FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08

Regresé! Y sin problemas con nada jaja. Perdón por la demora, y aquí les dejo un nuevo capítulo :)

CAPÍTULO 18.

Dos días habían pasado, y las cosas parecían no cambiar. Santana había decidido darle su tiempo a Brittany, aunque le doliera y no pudiera dejar de pensar en ella.
No quería salir de casa ese día, pero había quedado en ir a almorzar en casa de Dani ya que ésta se iba a Los Ángeles al siguiente día. Se visitó casual pero abrigada y caminó hasta la casa de su amiga. Tenía tiempo, porque había salido temprano así que compró el postre para llegar con algo en sus manos.
Al llegar, Lizzie y Dani jugaban en el patio, y a la morena eso le pareció de lo más tierno.
- ¡Santana!- gritó la pequeña y corrió a abrazarla.
- Hola pequeñita.- le dijo ella y sonrió.- ¿Cómo has estado?
- Muy bien. Gracias por los regalos de Navidad, no tuve oportunidad de agradecerte.
- Oh por nada, espero que los disfrutes.
- Lo hago, en verdad.- tomó su mano y la dirigió hasta la puerta, donde estaba su hermana.
- Hola morena sexy.- bromeó Dani.- Es raro que no llegues tarde.
- Hoy quise ser puntual, así no tengas que quejarte de mi.
- Vamos adentro.- invitó Lizzie.- Dani es tan mala anfitriona que te dejará morir de frío aquí afuera.- las chicas rieron y entraron a la casa. Santana conocía bien el lugar, por lo que dejó su abrigo y se fue a la cocina, de donde salía un aroma exquisito.
- Traje el postre.- dijo al fin.
- No tendrías que haberlo hecho, pero gracias. Siéntate por favor.- la latina hizo caso y se sentó, mientras Lizzie salía del lugar jugando con una muñeca.- Mis hermanos están muy contentos con la noticia, no quieren que me vaya pero saben que volveré y quizás debamos ir a vivir allá.
- ¿Y tu padre?
- Está muy orgulloso de mí, y cree que lograré todo esto.
- Yo también siento lo mismo, y lo sabes.
- Quisiera que mi madre me viera.- se sentó frente a la morena y por primera vez habló sin esa sonrisa que la caracterizaba.- Estaría tan orgullosa de su pequeña…
- Lo está seguramente, y te da su apoyo desde donde sea que esté.
- Algunos días la extraño mucho, pero he aprendido a vivir con su ausencia. Por los niños y por papá más que nada. ¿Sabes? Siempre hice las cosas por ellos, y al sentir que esto es sólo por mí me hace sentir algo egoísta.
- No lo es Dani, es algo que te mereces.
- Lo sé, en el fondo. Pero es inevitable pensarlo así.  
- Vas a brillar, vas a ser famosa y feliz. Eso es lo que quiero para ti.
- Y yo también. Quiero verte cambiar esa carita de perro abandonado.- esa expresión hizo reír a la morena.
- Lo haré, dame tiempo.
- Nada de tiempo. Escúchame, ¡eres Santana Lopez! No puedo creer que estás cruzada de brazos, sólo esperando a que Brittany se decida a hablarte.
- Ella me pidió tiempo, no puedo obligarla. Me comporté como una idiota, tiene razones para estar así.
- Y no estoy negando eso, para nada. Pero esto no eres tú, la Santana que conozco insiste hasta conseguir lo que quiere, no se hunde en la primera oportunidad, no es débil.
- Brittany siempre ha sido mi debilidad, y ahora es mi mayor dolor. No quiero hablar de ella, vine aquí por ti.- intentó cambiar de tema.
- ¿Por qué crees que te llamé? No voy a irme sin intervenir en esto. Eres mi ex novia, ¿lo recuerdas? Sé lo difícil que es para ti mostrar tus debilidades.
- No puedes hacer nada, en verdad.
- Iba a proponerte darle celos a Brittany conmigo.- la morena abrió grandes los ojos.- Perdón, solo bromeaba.- rió Dani.
- Casi me levanto de esta silla sólo para golpearte.
- Tienes que luchar por ella, darle razones para que te perdone, demostrarle que lo de Quinn fue un error y que la quieres en verdad.
- Tiempo al tiempo Dani. Lo haré, sólo que no por ahora.
- ¡Terca e insoportable saliste!- bromeó.- Pero está bien, lo entiendo. Aunque aclaro que no me quedaré de brazos cruzados.
- No harás nada, te vas mañana.- le respondió entre risas.
- El que avisa no traiciona morena.- le advirtió.- Cambiando de tema, ¿cómo están la reina de Yale y el hobbit de Broadway?
- No lo sé. Rachel no me habla de Quinn porque sabe que estallaré de rabia.
- Pero serás orgullosa. Olvídalo, sólo para saber cómo van las cosas entre ellas.
- No seas chismosa, dudo que pase algo entre ellas ahora. Rachel tiene que ordenarse.
- Y tú hablar con la rubia bailarina.
- Basta Dani, o te golpearé con la silla.
- Te quiero, me quieres, no vas a golpearme.
- Te voy a querer más cuando te vayas lejos.- jugó con ella.
Fue un almuerzo agradable, que le permitió a Santana despejar un poco su cabeza y reírse demasiado. Aunque ya lo sabía, con Dani funcionaban super bien como amigas y ese tiempo les sirvió para darse cuenta. Se fue un poco antes de las cinco, porque Dani tenía compromisos. Sin embargo iba a ir a despedirla en el aeropuerto la mañana siguiente.


