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FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
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Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
AnonGirlSan escribió:Holaa acá tienes a una nueva lectora :D
Son varias cosas que me encantan de tu fic... como la amistad entre Rachel y Santana :)... que no hicieras sufrir a Dani, como la describiste no me hubiera gustado que sufriera (no puedo decir lo mismo con la serie, ya que no se sabe casi nada de ella y su personalidad) y lo que más me gusta son las Brittana!! son muy tiernas y están juntas :D
Dijiste que habría drama :S espero que no nos hagas sufrir mucho xD
Saludos :)
Hola Nueva Lectora! La amistad de Rachel y Santana es muy leal, y planeo que siga así porque es un gran apoyo para ambas. Es bueno tener buenas amigas no?
Y sí, repito, jamás haría sufrir a Dani. Me habría encantada que se supiera más de ella en la serie. Lamento decir que quizás te haga sufrir demasiado luego jaja, pero aún no.
Saludos!
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Me alegro que te guste! Saludos!monicagleek escribió:Pero que tiernas.
Me encanta ;-)
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Dolomiti escribió:Hola!! Esta historia me encanta!! Me parece super maduro de parte de Dani dejar a Santana
para que este con Britt! Me llama la atención el porque lloraba Dani, espero nada grave pero bueno!
La foto me pareció un DETALLASO!! de parte de Britt
Espero el siguiente cap!! Besos!! Saludines!
Me encanta que te encante jaja. Dani es un ángel, tan buena! Le prepararé sólo cosas buenas por ser tan increíble. No te preocupes, no sufrirá demasiado. Tendrá muchas soluciones con el transcurso de la historia.
Britt es tan tierna con Santana! Saludos!
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Hola! Estoy aquí otra vez! ¿Cómo están? Antes de empezar, quiero dar todas mis fuerzas al pueblo chileno! Sé que hay muchas por aquí.
Ahora sí, aquí el nuevo capítulo. Espero les guste y sigan dejando tan lindos comentarios! Veamos quien es la villana en cuestión...
Capítulo 10.
Brittany llegó puntual al apartamento de sus amigos. Era cierto, no era tan lujoso como el suyo pero era bonito. Llamó a la puerta y fue Rachel quien abrió.
- ¡Brittany!- exclamó y saltó a sus brazos.- Siempre es lindo verte. Ven, pasa.- la invitó. La rubia dió los primeros pasos dentro, y vio a Kurt acercarse.
- ¡Qué bien te ves!- le dijo y la hizo dar una vuelta.- Esa ropa es realmente una gran elección.
- Algunas cosas nunca cambian.- rió y lo abrazó.- Es un gusto volver a verte Kurt.
- Lo mismo digo muñeca.- le tomó nuevamente de la mano y la observó.
Ella traía un jean negro, botas altas por encima del mismo, una blusa blanca que marcaba su cintura, y un saco negro largo.
- Te felicito, deberías enseñarle tu buen gusto a Rachel y Santana.
- ¡Te oí!- dijo Rachel y lo golpeó.- Britt puedes poner el saco en el perchero.
- Claro, gracias.- lo hizo rápidamente.- ¿Dónde está Santana?- no quería parecer desesperada, por lo que luego de preguntar de relajó en el sofá sin que se lo dijeran. Rachel estaba allí y Kurt en la cocina.
- En su cuarto, siempre tarda horas cuando va a bañarse. Supongo que ya salió.
- Siempre fue así.- recordó con gracia Brittany.
- Ahora es peor, porque se arregla mucho más. El uniforme de las animadoras ya no la acompaña.
- Qué tiempos aquellos...- no podía dejar de observar el lugar, sin dudas la decoración le recordaba que Kurt vivía allí.- Es un bonito hogar.
- Es acogedor y espacioso. Eso es bueno porque cada uno necesita su lugar a veces.
- ¿Cómo hacen para convivir? Es decir, son las tres personas más diferentes que conozco.
- Es divertido. Kurt y yo tenemos ciertas reglas, por eso nos entendemos. Pero Santana jamás cumplió ninguna de ellas así que fue difícil adaptarnos a ella. Sin embargo, cada día es un desafío. Tenemos una cosa en común...
- La pasión, la ambición, llegar lejos, aplastar a todos.- Brittany usó un divertido tono.
- Eso entre otras cosas.- rió Rachel.- Pero principalmente la lealtad. Santana puede ser muy leal, ¿sabes?
- Claro que lo sé.
- Somos buenos amigos ahora. Eso es lo más importante. Aunque a veces quiero matar a tu novia.
- Cállate hobbit.- Santana salió de su habitación con una pollera corta, botas largas, y una remera roja lo suficiente ajustada a su cuerpo. Llevaba el pelo mojado y unas perfectas ondas cayendo por detrás. Se acercó al sofá y se inclinó para besar a Brittany en su mejilla derecha.- Hola amor.- le susurró y sonrió.- No escuches a Rachel, soy yo quien quiere matarla a veces.
- Como si fuera a creer que eres un ángel...- bromeó Brittany.
- Me agradas cada día más.- Rachel se burlaba de Santana y chocó sus manos con las de Brittany. Luego se fue a la cocina.
- Gracias 'mi amor'- Santana dijo sus últimas palabras con ironía.- Deberías defenderme.
- Sólo bromeaba.- la rubia tiró de su mano y logró sentarla a su lado.- Te ves tan hermosa.
- Tú también.- la miró con ternura y luego la besó.
- Es raro estar aquí.
- ¿Por qué?- se acomodó en el sofá y apoyó su cabeza en el hombro de Brittany.
- Es raro sentirme acompañada, rodeada de amigos, contigo a mi lado...- acarició suavemente su mano.
- Acostúmbrate, Rachel y Kurt querrán tenerte aquí por lo menos dos veces a la semana.
- Eso no será un problema para mí.- esta vez acarició su rostro y la obligó a mirarla.- Te amo.
- Yo también.- mostró una sonrisa enorme y le dio un beso corto en los labios.
- ¿No son tiernas?- Rachel no podía dejar de mirarlas.
- Santana se ve feliz. Eso es lo que más me importa.- Kurt estaba sonriendo y mirándolas también.
- ¿Crees que podrán ser felices de una vez por todas?
- Espero que sí. Y que Santana respete su relación.- recibió un golpe en su cabeza.- ¿Y eso por qué?- miró a Rachel enojado.
- Santana la ama, claro que respetará la relación.
- Sólo decía...
- Sólo cállate.- estaba realmente encantada de verlas sentadas, sonriendo y jugando.
- Britt tengo algo que decirte.- Santana sacó las tres cartas de las escuelas de baile.
- Lo que quieras.
- Hice unas averiguaciones, tengo un par de contactos y bueno, envié vídeos a algunas escuelas de baile.- la miraba atentamente sin dejar de jugar con los sobres.- Y llegaron tres propuestas para ti.
- ¿Cómo?
- Son buenas escuelas, y están dispuestas a ofrecerte la beca completa para tus estudios.
- Santana eso es... Dios, no sé como definirlo.- agarró los tres sobres.- ¿Por qué hiciste esto?
- No sabía cómo hacerte feliz, y se me ocurrió esto. Sabes que haría cualquier cosa por ti.
- ¿Te enviaron estas solicitudes para mi?
- Están encantados Britt, y no es para menos. Puedes verlas tranquila luego, y decidir.
- No te veo muy feliz.- definitivamente lograba ver todo lo que le pasaba.- ¿Sucede algo?
- Voy a ser honesta contigo, pero quiero que me prometas que esto no influirá en tu decisión.
- Te lo prometo.
- Las dos mejores son fuera de la ciudad, y tendrás que irte.
- Ah ya veo el problema...- rió leve y luego le dio un beso.- ¿Confías en mi aunque ni yo sepa lo que sucederá?- repitió esa pregunta que Santana le había hecho un tiempo atrás.
- Quiero que tú confíes en ti y sepas elegir.
- ¿Confías en mí Santana?- sus ojos se conectaron con los de la morena.
- Claro que confío en ti.
- Estaremos bien.- la abrazó como sólo ella podía hacerlo.
- Ven, vamos a la cocina.- la tomó de la mano y la llevó con Kurt y Rachel.
Fue una noche hermosa, cenaron, hablaron de sus proyectos, de sus nuevas amistades, de NYADA, rieron, bailaron y cantaron todos juntos. Brittany se sentía feliz, como hace un tiempo no se sentía. Era como volver al club Glee, donde todos eran completamente felices. Rachel lideraba, Kurt era su competencia, Santana los hacía reír con sus ironías, y ella bailaba.
Kurt y Rachel quedaron agotados, por lo que fueron a dormir pasada la medianoche. Santana estaba terminando de lavar los vasos y ella la miraba.
- ¿Estás segura qué no necesitas ayuda?- le preguntó.
- Ya termino Britt, estoy bien. ¿Te quedarás?
- No debería hacerlo, pero es demasiado tarde.
- Me gusta como suena eso.- su sonrisa era provocadora.
- Siempre tan oportuna.- rió.
- Terminé.- se acercó a ella y la abrazó por detrás. Comenzó a darle besos en el cuello y luego se acercó a su rostro.- ¿Te gusta esto?
- Mmm...- Brittany apenas podía hablar.
- Te encanta...- la morena la puso frente a ella y le besó dulcemente. La cargó como pudo hasta la habitación y una vez allí, notó que la bailarina esta nerviosa.- ¿Qué sucede Britt?- acarició su rostro.
- Sólo estoy nerviosa.- sus mejillas estaban empezando a tomar mucho más color de lo normal.
- Brittany...- Santana no podía evitar reír.- Jamás pensé que estarías nerviosa por esto.
- Perdón, no sé que sucede. Quizás sea porque Rachel y Kurt están del otro lado.
- No tenemos que hacerlo si no quieres.- la abrazó y recordó que el cuadro estaba allí.- Mira...- la obligó a voltear.
- Es un lugar perfecto.
- Lo es en realidad. Despierto cada mañana y lo veo allí.
- Te amo tanto...- la besó.- Tanto...
- Ven, te prestaré algo de ropa.- buscó entre los cajones.
- Como en los viejos tiempos...- el recuerdo de la secundaria la hizo sonreír.- ¿Recuerdas nuestra primera cita?- se sentó en la cama.
- ¿Crees que me olvidaría de eso?- se acercó a ella con ropa más cómoda.- Toma.
- Algún día volveremos a Lima y repetiremos eso.
- ¿Extrañas Lima?
- Quién no...
- Pues yo.- Santana recordó que la última vez que estuvo allí fue para el homenaje que hicieron a Finn.- Después de la muerte de Finn le dije al Señor Schue que Nueva York es mi hogar ahora, y que regresar a Lima me recuerda todo lo que perdí.- su rostro comenzaba a mostrar tristeza. Brittany la dejó continuar.- Mi abuela, de quien nunca más supe nada. Finn... ¡Dios! No hablé de esto con nadie pero cómo me dolió su pérdida. Yo lo quería mucho. Y...- se detuvo y la miró.- Eso ya no importa.
- A mí.- estaba tan convencida como dolida.
- Como dije, eso ya no importa. Estás aquí.
- Y no me iré.- Brittany sonrió. Observó que en el escritorio había una foto de Santana con Dani.
- Si te molesta puedo guardarla.- la morena se había dado cuenta.
- No, no. Sólo te observo. Estabas feliz.
- Sí... Fue un día muy agradable.- recordó.
- ¿Llegaste a amarla?
- No.- ni siquiera lo pensó. - Es decir, la quise demasiado. Aún la quiero, pero lo nuestro iba por otro lado. Creo que podemos ser buenas amigas pero nunca podré amarla.
- ¿Puedo saber por qué fueron novias entonces?
- Trataba de ser feliz. Me convencí de que nunca más volvería a verte, y traté de amar a alguien mas. Lo cierto es que nunca podré hacerlo.
- Yo siempre te amé. Después de Sam no estuve con nadie más.
- ¿No conociste a nadie en la Universidad?- preguntó sorprendida.
- Conocí a mucha gente pero nadie como tú.
- Oh, Britt... Eso es muy dulce.- Santana la abrazó y ambas rieron.- Soy muy feliz.
- No quiero presumir pero sé que lo eres por mí.- hizo reír nuevamente a la morena.
- Vamos a dormir señorita engreída.
Ambas se vistieron con ropa más cómoda y se acostaron. Estaban abrazadas pero sin dormir, ninguna de las dos podía hacerlo. Santana comenzó a acariciar el rostro de la rubia hasta que ésta quedó completamente dormida. Ella sin embargo no lograba conciliar el sueño, estaba observando cada detalle del rostro de Brittany. No recordaba lo que era estar realmente feliz, sentirse tan completa y olvidar el mundo que la rodeaba. Sólo existían ellas dos, y eso le bastaba para sentirse bien. 'Te amo' pensó, pero su sonrisa fue suficiente para expresarlo. Eso era lo que más le gustaba de estar con ella, todo era espontáneo, nunca era necesario forzar las palabras, se entendían perfectamente en el silencio. Pensó que así se veían realmente las parejas, y trató de capturar ese momento y guardarlo para siempre en su corazón. Atrajo a Brittany hacia ella, aún más de lo que estaba, el frío de un típico 21 de diciembre empezaba a sentirse en la ciudad.
