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Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
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24 participantes
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Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Cuando volverás????
Ya extraño tus continuaciones...
Saludos*
(Espero que no te haya pasado nada malo)
Ya extraño tus continuaciones...
Saludos*
(Espero que no te haya pasado nada malo)
Tat-Tat******* - Mensajes : 469
Fecha de inscripción : 06/07/2013
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
MarisaParedes escribió:Hola. No recuerdo haber comentado antes, pero tal vez lo hice. Tampoco recuerdo cuando leí tu fic por vez primera, pero me comí todos los capítulos juntos y ahora encuentro esta actualización que es estupenda.
Me fascina el punto de vista de la historia. Y como ya es tarde, solo eso diré.
Ojalá continues pronto. Y gracias por darnos este fic excepcional y conmovedor.
Heyy!! jajaja me alegro que hayas disfrutado de varios capítulos juntos... hoy voy a subir uno.. o veré si subo más ;) Espero que sigas disfrutando! Gracias por comentar :) Besoo!
Busshunter* - Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 24/01/2013
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Tat-Tat escribió:Oh mi Dios.. agradezco tanto que hayas vuelto en gloria y majestad, porque OMG eso fue un maratón de capítulos (acaso para compensar que desaparecerás nuevamente u.u), como sea.
Wow!!!! pobre Quinn, me la pena el verla siendo ya casi una masoquista, quedándose con Santana y que esta no se de cuente de la pobre, la cela increíble, la protege...
Y la idiota de Britt, como tan necia que "le hizo el mismo favor a su amigo"... yo estaba que le iba a pegar a Sam por aprovecharse (sii, somos iguales, pensamos igual. Mentira boca trucha, tú eres un pervertido aprovechador!.)
Ame a Tina, sus pensamientos obscenos, me reí demasiado.
Kurt apoyando a Quinn....
ahhhh, de verdad que amo tu historia.
Por favor vuelve pronto!!!!!
*saludos
Mmmm espero no volver a desaparecer por aquí xD jajaja voy a intentar, no prometo nada :P Me alegra saber que te guste cómo encaré la historia.. y sí, Quinn es algo masoquista pero te aseguro que después se lo voy a compensar :O jajaj Gracias por comentar!! Besoo!
Busshunter* - Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 24/01/2013
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Pame_21 escribió:Hola volviste que bueno y que mejor forma con un maratón de capítulos no me lo podía creer esas clases de parto jajaja :-D estaban como que algo intensas pobre San y quinn ni para que tanto tiempo sin tener nada de nada tenía q explotar en cualquier momento jjj y durmiendo al lado de Santana noooo yo tampoco me hubiera aguantado mucho jjjj me sorprendió Tina quien diría q tenía esas ideas con San jaja que te diré estuvieron geniales que buena forma de volver nada más te pido que no tardes mucho Chao;-)
Jajajaj aunque no lo creas, las clases de parto son ciertas xD así que no es sólo mi imaginación eh :O Me alegra mucho que hayas disfrutado la maratón de capítulos :) Espero leerte pronto! Gracias por comentar! Besoo!
Busshunter* - Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 24/01/2013
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Tat-Tat escribió:Cuando volverás????
Ya extraño tus continuaciones...
Saludos*
(Espero que no te haya pasado nada malo)
Para tu gran sorpresa, hoy mismo volveré a actualizar ;)
Espero que te gustee!
Gracias por comentar... un beso!
Busshunter* - Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 24/01/2013
Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
CAPÍTULO 14: SCARED
-Santana
'Estás soñando… si es que escuchaste algo, has de cuenta que no lo escuchaste'
-Santana…
'Joder, es Quinn. OK, Snix, tranquilízate un poco… yo sé que quieres decirle que deje de molestar y que te deje tranquila… pero vas a tener que escuchar qué es lo que quiere'
-Mhhm?
-Quiero un pote de crema chantilly con flan, frutillas, mucho dulce de leche, con unas bochas de helado de chocolate con avellanas y salsa de chocolate arriba
'¿Ah? ¿Qué carajo?'
-Sí, Fabray… ¿Algo más? -tú le contestas apenas audible y tratando de que se calle lo más rápido posible así podías continuar con tu sueño.
-Ya que me preguntas… mmm creo que quedaría bien unas rodajas de durazno
-Mmhhmmm –le respondiste ya retornando a tu dulce y pacífico sueño. ¿A caso estaba loca? Tú no sabías si estaba desvelada o aburrida, o ambas cosas… y por eso buscaba despertarte o simplemente quería molestarte para entretenerse un poco.
Uno.
'Hhhhmmm, al fin silencio'
Dos
Tres
¡PAF!
-¡Qué carajo –
La rubia te había golpeado con la almohada para despertarte. Jurarías que además de despertarte te había atontado con la fuerza con la que te había golpeado.
¡PAF!
No tuviste tiempo de completar la frase que nuevamente fuiste golpeada por Quinn. ¡¿A caso está loca?!
-¡Mujer tranquilízate un poco! ¡Deja de golpearme!
'Ok, respira hondo e intenta no enloquecerte'
-¡Ignoraste lo que te pedí!¡Cómo quieres que me sienta al ver que mi propia amiga ignora lo que le pido que haga por mí!
¡PAF! ¡PAF!
-¡Ok! ¡Basta ya con la agresión, por favor! ¿Te diste cuenta acaso de qué hora es Quinn? –Giraste para ver la hora que marcaba el reloj que tenías en tu mesita de luz mientras te rozabas con tu mano en donde te había pegado tu amiga – ¡Son las tres de la mañana! –Dios santo. Sentías cómo la sangre estaba por hervir en tus venas al vivir esto. Solamente querías dormir tranquila… no que alguien te pegue con la almohada.
¡PAF! ¡PAF!
-¡No me importa qué hora es, yo sólo quiero ese postre!
¡PAF!
-No voy a ir a buscarlo Fabray, ¿Qué te piensas que soy? ¿Tu maldita mucama?
Suspiraste y agarraste el almohadón con el que te estaba golpeando y te volviste a recostar. Enseguida te arrepentiste cuando escuchaste su llorisqueo. Ugh. Mujeres . Bueno… 'mujeres mujeres', no.
Mujeres embarazadas…
Revoleaste los ojos y te armaste de paciencia para girar y tratar de arreglar la situación. Era lo único que podías hacer. Ya estabas despierta… y estabas de un increíble malhumor… por lo que no te ibas a dormir inmediatamente, y menos si ella estaba llorando.
-Quinn… -trataste de acercarte hacia a ella para que dejara de llorar pero te rechazó la mano cuando intentaste tocar su brazo.
'Inspira….y… Exhala…'
-¿Enserio quieres todo eso de postre? –le preguntaste con la voz más dulce que podías tener… así a lo mejor ella iba a calmarse.
-No Santana, solamente lo quiero poner de adorno en la mesita de luz –ella te contestó cortante.
-Ok, me quedo más tranquila –dijiste en broma pero fue para peor… Quinn estalló en llanto y agarró su almohadón para comenzar a pegarte de nuevo.
