Gleek Latino
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Primer15
Image hosted by servimg.com

Image hosted by servimg.com
Image hosted by servimg.com
Estreno Glee 5x17
"Opening Night" en:
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Coment10
Últimos temas
» Ayudenme a encontrarlos
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyLun Mar 14, 2022 3:20 pm por Laidy T

» Busco fanfic brittana
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyLun Feb 28, 2022 10:01 pm por lana66

» Busco fanfic
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptySáb Nov 21, 2020 2:14 pm por LaChicken

» [Resuelto]Brittana: (Adaptación) El Oscuro Juego de SATANÁS... (Gp Santana) Cap. 7 Cont. Cap. 8
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyJue Sep 17, 2020 12:07 am por gaby1604

» [Resuelto]FanFic Brittana: La Esposa del Vecino (Adaptada) Epílogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMar Sep 08, 2020 9:19 am por Isabella28

» Brittana: Destino o Accidente (GP Santana) Actualizado 17-07-2017
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyDom Sep 06, 2020 10:27 am por Isabella28

» [Resuelto]Mándame al Infierno pero Besame (adaptación) Gp Santana Cap. 18 y Epilogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyVie Sep 04, 2020 12:54 am por gaby1604

» Fic Brittana----Más aya de lo normal----(segunda parte)
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMar Ago 25, 2020 7:50 pm por atrizz1

» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyLun Ago 03, 2020 5:10 pm por marthagr81@yahoo.es

» Que pasó con Naya?
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMiér Jul 22, 2020 6:54 pm por marthagr81@yahoo.es

» [Resuelto]FanFic Brittana: Medianoche V (Adaptada) Cap 31
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyJue Jul 16, 2020 7:16 am por marthagr81@yahoo.es

» No abandonen
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMiér Jun 17, 2020 3:17 pm por Faith2303

» FanFic Brittana: " Glimpse " Epilogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyVie Abr 17, 2020 12:26 am por Faith2303

» FanFic Brittana: Pídeme lo que Quieras 4: Y Yo te lo Daré (Adaptada) Epílogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyLun Ene 20, 2020 1:47 pm por thalia danyeli

» Brittana, cafe para dos- Capitulo 16
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyDom Oct 06, 2019 8:40 am por mystic

» brittana. amor y hierro capitulo 10
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMiér Sep 25, 2019 9:29 am por mystic

» holaaa,he vuelto
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyJue Ago 08, 2019 4:33 am por monica.santander

» [Resuelto]FanFic Brittana: Wallbanger 3 Last Call (Adaptada) Epílogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMiér Mayo 08, 2019 9:25 pm por 23l1

» [Resuelto]FanFic Brittana: Comportamiento (Adaptada) Epílogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyMiér Abr 10, 2019 9:29 pm por 23l1

» [Resuelto]FanFic Brittana: Justicia V (Adaptada) Epílogo
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 EmptyLun Abr 08, 2019 8:29 pm por 23l1

[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Encues10
Sondeo

Musical Favorito Glee 5x15 Bash

[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba1011%[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba10 11% [ 4 ]
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba1019%[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba10 19% [ 7 ]
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba1011%[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba10 11% [ 4 ]
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba1024%[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba10 24% [ 9 ]
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba1027%[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba10 27% [ 10 ]
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba108%[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Topeba10 8% [ 3 ]

Votos Totales : 37

Image hosted by servimg.com
[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 Gleeka10
Los posteadores más activos de la semana
No hay usuarios

Disclaimer
Image hosted by servimg.com
·Nombre: Gleek Latino
·Creación: 13 Nov 2009
·Host: Foroactivo
·Versión: GS5
Glee
Image hosted by servimg.com
Publicidad

[Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

+2
3:)
23l1
6 participantes

Página 3 de 6. Precedente  1, 2, 3, 4, 5, 6  Siguiente

Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 12

Mensaje por 23l1 Vie Oct 21, 2016 2:14 am

Capitulo 12


Voy conduciendo en dirección de la casa de Brittany.

No sé qué me ha poseído para estar haciendo esto, no entiendo nada de lo que pasa conmigo.

No debería ir tras ella, este no es mi estilo, pero la verdad es que, dentro de mí, siento la inmensa necesidad de verla.

Nunca antes en la vida me había sucedido esto.

Yo no soy mujer que busque a otra, no las persigo, ellas vienen a mí y yo disfruto de ellas.

Pero con Brittany todo ha sido diferente.

Con ella mi cabeza casi no piensa y eso me tiene muy, pero muy jodida.

Estos días que no la he visto me he vuelto loca pensando en ella. Y cuando el día de trabajo termina y vuelvo a casa, paso por la calle de la tienda de lencería donde su fotografía me mira desde la vitrina. Vuelvo a recordar su cuerpo bajo el mío y eso me hace arder de un deseo inexplicable.

Hoy ya no aguanto más.

Deseo verla, deseo mirar esos ojos azules que pueden conmigo.

Ni yo me creo lo patéticos de mis pensamientos y hasta me llego a dar pena.

No quiero sentirme así, no quiero mostrarme vulnerable por culpa de una mujer, estoy de lo peor.

Conduzco un poco más, hasta que entro en la calle donde vive Brittany. Bajo la velocidad y de pronto pienso en si estaré haciendo bien.

Tal vez deba dar la vuelta e irme a casa y terminar con esta tontería de buscar a Brittany.

Pero mi cuerpo y mi mente no están en la misma sintonía.

Ya que, sin notarlo, ya me encuentro fuera de su casa. Miro hacia la entrada de aquel lugar. Aquella casa me resulta acogedora y me quedo ahí, pegada en mi asiento, observando la propiedad.

¿Qué demonios me pasa?

Estoy actuando como una verdadera debilucha y me doy miedo.

Lo que debo hacer es, bajarme del auto, llegar hasta la puerta, tocar el timbre y cuando Brittany aparezca frente a mí, besarla como he estado deseando hacer desde la última vez que la vi la noche de la fiesta de lanzamiento.

Sí, eso es lo que debo hacer.

Me quito el cinturón de seguridad, abro la puerta del auto y salgo a la calle.

«Aún tengo tiempo de arrepentirme» resuena en mi mente, pero no hago caso a esa jodida voz interna y ya estoy en la puerta de la casa y con mi dedo hundiendo el botón del timbre.

Me pongo nerviosa, tal vez ella no esté en su casa, tal vez se enoje al verme aquí y me mande a la mierda o tal vez…

¿Con quién vive Brittany?

Nunca me he hecho esa pregunta y ahora que lo pienso esta es una casa muy grande para que viva una persona sola. Pero ella no tiene pareja…Bueno, eso fue lo que ella dijo.

¿Será que Brittany me ha mentido?

¿Será eso y ella vive aquí con una pareja?

¡Qué imbécil soy!

No tengo ganas de averiguarlo y creo que lo mejor será que me vaya de aquí antes de hacer un papelón.

Voy a girar para comenzar mi retirada, cuando la puerta de entrada se abre y deja la bella figura de Brittany frente a mí.

―¿Santana?―pregunta con la cara llena de asombro, con los ojos muy abiertos y puedo notar que está un poco nerviosa.

―Hola, Brittany. Andaba por el vecindario y me dije, “¿por qué no paso a visitar a Brittany?”

Qué excusa más mala, ni yo me la he creído.

Gira su cabeza hacia el interior de su casa, mirando, como si temiera que alguien la pudiera descubrir.

Lo que pensaba, ella vive con una pareja y yo, la idiota, vine a joderle la tarde.

Brittany sale al portal y junta la puerta tras ella. Ahora se acerca un paso hacia mí y me pregunta:

―¿Qué haces aquí?

La siento muy preocupada, de seguro no quiere que su pareja me vea, pero no puedo mentirle.

―Vine a verte―le suelto sin más y doy un paso para acortar la distancia.

Siento cómo una poderosa electricidad surge entre nosotras y me da igual que esté o no su novio o novia en casa, por mí se puede ir a la mierda.

―¿Por qué? ¿Por qué quieres verme?

―Brittany, no me preguntes algo para lo que no tengo la respuesta. Solo sé que quería verte y aquí estoy―digo un poco enojada ya que me siento débil frente a ella develando mis intenciones.

No sé cómo actuar con ella y con lo que siento.

―Santana …yo…creo…―balbucea nerviosa, de seguro está deseando que me largue de ahí cuanto antes.

