[FanFic] : Today my life begins - Capítulo 53

Nuevos Caminos, yo no lo terminé de leer, lo seguía y me gustaba mucho… pero me pasó igual que me pasa en todos los Faberry que leo… me aburro antes del final :( creo que Faberry no es para mí u.u pero realmente sí es un fic muy bueno, creo que tiene 51 capítulos, yo me quedé en el 46 xD pero sí vale la pena.

Bueno, Santana es perfecta, es lo único que hay que decir…

Y obvio!!!!! Marissa debe de conquistar a Lindsay!

Pues a mí sí me gustaría que Quinn y Hanna intentaran algo, aunque no se quedaran juntas al final, porque Hanna me da mucha pena por amar a Emily y que no le corresponda, y la verdad Rachel se merece perder a Quinn por dejarla con esas excusas tan tontas

gracias por actualizar :)

Pues a mi faberry si me gusta mucho aunque solo sea en fic's :( y brittana son tan tiernas las dos como en el episodio de glee santana apoyando a britt diciendole que no es tonta como me gusta esa pareja

Capítulo 40:

Se había despertado a las 6am para hacer ejercicio y después bañarse. Necesitaba relajarse pero no encontraba la manera, estaba demasiado hiperactiva. Era la quinta vez que llamaba a Aria y ésta no atendía, siguió intentándolo y al noveno intento lo consiguió.
- “Rachel sabes acaso qué hora es?” – preguntó Aria con los ojos aun cerrados
- “Es una hora perfecta para llamar”
- “Qué te pasa? Te encuentras bien?”
- “Ayer antes de irme de tu casa me crucé con Quinn…” – le contó a su mejor amiga
- “Vive aquí, no sé qué es lo sorprendente”
- “Intenté hablar con ella, le dije que la extraño y le pregunté si está de novia con Hanna”
- “Y qué dijo?”
- “Me dijo que si me molesta que salga con ella no le pregunte…”
- “Es decir, te dijo que si están de novias” – dijo con muy poco tacto
- “En teoría sí…Aria, necesito que me ayudes a recuperarla”
- “Y cómo se supone que voy a hacer eso?”
- “No sé, es tu hermana…”
- “Y qué pasa con Hanna?” – preguntó Aria para después sentarse en la cama
- “Qué me importa esa roba novias? Quinn es mi chica no suya”
- “Rachel escucha, a mí me encantaría ayudarte, lo juro, pero mi relación con ella no está del todo bien y sinceramente creo que eso empeoraría más tu situación con ella” – la cara de Rachel al escuchar a su amiga había cambiado, sabía que tenía razón – “y otra cosa, no te olvides que estás hablando de mi hermana, yo te quiero mucho Rachel pero no me gusta que hables de ella como si fuera un trofeo…Tal vez deberías dejar que lo intente con Hanna, quiero decir, si ella la hace feliz…”
- “Estás insinuando que yo no la hago feliz?” – preguntó Rachel enojada
- “Yo no dije eso”
- “Pues es lo que pareció!”
- “No me grites ok?”
- “Si no quieres que te grite entonces no te pongas del lado de Hanna” – respondió alzando la voz la judía
- “No me pongo del lado de Hanna, solo digo que si ella le hace feliz…”
- “Ella le hace feliz y yo no, es lo que estás diciendo”
- “Muy feliz no la hiciste cuando la dejaste y pasó noches llorando!” – respondió Aria harta de escuchar a Rachel
- “No sé ni para que te llamé”
- “Adiós Rachel” – dijo cortando la llamada

Brittany y Santana acababan de tener el sexo matutino que tanto le gustaba a la latina. Había sido perfecto, como cada vez que tenía encuentros íntimos con la bailarina, por primera vez en su vida sentía que se conectaba con alguien a la perfección, más allá de lo físico Santana podía asegurar con total seguridad y no se equivocaría que aquella rubia era su alma gemela.
Santana estaba recostada boca abajo mientras que Brittany se dedicaba a dibujar corazones con su dedo sobre la espalda de su novia, estaban disfrutando de aquel silencio cargado de amor.
- “Santy…”
- “Si?”
- “Háblame de él” – pidió la bailarina mientras seguía pasando su dedo por la espalda de Santana
- “De Sebastian?”
- “Ajá”
- “Qué quieres saber exactamente?”
- “Todo lo que tú quieras contarme” – respondió convencida
- “Bueno…Como ya te dije éramos mellizos, yo salí antes, siempre soy la primera en todo…” – trató de bromear – “Nos llevábamos muy bien, siempre fui más unida a él que a mi hermana supongo que porque teníamos la misma edad…Le encantaba dibujar edificios, puentes y cosas así por eso quería ser arquitecto…”
- “Se parecía a ti?”
- “No físicamente, pero era igual de osado que yo, imagíname en versión hombre, así era Sebastian” – a la latina se le dibujaba una sonrisa algo amarga al recordarlo
- “Qué le pasó?”
- “Una noche llovía mucho y él quería ir a la práctica de football, estábamos solos porque mis papás tenían una cena importante y le pedí que se quedara conmigo, le mentí diciendo que tenía miedo de la tormenta pero él me conocía y sabía que yo no le temía a nada así que agarró si bici y se fue…Luego de unas horas justo cuando mis papás llegaron recibimos una llamada del hospital diciendo que Sebastian había tenido un accidente…Estaba en un carril de autos de sentido contrario y la luz de uno de ellos lo deslumbró y cayó golpeándose en la cabeza…Le dije como mil veces que no anduviera en bici con esa tormenta pero siempre hacía lo que se le cantaba”
- “Al igual que tú…” – le recordó Brittany
- “Ya te dije que éramos iguales en eso”
- “Y cómo te sientes después de que eso pasó?”
- “Es complicado…Estoy enojada todo el tiempo, enojada conmigo porque creo que si me hubiera esforzado más seguramente él estaría vivo ahora y enojada con él por no haberme querido lo suficiente como para quedarse conmigo esa noche…”
- “No te puedes culpar por eso Santy, los López son difíciles de domar...Lo extrañas mucho?”
- “Cada minuto que pasa…Hay veces que cuando escucho como alguien abre la puerta de casa o suena el teléfono creo que es él hasta que caigo en la realidad…Es loco pero cuando tienes a alguien que quieres mucho tal vez hay un día en el que no piensas absolutamente nada en esa persona pero cuando ya no está más no hay día que no pienses en ella…” – dijo antes de voltearse para mirar a los ojos a Brittany por primera vez en toda la conversación – “Tú no me abandones nunca porque me moriría”
- “No pienso irme a ningún lado además aún tenemos que patearles el trasero en los nacionales”
- “Estás bromeando? Nosotros les vamos a patear a ustedes, van a ver!” – exclamó la latina
- “Santy, gracias por confiar en mí y contarme todo eso”
- “Eres mi novia y tienes que saber todo de mí”
- “Es por eso por lo que te preocupa tanto mi relación con Nicole verdad?” – preguntó Brittany agarrando la mano de Santana para luego besarla
- “Sí, no me gusta ver que se tienen y no se disfrutan”
- “Las cosas van a cambiar” – sonrió Brittany – “Santy…”
- “Dime Britt”
- “Todavía no probamos el jacuzzi”
- “Y a qué estamos esperando?” – preguntó dando un salto para levantarse de la cama y dirigirse al baño con su novia siguiéndole de cerca

Las horas fueron pasando y la noche había llegado. Marissa se preparaba porque Lindsay pasaría a buscarla en cualquier momento. Hacía mucho que no salía de “cacería” como su amiga había decidido llamarle. Sonó el timbre y bajó para abrirle.
- “Wow! Estoy pensando seriamente en ser tu presa esta noche” – dijo Lindsay nada más verla
- “Gracias por lo que supongo es un cumplido, tú tampoco te ves mal!”
- “Nos vamos?”
- “Cuando quieras”
Subieron al auto de Lindsay quien manejó por donde Marissa le iba indicando. Cuando llegaron Lindsay observó el lugar, le gustaba la música que se podía escuchar desde fuera así que decidieron entrar.
- “Vaya…” – dijo Lindsay
- “Qué sucede?”
- “Este lugar no era como me lo imaginaba” – confesó la morena
- “Y cómo lo imaginabas?”
- “Supongo que con un montón de mujeres con cabello corto, con tal vez algún piercing y vistiendo como hombres…Hay mujeres realmente lindas y femeninas aquí”
- “Estoy harta de ese estereotipo no por ser lesbiana tengo que dejar de ser femenina” – dijo algo molesta Marissa
- “Es mi primera vez, lo siento! Vamos a tomar algo, yo invito!”