-Nonono! Ok!Ok!… era una broma de mal gusto… ¿Puedes repetirme qué es lo que quieres? Voy a ir a buscártelo … ¡Pero deja de llorar y de pegarme! –le dijiste tratando de agarrar su almohadón para impedir que te pegara.
-Crema chantilly con flan, bochas de helado de chocolate con avellanas y –
-Dios, Q! Vas a engordar unos diez kilos más! –le dijiste y te empezaste a preocupar cuando viste que sus ojos se habían tornado llorosos y nuevamente agarró el almohadón para pegarte mientras se movía sobre la cama. Esto te indujo a retirarte de la cama y , como Quinn te perseguía, te fue guiando de a poco hacia la puerta de la habitación a los golpes… seguías caminando hasta bajar las escaleras mientras esquivabas algunos almohadazos … hasta llegar a la puerta de tu casa.
-¡Qué diablos –
-¡Vete de aquí!
Tu amiga embarazada terminó abriéndote la puerta y empujándote hacia afuera.
-¡Quinn! Me puedes decir qué hice ahora? –gritaste al ver que te había encerrado fuera de tu propia casa.
-Me llamaste gorda!
-¡Pero si yo –
-Vete!
Esto ya había llegado al límite de tu paciencia. ¿Qué mierda le pasaba? ¡Está loca! ¡Definitivamente loca! Siempre supiste que no era una chica tranquila como Brittany…¡Pero tampoco tan histérica!
Y ahí estabas…
Quinn Fabray te había echado de tu propia casa.
Comenzaste a golpear fuertemente la puerta.
-¡MIRA FABRAY, TE CONVIENE QUE ABRAS LA PUERTA DE MI PROPIA CASA SI ES QUE NO QUIERES QUE LA DERRUMBE A PATADAS Y TERMINE ARRANCANDO TODOS TUS CABELLOS, UNO POR UNO! –gritaste con toda la furia que habías contenido anteriormente y sólo esperabas que al menos ella se encontrara del otro lado de la puerta para que te escuchase.
-Trae mi postre o duermes afuera
-No lo dirás enserio, Quinn… ¿No?
…
..
.
Nada… ninguna respuesta
-QUINN!
Sinceramente no lo podías creer…
Miraste hacia tu alrededor para ver si alguien estaba viendo esto… gracias a Dios, NO. Por lo menos agradeciste que te encontrabas vestida con tus mini shorts y una musculosa.
Ugh. Ya eran las 4 de la mañana y al estar afuera de tu casa… no te quedaba otra que conseguir lo que la maldita rubia quería si es que tú querías dormir en tu cómoda cama. Si no fuera que realmente la querías demasiado, hubieras dejado que tu Snix interior saliera a luz e hiciera que la rubia se arrepintiera de haber deseado ese maldito postre.
Así que comenzaste a caminar…
...
..
.
________________________________________
Seis y media de la mañana.
Eran las seis y media de la mañana cuando llegaste a casa que afortunadamente… la puerta estaba abierta. Te morías del sueño, tus pies no daban más de todo lo que habías caminado… porque obviamente, tuviste que recorrer millones de lugares para conseguir cada cosa que ella te había pedido. Ni hacía falta mencionar el mal humor que tenías… era impresionante. No podías creer que Fabray te tuviera así. Juraste que iba a ser la última vez en la vida que ella iba a conseguir que hicieras esto.
Cuando entraste a tu casa, buscaste una copa, cuchara, servilleta… todo lo que ella podría necesitar y así no tenías que volver a bajar para buscar las cosas. No veías la hora de dormir en paz.
-Te conviene que te comas todo esto ni bien te lo entregue porque si no voy a – comenzaste a hablar y cuando entraste a la habitación…. Viste a tu querida amiga recostada durmiendo profunda y pacíficamente. Nuevamente te armaste de paciencia para no abalanzarte sobre ella y ahorcarla.
-Voy a matarte mujer -dijiste no pudiendo creer que todas las vueltas que diste en esta ciudad para conseguir lo que ella deseaba había sido inútil.
– Juro que te voy a matar Lucy Quinn Fabray
...
..
.
________________________________________
-Buen día San –escuchaste la voz inconfundible de tu amiga que intentaba despertarte corriendo las cortinas para que entrara luz en el dormitorio. Tenías un dolor de cabeza insoportable por l sueño acumulado que tenías. Ni siquiera le respondiste, directamente te fuiste al baño para lavarte la cara y tratar de ocultar tus horribles ojeras y la hinchazón de tus ojos por dormir tan poco.
-¿Por qué no me hablas? –la rubia te preguntó mientras te servía un café esperando a que te sentaras a su lado como tú hacías todas las mañanas.
-¿Te estás burlando de mi Fabray? Te advierto que no estoy de humor para que juegues conmigo después de lo de anoche… así que ahórrate todo discurso de 'angelito' que tengas ahí guardado como disculpas o lo que sea
-Pero qué – Oh, -reaccionó la rubia –lo siento de verdad Santana, creo que ese fue mi primer antojo
-Y espero que sea el último porque no voy a aceptar que vuelvas a dejarme afuera de mi casa por un puto postre Lucy Quinn Fabray… Dios, siempre supe que eras una jodida histérica, pero no tanto… eres una maldita bipolar Fabray
-Lo siento –te dijo ruborizada
-Te conviene que lo estés… -le respondiste y decidiste ir en busca de alguna aspirina para calmar tu jaqueca.
Una vez que almorzaron, tocaron la puerta y decidiste ir a atender mientras Quinn limpiaba la mesa. Revoleaste los ojos al ver que era Berry con una torta en sus manos y una amplia sonrisa que enseguida se derrumbó al ver tu malhumor. A su lado se encontraba Kurt con una cara de espanto al ver tu mala atención con ellos. Aunque tú pienses que son insoportables, realmente insoportables, en el fondo los querías… pero hoy no era el momento para tener sus presencias en tu casa. No cuando no habías dormido lo suficiente.
-No es mi intención ofenderte ni nada, siempre te he tenido como una diva y sé que las mujeres solemos tener problemas con la humedad, porque tú sabes que –
-Ve al grano Berry –dijiste con impaciencia
-¿Que te ha pasado para que luzcas horripilantemente? -pudiste observar cómo Rachel te preguntaba preocupada al observarte detenidamente.
-Es verdad Satan, si no encontrabas la crema indicada para tapar tus ojeras… lo único que debías hacer era consultarlo conmigo y yo al instante te recomendaba alguna… -Lady Hummel te respondió y tú clavaste la mirada en él.
-No tengo ganas de pelear con ustedes, así que si quieren saber… pregúntenle a Quinn –le respondiste sin ganas de discutir y viste el cruce de miradas entre Rachel y Quinn, quien se había puesto increíblemente ruborizada. Luego, comenzaste a buscar tus llaves de la Jeep para irte.
-¿Qué rayos le sucede? –escuchaste a Rachel y Kurt preguntarle a Quinn en voz baja.
