[Resuelto]FanFic Brittana: Ángel de Fuego (Adaptada) Cap 39 - Fin

Capitulo 31

Rachel sonrió cuando Brittany sacudió su cabeza con desaprobación hacia Santana.

—Eres tan terca—dijo Brittany.

—Me han disparado peor que esto—dijo Santana mientras se sentaba en el sofá de dos puestos—Es apenas un rasguño.

Brittany dejó escapar el aliento mientras miraba a Rachel.

—Es una cabezota—murmuró Brittany.

Rachel asintió.

—También tengo una como ella—dijo con una sonrisa rápida.

—Sé que no estás hablando de mí—dijo Quinn mientras sacaba una cerveza de la nevera.

Quinn la levantó hacia Santana.

—No sé ustedes, pero en este momento, esto es lo primero en mi lista.

Santana asintió.

—Sí, por favor.

Rachel tomó la cerveza de Quinn y luego caminó hacia Santana, entonces tomó una para ella.

Tina seguía pegada a las computadoras y Artie y Noah aún no habían llegado.

Ellos estaban a cargo de la cena y conociendo a Artie, sería comida china.

No le importaba.

Tenía hambre y comería cualquier cosa.

Miró a Brittany.

—¿Quieres una cerveza? ¿Vino? ¿O simplemente agua?

Brittany sonrió.

—Algo más que agua. También tomaré una cerveza.

Rachel agarró otra de la nevera y se la entregó a Brittany.

Tina entró por el pasillo, estirando su espalda.

—Entonces ¿a dónde fue Ángel?—preguntó Quinn tan pronto como Tina asomó su cabeza.

—Lo siento. Debí haber previsto esto—dijo Tina—Debió saltar a lo más alto de mi lista.

—¿Qué?

—En el satélite, no era nada más que un rastro—dijo Tina—Al parecer, un camino rústico que atraviesa el bosque. Lo he rastreado y llega a la carretera Pueblo Canyon. No es de extrañar que se sintiera seguro ahí. Tenía dos salidas de escape.

—Está bien, así que esa era su casa de seguridad. Pero no encontraron el dinero ahí. Nada en el interior, solo botellas de agua y raciones de MRE.

Tina se acercó a la nevera, luego miró a Rachel pidiendo permiso.

—Adelante.

—Una cerveza suena bastante bien en este momento—dijo Tina.

Tina se apoyó en el mostrador de la pequeña cocina y tomó un largo trago, dejando escapar un suspiro de alivio y sacudió sus hombros.

Mientras ellos habían estado fuera de casa, Tina había estado pegada a las computadoras.

Sin duda, estaba tan cansada como ellos.

—¿Algo en las tarjetas de crédito?—preguntó Quinn, sin darle mucho tiempo para recuperarse.

—Sí, tengo algo—dijo Tina—No está terminado, pero creo que tengo suficiente para un perfil.

—Grandioso—Quinn se trasladó hacia su sillón reclinable—Dame algo antes de Artie llegue. Sabes que le enloquece que practiques piratería informática en las bases de datos—dijo ella.

—Déjame traer mi portátil. Será más fácil—dijo Tina.

Rachel se sentó en el comedor con Brittany, pero sus ojos estaban viendo a Quinn.

Se alegraba que ahora luciera un poco más relajada.

Anteriormente, Quinn y Figgins habían tenido una pelea a gritos, tan fuerte que Rachel había tenido que intervenir.

Sí, como Quinn había dicho, si tuviera que hacerlo nuevamente, habría llamado a la ‘maldita Guardia Nacional’ para rodear la casa.

Pero, en realidad, haberse topado con él como lo hicieron… nadie estaba pensando en respaldo.

Por desgracia, eso no era lo Figgins quería escuchar.

Sin embargo, había algo que le preocupaba. No habían tenido protección de la casa.

Dos enormes rocas frente a ellas les habían protegido, de cierta manera, de las balas de los asistentes del sheriff, pero no había habido ninguna protección de la casa.

Ángel tenía un disparo claro contra ellas.

Sin embargo, ni una sola vez les había apuntado. Cada disparo que salía de la casa iba dirigido hacia los asistentes.

No hacia ellas.

El temor de Quinn estaba justificado.

Ella y Santana podrían haber sido asesinadas. Probablemente deberían estar muertas.

Sin embargo, Ángel nunca les disparó.

Rachel miró a Brittany y enarcó sus cejas.

—¿Quieres dar un paseo?—le preguntó en voz baja.

—¿Un paseo?—Brittany levantó sus propias cejas.

Rachel sonrió.

—Para charlar…—entonces miró hacia Quinn y Santana—…SOLAS.

Brittany también sonrió.

—Ya veo—Brittany asintió con la cabeza—Claro.

Se pusieron de pie al mismo tiempo y Rachel miró a Quinn.

—Regresaremos pronto. Sólo saldremos por un rato.

Quinn frunció el ceño.

—Pero Tina va a darnos un resumen de lo que encontró.

—Y cuando Artie y Noah lleguen aquí, tendrá que hacerlo nuevamente—dijo Rachel.

