Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios

podria ser mas lindo, al fin brittany se dejo de estupideces!!!!

holap dan,..

es bueno que britt se diera cuanta que tenia que decirle a san lo que sentía aunque sea su ultima oportunidad!!!
me gusto la reacción de la tía de san con respecto a britt!!!
ahora que pasa con la relación de las dos sabiendo lo que sienten una por la otra!!!

nos vemos!!!

PD; todo mundo me dice LU!!!

JanethValenciaaf escribió:Me encanto al fin se le declaro britt a santy, mañana quiero 2 capítulos

Que bueno que te haya gustado.
Y habrá dos capítulos.

monica.santander escribió:Hayyyyy que susto me diste!!!!!!
Me gustaron los capitulos!!
Hasta mañana.
Saludos

Jajajajaja ¿porque?
Me alegra leer eso
Hasta hoy
Saludos

Jane0_o escribió:Me encanto ya quiero leer del tiempo que pasaran las 3 juntas
Ahora solo falta que brittany regrese
Saludos

Que bonito que te haya gustado, eso ya lo veremos más adelante.
Si, solo falta eso
Saludos

micky morales escribió:podria ser mas lindo, al fin brittany se dejo de estupideces!!!!

Yo creo que sí, con ellas lo lindo no tiene límites, si esas aptitudes no me gustan.

3:) escribió:holap dan,..

es bueno que britt se diera cuanta que tenia que decirle a san lo que sentía aunque sea su ultima oportunidad!!!
me gusto la reacción de la tía de san con respecto a britt!!!
ahora que pasa con la relación de las dos sabiendo lo que sienten una por la otra!!!

nos vemos!!!

PD; todo mundo me dice LU!!!

Hola Lu…

Si, ya me estaba molestando como actuaba.
Si, al menos se tiene que llevar bien con alguien de la familia de San ¿no?
Eso lo descubrirás en estos capítulos.

Nos vemos

P.D: ¿Y cuál es tu nombre real? Y no me digas que es secreto, ya dos lectoras ya me han dicho lo mismo.

Hola chicas sexys y lectoras ¿Cómo están?
Espero que estén muy bien y estén teniendo un excelente día.
Hoy como dije o escribí les tengo otros 2 capítulos que espero que les gusten y así baje un poco su odio hacia mí. Ya casi llegamos la final de la historia.

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CAPÍTULO 24

Unos interminables minutos más tarde, los médicos salen del box y les dan el parte a Julio y a Begoña, en cuanto se van, la tía de Santana entra y nos cuenta que va a permanecer en la UCI un día más para observarle, después lo subirán a planta y según vaya evolucionando ya irán viendo qué hacen.

También nos dice que van a hacerle una serie de pruebas para comprobar que no hay nada raro, se la ve esperanzada y mira a su sobrina con tanto amor que siento que estorbo en la habitación, por lo que doy unos pasos hacia atrás para apoyarme en la pared del fondo y dejarles un poco de intimidad.

— Gracias por traerla de vuelta — me dice Julio casi en un susurro que me sobresalta — supongo que mi tía tenía razón y no hay que perder la fe — le miro sin saber muy bien qué decirle — perdona por todo lo que te dije antes — asiento sorprendida de que sea capaz de pedir disculpas.

Se acerca a la cama de su hermana y le abraza con cuidado. Begoña se acerca a mí y aunque está llorosa, sonríe como una niña con zapatos nuevos y me contagia su buen humor. Le digo que voy a ir a llamar a Sam para ponerle al día y preguntarle cuando sale nuestro vuelo de vuelta y la mirada se le nubla, pero asiente con una sonrisa.

— ¡Brittany! — Santana me llama e inmediatamente me pongo a su lado — no te vayas.

— Iba a llamar por teléfono, vine con un amigo de Londres y tengo que saber cuándo sale nuestro vuelo.

— Otra vez huyes.

— No Santana… no huyo, pero mi hija está en Londres con mis padres.

— ¿Y qué pasa con nosotras?

Begoña coge a Julio del brazo y se disculpa por salir de la habitación, quiere dejarnos intimidad y la comprendo. Yo he temido esa pregunta desde que Santana abrió los ojos. Lo cierto es que no sé qué va a pasar con nosotras, nos queremos, quizá nos queramos demasiado, pero yo ahora tengo una vida en Londres y ella tiene aquí su vida.

Durante unos segundos nos miramos fijamente a los ojos y estoy convencida de que Santana sabe lo que le voy a decir, no es lo que deseo, pero es lo que debo hacer.

— Santana…

— No Brittany… no lo digas.

— Escúchame, tu vida está aquí y la mía está…

— ¿Dónde Brittany? Estás equivocada, mi vida está a tu lado y al de Sofía.

— ¿Renunciarías a todo por estar conmigo? — pregunto desesperada por hacerme entender.

— Renuncié a vivir cuando me abandonaste — me mira llena de ira y no le culpo — vuelves a irte, tú dirás que no huyes, pero es exactamente lo que estás haciendo.

Me inclino para besarle pero retira la cara y se niega a mirarme. Sintiéndome lo peor de este mundo, salgo del box, sé que tengo que llamar a Sam, pero ahora mismo no tengo fuerzas para hacerlo, ya sólo con ver la cara con la que me mira Julio es suficiente, me siento torpemente en una de las sillas y todo mi mundo se desmorona.

La tía de Santana se sienta a mi lado en silencio y su hermano entra en el box.

Durante unos minutos permanezco en silencio, quiero arreglarlo, quiero estar con ella… pero ¿cómo voy a hacerlo cuando nos separa un país y un mar?

Triste y abatida salgo hasta el pasillo general para llamar a Sam.

— Respóndeme a una cosa Brittany — me dice cuando termino de contarle lo ocurrido — exactamente ¿qué es lo que te retiene en Londres?

— Allí es donde vivo ahora.

— No querida, allí es donde sobrevives, que no es lo mismo. Para vivir hay que disfrutar de estar vivo.

— Entonces ¿qué quieres que haga? ¿Me traslado de nuevo a España como si no hubiese pasado nada?

— ¿Y por qué no?

— ¡Sam!

— A ver Brittany, tienes medios económicos para vivir donde quieras, estoy seguro de que Santana querrá que te traslades a su casa y con esas manos que tienes encontrarás trabajo donde sea.

Hablo con Sam durante unos minutos más y cuando cuelgo el teléfono necesito un rato para pensar en todo lo que hemos hablado. Tengo que recapacitar en las posibles consecuencias de mis actos. Me prometí que si Santana volvía, yo sería valiente y me arriesgaría, o al menos, sopesaría todas las opciones disponibles, lo más fácil sería irme a Londres, donde casi estoy establecida, salvo que no tengo una casa propia ya que vivo con mis padres. Podría instalarme en Valencia, pero ¿de qué viviría? Tendría que empezar de cero otra vez, aunque Sam tiene razón en que si me mudo a casa de Santana, podría mantenernos durante unos meses al menos.

Todo esto es una locura, aquí estoy en mitad del pasillo de un hospital decidiendo si debo ir a vivir con mi hija a casa de una mujer a la que apenas conozco pero por la que haría cualquier cosa.

¡Y yo que odiaba los cambios!

¡Pues anda que no ha cambiado mi vida!