- Dulces sueños preciosa...- besó suavemente su rostro para no despertarla y cerró sus ojos para dormir ella también.
Ahora sí, aquí el nuevo capítulo. Espero les guste y sigan dejando tan lindos comentarios! Veamos quien es la villana en cuestión...
Capítulo 10.
Brittany llegó puntual al apartamento de sus amigos. Era cierto, no era tan lujoso como el suyo pero era bonito. Llamó a la puerta y fue Rachel quien abrió.
- ¡Brittany!- exclamó y saltó a sus brazos.- Siempre es lindo verte. Ven, pasa.- la invitó. La rubia dió los primeros pasos dentro, y vio a Kurt acercarse.
- ¡Qué bien te ves!- le dijo y la hizo dar una vuelta.- Esa ropa es realmente una gran elección.
- Algunas cosas nunca cambian.- rió y lo abrazó.- Es un gusto volver a verte Kurt.
- Lo mismo digo muñeca.- le tomó nuevamente de la mano y la observó.
Ella traía un jean negro, botas altas por encima del mismo, una blusa blanca que marcaba su cintura, y un saco negro largo.
- Te felicito, deberías enseñarle tu buen gusto a Rachel y Santana.
- ¡Te oí!- dijo Rachel y lo golpeó.- Britt puedes poner el saco en el perchero.
- Claro, gracias.- lo hizo rápidamente.- ¿Dónde está Santana?- no quería parecer desesperada, por lo que luego de preguntar de relajó en el sofá sin que se lo dijeran. Rachel estaba allí y Kurt en la cocina.
- En su cuarto, siempre tarda horas cuando va a bañarse. Supongo que ya salió.
- Siempre fue así.- recordó con gracia Brittany.
- Ahora es peor, porque se arregla mucho más. El uniforme de las animadoras ya no la acompaña.
- Qué tiempos aquellos...- no podía dejar de observar el lugar, sin dudas la decoración le recordaba que Kurt vivía allí.- Es un bonito hogar.
- Es acogedor y espacioso. Eso es bueno porque cada uno necesita su lugar a veces.
- ¿Cómo hacen para convivir? Es decir, son las tres personas más diferentes que conozco.
- Es divertido. Kurt y yo tenemos ciertas reglas, por eso nos entendemos. Pero Santana jamás cumplió ninguna de ellas así que fue difícil adaptarnos a ella. Sin embargo, cada día es un desafío. Tenemos una cosa en común...
- La pasión, la ambición, llegar lejos, aplastar a todos.- Brittany usó un divertido tono.
- Eso entre otras cosas.- rió Rachel.- Pero principalmente la lealtad. Santana puede ser muy leal, ¿sabes?
- Claro que lo sé.
- Somos buenos amigos ahora. Eso es lo más importante. Aunque a veces quiero matar a tu novia.
- Cállate hobbit.- Santana salió de su habitación con una pollera corta, botas largas, y una remera roja lo suficiente ajustada a su cuerpo. Llevaba el pelo mojado y unas perfectas ondas cayendo por detrás. Se acercó al sofá y se inclinó para besar a Brittany en su mejilla derecha.- Hola amor.- le susurró y sonrió.- No escuches a Rachel, soy yo quien quiere matarla a veces.
- Como si fuera a creer que eres un ángel...- bromeó Brittany.
- Me agradas cada día más.- Rachel se burlaba de Santana y chocó sus manos con las de Brittany. Luego se fue a la cocina.
- Gracias 'mi amor'- Santana dijo sus últimas palabras con ironía.- Deberías defenderme.
- Sólo bromeaba.- la rubia tiró de su mano y logró sentarla a su lado.- Te ves tan hermosa.
- Tú también.- la miró con ternura y luego la besó.
- Es raro estar aquí.
- ¿Por qué?- se acomodó en el sofá y apoyó su cabeza en el hombro de Brittany.
- Es raro sentirme acompañada, rodeada de amigos, contigo a mi lado...- acarició suavemente su mano.
- Acostúmbrate, Rachel y Kurt querrán tenerte aquí por lo menos dos veces a la semana.
- Eso no será un problema para mí.- esta vez acarició su rostro y la obligó a mirarla.- Te amo.
- Yo también.- mostró una sonrisa enorme y le dio un beso corto en los labios.
- ¿No son tiernas?- Rachel no podía dejar de mirarlas.
- Santana se ve feliz. Eso es lo que más me importa.- Kurt estaba sonriendo y mirándolas también.
- ¿Crees que podrán ser felices de una vez por todas?
- Espero que sí. Y que Santana respete su relación.- recibió un golpe en su cabeza.- ¿Y eso por qué?- miró a Rachel enojado.
- Santana la ama, claro que respetará la relación.
- Sólo decía...
- Sólo cállate.- estaba realmente encantada de verlas sentadas, sonriendo y jugando.
- Britt tengo algo que decirte.- Santana sacó las tres cartas de las escuelas de baile.
- Lo que quieras.
- Hice unas averiguaciones, tengo un par de contactos y bueno, envié vídeos a algunas escuelas de baile.- la miraba atentamente sin dejar de jugar con los sobres.- Y llegaron tres propuestas para ti.
- ¿Cómo?
- Son buenas escuelas, y están dispuestas a ofrecerte la beca completa para tus estudios.
- Santana eso es... Dios, no sé como definirlo.- agarró los tres sobres.- ¿Por qué hiciste esto?
- No sabía cómo hacerte feliz, y se me ocurrió esto. Sabes que haría cualquier cosa por ti.
- ¿Te enviaron estas solicitudes para mi?
- Están encantados Britt, y no es para menos. Puedes verlas tranquila luego, y decidir.
- No te veo muy feliz.- definitivamente lograba ver todo lo que le pasaba.- ¿Sucede algo?
- Voy a ser honesta contigo, pero quiero que me prometas que esto no influirá en tu decisión.
- Te lo prometo.
- Las dos mejores son fuera de la ciudad, y tendrás que irte.
- Ah ya veo el problema...- rió leve y luego le dio un beso.- ¿Confías en mi aunque ni yo sepa lo que sucederá?- repitió esa pregunta que Santana le había hecho un tiempo atrás.
- Quiero que tú confíes en ti y sepas elegir.
- ¿Confías en mí Santana?- sus ojos se conectaron con los de la morena.
- Claro que confío en ti.
- Estaremos bien.- la abrazó como sólo ella podía hacerlo.
- Ven, vamos a la cocina.- la tomó de la mano y la llevó con Kurt y Rachel.
Fue una noche hermosa, cenaron, hablaron de sus proyectos, de sus nuevas amistades, de NYADA, rieron, bailaron y cantaron todos juntos. Brittany se sentía feliz, como hace un tiempo no se sentía. Era como volver al club Glee, donde todos eran completamente felices. Rachel lideraba, Kurt era su competencia, Santana los hacía reír con sus ironías, y ella bailaba.
Kurt y Rachel quedaron agotados, por lo que fueron a dormir pasada la medianoche. Santana estaba terminando de lavar los vasos y ella la miraba.
- ¿Estás segura qué no necesitas ayuda?- le preguntó.
- Ya termino Britt, estoy bien. ¿Te quedarás?
- No debería hacerlo, pero es demasiado tarde.
- Me gusta como suena eso.- su sonrisa era provocadora.
- Siempre tan oportuna.- rió.
- Terminé.- se acercó a ella y la abrazó por detrás. Comenzó a darle besos en el cuello y luego se acercó a su rostro.- ¿Te gusta esto?
- Mmm...- Brittany apenas podía hablar.
- Te encanta...- la morena la puso frente a ella y le besó dulcemente. La cargó como pudo hasta la habitación y una vez allí, notó que la bailarina esta nerviosa.- ¿Qué sucede Britt?- acarició su rostro.
- Sólo estoy nerviosa.- sus mejillas estaban empezando a tomar mucho más color de lo normal.
- Brittany...- Santana no podía evitar reír.- Jamás pensé que estarías nerviosa por esto.
- Perdón, no sé que sucede. Quizás sea porque Rachel y Kurt están del otro lado.
- No tenemos que hacerlo si no quieres.- la abrazó y recordó que el cuadro estaba allí.- Mira...- la obligó a voltear.
- Es un lugar perfecto.
- Lo es en realidad. Despierto cada mañana y lo veo allí.
- Te amo tanto...- la besó.- Tanto...
- Ven, te prestaré algo de ropa.- buscó entre los cajones.
- Como en los viejos tiempos...- el recuerdo de la secundaria la hizo sonreír.- ¿Recuerdas nuestra primera cita?- se sentó en la cama.
- ¿Crees que me olvidaría de eso?- se acercó a ella con ropa más cómoda.- Toma.
- Algún día volveremos a Lima y repetiremos eso.
- ¿Extrañas Lima?
- Quién no...
- Pues yo.- Santana recordó que la última vez que estuvo allí fue para el homenaje que hicieron a Finn.- Después de la muerte de Finn le dije al Señor Schue que Nueva York es mi hogar ahora, y que regresar a Lima me recuerda todo lo que perdí.- su rostro comenzaba a mostrar tristeza. Brittany la dejó continuar.- Mi abuela, de quien nunca más supe nada. Finn... ¡Dios! No hablé de esto con nadie pero cómo me dolió su pérdida. Yo lo quería mucho. Y...- se detuvo y la miró.- Eso ya no importa.
- A mí.- estaba tan convencida como dolida.
- Como dije, eso ya no importa. Estás aquí.
- Y no me iré.- Brittany sonrió. Observó que en el escritorio había una foto de Santana con Dani.
- Si te molesta puedo guardarla.- la morena se había dado cuenta.
- No, no. Sólo te observo. Estabas feliz.
- Sí... Fue un día muy agradable.- recordó.
- ¿Llegaste a amarla?
- No.- ni siquiera lo pensó. - Es decir, la quise demasiado. Aún la quiero, pero lo nuestro iba por otro lado. Creo que podemos ser buenas amigas pero nunca podré amarla.
- ¿Puedo saber por qué fueron novias entonces?
- Trataba de ser feliz. Me convencí de que nunca más volvería a verte, y traté de amar a alguien mas. Lo cierto es que nunca podré hacerlo.
- Yo siempre te amé. Después de Sam no estuve con nadie más.
- ¿No conociste a nadie en la Universidad?- preguntó sorprendida.
- Conocí a mucha gente pero nadie como tú.
- Oh, Britt... Eso es muy dulce.- Santana la abrazó y ambas rieron.- Soy muy feliz.
- No quiero presumir pero sé que lo eres por mí.- hizo reír nuevamente a la morena.
- Vamos a dormir señorita engreída.
Ambas se vistieron con ropa más cómoda y se acostaron. Estaban abrazadas pero sin dormir, ninguna de las dos podía hacerlo. Santana comenzó a acariciar el rostro de la rubia hasta que ésta quedó completamente dormida. Ella sin embargo no lograba conciliar el sueño, estaba observando cada detalle del rostro de Brittany. No recordaba lo que era estar realmente feliz, sentirse tan completa y olvidar el mundo que la rodeaba. Sólo existían ellas dos, y eso le bastaba para sentirse bien. 'Te amo' pensó, pero su sonrisa fue suficiente para expresarlo. Eso era lo que más le gustaba de estar con ella, todo era espontáneo, nunca era necesario forzar las palabras, se entendían perfectamente en el silencio. Pensó que así se veían realmente las parejas, y trató de capturar ese momento y guardarlo para siempre en su corazón. Atrajo a Brittany hacia ella, aún más de lo que estaba, el frío de un típico 21 de diciembre empezaba a sentirse en la ciudad.
- Dulces sueños preciosa...- besó suavemente su rostro para no despertarla y cerró sus ojos para dormir ella también.
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
El despertador sonó a las 07:30 ese día. El calendario marcaba el 22 de diciembre de 2013. Brittany abrió sus ojos y aún seguía aferrada a los brazos de Santana. Sonrió por eso. No había manera de estar segura, pero podía decir que estaba nevando en la ciudad.
- Santy...- trató de moverse pero la morena la apretó más con sus brazos. Brittany rió.- Santy, ¿podrías abrir los ojos?
- Mmm...- estaba despierta pero mantenía sus ojos cerrados.
- Puedo asegurar que está nevando. ¿No te gustaría confirmarlo?
- Me gustaría que te callaras y me dejaras abrazarte y dormir.
- No estoy segura si eso fue dulce o una agresión.- de todos modos la abrazó y besó sus brazos.
- Fue una forma agresiva de decirte algo dulce.- la rubia sonrió y ella besó su cabeza.
- Esas formas particulares de demostrar tu amor.
- ¿Quieres levantarte?- logró incorporarse un poco. No quería decirle a Brittany que le costó dormir porque no podía dejar de mirarla.
- Sólo si tú quieres...
- No dejaste de ser tan inquieta. Ven, vamos.- se levantó de la cama, no sin antes darle un largo beso en los labios.
