FIC BRITTANA : Mi Reina de la noche - capitulo 46, FINAL.

Hice la maleta. Ella estaba junto a la puerta, apoyada en el marco, con los brazos cruzados. No había expresión alguna en su rostro estaba con la mirada perdida en mi equipaje. Yo deseaba con todas mis fuerzas estar ya en el avión pero, al mismo tiempo, quería retrasar al máximo la separación.

Cuando terminé, la miré y sentí ganas de gritar. Nada de aquello tenía sentido: nos amábamos, pero separadas no nos haríamos más daño así que no teníamos elección. A pesar de su cara inexpresiva, casi sentí en mi propia piel la tristeza que la embargaba.

Me dirigí a la puerta. No me atreví a tocar su cuerpo por última vez, pues sólo serviría para hacernos perder el control a las dos.

Abrí la puerta: me siguió, primero caminando lento e inseguro, y después con largos pasos ya en el pasillo la sentía correr detrás de mí me abrazó por la espalda y yo me quedé inmóvil, sin desear nada más.

—Por favor britt quédate conmigo —me susurró entre sollozos.Dejé caer la maleta me voltee en sus brazos y la abracé yo también. La estreché con fuerza, para sentir su cuerpo una vez más.

—No puedo, sabes que no podemos —Hablé junto a su hombro. Me llegó su fragancia y casi pude percibir el sabor de su piel. La amaba más que a nada en el mundo, ella acercó su cara a la mía y me beso, con amor, necesidad y nostalgia, pidió paso con su lengua y se lo di ,el beso se prolongó más de lo común era obvio que no quería dejarme ir

—san, por favor suéltame—le susurre uniendo nuestras frentes con lágrimas corriendo por mis mejillas

—No, no esta vez, tu luchaste por tenerme a tu lado ahora me toca a mí luchar por ti, por lo nuestro, insistiré britt , no te iras de mi vida tan fácil , no de nuevo, no lo permitiré—me dijo sollozando y con la voz entrecortada

—santana, no lo hagas más difícil —Me aparté de ella como pude, recogí mi maleta y empecé a bajar la escaleras llorando. No volví la vista atrás ni una vez.

Estaba en el avión de vuelta a casa con una expresión en el rostro como si estuviera en trance. A medida que aumentaban los kilómetros que nos separaban, me iba serenando.

Había encontrado a la mujer de mi vida y la había perdido. “Bueno, no era para tanto, a todo el mundo le pasa lo mismo”. No, no servía de
nada querer engañarme a mí misma. Sabía que jamás en mi vida volvería a sentir algo así. Ella sería siempre mi recuerdo más feliz...
y también el más triste.

Lo primero que hice al llegar fue tomar el teléfono y llamar a quinn, decirle que ya estaba en new york para que ella pudiera empezar con lo del juicio.


Deshice la maleta, puse la ropa sucia en la lavadora y recogí el correo,
que ya empezaba a sobresalir del buzón que había en el rellano. esas actividades me proporcionaron unos minutos de Respiro.

Me preparé un baño y permanecí largo rato sumergida en agua caliente. Era una de mis actividades favoritas, que siempre me relajaba y tranquilizaba. Experimenté la relajación física, pero cuando quise dejar la mente en blanco, como tenía por costumbre, me topé con demasiados pensamientos Bueno, en realidad sólo había uno: santana López.

La recordé en su bañera de París y recordé también cómo me sentí al verla allí. Aparte del calor del agua, que me calentaba por fuera, empecé a notar cierto ardor dentro de mi cuerpo. “Ya se me pasará —pensé—. Con el tiempo... conoceré a otras mujeres, me acostaré con ellas y me ayudarán a olvidar. Tal vez hasta me vaya a vivir con otra mujer. Ese es mi futuro, no ella. O a lo mejor me quedo sola”.