Quinn asintió.

Entonces...

—¿Está todo bien?

—Bien. Vuelvo enseguida.



Una vez afuera, Rachel dejó escapar un profundo suspiro.

—A veces odio esta línea de trabajo.

—Yo también.

—Cuanto más pienso en ello, establecernos en alguna aburrida ciudad de montaña…donde lo más emocionante sea un borracho y un buscapleitos un sábado por la noche… mejor suena para mí.

Brittany sonrió.

—¿Eso está en tu futuro?

—Sé que cuando Quinn lo mencionó la primera vez, probablemente no estaba pensando en eso como una opción inmediata—dijo Rachel—Pero después de todo esto, creo que podríamos tener una discusión seria sobre el tema.

Las guió por el camino estrecho, más allá de las otras casas rodantes y los campistas.

Mientras pasaban los días, éstos se hacían más claros y agradablemente frescos, otro precioso día de otoño.

—Realmente espero que San deje el FBI—dijo Brittany—Sabía que ella no tenía la camaradería ahí como la tenía con Marley y Finn, pero me hizo creer que le gustaba. Fue algo sorprendente escucharle decir que estaba pensando regresar a Homicidio.

—¿Te sorprendió que no te hubiera dicho nada?

Brittany asintió.

—No nos reservamos las cosas. Hablamos de todo. Conociendo a San como lo hago, imagino que quería estar segura antes de mencionármelo.

—¿Así que mencionar lo que está pensando significa que ya ha tomado su decisión?—supuso Rachel.

Brittany se echó a reír.

—Sí. Supongo que en seguida que regresemos a Dallas, se pondrá en contacto con el teniente Schuester—Brittany se volteó hacia Rachel—¿Pero realmente querías charlar sobre esto?

Rachel negó con su cabeza.

—No. Supongo que estaba meditación sobre la vida después del FBI—Rachel respiró profundamente—Es algo que no le he mencionado a Quinn, pero... Santana y yo... estábamos directamente en la línea de fuego de Ángel. Y ni una vez nos apuntó.

—¿Estás segura?

—Sí. Quiero decir, todo era un caos y sé que sólo duró sesenta segundos o más, pero los disparos desde la casa fueron dirigidos hacia los asistentes, no hacia mí o Santana. Recuerdo haber pensado ¿Dónde nos cubriremos?

—Estaban al otro lado de las rocas—dijo Brittany.

—Correcto. Las rocas estaban entre nosotras y los asistentes. No había nada entre nosotras y la casa. Por supuesto, una vez que el tiroteo comenzó, no hubo tiempo de hacer otra cosa sino lo que hicimos, agacharnos tanto como nos fuera posible y cubrir nuestras cabezas—dijo Rachel.

Sintió un escalofrío al notar lo vulnerable que habían estado.

—Entonces… ¿qué estás pensando?

Rachel se volteó hacia Brittany.

—Es un poco loco.

Brittany la miró a los ojos.

—¿Crees que intencionalmente les perdonó la vida por mí?

Rachel asintió.

—Él conoce a Quinn. No nos conoce ni a mí ni a Santana.

—Sin embargo, sabía que una de ustedes era San, mi pareja.

—Sí. Y no quería matarla—Rachel se encogió de hombros—Y si le digo esto a Quinn, de hecho diría que es una locura. Que Ángel es un asesino. Que no perdona a las personas.

—Él me perdonó la vida—le recordó Brittany—Pero no era algo que hubiera considerado. Quiero decir, pensaba que estaban recibiendo disparos de ambos lados. Fue un milagro que no salieras herida.

—Tenía un disparo en el chaleco, Santana tuvo tres. Todas de revólveres. Ángel estaba usando un rifle—hizo una pausa—Pero el milagro, como lo llamas, fue la humanidad de Ángel. Por alguna razón, el vínculo que dos formaron mientras estuvieron allá afuera es fuerte. Y él sabía que si mataba a Santana, eso lo destruiría. Así que él nos perdonó la vida a Santana y a mí—respiró profundamente—Y es un poco aterrador pensar en eso—admitió—Y Quinn también se culpó terriblemente a sí misma por lo que pasó.

—¿Qué quieres decir?

—Que fuéramos a la casa como lo hicimos, sin respaldo.

Brittany asintió.

—Sí, estuvieron expuestas ¿Qué crees que hubiera pasado si los asistentes no hubieran aparecido? ¿Qué crees que hubiera hecho Ángel?

—Honestamente, no lo sé. No puedo imaginar que nos hubiera permitido acercarnos. Tal vez habría hecho unos disparos de advertencia, lo suficiente como para permitirle llegar a su coche.

—Bueno, ninguna de nosotras esperábamos que él estuviera ahí en primer lugar—dijo Brittany—Quiero decir… ¿cuáles eran las posibilidades de que Tina pusiera seis propiedades en una lista y tuviéramos un acierto?

Rachel sonrió.

—Sé que tú y Santana no entienden su método o incluso cómo funcionan los algoritmos, pero él simplemente puso en la lista las seis primeras que tenían la mayor probabilidad—dijo Rachel.

