|
Estreno Glee 5x17
"Opening Night" en:
"Opening Night" en:
Últimos temas
Los posteadores más activos de la semana
No hay usuarios |
Publicidad
Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
+11
micky morales
Canek
ant0ne
23l1
ana_kunis
3:)
fanybeaHEYA
Sanny25
Heya Morrivera
JanethValenciaaf
Daniela Gutierrez
15 participantes
Página 2 de 7.
Página 2 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
JanethValenciaaf escribió:Pobre de britt, por que no los denuncio, se que por proteger a su niña.
Bueno ahora que va a hacer.
Saludos desde cd. Madero, tamps
jajajaaj
Cada vez parece que le va peor, por miedo y proteger a su niña hermosa.
Ya lo veremos.
Que bello, y saludos desde León, Gto.
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Hola una vez mas por el día de hoy.
Como dije subiría 2 capítulos. y he aquí el segundo.
*************************************************************************
CAPÍTULO 6
Lo primero que hago al día siguiente es comprobar mi cuenta para ver el saldo y grito loca de contenta al ver que ya me han hecho el ingreso del seguro. ¡Fantástico! Una cosa menos. Mentalmente calculo lo que me va a quedar para invertir en el negocio tras pagar la extorsión y sonrío al comprobar que aunque me cueste un poco al principio, puedo volver a ponerla en marcha.
Mike y Tina me acompañan a elegir la maquinaria y todo el mobiliario de la pastelería, me dejo guiar por ellos, hacen un gran equipo y tienen unas ideas geniales, prácticas y además más baratas de lo que yo creía en un principio. Lo que yo decía, son una auténtica joya.
Tras asegurarme de que mi mejor amiga ha ido a recoger a Sofía, los chicos y yo vamos a una tienda de decoración de un amigo de Mike, el chico que nos atiende es muy eficiente, nos aconseja muy bien sobre cómo tendré que hacer las reparaciones e incluso se ofrece a ayudarme con lo que necesite.
Por la noche estoy agotada pero satisfecha. Mañana empezaremos a retirar todo lo del local y estoy emocionada por el cambio, asustada por todos los frentes que tengo abiertos al mismo tiempo y cabreada con mi ex por ponerme en esta situación.
Tardamos tres días en vaciar completamente el local, nos ha llevado mucho tiempo pese a los que éramos porque hemos aprovechado para quitar el papel pintado de las paredes y arrancar las baldosas del suelo ya que la mayoría estaban destrozadas.
Cuando dejo a mi preciosa hija en los brazos de Rachel tengo que hacer un esfuerzo por no echarme a llorar, hoy tengo que reunirme con el salvaje que me atacó a la salida de la guardería y estoy muerta de miedo, le he dado todos los datos a mi amiga, si me pasa algo tiene que ponerse en contacto con mis padres y ellos se harán cargo de Sofía, en cuanto al local, he modificado el testamento y les quedará a Mike y a Tina y tendrán que ingresar una parte de los beneficios en una cuenta a nombre de mi hija, lo he hecho todo con la ayuda de Quinn por supuesto.
— Buenos días putita — me dice al oído el mismo hombre que me atacó justo antes de que entre en la taberna.
— Mi nombre es Brittany — digo girándome.
— ¡Vaya! ¿Has encontrado el coraje?.
— ¿Quieres el dinero o no? No tengo tiempo para esto.
— Tranquila putita, no me pongas nervioso o puede que haga alguna tontería — dice enseñándome un arma que lleva escondida en el cinturón.
— Toma, acabemos ya con esto — le digo tendiéndole un abultado sobre.
— Buena chica — me sonríe y a duras penas consigo controlar las arcadas.
— Si me ibas a extorsionar, no tenías por qué destrozarme la pastelería, casi no consigo el dinero.
— No fue cosa mía muñeca, eso tendrás que agradecérselo a tu marido.
— Lo haré en cuanto le encuentre.
— Buena suerte con eso.
— Con esto estamos en paz ¿verdad? — pregunto con seguridad en la voz aunque tengo miedo y conozco la respuesta.
— Por supuesto — dice sonriendo de nuevo de esa forma tan repulsiva.
Me largo de allí como alma que lleva el diablo, subo a mi coche como si alguien me persiguiese y arranco quemando rueda. Estoy con la adrenalina a tope, todo mi cuerpo tiembla y creo que estoy a punto de empezar a sufrir convulsiones.
Conduzco como una loca por las calles de Madrid, necesito soltar la adrenalina y no soy nada aficionada al deporte por lo que decido bajar las ventanillas, subir la música y gritar todo lo alto que puedo, si no libero presión, creo bastante probable que me estalle la cabeza.
Veinte minutos más tarde entro en una cafetería del barrio de Aluche, ¡hasta Aluche he llegado! Alucinando estoy… pero mientras pido una tila doble le mando un mensaje a Rachel para informarla de que estoy sana y salva, al menos de momento.
Tres tilas dobles más tarde, consigo volver al coche, eso sí, aún me tiemblan las piernas y me cuesta respirar con normalidad, pero increíblemente consigo regresar a mi barrio sana y salva. Lo que es poco menos que un milagro dado mi estado de nervios.
Vuelvo a llamar a mi amiga para decirle que estoy bien pero que voy a ir a la pastelería a ayudar a los chicos con la pintura de las paredes porque estoy demasiado nerviosa como para estar con Sofía, me muero de ganas de abrazarla pero en mi estado es probable que incluso se me caiga de los brazos. Rachel me asegura una y otra vez que las dos lo están pasando genial en la oficina y que no me preocupe por nada.
Estoy encantada con mi equipo, me quedo maravillada al comprobar que ya han pintado toda la zona de la cafetería de un precioso color malva claro y Mike ya está preparando el color para la zona de la pastelería en un precioso color fresa que pondrá en la pared del fondo. Es tan bueno el trabajo que han hecho que casi me siento a salvo del salvaje con el que he compartido unos segundos.
No es que yo sea muy fan de los espacios multicolor, pero en la simulación que nos hicieron en la tienda quedaba realmente bien, todos los muebles son de color blanco y los suelos ya no serán de baldosa, será un linóleo de color madera clara con las vetas y todo. El ambiente será cálido, coqueto y ya no parecerá una simple pastelería, sino un local donde disfrutar de deliciosas bebidas e increíbles dulces que las acompañarán.
La joya de la corona será la cocina. El suelo será también de linóleo, además de ser lo más barato, es muy fácil de limpiar y tremendamente resistente, las paredes simularán paneles de piedra en tonos tierra, tendremos un horno para pan, dos grandes hornos para pastelería, una amasadora grande, un fermentador, un gran refrigerador, un par de robots de cocina, una gran isla central donde trabajar en los encargos y demás cosas necesarias. Será un sueño de cocina. Las encimeras serán metálicas, pero los muebles serán de color verde lima, el color favorito de Mike.
Suspiro profundamente mientras me sujeto el pelo en un moño alto. Voy a ponerme manos a la obra y ayudar a mis chicos, si ellos han renunciado a sus vacaciones para echarme una mano con la remodelación del negocio, yo también puedo remangarme.
— Mira jefa — Mike me saca de mi aletargamiento — tengo una sorpresa para ti,
Tina y yo hemos pensado que esto te gustaría, será vuestro rincón.
Me lleva hasta un rincón al fondo de la cafetería donde han puesto un vinilo de un cerezo japonés en flor, una butaca de color crema y otra igual más pequeña con una pequeña estantería, una mesita de color malva y justo debajo de las ramas del cerezo en letras negras mate pone: “El rincón de Sofía” en la misma tipografía que yo usaba en los carteles con las recomendaciones.
No puedo evitar emocionarme y en un impulso abrazo fuertemente a Mike mientras intento no echarme a llorar como una niña pequeña.
— Muchas gracias Mike, eres un encanto — le susurró al oído.
— Te lo mereces jefa, vamos a hacer de este local nuestro segundo hogar — me dice con ánimo.
Aún no puedo desvelar mis planes, pero cada día estoy más segura de la decisión que he tomado. Pese a todo lo que estoy viviendo últimamente, soy afortunada, he encontrado a un grupo de personas que son buenas y se han convertido en una parte muy importante de mi vida.
Al acabar el día voy a recoger a Sofía a casa de Rachel. Mi niña está profundamente dormida, al parecer Quinn se la llevó al parque y ha corrido toda la tarde. Mi amiga es la mejor, ya le ha dado la cena y la ha duchado, la cojo con cuidado y durante un segundo me deleito en su carita, es la dulzura personificada, sólo con mirarla sé que no habrá nada que no sea capaz de hacer por ella. Voy a salir de todos los pozos en los que estoy metida, no sé cómo voy a hacerlo, pero tengo claro que lo conseguiré.
Después de despedirme de mi mejor amiga, salgo de su casa y cuando llego a la mía, Sofía se despierta ligeramente para regalarme una sonrisa y volver a dormirse en mis brazos, igual que cuando era un bebé.
Al cabo de una semana la pastelería está lista para abrir sus puertas al público, estoy tan nerviosa que casi no puedo comer ni dormir. Los chicos han hecho un trabajo estupendo y al final el dinero ha llegado de sobra gracias a las buenas ideas de Tina y Mike. Han comprado muchas cosas por internet mucho más baratas de lo que a mí me habrían salido en los distribuidores habituales.
**********************************************************************
Y eso fue todo por el día de hoy nos leemos dentro de 3 dias o antes si algo increíble sucede.
Cuídense mucho y sean Felices.
P.D: Les agradecería mucho si me dejaras un comentario acerca del capitulo
P.D.2: Cada vez falta menos para que San aparezca
Como dije subiría 2 capítulos. y he aquí el segundo.
*************************************************************************
CAPÍTULO 6
Lo primero que hago al día siguiente es comprobar mi cuenta para ver el saldo y grito loca de contenta al ver que ya me han hecho el ingreso del seguro. ¡Fantástico! Una cosa menos. Mentalmente calculo lo que me va a quedar para invertir en el negocio tras pagar la extorsión y sonrío al comprobar que aunque me cueste un poco al principio, puedo volver a ponerla en marcha.
Mike y Tina me acompañan a elegir la maquinaria y todo el mobiliario de la pastelería, me dejo guiar por ellos, hacen un gran equipo y tienen unas ideas geniales, prácticas y además más baratas de lo que yo creía en un principio. Lo que yo decía, son una auténtica joya.
Tras asegurarme de que mi mejor amiga ha ido a recoger a Sofía, los chicos y yo vamos a una tienda de decoración de un amigo de Mike, el chico que nos atiende es muy eficiente, nos aconseja muy bien sobre cómo tendré que hacer las reparaciones e incluso se ofrece a ayudarme con lo que necesite.
Por la noche estoy agotada pero satisfecha. Mañana empezaremos a retirar todo lo del local y estoy emocionada por el cambio, asustada por todos los frentes que tengo abiertos al mismo tiempo y cabreada con mi ex por ponerme en esta situación.
Tardamos tres días en vaciar completamente el local, nos ha llevado mucho tiempo pese a los que éramos porque hemos aprovechado para quitar el papel pintado de las paredes y arrancar las baldosas del suelo ya que la mayoría estaban destrozadas.
Cuando dejo a mi preciosa hija en los brazos de Rachel tengo que hacer un esfuerzo por no echarme a llorar, hoy tengo que reunirme con el salvaje que me atacó a la salida de la guardería y estoy muerta de miedo, le he dado todos los datos a mi amiga, si me pasa algo tiene que ponerse en contacto con mis padres y ellos se harán cargo de Sofía, en cuanto al local, he modificado el testamento y les quedará a Mike y a Tina y tendrán que ingresar una parte de los beneficios en una cuenta a nombre de mi hija, lo he hecho todo con la ayuda de Quinn por supuesto.
— Buenos días putita — me dice al oído el mismo hombre que me atacó justo antes de que entre en la taberna.
— Mi nombre es Brittany — digo girándome.
— ¡Vaya! ¿Has encontrado el coraje?.
— ¿Quieres el dinero o no? No tengo tiempo para esto.
— Tranquila putita, no me pongas nervioso o puede que haga alguna tontería — dice enseñándome un arma que lleva escondida en el cinturón.
— Toma, acabemos ya con esto — le digo tendiéndole un abultado sobre.
— Buena chica — me sonríe y a duras penas consigo controlar las arcadas.
— Si me ibas a extorsionar, no tenías por qué destrozarme la pastelería, casi no consigo el dinero.
— No fue cosa mía muñeca, eso tendrás que agradecérselo a tu marido.
— Lo haré en cuanto le encuentre.
— Buena suerte con eso.
— Con esto estamos en paz ¿verdad? — pregunto con seguridad en la voz aunque tengo miedo y conozco la respuesta.
— Por supuesto — dice sonriendo de nuevo de esa forma tan repulsiva.
Me largo de allí como alma que lleva el diablo, subo a mi coche como si alguien me persiguiese y arranco quemando rueda. Estoy con la adrenalina a tope, todo mi cuerpo tiembla y creo que estoy a punto de empezar a sufrir convulsiones.
Conduzco como una loca por las calles de Madrid, necesito soltar la adrenalina y no soy nada aficionada al deporte por lo que decido bajar las ventanillas, subir la música y gritar todo lo alto que puedo, si no libero presión, creo bastante probable que me estalle la cabeza.
Veinte minutos más tarde entro en una cafetería del barrio de Aluche, ¡hasta Aluche he llegado! Alucinando estoy… pero mientras pido una tila doble le mando un mensaje a Rachel para informarla de que estoy sana y salva, al menos de momento.
Tres tilas dobles más tarde, consigo volver al coche, eso sí, aún me tiemblan las piernas y me cuesta respirar con normalidad, pero increíblemente consigo regresar a mi barrio sana y salva. Lo que es poco menos que un milagro dado mi estado de nervios.
Vuelvo a llamar a mi amiga para decirle que estoy bien pero que voy a ir a la pastelería a ayudar a los chicos con la pintura de las paredes porque estoy demasiado nerviosa como para estar con Sofía, me muero de ganas de abrazarla pero en mi estado es probable que incluso se me caiga de los brazos. Rachel me asegura una y otra vez que las dos lo están pasando genial en la oficina y que no me preocupe por nada.
Estoy encantada con mi equipo, me quedo maravillada al comprobar que ya han pintado toda la zona de la cafetería de un precioso color malva claro y Mike ya está preparando el color para la zona de la pastelería en un precioso color fresa que pondrá en la pared del fondo. Es tan bueno el trabajo que han hecho que casi me siento a salvo del salvaje con el que he compartido unos segundos.
No es que yo sea muy fan de los espacios multicolor, pero en la simulación que nos hicieron en la tienda quedaba realmente bien, todos los muebles son de color blanco y los suelos ya no serán de baldosa, será un linóleo de color madera clara con las vetas y todo. El ambiente será cálido, coqueto y ya no parecerá una simple pastelería, sino un local donde disfrutar de deliciosas bebidas e increíbles dulces que las acompañarán.
La joya de la corona será la cocina. El suelo será también de linóleo, además de ser lo más barato, es muy fácil de limpiar y tremendamente resistente, las paredes simularán paneles de piedra en tonos tierra, tendremos un horno para pan, dos grandes hornos para pastelería, una amasadora grande, un fermentador, un gran refrigerador, un par de robots de cocina, una gran isla central donde trabajar en los encargos y demás cosas necesarias. Será un sueño de cocina. Las encimeras serán metálicas, pero los muebles serán de color verde lima, el color favorito de Mike.
Suspiro profundamente mientras me sujeto el pelo en un moño alto. Voy a ponerme manos a la obra y ayudar a mis chicos, si ellos han renunciado a sus vacaciones para echarme una mano con la remodelación del negocio, yo también puedo remangarme.
— Mira jefa — Mike me saca de mi aletargamiento — tengo una sorpresa para ti,
Tina y yo hemos pensado que esto te gustaría, será vuestro rincón.
Me lleva hasta un rincón al fondo de la cafetería donde han puesto un vinilo de un cerezo japonés en flor, una butaca de color crema y otra igual más pequeña con una pequeña estantería, una mesita de color malva y justo debajo de las ramas del cerezo en letras negras mate pone: “El rincón de Sofía” en la misma tipografía que yo usaba en los carteles con las recomendaciones.
No puedo evitar emocionarme y en un impulso abrazo fuertemente a Mike mientras intento no echarme a llorar como una niña pequeña.
— Muchas gracias Mike, eres un encanto — le susurró al oído.
— Te lo mereces jefa, vamos a hacer de este local nuestro segundo hogar — me dice con ánimo.
Aún no puedo desvelar mis planes, pero cada día estoy más segura de la decisión que he tomado. Pese a todo lo que estoy viviendo últimamente, soy afortunada, he encontrado a un grupo de personas que son buenas y se han convertido en una parte muy importante de mi vida.
Al acabar el día voy a recoger a Sofía a casa de Rachel. Mi niña está profundamente dormida, al parecer Quinn se la llevó al parque y ha corrido toda la tarde. Mi amiga es la mejor, ya le ha dado la cena y la ha duchado, la cojo con cuidado y durante un segundo me deleito en su carita, es la dulzura personificada, sólo con mirarla sé que no habrá nada que no sea capaz de hacer por ella. Voy a salir de todos los pozos en los que estoy metida, no sé cómo voy a hacerlo, pero tengo claro que lo conseguiré.
Después de despedirme de mi mejor amiga, salgo de su casa y cuando llego a la mía, Sofía se despierta ligeramente para regalarme una sonrisa y volver a dormirse en mis brazos, igual que cuando era un bebé.
Al cabo de una semana la pastelería está lista para abrir sus puertas al público, estoy tan nerviosa que casi no puedo comer ni dormir. Los chicos han hecho un trabajo estupendo y al final el dinero ha llegado de sobra gracias a las buenas ideas de Tina y Mike. Han comprado muchas cosas por internet mucho más baratas de lo que a mí me habrían salido en los distribuidores habituales.
**********************************************************************
Y eso fue todo por el día de hoy nos leemos dentro de 3 dias o antes si algo increíble sucede.
Cuídense mucho y sean Felices.
P.D: Les agradecería mucho si me dejaras un comentario acerca del capitulo
P.D.2: Cada vez falta menos para que San aparezca
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
¡¡¡¡Dios!!!!! Al menos le sobro algo de dinero, como es la hija de britt y de puck, si nos podrías dar una foto de Sofía.
Ya quiero que aparezca santana
Y donde estará ese NOAH (COBARDE)
Ya quiero que aparezca santana
Y donde estará ese NOAH (COBARDE)
JanethValenciaaf********- - Mensajes : 659
Fecha de inscripción : 20/01/2015
Edad : 25
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
holap,...
dime que algo divino pasa y cae un rayo y fulmina al bastardo????
me gusto lo que hicieron mike y tina para sofi!!! y en general para arreglar todo,..
espero con ansias la aparición de san!!!
nos vemos!!!
dime que algo divino pasa y cae un rayo y fulmina al bastardo????
me gusto lo que hicieron mike y tina para sofi!!! y en general para arreglar todo,..
espero con ansias la aparición de san!!!
nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
JanethValenciaaf escribió:¡¡¡¡Dios!!!!! Al menos le sobro algo de dinero, como es la hija de britt y de puck, si nos podrías dar una foto de Sofía.
Ya quiero que aparezca santana
Y donde estará ese NOAH (COBARDE)
Si, pensé que no le quedaría nada para restablecer su negocio
Te llevaras una sorpresa cuando salga
Es lo que todos se preguntan y es más que simple un cobarde
P.D: Más o menos así es Sofía
3:) escribió:holap,...
dime que algo divino pasa y cae un rayo y fulmina al bastardo????
me gusto lo que hicieron mike y tina para sofi!!! y en general para arreglar todo,..
espero con ansias la aparición de san!!!
nos vemos!!!
Hola
Tal vez le pase algo pero no sé si lo creas divino
A mí también son muy buenos empleados y amigos con Britt,
Yo también tranquila sale más pronto de lo que crees
Nos vemos
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Nueva DIA, nuevo capítulo.
Espero que les guste, porque se vienen cosas interesantes a partir de aquí.
*********************************************************
CAPÍTULO 7
El día de la inauguración me levanto con las fuerzas renovadas, han pasado diez días desde que pagué al extorsionista y no he vuelto a saber de él, sé que no debería, pero no puedo dejar de fantasear con la idea de que jamás volveré a verle. Aunque inevitablemente me siento alerta ante un más que posible nuevo ataque por su parte.
