[Resuelto]Brittana: Cruda Desnudez GP-Santana (Adaptación) FINALIZADO

Me gusta como ensamblan la "familia"... sobre todo san con zoe!!!
Obviamente es diro y quinn esta tratando de armar un futuro mejor pocible para zoe y no perderse los momentos...
Bueno ya se van conisiendo de a poco... y conoscan a la familia de cada una... y van encajando bien dentro de todo...

3:) escribió:Me gusta como ensamblan la "familia"... sobre todo san con zoe!!!
Obviamente es diro y quinn esta tratando de armar un futuro mejor pocible para zoe y no perderse los momentos...
Bueno ya se van conisiendo de a poco... y conoscan a la familia de cada una... y van encajando bien dentro de todo...

Sip toda la razón solo que la familia de Brittany es mas facil que la familia de Santana, ademas de aqui en adelante saldran los trapos sucios de Santana.....

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Las dos tienen sus demonios.... de direrente magnitud pero lo tienen!!!
Bueno ahora se sabe el por que de britt!!!... falta que se lo diga a san..
Mmm que paso con el bebe???... y por el peso que carga san no creo que sea bueno!!!!...

San debió desde un principio ser honesta con Britt, supongo que no paso por cosas buenas como la rubia, pero si quiere empezar un futuro con ella debe contarle todo. Haber como toma las cosas Britt .... Además el que siga cuidando a su esposa creo la sigue arrastrando al pasado. Ósea esta bien que la ayude por todo lo que pasaron pero no la esta dejando seguir adelante.
Y bueno que decir de Quinn esta pasando por una etapa muy fuerte y mas por su pequeña, y aunque sabe que dejarla en manos de Britt es lo mejor que puede hacer el saber que la dejara es muy feo y triste.
También de Britt ya salió el misterio con Charles, lo bueno es que se fue de su lado y reacciono.
En fin haber como siguen las cosas, actualiza de nuevo! Jajajaja

3:) escribió:Las dos tienen sus demonios.... de direrente magnitud pero lo tienen!!!
Bueno ahora se sabe el por que de britt!!!... falta que se lo diga a san..
Mmm que paso con el bebe???... y por el peso que carga san no creo que sea bueno!!!!...

sip esos demonios estan saliendo a la luz, Aca el siguiente capitulo para que sepan que paso con ese bebe.....

JVM escribió:San debió desde un principio ser honesta con Britt, supongo que no  paso por cosas buenas como la rubia, pero si quiere empezar un futuro con ella debe contarle todo. Haber como toma las cosas Britt .... Además el que siga cuidando a su esposa creo la sigue arrastrando al pasado. Ósea esta bien que la ayude por todo lo que pasaron pero no la esta dejando seguir adelante.
Y bueno que decir de Quinn esta pasando por una etapa muy fuerte y mas por su pequeña, y aunque sabe que dejarla en manos de Britt es lo mejor que puede hacer el saber que la dejara es muy feo y triste.
También de Britt ya salió el misterio con Charles, lo bueno es que se fue de su lado y reacciono.
En fin haber como siguen las cosas, actualiza de nuevo! Jajajaja

sip Santana debio ser honesta, pero por un motivo u otro no lo hizo, puede ser inseguridad al perderla..... creo que si sigue cuidando a su esposa es por remordimiento o cargo de conciencia...
Por otro lado Brittany sufriendo por lo que esta pasando con Quinn, ante su inminente muerte, espero que pueda sobrellevarlo o mejor aun que ella no muera.

y Ya estoy actualizando de nuevo.. JMV te recomiendo que leas CARCEL DE AMOR, ES UNA GP DE SANTANA QUE SE QUE TE GUSTARA, CHEKALA OK... SUPER RECOMENDADA.

CAPITULO 17
SANTANA

¡Estoy tan jodida! ¡Mierda! Miro a Britt en el asiento del pasajero. Está tan cerca de hiperventilar, y no la culpo. ¿Por qué demonios tuvo que ir por las escaleras?

―Britt, por favor…

―Ahora no ―dice―. Y conduce cinco kilómetros sobre el límite de velocidad. Necesito llegar a casa. No creas que vas a dar un paseo.

Acelero, pero no voy a quedarme en silencio los próximos treinta minutos. Conduciré en círculos hasta que me escuche. Tiene un horrible sentido de la dirección, dudo que se dé cuenta. Cuando llegamos a la interestatal, empiezo mi defensa. Necesito asegurarme que no salga corriendo del auto en un semáforo.

―¿Britt? ―Estiro mi mano hacia la de ella, pero la aparta. Está temblando, erizándose la piel de sus brazos. Deja escapar un pequeño gemido y cubre su boca.

―Oh, Dios, ¿Lily está embarazada? Todavía seguías durmiendo con ella después del divorcio. ¡Está embarazada!

Giro el auto a un lado de la carretera y enciendo la baliza.

―Jesús, Britt. ¿Qué clase de mujer crees que soy?

Me mira con los ojos entrecerrados.

―¿No está embarazada?

―No, claro que no.

―Si no está embarazada, y no es para Zoe, entonces, ¿por qué tienes una habitación para bebé a medio terminar?

―El bebé… ―Tomo una profunda respiración y miro fijamente la carreta. Nunca lo dije en voz alta antes―. El bebé nació muerto.

Falta aire en el auto, y los ojos de Britt se quedan fijamente en mí.

―. Es solo que no puedo empacar todo de esa habitación.

Ella levanta mi barbilla, sus ojos azules son redondos y suaves. Se quita el cinturón de seguridad y se desliza sobre mi regazo, pasando sus brazos alrededor de mí con fuerza. La atraigo más y colocó mi nariz en su cabello.
―Lo siento tanto, por el bebé, por la forma en que actué. De verdad lo lamento.

―No te alejes de mí ―digo, mis brazos envolviéndola con fuerza alrededor de su cintura―. No puedo perderte a ti también.

―Oh, Santana ―dice, apretándome más fuerte―. ¿Está es la razón por la que te divorciaste?

―No pudimos hacer que el matrimonio funcionara después de eso.

―Entiendo.

―Ella nació a las veintidós semanas.

―¿Ella?