—De acuerdo con una computadora—dijo Brittany con un movimiento de cabeza.

La bocina de una corneta les sobresaltó y se movieron fuera del camino, sólo para ver a Noah que les sonreía desde detrás del volante de su coche de alquiler.

—Señoritas… ¿necesitan un aventón?

—Depende—dijo Rachel—¿Tienes comida ahí?

************************************************************************************************************
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D

Capitulo 32

Quinn utilizó la cuchara de plástico para recoger más arroz, añadiendo camarones y verduras picantes.

—¿Vas a comerte ese último rollo de huevo?—preguntó Santana, ya agarrándolo.

—Sí, voy a comérmelo. Devuélvemelo—dijo Quinn mientras daba una palmada en la mano de Santana.

—Jesús, podría pensar que es un trozo de pizza o algo así—murmuró Santana, provocando la risa de Rachel.

—Si hubiera sido el último trozo de pizza, te hubiera apuñalado con mi tenedor—dijo Quinn mientras tomaba un bocado cargado con arroz y camarón.

Quinn vio a Rachel y Brittany las miró a las dos y sonrió y le dio un guiño sutil a Rachel.

La casa rodante había estado llena con todos adentro así que decidieron cenar temprano en la mesa de picnic.

Artie y Noah habían comprado una variedad de platos chinos y un plato de rollos de huevo.

La conversación había sido ligera solo como relleno. No habían discutido en absoluto el episodio en la casa.

Y Tina sólo les había dado lo mínimo en su búsqueda de las tarjetas de crédito. Sin embargo, partiendo de lo que les había dado, ella tenía lo suficiente como para reconstruir un patrón.

Artie limpió su boca con una servilleta de papel y luego tomó un trago de agua de su botella.

Quinn lo miró a los ojos a través de la mesa y supo que él había llegado a su límite con el descanso.

—No he hablado con Figgins— dijo él—Supongo que tú lo hiciste.

Quinn asintió.

—Oh sí. No fue agradable—admitió Quinn—Al parecer, debimos haber sabido que Ángel estaba en la casa y debimos haber llamado a todos los oficiales de la ley de todo el maldito estado como respaldo y luego bombardear la casa desapareciéndola de la faz de la tierra—dijo ella—Por supuesto, con Ángel todavía en el interior.

—Fácil adivinarlo ahora—dijo él sorprendiéndola—Si hubiera estado a la cabeza, habría hecho lo mismo. No fue como que hubieras conducido hasta la puerta de entrada.

Quinn colocó su tenedor en el plato, todavía mirando el rollo de huevo. Se lo pasó a Santana, quien lo agarró rápidamente.

—Sí, lo sé—le dijo a Artie—Pero aun así, debí haber tomado más precauciones. Verificar estas propiedades fue más un ejercicio para matar el tiempo hasta que Tina consiguiera algo un poco más concreto—admitió Quinn—Nunca pensé que Ángel estuviera dentro de la casa.

—Me sorprende que ninguno de los asistentes recibiera un tiro—dijo Noah.

—A mí también—dijo Quinn—Con las habilidades de Ángel, debió haber sido capaz de matar a seis de ellos.

—En realidad no duró tanto tiempo—dijo Rachel—Un minuto, como máximo—entonces levantó sus cejas casi disculpándose—Por supuesto, estar atrapada en un fuego cruzado… pareció como una hora.

—Secundo eso—dijo Santana—Pero tienes razón. Disparó una gran cantidad de rondas desde la casa en ese largo minuto. Sus coches tenían muchos disparos, pero ninguno de ellos tuvo un rasguño.

Quinn notó que Rachel y Brittany intercambiaron miradas una vez más.

Nuevamente sintió curiosidad sobre lo que hablaron durante su paseo. Pero en lugar de preguntarles directamente delante de todos, pensó reservarlo para esta noche, cuando ella y Rachel estuvieran solas.

—Si no lo conociera, diría que Ángel no estaba disparando a matar—dijo Quinn.

Brittany asintió.

—Estoy de acuerdo. Sólo fue una distracción—miró a Artie—Si se me permite intervenir en esto.

—Por supuesto—dijo él.

Brittany apoyó los codos sobre la mesa, mirándolos a todos antes de hablar.

—Él usó la palabra “distracción”. Si había previsto inicialmente... eliminar todo su equipo o no, no lo sé—dijo Brittany—Pero cuando los dos sujetos intentaron traicionarlo y tomar el dinero, los mató. No sé si eso hizo que los otros tres se convirtieran en prescindibles o no. Pero todo lo demás que hizo después de eso, fue solamente por distracción. Causar el accidente que cerró el camino, matar a esa familia—miró a Santana—E incluso llevarme. Todo fue una distracción—se volteó hacia Quinn—¿Por qué hoy sería diferente? Tal vez nos vió llegar. Sabía que cada agencia en el estado le estaba buscando. Así que una llamada al 911 envió al departamento del sheriff rápidamente.

—Y fue distracción suficiente para que escapara—dijo Quinn—Ni siquiera estuve cerca para dispararle. Estaba demasiado ocupada esquivando las balas.