-Anoche tuve mi primer antojo y… la dejé afuera de la casa hasta que me consiguiera el postre que quería… y no pudo dormir bien porque llegó muy tarde –Quinn respondió y tú notaste la vergüenza y timidez en su voz –por eso no está de buen humor
-AAAAAWWWWW –escuchaste cómo el dúo de voces se enternecían al escuchar lo que te había pasado mientras tú mirabas su habías dejado tus llaves arriba de un mueble –ven aquí Satán, ¡Abrazo grupaaaal! –te congelaste al escuchar que tus dos amigos venían por ti para abrazarte y cargosearte.
-¡No! ¡Aléjense de mí! ¡No quiero que tus manos de gnomo ni tu piel de porcelana estén en contacto conmigo! –comenzaste a gritar y tratar de rechazar los brazos que intentaban rodearte. Pero terminaste perdiendo.
-Yo sabía que en el fondo eras una persona dulce, amable y que te preocupabas por los demás –Rachel te decía sonriendo y te abrazaba fuertemente.
-¡Suéltenme o juro que voy a ir all Lima Heights sobre ustedes! –gritaste intentando de asustarlos…. Pero nada.
-Awww, ¿Quién hubiera imaginado a nuestra Satán buscando las cosas para el antojo de Quinn? Es muy tierno de tu parte Santana… -Kurt también te sonreía y tú resoplabas y no sabías cómo hacer para soltarte de ese abrazo que parecía que te iban a asfixiar. Pudiste escuchar una pequeña risilla de fondo y ya sabías que era Quinn la que estaba gozando tu situación.
-Urgghhh… ya es suficiente! Suéltenme que hace calor! –dijiste y lograste liberarte de ellos. Ni siquiera los miraste porque ya sabías que todos se estaban riendo de ti. Tomaste las llaves y decidiste ir a visitar a tu novia. Tal vez eso iba a cambiar tu humor. Pero lo que menos sabías era que iba a pasar todo lo contrario.
...
..
.
________________________________________
-Hey Britt-Britt –saludaste a la holandesa abrazándola fuertemente y besándola con todas las ganas que tenías guardadas durante el día.
-Hola San! –ella te respondió con su enorme sonrisa que iluminaba todos tus días del año. Ni bien se soltaron, ella te dirigió a su habitación y cerró la puerta, cosa que nunca antes había hecho.
-¿Pasa algo que cerraste la puerta? –preguntaste inmediatamente. No sabías por qué pero esto no te gustaba ni en lo más mínimo y tu corazón se estaba acelerando por la preocupación. Tú simplemente observaste cómo tu amada novia se sentó en su cama esperando a que tú hicieras lo mismo.
-Tengo una noticia para ti –ella te dijo y tú simplemente tragaste saliva. Sentiste cómo se te había secado la garganta al instante.
-¿Qué ocurre?
-Santana… -Brittany te tomó de las manos y jugó con tus dedos por unos segundos hasta que enlazó su meñique con el tuyo –voy a quedarme aquí… mi mamá estuvo averiguando y logró que me aceptaran como maestra en un colegio de danzas… no voy a estudiar –ella te miró una vez que terminó de hablar.
-Pe-pero tú dijiste que… -comenzaste a tartamudear en cuanto procesaste la información. Durante todo el año Brittany y tú había programado ir a vivir juntas en Nueva York, tú estudiarías en NYADA (que afortuandamente conseguiste entrar), y ella iba a tratar de cumplir su sueño de ingresar a Juilliard. Nunca, en ningún momento… ella te había dado algún indicio de que no se podía concretar. Tú ya te habías emocionado al imaginarte la convivencia con ella, ustedes dos… solas. Aunque no ibas a negar que ibas a extrañar muchísimo a Quinn.
-Lo sé… lo sé, y lo siento muchísimo San… pero es que estuve hablando con mi madre en estos últimos días y ella tiene razón… debería quedarme aquí, con mi familia… yo no soy una chica para ir a vivir a Nueva York
-Britt, no tiene sentido lo que dices…
-Santana, tú misma sabes las veces que me he perdido en esta misma ciudad que es pequeña y es donde yo crecí y terminé llamándote para que me fueras a buscar… -Brittany te dijo sinceramente y tú no tuviste otra opción que asentir lo que ella dijo, porque era verdad. Brittany era una chica muy soñadora, siempre iba desconcentrada a cualquier parte… era como una niña a veces. Si no fuera por ti, ella ni sabría qué materias tendría que estudiar para los exámenes ni hasta dónde quedaba las aulas.
-Pero yo voy a estar allí y te voy a ayudar… como siempre hice Brittany –le insististe pero ella te sonrió tristemente.
-Lo sé… pero no es justo, y no quiero ser una carga para ti –ella te respondió y tu inmediatamente te acercaste mientras negabas con la cabeza lo que te había dicho.
-No! Nunca fuiste, ni eres, ni vas a ser una carga para mi Britt… yo te amo y haría cualquier cosa por ti… -le respondiste a milímetros de distancia de su rostro –no voy a ir Nueva York, prefiero quedarme aquí contigo –la miraste fijamente para que pudiera ver tu sinceridad en tus ojos.
-No dudo en que serías capaz de hacer cualquier cosa por mi… pero sé que no es justo San, y tú lo sabes… además no creo que me pueda adaptar allí y tú mereces perseguir tu sueño y mostrarle al mundo el hermoso unicornio que eres–ella te dijo sonriendo tristemente y tú comenzaste a aflojar tu insistencia porque veías que ella ya había tomado una decisión. Sentiste cómo tu garganta se iba ahogando y tenías ganas de llorar. Te alejaste un poco de ella para que no pudiera verte en ese estado de vulnerabilidad, aunque sabías que Brittany se iba a dar cuenta.
-San…
-Esto significa que.. –comenzaste a hablar pero no pudiste terminar la frase. No querías escuchar esas palabras salir de tu boca ni de la de ella. Con tan sólo pensar que esto podría significar la ruptura de tu relación, te daba náuseas.
-Nada –ella te dijo y tomó nuevamente tus manos como signo de afirmación.
-Tengo miedo Britt –admitiste y odiabas sentir cómo tu labio inferior temblaba. Tú tenías miedo de que tu relación con ella pudiera acabar. ¿Cómo ibas a lograr que funcionara una relación a distancia? Ni siquiera sabías cómo manejar una relación viviendo en la misma ciudad… ¿Cómo ibas a lograrlo a kilómetros de ella? Te aterrorizaba esa idea. Odiabas pensar la posibilidad de que se terminara tu relación con la holandesa, de que ella pudiera conocer a otra persona… de no poder estar cuando ella te necesitara… odiabas todo eso.
-No tienes por qué tenerlo, todo va a estar bien Sanny –ella te susurró al oído una vez que había envuelto sus brazos alrededor de tu cuello para abrazarte fuertemente.
Pero tú, en tu interior… sentías que no iba a ser así.
Y sentiste un pequeño dolor en el pecho, porque sabías muy bien que cada vez que presentías que algo malo iba a suceder… se terminaba cumpliendo.
...
..
.
________________________________________
Cuando llegaste a casa, tiraste las llaves en la mesa con desgano. Quinn se encontraba acostada en el sillón haciendo zapping en la TV mientras comía un pote de helado. Ella se giró para mirarte y te saludó.