Por otro lado, Rachel estaba leyendo un libro sentada en su cama. Hacía un tiempo que no lo hacía y le gustaban esos momentos.
- Te traje una taza de chocolate caliente.- dijo una rubia entrando a su cuarto con dos tazas en las manos.
- ¿Y a qué se debe esto?- preguntó dejando el libro sobre la mesita de noche, para luego tomar una de las tazas.
- Sólo una forma de entablar una conversación porque estoy aburrida.- rió.- Hazte a un lado y déjame taparme los pies.- le dijo.- Hace muchísimo frío.
- ¿Kurt y Santana regresaron?- le preguntó.
- No, aún no. ¿Pasa algo entre Kurt y Elliot?
- No lo creo, siempre fueron buenos amigos.
- Pero ahora Kurt está soltero.
- No lo sé, se irá viendo con el tiempo. Quizás pueda pasar algo.
- ¿Y a ti? ¿Hay alguien que te interese?- preguntó y tomó un sorbo de chocolate, notando cómo Rachel se ponía nerviosa.- Perdón, no tienes que responder si no quieres.
- Está bien, no importa.- contestó para evitar el mal momento.- Quizás sí, quizás no. Es muy complicado.
- ¿Es por Finn?
- Creo que ya no es tanto por él, entendí que ya no volverá y que debo seguir adelante. Es más complicado que eso.- rió leve.
- ¿Quieres contarme?- la miró dulcemente y le sonrió.
- Me siento algo… Mmm… atraída podría decir, por alguien. Pero siento que estoy loca, que es algo imposible y que tengo que dejar de pensar en ello.
- ¿No te corresponde?
- No lo creo, es más, creo que jamás lo haría.
- Deberías intentarlo. A los chicos esas cosas se le notan, no son como nosotras que somos más reservadas con los sentimientos.
- Justamente ahí el problema.- le sonrió y la rubia pareció entender a qué se refería.
- ¿Te gusta una chica? Dime que no es Santana, porque podríamos huir juntas.
- No, no, no. ¡Por Dios, no!- largó una fuerte carcajada.
- ¿Entonces?
- ¿Podemos dejar el tema hasta aquí?- pidió amablemente.
- Claro, lo dejemos aquí. Igual creo que es un tema interesante que podríamos retomar algún día.
- ¿No quieres hablarme de ti?
- Creo que la persona por la que había estado confundida nunca podría estar conmigo.
- Estamos complicadas, ¿eh?- miró al frente y Quinn hizo lo mismo.
- Por ahora solo me interesa arreglar las cosas con Santana y Brittany, para luego arreglar unos asuntos personales. Estoy pensando en venir a vivir aquí, me gusta el ritmo que tiene Nueva York.
- ¡Eso es genial!- sonó mucho más animada de lo que se suponía, y ambas lo notaron.- Digo, Nueva York es mucho mejor cuando tienes amigos alrededor.
- Me gusta la idea, y podría continuar mis estudios aquí sin ningún problema. Pero depende de muchas cosas.
- Sabes que cuentas conmigo. Podrías quedarte aquí.
- Gracias Rach.- le sonrió notablemente incómoda y dejó la taza en la mesa de noche, para luego tomar una foto que la castaña tenía allí, donde estaba con Kurt y Santana.- Es linda.
- Oh, y tiene recuerdos aún mas lindos.- dijo riendo.- Fue el primer día de Santana aquí, estaba devastada por lo que pasó con Brittany, y decidimos llevarla a conocer la ciudad. Terminamos en una especie de club gay gracias a Kurt. ¡Jamás me había divertido tanto!- reía sólo recordar ese día.
- ¿Fue fácil la convivencia desde el principio?
- No, para nada. ¡Imagínate a Santana desordenando todo! Kurt la odiaba, odiaba sus ironías y su mal humor. Pero ella cambió demasiado, se adaptó a nosotros. Aparte siempre fue una buena amiga, a su forma claro.
- ¿Sufrió mucho por Britt?
- Sí, demasiado. Luego conoció a Dani y las cosas parecieron mejorar. Pero creo que siempre funcionaron como amigas, sólo para eso.
- ¿Y a ti te costó mucho volver aquí luego de la muerte de Finn? Sé que estuviste en Ohio un tiempo.
- Fue… Complicado.- reconoció.
- No tenemos que hablarlo si no quieres.
- Oh, no me importa.
Por alguna razón se sentían seguras hablando, por lo que siguieron haciéndolo hasta quedar dormidas. Sin darse cuenta, Quinn quedó con su cabeza sobre el hombro de Rachel, y la castaña apoyó suavemente la suya también.
Santana fue quien llegó antes al departamento, y las vio. De no haber sido porque se trataba de Quinn, la imagen le habría parecido de lo más tierna. Rachel la escuchó y abrió los ojos para encontrársela parada en la puerta.
- No digas nada.- murmuró ante la sonrisa maliciosa de su amiga.
- No dije nada.- se burló y a continuación dejó el lugar.