Pienso y pienso y le doy vueltas al tema una y otra vez y no encuentro una solución en la que ganemos todos. Finalmente me doy cuenta de que es algo que debo hablar con Santana, al fin y al cabo, su vida también se va a ver afectada por mi decisión.

Entro sigilosamente en el box y nadie se percata de mi presencia, pero se me hiela la sangre cuando escucho lo que Santana está diciendo.

— Julio, me importa muy poco lo que tú opines, ¿no te das cuenta de que la quiero más que a nada?

— ¡Pero si apenas la conoces!

— ¿Y qué se supone que tengo que conocer? Es preciosa, trabajadora, buena persona, tiene una hija y un ex marido al que se cargaron por chanchullos de drogas de los cuales ella no sabía nada… tú la has investigado ¿me he dejado algo?

— Pero Santana…

— ¿Ves? Ni siquiera tú has podido encontrar algo malo de ella. Si tengo que darle todo lo que tengo para que se quede conmigo lo haré, no puedo volver a perderla.

— Tiene una hija.

— Y yo un hermano que es un cabrón.

— Muy bonito ese lenguaje — intercede Begoña.

— Julio, adoro a esa niña, es tan bonita y dulce como su madre.

— ¿Estás preparada para ser esposa y madre de golpe?

— Desde que la besé por primera vez supe que jamás podría alejarme de ella.

— Estás más loca de lo que pensaba.

Una enfermera me pide permiso para entrar y todos se giran para mirarme. No es correcto escuchar conversaciones ajenas, pero ésta conversación era digna de ser escuchada, Santana es una mujer realmente increíble. Perfecta en todos los aspectos.

Otras dos enfermeras entran y le quitan los frenos a la cama, tienen que llevarse a Santana para hacerle unas pruebas y todos nos apartamos para que las chicas puedan trabajar.

— Dime algo Brittany — me mira nerviosa.

— ¿Desde cuándo te has vuelto tan loca? — le pregunto con una sonrisa.

— Desde que tú apareciste — me guiña un ojo y yo siento que me derrito — ¿estarás aquí cuando vuelva?

— Te lo prometo.

Se llevan a Santana y yo miro embobada a la mujer que me ha robado el corazón, estoy enamorada de ella y ella lo está de mí, me parece que el mundo se ha vuelto de color de rosa. Aún nos quedan muchas cosas de las que hablar y muchas otras que solucionar, pero Sam tenía razón, jamás me habría recuperado de no arreglar las cosas con Santana.

Julio y Begoña hablan en un rincón de la sala de espera de la UCI, soy consciente de que a su hermano no le hace ninguna gracia que estemos juntas y también soy consciente de que va a ser una fuente constante de problemas, pero paso a paso. Aún tenemos que saber en qué punto estamos para empezar a preocuparnos de terceras personas.

Al cabo de una hora Santana aún no ha vuelto de las pruebas, pero Sam ha vuelto de su comida con el médico, rápidamente le pongo al día y me abraza con cariño, hablamos sobre cómo puedo solucionar los inconvenientes de volver a trasladarme de país pero él sólo sonríe y me dice que no me preocupe, que su madre lo entenderá. Al fin y al cabo ella también lo arriesgó todo por amor.

Unos minutos más tarde, la mujer de mis sueños aparece escoltado por varias enfermeras y encantada de la vida le presento a Sam y me da la sensación de que se caen bien al instante, lo cual es importante para mí, mi amigo inglés ha sido mi mayor apoyo en Londres.

CAPÍTULO 25

Al día siguiente es Nochebuena y a primera hora de la mañana sale nuestro avión para
Inglaterra, estaré fuera unos días para solucionar todos los asuntos pendientes, pero volveré para Año Nuevo. Santana me ha suplicado hasta la saciedad que no la deje solo en Navidad, pero no soy capaz de estar lejos de mi hija tantos días, aunque su solución es que vaya a buscarla y vuelva para estar con ella. No es que sea mal plan, pero no creo que pueda arreglar todo en unas horas.

En cuanto entro en casa de mis padres, abrazo a mi hija total y absolutamente feliz y encantada de la vida, la he echado mucho de menos y aunque sólo es una niña pequeña me muero de ganas de contarle todo lo que ha pasado y explicarle lo bonita que será nuestra casa cuando nos instalemos en Valencia.

San me manda mensajes cada cinco minutos y yo no paro de sonreír como una colegiala enamorada, que es como me siento exactamente, sólo de recordar sus increíbles ojos oscuros se me eriza la piel y una sonrisa tonta se me instala en la cara.

Por la noche, durante la cena, mis padres están especialmente contentos, sé que han disfrutado de tenernos durante un tiempo, pero también soy consciente de que han hecho un parón en sus vidas, ellos aprovechan cualquier momento libre para hacer una escapada y desde que me mudé con ellos, apenas han salido. No es que se alegren por perdernos de vista, se alegran por verme feliz e ilusionada y por saber que las dos estaremos bien, se fían de mi criterio, pero también del de Sam y él les ha explicado lo buena mujer que es Santana.

Pero el momentazo del año llega cuando mis padres me entregan el regalo de Navidad que son dos billetes de avión para Sofía y para mí, con destino Valencia y fecha de mañana. No son unos padres muy apegados, pero son buenos padres. Me aseguran que ellos se encargarán de hacer que me lleguen las cajas de la mudanza, de todas formas, la mayoría de ellas estaban sin tocar en el garaje.

Llego al aeropuerto de Valencia el día de Navidad a las seis y media de la tarde hora española. Con tanto viaje estoy un poco desorientada, pero si todo sale bien, tanto Sofía como yo nos estableceremos de forma permanente en esta preciosa ciudad.

En cuanto entro en el hospital pregunto por Santana y para mi sorpresa ya está ingresado en planta, una enfermera me indica que no se permite la entrada de los niños a las habitaciones y durante un momento no sé qué hacer, quiero darle una sorpresa a la mujer que tanto quiero, le explico a la enfermera mi dilema y me dice que puede llamar a la habitación y pedirle a algún familiar que baje a quedarse con la niña un rato. Y así lo hace.

Espero impaciente y me imagino que será Begoña quien aparezca, pero para mi sorpresa es Julio. Me empiezo a poner nerviosa casi en cuanto le veo, lo que menos me apetece ahora mismo es escuchar alguna de sus lindezas y por supuesto, me niego a que Sofía nos vea discutir.

— Menuda sorpresa — me dice y hasta parece honesto — no conozco en persona a tu hija, sólo la he visto de pasada — me da un beso en la mejilla que me deja sin palabras — bienvenidas. Hola Sofía, mi nombre es Julio — le da un beso a mi niña en la frente y yo sigo alucinando — oh venga Brittany, no me mires así, si vas a ser mi cuñada y esta preciosidad va a ser mi sobrina tendremos que empezar a llevarnos bien ¿no te parece?

— Cada día que pasa me sorprendes más… — digo totalmente atónita — no estoy muy segura de que Sofía se quiera quedar contigo de buena gana…

Pero para mi sorpresa, Julio le abre los brazos y mi hija se lanza a ellos, dejándome atontada por su reacción, vale que desde pequeña está acostumbrada a ir de unos brazos a otros, pero en Londres parecía que se le había quitado la costumbre.