Alguien llamó a la puerta y por orden de su mamá Santana no tuvo más remedio que abrir de mala gana.
- “Hola Santana” – dijo Rachel
- “Qué haces aquí?”
- “Está Brittany contigo? La llamé al celular y lo tiene apagado, fui a su casa y no hay nadie”
- “No, no está aquí…” – Rachel miraba a Santana no muy segura de creer lo que decía – “Cena familiar”
- “Ok…Entiendo…Puedo hablar contigo un minuto?”
- “No es mi idea de un sábado genial pero como no tengo nada mejor que hacer…”
- “Sé que no somos amigas…” – empezó diciendo la castaña – “Y no tengo derecho a pedirte nada pero estoy desesperada y realmente me vendría bien algo de ayuda con Quinn”
- “Y en qué quieres que te ayude exactamente?”
- “No sé, cualquier cosa que me ayude a recuperarla me sirve”
- “Últimamente no hemos hablado mucho, está siempre con Hanna y yo con Britt…” – dijo la latina encogiéndose de hombros
- “Creo que salen juntas”
- “De ser así me lo hubiera contado…Además Hanna no juega en nuestro equipo” – mintió para que el secreto de Hanna no corriese peligro ya que supuestamente la única que sabía la verdad era Emily
- “Santana no soy estúpida, salía con Quinn recuerdas? Ella me contaba todo…Mira si no me quieres ayudar solo tienes que decírmelo”
- “No te quiero ayudar”
- “Y pensar que Brittany cree que eres una buena persona…” – dijo Rachel con un tono de voz casi inaudible
- “Perdón que dijiste?” – la latina estaba empezando a enojarse – “Mira hobbit no vuelvas a venir a mi casa a faltarme el respeto y da gracias que no te golpeé en cuanto te vi por romperle el corazón a mi mejor amiga y si no fueras amiga de mi novia puedes estar convencida que lo haría así que vete por donde has venido enana” – dijo antes de cerrar la puerta de un golpe

Hacía 3 horas que estaban en ese local. Marissa había entablado conversación con cinco chicas diferentes que se le habían acercado pero ninguna era de su agrado incluso a Lindsay le habían coqueteado pero ella siempre ponía la misma excusa “Lo siento pero no me acostaré con nadie hasta llegar al matrimonio” lo que hacía que todas las chicas salieran corriendo. Había decidido dejar sola a la pelirroja en la barra mientras ella iba a bailar, no quería espantarle ninguna “presa”. La sexta chica que se le presentó a Marissa era realmente linda, tenía el pelo oscuro y ojos color avellana, nada llamativa de no ser por esa gran sonrisa. La chica en cuestión vestía unos jeans rotos de color blanco, una remera negra con un chaleco del mismo color con motivos blancos. Tenía las uñas pintadas de color negro y un montón de pulseras en los dos brazos en una de ellas se podía leer “Trainwreck”.
- “Debe ser aburrido estar sola un sábado por la noche…” – dijo la chica sentándose a su lado
- “No sé, dímelo tú”
- “Vaya, además de linda tienes carácter, me gusta”
- “Me llamo Marissa”
- “Hey! Ponme otro trago, de lo mismo” – le dijo la chica al camarero mostrándole su copa – “Y a ella ponle también lo mismo que está tomando”
- “No tienes por qué hacerlo, estoy bien así”
- “Me llamo Danielle, pero dime Danie” – dijo ignorando lo que recién le había dicho Marissa
- “Gracias por el trago”
- “No hay de qué” – respondió observando al camarero con sus respectivas bebidas – “creo que a esa chica de ahí le gustas”
- “A quién a Lindsay?”
- “La conoces?” – preguntó Danielle
- “Sí, es mi amiga”
- “Pensé que estabas sola…”
- “Lo estoy, ella es hetero” – respondió ganándose una sonrisa por parte de la desconocida – “viene hacia aquí, te la presentaré”
- “Marissa podemos irnos a casa? No me siento bien…”
- “Ahora? Estoy hablando con ella” – señaló a Danielle
- “Como quieras, yo si me voy…”
- “Espera, no voy a dejarte sola si te sientes mal”
- “Gracias” – respondió Lindsay fingiendo una sonrisa
- “Adiós Danie, un gusto conocerte”
- “Marissa!” – dijo la chica anotando algo en un papel – “Toma, si algún día quieres llamarme estaré encantada de que lo hagas”
- “Ok, gracias de nuevo” – dijo con una sonrisa

El camino hasta casa de Marissa fue eterno, ninguna de las dos chicas hablaba. Lindsay estaba concentrada en la carretera mientras que la pelirroja miraba el pedazo de papel que Danielle le había dado. Cuando llegaron las dos bajaron del auto, Lindsay la acompañó hasta su casa.
- “Eres consciente de que arruinaste lo que podía haber sido una noche triunfal verdad?” – preguntó Marissa abriendo la puerta y dejando pasar a su amiga
- “No es para tanto, era una chica del montón”
- “Me gustaba”
- “Por qué? Ni si quiera tenía unos ojos lindos” – opinó Lindsay
- “Y qué? Era simpática”
- “Te mereces algo mejor que ella”
- “Alguien cómo tú?”
- “Por ejemplo” – dijo Lindsay asintiendo con la cabeza
- “Estoy tan cansada de ese juego…Qué te importa con quién esté?”
- “Me importa mucho” – Lindsay estaba a punto de perder el control de sus actos
- “Por qué te importa tanto? Deja que me acueste con quien me dé la maldita gana!”
- “No delante de mí”
- “No pensaba acostarme con nadie delante de ti!” – gritó una Marissa fuera de control
- “Pero si besarte con alguien”
- “Y cuál es el maldito problema!?”
Lindsay quiso responderle pero no salía ninguna palabra, la tensión se palpaba en el ambiente y la morena no hizo otra cosa con lanzarse a la boca de la pelirroja quien se separó como pudo.
- “Qué haces!?”
- “No es obvio?”
- “Pero por qué lo haces?” – insistió Marissa
- “Porque me muero por besarte”
Lindsay obtuvo un silencio como respuesta y luego de mirarse fijamente sin saber que más decir Marissa tomó por sorpresa a Lindsay para volver a besarla. Sentían sus respiraciones sobre sus bocas que se volvían cada vez más pausadas, Lindsay abrió la boca para hablar pero Marissa la interrumpió casi susurrando.
- “Por favor, quédate conmigo esta noche…”

ya queria que pasara eso entre linds y mari jjajaj y San y Britt tiernisimaaaas como siempre las amoo :)

Noche pasional entre Von Pearce?! me encanta!!

aaa que buena esa pareja me guta :P VonPearce

y brittana como siempre tan tiernas :) y faberry :( amo esa pareja

gracias por actualizar!!