- Linda manera de despertar...
Ambas se levantaron de la cama, cepillaron sus dientes y luego se vistieron. Nuevamente Santana le prestó algo de ropa a la rubia ya que hacía mucho frío.
- Te invito a desayunar afuera. Y luego puedo acompañarte a tu casa.- la morena se ofreció a llevarla.
- Claro, me encantaría.
Salieron del apartamento tomadas de la mano, disfrutando de la nieve que Nueva York les ofrecía. Santana llevó a Brittany hasta el mismo bar en el que habían cenado la noche que se vieron después de tanto tiempo. Tomaron un lugar perfecto para poder ver la ciudad a su alrededor. Ordenaron y la camarera llegó con café negro para la morena y una taza de chocolate caliente para la rubia. Ambas acompañadas de medialunas.
- Gracias a ti no podré mantener mi figura.- le comentó Santana a su novia.
- Yo no te obligo a comer tanto.
- Pero tampoco lo impides.
- Puedes dejar las medialunas, no tengo problema en comerlas todas.
- Yo soy buena novia y no te dejaré hacer eso.
- Escúchame, 'buena novia".- Lo último fue con tono sarcástico.- ¿Tienes planes de Navidad?
- Los padres de Rachel vendrán, acompañados del padre de Kurt y Carol. Yo iba a quedarme pero mamá insiste en que debo volver a Lima en Navidad.
- Pues vamos...
- ¿Cómo?- preguntó sorprendida.
- No tengo planes, ni a donde ir. Y quiero estar contigo.
- Está bien.- Santana cedió rápidamente.- Podremos hacer eso. Saldremos mañana por la tarde, ¿te parece?
- Claro.- sonrió la rubia.- Eso suena genial. Gracias.
- No tienes que agradecer. A mis padres les encantará tenerte en casa.
- Va a ser duro para mí.- sus ojos mostraban unas lágrimas que inevitablemente querían salir.
- No estás sola Brittany, lo sabes.- tomó su mano por encima de la mesa.
- Como en los viejos tiempos...- la rubia sonrió. Santana no entendió.- Cuando solíamos almorzar en Breadstix y tomabas mi mano.
- Oh... Extraño esos días a veces. De todas maneras, la Navidad en Nueva York es lo mejor. Es una lástima que no podamos quedarnos.
- Ya habrá otra oportunidad. Y podemos venir a recibir el Nuevo Año aquí.
- ¿Vendrías conmigo?
- Claro. Quiero estar contigo porque las cosas se me hacen mucho más fáciles.
- Entonces así será, volveremos a la ciudad en víspera de Año Nuevo.
- ¿Irás a ver a tu abuela?
- Ella fue clara. No me quiere cerca.
- Algún día, cuando quieras darte cuenta, será tarde Santana.
Santana no dejaba de sorprenderse de la madurez de la rubia y de su cambio. No quiso continuar con el tema, así que hablaron de cualquier cosa que se les venía a la mente. No importaba cuán raros o locos pudieran ser los temas de conversación, disfrutaban de la compañía de la otra. Brittany le comentó a Santana sobre su sueño de graduarse de la Universidad y abrir una escuela de baile en Nueva York, eso le agradó a la morena, quién pensaba pasar el resto de su vida con ella y si ambas estaban de acuerdo con continuar en la ciudad, era mucho más fácil. El tiempo parecía correr muy rápido cuando estaban juntas, y Brittany debía volver a su apartamento. Santana la dejó allí y decidió volver caminando a pesar del frío.
Pasó por el centro comercial y entró a buscar regalos para Navidad. Primero compró regalos para sus padres. Luego intentó recordar qué podía regalarle a Kurt y Rachel. Buscó entre sus recuerdos y compró una camisa que a Kurt le pareció genial, aunque a ella le parecía horrible. Y para Rachel debía buscar algo simbólico, algo que tuviera un significado, y que la castaña pudiera guardar siempre. Supo perfectamente qué debía comprar para ella. Quedaba Brittany, y aunque debía ser más fácil para ella, no lo era. No sabía qué podía regalarle a su novia, y eso estaba molestándola. Siguió caminando, buscando algo que le recordara a la rubia pero aún no tenía éxito. Pasó por la sección de juguetes, y logró ver a Dani junto a sus hermanos. Desde que terminaron no la había visto, y eso la ponía nerviosa. Sin embargo, no podía irse sin saludarla. Se acercó a ellos y los niños la saludaron con timidez, antes de ir a explorar cada juguete.
- Hola Dani.- dijo nerviosa.- ¿Cómo estás?
- ¡Santana! Ha estado todo bien.- siempre sonriente, siempre agradable.- ¿Tú? No te he visto hace un tiempo.
- Estuve trabajando sólo por las noches. Todo está bien.
- ¿Haciendo compras de Navidad?- observó las bolsas.
- Sí. De hecho debo llevarlas a Lima.
- ¿No estarás en Nueva York? Te pierdes mucho.
- Lo sé. Pero mis padres insisten en que debo ir con ellos. ¿Ustedes estarán aquí?
- Si, papá quiere quedarse. Y los niños también. Están entusiasmados, como cualquiera a su edad.
- Escogiendo sus regalos por lo que veo.
- De hecho no lo hacen, saben que ésta Navidad será diferente. Deben conformarse con lo que papá y yo podamos comprar.- por primera vez pudo notar angustia en su rostro.
- Habrá tiempos mejores.- puso una mano en su hombro y sonrió.
- Lo sé.
- Debo irme. Todavía faltan un par de cosas para comprar.- se despidió de ella y observó a los niños.- Que tengan una Feliz Navidad, Dani.
- Igualmente Santana. Saluda a los chicos, y a Brittany.
La morena pasó cerca de los niños. Vió a Lizzie observando una muñeca bailarina y Max tenía en sus manos un dinosaurio grande.
- Lizzie...- la llamó.- ¿Podrías hacerme un favor?
-Claro.- Santana pensó que estaba a punto de hacer la pregunta más estúpida de todas.
- ¿Conoces a Brittany Pierce?- conocía la respuesta pero sin embargo tenía que preguntar.
- Sí, ella es mi maestra.
- ¿Qué crees que le gustaría recibir en Navidad?- definitivamente había perdido la cordura.
- Pues...- la niña se detuvo a pensar.- Un gato.- respondió segura.
- ¿Un gato?- la morena estaba confundida. Pensó que Brittany tenía ya uno, pero luego recordó que no lo había visto.
- Sí. Ella me contó un día que su gato, el gordito, escapó de su casa y nunca más regresó.
- Está bien, gracias pequeña. Feliz Navidad enanos.- Sonrió y los saludó, para luego seguir su camino.
- ¡Feliz Navidad Santana!
La morena llegó a su apartamento y dejó los regalos debajo del árbol.
- ¿Rachel? ¿Estás en casa?- llamó a su compañera.
- Aquí estoy.- la castaña salió de la cocina.- ¿Cómo te fue?
- Muy bien. Está nevando, ¿viste?
- Sí, anunciando la Navidad.
- ¿Dónde está Hummel?
- Se fue al supermercado, para terminar las compras. ¿Te quedarás en Nueva York este año?
- No. Brittany y yo iremos a Lima.- se sentó en el sofá y Rachel la imitó. -Aunque me gustaría quedarme.
- ¿Por qué te vas entonces?
- Mis padres quieren que vuelva a Lima al menos en estas fechas. Pero estaré aquí para esperar el nuevo año, así que Brittany y yo vendremos con ustedes.
- Esa noche tocamos en el bar, tendrás que venir de todas maneras.
- ¿Por qué nadie me lo dijo?
- Estoy haciéndolo.- Rachel rió.
- De todos modos estaré aquí.- se relajó y luego se incorporó sorprendida.- Espera, Dani, Brittany y yo en el mismo lugar.
- Vamos, no es tan grave.- Santana le lanzó una mirada fulminante.
- Estás exagerando, y sólo yo tengo el poder para hacer eso. Ah, se me olvidó, también estará Quinn.
- No estás hablando en serio. Si lo estás haciendo a propósito te ruego que pares.
- Llamó hace un rato, la invité.
- Ok, gracias. Ya viví muchas emociones hoy.- se levantó del sofá y se fue a su habitación.
No debería preocuparse, pero lo estaba. Sabía que Dani y Brittany se conocían, y aunque fuera incómodo podían llegar a pasarla bien. Pero Quinn la preocupaba. No había hablado con nadie sobre eso, pero desde la boda del Sr. Shue, la ex capitana de las animadoras no había dejado de enviarle mensajes y mails para encontrarse, y ella sólo respondió una vez para darle a.entender que no podía pasar nada entre ellas, pero la rubia seguía sin darse por vencida. Se preguntó si debía contarle a Brittany sobre eso pero decidió que no.
- Espero que te comportes Fabray...- dijo pensativa.
Llegada la noche, Santana se puso a acomodar algo de ropa para tener todo listo y no olvidar nada. Preparó lo justo y necesario, para unos días nada más. En cierta forma estaba emocionada por volver a Lima, a ver a sus padres y pasar Navidad con ellos y Brittany. Recordó que no le había dado la noticia a su madre sobre la bailarina, pero prefirió hacerlo personalmente, ya que todo había pasado muy rápido y quería ser cuidadosa. La ropa estaba sobre la cama, sin embargo aún no quería llenar el bolso. Se sentó en el extremo y llamó a Brittany.
- ¿Tanto me extrañas?- la voz de Brittany y su comentario la hicieron reír.
- Se podría decir que sí. ¿Cómo estás?
- Cansada. Estuve entrenando.
- Debería aprender más de ti. Soy demasiado floja.
- Sin embargo te ves increíble.
- Gracias por el cumplido, pero en unos años estaré bastante mal.- no estaba segura si esa conversación iba hacia un lugar muy coherente.
- Te amaré igual.- la rubia utilizó ese tono dulce que la caracterizaba. - Aunque seas una latina pequeña y gordita.
- ¿Pequeña? ¡Oye! Sólo yo puedo burlarme de la altura de las personas.
- Lo siento, pequeñita.- estaba tratando de desafiarla.
- Así que estás con esas hoy. Te quedarás en Nueva York y yo me iré sola a Lima.
- No, por favor. No me dejes. Mi bolso está listo ya.- Santana podría jurar que Brittany estaba haciendo uno de sus pucheros.
- No lo haré Britt.- volvió a su tono dulce.
- ¿Avisaste a tus padres que voy contigo?
- Claro, lo hice.- mintió.
- No lo hiciste, ¿cierto?- casi podía ver su cara.
- Está bien, no lo hice.
- Pareciera que te conozco de años ¿no?
- Sabes que no habrá problemas.- respondió entre risas.
- Escucha, debo terminar unas cosas, y mañana por la mañana tengo que ir a dar clases. En realidad haremos un especial de Navidad con los niños, y me quedan cosas por hacer.
- Está bien. ¿A qué hora terminas?
- Al mediodía.
- Bueno, iré a buscarte. Lleva tus bolsos, almorzaremos en casa y de aquí nos iremos.
- Ok. Te esperaré. Quizás quieras ir antes, así veas un poco lo que haremos.
- Si tengo tiempo estaré allí, ¿ok? Ahora te dejo terminar. Te amo Britt, mucho.
- Yo también Santy.- le dió un beso al teléfono y colgó.
Santana sonreía a la pantalla.
- ¿Siempre pondrás esa cara de estúpida cuando hables con ella?- Kurt se burlaba desde la puerta.
- Al menos no pasamos las horas peleando.
- ¡Oye! Eso fue un golpe bajo.- Santana rió.- Rachel y yo queremos cenar todos juntos, ya que no estarás en Navidad. Vamos.
- Si quieren que me vaya, sólo deben decirlo.- bromeó ella.
- ¿La cena no hace falta?- Kurt siguió con la broma.
- Creo que no.- ella agarró a su amigo del brazo y fueron juntos al comedor, donde Rachel había preparado una bonita alfombra al lado del enorme árbol. -¿Comeremos ahí?- Santana estaba sorprendida pero le agradaba la idea.
- Sí, será divertido.- Rachel se veía entuasiasmada. -Vengan, la cena está lista.
La cena fue realmente original y divertida. Se rieron tanto que olvidaron todas sus preocupaciones por horas.
- Bueno Santana...- dijo Kurt. - Rachel y yo queremos darte un regalo antes que te vayas.
- Por favor, si van a cantarme, les ruego que no griten tanto.
- En realidad no es una canción.- Rachel sacó una caja envuelta cuidadosamente. - Feliz Navidad Santana.- se lo entregó y sonrió.
- No es lo que yo quería comprarte, pero Rachel insistió.- Kurt se acercó más a ellas.
- Vamos ¡ábrelo!
Santana obedeció al instante, sorprendida aún por el gesto. Logró quitar la cinta que lo envolvía y luego el papel. La caja roja estaba sellada por lo que también tuvo que deshacerse de ella. Su cara al ver lo que había adentro fue de asombro y nostalgia a la vez.
- Te dije que no era buena idea.- murmuró Kurt a Rachel.