— Pues a Sofía le caigo bien — dice Julio con tono divertido.

— Será porque a ella no la has detenido nunca — le miro con los ojos entrecerrados.

— Bueno, técnicamente a ti tampoco… sólo te llevé a comisaría para hablar.

— Para interrogarme y acusarme.

— Tecnicismos — dice antes de hacerle una pedorreta a Sofía que se ríe como loca con las monerías del inspector.

— Te voy a apuntar mi teléfono por si la niña se pone nerviosa o algo…

— Ya tengo tu teléfono — le miro sorprendida — soy policía — me recuerda y sonrío.

Tras darle un beso a mi preciosa hija que ni se inmuta porque me vaya, me alejo por el pasillo en dirección a los ascensores, justo antes de entrar en uno miro a Sofía y veo como Julio la eleva en el aire y la niña se desternilla de la risa. Si no lo veo, no lo creo.

Bastante desconcertada por la renovada actitud de Julio hacia mí y hacia mi hija, llamo suavemente a la puerta de la habitación de Santana, Begoña me abre en silencio y me hace señas para que no haga ruido, ya que su sobrina está dormida.

Cuando yo entro, ella sale y antes de despedirse me dice que se va a conocer a Sofía y que no tenga prisa por ellos, que ella adora a los niños y que tiene mano con ellos, además Santana le ha asegurado que es una cría muy buena y muy fácil de tratar.

Me siento con cuidado en la butaca al lado de su cama y le observo detenidamente.

Ahora lleva un pijama de paciente de hospital que le queda un poco pequeño y le marca todos los músculos del magullado cuerpo, aun así, un cuerpo impresionante. Tiene bastantes cortes en un brazo y moratones por todas partes, pero su cara sigue siendo de ensueño, muy simétrica, labios perfilados, el inferior ligeramente más grueso que el superior, nariz recta, el ligero escote de la pijama que hace que le dé un aspecto de rebelde sexy que hace que me esté resultando casi imposible no tumbarme a su lado y despertarle con mordiscos en el cuello.

Tras mirarle durante unos minutos, decido que necesito hacerle saber que he vuelto, por lo que con mucho cuidado le beso en los labios, despacio, dulcemente…

— Has vuelto — dice con la voz aún soñolienta.

— Te dije que lo haría.

— ¿Has venido sola? — niego con la cabeza — ¿y Sofía?

— Con tu hermano y te juro que si no lo veo, no lo creo.

— Adora a los niños, es voluntario en un centro de menores y los niños pequeños se lo comen a besos en cuanto entra por la puerta.

— ¿Hablamos del mismo hombre? — ya tenía claro que no sé calar a las personas, pero lo del inspector tiene tela.

— No es un mal hombre… como dice mi tía, su trabajo le ha quitado la fe en las personas y en cuanto se hacen adultas pierden su confianza.

— Ya veo…

Durante un buen rato hablamos de los resultados de las pruebas y para mi sorpresa, los médicos incluso se plantean mandarle a casa en un par de días, ya que al parecer, todas han salido muy bien.

A medida que se hace de noche me empiezo a poner nerviosa y Santana imagina el motivo.

— Esta noche puedes quedarte con mi tía, no vive muy lejos de aquí y así no estarás sola, o también puedo pedir el alta voluntaria y nos vamos las tres a casa — me dice con una de sus preciosas sonrisas.

— Sin ánimo de ofender, preferiría instalarme ya en tu casa, Sofía ya ha sufrido muchos cambios de hogar y prefiero esperar a que tu médico te dé el alta… no vaya a ser que te dé un chungo por la noche y ¡menudo lío! Tu hermano me fusila sin pensárselo dos veces.

Las dos nos reímos a carcajadas cuando Julio entra con Sofía y Begoña en la habitación y yo me quedo alucinada.

¿No se suponía que los niños no podían subir a la planta?

Pero cuando le pregunto al inspector, sólo me enseña la placa y se ríe mientras sigue haciéndole monerías a Sofía.

Finalmente a Santana le dan el alta en el hospital al cabo de unos días, pero estará de baja durante al menos seis meses, ya que las lesiones que tuvo fueron graves. Tendrá que ir a rehabilitación y a revisiones médicas, pero al menos está viva y los médicos creen que se recuperará totalmente.

Sus compañeros del parque de bomberos vienen a visitarle mucho y a contarle los cotilleos de unos y de otros, me alegra mucho saber que entre ellos se llevan tan bien, creo que en todos los trabajos debe haber un buen ambiente, pero cuando tu vida depende de tu compañero, tienes que poder confiar en ellos.

La noche de fin de año es muy especial para mí. Rachel y Quinn han venido a pasar el fin de año con nosotras, lo que me ha dado la oportunidad de hacer las paces con mi mejor amiga porque últimamente la he tenido muy abandonada y ella siempre ha sido como una hermana para mí.

También puedo comprobar que Santana y Quinn se han hecho grandes amigas y mantienen una complicidad especial, lo que me alegra muchísimo porque es importante que se lleven bien.

Sofía se ha adaptado perfectamente a su nuevo cuarto, su cama le encanta, Santana le ha tallado su nombre en el cabecero, mis padres ya han enviado las cajas desde Londres y tiene todos sus juguetes y sus peluches favoritos.

Después de Año Nuevo, Julio vuelve a Madrid ya que se le han terminado las vacaciones que solicitó para poder estar al lado de su hermana, la relación entre nosotros ha mejorado muchísimo pero no ha sido por nosotros, ha sido por Sofía, adora a su tío y ya le llama así. A él se le cae la baba con mi hija y yo me siento orgullosa de ver como se ha metido en el bolsillo a alguien que no tiene fe en las personas.

Begoña nos ayuda mucho en casa, ya me imaginaba yo que Santana tendría ayuda para mantener la casa tan perfecta y aunque tengo que reconocer que es muy cuidadosa y organizada, su tía viene dos o tres días a la semana para limpiar la casa de arriba abajo, al parecer desde que la jubilaron se aburre mucho, pobrecita, me da pena, aunque lo cierto es que cada vez pasa más tiempo con Sofía y soy yo la que se encarga de la casa, la niña lo pasa genial con ella, algo que no es de extrañar porque
Begoña fue profesora de guardería durante muchos años y es de esas personas que lleva su oficio en la sangre.

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Y hasta aquí con los capítulos del día de hoy, espero que les haya gustado.
Ya sabes que si te gusto, quieres hacerme una pregunta o insultarme lo puedes hacer con tu sexy comentario en la parte de abajo. ES GRATIS. (Yo sé que les gusto)

Nos estaremos leyendo el sábado o antes si es que algo extraordinario pasa.
Gracias por sus comentarios

CUÍDENSE MUCHO
LAS AMO
NO OLVIDEN HACER SU TAREA
Y SEAN MUY PERO MUUUUUUUUUUUUUUUY FELICES

P.D: ¿Cómo se llaman? Para al menos conocerlas un poco.

Como que todo se empieza a acomodar al fin!!!!!
Saludos, espero que algo extraordinario pase y pueda leerte el viernes.
PD: mi nombre es Monica, holaaa!!!!