Asiento.

―Íbamos a llamarla Zoe.

―¿Cuándo pasó esto?

―Hace dos años ―susurro―. Intentamos seguir. Tuvimos asesoramiento, pero no funcionó.

―Creo que eso separaría a muchas parejas.

―No dejaría que nada te aleje de mí ―digo.

Sus ojos se suavizan, y planta un suave beso en mis labios.

―Ningún persona ha tenido miedo de perderme antes.

―Promételo ―digo―. Promételo que no te perderé.

―Estoy justo aquí, bebé. Lo prometo. ―Sostiene mi rostro entre sus manos―. ¿Cómo sucedió?

―Parto prematuro. ―Inclino mi cabeza hacia atrás y cierro los ojos―. Lily sufrió un paro cardíaco después de tener a Zoe.

―¿Paro cardíaco?

―Nunca olvidaré la mirada del médico ―digo en voz baja―. Fui rápidamente hacia el hospital desde la oficina. Sabía que era demasiado pronto. Se suponía que debía estar en la habitación con Lily cuando diera a luz. Ese era nuestro plan de parto, pero su condición era demasiada crítica. El médico salió y dijo que nuestro bebé nació muerto, que el corazón de Lily se había detenido, y un especialista cardíaco estaba revisándola.

―¡Dios! ―Me acaricia el cabello, pasando la punta de sus dedos por mi rostro.

―Él me llevó a la habitación y me dejo cargar a Zoe mientras esperábamos noticias de Lily.

―Apuesto que era hermosa ―dice Britt.

Trago con fuerza y asiento.

―No sé de qué color eran sus ojos.

― café caramelo como los tuyos, seguro ―dice Britt, y suena tan segura.

―Eso espero ―digo.
Mi cuerpo se llena de culpa. Una parte de mí quiere mantener cerca ese recuerdo, la única vez que cargué a mi bebé. Pero, otra parte de mí quiere olvidarlo, no recordar lo pequeña que era que podía sostenerla con una mano―. Me senté allí, cargando el pequeño cuerpo de mi hija muerta por casi una hora antes de que el médico finalmente entrara y diera que Lily estaba a estable.

―Gracias a Dios ―dice Britt―. ¿Tuvo la oportunidad de ver al bebé?

―No ―digo―. Es la razón por la que quería fotografías de la casa… de la habitación.

―Tiene sentido, supongo, pero, ¿por qué quiere fotografías ahora?

―La noche de la fiesta de estación fue el aniversario de la muerte de nuestro bebé. Eso junto a la venta de la casa ha afectado mucho a Lily.

―Es mucho para ti, también.

―Iba a contarte. Es duro hablar sobre esto.

―Lily es tan joven para perder un bebé de esa forma. Nunca he oído sobre algo tan terrible.

―Bulimia ―susurro, por el pequeño secreto terrible que es.

―¿Qué? ¿Lo hacía mientras estaba embarazada?

―Lo estuvo haciendo todo el tiempo mientras estuvimos casadas ―digo―. Solo que no me di cuenta, no hasta ese día. Solo seguía preguntándole al médico cómo pudo haber sucedido esto. Me miró con tanta confusión, como si debería haber sabido. Ahí me enteré. El embarazo en realidad le dio una buena coartada. Ella me seguía diciendo que estaba descompuesta por las mañanas.

―Santana, no hay manera que hubieses sabido la diferencia.

Me aparto un poco.

―Me pagan para que sepa estas cosas… para darme cuenta sobre cosas de la gente. Debería haber sabido que mi esposa estaba lentamente matándose a sí misma. Supongo que dejé de prestar atención, o no quería verlo, o estaba trabajando mucho. No lo sé.

―No puedes pensar de esa forma.

―Debería haber sabido ―grito, pero Britt ni siquiera se encoge.

―¿Lily te culpa?

―No, pero no admite que tuvo algún problema, incluso después de la muerte del bebé. Pero, dijo que puede ver dolor en mis ojos cada vez me miraba, y esa es la razón por la que pidió el divorcio. Pensó que la culpaba.

―¿Lo hacías?

―No, me culpo a mí misma. Era mi esposa. Juré cuidar de ella y fallé.

Ella acuna mi rostro.

―Dime. ―Levanto la mirada hacia ella y niego con la cabeza un poco.

―. Dime cuánto duele. ―Admito que estoy asustada como la muerte. Se siente como si abriera esas puertas, nunca las cerraré de nuevo.

Britt me besa suavemente-

―. Supongo que la atención estaba en Lily después que esto sucediera y se ha mantenido de esa forma. Supongo que nunca dijiste cómo te afectó esto. ¿Cuánto de dolió?

Tiene razón, por supuesto. Nunca he abierto mi corazón a este dolor enfrente de nadie. Ser una mujer y abogada significa ser fuerte. Significa nunca perder el control… siempre estar calmada. Pero duele malditamente tanto. Tiene que salir, conozco mi corazón, mi dolor está a salvo con Britt.

―Ella…

―¿Lily?

Muerdo el interior de mi boca, tratando de redirigir el dolor.

―Se daba atracones y luego vomitaba. Luego, comía pequeños porciones de fruta así el bebé no moría de hambre. Esa era su lógica, así es como alimentaba a nuestra hija.

―Mi cabeza colapsa en su hombro, unas cuantas lágrimas cayendo sobre su camiseta. Nunca jamás vi a Britt llorar. Maldita sea, soy una cobarde, pero no puedo evitarlo. Ya no puedo guardarme esto. Me aferro a ella como si fuera mi única opción de vida. Podría ser la única razón por la que no estoy perdiendo totalmente mi cabeza de mierda en este momento―. No me dijo eso hasta hace unos meses.

―Me alegro que la estés ayudando. Me alegro que finalmente se esté recuperando.

―Yo también ―susurro―. Lily yo intentamos buscar otro hijo por tanto tiempo. No me di cuenta que estábamos teniendo problemas debido a que ella estaba tan enferma, su cuerpo tan desnutrido. Estaba tan feliz cuando nos enteramos. Y quería una niña desde el principio. Parecía perfecto.

―No para Lily, supongo.

