susurrando.

Rachel – La castaña se alegró de que preguntara – Estoy bien – Se acercó mas hacia su prometida – ¿Vos como estas? – Dijo corriendo un mechón de pelo detrás de la oreja de su chica.

Santana – Cerro los ojos ante el contacto y guio su rostro hacia la mano de la castaña – Ahora estoy bien – Corrió su mirada hacia los ojos de la joven - Te extrañe...

Rachel – Solo nos separamos veinte minutos – Sonrió.

Santana – Siempre que no estas conmigo te extraño – Dijo cabizbaja.

Rachel - Ella conocía a Santana, su semblante de fortaleza y seriedad, solo verla de esa forma hacia que se derritiera de ternura – Te amo – Dijo embobada.

Santana – Levanto su mirada y la clavo en los ojos de la persona que amaba… Se estremeció… Como el primer día – Perdóname… No debí llevarte con el… Solo quería que supiera lo mucho que significas para mí.

Rachel – Lentamente poso un dedo en los labios de la morena para callarla – Perdóname vos a mi San… Reaccione mal… Me asuste… No quería que perdieras a tu padre por mi culpa.

Santana – Hago lo que hago porque es mi padre y lo siento como una obligación – Tomo sus manos para entrelazar los dedos - No lo voy a dejar en la calle.

Rachel – Sonrió mirando sus manos entrelazadas - ¿Y Emily?

Santana – A mi padre lo mantengo… Pero para mi hermana lo único que quiero es un futuro mejor… Es chica aun… - Dijo pensando en su pequeña hermana - Pero algún día va a entrar en la academia y quiero poder ayudarla en lo que sea… Que no necesite nada.

Rachel – ¿La extrañas no es cierto? – Pregunto mientras la abrazaba.

Santana – Si… – Respondió acurrucándose en sus brazos con los ojos cerrados - Pero sé que es mejor que este con mi abuela, él no la cuidaría y yo tengo que cumplir con mis obligaciones.

Rachel – Cerro los ojos inspirando el dulce aroma de su pelo - ¿Me perdonas entonces?

Santana – Rápidamente se incorporo hasta quedar frente al rostro de su prometida - No me enoje con vos Rachel – Aseguro mirándola fijamente – Jamás lo haría… Solo tuve miedo de perderte.

Rachel – ¿Perderme? – Pregunto mirando una y otra vez sus labios y ojos.

Santana – Si… Perderte… - Insistió mirándola – No soportaría la idea de no pasar el resto de mi vida con vos.

Rachel - No te dejaría nunca – Dijo mirándola fijamente a los ojos.

Santana – Sonrió mirando sus labios - ¿Me lo prometes?

Rachel – Te lo prometo – Respondió asistiendo con la cabeza - Jamás voy a dejarte… – Se quedaron abrazadas en silencio, mientras observaban sus manos entrelazadas con sus anillos.

Santana – Cella la promesa... – Pidió acercándose suavemente.

Después de esa conversación…. Rachel la miro a los ojos y luego a sus labios… Podía sentir su cuerpo estremeciéndose por su belleza… Santana sonrió algo sonrojada por esa atenta mirada y con suavidad fue deslizándose hasta los labios de su prometida… Fue un beso tranquilo pero cargado de emociones… Sus labios se deslizaban sobre los otros una y otra vez… Inclinando sus cabezas hacia lados opuestos… Sus lenguas se tocaban ante cada roce pidiendo por más y disfrutando del suave y delicioso contacto… No importa la oscuridad en la que estén fundidas… Un beso… Puede iluminar hasta el alma mas perdida.

Se quedaron abrazadas en el oscuro gimnasio sobre una colchoneta… Disfrutando una y otra vez de la calidez de sus cuerpos entrelazados.

Santana – ¿En que pensas? – Dijo mientras acariciaba su pelo, de la chica recostada en su abdomen.

Rachel – Vos vas a ganar – Respondió buscando su mano.

Santana – ¿Como sabes? – Sorprendida.

Rachel – Solo lo se… – Se levanto quedando al mismo nivel que la morena.

Santana – ¿Porque me elegirían a mi? - Volvió a preguntar mirándola confundida - Todos tenemos las mismas chances.

Rachel – Si pero vos sos diferente – Respondió para luego dejar un suave beso en la comisura de sus labios - Por eso me enamore de vos… - Susurro en la cercanía.
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Santana – Cerro los ojos sintiendo olas y olas de hormigueo – Lo decís porque te vas a casar conmigo.

Rachel – No… Déjame explicarte - Respiro profundamente y la miro con ternura - De todos los chicos… Sos la única que aspira a la felicidad, siempre – Santana sonrió - No importa cuan devastados estemos, solo vos sos capas de sacarnos adelante… Incluso cuando no podes con vos misma, no lo pensarías dos veces y darías tu vida por cualquiera – Hizo una pausa tomando su mano - Sos superior, Santana – La morena la miraba a los ojos, grabando en su mente cada palabra – El único símbolo de superioridad es la bondad y la única persona realmente bondadosa, sos vos.

Santana – No aguanto más y se tiro a sus labios nuevamente… Con total intensidad tomando su rostro entre sos manos - Vos sos mi refugio Rachel… - Susurro en la cercanía – Mi todo.
Rachel – Cerro los ojos apoyando sus frentes - Sos única Santana, ellos van a elegirte.

Santana – No lograría nada si no te tengo a vos.

Rachel – Se alejó buscando su mirada - Si lo harías, por eso van a elegirte.

Santana – Sonrió tímidamente perdiéndose en su mirada - Te amo.

Rachel – Rodio su cuello con sus brazos y susurro - Te amo.

De repente Sugar entro corriendo al Gimnasio.

Sugar – Chicas - ¿No vieron a Artie? - Pregunto mirando hacia ambos lados - Tengo que decirle algo.

Rachel – Se fue con los chicos pero no volvieron, deben estar duchándose.

Santana – La miro entrecerrando los ojos - ¿Sugar pasa algo? – Pregunto preocupada.

Sugar – Respiro profundamente y se acercó unos pasos - Si pero no digan nada a nadie – Las chicas se miraron confundidas - Es muy importante.