Capítulo 41:

La noche de Marissa fue la más apasionada que vivió jamás. Los besos no faltaban al igual que las caricias, sus cuerpos hablaban por si solos, no necesitaban las palabras. Lindsay parecía otra, estaba totalmente entregada al igual que la pelirroja quien disfrutaba de cada segundo que compartía con la morena.
Terminaron agotadas por tanto esfuerzo físico y no tardaron en dormirse. Cuando salió el sol Marissa notó que Lindsay ya estaba despierte, volteó a mirarla y pudo ver como Lindsay estaba vistiéndose.
- “Vas a prepararme el desayuno?” – preguntó Marissa sonriendo sinceramente por primera vez en mucho tiempo
- “Tengo que volver a casa, puedes seguir durmiendo si quieres aún es temprano”
- “Por qué el apuro?”
- “Me gusta dormir en mi cama”
- “Y por qué no te fuiste antes?” – preguntó molesta la pelirroja
- “Estaba cansada, hicimos mucho ejercicio en la noche”
- “Lindsay, que significó para ti lo que pasó entre nosotras?”
- “Yo quería acostarme contigo y tu querías hacer lo mismo conmigo”
- “Y ya está?”
- “Qué más quieres? Qué te pida matrimonio? Yo no soy así” – se justificó Lindsay
- “Y cómo eres?”
- “No me ato a nadie…Me acuesto con quien quiero y cuando quiero…No entiendo el drama, estás enamorada de mí?”
- “No! Y tú qué sientes por mí?”
- “Me gustas, nos divertimos juntas pero no voy a ir corriendo a pedirte que seas mi novia”
- “Entiendo, yo soy para ti lo que tú eres para Sam”
- “Al menos él no me hace estos planteos…” – pensó en voz alta – “Mira, esto es lo que puedo ofrecerte, es lo único que se hacer…No sé estar en una relación”
- “Lo intentaste al menos?”
- “No me hace falta intentarlo para saberlo, ya me estás dando dolor de cabeza enserio, sigue durmiendo en la tarde te llamo”
- “No tienes por qué llamarme”
- “Quiero hacerlo, si no quieres hablar no me atiendas y listo pero te llamaré” – le aseguró antes de dejarla sola en su habitación

El día siguió avanzando y cuando Aria se despertó fue hasta la habitación de Quinn para despertarla aunque no hizo falta porque cuando la morena entró pudo observar a su hermanastra mirando fijamente hasta el techo
- “Buen día, vienes a desayunar?” – preguntó Aria tratando de sonar amablemente
- “No tengo hambre”
- “Como quieras…”
- “Aria!” – exclamó evitando que su hermanastra abandonara la habitación
- “Dime”
- “Puedes hablar con Rachel y decirle que deje de molestarme?” – pidió Quinn
- “Qué es lo que te molesta realmente?”
- “Que me diga que me extraña o que quiere que regresemos…”
- “Y por qué te molesta?” – indagó Aria
- “Más que molestarme me duele…Yo sé que no soy una persona fácil, le advertí antes de empezar la relación y aun así me aceptó, después me deja con la excusa de que se siente mal por tener que escondernos o que se yo…Y ahora quiere que regrese a sus brazos? Está loca! Tengo dignidad y no voy a ir atrás de ella cada vez que se le cante”
- “Ok, si es lo que quieres le diré pero no me gustaría tener que estar en medio de la batalla, tu eres mi hermana y ella mi mejor amiga…Entiendes ahora por qué no me gusta la idea de que mis amigos salgan con mi hermana? O bueno, en este caso amigas…”
- “No te preocupes que no caeré de nuevo…”
- “Sales ahora con Hanna no?”
- “Es lo que piensa Rachel” – afirmó Quinn
- “Para ser sincera deberías decir que es lo que tú le hiciste creer”
- “Sólo le dije eso para molestarla, es lo menos que puedo hacer después de lo que me hizo”
- “Voy a fingir que no escuché nada” – dijo Aria tapándose los oídos haciendo reír a la rubia
- “Vamos a desayunar antes de que me arrepienta por hablar contigo”
- “Reconócelo te morías de ganas!” – exclamó ganándose un pequeño empujón por parte de Quinn

Emily había cruzado la línea que limitaba su casa de la de la latina, llamó a su casa y la señora López le dijo que su hija seguía durmiendo y acto seguido le dio permiso para que pudiera ir a despertarla.
Abrió la puerta con cautela y sin hacer ningún ruido ingresó en la habitación. Santana estaba dormida con la boca abierta, de la misma salía un hilo de saliva que indicaba lo cómoda que se encontraba. La imagen le causó tanta gracia a la nadadora que sacó su celular para capturar la imagen.
- “San despierta” – dijo moviendo suavemente el cuerpo de Santana después de haber tomado la foto
- “Qué pasa?” – preguntó volteándose para seguir durmiendo
- “Son las 4 de la tarde!”
- “Qué!? Oh Dios, me dormí…Brittany me matará” – gritó saltando de la cama, literalmente
- “Relájate”
- “No puedo, le prometí que saldría con ella y con Nicole…” – dijo antes de mirar el reloj – “Maldita sea Emily, me asustaste!”
- “Lo siento, la única manera de que te despertaras era eso o con agua…”
- “Y a qué has venido?” – preguntó sonriente la latina quien se alegraba por tenerla ahí
- “A verte porque tú ya no te acuerdas de mí!”
- “Estás intentando hacerme sentir culpable?”
- “Funciona?”
- “Sí! Ya sé que últimamente solo paso tiempo con Brittany pero se me hace tan difícil separarme de ella…” – confesó la latina
- “Pues no sé qué harás cuando tengamos las vacaciones de Navidad”
- “Al no tener que ir a la maldita escuela yo sí sé qué haremos” – se le dibujó una sonrisa pícara
- “Sólo piensas en eso?”
- “Qué hay de malo en querer hacer el amor con mi novia todo el tiempo posible?”
- “Nada, la verdad me pone feliz que estés tan radiante”
- “Gracias! Y tú busca pronto una novia para que podamos tener una cita doble”
- “Todavía no olvidé a Maya” – dijo la nadadora haciendo que Santana lanzase un suspiro de frustración
- “Emily ella está en Australia diviértete, mira no digo que te cases con la primera que se te cruce pero puedes intentar conocer a alguien”
- “Pretendes que salga yo sola a buscar mujeres? Es desesperado y aburrido”
- “Se me está ocurriendo algo…” – dijo con una sonrisa
- “Cuando pones esa cara, me das miedo”
- “Será épico!” – exclamó como si Emily supiera de qué estaba hablando
- “Me cuentas o tengo que adivinarlo?”
- “Escucha atenta, no lo repetiré…” – advirtió la latina antes de contar su idea

Ashley era la mamá de Hanna, una mujer que cuando fue abandonada junto con su hija por su marido Tom se volcó en su trabajo dejando un poco olvidada a su hija. No era una mala madre pero tal vez si le hubiera dedicado algo más de tiempo a Hanna ésta tuviera más confianza en ella para contarle sus problemas y sus preocupaciones.
La mujer pasó toda la mañana preparando un gran desayuno para compartir con su hija que no tardaría mucho en bajar ya que hacía un rato había podido escuchar como entraba en el baño para ducharse. Unos minutos más tarde la joven se encontraba con Ashley.
- “Buen día má!”
- “Buen día cariño”
- “Hiciste todo esta comida?” – preguntó sorprendida
- “Sí, tenemos que hablar y qué mejor que hacerlo compartiendo un rico desayuno”
- “Juro que no hice nada, soy inocente” – se defendió antes de tiempo
- “Llegó eso para ti” – ignoró lo que dijo su hija y señaló a un ramo de flores que estaba sobre la barra de la cocina
- “Son…” – dijo observándolas de cerca – “Hermosas”
Hanna se acercó para olerlas, parecían recién cortadas. Había un sobre blanco que abrió esperando saber quién las enviaba. No había remitente solo una frase que decía “Cuando quieres realmente una cosa, todo el Universo conspira para ayudarte a conseguirla” Hanna solo atinó a sonreír y después fue a sentarse para desayunar con Ashley.
- “Te las envía Sam?” – preguntó la mujer
- “No, no sé…No pone remitente”
- “Tal vez sea Emily”
- “Emily?” – preguntó sorprendida
- “Hace mucho que no viene a verte, supongo que están peleadas”
- “Algo así…”
- “Qué pasó entre ustedes?” – se interesó la mujer
- “Es algo de lo que no quiero hablar”
- “Se enamoró de ti y por eso se distanciaron?” – preguntó consiguiendo que Hanna se atragantara con lo que estaba comiendo
- “Qué!? No!”
- “Entonces?”
- “Por favor mamá…”
- “Ok pero quiero que sepas algo” – dijo captando la atención de su hija – “si necesitas hablar de algo, lo que sea, voy a estar para escucharte y no te juzgaré”
- “No sé de qué me hablas…”
- “Soy tu madre, te conozco mucho más de lo que crees”
- “Tengo que ir a estudiar, gracias por el desayuno…” – dijo levantándose de la mesa
- “Hija, no olvides de que te amo” – le recordó Ashley antes de que Hanna agarrara el ramo y subiera hasta su habitación

Me gustó mucho este capítulo, la parte Von Pearce… para mí que Lindsay sí se está enamorando de Marissa y por eso se fue, porque está asustada de cualquier cosas que pueda sentir por ella que vaya más allá del sexo, por eso creo que ya olvidó a Sam, prefiere pasar tiempo con Marissa a tener sexo con él, pero bueno… algo me dice que a Marissa le va a doler mucho el rechazo de Lindsay.