Pero no quiero alejarme de ella.

La puerta tras de Brittany se abre de golpe y ella gira para mirar quién ha salido hasta el portal.

―¡Mami! ¡Mami! ¡Ven. La abuela ya sacó el pastel del horno!

Un pequeño torbellino de largo cabello rubio hace su aparición junto a nosotras.

¿Mami?

¿La pequeña rubia ha dicho mami?

¿Brittany es su mamá?

¿Brittany tiene una hija?

Las preguntas en mi mente me aturden, no tengo reacción alguna ante lo que escucho, me he quedado de una sola pieza.

―Vamos, mami―dice la niña, tirando de la mano de Brittany―Vamos a ver el pastel para decorarlo.

Brittany me mira y ve que no me muevo y de seguro mi cara es de asombro absoluto.

―Susan, ve dentro con la abuela.

―Pero, mami…

―Ve, Susan. Yo iré enseguida.

―No demores mucho. Y puedes invitar a tu amiga, el pastel es muy grande y alcanza para todas.

La niña me mira con sus grandes ojos claros y me sonríe. Yo no muevo un solo músculo de la cara, estoy como petrificada. Ahora ella gira sobre sus talones y entra en la casa obedeciendo a su mamá.

Brittany me vuelve a mirar, de seguro esperando a que yo diga algo, pero, ¿qué tengo que decir?

―Tienes…tienes una hija―mi voz suena cortante.

No es una pregunta, es una afirmación.

―Sí, tengo una hija.

Su confirmación hace que un escalofrió me recorra por completo.

No sé qué hacer ni que decir en este caso.

Miro una vez más los ojos de Brittany y en mi interior una sensación extraña comienza a crecer. Es como si la rabia y la desolación me llenaran por completo.

Sin decir nada giro y comienzo mi camino de vuelta hasta mi auto dejando a Brittany en el portal de su casa, sin decir nada más.

«Brittany tiene una hija… Brittany tiene una hija»

Es lo que resuena en mi cabeza una y otra y otra vez.

Me meto en el auto y salgo del lugar a toda velocidad.

¿Qué me pasa ahora?

¿Por qué me siento así al saber que Brittany tiene una hija?

Me maldigo mentalmente por no tener respuesta a estas interrogantes.


Doy vueltas por la ciudad, como si así, fuera a encontrar algo que me ayude a saber qué me pasa, como si algo me fuera a dar la respuesta.

¿Pero qué respuesta es esa que quiero encontrar?

Necesito hablar con alguien.

Necesito que alguien me explique qué mierda pasa conmigo.

Y sin pensarlo más, conduzco mi auto hasta el departamento de Quinn.



Estoy en el departamento de mi amiga.

Doy un par de golpes en la puerta y ésta se abre y es Rachel la que me recibe.

―Hola, Rachel. ¿Está Quinn?―digo y no espero a que ella me invite a pasar.

Entro con confianza en el departamento y camino hasta el salón.

―Santana, ¿qué sucede?

―Nada, Rachel. Bueno, en verdad, todo. Sucede todo, necesito hablar con Quinn.

―Pero…―dice mientras yo me muevo de un lado a otro en el salón.

―¿Santana? ¿Pero qué haces tú aquí?―Quinn entra en la sala y llega a mí sorprendida de verme en su casa.

―Quinn, necesito hablar contigo.

―Está bien. Siéntate y dime qué es lo que pasa.

―Tú lo sabías, ¿verdad? Tú lo sabías y no me dijiste nada.

―¿Qué cosa? ¿Qué es lo que supuestamente yo sabía?

―Que Brittany tiene una hija.

El silencio se hace en el departamento de mi amiga.

Con eso comprendo que esto es una sorpresa para ella, tal como lo ha sido para mí.

―No lo sabía, San. No tenía ni la menor idea de que Brittany tuviera una hija.

―Las voy a dejar solas para que hablen con tranquilidad―nos dice Rachel, quien me da una mirada reprobatoria antes de desaparecer de nuestra vista.

―¿Pero cómo no lo sabías, Quinn? Tú la entrevistaste, tú viste su currículum…

―Sí, pero el currículum dice que ella es soltera y, cuando le pregunté por su disponibilidad para los viajes, no puso ninguna objeción.

Mi cabeza da vueltas pensando en la ojiazul, en ella y en la pequeña niña y de pronto me siento muy mal.

―¿Cómo te enteraste?

―Hoy fui hasta su casa. Quería verla y cuando llegué, Brittany me abrió la puerta. Cuando estaba hablando con ella, una pequeña niña rubia muy parecida a ella apareció ante nosotras llamándola mami.

―Pero vamos a ver, San. ¿Qué es lo que realmente te jode de que Brittany tenga una hija? No entiendo a qué ha viene todo este show.

Pienso en la pregunta que me ha hecho mi amiga y la verdad es que no sé.

No entiendo mi forma de actuar, con un berrinche escandaloso, pero en este momento siento como si Brittany me hubiese engañado y debo reconocer que me ha dolido…Pero qué mierda.

―No lo sé―respondo.

Quinn me mira seria.

―Yo sí lo sé―dice con suficiencia―Te jode que Brittany te guste y que te guste más de lo que quisieras.

―Qué dices…

―Te jode que te haya ocultado lo de su hija. Pero es que ella no tenía por qué decirte nada, menos a ti.

―Claro que debería haber dicho algo. Estuvimos juntas y…

―Sí, estuviste con ella. Fue una noche, sexo ocasional, un polvo del momento, sexo sin compromiso o llámalo como quieras. No tenía por qué contarte de su vida. Ella sabe que no eres una persona seria, que eres una mujeriega de primera y…

―¿Qué quieres decir con todo eso?

―Que ella no te ve como algo serio. No eres una mujer para formar pareja, San. A ella le gustaste y se entregó a ti y punto. Hizo lo mismo que tú, pero no quiere que entres en su vida.

Siento que un puño se hunde en mi estómago.

Lo que me ha dicho Quinn no me ha gustado nada, pero tengo que reconocer que tiene razón.

No soy una mujer que busque algo serio con otra, no quiero compromisos, pero no puedo evitar pensar en Brittany como en algo más.

Tomo una honda respiración y trato de ordenar todos los pensamientos que se mezclan en mi cabeza.

―No lo entiendo, Q. No entiendo qué me pasa con ella.

―Te gusta. Brittany te ha gustado desde el primer día que la viste. Pero, amiga, creo que es mejor dejar todo hasta aquí. Tú sigues con tu vida y dejas que ella siga con la suya.

―Pero, es que…

―No, amiga. Déjala en paz. Ella es una mujer que necesita algo mejor que una mujeriega de mierda. Ella tiene que ver por su hija, tiene que buscar una persona buena y tú no eres esa persona. Además, a ti ni siquiera te gustan los niños.

Eso es verdad, no me gustan los niños.

Son unas cosas horrorosas.

No, eso no va conmigo.

Nos quedamos en silencio, Quinn mirándome y yo pensando qué haré de ahora en adelante. Me jode tener que olvidarme de Brittany, porque me gusta mucho, más de lo que pretendía, pero Quinn tiene mucha razón.

Brittany necesita una persona que pueda formar una familia con ella.

Mi bella lectora de novelas románticas necesita a ese príncipe o princesa que la ame para siempre y claramente yo no soy eso que ella busca.

Me levanto del sofá, y no quiero seguir dando lástima, ya es hora de que me vaya a mi casa.

Debo descansar o tal vez llamar a mis amigos para salir por ahí de copas.

Me despido de Quinn agradeciéndole que me haya escuchado. Llego hasta mi auto y me subo para largarme pronto de ese lugar.


Ya estoy conduciendo camino a mi casa cuando me fijo que estoy entrando en la calle donde está la tienda de lencería. Me estaciono fuera de la tienda y miro por un rato la fotografía de Brittany.

No sé qué me ha hecho esta mujer.

¿Por qué es distinta a todas las mujeres con las que he estado?

¿Qué ha tocado dentro de mí que no la puedo sacar de mis pensamientos?

Luego de estar mirando la fotografía fijamente por unos minutos, decido que debo marcharme de ahí.

Si quiero olvidarme de ella tendré que buscar otro camino para volver a la mansión.


Estoy en casa, pensaba salir, pero la verdad al final no estoy de ánimo como para fiestas.

Pero que patética me siento, esto debe terminar ya.


Me meto en la ducha, necesito relajarme, necesito que el agua me calme.