-Hey… llegas tarde, ¿Pasó algo? –te preguntó mientras tú te dirigías directamente hacia las escaleras para ir a tu dormitorio.
-Hola Quinn, no.. no pasó nada –le respondiste –me voy a dormir –le dijiste como para que se hiciera la idea de que querías estar sola.
Realmente hoy no era tu día.
Ni bien entraste a tu habitación, te tiraste sobre la cama y enterraste tu cabeza en la almohada. Querías dormir todo lo que no dormiste y de paso olvidar la gran noticia que te había dado tu novia. A lo mejor mañana lo ibas a tomar de una manera distinta, o ella podría cambiar de opinión (eso lo deseabas con el alma).
Suspiraste nuevamente tratando de calmarte y no estallar en llanto.
-Hey … ¿Puedo pasar? –la voz de Quinn interrumpió tu proceso de relax, y volviste a suspirar porque ya sabías que ella quería hablar contigo.
-Ya estás aquí –le contestaste fríamente y escuchaste cómo ella caminaba lentamente hacia tu cama. Se sentó a tu lado para acariciar tus mechones que tapaban tu rostro y los colocó detrás de tu ojera.
-¿Pasó algo con Britt? –siempre te asombró la capacidad de Quinn para leer tu mente sin haberle dicho una palabra. Y sabías que a ella no le podías mentir, era una chica muy inteligente y astuta y se daba cuenta cuándo no le decías la verdad. Ni siquiera le respondiste, directamente suspiraste hondamente y ella lo tomó como una respuesta afirmativa.
-¿Quieres contarme? Te traje un té… tal vez eso te tranquilice un poco –ella te habló con una voz dulce que nunca antes habías escuchado venir de ella. No sabías por qué, pero decidiste girar en tu cama y dirigir tu atención hacia ella. Una vez que cruzaste tu mirada con aquellos ojos de color avellana (que últimamente siempre te cautivaban) pudiste ver su expresión gentil, comprensivo… y preocupado por ti.
-Gracias –le agradeciste una vez que tomaste la taza de café y comenzaste a beberla. Ella solamente te sonrió y te miraba esperando a que le contaras –Brittany me dijo que ella se queda aquí, la madre le consiguió trabajo como maestra en un colegio de danza –tú comenzaste a hablar y con todas tus fuerzas tratabas de que tu labio inferior no empezara a temblar. Quinn asintió y esperó a que continuaras contando –habíamos acordado que ella iba a vivir conmigo en Nueva York, yo iba a estudiar en NYADA y juntas íbamos a buscar algún instituto o algo que aceptara a Britt… pero hoy recién me dijo que ya había decidido quedarse.. y-y- –sin querer, dejaste que la vulnerabilidad tomara control de ti y tu labio comenzó a temblar descontroladamente y tus ojos a humedecerse.
-San… no puedes obligarla a ir a vivir contigo –Quinn te respondió mirándote con mucha compasión. Tu primera reacción fue querer pegarle, porque tú querías solamente vivir con ella y hasta ahora tú sabías que ella también lo quería… o eso ella te había hecho creer.
-Lo-lo sé… pero, ¿Por qué no me dijo antes que no estaba segura… o que lo iba a pensar? Yo lo hubiese entendido perfectamente… en cambio ella dejó que me ilusionara y pensara millones de cosas que podíamos hacer juntas… -tú respondiste sinceramente y dejaste caer lágrimas por tus mejillas, las cuales Quinn fue secando con sus pulgares al tomar tu rostro en sus manos para mirarte fijamente. Por un momento dejaste de respirar al ver esos ojos verdosos, preciosos… mirándote con tanta intensidad.
-Si se aman de verdad… ustedes lo van a superar a esto –ella te dijo sencillamente y tú asentiste, porque era la verdad. Pero, tenías miedo de que justamente … seas tú la que amabas más en esta relación y que con la distancia ella pudiera encontrar a alguien mejor que tú y pudiera olvidarse de tus sentimientos. Te daba pánico pensarlo. Pero era una posibilidad… o que entre las dos pudieran pelear por la relación.
-Lo sé… -respondiste.
-Ven aquí –ella te indicó y se acomodó en la cama indicándote que te apoyaras sobre su pecho –creo que te haría bien esto –ella te dijo y te rodeó con sus brazos. Nunca te sentiste tan protegida.
-Gracias –volviste a agradecerle mientras te acomodabas sobre ella. Quinn directamente besó tu frente a la vez que acariciaba tu cabello. Ella sabía que eso te hacía tranquilizar y caer en un profundo sueño.
-¿Tú que vas a hacer? –le preguntaste refiriéndote a los estudios... o al modelo de vida que ella iba a elegir a partir de ahora.
-Sé que no voy a poder ir a estudiar a Yale, no tengo el dinero como para sostenerme la carrera ni mantenerme y…
-Quinn, mi madre me dijo que ella iba a pagarte la carrera y –
-No Santana –ella te interrumpió firmemente –no voy a permitir que tu familia se haga cargo de esos gastos que son muchísimos… demasiado que me ayudaron durante todo mi embarazo que eternamente voy a estar agradecida –la rubia te respondió y tú quería insistirle… pero sabías que Quinn es más que terca, es orgullosa… y cuando se le metía una idea en la cabeza, nadie se la sacaba.
-Tal vez busque algún trabajo para poder mudarme y hacerme cargo de mi hija… y de ahí en más veré lo que Dios tiene planeado para mí…
-¿Estás segura? Al menos quédate en esta casa Q, ya que no aceptas que mis padres te paguen el estudio… quédate aquí –le pediste y te inclinaste sobre ella para mirarla a los ojos.
Nunca te ibas a poder responder qué fue lo que pasó, ni qué fue lo que significó eso… pero… los ojos verdes avellana estaban más intensos que nunca y pudiste ver cómo ella te miraba de una forma diferente… como que intentaba decirte algo a través de ellos, pero aún no lo podías descifrar.
Cuando viste que su atención se focalizó en tus labios, sentiste tu corazón acelerarse un poco y tus manos transpirar. Entonces decidiste volver a tu postura anterior y tratar de aclarar tu mente por un momento.
-Está bien… me quedaré aquí –ella aceptó y tú asentiste. No dijiste más nada, porque todavía estabas algo incierta… y no podías formar algún pensamiento coherente.
Tal vez te sentías así porque era ese momento de vulnerabilidad por lo sucedido con Brittany.
Intentaste auto-convencerte.
...
..
.
________________________________________
Al día siguiente, te despertaste antes que Quinn y te llamó la atención ver que tu boca estaba a milímetros de la de ella, tus piernas estaban entrelazadas con las suyas y te causó gracia ver que tu cuerpo estaba bastante encorvado, rodeando la enorme panza de tu amiga. Sonreíste y pensaste cuándo iba a ser el momento en que diera a luz a Beth. Ya la querías conocer, y tú sabías y lo tenías asumido que ibas a babearte por la pequeña y que ella iba a hacerte lo que ella quería.
Tus pensamientos fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta. ¿Quién diablos podría ser a estas horas?