El sol había bajado y las primeras luces de la ciudad ya se hacían presentes. Dani y Lizzie caminaban tomadas de la mano y llevaban un ramo de flores. Entraron a un edificio y subieron hasta el lugar que les interesaba visitar. Llamaron a la puerta y una rubia salió con una enorme sonrisa.
- ¡Britt!- exclamó la pequeña y se lanzó a sus brazos.
- Hola pequeñita.- le dijo y la abrazó muy fuerte.- Qué sorpresa tenerlas por aquí. Pasen por favor.- abrió la puerta y las dejó entrar.
- ¿Cómo estás?- preguntó Dani, y entregó el ramo de flores.- Lizzie insistió en traerte esto.
- Gracias, muchas gracias. Son preciosas. Siéntense por favor.- las dirigió al sofá y luego les acercó una bandeja con galletas y jugo.- No esperaba esta agradable visita.- le habló a la pequeña.- Te extrañaba.
- Yo también. No me gustan los recesos de Navidad.- le dijo frunciendo el ceño.
- Ya queda poco. Aparte tengo una sorpresa para ti.
- ¿Una sorpresa?- preguntó ansiosa ante la mirada atenta de su hermana.
- Sí. Mira, me quedaré en la Universidad de Nueva York, así que podré seguir ayudando en la escuela de baile y seguiré viéndote.
- ¡Eso es estupendo!- gritó la pequeña sonriente.- Me alegro mucho.
- Yo también en verdad. Ahora…- miró a Dani.- Supe que te vas mañana.
- Sí. Los Ángeles me espera.
- ¿Estás ansiosa?
- Nerviosa ante todo. Es mi gran oportunidad.
- Lo lograrás. Pero espero que vuelvas, ¿me escuchaste?- sonó amenazante.
- Lo haré, en una de mis giras mundiales.- rió.
Hablaron un rato, y luego Lizzie se entretuvo viendo televisión.
- ¿Puedo hablar contigo en privado?- dijo Dani a Brittany.
- Sí, cómo no.- se levantó del sillón.- Ya volvemos Lizzie.- le dijo a la pequeña y se fue a la cocina con Dani.- Si tiene que ver con Santana yo…
- No seas tan cabeza dura.- la interrumpió.- Estuve con ella esta mañana. No vengo a sermonearte ni a exigirte algo, sólo escúchame.
- Está bien.
- Fue una estúpida, lo sabe y lo siente.
- Eso ya me lo dijo.
- ¡Escúchame!
- Lo siento.- rió leve.
- Jamás, jamás en mi vida pensé en estar haciendo esto por mi ex novia. Pero es tan buena, y ustedes son tan lindas juntas que no puedo dejarlo pasar. Tienes que darle una oportunidad, no la desaprovechará porque te ama más que a sí misma. Lo que pasó con Quinn es un error, y lo sabes.
- Y porque lo sé es que necesito este tiempo. En verdad valoro mucho lo que haces, pero hay cosas que quizás no sabes de Santana, de su pasado. Hay cosas que ella debe cambiar.
- Tienes razón, hay muchas cosas que no sé de ella. Pero de una estoy muy segura, y es que no hay nadie a quien ella ame más que a ti, y a quien le sea completamente honesta.- la miró algo confusa y luego siguió.- Cuando llegaste a Nueva York, unos días antes de que ella me dejara, sé que estuvo contigo.
- ¿Te lo dijo?- preguntó con mucha vergüenza.
- No hizo falta que lo hiciera, lo supe al ver sus ojos. Ella me engañó, y quizás creas que no hay diferencia entre lo que hizo con Quinn, pero sí la hay. Cuando ella me dejó nunca dijo que lo que pasó entre ustedes había sido un error, sino que me dijo que te amaba. Fue honesta, y jamás negó que lo que pasó contigo fue porque quiso, porque lo sentía.
- Lo siento Dani, yo…
- No importa, eso ya pasó. El punto es que tienes que pensar en todo, y me alegra que te quedes en Nueva York, porque hará las cosas más fáciles. Ahora debo irme, mañana es el gran día.
- ¿Puedo ir a despedirte?- preguntó tímida.
- Sí, me encantaría.- le sonrió.- Salgo a las 6:30, espero verte.- se dirigieron a donde estaba Lizzie.- Vamos pequeña, ya es algo tarde.
- Está bien.- dijo la niña sin oponerse.- Me gustó volver a verte.- le dijo a Britt y la abrazó.
- A mí también corazón.- respondió la rubia y besó su cabeza.- Te esperaré en clases la próxima semana, ¿si?
- Ahí estaré.- ya estaban en la puerta.
- Adiós.- le dijo Dani y la abrazó, lo que tomó por sorpresa a la bailarina.- Te espero mañana.
- Nos vemos Dani. Gracias.
- No hay por qué.- le sonrió y se fueron por el ascensor.
La rubia sólo cerró la puerta y suspiró. La visita le había tomado por sorpresa pero fue agradable. Quería mucho a la pequeña y le encantaba tenerla por ahí, pero por otro lado todo lo que Dani intentó hacer por ella la sorprendió. Tenía muchas cosas en qué pensar ahora.
Caminó por el pasillo y entró a su cuarto. Se sentó frente a la ventana y miró la ciudad, toda iluminada y con su típico clima. No quería llorar, ya no más. Se repitió una y otra vez que tenía que ser fuerte, y trató de suprimir todas las lágrimas. No sólo era Santana, o su mamá. Le preocupaba todo, su futuro, su carrera, su papá, su vida. Necesitaba dejar de ser esa niñita que se valía de otros, pero cada vez se sentía más insegura. Agarró su celular y escribió:
“Esto es totalmente loco pero quería decirte que te amo como a nadie, y hoy particularmente mucho más. Espero que estés bien.”
Se cuestionó si debía enviarlo, y luego de una lucha interna consigo misma decidió que era mejor borrarlo. Habría que darle más tiempo a las cosas.

hay britt pero que terca resultaste! hasta pronto!

Las dos DEMASIADO tercas -.-'

Y Dani, es un amor, me gusta.
Además me gusta como va lo de Rachel y Quinn :) espero que lleguen a ser algo ;) & espero que San y Britt se arreglen pronto <3

Por cierto, estoy feliz de que Britt se quede en NY :D

Saludos :)

dios que cabeza dura estas chicas pero bueh! jajaja amo que dani sea tan perfecta jaja besos!

Ya que vuelvan porfaaaaa!!!! =)   estan hechas para que esten juntas!!!