- Esto es realmente hermoso.- dijo la morena y la castaña sonrió victoriosa. -No tenían que hacerlo.- los abrazó a los dos y sonrió.- Son grandes amigos. Sostuvo una bola de cristal entre sus manos, pero no era una cualquiera, allí dentro estaba la casa de su abuela en miniatura. Había pasado toda su vida en esa casa, cuando sus padres trabajaban y extrañaba demasiado estar allí.
- Me comentaste que extrañabas esa casa, y entonces pensé que sería bueno que la tuvieras en algún lugar para recordarla.- Rachel sabía acerca de todos los sentimientos que la morena tenía por esa casa y por su abuela. -Nos costó demasiado encontrar alguien que quisiera tallar esto a la perfección, pero creo que quedó bastante parecida.
- Eres increíble.- la latina no podía dejar de mirar al objeto en sus manos. -Ambos lo son.- recordó que Kurt estaba allí. -Es realmente un gran regalo.
- Me alegro que te gustara.- Kurt sonreía. -Aunque yo quería comprarte un vestido de esos que te gustan, estaba de muerte. Ibas a verte increíble en él.
- Esto sin dudas es mejor.- Santana rió y luego trajo los regalos que ella les había comprado. -Pensaba dárselos mañana antes de irme pero este es un buen momento. Esto es tuyo.- le dijo a Kurt y le alcanzó una bolsa.- Me dijiste que te gustaba y yo...
- ¡Oh por Dios! Es la camisa que vi ese día que fuimos al centro comercial.- casi gritaba de la emoción. No había nada que se pudiera regalar a Kurt que sea mejor que ropa elegante de diseñador. -¡Te amo Santana!- la abrazó fuerte.
- Ok, ok. Ya fue mucho amor.- bromeó ella. Luego le acercó a Rachel su regalo. - Este es para ti. Buscaba algo que tuviera un significado y fuera simbólico. Espero que esto lo sea.
La castaña rompió el envoltorio. Se encontró con una cajita rectangular de terciopelo roja.
- No le propondrás matrimonio, ¿cierto?- bromeó Kurt.
- Cállate Hummel.
Rachel abrió la cajita y vió un brazalete de plata. Era muy delicado y bonito. Pero lo realmente hermoso era el dije que colgaba de él.
- Es una estrella con un casco de fútbol en el centro.- explicó Santana aunque era obvio. -Te escuché hablar con una estrella el otro día, y lejos de pensar que estás loca, pensé que estabas hablando con Finn y que era lo más hermoso que vi alguna vez. Él estaba seguro que serías tú la estrella, y él fue tu Mariscal de campo, armó tu jugada, te ayudó a realizarla y te dejó anotar. Serás una estrella algún día, pero no olvides que tu jugada fue posible por él.
Rachel sólo la abrazó y lloró en su hombro.
- Gracias Santana.- sus palabras fueron honestas y llenas de cariño. Santana la abrazó más fuerte y se limitó a sonreír. Kurt las observaba y algunas lágrimas se asomaban en sus ojos. En verdad, el regalo de Santana era perfecto y estaba muy emocionado. En definitiva todos extrañaban a Finn, pero nadie tanto como Rachel.
- Es muy lindo lo que hiciste Santana.- Kurt trataba de expresar con claridad lo que sentía pero no podía.
- Puedo ser linda a veces.- su intención era cambiar de tema.
- Esto fue muy lindo de tu parte. Te lo agradezco.- Rachel secó sus lágrimas y sonrió.
- ¿Abrazo grupal?- la morena sorprendió a sus amigos con un abrazo fuerte. -Los quiero tanto. Gracias por todo.- su celular sonaba. -Y por suerte mi celular está sonando y me sacará de esta cursilería.- se alejó un poco y atendió.
- ¡Déjala Brittany!- gritó Kurt.
- Cállate.- Santana lo mató con la mirada. -¿Amor?
- Disculpa si estabas durmiendo.- indiscutiblemente era Brittany. Su tono dulce la delató.
- No lo hacía preciosa. ¿Qué sucede?
- Sólo quiero hablar contigo. No puedo dormir.
- ¿Por algo en particular?
- Sólo insomnio. Y necesito dormir para estar bien mañana.
- Podría cantarte una canción.- reflexionó y se sentó en la ventana.
- Eso sería extraño. ¿Crees que funcionará?
- Probemos. Vamos, ve a la cama y yo cantaré algo para ti.
- Estoy en mi cama.
- Bueno, ¿qué quieres que cante?
- Songbird.
- Está bien.- Santana empezó con unos versos y fue afinando su voz a medida que la canción avanzaba. Se sintió como cuando intentaba decirle a Brittany con canciones lo que sus palabras no podían. Cuando terminó notó que la respiración de la rubia era lo único que se escuchaba.
-Que duermas bien pequeña. Te amo.
- Santy...- trató de moverse pero la morena la apretó más con sus brazos. Brittany rió.- Santy, ¿podrías abrir los ojos?
- Mmm...- estaba despierta pero mantenía sus ojos cerrados.
- Puedo asegurar que está nevando. ¿No te gustaría confirmarlo?
- Me gustaría que te callaras y me dejaras abrazarte y dormir.
- No estoy segura si eso fue dulce o una agresión.- de todos modos la abrazó y besó sus brazos.
- Fue una forma agresiva de decirte algo dulce.- la rubia sonrió y ella besó su cabeza.
- Esas formas particulares de demostrar tu amor.
- ¿Quieres levantarte?- logró incorporarse un poco. No quería decirle a Brittany que le costó dormir porque no podía dejar de mirarla.
- Sólo si tú quieres...
- No dejaste de ser tan inquieta. Ven, vamos.- se levantó de la cama, no sin antes darle un largo beso en los labios.
- Linda manera de despertar...
Ambas se levantaron de la cama, cepillaron sus dientes y luego se vistieron. Nuevamente Santana le prestó algo de ropa a la rubia ya que hacía mucho frío.
- Te invito a desayunar afuera. Y luego puedo acompañarte a tu casa.- la morena se ofreció a llevarla.
- Claro, me encantaría.
Salieron del apartamento tomadas de la mano, disfrutando de la nieve que Nueva York les ofrecía. Santana llevó a Brittany hasta el mismo bar en el que habían cenado la noche que se vieron después de tanto tiempo. Tomaron un lugar perfecto para poder ver la ciudad a su alrededor. Ordenaron y la camarera llegó con café negro para la morena y una taza de chocolate caliente para la rubia. Ambas acompañadas de medialunas.
- Gracias a ti no podré mantener mi figura.- le comentó Santana a su novia.
- Yo no te obligo a comer tanto.
- Pero tampoco lo impides.
- Puedes dejar las medialunas, no tengo problema en comerlas todas.
- Yo soy buena novia y no te dejaré hacer eso.
- Escúchame, 'buena novia".- Lo último fue con tono sarcástico.- ¿Tienes planes de Navidad?
- Los padres de Rachel vendrán, acompañados del padre de Kurt y Carol. Yo iba a quedarme pero mamá insiste en que debo volver a Lima en Navidad.
- Pues vamos...
- ¿Cómo?- preguntó sorprendida.
- No tengo planes, ni a donde ir. Y quiero estar contigo.
- Está bien.- Santana cedió rápidamente.- Podremos hacer eso. Saldremos mañana por la tarde, ¿te parece?
- Claro.- sonrió la rubia.- Eso suena genial. Gracias.
- No tienes que agradecer. A mis padres les encantará tenerte en casa.
- Va a ser duro para mí.- sus ojos mostraban unas lágrimas que inevitablemente querían salir.
- No estás sola Brittany, lo sabes.- tomó su mano por encima de la mesa.
- Como en los viejos tiempos...- la rubia sonrió. Santana no entendió.- Cuando solíamos almorzar en Breadstix y tomabas mi mano.
- Oh... Extraño esos días a veces. De todas maneras, la Navidad en Nueva York es lo mejor. Es una lástima que no podamos quedarnos.
- Ya habrá otra oportunidad. Y podemos venir a recibir el Nuevo Año aquí.
- ¿Vendrías conmigo?
- Claro. Quiero estar contigo porque las cosas se me hacen mucho más fáciles.
- Entonces así será, volveremos a la ciudad en víspera de Año Nuevo.
- ¿Irás a ver a tu abuela?
- Ella fue clara. No me quiere cerca.
- Algún día, cuando quieras darte cuenta, será tarde Santana.
Santana no dejaba de sorprenderse de la madurez de la rubia y de su cambio. No quiso continuar con el tema, así que hablaron de cualquier cosa que se les venía a la mente. No importaba cuán raros o locos pudieran ser los temas de conversación, disfrutaban de la compañía de la otra. Brittany le comentó a Santana sobre su sueño de graduarse de la Universidad y abrir una escuela de baile en Nueva York, eso le agradó a la morena, quién pensaba pasar el resto de su vida con ella y si ambas estaban de acuerdo con continuar en la ciudad, era mucho más fácil. El tiempo parecía correr muy rápido cuando estaban juntas, y Brittany debía volver a su apartamento. Santana la dejó allí y decidió volver caminando a pesar del frío.
Pasó por el centro comercial y entró a buscar regalos para Navidad. Primero compró regalos para sus padres. Luego intentó recordar qué podía regalarle a Kurt y Rachel. Buscó entre sus recuerdos y compró una camisa que a Kurt le pareció genial, aunque a ella le parecía horrible. Y para Rachel debía buscar algo simbólico, algo que tuviera un significado, y que la castaña pudiera guardar siempre. Supo perfectamente qué debía comprar para ella. Quedaba Brittany, y aunque debía ser más fácil para ella, no lo era. No sabía qué podía regalarle a su novia, y eso estaba molestándola. Siguió caminando, buscando algo que le recordara a la rubia pero aún no tenía éxito. Pasó por la sección de juguetes, y logró ver a Dani junto a sus hermanos. Desde que terminaron no la había visto, y eso la ponía nerviosa. Sin embargo, no podía irse sin saludarla. Se acercó a ellos y los niños la saludaron con timidez, antes de ir a explorar cada juguete.
- Hola Dani.- dijo nerviosa.- ¿Cómo estás?
- ¡Santana! Ha estado todo bien.- siempre sonriente, siempre agradable.- ¿Tú? No te he visto hace un tiempo.
- Estuve trabajando sólo por las noches. Todo está bien.
- ¿Haciendo compras de Navidad?- observó las bolsas.
- Sí. De hecho debo llevarlas a Lima.
- ¿No estarás en Nueva York? Te pierdes mucho.
- Lo sé. Pero mis padres insisten en que debo ir con ellos. ¿Ustedes estarán aquí?
- Si, papá quiere quedarse. Y los niños también. Están entusiasmados, como cualquiera a su edad.
- Escogiendo sus regalos por lo que veo.
- De hecho no lo hacen, saben que ésta Navidad será diferente. Deben conformarse con lo que papá y yo podamos comprar.- por primera vez pudo notar angustia en su rostro.
- Habrá tiempos mejores.- puso una mano en su hombro y sonrió.
- Lo sé.
- Debo irme. Todavía faltan un par de cosas para comprar.- se despidió de ella y observó a los niños.- Que tengan una Feliz Navidad, Dani.
- Igualmente Santana. Saluda a los chicos, y a Brittany.
La morena pasó cerca de los niños. Vió a Lizzie observando una muñeca bailarina y Max tenía en sus manos un dinosaurio grande.
- Lizzie...- la llamó.- ¿Podrías hacerme un favor?
-Claro.- Santana pensó que estaba a punto de hacer la pregunta más estúpida de todas.
- ¿Conoces a Brittany Pierce?- conocía la respuesta pero sin embargo tenía que preguntar.
- Sí, ella es mi maestra.
- ¿Qué crees que le gustaría recibir en Navidad?- definitivamente había perdido la cordura.
- Pues...- la niña se detuvo a pensar.- Un gato.- respondió segura.
- ¿Un gato?- la morena estaba confundida. Pensó que Brittany tenía ya uno, pero luego recordó que no lo había visto.
- Sí. Ella me contó un día que su gato, el gordito, escapó de su casa y nunca más regresó.
- Está bien, gracias pequeña. Feliz Navidad enanos.- Sonrió y los saludó, para luego seguir su camino.
- ¡Feliz Navidad Santana!
La morena llegó a su apartamento y dejó los regalos debajo del árbol.
- ¿Rachel? ¿Estás en casa?- llamó a su compañera.
- Aquí estoy.- la castaña salió de la cocina.- ¿Cómo te fue?
- Muy bien. Está nevando, ¿viste?
- Sí, anunciando la Navidad.
- ¿Dónde está Hummel?
- Se fue al supermercado, para terminar las compras. ¿Te quedarás en Nueva York este año?
- No. Brittany y yo iremos a Lima.- se sentó en el sofá y Rachel la imitó. -Aunque me gustaría quedarme.
- ¿Por qué te vas entonces?
- Mis padres quieren que vuelva a Lima al menos en estas fechas. Pero estaré aquí para esperar el nuevo año, así que Brittany y yo vendremos con ustedes.