La mamá de Hanna! No sabía que se llama Ashley, como nunca escuché su nombre en el programa… más bien, nunca le presté atención a su nombre jajaja, me gusta el hecho de que quiera apoyar a su hija con todos sus problemas. Tal vez más adelante Hanna le cuente porque se alejó de Emily, ojalá lo haga, puede que le de un buen consejo para poder olvidarla –o conquistarla.

Igual me encantó lo pervertida que es Santana, solo quiere estar teniendo sexo con Brittany, aunque ella le llama hacer el amor, eso es bueno, significa que quiere a Brittany mucho más que de una forma física, no sólo es el hecho de sentir placer carnal al hacerlo, sino también sentir que tu corazón estallará en el acto de entrega porque lo haces con la persona que amas.

Y también que bueno que Quinn le pidió a Aria el favor de que le dijera a Rachel que la deje en paz, debe de destrozarla el hecho de que quiera implementar ese juego de cortar y regresar, cortar y regresar, con ella, debe de frustrarla el hecho de que tal vez… ella lo quiere jugar también, porque si está obsesionada con Rachel, daría cualquier cosa por seguir con ella aunque sintiera que jueguen con sus sentimientos, por eso me encanta que ya le dijera que no, quiere mucho a Rachel, tal vez sí está enamorada de ella, pero no por eso debe de permitir que Rachel haga lo que se le pegue la gana hacer a cualquier hora.

VonPearce muy bueno pero parece que a lindsay no le interesan mucho las relaciones :/ me mato santana porque penso que habia dejado plantada a britt y faberry :'( una de mis parejas favoritas

Hey! No tuve tiempo en toda la semana para ponerme al día, por fin lo hice y WAAUU no dejas de sorprenderme, amo tu fic!

Brittana es tan tiierno! Me encantan juntas, Britt saca lo mejor de Santana sin duda. Espero que Rachel no vaya con el cuento de que Santana no es buena a Britt por esa conversación, porque en mi opinión San estaba en su derecho de defender a Quinn.

Me gustan mucho Quinn y Hanna juntas!!! Quinn sigue enamorada de Rachel, pero no debe dejarla que haga con ella lo que quiera porque si no siempre estarán igual. Quizás con Hanna si tenga algo más que peleas, pueden ayudarse mucho!

Y Von pierce!!!! Yo también pienso que Lindsay si que está sintiendo cosas por Marissa! Sobre todo por la conversación cuando salieron del coche y le dijo que no quería que hiciera nada con nadie delante de ella y luego a besó!! Se iría por la mañana por miedo a lo que siente, pero no creo que eso le caiga muy bien a MArissa, y menos después de lo mal que lo ha estado pasando por Santana. Así que veremos, ya tengo ganas de saber como sigue esta historia!!

Espero que actualices pronto! :D

Capítulo 42:

Hanna subió a su habitación, sus pensamientos se mezclaban, por un lado no había entendido lo que su madre quiso decirle o, mejor dicho, fingió no entenderle. Y por el lado contrario pensaba en quien había sido la persona responsable de enviarle ese ramo. Inició sesión esperando que Quinn estuviera del otro lado y no se equivocaba.

Hanna says:
Quinn, fuiste tú?
Quinn says:
Hola, yo estoy bien gracias por preguntar y tú?
Hanna says:
Fuiste tú o no?
Quinn says:
Puedes concretar más?
Hanna says:
Alguien me envió un ramo de rosas, quiero saber si fuiste tú
Quinn says:
Si quieres que sea yo te digo que sí pero la verdad es que no te envié nada y menos un ramo de rosas…
Hanna says:
Entonces?
Quinn says:
No sé, debe haber alguien más que quiera besarte
Hanna says:
Alguien más? Quién se supone que quiere besarme?
Quinn says:
Tal vez yo
Hanna says:
Me estás coqueteando? Jajajaja
Quinn says:
Un poco, algún problema?
Hanna says:
Ninguno, me gusta que lo hagas!
Quinn says:
A mí me gustas tú!
Hanna says:
…
Quinn says:
Jajajajaja apuesto a que te pusiste colorada! Tranquila, estaba bromeando! Jajajajaja
Hanna says:
Tonta! Nos vemos en la tarde?
Quinn says:
Solo si prometes no besarme
Hanna says:
Te recuerdo que fuiste tú la que me besó a mí
Quinn says:
Y yo te recuerdo que fuiste tú la que me lo rogó a mí
Hanna says:
Yo no te rogué!
Quinn says:
Pero lo harás! Nos vemos a las 6pm en Starbucks?
Hanna says:
Ok, no te pongas muy linda que no quiero que todo el mundo te mire…
Quinn says:
:shock: :oops:
Hanna says:
Jajajaja tarada! Te veo en la tarde!
Quinn says:
Bye linda!

Santana había llegado unos minutos antes a casa de su novia, saldría con ella y con Nicole a comer, mientras Brittany y su hermana terminaban de arreglarse la latina esperaba en la cocina mirando como la señora Pierce terminaba de cocinar algo para ella y su marido.
- “Huele muy bien eso!” – dijo Santana
- “Gracias, aún están a tiempo de quedarse”
- “Nada me encantaría más pero creo que será bueno salir con Brittany y Nicole, las llevaré a un lugar que les encantará”
- “Cómo haces?” – preguntó la señora Pierce
- “Cómo hago qué cosa?”
- “Para ser tan buena con mi hija, con las dos en realidad. Muchas personas pierden la paciencia fácilmente con Brittany y tú eres tan paciente con ella…”
- “Soy la persona menos paciente del mundo, con Brittany es diferente me encanta escucharla hablar porque siempre tiene algo divertido o lindo para decir…Hace que todo sea tan distinto…Supongo que es porque la amo”
- “Estoy muy orgullosas de ustedes dos Santana, creo que mi hija encontró la mejor persona para compartir su vida, nunca la vi tan sonriente, tan feliz y es de Brittany de quien estamos hablando” – rió dulcemente la mujer
- “Ya estamos listas!!” – exclamó Brittany apareciendo en la cocina con Nicole a su lado, estaban vestidas de igual manera, se veían adorables
- “Están hermosas” – dijo la latina
- “Nos vamos?” – preguntó Brittany ansiosa
- “Claro, adiós señora Pierce”
- “Adiós chicas, diviértanse”

El celular de Hanna sonó insistentemente, cuando alcanzó a atender no podía creer que fuera Emily la que estaba al otro lado del teléfono.
- “Te equivocaste de número?” – preguntó Hanna confusa por la llamada
- “Hola a ti también!”
- “Hola Em, en qué puedo ayudarte?”
- “Estoy buscando mi camiseta de los Rolling Stones y no la encuentro, quería saber si la tienes tú…”
- “Sí está aquí” – respondió abriendo el placard para asegurarse
- “Te molesta si voy a tu casa a buscarla?”
- “No, ven cuando quieras…Bueno, antes de las 6pm si puede ser tengo planes con Quinn”
- “En 15 minutos estaré ahí, hasta ahora”
- “Ok, te veo ahora”
Pasaron rápido los 15 minutos, cuando quiso darse cuenta de la hora Emily ya estaba golpeando la puerta de la habitación de Hanna pidiendo permiso para entrar.
- “Puedo pasar?”
- “Claro, entra” – invitó la rubia
- “Perdón por molestarte pero de verdad quiero ponerme esa camiseta”
- “No molestas, además es tuya, toma” – dijo devolviéndole la prenda
- “Te importa si me cambio aquí?”
- “No, me voltearé”
- “Se me hace raro estar en tu habitación” – dijo mientras se cambiaba la camiseta
- “No es la primera vez que estas aquí”
- “Lo sé, pero hace mucho desde la última vez…” – dijo creando un silencio incómodo – “Vaya, Quinn te trata muy bien, hasta te regaló flores” – dijo mirando el ramo
- “No es de Quinn, no sé de quién es”
- “Tienes un admirador secreto?”
- “Algo así…Supongo” – se encogió de hombros
- “Y cuéntame, como te va todo?”
- “Muy bien, que se yo, como siempre…”
- “Y las cosas con Quinn?” – se interesó Emily
- “Pues…Bien, no sé a qué te refieres exactamente pero bien…”
- “Pero están de novias o no?”
- “Cómo sabes que Quinn es…”
- “Digamos que se le escapó una vez en casa de Santana” – contaba entre risas
- “No estamos de novias, somos amigas”
- “Sabe lo tuyo?”
- “Sí, yo le conté”
- “Y cómo llevas ese tema?” – volvió a preguntar la nadadora
- “Si lo preguntas por lo de ser lesbiana Quinn me está ayudando bastante así que mejor, y si lo preguntas por lo de estar enamorada de ti también mejor, ya casi no pienso en ti así que…”
- “Quinn también te está ayudando a eso?”
- “No sé Emily…”
- “No sabes o no me quieres decir?”
- “Me estás haciendo una escena de celos?” – preguntó Hanna arqueando una ceja
- “Por supuesto que no yo solo pregunto y tú te pones a la defensiva, como siempre…Mejor me voy” – Emily apenas respiró entre palabra y palabra parecía confusa
- “Ya sabes dónde está la salida, cuídate” – dijo abriendo el placard para cambiarse de ropa
Emily salió sin decir una sola palabra haciendo que Hanna se volteara para ver que se había quedado sola. Volteó de nuevo para elegir la ropa que se pondría y al hacerlo pudo ver como una foto se había caído, era una foto de ella y Emily festejando el año nuevo, se veían muy sonrientes, muy felices, muy amigas.