Mike y yo nos hemos esmerado mucho en los pasteles que se van a dar en la degustación, tenemos que empezar con fuerza, con todo lo que ha pasado hemos perdido casi tres semanas y eso se nota en la cuenta de la empresa. Aunque todos mis chicos me han dejado bien claro que si no puedo pagarles un mes o dos no supone ningún problema. Tengo un equipo maravilloso.
Sobre todas las mesas de la cafetería están dispuestas unas bandejas con un surtido de tartas, galletas y mini cupcakes y todo el mundo parece disfrutar de la degustación. Los niños parecen encantados con la zona infantil, una idea de Rachel y que queda perfectamente. En el rincón contrario al que se encuentran las butacas, hemos pintado un trozo de pared con pizarra donde los críos pueden pintar con tizas de colores y por las risas que llenan el local, deduzco que ha sido todo un acierto. Sofía está encantada, creo que le gusta absolutamente todo.
Cuando estamos a punto de cerrar, el inspector Julio López hace acto de presencia, al principio le recibo con una gran sonrisa y una bandeja de pasteles, pero cuando la cara de su compañero se contrae, me doy cuenta de que no ha sido una buena idea.
— Tenemos que hablar en privado — me dice secamente.
Le hago una seña a Rachel que avisa a Quinn para que me acompañe a la cocina donde entro escoltada por el inspector y su compañero. Estoy tan nerviosa que me tiemblan las piernas. Sólo espero que no se hayan enterado de que pagué veinte mil euros a un delincuente y de que no lo denuncié, no estoy segura de sí es ilegal del todo, pero prefiero no averiguarlo.
— Usted dirá inspector — le digo intentando controlar mi nerviosismo.
— Hemos encontrado a su ex marido — me dice como si yo supiese qué significa eso.
— ¿Y? — pregunto confusa.
— Cómo que ¿y? le hemos encontrado muerto — sus palabras me atraviesan como cuchillos.
— ¿Muerto? ¿Cómo que muerto? — consigo balbucear después de unos segundos.
— Semi enterrado en un descampado, le habían sacado los ojos cuando aún estaba vivo y le cortaron las manos y los genitales, un ataque brutal.
— ¡Oh Dios mío! — las piernas me flaquean y tengo que agarrarme a la encimera para no caer.
— Agente, me parece que se está pasando — intercede Quinn.
— Abogada, es nuestra principal sospechosa y dadas las circunstancias creo que estoy siendo bastante benévolo.
— ¿Sospechosa? — casi grito — ¿Cómo que sospechosa? — miro a todos atónita — ¿de verdad cree que yo le he matado?
— Bueno, sospechamos que su ex marido fue el responsable del ataque a su negocio, creemos que buscaba dinero ya que debía una gran suma a un capo muy peligroso… así que dígame, Brittany… ¿le pilló usted antes que el cabrón para el que trabajaba?
— Esta conversación se termina aquí — interviene Quinn — Britt no respondas a nada. Inspector, si quiere interrogar a mi cliente debería haberla informado previamente.
— Podemos hacer esto aquí o en comisaría — dice mirándome fijamente a los ojos.
— Mi cliente no ha matado a nadie y si tuvierais pruebas de lo contrario, ya estaría detenida — afirma rotundamente Quinn y yo le miro muerta de miedo.
— Es cuestión de tiempo abogada, es cuestión de tiempo — dice con una sonrisa petulante.
— Perfecto entonces. El tiempo exonerará a mi cliente. Y ahora agentes, disfruten de los pasteles, están buenísimos, vámonos Brittany.
Quinn me coge del brazo y me saca de la cocina casi a rastras porque yo estoy en estado de shock, salgo a la cafetería de forma autómata, Rachel se va a acercar a mí, pero Quinn le hace una seña para que no alarme a los clientes que aún quedan tomando algo.
Sofía me ve y sonríe y Rach me la trae para que la coja, la abrazo fuerte y aspiro su olor, consigo tranquilizarme lo suficiente como para empezar a repasar mentalmente la conversación que he tenido con el inspector López, no me cabe duda de que ese hombre me odia, no entiendo el motivo, pero me odia, ha decidido que con pruebas o sin ellas, soy culpable de la muerte de Noah.
Y al pensar en mi ex marido suspiro mientras observo como los inspectores salen de mi negocio tras mirarme con desconfianza.
Noah ha muerto, bueno, más bien lo han matado. E inmediatamente pienso en el extorsionista y en la malvada sonrisa que me dedicó cuando le dije que estaba buscando a Puck. Sabía que algo le pasaba a mi ex y no puedo evitar sentirme culpable, sabía que algo le ocurría y no sólo no le ayudé sino que además le di la espalda, espero que esté donde esté, pueda perdonarme algún día.
Cuando meto a Sofía en la cama, Rachel y Quinn me esperan en el salón con la preocupación claramente reflejada en sus rostros. Quinn me dice con bonitas palabras y frases irónicas que no le ha hecho gracia enterarse de mi reunión secreta con el extorsionista, cuando le pedí que me arreglase los papales para el testamento no lo entendió muy bien y creo que acaba de hacerlo. Rachel y yo intentamos explicarle que fue lo único que se nos ocurrió y que nos pareció la opción más segura, sobre todo para Sofía.
Los carnavales llegan y en la pastelería organizamos un concurso de disfraces infantiles. La fiesta es un éxito rotundo, las ventas se han disparado gracias a mi idea de hacer piruletas de chocolate de varios colores. Y de nuevo cuando vamos a cerrar, el inspector López hace acto de presencia.
— ¡Pero bueno! ¿otra vez aquí? Usted se ha propuesto condenarme a toda costa ¿eh? — le digo claramente frustrada.
— Cuidado con esa boca, tenemos que hacerle unas preguntas y esta vez será en comisaría, por cierto, será un interrogatorio y debería llamar a su abogado.
— ¡Esto es increíble! ¡Que yo no he matado a nadie! — me giro buscando a mi mano derecha — Mike, llama a Rachel para que venga a buscar a Sofía y llama también a
Quinn anda… y dile que vaya a comisaría en cuanto pueda.
— ¿Pero a qué viene este acoso? — dice Tina cabreada — mire inspector.
— ¡Tina! — interrumpo antes de que diga algo de lo que se arrepienta — déjalo estar anda… localizar a Quinn y contarle lo que ha pasado.
Me meto en el coche y agradezco que sea de noche y que no se vea un alma en la calle, así no podrán ver lo avergonzada que estoy, esto es ridículo, acabo de meterme en un coche de policía disfrazada de la muñeca Tarta de Fresa, desde luego es el atuendo perfecto para que sea totalmente imposible que pase desapercibida.
Una vez que llegamos a comisaría, nos paramos frente al mostrador y un agente informa al inspector López de que tiene una visita esperándole. Me giro a la vez que él para ver de quien se trata y casi me atraganto. ¡Madre del amor hermoso! ¿Pero de donde sale esta mujer?
Increíble, llevo más de un año sin fijarme en los hombres o mujeres, pese a todos los intentos de Rachel para liarme con alguno de sus mejores clientes y en el peor momento de mi vida voy y me cruzo con la mujer de mis sueños.
Le miro disimuladamente e intento por todos los medios no ponerme del color del ridículo vestido que llevo. Decir que es una mujer muy atractiva es quedarse corta, es guapísima, mediana estatura, pelo oscuro y tez morena, ojos cafés casi negros y perfil latino. Ufff llevo tanto tiempo sin sexo que creo que podría tener un orgasmo sólo con que me dedicara una sonrisa, imagino que tendrá una sonrisa sexy y provocadora de esas que hacen que a los hombres e incluso mujeres nos tiemblen las piernas.
Decido girarme y darle la espalda porque creo que me ha pillado mirándole con cara de tonta.
Espero pacientemente unos diez minutos hasta que el inspector López aparece a mi lado y casi me arrastra hasta una sala cutre con las paredes blancas, suelo gris, una mesa y dos sillas. Me siento en una de las sillas y el policía se sienta en la otra que está enfrente, acabo de fijarme en que lleva una carpeta en las manos.
— Bien, ¿cuánto tardará su abogado? — me dice con una sonrisa maliciosa.
— Sabe una cosa inspector López… no me gusta nada su tono. ¿Por qué se ha empeñado en que soy culpable de algo?.
— Yo no me he empeñado en nada Brittany, pero sí que es culpable de algo y ahora tenemos las pruebas.
Me quedo congelada. Observo al inspector que tiene una expresión de satisfacción en la cara que me provoca nauseas, ¿cómo que tiene pruebas? ¿Pruebas de qué? mi mente empieza a trabajar a marchas forzadas, no puede tener pruebas de que yo maté a Noah porque yo no le maté, así que eso no es posible ¿no? ¿O sí? He visto muchas series policíacas y está eso de inculpar a alguien. Y en cuanto esa idea cruza mi cabeza empiezo a temblar como una vara verde. ¿Y si el asesino de Noah quiere que yo cargue con la culpa? Voy a perder a Sofía.
Intento desesperadamente no llorar, estoy convencida de que eso me haría parecer más culpable de lo que ya parezco, pero estar en esta sala con el inspector tranquilamente sentado enfrente y mirándome con esa cara de ¡te pillé!, está a punto de derribar todas mis defensas.
Y justo en el momento en el que estoy a punto de iniciar la confesión de que pagué al extorsionista, Quinn entra en la sala con cara de mala leche.
— ¿Se puede saber a qué juega agente? — le espeta al inspector que ni se inmuta.
— Tranquilícese abogada. Llevamos esperándole un buen rato como para que entre aquí dando voces. He traído a su cliente para interrogarla y ahora que por fin se ha decidido usted a aparecer, podemos empezar. Bien — continúa sin permitir que Quinn meta baza — como le dije la última vez que nos vimos, su ex marido apareció muerto y había sido salvajemente atacado, nos ha costado un poco, eso no se lo voy a negar, pero por fin hemos encontrado el arma homicida. Noah Puckerman fue asesinado con varias puñaladas en el pecho después de que alguien le sacase los ojos de las cuencas y le amputase las manos.
— ¡Por Dios! ¿le hicieron eso estando vivo? — pregunto a punto de vomitar.
— Ya conoce la respuesta a esa pregunta Brittany — me sonríe y yo me voy a echar a llorar — como le decía hemos encontrado el arma homicida. Se trata de un cuchillo muy especial, por eso una vez localizado nos ha sido extremadamente fácil relacionarlo con el autor del crimen.
El compañero del inspector López entra en la sala y deja sobre la mesa algo metido en una bolsa de plástico transparente con una etiqueta escrita a mano. Por un momento creo que estoy dentro de un capítulo de CSI, esto no me puede estar pasando a mí.
Miro incrédula al inspector que me está poniendo muy nerviosa con esa actitud tan prepotente que tiene ahora mismo.
— ¿Se supone que mi cliente tiene que reconocer ese cuchillo? — dice Quinn, lo que me hace reaccionar y mirar lo que hay dentro de la bolsa de plástico.
— ¡Es mi cuchillo! — digo antes de que Quinn pueda detenerme.
— ¡Ni una palabra más Brittany! — me grita mi amiga claramente cabreada, acabo de darme cuenta de lo que he hecho.
— Da igual lo que diga o no diga abogada. Tenemos una foto en la que se ve a su cliente posando sonriente con el cuchillo en la mano con actitud victoriosa, además, el hecho de que el arma homicida lleve grabado el nombre de su cliente también ayuda.
— Le recuerdo agente, que a mi cliente le entraron a robar en su negocio que es donde guardaba el cuchillo y que se denunció su desaparición a la policía y al perito del seguro.
— Cierto. Pero verá… el problema es que ese supuesto robo ocurrió el ocho de enero, unos días antes de la fecha aproximada de la muerte, según el forense… ¿ves por dónde voy? — me dice con una sonrisa lobuna.
— Un momento… ¿fecha aproximada? — interviene Quinn — eso significa que Noah pudo morir el ocho, el nueve o incluso el quince de enero, inspector — miro esperanzada a mi amiga que continua diciendo — bien, le agradecemos que nos haya puesto al día sobre cómo va el caso, pero todo lo que tiene es circunstancial y si mi cliente no está detenida, nos iremos ahora mismo, es tarde y Brittany es madre soltera, su hija la espera.
— Verá Brittany… — dice el inspector ignorando a Quinn — yo creo que se cansó de darle dinero a su ex marido, la estaba sangrando… hemos investigado sus cuentas y le dio grandes sumas en varias ocasiones… volvió a pedirle dinero, usted se negó, él le destrozó el negocio, le pilló y lo mató encubriendo las pruebas, o quizá le mató primero y luego destrozó su negocio para cobrar el dinero del seguro.
— Ni una palabra Brittany… — me advierte Quinn — bonita historia ¿tiene pruebas de ello? — se retan con la mirada y mi amiga sonríe — en ese caso, nos vamos, que tenga dulces sueños inspector.
Antes de que pueda decir nada, Quinn me coge de la mano y tira de mí con fuerza, supongo que para hacerme reaccionar, ya que parece que estoy paralizada. Consigo ponerme de pie y sigo con la cabeza baja a mi abogada mientras la gente me observa y hace comentarios de todo tipo sobre mi disfraz. ¡Dios! ¡Que se abra la tierra y me trague ahora mismo por favor!
*********************************************************
Y hasta aquí con el capítulo, espero que les haya gusta ya saben que si les gusto, tienen el tiempo y gustan regalarme su sexy comentario se los agradecería mucho ES GRATIS.
Y a quien será la extraña mujer en la comisaría de la cual Britt tuvo pensamientos impuros???
Miles de gracias por leer, y recuerden ser felices
LOS AMO Y CUÍDENSE MUCHO.
Espero que les guste, porque se vienen cosas interesantes a partir de aquí.
*********************************************************
CAPÍTULO 7
El día de la inauguración me levanto con las fuerzas renovadas, han pasado diez días desde que pagué al extorsionista y no he vuelto a saber de él, sé que no debería, pero no puedo dejar de fantasear con la idea de que jamás volveré a verle. Aunque inevitablemente me siento alerta ante un más que posible nuevo ataque por su parte.
Mike y yo nos hemos esmerado mucho en los pasteles que se van a dar en la degustación, tenemos que empezar con fuerza, con todo lo que ha pasado hemos perdido casi tres semanas y eso se nota en la cuenta de la empresa. Aunque todos mis chicos me han dejado bien claro que si no puedo pagarles un mes o dos no supone ningún problema. Tengo un equipo maravilloso.
Sobre todas las mesas de la cafetería están dispuestas unas bandejas con un surtido de tartas, galletas y mini cupcakes y todo el mundo parece disfrutar de la degustación. Los niños parecen encantados con la zona infantil, una idea de Rachel y que queda perfectamente. En el rincón contrario al que se encuentran las butacas, hemos pintado un trozo de pared con pizarra donde los críos pueden pintar con tizas de colores y por las risas que llenan el local, deduzco que ha sido todo un acierto. Sofía está encantada, creo que le gusta absolutamente todo.
Cuando estamos a punto de cerrar, el inspector Julio López hace acto de presencia, al principio le recibo con una gran sonrisa y una bandeja de pasteles, pero cuando la cara de su compañero se contrae, me doy cuenta de que no ha sido una buena idea.
— Tenemos que hablar en privado — me dice secamente.
Le hago una seña a Rachel que avisa a Quinn para que me acompañe a la cocina donde entro escoltada por el inspector y su compañero. Estoy tan nerviosa que me tiemblan las piernas. Sólo espero que no se hayan enterado de que pagué veinte mil euros a un delincuente y de que no lo denuncié, no estoy segura de sí es ilegal del todo, pero prefiero no averiguarlo.
— Usted dirá inspector — le digo intentando controlar mi nerviosismo.
— Hemos encontrado a su ex marido — me dice como si yo supiese qué significa eso.
— ¿Y? — pregunto confusa.
— Cómo que ¿y? le hemos encontrado muerto — sus palabras me atraviesan como cuchillos.
— ¿Muerto? ¿Cómo que muerto? — consigo balbucear después de unos segundos.
— Semi enterrado en un descampado, le habían sacado los ojos cuando aún estaba vivo y le cortaron las manos y los genitales, un ataque brutal.
— ¡Oh Dios mío! — las piernas me flaquean y tengo que agarrarme a la encimera para no caer.
— Agente, me parece que se está pasando — intercede Quinn.
— Abogada, es nuestra principal sospechosa y dadas las circunstancias creo que estoy siendo bastante benévolo.
— ¿Sospechosa? — casi grito — ¿Cómo que sospechosa? — miro a todos atónita — ¿de verdad cree que yo le he matado?
— Bueno, sospechamos que su ex marido fue el responsable del ataque a su negocio, creemos que buscaba dinero ya que debía una gran suma a un capo muy peligroso… así que dígame, Brittany… ¿le pilló usted antes que el cabrón para el que trabajaba?
— Esta conversación se termina aquí — interviene Quinn — Britt no respondas a nada. Inspector, si quiere interrogar a mi cliente debería haberla informado previamente.
— Podemos hacer esto aquí o en comisaría — dice mirándome fijamente a los ojos.
— Mi cliente no ha matado a nadie y si tuvierais pruebas de lo contrario, ya estaría detenida — afirma rotundamente Quinn y yo le miro muerta de miedo.
— Es cuestión de tiempo abogada, es cuestión de tiempo — dice con una sonrisa petulante.
— Perfecto entonces. El tiempo exonerará a mi cliente. Y ahora agentes, disfruten de los pasteles, están buenísimos, vámonos Brittany.
Quinn me coge del brazo y me saca de la cocina casi a rastras porque yo estoy en estado de shock, salgo a la cafetería de forma autómata, Rachel se va a acercar a mí, pero Quinn le hace una seña para que no alarme a los clientes que aún quedan tomando algo.
Sofía me ve y sonríe y Rach me la trae para que la coja, la abrazo fuerte y aspiro su olor, consigo tranquilizarme lo suficiente como para empezar a repasar mentalmente la conversación que he tenido con el inspector López, no me cabe duda de que ese hombre me odia, no entiendo el motivo, pero me odia, ha decidido que con pruebas o sin ellas, soy culpable de la muerte de Noah.
Y al pensar en mi ex marido suspiro mientras observo como los inspectores salen de mi negocio tras mirarme con desconfianza.
Noah ha muerto, bueno, más bien lo han matado. E inmediatamente pienso en el extorsionista y en la malvada sonrisa que me dedicó cuando le dije que estaba buscando a Puck. Sabía que algo le pasaba a mi ex y no puedo evitar sentirme culpable, sabía que algo le ocurría y no sólo no le ayudé sino que además le di la espalda, espero que esté donde esté, pueda perdonarme algún día.
Cuando meto a Sofía en la cama, Rachel y Quinn me esperan en el salón con la preocupación claramente reflejada en sus rostros. Quinn me dice con bonitas palabras y frases irónicas que no le ha hecho gracia enterarse de mi reunión secreta con el extorsionista, cuando le pedí que me arreglase los papales para el testamento no lo entendió muy bien y creo que acaba de hacerlo. Rachel y yo intentamos explicarle que fue lo único que se nos ocurrió y que nos pareció la opción más segura, sobre todo para Sofía.
Los carnavales llegan y en la pastelería organizamos un concurso de disfraces infantiles. La fiesta es un éxito rotundo, las ventas se han disparado gracias a mi idea de hacer piruletas de chocolate de varios colores. Y de nuevo cuando vamos a cerrar, el inspector López hace acto de presencia.
— ¡Pero bueno! ¿otra vez aquí? Usted se ha propuesto condenarme a toda costa ¿eh? — le digo claramente frustrada.
— Cuidado con esa boca, tenemos que hacerle unas preguntas y esta vez será en comisaría, por cierto, será un interrogatorio y debería llamar a su abogado.
— ¡Esto es increíble! ¡Que yo no he matado a nadie! — me giro buscando a mi mano derecha — Mike, llama a Rachel para que venga a buscar a Sofía y llama también a
Quinn anda… y dile que vaya a comisaría en cuanto pueda.
— ¿Pero a qué viene este acoso? — dice Tina cabreada — mire inspector.
— ¡Tina! — interrumpo antes de que diga algo de lo que se arrepienta — déjalo estar anda… localizar a Quinn y contarle lo que ha pasado.