- Esa noche tocamos en el bar, tendrás que venir de todas maneras.
- ¿Por qué nadie me lo dijo?
- Estoy haciéndolo.- Rachel rió.
- De todos modos estaré aquí.- se relajó y luego se incorporó sorprendida.- Espera, Dani, Brittany y yo en el mismo lugar.
- Vamos, no es tan grave.- Santana le lanzó una mirada fulminante.
- Estás exagerando, y sólo yo tengo el poder para hacer eso. Ah, se me olvidó, también estará Quinn.
- No estás hablando en serio. Si lo estás haciendo a propósito te ruego que pares.
- Llamó hace un rato, la invité.
- Ok, gracias. Ya viví muchas emociones hoy.- se levantó del sofá y se fue a su habitación.
No debería preocuparse, pero lo estaba. Sabía que Dani y Brittany se conocían, y aunque fuera incómodo podían llegar a pasarla bien. Pero Quinn la preocupaba. No había hablado con nadie sobre eso, pero desde la boda del Sr. Shue, la ex capitana de las animadoras no había dejado de enviarle mensajes y mails para encontrarse, y ella sólo respondió una vez para darle a.entender que no podía pasar nada entre ellas, pero la rubia seguía sin darse por vencida. Se preguntó si debía contarle a Brittany sobre eso pero decidió que no.
- Espero que te comportes Fabray...- dijo pensativa.
Llegada la noche, Santana se puso a acomodar algo de ropa para tener todo listo y no olvidar nada. Preparó lo justo y necesario, para unos días nada más. En cierta forma estaba emocionada por volver a Lima, a ver a sus padres y pasar Navidad con ellos y Brittany. Recordó que no le había dado la noticia a su madre sobre la bailarina, pero prefirió hacerlo personalmente, ya que todo había pasado muy rápido y quería ser cuidadosa. La ropa estaba sobre la cama, sin embargo aún no quería llenar el bolso. Se sentó en el extremo y llamó a Brittany.
- ¿Tanto me extrañas?- la voz de Brittany y su comentario la hicieron reír.
- Se podría decir que sí. ¿Cómo estás?
- Cansada. Estuve entrenando.
- Debería aprender más de ti. Soy demasiado floja.
- Sin embargo te ves increíble.
- Gracias por el cumplido, pero en unos años estaré bastante mal.- no estaba segura si esa conversación iba hacia un lugar muy coherente.
- Te amaré igual.- la rubia utilizó ese tono dulce que la caracterizaba. - Aunque seas una latina pequeña y gordita.
- ¿Pequeña? ¡Oye! Sólo yo puedo burlarme de la altura de las personas.
- Lo siento, pequeñita.- estaba tratando de desafiarla.
- Así que estás con esas hoy. Te quedarás en Nueva York y yo me iré sola a Lima.
- No, por favor. No me dejes. Mi bolso está listo ya.- Santana podría jurar que Brittany estaba haciendo uno de sus pucheros.
- No lo haré Britt.- volvió a su tono dulce.
- ¿Avisaste a tus padres que voy contigo?
- Claro, lo hice.- mintió.
- No lo hiciste, ¿cierto?- casi podía ver su cara.
- Está bien, no lo hice.
- Pareciera que te conozco de años ¿no?
- Sabes que no habrá problemas.- respondió entre risas.
- Escucha, debo terminar unas cosas, y mañana por la mañana tengo que ir a dar clases. En realidad haremos un especial de Navidad con los niños, y me quedan cosas por hacer.
- Está bien. ¿A qué hora terminas?
- Al mediodía.
- Bueno, iré a buscarte. Lleva tus bolsos, almorzaremos en casa y de aquí nos iremos.
- Ok. Te esperaré. Quizás quieras ir antes, así veas un poco lo que haremos.
- Si tengo tiempo estaré allí, ¿ok? Ahora te dejo terminar. Te amo Britt, mucho.
- Yo también Santy.- le dió un beso al teléfono y colgó.
Santana sonreía a la pantalla.
- ¿Siempre pondrás esa cara de estúpida cuando hables con ella?- Kurt se burlaba desde la puerta.
- Al menos no pasamos las horas peleando.
- ¡Oye! Eso fue un golpe bajo.- Santana rió.- Rachel y yo queremos cenar todos juntos, ya que no estarás en Navidad. Vamos.
- Si quieren que me vaya, sólo deben decirlo.- bromeó ella.
- ¿La cena no hace falta?- Kurt siguió con la broma.
- Creo que no.- ella agarró a su amigo del brazo y fueron juntos al comedor, donde Rachel había preparado una bonita alfombra al lado del enorme árbol. -¿Comeremos ahí?- Santana estaba sorprendida pero le agradaba la idea.
- Sí, será divertido.- Rachel se veía entuasiasmada. -Vengan, la cena está lista.
La cena fue realmente original y divertida. Se rieron tanto que olvidaron todas sus preocupaciones por horas.
- Bueno Santana...- dijo Kurt. - Rachel y yo queremos darte un regalo antes que te vayas.
- Por favor, si van a cantarme, les ruego que no griten tanto.
- En realidad no es una canción.- Rachel sacó una caja envuelta cuidadosamente. - Feliz Navidad Santana.- se lo entregó y sonrió.
- No es lo que yo quería comprarte, pero Rachel insistió.- Kurt se acercó más a ellas.
- Vamos ¡ábrelo!
Santana obedeció al instante, sorprendida aún por el gesto. Logró quitar la cinta que lo envolvía y luego el papel. La caja roja estaba sellada por lo que también tuvo que deshacerse de ella. Su cara al ver lo que había adentro fue de asombro y nostalgia a la vez.
- Te dije que no era buena idea.- murmuró Kurt a Rachel.
- Esto es realmente hermoso.- dijo la morena y la castaña sonrió victoriosa. -No tenían que hacerlo.- los abrazó a los dos y sonrió.- Son grandes amigos. Sostuvo una bola de cristal entre sus manos, pero no era una cualquiera, allí dentro estaba la casa de su abuela en miniatura. Había pasado toda su vida en esa casa, cuando sus padres trabajaban y extrañaba demasiado estar allí.
- Me comentaste que extrañabas esa casa, y entonces pensé que sería bueno que la tuvieras en algún lugar para recordarla.- Rachel sabía acerca de todos los sentimientos que la morena tenía por esa casa y por su abuela. -Nos costó demasiado encontrar alguien que quisiera tallar esto a la perfección, pero creo que quedó bastante parecida.
- Eres increíble.- la latina no podía dejar de mirar al objeto en sus manos. -Ambos lo son.- recordó que Kurt estaba allí. -Es realmente un gran regalo.
- Me alegro que te gustara.- Kurt sonreía. -Aunque yo quería comprarte un vestido de esos que te gustan, estaba de muerte. Ibas a verte increíble en él.
- Esto sin dudas es mejor.- Santana rió y luego trajo los regalos que ella les había comprado. -Pensaba dárselos mañana antes de irme pero este es un buen momento. Esto es tuyo.- le dijo a Kurt y le alcanzó una bolsa.- Me dijiste que te gustaba y yo...
- ¡Oh por Dios! Es la camisa que vi ese día que fuimos al centro comercial.- casi gritaba de la emoción. No había nada que se pudiera regalar a Kurt que sea mejor que ropa elegante de diseñador. -¡Te amo Santana!- la abrazó fuerte.
- Ok, ok. Ya fue mucho amor.- bromeó ella. Luego le acercó a Rachel su regalo. - Este es para ti. Buscaba algo que tuviera un significado y fuera simbólico. Espero que esto lo sea.
La castaña rompió el envoltorio. Se encontró con una cajita rectangular de terciopelo roja.
- No le propondrás matrimonio, ¿cierto?- bromeó Kurt.
- Cállate Hummel.
Rachel abrió la cajita y vió un brazalete de plata. Era muy delicado y bonito. Pero lo realmente hermoso era el dije que colgaba de él.
- Es una estrella con un casco de fútbol en el centro.- explicó Santana aunque era obvio. -Te escuché hablar con una estrella el otro día, y lejos de pensar que estás loca, pensé que estabas hablando con Finn y que era lo más hermoso que vi alguna vez. Él estaba seguro que serías tú la estrella, y él fue tu Mariscal de campo, armó tu jugada, te ayudó a realizarla y te dejó anotar. Serás una estrella algún día, pero no olvides que tu jugada fue posible por él.
Rachel sólo la abrazó y lloró en su hombro.
- Gracias Santana.- sus palabras fueron honestas y llenas de cariño. Santana la abrazó más fuerte y se limitó a sonreír. Kurt las observaba y algunas lágrimas se asomaban en sus ojos. En verdad, el regalo de Santana era perfecto y estaba muy emocionado. En definitiva todos extrañaban a Finn, pero nadie tanto como Rachel.
- Es muy lindo lo que hiciste Santana.- Kurt trataba de expresar con claridad lo que sentía pero no podía.
- Puedo ser linda a veces.- su intención era cambiar de tema.
- Esto fue muy lindo de tu parte. Te lo agradezco.- Rachel secó sus lágrimas y sonrió.
- ¿Abrazo grupal?- la morena sorprendió a sus amigos con un abrazo fuerte. -Los quiero tanto. Gracias por todo.- su celular sonaba. -Y por suerte mi celular está sonando y me sacará de esta cursilería.- se alejó un poco y atendió.
- ¡Déjala Brittany!- gritó Kurt.
- Cállate.- Santana lo mató con la mirada. -¿Amor?
- Disculpa si estabas durmiendo.- indiscutiblemente era Brittany. Su tono dulce la delató.
- No lo hacía preciosa. ¿Qué sucede?
- Sólo quiero hablar contigo. No puedo dormir.
- ¿Por algo en particular?
- Sólo insomnio. Y necesito dormir para estar bien mañana.
- Podría cantarte una canción.- reflexionó y se sentó en la ventana.
- Eso sería extraño. ¿Crees que funcionará?
- Probemos. Vamos, ve a la cama y yo cantaré algo para ti.
- Estoy en mi cama.
- Bueno, ¿qué quieres que cante?
- Songbird.
- Está bien.- Santana empezó con unos versos y fue afinando su voz a medida que la canción avanzaba. Se sintió como cuando intentaba decirle a Brittany con canciones lo que sus palabras no podían. Cuando terminó notó que la respiración de la rubia era lo único que se escuchaba.
-Que duermas bien pequeña. Te amo.
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Aww esto no puede ser más perfecto <3
Aunque espero que Quinn no haga de las suyas :/
Saludos :)
Aunque espero que Quinn no haga de las suyas :/
Saludos :)
Elita- - Mensajes : 1247
Fecha de inscripción : 17/06/2012
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Que hermoso el momento de los regalos.
Muy bueno el capitulo
Muy bueno el capitulo
monicagleek- ---
- Mensajes : 523
Fecha de inscripción : 25/11/2013
Edad : 27
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
excelente como siempre! hasta perfecto me gusta la faceta dulce de san y mas con los chicos sus amigos! y britt super dulce me gusta mucho mis chicas!!! aunque quinntana interesante ja ser que habrá faberry luego??? besos!
tatymm-*- - Mensajes : 2406
Fecha de inscripción : 20/08/2012
Edad : 34
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Hola! nueva lectora, hoy me leí todos lo capítulos y no puedo decir nada mas que genial! me encanta y me gusta mucho tu manera de escribir y las brittana son tan tiernas <3 aunque me da penita por todo lo que ha pasado Britt, de ser una niña inocente donde todo era felicidad paso a ser una chica triste a la que la vida real la golpeo sin anestesia, pero por suerte esta San que la hace feliz y la ayuda a seguir adelante :) aun que me tiene preocupa tu famoso drama que al parecer también llegara fuerte , espero que no afecte mucho a la relación de las chicas, que no sea ese tipo de drama donde terminan y empiezan a salir con otras personas por despecho o por intentar olvidar a la otra donde solo terminan lastimando a una tercera persona cuando saben que nunca se podrán dejar de amar, nunca le he encontrado mucho sentido a eso...pero bueno a esperar lo que traes tu.
Por cierto soy de Chile y estoy contigo, fuerza a estas personas afectadas, yo soy mas o menos del centro de chile así que no pasa nada, pero las personas del norte y de las costas son las afectadas, terremoto ayer y hoy un sismo de 7.8 con nueva alerta de tsunami, terrible, no me lo imagino, yo pase por el terremoto del 2010 y no creo ser capas de pasar por otro como estas personas. muchas gracias por tu preocupación :) Saludos y espero que actualices pronto.
Por cierto soy de Chile y estoy contigo, fuerza a estas personas afectadas, yo soy mas o menos del centro de chile así que no pasa nada, pero las personas del norte y de las costas son las afectadas, terremoto ayer y hoy un sismo de 7.8 con nueva alerta de tsunami, terrible, no me lo imagino, yo pase por el terremoto del 2010 y no creo ser capas de pasar por otro como estas personas. muchas gracias por tu preocupación :) Saludos y espero que actualices pronto.