Decidiste retirarte del embrace de tu amiga, tratando de que no se despertara, te pusiste las pantuflas y fuiste a atender la puerta. Si llegaban a ser Rachel o Kurt… juraste que los ibas a matar, pero te llevaste una sorpresa cuando abriste la puerta.
-¿Qué haces aquí?
-Vine a entregarte esto y a hablar contigo
...
..
.
____________________________________________________________
¿QUÉ OPINAN? ;)
-Santana
'Estás soñando… si es que escuchaste algo, has de cuenta que no lo escuchaste'
-Santana…
'Joder, es Quinn. OK, Snix, tranquilízate un poco… yo sé que quieres decirle que deje de molestar y que te deje tranquila… pero vas a tener que escuchar qué es lo que quiere'
-Mhhm?
-Quiero un pote de crema chantilly con flan, frutillas, mucho dulce de leche, con unas bochas de helado de chocolate con avellanas y salsa de chocolate arriba
'¿Ah? ¿Qué carajo?'
-Sí, Fabray… ¿Algo más? -tú le contestas apenas audible y tratando de que se calle lo más rápido posible así podías continuar con tu sueño.
-Ya que me preguntas… mmm creo que quedaría bien unas rodajas de durazno
-Mmhhmmm –le respondiste ya retornando a tu dulce y pacífico sueño. ¿A caso estaba loca? Tú no sabías si estaba desvelada o aburrida, o ambas cosas… y por eso buscaba despertarte o simplemente quería molestarte para entretenerse un poco.
Uno.
'Hhhhmmm, al fin silencio'
Dos
Tres
¡PAF!
-¡Qué carajo –
La rubia te había golpeado con la almohada para despertarte. Jurarías que además de despertarte te había atontado con la fuerza con la que te había golpeado.
¡PAF!
No tuviste tiempo de completar la frase que nuevamente fuiste golpeada por Quinn. ¡¿A caso está loca?!
-¡Mujer tranquilízate un poco! ¡Deja de golpearme!
'Ok, respira hondo e intenta no enloquecerte'
-¡Ignoraste lo que te pedí!¡Cómo quieres que me sienta al ver que mi propia amiga ignora lo que le pido que haga por mí!
¡PAF! ¡PAF!
-¡Ok! ¡Basta ya con la agresión, por favor! ¿Te diste cuenta acaso de qué hora es Quinn? –Giraste para ver la hora que marcaba el reloj que tenías en tu mesita de luz mientras te rozabas con tu mano en donde te había pegado tu amiga – ¡Son las tres de la mañana! –Dios santo. Sentías cómo la sangre estaba por hervir en tus venas al vivir esto. Solamente querías dormir tranquila… no que alguien te pegue con la almohada.
¡PAF! ¡PAF!
-¡No me importa qué hora es, yo sólo quiero ese postre!
¡PAF!
-No voy a ir a buscarlo Fabray, ¿Qué te piensas que soy? ¿Tu maldita mucama?
Suspiraste y agarraste el almohadón con el que te estaba golpeando y te volviste a recostar. Enseguida te arrepentiste cuando escuchaste su llorisqueo. Ugh. Mujeres . Bueno… 'mujeres mujeres', no.
Mujeres embarazadas…
Revoleaste los ojos y te armaste de paciencia para girar y tratar de arreglar la situación. Era lo único que podías hacer. Ya estabas despierta… y estabas de un increíble malhumor… por lo que no te ibas a dormir inmediatamente, y menos si ella estaba llorando.
-Quinn… -trataste de acercarte hacia a ella para que dejara de llorar pero te rechazó la mano cuando intentaste tocar su brazo.
'Inspira….y… Exhala…'
-¿Enserio quieres todo eso de postre? –le preguntaste con la voz más dulce que podías tener… así a lo mejor ella iba a calmarse.
-No Santana, solamente lo quiero poner de adorno en la mesita de luz –ella te contestó cortante.
-Ok, me quedo más tranquila –dijiste en broma pero fue para peor… Quinn estalló en llanto y agarró su almohadón para comenzar a pegarte de nuevo.
-Nonono! Ok!Ok!… era una broma de mal gusto… ¿Puedes repetirme qué es lo que quieres? Voy a ir a buscártelo … ¡Pero deja de llorar y de pegarme! –le dijiste tratando de agarrar su almohadón para impedir que te pegara.
-Crema chantilly con flan, bochas de helado de chocolate con avellanas y –
-Dios, Q! Vas a engordar unos diez kilos más! –le dijiste y te empezaste a preocupar cuando viste que sus ojos se habían tornado llorosos y nuevamente agarró el almohadón para pegarte mientras se movía sobre la cama. Esto te indujo a retirarte de la cama y , como Quinn te perseguía, te fue guiando de a poco hacia la puerta de la habitación a los golpes… seguías caminando hasta bajar las escaleras mientras esquivabas algunos almohadazos … hasta llegar a la puerta de tu casa.
-¡Qué diablos –
-¡Vete de aquí!
Tu amiga embarazada terminó abriéndote la puerta y empujándote hacia afuera.
-¡Quinn! Me puedes decir qué hice ahora? –gritaste al ver que te había encerrado fuera de tu propia casa.
-Me llamaste gorda!
-¡Pero si yo –
-Vete!
Esto ya había llegado al límite de tu paciencia. ¿Qué mierda le pasaba? ¡Está loca! ¡Definitivamente loca! Siempre supiste que no era una chica tranquila como Brittany…¡Pero tampoco tan histérica!
Y ahí estabas…
Quinn Fabray te había echado de tu propia casa.
Comenzaste a golpear fuertemente la puerta.
-¡MIRA FABRAY, TE CONVIENE QUE ABRAS LA PUERTA DE MI PROPIA CASA SI ES QUE NO QUIERES QUE LA DERRUMBE A PATADAS Y TERMINE ARRANCANDO TODOS TUS CABELLOS, UNO POR UNO! –gritaste con toda la furia que habías contenido anteriormente y sólo esperabas que al menos ella se encontrara del otro lado de la puerta para que te escuchase.
-Trae mi postre o duermes afuera
-No lo dirás enserio, Quinn… ¿No?
…
..
.
Nada… ninguna respuesta
-QUINN!
Sinceramente no lo podías creer…
Miraste hacia tu alrededor para ver si alguien estaba viendo esto… gracias a Dios, NO. Por lo menos agradeciste que te encontrabas vestida con tus mini shorts y una musculosa.
Ugh. Ya eran las 4 de la mañana y al estar afuera de tu casa… no te quedaba otra que conseguir lo que la maldita rubia quería si es que tú querías dormir en tu cómoda cama. Si no fuera que realmente la querías demasiado, hubieras dejado que tu Snix interior saliera a luz e hiciera que la rubia se arrepintiera de haber deseado ese maldito postre.
Así que comenzaste a caminar…
...
..
.
________________________________________
Seis y media de la mañana.
Eran las seis y media de la mañana cuando llegaste a casa que afortunadamente… la puerta estaba abierta. Te morías del sueño, tus pies no daban más de todo lo que habías caminado… porque obviamente, tuviste que recorrer millones de lugares para conseguir cada cosa que ella te había pedido. Ni hacía falta mencionar el mal humor que tenías… era impresionante. No podías creer que Fabray te tuviera así. Juraste que iba a ser la última vez en la vida que ella iba a conseguir que hicieras esto.