Santana, Brittany y Nicole llegaron a su destino. Era un restaurant a las afueras de la ciudad, no era un lugar serio y seguramente el pelotero gigante era el motivo por el que aquel restaurant estaba repleto de niños y niñas que correteaban de un lado a otro.
- “Britt mira el pelotero! Es enorme!” – exclamó Nicole con una gran sonrisa
- “Santana este lugar es genial, como lo conocías?”
- “Solía venir con mis padres cuando era más pequeña” – contó Santana
- “Podremos ir a jugar después de comer San?” – preguntó Nicole
- “Claro que sí pequeña para eso las traje aquí, la comida no es tan buena pero el pelotero es asombroso!”
Después de comer Nicole salió corriendo hacia el pelotero, Santana y Brittany la miraban desde afuera, querían compartir unos minutos a solas
- “Parece que se está divirtiendo no?” – preguntó Santana mientras miraba a Nicole
- “Un pelotero es como la casa de la felicidad, como alguien no podría divertirse aquí?”
- “Y tú te estás divirtiendo?”
- “Por supuesto que sí Santy y tú?”
- “Yo siempre que estoy contigo me divierto” – le agarro una mano para depositar un beso
- “Hey déjense de besos y vengan a jugar conmigo!” – gritó la niña
- “La última pierde!” – le dijo Santana a Brittany antes de salir corriendo

Por fin eran las 6pm, Hanna llegó antes así que decidió esperar a Quinn adentro. La rubia de ojos verdes no tardó mucho en llegar, entró y pudo ver a Hanna sentada con dos vasos en la mesa.
- “Hola Hanna, perdón por la demora” – se disculpó Quinn
- “Todo bien, pedí tu café justo y como te gusta”
- “Gracias pero no tenías por qué pagar lo mío”
- “Qué clase de cita sería esta si no?” – preguntó Hanna haciendo que Quinn se sorprendiera – “Estoy bromeando Quinn, puedes volver a respirar”
- “Alguna vez te lo planteaste?” – preguntó Quinn después de unos segundos de silencio
- “No entendí la pregunta”
- “Digo que si alguna vez te planteaste que tú y yo tuviéramos una cita”
- “Sí, justo hoy!”
- “Enserio?”
- “Sí, no sé…No es cómo si te fuera a pedir una cita pero si me imaginé teniendo una contigo”
- “Y si te pido que tengamos una cita…Aceptarías?” – preguntó algo nerviosa Quinn
- “Y qué pasa con Rachel?”
- “Bueno…Se acabó, no quiero volver con ella, no quiero llorar más por ella”
- “Y yo conseguiré que la olvides?”
- “Pues puedes intentarlo al igual que yo puedo intentar que no pienses más en Emily…Me divierto contigo y me haces sentirme segura y confiada, contigo soy diferente…Tan diferente que es la primera vez que le pido una primera cita a alguien” – rió Quinn – “Creo que podría funcionar”
- “No sé Quinn, no sé si estoy lista para tener novia…”
- “Te entiendo, pasé por eso y si decides cambiar de idea sólo házmelo saber ok?” – sonrió ampliamente
- “Gracias por entenderme”
- “Sólo quiero que estés segura y yo no tengo prisa”
- “Y si decidiera aceptar la cita, que no estoy diciendo que esté aceptando” – aclaró Hanna – “a donde me llevarías?”
- “Eso lo sabrás cuando aceptes” – le guiñó un ojo

Marissa pasó todo el día tirada en la cama, pensando en todo lo que había pasado en la noche. Le había encantado estar con Lindsay pero el hecho de que la morena dejara su cama desde tan temprano le había hecho sentir como si fuera una cualquiera. Estaba enojada, enojada con Lindsay por haberla dejado así y enojada con ella misma por sentir algo por la que era su amiga, si bien no estaba enamorada sabía que esto solo era el comienzo de lo que podría ser llamado como “el clavo que saca otro clavo”.
Estaba tan sumergida en sus pensamientos que cuando sonó el celular ni si quiera miró quien llamaba, solo se limitó a atender la llamada
- “Hola…” – saludó Marissa aún concentrada en sus pensamientos
- “Hey linda qué hacías?”
- “Oh Lindsay eres tú…Estaba pensando…”
- “En mi?” – preguntó la morena de ojos claros
- “No, estaba pensando en llamar a Dani” – mintió para ver la reacción de su amiga
- “A quién?”
- “Dani, la chica de la sonrisa hermosa que conocí ayer”
- “Y para qué la quieres llamar?”
- “Para verla, realmente me gustó” – dijo Marissa con un tono muy convincente
- “Ok, entonces si vas a estar ocupada iré a ver a Sam”
- “Acaso no puedes estar si acostarte con nadie?”
- “Perdón?” – por primera vez Lindsay se había sentido ofendida por la pelirroja
- “Tengo que dejarte, nos vemos mañana en la escuela”
- “Adiós Marissa”
Marissa estaba tan enojada con Lindsay que le envió un mensaje de texto a Danielle que no tardó en responder.

Marissa: Hola Dani! Soy Marissa, me recuerdas? – M.
Danielle: Crees que podría olvidarme de ti! Estaba esperando noticias tuyas! – D.
Marissa: Me preguntaba si querrías hacer algo mañana después de clases…– M.
Danielle: Nada me gustaría más! Te parece si te paso a buscar cuando termines tus clases? – D.
Marissa: Claro, estudio en el McKinley sabes dónde queda? – M
Danielle: No pero envíame mañana un mensaje con la dirección y la hora, te parece? – D.
Marissa: Ok, te veo mañana entonces! – M.
Danielle: Hasta mañana linda! – D.

Siento mucho no haber escrito mucho sobre Brittana en este capítulo pero quise repartir un poco por si les resulta algo monótono! (Me disculpo antes de que me digan que extrañaron más Brittana hahaha)

a mi me encanto la parte brittana santana es tan linda con su novia y cuñada, quinn no olvides a rachel :'( faberry <3 y vonpearce me gusta! se ponen las dos celosas gracias por actualizar espero el proximo!!

....! ok... xido tu roLLO pues nadaa.... espero la sigas prontooo.. x)... la vdd no tengo nada qe decir... qe no te aya disho antes x).....



no me gusta hanna con quiin... y pues todavia te pasoo a Lindsay y Marissa x) jajajaja ... emily la dejas SOLA¬¬ me caee bien pero con Hanna.

Ya leí el nuevo capítulo y me gustó mucho, como siempre!

Adoro Brittana, aunque fueran pocos los momentos de ellas fueron muy tiernos! Se nota cuando se quieren!

Hanna y Quinn me encantan juntas, enserio, nunca pensé que pudieran gustarme tanto. Se ayudan muchísimo! Y Emily apuesto porque ya está celosa!!!

