FanFic BRITTANA "Sweet Hope": Sinopsis + Prólogo + Epílogo & Capítulo Extra (24 de Octubre 2015)

Hola……….buenas noches a todas/os……….uyyy, me invade una infinidad de emociones porque llegamos al final de la historia (apenas si queda el capítulo extra…..espero les guste el capítulo de hoy junto al epílogo



Mantengo mi posición sobre el episodio final de la serie, este final fue bueno, pero no colmo del todo mi expectativas para el cierre de lo que fue y será una gran serie: GLEE……lo que lamento es que no se haya dado a conocer el futuro o líneas de dialogo a otros personajes importantes (creo yo) para saber de ellos, por ejemplo: Santana, Brittany, Quinn, Puck o Mike, etc. Demás está decir que por ahora supongo que o mientras creo que voy a distraerme con los fic’s (benditas adaptaciones o historias originales por hacer que me distraiga un poco de la realidad jejejeje)……..








*Para quienes no hayan leído las historias anteriores, estas son las direcciones:







http://www.gleeklatino.com/t20759p300-resueltofanfic-brittana-5ta-avenida-neoyorkina-2da-parte-primero-viene-el-amorluego-viene-el-matrimonio-epilogo
(5ta Avenida Neoyorkina)






http://www.gleeklatino.com/t21732p330-resueltofanfic-brittana-play-with-me-epilogo
(Play with Me)






http://www.gleeklatino.com/t22139p255-fanfic-brittana-safe-with-me-capitulo-bonus-track-halloween-con-el-clan-familiar-de-los-pierce-31-de-agosto
(Safe with Me)






http://www.gleeklatino.com/t22314p90-resueltofanfic-brittana-beautiful-stranger-cap-16-final-12-de-noviembre
(Beutiful stranger)







http://www.gleeklatino.com/t22405p135-fanfic-brittana-lick-sinopsiscapitulo-22-final-09-de-enero#536524
(Lick)




http://www.gleeklatino.com/t22471p135-resueltofanfic-brittana-breathe-with-me-epilogo-06-de-abril-2015#540911
(Breathe With Me)




http://www.gleeklatino.com/t22548-fanfic-brittana-the-mighty-storm-2da-parte-wethering-the-storm-sinopsis-epilogo-23-de-junio-2015
(“The Mighty Storm” / 2da Parte "Wethering the Storm)





http://www.gleeklatino.com/t22579p165-resueltofanfic-brittana-sweet-home-2da-parte-sinopsis-prologo-capitulos-37-epilogo-capitulo-extra-07-de-septiembre-2015
(Sweet Home: 1ra y 2da parte)







*Actualización: día JUEVES…….si pudiera actualizar antes se los haré saber (pero si no, tengan la seguridad que lo haré en el día señalado)






Sin más que decir por el momento……….no las aburro más, disfruten del capítulo






Me encantará recibir sus críticas, comentarios, sugerencias, etc.………….así que a escribir.







Y la canción del día es……….













https://www.youtube.com/watch?v=b3ZdTZRAgAI

NOTA DE ACLARACIÓN PERMANENTE E IMPORTANTE.- El presente trabajo es una adaptación a mi pareja favorita de Glee (Brittana), aclaro que conserve el título de la historia porque me pareció lo más conveniente, además de que soy malísima para ponerle nombre a algo o las cosas jejejeje……..La historia original obviamente no me pertenece …………esta obra se titula “Sweet Hope” y es de autoría de Tillie Cole (todos los derechos reservados para esta estupenda escritora, así como a todos los involucrados en la publicación de su trabajo) (así que a esta distinguida escritora mis más grandes felicitaciones y admiración por la forma y estilo literario que realiza); la traducción, corrección y diseño de dicha obra fue realizada por la fabulosa comunidad virtual SIMPLY BOOKS (gracias a todos quienes hacen posible que el resto de las personas podamos disfrutar de tantas maravillosas obras) (la obra original traducida la podrán encontrar en distintos blogs).








Aclaro que si bien en la obra, los lugares recurrentes que se mencionan son Seattle y Alabama-Tusscalosa fundamentalmente; tomando en cuenta las características y sitios donde se desarrolló GLEE desde su primera hasta la sexta temporada …….decidí que los lugares donde se desarrollará la historia sea Seattle y Lima-Ohio (Espero les parezcan estas alternativas). Sobre el resto de los personajes, considerando las características de algunos de la obra original y en correlación con los de Glee puse a quienes se ajustaban a estas personalidades, aunque en algunos casos me deje llevar por la emoción del momento y puse a quienes creí conveniente jejejeje.











Algo más……enfatizo nuevamente que esta historia se compone 1 solo libro que consta de: sinopsis + prólogo + 22 capítulos + epílogo + capítulo extra. Este libro es narrado desde la perspectiva de Brittany y Santana (es decir, algunos capítulos los narrado por una, y otros capítulos por la otra)………Espero disfruten de esta historia






Ahora……….solo queda esperar sus opiniones.

Capítulo 22
Brittany

- La señorita López recibió un disparo directo en el estómago. Perdió mucha sangre. Cuando fue ingresada tuvimos que operar inmediatamente. Nos la arreglamos para reparar la herida y retiramos con éxito la bala. Le hemos hecho una transfusión de sangre y ahora está estable.

El doctor tenía que dejar que viéramos a Santana. Mis nervios estaban destrozados. Me sentía asqueada mientras el doctor explicaba la extensión de sus heridas y cómo pudo haber muerto si la policía no la hubiera encontrado cuando lo hizo.

—Dennos unos minutos para llevarla a su nueva habitación y estará lista para recibir visitas, pero sólo dos a la vez.

El doctor dejó la habitación. Cuando intenté respirar, un oficial de policía entró.

—¿Son familiares de Santana López? —preguntó y miró a Jake.

—Sí, señor —dijo Jake levantándose—. ¿Sabe que le sucedió?

El oficial de policía cerró su libreta y asintió.

—¿Conocen al señor Remo Marino?

Cerré mis ojos sintiendo que mi mundo se derrumbaba. Estaba paralizada, totalmente paralizada sabiendo que pude haber perdido al amor de mi vida. El amor de mi vida quien merecía esta nueva vida que había —literalmente— esculpida a sí misma.

Remo… Remo Marino. Ese bastardo casi me arranca el corazón.

—Sí, conozco a Remo —dijo Jake, el tono de su voz cayendo hasta temperaturas árticas.

El oficial levantó su ceja.

—¿Un antiguo miembro de la pandilla?

Jake miró al oficial, pero no dijo nada. El oficial suspiró y asintió.

—Está bien, lo entiendo.

—¿Qué le sucedió a Remo? —preguntó Violeta, luciendo como si se hubiera sorprendido.

El oficial se pasó una mano por el rostro.

—El señor Marino era buscado por cinco cargos relacionados con drogas y dos homicidios. Ha estado huyendo durante años. Cruzó las fronteras estatales en un vehículo robado y sólo era cuestión de tiempo antes de que lo atrapáramos… desafortunadamente se las arregló para atacar a la señorita López antes de que descubriéramos su paradero. Otro auto que pasaba vio el incidente y lo denunció.

—¿Y? —preguntó Quinn—. ¿Dónde está el idiota ahora?

—El señor Marino abrió fuego contra los oficiales. No tenía intención de ir a prisión. Fue asesinado a tiros en el escenario del crimen.

El silencio que siguió a las noticias del oficial colgó pesadamente en la habitación. Pero no pude evitar estar agradecida de que Remo hubiera muerto… eso significaba… eso significaba que Santana finalmente era libre.

Finalmente era libre de su pasado.

El oficial abrió la puerta y dijo:

—Lamento que su hermana fuera herida. Parece que cambió su vida. Espero que pueda recuperarse.

Cuando la puerta se cerró, Jake se desplomó contra la pared, deslizándose hasta el suelo. Cubrió su rostro con ambas manos.

—Cristo… —dijo con una voz consumida que hizo que nuevas lágrimas brotaran de mis ojos—. Ese maldito idiota de Heighter. Si no estuviera muerto, lo mataría yo mismo.

Jake levantó su cabeza hacia mí.

—¿Brittany?

Me encontré con su mirada.

—¿Alessia? —interrogó. Sabía lo que estaba preguntando. Quería saber si era un peligro para sus hermanas.

—Cadena perpetua. Tres cargos por homicidio —contesté, y vi una tonelada de tensión abandonar sus músculos—. Nunca va a salir.

Justo entonces, el doctor entró por la puerta.

—La señorita López puede tener visitantes ahora.

Inmediatamente me puse de pie, como también lo hicieron Violeta y Jake. El doctor nos miró a los tres y sus hombros se hundieron.