Cuando entraste a tu casa, buscaste una copa, cuchara, servilleta… todo lo que ella podría necesitar y así no tenías que volver a bajar para buscar las cosas. No veías la hora de dormir en paz.
-Te conviene que te comas todo esto ni bien te lo entregue porque si no voy a – comenzaste a hablar y cuando entraste a la habitación…. Viste a tu querida amiga recostada durmiendo profunda y pacíficamente. Nuevamente te armaste de paciencia para no abalanzarte sobre ella y ahorcarla.
-Voy a matarte mujer -dijiste no pudiendo creer que todas las vueltas que diste en esta ciudad para conseguir lo que ella deseaba había sido inútil.
– Juro que te voy a matar Lucy Quinn Fabray
...
..
.
________________________________________
-Buen día San –escuchaste la voz inconfundible de tu amiga que intentaba despertarte corriendo las cortinas para que entrara luz en el dormitorio. Tenías un dolor de cabeza insoportable por l sueño acumulado que tenías. Ni siquiera le respondiste, directamente te fuiste al baño para lavarte la cara y tratar de ocultar tus horribles ojeras y la hinchazón de tus ojos por dormir tan poco.
-¿Por qué no me hablas? –la rubia te preguntó mientras te servía un café esperando a que te sentaras a su lado como tú hacías todas las mañanas.
-¿Te estás burlando de mi Fabray? Te advierto que no estoy de humor para que juegues conmigo después de lo de anoche… así que ahórrate todo discurso de 'angelito' que tengas ahí guardado como disculpas o lo que sea
-Pero qué – Oh, -reaccionó la rubia –lo siento de verdad Santana, creo que ese fue mi primer antojo
-Y espero que sea el último porque no voy a aceptar que vuelvas a dejarme afuera de mi casa por un puto postre Lucy Quinn Fabray… Dios, siempre supe que eras una jodida histérica, pero no tanto… eres una maldita bipolar Fabray
-Lo siento –te dijo ruborizada
-Te conviene que lo estés… -le respondiste y decidiste ir en busca de alguna aspirina para calmar tu jaqueca.
Una vez que almorzaron, tocaron la puerta y decidiste ir a atender mientras Quinn limpiaba la mesa. Revoleaste los ojos al ver que era Berry con una torta en sus manos y una amplia sonrisa que enseguida se derrumbó al ver tu malhumor. A su lado se encontraba Kurt con una cara de espanto al ver tu mala atención con ellos. Aunque tú pienses que son insoportables, realmente insoportables, en el fondo los querías… pero hoy no era el momento para tener sus presencias en tu casa. No cuando no habías dormido lo suficiente.
-No es mi intención ofenderte ni nada, siempre te he tenido como una diva y sé que las mujeres solemos tener problemas con la humedad, porque tú sabes que –
-Ve al grano Berry –dijiste con impaciencia
-¿Que te ha pasado para que luzcas horripilantemente? -pudiste observar cómo Rachel te preguntaba preocupada al observarte detenidamente.
-Es verdad Satan, si no encontrabas la crema indicada para tapar tus ojeras… lo único que debías hacer era consultarlo conmigo y yo al instante te recomendaba alguna… -Lady Hummel te respondió y tú clavaste la mirada en él.
-No tengo ganas de pelear con ustedes, así que si quieren saber… pregúntenle a Quinn –le respondiste sin ganas de discutir y viste el cruce de miradas entre Rachel y Quinn, quien se había puesto increíblemente ruborizada. Luego, comenzaste a buscar tus llaves de la Jeep para irte.
-¿Qué rayos le sucede? –escuchaste a Rachel y Kurt preguntarle a Quinn en voz baja.
-Anoche tuve mi primer antojo y… la dejé afuera de la casa hasta que me consiguiera el postre que quería… y no pudo dormir bien porque llegó muy tarde –Quinn respondió y tú notaste la vergüenza y timidez en su voz –por eso no está de buen humor
-AAAAAWWWWW –escuchaste cómo el dúo de voces se enternecían al escuchar lo que te había pasado mientras tú mirabas su habías dejado tus llaves arriba de un mueble –ven aquí Satán, ¡Abrazo grupaaaal! –te congelaste al escuchar que tus dos amigos venían por ti para abrazarte y cargosearte.
-¡No! ¡Aléjense de mí! ¡No quiero que tus manos de gnomo ni tu piel de porcelana estén en contacto conmigo! –comenzaste a gritar y tratar de rechazar los brazos que intentaban rodearte. Pero terminaste perdiendo.
-Yo sabía que en el fondo eras una persona dulce, amable y que te preocupabas por los demás –Rachel te decía sonriendo y te abrazaba fuertemente.
-¡Suéltenme o juro que voy a ir all Lima Heights sobre ustedes! –gritaste intentando de asustarlos…. Pero nada.
-Awww, ¿Quién hubiera imaginado a nuestra Satán buscando las cosas para el antojo de Quinn? Es muy tierno de tu parte Santana… -Kurt también te sonreía y tú resoplabas y no sabías cómo hacer para soltarte de ese abrazo que parecía que te iban a asfixiar. Pudiste escuchar una pequeña risilla de fondo y ya sabías que era Quinn la que estaba gozando tu situación.
-Urgghhh… ya es suficiente! Suéltenme que hace calor! –dijiste y lograste liberarte de ellos. Ni siquiera los miraste porque ya sabías que todos se estaban riendo de ti. Tomaste las llaves y decidiste ir a visitar a tu novia. Tal vez eso iba a cambiar tu humor. Pero lo que menos sabías era que iba a pasar todo lo contrario.
...
..
.
________________________________________
-Hey Britt-Britt –saludaste a la holandesa abrazándola fuertemente y besándola con todas las ganas que tenías guardadas durante el día.
-Hola San! –ella te respondió con su enorme sonrisa que iluminaba todos tus días del año. Ni bien se soltaron, ella te dirigió a su habitación y cerró la puerta, cosa que nunca antes había hecho.
-¿Pasa algo que cerraste la puerta? –preguntaste inmediatamente. No sabías por qué pero esto no te gustaba ni en lo más mínimo y tu corazón se estaba acelerando por la preocupación. Tú simplemente observaste cómo tu amada novia se sentó en su cama esperando a que tú hicieras lo mismo.
-Tengo una noticia para ti –ella te dijo y tú simplemente tragaste saliva. Sentiste cómo se te había secado la garganta al instante.
-¿Qué ocurre?
-Santana… -Brittany te tomó de las manos y jugó con tus dedos por unos segundos hasta que enlazó su meñique con el tuyo –voy a quedarme aquí… mi mamá estuvo averiguando y logró que me aceptaran como maestra en un colegio de danzas… no voy a estudiar –ella te miró una vez que terminó de hablar.