—Todo eso está muy bien… pero ¿dónde diablos está?—preguntó Artie.

Quinn se volteó hacia Tina.

—Estás a cargo, Cohen-Chang. Diles lo que encontraste.

Tina asintió.

—Bueno, tomen en cuenta que no es nada concreto. Y todavía estoy corriendo dos programas.

Tina movió su plato a un lado y sacó su computadora portátil colocándola delante de ella.

—Pero creo que es importante—miró rápidamente a Artie—He recopilado datos a través de los recibos de las tarjetas de crédito—dijo ella—Sabemos que reapareció aquí en los Estados Unidos hace seis meses. Usé eso como punto de partida. Básicamente, tomé todas las transacciones hechas después de esa fecha dentro de un radio de cien millas entre Santa Fe y Taos.

—Eso tuvo que haber sido miles de transacciones—dijo Santana.

Tina sacudió su cabeza.

—Oh, mucho más que miles—dijo Tina—Cientos de miles de personas. Seguí las transacciones de gas y combustible por separado en mi primera búsqueda, luego las combiné con alimentación, hospedaje y bueno... básicamente todo lo demás.

—Sí, grandioso…—dijo Quinn—… Diles lo que has encontrado.

—Encontré dos patrones que encajaron. Uno ocurrió hace cinco meses. El otro, justo hace un mes.

—¿Qué tipo de patrón?—preguntó Artie.

—El primero de ellos, Charles McDaniel. Utilizó una tarjeta de crédito para alquilar un coche en Albuquerque. Sus recibos de gas muestran que hizo viajes de ida y vuelta entre Santa Fe, Taos y Eagle Nest durante casi un mes. Desafortunadamente, no hubo ningún uso de tarjeta de crédito para alojamiento o comida.

—Está bien ¿estás diciendo que fue la única persona que viajó esa misma ruta durante ese tiempo?

—No. Pero lo que fui capaz de encajar fue otra tarjeta de crédito… Justin Black… usada en la misma zona al mismo tiempo. De hecho, varias paradas para recargar gasolina con la tarjeta de Charles McDaniel coincidieron casi simultáneamente con la compra de comida cargada a la tarjeta de Justin Black.

—¿Así que tu teoría es que Ángel tenía estas dos tarjetas, usándolas a voluntad sin temor a ser rastreado?—preguntó Santana—¿No hubiera sido más seguro para él usar dinero en efectivo?

—¿Por qué utilizar su propio dinero cuando puede cargarlo a una cuenta falsa?—preguntó Quinn.

—¿No se arriesgaba a que estos sujetos supieran que sus tarjetas estaban siendo comprometidas?—Santana se encogió de hombros—Tan cuidadoso como ha sido, eso parece imprudente.

—No son reales—dijo Tina—Bueno, las tarjetas son reales, pero forjadas—explicó—Robo de identidad. Para cuando Justin Black y Charles McDaniel fueran conscientes de los cargos, él ya habría desechado las tarjetas. Los únicos cargos se hicieron justo en ese mes.

—Está bien…—dijo Artie—¿Qué más? Seguramente no es todo lo que tienes. Quiero decir, no hay manera de demostrar que era Ángel quien estaba usando las tarjetas. E incluso si la hubiera, no ayudaría a encontrarlo.

—Hace cinco semanas…. el mismo patrón, diferentes tarjetas, diferentes nombres—dijo Tina—Sólo que, añadió otras paradas. Alojamiento y combustible cerca de la compañía de vehículos blindados. Y en esta ocasión, cargaron al alquiler de dos coches, no sólo uno. El segundo fue en Santa Fe.

Santana negó con su cabeza.

—Está bien, tal vez no lo estoy viendo ¿pero qué demonios prueba eso? ¿Y cómo demonios nos ayuda?

—No es blanco y negro—dijo Quinn—Si introduces los datos y obtienes resultados, tienes que confiar en ellos. Sé que no tiene sentido.

—Digamos que confío en ellos—dijo Santana—¿Ahora qué? ¿En qué nos ayuda?

—Estoy revisando los alquileres de coches de los últimos meses—dijo Tina—Sabemos que tenía un coche para huir y sabemos que tenía un coche escondido en las montañas. Y ahora sabemos que tiene un Ford blanco.

—Tal vez los compró—dijo Brittany—No los alquiló.

Tina asintió.

—Sí. Tal vez lo hizo. Revisaré eso también. También estoy haciendo una búsqueda de esos dos nombres para ver si aparece algo.

—¿Qué otra cosa estás buscando? Dijiste que tenías un par de cosas más—dijo Quinn.

—Propiedades en el área de Taos que fue comprada o alquilada en los últimos seis meses. Esconderse en propiedades abandonadas es una cosa, pero ¿no se sentiría más seguro si tuviera su propio lugar?

Artie sacudió su cabeza.

—Eso no tiene sentido. Robó tres millones de dólares ¿No tomaría el dinero y huiría? Además, si él tiene su propio lugar ¿por qué lo encontramos en una propiedad abandonada?