Me meto en el coche y agradezco que sea de noche y que no se vea un alma en la calle, así no podrán ver lo avergonzada que estoy, esto es ridículo, acabo de meterme en un coche de policía disfrazada de la muñeca Tarta de Fresa, desde luego es el atuendo perfecto para que sea totalmente imposible que pase desapercibida.
Una vez que llegamos a comisaría, nos paramos frente al mostrador y un agente informa al inspector López de que tiene una visita esperándole. Me giro a la vez que él para ver de quien se trata y casi me atraganto. ¡Madre del amor hermoso! ¿Pero de donde sale esta mujer?
Increíble, llevo más de un año sin fijarme en los hombres o mujeres, pese a todos los intentos de Rachel para liarme con alguno de sus mejores clientes y en el peor momento de mi vida voy y me cruzo con la mujer de mis sueños.
Le miro disimuladamente e intento por todos los medios no ponerme del color del ridículo vestido que llevo. Decir que es una mujer muy atractiva es quedarse corta, es guapísima, mediana estatura, pelo oscuro y tez morena, ojos cafés casi negros y perfil latino. Ufff llevo tanto tiempo sin sexo que creo que podría tener un orgasmo sólo con que me dedicara una sonrisa, imagino que tendrá una sonrisa sexy y provocadora de esas que hacen que a los hombres e incluso mujeres nos tiemblen las piernas.
Decido girarme y darle la espalda porque creo que me ha pillado mirándole con cara de tonta.
Espero pacientemente unos diez minutos hasta que el inspector López aparece a mi lado y casi me arrastra hasta una sala cutre con las paredes blancas, suelo gris, una mesa y dos sillas. Me siento en una de las sillas y el policía se sienta en la otra que está enfrente, acabo de fijarme en que lleva una carpeta en las manos.
— Bien, ¿cuánto tardará su abogado? — me dice con una sonrisa maliciosa.
— Sabe una cosa inspector López… no me gusta nada su tono. ¿Por qué se ha empeñado en que soy culpable de algo?.
— Yo no me he empeñado en nada Brittany, pero sí que es culpable de algo y ahora tenemos las pruebas.
Me quedo congelada. Observo al inspector que tiene una expresión de satisfacción en la cara que me provoca nauseas, ¿cómo que tiene pruebas? ¿Pruebas de qué? mi mente empieza a trabajar a marchas forzadas, no puede tener pruebas de que yo maté a Noah porque yo no le maté, así que eso no es posible ¿no? ¿O sí? He visto muchas series policíacas y está eso de inculpar a alguien. Y en cuanto esa idea cruza mi cabeza empiezo a temblar como una vara verde. ¿Y si el asesino de Noah quiere que yo cargue con la culpa? Voy a perder a Sofía.
Intento desesperadamente no llorar, estoy convencida de que eso me haría parecer más culpable de lo que ya parezco, pero estar en esta sala con el inspector tranquilamente sentado enfrente y mirándome con esa cara de ¡te pillé!, está a punto de derribar todas mis defensas.
Y justo en el momento en el que estoy a punto de iniciar la confesión de que pagué al extorsionista, Quinn entra en la sala con cara de mala leche.
— ¿Se puede saber a qué juega agente? — le espeta al inspector que ni se inmuta.
— Tranquilícese abogada. Llevamos esperándole un buen rato como para que entre aquí dando voces. He traído a su cliente para interrogarla y ahora que por fin se ha decidido usted a aparecer, podemos empezar. Bien — continúa sin permitir que Quinn meta baza — como le dije la última vez que nos vimos, su ex marido apareció muerto y había sido salvajemente atacado, nos ha costado un poco, eso no se lo voy a negar, pero por fin hemos encontrado el arma homicida. Noah Puckerman fue asesinado con varias puñaladas en el pecho después de que alguien le sacase los ojos de las cuencas y le amputase las manos.
— ¡Por Dios! ¿le hicieron eso estando vivo? — pregunto a punto de vomitar.
— Ya conoce la respuesta a esa pregunta Brittany — me sonríe y yo me voy a echar a llorar — como le decía hemos encontrado el arma homicida. Se trata de un cuchillo muy especial, por eso una vez localizado nos ha sido extremadamente fácil relacionarlo con el autor del crimen.
El compañero del inspector López entra en la sala y deja sobre la mesa algo metido en una bolsa de plástico transparente con una etiqueta escrita a mano. Por un momento creo que estoy dentro de un capítulo de CSI, esto no me puede estar pasando a mí.
Miro incrédula al inspector que me está poniendo muy nerviosa con esa actitud tan prepotente que tiene ahora mismo.
— ¿Se supone que mi cliente tiene que reconocer ese cuchillo? — dice Quinn, lo que me hace reaccionar y mirar lo que hay dentro de la bolsa de plástico.
— ¡Es mi cuchillo! — digo antes de que Quinn pueda detenerme.
— ¡Ni una palabra más Brittany! — me grita mi amiga claramente cabreada, acabo de darme cuenta de lo que he hecho.
— Da igual lo que diga o no diga abogada. Tenemos una foto en la que se ve a su cliente posando sonriente con el cuchillo en la mano con actitud victoriosa, además, el hecho de que el arma homicida lleve grabado el nombre de su cliente también ayuda.
— Le recuerdo agente, que a mi cliente le entraron a robar en su negocio que es donde guardaba el cuchillo y que se denunció su desaparición a la policía y al perito del seguro.
— Cierto. Pero verá… el problema es que ese supuesto robo ocurrió el ocho de enero, unos días antes de la fecha aproximada de la muerte, según el forense… ¿ves por dónde voy? — me dice con una sonrisa lobuna.
— Un momento… ¿fecha aproximada? — interviene Quinn — eso significa que Noah pudo morir el ocho, el nueve o incluso el quince de enero, inspector — miro esperanzada a mi amiga que continua diciendo — bien, le agradecemos que nos haya puesto al día sobre cómo va el caso, pero todo lo que tiene es circunstancial y si mi cliente no está detenida, nos iremos ahora mismo, es tarde y Brittany es madre soltera, su hija la espera.
— Verá Brittany… — dice el inspector ignorando a Quinn — yo creo que se cansó de darle dinero a su ex marido, la estaba sangrando… hemos investigado sus cuentas y le dio grandes sumas en varias ocasiones… volvió a pedirle dinero, usted se negó, él le destrozó el negocio, le pilló y lo mató encubriendo las pruebas, o quizá le mató primero y luego destrozó su negocio para cobrar el dinero del seguro.
— Ni una palabra Brittany… — me advierte Quinn — bonita historia ¿tiene pruebas de ello? — se retan con la mirada y mi amiga sonríe — en ese caso, nos vamos, que tenga dulces sueños inspector.
Antes de que pueda decir nada, Quinn me coge de la mano y tira de mí con fuerza, supongo que para hacerme reaccionar, ya que parece que estoy paralizada. Consigo ponerme de pie y sigo con la cabeza baja a mi abogada mientras la gente me observa y hace comentarios de todo tipo sobre mi disfraz. ¡Dios! ¡Que se abra la tierra y me trague ahora mismo por favor!
*********************************************************
Y hasta aquí con el capítulo, espero que les haya gusta ya saben que si les gusto, tienen el tiempo y gustan regalarme su sexy comentario se los agradecería mucho ES GRATIS.
Y a quien será la extraña mujer en la comisaría de la cual Britt tuvo pensamientos impuros???
Miles de gracias por leer, y recuerden ser felices
LOS AMO Y CUÍDENSE MUCHO.
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Esa extraña mujer era SANTANA!!!!!!!!!!
AHORA ODIO A ESE INSPECTOR LOPEZ
ACTUALIZA PRONTO!!!!!!
AHORA ODIO A ESE INSPECTOR LOPEZ
ACTUALIZA PRONTO!!!!!!
JanethValenciaaf********- - Mensajes : 659
Fecha de inscripción : 20/01/2015
Edad : 25
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
holap,...
neta el suegro se esta pasando,...
ammm esto va a sonar macabro,... pero me gusto que muriera punk, neta que lo hicieron bien jajajaj
y dime quien no tendría un orgasmo de solo ver a san en frente????
nos vemos!!!
neta el suegro se esta pasando,...
ammm esto va a sonar macabro,... pero me gusto que muriera punk, neta que lo hicieron bien jajajaj
y dime quien no tendría un orgasmo de solo ver a san en frente????
nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
JanethValenciaaf escribió:Esa extraña mujer era SANTANA!!!!!!!!!!
AHORA ODIO A ESE INSPECTOR LOPEZ
ACTUALIZA PRONTO!!!!!!
Tal vez, ya veremos quién era
Yo también, no sé cuántas veces se lo tienen que decir BRITT NO MATO A NOAH
Aquí estoy. Espero que no hayas esperado mucho
3:) escribió:holap,...
neta el suegro se esta pasando,...
ammm esto va a sonar macabro,... pero me gusto que muriera punk, neta que lo hicieron bien jajajaj
y dime quien no tendría un orgasmo de solo ver a san en frente????
nos vemos!!!
Holaaaa
Jajajajajaja “suegro” xD sii, ya me cae un poco mal.
Jajajajaja la verdad si suena macabro...
Eso es difícil, tal vez un ciego no se
Nos vemos
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Hola chicas/os aquí otro capítulo de la historia espero que les guste
****************************************************
CAPÍTULO 8
Durante el trayecto hasta mi casa, Rachel me informa de que Sofía ya está dormida y que es mejor que pase la noche con ella, no me hace mucha gracia la idea, pero reconozco que tiene razón.
Yo estoy demasiado nerviosa, dolida y triste como para cuidar correctamente de mi hija.
Hacemos el viaje en silencio y cuando Quinn para delante de mi portal le agradezco su ayuda y me bajo del coche mientras las lágrimas empiezan a caer sin control.
Una vez en mi casa, saco una caja de la parte alta del armario. Es donde decidí guardar todos los recuerdos que tenía de Noah, no sé por qué motivo guardé las fotos y demás, creo que en el fondo lo hice para enseñarle a Sofía quién era su padre cuando mi pequeña estuviese preparada para ello.
Me siento en el sofá con una gran copa de vino blanco y empiezo a mirar las fotografías.
Parecíamos felices. La primera que veo es la que nos hicimos el último día de instituto, en un parque infantil que había cerca, yo me lancé por el tobogán y Noah se lazó detrás de mí, los dos caímos en la arena y nos partimos de la risa, fue el día que me besó por primera vez.
Sigo mirando dentro de la caja y veo la alianza de boda. La sostengo en la mano y parece que pesa una tonelada. Durante unos segundos la observo detenidamente mientras recuerdo el día de nuestra boda. Fue un bonito día, una ceremonia muy íntima donde sólo estaban mis padres, mi mejor amiga Rachel, un par de primos y tres de mis tíos. Noah no tenía familia y no quiso invitar a ningún amigo. Éramos quince personas, más que suficiente para una boda por lo civil y una comida en un bar del barrio. No tengo muchas fotos de aquel día y las pocas que tengo parece que no son reales.
Al mirarlas siento que esa que se ve en las imágenes no soy yo. Han pasado algo más de cinco años desde que se hicieron esas fotografías y mi vida ha cambiado radicalmente. En cinco años me he casado, me he divorciado, he tenido una hija y he conseguido que mi negocio funcionase, también he sufrido acoso sexual por parte de un delincuente que me ha extorsionado, han asesinado a Noah y al parecer el inspector del caso ha decidido que yo soy la culpable. Durante horas miro el contenido de la caja mientras bebo vino, lloro, me seco las lágrimas y vuelvo a empezar.
Cuando me despierto, tengo un terrible dolor de cabeza. No estoy acostumbrada a beber vino y me temo que no ha sido una buena idea terminarme una botella entera sin nada en el estómago.
Me arrastro hasta la ducha y cuando parece que el suelo ha dejado de girar llamo a Rach para saber cómo está mi preciosa hija, mi amiga me informa de que cada día está más enamorada de ella y que cualquier día no me la devuelve. No me extraña lo más mínimo, Sofía es una niña muy buena y cariñosa.
Quedo en ir a recoger yo a la niña a la guardería al mediodía. Tengo que pasar por la pastelería para ponerme al día con los chicos y explicarles lo que ocurrió la noche anterior.
Al llegar a mi negocio, respiro profundamente y entro con paso decidido, ya hay varios clientes desayunando, Tina está recogiendo un encargo para una tarta de cumpleaños y el resto está atendiendo la cafetería. Entro en la cocina y veo a Mike pensativo con su cuaderno mordiendo nerviosamente su bolígrafo de la suerte.
— Buenos días jefa — me dice cuando se da cuenta de que estoy.
— Buenos días Mike, ¿qué andas cavilando?
— Nos han hecho un encargo para una pedida de mano, pero el novio no tiene ni idea de lo que quiere, ni siquiera sabe dónde lo hará ni cómo… y se le ha ocurrido la fantástica idea de dejar en mis manos la sorpresa, ¿qué te parece?
— ¿Quieres ayuda? — asiente y me pongo a su lado.
Durante unos minutos discutimos varias ideas y al final nos damos cuenta de que no sabemos nada de la novia, por lo que es muy difícil hacer algo que merezca la pena. Y entonces se me enciende la bombilla. El novio no tiene nada aún decidido, por lo que es un lienzo en blanco. Decido llamarle y hacerle unas preguntas, en cuanto cuelgo el teléfono tengo claro cómo será la tarta y aunque tengo que investigar un poco, creo que incluso puedo ayudar al novio con la elección del lugar.
Al final nos decantamos por una tarta en forma de cojín hecho de bizcocho de vainilla, relleno de crema de fresa y cubierto con fondant, le daremos el aspecto de estar forrado con seda, quedará brillante, en un color borgoña, le pondremos incluso los flecos a modo de faldones y las borlas colgantes en las esquinas de color dorado. Encima del cojín irá la cajita de joyería con el anillo y el novio escribirá en una tarjeta: “Tú eres mi princesa. ¿Querrías casarte conmigo y hacerme el hombre más afortunado del mundo?”
Hablando con él me di cuenta de que la afortunada chica es una soñadora, una romántica y que su novio haría cualquier cosa por ella, descubrí que su color favorito es el rojo y que su película favorita es “La Cenicienta”. Estaba cantado. Mike está encantado con la idea y tras volver a llamar al novio en cuestión e informarle de todo nos alegramos mucho al ver que se muestra más que satisfecho con la idea. Todo le parece perfecto y nos felicita por haber cerrado los detalles en apenas unas horas.
Cuando estoy saliendo por la puerta para ir a buscar a Sofía, me choco con alguien.
— ¡Oh! ¡Cuánto lo siento! — digo antes de levantar la visa y quedarme catatónica.
— No te preocupes, estoy bien — la voz de esta mujer me envuelve como un manto de caramelo líquido.
— Ya lo veo… — digo antes de pensar — quiero decir que yo… es decir… que tu… — confirmado, mi cerebro se ha desconectado.
— Quieres decir que pese al atropello, no me has herido — me dice con una sonrisa que hace que me tiemblen las rodillas.
— Sí, eso quería decir — digo sonriendo como una idiota y poniéndome del color de las amapolas.
— ¿Tú estás bien?
— Creo que el golpe me ha desconectado el cerebro.
— Con esa sonrisa se te puede perdonar — me dice susurrándome al oído.
¡Vaya! ¿Y ahora qué le digo yo a esta mujer? Si le gusta mi sonrisa puedo volver a sonreír y así a lo mejor no se da cuenta de que me he quedado tonta de repente. Y lo intento. Pero es que no puedo dejar de mirar esos increíbles ojos cafés y ese rostro perfectamente esculpido, si me dicen que esta mujer es miss universo, me lo creo. Es que es guapísima.
— Venía a probar esas delicatesen que dicen que preparas — me dice al cabo de unos instantes, supongo que cuando se cansa de que le mire embobada.
— Oh… si… yo no puedo… quiero decir, ahora mismo yo no puedo atenderte porque tengo que ir a buscar a mi hija, pero cualquiera de mis compañeros lo hará encantado — digo de carrerilla antes de perder la facultad del habla de nuevo.
— Mmmm, creo que prefiero que me aconsejes tú. ¿Cuándo volverás? — alucinada estoy.
— Vuelvo a eso de las cinco y media, cuando mi hija se levanta de la siesta — le digo totalmente anonadada.
— Pues a las seis menos cuarto estaré aquí — me dice cogiéndome de la mano — todo un placer conocerte.
Me suelta la mano, se da media vuelta y se va… y yo le sigo con la mirada como una quinceañera enamorada. Durante unos segundos observo como se pone el casco y se sube a una moto preciosa de color negro brillante.
Necesito unos segundos para centrarme y recordar qué es lo que estaba haciendo antes de que apareciese esta mujer vestida para incitarme al pecado y repetir… me doy cuenta de que tengo la llave del coche en la mano e inmediatamente recuerdo que iba a buscar a mi hija a la guardería.
Suspiro profundamente mientras me dirijo hacia el coche con una sonrisa estúpida en la cara, a estas alturas de mi vida y me emociono por una mujer… de acuerdo en que es una mujer digna de atar a la cama y no dejarle escapar nunca, pero creo que ya debería haber aprendido la lección. Por muy guapo o guapa que sea, pese a esos andares de depredadora, pese a la sonrisa sexy y arrebatadora y a tener esa pinta de rebelde sin causa, yo ya tengo una vida demasiado complicada como para empezar nada con nadie, eso siguiendo los deseos de mi desatada imaginación que ya nos ve caminando hacia el altar.
Recojo a mi preciosa hija de la guardería y vamos a casa, comemos mientras yo le cuento el encuentro tan maravilloso que he tenido con la guapa desconocida de la comisaría. Soy consciente de que no es una conversación muy apropiada para una niña de poco más de un año, pero es que si se lo cuento a cualquiera de mis amigos enseguida empezarán con los planes de boda.
Al acostar a la niña para que duerma la siesta me doy cuenta de que tengo el móvil en silencio desde que hablé con Rachel, lo saco del bolso y sonrío cuando veo la cantidad de mensajes y llamadas que tengo.
— Dime Rach — digo en cuanto descuelga.
— ¡Cuéntamelo todo! — exclama divertida.
— Pues mira, fui a recoger a Sofía, hemos comido puré de verduras y pollo desmigado con un poco de pan, la he metido en la cama y ahora estoy hablando contigo — digo casi sin poder contener la risa.
— ¿Pero de qué puñetas me estás hablando? — casi grita — yo me refiero a la sexy chica que has atropellado a la salida de la pastelería.
— Las noticias vuelan.
— Nena, te grabaron en video y me lo enviaron… vi la cara de tonta que tenías y que te costó unos segundos recuperarte…
— Creo que hoy voy a despedir a alguien.
— ¡No seas ridícula! Estamos deseando que tengas a alguien en tu vida.
— No me parece lo más apropiado dadas las circunstancias.
— ¡Bah! ¿lo dices por el inspector? Quinn dice que no tienen nada, por eso dan palos de ciego, tienes que intentarlo.
— Me parece que no — digo suspirando.
— ¿Pero por qué te niegas a ser feliz?
— ¿Y tú cómo sabes que seré feliz? — pregunto exasperada.
— ¡Mujer! Al menos lo habrás intentado.
— No quiero intentar nada… mi vida ya es bastante complicada ahora mismo.
— Brittany… no hay nada de malo en disfrutar un poco de la vida.
— Rach…
— ¡Que no me cuentes cuentos! ¡Que lo intentes! — resoplo e intento no colgarle el teléfono — pero vamos a ver… ¿se puede saber qué te pasa?
— ¿En serio? ¡pues que a mi última pareja le asesinaron y creen que fui yo! ¡Eso me pasa Rachel!
Mi amiga intenta por todos los medios convencerme de que tan solo es una época, una muy mala época pero que terminará pasando y me repite una y mil veces esa milonga de que yo también tengo derecho a ser feliz, de lo que no se está dando cuenta es de que yo ya soy feliz, tengo a mi hija conmigo que a día de hoy es todo lo que quiero.
No voy a negar que criar a una hija yo sola es muy difícil, no cambiaría absolutamente nada porque la adoro con toda mi alma, pero es difícil. Ya casi no recuerdo lo que es tener el día libre y sin horarios, vale que entre la guardería y Rachel, tengo ratos libres, pero no es lo mismo. Echo de menos esas cenas en casa de mi amiga que duraban hasta las tantas de la mañana.