Me encanto
Saludos

PD: mi nombre es Janette

no voy a matarte pq me han encantado los capitulos, hasta muy pronto y el nombre que ves es el mio miky morales aunque no me desagradaria llamarme Diana Agron!!!!!!jajajajajajajajajajajajajjajaja

holap dan,...

es bueno que britt aya vuelto,...
me gusto el gesto de los papis de britt para que vuelvan con sofi!!!
coincido con briitt es difícil ver a julio y a sofi interactuando!!!

nos vemos!!!

PD; mi nombre es Danna,.. pero todo el mundo me dice LU por eso te lo puse primero!!!

No te mataré, ese día es mi favorito :), espero mucho ya de esta futura familia lopezpierce.
PD:Mi nombre es Janeth Osiris, ya se osiris como el dios de la muerte y del más allá,

Monica.Santander escribió:Como que todo se empieza a acomodar al fin!!!!!
Saludos, espero que algo extraordinario pase y pueda leerte el viernes.
PD: mi nombre es Monica, holaaa!!!!

Por fin, el drama se va terminando
Saludos, y lo siento mucho que no haya pasado pero estaba muy ocupada con un proyecto.
P.D: Holaaa Mónica

Jane0_o escribió:Me encanto
Saludos

PD: mi nombre es Janette

Me alegra leer eso..
Saludos.

P.D: Hola Janette

Micky Morales escribió:no voy a matarte pq me han encantado los capitulos, hasta muy pronto y el nombre que ves es el mio miky morales aunque no me desagradaria llamarme Diana Agron!!!!!!jajajajajajajajajajajajajjajaja

Que bonito se lee eso, gracias por perdonar mi vida…
Hasta este momento…
Hola Miky Morales jajajajajaja a nadie le desagradaría llamarse Dianna Agron.

3:) escribió:holap dan,...

es bueno que britt aya vuelto,...
me gusto el gesto de los papis de britt para que vuelvan con sofi!!!
coincido con briitt es difícil ver a julio y a sofi interactuando!!!

nos vemos!!!

PD; mi nombre es Danna,.. pero todo el mundo me dice LU por eso te lo puse primero!!!

Holap Lu…
Es genial por fin esta quedando todo donde debería…
A mi también, fue super lindo…
Jajajajajaj es algo super raro para tod@s

Nos vemos!!!

P.D: Danna, bonito nombre…
Entonces será Lu y Danna de vez en cuando.

JanethValenciaaf escribió:No te mataré, ese día es mi favorito :), espero mucho ya de esta futura familia lopezpierce.
PD:Mi nombre es Janeth Osiris, ya se osiris como el dios de la muerte y del más allá,

Gracias, ya he salvado mi vida dos veces…
Todas esperamos lo mismo seria una familia perfecta

P.D: Holaa Janeth Osiris… woooow eso suena terrorífico OK NO.

Hola chicas, perdón por no actualizar antes pero estaba algo ocupada y hasta ahora que llegue a mi casa lo pude subir…
Espero que estén muy bien y estén teniendo un excelente día.
En fiiin, espero que les guste el capítulo.

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CAPÍTULO 26

— Sofía por fin se ha dormido — dice SantEmma en cuanto entra en nuestra habitación.

— La estás mal acostumbrando… ella se dormía solita en su cama y no le hacía falta nadie y desde que vivimos aquí, si no te quedas con ella no se duerme.

— No te enfades cariño, es que me encanta teneros aquí y adoro ver cómo se va quedando dormida con las historias que le cuento — me da un beso en los labios que me sabe a gloria — ¿Sabes una cosa? — dice emocionada y yo niego divertida — hoy me ha llamado mamá — los ojos se le iluminan y a mí se me llena el corazón de amor.

— Es lógico.

— ¿Te molesta?

— ¿Molestarme? — le beso de nuevo con mucho cariño — no, no me molesta lo más mínimo, a todos los efectos eres como su segunda madre, quienes más se ha acercado han sido Rachel y Quinn y ella era muy pequeña como para acordarse.

— MañEmma es su cumpleaños y no te lo creerás, pero estoy nerviosa, espero que le guste el regalo que le he comprado.

— Si me dijeras lo que es, podría ayudarte.

— Ah no… es una especie de prueba — me mira intensamente — por cierto, hablando de pruebas… tú y yo tenemos una prueba pendiente aún… — empieza a acariciarme con el dedo los labios y todo mi cuerpo reacciona al contacto.

— SantEmma, no creo que sea buena idea… aún es muy pronto para un esfuerzo así.

— Te deseo Brittany — me susurra al oído — te deseo tanto que sólo puedo pensar en tu cuerpo arqueado de placer bajo el mío — me vuelve a susurrar y me muerde en el cuello.

— Y yo a ti también te deseo, pero sigo pensando que no es una buena idea.

Sin decir una palabra más, se pone sobre mí y comienza a acariciarme la cara muy dulcemente mientras me besa con mucha ternura, lo que provoca que el traidor de mi cuerpo reaccione de forma casi inmediata, empieza a acariciarme por encima del camisón mientras los besos van incrementando su intensidad, baja su mano por mi cuerpo con caricias posesivas que me encienden y cuando llega a mi cadera me aprieta un poco, lo que hace que gima de placer por la anticipación.

Sigue su camino hasta mi pierna y cuando encuentra el borde del camisón, mete la mano debajo y comienza una caricia ascendente por el interior de mi muslo, sin miramientos introduce un dedo dentro de mí y lo gira lentamente, yo gimo de placer mientras la mujer que me vuelve loca me besa y me muerde los pezones con distinta intensidad.

Cuando mi cuerpo empieza a exigir mayores atenciones, SantEmma saca su dedo de mi cuerpo y con deleite lo chupa mientras yo le observo fascinada.

— Yo creo que estás más que convencida de que sería una fantástica idea.

— Eso es hacer trampas.

— En el amor y en la guerra todo vale y yo te quiero como jamás he querido a nadie.

— Y eso es chantaje.

— No — me susurra al oído — esto es deseo en estado puro — dice colocando sus dedos en la entrada de mi cuerpo — te quiero Brittany, eres la mujer de mis sueños.

— Tú eres mi fantasía hecha realidad.

Y sin saber exactamente como ha pasado, SantEmma se introduce lentamente en mi interior con 2 dedos mirándome fijamente a los ojos, puedo notar como el color de sus preciosos ojos se oscurece como las profundidades de la oscuridad y me pierdo en la intensidad de lo que me hace sentir.

Los movimientos son muy lentos aunque sensualmente excitantes y por un momento creo que se está haciendo daño, intento que se quede quieta pero me besa con pasión y me acaricia posesivamente.

— Déjame ponerme encima Sanny, no creo que estés para muchas florituras.

— Estoy bien cariño.

— No SantEmma, si creo que te estás haciendo daño no me concentro.

— ¿Qué no te concentras? — me muerde un pezón y yo gimo — déjame demostrarte lo perfectamente que estoy y lo mucho que vas a concentrarte.

Empieza a entrar y salir de forma intensa y delirantemente despacio, su mano libre me acarician el cuerpo, su lengua hace maravillas con mis pechos y al cabo de unos segundos ya no soy capaz de razonar lo más mínimo, sólo puedo dejarme llevar por la pasión que esta mujer desprende en cada momento.