-Pe-pero tú dijiste que… -comenzaste a tartamudear en cuanto procesaste la información. Durante todo el año Brittany y tú había programado ir a vivir juntas en Nueva York, tú estudiarías en NYADA (que afortuandamente conseguiste entrar), y ella iba a tratar de cumplir su sueño de ingresar a Juilliard. Nunca, en ningún momento… ella te había dado algún indicio de que no se podía concretar. Tú ya te habías emocionado al imaginarte la convivencia con ella, ustedes dos… solas. Aunque no ibas a negar que ibas a extrañar muchísimo a Quinn.
-Lo sé… lo sé, y lo siento muchísimo San… pero es que estuve hablando con mi madre en estos últimos días y ella tiene razón… debería quedarme aquí, con mi familia… yo no soy una chica para ir a vivir a Nueva York
-Britt, no tiene sentido lo que dices…
-Santana, tú misma sabes las veces que me he perdido en esta misma ciudad que es pequeña y es donde yo crecí y terminé llamándote para que me fueras a buscar… -Brittany te dijo sinceramente y tú no tuviste otra opción que asentir lo que ella dijo, porque era verdad. Brittany era una chica muy soñadora, siempre iba desconcentrada a cualquier parte… era como una niña a veces. Si no fuera por ti, ella ni sabría qué materias tendría que estudiar para los exámenes ni hasta dónde quedaba las aulas.
-Pero yo voy a estar allí y te voy a ayudar… como siempre hice Brittany –le insististe pero ella te sonrió tristemente.
-Lo sé… pero no es justo, y no quiero ser una carga para ti –ella te respondió y tu inmediatamente te acercaste mientras negabas con la cabeza lo que te había dicho.
-No! Nunca fuiste, ni eres, ni vas a ser una carga para mi Britt… yo te amo y haría cualquier cosa por ti… -le respondiste a milímetros de distancia de su rostro –no voy a ir Nueva York, prefiero quedarme aquí contigo –la miraste fijamente para que pudiera ver tu sinceridad en tus ojos.
-No dudo en que serías capaz de hacer cualquier cosa por mi… pero sé que no es justo San, y tú lo sabes… además no creo que me pueda adaptar allí y tú mereces perseguir tu sueño y mostrarle al mundo el hermoso unicornio que eres–ella te dijo sonriendo tristemente y tú comenzaste a aflojar tu insistencia porque veías que ella ya había tomado una decisión. Sentiste cómo tu garganta se iba ahogando y tenías ganas de llorar. Te alejaste un poco de ella para que no pudiera verte en ese estado de vulnerabilidad, aunque sabías que Brittany se iba a dar cuenta.
-San…
-Esto significa que.. –comenzaste a hablar pero no pudiste terminar la frase. No querías escuchar esas palabras salir de tu boca ni de la de ella. Con tan sólo pensar que esto podría significar la ruptura de tu relación, te daba náuseas.
-Nada –ella te dijo y tomó nuevamente tus manos como signo de afirmación.
-Tengo miedo Britt –admitiste y odiabas sentir cómo tu labio inferior temblaba. Tú tenías miedo de que tu relación con ella pudiera acabar. ¿Cómo ibas a lograr que funcionara una relación a distancia? Ni siquiera sabías cómo manejar una relación viviendo en la misma ciudad… ¿Cómo ibas a lograrlo a kilómetros de ella? Te aterrorizaba esa idea. Odiabas pensar la posibilidad de que se terminara tu relación con la holandesa, de que ella pudiera conocer a otra persona… de no poder estar cuando ella te necesitara… odiabas todo eso.
-No tienes por qué tenerlo, todo va a estar bien Sanny –ella te susurró al oído una vez que había envuelto sus brazos alrededor de tu cuello para abrazarte fuertemente.
Pero tú, en tu interior… sentías que no iba a ser así.
Y sentiste un pequeño dolor en el pecho, porque sabías muy bien que cada vez que presentías que algo malo iba a suceder… se terminaba cumpliendo.
...
..
.
________________________________________
Cuando llegaste a casa, tiraste las llaves en la mesa con desgano. Quinn se encontraba acostada en el sillón haciendo zapping en la TV mientras comía un pote de helado. Ella se giró para mirarte y te saludó.
-Hey… llegas tarde, ¿Pasó algo? –te preguntó mientras tú te dirigías directamente hacia las escaleras para ir a tu dormitorio.
-Hola Quinn, no.. no pasó nada –le respondiste –me voy a dormir –le dijiste como para que se hiciera la idea de que querías estar sola.
Realmente hoy no era tu día.
Ni bien entraste a tu habitación, te tiraste sobre la cama y enterraste tu cabeza en la almohada. Querías dormir todo lo que no dormiste y de paso olvidar la gran noticia que te había dado tu novia. A lo mejor mañana lo ibas a tomar de una manera distinta, o ella podría cambiar de opinión (eso lo deseabas con el alma).
Suspiraste nuevamente tratando de calmarte y no estallar en llanto.
-Hey … ¿Puedo pasar? –la voz de Quinn interrumpió tu proceso de relax, y volviste a suspirar porque ya sabías que ella quería hablar contigo.
-Ya estás aquí –le contestaste fríamente y escuchaste cómo ella caminaba lentamente hacia tu cama. Se sentó a tu lado para acariciar tus mechones que tapaban tu rostro y los colocó detrás de tu ojera.
-¿Pasó algo con Britt? –siempre te asombró la capacidad de Quinn para leer tu mente sin haberle dicho una palabra. Y sabías que a ella no le podías mentir, era una chica muy inteligente y astuta y se daba cuenta cuándo no le decías la verdad. Ni siquiera le respondiste, directamente suspiraste hondamente y ella lo tomó como una respuesta afirmativa.
-¿Quieres contarme? Te traje un té… tal vez eso te tranquilice un poco –ella te habló con una voz dulce que nunca antes habías escuchado venir de ella. No sabías por qué, pero decidiste girar en tu cama y dirigir tu atención hacia ella. Una vez que cruzaste tu mirada con aquellos ojos de color avellana (que últimamente siempre te cautivaban) pudiste ver su expresión gentil, comprensivo… y preocupado por ti.
-Gracias –le agradeciste una vez que tomaste la taza de café y comenzaste a beberla. Ella solamente te sonrió y te miraba esperando a que le contaras –Brittany me dijo que ella se queda aquí, la madre le consiguió trabajo como maestra en un colegio de danza –tú comenzaste a hablar y con todas tus fuerzas tratabas de que tu labio inferior no empezara a temblar. Quinn asintió y esperó a que continuaras contando –habíamos acordado que ella iba a vivir conmigo en Nueva York, yo iba a estudiar en NYADA y juntas íbamos a buscar algún instituto o algo que aceptara a Britt… pero hoy recién me dijo que ya había decidido quedarse.. y-y- –sin querer, dejaste que la vulnerabilidad tomara control de ti y tu labio comenzó a temblar descontroladamente y tus ojos a humedecerse.
-San… no puedes obligarla a ir a vivir contigo –Quinn te respondió mirándote con mucha compasión. Tu primera reacción fue querer pegarle, porque tú querías solamente vivir con ella y hasta ahora tú sabías que ella también lo quería… o eso ella te había hecho creer.