―No, los doctores piensan que el embarazo lo empeoró. Pensar que no podía controlar su propio cuerpo, su propio peso.

―Estoy segura que era escalofriante para ella. ―¿Por qué no lo vi, Britt? Dios, ¿quizás si no hubiese estado trabajando tanto?

―La amabas, Santana. Es más duro ver cosas cuando amamos a alguien.

―No seré así contigo, Britt ―digo suavemente―. Lo prometo. Siempre prestaré atención.

―Sé eso. Nadie jamás me ha amado como tú me amas.

Inclino mi frente sobre la de ella.

―Eso es lo que sucede cuando pierdes a alguien. Aprendes a amar como si estuvieras por perderlos… como si pudieran apartarse de ti en un segundo.

―No vas a perderme.

―Podría, así que no voy a tomar nada por hecho. Ni un beso, ni un abrazo. Estoy tan arrepentida, así que no voy a perder ni un momento contigo porque todo puede desaparecer. Me pueden arrebatar todo.

Mantiene mi rostro entre sus manos de nuevo, sus ojos húmedos con lágrimas. Pero, por el dolor, las lágrimas, mantiene el contacto visual y promete:

―Amor sin remordimientos.

―Amor sin remordimientos ―prometo.

Ufff... fuerte lo que paso san con lily.. y zoe!!! Enfermedad que te come la cabeza...
Ahora ya sabemos el por que de todo!!! Respecto a san y su divorcio...
Ahora le toca a britt!!!

Super fuerte pobre San!!!!
Espero que puedan sostener su promesa!!!
Saludos

Pobre San y Lily, que feo perder un hijo y mas en esas circunstancias :/
Ahora San puede estar tranquila respecto a Britt, ya sabe sobre su pequeña y aun sigue con ella. Solo esperó que poco a poco vaya quitándosele el miedo de perderla, tiene que disfrutar y no pensar en eso!

Y mil gracias por la nueva historia, me he atrasado un poquitin jajajaja, pero ya me pondré al corriente, me encanta que sigas dándonos estas historias maravillosas :D.
Y mas las gp jajajaja que las amo, gracias!

Pobre San, lily no era tan santa, asi que no me siento mal por ella, quien no sabe que hacer eso no es bueno y menos cuando estas embarazada???? ahora si creo que las cosas iran mejor entre britt y san, hasta pronto!!!!

3:) escribió:Ufff... fuerte lo que paso san con lily.. y zoe!!! Enfermedad que te come la cabeza...
Ahora ya sabemos el por que de todo!!! Respecto a san y su divorcio...
Ahora le toca a britt!!!

Vamos a ver que mas les falta confesar......

monica.santander escribió:Super fuerte pobre San!!!!
Espero que puedan sostener su promesa!!!
Saludos

Fuerte es poco, muy realista esto verdad??????
Espero que si, que se mantenga lo que han prometido......

JVM escribió:Pobre San y Lily, que feo perder un hijo y mas en esas circunstancias :/
Ahora San puede estar tranquila respecto a Britt, ya sabe sobre su pequeña y aun sigue con ella. Solo esperó que poco a poco vaya quitándosele el miedo de perderla, tiene que disfrutar y no pensar en eso!

Y mil gracias por la nueva historia, me he atrasado un poquitin jajajaja, pero ya me pondré al corriente, me encanta que sigas dándonos estas historias maravillosas :D.
Y mas las gp jajajaja que las amo, gracias!

Primero creo que no estaban destinadas a estar juntas, ambas tienen responsabilidad en esa perdida, una obsesa por su trabajo, y la otra obsesionada por verse delgada, vomitando todo lo que pueda, es una realidad muy dolorosa.

Sip, me has hecho irme por adaptaciones GP, y fue bueno por que habia pocas en el foro.
Desde ya te digo que te dedico Carcel de Amor, se que adoraras la historia, es increible.... y por eso decidi subirla aun cuando no he terminado las otras, aunque dos de mis adaptaciones ya estan por terminar..

saludos....... y de nada... todo por complacerlas....

micky morales escribió:Pobre San, lily no era tan santa, asi que no me siento mal por ella, quien no sabe que hacer eso no es bueno y menos cuando estas embarazada???? ahora si creo que las cosas iran mejor entre britt y san, hasta pronto!!!!

Muy bien dicho, yo tampoco me siento mal por ella, ella se creo su propio infierno por no comer,..... Espero que asi sea.... espero que todo salga bien...... Hasta pronto....

CAPITULO 18
SANTANA

Por primera vez, Brittany despierta antes que yo. Jamás duermo profundamente, pero después de ayer, después de contarle todo, necesitaba dormir. Siempre creí que necesitaba contener todo eso dentro, y tal vez con Lily, tuve que hacerlo. Tuve que ser fuerte para ella, pero mantener toda esa mierda encerrada no me hizo sentir mejor. Sólo tomó demasiada energía contenerlo; cargar el pesado peso en mi pecho. Pero anoche cuando subí a la cama, y Brittany apoyó su cabeza en mi pecho, el peso fue completamente diferente. Desearía no haber dejado salir esas lágrimas, pero no me importa ni un carajo eso. Se siente muy bien sacar todo eso de mi pecho, haberlo compartido con Brittany; despertar esta mañana por primera vez en dos años y de verdad tener un verdadero comienzo en un día nuevo, sin cargar el dolor de días y años atrás.

Hora de sólo mirar adelante. Me vestí y encontré a Brittany mirando aplicaciones de becarios, y posibles propiedades de reubicación. Ha estado agonizando con eso desde hace días. Recojo algunos de los listados de reportes de bienes raíces.

―Deberíamos ver estos tres. Puedo organizarlo. ―Asiente levemente y luego cambia su atención a las hojas de vida de los becarios. Sé a cuales habría entrevistado, pero no quiero sobrepasarme. Además, Brittany tiene un gran instinto para las personas y la verdad no necesita mis consejos. Tomo mis llaves, Y Brittany me mira.

―Diviértete en tu cita ―dice.

―Ah, demonios ―gruño―. ¿Quinn y tú se cuentan todo?

Me sonríe.