También echo mucho de menos el sexo y estar acompañada por alguien, sobre todo por las noches, una vez que la niña duerme me siento muy sola, quizá si hubiese conocido a la guapa desconocida en esos momentos de debilidad sí que hubiese cedido en todo, pero en este momento del día no me siento tentada a empezar nada, ni siquiera un tonteo inocente.
Me tumbo en el sofá y disfruto del silencio y la tranquilidad. Inmediatamente mi cabeza empieza a recordar las palabras del impresionante mujer con la que choqué, sólo que ahora no me habla de pastelitos y chocolate… sino que me habla de una tórrida aventura, de sexo ardiente y desenfrenado, proyectando imágenes de lo más sensuales en mi cerebro.
Debo estar desesperada porque jamás he sido una aficionada a ese sexo que está tan de moda ahora con palabras de seguridad, arneses, ataduras y demás. Niego con la cabeza con la estúpida esperanza de que las imágenes desaparezcan de mi mente y tomo la decisión de que esta tarde no iré a la pastelería.
En cuanto la niña se despierta agradezco que llueva, una excusa más para no salir de casa con ella. Definitivamente lo mejor será que nos quedemos aquí y juguemos juntas. Y en cuanto decido ponerle algo más cómodo a Sofía, mi teléfono empieza a sonar.
— Jefa lo siento mucho, pero tienes que venir, mi madre ha tenido un accidente y está en el hospital — me dice Mike.
— No digas nada más, vete con ella y Mike, tarda lo que tengas que tardar ¿vale? Yo me ocupo de todo.
— Mañana intentaré estar a mi hora para abrir.
— No me has entendido… hasta que tu madre no esté en condiciones no te separes de ella ¿vale? Yo me ocupo de todo.
— Muchas gracias jefa.
— Yo te debo mucho más a ti, así que cuida de tu madre que es lo importante ahora mismo ¿de acuerdo?
En cuanto cuelgo el teléfono me revuelvo incómoda en el sofá, lo que es una estupidez, la pastelería es mi negocio, es mi segundo hogar, es mi medio de vida… y sin embargo, ahora me siento incómoda porque una desconocida que me pone como una moto sabe que allí puede localizarme.
Esto es ridículo.
Intento auto convencerme de que no va a aparecer mientras visto a mi hija con ropa de calle y mientras me visto yo, me auto convenzo de que simplemente es una Don Juan insensible que sólo quiere pasar un buen rato con la chica de la pastelería, estoy convencida de que será una cabrona peor que Noah. Y para eso no estoy preparada, por muy irresistible que sea.
Como si viviese un milagro, consigo aparcar justo enfrente de la pastelería, con suerte no nos empaparemos hasta que podamos entrar. Saco rápidamente a Sofía de su sillita y entro como un vendaval en el local.
******************************************************
Y hasta aquí con el capítulo, espero que les haya gustado ya saben que si les gusto, tienen el tiempo y gustan regalarme su sexy comentario se los agradecería mucho. ES GRATIS.
Que creen que pase en el siguiente capítulo???
Miles de gracias por leer, y recuerden ser felices
LOS AMO Y CUÍDENSE MUCHO.
P.D: Hoy les tengo un trato, mis sexys lectores y los/as “lectores fantasma” * si es que los hay* de esta historia se animen a comentar, por cada comentario que reciba esta actualización subiré un capítulo lo que significa:
1 comentario = 1 capítulo
2 comentarios = 2 capítulos …..
Si llegamos a los 5 comentarios o mas para mañana a las 9:00 am de mi país *México*, los subo ese mismo día y les doy uno extra.
****************************************************
CAPÍTULO 8
Durante el trayecto hasta mi casa, Rachel me informa de que Sofía ya está dormida y que es mejor que pase la noche con ella, no me hace mucha gracia la idea, pero reconozco que tiene razón.
Yo estoy demasiado nerviosa, dolida y triste como para cuidar correctamente de mi hija.
Hacemos el viaje en silencio y cuando Quinn para delante de mi portal le agradezco su ayuda y me bajo del coche mientras las lágrimas empiezan a caer sin control.
Una vez en mi casa, saco una caja de la parte alta del armario. Es donde decidí guardar todos los recuerdos que tenía de Noah, no sé por qué motivo guardé las fotos y demás, creo que en el fondo lo hice para enseñarle a Sofía quién era su padre cuando mi pequeña estuviese preparada para ello.
Me siento en el sofá con una gran copa de vino blanco y empiezo a mirar las fotografías.
Parecíamos felices. La primera que veo es la que nos hicimos el último día de instituto, en un parque infantil que había cerca, yo me lancé por el tobogán y Noah se lazó detrás de mí, los dos caímos en la arena y nos partimos de la risa, fue el día que me besó por primera vez.
Sigo mirando dentro de la caja y veo la alianza de boda. La sostengo en la mano y parece que pesa una tonelada. Durante unos segundos la observo detenidamente mientras recuerdo el día de nuestra boda. Fue un bonito día, una ceremonia muy íntima donde sólo estaban mis padres, mi mejor amiga Rachel, un par de primos y tres de mis tíos. Noah no tenía familia y no quiso invitar a ningún amigo. Éramos quince personas, más que suficiente para una boda por lo civil y una comida en un bar del barrio. No tengo muchas fotos de aquel día y las pocas que tengo parece que no son reales.
Al mirarlas siento que esa que se ve en las imágenes no soy yo. Han pasado algo más de cinco años desde que se hicieron esas fotografías y mi vida ha cambiado radicalmente. En cinco años me he casado, me he divorciado, he tenido una hija y he conseguido que mi negocio funcionase, también he sufrido acoso sexual por parte de un delincuente que me ha extorsionado, han asesinado a Noah y al parecer el inspector del caso ha decidido que yo soy la culpable. Durante horas miro el contenido de la caja mientras bebo vino, lloro, me seco las lágrimas y vuelvo a empezar.
Cuando me despierto, tengo un terrible dolor de cabeza. No estoy acostumbrada a beber vino y me temo que no ha sido una buena idea terminarme una botella entera sin nada en el estómago.
Me arrastro hasta la ducha y cuando parece que el suelo ha dejado de girar llamo a Rach para saber cómo está mi preciosa hija, mi amiga me informa de que cada día está más enamorada de ella y que cualquier día no me la devuelve. No me extraña lo más mínimo, Sofía es una niña muy buena y cariñosa.
Quedo en ir a recoger yo a la niña a la guardería al mediodía. Tengo que pasar por la pastelería para ponerme al día con los chicos y explicarles lo que ocurrió la noche anterior.
Al llegar a mi negocio, respiro profundamente y entro con paso decidido, ya hay varios clientes desayunando, Tina está recogiendo un encargo para una tarta de cumpleaños y el resto está atendiendo la cafetería. Entro en la cocina y veo a Mike pensativo con su cuaderno mordiendo nerviosamente su bolígrafo de la suerte.
— Buenos días jefa — me dice cuando se da cuenta de que estoy.
— Buenos días Mike, ¿qué andas cavilando?
— Nos han hecho un encargo para una pedida de mano, pero el novio no tiene ni idea de lo que quiere, ni siquiera sabe dónde lo hará ni cómo… y se le ha ocurrido la fantástica idea de dejar en mis manos la sorpresa, ¿qué te parece?
— ¿Quieres ayuda? — asiente y me pongo a su lado.
Durante unos minutos discutimos varias ideas y al final nos damos cuenta de que no sabemos nada de la novia, por lo que es muy difícil hacer algo que merezca la pena. Y entonces se me enciende la bombilla. El novio no tiene nada aún decidido, por lo que es un lienzo en blanco. Decido llamarle y hacerle unas preguntas, en cuanto cuelgo el teléfono tengo claro cómo será la tarta y aunque tengo que investigar un poco, creo que incluso puedo ayudar al novio con la elección del lugar.
Al final nos decantamos por una tarta en forma de cojín hecho de bizcocho de vainilla, relleno de crema de fresa y cubierto con fondant, le daremos el aspecto de estar forrado con seda, quedará brillante, en un color borgoña, le pondremos incluso los flecos a modo de faldones y las borlas colgantes en las esquinas de color dorado. Encima del cojín irá la cajita de joyería con el anillo y el novio escribirá en una tarjeta: “Tú eres mi princesa. ¿Querrías casarte conmigo y hacerme el hombre más afortunado del mundo?”
Hablando con él me di cuenta de que la afortunada chica es una soñadora, una romántica y que su novio haría cualquier cosa por ella, descubrí que su color favorito es el rojo y que su película favorita es “La Cenicienta”. Estaba cantado. Mike está encantado con la idea y tras volver a llamar al novio en cuestión e informarle de todo nos alegramos mucho al ver que se muestra más que satisfecho con la idea. Todo le parece perfecto y nos felicita por haber cerrado los detalles en apenas unas horas.
Cuando estoy saliendo por la puerta para ir a buscar a Sofía, me choco con alguien.
— ¡Oh! ¡Cuánto lo siento! — digo antes de levantar la visa y quedarme catatónica.
— No te preocupes, estoy bien — la voz de esta mujer me envuelve como un manto de caramelo líquido.
— Ya lo veo… — digo antes de pensar — quiero decir que yo… es decir… que tu… — confirmado, mi cerebro se ha desconectado.
— Quieres decir que pese al atropello, no me has herido — me dice con una sonrisa que hace que me tiemblen las rodillas.
— Sí, eso quería decir — digo sonriendo como una idiota y poniéndome del color de las amapolas.
— ¿Tú estás bien?
— Creo que el golpe me ha desconectado el cerebro.
— Con esa sonrisa se te puede perdonar — me dice susurrándome al oído.
¡Vaya! ¿Y ahora qué le digo yo a esta mujer? Si le gusta mi sonrisa puedo volver a sonreír y así a lo mejor no se da cuenta de que me he quedado tonta de repente. Y lo intento. Pero es que no puedo dejar de mirar esos increíbles ojos cafés y ese rostro perfectamente esculpido, si me dicen que esta mujer es miss universo, me lo creo. Es que es guapísima.
— Venía a probar esas delicatesen que dicen que preparas — me dice al cabo de unos instantes, supongo que cuando se cansa de que le mire embobada.
— Oh… si… yo no puedo… quiero decir, ahora mismo yo no puedo atenderte porque tengo que ir a buscar a mi hija, pero cualquiera de mis compañeros lo hará encantado — digo de carrerilla antes de perder la facultad del habla de nuevo.
— Mmmm, creo que prefiero que me aconsejes tú. ¿Cuándo volverás? — alucinada estoy.
— Vuelvo a eso de las cinco y media, cuando mi hija se levanta de la siesta — le digo totalmente anonadada.
— Pues a las seis menos cuarto estaré aquí — me dice cogiéndome de la mano — todo un placer conocerte.
Me suelta la mano, se da media vuelta y se va… y yo le sigo con la mirada como una quinceañera enamorada. Durante unos segundos observo como se pone el casco y se sube a una moto preciosa de color negro brillante.
Necesito unos segundos para centrarme y recordar qué es lo que estaba haciendo antes de que apareciese esta mujer vestida para incitarme al pecado y repetir… me doy cuenta de que tengo la llave del coche en la mano e inmediatamente recuerdo que iba a buscar a mi hija a la guardería.
Suspiro profundamente mientras me dirijo hacia el coche con una sonrisa estúpida en la cara, a estas alturas de mi vida y me emociono por una mujer… de acuerdo en que es una mujer digna de atar a la cama y no dejarle escapar nunca, pero creo que ya debería haber aprendido la lección. Por muy guapo o guapa que sea, pese a esos andares de depredadora, pese a la sonrisa sexy y arrebatadora y a tener esa pinta de rebelde sin causa, yo ya tengo una vida demasiado complicada como para empezar nada con nadie, eso siguiendo los deseos de mi desatada imaginación que ya nos ve caminando hacia el altar.
Recojo a mi preciosa hija de la guardería y vamos a casa, comemos mientras yo le cuento el encuentro tan maravilloso que he tenido con la guapa desconocida de la comisaría. Soy consciente de que no es una conversación muy apropiada para una niña de poco más de un año, pero es que si se lo cuento a cualquiera de mis amigos enseguida empezarán con los planes de boda.
Al acostar a la niña para que duerma la siesta me doy cuenta de que tengo el móvil en silencio desde que hablé con Rachel, lo saco del bolso y sonrío cuando veo la cantidad de mensajes y llamadas que tengo.
— Dime Rach — digo en cuanto descuelga.
— ¡Cuéntamelo todo! — exclama divertida.
— Pues mira, fui a recoger a Sofía, hemos comido puré de verduras y pollo desmigado con un poco de pan, la he metido en la cama y ahora estoy hablando contigo — digo casi sin poder contener la risa.
— ¿Pero de qué puñetas me estás hablando? — casi grita — yo me refiero a la sexy chica que has atropellado a la salida de la pastelería.
— Las noticias vuelan.
— Nena, te grabaron en video y me lo enviaron… vi la cara de tonta que tenías y que te costó unos segundos recuperarte…
— Creo que hoy voy a despedir a alguien.
— ¡No seas ridícula! Estamos deseando que tengas a alguien en tu vida.
— No me parece lo más apropiado dadas las circunstancias.
— ¡Bah! ¿lo dices por el inspector? Quinn dice que no tienen nada, por eso dan palos de ciego, tienes que intentarlo.
— Me parece que no — digo suspirando.
— ¿Pero por qué te niegas a ser feliz?
— ¿Y tú cómo sabes que seré feliz? — pregunto exasperada.
— ¡Mujer! Al menos lo habrás intentado.
— No quiero intentar nada… mi vida ya es bastante complicada ahora mismo.
— Brittany… no hay nada de malo en disfrutar un poco de la vida.
— Rach…
— ¡Que no me cuentes cuentos! ¡Que lo intentes! — resoplo e intento no colgarle el teléfono — pero vamos a ver… ¿se puede saber qué te pasa?
— ¿En serio? ¡pues que a mi última pareja le asesinaron y creen que fui yo! ¡Eso me pasa Rachel!
Mi amiga intenta por todos los medios convencerme de que tan solo es una época, una muy mala época pero que terminará pasando y me repite una y mil veces esa milonga de que yo también tengo derecho a ser feliz, de lo que no se está dando cuenta es de que yo ya soy feliz, tengo a mi hija conmigo que a día de hoy es todo lo que quiero.
No voy a negar que criar a una hija yo sola es muy difícil, no cambiaría absolutamente nada porque la adoro con toda mi alma, pero es difícil. Ya casi no recuerdo lo que es tener el día libre y sin horarios, vale que entre la guardería y Rachel, tengo ratos libres, pero no es lo mismo. Echo de menos esas cenas en casa de mi amiga que duraban hasta las tantas de la mañana.
También echo mucho de menos el sexo y estar acompañada por alguien, sobre todo por las noches, una vez que la niña duerme me siento muy sola, quizá si hubiese conocido a la guapa desconocida en esos momentos de debilidad sí que hubiese cedido en todo, pero en este momento del día no me siento tentada a empezar nada, ni siquiera un tonteo inocente.
Me tumbo en el sofá y disfruto del silencio y la tranquilidad. Inmediatamente mi cabeza empieza a recordar las palabras del impresionante mujer con la que choqué, sólo que ahora no me habla de pastelitos y chocolate… sino que me habla de una tórrida aventura, de sexo ardiente y desenfrenado, proyectando imágenes de lo más sensuales en mi cerebro.
Debo estar desesperada porque jamás he sido una aficionada a ese sexo que está tan de moda ahora con palabras de seguridad, arneses, ataduras y demás. Niego con la cabeza con la estúpida esperanza de que las imágenes desaparezcan de mi mente y tomo la decisión de que esta tarde no iré a la pastelería.
En cuanto la niña se despierta agradezco que llueva, una excusa más para no salir de casa con ella. Definitivamente lo mejor será que nos quedemos aquí y juguemos juntas. Y en cuanto decido ponerle algo más cómodo a Sofía, mi teléfono empieza a sonar.
— Jefa lo siento mucho, pero tienes que venir, mi madre ha tenido un accidente y está en el hospital — me dice Mike.
— No digas nada más, vete con ella y Mike, tarda lo que tengas que tardar ¿vale? Yo me ocupo de todo.
— Mañana intentaré estar a mi hora para abrir.
— No me has entendido… hasta que tu madre no esté en condiciones no te separes de ella ¿vale? Yo me ocupo de todo.
— Muchas gracias jefa.
— Yo te debo mucho más a ti, así que cuida de tu madre que es lo importante ahora mismo ¿de acuerdo?
En cuanto cuelgo el teléfono me revuelvo incómoda en el sofá, lo que es una estupidez, la pastelería es mi negocio, es mi segundo hogar, es mi medio de vida… y sin embargo, ahora me siento incómoda porque una desconocida que me pone como una moto sabe que allí puede localizarme.
Esto es ridículo.
Intento auto convencerme de que no va a aparecer mientras visto a mi hija con ropa de calle y mientras me visto yo, me auto convenzo de que simplemente es una Don Juan insensible que sólo quiere pasar un buen rato con la chica de la pastelería, estoy convencida de que será una cabrona peor que Noah. Y para eso no estoy preparada, por muy irresistible que sea.
Como si viviese un milagro, consigo aparcar justo enfrente de la pastelería, con suerte no nos empaparemos hasta que podamos entrar. Saco rápidamente a Sofía de su sillita y entro como un vendaval en el local.
******************************************************
Y hasta aquí con el capítulo, espero que les haya gustado ya saben que si les gusto, tienen el tiempo y gustan regalarme su sexy comentario se los agradecería mucho. ES GRATIS.
Que creen que pase en el siguiente capítulo???
Miles de gracias por leer, y recuerden ser felices
LOS AMO Y CUÍDENSE MUCHO.
P.D: Hoy les tengo un trato, mis sexys lectores y los/as “lectores fantasma” * si es que los hay* de esta historia se animen a comentar, por cada comentario que reciba esta actualización subiré un capítulo lo que significa:
1 comentario = 1 capítulo
2 comentarios = 2 capítulos …..
Si llegamos a los 5 comentarios o mas para mañana a las 9:00 am de mi país *México*, los subo ese mismo día y les doy uno extra.
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Amen aparecio san aqui ya tenemos 1 cap
Heya Morrivera********- - Mensajes : 633
Fecha de inscripción : 07/05/2014
Edad : 35
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Jaja Hola, aquí una lectora fantasma XD no me pude resistir a tu oferta ;)
Me encanta la adaptación. Ya quiero mas capítulos. Aunque tengo dos preguntas, ¿cómo cuantos capítulos son o serán? Y la otra ¿de que parte de México eres? También soy de México. Saludos.
Me encanta la adaptación. Ya quiero mas capítulos. Aunque tengo dos preguntas, ¿cómo cuantos capítulos son o serán? Y la otra ¿de que parte de México eres? También soy de México. Saludos.
ana_kunis******* - Mensajes : 420
Fecha de inscripción : 27/02/2012
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
holap,...
rachel y su síndrome de cupido jajajaja
bueno para ser el primer encuentro fuera de la fuerza es bueno!!!
quiero el nuevo encuentro!!!
nos vemos!!!!!!!!!!!!!!
rachel y su síndrome de cupido jajajaja
bueno para ser el primer encuentro fuera de la fuerza es bueno!!!
quiero el nuevo encuentro!!!
nos vemos!!!!!!!!!!!!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Heya Morrivera escribió:Amen aparecio san aqui ya tenemos 1 cap
De hecho ya había aparecido, pero no habían tenido la oportunidad de hablar.
SI UN CAPÍTULO, MUCHÍSIMAS GRACIAS POR COMENTAR.
ana_kunis escribió:Jaja Hola, aquí una lectora fantasma XD no me pude resistir a tu oferta ;)
Me encanta la adaptación. Ya quiero mas capítulos. Aunque tengo dos preguntas, ¿cómo cuantos capítulos son o serán? Y la otra ¿de que parte de México eres? También soy de México. Saludos.
Holaaaaa, jajaja que bueno me alegro que haya funcionado.
El libro es muy lindo, pues es tu día de suerte porque hoy los tendrás.
Son 29 capítulos y epilogo.
Es genial que seas de México, porque los mexicanos SOMOS CHIDOS xD y soy de León, Guanajuato ¿y tú?
Saludos
3:) escribió:holap,...
rachel y su síndrome de cupido jajajaja
bueno para ser el primer encuentro fuera de la fuerza es bueno!!!
quiero el nuevo encuentro!!!
nos vemos!!!!!!!!!!!!!!