—Porque su foto ha sido publicada en todas las noticias—dijo Brittany—Si tiene un lugar, lo más probable es que lo tendría en un área pública. Tal vez incluso un apartamento.

—Creo que si tiene un lugar, eso no era parte del plan original—dijo Quinn—Sí, tomar el dinero y huir tiene más sentido. Pero él ya no está operando bajo ese plan. Está en el Plan C, por lo menos.

Artie se puso de pie, caminando detrás de la mesa de picnic. Negando con su cabeza nuevamente.

—Conjeturas. Nada más que suposiciones y conjeturas. Estoy de acuerdo con la agente López. Esto no nos ayuda. No estamos más cerca de encontrarlo—miró a Quinn—¿Así que teníamos un patrón? Nos dice lo que él hacía, no lo que va a hacer.

Quinn sonrió.

—Me conoces, Artie, me encantan las conjeturas.

—En realidad, dos patrones—corrigió Tina—Y todavía estoy revisando las transacciones con tarjeta de crédito, buscando si algo ocurrió durante las últimas dos semanas.

—Él estaba aquí hace cinco semanas—dijo Rachel—¿No es seguro asumir que nunca se fue?

—Los cargos de las tarjetas de crédito duraron tres semanas y luego se detuvieron—dijo Tina.

—Así que tiene más tarjetas. O tal vez comenzó a usar dinero en efectivo—sugirió Noah.

—Bueno, sabemos que ahora tiene tres millones de dólares—dijo Santana.

—Miren, antes de desanimarnos con esto, dejemos que llegue a su fin—dijo Quinn.

—¿Qué llegue a su fin qué?—preguntó Artie—No tenemos nada. Estamos sentados aquí con nuestra cabeza metida hasta el culo sin hacer nada—dijo él, su voz cada vez más fuerte.

—Estamos haciendo lo que hacemos—dijo Quinn con calma—Si los alguaciles federales patean las calles o el departamento del sheriff patea las calles... eso es lo que ellos hacen. No es lo que nosotros hacemos. Dejamos que Tina haga lo suyo. Cuando algo surge, echamos un vistazo. Como hicimos hoy—hizo una pausa—Como trabajamos en Barstow.

Artie la miró, todavía moviendo lentamente su cabeza.

—Hoy lo perdimos. Probablemente esa fue nuestra única oportunidad. Mi conjetura es que ya se ha ido de esta zona.

—No sin el dinero—dijo Brittany.

—Después de todo lo que ha pasado hoy ¿todavía piensas que él está dando vueltas por aquí?

—Sí. De lo contrario ¿cuál fue el punto de todo esto?

************************************************************************************************************
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D

Capitulo 33

—Estoy tan lista para que esto termine—murmuró Rachel contra los labios de Quinn.

—Yo también.

Quinn volvió a besarla, pero cuando el beso se profundizó, Rachel se apartó.

No tenían tiempo.

—Tina pronto estará de regreso—dijo Rachel.

Quinn suspiró.

—Lo sé. También estoy lista para recuperar nuestra casa.

—Fuiste quien accedió a dejarle dormir aquí esta noche—le recordó Rachel.

—Cuanto antes encuentre algo, más pronto podremos salir de aquí—dijo Quinn y agarró la mano de Rachel y la acercó nuevamente—¿Estás bien?

Rachel asintió con la cabeza.

—Sí ¿Por qué lo preguntas?

—Estuviste un poco callada hoy. Sé que lo que pasó en la casa…

—Estoy bien, cariño. Deja de castigarte por eso—Rachel la miró sus ojos—Además, no creo que alguna vez estuviéramos en peligro de Ángel.

Quinn frunció el ceño.

—¿Eso fue de lo que hablaron tú y Britt?

Rachel sonrió, preguntándose cuándo Quinn traería a relucir eso.

Tiró de Quinn sentándola junto a ella en el sillón de dos puestos, moviendo a Lola en su regazo. La gata ronroneó y se estiró, luego se arrastró hasta el regazo de Quinn.

Quinn inmediatamente hundió sus dedos en el pelaje negro de Lola.

—Ángel nunca atentó contra nuestra vida—dijo Rachel—Y no pudo haber sido que estaba demasiado preocupado con los asistentes como para preocuparse por nosotras. Estábamos en su línea de tiro.

—Entonces… ¿cuál es tu teoría?

—Él no quería matar a la amante de Britt.

Quinn negó con la cabeza.

—No. No es así como funciona, Rach. El Ángel me conocía, se guiaba por las reglas cuando se trataba de esto. Sólo hay dos reglas concretas, cumplir la misión asignada y salir con vida. Todo lo demás simplemente es daño colateral. Sin importar lo que sea—dijo Quinn—No puede haber ningún tipo de apego emocional en su línea de trabajo. Ángel no se preocupa por eso. No le hubiera importado que Santana estuviera allá afuera. Es un asesino.

—No estoy de acuerdo—dijo Rachel—Al menos en este caso. A él le importa. Él se preocupa por Britt. Por alguna razón, lo hace.

—¿Así que crees que porque Santana estaba ahí, no les disparó?