―Casi.
Sacudo la cabeza, la beso en la mejilla, y salgo. Corro por la ciudad, sin querer llegar tarde; sin querer dejarla esperando. Abriendo la puerta del café, mis ojos la encuentran de inmediato. Le hago señas para que no se pare, y me siento.

―Justo a tiempo ―dice Quinn, llevándose la taza de té a los labios―. ¿Todo bien? Estuve sorprendida cuando me llamaste. Estaba bromeando cuando dije que deberíamos planear el resto de la vida de Brittany.

―Bueno, te dije que tenía planes para mí. Espero que encontrarnos aquí esté bien. Podría haber ido a la casa de Michael.

―Esto es perfecto. Tiene a Zoe en un grupo de juego en la iglesia cruzando la calle. Ya no puedo hacer los ejercicios con ella, e iba a dejarme sola en casa, así que funcionó bien.

―Bien ―digo, juntando mis manos.

Quinn inclina su cabeza de un lado a otro.

―¿Brittany está molesta conmigo o algo? Pareces diferente.

―Brittany está… ―Sé que estoy sonriendo. Pensar en ella simplemente me hace eso―. Ella está…

―¡Oh, Dios mío! Está embarazada ―grita Quinn.

Las personas de hasta cuatro mesas de distancia miran hacia nosotras. No puedo creer que ella hiciera eso. Alzo mis manos.

―¡Shh! No, no está embarazada.

―Bueno, demonios, Zoe necesita un primo.

―Creo que Brittany y yo tendremos las manos llenas con Zoe…
―Quinn aparta la mirada de mí, mirando por la ventana afuera. ¿Podría haber dicho algo más idiota?―. Quinn, eso salió mal.

―No es eso. ―Vuelve sus ojos a mí―. Significa mucho para mí que quieras tanto a Zoe.

Alcanzo su mano.

―Brittany y yo la amaremos como si fuera nuestra, te lo prometo, pero nos aseguraremos de que sepa quién es su madre.

Quinn sacude su cabeza ligeramente y se lleva su taza a los labios.

―No es por esto que querías hablar conmigo.

―Más o menos ―digo―. Quiero tu permiso para casarme con Brittany. ―Quinn sostiene la taza congelada frente a su cara, los segundos lentamente pasan. Sus ojos no están revelando nada―. Sé que se supone que le pregunte a Michael, pero significaría más para Brittany que te preguntara a ti. ―Estiro la mano y suavemente bajo la taza, la gran sonrisa de Brittany aparece a la vista.

―Ya era hora ―dice, estirándose y envolviendo sus brazos alrededor de mi cuello.
Me río.

―Creo que todo el mundo va a decir que es muy pronto.

―A la mierda todo el mundo ―dice Quinn―. ¿Por qué perder el tiempo? Nadie tiene el mañana prometido.

BRITTANY

Miró por sobre mi máquina de coser, mirando a Santana teclear en la computadora. Ha estado en eso desde hace horas, desde que llegó de su cita misteriosa con Quinn. Seguramente no iban en serio sobre planear el resto de mi vida. Es hora de sacarle algo de información. Probablemente debería decirle que descanse, considerando todo lo que compartió conmigo sobre Lily y su bebé.

Me rompe el corazón pensar en lo que ellas pasaron. Pero explica mucho, también; explica el corazón de Santana; la forma en que ama con todo lo que es. No conoce otra forma. Su pasado la ha hecho incapaz de amar menos. Es aterrador para una chica como yo, una chica que nunca ha tenido a una persona que la ame así. Si la pierdo, sé que jamás me recuperaría. Su amor me ha arruinado para todos los demás. Es lo que me sostiene. Y Santana tampoco podría sobrevivir otra perdida. Así que supongo que será que nos aferremos.

Y sé a qué partes quiero aferrarme. Además, ella necesita un descanso; sus ojos están inyectados en sangre, y su cabello es un desastre.

―Qué tal si…

―¡Shh! Dame un minuto ―dice Santana, alzando su dedo. Mete un lápiz a su boca y escribe un poco más. Luego una sonrisa aparece. Se quita el lápiz y lo arroja a la mesa―. Maldición.

―¿Qué?

―He estado mirando tus libros.

―Oh, Dios, ¿son malos?

―Ven aquí ―dice y apunta a la pantalla―. Mira aquí. Estos son tus ingresos proyectados por el año. ¿Ves eso?

―¿Hiciste algo mal? ―digo, comenzando a revisar los números por mi cuenta. De ninguna manera esto está bien.

―Doblé y tripliqué.

Trató de recoger mi mandíbula del suelo mientras miro la pantalla. Sé que Santana hace el doble, incluso cuadriplica ese número, pero eso es mucho dinero para mí. Eso significar seguridad para mí y mi familia.

―Puedo darle a Zoe todo lo que necesita.

―Jamás dudé eso. Lo único que necesita es tu amor.

Juro que me sentí más liviana. Fue como si perdiera veinte kilos, el peso que se levantó.

―De verdad lo hice.

―Lo hiciste, cariño ―dice Santana―. Las ventas desde la entrevista de Jake han subido hasta el tope. Y no hay razón para pensar que no vas a seguir creciendo cada año.

―Puedo enviarla a una escuela privada y la universidad y a clases de baile y…

Santana me toma en sus brazos.

―Y tal vez salir de este agujero que llamas apartamento.

Me río con fuerza.

―Y tal vez contratar a un interno para tener más tiempo juntas una vez que vuelvas a tu trabajo de verdad.

―Estoy muy orgullosa de ti.

Abrazándola con fuerza, presiono mi cuerpo contra el suyo y ella agarra mi trasero con ambas manos. Inclino mi cabeza contra su pecho, escuchando el ritmo de su corazón. Jamás imaginé que mi pequeña empresa lo lograría. Jamás me imaginé que tendría con quien compartirlo. Jamás imaginé que una novia se sentiría orgullosa de mí, o lo mucho que eso significaría para mí. La beso suavemente en la boca, tomo su mano, y la llevo hacia mi apartamento, a mi cama.