Holaaap
Jajaja pero tiene su gracia o no….
Si muy bueno
Noticia buena en este capítulo lo tendrás.
Nos vemos
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Hola lectores/as guapos/as como lo prometí les traigo capítulos, solo tuvimos 3 comentarios lo que significa que solo tendremos 3 capítulos a lo largo del día, y para que se animen a comentar más seguido le estaré haciendo tratos que podrán leer al final del capítulo. Sin más por ahora el capítulo.
***********************************************************
CAPÍTULO 9
Tina inmediatamente me pone al día sobre lo nervioso y agitado que estaba Mike, al parecer su madre no debería coger el coche porque hace algo más de medio año tuvo un coágulo en el cerebro y a veces se desorienta, me pongo en alerta casi al instante… ¿La madre de Mike tuvo un coágulo y yo no me he enterado? Voy a tener una conversación muy seria con mi mano derecha. Se ha estado haciendo cargo de todo mi negocio, haciendo un montón de horas extras que no quiere que le pague, no deja de pensar en cosas para mejorar la calidad y hacer que vengan más clientes, pero ¿no tiene confianza como para decirme que su madre le necesita? Estoy enfadada y a la vez muy halagada. Es contradictorio y frustrante.
Dejo a Sofía en su pequeño parque en el rincón que crearon para nosotras y yo me pongo el delantal en cuanto entro en la cocina, pero estoy demasiado distraída y soy consciente de que voy a terminar el día cortándome, quemándome, tirando algo y poniendo todo hecho un cristo… o quizá todo a la vez.
Miro los encargos que tenemos que hacer hoy más los pedidos para reponer en la zona de pastelería y panadería. Me concentro un par de segundos y me pongo manos a la obra.
Lo primero que tengo que hacer es sacar las cookies de chocolate que Mike dejó en el horno antes de irse, este hombre está en todo. Tina se asoma a la cocina para ver si necesito ayuda, lo que me hace reír, durante años me he encargado yo de todo, puede que haya delegado mucho en Mike, pero eso no significa que no sea capaz de hacerme cargo de mi negocio, por supuesto ella no lo hace con esa intención, es que ella es así, amable, diligente y siempre dispuesta a echar una mano.
Saco las galletas y cuando las coloco en su sitio en el mostrador me doy cuenta de que la guapa desconocida me está mirando sentada en una de los taburetes de la barra en la zona de cafetería. Me sonrojo e intento por todos los medios disimular, pero creo que no lo consigo, pues Tina me mira y sonríe pícaramente.
Tímidamente vuelvo a la cocina sin mirar a la mujer que me pone cardiaca y entro como alma que lleva el diablo. Lo siguiente de la lista es preparar una tarta de cumpleaños que vendrán a recoger mañana por la mañana. Saco todos los ingredientes y los dispongo para empezar a hornear los bizcochos.
— Si te escondes aquí nunca podrás conocer a esa diosa— la voz de Rachel me sobresalta — perdona, no quería asustarte.
— Hola Rachel, ¿qué haces aquí? — pregunto distraídamente.
— Confirmar que estás loca de remate — mira a Sofía que está en sus brazos — ¿verdad que a mamá le ha dado algo raro a la cabeza? Con lo buena que está esa mujer y ella aquí, embadurnada de harina.
— No es harina, es azúcar glas y no me escondo, tengo trabajo.
— ¡Claaaro que sí!
Sale de la cocina muerta de risa y mi hija riéndose con ella, sé que no tiene ni idea de por qué se está riendo, pero es muy triste que hasta mi pequeña se dé cuenta de que he puesto una excusa absurda para no volver a toparme con la mujer que me va a volver loca.
Meto las dos bandejas con la masa en el horno doble y empiezo a trabajar el fondant para modelar el circuito de carreras de la tarta. Intento concentrarme, de verdad que lo intento, pero no hay forma. Sólo pienso en sonrisas de infarto, en miradas intensas de color café, en su voz dulce pero a la vez grave que me envuelve como caramelo caliente… ¡Dios! ¡Tengo un problema enorme!
Cojo un trozo de corcho blanco y empiezo a modelarlo con la forma del coche de carreras que el niño ha pedido, después lo forraré con porcelana fría y lo decoraré con pintura, será un bonito recuerdo. Ha sido otra de las ideas de Mike y la verdad es que madres y niños están encantados.
— Buenas tardes — la voz como caramelo fundido resuena en la silenciosa cocina.
— ¡Dios! ¡qué susto! — grito intentando sujetar el bote de pintura en las manos.
— Llevo horas esperando a que me recomiendes algo que comer — dice acercándose a mi.
— No… no puedes estar aquí.
— Tina me ha dicho que sí, que ya habéis cerrado y que Rachel se ha llevado a Sofía
— me mira fijamente — es una réplica casi exacta — dice señalando con la cabeza el coche que estoy modelando.
— Disculpa, ¿casi exacta? — le miro con el ceño fruncido — es exacta.
— Me temo que no, el modelo de este año es diferente, el chasis hace un tobogán hasta llegar al morro y es un poco más ancho, el ala trasera tiene que ser más estrecha y debes quitarle el plano y el tubo de escape va en el medio, no en el lado derecho.
Miro atónita a la guapísima mujer que me está dando una lección con sus conocimientos de Fórmula 1, intento despegar mis ojos de los suyos para centrarme en el dibujo que tengo delante y sobre el que me estoy guiando para el modelaje cuando en una esquina veo que pone F138.
— Debería poner F14T, que es el modelo de este año. Por cierto, mi nombre es Santana — bajo la cabeza y sonrío.
— Yo me llamo Brittany.
— Un placer Brittany, dime, ¿cuál es tu especialidad?
Durante unos segundos vuelvo a mirarle fijamente a los ojos, es como perderse en la obscuridad, me hechiza con su mirada intensa y su preciosa sonrisa, e inmediatamente tengo que retirar mis ojos de los suyos porque en mi mente han empezado a proyectarse imágenes escandalosas sobre ella, un bol de chocolate fundido y yo encima de la mesa de trabajo.
— ¿Eres nueva en el barrio? — le pregunto mientras cojo un plato.
— No soy de aquí, estoy de vacaciones.
— Mmmm y ¿cómo has conocido mi pastelería? — vuelvo a preguntar mientras abro el refrigerador.
— No te lo creerás, pero desde que he llegado no he dejado de oír hablar de ella.
— Pues si los comentarios han sido buenos, espero estar a la altura — digo mientras corto un trozo de tarta.
Le pongo delante el plato con un par de cupcakes Red Velvet y un buen trozo de tarta de zanahoria y nueces, mientras le dedico una sonrisa.
— Con esta pinta estoy segura de que lo estarás — me dice sonriendo de nuevo.
— ¿Quieres algo de beber? — necesito cambiar de tema, me pone cardiaca mirarle.
— Creo que también me dejaré aconsejar — dice como quien no quiere la cosa mientras coge un cupcake.
Salgo de la cocina y un par de minutos más tarde vuelvo con un vaso y una taza en las manos, dos de nuestras especialidades, el frappé de capuchino, dado que estamos en invierno, no es que apetezca mucho algo frío, pero también he traído una taza de café moka.
— No sabía lo que te apetecería así que he traído una bebida fría y otra caliente.
— Creo que me beberé las dos, ¿así servís aquí el café? — asiento encantada — no me extraña que siempre esté el local lleno, por cierto esta magdalena roja está muy rica.
— ¿Magdalena roja? — ya me ha tocado la fibra sensible — son cupcakes Red Velvet con frosting de crema de queso, no es una magdalena — creo que me he pasado en el tono.
— Perdona, no quería ofenderte — dice quitándome los cafés de las manos y poniéndolos en la mesa — lo siento, no menospreciaba tu trabajo, es que no sabía cómo se llamaba.
— Tranquila — digo bajando la vista — es normal, la mayoría de los hombres y algunas mujeres no aprecian las diferencias.
El ambiente se ha enrarecido ligeramente y soy consciente de que ha sido por mi culpa, de repente era como estar delante de Puck intentando que me ayudase a decidir los sabores para los cupcakes del concurso. Yo elaborando sabores con mojitos, con crema de café, con galletas oreo y él solo me decía que sabían a lima, café y galletas… era muy frustrante.
Afortunadamente, la guapísima mujer que tengo delante, cambia de tema y me pregunta sutilmente por el nombre de la tarta que se está comiendo, lo que me hace sonreír, no tendrá ni idea de pastelería, pero al menos quiere disimularlo.
Unos minutos más tarde, le estoy sirviendo otro trozo de tarta de zanahoria mientras nos reímos sin parar cuando me cuenta que la única vez que se metió en la cocina fue para ayudar a su madre a hacer una tarta de cumpleaños para su hermano y por más que su madre se hartó de paciencia, finalmente la echó de la cocina.
Charlamos animadamente durante más de dos horas. Es increíble lo fácil que me resulta hablar con ella, es una mujer divertida, se fija en los detalles e incluso dice que quiere apuntarse al curso de galletas que voy a dar en primavera, lo que me hace reír de nuevo.
Cuando miro el reloj me doy cuenta de que es casi la una de la mañana. Me levanto nerviosa del taburete y empiezo a recoger el fondant, la glasa y los papeles que me han servido de guía para el coche de Fórmula 1 que al parecer no es el modelo de este año.
— Déjame que te ayude, así terminaremos antes y después te acompañaré a tu casa — dice poniéndose detrás y a mí se me para el corazón.
— No creo que sea necesario — intento esquivarle pero me cierra el paso.
— Sé que no es necesario, pero me sentiré mejor si me aseguro de que no te ocurre nada — me muevo nerviosa y miro al suelo — ¿te pongo nerviosa? — me dice susurrándome al oído.
Está muy cerca de mí, tengo las manos apoyadas en la encimera, las de ella a cada lado de las mías, cerca pero sin tocarme, le siento detrás de mí, pero ni siquiera me roza la espalda, su cálido aliento me acaricia la nuca. Pero en vez de ser consciente de que este es probablemente el momento más erótico que he vivido en mi vida, sólo puedo recordar al extorsionista, cuando me aprisionó contra el coche y me metió mano descaradamente, un ataque de rabia se apodera de mí y consigo zafarme de entre sus brazos.
— No vuelvas a acercarte tanto por favor — le pido intentando mantener a raya el ataque de pánico que estoy sufriendo-
— Brittany, ¿qué pasa? — da un paso hacia mí y yo doy uno hacia atrás — no voy a hacerte daño, siento haberme lanzado, me resultas irresistible.
— No… yo no puedo — digo atravesando la cocina hasta la puerta — creo que deberías irte ya.
— No. Si no quieres que intente seducirte de nuevo vale, pero no voy a dejarte sola de madrugada, te acompañaré a casa y me despediré de ti como una dama.
— Ya te he dicho que no es necesario.
— Creo que sí que lo es, no quiero que tengas esa imagen de mí, te prometo que conmigo estarás a salvo.
Casi tengo ganas de llorar. No me he sentido a salvo desde que Noah me dijo que me dejaba para irse a vivir con su amante, cada día he tenido esa sensación de que algo malo estaba a punto de pasar, cada día he estado nerviosa, síntomas que empeoraron drásticamente cuando el extorsionista me abordó a la salida de la guardería de Sofía.
Observo a Santana durante unos segundos, está impasible, mantiene la distancia pero sin dejar de mirarme, por la postura de su cuerpo me doy cuenta de que no está siendo agresiva, está alerta, ya que tiene los músculos de los brazos tensos, que gracias a su camiseta de manga corta se aprecian demasiado bien.
Y en ese momento me doy cuenta de que si hubiese querido hacerme algo, ya lo habría hecho.
Hemos pasado juntos varias horas a solas y a su alcance tenía cuchillos, tijeras y punzones, aunque con el cuerpo que tiene estoy segura de que podría manejarme a su antojo sólo con una mano. Suspiro profundamente y todo mi cuerpo se relaja.
— Discúlpame Santana, no quería ser desagradable — por un momento me siento tentada a contarle lo que pasó, pero finalmente decido que no es buena idea — puedes acompañarme al coche si quieres.
— Prefiero llevarte en la moto y así tendré una excusa para verte mañana — me dice sonriendo y dando despacio un paso hacia mí.
— ¿Quieres verme mañana? — mi corazón se acelera de golpe.
— Me costará separarme de ti esta noche — lo dice seria, con voz grave y juro que estoy a punto de sufrir un infarto.
Me quito el delantal y lo cuelgo al lado de la puerta. Santana me sigue y salimos juntas de la pastelería, me ayuda a cerrar la verja y me coge de la mano suavemente para guiarme hasta su moto.
Me siento hechizada por ella, he pasado de estar aterrada a estar encantada, me dejo llevar, es sólo un paseo en moto ¿no? Aunque no puedo negar que me siento seducida, nadie me ha tratado nunca así. Con Puck era diferente, él hacía lo que quería y si yo quería estar con él, era yo la que debía ponerse las pilas. Con Santana… soy capaz de pensar, soy capaz de decir no y no le parece mal, simplemente se adapta. Me tiene desconcertada y enganchada a partes iguales.
— Nunca he subido a una moto — le digo observando la impresionante máquina.
— Sólo tienes que agarrarte fuerte a mí — dice provocador lo que me arranca una sonrisa — eso está mejor, me gusta verte sonreír — bajo la mirada avergonzada — Brittany, mírame — me levanta la barbilla con suavidad hasta que nuestros ojos se encuentran — jamás te haría daño, confía en mí por favor, me siento obligada a protegerte, es algo que no puedo explicar, tú sólo… déjate llevar ¿vale?
Me ayuda a subir a la moto y me coloca con suavidad un casco que estaba sujeto al asa trasera y ella se coloca el otro. Se sube a la moto y me coge las manos colocándolas alrededor de su cuerpo, que pese a la cazadora de cuero me resulta toda una tentación, es una mujer fuerte, de eso no me cabe duda.
Arranca suavemente y vamos a una velocidad tan baja que realmente parece que la moto ni siquiera está encendida, sonrío por el detalle, cojo algo más de confianza y le guio por las calles.
Realmente no son muchas, ya que vivo a dos manzanas de mi negocio, pero estoy disfrutando del paseo.
Cuando le indico cual es mi portal, detiene la moto justo delante de la puerta del garaje. Baja de la moto y se quita el casco, me ayuda a bajar y me quita el casco a mí con la misma delicadeza con la que me lo puso. Nos miramos durante unos segundos a los ojos, lo que me provoca que la sangre se me acelere en las venas, mi corazón late con demasiada energía y siento unas ganas irresistibles de besarla.
Y antes de pensar en lo que hago, me pongo de puntillas y le doy un beso en la comisura de los labios, ha sido intencionado, lo que supone todo un escándalo si lo comparo con la vida monacal que he llevado desde que Noah se fue de casa.
— Gracias por el paseo
— Un placer — me dice acariciándome la cara dulcemente, una caricia que me enciende
— ¿a qué hora paso a buscarte mañana?
— No es necesario que vengas a buscarme — me mira seria y frunce el ceño, lo que me hace sonreír — además Mike no está, así que abro yo y abrimos a las siete de la mañana
— Estaré aquí a las siete menos veinte — dice con seguridad.
— Eso no te deja mucho tiempo para dormir — digo coqueta.
— Después de tu beso no creo que pueda dormir — me besa dulcemente en la mejilla — dulces sueños Brittany, te veré en unas horas.
No soy capaz de decir nada más, si lo hago soy capaz de obligarle a subir a casa y probablemente acabe violándole en el ascensor y no es que no lo desee, porque cada terminación nerviosa de mi cuerpo grita que lo haga, pero después de todos los cambios de humor que he tenido estando con ella, creo que obligarle a subir para aprovecharme de ella sexualmente sería la forma más rápida de no volver a verle. Y quiero volver a verle, necesito volver a verle.
Tímidamente saco las llaves del bolso y entro en el portal con la firme intención de no mirar atrás, pero no lo consigo, cuando voy a cerrar la puerta, me giro y le veo observándome, lo que me calienta la sangre más aún. ¡Por Dios! ¡Voy a arder por combustión espontánea!
***********************************************************
Y buenos amiguitos hasta aquí con el primer capítulo del día, espero que les haya gustado, me harían muy feliz si comentaran que les pareció.
Cuídense muchísimo, los amo y sean felices
P.D: En el siguiente capítulo les daré algunas opciones para hacer el trato
***********************************************************
CAPÍTULO 9
Tina inmediatamente me pone al día sobre lo nervioso y agitado que estaba Mike, al parecer su madre no debería coger el coche porque hace algo más de medio año tuvo un coágulo en el cerebro y a veces se desorienta, me pongo en alerta casi al instante… ¿La madre de Mike tuvo un coágulo y yo no me he enterado? Voy a tener una conversación muy seria con mi mano derecha. Se ha estado haciendo cargo de todo mi negocio, haciendo un montón de horas extras que no quiere que le pague, no deja de pensar en cosas para mejorar la calidad y hacer que vengan más clientes, pero ¿no tiene confianza como para decirme que su madre le necesita? Estoy enfadada y a la vez muy halagada. Es contradictorio y frustrante.
Dejo a Sofía en su pequeño parque en el rincón que crearon para nosotras y yo me pongo el delantal en cuanto entro en la cocina, pero estoy demasiado distraída y soy consciente de que voy a terminar el día cortándome, quemándome, tirando algo y poniendo todo hecho un cristo… o quizá todo a la vez.
Miro los encargos que tenemos que hacer hoy más los pedidos para reponer en la zona de pastelería y panadería. Me concentro un par de segundos y me pongo manos a la obra.
Lo primero que tengo que hacer es sacar las cookies de chocolate que Mike dejó en el horno antes de irse, este hombre está en todo. Tina se asoma a la cocina para ver si necesito ayuda, lo que me hace reír, durante años me he encargado yo de todo, puede que haya delegado mucho en Mike, pero eso no significa que no sea capaz de hacerme cargo de mi negocio, por supuesto ella no lo hace con esa intención, es que ella es así, amable, diligente y siempre dispuesta a echar una mano.
Saco las galletas y cuando las coloco en su sitio en el mostrador me doy cuenta de que la guapa desconocida me está mirando sentada en una de los taburetes de la barra en la zona de cafetería. Me sonrojo e intento por todos los medios disimular, pero creo que no lo consigo, pues Tina me mira y sonríe pícaramente.
Tímidamente vuelvo a la cocina sin mirar a la mujer que me pone cardiaca y entro como alma que lleva el diablo. Lo siguiente de la lista es preparar una tarta de cumpleaños que vendrán a recoger mañana por la mañana. Saco todos los ingredientes y los dispongo para empezar a hornear los bizcochos.
— Si te escondes aquí nunca podrás conocer a esa diosa— la voz de Rachel me sobresalta — perdona, no quería asustarte.
— Hola Rachel, ¿qué haces aquí? — pregunto distraídamente.
— Confirmar que estás loca de remate — mira a Sofía que está en sus brazos — ¿verdad que a mamá le ha dado algo raro a la cabeza? Con lo buena que está esa mujer y ella aquí, embadurnada de harina.
— No es harina, es azúcar glas y no me escondo, tengo trabajo.
— ¡Claaaro que sí!
Sale de la cocina muerta de risa y mi hija riéndose con ella, sé que no tiene ni idea de por qué se está riendo, pero es muy triste que hasta mi pequeña se dé cuenta de que he puesto una excusa absurda para no volver a toparme con la mujer que me va a volver loca.
Meto las dos bandejas con la masa en el horno doble y empiezo a trabajar el fondant para modelar el circuito de carreras de la tarta. Intento concentrarme, de verdad que lo intento, pero no hay forma. Sólo pienso en sonrisas de infarto, en miradas intensas de color café, en su voz dulce pero a la vez grave que me envuelve como caramelo caliente… ¡Dios! ¡Tengo un problema enorme!
Cojo un trozo de corcho blanco y empiezo a modelarlo con la forma del coche de carreras que el niño ha pedido, después lo forraré con porcelana fría y lo decoraré con pintura, será un bonito recuerdo. Ha sido otra de las ideas de Mike y la verdad es que madres y niños están encantados.
— Buenas tardes — la voz como caramelo fundido resuena en la silenciosa cocina.
— ¡Dios! ¡qué susto! — grito intentando sujetar el bote de pintura en las manos.
— Llevo horas esperando a que me recomiendes algo que comer — dice acercándose a mi.