Llevo tanto tiempo sin ella que mi cuerpo enseguida empieza a formar un orgasmo en mi vientre, me agarro a la espalda de SantEmma pero como no quiero hacerle daño, enseguida le suelto y tengo que agarrarme a las sábEmmas para intentar controlar las sensaciones que me invaden, la mujer de mis sueños añade otro dedo y aumenta el ritmo de las penetraciones y yo ya no soy capaz de resistirlo más, el orgasmo se apodera de mí y me recorre entera haciendo que me arquee de placer y que grite al ritmo del éxtasis que estoy sintiendo ahora mismo, pero SantEmma acalla los gritos con un beso intenso, pasional y muy terrenal mientras se abandona al clímax.

— ¿Te duele algo? — pregunto cuando se derrumba encima de mí.

— No cariño, no me duele nada, no te haces una idea de lo mucho que te necesitaba, te echaba mucho de menos.

— Y yo a ti mi amor.

Se tumba a mi lado y entonces caigo en la cuenta de que hace una semEmma hemos ido a una clínica de inseminación y empiezo a ponerme nerviosa, no voy decirle nada porque no quiero que piense nada malo de mí, pero la ansiedad que empieza a gEmmarle terreno a la dicha post coital hace que me levante de la cama y me vaya al baño, cierro la puerta e intento pensar en cuantas posibilidades tengo de haberme quedado embarazada, aunque como dijo la doctora Marley estos procedimientos no siempre funcionan al primer intento.

Al cabo de unos minutos salgo del baño y SantEmma se incorpora en la cama para poder mirarme fijamente.

— Estás preocupada — me dice muy seria — ¿qué pasa Brittany? ¿está todo bien? ¿te he hecho daño?

— Estoy bien cariño, no te preocupes — miento mientras me meto en la cama.

— Britt, no me hagas esto… cuéntamelo ¿qué ha ocurrido?

— No ha ocurrido nada, tranquila, de verdad que estoy bien.

— No, no lo estás y me estás ocultando algo… dime lo que ocurre, ¿acaso has tenido que fingir?

— ¿Cómo dices? Espera… ¿en serio me preguntas que si he fingido un orgasmo? asiente y yo me cabreo por momentos — no SantEmma, no he fingido el orgasmo… estoy ligeramente nerviosa por lo que hemos hecho la semEmma pasada, eso de ir a la clínica.

— ¿Y? — dice encogiéndose de hombros — ahora somos una familia Brittany, si te quedas embarazada no ocurrirá nada malo, tendremos un bebé igual de precioso e inteligente que el que ya tenemos y seré una mujer más feliz de lo que lo soy ahora mismo.

— No sé si quiero tener más hijos SantEmma… — mi respuesta no le ha gustado, puedo notarlo.

Entonces porque has accedido al tratamiento.

-¡NO LO SÉ!- grito y es la verdad, no sé porque lo hecho. Tal vez fue la ilusión que tenían sus ojos cuando me lo propuso.


— Vale, ¿tienes forma de saber esta noche si estás embarazada? — niego con la cabeza — bien, pues nos preocuparemos cuando tengamos que hacerlo ¿de acuerdo cariño?

— Te ha molestado lo que he dicho.

— Molestado no… no me lo esperaba, pero no me ha molestado, yo lo quiero todo de ti
Britt-Britt y lo que me des me hará feliz.

No se puede ser más buena, dulce, tierna y cariñosa que SantEmma. Me abrazo a ella y me quedo dormida escuchando como le late el corazón mientras me doy cuenta de la suerte que tengo de poder estar al lado de la mujer a la que amo y que ella me quiera a mí.

A finales de enero, SantEmma está muy nerviosa, está claro que no es una mujer de estar en casa todo el santo día, pero aunque ella parece que no lo entiende, aún está convaleciente, en la revisión de hace unos días le felicitaron por el buen trabajo con el fisioterapeuta pero también le pidieron por activa y por pasiva que no se forzara, que podría ser peor, pero en cuanto llegamos a casa hace lo que le da la gEmma, como correr detrás de Sofía o cogerla en brazos como si la niña no pesase más que uno de sus peluches.

Cuando me baja la regla, yo me siento aliviada pero al contárselo a SantEmma parece que le han dado una mala noticia, me siento culpable por negarle algo que sé que desea, pero me parece demasiado pronto, en realidad llevamos juntas apenas unos días y no creo que tener un bebé sea una buena forma de empezar una relación, aunque la convivencia con ella es realmente muy buena, creo que necesitamos afianzarnos más como pareja antes de traer otro bebé a este mundo.

A finales de Febrero, Rachel me da la noticia de que por fin se ha cerrado la venta de mi piso de Madrid, por lo que en breve recibiré mucho dinero y enseguida empiezo a hacer planes sobre cómo debería invertirlo.

Le planteo a SantEmma la idea de comprarle la mitad de la casa y ponerla a nombre de las dos, pero en vez de tener una conversación como adultas, terminamos discutiendo como críos, no acabo de entender por qué le ha molestado tanto lo que le he propuesto, sólo intento ser práctica y asegurar el futuro de Sofía.

Pero cuando se lo cuento a Rach totalmente frustrada por el éxito tan nulo de mi idea, ella se parte de la risa y me dice que soy la mujer con menos sexto sentido que ha conocido en la vida. Según Rachel, he ofendido a SantEmma al insinuar que sus sentimientos por nosotras son pasajeros y que su nivel de compromiso es mayor del que yo he dado por hecho.

¡Tama ya!

Lo cierto es que no entiendo una sola palabra de lo que me está diciendo, en ningún momento le he dicho que crea que nos va a dejar en la calle cuando se canse de nosotras, que parece que es lo que piensa según ha deducido Rachel por los retazos de la discusión que le he contado.

Dos días más tarde, SantEmma aparece en casa después de la rehabilitación con unos papeles en la mano y en cuanto Begoña se lleva a pasear a Sofía, me explica que es la documentación necesaria para que pueda adoptar a Sofía y ser oficialmente su segunda madre.

Necesito sentarme.

Ahora mismo no soy capaz de hablar.

— ¿Quieres quitarme a mi hija? — pregunto al cabo de unos minutos.

— ¿Cómo puedes pensar eso de mí? ¡claro que no! Tú dijiste que querías comprar la mitad de la casa para asegurar el futuro de Sofía.

— Sí, pero yo me refería a…

— Lo que yo te propongo va más allá de una casa, quiero a esa niña como si fuese mía, ¿quieres protegerla? Firma los papeles y Sofía pasará a ser mi hija a todos los efectos y con todas las obligaciones que eso conlleva por mi parte.

— Yo no… yo… — creo que voy a desmayarme, todo esto está yendo muy rápido.

— Vamos a ver Brittany, yo te quiero y quiero a Sofía, creo que ya te he demostrado que no hay nadie más importante para mí que vosotras… pero si necesitas más… esos papeles te garantizan que me haré cargo de la niña a todos los efectos.

— ¡Pero yo no quiero que sea una obligación!

— Y no lo es, es una formalización de nuestra situación…

— SantEmma… no estoy segura de esto…

— Brittany, ¿quieres la casa? mañEmma vamos al registro de la propiedad y la ponemos a tu nombre, haré lo que haga falta para asegurarme de que no huyes de nuevo.