—Nadie más que ustedes tres, ¿está bien?

Lo seguimos por la puerta y con cada paso que daba, mi corazón latía más y más rápido. Quería ver a Santana tan desesperadamente que casi eché a correr. Claramente sintiendo mi ansiedad, Violeta se estiró y tomó mi mano. Sorprendida, me encontré con sus ojos grises y vi el miedo y la tristeza en su profundidad. Estaba tan asustada como yo de entrar en esa habitación.

El doctor nos guió a una habitación en la esquina del pasillo. Con el pecho oprimido y sintiéndome entumecida, lo seguí a través de la puerta, cuando inmediatamente me congelé en mi paso, como todos nosotros, la mano de Violeta apretando fuertemente la mía.

Santana…

Como una presa rompiéndose, las lágrimas cayeron por mi rostro cuando vi a mi amor roto en una cama de hospital. Los cables estaban entrando y saliendo de su piel, y la sangre trasfundida por su brazo.

Sus ojos se estaban cerrados, sus labios hinchados y amoratados y su largo cabello estaba echado hacia atrás de su rostro.

Incluso así era hermosa… mi oscura y torturada anti-heroína… la mujer que siempre estuve destinada a adorar.

Mientras la espalda de Jake se apretaba ante la visión de su hermana mayor, también sostuve su mano. Los ojos de Jake se cerraron brevemente ante mi toque pero se abrieron y mantuvo su atención en Santana. Ninguno podía mirar hacia otro lado… habíamos estado tan cerca de perderla.

—Ha estado despertando más y más, así que podrán hablar con ella pronto.

En alguna parte de mi cerebro, registré al doctor irse, dejándonos solos, pero mis ojos se encontraban pegados a la otra mitad de mi alma yaciendo en esa cama.

—¿Cómo va a perdonarnos alguna vez, Jake? —dijo Violeta a través de su garganta apretada—. La tratamos como una escoria, nunca le dimos una maldita oportunidad de explicar nada… y mira lo que había estado haciendo… mira lo que hizo por nosotros y nunca supimos. Casi murió en esa prisión tratando de protegernos, y lo ha hecho de nuevo… nos ha protegido de nuevo…

La voz de Violeta se cortó.

- Siempre nos ha estado protegiendo, ¿no es así, Jake? Desde que éramos niños, siempre ha tratado de mantenernos cerca… y le dimos la espalda cuando más nos necesitaba…

Después de la confesión de Violeta, el goteo de la intravenosa sonaba como el choque de truenos mientras caían dentro del líquido al mezclase en el dispensador.

Abrí mi boca para decirle que todo estaría bien, cuando escuchamos:

—No hay… nada… que… lamentar…

El tiempo pareció detenerse cuando el timbre áspero de la voz ronca de Santana sonó a través de la tristeza de la habitación. Al unísono, saltamos hacia adelante. Jake y Violeta corrieron hacia un lado de su cama, y yo hacia el otro.

Pasando mi mano a través de la frente de Santana, la observé luchar por tragar y abrir sus ojos. Una lágrima de mi ojo salpicó sobre su mejilla. Utilicé mi pulgar para limpiarla.

Mientras pasé la almohadilla mojada de mi pulgar a lo largo de la línea de su mandíbula, sentí esa deliciosa sensación de un par de oscuros ojos marrones mirándome. Inhalando un fortalecedor aliento, parpadeé y levanté mi mirada para encontrarme con esos hermosos ojos.

Con su labio superior curvándose en una sonrisa enganchadora, Santana abrió sus labios y carraspeó:

—Carina… —dijo con un aliviado suspiro.

El nombre de cariño sonó como una oración contestada para mi alma mientras llegaba a mis oídos. Aspirando mis emociones, le di una sonrisa acuosa.

—Bienvenida de vuelta, mi amor…

—¿Qué… qué? —trató de preguntar.

La callé y sacudí mi cabeza.

—Todo está bien, tú estás bien. —Levanté la mirada hacia Jake y Violeta ansiosamente de pie al otro lado de la cama. Y reaseguré—: Todos estamos bien.

Santana lentamente siguió mi mirada, llevándolo hacia Jake y Violeta.

—Fratelli… —dijo tranquilamente, levantando lentamente su mano.

Jake fue el primero en estirarse por la mano de Santana, su cabeza agachándose hasta que su frente tocó sus dedos.

—Santana… yo lo siento mucho…

—Vai bene —contestó Santana. Luego miró hacia Violeta—. Vio… —dijo con sentimiento. Pude ver los ojos de Santana brillando con lágrimas sin derramarse. Amaba a esa chica hasta la muerte.

Violeta se desplomó sobre una silla como si sus piernas ya no pudieran sostener su peso, luego su cabeza golpeó el colchón, su espalda temblando con la fuerza de sus lágrimas.

—Lo siento, San… Lo siento tanto… —lloró. Jake liberó la mano de Santana.

Santana la posó sobre la cabeza de Violeta.

Violeta levantó la mirada cuando lo hizo y la envolvió con sus dos manos.

—Debimos haber confiado en ti.

Santana cerró sus ojos, después los abrió un segundo después.

—Nunca… les di… mucha razón… para confiarme con sus vidas… lo… entiendo.

Jake sacudió su cabeza.

—Todo lo que hiciste fue protegernos, San… lo entiendo ahora… —Jake limpió sus ojos con la palma de sus manos y preguntó—, esas esculturas, San…¿por qué no nos dijiste…?

—Vergüenza… —contestó apenada—. No lo merecía… —Su cabeza giró en la almohada hacia mí, sus ojos diciéndome sin palabras lo mucho que me amaba—, nada de esto. He sido… injustamente bendecida.

Sintiendo mi corazón agrandarse, me incliné y besé sus labios.

—Estás equivocada.

—Soy una pecadora —dijo Santana.

Pude oír cuanto creía esa aseveración. Podía verlo en su expresión honesta.

—No. —La tranquilicé—. Los pecadores son personas que no reconocen sus errores. Tú lo has hecho, mi amor, los has reconocido y has hecho todo en tu poder para arreglarlos… no eres una pecadora. Eres una redimida.

—Tiene razón, San —dijo Violeta y su aliento se atrapó—. La mamma… estaría muy orgullosa de ti.

—Violeta —susurró Santana.

Jake se sentó junto a Violeta, añadiendo su mano encima de las suyas.

—Estoy tan orgulloso de ti… Tengo el honor de que seas de mi sangre

Aquellas palabras parecieron resonar en Santana, significando mucho para ambos y las lágrimas escaparon de los ojos de Santana. La visión de los tres hermanos López juntos fue mi perdición.

Después de algunos minutos de los hermanos López arreglando las cosas, Violeta dijo repentinamente:

—A partir de ahora sólo cosas buenas para nosotros, ¿de acuerdo?

Santana exhaló y pude ver el orgullo por la demostración de fuerza de Violeta brillando en sus ojos oscuros.

Violeta levantó su mirada y se encontró con los ojos tanto de Jake como de Santana.

—Júrenlo.

Jake envolvió un brazo alrededor del hombro de Violeta, presionando en beso en su cabeza y dijo:

—Lo giuro.

Ambos miraron después a Santana. Santana sonrió a través de sus hinchados labios partidos, una genuina sonrisa completa que no le había visto mostrar antes y susurró:

—Lo giuro.




Pasaron las horas mientras los tres nos manteníamos de vigilia de en la cabecera de Santana. Estaba cansada, entrando y saliendo del sueño, pero nos quedamos allí. Los tres hermanos hablaron sobre el tiempo que Santana estuvo en prisión, Jake renuente a creer que Santana no le hubiera dicho cuanto había sufrido. Pero se las arreglaron para superarlo. Violeta habló de sus miedos de perderlos a ambos, pero admitió que había contenido sus sentimientos durante demasiado tiempo, culpando erróneamente a Santana de todo su dolor.

Se rieron, lloraron y cuando la noche llegó, una paz había sido encontrada. Cuando el doctor entró a decirnos que las horas de visita habían terminado, Jake y Violeta de mala gana se pusieron de pie, pero antes de que pudiera unirme a ellos, Santana agarró mi mano.

—No te vayas —pidió adormilada, y mi corazón se derritió. Miré al doctor y le lancé mi sonrisa más dulce.

—¿Puedo quedarme a pasar la noche? Me necesita. —El doctor suspiró y rogué—: ¿Por favor? Casi… la pierdo…

Viendo compasión en su expresión, dijo:

—Sólo tú. —Jake y Violeta la besaron en la frente y prometieron verla mañana.