— No… no puedes estar aquí.
— Tina me ha dicho que sí, que ya habéis cerrado y que Rachel se ha llevado a Sofía
— me mira fijamente — es una réplica casi exacta — dice señalando con la cabeza el coche que estoy modelando.
— Disculpa, ¿casi exacta? — le miro con el ceño fruncido — es exacta.
— Me temo que no, el modelo de este año es diferente, el chasis hace un tobogán hasta llegar al morro y es un poco más ancho, el ala trasera tiene que ser más estrecha y debes quitarle el plano y el tubo de escape va en el medio, no en el lado derecho.
Miro atónita a la guapísima mujer que me está dando una lección con sus conocimientos de Fórmula 1, intento despegar mis ojos de los suyos para centrarme en el dibujo que tengo delante y sobre el que me estoy guiando para el modelaje cuando en una esquina veo que pone F138.
— Debería poner F14T, que es el modelo de este año. Por cierto, mi nombre es Santana — bajo la cabeza y sonrío.
— Yo me llamo Brittany.
— Un placer Brittany, dime, ¿cuál es tu especialidad?
Durante unos segundos vuelvo a mirarle fijamente a los ojos, es como perderse en la obscuridad, me hechiza con su mirada intensa y su preciosa sonrisa, e inmediatamente tengo que retirar mis ojos de los suyos porque en mi mente han empezado a proyectarse imágenes escandalosas sobre ella, un bol de chocolate fundido y yo encima de la mesa de trabajo.
— ¿Eres nueva en el barrio? — le pregunto mientras cojo un plato.
— No soy de aquí, estoy de vacaciones.
— Mmmm y ¿cómo has conocido mi pastelería? — vuelvo a preguntar mientras abro el refrigerador.
— No te lo creerás, pero desde que he llegado no he dejado de oír hablar de ella.
— Pues si los comentarios han sido buenos, espero estar a la altura — digo mientras corto un trozo de tarta.
Le pongo delante el plato con un par de cupcakes Red Velvet y un buen trozo de tarta de zanahoria y nueces, mientras le dedico una sonrisa.
— Con esta pinta estoy segura de que lo estarás — me dice sonriendo de nuevo.
— ¿Quieres algo de beber? — necesito cambiar de tema, me pone cardiaca mirarle.
— Creo que también me dejaré aconsejar — dice como quien no quiere la cosa mientras coge un cupcake.
Salgo de la cocina y un par de minutos más tarde vuelvo con un vaso y una taza en las manos, dos de nuestras especialidades, el frappé de capuchino, dado que estamos en invierno, no es que apetezca mucho algo frío, pero también he traído una taza de café moka.
— No sabía lo que te apetecería así que he traído una bebida fría y otra caliente.
— Creo que me beberé las dos, ¿así servís aquí el café? — asiento encantada — no me extraña que siempre esté el local lleno, por cierto esta magdalena roja está muy rica.
— ¿Magdalena roja? — ya me ha tocado la fibra sensible — son cupcakes Red Velvet con frosting de crema de queso, no es una magdalena — creo que me he pasado en el tono.
— Perdona, no quería ofenderte — dice quitándome los cafés de las manos y poniéndolos en la mesa — lo siento, no menospreciaba tu trabajo, es que no sabía cómo se llamaba.
— Tranquila — digo bajando la vista — es normal, la mayoría de los hombres y algunas mujeres no aprecian las diferencias.
El ambiente se ha enrarecido ligeramente y soy consciente de que ha sido por mi culpa, de repente era como estar delante de Puck intentando que me ayudase a decidir los sabores para los cupcakes del concurso. Yo elaborando sabores con mojitos, con crema de café, con galletas oreo y él solo me decía que sabían a lima, café y galletas… era muy frustrante.
Afortunadamente, la guapísima mujer que tengo delante, cambia de tema y me pregunta sutilmente por el nombre de la tarta que se está comiendo, lo que me hace sonreír, no tendrá ni idea de pastelería, pero al menos quiere disimularlo.
Unos minutos más tarde, le estoy sirviendo otro trozo de tarta de zanahoria mientras nos reímos sin parar cuando me cuenta que la única vez que se metió en la cocina fue para ayudar a su madre a hacer una tarta de cumpleaños para su hermano y por más que su madre se hartó de paciencia, finalmente la echó de la cocina.
Charlamos animadamente durante más de dos horas. Es increíble lo fácil que me resulta hablar con ella, es una mujer divertida, se fija en los detalles e incluso dice que quiere apuntarse al curso de galletas que voy a dar en primavera, lo que me hace reír de nuevo.
Cuando miro el reloj me doy cuenta de que es casi la una de la mañana. Me levanto nerviosa del taburete y empiezo a recoger el fondant, la glasa y los papeles que me han servido de guía para el coche de Fórmula 1 que al parecer no es el modelo de este año.
— Déjame que te ayude, así terminaremos antes y después te acompañaré a tu casa — dice poniéndose detrás y a mí se me para el corazón.
— No creo que sea necesario — intento esquivarle pero me cierra el paso.
— Sé que no es necesario, pero me sentiré mejor si me aseguro de que no te ocurre nada — me muevo nerviosa y miro al suelo — ¿te pongo nerviosa? — me dice susurrándome al oído.
Está muy cerca de mí, tengo las manos apoyadas en la encimera, las de ella a cada lado de las mías, cerca pero sin tocarme, le siento detrás de mí, pero ni siquiera me roza la espalda, su cálido aliento me acaricia la nuca. Pero en vez de ser consciente de que este es probablemente el momento más erótico que he vivido en mi vida, sólo puedo recordar al extorsionista, cuando me aprisionó contra el coche y me metió mano descaradamente, un ataque de rabia se apodera de mí y consigo zafarme de entre sus brazos.
— No vuelvas a acercarte tanto por favor — le pido intentando mantener a raya el ataque de pánico que estoy sufriendo-
— Brittany, ¿qué pasa? — da un paso hacia mí y yo doy uno hacia atrás — no voy a hacerte daño, siento haberme lanzado, me resultas irresistible.
— No… yo no puedo — digo atravesando la cocina hasta la puerta — creo que deberías irte ya.
— No. Si no quieres que intente seducirte de nuevo vale, pero no voy a dejarte sola de madrugada, te acompañaré a casa y me despediré de ti como una dama.
— Ya te he dicho que no es necesario.
— Creo que sí que lo es, no quiero que tengas esa imagen de mí, te prometo que conmigo estarás a salvo.
Casi tengo ganas de llorar. No me he sentido a salvo desde que Noah me dijo que me dejaba para irse a vivir con su amante, cada día he tenido esa sensación de que algo malo estaba a punto de pasar, cada día he estado nerviosa, síntomas que empeoraron drásticamente cuando el extorsionista me abordó a la salida de la guardería de Sofía.
Observo a Santana durante unos segundos, está impasible, mantiene la distancia pero sin dejar de mirarme, por la postura de su cuerpo me doy cuenta de que no está siendo agresiva, está alerta, ya que tiene los músculos de los brazos tensos, que gracias a su camiseta de manga corta se aprecian demasiado bien.
Y en ese momento me doy cuenta de que si hubiese querido hacerme algo, ya lo habría hecho.
Hemos pasado juntos varias horas a solas y a su alcance tenía cuchillos, tijeras y punzones, aunque con el cuerpo que tiene estoy segura de que podría manejarme a su antojo sólo con una mano. Suspiro profundamente y todo mi cuerpo se relaja.
— Discúlpame Santana, no quería ser desagradable — por un momento me siento tentada a contarle lo que pasó, pero finalmente decido que no es buena idea — puedes acompañarme al coche si quieres.
— Prefiero llevarte en la moto y así tendré una excusa para verte mañana — me dice sonriendo y dando despacio un paso hacia mí.
— ¿Quieres verme mañana? — mi corazón se acelera de golpe.
— Me costará separarme de ti esta noche — lo dice seria, con voz grave y juro que estoy a punto de sufrir un infarto.
Me quito el delantal y lo cuelgo al lado de la puerta. Santana me sigue y salimos juntas de la pastelería, me ayuda a cerrar la verja y me coge de la mano suavemente para guiarme hasta su moto.
Me siento hechizada por ella, he pasado de estar aterrada a estar encantada, me dejo llevar, es sólo un paseo en moto ¿no? Aunque no puedo negar que me siento seducida, nadie me ha tratado nunca así. Con Puck era diferente, él hacía lo que quería y si yo quería estar con él, era yo la que debía ponerse las pilas. Con Santana… soy capaz de pensar, soy capaz de decir no y no le parece mal, simplemente se adapta. Me tiene desconcertada y enganchada a partes iguales.
— Nunca he subido a una moto — le digo observando la impresionante máquina.
— Sólo tienes que agarrarte fuerte a mí — dice provocador lo que me arranca una sonrisa — eso está mejor, me gusta verte sonreír — bajo la mirada avergonzada — Brittany, mírame — me levanta la barbilla con suavidad hasta que nuestros ojos se encuentran — jamás te haría daño, confía en mí por favor, me siento obligada a protegerte, es algo que no puedo explicar, tú sólo… déjate llevar ¿vale?
Me ayuda a subir a la moto y me coloca con suavidad un casco que estaba sujeto al asa trasera y ella se coloca el otro. Se sube a la moto y me coge las manos colocándolas alrededor de su cuerpo, que pese a la cazadora de cuero me resulta toda una tentación, es una mujer fuerte, de eso no me cabe duda.
Arranca suavemente y vamos a una velocidad tan baja que realmente parece que la moto ni siquiera está encendida, sonrío por el detalle, cojo algo más de confianza y le guio por las calles.
Realmente no son muchas, ya que vivo a dos manzanas de mi negocio, pero estoy disfrutando del paseo.
Cuando le indico cual es mi portal, detiene la moto justo delante de la puerta del garaje. Baja de la moto y se quita el casco, me ayuda a bajar y me quita el casco a mí con la misma delicadeza con la que me lo puso. Nos miramos durante unos segundos a los ojos, lo que me provoca que la sangre se me acelere en las venas, mi corazón late con demasiada energía y siento unas ganas irresistibles de besarla.
Y antes de pensar en lo que hago, me pongo de puntillas y le doy un beso en la comisura de los labios, ha sido intencionado, lo que supone todo un escándalo si lo comparo con la vida monacal que he llevado desde que Noah se fue de casa.
— Gracias por el paseo
— Un placer — me dice acariciándome la cara dulcemente, una caricia que me enciende
— ¿a qué hora paso a buscarte mañana?
— No es necesario que vengas a buscarme — me mira seria y frunce el ceño, lo que me hace sonreír — además Mike no está, así que abro yo y abrimos a las siete de la mañana
— Estaré aquí a las siete menos veinte — dice con seguridad.
— Eso no te deja mucho tiempo para dormir — digo coqueta.
— Después de tu beso no creo que pueda dormir — me besa dulcemente en la mejilla — dulces sueños Brittany, te veré en unas horas.
No soy capaz de decir nada más, si lo hago soy capaz de obligarle a subir a casa y probablemente acabe violándole en el ascensor y no es que no lo desee, porque cada terminación nerviosa de mi cuerpo grita que lo haga, pero después de todos los cambios de humor que he tenido estando con ella, creo que obligarle a subir para aprovecharme de ella sexualmente sería la forma más rápida de no volver a verle. Y quiero volver a verle, necesito volver a verle.
Tímidamente saco las llaves del bolso y entro en el portal con la firme intención de no mirar atrás, pero no lo consigo, cuando voy a cerrar la puerta, me giro y le veo observándome, lo que me calienta la sangre más aún. ¡Por Dios! ¡Voy a arder por combustión espontánea!
***********************************************************
Y buenos amiguitos hasta aquí con el primer capítulo del día, espero que les haya gustado, me harían muy feliz si comentaran que les pareció.
Cuídense muchísimo, los amo y sean felices
P.D: En el siguiente capítulo les daré algunas opciones para hacer el trato
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Buenas tardes/noches/días depende de la hora en la cual leas esto, por fin logre terminar mi entrenamiento y quería actualizar ahora que tengo un micro descanso.
**********************************************************
CAPÍTULO 10
Subo a casa como en una nube. Estar con Santana es lo más emocionante que me ha pasado nunca, salvo el nacimiento de Sofía, pero claro, no son situaciones comparables. Lo de Santana es más como la aventura que nunca he vivido.
Me meto en la cama sin gota de hambre y sin estar cansada, algo curioso dado el día tan largo que ha resultado ser, pero es que no puedo dejar de sonreír como una idiota al pensar en el pecaminoso y muy atractiva chica que me ha traído a casa.
Sus maravillosos ojos cafés casi negros me persiguen en sueños, con palabras dulces y seductoras, su cuerpo me incita a perder el control, el deseo me nubla la razón y lo único que puedo hacer es dejarme llevar, perderme en la vorágine de sentimientos que se despiertan en mi interior cuando le tengo tan cerca de mí que sus caricias me queman la piel provocándome oleadas de un placer ya casi olvidado.
Mis manos vuelan por su cuerpo, mis labios se pierden en la piel de su cuello que es como lava ardiente con sabor a mango, papaya y fruta de la pasión. Así es San, una explosión de sabores tropicales, exóticos, excitantes, lujuriosos y que incitan a la vida. Algo totalmente diferente a todo lo que yo había conocido.
Cuando el reloj suena no puedo creerme las imágenes que estaba viendo en mi cabeza, pero inexplicablemente y pese a dormir tan solo unas pocas horas, me levanto de un salto de la cama y me meto en la ducha con las pilas totalmente cargadas.
El agua resbala por mi cuerpo y no puedo cerrar los ojos porque mi calenturienta mente se empeña en hacerme imaginar que es Santana quien me acaricia con dulzura, precisión y dedicación, mi cuerpo se estremece, mi sangre se acelera, el corazón bombea a marchas forzadas y tengo que hacer un esfuerzo titánico para no dejarme llevar por mi imaginación y disfrutar del que probablemente sería el mejor orgasmo de mi vida. Pero en el último minuto consigo reprimirme cuando pienso en cómo voy a mirar a la cara a la mujer que protagoniza mis fantasías.
Me seco el pelo a toda velocidad, mi debate en la ducha ha hecho que me retrase y por nada del mundo quiero hacer esperar a Santana, hoy me gustaría vestirme de forma sexy, pero tengo dos problemas, el primero es que toda la ropa que tengo es funcional, hace siglos que no me compro nada sexy y el segundo es que hoy me espera un día tan largo como el de ayer, así que descarto los tacones y finalmente me pongo unos vaqueros que me resultan muy cómodos, una camiseta ligeramente ajustada de color rojo y mis bailarinas rojas, justo cuando me pongo el abrigo, suena el timbre y todo mi cuerpo se acelera por la emoción.
Cuando salgo a la calle aún es de noche, pero puedo verle perfectamente, apoyada en su moto, con los brazos cruzados y ese aspecto de mujer imposiblemente atractivo. Tardo unos segundos en reaccionar y comenzar a caminar hacia ella al otro lado de la calle.
— Buenos días Brittany — me da un beso en la mejilla que me hace estremecer — estás preciosa.
— Buenos días Santana — le digo roja como un tomate.
Como la noche anterior me ayuda a subir a la moto y me pone el casco, se pone el suyo, se sube a la moto y me coge las manos para que le rodee el cuerpo, tengo que ahogar un gemido recordando la escena de la ducha y agradezco llevar el casco y que no pueda verme la cara ahora mismo.
Unos minutos más tarde llegamos a la pastelería, son algo menos de las siete lo que me dará tiempo para empezar el día invitando a Santana a tomar un café.
Entramos y cuando le estoy sirviendo un café moka, Tina entra en la pastelería y su cara es un poema cuando se fija en la mujer tan atractiva que está tomando café. Y no la culpo cualquier mujer duda de su sexualidad nada más de verla.
— ¡Vaya! — exclama mirándome fijamente — ¡pues sí que habéis madrugado! — la fulmino con la mirada pero me ignora totalmente.
— Buenos días Tina — dice Santana intentando ocultar una sonrisa.
— Buenos días Santana, ¡hola jefa! — se acerca a mí y me dedica una sonrisa pícara.
— Bueno, después de que todos nos hayamos saludado me voy a la cocina que los hornos ya deben estar calientes — Tina estalla en una carcajada y Santana sonríe maliciosamente.
— ¡Déjalo jefa! Ya lo hago yo, no vaya a ser que te quemes — y se mete en la cocina antes de que pueda asesinarla.
Me muevo nerviosa por la cafetería intentando no mirar a Santana. Es que no sé qué me pasa estando con ella, es como si mi cerebro se centrarle sólo en seducirle, es muy extraño, si ella está cerca estoy alterada físicamente pero muy centrada mentalmente, aunque parece que todo lo que digo es con doble intención. Y eso que intento no pensar en mi fantasía aunque la tengo clavada en mi mente.
Al cabo de unos minutos, mientras estoy colocando las cartas de las mesas, Santana me rodea la cintura con una mano y me gira para que le mire.
— Será mejor que me vaya — me dice muy cerca de mi boca, intento hablar pero no puedo — ¿puedo volver a verte? — asiento porque creo que me he quedado sin la capacidad de hablar — entonces nos veremos mañana Brittany.
Me da un beso en el dorso de la mano y creo que estoy a punto de derretirme. Jamás en mi vida había conocido a un hombre o mujer como ella, me trata con una delicadeza extrema y sus caricias son sutiles pero me vuelven loca.
Me quedo clavada en el suelo mirando extasiada a la mujer que definitivamente me ha robado la voluntad, porque esta mujer tiene que ser una bruja o algo así. Nunca he creído en la magia, pero no es normal lo que siento por ella.
Justo antes de salir por la puerta, se pone la cazadora y se gira para mirarme durante unos segundos, mi corazón se para de golpe y he dejado de respirar, se coloca el cuello y me sonríe. Y tengo que concentrarme para no dejarme caer al suelo o salir corriendo detrás de ella, no lo tengo claro.
Durante el resto del día, Tina me lanza miraditas, sonrisas pícaras y sutiles comentarios, esta chica es de lo que no hay. Pero el momento álgido del día es cuando a media mañana Rachel entra en la cocina exigiéndome detalles de mi noche con la diosa de ojos oscuros.
No da crédito a lo que le cuento y me regaña una y otra vez por no lanzarme a vivir la aventura, pero cuando le cuento la escena de la cocina, cuando me puse tan nerviosa, simplemente se queda callada y me abraza. Por eso es mi mejor amiga, porque me conoce tan bien como yo misma.
Al medio día voy a buscar a mi hija a la guardería, iremos a comer con Rachel y Quinn para que puedan burlarse un poco de mí y después volveré a la pastelería, pero aprovecharé la hora de la comida para llamar a Mike y saber cómo se encuentra su madre.
Mi mano derecha me informa de que su madre está estable, tuvieron que operarla de noche, pero al parecer todo está yendo bien, aunque por su tono de voz sé que no me lo está contando todo, si las cosas fuesen tan bien como me las está pintando no estaría tan preocupado.
No soy capaz de comer tranquila, de modo que vuelvo a la guardería e inscribo a Sofía para que pase las tardes allí también, no me ponen ningún problema, la directora es una de mis mejores clientas y entiende que ahora que Mike no está yo necesite que la pequeña pase más horas allí.
Una vez que soluciono el tema de la niña, me voy al hospital. Y cuando veo a Mike totalmente destrozado en la sala de espera de la UCI se me cae el alma a los pies.
— Mike… — la verdad es que no sé qué puedo decirle, jamás le había visto tan vulnerable.
— Hola jefa — dice intentando recomponerse.
— No quiero regañarte, pero… ¿por qué no me lo dijiste?
— ¿Con todo por lo que tú estás pasando? — hace un gesto y quiero darme contra una pared, no he sido una buena amiga.
— Mike, ¿puedo hacer algo por ti o por ella?
— Sólo nos queda esperar a que se recupere.
— ¿Y se va a recuperar?
— No lo creo probable y los médicos tampoco… me siento culpable, el día anterior me pidió que la llevase a hacer la compra pero estaba tan liado con la fiesta de disfraces,
Tina se enfadó conmigo y se me olvidó, se puso nerviosa y no sé de dónde sacó las llaves del coche.
— Debiste contármelo Mike, te habría liberado del trabajo y lo sabes.