— ¡Dios! Ahora parece que soy yo la que quiere dejarte en la calle…

— Te lo parece porque es lo que crees que yo voy a hacer y a estas alturas ya deberías saber que jamás haría una cosa así.

Nos miramos fijamente pero no somos capaces de arreglar la situación, parece que entre nosotras haya un agujero negro que se trague todas nuestras buenas intenciones y escupa las palabras de forma que el otro sólo oiga que tenemos dobles intenciones.

— Al menos piénsatelo Brittany — dice SantEmma levantándose del sofá y volviendo a salir de casa.

Al cabo de unos segundos escucho el rugido de la moto y enseguida me pongo alerta, ¡esta mujer se ha vuelto loca! ¡Aún no puede conducir la moto! Y de pronto la discusión ya no me parece importante. Durante la siguiente hora sujeto el móvil en las manos esperando a que me llamen para darme la noticia de que a SantEmma le ha pasado algo.

El miedo a perderle vuelve a atenazarme la garganta y empiezo a dar vueltas por la casa como si estuviese poseída.

Cuando Begoña vuelve con Sofía dormida en su carrito, se extraña al no ver a SantEmma, pero sin entrar en detalles, le digo que ha salido a pasear y en cuanto mete a la niña en su cama, se despide cariñosamente de mí y se va.

Espero a SantEmma durante horas, le llamo más de treinta veces al móvil y todas y cada una de las veces me cuelga el teléfono, lo que no hace sino aumentar mi cabreo. Le mando mensajes que no responde y yo creo que estoy a punto de volverme completamente loca.

Totalmente desesperada llamo a Rachel y le cuento lo que ha ocurrido, pero mi amiga en vez de ponerse de mi lado, alaba la mano que ha tenido SantEmma para ponerme entre las cuerdas y obligarme a aceptar un compromiso, ya es la segunda vez que le apoya a ella y no a mí y no me gusta nada perder a mi mejor amiga. Me cabreo con ella también y después de no ser nada amable cuelgo el teléfono.

Como un león enjaulado empiezo a dar vueltas por la casa, cabreada como una mona, pero lo que realmente me está alterando es la preocupación porque a SantEmma le pase algo. Finalmente decido llamar a Julio para preguntarle dónde podría estar SantEmma a estas horas, me obliga a contarle lo que ha ocurrido entre nosotras y tras darme su opinión al respecto me dice que seguramente estará en la sala común del parque de bomberos.

Me visto a toda velocidad mientras llamo a Begoña, necesito que me haga de canguro para Sofía, le cuento que voy a matar a su sobrina por hacer que me preocupe tanto y ella se parte de risa y me asegura que llegará lo antes que pueda.

No me lo puedo creer, son más de las doce de la noche y la inconsciente de SantEmma aún no ha dado señales de vida. Me la voy a cargar. Espero impaciente hasta que Begoña llega y casi la arrollo en cuanto abre la puerta, subo a toda velocidad al coche y conduzco como una loca por las calles de Valencia hasta que llego al parque de Bomberos.

Me tomo unos segundos para intentar reflexionar sobre lo que debo decirle a SantEmma, pero estoy tan enfadada, tan preocupada y tan herida que antes de pensármelo dos veces, aparco el coche y entro como una furia, paro a una chica que está fregando el enorme suelo de cemento y le pregunto por la sala común, me indica amablemente y yo subo los escalones de dos en dos, a cada segundo que pasa estoy más furiosa.

— ¡SantEmma! — grito en cuanto le localizo tirada en un sofá — ¡eres una cabróna!

— ¡Brittany! — mi mira como si no se creyese que estoy aquí.

— ¡Te juro que voy a arrancarte la piel a tiras! — me acerco a ella a grandes zancadas — ¿tú te has vuelto loca? ¿se puede saber qué coño haces aquí?

— ¿Dónde está Sofía?

— ¡Durmiendo! ¡Si te importase tanto como dices habrías estado con ella para dormirla, se ha pasado la última hora llorando y buscándote por la casa!

A SantEmma le cambia la cara, los ojos se le oscurecen y la mandíbula se le tensa. Sé que ha sido un golpe bajo, no dudo ni por un instante que adora a Sofía, pero es que estoy muy enfadada.

— Creo que con eso te has pasado — me dice un hombre a mi espalda y me giro rápidamente — soy Will, el jefe de SantEmma — se presenta dándome la mano — tú debes ser la mujer que la está volviendo loca.

— El sentimiento es mutuo — digo ligeramente avergonzada y él sonríe.

— Eso es bueno… mi Emma lleva tres décadas sacándome de mis casillas.

— Voy a contarle eso a Emma — le dice Santana divertida — Brittany cariño, vamos a casa — y mi cabreo vuelve con fuerza.

— ¿Ahora quieres volver a casa? — le golpeo en el pecho — ¡llevo horas llamándote!
¿por qué no cogías el teléfono? — ha sido como revivir una pesadilla.

— Estaba enfadada contigo Brittany, has insinuado que te voy a echar de casa y que Sofía sólo es una obligación para mí… ¿qué clase de mujer crees que soy?

— Me parece que os voy a dejar a solas — interviene el jefe de Santana — pero chica… a tu mujer siempre se le ha de contestar al teléfono, por muy enfadada que estés. Encantado de conocerte Brittany — me da un beso en la mejilla — le vas a encantar a Emma.

Observo como se va Will mientras lucho con las ganas de llorar por pura desesperación, pero no pienso llorar.

Me ha hecho sufrir mucho, no digo que yo lo haya hecho todo bien, a la vista está que no ha sido el caso, pero…

— ¿Sabes? La noche que Noah me pidió el divorcio se pasó horas sin contestarme al teléfono — digo al final profundamente herida.

— Brittany…

— Déjalo Santana, déjalo estar… — la furia ha dado paso a la tristeza y ya no quiero discutir con ella — me voy a ir a casa, si cuando me despierte por la mañana no estás, Sofía y yo haremos las maletas.

— Suena a ultimátum.

— Tómatelo como quieras Santana.

Abatida como no me he sentido nunca en la vida, bajo las escaleras de forma mecánica, llego hasta el coche y sin darme cuenta conduzco hasta la playa. Aparco y bajo hasta la arena. Me quito los zapatos y empiezo a pasear en dirección al mar.

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Y hasta aquí con el capítulo, espero que les haya gustado, ya sabes que si te gusto, quieres preguntarme algo o insultarme lo puede hacer con un comentario es cual siempre en bien recibido y ES COMPLETAMENTE GRATIS.
Todas tienen muy lindos nombres y mil gracias por comentar, leer y sobre todo aguantar mis locuras.
Nos leemos el lunes o antes si es que algo extraordinario pasa…

CUÍDENSE MUCHO PERO MUCHO MUCHO
LAS AMO INFINITAMENTE
NO OLVIDEN HACER SU TAREA
Y SEAN HÍPER FELICES

P.D: Pregunta para conocernos mejor ¿Cuántos años tienen?
Yo tengo 17, aun estoy peque

P.D: Se que tal vez no les guste esta parte pero lo tengo que hacer…
Solo quedan 3 capítulos de la historia.

Nooooooo!!!!! Que britt no se meta al mar, que firme los papeles que santana le dio
PD: TENGO 16 AÑOS...