Hola!
Algo muy en particular me gusta mucho de tu fic, que me leí en un rato: los diálogos. Cada uno de los personajes (salvo Brittany, pero parece que Brittany es muy dificil de escribir para alguien que no sea Ryan Murphy) tiene el tono que uno espera que tengan, el que es propio de cada uno.
Me gustó la historia, también. Pero hay algo que no llego a entender, y es el tema del grave error de Santana con Quinn. Cuál es, exactamente? Supongo que el hecho de que no se haya apartado cuando la besó. Eso es, definitivamente, un error. Pero también es verdad que no correspondió el beso y que intentó apartarse de Quinn todo lo que la situación de estar parando en su propia casa, le hizo posible.
De hecho, Brittany ya había desconfiado de ella antes de eso, a raíz de lo que Quinn le dijo. Se enojó con Santana sin darle una explicación ni pedírsela, y la otra lo dejó pasar. La de Brittany es una exigencia un poco grande, incluso pensando en que están juntas de nuevo porque fue Santana la que se dispuso a dejar de lado todo lo que ya tenía avanzado en su vida, para volver con ella. Algo que Brittany no hizo ninguna de las dos veces en las que Santana fue a buscarla y le dijo que la amaba, pues la primera vez decidió quedarse con Artie y la segunda, con Sam.
Entiendo las buenas intenciones de Dany, que es maravillosa. Pero la verdad, yo también creo que Brittany necesita tiempo para reacomodarse en una vida sin la guía fundamental, que siempre es la madre. Que se forme a sí misma como persona, para que Santana ni nadie más sea lo principal para ella. Pero, vamos a ser sinceras, esto ya es así, ya que ella nunca dudó en seguir adelante sin la morocha. Ahora es buenísimo que empiece su carrera en la universidad (que Santana le consiguió, pero tal vez de eso ya no se acuerda...).
Pero espero que, por justa correspondencia, también Santana entienda que su vida y su talento son valiosos más allá de Brittany. Y si ya tuvo que "sobrevivir" sin la rubia, que ahora se dedique a "vivir", en el modo que mejor sea para ella sin esperar que la felicidad provenga de nadie más. Si luego el amor se da, mejor todavía.
Gracias por escribir! Ojalá puedas actualizar pronto

micky morales escribió:hay britt pero que terca resultaste! hasta pronto!

Si Britt está un poquito terca pero necesita tiempo. Hasta pronto!

Elita escribió:Las dos DEMASIADO tercas -.-'

Y Dani, es un amor, me gusta.
Además me gusta como va lo de Rachel y Quinn  :) espero que lleguen a ser algo ;) & espero que San y Britt se arreglen pronto <3

Por cierto, estoy feliz de que Britt se quede en NY :D

Saludos :)

Las dos tienen cosas que arreglar, y darse cuenta que pueden por separado. Dani es un amor, la mejor jaja.
Faberry es interesante, y seguirá siéndolo. Veremos mas adelante que pasa.
El que Britt se quede en NY es indispensable.
Saludos!

tatymm escribió:dios que cabeza dura estas chicas pero bueh! jajaja amo que dani sea tan perfecta jaja besos!

Jaja super cabeza dura! Y me encanta que compartan mis sentimientos hacia esta Dani que pude crear. Besos!!

Pao Up escribió:Ya que vuelvan porfaaaaa!!!! =)   estan hechas para que esten juntas!!!

No te gusta un poquito más de drama? jaja. Espero complacerte dentro de poco.

Anddy Rivera Morris escribió:

Oh Dios, ambas son demasiado testarudas!!
Pero en el siguiente capítulo se encuentraan <3 jiji
Ya quiero reconciliación :$

Es así, en el siguiente (que espero sea en esta semana) se encontrarán, y ahí veremos qué pasa.
Saludos!

MarisaParedes escribió:Hola!
Algo muy en particular me gusta mucho de tu fic, que me leí en un rato: los diálogos. Cada uno de los personajes (salvo Brittany, pero parece que Brittany es muy dificil de escribir para alguien que no sea Ryan Murphy) tiene el tono que uno espera que tengan, el que es propio de cada uno.
Me gustó la historia, también. Pero hay algo que no llego a entender, y es el tema del grave error de Santana con Quinn. Cuál es, exactamente? Supongo que el hecho de que no se haya apartado cuando la besó. Eso es, definitivamente, un error. Pero también es verdad que no correspondió el beso y que intentó apartarse de Quinn todo lo que la situación de estar parando en su propia casa, le hizo posible.
De hecho, Brittany ya había desconfiado de ella antes de eso, a raíz de lo que Quinn le dijo. Se enojó con Santana sin darle una explicación ni pedírsela, y la otra lo dejó pasar. La de Brittany es una exigencia un poco grande, incluso pensando en que están juntas de nuevo porque fue Santana la que se dispuso a dejar de lado todo lo que ya tenía avanzado en su vida, para volver con ella. Algo que Brittany no hizo ninguna de las dos veces en las que Santana fue a buscarla y le dijo que la amaba, pues la primera vez decidió quedarse con Artie y la segunda, con Sam.
Entiendo las buenas intenciones de Dany, que es maravillosa. Pero la verdad, yo también creo que Brittany necesita tiempo para reacomodarse en una vida sin la guía fundamental, que siempre es la madre. Que se forme a sí misma como persona, para que Santana ni nadie más sea lo principal para ella. Pero, vamos a ser sinceras, esto ya es así, ya que ella nunca dudó en seguir adelante sin la morocha. Ahora es buenísimo que empiece su carrera en la universidad (que Santana le consiguió, pero tal vez de eso ya no se acuerda...).
Pero espero que, por justa correspondencia, también Santana entienda que su vida y su talento son valiosos más allá de Brittany. Y si ya tuvo que "sobrevivir" sin la rubia, que ahora se dedique a "vivir", en el modo que mejor sea para ella sin esperar que la felicidad provenga de nadie más. Si luego el amor se da, mejor todavía.
Gracias por escribir! Ojalá puedas actualizar pronto

Estoy por aquí porque vi tu comentario, y porque me agrada demasiado que la gente se detenga a hacer estas observaciones sobre algo que hago.
Me alegra que sientas eso de los diálogos, y que lo expreses. Brittany es algo complicada de hacer, ya que tiene ese toque de inocencia y humor que cuesta imaginar.
Lo de Santana y Quinn me parece fue una mala jugada para Santana, que Brittany no puede comprender porque es algo testaruda. Es cierto que tampoco se detuvo a pedir explicaciones y que antes ya desconfió, y por lo tanto la culpa parece ser de ella si lo vemos así.
Ahora me gustaría saber si lo que no entiendes es sobre la redacción o sólo te has metido en la historia y estás juzgando a los personajes. Me gustaría saberlo :)
Pienso igual, Santana es tan talentosa y buena que merece ser feliz sin depender de alguien. Y gracias, porque lo tendré en cuenta :)
Me encanta que te hayas tomado el tiempo, me encantan las críticas porque de hecho yo lo soy, y me encanta que te animes a meterte en la historia y olvidar por un rato que es ficción y que puedes jugar un rato con los personajes.
No me agradezcas por escribir, yo te agradezco por leer y por comentar tan honestamente!
Espero actualizar antes del viernes :) Saludos! Y espero puedas seguir aquí.