— Por eso mismo no lo hice… Brittany — me sorprendo, es la primera vez que usa mi nombre — mi madre no ha sido una buena madre, nunca ha sido cómo eres tú con Sofía, yo me crie con mi padre, entre hornos y bizcochos, mientras ella vivía la vida.
Durante casi una hora me cuenta lo solo que se sentía cuando era un crio porque su padre trabajaba muchísimas horas para mantenerle y pagarle unos buenos estudios, mientras su madre iba de hombre en hombre, de ciudad en ciudad.
Me explica que sus padres nunca se casaron y que su madre ha llevado una vida muy loca y desenfrenada, pero que inexplicablemente se siente obligado a cuidar de ella, incluso pese a que ella volvió a su vida hace seis meses, cuando sufrió el coágulo en la cabeza y el hospital le llamó, llevaban más de tres años sin verse.
No sé cómo puedo ayudarle. Entiendo lo que es tener una relación fría con tus padres, los míos se marcharon a Londres en cuanto pudieron, ese siempre fue el sueño de mi madre y en cuanto la vida les dio la oportunidad se largaron sin mirar atrás. Yo me quedé con dieciocho años en casa de mi tía que cuidó de mí hasta el día que falleció dos años más tarde, estudié cocina por ella, era su pasión.
Una hora más tarde, me despido de Mike y vuelvo a la pastelería, meto a Tina en la cocina y la obligo a que me cuente qué es lo que les pasó a ellos dos, se enfadaron por un malentendido y yo me he empeñado en que lo solucionen, Mike la necesita y sé que ella está deseando estar con él.
Finalmente termino dándole dos días libres para que esté con su prometido, cosa de la que acabo de enterarme también. Y la mando al hospital con una cajita con galletas en forma de corazón decoradas con chocolate.
En un minuto libre que tengo le mando un mensaje a Rachel y me contesta que me ocupe de todo, que ella se hará cargo de Sofía, dice que cuanto más tiempo pasa con ella, más se convence para no tener hijos y que a Quinn también le viene bien saber lo que se siente. No puedo evitar reírme con mi mejor amiga, es la mejor.
Y cuando por fin se termina el día y estoy preparada para cerrar, aparece Santana con una rosa roja preciosa que me entrega justo antes de darme un beso en la mejilla, sólo tengo una hora como mucho, hoy quiero dormir con mi hija, se lo explico a Santana y lo entiende perfectamente.
— ¿Has cenado? — me pregunta de repente.
— ¿Cenar? Llevo todo el día de un lado al otro casi sin tiempo ni para respirar.
— ¿Sería una idea muy descabellada si vamos a buscar ahora a la niña y cenamos las tres juntas? — le miro sorprendida — tranquila, te hablo de ir a un restaurante — sonrío y me acaricia la mano dulcemente.
— Seguro que Sofía ya ha cenado — miro el reloj — de hecho, a estas horas ya estará durmiendo.
— Entonces lo dejaremos para mañana.
Media hora más tarde me acompaña hasta el coche y se despide de mí con un beso en el dorso de la mano. Conduzco como una autómata hasta la casa de Rachel y cuando encuentro aparcamiento necesito unos segundos para tranquilizarme, tengo que borrar esta sonrisa estúpida de la cara o mi amiga me someterá al tercer grado.
Cuando subo a casa de Rachel, Quinn me saluda cariñosamente y antes de que coja a mi hija me informa de que la policía sigue sin tener nada acerca del asesinato de Noah, al parecer ha hablado con un fiscal amigo suyo y le ha dicho que no van a presentar cargos contra mí porque el caso no sólo es que no se sostenga, es que hace aguas por todas partes.
Me quita un peso de encima, bueno, una parte al menos, porque realmente no es que me hayan exculpado, es que no pueden culparme, que no es lo mismo. Yo estoy prácticamente segura de que fue el extorsionista quien lo mató, Quinn y Rachel opinan lo mismo que yo, pero no podemos contárselo a la policía porque tendría que contarles el ataque, la extorsión y el pago que le hice. Lo que me pone en una situación complicada.
Rachel me prepara algo rápido de comer y disfruto de un sándwich vegetal riquísimo mientras les cuento a mis amigas lo emocionante que es pasar el tiempo con Santana.
Las dos se muestras encantadas de que por fin haya encontrado a una mujer que me haga suspirar y por cómo lo expresan, parece que estaban realmente preocupadas porque me negase a intentar ser feliz.
También les cuento lo que ha ocurrido con la madre de Mike y lo mal que éste se siente por no haber hecho lo que ella le pedía, Quinn toma nota y me dice que preguntará a un amigo suyo que es médico, a ver si hay alguna solución.
Más feliz de lo que me he sentido en meses, cojo a mi preciosa hija que aún duerme y la meto con cuidado en el coche, me da pena que pueda despertarse, pero necesito estar con mi niña, últimamente apenas paso tiempo con ella y después de escuchar la historia de Mike, estoy más empeñada que nunca en que mi dulce Sofía nunca hable así de mí.
Afortunadamente la niña no se despierta y la meto en su camita a dormir y como me da un poco de pena, me tumbo con ella, sé que es más por mí que por ella, cuando duerme en casa de Rachel, lo hace en su cama y duerme del tirón toda la noche. Pero hoy especialmente no me siento preparada para que durmamos en habitaciones distintas.
*********************************************************
Y hasta aquí con el segundo capítulo del día, espero que les haya gustado.
Si te gusto agradecería que me dejaras un comentario. MIL GRACIAS POR LEER
P.D: Aquí es donde ustedes elijen.
Si llegamos a cierto número de comentarios *se va a especificar en la siguiente actu* que prefieren ¿Capítulos o una adaptación de un pequeñito libro o microhistoria o como carajos se le llame?
Dependiendo de lo que elijan les daré el trato, si para cuando vuelva con el siguiente capítulo aún no hay comentarios o están empatados los “votos” hare algo para que sea justo para todas/os
BESOS Y ABRAZOS
LOS AMO
**********************************************************
CAPÍTULO 10
Subo a casa como en una nube. Estar con Santana es lo más emocionante que me ha pasado nunca, salvo el nacimiento de Sofía, pero claro, no son situaciones comparables. Lo de Santana es más como la aventura que nunca he vivido.
Me meto en la cama sin gota de hambre y sin estar cansada, algo curioso dado el día tan largo que ha resultado ser, pero es que no puedo dejar de sonreír como una idiota al pensar en el pecaminoso y muy atractiva chica que me ha traído a casa.
Sus maravillosos ojos cafés casi negros me persiguen en sueños, con palabras dulces y seductoras, su cuerpo me incita a perder el control, el deseo me nubla la razón y lo único que puedo hacer es dejarme llevar, perderme en la vorágine de sentimientos que se despiertan en mi interior cuando le tengo tan cerca de mí que sus caricias me queman la piel provocándome oleadas de un placer ya casi olvidado.
Mis manos vuelan por su cuerpo, mis labios se pierden en la piel de su cuello que es como lava ardiente con sabor a mango, papaya y fruta de la pasión. Así es San, una explosión de sabores tropicales, exóticos, excitantes, lujuriosos y que incitan a la vida. Algo totalmente diferente a todo lo que yo había conocido.
Cuando el reloj suena no puedo creerme las imágenes que estaba viendo en mi cabeza, pero inexplicablemente y pese a dormir tan solo unas pocas horas, me levanto de un salto de la cama y me meto en la ducha con las pilas totalmente cargadas.
El agua resbala por mi cuerpo y no puedo cerrar los ojos porque mi calenturienta mente se empeña en hacerme imaginar que es Santana quien me acaricia con dulzura, precisión y dedicación, mi cuerpo se estremece, mi sangre se acelera, el corazón bombea a marchas forzadas y tengo que hacer un esfuerzo titánico para no dejarme llevar por mi imaginación y disfrutar del que probablemente sería el mejor orgasmo de mi vida. Pero en el último minuto consigo reprimirme cuando pienso en cómo voy a mirar a la cara a la mujer que protagoniza mis fantasías.
Me seco el pelo a toda velocidad, mi debate en la ducha ha hecho que me retrase y por nada del mundo quiero hacer esperar a Santana, hoy me gustaría vestirme de forma sexy, pero tengo dos problemas, el primero es que toda la ropa que tengo es funcional, hace siglos que no me compro nada sexy y el segundo es que hoy me espera un día tan largo como el de ayer, así que descarto los tacones y finalmente me pongo unos vaqueros que me resultan muy cómodos, una camiseta ligeramente ajustada de color rojo y mis bailarinas rojas, justo cuando me pongo el abrigo, suena el timbre y todo mi cuerpo se acelera por la emoción.
Cuando salgo a la calle aún es de noche, pero puedo verle perfectamente, apoyada en su moto, con los brazos cruzados y ese aspecto de mujer imposiblemente atractivo. Tardo unos segundos en reaccionar y comenzar a caminar hacia ella al otro lado de la calle.
— Buenos días Brittany — me da un beso en la mejilla que me hace estremecer — estás preciosa.
— Buenos días Santana — le digo roja como un tomate.
Como la noche anterior me ayuda a subir a la moto y me pone el casco, se pone el suyo, se sube a la moto y me coge las manos para que le rodee el cuerpo, tengo que ahogar un gemido recordando la escena de la ducha y agradezco llevar el casco y que no pueda verme la cara ahora mismo.
Unos minutos más tarde llegamos a la pastelería, son algo menos de las siete lo que me dará tiempo para empezar el día invitando a Santana a tomar un café.
Entramos y cuando le estoy sirviendo un café moka, Tina entra en la pastelería y su cara es un poema cuando se fija en la mujer tan atractiva que está tomando café. Y no la culpo cualquier mujer duda de su sexualidad nada más de verla.
— ¡Vaya! — exclama mirándome fijamente — ¡pues sí que habéis madrugado! — la fulmino con la mirada pero me ignora totalmente.
— Buenos días Tina — dice Santana intentando ocultar una sonrisa.
— Buenos días Santana, ¡hola jefa! — se acerca a mí y me dedica una sonrisa pícara.
— Bueno, después de que todos nos hayamos saludado me voy a la cocina que los hornos ya deben estar calientes — Tina estalla en una carcajada y Santana sonríe maliciosamente.
— ¡Déjalo jefa! Ya lo hago yo, no vaya a ser que te quemes — y se mete en la cocina antes de que pueda asesinarla.
Me muevo nerviosa por la cafetería intentando no mirar a Santana. Es que no sé qué me pasa estando con ella, es como si mi cerebro se centrarle sólo en seducirle, es muy extraño, si ella está cerca estoy alterada físicamente pero muy centrada mentalmente, aunque parece que todo lo que digo es con doble intención. Y eso que intento no pensar en mi fantasía aunque la tengo clavada en mi mente.
Al cabo de unos minutos, mientras estoy colocando las cartas de las mesas, Santana me rodea la cintura con una mano y me gira para que le mire.
— Será mejor que me vaya — me dice muy cerca de mi boca, intento hablar pero no puedo — ¿puedo volver a verte? — asiento porque creo que me he quedado sin la capacidad de hablar — entonces nos veremos mañana Brittany.
Me da un beso en el dorso de la mano y creo que estoy a punto de derretirme. Jamás en mi vida había conocido a un hombre o mujer como ella, me trata con una delicadeza extrema y sus caricias son sutiles pero me vuelven loca.
Me quedo clavada en el suelo mirando extasiada a la mujer que definitivamente me ha robado la voluntad, porque esta mujer tiene que ser una bruja o algo así. Nunca he creído en la magia, pero no es normal lo que siento por ella.
Justo antes de salir por la puerta, se pone la cazadora y se gira para mirarme durante unos segundos, mi corazón se para de golpe y he dejado de respirar, se coloca el cuello y me sonríe. Y tengo que concentrarme para no dejarme caer al suelo o salir corriendo detrás de ella, no lo tengo claro.
Durante el resto del día, Tina me lanza miraditas, sonrisas pícaras y sutiles comentarios, esta chica es de lo que no hay. Pero el momento álgido del día es cuando a media mañana Rachel entra en la cocina exigiéndome detalles de mi noche con la diosa de ojos oscuros.
No da crédito a lo que le cuento y me regaña una y otra vez por no lanzarme a vivir la aventura, pero cuando le cuento la escena de la cocina, cuando me puse tan nerviosa, simplemente se queda callada y me abraza. Por eso es mi mejor amiga, porque me conoce tan bien como yo misma.
Al medio día voy a buscar a mi hija a la guardería, iremos a comer con Rachel y Quinn para que puedan burlarse un poco de mí y después volveré a la pastelería, pero aprovecharé la hora de la comida para llamar a Mike y saber cómo se encuentra su madre.
Mi mano derecha me informa de que su madre está estable, tuvieron que operarla de noche, pero al parecer todo está yendo bien, aunque por su tono de voz sé que no me lo está contando todo, si las cosas fuesen tan bien como me las está pintando no estaría tan preocupado.
No soy capaz de comer tranquila, de modo que vuelvo a la guardería e inscribo a Sofía para que pase las tardes allí también, no me ponen ningún problema, la directora es una de mis mejores clientas y entiende que ahora que Mike no está yo necesite que la pequeña pase más horas allí.
Una vez que soluciono el tema de la niña, me voy al hospital. Y cuando veo a Mike totalmente destrozado en la sala de espera de la UCI se me cae el alma a los pies.
— Mike… — la verdad es que no sé qué puedo decirle, jamás le había visto tan vulnerable.
— Hola jefa — dice intentando recomponerse.
— No quiero regañarte, pero… ¿por qué no me lo dijiste?
— ¿Con todo por lo que tú estás pasando? — hace un gesto y quiero darme contra una pared, no he sido una buena amiga.
— Mike, ¿puedo hacer algo por ti o por ella?
— Sólo nos queda esperar a que se recupere.
— ¿Y se va a recuperar?
— No lo creo probable y los médicos tampoco… me siento culpable, el día anterior me pidió que la llevase a hacer la compra pero estaba tan liado con la fiesta de disfraces,
Tina se enfadó conmigo y se me olvidó, se puso nerviosa y no sé de dónde sacó las llaves del coche.
— Debiste contármelo Mike, te habría liberado del trabajo y lo sabes.
— Por eso mismo no lo hice… Brittany — me sorprendo, es la primera vez que usa mi nombre — mi madre no ha sido una buena madre, nunca ha sido cómo eres tú con Sofía, yo me crie con mi padre, entre hornos y bizcochos, mientras ella vivía la vida.
Durante casi una hora me cuenta lo solo que se sentía cuando era un crio porque su padre trabajaba muchísimas horas para mantenerle y pagarle unos buenos estudios, mientras su madre iba de hombre en hombre, de ciudad en ciudad.
Me explica que sus padres nunca se casaron y que su madre ha llevado una vida muy loca y desenfrenada, pero que inexplicablemente se siente obligado a cuidar de ella, incluso pese a que ella volvió a su vida hace seis meses, cuando sufrió el coágulo en la cabeza y el hospital le llamó, llevaban más de tres años sin verse.
No sé cómo puedo ayudarle. Entiendo lo que es tener una relación fría con tus padres, los míos se marcharon a Londres en cuanto pudieron, ese siempre fue el sueño de mi madre y en cuanto la vida les dio la oportunidad se largaron sin mirar atrás. Yo me quedé con dieciocho años en casa de mi tía que cuidó de mí hasta el día que falleció dos años más tarde, estudié cocina por ella, era su pasión.
Una hora más tarde, me despido de Mike y vuelvo a la pastelería, meto a Tina en la cocina y la obligo a que me cuente qué es lo que les pasó a ellos dos, se enfadaron por un malentendido y yo me he empeñado en que lo solucionen, Mike la necesita y sé que ella está deseando estar con él.
Finalmente termino dándole dos días libres para que esté con su prometido, cosa de la que acabo de enterarme también. Y la mando al hospital con una cajita con galletas en forma de corazón decoradas con chocolate.
En un minuto libre que tengo le mando un mensaje a Rachel y me contesta que me ocupe de todo, que ella se hará cargo de Sofía, dice que cuanto más tiempo pasa con ella, más se convence para no tener hijos y que a Quinn también le viene bien saber lo que se siente. No puedo evitar reírme con mi mejor amiga, es la mejor.
Y cuando por fin se termina el día y estoy preparada para cerrar, aparece Santana con una rosa roja preciosa que me entrega justo antes de darme un beso en la mejilla, sólo tengo una hora como mucho, hoy quiero dormir con mi hija, se lo explico a Santana y lo entiende perfectamente.
— ¿Has cenado? — me pregunta de repente.
— ¿Cenar? Llevo todo el día de un lado al otro casi sin tiempo ni para respirar.
— ¿Sería una idea muy descabellada si vamos a buscar ahora a la niña y cenamos las tres juntas? — le miro sorprendida — tranquila, te hablo de ir a un restaurante — sonrío y me acaricia la mano dulcemente.
— Seguro que Sofía ya ha cenado — miro el reloj — de hecho, a estas horas ya estará durmiendo.
— Entonces lo dejaremos para mañana.
Media hora más tarde me acompaña hasta el coche y se despide de mí con un beso en el dorso de la mano. Conduzco como una autómata hasta la casa de Rachel y cuando encuentro aparcamiento necesito unos segundos para tranquilizarme, tengo que borrar esta sonrisa estúpida de la cara o mi amiga me someterá al tercer grado.
Cuando subo a casa de Rachel, Quinn me saluda cariñosamente y antes de que coja a mi hija me informa de que la policía sigue sin tener nada acerca del asesinato de Noah, al parecer ha hablado con un fiscal amigo suyo y le ha dicho que no van a presentar cargos contra mí porque el caso no sólo es que no se sostenga, es que hace aguas por todas partes.
Me quita un peso de encima, bueno, una parte al menos, porque realmente no es que me hayan exculpado, es que no pueden culparme, que no es lo mismo. Yo estoy prácticamente segura de que fue el extorsionista quien lo mató, Quinn y Rachel opinan lo mismo que yo, pero no podemos contárselo a la policía porque tendría que contarles el ataque, la extorsión y el pago que le hice. Lo que me pone en una situación complicada.
Rachel me prepara algo rápido de comer y disfruto de un sándwich vegetal riquísimo mientras les cuento a mis amigas lo emocionante que es pasar el tiempo con Santana.
Las dos se muestras encantadas de que por fin haya encontrado a una mujer que me haga suspirar y por cómo lo expresan, parece que estaban realmente preocupadas porque me negase a intentar ser feliz.
También les cuento lo que ha ocurrido con la madre de Mike y lo mal que éste se siente por no haber hecho lo que ella le pedía, Quinn toma nota y me dice que preguntará a un amigo suyo que es médico, a ver si hay alguna solución.
Más feliz de lo que me he sentido en meses, cojo a mi preciosa hija que aún duerme y la meto con cuidado en el coche, me da pena que pueda despertarse, pero necesito estar con mi niña, últimamente apenas paso tiempo con ella y después de escuchar la historia de Mike, estoy más empeñada que nunca en que mi dulce Sofía nunca hable así de mí.
Afortunadamente la niña no se despierta y la meto en su camita a dormir y como me da un poco de pena, me tumbo con ella, sé que es más por mí que por ella, cuando duerme en casa de Rachel, lo hace en su cama y duerme del tirón toda la noche. Pero hoy especialmente no me siento preparada para que durmamos en habitaciones distintas.
*********************************************************
Y hasta aquí con el segundo capítulo del día, espero que les haya gustado.
Si te gusto agradecería que me dejaras un comentario. MIL GRACIAS POR LEER
P.D: Aquí es donde ustedes elijen.
Si llegamos a cierto número de comentarios *se va a especificar en la siguiente actu* que prefieren ¿Capítulos o una adaptación de un pequeñito libro o microhistoria o como carajos se le llame?
Dependiendo de lo que elijan les daré el trato, si para cuando vuelva con el siguiente capítulo aún no hay comentarios o están empatados los “votos” hare algo para que sea justo para todas/os
BESOS Y ABRAZOS
LOS AMO
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Jaja hola, ya quiero ver más acción entre Santana y brittany :).
Los mexicanos somos los mejores, soy de Puebla.
Pues por mi parte, quiero mas capítulos. Wiiiiiiiii!
Los mexicanos somos los mejores, soy de Puebla.
Pues por mi parte, quiero mas capítulos. Wiiiiiiiii!
ana_kunis******* - Mensajes : 420
Fecha de inscripción : 27/02/2012
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
ana_kunis escribió:
Jaja hola, ya quiero ver más acción entre Santana y brittany :).