Yo nunca olvido hacer mis tareas, soy una niña cumplido y responsable

Hola no entiendo a Britt le dan todo en bandeja de plata y lo primero que hace es pensar cosas malas de San!!!
Saludos

holap dan,..

es normal el miedo de tener todo ahora,... y después que san la deje y perder todo de golpe,..
a ver que va a hacer britt???

nos vemos!!!

PD; tengo 23 años,..!!!

Nooo porque
Bueno se entienden sus miedos de brittany pero se esta pasando
Saludos y hasta tu prontisima actualizacionnn




PD: tengo 22

brittany me esta cansando, que le pasa? actua como si no quisiera compromiso con santana! que lo diga y ya!

JanethValenciaaf escribió:Nooooooo!!!!! Que britt no se meta al mar, que firme los papeles que santana le dio
PD: TENGO 16 AÑOS...

Hola Janeth…
Tal vez solo quiere nadar porque tiene calor ¿no?
Si eso sii, que firme los papeles.

P.D: Wooow cosita, estas muy peque *Habla la que ya es veterana LOL*

JanethValenciaaf escribió:Yo nunca olvido hacer mis tareas, soy una niña cumplido y responsable

Qué bueno que no las olvides, eso es muy bueno y asi tenemos que hacer toda la vida.

monica.santander escribió:Hola no entiendo a Britt le dan todo en bandeja de plata y lo primero que hace es pensar cosas malas de San!!!
Saludos

Hola Monica…

Lo sé, necesita ir a un psicólogo. Parece que San le dice todo lo contrario…
Saludos

3:) escribió:holap dan,..

es normal el miedo de tener todo ahora,... y después que san la deje y perder todo de golpe,..
a ver que va a hacer britt???

nos vemos!!!

PD; tengo 23 años,..!!!

Holap Lu…

Tal vez, pero el miedo de Britt se va a los extremos…
Ya lo sabrás en el capítulo…

Nos vemos!!!

P.D: Muy buena edad

Jane0_o escribió:Nooo porque
Bueno se entienden sus miedos de brittany pero se esta pasando
Saludos y hasta tu prontisima actualizacionnn


PD: tengo 22

Hola Janette…

No lo se…
Bastante diría yo, se me hace una exageración…
Saludos y hasta ahorita…

P.D: 5 añitos mayor que yo :P

micky morales escribió:brittany me esta cansando, que le pasa? actua como si no quisiera compromiso con santana! que lo diga y ya!

Hola Miky…
A mi también, creo que esta loca es la única explicación que se me ocurre…
Si no quiere a San que le diga, aunque se nos parta el corazón ¿no?

Hola chicas, por fin tengo un descanso, ya que ahora regrese a los entrenamientos wii vuelvo hacer feliz…
Espero que estén muy bien y estén teniendo un excelente día.
En fiiin, espero que les guste el capítulo. Y lo comenten.

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CAPÍTULO 27

Siempre me ha encantado el mar, el murmullo, el olor de la sal…

Miro hacia el horizonte y cuando me doy cuenta de que es una de esas extrañas noches sin luna, soy consciente de que sin Santana, es así exactamente como me siento. Como un cielo vacío. Observo la tranquilidad del agua y algo me recuerda lo que siempre se dice que la luna afecta a las mareas, vuelvo a mirar al cielo y comprendo que así como el mar está tranquilo porque no hay luna, mi corazón no late porque Santana no está a mi lado.

Son verdades absolutas, son realidades aplastantes. Puedo enfurecerme todo lo que quiera, puedo comparar a Santana con Noah tantas veces como se me ocurra, pero hay algo que jamás cambiará pase lo que pase y es que ella es la mujer de mis sueños nunca ha sido y nunca será como el desgraciado de mi ex marido.

Durante unos minutos me siento en la arena y jugueteo con ella mientras pienso en cómo puedo arreglar las cosas con Santana. Sé que todo esto le tiene que estar costando una barbaridad, ha pasado de ser una sexy bombero soltera a ser esposa y madre prácticamente de la noche a la mañana. Voy a tener que hablar con ella muy seriamente, quizá lo mejor sería que alquilase un apartamento para la niña y para mí y que Santana y yo empezásemos una relación algo más normal. Aunque algo me dice que en cuanto le proponga esa idea se va a poner como una hidra.

Sin saber qué hacer me subo al coche y conduzco en dirección a su casa. Sé que no estará allí y eso a lo mejor me da la oportunidad de pensar las cosas con la mente algo más despejada. Meto el coche en el garaje y como la puerta que lo comunica con la casa hace mucho ruido, decido entrar por la principal.

Abro con cuidado y a oscuras y en cuanto paso el cerrojo, la luz se enciende.

— Que sea la última vez que sales de casa sin el móvil — me dice Santana con la mandíbula tensa y levantándose del sofá — que sea la última vez que haces que me preocupe así — se acerca lentamente a mí y yo estoy paralizada — y que sea la última vez que insinúas que no te quiero.

— Santa…

— Brittany, ahora vas a escucharme — me arrincona contra la puerta y apoya sus manos a los lados de mi cabeza — eres la mujer más terca, desconfiada y desesperante que jamás he conocido — me besa cuando voy a protestar — pero también eres la mujer más increíble, buena, generosa, dulce y cariñosa que conozco, me vuelves loca y no sé cómo manejar esa situación. No me he portado bien al no responderte las llamadas y ahora comprendo tus miedos, no volverá a pasar, te lo prometo, pero tú intenta comprender los míos. Durante estas semanas me has hecho vivir en el paraíso y de repente haces que todo parezca que está a punto de desmoronarse… no soporto la idea de despertarme y que Sofía y tú no estéis a mi lado, me vuelve loca y no me deja pensar.

Durante unos segundos intento procesar lo que me acaba de decir. Creo que he malinterpretado todas sus acciones y sus gestos, sé que es porque llevo mucho tiempo viviendo yo sola, pero realmente parece que siente cada palabra que ha dicho y juro que voy a volverme loca de remate si no le beso ahora mismo.

Me pongo de puntillas y le acaricio los labios con los míos. La tiento, pero ella se mantiene firme y a la suficiente distancia para no rozarme y que a la vez me vuelva loca.

— Me dolió que me colgases el teléfono.

— Y a mí que insinúes que no te quiero.

— No sé lo que somos, no sé dónde estamos, no sé qué esperar.

— Somos familia, estamos en nuestro hogar y tienes que esperarlo todo.

— ¿Qué es lo que quieres Santana? ¿Qué quieres de nosotras?

— Todo. Lo quiero todo Brittany. Quiero teneros a mi lado cada día, irme a trabajar y al volver refugiarme en tus brazos y en las sonrisas de mi niña, porque aunque no soy la madre biológica de Sofía, juro que la llevo en mi corazón como si fuese de mi sangre. Quiero tener la seguridad que jamás vas a volver a huir, os necesito en mi vida, os necesito tanto que me duele.

Sin poder resistirlo más, le rodeo el cuello con los brazos y le beso apasionadamente. Tarda un par de segundos en reaccionar, pero finalmente me empotra contra la puerta y el beso se vuelve violento, desesperado, furioso… es como si intentase transmitirme cómo se siente y yo se lo permito, durante unos minutos me besa con desesperación mientras sus manos me sujetan con posesión y fuerza.