Mientras alcanzaban la puerta, pregunté:

—¿Pueden por favor decirle a Rachel y Quinn que los veré mañana?

Jake asintió y me sonrió. Me pasmé ante el poder de esa sonrisa, y lanzando una última mirada hacia su hermana en cama, dijo para que sólo yo pudiera escuchar:

—Cuídala, Britt. Nunca pensé que vería el día, pero esa hermana mía te ama a muerte. Puede que no muestre mucho sus sentimientos, pero no puede esconder lo mucho que te adora.

Levantándome en la punta de mis pies, presioné un beso sobre la mejilla de Jake y susurré:

—Siempre.

Jake se rió. También besé a Violeta antes de cerrar la puerta. Todos excepto las dos habíamos quedado en la habitación.

Mientras me movía hacia la cama, Santana estaba mirando mis zapatos y encontró mis ojos con una sonrisa.

—Adoro esos zapatos —dijo adormilada. Me moví hacia la cama, y justo cuando estaba a punto de sentarme en la silla cercana, Santana sacudió firmemente su cabeza y palmeó débilmente la cama.

Empezó a moverse hacia un lado para hacerme más espacio y brinqué hacia adelante ante la visión de dolor que cubría su rostro.

—¡Santana! —siseé cuando hizo un gesto de agonía y sostuvo la herida en su estómago. Gotas de sudor se formaron sobre su frente cuando se relajó de vuelta en el colchón… un espacio para mi ahora estaba en su lado izquierdo.

—Recuéstate —dijo a través de sus dientes apretados y sacudí mi cabeza.

—¡No! Mira el dolor que sientes.

—Brittany, me dispararon y pude haber muerto. Por favor, Rayos sólo recuéstate… Te necesito.

Me quedé ahí de pie debatiéndome sobre qué hacer, pero cuando vislumbre vulnerabilidad en su mirada, cedí y cuidadosamente me recosté junto a ella.

Mientras apoyaba mi cabeza en su almohada, me estiré y enredé mi mano a través de la suya. Santana apretó mi mano fuertemente y cuando levanté la mirada, pude ver las arrugas de preocupación en su frente.

—Oye —pregunté—. ¿Qué pasa?

Santana se quedó quieta y estaba segura que no me iba a responder. Pero con un jadeo, miró hacia arriba y tiró de mi mano para que quedara bajo su mejilla.

—Anoche, por primera vez en mi vida, estuve muy asustada.

Mi corazón se hundió cuando vi lo mucho que le había costado reconocer eso.

—Amor… —susurré, y con mi otra mano, acaricié su mejilla—. Es entendible. Te dispararon.

Santana se inclinó ante mi toque y besó mi palma.

—No estaba asustada por recibir un disparo, Brittany, estaba tan aterrorizada de que no volver a verte nunca de nuevo.

Mi respiración se atrapó. Me incliné para besarle sus pálidos labios amoratados.

—Santana —lloré—, también estaba muy asustada. Jake y Violeta me dijeron que te habían echado y que habías escapado. Sentí como si mi alma hubiera sido desgarrada. No podía creer que me dejarías así… sin siquiera decir adiós.

—Me iba a ir —dijo tristemente. Su mano apretándose alrededor de la mía—. E iba a llevarte conmigo.

—Santana…

—Pero Remo me siguió. —Santana respiró a través de su nariz como si estuviera reviviendo todo en su cabeza—. Me había seguido durante días… Supe que no escaparía de él viva. Estaba ahí por venganza, y todo en lo que podía pensar era que Jake y Violeta no me volverían a ver de nuevo después de haberme ido bajo un malentendido… y que tú… nunca vería este hermoso rostro de nuevo… que nunca llegaría a vivir la vida que no podía creer que finalmente me había sido regalada.

Las lágrimas corrieron por su incipiente mejilla hacia su cuello.

—Shhh… —la tranquilicé—. Estás viva. Sobreviviste y Remo está muerto… todas las amenazas contra ti y tus hermanos han desaparecido… de una vez por todas.

Santana inhaló profundamente como si pensará que no podía comprender ese hecho. Moviéndome incluso más cerca de ella en la cama, siendo cuidadosa con sus heridas, añadí:

—Y me tienes… todo de mí… para siempre, si eso es lo que quieres.

Los ojos de Santana se ampliaron y liberando un largo suspiro, asintió.

—Cielos, Brittany, eso es todo lo que quiero. Eres todo para mí. Eres mía para siempre.

—Y tú eres mía para siempre también —contesté. La imagen de mi escultura de repente vino a mi mente y dije—: Santana… tu nueva escultura… —Dejé de hablar, incapaz de encontrar las palabras para expresar cómo me sentía.

—¿Te… gustó? —preguntó dudosamente, su rostro duro por un momento luciendo un nerviosismo inocente.

—¿Me gustó? —pregunté con una sola risa—. No puedo… no puedo creer que así sea cómo me ves… tu esperanza… tu deseo hecho realidad…

—Eres mi esperanza, Brittany. Eres cada esperanza que alguna vez me haya atrevido a tener… la mia luce.

—Santana —murmuré. Inclinándome cuidadosamente hacia su amoratada boca, gentilmente presionando mis labios con los suyos. El beso fue todo lo que quise expresar, pero fui incapaz de decirlo con palabras. Mientras nos separábamos, sonreí—. Tu exhibición fue un éxito, amor. Sue ya ha tenido ofertas para llevarla de gira. Sólo piensa, tu exhibición en lo más grandes museos de arte del mundo… todo el mundo será testigo de tu genialidad.

Santana alejó la mirada, luego me miró de nuevo, una expresión nerviosa sobre su rostro.

—¿Santana? ¿Qué pasa? —pregunté—. ¿No estás feliz? Es algo que cambia la vida. Es un sueño hecho realidad.

—No lo sé —contestó y fruncí el ceño—. Toda mi felicidad depende…

Echándome hacia atrás, pregunté:

—¿De qué?

Rodando sus labios, haciendo gestos ante los dolorosos cortes, dijo:

—En si vas a ser la comisaría oficial de la gira.

Parpadeé, después parpadeé de nuevo, antes de que una ancha sonrisa jubilosa se extendiera por mis labios.

—Santana, ¿me estás pidiendo que vaya alrededor del mundo contigo?

Santana me sonrió de esa forma devastadora que sólo ella había dominado y dijo:

—Claro que no iré a ningún lado sin ti, carina. Sé lo que quiero… y eso eres tú. Eres la única que alguna vez me tuvo. Cielos, nena, realmente me tienes en cada posible manera.

Sintiendo que podría morir de felicidad, incliné mi cabeza y dije:

—¿Lo giuro?

Resopló una risa y asintió.

—Claro que lo juro por todo lo que soy.

—¿Y dónde viviremos? —pregunté, el tono surreal de esta conversación se estaba convirtiendo en algo difícil de seguir.

—Donde tú quieras, pero…

—¿Pero qué?

—Pero como que me gustaría estar cerca de mis hermanos aquí en Lima-Ohio. Extrañamente, me estoy acostumbrando a las nubes grises y la lluvia.

Me relajé con alivio.

—Bien, porque también quiero estar aquí. Quiero estar aquí cuando Rachel tenga a mi sobrino o sobrina en unos cuantos meses.

—Entonces vas a vivir conmigo —instruyó Santana firmemente.

La calidez inundó mi cuerpo y asentí.

—Por supuesto. Te amo —dije en un estado de perfecta alegría, y me enrosqué en los brazos de Santana.

Escuchando también un suspiro pacifico de Santana, susurró de regreso:

—Ti amo, carina. Tienes todo mi amor.

Mientras cerraba mis ojos, segura con la chica cuya alma estaría por siempre fusionada con la mía, envié una oración silenciosa a la mamma de Santana.

“La tengo ahora, Maribel. Tu hija perdida ha sido encontrada. Finalmente puedes descansar en paz”.

Epílogo
Santana…
Lima-Ohio. Tres años después…

- Está bien, carina, puedes hacerlo.

—Estoy muy cansada —susurró Brittany, con su hermoso rostro pálido y su cuerpo agotado.

Pasé mis manos por su mejilla.

—Un empujón más, nena. Un empujón más y estará aquí.

El amor brillaba en los ojos de Brittany. Ella asintió. El médico miró a mi esposa.

—Esto es todo, Brittany, un empujón más y conocerás a tu hija.

Agarrando su mano en la mía, Brittany apretó mis dedos y empujó tan fuerte como pudo. Mi corazón latía tan rápido que pensé que iba a estallar de mi pecho. Brittany jadeó en busca de aire, y el sonido más increíble golpeó mis oídos, el sonido de un llanto agudo.