Aaaw Dani tan linda! Y mis brittana tan tercas!! -_- pff caray que remedio... Hasta la siguiente actu! Saludines

actualiza porfavorrrr    

Dolomiti escribió:Aaaw Dani tan linda! Y mis brittana tan tercas!! -_-  pff caray que remedio... Hasta la siguiente actu! Saludines

Gracias por comentar! Aquí estoy otra vez :)

PAUlANyH escribió:actualiza porfavorrrr     

Perdón! Sé que demoré mucho, pero se me complicó :( Aquí estoy otra vez :)

LAMENTO MUCHO LA DEMORA! Aquí les dejo otro capítulo.

Capítulo 18.

El reloj marcaba las 5:30 am, cuando Santana abrió los ojos y tomó su celular. Era el día en que Dani se iba, y tenía que ir a despedirla. Se levantó y se fue directo al baño, se duchó y salió a vestirse. Hacía frío, mucho frío para su gusto, por lo que se abrigó lo suficiente. Si hubiera estado en casa de Brittany, la calefacción habría estado encendida.
Antes de salir del cuarto, una vez que estuvo lista, se detuvo frente al retrato que colgaba de su pared. Inconscientemente acarició su brazalete y sonrió con tristeza.
En el comedor, Rachel estaba preparando el desayuno, mientras Kurt casi dormía sobre la mesa. La morena se acercó lentamente y le gritó para provocarle un gran susto.
- ¡Santana!- exclamó él y la golpeó en su brazo, mientras las otras dos reían.- ¿No ves que estaba distraído?
- ¿Distraído? Estabas durmiendo sobre la mesa, eso es vergonzoso.- se burló ella y se dirigió a ayudar a Rachel con las tazas y el azúcar.
- Salí anoche, y sólo pude dormir dos horas.- se quejó el chico.
- ¿Dónde estuviste metido?- preguntó la castaña y ambas se sentaron, mientras servían café a Kurt.
- Estuve componiendo un par de canciones en casa de Elliot.
- Elliot, Elliot, Elliot…- murmuró Santana y llevó un sorbo de café a su boca.
- ¿Qué pasa con él?- preguntó la más pequeña curiosa.
- Nada, sólo somos amigos.
- Claro. Como Quinn y Rachel.- el comentario de la latina hizo que la actriz se ahogara un poco, y luego la mirara con los ojos como platos.- ¿Qué?- preguntó con mucho inocencia.
- ¡Espera!- reaccionó Kurt.- ¿Qué pasa con Quinn? ¡No me contaste!
- Cállate.- le pidió avergonzada.- Ella está durmiendo del otro lado.
- No me contaste nada, no puedo creer que Santana sepa más cosas que yo.- murmuró muy celoso.
- No empieces con el melodrama porcelana.- dijo la morena.- Yo la desenmascaré, ¿no recuerdas mi gaydar? Cálmate.
- ¿Te gusta Quinn?- le preguntó finalmente el muchacho a su amiga.
- Sólo un poco, pero ya pasará. Es sólo algo momentáneo y muy confuso.
- Oh sí, claro…- el tono sarcástico de Santana comenzaba a irritar a Kurt.
- Hablaremos de esto cuando estemos SOLOS.- aclaró y provocó que sus amigas rieran.
- Sí, mejor volvamos a lo que me importa. Elliot.- dijo Santana.
- Él es mi amigo, lo pasamos bien, y estamos trabajando en un proyecto juntos, que les contaré cuando tenga más claro a dónde van las cosas. Profesionalmente hablando.- aclaró rápidamente.- Las cosas con Blaine terminaron hace muy poco tiempo.
- Tienes razón. No te pregunto más.- ese comentario sorprendió a Kurt y Rachel.
- ¿Te sientes bien?- exageró la castaña y tocó su frente como midiendo la temperatura.
- Basta hobbit, no exageres. Intento olvidar mis poderes para arruinar los momentos, pero contigo cerca es complicado.- rió.- ¿La bruja maldita no va con nosotros?- preguntó por Quinn.
- No la llames así.- pidió Rachel amablemente.- Y no, prefiere quedarse.
- Buena elección.
Un rato después, los tres estuvieron en el aeropuerto, donde Dani, sus hermanos y su padre, estaban esperando la llegada del avión que la llevaría en busca de su sueño mayor. Estaban todos hablando, divertidos. Dani también insistía en Elliot y Kurt, pero sin conseguir ninguna respuesta del muchacho que seguía sosteniendo que sólo eran amigos.
Santana estaba sentada al lado de Rachel, mientras escuchaban a Lizzie contar sobre la posible cantante famosa en la que se convertiría su hermana. La pequeña no dejaba de decir lo orgullosa que estaba de Dani, y lo mucho que la quería. De pronto, sólo se quedó callada y salió corriendo en dirección contraria a donde Santana y Rachel tenían posicionada su vista. Ambas voltearon y vieron a Brittany caminar hacia ellos.
Traía un tierno gorro azul, con un pompón sobre él, y una bufanda a juego. Siempre resaltando sus ojos y su dorado cabello. La morena no pudo evitar sonreír ante la vista, y más aún cuando la pequeña se colgó en sus brazos y la abrazó con mucha fuerza. Brittany siempre había sido muy buena con los niños, pero tenía una conexión con esa pequeña, una conexión que iba más allá del cariño que normalmente sentía con los más chiquitos.
La rubia se acercó a ellos con la pequeña en brazos y saludó a Dani y a Max, quien también la abrazó fuerte. Luego se presentó con el padre de los niños y a continuación saludó a Kurt, Rachel y a Santana, sólo con un beso en la mejilla y evitando mirarla a los ojos. No había sido fácil, pero luchó contra ella misma para no abalanzarse contra ella y besarla como quería.