Tras poner fin al beso y sentir la ira aun bullendo en su sangre, decido hacer lo mismo, besarle intentando transmitirle todo lo que yo siento, así que le beso con mucha suavidad, muy tímidamente, poco a poco voy profundizando el beso pero al cabo de un segundo me retiro y vuelvo a besarle despacio.

— Me vuelves loca Brittany, siento que te me escapas de los dedos y no puedo soportarlo.

— Eso es porque apenas nos conocemos Santana, fíjate, llevamos juntas muy poco tiempo y sin embargo ya vivimos juntas.

— Y eso te asusta — asiento sin dejar de mirarle — temes que yo te abandone — vuelvo a asentir — te da miedo que yo también te mienta.

— Me aterra — suspira profundamente y me acaricia la cara con ternura.

— Sólo tengo palabras y espero que me des el tiempo suficiente para demostrar que lo que digo es verdad, te quiero Brittany y quiero a Sofía, sois mi mundo.

Nos besamos durante unos minutos más y al final nos vamos a la habitación después de comprobar que Sofía está bien, no puedo evitar sentir un nudo en el estómago cuando veo a Santana recorrerle con el dedo los surcos de las lágrimas y besarla dulcemente en la frente, le susurra algo al oído y vuelve a besarla.

En silencio nos metemos en la cama y me quedo dormida apoyada en su pecho, escuchándole respirar.


Los días pasan y las cosas entre Santana y yo van mejor. Cuando chocamos en algo, los dos nos paramos para coger aire antes de estallar, lo cierto es que es muy fácil convivir con ella, las cosas como son.

Llegan las fallas y toda la ciudad se vuelca, debo reconocer que no entiendo muy bien esto del sentimiento fallero, pero me dejo llevar por el buen humor de Santana y disfruto como una niña viendo como nos presenta a todos sus conocidos, está orgullosa de Sofía que hace de ella lo que quiere.

El día de la ofrenda, nos cruzamos con Will, el jefe de Santana, que va con su mujer Emma, nos presentamos e inmediatamente sé que nos vamos a llevar a las mil maravillas, es una mujer preciosa y me quedo realmente impresionada cuando me cuenta con lágrimas en los ojos que ella fue fallera mayor de su falla. Se la ve profundamente emocionada y aunque sigo sin entender muy bien qué significa exactamente, puedo ver el orgullo en sus ojos.

— Sofía algún día también será fallera — me susurra Santana al oído — con lo bonita que es, se llevará al jurado de calle.

Tomamos algo en una terraza mientras les escucho hablar de las distintas fallas, de la programación de las fiestas y miro divertida como Will y Santana se ponen nerviosos cuando empiezan a hablar sobre la cremà, que es cuando se queman todas las fallas.

La niña, Santana y yo lo pasamos de lujo en las fiestas, vamos a cenar a varias fallas donde nos invitan porque conocen a Santana y casi todos los días nos acostamos a las tantas, ella parece que lo lleva bien pero a mí me cuesta seguirle el ritmo, aunque la que parece que es valenciana de toda la vida es Sofía, ¡hay que ver cómo le gusta la fiesta a esta hija mía!

No hemos vuelto a mencionar el tema de comprar la casa o de que Santana adopte a Sofía, pero soy consciente de que las dos le estamos dando vueltas a la cabeza.

Aunque Santana no debería incorporarse al trabajo hasta finales de Junio, consigue convencer al fisioterapeuta y al médico de que está perfectamente sana, por lo que le firman el alta, afortunadamente su jefe le deja volver pero le saca de las rondas, hará trabajos menores hasta que él considere que está totalmente recuperado. En cuanto empieza con la rutina del trabajo se relaja visiblemente, está claro que estar tanto tiempo en casa le estaba empezando a pasar factura. Y eso que iba a rehabilitación, los chicos venían a verle y salíamos con Sofía todas las tardes, pero la mujer de mis sueños no es de los que se quedan viendo la tele.


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Y hasta aquí con el capítulo, espero que les haya gustado, ya sabes que si te gusto, quieres preguntarme algo o insultarme lo puede hacer con un comentario es cual siempre en bien recibido y ES COMPLETAMENTE GRATIS.
Todas están peques, pero la más grande de las que comentaron su edad es Danna lo siento pero es así, jajaja estoy loca lo sé …
Nos leemos el miércoles o antes si es que algo extraordinario pasa…

CUÍDENSE MUCHO
LAS AMO COMO NO TIENEN UNA IDEA
NO OLVIDEN HACER SU TAREA
Y SEAN SUPERARCHIECONTRAMEGA FELICES

P.D: Pregunta para conocernos mejor ¿de qué país son?
Yo soy de León, Guanajuato. México *tod@s dicen que “Guanajuato” es un nombre raro ¿ustedes creen lo mismo?


P.D: Noticia mala…
QUEDAN 2 CAPÍTULOS

holap dan,...

me gusto,...
ame la seguridad que le da san a britt,...
me gusta como va la relación entre las dos!!!

nos vemos!!!

PD; soy de argentina de buenos aires,.. pero vivo en los ángeles,..!!!!

Hola dan,
Me da mucho gusto que hayas actualizado, no es que sea muy fanática de las brittana, jajajajajajaj
Que bueno que ya estén bien las dos,
PD: SOY DE CD.MADERO, TAMAULIPAS,

Hola que tal!!!
Que bueno que las chicas arregle sus dilemas de una ves!!!
Soy de Mendoza Argentina
Saludos

bueno no estan tan mal las cosas aunque podrian ir mejor! soy de margarita- venezuela.

3:) escribió:holap dan,...

me gusto,...
ame la seguridad que le da san a britt,...
me gusta como va la relación entre las dos!!!

nos vemos!!!

PD; soy de argentina de buenos aires,.. pero vivo en los ángeles,..!!!!

Holap Lu…

Que bueno…
Yo también, y es lo que Britt necesita…
Si, hasta ahora todo bien…

¡¡¡No vemos!!!

P.D: Argentina, me encanta el acento que tienen… uuuy que bonito y que tal vas allá?

JanethValenciaaf escribió:Hola dan,
Me da mucho gusto que hayas actualizado, no es que sea muy fanática de las brittana, jajajajajajaj
Que bueno que ya estén bien las dos,
PD: SOY DE CD.MADERO, TAMAULIPAS,

Hola Janeth…

Si, qué bonito es cuando actualizan las historias y más si son Brittana…
Tu fan de Brittana??? No lo creo  jajajajajajaja
Si, es muy bonito y que así sigua siempre ¿no?

P.D: Wiii, creo que estamos un poco cerca, solo atravieso San Luis potosí y ya llego LOL.

monica.santander escribió:Hola que tal!!!
Que bueno que las chicas arregle sus dilemas de una ves!!!
Soy de Mendoza Argentina
Saludos

Hola Monica…

Si, no queremos más problemas…
Otra argentina, no sé según recuerdo tiene diferente acento al de BsAs ¿no?

Saludos

micky morales escribió:bueno no estan tan mal las cosas aunque podrian ir mejor! soy de margarita- venezuela.

Hola Miky..
Eso siii, esperemos que en estos últimos capítulos por fin todo quede perfecto…
Venezuela, que bonito siempre he querido ir…