Mis piernas se convirtieron en gelatina cuando vi al doctor sostener un pequeño bebé. Las enfermeras lo limpiaron, justo antes de que la levantaran y la colocaran sobre el pecho desnudo de Brittany.

La cara de Brittany tenía lágrimas mientras miraba a nuestra hija recién nacida, con un poco de cabello negro ya en la cabeza. Cuando me moví a la cabecera de la cama, mirando a mis dos hermosas chicas, no podía describir la abrumadora sensación de hogar que me golpeó con la fuerza de un camión Mack.

El rostro resplandeciente de Brittany me miró y esbocé una sonrisa de incredulidad.

—Santana... tenemos una hija —me dijo, su voz ronca a causa de todas las horas de esfuerzo.

Incapaz de hablar, me incliné y le di un beso en la cabeza, y luego, con nerviosismo me agaché y besé a mi hija en la mejilla. Cuando me alejé, se retorció en los brazos de Brittany, y abrió los ojos para mirar directamente hacia mí... sus ojos marrones oscuros encontraron los míos... y me derribó de donde estaba.

Jadeando, miré hacia ella y un miedo repentino me recorrió. ¿Era digna de ser su mamá? ¿Merezco que me pase algo tan bueno?

—Ella te adorará, San —me aseguró Brittany, capturando mi mirada, deteniendo inmediatamente los pensamientos agobiantes en mi mente. —Te adorará tanto como yo.

Tragando el nudo en la garganta, me obligué a relajarme y me senté en la cama. Envolví mis brazos alrededor de mis dos razones para vivir.

—Ti amo, carina. Sempre —le dije entrecortadamente y giré la cabeza de Brittany para besarla.

—Yo también te amo, querida —susurró y pasó el dedo por el sonrosado rostro de nuestra hija durmiendo.

—Necesita nombre —dijo en voz baja Brittany, pero guardé silencio. Sólo había un nombre que quería darle. Un homenaje, un honor que quería que mi hija tuviera.

Nos sentamos allí durante una hora antes de que Brittany me apretara la mano.

—Será mejor que vayas y des a todos la buena noticia, mi madre y mi padre deben estar subiéndose por las paredes.

Sonriendo ante la idea de la madre de Brittany causando estragos en la sala de espera, exigiendo que la dejaran entrar, pasó por mi mente.

—Está bien, cariño —le dije, y besé a mi esposa e hija por última vez, salí de la habitación hacia la zona de espera, donde se reunía toda nuestra familia.

Cuando abrí la puerta, la madre de Brittany estuvo de pie en cuestión de segundos y se precipitó en mi dirección.

—Santana —dijo ella con alivio, con su fuerte acento extranjero tan pesado como siempre—: ¿Cómo están mis niñas? —Su cara bonita era sólo una versión anterior de Brittany. Pude ver la aprehensión preocupada en sus ojos azules.

No pude dejar de sonreír, contesté:

—Están perfectas... muy perfectas.

Mama Susan rompió a llorar y envolvió sus brazos alrededor de mi cuello. Cerré los ojos y respiré hondo, riéndome de su respuesta aliviada. Susan y Gabe se habían convertido en mis padres. Nunca me habían juzgado, sólo me aceptaron como la chica que amaba a Brittany y me dieron la bienvenida como su hija. Eran tan perfectos como suegros como la esposa perfecta que era su hija... y adoraban a Jake y a Violeta también.

—Ella está esperando —le dije.

En un santiamén, Susan fue por el pasillo, casi corriendo hasta la sala de partos. Pude oír su grito feliz todo el camino desde aquí.

Gabe, el padre de Brittany se me acercó y me estrechó la mano.

—Felicitaciones, hija. Bienvenida al club de los padres de una hija. —Se rió como si fuera una broma. Acercándome a su pecho, me dio una palmadita en la espalda y susurró—: Buena suerte.

Al salir, dos personitas de repente corrieron debajo de mis piernas y yo los levanté.

—¡Zia San! —gritó Dante, con sus mofletes rojos y sus enormes ojos verdes.

—Hola amigo —le dije y le di un beso en la mejilla. Él se rió, pero tal como lo hizo, Beth golpeó mi cara con ganas atención también—. Yo también, Tía San. ¡Quiero un beso también!

Riendo, di un beso en su mejilla y empujó el brazo de Dante haciéndole fruncir el ceño.

—Está bien, está bien, señorita, ya es suficiente —dijo Rachel con severidad y levantó a su hija de mis brazos, pero no antes de besar mi mejilla—. Felicidades, cariño. No puedo esperar para conocerla.

Kitty se adelantó y tomó junto a su hijo de los brazos que seguía mirando a Beth. Kitty negó con la cabeza a su hijo y me sonrió. Inclinándome la besé en la mejilla.

—Estoy tan feliz por ti, San —dijo ella.

Quinn se acercó y tendió la mano.

—Felicidades, San —dijo y me apretó la mano—. Asegúrate de cuidarlas, ¿de acuerdo?

Asentí y se alejó. Nunca estaría totalmente de acuerdo con ella, ni ella conmigo, pero al menos superamos la etapa de querernos matar y podríamos al menos estar en la misma habitación... incluso ayudarnos, en algunas circunstancias.

Mis ojos buscaron a Violeta y Jake. Al unísono, se acercaron y ambos envolvieron sus brazos alrededor de mi cuello. Riendo, también los abracé con fuerzas.

—¡Auguri, Fratella! —dijo cada uno de ellos y se apartaron con una orgullosa sonrisa feliz.

Vi a la novia de Violeta, Elsie, por encima del hombro. Se levantó y envolvió sus brazos alrededor de mi cintura.

—Me alegro por ti, San —dijo y me reí en la cara linda de la rubia.

—Gracias, Elsie.

—¿Y entonces? —pregunté—. ¿Quién quiere conocer a mi hija?

Todos mis amigos y familiares se dirigieron a la sala de partos, Dante y Beth una vez más se dirigieron a mis brazos.

Mi hermosa hija los enamoró en cuestión de segundos.




Cuando cayó la noche, me quedé mirando a mi esposa mientras dormía en la cama del hospital y me acerqué para besar su mejilla. Brittany se agitó, sus párpados se separaron. Sostuve a mi hija en mis brazos, sus ojos marrones incapaces de dejar de mirarme.

Brittany levantó la mano y la envolvió en mi cabello largo.

—¿Estás bien, mamá?

Sonreí y miré a nuestra hija.

—Estoy perfecta, carina. Muy perfecta —susurré.

Eché un vistazo a la puerta, sintiendo la necesidad de aire fresco. Brittany debió ver mi cara.

—Anda, cariño, muéstrale el cielo de la noche.

Incliné la cabeza hacia un lado, y le dije:

—Te amo, señora López.

Sonriendo somnolienta, murmuró:

—Yo también te amo, Santana López. Eres todo mi corazón.

Colocando un último beso en su cabeza, me dirigí a la puerta. Justo cuando estaba a punto de salir, Brittany susurró:

—Tienes que escoger un nombre, mamá. Tu hija no puede ser bebé López siempre... y creo que sé el que quieres que sea. Simplemente no has reunido el valor suficiente para preguntar, ¿verdad?

Cerré mis ojos brevemente. Como siempre, mi esposa me conocía demasiado bien.

Mirando a mi hija envuelta en una manta de color rosa, tomé una respiración profunda y me dirigí hacia la puerta. El pasillo estaba tranquilo y me dirigí a jardín privado de la unidad obstetricia. Al pasar junto el mostrador de enfermeras, la enfermera más mayor que había cuidado de mi pequeña familia levantó la mirada y su rostro se fundió en una sonrisa.

Levanté la banda alrededor de mi brazo que estaba electrónicamente vinculada a la etiqueta en el tobillo de mi hija. Diciéndole a las enfermeras que era su otra madre.

—¿No se pitará esto si entro en ese jardín justo ahí? —Incliné mi barbilla hacia la entrada del jardín.

La enfermera negó con la cabeza.

—No, puede salir ahí. Todo está cerrado y seguro. Así que a menos que le broten alas y vuele lejos, no se encenderá ninguna alarma.

—No, no tengo alas —dije mientras caminaba hacia adelante. Sintiendo todo tan surrealista mientras sostenía a mi hija en mis brazos, hija mía y de Brittany (ambas habíamos decidido que Britt se sometiera al tratamiento de fertilización, utilizara un óvulo mío y buscamos a un donante muy parecido a mi hermosa rubia….y el resto era historia), seguí mirando a mi hija para asegurarme de que no estaba soñando. Soñar que todo esto, mi vida, no era sólo un verdadero buen sueño del que no quería despertar.