Nathy_Gleek*** - Mensajes : 108
Fecha de inscripción : 15/12/2012
Edad : 30
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
a toda la gente de chile mucha fuerza, el capitulo realmente genial, gracias!
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Oh Dios mío!!!
QUE HERMOSO CAPÍTULO!!! :')
En serio, me conmovió tanto Asdfghjkl *-*
No quiero drama :c pero supongo que es parte de-
Sin más que decirte, nos leemos en la próxima
muchos besos c:
QUE HERMOSO CAPÍTULO!!! :')
En serio, me conmovió tanto Asdfghjkl *-*
No quiero drama :c pero supongo que es parte de-
Sin más que decirte, nos leemos en la próxima
muchos besos c:
Anddy Rivera Morris******* - Mensajes : 407
Fecha de inscripción : 16/05/2013
Edad : 27
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Elita escribió:Aww esto no puede ser más perfecto <3
Aunque espero que Quinn no haga de las suyas :/
Saludos :)
Veremos qué se le ocurre a Quinn en cuanto llegue.
Saludos!! :)
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
monicagleek escribió:Que hermoso el momento de los regalos.
Muy bueno el capitulo
Gracias por tu comentario! Saludos!
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
tatymm escribió:excelente como siempre! hasta perfecto me gusta la faceta dulce de san y mas con los chicos sus amigos! y britt super dulce me gusta mucho mis chicas!!! aunque quinntana interesante ja ser que habrá faberry luego??? besos!
Quinntana es SUPEEEER interesante jaja. Quieres Faberry? Veremos. Besos!!
Anita-P******* - Mensajes : 454
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Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Nathy_Gleek escribió:Hola! nueva lectora, hoy me leí todos lo capítulos y no puedo decir nada mas que genial! me encanta y me gusta mucho tu manera de escribir y las brittana son tan tiernas <3 aunque me da penita por todo lo que ha pasado Britt, de ser una niña inocente donde todo era felicidad paso a ser una chica triste a la que la vida real la golpeo sin anestesia, pero por suerte esta San que la hace feliz y la ayuda a seguir adelante :) aun que me tiene preocupa tu famoso drama que al parecer también llegara fuerte , espero que no afecte mucho a la relación de las chicas, que no sea ese tipo de drama donde terminan y empiezan a salir con otras personas por despecho o por intentar olvidar a la otra donde solo terminan lastimando a una tercera persona cuando saben que nunca se podrán dejar de amar, nunca le he encontrado mucho sentido a eso...pero bueno a esperar lo que traes tu.
Por cierto soy de Chile y estoy contigo, fuerza a estas personas afectadas, yo soy mas o menos del centro de chile así que no pasa nada, pero las personas del norte y de las costas son las afectadas, terremoto ayer y hoy un sismo de 7.8 con nueva alerta de tsunami, terrible, no me lo imagino, yo pase por el terremoto del 2010 y no creo ser capas de pasar por otro como estas personas. muchas gracias por tu preocupación :) Saludos y espero que actualices pronto.
Woww! Tuve que leer bastante, gracias por eso. Sí, tambien llegará el drama y ya veré hasta que punto sostenerlo. Tienes razon con lo que dices, así que irá por otro lado. Gracias por el consejo!
Creo que las cosas han mejorado en Chile cierto? De verdad, no creo que alguien pueda imaginar lo que han pasado, y espero que no tengas que vivirlo otra vez, realmente lo espero :) Saludos! Me alegra tenerte por aquí
Anita-P******* - Mensajes : 454
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Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
micky morales escribió:a toda la gente de chile mucha fuerza, el capitulo realmente genial, gracias!
Gracias por tu comentario! Saludos!!
Anita-P******* - Mensajes : 454
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Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Anddy Rivera Morris escribió:Oh Dios mío!!!
QUE HERMOSO CAPÍTULO!!! :')
En serio, me conmovió tanto Asdfghjkl *-*
No quiero drama :c pero supongo que es parte de-
Sin más que decirte, nos leemos en la próxima
muchos besos c:
Siempre me alegra ver tus comentarios por aquí! Gracias por pasar. Hasta pronto!
Anita-P******* - Mensajes : 454
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Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Hola! Por fin puedo estar aquí otra vez. Aunque con poco tiempo porque ya empecé los estudios para los exámenes de la Universidad :( Sin embargo les dejo un nuevo capítulo y espero que sigan comentando! Hasta pronto y que tengan una linda semana.
CAPITULO 11.
Eran las 11 de la mañana cuando Santana salió a la escuela de baile. Tenía una hora hasta que las clases de Brittany terminaran. Cuando llegó allí, la dejaron entrar y la dirigieron hacia el salón donde la rubia y una mujer mucho mayor, estaban dando su clase. La rubia estaba rodeada de niñas a quien les enseñaba los pasos más lindos con mucha paciencia. Se veía tan feliz y tierna que Santana sólo pudo sonreír y observarla desde la puerta.
El número final del día consistía en una bonita y emotiva representación del Nacimiento. La morena estaba encantada, feliz de estar allí. Sabía que Brittany era una gran bailarina, pero no sabía cuánta belleza había en el baile, y más aún, la belleza que había cuando se hace lo que uno ama.
Para despedir a las niñas, Brittany hablaba con sus padres, les regalaba a todas un tierno y cálido abrazo y les deseaba una feliz navidad. Lizzie fue quien la abrazó con mas fuerzas, le dió un beso y se fue con su padre.
Se notaba que estaba agotada pero su sonrisa seguía intacta.
Se acercó a ella con su mirada dulce y alegre.
- ¿Te gustó?- le preguntó a la morena y dejó un suave beso en sus labios.
- Fue muy lindo. Te felicito.- sonreía casi tanto como ella.
- En realidad sólo ayudo, Julia hace la mayor parte porque no estoy capacitada aún.- se sentó en el piso y Santana la acompañó.
- Sí que lo estás Britt. La Universidad reforzará lo que sabes desde tu nacimiento nada más. La pasión, el talento, la vocación... Eso es tuyo.
- Gracias.- se apoyó en su hombro con los ojos cerrados y la tomó de la mano.
- Debemos irnos.
- Sólo espera un momento.- abrió sus ojos y miró el espejo que había en frente. -Mira. En este espejo me veo cada vez que hago lo que más amo, aquí disfruto cada minuto, me esfuerzo para ser la mejor, para lograr los más perfectos pasos de baile. Aquí soy tan feliz y estoy casi segura que sin dudas amo las danzas. Ahora estás aquí, y sólo nos veo a nosotras. ¿Crees que algún día este espejo mostrará a nuestra hija llegando de la mano contigo y yo esperándola para enseñarle lo que hago?
- Creo que eso será muy lindo.- Santana sonreía. - ¿Sabes? Por primera vez en mi vida no tengo miedo de imaginar mi futuro, de imaginar a mis hijas corriendo por este salón mientras yo las observo desde lejos y tú intentas enseñarles lo mas lindo del baile.
- Lo haremos posible Santana...- buscó sus ojos y sonrió. -Porque te amo.
- Yo te amo a ti.- la besó dulcemente y luego se separó de ella para abrazarla. -Debemos irnos preciosa, Rachel es intolerable cuando llegamos tarde al almuerzo.
Brittany buscó sus cosas, se puso un abrigo y salieron hasta el apartamento de Santana, donde Rachel y Kurt esperaban con el almuerzo listo. Tuvieron el suficiente tiempo para almorzar, ducharse y preparar el bolso de Santana que seguía sin llenarse por completo. Luego partieron rumbo a Lima.
Santana estuvo algo inquieta todo el camino, y Brittany notó que algo le preocupaba, sin embargo no se lo preguntó. Cuando por fin llegaron, decidieron caminar hasta la casa de Santana y recorrer de nuevo todos esos lugares que habían frecuentado en su adolescencia.
Allí estaban, paradas frente a la casa más linda del lugar, con sus bolsos listos y sus manos entrelazadas. Les tomó un tiempo decidirse a llamar a la puerta, pero fue Brittany quien tomó la iniciativa.
La madre de Santana abrió la puerta y se abalanzó contra ellas.
- ¡Mis niñas!- les decía con lágrimas en sus ojos y haciendo más presión sobre ellas.
- Ya mamá...- Santana se separó de ella pero sonreía.
No esperaron invitación y entraron a la casa.
- No sabía que venías Brittany.- dijo la mujer sorprendida.
- Su hija es muy cabeza dura y no quiso avisarle.- le lanzó una mirada a Santana quien reía.
- A mamá no le molesta.- la morena estaba muy segura de eso.
- Claro que no, eres bienvenida siempre. Suban a dejar sus cosas chicas, y luego bajen porque me parece que deben contarme algo.- miró sus manos entrelazadas y sonrió. Brittany se sonrojó.- Vamos, Britt. No me digas que ahora tienes vergüenza.- definitivamente ella era mamá de Santana. La morena sólo reía.
- ¿Y papá?
- Se fue al supermercado, vendrá luego.
Las chicas subieron a dejar su equipaje en el cuarto de Santana. Todo estaba igual, no habían hecho ningún cambio desde que ella se fue. Las fotos permanecían sobre el escritorio y algunos libros también. La rubia miró a su novia sentarse en la cama y observar con nostalgia todo a su alrededor.
- ¿Estás bien?- le preguntó y se arrodilló junto a ella.
- Sí, solo estoy nerviosa. No es fácil volver a casa.
- ¿La gran Santana Lopez está nerviosa?- con su dedo índice golpeó suave la nariz de la morena, quien sólo sonrió leve y se lanzó a sus brazos con algunas lágrimas en sus ojos.
-Ey, ey... ¿Qué sucede?- Brittany no entendía por qué lloraba.
- Sólo abrázame.- se aferró con más fuerza y luego secó sus lágrimas. - Voy a estar bien. Siempre soy muy fuerte y no soporto que me vean vulnerable, necesito llorar a veces. Pero no voy a llorar más, debemos ir con mamá.
- No te liberarás de esta charla.- le dió un beso y caminó con ella hasta la sala.
- ¡Mamá!- Santana gritó para asustarla y rió lo más fuerte que pudo.
- Siempre tan cariñosa.- le dijo ella y la golpeó. -Vengan, siéntense.- les señaló el sofá grande y ella se sentó al frente, con la mirada fija. -Evitemos vueltas y comentarios estúpidos, ¿cómo fue que están juntas otra vez?- Brittany estaba sonrojada como nunca, mientras Santana sonreía ante eso.
- Simplemente pasó.- respondió la morena sin quitar la vista a su madre. -Britt llegó a Nueva York, nos juntamos y hablamos.
- Seguro Santana...- su tono era sarcástico. -Seguro hablaron, claro.
- Mamá, Brittany está avergonzada y tú no ayudas.
- Mira Brittany, me conoces de años, sabes como soy. Y sobre todo, yo sé cómo son ustedes.- alzó una ceja y ambas sonrieron.
- El punto es que sólo pasó.- Santana ya estaba algo irritada.
- Son tan lindas...- las miraba con admiración y cariño. -Tu padre estará muy contento cuando las vea aquí.
- Disculpen.. - Dijo tímidamente la rubia tomando su cabeza. -No estoy muy bien, subiré a la cama un rato.
- ¿Sucede algo Britt?- Santana la miró y esperó una respuesta. -Estabas bien hace un rato.
- Me dió un fuerte dolor en la cabeza y me siento mareada por alguna razón.
- Lo bueno es que no estás embarazada.- bromeó la madre de Santana.
- ¡Mamá!- ahora era la morena quien estaba ruborizada. Brittany rió. -Ven, te acompaño a mi cuarto.
- No, puedo ir sola. Tú y tu mamá tienen mucho de qué hablar.- se levantó y subió las escaleras, dejándolas solas.
- La noto diferente. Tiene algo.
- Quizás sea porque su mamá murió y que su padre la abandonó. ¿No lo sabías?
- No, claro que no.- estaba muy conmocionada con la noticia.
- Pues sí. Ella está en Nueva York ahora, sigue sin rumbo pero al menos intento que se sienta acompañada. A veces no sé qué decir para que esté feliz.
- Será cuestión de tiempo Santana. Pobre niña... Cuídala.
- La amo mamá.- nunca se había sentado con su madre a expresar las cosas que sentía. -En verdad creo que no habrá otra mujer que me haga tan feliz como ella. Me hace mejor persona.
- Y te da una terrible cara de boba.- bromeó.
- También.- rió ella. -¿Crees que lograré hacerla feliz?
- Claro que sí pequeña. El amor es suficiente. Ahora cuéntame, ¿Cómo te está yendo?
- Increíble. Soy muy feliz en la ciudad, porque tengo todo lo que siempre quise. Estoy bien encaminada a lo que quiero para mi futuro.
- Estamos muy orgullosos de ti, ¿lo sabes?
- Sí mamá.- su sonrisa expresaba todo la admiración que sentía por su madre.
En ese momento la puerta se abrió y el padre de Santana la observó como si la viera después de muchos años.
- ¡Papá!- la morena se lanzó a sus brazos y se colgó de su cuello como cuando era niña.