Y en cuanto a Marissa y Lindsay, esas dos ya empezaron a sentir cosas por la otra, solo hace falta que lo reconozcan, aunque no creo que les sea tan fácil, las dos son súper cabezotas jajajjajajaja

Síguelo pronto :D

Capítulo 43:

Lindsay estaba tan molesta con Marissa que no le habló durante todo el día, ni si quiera en la última hora cuando el destino conspiró en su contra para que el único lugar libre que había fuera al lado de la pelirroja, tal vez el próximo día se lo pensaría dos veces antes de llegar tarde.
Para su desgracia el día empeoró cuando 15 minutos antes de terminar la clase vio a Danielle fuera, seguramente esperando a Marissa quien se sorprendió al verla ahí ya que habían quedado en verse en el estacionamiento.

Marissa: Qué haces ahí fuera? – M.
Danielle: No podía esperar a que salgas…Estaba deseando verte! – D.
Marissa: Enserio? Sólo quedan 10 minutos, de verdad estás algo loca…– M.
Danielle: Quieres que te demuestre lo que es estar loca? –D.
Marissa: Nada me encantaría más! – M.

Danielle no lo dudó y después de golpear la puerta levemente entró interrumpiendo al señor Schuester quien estaba dando su clase de español.
- “Disculpe, puedo ayudarle en algo?” – preguntó amablemente el profesor
- “Sólo vine a darle algo a una de sus alumnas, solo serán un par de segundos”
- “Está bien, ya casi había terminado”
Danielle fue directa a donde estaba la pelirroja, se colocó frente a ella poniendo las dos manos sobre el pupitre y después de mirarla a los ojos la besó y volvió a salir del aula haciendo que algunos de los alumnos exclamaran cosas obscenas.
Después de que el señor Schuester les diera permiso para salir Marissa se encontró con Danielle quien había salido a esperar a la pelirroja al estacionamiento como habían quedado.
- “Qué fue eso Danielle?” – preguntó Marissa
- “No querías que te demuestre lo que es estar loca?”
- “Pero me imaginaba otra cosa…”
- “Querías que quemara tu escuela o algo así?” – preguntó divertida Danielle
- “Esperaba cualquier cosa menos queme beses…”
- “Te molestó?”
- “No lo sé Dani”
- “Ok, lo siento! Pero no puedo prometer que no volveré a hacerlo”
- “No te lo pedí” – respondió Marissa

Santana estaba esperando a Emily que había ido al baño cuando Brittany la sorprendió abrazándola por detrás.
- “Te amo Santy” – le susurró al oído
- “Yo también te amo B”
- “Nos vamos ya?”
- “Me encantaría irme contigo pero tengo algo que hacer con Emily, igual si esperas a que salga del baño te llevo a casa” – le dijo haciendo que Brittany pusiera cara de pena
- “Ok, yo quería enseñarte el nuevo conjunto de ropa interior que me compré pero puede esperar…”
- “Trae cuerditas?”
- “No…”
- “Oh…” – hizo puchero la latina
- “Me causa gracia que te gusten tanto las cuerditas”
- “Y bueno, cuando era pequeña en mi cumpleaños mi papá me compraba una gran piñata, pero no de esas que golpeas y te cae todo, era de las que trae muchas cuerdas y solo dos son las que hacen que se abra…Supongo que tu ropa interior de cuerdas es como una piñata, si tiro de las correctas obtengo mi premio” – explicó con una sonrisa pícara
- “A veces eres muy poco romántica sabías?”
- “Ya estoy lista, vamos?” – preguntó Emily cuando se reunió con la latina
- “Ok pero antes acompañamos a Britt no quiero que se vaya sola”
- “Sé ir a mi casa, no me perderé” – dijo Brittany
- “Te acompañaremos y no hay más que hablar” – respondió Emily tirando de Brittany y Santana

Rachel no había asistido a ninguna de sus clases, no quería ver a Quinn acompañada de Hanna todo el tiempo. No pudo quedarse en casa porque sus papás le preguntarían así que se pasó todo el día en un parque. Después de meditarlo durante toda la mañana se decidió a ir a hablar con su ex así que caminó hasta la casa de la rubia y para su suerte se la encontró sin su amiga.
- “Hola…”
- “Rachel? Estás buscando a Aria?” – preguntó mientras buscaba la llave
- “En realidad no, necesito hablar contigo”
- “Creo que ya nos dijimos todo lo que había por decirse”
- “Por favor Quinn, después de esta charla si no quieres que te moleste más lo haré, lo prometo”
- “Está bien, habla” – dijo sentándose en el escalón seguida de la judía
- “Te extraño y sé que ya te lo dije antes pero Quinn te juro que me estoy muriendo sin ti, no sé cómo hacer para olvidarme de tus besos, de tu sonrisa, de tu mirada…De ti. Sé que no fui la novia más comprensiva pero tuve mis momentos de buena novia no? No puedes olvidar el fallo que cometí y darme una oportunidad?”
- “Rachel me dejaste con una absurda excusa y me mataste, me pasé muchas noches llorando esperando que volvieras pero sabes? Me cansé de sentirme mal”
- “Me equivoqué como ser humano que soy…Duele demasiado estar sin ti Quinn” – dijo Rachel con los ojos cristalinos
- “Y crees que es fácil para mí? Crees que no me duele?”
- “No mucho la verdad, te buscaste a otra…Durante cuánto tiempo lloraste, una semana o dos? Hasta que llegó Hanna para consolarte…”
- “No metas a Hanna en esto, ni ella ni yo tenemos la culpa de lo que tú haces y de las decisiones que tú tomas” – Quinn se levantó, no quería seguir hablando con Rachel
- “Genial, ahora me dejarás hablando sola”
- “Es que no quiero escucharte más Rachel, dices que te duele y que me extrañas ok pero eso no hace que mis dudas desaparezcan”
- “Qué clase de dudas?” – quiso saber Rachel
- “Quién me garantiza que no me dejarás otra vez con otra estúpida excusa?”
- “Yo, yo te lo garantizo”
- “Lo siento pero dejé de creer en ti hace algún tiempo, más concretamente cuando decías que nunca me dejarías y después lo hiciste”
- “Pero Quinn…” – Rachel intentó defenderse se vio interrumpida por Quinn
- “Ya está Rachel, no hay nada que puedas decir o hacer. Te deseo lo mejor Rach y de verdad espero que seas feliz con cualquier otro chico o chica, y que esto te sirva para hacer las cosas un poco mejor con la persona que elija estar en una relación contigo. Adiós” – le dijo antes de entrar en su casa
Rachel esperó unos minutos sin apartar su vista de aquella puerta, esperaba que Quinn recapacitara y saliera a buscarla para no volver a separarse nunca más, nunca sucedió.

Santana estaba trabajando en algo junto con Emily cuando la nadadora se decidió a preguntarle a la latina algo que le había estado rondando en su cabeza desde la clase de español.
- “Puedo preguntarte algo?” – dijo sin interrumpir su trabajo
- “Aunque te diga que no lo harás de igual manera así que dispara”
- “Sentiste algo cuando esa loca entró en la clase del señor Schue y besó a Marissa?”
- “No, no sentí nada” – respondió seriamente
- “Oh vamos, enserio? Es tu ex”
- “Lo sé, pero qué se supone que debía sentir? Tengo una novia que me quiere, me cuida, me da todo lo que necesito, todo lo que quiero y además es la más sexy y hermosa de toda la ciudad, podría jurar que de todo el país e incluso del mundo”
- “Veo que Brittany te tiene completamente enamorada”
- “No puedo negarlo y tampoco me avergüenza mostrarme diferente a lo que suelo ser, cuando estoy con ella no puedo ser mala…” – confesó ganándose una sonrisa por parte de la nadadora
- “Estoy feliz de verte tan bien con alguien pero no lo eches a perder ok? Ya sabemos las dos la tendencia que tienes a huir, cuando más feliz eres más te asustas”
- “Estoy trabajando en ello y no lo estoy haciendo tan mal verdad?”
- “Eso parece, no lo eches a perder”
- “Ya está terminado” – dijo Santana cambiando de tema echando el último vistazo a lo que estaban haciendo – “qué te parece?”
- “Quedó perfecto!”