-Lo-lo sé… pero, ¿Por qué no me dijo antes que no estaba segura… o que lo iba a pensar? Yo lo hubiese entendido perfectamente… en cambio ella dejó que me ilusionara y pensara millones de cosas que podíamos hacer juntas… -tú respondiste sinceramente y dejaste caer lágrimas por tus mejillas, las cuales Quinn fue secando con sus pulgares al tomar tu rostro en sus manos para mirarte fijamente. Por un momento dejaste de respirar al ver esos ojos verdosos, preciosos… mirándote con tanta intensidad.
-Si se aman de verdad… ustedes lo van a superar a esto –ella te dijo sencillamente y tú asentiste, porque era la verdad. Pero, tenías miedo de que justamente … seas tú la que amabas más en esta relación y que con la distancia ella pudiera encontrar a alguien mejor que tú y pudiera olvidarse de tus sentimientos. Te daba pánico pensarlo. Pero era una posibilidad… o que entre las dos pudieran pelear por la relación.
-Lo sé… -respondiste.
-Ven aquí –ella te indicó y se acomodó en la cama indicándote que te apoyaras sobre su pecho –creo que te haría bien esto –ella te dijo y te rodeó con sus brazos. Nunca te sentiste tan protegida.
-Gracias –volviste a agradecerle mientras te acomodabas sobre ella. Quinn directamente besó tu frente a la vez que acariciaba tu cabello. Ella sabía que eso te hacía tranquilizar y caer en un profundo sueño.
-¿Tú que vas a hacer? –le preguntaste refiriéndote a los estudios... o al modelo de vida que ella iba a elegir a partir de ahora.
-Sé que no voy a poder ir a estudiar a Yale, no tengo el dinero como para sostenerme la carrera ni mantenerme y…
-Quinn, mi madre me dijo que ella iba a pagarte la carrera y –
-No Santana –ella te interrumpió firmemente –no voy a permitir que tu familia se haga cargo de esos gastos que son muchísimos… demasiado que me ayudaron durante todo mi embarazo que eternamente voy a estar agradecida –la rubia te respondió y tú quería insistirle… pero sabías que Quinn es más que terca, es orgullosa… y cuando se le metía una idea en la cabeza, nadie se la sacaba.
-Tal vez busque algún trabajo para poder mudarme y hacerme cargo de mi hija… y de ahí en más veré lo que Dios tiene planeado para mí…
-¿Estás segura? Al menos quédate en esta casa Q, ya que no aceptas que mis padres te paguen el estudio… quédate aquí –le pediste y te inclinaste sobre ella para mirarla a los ojos.
Nunca te ibas a poder responder qué fue lo que pasó, ni qué fue lo que significó eso… pero… los ojos verdes avellana estaban más intensos que nunca y pudiste ver cómo ella te miraba de una forma diferente… como que intentaba decirte algo a través de ellos, pero aún no lo podías descifrar.
Cuando viste que su atención se focalizó en tus labios, sentiste tu corazón acelerarse un poco y tus manos transpirar. Entonces decidiste volver a tu postura anterior y tratar de aclarar tu mente por un momento.
-Está bien… me quedaré aquí –ella aceptó y tú asentiste. No dijiste más nada, porque todavía estabas algo incierta… y no podías formar algún pensamiento coherente.
Tal vez te sentías así porque era ese momento de vulnerabilidad por lo sucedido con Brittany.
Intentaste auto-convencerte.
...
..
.
________________________________________
Al día siguiente, te despertaste antes que Quinn y te llamó la atención ver que tu boca estaba a milímetros de la de ella, tus piernas estaban entrelazadas con las suyas y te causó gracia ver que tu cuerpo estaba bastante encorvado, rodeando la enorme panza de tu amiga. Sonreíste y pensaste cuándo iba a ser el momento en que diera a luz a Beth. Ya la querías conocer, y tú sabías y lo tenías asumido que ibas a babearte por la pequeña y que ella iba a hacerte lo que ella quería.
Tus pensamientos fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta. ¿Quién diablos podría ser a estas horas?
Decidiste retirarte del embrace de tu amiga, tratando de que no se despertara, te pusiste las pantuflas y fuiste a atender la puerta. Si llegaban a ser Rachel o Kurt… juraste que los ibas a matar, pero te llevaste una sorpresa cuando abriste la puerta.
-¿Qué haces aquí?
-Vine a entregarte esto y a hablar contigo
...
..
.
____________________________________________________________
¿QUÉ OPINAN? ;)
Busshunter* - Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 24/01/2013
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Oh mi Dios...
aún espero que puedas compensar a Quinn...
quién será ?
Boca trucha o la "madre" de Quinn???
Muchas gracias por seguir. Porfa no desaparezcas.
Saludos*
aún espero que puedas compensar a Quinn...
quién será ?
Boca trucha o la "madre" de Quinn???
Muchas gracias por seguir. Porfa no desaparezcas.
Saludos*
Tat-Tat******* - Mensajes : 469
Fecha de inscripción : 06/07/2013
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
ho dios ayer me lei todos los capítulos y me encantó espero tu actualización ♥
equaloverealove*** - Mensajes : 148
Fecha de inscripción : 04/02/2014
Edad : 29
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Hola que genial estuvo el capitulo y como es eso que las clases son ciertas a la que yo asistí con mi exnovia eran aburridas y hablaban sólo de lo que le esperaba como contorolar la respiración además de cambiar pañales lo cual ya sabía hacerlojaja, me quedé con la intriga de quien llegó a tocar actualiza pronto Chao :*
Pame_21***** - Mensajes : 245
Fecha de inscripción : 31/10/2012
Edad : 33
Por dios!!
DIME QUE QUIERES?! TE ALABO?? Te doy un beso?? LO QUE SEA POR FAVOR! PERO TIENES QUE ACTUALIZAR!!
Amo a esta Quinn la amo (quisiera una quinn embarazada para mi haha)
Es tan ella pero aagg me derrite! pero aagg como chinga con sus antojos esta loca Pero aaagg qu linda.
Me atrapo tu historia por su peculiaridad y AMO LAS HISTORIAS BIEN REDACTADAS QUE SE ENTIENDAN, Y UNA DE ESAS ES LA TUYA!
Corazon, esperare tu actualización c:
Amo a esta Quinn la amo (quisiera una quinn embarazada para mi haha)
Es tan ella pero aagg me derrite! pero aagg como chinga con sus antojos esta loca Pero aaagg qu linda.
Me atrapo tu historia por su peculiaridad y AMO LAS HISTORIAS BIEN REDACTADAS QUE SE ENTIENDAN, Y UNA DE ESAS ES LA TUYA!
Corazon, esperare tu actualización c:
Cozmica Green* - Mensajes : 4
Fecha de inscripción : 20/03/2014
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
Lo he leído todo en un día y me ha encantado pero por favor actualiza, ya tienes otra lectora a la espera :)
dani_lcastrejon** - Mensajes : 60
Fecha de inscripción : 28/06/2014
Edad : 29
Re: Invisible and Untouchable : CAP 14 (FIC QUINNTANA)
mori en la espera creo xd me dio un ataque cardiaco xd
equaloverealove*** - Mensajes : 148
Fecha de inscripción : 04/02/2014
Edad : 29
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