Luego salgo, me seco y como en mucho tiempo no hacía, me meto en la cama muy temprano y me quedo dormida pensando en qué hacer para olvidarme de Brittany para siempre.






Han pasados tres semanas desde que me enterara que Brittany tiene una hija y desde ese día no la he visto.

La verdad, es que he tratado de alejarla de mis pensamientos, pero me ha resultado casi imposible.

He estado tentada de volver hasta su casa para verla otra vez, pero pienso en lo que hablé con Quinn y me contengo.


Es sábado y estoy en la cocina de la mansión tomando desayuno.

Mis padres salieron de la ciudad y nos dejaron a mi hermana y a mí de dueños de casa.

Emily entra en la cocina y se acerca a mí para besarme la mejilla.

―Cómo está hoy mi hermanita más bella. Mi hermanita hermosa…

―No―le digo, porque sé que quiere algo de mí.

―Tana…

―Sé que me vas a pedir algo y la respuesta es no.

Mi hermana hace un puchero. No le gusta que le digan que no, bueno a mí tampoco, debe ser algo genético.

―Tana, no seas mala, tienes que ayudarme.

―No―le digo lentamente, lo que hace que ella suelte un bufido de indignación.

―San, necesito hacer algo muy importante en el centro comercial. Por favor préstame tu auto. El mío está en el taller.

Esta chica está completamente loca.

No le presto mi Aston Martin ni a mi papá, menos se lo prestaría ella.

―La respuesta sigue siendo no y no insistas más, Emily. ¿Por qué no usas el auto de papá?

―Porque si papá se llega a enterar que saqué su auto me mata. Además, imagínate le pasa algo a su joyita… No quiero ni pensarlo.

―Claro, por eso mejor que le pase algo al mío, ¿verdad?

―Vamos, hermana. Necesito ir a comprar un regalo para el cumpleaños de mi amiga. Necesito tu auto.

―Em, no.

―Por favor, por favor. Ya sé, ¿y si tú me llevas?

―¿Qué? Tengo cosas mejores que hacer que salir con mi hermana de compras.

Emily me mira y pienso que en cualquier momento se largará a llorar. Pero es que yo no quiero andar de niñera por todo el centro comercial.

No, eso sí que no.

―Tana―me dice con una voz que es como si tuviera una gran tristeza―, Por favor. Llévame hasta el centro comercial…

―Toma un taxi.

―No. Llévame y te prometo que será muy corto. Vamos a la tienda específica y volvemos de inmediato.

Sé que mi hermana no dará su brazo a torcer. Seguirá intentándolo hasta que mi respuesta sea un sí.

Resoplo resignada, no quiero escuchar sus lloriqueos, así que al final le digo que la llevaré al dichoso centro comercial.

―¡Gracias hermana!―me besa la mejilla mientras se cuelga de mi cuello.

Luego toma una galleta desde encima de la mesa y comienza a salir de la cocina, pero antes de que pase por la puerta le advierto:

―Te doy quince minutos. Si no estás lista en ese tiempo olvídate de que te lleve.

Ella abre los ojos y sale corriendo de la cocina. Yo sonrío, mi hermana aún no madura, sigue siendo una niña caprichosa.



Ya estoy conduciendo mi auto en dirección al centro comercial.

Emily se ha adueñado del sistema de sonido de mi auto y tengo que escuchar su lista de reproducción.

Casi todo es música electrónica.

Reconozco a Calvin Harris y a Afrojack. Ella canta y baila en su asiento, mientras que yo la miro y río divertida.


Llegamos al gran centro comercial, hace un buen rato que no venía por este lugar.

No sé por qué lado me llevará Emily, solo espero que cumpla su promesa y esta tortura dure lo menos posible.


Caminamos por los pasillos y ella mira cada tienda.

Esto durará una eternidad, de eso estoy seguro.

―¡Aquí!―dice mi hermana emocionada cuando ve una gran librería.

―¿Una librería? ¿Qué hacemos en una librería?

―Comprar un libro. ¿No es obvio, hermana? Ese será el regalo para mi amiga.

―Ya, ¿pero tus amigas saben leer otra cosa que no sean las revistas de moda?

―Ja, qué graciosa. Vamos, acompáñame.

Tira de mi mano y entramos a la gran librería. No sé qué quiere comprar, así es que la dejo sola que mire todo lo que quiera, pero ojalá no demore mucho.

La verdad es que ya me estoy comenzando a aburrir.

Miro a mi alrededor toda la cantidad de libros y el recuerdo de Brittany leyendo su libro romántico llega a mi mente.

Suspiro ante ese recuerdo.

Ella, siempre es ella… No, Santana, para esto ya.

Me alejo un poco de Emily y llego hasta un pasillo donde se encuentran los libros de fantasías y cuentos. Observo los títulos de aquellas historias, pasando mis manos por sus lomos, cuando de pronto escucho una voz:

―¿Me puedes alcanzar El manual de las hadas, por favor?―me giro y tengo que bajar la mirada para ver quién me habla.

No puedo creer lo que ven mis ojos.

Ahí, junto a mí, está una niña de largo cabello rubio y grandes ojos claros.

Esa niña es la hija de Brittany.

―¿El manual de las hadas?―respondo luego de mover mi cabeza para reaccionar.

―Sí. Es ese de color rosa que está hasta arriba. Yo soy pequeña y no lo alcanzo, pero tú eres muy alta y lo puedes sacar.

―Claro. El manual de las hadas―giro y tomo desde lo alto del estante el famoso manual y se lo entrego a la pequeña.

―¡Gracias!―dice y sus ojos se iluminan cuando tiene el libro entre las manos.

Se sienta en el suelo y comienza a ver el libro. Yo la miro con curiosidad, es tan parecida a su mamá.

Y de pronto pienso en Brittany y en dónde estará.

―¿Cuál es tu nombre?

―Susan.

―Susan. ¿Y qué haces aquí sola, Susan?

―No estoy sola. Vine con mi mami. Ella se queda en la parte de los libros que le gustan y yo vengo aquí a leer El manual de las hadas.

―Susan, ¿y tú mamá no te ha dicho que no hables con extraños?―pregunto y me siento en el suelo frente a ella.

―Sí.

―Y entonces, ¿por qué estás hablando conmigo?

―Pero es que tú no eres una extraña. Eres amiga de mamá. Te vi la otra vez en mi casa cuando fuiste a verla y también te vi en una foto en el diario. Mi mamá dijo que eras su amiga cuando le pregunté por ti.

No puedo creer que una niña tan pequeña maneje tanta información.

Tiene una respuesta para todo, igual a su mamá.

―¿Y por qué El manual de las hadas? ¿No hay otro libro que te guste?

―Claro, me gustan muchos, pero éste es mi favorito.

―¿Y por qué? ¿Por qué te gustan las hadas?

―Porque ellas nos regalan deseos. Si nos portamos bien, claro.

―Ah―digo y sonrío por lo que me está contando con tanto convencimiento.

―¿Tú crees en las hadas?―me pregunta mirándome fijamente a los ojos y no sé qué responderle.

¿Qué se le dice a una niña pequeña que cree ciegamente en la magia?

―Bueno…yo… creo…

―Susan, no molestes a la señorita.

Giro mi cara y la veo.

Es Brittany que está acercándose por el pasillo y se ve hermosa. Mi corazón se acelera, hace semanas que no la veo. Hace días que se las arregla para colarse en mis pensamientos por más que trato de arrancarla de ellos para siempre.

Ella me mira con el ceño fruncido. Yo me levanto y se acerca hasta Susan.

―Hola, Brittany.

―Santana.

Eso es todo lo que dice.

Solo una palabra.

Quiero que me hable, quiero que me diga algo, aunque me lance una pesadez.

―Vamos, Susan, tenemos que ir a almorzar.

―Pero mami. Estoy leyendo a las hadas, solo un poco más, ¿quieres?

―Lo siento, hija. Tenemos que irnos.

La niña se levanta y en la cara va mostrando su gran enojo. Brittany la mira y luego me mira a mí.

―Brittany, ¿podemos hablar?

―No lo creo, Santana. Bien, Susan, deja ese libro y despídete de la señorita, nos vamos.

―Adiós, Santana―me dice Susan con tristeza y me entrega El manual de las hadas.

―Adiós, Susan―le respondo y veo cómo ella se va alejando por el pasillo.