- Ven, siéntate aquí.- le dijo Lizzie, y la llevó al lado de Santana.- Estaba contándole a las chicas que mi hermana será muy famosa.- la rubia se sentó y Rachel dio un codazo a su amiga.
- Así que tu hermana va a ser famosa como J-Lo.- dijo la castaña para que Lizzie siguiera su relato.
- Ah, sí. Y traerá a casa un gran premio para colocar sobre su cama, también tendrá muchos fans gritando por ella y pidiendo autógrafos.
- ¡Eso suena genial!- dijo Dani y la abrazó por detrás, agachándose a su altura.- ¿No estarás celosa?
- No, porque ellos serán fans, pero yo soy tu hermanita.- besó su mejilla y sonrió, de la misma manera que su hermana mayor lo hacía.- Y mamá estará muy orgullosa de ti, y de nosotros. Nos mirará, ¿cierto? Ella prometió que siempre sería así.
- Por supuesto que lo hará.- respondió la cantante y trató de ser cuidadosa por Brittany.
- Sé que la mamá de Rachel es una genial persona de Broadway que vive aquí en Nueva York, y que la mamá de Santana está en Ohio. ¿Y tu mamá Britt?- preguntó inocentemente.
- Ella…- le dijo la rubia con algo de tristeza.- Ella también me mira desde algún lugar, aunque no puedo verla.
- Quizás conoce a mi mamá.- la pequeña se sentó en su regazo y siguió.- ¿Sabes? Ella era genial, y una muy buena cantante, al igual que Dani. ¿Cómo era tu mamá?
- Oh… Ella era una mujer muy bonita, con un gran talento para el baile. Tenía un corazón enorme, y siempre trataba de cuidarme.
- ¿Se fue hace mucho tiempo?- preguntó y Dani trató de interrumpirla, pero Brittany le hizo una seña para que la dejara. Rachel y Santana sólo miraban la escena en silencio.
- No, hace muy poco.
- Nunca entendí por qué se van…- la pequeña suspiró y apoyó su cabeza en el hombro de la rubia.
- Quizás…- trató de explicarle, pero tampoco lo podía entender.
- Necesitan descansar, y pasar a estar más cerca de sus hijos, en su corazón.- completó Santana y sonrió. Por primera vez, sus ojos lograron hacer contacto con los de Brittany.
- Eso.- coincidió Brittany y le sonrió también, diciendo en esa sonrisa lo agradecida que estaba por salvarla de la pregunta.- Ahora ella está en tu corazón, y en el de tus hermanos.
- Y en el de papá.- agregó la pequeña.
- Exacto.- se produjo un silencio incómodo, donde la rubia miró el brazalete en manos de la morena y sonrió con tristeza. Ella pudo darse cuenta y tomó su mano muy suavemente.
- ¿Entre ustedes pasa algo?- preguntó Lizzie, quien sí había notado lo que pasaba. Dani rió.
- Eh…- balbuceó la morena.
- Sólo somos amigas.- completó Brittany y apartó su mano, haciendo que Santana sonriera irónicamente.
- Bueno, porque se verían bien como novias, claro, si a Dani no le molestara.
- Ven pequeña, acompáñame al baño un rato.- le pidió su hermana para evitar que siguiera hablando.
- Pero si fuiste hace un…
- Acompáñame.- la interrumpió clavando su mirada en ella.
- Voy con ustedes.- dijo Rachel, viendo que Kurt hablaba con el padre de Dani.
El hecho de que las chicas se fueran, dejó un silenció incómodo, que luego fue interrumpido por el bostezo de Santana.
- ¿No descansaste lo suficiente?- la pregunta de la rubia que estaba sentada a su lado la sorprendió.
- Lo raro es que sí lo hice, descansé bien. Quizás sólo fue un reflejo.
- Quizás te aburro.
- El silencio me aburre, tienes razón. Ahora ya no bostezaré más.- le ofreció una sonrisa.- Al menos ahora me consideras tu amiga, es un progreso.- agregó notablemente molesta por el comentario.
- Es una niña. No iba a decirle que ya no somos nada.- la miró y notó tristeza en sus ojos.- Para eso tendría que convencerme de que ya no lo somos, y aún no lo hice.
- Y espero que no lo hagas, en verdad. He estado trabajando con todas mis fuerzas para dejarte aclarar las cosas tú sola, y créeme que es difícil. Pero quiero que salgamos adelante.
- Tiempo, ¿si?
- Sí, te entiendo. Pero por favor no vuelvas a hacerme eso, yo no soy tu amiga. Es decir, lo soy, pero no soy sólo eso, no sirvo para eso.
- ¿Y si yo decidiera que así va a ser el resto de nuestra vida? ¿No podrías aceptarlo?
- Sé que no lo harás.
- ¿Y si lo hiciera?- insistió.
- No creería en eso.
- Siempre tan terca.
- Sólo peleo por lo que me corresponde, y me importa. Tú y yo estamos atadas en esta rueda que es la vida, con cadenas, y con candados. Te pertenezco, me perteneces, siempre fue y siempre será así, aunque yo haya cometido un estúpido error, del que aún no has pedido explicaciones.- la miró y notó como se sintió culpable por eso.
- No las necesito.- Brittany estaba muy cerrada en sus ideas.
- No ahora, pero cuando las quieras, voy a estar esperándote para darlas. Es así lo mucho que te amo.- besó su mejilla y se levantó de su lugar.- Estás muy linda hoy princesa.- le dijo por último y se fue en dirección a Kurt, dejándola sola.