El sexo es como montar en bicicleta, ¿verdad? Los nervios afloran en mi estómago. Ha pasado mucho tiempo desde que tuve sexo, pero finalmente estoy lista. Y sé que Santana ha estado lista desde hace semanas, pero no iba a permitir que nuestra primera vez fuera durante la siesta de Zoe. Sostengo su mirada, sus ojos normalmente brillantes se oscurecen y su pulgar pasa sobre su labio inferior. Cuando estira la mano y toma mi mejilla en su palma, mis nervios se calman y alcanzo los botones de su camisa, pasándola sobre su cabeza, la piel bronceada de sus marcadas abdominales sale a la vista.

Sus ojos miran el camino de mis dedos por sobre los músculos de su pecho y su estómago. Su lengua se desliza a lo largo de su labio inferior, la esquina de su boca se eleva. No hay nada más sexy que una mujer deseándote, sabiendo lo mucho que te desea. Todos conocemos esa mirada; la mirada que una persona da antes de besarte o hacerte el amor. Es toda intensa, pero también dulce. Es la diferencia de estar con una persona que te ama y con personas que sólo quieren acostarse contigo. Puedes verlo en una sola pequeña mirada.

Levanta mi camisa sobre mi cabeza y luego da un pequeño paso atrás. Sus dedos pasan bajo las tiras de mi sostén, acariciándome, obligando a mis pechos a erguirse. Mi aliento se atora cuando su boca cubre mi pezón, succionando y mordiéndolo ligeramente entre sus dientes.

―¡Oh, Dios! ―Estiro la mano y desabrocho mi sostén, dándole acceso.

La siento sonreír y enredo mis dedos en su cabello, queriendo que succiones con más fuerza. Su mano se desliza a mi otro pecho, su dedo gentilmente juega con mi otro pezón. El placer se dispara justo entre mis piernas. Siento la humedad en mis bragas, el calor aumentando.

Me baja sobre la cama, besándome suavemente, y siento mi cuerpo suavizarse bajo su experta lengua. Traza un camino de besos hacia abajo, su lengua rodea mi ombligo, besando mi cintura. Sus ojos se fijan en los míos, y miro mientras desliza mi pantalón, besando mis caderas y los muslos internos.

La seda marfil de mis bragas debe de haberla llamado porque se entierra entre mis piernas, dejando que su aliento me lleve al borde. Sé que puede saborear lo mojada que me está poniendo, lo abierta que estoy. Toma mis bragas entre sus dientes y tira de ellas. Levanto mis caderas para dejar que las baje.

La empujo sobre la cama, quitándole el resto de su ropa, y la deslizo profundamente en mi boca. Cuando su mano se desliza a mi cadera y me guía sobre ella, mis ojos se abren sorprendidos. Estoy montando su boca. Con el primer movimiento de su lengua, cualquier vergüenza sale por la ventana. En segundos, me encuentro moviendo mis caderas, llevando su lengua dentro y fuera de mí. Casi me olvido de lo que supone que debía estar haciendo, se siente increíble.

Si esto es una competencia, no estoy segura de que quién está ganando. Me inclino y la succiono profundamente en mi boca que juro que está tocando el fondo de mi garganta. Continúo deslizando mi lengua sobre ella, pero es difícil concentrarse cuando su lengua está deslizándose dentro y fuera de mí. Muevo mis caderas sobre su boca, sin estar avergonzada por mi placer, sin ser ya consciente de mi cuerpo con ella.

Lleva sus manos a mi trasero, animándome a usar su boca para llevarme hasta allí. Dejo de succionarla, dejo de lamerla, y comienzo a jadear. Comienzo a gritar. Mis caderas bajan ligeramente, empujando contra su boca, y mis piernas se tensan.
―¡Oh, Dios!

Mi cabeza cae sobre su muslo superior cuando colapso. Me recuesto allí jadeando por unos segundos, mientras Santana pasa su mano a lo largo de mi culo puesto sobre su pecho. Ruedo.

―Lo siento mucho.

Santana se ríe.

―¿Por qué?

―Por sofocarte de esa forma ―digo―. Y por dejarte colgada así.

Santana se sube sobre mí.

―Sofócame cuando quieras, y sobre dejarme colgada, no he terminado contigo todavía. ―Su pene tira entre mis piernas, y sonrío. Estiro la mano y deslizo su punta dentro de mí. Sus ojos se cierran con fuerza―. Dios, estás apretada.
Agarro su espalda y tomo aire profundamente. No había esperado este dolor; un delicioso y suave ardor mientras me llena del todo. Santana pasa su mano sobre mi mejilla, llevando mis ojos a los suyos. Mis músculos se relajan, y me derrito alrededor de ella. Se desliza profundamente dentro, manteniendo sus ojos en los míos. Mi boca cae abierta por el placer, pero no se mueve. Sé que está memorizando este momento, quemándolo en su cerebro, sin querer tomarme o el hacerme el amor por sentado. Su boca encuentra la mía, su lengua lentamente separa mis labios. Nuestras lenguas se encuentran, y presiona más hondo dentro de mí. Me aprieto alrededor de ella, y Santana lleva mis manos sobre mi cabeza.

―Quieta ―dice―. Quiero mirarte. Quiero sentirte temblando dentro de mí mientras te vienes. ―Se desliza dentro y fuera lentamente, mi cuerpo pulsa con cada empuje.

Gimo un poco, desesperada por venirme de nuevo.

―Estoy muy cerca.

―No me detendré hasta que te vengas ―promete.

Y sé que eso es cierto. Sé que mi placer es más importante para ella que el propio. Por primera vez, soy lo más importante en la vida de una persona.

Riéndome, trato de quitarle la sábana a Santana, pero ella la aparta. No hay espacio para ser tímida con Santana. Simplemente no lo aceptará, y honestamente, el tiempo para ser tímida ya se acabó. No estoy segura de cuánto tiempo llevamos desnudas en mi cama. Hubo sexo maravilloso, después la siesta desnudas, luego más sexo, luego comimos desnudas, sexo de nuevo, y ahora hemos estado hablando y riendo, recostadas desnudas una al lado de la otra por horas.
Me estiro de nuevo por la sábana.
―Tengo frío. ―Me acerca a su pecho, tirando la sábana al piso, y me río―. ¿Podemos quedarnos así para siempre? ―pregunto. Me besa estando de acuerdo―. Prométeme que siempre será así.