Brittany me mira una última vez y sin decir ni adiós, se aleja hasta que desaparece de mi vista.

Me quedo ahí parada.

Verla me ha hecho darme cuenta cuánto la he extrañado y eso es demasiado.

Ahí, en ese pasillo del cual no me he movido, me encuentra mi hermana.

―Tana, pensé que me habías dejado sola. Ya tengo lo que necesito. ¿Y tú?

Pienso en lo que necesito, y claro que no lo tengo.

Necesito a Brittany y no la tengo conmigo.

Miro el libro entre mis manos y sonrío.

«Las hadas nos regalan deseos si nos portamos bien» me ha dicho la pequeña Susan.

¿Será que las hadas me regalaran un deseo a mí que no me he portado tan bien?


Camino para salir del pasillo y llego a la caja junto a mi hermana. Ella paga el libro y luego yo paso el mío.

―Voy a llevar éste―le digo a la vendedora que me da una mirada divertida porque claramente no es un libro para una mujer como yo. Pero luego de que lo marque le digo―Para regalo por favor.






******************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 3:) Vie Oct 21, 2016 9:28 am

Hola morra..

Bueno la reaccion de san no fue la mejor cuando se entero lo de su...
Es totalmente sierto lo que le dijo quinn... y lo sabe!!! Pero se puede cambiar no???
No son tan malos los niños jajaja es normal que britt reaccione de esa manera.. despues de como se fue san!!!...
A ver si a san las hadas me cumplen el sueño jajaj

Nos vemos!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por micky morales Vie Oct 21, 2016 7:32 pm

Logico que britt este resentida con san por practicamente huir al enterarse de la existencia de susan, pero apuesto que esa peque se ganara a la lopez mayor, a ver como van las cosas cuando san entregue ese obsequio!!!!! [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2145353087 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 918367557
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 23l1 Vie Oct 21, 2016 8:19 pm

3:) escribió:Hola morra..

Bueno la reaccion de san no fue la mejor cuando se entero lo de su...
Es totalmente sierto lo que le dijo quinn... y lo sabe!!! Pero se puede cambiar no???
No son tan malos los niños jajaja es normal que britt reaccione de esa manera.. despues de como se fue san!!!...
A ver si a san las hadas me cumplen el sueño jajaj

Nos vemos!




hola lu, no, no lo fue =/ Sip, toda la razón para la rubia de ojos verdes! Si lo hace de corazón si q pude! Jajajajaja no, no lo son xD jajaja traviesos puede jajajaajajajaja. Si, tiene todo el derecho, no¿? esa morena no lo hizo bn xD Jajajajajajaaj. aquí el siguiente cap para saberlo! Saludos =D





micky morales escribió:Logico que britt este resentida con san por practicamente huir al enterarse de la existencia de susan, pero apuesto que esa peque se ganara a la lopez mayor, a ver como van las cosas cuando san entregue ese obsequio!!!!! [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2145353087 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 918367557




Hola, sip, obviamente que se los ganara osea, si la pierce mayor pudo, como la mini britt no va a poder¿? ajjajajaajaja. zquí el sigueinte cap apra saber mas de eso! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 13

Mensaje por 23l1 Vie Oct 21, 2016 8:20 pm

Capitulo 13


―¿Un regalo? ¿Para quién?―pregunta mi hermana mientras salimos de la librería.

Está curiosa por saber a quién le he comprado un regalo, pero yo no quiero decirle nada, ni siquiera yo sé por qué lo he hecho.

―Para una amiga―respondo corta y precisa, pero sé que ella no parará de preguntar.

―Una amiga… No sabía que tenías amigas menores de dieciocho años. Además, tú nunca has comprado un regalo a una mujer.

En eso mi hermana tiene razón.

Nunca he comprado algún presente para una mujer. Bueno, solo a mi mamá, a Emily y Quinn, pero eso no cuenta, ¿verdad?

―Em…

―El libro que compraste es para niños. ¿Por qué, San? Anda, cuenta.

Seguimos caminando por los pasillos del centro comercial, no quiero hablar de este tema, menos con ella.

Pero, por lo visto no entiende.

―Em, será mejor que vamos a almorzar.

―Pero, San…

―Emily, entiende, si te estoy contestando con evasivas es porque no te quiero contar. No insistas, ¿quieres?

Me mira con los ojos muy abiertos, pero se queda callada respetando mi decisión de no contarle nada. Luego, camino para salir del centro comercial y llegar hasta mi auto, Emily solo me sigue sin decir ni media palabra.

Conduzco en dirección al restaurante donde almorzaremos con mi hermana cuando el sonido de mi móvil rompe el silencio que inunda el interior del auto.

Emily está enojada porque no le he contado para quién es el regalo que ahora está en el asiento trasero de mi auto y eso la tiene comiéndose la cabeza.

Solo quiere saber quién es mi pequeña amiga misteriosa.

Veo en la pantalla del móvil que es Marley quien me llama, así que decido contestar en el alta voz.

―Hola, Marley.

―Hola guapa. ¿Cómo estás?
―la alegre voz de mi amiga me hace sonreír y distiende un poco el ambiente en el auto.

―Muy bien, ¿y tú?

―Bien. Te llamo por el encargo que me hiciste.

―Sí, dime, ¿cómo te ha ido con eso?


Hace unos días le pedí a Marley que me buscara un lugar donde vivir.

Necesito mudarme de la mansión lo antes posible.

―Muy bien. Ya tengo dos lugares que sé te pueden gustar. Uno es un ático, muy cerca de donde vive Q y el otro es en un condominio. Está un poco más alejado de la ciudad, pero es un lugar muy espacioso y elegante.

Emily gira su cara de golpe hacia mí.

No se puede creer lo que escucha.

Ya me estoy imaginando todo lo que vendrá, todo lo que tendré que escuchar luego de que la llamada de Marley termine.

―Genial. ¿Cuándo crees que podamos verlos?―pregunto ansiosa.

―Cuando quieras. Me dices el día y vamos.

―Bien. Deja que revise mi agenda y coordinamos la visita.

―Bien, espero tu llamada. Ahora te dejo. Besos, guapa.

―Besos, Marley.


La llamada termina y espero a la reacción de mi hermana, la cual no demora en llegar.

―San… ¿escuché bien? ¿Te vas a mudar de la mansión?

―Sí.

―¡No lo puedo creer! ¿Y mamá lo sabe?

―No.

―¿Sabes cómo se va a poner cuando lo sepa?

―Em. Deja de ser tan dramática. Mamá no se tiene que poner de ninguna forma. Ella no tiene nada que opinar sobre esto.

―Pero ella no querrá que te vayas, sabes que para ella eres su hija consentido.

Pienso en lo que me dice Emily.

Es verdad que mi mamá ha sido muy consentidora y no solo conmigo, con Emily es igual. Pero la decisión de mudarme ya está tomada, ya es hora de dejar la mansión y hasta creo que me he demorado mucho en salir del nido.

―¿Pero no crees que ya estoy un poco mayorcita como para seguir viviendo con mis padres?

―Yo te entiendo, hermana, pero es que mamá aún te ve como su bebé.

Sé que más temprano que tarde mi mamá se enterará de mi decisión y todo gracias a Emily. Sé que apenas ella ponga un pie dentro de la mansión, mi querida hermanita le irá con el chisme y de seguro se vendrá el drama total.

De solo pensar en lo que dirá mi mamá cuando se entere de que dejo la mansión, se me hace un nudo en el estómago.



Llegamos a un restaurante al que hemos ido varias veces con mi familia.

Emily no para de hablar de todo lo que ha sucedido en este día y la verdad es que he estado tentado de levantarme y salir corriendo desde aquel lugar y dejarla sola.

Trato de no escucharla, pero es imposible.

Por todos los cielos, ¿por qué hoy no podía ser un día tranquilo para mí?


Por fin terminamos de almorzar, ya quiero volver a casa y encerrarme en mi cuarto hasta el día siguiente.

Nos subimos en el auto y piso el acelerador para llegar lo antes posible a la mansión.

No me importa si me detiene la policía por ir conduciendo a exceso de velocidad. Creo que si me llevan detenido sería genial, así encerrada, no escucharía a la pesada de mi hermana.


Llegamos a la mansión López, Emily baja y yo saco el regalo que he comprado y lo coloco bajo mi brazo para caminar hasta la entrada de la mansión.

Gracias a Dios mi hermana se ha quedado muda, creo que ya entendió que, por mucho que me presione, no soltaré prenda de para quién he comprado este regalo.