Cómo diablos una pecadora como yo merecía todo esto no tenía ni idea….

Cuando abrí la puerta del jardín de la azotea, la noche de verano me envolvió, el aire caliente se filtró en mi piel. El pequeño jardín privado estaba desierto a esa hora, por lo que me trasladé hacia el césped y me senté apoyada contra una pared, sosteniendo a mi hija en mis brazos mientras miraba hacia el claro cielo nocturno. Todas las estrellas estaban fuera esta noche y una sonrisa nostálgica levantó mis labios.

Mirando hacia abajo, la nariz de mi hija se arrugó en su sueño. Pasando un dedo por su mejilla, abrí mi boca y canté:

—Dormi, Dormi, O Bel Bambin... —canté la canción de cuna italiana suavemente, meciéndome hacia adelante y hacia atrás al igual que había hecho hacía tantos años con Violeta. Mientras cantaba cada palabra, no pude contener la lágrima que escapó de la esquina de mi ojo izquierdo.

Ella era mía. Esta perfección dormida era la mejor cosa que jamás había hecho en mi vida.

Al oír la puerta del jardín abrirse, me senté con la espalda recta, limpiándome los ojos, sólo para ver a Jake y Violeta entrar, Dante colocado feliz en los brazos de Jake.

—¿Qué están haciendo todavía aquí? —pregunté con voz áspera. Debía ser al menos las dos de la mañana. Incliné mi barbilla a Dante—. ¿Y cómo diablos está todavía despierto?

—Se negó a irse, montó una trifulca cuando Kitty trató de alejarlo de nosotros. No me importó, nunca duerme todos modos. Es el conejito de Energizer —bromeó Jake agitando la cabeza, pero abrazando más fuerte a su hijo en sus brazos.

Dante agitó sus manos delante de las mejillas de Jake.

—En-er cone... cone-jii —trató de repetir, sonando tan lindo.

Jake asintió juguetonamente a su hijo.

—Sí, lo eres. El conejito de Energizer.

Dante chilló de la risa, echando la cabeza hacia atrás, haciéndonos reír a todos también.

Jake se sentó a mi lado en la hierba seca, Dante se encaramó en su rodilla, mirando a mi hija con fascinación. Violeta se dejó caer al otro lado de mí y envolvió su brazo alrededor de mi hombro.

—No pensarías que nos vamos a ir, ¿verdad?

Sentí mí pecho encogerse, iba a contestar, cuando Jake dijo:

—Somos tus hermanos, nos iremos cuando tú lo hagas. Lo sabes, San.

Aclarando de la emoción de mi garganta, miré a mi hija dormida, sosteniéndola en mis brazos y pregunté:

—¿Cómo sabían que estaría aquí?

—Pasaste junto a nosotros, San. Mirabas tanto a tu hija que no nos viste sentados justo en frente de ti.

Dante se inclinó para mirar a mi hija y luego me miró, sus labios rosados se fruncieron.

—¿Cómo se llama? —preguntó en su linda forma de hablar de bebé. Era tan adorable.

—Sí, San —dijo Violeta—. ¿Cómo llamarás a nuestra sobrina?

Mientras miraba a mi hija, me perdí en su durmiente cara bonita de color de rosa y dije:

—Quiero llamarla Maribel.

El silencio siguió a mis palabras y me tensé. No estaba segura de si mis hermanos estarían de acuerdo con que mi hija se llamara como nuestra mamma.

Fue hasta que levanté la mirada y ambos me miraban con lágrimas en los ojos.

—San —dijo Violeta, la voz quebrada. —La mamma estaría tan orgullosa de que tu hija compartiera su nombre. Sólo puedo imaginar lo feliz que sería si estuviera aquí ahora mismo.

—Sí —dijo Jake, con un nudo en la garganta. —La mamma la mira ahora y está muy sonriente, San. Sonriendo mucho.

Jake miró a mi hija. Se inclinó y la besó en la frente.

—Maribel —dijo amorosamente.

Luego Violeta siguió su ejemplo.

—Pequeña Maribel López.

Mi corazón estaba tan lleno mientras los cinco nos sentábamos aquí en silencio. Los tres hermanos López nos quedamos mudos, hasta que Dante de repente señaló hacia el cielo y dijo:

—¡Papá... gran estrella!

Jake se rió de su hijo destrozando nuestro conmovedor momento y lo apretó contra su pecho, alborotándole el cabello oscuro.

—Sí, Dante. Una gran estrella. Le stelle grande —dijo en italiano.

Dante vio los labios de Jake y dijo:

—Lee stel ee gan de.

Todos nos reímos cuando Dante trató de hablar italiano.

—¡Bene! —le dijo Jake a su hijo, y le hizo cosquillas a Dante hasta que estalló en un ataque de risa—. ¡Molto bene!

En cuanto a Violeta, la vi entrecerrando los ojos hacia las estrellas y me di cuenta que ella nunca llegó a recordar observar las estrellas con Jake y conmigo todos esos años atrás, era demasiado joven. Pero debía ser algo que tenía que compartir con nosotros ahora.

Cerré los ojos, tomé una respiración profunda y apoyé mi espalda en la pared con mi hija acunada en mis brazos, y dije:

—Jake, dinos cuáles son esas estrellas.

Jake miró hacia mí, y pude ver sus ojos analizar la petición. No habíamos hecho esto desde que éramos niños pequeños que trataban de escapar de nuestro padre abusivo.

Jake colocó cuidadosamente a Dante en su regazo, Dante chilló de emoción. Él miró hacia el cielo nocturno.

Me volví a Violeta.

—Mira hacia arriba, Violeta.

Sacudiendo la cabeza y sonriéndonos, Violeta se echó hacia atrás y miró hacia arriba.

Jake señaló tres estrellas en una fila.

—Esas tres estrellas son las llamadas el Cinturón de Orión. Puedes decir que es el Cinturón de Orión por la forma en que todas están en fila. ¿Lo ven?

Escuché a Jake explicar constelación detrás de constelación, Dante y Maribel ahora formaban parte de nuestra tradición López. Y a medida que pasaban los minutos, una sensación de paz y tranquilidad se apoderó de mí.

Lo habíamos conseguido.

Los tres, yaciendo aquí mirando las estrellas como lo hicimos hace mucho tiempo atrás, lo habíamos conseguido.

Éramos los hermanos López. Tres hermanos nacidos en el caos y dolor. Tres hermanos que habían soportado la tragedia y la pérdida. Hermanos hasta el final, unidos por lazos de sangre, nuestros lazos irrompibles por el amor incondicional.

Y estaba segura de que en ese cielo, una hermosa ángel (nuestra madre) miraba a sus hijos, con una sonrisa en su rostro y una felicidad orgullosa en su corazón.





Fin

Hola……….buenas       noches a todas/os……….uyyy, me invade una infinidad de emociones                      porque llegamos al final de la historia …..espero les guste el capítulo de hoy…..mil     disculpas por no haber actualizado antes.



Las invito a leer el nuevo proyecto de adaptación titulado “BEFORE CALIFORNIA AVE”



Mantengo mi posición sobre el episodio final de la serie, este final fue bueno, pero no colmo del todo mi expectativas para el cierre de lo que fue y será una gran serie: GLEE……lo que lamento es que no se haya dado a conocer el futuro o líneas de dialogo a otros personajes importantes (creo yo) para saber de ellos, por ejemplo: Santana, Brittany, Quinn, Puck o Mike, etc. Demás está decir que por ahora supongo que o mientras creo que voy a distraerme con los fic’s (benditas adaptaciones o historias originales por hacer que me distraiga un poco de la realidad    jejejeje)……..








*Para quienes no hayan leído las historias anteriores, estas son las direcciones:







http://www.gleeklatino.com/t20759p300-resueltofanfic-brittana-5ta-avenida-neoyorkina-2da-parte-primero-viene-el-amorluego-viene-el-matrimonio-epilogo
(5ta Avenida Neoyorkina)






http://www.gleeklatino.com/t21732p330-resueltofanfic-brittana-play-with-me-epilogo
(Play with Me)






http://www.gleeklatino.com/t22139p255-fanfic-brittana-safe-with-me-capitulo-bonus-track-halloween-con-el-clan-familiar-de-los-pierce-31-de-agosto
(Safe with Me)






http://www.gleeklatino.com/t22314p90-resueltofanfic-brittana-beautiful-stranger-cap-16-final-12-de-noviembre
(Beutiful stranger)







http://www.gleeklatino.com/t22405p135-fanfic-brittana-lick-sinopsiscapitulo-22-final-09-de-enero#536524
(Lick)




http://www.gleeklatino.com/t22471p135-resueltofanfic-brittana-breathe-with-me-epilogo-06-de-abril-2015#540911
(Breathe With Me)




http://www.gleeklatino.com/t22548-fanfic-brittana-the-mighty-storm-2da-parte-wethering-the-storm-sinopsis-epilogo-23-de-junio-2015
(“The Mighty Storm” / 2da Parte "Wethering the Storm)





http://www.gleeklatino.com/t22579p165-resueltofanfic-brittana-sweet-home-2da-parte-sinopsis-prologo-capitulos-37-epilogo-capitulo-extra-07-de-septiembre-2015
(Sweet Home: 1ra y 2da parte)






https://gleelatino.forosactivos.net/t22620-fanfic-brittana-before-california-ave-sinopsis-caps-1-2#548137
(Before California Ave)











Sin más que decir por el momento……….no las aburro más, disfruten del capítulo






Me encantará recibir sus críticas, comentarios, sugerencias, etc.………….así que a escribir.