―Lo prometo.

―Bien, está decidido. Nos quedaremos aquí para siempre.

Santana se inclina sobre su codo, y aparta una hebra de cabello de mi cara.

―De hecho, he estado pensando… mi casa se venderá pronto, y necesitas un lugar más grande…

Sé que todavía está hablando, pero lo único que puedo oír es el golpeteo de mi corazón. Mudarme con Charles había sido un gran error. No quiero cometer otro error.

―Sé que es rápido, pero te amo. Por mucho tiempo, estuve pasando por la vida, pero sin vivirla realmente. Tu risa ese día fue mi alarma despertadora, y no quiero perderte, perder esta sensación.

Acaricio su rostro.

―Tampoco yo, pero tengo que pensar en Zoe y en Quinn.

―Lo sé ―dice Santana―. Estoy pensando en ellas. Es una de las razones por las que estoy haciendo esto ahora y no estoy esperando. A Quinn le encantaría ver nuestro día de bodas.

Mi boca cae abierta. ¿Qué acababa de decir? En un recoveco de mi mente estaba esperando esta propuesta.

―¿Día de boda? ¿Pensé que estabas pidiéndome que me mudara contigo?

―También. Como mi esposa. ―Estira la mano y saco algo de su maletín. La caja es demasiado grande para ser un anillo. La desliza frente a mí y me hace señas para que la abra.

Lentamente quito la tapa, un par de tacones azul menta están dentro.

Me conoce tan bien.

―¿Talla ocho?

Se ríe y apunta al talón, un gran anillo de diamantes cuelga de este.

―Espero haber conseguido la talla del anillo también. ―Se pone de rodillas en la cama, completamente desnuda―. Me dijiste una vez que puedes decir mucho de una mujer por sus zapatos, así que espero que estos digan “novia”. ¿Brittany Pierce, me harías el gran honor de usar estos zapatos y caminar por el altar para convertirte en mi esposa?

Que hermosa peticion!!!!! aceptara brittany o empezara con sus cosas que si quinn, que si zoe, que si esto, que si aquello??????? a esperar a ver que pasa!!!!!

Muy ingeniosa la forma de pedirle matrimonia a britt jajaa... a ver si acepta...
Amo todo lo que hace san parq britt sobre todo la peticion a quinn!!!

Por fin consumaron su amor jajajaja, ya se habían tardado.
La propuesta es cierto que es pronta pero si se aman no veo el porque no hacerlo, sin embargo saldrán a flote los miedos de Britt pero esperó que no ganen, ahora le toca ser honesta con San sobre lo que vivió.
Que decir de Q planeando la vida Britt jajajaja, la mejor hermana! :D

P.d. Mil gracias por la dedicatoria, estoy segura que la amare como el resto de tus historias. Obviamente esa un poco mas por el detalle jajajaja.
Y bueno por mi encantada que sigas con las historias gp, como dices son muy pocas en el foro y que tu nos las estés dando es lo mejor! Gracias infinitas!
Todos los dias espero que actualices, porque me haces el dia, y me dejas con ganas de mas como ahorita jajajaja.

micky morales escribió:Que hermosa peticion!!!!! aceptara brittany o empezara con sus cosas que si quinn, que si zoe, que si esto, que si aquello??????? a esperar a ver que pasa!!!!!

Muy buena pregunta,,,, pero se supone que Brittany es la chica del si, solo espero que ahora no se vuelva la chica que dice No.

3:) escribió:Muy ingeniosa la forma de pedirle matrimonia a britt jajaa... a ver si acepta...
Amo todo lo que hace san parq britt sobre todo la peticion a quinn!!!

O si muy original diria yo.. Vamos a ver que sale de esa boca.....
Santana es muy considerada de la manera que no lo hizo en su relacion anterior,, pero eso de ser una mujer divorciada es mucho equipaje que cargar, esperemos que Brittany acepte eso.......

y Quinn o esa es una sola como solo ella sabe.

JVM escribió:Por fin consumaron su amor jajajaja, ya se habían tardado.
La propuesta es cierto que es pronta pero si se aman no veo el porque no hacerlo, sin embargo saldrán a flote los miedos de Britt pero esperó que no ganen, ahora le toca ser honesta con San sobre lo que vivió.
Que decir de Q planeando la vida Britt jajajaja, la mejor hermana! :D

P.d. Mil gracias por la dedicatoria, estoy segura que la amare como el resto de tus historias. Obviamente esa un poco mas por el detalle jajajaja.
Y bueno por mi encantada que sigas con las historias gp, como dices son muy pocas en el foro y que tu nos las estés dando es lo mejor! Gracias infinitas!
Todos los dias espero que actualices, porque me haces el dia, y me dejas con ganas de mas como ahorita jajajaja.

Hola jajaj, bueno espero que Brittany de el si.......
y de nada en cuanto a las historias, realmente a raiz de tu peticion pues comenzaron mis adaptaciones a ser GP, y pues creo que seguire con unas cuantas...
Por mi actualizaria diario y subiría mas de un cap. pero a veces el cansancio me gana y solo puedo subir un cap. o a veces no puedo hacerlo del todo.... pero no creas tengo pensado adaptar una historia y subirla completa de un tiron solo estoy viendo cual elijo..

CAPITULO 19
SANTANA

Se siente como si el tiempo se hubiera detenido mientras espero a que responda a la pregunta más grande de nuestras vidas. Extiende la mano hacia la caja, con suerte para ponerse ambos, el anillo y los zapatos. Pero levanta la tapa y la pone de nuevo sobre la caja.

―Lo siento, pero no puedo, Santana.

¿Qué mierda acaba de pasar? Miro a la caja, con mi pecho tenso. No puedo creer que en realidad me haya rechazado. Quiero decir, sabía que esto era un riesgo… uno grande, pero pensé que al menos se lo pensaría más de cinco segundos.
Sus dedos levantan mi barbilla.

―Esto fue perfecto. Exactamente lo que habría deseado.

―Entonces, ¿por qué dices que no?

Se levanta, poniéndose mi camisa, y empieza a pasearse por su pequeño apartamento.