Entro en la mansión, mis padres aún no llegan y eso me tranquiliza un poco.

No escucharé los gritos de mamá, por lo menos tengo un par de horas de descanso.

Me voy a mi habitación y con el libro aún bajo el brazo entro en mi cuarto y me siento al borde de la cama. Acaricio el papel que envuelve el "Manual de las Hadas" y la imagen de la pequeña rubia viene a mi mente.

La dulce mirada de la pequeña, con sus grandes ojos claros, me ha dejado totalmente confundida.

También pienso en Brittany y en cómo me miró hoy en la librería, con ese desprecio y rabia que se reflejaban claramente en sus ojos.

¿Qué debo hacer ahora?

Lo que quiero es correr hasta ella y besarla con locura y borrar esa mirada de odio con la que me vio.

Luego pienso en lo hablado con Quinn y en lo de que ella no quiere que entre en su vida.

Eso me provoca una extraña sensación en mi interior, porque una parte de mí, la parte de la razón, quiere dejarla tranquila.

No meterme en su vida, ya que no soy la persona que ella necesita.

Nunca seré una mujer reformado por amor, como lo es Quinn.

El amor ni siquiera está en mis planes futuros, la verdad es que nunca he sentido amor por alguna mujer.

Pero la parte irracional, la parte que la desea con locura, me pide que la siga, que la haga mía otra vez, que no la deje escapar.

Me tomo la cabeza con ambas manos, todo esto es una locura.

Me recuesto en la cama mirando al techo. Y, pensando en Brittany, me quedo dormida.



Me despierto cuando la puerta de mi cuarto se abre de golpe.

Sobresaltada y sin saber muy bien qué pasa veo que mi mamá está parada
en la puerta.

―¿Qué pasa mamá? ¿Por qué entras así en mi cuarto?

―¿Es verdad lo que me acaba de contar tu hermana? ¿Es verdad que te vas a ir de la mansión?

Mi querida hermanita no podía mantener su boquita cerrada, eso era mucho pedir. Ahora me toca aguantar el drama que de seguro mi mamá me hará.

―Mamá …yo…

―¿Por qué, hija? ¿Por qué quieres dejarnos?

―Mamá, ¿no crees que estoy un poco mayor para seguir viviendo con mis padres?

Ella me mira como si fuera una locura lo que estoy diciendo.

―Pero es que hija, aquí tienes todas las comodidades, la mansión es amplia como para que tengas tu espacio y…

―Sí, mamá, todo eso es verdad, pero ya es tiempo de que tenga un lugar propio.

Mi mamá me toma de la mano, como si con eso yo no me fuera a ir de su lado.

―¿Y ya tienes un lugar? ¿Dónde, hija? Dime dónde te vas a mudar.

―Aún no lo sé, mamá. Le pedí a Marley que me busque algo, dentro de unos días veré que tal. mamá, tampoco es que me vaya a ir al otro lado del mundo, solo a unos minutos de aquí. Además me verás muy seguido por la mansión.

Ella me acaricia el rostro y me sonríe con calidez. Luego suelta un suspiro y me dice:

―Lo siento, hija. Siento haber actuado así, tan exagerada, pero aunque tengas cien años, para mi sigues siendo mi pequeña. Ay, qué tonta―dice y una lágrima cae por su mejilla.

La abrazo fuerte, amo a mi mamá, pero yo necesito vivir sola y tener intimidad.

Nos quedamos así un rato, solo abrazadas y sin decir nada, entendiéndonos a la perfección.

Luego ella rompe el contacto, se levanta de la cama y me pide que no falte a la hora de la cena.

Sé que está triste y sé que será peor cuando me vaya, pero está mi hermana y ella le hará compañía. Ella no piensa moverse de la comodidad que le proporciona la mansión.




La cena transcurre mejor de lo que esperaba.

Mi papá me pregunta con curiosidad por mi decisión de irme de la mansión, y creo que está contento y hasta aliviado de que me vaya.



Luego de la cena me voy con él a la biblioteca donde bebemos un vaso de licor.

―Hija, ¿estás seguro de dejar la mansión? Ya sabes, esta es y siempre será tu casa.

―Lo sé papá. Pero, ya es tiempo de dejarlos, ¿no crees?

―Creo que sí, pero es tu mamá la que no lo entiende.

―Ya lo entenderá, no me iré mañana, así que tendrá tiempo para acostumbrarse.

Miro con detenimiento el licor de color ámbar dentro de mi vaso. El silencio se ha hecho de pronto entre los dos.

―¿Qué te pasa, Tana?―pregunta mi papá de pronto y yo levanto la mirada para encontrarme con la suya llena de interrogantes.

―A mí, nada… ¿Por qué lo preguntas?

―Has estado actuando muy rara últimamente, hija. Es como si algo te preocupara de sobremanera. Casi siempre estás perdida en tus pensamientos, dime, ¿qué es lo que sucede? ¿Tienes algún problema?

Vaya, no tenía ni idea de que me viera de tal manera.

Es verdad de que he estado muy pensativa últimamente pensando en Brittany y todo lo sucedido con ella, pero no puedo contarle nada a mi papá.

No puedo decirle que me acosté con la rubia cuando él expresamente me lo había prohibido.

―No es nada, papá. Solo es un poco de cansancio.

―Tana, te conozco muy bien y sé que algo te preocupa. Y sé también que no me quieres contar nada, pero no te voy a preguntar más. Solo quiero que sepas que cuando quieras hablar aquí estaré para escuchar.

―Gracias, papá.

La conversación termina y yo vuelvo a mi habitación.

Pienso en lo dicho por mi papá, en que he estado desconcentrado y esto no puede seguir así.

Tengo que dejar de pensar en Brittany …por lo menos en el trabajo.





Me estoy vistiendo para comenzar una semana más de trabajo.

La semana pasada fue tediosa y sin sobresaltos.

Todo normal en el Holding, menos yo.

Todos y cada unos de los días pasados me los he pasado pensando en Brittany y en qué hacer respecto a ella. No sé si ir a buscarla o dejarla tranquila de una vez por todas.

Pero, cuando ya tengo decidido olvidarla, el recuerdo de su cuerpo y su boca hace que la sangre en mis venas se caliente como el infierno.

Sin embargo, cuando estoy decidido a buscarla, me arrepiento y no hago nada, porque ni yo misma entiendo qué me pasa y qué es lo que quiero con ella realmente.

Aún tengo el regalo para Susan en mi habitación.

He pensado un par de veces en ir hasta su casa para entregárselo, pero me arrepiento al instante de haberlo pensado.


Ya estoy metido en el ascensor subiendo hasta el piso quince para comenzar mi día laboral. El timbre del aparato me indica que ya he llegado a mi destino.

Salgo al vestíbulo y me encuentro con ella… Brittany está en la recepción hablando con Tina.

Me quedo mirándola por un instante.

Sonríe a algo que le dice Tina. Observo su cabellera rubia que cae en suaves ondas por sobre sus hombros y no puedo dejar de fijarme en su cuerpo.

De pronto siento mucho calor.

La suavidad del cuerpo de esta mujer acude a mi mente. Mi pulso se acelera, han sido tantos días sin verla, pero…

¿Qué hace ella aquí?

Muevo mi cabeza de un lado a otro para reaccionar y camino hasta el escritorio de Tina. Estoy a su lado y Brittany, al notar mi presencia, me mira nerviosa y se sonroja de inmediato.

―Buenos días―saludo mirándola fijo a sus ojos azules.

―Buenos días―responde casi susurrando.

Y ahí nos quedamos.

Mirándonos sin decir nada, en un silencio tenso que Tina no se atreve a romper, aunque sé que debe darme los mensajes del día.

Pero, yo no aguanto más.

Tomo de la mano a Brittany y la voy guiando por el pasillo que lleva a mi oficina. Ella no se resiste, y es un alivio que no lo haga, porque así nos evitamos el escándalo, aunque el solo hecho de ir de mi mano ya desate las habladurías en el piso quince…y me importa una mierda.

Rápidamente llego a la puerta de mi oficina, la abro y dejo que sea ella quien entre primero. Yo la sigo y cierro la puerta tras de mí.

―San…

Es todo lo que alcanza a decirme, no la dejo hablar ya que comienzo a besarla como una loca desesperada.

En este momento soy una sedienta en el desierto y su boca es el agua que necesito.