Unos minutos después, el último llamado al avión que se dirigía a Los Ángeles avisó que Dani tenía que irse. Se despidió de todos, con un gran y fuerte abrazo. A su padre y a sus hermanos los llenó de besos y sonrisas, a pesar de que estaría allí en una semana. Separarse de ellos después de la muerte de su madre era difícil, pero necesitaba hacerlo para seguir adelante con ella misma.
A Kurt y Rachel les dijo que se cuidaran, y por lo bajo le pidió a Rachel que aclarara las cosas con Quinn antes de su regreso. Por supuesto, la castaña no respondió.
A Brittany le sonrió y le recordó la conversación que habían tenido el día anterior, agregando que se veían muy lindas una al lado de la otra en ese momento.
Y por último, le dedicó un fuerte abrazo a Santana.
- Gracias por apoyarme siempre. Sobrevive sin mí una semana.- le pidió entre risas.
- Trataré de no morir en el intento.- bromeó.- Te quiero, te quiero mucho. En cuanto tengas novedades, llámame, no importa la hora que marque tu reloj.
- Y tú habla con Brittany. Aquí entre nosotras….- bajó la voz.- Ella decidió quedarse en la Universidad de Nueva York, y le dará clases a Lizzie el lunes, creo que nadie podrá buscarla, así que te encomiendo el trabajo.- guiñó un ojo y se marchó.
Dani subió al avión, llena de sueños y esperanzas, mientras sus seres queridos veían cómo despegaba a través de una gran pared de cristal. Sabía que sólo sería una semana, pero que en esa semana marcaría el resto de su carrera, y de su vida. Miró en sus muñecas su tatuaje: “Stay Strong”, y sonrió. Ella era así, una persona fuerte, una guerrera, y ahora iba en busca de lo que merecía.

hermoso cap, amo a dani! y lizzi tan inocente jaja besos!

Sí, hoy estuve buena! Aquí otro más :)

Capítulo 19.

Era lunes, una morena estaba sentada frente al reloj, mordiendo sus uñas y chocando las llaves de su casa sobre la mesa. Esperaba que la aguja mayor se posicionara sobre el número seis, y la pequeña siguiera en el once. A esa hora tendría que salir a buscar a Lizzie a su clase de baile, y luego traerla a su casa por unas horas hasta que su padre estuviera libre del traajo. Con la ausencia de Dani algunos espacios no podían ser arreglados en la agenda del hombre, y pagar una niñera sería realmente un nuevo sacrificio que no podía correr en ese momento, por lo que Santana se ofreció a buscarla los días lunes, jueves y viernes. Eso implicaría ver a Brittany tres veces a la semana, y que su corazón se alegrara o se entristeciera aún más.
Unos minutos después, salió en busca de la pequeña. Llevaba jeans, una básica remera blanca y una camisa sin abotonar de color azul. Sencillamente hermosa.
Entró a la academia, y esperó sentada dentro del salón, observando a Lizzie tan aplicada, perfeccionista y talentosa como su hermana. También vio a Brittany, quién ese día estaba sola porque la maestra había tenido una urgencia de último momento. Se veía tan feliz haciendo lo que amaba, y rodeada de todas esas niñas que compartían su pasión por el baile que le causó alegría verla así.
La clase terminó y las niñas empezaron a ser llevadas por sus padres.
- Hola Santana.- le dijo Lizzie y la morena besó su cabeza.
- Hola pequeñita, ¿cómo estuvo el día?
- Muy bien. ¿Me esperas un segundo? Quiero ir a vestirme.
- Está bien, te espero aquí.- le sonrió y se sentó otra vez.
- Es una niña muy aplicada, y le encanta exigirse.- comentó Brittany acercándose, y dejando una cara de confusión en Santana.- Siempre hago una devolución a la persona que viene a recogerlas.
- Serás una gran maestra. Lo eres en realidad.
- Eso se verá reflejado en ellas cuando sean un poco más grandes, pero gracias.- se sentó a su lado.- ¿Cómo estás?
- Bien. ¿Y tú?
- Cansada, con sueño y con muchas ganas de dormir un día entero. Pero bien.- rió leve.- Te ves muy linda hoy, ¿vas a salir?
- Oh no, sólo quise vestirme bien hoy.- rió con más fuerza.
- Ya estoy lista.- llegó Lizzie con su bolso en el hombro.
- Está bien, vamos pequeña. Hoy tengo que cocinar para ti.- Santana se levantó y tomó la mano de la niña.
- Suerte con eso.- se burló Brittany y besó a la pequeña.- Adiós cocinera.- se dirigió a Santana moviendo lentamente su mano.
- Mañana puedes preguntarle a Lizzie cómo cociné. Adiós.
Ese día el corazón de la morena se fue alegre, porque al menos las pocas palabras que habían cruzado la hicieron feliz. Caminaron a lo largo del parque y llegaron al departamento.
- Nunca había estado aquí.- dijo Lizzie y entró observando todo.- ¿Vives sola?
- No, Rachel y Kurt también viven aquí. Y ahora tenemos una invitada de Ohio, Quinn.
- ¿Y dónde están ellos?
- Kurt se fue a clases, Rachel trabaja y Quinn salió quién sabe dónde.
- Ah…- se sentó en el sofá y la miraba mientras Santana preparaba las cosas para cocinar.
- No soy muy buena en la cocina, puedo hacer algo de carne y ensalada, si es que te gusta.
- Sí, me gusta. Así que Britt tenía razón.
- ¿Sobre qué?- preguntó confundida.
- Sobre que no se te da la cocina.
- Sí, ella estaba en lo correcto.- sonrió.
- Y ustedes me mintieron.
- ¿Perdón?
- Entre ustedes pasa, o pasó algo. El día que se fue mi hermana se los pregunté y me lo negaron.
- ¿De dónde sacas esa conclusión enana?
- Porque hoy a Britt se le cayó una foto contigo de su bolso, y alcancé a verla.
- Las amigas también se sacan fotos.- se defendió, aunque sabía que la niña era muy inteligente.
- Pero ella sonrió como tonta cuando la recogió, y también con algo de tristeza.
- Igual a tu hermana…- Santana sacudió lentamente su cabeza de un lado a otro.