Y la canción del día es……….













https://www.youtube.com/watch?v=-ygNN2ltIe8

NOTA DE ACLARACIÓN PERMANENTE E IMPORTANTE.- El presente trabajo es una adaptación a mi pareja favorita de Glee (Brittana), aclaro que conserve el título de la historia porque me pareció lo más conveniente, además de que soy malísima para ponerle nombre a algo o las cosas    jejejeje……..La historia original obviamente no me pertenece …………esta obra se titula “Sweet Hope” y es de autoría de Tillie Cole (todos los derechos reservados para esta estupenda escritora, así como a todos los involucrados en la publicación de su trabajo) (así que a esta distinguida escritora mis más grandes felicitaciones y admiración por la forma y estilo literario que realiza); la traducción, corrección y diseño de dicha obra fue realizada por la fabulosa comunidad virtual SIMPLY BOOKS (gracias a todos quienes hacen posible que el resto de las personas podamos disfrutar de tantas maravillosas obras) (la obra original traducida la podrán encontrar en distintos blogs).








Aclaro que si bien en la obra, los lugares recurrentes que se mencionan son Seattle y Alabama-Tusscalosa fundamentalmente; tomando en cuenta las características y sitios donde se desarrolló GLEE desde su primera hasta la sexta temporada …….decidí que los lugares donde se desarrollará la historia sea Seattle y Lima-Ohio (Espero les parezcan estas alternativas). Sobre el resto de los personajes, considerando las características de algunos de la obra original y en correlación con los de Glee puse a quienes se ajustaban a estas personalidades, aunque en algunos casos me deje llevar por la emoción del momento y puse a quienes creí conveniente      jejejeje.











Algo más……enfatizo nuevamente que esta historia se compone 1 solo libro que consta de: sinopsis + prólogo + 22 capítulos + epílogo + capítulo extra. Este libro es narrado desde la perspectiva de Brittany y Santana (es decir, algunos capítulos los narrado por una, y otros capítulos por la otra)………Espero disfruten de esta historia






Ahora……….solo queda esperar sus opiniones.











Estas cosas nunca eran fáciles.

Mientras estaba detrás de las escenas de mi exposición, escuchando cientos de voces en el otro lado de la pared, mi   corazón se aceleró.

El director del museo estaba allí ahora, dándole a la multitud su charla presentando mi exposición. Después de años de hacer esto no me habían quitado los nervios de la noche de la presentación y mi aprensión sobre cómo sería recibida la muestra. Cerré los ojos y respiré profundo.

Justo en ese momento, una mano familiar acarició mi espalda, el aroma de fresa llenó el espacio alrededor. Mis hombros inmediatamente perdieron su tensión y exhalaron en relieve.

—Brittany —Exhalé con un suspiro.

Cuando abrí los ojos, vi que mi bella esposa se había trasladado hasta estar delante de mí, vestida con un largo vestido azul ajustado, su largo  cabello cayendo sobre su hombro.

Puso sus manos en mi cara.

—Respira, mi amor. La gente las adora. La mayoría están demasiado ciegos por las lágrimas al hablar incluso.

Envolviendo mis brazos alrededor de su cintura, la atraje hacia mi pecho y presioné mis labios contra los suyos. Brittany se fundió en mis brazos y sus dedos recorrieron mi cabello largo.

Tirando hacia atrás, su mirada encontró la mía y las lágrimas llenaron sus ojos.

—Estoy muy orgullosa de ti —me susurró y presionó suavemente su frente en la mía—. Una exposición permanente en el Museo Guggenheim. Santana. Es el sueño de toda artista contemporánea. No hay mayor honor.

Asentí y deje escapar un largo suspiro.

—Lo sé —dije y di un codazo con mi barbilla a dirección de la galería—. ¿Está lleno? ¿Consiguieron la participación que querían?

—Lleno — Brittany respondió con entusiasmo.

Justo en ese momento, se abrió la puerta detrás de nosotras. Volví a ver a mis dos hermosas hijas entrar en mi escondite. Sus rostros se iluminaron con sonrisas hasta sus orejas mientras corrían hacia mí, casi me llevan contra el suelo.

Incapaz de contener una risa, las envolví en mis brazos. Cuando levanté la vista, Brittany estaba mirando hacia nosotras con una sonrisa aguada en su rostro. Después de todos estos años todavía era mi mayor animadora... y esto, mi pequeña familia, que me rodeaba... eran mi todo... mi luz, mi mundo y mi esperanza que me devolvía la vida.

Con un último apretón, Maribel, mi hija de quince años, se retiró; Susan, mi hija menor, hizo lo mismo. A los doce años hacía todo lo que su hermana hacía. Parecía ser un rasgo López. (Cuando decidimos tener a nuestra segunda hija, fui yo quien la tuvo después del tratamiento de fertilización, la pequeña Susan era tan parecida a Britt y Maribel en opinión de mi bella esposa era como mi versión adolescente tanto en el carácter protector como en el aspecto físico)

—Mamá —dijo Maribel con sus ojos oscuros brillantes—. Es hermoso. Las personas se están volviendo locas por las esculturas... —su rostro se sonrojo mientras las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas—. …tus esculturas, mamá—anunció con orgullo.

Sintiendo mi garganta estrecha al ver su muestra de emoción, levanté mis manos y limpie sus mejillas con las yemas de mis pulgares.

Al oír un resoplido a mi derecha, miré hacia abajo para ver a Susan mirando hacia su hermana mayor, también derramando lágrimas.

Inclinándose, le pregunté:

—Oye, tú no, mia cara. ¿Qué es todo esto? —Mi voz se quebró, mi garganta apretada al ver las reacciones de mis hijas.

Susan, que era la viva imagen de su madre, me miró y frunció los labios, apareciendo sus hoyuelos profundos en sus mejillas mientras trataba  de recuperar el aliento.

—Estamos muy orgullosas de ti, mamá. Todas estas personas... ellos están aquí por ti. Mami Britt nos dijo lo especial que ellos creen que eres. Y eres nuestra madre... que... me hace sentir muy orgullosa—. Se las arregló para decir y destruyó completamente cualquier esperanza que tenía de no descomponerme.

Mi mirada estaba borrosa ahora, envolviendo mis manos alrededor de la parte posterior de las cabezas de mis hijas, tiré de ellas hacia mí, las lágrimas ahora corrían por mi cara.

—Grazie —dije con voz áspera—: Estoy muy orgullosa de ser su madre.

Inmediatamente, sentí a Brittany a mi lado.

Mirando hacia arriba, sacudí la cabeza hacia mi esposa que estaba mirando hacia mí y mis niñas, con su expresión llena de amor.

—No puedo verlas llorar, carina, eso me rompe.

Brittany sonrió cuando me retire para ver a nuestras hijas. Sus enormes ojos nunca dejaron los míos.

—Todo es para ustedes, ¿lo saben no es así? Todo esto, ustedes me inspiran. Ustedes dos, y mami Britt. Todo lo que hago es para ustedes.

Mis dos hijas asintieron con la cabeza con mis palabras y limpiaron sus mejillas.

—Ti voglio bene —le dije, y besé a cada uno de ellas en la cabeza.

—Ti voglio bene, mamá —respondieron al unísono.

Mi corazón se derritió un poquito más.

Brittany se inclinó sobre mí y besó a Maribel, luego en la cabellera rubia de Susan. Envolviendo sus brazos alrededor de sus hombros, su mirada se encontró con la mía.

—¿Has oído lo suficiente? ¿Estás lista para ir? —preguntó, sabiendo que mi tradición era escuchar las reacciones de la multitud en la noche de inauguración mientras me escondía detrás de la galería. No podía permanecer en las galerías más de unos treinta minutos y mis nervios se trituraban. Todavía no tenía ni un deseo porque el mundo del arte sepa quién era yo. Me gustó que me  las haya arreglado para mantener mi anonimato, incluso después de todos estos años.