Brittany trata de zafarse de mi agarre, pero mientras más se remueve entre mis brazos más la aferro contra mí.

Esta mujer me quita la poca cordura que tengo.

Besar nuevamente su boca es un placer inimaginable, un placer que me gustaría disfrutar a diario.

Aunque no quiero, dejo de besarla, quiero ver sus ojos, quiero hablar con ella.

―Santana …no… esto no…no aquí―balbucea mientras abre los ojos.

―Lo sé, pero es que no me pude aguantar las ganas, Brittany. Es algo que no puedo explicar.

―Pero esto no está bien. Tú sabes que esto no está bien.

―¿Por qué no, Brittany?

Se vuelve a remover entre mis manos y decido dejarla libre.

Ahora nos toca hablar.

―Santana, ya conoces mi situación. Yo no puedo seguir con este juego.

―¿Juego?

―Sí. Para ti esto es un juego. Cuando estuvimos en Aruba fue porque no pensé en nada y quería estar contigo. Pero ahora esto es un juego. Me ves y me besas. Me llevas a una oficina y tenemos sexo…

―A mí no me pareció que te molestara cuando lo hacíamos.

Brittany me fulmina con la mirada. Creo que si pudiera me daba un golpe en plena cara.

Por precaución me alejo un poco.

―Serás imbécil. Es que es lo que digo. Todo para ti es un juego. Sí, estuve contigo, me gustó tener sexo contigo, me encanta cuando me besas, pero ya no más.

―Brittany…

―No. Ya no más, Santana. No quiero seguir con este juego, no puedo. Tú eres una niña consentida a la que no le han negado nada en la vida, pero yo tengo una hija de la cual cuidar y…

―¿A dónde quieres llegar, Brittany? ¿Qué tiene que ver Susan en esto?

Toma una honda respiración, es como si yo la estuviera sacando de quicio.

En este momento siento que me odia más que a nadie en el mundo.

―¿Es que tú no entiendes a dónde nos lleva todo este jueguito? Aunque no lo quieras se involucran sentimientos y yo…yo no quiero enamorarme de ti.

Siento como si alguien me hubiera metido una mano en el estómago y ahora me lo arrancara de golpe.

¿Qué es esto que siento?

¿Por qué me molesta tanto lo que me ha dicho Brittany?

―¿Por qué no, Brittany?

No sé por qué le pregunto esto, no sé si me gustará escuchar su respuesta.

―Porque tú no eres la persona que yo necesito.

Sus palabras me duelen más de lo que yo pensaba.

Me siento rabiosa y miserable a la vez.

―No soy la persona que necesitas…―repito como para convencerme de ese hecho.

―No, Santana, no lo eres. Tú sigues viviendo la vida sin que nada ni nadie te importe, pero yo si tengo de quién preocuparme. Estuvimos juntas dos veces y creo que es suficiente, no sigamos con este jueguito, por favor.

Yo la miro fijo, apretando las manos, formando dos puños que me gustaría estrellar con rabia contra una de las paredes.

Ella se quiere alejar de mí porque no soy la mujer responsable, la princesa que ella y su hija necesitan.

Y me sorprendo a mi misma sintiendo que deseo ser una mejor persona, la mujer que ella desea… Yo sí que estoy jodida.

―Brittany, yo…

No puedo terminar la frase, el teléfono móvil de Brittany nos interrumpe. Busca en su bolso, saca el aparato y se dispone a contestar.

―Hola―dice y se gira dándome la espalda para que no me meta en su conversación―Sí, soy yo.

Se queda quieta oyendo lo que le dicen y yo me acerco un poco. Esta atracción que siento hacia ella desde el primer día me juega en contra.

Necesito tenerla más cerca y más y más.

―No, no puede ser―dice de pronto y noto que su cuerpo vibra.

Gira y me mira con sus grandes ojos azules que están a punto de soltar lágrimas.

―Iré de inmediato―termina la conversación y se queda petrificada.

―¿Sucede algo malo, Brittany?

―Mi mamá, tengo que ir…mi mamá …está en el hospital.

Me alcanzo a acercar más a ella justo en el momento en que le flaquean las
piernas. La tomo entre mis brazos y la llevo hasta un sofá. Ahora las lágrimas corren por su rostro y yo trato de calmarla, mientras que con mis dedos voy limpiando sus mejillas.

―Cálmate y cuéntame qué pasa. ¿Qué le sucedió a tu mamá?

―Está en el hospital. La ingresaron de urgencia por un alza de presión. Necesito ir enseguida, algo puede pasar…necesito ir.

―Claro que vas a ir. Es más, yo te llevaré. Vamos.

Me levanto y le extiendo la mano. La mira, dudando por un segundo sí aceptar o no mi ayuda. Hasta que posa su mano en la mía y se levanta.


Salimos de la oficina y volvemos a recorrer el vestíbulo tomadas de la mano.

Todos nos miran, incluso Quinn que viene entrando por el pasillo y se queda pasmada con lo que ve.

―¿San? Pero que…

―Ahora no, Quinn. Esto es una urgencia. Dile a Tina que cancele mi agenda, ¿quieres?

Mi amiga queda con la mandíbula desencajada sin saber qué decirme. Yo no me detengo hasta llegar al ascensor y escucho que Brittany me dice:

―No es necesario que vengas conmigo, Santana. Debes estar muy ocupada y tu trabajo…

―No me importa. Ya dije, voy contigo.


Llegamos a mi auto y conduzco con rumbo al hospital.

Ella está nerviosa y de vez en cuando la escucho rezar bajito. Está asustada por lo que pueda pasarle a su mamá. Me pongo en su situación y yo también lo estaría.



Llegamos al hospital y ella corre hasta un mesón para pedir información.

Le dicen que la señora Pierce tuvo un alza de presión y que está en observación. Pregunta si puede verla y le dicen que tiene que esperar hasta que salga el médico y hable con ella.

Nos sentamos en la sala de espera.

Una frente a la otra.

No sé muy bien qué hacer en estos casos. Le ofrezco algo de comer, algo de beber y algo de comer otra vez y todo me lo ha rechazado.



Ya llevamos más de una hora en esa sala y nadie ha salido a decirnos ni una mísera palabra.

Brittany piensa lo peor, noto en sus ojos el terror a que algo malo suceda. De pronto mira su reloj y se toma la cabeza con ambas manos.

―No puede ser.

―¿Qué sucede, Brittany?

―Susan. Me olvide por completo de ella. Ya debe estar por salir del colegio. ¿Qué voy a hacer ahora?

La veo desesperada, no me gusta verla de este modo y sin pensar en nada me ofrezco:

―Yo voy por Susan al colegio.

―¿Tú?

―¿Tienes una mejor idea?

―No. Pero es que no quiero que tú…

―Brittany, es una urgencia. Voy por Susan y la puedo llevar a almorzar, no creo que quieras que ella venga aquí. Me puedes llamar a cada segundo si así estás más tranquila.

Me mira sorprendida…qué mierda… si hasta yo me estoy sorprendiendo con este ofrecimiento.

¿Qué estoy haciendo?

―¿Estás segura, Santana? No tienes por qué hacerlo.

―¿Tienes a alguien que vaya por Susan? No, ¿verdad? Tendrías que ir tú y no quieres dejar a tu mamá tampoco. Es decir que soy la mejor opción.

Brittany se muerde el labio inferior, está en una encrucijada. No se fía cien por ciento de mí, pero en este momento soy la única persona a la cual puede recurrir.

―Está bien. Llamaré al colegio y diré que irás a buscarla.

Llama y da mi nombre para no tener problemas cuando vaya por Susan. Me da la dirección del colegio y yo me levanto para salir.

―Gracias, Santana. De verdad, muchas gracias.

―De nada―digo y le beso la mejilla y luego salgo del hospital.



Conduzco por las calles para llegar hasta el colegio de Susan.

Apenas si pienso en todo lo que estoy haciendo.

Llego al colegio y estaciono mi auto, nunca me imaginé haciendo esto. Si me viera Quinn no dejaría de molestarme de por vida.

Llego a la entrada donde me atiende una amable mujer y, luego de decirle que vengo por Susan, ella desaparece en busca de la pequeña rubia.

Unos minutos después, Susan aparece.

Vestida impecable con su uniforme y peinada con una alta coleta de caballo que se mueve de lado a lado.

―Hola, Santana―me saluda risueña.

―Hola, pequeña hada. Tu mamá me envió por ti. ¿Lista para irnos?