En esos momentos, quedarme sola era la situación que me resultaba más apetecible. Puesto que a ella no podía tenerla, no me parecía que hubiera tanta diferencia. ¿Y el sexo? “¡Condenado instinto sexual! ¿Por qué no me dejas en paz? ¿O acaso crees que puedes hacer realidad todos tus deseos?”. No, no, claro que no. Pero... ¿qué me Quedaba después de ella? Santana llenaba mis días, la amaba demasiado como para olvidarla o reemplazarla con cualquiera, El sexo con ella era una experiencia increíble y no me sentía capaz de apartar ese recuerdo de mi mente.

Imaginé que notaba en mi piel la caricia de sus manos y suspiré. El estremecimiento de mi vientre fue tan real como el cosquilleo que notaba en la piel. Froté esa parte de mi cuerpo para que desapareciera el hormigueo, pero fue un error.

La agradable sensación del agua caliente en contacto con mi piel incrementó un poco más mi sensibilidad. Quería más. Vi su cara frente a mí, sus labios ligeramente entreabiertos, y deseé tenerla cerca.

Imaginé que estaba allí y que introducía los mimos en el agua, entre mis piernas. Cerré los ojos: sabía que no era ella, pero recurrí a todas mis fantasías para imaginar que era santana la que me acariciaba.

Gemí cuando empecé a notar una sensación placentera. No era necesario que guiara mis manos, pues ellas solas hacían todo el trabajo. En el agua, los pezones se pusieron duros de inmediato. Entre mis piernas noté el impacto certero de una flecha al rojo vivo que incrementó mi deseo y deslicé una mano hacia abajo. La vi: estaba inclinada sobre mí y mis caricias eran sus caricias. Murmuré su nombre. No podía parar.

De alguna forma, quería invocar su presencia. Me hundí más en la bañera y me retorcí de placer, mientras el agua salpicaba a los lados. Aumenté el ritmo de las caricias y, de repente, arqueé todo el cuerpo y gemí en voz alta: ahh “¡santana!”

Dejé la mano entre las piernas unos segundos más, para disfrutar de la sensación. Estaba sumergida en el agua, a punto de quedarme dormida. Abrí los ojos, retiré la mano y entonces la realidad volvió, no era más que mi mano y lo que había hecho no era otra cosa más que masturbarme.

¿Eso era lo único que me quedaba? ¿Ese era mi futuro? Hasta entonces, jamás me había preocupado. Cuando estaba sola y sentía el deseo de hacerlo, lo disfrutaba, sin importarme si en aquel momento tenía novia o no. Ahora, sin embargo, la perspectiva me parecía muy poco atractiva, pero no me iba a quedar otro remedio que acostumbrarme.

Perspectiva SANTANA

Han pasado algunos días desde que brittany se fue de Francia a new york, dejando nuevamente en mí una herida muy grande, tal vez por el simple hecho de que yo aún guardaba las esperanzas, que volveríamos a ser una pareja estable, que no se iría, que se quedaría aquí conmigo, el poco tiempo en el que estuve con ella fui plenamente feliz, algo que nunca pensaba que llegaría a ser con la vida y profesión que tengo.

Miro a mi alrededor y el apartamento se siente tan vacío a pesar de todos los lujos que lo rodean, siempre me había sentido tan a gusto estando sola en este apartamento de parís, jamás había traído a alguien aquí puesto que era mi lugar de descanso, de alejamiento pero brittany ¡mi britt! fue la primera en hacerme compañía dentro de estas paredes.

Me dirigí a mi habitación y me acuesto en mi cama, enterrando mi rostro en la almohada que utilizó britt, aún conserva el olor de su cabello, y las sabanas aún tienen el dulce aroma de su cuerpo .

—¡la extraño demasiado! Acaso ¿lograre vivir sin ella? —pregunto al vacío esperando una respuesta, la cual nunca llegó.