Rachel salió de trabajar y Quinn la esperaba afuera para almorzar, antes de que la castaña fuera a clases.
- ¿Dónde quisieras ir?- preguntó la rubia.
- Hace un tiempo no me doy un gusto en McDonald’s, ¿te parece?
- Me encanta la idea.- sonrió y le ofreció su brazo para caminar. Rachel lo tomó.
- ¿Santana estaba en casa?
- Salí temprano para que no me matara, pero sí, tenía que buscar a la hermana de Dani y se quedarían en el departamento hasta que tuviera que llevarla a su casa.
- Santana con una niña…- pensó.- ¿Quién lo diría?
- Divertido.- rió.- ¿Cómo estuvo tu día hoy?
- Agotador, y aún tengo que ir a clases. ¿El tuyo?
- Fuera de lo normal. Salí a correr, y algunos chicos ofrecieron su número de teléfono.- rió.
- Quinn Fabray en acción.
- Esa etapa mía ya pasó.
- Oh, sí claro.- sonó irónica.- Cuando alguien es bonita nunca deja de serlo.
- ¿Acabas de hacerme un cumplido?- la miró sintiéndose superior y sonriendo de lado.
- Sólo digo lo que todos saben.- se había ruborizado como nunca antes.
- Gracias de todas formas.- rió al ver su reacción.- Sé que soy una de las personas más bellas de este planeta.
- Bueno, ya estás exagerando un poquito.
- Creo que me contagié de una pequeñita actriz de Broadway.
- Si con pequeñita te refieres a estatura todo bien, porque estás hablando de la más grande estrella de Broadway.
- Tienes razón, lo siento.- se burló.- Me haces sentir bien.- confesó sin rodeos.
- ¿Cómo?
- Me siento bien cuando estoy contigo, me haces reír y olvidar muchas preocupaciones. Eres una buena amiga Rachel.
- Gracias.- sonrió.- ¿Puedo saber cuáles preocupaciones?
- Sólo son cosas sin importancia.
- Pues me alegra saber que sirvo para eso.
- En realidad puedes servirme de algo más.
- ¿Qué cosa?
- Quiero ver a Beth. Y sé que puedes ayudarme con eso.
- Puedo hablar con Shelby y ver qué podemos hacer.
- Me encantaría que lo hicieras. Extraño mucho a mi niña, siempre pienso en ella y hace dos años no sé cómo estará, o cuánto creció.
- Ella está hermosa, se parece muchísimo a ti en muchas cosas. Camina con las manos en la cintura y blanquea sus ojos cuando alguien la molesta.
- ¿La ves seguido?
- No, pero cuando lo hago, observo esos detalles. Aunque también tiene muchas cosas de Shelby, y mías. Que supongo heredé de mi madre.
- ¿Y en la escuela?
- Muy aplicada. No te preocupes, no es como Puck.- bromeó.
- ¿Me ayudarás a verla?
- Sí, lo voy a hacer.- sonrió de lado y la miró.- Sólo si hablas con Britt y Santana.
- Otra vez con eso. Lo voy a hacer, sólo dame tiempo.
- Llegamos.- entraron al lugar y se sentaron.
Las cosas avanzaban muy lentas entre ellas, y ninguna se animaba a dar un paso adelante. Sin embargo se conocieron más, y empezaron a contarse cosas más íntimas de cada una. Rachel notó que Quinn era otra persona, y que en verdad había cambiado sus prioridades en la vida. Le encantaba, estaba totalmente perdida en sus ojos y no podía evitarlo.


Por otro lado, Santana y Lizzie estaban sentadas por probar la comida.
- Bueno, ¿serás la primera valiente?- preguntó la morena a la pequeña.
- Si, esto se ve delicioso.- cortó un poco de carne y la llevó a la boca como una verdadera crítica.- Y lo está.- dijo al fin.
- ¡Asombroso!- exclamó Santana y rió.
- Brittany perdió, mañana se lo diré.
- Ella no confiaba en mí, y se equivocó ¿no crees?
- Sí, está muy equivocada. Deberías perfeccionar algunas recetas e invitarla a comer.
- ¿Te parece?
- Claro que sí. Y también puedes hablarle sobre lo mucho que te gusta.
- ¿Cocinar?
- No, ella. Está claro.- dijo como si fuera obvio.
- Ay, pero qué niña insistente.- rió.- Sí, ella me gusta mucho. ¿Eso querías oír?
- Eso y más.- sonrió maliciosa.- ¿Qué pasa con ella?
- Estamos en una especie de entre tiempo, como en las partidas de futbol.
- ¿Y cuándo será el segundo tiempo?
- Cuando tenga que ser.
- Error. Cuando tú insistas.
- Basta pequeña Dani.
- Lo último que diré, es que ella es muy linda y tiene un enorme corazón. Aparte de que será una excelente mamá. ¿No quieres a alguien así?- preguntó.- No respondas.

Santana quedó sorprendida y en silencio, sólo observando a una niña que sabía mucho sobre cosas que aún no le habían pasado. Rió leve y siguió con su almuerzo. Después de todo, Lizzie tenía razón en algo: quería a alguien así, específicamente a Brittany.
Tomó su celular y escribió: “Llevaré a Lizzie a su casa en una hora, ¿quieres acompañarme al otro lado de la ciudad, a un pequeño estanque que sé te gusta?” Y luego lo envió. No sabía qué respuesta esperar, pero lo peor que podía pasar era un “no”.
Esperó sólo unos minutos y llegó.

“Sólo si prometes que me dejarás ver el atardecer contigo.”- B

“Es una promesa”- S.

vaya que bien, un avance, hasta muy pronto, espero!

aaaaaaaaaaaaaaawwwwwwwwwwwwww mas tiernas! me cae muy bien lizzi! jajaja besos!