―Sí―me dice y me toma de la mano.

Salimos del colegio y llegamos a mi auto.

―¿Y dónde está mamá?

―Está con tu abuela. Tienen algo muy importante que hacer. ¿Tienes hambre?

―Sí, mucha.

―Bien. ¿Qué te parece si almorzamos?

―Me parece muy bien. ¿Dónde almorzaremos?

Pienso y pienso dónde llevar a una niña de seis años a almorzar. Qué le gustará comer a esta pequeña rubia. Luego de darle un par de vueltas al asunto le digo:

―Iremos a almorzar a mi casa.

―¡Genial!―me dice entusiasmada.


Sigo conduciendo y pienso en qué será de este almuerzo en la mansión.

Pienso en qué dirá mi mamá y mi hermana cuando me vean llegar con mi pequeña amiga.

Todo puede pasar este día.





******************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 3:) Vie Oct 21, 2016 9:49 pm

Hola morra...

Es impocible que se mantengan separadas...
Bueno... san esta "madurando"... se va a mudar eso es algo no???
Bueno britt le pide madures a san... y lo esta haciendo bien!!!...
A ver como reaccionan cuando vayan a la mancion??

Nos vemos!!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 23l1 Sáb Oct 22, 2016 1:21 am

3:) escribió:Hola morra...

Es impocible que se mantengan separadas...
Bueno... san esta "madurando"... se va a mudar eso es algo no???
Bueno britt le pide madures a san... y lo esta haciendo bien!!!...
A ver como reaccionan cuando vayan a la mancion??

Nos vemos!!!



Hola lu, si que lo es jajajjajajaaj. Mmm si, osea paso a paso, no¿? jajajajja. Si, un poso a favor para la linda morena, no¿? jajajaja. Para saber eso, aquí dejo el siguiente cap! jajaja. Saludos =D



23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 14

Mensaje por 23l1 Sáb Oct 22, 2016 1:24 am

Capitulo 14


―¿Esta es tu casa?―pregunta Susan mientras vamos por el sendero que nos lleva a la entrada de la mansión.

―Sí, esta es mi casa.

―Wow, si esto parece un castillo. ¿Y vives sola aquí?

―No. Vivo con mis padres y mi hermana.

―Ah, genial.

Detengo el auto y me bajo para ir hasta el asiento del copiloto y abrirle la puerta a mi pequeña invitada. Ella toma su bolso y baja del auto y tomadas de la mano, nos encaminamos hasta la puerta de la mansión.

¿Cuál será la reacción de mi mamá cuando me vea entrar de la mano de una niña?

Tal vez se desmaye.

Abro la puerta y entramos en la mansión, no escucho nada, tal vez no haya nadie en casa, pero lo dudo por la hora que es.

Susan mira todo con los ojos muy abiertos y yo sonrío al ver la curiosidad en su rostro.

Asoma su cara por la ventana que da hacia el jardín trasero y escucho que suelta un suspiro de admiración.

―¡Y tienes piscina! ¡Y una grande!―dice casi en un grito.

―Sí.

―¿Y podemos nadar?

―Creo que hoy no. Pero le podemos decir a tu mamá que te traiga otro día.

―¡Sí!

La alegría de Susan es contagiosa y no puedo evitar sonreír con su entusiasmo.

Esto es algo nuevo para mí.

―¿Y esta niña, quién es?―mi mamá entra en el salón y al escuchar su pregunta Susan y yo giramos la cabeza para mirarla.

―Mamá―digo poniéndome al lado de Susan quien mira a mi mamá con detenimiento―, Ella es Susan, la hija de Brittany.

Mi mamá abre los ojos claramente sorprendida por lo que escucha.

―¿Hija de Brittany? ¿ Brittany, la modelo de la nueva campaña?

―Sí, mi mamá es modelo―responde la pequeña rubia con un desplante que ya me quisiera yo.

―Ah―dice mi mamá y se acerca más a la niña―Bueno, entonces bienvenida, Susan.

Le extiende la mano y Susan se la estrecha con seguridad. Mi mamá sonríe, pero al mirarme de vuelta, en sus ojos puedo ver las interrogantes que tiene en este momento.

Mi teléfono vibra en el bolsillo de mi pantalón. Lo saco y veo que es Brittany.

Le contesto de inmediato.

―Hola, Brittany.

―Hola, Santana. ¿Todo bien? ¿Cómo está Susan? ¿Se está portando bien? ¿Dónde están?

―Tranquila. Todo está muy bien. Estamos en mi casa y ya nos preparamos para almorzar. ¿Y tu mamá, cómo está? ¿Hablaste ya con el médico?

―Sí. Están esperando a ver cómo evoluciona. Dentro de poco podré pasar a verla.

―Qué bien. Puedes estar tranquila, Susan se ha portado muy bien. ¿Quieres hablar con ella?

―Sí, por favor.


Me acerco a Susan, quien está manteniendo una entretenida conversación con mi mamá. Le extiendo el teléfono y le digo:

―Es tu mamá, quiere hablar contigo.

Ella toma el teléfono con prisa y contesta la llamada.

―Hola, mamá―dice con una sonrisa en la cara―Sí, estoy en casa de Santana. Mamá y es un palacio como el de la bella durmiente. Tiene una piscina gigante. Todo es muy bonito.

Susan sigue hablando contándole a su mamá todo lo que ha visto en la mansión.

Mi mamá aprovecha el momento y me pregunta:

―Así que Brittany tiene una hija. ¿Qué pasó con ella?

―Me la encontré en el Holding. Estábamos hablando cuando la llamaron desde el hospital para avisarle que su mamá había sido ingresada de urgencia.

―¿Y ella está bien?

―Me dice Brittany que ya está mucho mejor. No podía estar con la niña en el hospital y no tenía con quién dejar a Susan y yo me ofrecí a ayudarla.

―Te ofreciste…

―Sí, mamá. Brittany es mi amiga y tenía que ayudarla.

Mi mamá me mira aún incrédula.

Para ella esto es una novedad.

Sabe que no me gustan los niños y que yo me haga cargo de una, es todo
un evento.

―Sí, mamá. Me voy a portar muy bien. Besos―Susan termina la conversación con su mamá y me devuelve el teléfono.

―Hola.

―Santana, no sé cuánto me demoraré aquí, pero apenas vea a mi mamá y esté segura de que estará bien iré de inmediato por Susan. No quiero…

―Brittany, tranquila. Ella estará bien. Tómate todo el tiempo que necesites…

―Pero es que no quiero molestar más de…

―No es molestia, créeme. Ahora tú ocúpate tranquila de todo por allá. Cualquier cosa te llamaré enseguida.

―Santana …muchas gracias. De verdad, muchas, muchas gracias.

―De nada, Brittany. Adiós.


Corta la llamada y yo siento que mi pecho se aprieta.

Esta extraña sensación de querer hacer algo más por ella me invade por completo y no entiendo nada de lo que me sucede.

Aprovecho a mirar mis mensajes y me encuentro con unos cuantos de mi papá que me pide me reporte ya con él. No le hago caso, no quiero discutir con él en este instante.



La hora de almorzar llega y veo cómo mi hermana va bajando las escaleras hasta llegar junto a nosotras.

Emily mira a Susan sin entender qué hace una niña en nuestra casa. Luego me mira a mí y luego a nuestra mamá, hasta que por fin habla.

―Hola―le dice a Susan y se agacha un poco para quedar a la altura de la niña―, Soy Emily, la hermana de Santana.

―Hola, soy Susan, amiga de Santana.

Emily sonríe y le acaricia la cara a Susan.

―Eres muy bonita, Susan.

―Tú también eres muy bonita. Me gusta mucho el color de tus uñas.

―¿Te gusta? Lo tengo en mi cuarto. Si quieres, luego del almuerzo, lo podemos ver.

―Sí, genial.

Creo que mi hermana acaba de hacer una amiga.

Sin duda se llevarán de las mil maravillas.


El almuerzo fue de lo más entretenido.

Mi mamá se ha reído más de lo normal con cada ocurrencia de la pequeña rubia.

Al terminar, Emily cumple su promesa y lleva a Susan hasta su habitación.

De seguro tendrán un par de horas de entretención en ese lugar.

Me quedo con mi mamá en el salón hablando de Brittany. Sé que me quiere preguntar por ella y yo le evito la pregunta diciendo que solo somos amigas cada vez que me pregunta por el interés que tengo por ella.