- Hola mi pequeña.- él tenía una cierta debilidad por su hija. Estaba tan emocionado que la levantó del suelo y la abrazó muy fuerte. -No tienes una idea de lo mucho que te extrañé.- la soltó y ella lo miraba sonriente.
- Yo también papá.- su madre estaba allí y los abrazó.
Brittany observaba todo desde el final de la escalera. Pensó que era el cuadro más hermoso que podía existir, dos padres, con su única hija, ese profundo y honesto amor. Admiración uno por el otro. Ella deseaba sentir eso, deseaba que su madre estuviera ahí, extrañaba sus abrazos y la calidez y tranquilidad que transmitían sus ojos. Derramó unas lágrimas y se fue de nuevo a la habitación.
- Iré a ver a Brittany.- dijo Santana soltándose de sus abrazos.
- ¿Brittany está aquí?- su padre estaba muy sorprendido.
- Si. Mamá te explicará. Ya regreso.- la morena subió las escaleras y entró a su habitación. Vio a Brittany en la cama, con sus ojos perdidos en algún rincón del techo, se sentó a su lado y acarició su cabeza.- ¿Cómo estás?
- Me duele un poco la cabeza. No sé qué pasó.
- Debe de ser por el viaje. Quizás estás algo descompuesta. ¿Quieres comer algo?
- No, gracias. Estaré bien, sólo dame un rato.
- Está bien.- la rodeó con sus brazos y la besó.
- Quiero aclarar que cuando recupere mis fuerzas hablaremos sobre lo que te pasa a ti.
- No me pasa nada.
- Sólo digo.- se giró y quedó de espaldas a ellas, aún rodeada por sus abrazos.
- Te amo tanto, ¿lo sabes?
- Es bueno volver a escucharlo.
Ambas se quedaron ahí, mirando hacia el lugar donde estaban las fotos. Había muchos recuerdos, capturados en divertidas y tiernas fotografías. Brittany estaba en la mayoría de ellas. También estaban sus recuerdos de la preparatoria y cuando fueron animadoras. Brittany sonrió al ver una fotografía donde ella y Santana eran unas niñas y estaban tomadas por los meñiques. La morena sólo la observó hacerlo y sonrió porque estaban allí, juntas otra vez. La abrazó más fuerte y dejó un suave beso en su mejilla. El cansancio las venció y lograron dormir unas horas.
CAPITULO 11.
Eran las 11 de la mañana cuando Santana salió a la escuela de baile. Tenía una hora hasta que las clases de Brittany terminaran. Cuando llegó allí, la dejaron entrar y la dirigieron hacia el salón donde la rubia y una mujer mucho mayor, estaban dando su clase. La rubia estaba rodeada de niñas a quien les enseñaba los pasos más lindos con mucha paciencia. Se veía tan feliz y tierna que Santana sólo pudo sonreír y observarla desde la puerta.
El número final del día consistía en una bonita y emotiva representación del Nacimiento. La morena estaba encantada, feliz de estar allí. Sabía que Brittany era una gran bailarina, pero no sabía cuánta belleza había en el baile, y más aún, la belleza que había cuando se hace lo que uno ama.
Para despedir a las niñas, Brittany hablaba con sus padres, les regalaba a todas un tierno y cálido abrazo y les deseaba una feliz navidad. Lizzie fue quien la abrazó con mas fuerzas, le dió un beso y se fue con su padre.
Se notaba que estaba agotada pero su sonrisa seguía intacta.
Se acercó a ella con su mirada dulce y alegre.
- ¿Te gustó?- le preguntó a la morena y dejó un suave beso en sus labios.
- Fue muy lindo. Te felicito.- sonreía casi tanto como ella.
- En realidad sólo ayudo, Julia hace la mayor parte porque no estoy capacitada aún.- se sentó en el piso y Santana la acompañó.
- Sí que lo estás Britt. La Universidad reforzará lo que sabes desde tu nacimiento nada más. La pasión, el talento, la vocación... Eso es tuyo.
- Gracias.- se apoyó en su hombro con los ojos cerrados y la tomó de la mano.
- Debemos irnos.
- Sólo espera un momento.- abrió sus ojos y miró el espejo que había en frente. -Mira. En este espejo me veo cada vez que hago lo que más amo, aquí disfruto cada minuto, me esfuerzo para ser la mejor, para lograr los más perfectos pasos de baile. Aquí soy tan feliz y estoy casi segura que sin dudas amo las danzas. Ahora estás aquí, y sólo nos veo a nosotras. ¿Crees que algún día este espejo mostrará a nuestra hija llegando de la mano contigo y yo esperándola para enseñarle lo que hago?
- Creo que eso será muy lindo.- Santana sonreía. - ¿Sabes? Por primera vez en mi vida no tengo miedo de imaginar mi futuro, de imaginar a mis hijas corriendo por este salón mientras yo las observo desde lejos y tú intentas enseñarles lo mas lindo del baile.
- Lo haremos posible Santana...- buscó sus ojos y sonrió. -Porque te amo.
- Yo te amo a ti.- la besó dulcemente y luego se separó de ella para abrazarla. -Debemos irnos preciosa, Rachel es intolerable cuando llegamos tarde al almuerzo.
Brittany buscó sus cosas, se puso un abrigo y salieron hasta el apartamento de Santana, donde Rachel y Kurt esperaban con el almuerzo listo. Tuvieron el suficiente tiempo para almorzar, ducharse y preparar el bolso de Santana que seguía sin llenarse por completo. Luego partieron rumbo a Lima.
Santana estuvo algo inquieta todo el camino, y Brittany notó que algo le preocupaba, sin embargo no se lo preguntó. Cuando por fin llegaron, decidieron caminar hasta la casa de Santana y recorrer de nuevo todos esos lugares que habían frecuentado en su adolescencia.
Allí estaban, paradas frente a la casa más linda del lugar, con sus bolsos listos y sus manos entrelazadas. Les tomó un tiempo decidirse a llamar a la puerta, pero fue Brittany quien tomó la iniciativa.
La madre de Santana abrió la puerta y se abalanzó contra ellas.
- ¡Mis niñas!- les decía con lágrimas en sus ojos y haciendo más presión sobre ellas.
- Ya mamá...- Santana se separó de ella pero sonreía.
No esperaron invitación y entraron a la casa.
- No sabía que venías Brittany.- dijo la mujer sorprendida.
- Su hija es muy cabeza dura y no quiso avisarle.- le lanzó una mirada a Santana quien reía.
- A mamá no le molesta.- la morena estaba muy segura de eso.
- Claro que no, eres bienvenida siempre. Suban a dejar sus cosas chicas, y luego bajen porque me parece que deben contarme algo.- miró sus manos entrelazadas y sonrió. Brittany se sonrojó.- Vamos, Britt. No me digas que ahora tienes vergüenza.- definitivamente ella era mamá de Santana. La morena sólo reía.
- ¿Y papá?
- Se fue al supermercado, vendrá luego.
Las chicas subieron a dejar su equipaje en el cuarto de Santana. Todo estaba igual, no habían hecho ningún cambio desde que ella se fue. Las fotos permanecían sobre el escritorio y algunos libros también. La rubia miró a su novia sentarse en la cama y observar con nostalgia todo a su alrededor.
- ¿Estás bien?- le preguntó y se arrodilló junto a ella.
- Sí, solo estoy nerviosa. No es fácil volver a casa.
- ¿La gran Santana Lopez está nerviosa?- con su dedo índice golpeó suave la nariz de la morena, quien sólo sonrió leve y se lanzó a sus brazos con algunas lágrimas en sus ojos.
-Ey, ey... ¿Qué sucede?- Brittany no entendía por qué lloraba.
- Sólo abrázame.- se aferró con más fuerza y luego secó sus lágrimas. - Voy a estar bien. Siempre soy muy fuerte y no soporto que me vean vulnerable, necesito llorar a veces. Pero no voy a llorar más, debemos ir con mamá.
- No te liberarás de esta charla.- le dió un beso y caminó con ella hasta la sala.
- ¡Mamá!- Santana gritó para asustarla y rió lo más fuerte que pudo.
- Siempre tan cariñosa.- le dijo ella y la golpeó. -Vengan, siéntense.- les señaló el sofá grande y ella se sentó al frente, con la mirada fija. -Evitemos vueltas y comentarios estúpidos, ¿cómo fue que están juntas otra vez?- Brittany estaba sonrojada como nunca, mientras Santana sonreía ante eso.
- Simplemente pasó.- respondió la morena sin quitar la vista a su madre. -Britt llegó a Nueva York, nos juntamos y hablamos.
- Seguro Santana...- su tono era sarcástico. -Seguro hablaron, claro.
- Mamá, Brittany está avergonzada y tú no ayudas.
- Mira Brittany, me conoces de años, sabes como soy. Y sobre todo, yo sé cómo son ustedes.- alzó una ceja y ambas sonrieron.
- El punto es que sólo pasó.- Santana ya estaba algo irritada.
- Son tan lindas...- las miraba con admiración y cariño. -Tu padre estará muy contento cuando las vea aquí.
- Disculpen.. - Dijo tímidamente la rubia tomando su cabeza. -No estoy muy bien, subiré a la cama un rato.
- ¿Sucede algo Britt?- Santana la miró y esperó una respuesta. -Estabas bien hace un rato.
- Me dió un fuerte dolor en la cabeza y me siento mareada por alguna razón.
- Lo bueno es que no estás embarazada.- bromeó la madre de Santana.
- ¡Mamá!- ahora era la morena quien estaba ruborizada. Brittany rió. -Ven, te acompaño a mi cuarto.
- No, puedo ir sola. Tú y tu mamá tienen mucho de qué hablar.- se levantó y subió las escaleras, dejándolas solas.
- La noto diferente. Tiene algo.
- Quizás sea porque su mamá murió y que su padre la abandonó. ¿No lo sabías?
- No, claro que no.- estaba muy conmocionada con la noticia.
- Pues sí. Ella está en Nueva York ahora, sigue sin rumbo pero al menos intento que se sienta acompañada. A veces no sé qué decir para que esté feliz.
- Será cuestión de tiempo Santana. Pobre niña... Cuídala.
- La amo mamá.- nunca se había sentado con su madre a expresar las cosas que sentía. -En verdad creo que no habrá otra mujer que me haga tan feliz como ella. Me hace mejor persona.
- Y te da una terrible cara de boba.- bromeó.
- También.- rió ella. -¿Crees que lograré hacerla feliz?
- Claro que sí pequeña. El amor es suficiente. Ahora cuéntame, ¿Cómo te está yendo?
- Increíble. Soy muy feliz en la ciudad, porque tengo todo lo que siempre quise. Estoy bien encaminada a lo que quiero para mi futuro.
- Estamos muy orgullosos de ti, ¿lo sabes?
- Sí mamá.- su sonrisa expresaba todo la admiración que sentía por su madre.
En ese momento la puerta se abrió y el padre de Santana la observó como si la viera después de muchos años.
- ¡Papá!- la morena se lanzó a sus brazos y se colgó de su cuello como cuando era niña.
- Hola mi pequeña.- él tenía una cierta debilidad por su hija. Estaba tan emocionado que la levantó del suelo y la abrazó muy fuerte. -No tienes una idea de lo mucho que te extrañé.- la soltó y ella lo miraba sonriente.
- Yo también papá.- su madre estaba allí y los abrazó.
Brittany observaba todo desde el final de la escalera. Pensó que era el cuadro más hermoso que podía existir, dos padres, con su única hija, ese profundo y honesto amor. Admiración uno por el otro. Ella deseaba sentir eso, deseaba que su madre estuviera ahí, extrañaba sus abrazos y la calidez y tranquilidad que transmitían sus ojos. Derramó unas lágrimas y se fue de nuevo a la habitación.
- Iré a ver a Brittany.- dijo Santana soltándose de sus abrazos.
- ¿Brittany está aquí?- su padre estaba muy sorprendido.
- Si. Mamá te explicará. Ya regreso.- la morena subió las escaleras y entró a su habitación. Vio a Brittany en la cama, con sus ojos perdidos en algún rincón del techo, se sentó a su lado y acarició su cabeza.- ¿Cómo estás?
- Me duele un poco la cabeza. No sé qué pasó.
- Debe de ser por el viaje. Quizás estás algo descompuesta. ¿Quieres comer algo?
- No, gracias. Estaré bien, sólo dame un rato.
- Está bien.- la rodeó con sus brazos y la besó.
- Quiero aclarar que cuando recupere mis fuerzas hablaremos sobre lo que te pasa a ti.
- No me pasa nada.
- Sólo digo.- se giró y quedó de espaldas a ellas, aún rodeada por sus abrazos.
- Te amo tanto, ¿lo sabes?
- Es bueno volver a escucharlo.
Ambas se quedaron ahí, mirando hacia el lugar donde estaban las fotos. Había muchos recuerdos, capturados en divertidas y tiernas fotografías. Brittany estaba en la mayoría de ellas. También estaban sus recuerdos de la preparatoria y cuando fueron animadoras. Brittany sonrió al ver una fotografía donde ella y Santana eran unas niñas y estaban tomadas por los meñiques. La morena sólo la observó hacerlo y sonrió porque estaban allí, juntas otra vez. La abrazó más fuerte y dejó un suave beso en su mejilla. El cansancio las venció y lograron dormir unas horas.