Deseosa de salir fuera del museo como del infierno y lejos de toda la locura, asentí. Mire a Brittany de nuevo, y le pregunte:

—¿Nuestros amigos ya se fueron?

—Se fueron hace unos diez minutos. Les di un tour personal por la exposición sin aglomeraciones —me informo Brittany.

Echando un vistazo por el escenario, una oleada de nervios se extendió a través de mi estómago y, mirando hacia atrás a Brittany, le pregunté:

—¿Qué piensan?

Brittany inclinó la cabeza hacia un lado. Entonces esa mirada impresionante que siempre me da cuando necesitaba calmarme derivó en su cara.

—Lo adoraron, mi amor. Tus hermanos... estaban impresionados por tu talento, como siempre. —Cerré los ojos mientras Brittany añadió:

—Están muy orgullosos de ti.

Al abrir los ojos, exhalé un suspiro de alivio y tendí la mano. Brittany colocó su mano en la mía. Maribel fue al lado de Brittany y Susan llegó a mi lado, envolviendo su brazo alrededor de mi cintura.

Tuve que hacer una pausa durante un segundo. Solo tenía que tomar un momento para respirar pausadamente.

Escuchar las voces impresionadas del otro lado de esa pared, mierda, abrumaba mi trabajo, me quedé allí con orgullo, con mi esposa y mis dos hermosas chicas a mi lado. No podía creer que esta fuera mi vida.  Tenía una mujer que me amaba más de lo que merecía. Durante el tiempo que viviera, nunca tendría sentido para mí. Y tenía dos hijas que me adoraban...  Dos hermosas hijas brillantes, a las que adoraba también.

Un apretón en mi cintura me hizo mirar hacia abajo. Susan estaba mirando hacia mí.

—¿Estás bien, mamá?

Aclarando mi garganta, Asentí. —Nunca he estado mejor, mia cara. Mejor que nunca.




—¿Reservaste todo el lugar? —le pregunté a Brittany mientras entramos en el restaurante vacío de Nueva York.

Brittany se encogió de hombros.

—No te gustan las multitudes, y todo el mundo voló aquí para ver la exposición. Quería que fuera especial. Así que reservé todo el lugar.

Sacudiendo la cabeza a mi esposa, tomé su mano extendida. Maribel y Susan entraron en el restaurante primero. Brittany y yo las seguimos rápidamente detrás.

Entrando en el rústico restaurante tradicional italiano, nuestros amigos y familiares dejaron sus conversaciones y se volvieron hacia nosotras. Cuando Brittany agitó los brazos, se pusieron de pie y comenzaron a aplaudir.

Todos y cada uno de ellos... No me podía mover.

Tina, al ver que no estaba llevando muy bien sus felicitaciones, se deslizó de la silla y se levantó.

—Bueno, si no te vas a mover, ¡yo claro que voy a ir a ti!

Se movió hacía hacia adelante. Antes de que tuviera la oportunidad de hacer algo, envolvió sus manos alrededor de mi cuello.

—¡Pateaste sus traseros cariño! —gritó y me dio un beso en la mejilla.

Mike no estaba muy lejos detrás de ella, junto con sus cinco hijos... todos chicos, que se alinearon para felicitarme por mi exhibición. Rachel y Quinn Fabray vinieron después. Rachel me abrazó con fuerza, Quinn sacudió mi mano.

—Que gran exposición hiciste —dijo, y nos dimos la mano. Antes de darme cuenta, Quinn me había tirado hacía su pecho y me dio unas palmaditas en la parte posterior.

—Lo hiciste bien, San, muy bien.

De inmediato dio un paso atrás ya que sus cuatro hijos vinieron y me dieron abrazos y besos. Me quedé estupefacta. ¿Quinn y yo llevándonos bien? A pesar de que estábamos bien, nunca habíamos estado cerca. La miré mientras se alejaba... luego miró por encima del hombro y me dio un guiño orgulloso.

No tenía ni idea de qué hacer con ese gesto.

Sintiendo una mano en mi brazo, miré a mi lado para ver a mi hermana Violeta  con su esposa, Elsie. Cada una de ellas me tomó de la mano con uno de sus gemelos de cinco años; un niño, Jackson, y una niña, Penélope. Sacudiendo la cabeza, Violeta me abrazó con fuerza en sus brazos. Mi hermanita, la exitosa tenista a nivel internacional me apretó tan fuerte que casi dejé de respirar. Dando un paso atrás, la vi tragar saliva mientras luchaba por hablar a través de su apretada garganta.

Dándole una palmada en la mejilla, besé su frente.

—Grazie, fratellina —dije con voz áspera, no necesitaba palabras para ver lo orgullosa que estaba.

Mientras Violeta dio un paso atrás, Elsie se adelantó y me dio un beso en la mejilla, antes de envolver su brazo alrededor de la cintura de Violeta.

Jake vino después. Sin decir palabra, me acercó hasta su pecho.

—Cielos, San —dijo a través de su garganta obstruida—. No tengo ni una palabra. Estoy muy orgulloso de ti —me dijo y mis ojos se llenaron de lágrimas.

—Grazie, fratello —Luché por decir.

Jake se apartó, sus ojos oscuros se encontraron con los míos. Negó.

—No puedo creer todo esto...

—Lo mismo digo, chico —estuve de acuerdo.

—¿Puedo obtener un beso? —preguntó una voz desde detrás de Jake. Un segundo más tarde, Kitty se abrió paso, haciendo que Jake riera.

—Hola, Kitty —dije con una carcajada cuando llegó hasta envolverme en sus brazos.

—Es hermoso, Santana, de verdad. No había un ojo seco en esa galería que estuviera mirando esas esculturas, como todos nosotros.

—Gracias, Kitty —dije, mientras que Dante llegaba a estar al lado de su padre. Dante tenía casi dieciocho años y era casi el doble de alto que Jake... cielos, el doble de mí.

Tomando mi mano, me acercó más y tocó mi espalda.

—Zia Santana, es increíble. Siempre supe que lo sería.

Lance mi brazo alrededor de sus hombros, y palmeé mi mano sobre su pecho.

—Tú también lo vas a ser un día, cariño.

—¿Eso crees? —preguntó.

Jake y Kitty asintieron con la cabeza en acuerdo y llenos con orgullo.

Brittany se inclinó sobre mí para besar la mejilla de Dante.

—Claro que sí. —Adoraba a nuestro sobrino. Adoraba que quisiera ser escultor como yo. Siempre estaba con nosotras en nuestra casa en Lima-Ohio, viéndome trabajar.

—Lo sé. Mi sobrino está aprendiendo de mí a ser escultor. No hay manera que vayas como mi aprendiz. Eres un López. Siempre salimos adelante.

—¡Soy una López también! —Una vocecita aguda gritó desde atrás de Kitty. Daisy apartó a su madre fuera del camino para llegar hasta mí. Pero tan pronto como vio a Brittany, Daisy cambió de rumbo y se lanzó en sus brazos. Brittany levantó a nuestra sobrina de seis años. De inmediato comenzó a jugar con el cabello largo de Brittany.

Justo en ese momento, Violeta se acercó con sus gemelos, y preguntó:

—¿Vamos a comer o qué?




Un par de horas más tarde, después de que comiéramos, el sonido sobre vidrio llamó la atención de todos. Cuando miré a mi izquierda, vi que Rachel estaba de pie. Quinn la miró con una gran sonrisa.

Cuando todos alrededor de la mesa la vieron, Rachel respiró hondo.

—Perdón por interrumpir. —Brittany se agachó para tomar mi mano, con una sonrisa de felicidad en sus labios, mientras adivinaba lo que su mejor amiga estaba a punto de decir.

—Vamos, Rach, ¡bestia sexy! —gritó Tina y dio un trago de cerveza. Rachel agitó su cabeza, riendo, y tomó una respiración larga y profunda.

—Realmente no sirvo para hablar en público, al menos no fuera de las aulas. Pero no podía dejar pasar esta noche sin un brindis o dos cosas que compartir.

Rachel fijó sus ojos en mí.

—En primer lugar, quería ofrecer enormes felicitaciones a Santana por lo que es uno de los mayores logros que una escultora podía esperar... su propia exposición permanente en el Museo Guggenheim. Estoy realmente orgullosa de ti, cariño. Todos lo estamos. —Rachel levantó su copa. Brittany me apretó la mano mientras todos levantaron sus copas y tomaron un trago.