Ahora me doy cuenta lo mucho que marco mi vida, no podría cenar en un restaurant de noche porque inmediatamente me recordaría a brittany y en la primera cita que tuve con ella en realidad en la primera “cita de la vida cotidiana” que tuve en la vida, mi apartamento en new york , a pesar de tantas clientas que han estado allí, britt dejo su escena, ¡una imborrable! y estoy segura que al llegar allá la recordare, aquí en parís, viví muchas cosas, tengo amigos que no conocen mi historia y por lo tanto no me juzgan pero ahora estuvo britt aquí cuidándome , preocupándose por mí, amándome como lo hago yo con ella ¿cómo no extrañarla? ¿Cómo no necesitarla? Si se metió hasta lo más profundo de mi alma, conociendo todos los aspectos de mí, no pude evitar ponerme a llorar, el maltrato físico de serena no me dolió tanto como ver que ya no tengo a brittany a mi lado.

Me levanto de la cama secándome las lágrimas y me dirigí a la cocina de aquel apartamento silencioso, me prepare un sándwich y lo comí sin ganas, mientras mi mirada se perdía en algún sitio de la mesa, me sobresalte cuando escuche el teléfono sonar desde el salón, me levanto, un poco ilusionada “tal vez sea britt” camino hasta el salón, lo tomo y contesto

—¿hola? —pregunto curiosa


—hola, ¿hablo con santana López? —dice una mujer cuya voz no reconozco “no puede ser una de mis clientas, ninguna de ellas tiene mi numero en parís”


—sí, soy yo ¿Quién es?


—habla la abogada Quinn Fabray, brittany me dio tus datos para comunicarme contigo, tengo entendido que realizaras una denuncia.


—sí, sí, si yo denunciare a una mujer por agresión.


—no solo fue agresión señorita López, estoy al tanto de todo lo sucedido seré tu abogada, debo aclarar que sin costo alguno brittany es una gran amiga y me pidió que fuera tu abogada.


—ella me dijo algo de eso antes de…. Irse a new york.


—muy bien, yo ya estoy en la ciudad de new york y es de suma importancia para mi saber tu regreso al país, para concluir con lo que tengo adelantado del caso que es bastante apenas britt me hablo al respecto comencé a trabajar en ello, también debo explicarte algunas cosas.

—bien ..Pues. Yo.. Estaré de regreso en unos días.


— por favor especifique su arribo al país señorita López


—el lunes en el vuelo que llega a new york a las 7 de la mañana, y por favor llámame santana.


—perfecto santana, estaremos en contacto, hasta el lunes.


—adiós abogada Fabray.


Suspire pesadamente pues el momento de la verdad había llegado finalmente me enfrentaría a serena después de tanto tiempo que soporte sus agresiones y mis traumas tan solo pensar en ella me estremece, me da asco y miedo a la vez pero saber que tengo el apoyo de brittany y de la abogada fabray me tranquiliza un poco y me hace sentir segura ,termine de empacar las maletas, me gire y le di un último vistazo a mi apartamento parisino antes de cerrar la puerta con llave y me dirigí al aeropuerto, en el avión iba pensativa, se venían muchas cosas durante el juicio de eso estoy segura.


Perspectiva: SERENA

Al fin sola en la mansión, mamá volvió a Europa por la semana del fashion y mi padrastro se fue a esquiar por unos días a Canadá con el pequeño idiota de mi hermanastro.

Me encuentro en la cama de mi habitación con la laptop en mi regazo viendo en directo, los desfiles de mi madre y ufff esas modelitos están como para atarlas al cabezal de mi cama y hacerle cosas muy sucias.