—Sí. Él podría habernos matado. Podría haber matado a los seis asistentes, si es tan bueno como dices que es. Pero no lo hizo. Nadie murió—se encontró con la mirada de Quinn—El Ángel que conocías, los habría matado ¿cierto?

—Sí.

—Así que tal vez Britt tiene razón. Tal vez fue simplemente una distracción. Tal vez su verdadera misión aquí es el dinero, nada más. Él simplemente no dispara a matar cada vez que intenta…

—Las distracciones son una cosa, Rach ¿Pero matar a esa familia inocente? ¿Matar a ocho agentes de la ley para escapar?

—Ahí está tu daño colateral. Él estaba escapando. Su objetivo es el dinero. Eso es todo.

—¿Así que estás diciendo que no les disparó porque Santana estaba ahí o no les disparó porque no necesitaba hacerlo? ¿Qué simplemente necesitaba el tiempo suficiente para distraernos y escapar?

Rachel sonrió.

—¿Tal vez un poco de ambas cosas?

Quinn también sonrió.

—Puede Ser. Y supongo que nunca lo sabremos.

Unos faros brillaron afuera y unos segundos más tarde, Tina estaba llamando a su puerta.

Rachel cargó a Lola mientras Quinn se levantaba para dejarlo entrar.

Tina traía una pequeña bolsa de lona, que arrojó al suelo junto al sofá de dos puestos.

—Te traeré algunas sabanas—ofreció Rachel mientras se dirigía a su dormitorio.

Quinn y Tina entraron en la pequeña oficina y se desconectó de su conversación mientras sin pensar fue a desplegar el sofá para hacer la cama de Tina.

Preparó la cafetera para la mañana y luego se metió en el cuarto de baño.

Cuando salió, Quinn estaba esperando.

—¿Lista para la cama?

Rachel asintió.

—Sí. Ha sido un largo día.

Quinn asintió.

—Sí, lo ha sido—hizo un gesto hacia el dormitorio—Voy enseguida.

Rachel tocó su brazo mientras caminaba junto a ella, apretándolo ligeramente.

—Buenas noches, Tina—dijo Rachel en voz alta mientras pasaba junto a la oficina.

—Buenas noches—dijo Tina, sin apartar los ojos de la pantalla.




*******************************************************************************************************************



El sonido incesante finalmente penetró su sueño.

Quinn se dio la vuelta, parpadeando varias veces antes de registrarlo.

Rachel estaba profundamente dormida, con una mano enroscada alrededor del brazo de Quinn.

Quinn agarró su teléfono.

Eran casi las cuatro.

Suavemente se alejó de Rachel y salió a hurtadillas de la habitación. Empujó la puerta de la oficina abriéndola y el sonido se hizo más fuerte.

Se quedó mirando el parpadeo en la pantalla por un momento. Al parecer, los programas de Tina habían seguido su curso. Con suerte, habrían dado con algo.

Entró en la sala de estar y se detuvo, sonriendo mientras observaba como Tina dormía. Estaba acurrucada en una bola, lucía como una niña en lugar de un agente del FBI.

Extendió su mano y tocó su hombro levemente.

—Hey... despierta.

Ella saltó, sus ojos muy abiertos.

—¿Qué pasa?

Quinn levantó sus manos.

—Nada—hizo un gesto con su cabeza hacia el pasillo—Tu programa finalizó. Empezó a sonar la alarma.

Tina frotó sus ojos, luego sacó las piernas fuera de la cama.

Quinn ahogó su risa por la pijama que usaba con temas de Hello Kitty.

Tina la cubrió a toda prisa poniéndose una manta.

—¿Qué hora es?—preguntó mientras se ponía las gafas y arrastraba sus pies hacia la oficina.

—Temprano—dijo Quinn—Las 4.

Tina se dio la vuelta para mirarla.

—¿Café?—preguntó Tina mientras bostezaba.

Quinn asintió con la cabeza, sabiendo que no volvería a dormir.

—Sí. Café.

Se tomó un momento para mirar hacia la puerta de la habitación cerrada donde Rachel y Lola aún dormían. Suspiró, deseando poder volver ahí y unirse a ellas.

Pero no.

Café.

Era hora de ponerse a trabajar.

Quinn entró en la pequeña oficina con dos tazas humeantes de café. Tina no pareció notar su aproximación.

—Lo tomas negro ¿verdad?

Tina levantó la mirada y asintió con la cabeza.

—Creo que lo encontré.

Las cejas de Quinn se dispararon mientras Tina tomaba la taza de café que le ofrecía.

—¿Crees?

—Hace cinco meses, activaron los servicios públicos en una casa de alquiler. María Joseph.

—¿Qué significa eso?

—María era el nombre de su esposa. Joseph era su hijo.

Quinn se la quedó mirando.

—¿Eso es todo? ¿Eso es lo que tienes?

—Introduje todo lo que sabíamos sobre Ángel Figueroa. Todos los datos que tenía de él. Esta propiedad alquilada está en la parte superior de la lista. Ahora estoy corriendo una verificación de datos, pero María Joseph no parecía existir en la zona de Taos hasta hace cinco meses.