Los mexicanos somos los mejores, soy de Puebla.
Pues por mi parte, quiero mas capítulos. Wiiiiiiiii!
Hola Ana es tu nombre real ¿no?
Y pronto tendrás Brittana y será bastante.
Obvio somos súper sexys y chidos xD, que bonito, espero un día poder visitarlo.
Capítulos = 1 Microhistoria = 0 , espero que te hayan gustado los capítulos.
Y creo que las actualizaciones siguientes serán capítulos, pero ya veremos qué pasa.
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Hola por última vez este día, quería actualizar más temprano pero no pude
Lo siento. Aquí en capítulo. Espero que les guste.
*********************************************************
CAPÍTULO 11
Al día siguiente mi hija me despierta con una sonrisa tan bonita que podría iluminar toda la ciudad. Está tan contenta de verme que me siento muy mala madre en estos momentos, trabajo demasiadas horas y la dejo mucho tiempo en la guardería o con Rachel. Sé que las dos están encantadas de pasar el tiempo juntas, pero creo que es otra de las cosas que voy a cambiar.
Cuando llegamos a la pastelería aún es de noche y aunque se me parte el corazón por levantar a Sofía tan temprano, es lo que hay. La cafetería empieza a funcionar desde primera hora. Hoy he bajado el carrito, empieza a hacer tiempo primaveral y como no dan lluvias para hoy, si consigo librar durante media hora, llevaré a la niña a la guardería dando un paseo.
El resto del equipo llegan puntuales como siempre y hoy va a hacer falta, nos faltan dos personas y son las dos que más trabajan, yo puedo encargarme de la cocina y la pastelería, pero no estoy segura de si los otros dos chicos podrán con la cafetería ellos solos, son buenos trabajadores y tengo la esperanza de que me den una sorpresa. Hoy y mañana van a ser días muy duros.
Los días después de carnavales y hasta que empiece la Semana Santa, son relativamente tranquilos, por lo que a eso de las nueve me llevo a Sofía a la guardería dando un paseo, no creo que haya nada urgente y los chicos se están esforzando mucho.
Hacia media tarde, Tina me llama para decirme que Quinn se ha pasado por el hospital y les ha conseguido una plaza en una residencia para personas mayores con problemas de adicciones, que es caso de la madre de Mike. En cuanto salga del hospital, la ingresarán allí. Tengo que darle las gracias a Quinn, es una gran mujer.
A última hora de la tarde la cosa está bastante tranquila, por lo que les digo a los chicos que vamos a cerrar un poco antes de lo habitual y que ellos ya se pueden ir, lo que me agradecen dándose más prisa y ayudándome a recoger y fregar los suelos.
Y cuando estoy cerrando la verja, alguien se coloca detrás de mí y me pone las manos en la cintura.
— ¡No por favor! — grito muerta de miedo.
— ¡Eh tranquila Brittany! Soy yo — me giro rápidamente y casi quiero llorar cuando veo que es San.
— ¡Gracias a Dios que eres tú! — sin querer ni poder evitarlo le abrazo fuerte y me refugio en sus poderosos brazos.
— Oye, ¿estás bien? — me pregunta preocupada — ¿te ha pasado algo?
— No, no… — lo que menos me apetece ahora es recordar lo que ocurrió — perdona
Santana — digo separándome de ella avergonzada — es que me has asustado.
— Por mí puedes estar tranquila y si no fuese porque estás temblando de miedo, te asustaría más veces por conseguir un abrazo tuyo — me dice con una preciosa sonrisa, yo sonrío tímidamente y me besa en la mejilla.
— Iba a buscar a Sofía dando un paseo.
— ¿Puedo acompañarte? Así podría conocer a tu hija y hoy seguro que te pillo a tiempo de invitarlas a cenar.
Vuelvo a sonreír y caminamos en dirección a la guardería. Por el camino le cuento lo que le ha pasado a la madre de Mike y que estoy bastante cansada porque se nota mucho que falten dos personas en la pastelería, sobre todo cuando esas dos personas son Mike y Tina, que a día de hoy son mi mano derecha.
También le comento que he ampliado las horas de guardería de Sofía y que me siento un poco culpable por ello, pero que sin mis chicos en el negocio estoy obligada a pasar más horas allí, ella me escucha atentamente y me da su opinión al respecto, aclarando que como ella no es madre no entiende muy bien cómo me siento, sobre todo porque no lo hago para irme de fiesta, sino que lo hago para trabajar. Y creo que acaba de conquistarme. ¿Una mujer que no me da una solución y que reconoce que no comprende mi dilema? Acabo de enamorarme.
Empezamos a bromear y llegamos a la guardería riendo a carcajadas. La directora se queda de piedra cuando le presento a Santana, que no es para menos, porque la chica está de rompe y rasga. Y hace que todas las mujeres “heteros” se sientan atraída por ella.
Recogemos a Sofía de su clase y cuando la siento en la silla empieza a llorar como una descosida porque quiere ir en brazos, pero para mi sorpresa Santana le echa los brazos y encantada de la vida se va con ella, mi hija está acostumbrada a que los desconocidos la cojan en brazos, creo que no hay un solo cliente de la pastelería que no la haya cogido alguna vez, pero aun así, parece que hacen muy buenas migas.
Vamos dando un paseo y al pasar por una cervecería, Quinn sale a llamarnos. La niña en cuanto le ve se vuelve loca y ésta la coge con una gran sonrisa en la boca, Rachel dirá lo que quiera, pero esta chica está loca por ser madre, no puedo evitar reírme a carcajadas y todos juntos entramos en el bar. Rachel está con una compañera de la inmobiliaria que babea en cuanto Santana la da dos besos al presentarse y yo me siento estúpidamente celosa por su reacción. ¡Ni que fuésemos pareja!
Nos tomamos una cerveza con ellas y en cuanto Paquita, la mujer del dueño nos ve, viene a saludarnos y a comerse a besos a Sofía, me encanta este barrio, todos nos llevamos genial, nos conocemos todos y todo el mundo es amable y cariñoso con mi hija. En cuanto hago el ademán de irme para darle la cena a la niña, Paquita me dice que en un santiamén me prepara algo para que cene la cría, dicho y hecho, menos de media hora después, viene con un puré de verduras y un trocito de carne picadita, es un amor de mujer.
Mientras Sofía cena, el resto nos tomamos otra ronda y cuando se hace de noche, la niña ya se ha dormido y los adultos decidimos que ya es hora de retirarse a dormir que mañana madrugamos casi todos.
Santana nos acompaña a casa y me ayuda a subir a casa llevando ella el carrito.
— ¿Te apetece tomar algo? — pregunto coquetamente.
— Creo que será mejor que me vaya — le miro sorprendida y me sonríe — si me quedo, desearé pasar la noche contigo y no creo que sea una buena idea estando la niña.
— Tengo una habitación para invitados.
— No creo que pudiese resistirme — dice suspirando — además mañana trabajas y necesitas descansar — me besa en la mejilla y se encamina hacia la puerta.
— ¿Te veré mañana? — pregunto cuando entra en el ascensor.
— No lo dudes — responde antes de que se cierren las puertas.
Me apoyo en la puerta como una niña enamorada suspirando por su amor. Esta mujer me ha encandilado del todo, creo que ya puedo decir oficialmente que estoy totalmente loca por ella.
Me sirvo algo para cenar y me siento delante de la tele mientras ceno y chateo con Rachel que no se puede creer que aún no haya pasado nada con la diosa del olimpo, como ella le llama, no paro de reír y media hora más tarde me despido de ella y me meto en la cama con Sofía.
***************************************************************
Hasta aquí con los capítulos, muchas gracias por leer ya sabes que si te gusto, tienes tiempo y quieres, me puede dejar tu sexy y hermoso comentario que siempre es bien recibido.
P.D: Si este capítulo llega a los 3 comentarios para mañana a las 11:00 a.m. de México, les daré un capítulo mañana *martes* y miércoles otro, pero si llega a 5 comentarios serán los capítulos más la microhistoria de la cual les hable la actu anterior.
Saludos, cuídense mucho y sean súper felices
Lo siento. Aquí en capítulo. Espero que les guste.
*********************************************************
CAPÍTULO 11
Al día siguiente mi hija me despierta con una sonrisa tan bonita que podría iluminar toda la ciudad. Está tan contenta de verme que me siento muy mala madre en estos momentos, trabajo demasiadas horas y la dejo mucho tiempo en la guardería o con Rachel. Sé que las dos están encantadas de pasar el tiempo juntas, pero creo que es otra de las cosas que voy a cambiar.
Cuando llegamos a la pastelería aún es de noche y aunque se me parte el corazón por levantar a Sofía tan temprano, es lo que hay. La cafetería empieza a funcionar desde primera hora. Hoy he bajado el carrito, empieza a hacer tiempo primaveral y como no dan lluvias para hoy, si consigo librar durante media hora, llevaré a la niña a la guardería dando un paseo.
El resto del equipo llegan puntuales como siempre y hoy va a hacer falta, nos faltan dos personas y son las dos que más trabajan, yo puedo encargarme de la cocina y la pastelería, pero no estoy segura de si los otros dos chicos podrán con la cafetería ellos solos, son buenos trabajadores y tengo la esperanza de que me den una sorpresa. Hoy y mañana van a ser días muy duros.
Los días después de carnavales y hasta que empiece la Semana Santa, son relativamente tranquilos, por lo que a eso de las nueve me llevo a Sofía a la guardería dando un paseo, no creo que haya nada urgente y los chicos se están esforzando mucho.
Hacia media tarde, Tina me llama para decirme que Quinn se ha pasado por el hospital y les ha conseguido una plaza en una residencia para personas mayores con problemas de adicciones, que es caso de la madre de Mike. En cuanto salga del hospital, la ingresarán allí. Tengo que darle las gracias a Quinn, es una gran mujer.
A última hora de la tarde la cosa está bastante tranquila, por lo que les digo a los chicos que vamos a cerrar un poco antes de lo habitual y que ellos ya se pueden ir, lo que me agradecen dándose más prisa y ayudándome a recoger y fregar los suelos.
Y cuando estoy cerrando la verja, alguien se coloca detrás de mí y me pone las manos en la cintura.
— ¡No por favor! — grito muerta de miedo.
— ¡Eh tranquila Brittany! Soy yo — me giro rápidamente y casi quiero llorar cuando veo que es San.
— ¡Gracias a Dios que eres tú! — sin querer ni poder evitarlo le abrazo fuerte y me refugio en sus poderosos brazos.
— Oye, ¿estás bien? — me pregunta preocupada — ¿te ha pasado algo?
— No, no… — lo que menos me apetece ahora es recordar lo que ocurrió — perdona
Santana — digo separándome de ella avergonzada — es que me has asustado.
— Por mí puedes estar tranquila y si no fuese porque estás temblando de miedo, te asustaría más veces por conseguir un abrazo tuyo — me dice con una preciosa sonrisa, yo sonrío tímidamente y me besa en la mejilla.
— Iba a buscar a Sofía dando un paseo.
— ¿Puedo acompañarte? Así podría conocer a tu hija y hoy seguro que te pillo a tiempo de invitarlas a cenar.
Vuelvo a sonreír y caminamos en dirección a la guardería. Por el camino le cuento lo que le ha pasado a la madre de Mike y que estoy bastante cansada porque se nota mucho que falten dos personas en la pastelería, sobre todo cuando esas dos personas son Mike y Tina, que a día de hoy son mi mano derecha.
También le comento que he ampliado las horas de guardería de Sofía y que me siento un poco culpable por ello, pero que sin mis chicos en el negocio estoy obligada a pasar más horas allí, ella me escucha atentamente y me da su opinión al respecto, aclarando que como ella no es madre no entiende muy bien cómo me siento, sobre todo porque no lo hago para irme de fiesta, sino que lo hago para trabajar. Y creo que acaba de conquistarme. ¿Una mujer que no me da una solución y que reconoce que no comprende mi dilema? Acabo de enamorarme.
Empezamos a bromear y llegamos a la guardería riendo a carcajadas. La directora se queda de piedra cuando le presento a Santana, que no es para menos, porque la chica está de rompe y rasga. Y hace que todas las mujeres “heteros” se sientan atraída por ella.
Recogemos a Sofía de su clase y cuando la siento en la silla empieza a llorar como una descosida porque quiere ir en brazos, pero para mi sorpresa Santana le echa los brazos y encantada de la vida se va con ella, mi hija está acostumbrada a que los desconocidos la cojan en brazos, creo que no hay un solo cliente de la pastelería que no la haya cogido alguna vez, pero aun así, parece que hacen muy buenas migas.
Vamos dando un paseo y al pasar por una cervecería, Quinn sale a llamarnos. La niña en cuanto le ve se vuelve loca y ésta la coge con una gran sonrisa en la boca, Rachel dirá lo que quiera, pero esta chica está loca por ser madre, no puedo evitar reírme a carcajadas y todos juntos entramos en el bar. Rachel está con una compañera de la inmobiliaria que babea en cuanto Santana la da dos besos al presentarse y yo me siento estúpidamente celosa por su reacción. ¡Ni que fuésemos pareja!
Nos tomamos una cerveza con ellas y en cuanto Paquita, la mujer del dueño nos ve, viene a saludarnos y a comerse a besos a Sofía, me encanta este barrio, todos nos llevamos genial, nos conocemos todos y todo el mundo es amable y cariñoso con mi hija. En cuanto hago el ademán de irme para darle la cena a la niña, Paquita me dice que en un santiamén me prepara algo para que cene la cría, dicho y hecho, menos de media hora después, viene con un puré de verduras y un trocito de carne picadita, es un amor de mujer.
Mientras Sofía cena, el resto nos tomamos otra ronda y cuando se hace de noche, la niña ya se ha dormido y los adultos decidimos que ya es hora de retirarse a dormir que mañana madrugamos casi todos.
Santana nos acompaña a casa y me ayuda a subir a casa llevando ella el carrito.
— ¿Te apetece tomar algo? — pregunto coquetamente.
— Creo que será mejor que me vaya — le miro sorprendida y me sonríe — si me quedo, desearé pasar la noche contigo y no creo que sea una buena idea estando la niña.
— Tengo una habitación para invitados.
— No creo que pudiese resistirme — dice suspirando — además mañana trabajas y necesitas descansar — me besa en la mejilla y se encamina hacia la puerta.
— ¿Te veré mañana? — pregunto cuando entra en el ascensor.
— No lo dudes — responde antes de que se cierren las puertas.
Me apoyo en la puerta como una niña enamorada suspirando por su amor. Esta mujer me ha encandilado del todo, creo que ya puedo decir oficialmente que estoy totalmente loca por ella.
Me sirvo algo para cenar y me siento delante de la tele mientras ceno y chateo con Rachel que no se puede creer que aún no haya pasado nada con la diosa del olimpo, como ella le llama, no paro de reír y media hora más tarde me despido de ella y me meto en la cama con Sofía.
***************************************************************
Hasta aquí con los capítulos, muchas gracias por leer ya sabes que si te gusto, tienes tiempo y quieres, me puede dejar tu sexy y hermoso comentario que siempre es bien recibido.
P.D: Si este capítulo llega a los 3 comentarios para mañana a las 11:00 a.m. de México, les daré un capítulo mañana *martes* y miércoles otro, pero si llega a 5 comentarios serán los capítulos más la microhistoria de la cual les hable la actu anterior.
Saludos, cuídense mucho y sean súper felices
Daniela Gutierrez***** - Mensajes : 281
Fecha de inscripción : 03/07/2014
Edad : 27
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
holap,...
definitivamente san tiene a britt en a nube,..
quiero mas de la interacción de san y sofi!!!!!
no fue necesario que rachel se meta cono cupido!!! jajaja
nos vemos!!!
definitivamente san tiene a britt en a nube,..
quiero mas de la interacción de san y sofi!!!!!
no fue necesario que rachel se meta cono cupido!!! jajaja
nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Hola :) que tal? Mi nombre no es ana, no se en que estaba pensando cuando hice mi usuario XD. Jaja y si somos geniales, pues cuando quieras venir por aquí estamos :) :D.
Y ya quiero brittana!
Saludos.
Y ya quiero brittana!
Saludos.
ana_kunis******* - Mensajes : 420
Fecha de inscripción : 27/02/2012
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Hola, Bn! xfin! jajajaa como espera estos caps para poder comentar jajaajajajaj... espero mas de estos caps Brittana! Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
Me encanto, la reacción de britt "La Celosa", espero leer el próximo capitulo.
JanethValenciaaf********- - Mensajes : 659
Fecha de inscripción : 20/01/2015
Edad : 25
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
PERDON POR NO COMENTAR ANTES, EHHHH ESTADO MUY OCUPADA CON MIS TAREAS, Y CON EL BOXEO. ESPERO QUE ACTUALIZES PLISSS
JanethValenciaaf********- - Mensajes : 659
Fecha de inscripción : 20/01/2015
Edad : 25
Re: Otra oportunidad para amar (Adaptación) Brittana. Mis respuesta a sus ultimos comentarios
hola !! aqui una lectora fantasma !! que ya no lo soy jajaja vi tus propuestas y no se le pueden negar a eso !! jajaja me engancho esta historia ya quiero mas momentos brittana <3 saludos desde Perú
ant0ne* - Mensajes : 19
Fecha de inscripción : 14/09/2014
Página 2 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Temas similares
» [Resuelto]FIC Brittana - Pasión...por la danza? - Capitulo 87 FINAL
» Otra Oportunidad
» Otra Oportunidad
» Fic Otra oportunidad (POR FAVOR LEED MI ÚLTIMO MENSAJE)
» FIC - BRITTANA - Vuélveme A Amar - Capítulo 15 - Canción De Amor
» Otra Oportunidad
» Otra Oportunidad
» Fic Otra oportunidad (POR FAVOR LEED MI ÚLTIMO MENSAJE)
» FIC - BRITTANA - Vuélveme A Amar - Capítulo 15 - Canción De Amor
Página 2 de 7.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Lun Mar 14, 2022 3:20 pm por Laidy T
» Busco fanfic brittana
Lun Feb 28, 2022 10:01 pm por lana66
» Busco fanfic
Sáb Nov 21, 2020 2:14 pm por LaChicken
» [Resuelto]Brittana: (Adaptación) El Oscuro Juego de SATANÁS... (Gp Santana) Cap. 7 Cont. Cap. 8
Jue Sep 17, 2020 12:07 am por gaby1604
» [Resuelto]FanFic Brittana: La Esposa del Vecino (Adaptada) Epílogo
Mar Sep 08, 2020 9:19 am por Isabella28
» Brittana: Destino o Accidente (GP Santana) Actualizado 17-07-2017
Dom Sep 06, 2020 10:27 am por Isabella28
» [Resuelto]Mándame al Infierno pero Besame (adaptación) Gp Santana Cap. 18 y Epilogo
Vie Sep 04, 2020 12:54 am por gaby1604
» Fic Brittana----Más aya de lo normal----(segunda parte)
Mar Ago 25, 2020 7:50 pm por atrizz1
» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
Lun Ago 03, 2020 5:10 pm por marthagr81@yahoo.es
» Que pasó con Naya?
Miér Jul 22, 2020 6:54 pm por marthagr81@yahoo.es
» [Resuelto]FanFic Brittana: Medianoche V (Adaptada) Cap 31
Jue Jul 16, 2020 7:16 am por marthagr81@yahoo.es
» No abandonen
Miér Jun 17, 2020 3:17 pm por Faith2303
» FanFic Brittana: " Glimpse " Epilogo
Vie Abr 17, 2020 12:26 am por Faith2303
» FanFic Brittana: Pídeme lo que Quieras 4: Y Yo te lo Daré (Adaptada) Epílogo
Lun Ene 20, 2020 1:47 pm por thalia danyeli
» Brittana, cafe para dos- Capitulo 16
Dom Oct 06, 2019 8:40 am por mystic
» brittana. amor y hierro capitulo 10
Miér Sep 25, 2019 9:29 am por mystic
» holaaa,he vuelto
Jue Ago 08, 2019 4:33 am por monica.santander
» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
Miér Mayo 08, 2019 9:25 pm por 23l1
» [Resuelto]FanFic Brittana: Comportamiento (Adaptada) Epílogo
Miér Abr 10, 2019 9:29 pm por 23l1
» [Resuelto]FanFic Brittana: Justicia V (Adaptada) Epílogo
Lun Abr 08, 2019 8:29 pm por 23l1