De repente recordé a mi putita, esta vez me pase de lo usual pero es que no soporte que me dijera que no, en un principio intente hacer las cosas bien, comportándome bien con ella, e hice un esfuerzo de entender las veces en las cuales me rechazaba las cenas y regalos, también comprendí cuando no acepto tener una relación conmigo o al menos fingía comprender ya que cada vez que recibía una respuesta negativa, llegaba a casa y destrozaba todo a mi paso, luego empezó a negarme su cuerpo , las citas sexuales y eso simplemente no lo soporté , siempre obtengo lo que quiero y en ese momento quería su cuerpo , además que me empezó excitar de sobremanera verle los morados que le hago en su cuerpo , es como acostumbre en marcar mi territorio en ella y así dejarle saber que es mía, aún conservo la ropa que le arranque la cual tiene su exquisita esencia, me pregunto si ya se habrá repuesto de aquella noche tan… mmm.. Rica.

Esa latina regalada es como una maldita droga para mí es como la cocaína que el adicto necesita inhalar para sentirse bien, todo en ella es erótico, el color de su piel, su cabello, sus grandes pechos, su vientre, su olor… ese olor que me pone tan loca como un perro rabioso, tan solo pensar en ella me excita me hace querer estar sobre ella, entre sus piernas y pasar toda la tarde cabalgándola mientras le proporciono fuertes y excitantes mordiscos hasta que el cansancio me venza

Siento un cosquilleo en mi entrepierna y empiezo a respirar agitada mientras miro que mis manos tiemblan un poco, si, definitivamente esta mujer es una maldita droga y yo su adicta irremediable, por un momento me aprieto con la mano la entrepierna para calmarme, tengo que distraerme un poco, hacer algo, tomo el celular de la cama y decido llamar a mi inseparable amiga Blair.

— ¡hey serena! —contesta

— ¿Qué haces en estos momentos? ¡Estoy aburrida!

—pues nada divertido intentando redactar algo de la universidad, ¿has sabido algo de aquella mujer latina? —dice en tono preocupado

—en realidad, no, pronto le daré otra visita pero cuando le tenga demasiadas ganas, por ahora puedo aguantarme un poco.

—pero serena, ¿y si no está bien? Me contaste que la golpeaste fuerte, pobre mujer, tal vez deberíamos ir a ver como esta.

— ¡eres idiota ¿o qué?! ¡¿A quién le importa como este?!

— ¡a mí me importa! Es un ser humano, lo que le hiciste fue horrible y aunque no la conozca sé no se merece eso.

— ¿ahora eres buena y celestial?, querida amiga ¿ quieres que te recuerde como perdiste la virginidad el último año de secundaria?, tuve que drogar a marissa la sexy pelirroja popular de la cual estabas taaaan enamorada desde que eras una niña mocosa, yo veía como ella te ignoraba y jamás te tomo en cuenta, la drogue con rufis en una fiesta, estaba extasiada y quería acción, le indique donde estabas, subió a una de las habitaciones de aquella casa y tú te acostaste con ella, y lo disfrutaste así ella no recordara nada al día siguiente, ¡no te hagas la santa ahora!

— yo no la obligue, ni la golpee, y mucho menos ¡la viole serena!, sabes que me arrepentí de lo que hice además no volví a hacerlo, y no me hago la santa, ¡pero ya! no quiero discutir contigo, ¿qué tal si aprovechamos que tienes la mansión solo para ti y planificamos una fiesta?

—eso me parece genial ¿lo ves? Esta es la Blair de la cual me hice amiga a los 6 años jajaja, ven a mi casa y trae ropa te quedaras aquí unos días mientras preparamos la fiesta….. —le digo mientras sigo viendo el desfile de mi madre en la laptop.

[Continuara…]

Captado, lo que tiene Serena de hermosa...lo tiene de MALDITA. Todo lo que hizo y no le da ni tantito remordiemiento, debe de estar muy loca la tipa.

Pero....llegará Quinn, confió en Lion Quinn, se que la hundirá en la cárcel como se lo merece.

Brittana sufriendo porque se aman y no pueden estar juntas T.T me hace sufrir también, espero que puedan volver porque se hacían bien la una a la otra.

Un saludo Mc, espero el próximo ^^