Hanna necesitaba descansar, había estado estudiando desde que salió de la escuela y como no tenía noticias de Quinn decidió llamarla al celular
- “Hanna…Lo siento pero no me apetece mucho hablar en estos momentos…” – dijo Quinn tratando de que no se notara que estaba llorando
- “Estás bien?”
- “Sí…”
- “Entonces por qué lloras?” – preguntó Hanna preocupada – “Es por Rachel?”
- “Vino a verme…”
- “Y qué quería?”
- “Que vuelva con ella…” – dijo con un tono de voz quebrado
- “Quinn puedo ser sincera contigo?”
- “Te lo agradecería”
- “No me gustaría que regreses con Rachel pero si crees que ella puede hacerte feliz deberías al menos…Intentarlo” – dijo Hanna decidida
- “Pero es que yo no creo que pueda hacerme feliz”
- “Entonces por qué lloras?”
- “Porque me duele que todo haya terminado así, no puedo evitarlo soy así de idiota”
- “No digas eso porque no eres idiota…”
- “Hanna, por qué no te gustaría que regrese con ella?” – preguntó ahora la rubia de pelo más corto
- “Porque me gustas pero también quiero que seas feliz…El mundo se merece admirar la sonrisa que tienes, no sé si te diste cuenta alguna vez pero eso hermosa, absolutamente perfecta”
- “Gracias por estar Hanna, te parece si hablamos mañana en la escuela?”
- “Claro, cuídate y si necesitas algo ya sabes dónde encontrarme”
- “No te lo dije nunca pero eres la mejor, hasta mañana!”
- “Hasta mañana Q!”

Rachel quiso caminar, había estado llorando y no quería que nadie la viera así por lo que decidió desviarse de su camino de siempre e ir por otro. La judía se encontró con un grupo de chicas tal vez un par de años más grandes que ellas, la que parecía la líder se acercó a ella de forma decidida.
- “Hey tú dame lo que tengas”
- “No pienso darte nada” – se negó Rachel
- “Acaso escuchaste que te lo preguntara?”
- “Y acaso tú no escuchaste que no te pienso dar absolutamente nada? Y si vas a golpearme por favor intenta no darme en la nariz”
- “Me gusta tu actitud” – dijo la desconocida – “cómo te llamas?”
- “Rachel Berry”
- “Quieres quedarte con nosotras? Tenemos cerveza”
- “Por qué no, que puedo perder verdad?”
- “Sírvete tú misma” – dijo la chica mostrándole donde guardaban todas las cervezas

Recién había terminado la cita de Marissa y Danielle, parecían llevarse bien y disfrutar de la compañía de la otra. La pelirroja estuvo riendo sin parar desde que salieron del estacionamiento y para terminar con la cita decidió acompañar a Danielle a su casa mientras daban un paseo.
- “Llegamos!” – exclamó Danielle
- “Espero verte pronto, me divertí mucho contigo”
- “Yo también, llámame cuando quieras yo estaré esperando!” – le dijo a la vez que la abrazaba
- “Nos vemos Dani!”
De camino a su casa Marissa no podía dejar de pensar en Lindsay, había sido testigo del beso que le robó Danielle pero no sabía cómo lo habría tomado la morena quería averiguarlo llamándola pero Lindsay la había ignorado durante todo el día por lo que solo le envió un mensaje

Marissa: Hey Lindsay, podemos vernos? Necesito que hablemos! – M.
Lindsay: Lo siento pero no podrá ser hoy estoy por ir a lo de Sam, me quedaré a dormir ahí, mañana hablamos! – L.
Marissa: Creí que te gustaba dormir en tu cama…– M.
La morena nunca respondió a ese mensaje.


Me quedé sin compu hasta nuevo aviso, se murió! Trataré de actualizar lo más seguido que pueda antes de que la reparen porque no sé para cuanto tiempo tiene...Espero me sepan disculpar por el capítulo pésimo que deje recién!Gracias por comentar, amo leer sus comentarios!

Ya leí el capi, me gustó pero muy corto y eché de menos a Brittana juntas!

Me intriga ver el trabajo que estaban haciendo San y Emily, apuesto a que será algo bueno. Me encanta su amistad y como habla la latina de su relación con Britt, muy bueno que no sintiera nada con lo de MArissa y Danielle, es la señal de que la rubia la hace olvidar todo lo demás.

Me dió mucha pensa RAchel, y eso que me gustan Quinn y Hanna juntas. Es que lo hizo mal, pero todo el mundo puede equivocarse, Quinn está siendo muy dura con ella, no sé a que la llevarán las chicas que encontró en la calle.

Ya tengo ganas de leer el próximo capítulo, espero que tu ordenador no muriera del todo jajajajajaja

MUy bueno:D

Me encantaa como habla San de Britt-Britt :)
Echo de menos a Quinn y Rachel :( y emily y hanna jajajaja

Escribes genial! :) espero el próximo cap!

Capítulo 44:

A la mañana siguiente cuando los alumnos entraron en la escuela quedaron sorprendidos, había carteles por todas partes, carteles de lo que parecía una fiesta organizada por Santana y Emily. Se llamaba “La fiesta del semáforo” y consistía en que los que estuvieran de novios tenían que usar una camiseta roja, si alguien tenía una relación abierta con alguien debía usar una camiseta naranja y una verde para quien no tuviera ningún tipo de relación con nadie. Santana pensó que sería una buena ocasión para que Emily conociera a alguien y de paso cobrarían la entrada para recaudar dinero y viajar a los nacionales. La fiesta se organizaría en un local que Santana había conseguido gratis perteneciente a un buen amigo de su papá y al parecer aunque faltaran dos semanas para la fiesta a todos en esa escuela les encantó la idea.
Marissa se encontraba guardando los libros que no usaría hasta las últimas horas, detrás de ella estaba Sam con Mike y Puck hablando sobre la fiesta, cuando la pelirroja estaba por irse escuchó algo que le interesó y fingió seguir ocupada para poder enterarse bien de lo que decían.
- “Entonces Sam que camiseta usarás? Verde o naranja?” – quiso saber el judío
- “Verde, por qué debería usar la naranja?”
- “Porque te acuestas con Lindsay casi todas las semanas” – dijo el asiático como si fuera obvio el motivo
- “Nada que ver, hace semanas que no tengo nada con ella…Un día dejó de llamarme y de venir a verme cuando yo la buscaba” – explicó el rubio
- “Y por qué?” – preguntó de nuevo Mike
- “No sé, no me dio ninguna explicación y sinceramente no me importa, puedo estar con la chica que quiera cuando yo quiera”
- “Entonces usaremos los 3 una camiseta verde y tendremos a todas las chicas” – afirmó Puck a la vez que cerraba su locker.
La pelirroja había escuchado toda la conversación y no podía creerlo, Lindsay le había mentido y se preguntaba el por qué de eso. No se quedaría con la duda, en cuanto tuviera ocasión aprovecharía para preguntarle a Lindsay.

Era el segundo día consecutivo que Rachel no aparecía, Quinn se había dado cuenta pero no quiso mencionar nada, lo contrario que Aria quien estaba realmente preocupada porque sabía lo importante que era para Rachel la asistencia a clase al igual que obtener las mejores calificaciones.
- “No viste a Rachel? Hace dos días que no viene…” – dijo Aria como si Quinn no se hubiera percatado
- “No, no la vi”
- “Estará enferma?”
- “Lo dudo, ayer vino a casa a hablar conmigo y no parecía estar muy enferma” – confesó la rubia – “Igual creo que deberías llamarla, es tu mejor amiga”
- “La llamé cuando me desperté para ir a buscarla pero no me atendió”
- “Entonces no sé qué más puedes hacer, ya aparecerá”
- “Eso espero” – dijo antes de ingresar en el aula