Cuando Rachel bajó la copa, miró a su esposa y le tendió la mano. Quinn la tomó inmediatamente.

Volviendo de nuevo a nosotros, Rachel continuó:

—Esta misma semana estuve trabajando en mi oficina, tratando de planear una fecha de lanzamiento para mi próximo libro de texto. Cuando miré el calendario, de hecho me senté en mi silla en estado de shock. —Una pequeña sonrisa tiró de sus labios y empujó sus gafas negras hasta la nariz—. Hace veinticinco años este mismo mes volé a los EE.UU... a la Universidad de Lima... para estudiar mi Master.

—¡Dios, Rach! —exclamó Brittany. Sacudiendo la cabeza con incredulidad—. ¿Veinticinco años?

Rachel asintió con incredulidad y Kitty se rio.

—Recuerdo  ese  día  como  si  fuera  ayer,  Rach  Se  mudó  conmigo  y Tina. Estabas tan nerviosa.

—Sí, pero pronto sacudimos ese drama tuyo, ¿verdad, Rach? Pronto se convirtió en una de nosotras.

Rachel se rió.

—Seguro que lo hiciste, Tina —dijo ella felizmente, luego miró hacia abajo sobre la mesa—. Saco esto a colación porque... cuando miro alrededor de esta mesa, a todos nosotros... No puedo creer lo lejos que hemos llegado. Lo que hemos logrado... y los obstáculos que hemos tenido que superar.

El rostro de Rachel se puso serio.

—La razón por la que decidí ir a Lima fue porque no tenía a nadie en Inglaterra, sin familia, sin amigos reales... nada.

La mano de Brittany apretó la mía mientras miraba a su mejor amiga, la tristeza era evidente en su rostro.

—Cariño...  —susurró  Quinn,  acercándose  hacia  adelante  en  su   asiento.

Rachel levantó la mano para cortarla.

—No, no estoy buscando simpatía, Quinn. Todo lo contrario. —Se enfrentó al resto de nosotros de nuevo—. Mi primer día en Lima conocí a Kitty y Tina. Y sin juicio o expectativa, se convirtieron en mis mejores amigas y cambiaron mi vida. —Luego miró a Quinn. —Luego de mi primer día de estudios, me encontré contigo... literalmente... y eso fue todo. Era tuya y tú eras mía desde ese día en adelante.

Esta vez, nada detuvo a Quinn de inclinarse y besar a su esposa. Rachel se pasó la mano por la cara. Luego se volvió hacia Brittany diciendo:

—A través de Quinn me encontré con la muchacha más encantadora del mundo... su prima, Brittany. Brittany, se convirtió con rapidez, y todavía lo es, en   familia para mí. Eres la hermana que nunca tuve, pero que siempre quise.

—Tú también, Rach —Brittany accedió rápidamente a través de un nudo en la garganta por la emoción.

Rachel se rio mientras se limpiaba una lágrima perdida. Inclinándome más cerca de mi esposa, puse mi brazo alrededor de los hombros de Brittany y ella inmediatamente se derritió en mi costado.

—Recuerdo el día que mi profesora me pidió que viniera a Estados Unidos. Recuerdo haber pensado qué... preguntándome si sería la decisión acertada. Al final pensé ¿qué diablos? y salté con ambos pies. Y debido a ese salto de fe, ahora estoy viviendo una vida que apenas podía haber imaginado. En realidad, sinceramente, creo que todos lo somos.

Rachel señaló Tina y Mike.

—Tina y Mike se conocieron la misma noche que Quinn y yo... y ahora son los orgullosos padres de cinco hermosos chicos... y llevan uno de los ranchos más exitosos en Texas.

Ella miró al lado, hacia Kitty. Las lágrimas caían por sus mejillas.

—Kitty, ya sabes lo que pienso de ti. Sin duda, eres la más valiente... la persona más valiente que he conocido en mi vida. Te sobrepusiste a una enfermedad a la que ni siquiera puedo imaginar cómo hacer frente. Sin embargo, lo hiciste con gracia... y con una determinación feroz. Eres mi inspiración, mi fe en que una persona puede superar cualquier cosa.

—Rach —gritó Kitty, incapaz de hablar más. Jake abrazó a su esposa con fuerza entre sus brazos y la besó en la cabeza.

Mi pecho se tensó al ver... con mis emociones haciendo horas extras y haciendo acto de presencia.

—Es cierto, Kitty —aseguró Rachel—: Y en su viaje te enamoraste de Jake. Jake quien, junto con sus dos hermanas, se enfrentó a una especie de infierno que ningún ser humano debería tener que soportar—. Rachel fijó sus ojos en mí, en Jake y Violeta—. Ustedes tres han superado tanto dolor... mucho dolor de corazón. Pero al final, el amor como hermanos... su amor por los demás... los sacó adelante y los hizo las personas cariñosas y respetables que son hoy en día.

Rachel sonrió a Brittany, Elsie y Kitty.

—Junto con sus esposas, por supuesto... tres mujeres cuya tenacidad y capacidad de amar con fiereza mostraron que no era solo felicidad y alegría que se tenía en esta vida... y que la vida es demasiado corta para estar anclado en el pasado.

—Violeta juega la liga nacional de tenis... Jake y Kitty en Lima-Ohio para ayudar a los adolescentes con problemas... y por supuesto, Santana y Brittany, que por sorpresa han tomado el mundo del arte. —Rachel miró su a su rubia esposa—. Y nosotras, cariño. Eres la entrenadora del equipo de tenis de la universidad. Y yo, profesora... y nuestros hermosos cuatro hijos completan nuestras vidas.

Rachel se rió para sus adentros y sacudió la cabeza, sonrojándose.

- Estoy divagando. Sé que estoy divagando. Pero sentada aquí en este restaurante esta noche hace que mi corazón esté a punto de estallar de felicidad y orgullo. —Se quedó en silencio y vi una lágrima bajar por su mejilla y caer sobre la mesa. Todo estaba en silencio mientras Rachel mantuvo la cabeza baja. Inhalo lentamente y continuó—: Hace veinticinco años no tenía familia... Tenía pocas esperanzas. ¿Y ahora? Hoy he sido bendecida con la mejor familia y amigos en mundo y... y una carga de esperanzas y sueños.

Levantando la cabeza, una sonrisa se extendió en sus labios y resopló una carcajada acuosa.

- En mi cabeza, me imagino a todos nosotros envejecer, nuestras amistades. Me imagino las bodas de nuestros hijos, compartiendo juntos navidades y cumpleaños... el pasar de los años llenos de amor y felicidad... y me imagino a todos nosotros como abuelos y abuelas muy sexys contando nuestras historias a nuestros  nietos acerca de cómo nos reunimos todos, sobre todos los viajes que hicimos en nuestras vidas, lo bueno y lo malo.

Brittany estaba llorando a mi lado. De hecho, echando un vistazo alrededor de la mesa, todo el mundo estaba luchando para procurar no hacerlo. Incluso los niños estaban observando en silencio el discurso de Rachel, su hija, Beth y sus tres hijos, Isaac, Archie y Elias, la miraban como si fuera su sol.

- Lo que estoy tratando de decir es que el día que me arriesgué para mudarme a Lima fue la mejor cosa que he hecho... porque me llevó con ustedes. Los quiero tanto a todos que algunos días es casi imposible de   contener—anunció Rachel—: Un brindis... por la oportunidad, por esta posibilidad de ponerme en su camino para siempre.

Todos elevamos nuestras copas, brindando con champán y prácticamente todas las chicas corrieron hacia Rachel para abrazarla. Mientras observaba a Brittany dando besos y celebrando con sus mejores amigas, miré a mi derecha, solo para ver a Jake y Violeta trasladarse junto a mí. En silencio, puse mis brazos alrededor de los hombros de mis hermanos.

Fue en ese momento cuando supe que no podía lamentar nada. Ninguna de las cosas que sucedió en mi vida, porque este momento, ahora mismo, este sentimiento, valió la pena cada pizca de dolor y de angustia.

En ese momento, Brittany se volvió y llamó mi atención. Dejando a sus amigos, se acercó se veía tan impresionante como el día en que la conocí. Violeta y Jake me observaron sonrientes y se apartaron. Mientras mis hermanos regresaron con sus esposas, Brittany envolvió sus brazos alrededor de mi cuello.

Sosteniéndola con fuerza en mis brazos, movió de nuevo su hermoso rostro.

Buscando mis ojos, me pregunto:

—¿Eres feliz, mi amor?

Suspirando, sintiendo la mayor parte del contenido que tuve en toda mi vida, presioné mis labios en los suyos, tirando hacia atrás sólo para susurrar:


—Sono felice insieme a te... Sempre.