Anita-P******* - Mensajes : 454
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Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Durmieron alrededor de tres horas. Santana fue quien despertó y se dió cuenta de la hora, miró a Brittany dormir como una niña y sonrió, se veía muy tierna con una mano debajo de su mejilla. Le dió suaves besos en su cuello y la rubia sonrió.
- Dulces besos de chicas...- murmuró y Santana rió.
- ¿Cómo te sientes?
- Mucho mejor, el dolor de cabeza y el mareo pasaron. Me siento un poco debilitada nada más.
- Puedes quedarte aquí si quieres.
- No. Iré a molestar a tu padre, sé que me extraña.- logró levantarse y miró a Santana con cariño.
- ¿Por qué me miras así? Estoy algo incómoda ya.
- Gracias.- dijo con una gran sonrisa y se inclinó para besarla. -Vamos abajo.- la tomó de la mano y se fueron a la sala, donde el padre de Santana, Roberto, estaba viendo televisión.
-Yo sé que usted estaba extrañando demasiado a la pequeña rubia traviesa.- le dijo Brittany y fue a abrazarlo. Tenía mucha más confianza con él y siempre había sido como un tío para ella.
- ¡Ey! Tienes razón. ¿Cómo has estado? Ya no eres ninguna pequeña.- su tono dulce no era algo que Santana había heredado de él.
- Crecí. Todos lo hacemos.- su sonrisa estaba firme, como si la invadiera una felicidad inexplicable.
- Pues eso es cierto, me alegra que estés aquí. Hace mucho no venías.- Santana se sentía culpable por eso.
- Voy a la cocina con mamá.- dijo y se marchó.
- Estuve dando vueltas por ahí.
- Supe que estuviste en el MIT, eso es increíble Brittany.
- Sí lo fue pero ya no estoy más allí.
- ¿Pasó algo?
- En realidad jamás fue lo mío, así que ahora estoy probando suerte en el baile.
- ¿En Nueva York?
- Sí.
- Con razón estás otra vez con Santana.- parecía que a nadie le daba vergüenza hablar sobre su relación.
- Santana fue muy dulce conmigo, estamos por darnos otra oportunidad.
- Mi hija no dejaba de preguntar por ti cada vez que venía de visita.- Brittany se sonrojó. -Lo siento, te incomodé.
- No importa, me sonrojo por cualquier cosa.- rió ella.
- Supe lo de tu madre.- tocó el tema con cuidado. -Lo siento demasiado.
- Yo también... Fue duro.
- ¿Por qué nunca llamaste? Sabes que aquí todos te queremos.
- Nunca lo dudé, sólo quería estar sola. El paso del tiempo lo arreglará.
- Es bueno que estés aquí para Navidad.- la abrazó y le sonrió. Tenía la misma sonrisa de Santana, y esos ojos profundos. Brittany se sentía otra vez en su casa.
- Sé que me extrañaron.- hubo un silencio mientras Roberto cambiaba la televisión. -¿Puedo hacerle una pregunta?- Brittany se animó a preguntar.
- Claro.
- Pero tiene que ser muy cuidadoso, Santana no debe saberlo.
- Mis labios están sellados. Pregunta.
- Su hija consiguió que me dieran tres becas en muy buenas escuelas de baile.
- Eso es muy bueno.
- Sí. Pero tengo un problema y no tengo con quién hablar sobre eso. Una de ellas es en Nueva York, muy cerca de mi departamento. Es una buena escuela, tiene un gran programa de estudios pero no es la que más me llama la atención.
- ¿Y las otras?
- Hay una, es increíble. Pero es en California.
- No veo el problema.
- No quiero dejar a Santana otra vez.- ella sonó sincera y sin titubeos.
- Ah... Eso lo explica. Mira, Brittany, ella lo entenderá y estarán bien. Sé que se aman desde pequeñas, cuando jugaban en el patio y en la casa de madera que construimos todos juntos.- Brittany sonrió nostálgica. -Ustedes superarán la distancia y cuando deban estar juntas el camino las unirá. Debes elegir lo que te haga realmente feliz, y lo que ayude a tu vida personal.
- Gracias. Me sirvió demasiado.
- ¿En serio? ¿O lo dices por cortesía?- bromeó.
- Bueno quizás fue por cortesía y para que no me corriera de su casa.- jugó ella también. -No, en serio, muchas gracias. Fue de gran ayuda.- Santana entró a la sala con su madre.
- ¿De qué hablaban?- se sentó al lado de Brittany y tomó su mano.
- De lo aburrida que eres.- bromeó su padre.
- Igual a ti.- le respondió ella.
- Ya, dejen de pelear.- era su madre poniendo orden. -Vamos a cenar en un rato, quiero tranquilidad.- Brittany rió. -¿Y tú de qué te ríes?- usó el mismo tono que había utilizado con su hija y su marido.
- Nada ha cambiado en esta casa.- respondió ella y se apoyó en el hombro de Santana.
Fue una cena tranquila, llena de risas y bromas por parte de Roberto y su hija. Brittany no dejaba de mirarlos y sentirse en casa. Santana estaba sentada a su lado y cada tanto tomaba su mano debajo de la mesa y sonreía. Ella también estaba feliz, y muy agradecida de estar en casa.
- Propongo un brindis.- Roberto se puso de pie.
- ¿Por qué?- Santana sonreía.
- Porque están en casa, felices, y por el amor...
- Que cursi. - la morena sólo quería molestarlo.
- ¡Santana!- Brittany la golpeó.
- Perdón mi amor.- dijo arrepentida ella.
- Ay que cursi.- la imitó su padre.
- Ya Roberto, sigue con el brindis.- siempre su esposa poniendo orden.
- En fin, ¡salud familia!- levantaron las copas y brindaron por estar todos ahí, simplemente eso.
En cuanto terminaron, Brittany le pidió los padres de Santana que se fueran a dormir tranquilos ya que ella y la morena se encargarían de la cocina. Así lo hicieron, subieron a su cuarto y las chicas quedaron lavando los platos.
Era el último vaso que Santana lavó y Brittany secó y guardó.
- Terminamos.- dijo la rubia y se apoyó sobre la mesada.
- ¿Estás bien?- Santana se acercó demasiado a ella y la abrazó por la cintura.
- Sí, estoy muy bien.- ella también la abrazó y besó su cuello.
- ¿Quieres ir a dormir?
- No aún, quiero ir al patio. Solíamos pasar horas en la mecedora.
- Ven, aún sigue allí.- Santana la tomó de la mano y la dirigió al patio trasero. Se sentaron y se abrazaron con mucha fuerza.
- ¿Puedes decirme qué te preocupaba al llegar?- Brittany no se daba por vencida.
- Cosas que simplemente no valen la pena.- Ella quería decirle que Quinn estaría en Nueva York para el festejo de año nuevo, y quería contarle sobre lo sucedido en la boda de Will y Emma, pero pensaba que se lo tomaría mal y prefirió no hacerlo.
- Nada que te preocupe es poco importante para mí, nada.
- Lo sé preciosa, pero ya me pasó. Estoy feliz por estar aquí, con mi familia y contigo. No hay nada que me preocupe ahora.
- ¿Segura? Sabes que puedes decirme cualquier cosa.
- Lo sé.- estaba muy frío a esa hora y ella tomó una frazada que siempre colgaban allí y cubrió a Brittany.
- ¿A ti no te hace frío?
- No, yo tengo sangre caliente.- bromeó aunque algo de frío sí sentía. -Aparte sólo será un rato, ya iremos a dormir.- Brittany se acomodó sobre su pecho y miró al cielo como cada noche. -Ella está mirándote, y quiere matarme porque tengo a su bebé entre mis brazos.- la rubia sonrió.
- Algún día estará orgullosa de mí.
- Ya debe estarlo Britt...- se inclinó y la besó dulcemente.
- Quiero quedarme un rato más aquí. Puedo ver las estrellas con más claridad que en Nueva York y este silencio me tranquiliza.
- Sólo un rato, ¿si? ya hace mucho frío.
- Está bien.- la abrazó fuertemente y siguió observando las estrellas que brillaban mucho más que en la Gran Ciudad. Pensó en decirle a Santana que había estado pensando sobre la Universidad de California, pero prefirió dejarlo para otro momento.
En Nueva York, Rachel no podía dormir ya que Kurt había salido y se sentía muy sola. No quería admitirlo pero extrañaba a Santana, y hablar con ella cuando estaba aburrida. Dió unas cuantas vueltas en la cama y no lo consiguió. En otra ocasión, habría llamado a Finn sin importar la hora, porque sabia que él iba a escucharla sin problemas. Giró otra vez, y fijó su mirada en una foto que colgaba de su pared: Finn rodeándola con sus brazos en el baile de graduación.
- Quisiera volver a ese momento y detenerlo ahí para siempre.- le dijo y sintió un profundo dolor en su corazón. -Quiero salir adelante pero cada día te extraño más, quisiera poder regresar en el tiempo y decirte que te amo y que jamás dejé de hacerlo. Me haces tanta falta Finn...- sus lágrimas salieron sin control de sus ojos.
Unos segundos después sintió la mano de Kurt sobre su hombro, y agradeció que él no dijera nada, que sólo le diera su apoyo y su comprensión.
- Lo extraño Kurt, lo necesito.
- Debes salir adelante Rachel, debes poder hacerlo.- él también tenía lágrimas en su rostro pero intentaba disimularlas. -Finn está con nosotros, y estará aquí mientras lo lleves en tu corazón. Pero debes ser fuerte.
- Lo intento cada día, pero acostarme a dormir es siempre la misma tortura.
- Debes dormir Rach, me quedaré aquí hasta que lo hagas.- se sentó a su lado y tomó su mano. -Vamos, duerme. Yo estaré aquí.
Él se quedó a su lado hasta que la castaña quedó completamente dormida. Volteó a ver el cuadro y le regaló una triste sonrisa.
- Cuídala hermano.- murmuró y se fue a su cuarto sin hacer ruidos para evitar despertarla.
La nieve había empezado a caer en Lima, era un poco más de la medianoche cuando Santana notó que Brittany estaba dormida sobre su pecho y no había dejado de abrazarla. Sonrió y dejó un beso en su cabeza.
- Pequeña...- le dijo suavemente. -Es tarde, debemos subir.- observó los gestos que hacía antes de abrir sus ojos y sintió muchas ganas de cargarla hasta su cuarto como a una niña, sin embargo no podían levantarse de la mecedora en la posición en la que se encontraban.
- Hace mucho frío.- se quejó.
- Sí, está nevando. Ven, vamos arriba.- la apartó un poco y se levantó, luego la ayudó a ella.
Subieron las escaleras y entraron al cuarto de Santana.
- Voy a bañarme, no me tardaré. Duerme si quieres.- la morena la besó y Brittany se acomodó para dormir.
-Buenas noches.
- Te amo.- usó su tono dulce para decirlo.
- Yo también Britt.- entró al baño y dejó a la rubia sola por unos minutos.
Cuando terminó, secó su cabello y se colocó su pijama. Observó a su novia dormir, con la mano debajo de su mejilla. Pensó que tenerla allí era un privilegio, y sonrió levemente. Se acomodó a su lado, la cubrió bien y la abrazó para darle más calor ya que estaba aún más frío. Besó su mejilla y cerró sus ojos para dormir ella también.
La víspera de Navidad sería muy movida y debía descansar.
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Que penita que daba brittany, ver a santana con su familia tan feliz pobrecita :'(
monicagleek- ---
- Mensajes : 523
Fecha de inscripción : 25/11/2013
Edad : 27
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Oh cielos....! Ojala y no pase nada grave con el deliz de Santana, y que si Britt llega a enterarse no se vaya a California por arranque....!
Me gustaron mucho los capitulos!! :)
Me gustaron mucho los capitulos!! :)
Pao Up- ---
- Mensajes : 515
Fecha de inscripción : 22/01/2014
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
no creo que britt deje a santana por algo que paso no estando juntas y si britt va a california san lo entendera!
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
Se aproxima el drama... lo presiento! D:
...
Excelente capítulo :)
...
Excelente capítulo :)
Anddy Rivera Morris******* - Mensajes : 407
Fecha de inscripción : 16/05/2013
Edad : 27
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
uuu britt se va mmm que complicado y ya san dile la verdad sobre quinn y tu!! mejor ahora a que se entere de peor manera y tu britt has lo mismo con la universidad, ssiii faverry jaja besos!
tatymm-*- - Mensajes : 2406
Fecha de inscripción : 20/08/2012
Edad : 34
Re: FF Brittana- ¿Aún la amas? Final! 06/08
monicagleek escribió:Que penita que daba brittany, ver a santana con su familia tan feliz pobrecita :'(
Pobre Britt, no? Pero trataremos de darle alegrías en estos días en Lima. Saludoss!
Anita-P******* - Mensajes : 454
Fecha de inscripción : 27/01/2014
Edad : 28
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