Las horas pasaban y Rachel no aparecía. Tocaba clase de historia y Santana no quiso asistir así que se encargó de convencer a Quinn diciéndole que hacía mucho que no estaban solas como las mejores amigas que son para que la rubia tampoco asistiera a clase. Decidieron ir a donde siempre iban cuando no les apetecía asistir a alguna clase, detrás de las gradas de la cancha de football.
Para la sorpresa de las dos Rachel estaba ahí con el grupo de chicas que había conocido el día anterior, Quinn y Santana se acercaron a ellas sin entender si Rachel estaba con ellas por su propia voluntad o si las chicas le estaban haciendo algo y disimularon al verlas llegar.
- “Rachel estás bien?” – preguntó Quinn extrañada
- “Estoy mejor que nunca”
- “Te están molestando estas chicas? Porque si es así van a conocer a Santana López” – dijo ahora la latina
- “Desde cuándo me defiendes?”
- “Son amigas tuyas Rachel?” – preguntó la líder mientras se prendía un cigarrillo
- “No, a ella solo la conozco de la escuela” – dijo señalando a Santana para después señalar a Quinn – “y ella es solamente la hermanastra de mi mejor amiga”
- “Ok, entonces lárguense de aquí”
- “Quién te crees que eres para echarme?” – preguntó la latina plantándole cara
- “De verdad quieres saberlo?” – la desconocida estaba por empezar una pelea
- “Chicas, váyanse y no molesten más” – aconsejó
- “Nadie amenaza a Santana López y sale ileso”
- “San por favor, vámonos” – le pidió Quinn agarrándola del brazo
- “Esto no queda aquí” – le advirtió a la chica antes de voltearse para irse con Quinn
- “No me gusta esa latina”
- “A mí tampoco Jenny” – respondió Rachel
- “Sin embargo esa rubia no está nada mal...” – dijo con un tono de voz tan bajo que nadie pudo escucharla
Santana y Quinn encontraron un lugar donde sentarse y estar solas, la latina seguía enojada y la rubia no sabía cómo reaccionar ante lo que acababa de suceder.
- “Santana por Dios cálmate o te va a dar un infarto”
- “Cómo quieres que me calme? Escuchaste a esa intento de rockstar? Quién se cree que es, Dakota Fanning en The Runaways? Desde cuándo Rachel tiene esas amigas?”
- “Y qué se yo, estoy tan sorprendida como tú” – dijo Quinn encogiéndose de hombros
- “Pues si no quieres que termine mal haz algo”
- “Qué quieres que haga yo?”
- “No sé, habla con ella…Esas chicas solo le traerán problemas”
- “Ya está grande para decidir quién le conviene y quien no, no te parece?
- “Como sea, yo solo lo digo porque sé que te importa, por mi como si se une al circo y se va de gira” – dijo Santana cruzándose de brazos.

Cuando terminó la clase de historia Brittany se encontraba en la puerta esperando a que Santana saliera, ella había terminado su clase antes y quiso ir a verla antes de la siguiente.
- “Brittany estás esperando a San?” – preguntó Emily
- “Sí, sale ya?”
- “No está, se fue con Quinn tenían que ponerse al día de estas últimas semanas que casi no han hablado” – excusó a su amiga
- “Oh…Yo solo quería un beso para poder soportar la siguiente clase…”
- “No te preocupes no creo que pueda estar mucho tiempo sin ti”
- “Cómo sabes? San te habla de mí?” – preguntó con una sonrisa a la que nadie podría resistirse
- “Claro, somos amigas nos contamos todo”
- “Y que te dice?”
- “No sé si pueda contarlo…”
- “Por favor” – pidió haciendo puchero
- “Está muy enamorada de ti”
- “Yo también lo estoy de ella sabes por qué?”
- “Por qué?” – preguntó siguiendo a la rubia por los pasillos
- “Porque es la mejor novia, la más romántica, la más atenta, me cuida y me protege como nunca lo hizo nadie. Es la primera vez que le importo a alguien”
- “No digas eso, apuesto a que le importas a muchas personas”
- “Pero nunca nadie me toma enserio, ella sí. Además da los mejores besos del mundo” – afirmó la bailarina
- “Las personas que no te toman enserio es porque son simplemente estúpidos Brittany”
- “Gracias Emily, a veces me gustaría demostrarles que soy una mujer y no una niña”
- “Y por qué no lo haces?” – preguntó Emily mientras abría su locker
- “Porque no sé cómo hacerlo”
- “Britt eres la mejor bailarina de esta escuela, tienes un don, úsalo”
- “Tienes razón…” – respondió mientras pensaba en algo – “Lo tengo! Gracias Emily por la ayuda! Nos vemos!!” – abrazó a la nadadora y se fue corriendo dejándola sola.
- “No sé por qué tengo la sensación de que Santana me matará…”

Lindsay estaba en el baño y Marissa la siguió cuando la vio entrar, necesitaba hablar con ella y sabía que no tenía más opción que hacerlo casi a la fuerza.
- “Tenemos que hablar” – dijo Marissa fijándose que estuvieran a solas
- “Lo siento no puedo ahora”
- “Te vas con Sam?”
- “No, tengo clase” – rodó los ojos
- “Y después de la escuela?”
- “De qué quieres hablar?”
- “Quiero saber qué pasó para que de un día para el otro estemos así” – la pelirroja fue directa, no quería dar más vueltas
- “Nos acostamos, quisiste que me quedara y te dije que no, después te fuiste con otra, fin de la historia”
- “Tú te fuiste con Sam…”
- “Y qué? No te estoy reprochando nada, solo me hice a un lado para que puedas estar con esa”
- “Tiene nombre, se llama Danielle”
- “No me importa mucho como se llame” – Lindsay siempre era directa para todo lo que quería decir o hacer
- “Entonces? No estoy entendiendo nada”
- “Marissa, solo estoy tratando de hacer lo que es mejor para ti”
- “Y lo mejor para mi es mentirme?” – preguntó arqueando una ceja
- “En qué te mentí?”
- “Me dijiste que te acostabas con Sam y no trates de defenderte, sé que no lo ves hace mucho, qué pasó?”
- “De verdad quieres saberlo?”
- “Quiero saber todo” – dijo sin dudarlo
- “Tienes razón, no lo veo desde la fiesta de Aria, me llamaba y yo lo rechazaba hasta que dejó de hacerlo…No quería ni quiero tener más sexo con él y el único motivo eres tú”
- “Yo?”
- “Sí, tú. Desde ese beso no puedo pensar en otra cosa que no sea en ti, las veces que bromeaba sobre tú y yo teniendo algo más que una amistad era solo mi manera de expresar lo que de verdad quiero”
- “Y qué es lo que quieres?” – siguió indagando la pelirroja
- “A ti Marissa, te quiero a ti. Me mata verte con esa y no poder hacer nada para impedirlo”
- “Por qué no puedes hacer nada? Es porque soy una chica?”
- “Al diablo con eso! A mí no me importa lo que digan ni lo que piensen los demás, es por mí. Ya te dije que no sirvo para estar en una relación”
- “Pero no lo intentaste” – le interrumpió la pelirroja
- “No, no lo intenté porque no quiero hacerlo hasta estar segura, después de lo que te pasó con Santana no quiero hacerte sufrir”
- “Y si te ayudo a que estés segura?”
- “Cómo lo harás?” – quiso saber la morena
- “Por el momento dejaré de ver a Danielle”
- “Pero a ti te gusta esa chica aunque no lo entiendo porque no tiene nada especial…”
- “Lindsay…”
- “Lo siento”
- “Lo haremos de a poco ok?”
- “Eso significa que nada de sexo verdad?”
- “Exacto”
- “Me lo temía…” – dijo Lindsay a la vez que fruncía el ceño
- “Déjamelo a mí”
- “Me darías un beso?”
- “Claro que sí tonta” – respondió antes de cerrar la brecha de sus labios.

Hanna había estado buscando a Quinn, no tuvo oportunidad de hablar con ella antes y quería hacerlo para asegurarse que estaba bien pero no la encontró así que antes de su siguiente clase fue a su locker a buscar el libro que necesitaba. Cuando lo abrió se encontró un sobre con su nombre, uno igual al que traía el ramo de flores que había recibido con anterioridad, lo abrió y pudo leer:

“Cuando menos lo esperamos, la vida nos coloca delante un desafío que pone a prueba nuestro coraje y nuestra voluntad de cambio.”

Mi compu sigue sin signos vitales, tuve que actualizar desde lo de una amiga, espero poder subir capítulos seguido ya que por suerte tengo algunos capítulos ya escritos! Sigan comentando, se los agradezco!

Las nuevas amigas de Rachel :S
y la reacción de Santana jaja
Que es lo que hará Britt!?
Reconciliación de Marissa y Lindsay
Quien le envía las flores a Hanna!?

Espero tu próxima actualización!
Saludos! :D