―Porque es demasiado rápido. Nunca hablamos sobre esto antes. Porque mi hermana está muriendo. Porque tengo que pensar en Zoe. Porque antes me perdí en un hombre, y si no soy cuidadosa, lo haré de nuevo. Porque…

―Brittany, no permitiré que suceda. Te amo por quien eres. Ese es el punto.

―Lo sé, por eso quiero asegurarme de quedarme como estoy.

Me mira y veo cuán asustada está y sé que no tiene nada que ver conmigo. También sé exactamente de qué está hablando cuando dice que se perdió a sí misma. Lily diría lo mismo. Lily se había perdido conmigo. Mi vida había dominado la suya, hasta que no era nada más que la cáscara de una mujer moviéndose de evento social en evento social, haciendo cosas que pensaba que se esperaban de ella en lugar de hacer lo que quería. Capturo la mano de Brittany y empujo la caja en su dirección.

―Cuando estés preparada, póntelos y lo sabré.

Brittany pone sus manos sobre la caja.

―No sé cuándo o cuánto tiempo…

Me inclino hacia delante y la beso con suavidad.

―No importa porque no voy a ir a ninguna parte. Mi proposición no tiene fecha de expiración porque mi amor por ti no lo tiene.

―Lo siento.

La sostengo cerca de mí y la siento temblar. De verdad está asustada de que vaya a dejarla.

―Oye, nada de eso. Sabía que esto era arriesgado. ―Acarició su nariz con la mía gentilmente―. Estamos bien, nena.

―¿Pero cómo?

Me encojo de hombros.

―Amor. Sé por qué me rechazaste y sé que no tiene nada que ver con lo que sientes por mí o lo que siento por ti.

―Te amo tanto ―susurra Brittany.

―Lo sé. ―Esbozo una sonrisa―. Recuerda, te tengo en la palma de mi mano.

―Brittany empieza a reírse y mi cuerpo presta atención. Por mi vida que no puedo comprender cómo su risa puede darme una erección, pero lo hace… cada jodida vez.

Bostezo y estiro mis brazos sobre mi cabeza, golpeando la pared del pequeño apartamento de Brittany. Tenemos que conseguirle un nuevo lugar. Gimiendo, mis ojos intentan acostumbrarse a la luz. La caja de la proposición se ve con claridad. Brittany la ha colocado encima de la televisión, el lugar más prominente en la habitación. Si tuviera una repisa, estoy segura que la caja se encontraría allí. Oigo voces procedentes de la zona de trabajo. Es demasiado pronto para los clientes. Es realmente demasiado pronto para que Brittany incluso esté despierta, mucho menos llevando una conversación. Normalmente, le toma una buena media hora antes de ser coherente. Empiezo a dirigirme hacia el pasillo y me congelo. Son Quinn y Brittany, y están hablando de la noche anterior.

―No pude dormir para nada anoche. Simplemente me tumbé despierta mirando la caja ―dice Brittany―. ¿Hice lo correcto?

―No. ―Quinn se ríe débilmente―. Totalmente lo jodiste. No puedo creer que la rechazaras.

Oigo a Brittany gemir.

―Tal vez el sexo increíble me volvió estúpida.

―Espera, ¿te preguntó después del sexo? ―pregunta Quinn―. No dijiste esa parte. Detalles, por favor.

Sólo puedo imaginar cuán sonrojada está Brittany en este momento.

―No voy a darte detalles. Pero, Dios, Quinn, ella es tan…

Intento escuchar con más fuerza. No me importa que chismorreen si va a presumir de mis habilidades.

―Así de bueno, ¿eh? ―dice Quinn―. Te odio.

―No se trató sólo de lo increíblemente buena que fue. Ella fue… no sé cómo describirlo más que diciendo generosa. Juro que no pensó en sí misma ni por un segundo. Fue como si sólo se preocupara acerca de cuán bien me estaba sintiendo.


―Y después de este increíble y generoso sexo, la morena se propuso, ¿y le dijiste no?

―Te dije que el sexo me volvió estúpida.

―El sexo tiende a volver a las mujeres estúpidas ―comenta Quinn―. Pero las personas piensan más claramente después de correrse.

―No lo hacen ―dice Brittany.

―Sí, lo hacen ―insiste Quinn―. Piensa en cuán enfocada puede estar una persona cachonda . Pero después de terminar, pueden centrarse en otras cosas. En realidad, leí un estudio sobre eso… las endorfinas liberadas en el cerebro o algo. Incluso tiene un nombre. Se llama claridad post orgasmo.

Me muerdo el labio con fuerza para evitar reírme. Quinn es divertidísima. Va a dejar este mundo demasiado pronto. Oigo a Brittany empezar a reír también.

―Estoy segura que nunca me preguntará de nuevo, sin importar cuántas veces tenga sexo con ella.

―Todavía está aquí. Se quedó. Parece que todavía va a preguntar.

―¿Qué se supone que haga? ¿Sólo ponerme los zapatos y el anillo casualmente una mañana?

―Sí, eso es exactamente lo que se supone que hagas ―dice Quinn―. Sabes, no siempre voy a estar por aquí para estas crisis de hermanas en mitad de la noche.

―Tienes que estar ―dice Brittany.

―Prometo que estaré escuchando.

Oigo la voz de Brittany romperse. Es imposible que me esconda por más tiempo. Me necesita. Salgo. Quinn está ahora en una silla con ruedas y se están abrazando con Zoe metida entre ellas, suena dormida. La espalda de Brittany está hacia mí, así que mis ojos captan los de Quinn primero. Nunca he estado cerca de nadie con una enfermedad terminal, pero literalmente se está consumiendo. Me inclino y atraigo a Brittany hacia mis brazos. Entierra su cabeza en mi cuello.

―Sólo para que lo sepas, creo que Brittany es una idiota ―dice Quinn.

La cabeza de Brittany se levanta de golpe.

―¡Quinn!

―¿Qué? Estoy a las puertas de la muerte aquí. No tengo tiempo para perderlo.

―Quinn, lo juro, si tuvieras un cabello, te lo arrancaría.