Quinn pasó la mano por su cabello.

—No sé, Tina. Parece un poco improbable ¿no es así?

—¿Pensé que no creías en las coincidencias?

Quinn asintió con la cabeza.

—Tienes razón. Tenemos que verificarlo ¿A quién pertenece la propiedad alquilada?

—Parece ser un individuo. Margaret Torres. Tengo su información.

Quinn asintió.

—Está bien. La llamaré. Ver quien es María Joseph—Quinn suspiró—A una hora razonable, por supuesto—tomó un sorbo de su café—¿Qué más tienes?

Tina negó con la cabeza.

—Nada más que refleje un porcentaje tan alto.

—Disparos en la oscuridad—murmuró Quinn.

—Una aguja en un pajar—respondió Tina.

************************************************************************************************************
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D

Capitulo 34

Brittany gimió en voz baja mientras la boca de Santana se movía más abajo.

Santana extendió las piernas de Brittany con su rodilla mientras capturaba un pezón entre sus labios.

No tenía ni idea de que hora era, pero las manos de Brittany la habían estado acariciando, instándola a despertar. Cuando Brittany le susurró “haz el amor conmigo” Santana las hizo rodar, moviendo sus manos por el cuerpo desnudo de Brittany.

—Sí... con tu boca—murmuró Brittany.

Santana sonrió contra su pecho, luego se trasladó aún más bajo, sus labios humedeciendo el trayecto a lo largo del estómago de Brittany, haciendo una pausa para morder suavemente la depresión de su cadera, disfrutando el sabor familiar de la piel de Brittany.

Pero las manos de Brittany le empujaron más abajo y Santana permitió que Brittany la guiara.

La habitación estaba oscura, pero Santana le conocía muy bien. Extendió aún más las piernas de Brittany y entonces enterró su rostro entre ellas, su gemido se mezcló con el de Brittany mientras su lengua se deslizaba por su humedad.

La semana pasada había puesto una tensión en su relación, pero esto... esto, al menos, se sentía normal.

Ni persecuciones de un asesino, ni equipo del FBI, ni una extraña habitación de hotel.

Ahora no.

Ahora, sólo eran ellas... haciendo el amor.

Santana cerró su mente a todo lo demás mientras succionaba el clítoris de Brittany dentro su boca.

Brittany sacudió sus caderas contra la cabeza de Santana mientras su lengua se movía hacia adelante y hacia atrás, como sabía le gustaba a Brittany.

—Dios... sí—respiró Brittany—No te atrevas a parar.

Santana no tenía ninguna intención de parar, ni siquiera cuando escuchó su teléfono.

Las manos de Brittany se aferraron con fuerza en sus hombros y Santana ignoró el sonido infractor de su teléfono, escuchando a cambio la respiración acelerada de Brittany y sus silenciosos gemidos.

Pero el teléfono no se detuvo.

El timbre apareció nuevamente después de sólo un minuto de silencio.

—Ni siquiera pienses en contestar—murmuró Brittany.

Pero el timbre persistió y Santana casi gruñó con frustración. Se apartó de Brittany, alcanzando su teléfono.

—Es Quinn—dijo Santana a Brittany mientras comprobaba su teléfono.

Santana rodó sobre su espalda, su respiración tan laboriosa como la de Brittany.

—Más vale que sea importante Quinn, porque tu tiempo es una mierda—dijo Santana sin rodeos.

Quinn se rió.

—Lo siento. Ni siquiera quiero saber que interrumpí. Pero Tina tiene algo. Ya he llamado a Artie.

—Está bien.

Santana suspiró y miró a Brittany, quien aún tenían los ojos cerrados.

—Tienes al menos una media hora antes que Artie y Noah vayan a buscarte. Eso te dará el tiempo suficiente para terminar lo que sea que interrumpí—bromeó Quinn—Y, por cierto, recoge el desayuno de camino para acá.

—Te odio—murmuró Santana antes de colgar.

Brittany rodó la cabeza hacia ella, con una sonrisa en su rostro.

—Ustedes dos son muy parecidas.

—Al demonio que lo somos—dijo Santana.

Santana rodó hacia Brittany y la atrajo hacia ella.

—Ahora... ¿podemos continuar?

Brittany la besó y asintió.

—Por favor hazlo, Sanny.



********************************************************************************************************



—¿McDonald’s? ¿Trajiste McDonald’s?

—Yo no elegí el lugar—dijo Santana mientras mordía su sándwich de desayuno—Artie estaba conduciendo.

—Figúrate—dijo Quinn mientras también le daba un mordisco.

—¿Podemos continuar?—preguntó Artie con impaciencia—¿Tina? ¿Qué encontraste?

—Propiedades de alquiler—dijo Tina mirando a Quinn—Quinn llamó al propietario a primera hora de la mañana.

Quinn asintió.

—Sí. Tina encontró una casa alquilada que tenía activado los servicios públicos desde hace cinco meses.

—¿Qué prueba eso?—preguntó Artie.