No estoy segura de porqué me molesté en traer el cochecito en mi paseo con Zoe. La pequeña prefiere ser llevada en brazos. No sé por qué lucho contra ello. Es demasiado linda para negarse, de todos modos. Pero sostenerla mientras empujo un cochecito por las aceras de Dallas no es una hazaña fácil. Gracias a Dios, casi estamos de regreso en la tienda de Brittany.

Quinn se veía tan cansada esta mañana que Brittany se ofreció a cuidar a Zoe por el día. Y ya que Brittany está intentando trabajar, Zoe y yo hemos estado pasando el rato.

―¿Crees que Brittany se pondrá los zapatos en algún momento pronto? ―le pregunto a Zoe. Hace algunas burbujas con su baba y suelta una risita. Le hago una trompetilla en la mejilla y su chillido es muy alto. Juro que sólo los perros pueden oírlo.

Había esperado ser una mujer comprometida esta mañana. Las cosas no resultaron de esa manera, pero sé que Brittany sólo necesita un poco de tiempo. Su conversación con Quinn esta mañana lo prueba mucho.

―Podemos ser pacientes, ¿verdad?

Zoe hace una mueca… una que aprendí a reconocer realmente rápido. La expresión de caca, como Brittany la llama… aspecto centrado, serio, casi severo. Por qué le toma tanta concentración a esta pequeña niña cagar, no tengo ni idea. Pero de repente, tengo mucha prisa. No traje la bolsa de pañales conmigo.
Me doy prisa, empujando el cochecito, apartando a todos de mi camino. Entonces lo escucho. Suena como las trompetillas que le hago a Zoe, sólo que estas vienen del pañal y puedo sentir la vibración contra mi mano. ¡Mierda! Me detengo justo fuera de la puerta de la tienda de Brittany y Zoe se ríe. Si no lo supiera mejor, pensaría que la pequeña niña me engañó. Fue sólo gas… fétido, asqueroso, asesino de cualquier cosa viviente, pero al menos, no fue una explosión de diarrea de bebé.

Abro la puerta, entonces la pateo ligeramente con mi pie, intentando pasar el cochecito. Brittany viene en mi rescate con los ojos amplios.

―Hoyuelos prefiere ser llevada en brazos para… ―Entonces mis ojos se posan en el rostro de mi mamá―. ¿Mamá?

Brittany levanta sus cejas y sonríe.

―Tu madre acaba de venir.

Miro a mi madre, preguntándome qué provocó la visita. Sus ojos están lagrimeando.

―Mamá, ¿está todo bien?

Mueve la cabeza ligeramente.

―Lo siento. Es sólo que nunca te he visto sostener… ―Baja la cabeza y limpia sus ojos.

Brittany toma a Zoe y le doy a mi madre un abrazo―. Lo siento ―dice, tocando sus ojos y echando un vistazo a Brittany.

―Todo está bien ―dice Brittany―. Santana me contó. Lo siento mucho por tu pérdida.

―Gracias, fue lo más horrible… No hay palabras.

La abrazo de nuevo y siento su postura enderezarse.

―No me dijiste que ibas a venir.

―Necesito hablar contigo.

―Está bien ―digo, haciendo un poco de cosquillas a Zoe.

―Quizá este no es el mejor momento.

―Puedo llevar a Zoe atrás ―ofrece Brittany.

Tomo a Brittany de la mano.

―Quédate. ¿Qué pasa, mamá?

―Lily me llamó ―dice mi madre con calma.

―De acuerdo, sé que todavía hablan ―digo―. ¿Qué es tan importante?

―Me llamó desde tu casa.

Mi cabeza se alza de golpe.

―Se marchó y voló de regreso a Dallas anoche.

Brittany aparta su mano de la mía, pero la tomo de nuevo de inmediato.

―¿Y está en la casa?

―No tenía sus llaves y me llamó para que la dejara entrar.

―¿Lo hiciste?

―Por supuesto, todavía es su casa ―dice mamá―. ¿De verdad no tenías ni idea?
Niego y miro a Brittany.

―Juro que no lo sabía.

―Estaba molesta por la venta de la casa… el cuarto del bebé.

―Lo sé ―digo―. Le envié algunas fotos.

―Bien, no fue lo bastante bueno porque ahora ha vuelto y no parecía estar lo suficientemente bien para salir del tratamiento ―dice mi madre―. Hay marcas recientes de dientes en sus manos por hacerse vomitar.

Siento la tensión en todo mi cuerpo.

―¿Dijo algo más? ―le pregunto a mi madre.

―Quería saber si Brittany y tú estaban comprometidas. ―Mi madre mira la mano de Brittany―. Dijo que le contaste que querías casarte con Brittany.

―Ella preguntó. ¿Debería haberle mentido?

―Supongo que no, pero está frágil.

Deslizo mi mano alrededor de la cintura de Brittany.

―Gracias por decirme sobre Lily.

Asiente y se acerca a Brittany.

―Lo siento. ―Me besa en la mejilla y sale por la puerta.

Me siento como si la alfombra acabara de ser apartada de debajo de mí. Brittany me da unos golpecitos en la mano.

―Déjame poner a Zoe en su corralito. Volveré enseguida.

Me inclino y bajo mi cabeza a mis manos. ¡Qué puto desastre! Los dedos de Brittany pasan por mi cabello y vuelvo mis ojos hacia ella.

―Lo siento por todo esto. ―Me levanto y respiro profundamente.

Brittany da un paso lejos.

―Adelante. Ve a tu casa.

―No ―digo.

―No te calmarás hasta que la veas ―dice Brittany―. Ve a asegurarte de que está bien.

No sé qué hacer. Brittany tiene razón. Necesito ir a hablar con Lily para averiguar qué demonios está pasando, pero sé que Brittany realmente no quiere que me vaya. Sé que está intentando ser valiente.

―¿Qué hay de ti?

―Estoy bien ―dice Brittany, entonces se encoge de hombros―. En realidad, no estoy bien sobre que vayas a verla. Pero necesitas ir, así que estoy intentando hacer lo mejor que puedo.

Envuelvo mis brazos a su alrededor y beso la punta de su nariz.

―No me iré por mucho tiempo. Voy a volver aquí contigo.