—Nada, en realidad—dijo Quinn—El nombre era María Joseph—se encogió de hombros—Podría ser cualquier cosa.

—El nombre de su esposa era María—comentó Brittany.

—Sí. Y Joseph era el nombre de su hijo.

—¿Entonces asumo que esto no es más que una coincidencia?—preguntó Artie.

—Llamé al dueño de la casa—dijo Quinn—Una señora agradable. Muy dispuesta a dar información. Ella dijo que un hombre había alquilado el lugar para su sobrina. Nunca lo conoció. Él hizo todo por teléfono. Pagó sus seis meses de alquiler por adelantado. En efectivo.

—Todavía no es concluyente—dijo Artie.

Quinn miró a Tina.

—En realidad no.

—El nombre del hombre era Charles McDaniel—dijo Tina.

—El nombre de la tarjeta de crédito—dijo Noah asintiendo con su cabeza—Eso no es una coincidencia.

—Espera un minuto—dijo Santana—Si tuvo esta casa todo el tiempo ¿por qué diablos se escondió en una propiedad abandonada?

—No lo sé—dijo Quinn—Tal vez sólo estaba tratando de mantener un perfil bajo durante un tiempo. Esta propiedad alquilada se encuentra en una zona residencial. Ya que su rostro ha estado en todas las noticias, tal vez no quería correr el riesgo de ser visto.

—¿Te has comunicado con Figgins? Debemos involucrar a las otras agencias—dijo Artie.

—De ninguna manera—dijo Quinn—¿Queremos otro incidente como el que tuvimos en la casa?—negó con la cabeza—Hacemos vigilancia, lo emboscamos.

—Creo que deberíamos…

—Artie, es una zona residencial. Si llevas a un centenar de policías allá ¿qué crees que va a pasar?

—¿Qué dice Figgins?

—Él dice que es mi decisión—dijo Quinn—Será un maldito baño de sangre si asaltamos el lugar.

—Si rodeamos la casa, sin permitirle ninguna ruta de escape, entonces…

—Ángel no se rendirá sin una pelea—dijo Quinn.

—Entonces ¿qué sugieres?

Quinn miró a Brittany y luego a Artie.

—Tenemos que sacarlo. En silencio. No darle la oportunidad de matar a alguien más.

—¿Hacerlo el objetivo?

—Sí.

Artie la miró.

—¿Y cómo vas a hacer eso?

Quinn dejó escapar un profundo suspiro.

Hace mucho tiempo había renunciado a su papel como francotirador. Pero cuando habló con Figgins anteriormente, coincidieron en que tratar de capturarlo por la fuerza sólo provocaría más muertes.

Y ya había habido suficientes muertes.

Sólo había una persona más que debía morir.

Y esa era Ángel Figueroa.

Así que asintió con la cabeza, tomándose el tiempo para mirar a cada uno de ellos.

Rachel reconoció su decisión con un sutil movimiento de cabeza, y ella se sorprendió de que Brittany también lo hiciera.

—Está bien. Entonces ¿cuál es el plan?—preguntó él.

—Haremos lo que hicimos en ese viejo parque acuático en Barstow. Iremos bajo la oscuridad. Auriculares inalámbricos y micrófonos de muñeca nuevamente—dijo Quinn—Tina ya ha estado trabajando en ello.

—¿Qué pasa con la vigilancia?—preguntó Noah.

—He recolectado una serie de imágenes de satélite de la zona—dijo Tina—Pueden familiarizarse con ella y decidir cómo desean abordarla. Es un vecindario antiguo. Algo que probablemente fue atractivo para él es que hay muy pocas farolas. Ninguna cerca de la casa.

—Necesitaremos otro coche—dijo Quinn—Quiero tres puestos. Creo que podemos cubrir varias cuadras y aun así estar a salvo—miró a Brittany—Creo que deberías quedarte aquí con Tina.

—No—dijo Brittany con una rápida sacudida de su cabeza—Entiendo que esta es una misión del FBI, pero voy con ustedes. Me quedaré en el coche como antes, pero voy.

Quinn había imaginado que ese sería el caso, pero pensó que podría sugerirlo de todos modos. Así que asintió con la cabeza, luego señaló a Noah.

—Encárgate de conseguirnos otro coche.

—Ya lo tienes—Noah hizo una pausa—¿Usaremos la visión térmica como lo hicimos en Barstow?

—Necesitamos hacerlo, sí. Probablemente será la única manera de lograr un tiro limpio—dijo Quinn.

Echó un vistazo a Santana, que había estado excepcionalmente callada y luego a Brittany.

—Sé que esto no parece para nada una labor policial—dijo Quinn—Pero se nos ha dado el visto bueno para matar a Ángel. Realmente no estoy ansiosa por hacerlo... pero es lo que es.

Brittany se encontró con su mirada fija.

—Si estás haciendo la advertencia por mí, no te molestes. Sé cuál es la situación.

Quinn asintió.

—Para que lo sepas, consideramos la idea de que negociaras con Ángel.

Brittany le dio una media sonrisa.

—No creo que haga ninguna diferencia.

—No. Probablemente no.
 

************************************************************************************************************
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D