De pronto la puerta de la entrada se abre y mi papá llega hasta nosotras.

Se le ve enojado, irritado y creo que viene directo hacia mí para golpearme.

―¿Pero qué es lo que te crees? ¿Qué haces aquí cuando deberías estar en el trabajo?

―Papá, tengo una explicación. Si me dejas yo…

―Claro que tienes que tener una muy buena explicación para tu irresponsabilidad. Si pareces una chiquilla de quince años faltando a la escuela. Santana, que esto no es un juego. Ni siquiera te dignaste a contestar uno de mis mensajes, qué te crees, si soy tu jefe…

Mi papá a cada segundo va aumentando el tono de voz y su ira y siento que, en cualquier momento, le va a dar un ataque cardíaco.

―Querido―interviene mi mamá―, Tanita puede explicarlo todo. Si la dejas hablar…

―Ah no, Maribel. Deja de defender a esta vaga. Por eso está como está, porque la has sobreprotegido desde niña…

―Santana. ¿Por qué te grita tanto este señor?

Todos giramos la cabeza a la vez y vemos a mi hermana que ha llegado al salón junto con Susan.

A mi papá se le desfigura mucho más el rostro de lo que ya lo traía. Esto no le cuadra, nada tiene sentido para él.

―Susan, este señor es mi papá.

Susan se acerca de a poco hasta llegar a mi papá y lo mira con el ceño fruncido.

―¿Y tú te portaste mal y por eso él te está regañando?

Mi papá la mira incrédulo y luego de unos segundos suelta una carcajada.

―¿Y quién es usted, señorita?―pregunta Alfonso, tratando de parecer serio con el ceño fruncido, pero no lo consigue ya que una sonrisa se asoma en la comisura de la boca.

―Soy Susan Pierce. ¿Y usted?

―Alfonso López. ¿Susan Pierce?

―Sí, papá. Susan Pierce, como Brittany. Susan es su hija.

Mi papá abre mucho más los ojos y pasa su mirada de Susan a mí y viceversa. Y luego la fija en mí, como pidiéndome que le explique qué hace Susan en la misión.

―¿Santana se portó muy mal?―Susan vuelve a la carga.

―Digamos que sí. Ahora voy a hablar con ella para que me explique todo―le dice mi papá a la pequeña, pero posa su mirada en mí.

Me está exigiendo una explicación.

―Bueno, pero no la regañe mucho, ¿quiere?

Alfonso asiente con la cabeza y Emily invita a Susan a tomar helado en la cocina y desaparecen junto con mi mamá de nuestra vista.

―Santana, a la biblioteca…ahora.

Mi papá está enfadado por haber dejado el trabajo abandonado el día de hoy, pero cuando le explique sé que entenderá todo.

Él camina rápido hasta la biblioteca y yo lo sigo a toda prisa.

Ya estamos en la biblioteca y estoy esperando a que él hable. Se para frente a mí y me observa con detenimiento, cruzándose de brazos y con el ceño fruncido.

Al final, soy yo la primera en hablar tratando de darle una explicación.

―Papá, yo…

―Quiero que me expliques todo. Quiero saber por qué dejaste el trabajo abandonado y por qué la hija de Brittany está aquí.

―Brittany tuvo un problema con su mamá, ella está en el hospital. Estaba en el Holding cuando la llamaron, estaba muy nerviosa y yo la llevé hasta el hospital, no podía dejar que fuera sola. Brittany es mi amiga, tenía que ayudarla, papá.

―Claro… amigas. ¿Y la pequeña? ¿Por qué está aquí?

―Brittany no tenía cabeza para cuidarla y no podía tenerla con ella en el hospital. Así es que me ofrecí para cuidarla mientras se ocupa de su mamá.

―¿Y el papá o la otra mamá de Susan?

La pregunta de mi papá me pilla de sorpresa, no he tenido la oportunidad de preguntarle a Brittany por esa persona, pero el solo hecho de pensar en esa persona, hace que se me revuelva el estómago y eso me hace sentir extraña.

―No lo sé―digo con la mandíbula apretada―No he hablado con Brittany de él o ella, pero creo que no ha sido muy presente que digamos si la pequeña lleva el apellido de la mamá.

El silencio se hace de pronto entre nosotros.

Mi papá me observa, como si todo lo que le he dicho le sorprendiera de sobremanera. Yo estoy incómoda, quiero que esta conversación termine pronto, ya no soporto este interrogatorio.

―San, cuando contraté a Brittany para la campaña te pedí que por favor no te acercaras a ella, ¿recuerdas?

―Sí―digo tragando en seco el nudo que se ha formado en mi garganta.

Mi papá se acerca un poco más a mí, yo la miro nerviosa, presintiendo lo que se viene y pensando en cómo explicarle todo lo sucedido con Brittany.

―¡¿Y no podías hacerme caso por una vez en la vida, maldita sea?!

―Papá, no sé a qué te refieres.

―Claro que lo sabes. Te metiste con Brittany y no te atrevas a negarlo porque se te nota a leguas que te gusta esta mujer y que ha pasado algo entre ustedes dos.

No digo nada, no puedo decir nada.

Y creo que es peor porque con mi silencio le estoy confirmando todo a mi papá.

―Me dijiste que confiara en ti cuando viajaste a Aruba y mira lo que pasa por confiar en ti.

―Pero… yo… papá …yo…

―Santana, pensé que, por una vez en tu vida, serías responsable. Pero me doy cuenta que para ti esto es un juego.

―No, eso no es verdad.

―¿No?

―¿Y cómo llamas a lo que estás haciendo con Brittany? ¿A caso tienes intensiones serias con ella?

―Papá, solo somos amigas.

―Espero que sea así y deja que te diga un par de cosas que espero se queden en tu cabezota.

Alfonso toma una honda respiración y suelta un suspiro, como si hablar conmigo fuera una pérdida de tiempo.

―Hija, Brittany tiene una hija.

―Lo sé papá, sé que tiene una hija, pero qué tiene que ver eso con lo que estamos hablando.

―Que tú no te tomas las cosas en serio. Si es verdad que es una mamá soltera ella no necesita de alguien como tú en su vida.

―¿Alguien como yo?―pregunto ofendida―¿Qué quieres decir con eso?

―San, ambas sabemos que, aunque pido al cielo que sientes cabeza pronto, a ti no te interesa el compromiso. Tú quieres vivir la vida como hasta ahora.

Como se nota que este hombre que está frente a mí es mi papá.

Me conoce a la perfección.

―Ella necesita estabilidad, cosa que tú no le puedes dar. Si me dices que son amigas, está bien, quiero creerte y ojalá sigan así. Pero si tu intención sigue siendo divertirte con ella, espero que no le hagas perder el tiempo.

Me jode todo lo que mi papá me dice porque sé que tiene mucha razón.

A mí me gusta Brittany, la deseo con locura, pero no sé si deseo tener un compromiso con ella. Y aunque me gusta estar con ella y con Susan creo que no soy la persona indicada para entrar en sus vidas.

Pensar eso hace que sienta un pinchazo en el corazón.

Algo que nunca antes había sentido en mi vida y ahora sí que quiero que esta conversación termine.

No quiero escuchar más cuán mala soy para Brittany.

―¿Ya terminaste, papá?―digo enojada.

―Sí, hija.

―Bien, entonces voy a salir de aquí.

Me giro sobre mis talones y doy tres pasos hasta llegar a la puerta y antes de que pueda abrirla mi papá me habla:

―San, piensa en todo lo que estás haciendo y sus consecuencias, solo piénsalo.

―Claro―le digo sin mirarlo y girando el pomo, abro la puerta de la biblioteca y salgo dejando a mi papá solo en esa habitación.

Camino rápido y salgo hasta el jardín trasero.

Me siento cerca de la piscina y hago memoria de todo lo conversado con mi papá.

Siento una rabia inexplicable, porque sé que tengo que dejar de pensar en Brittany como una más de mis conquistas, porque ella es una buena persona que no se merece que un canalla como yo juegue con ella y por Susan.

Por la pequeña hada sobre todo.

Ella merece un papá u otra mamá, si es que no lo tiene.

Merece alguien a quien admirar, al cual recurrir si lo necesita y yo solo he estado huyendo de todo lo que sea compromiso en mi vida.

Respiro hondo cerrando los ojos y la cara de Brittany aparece ante mí y tomo una decisión. Sé que me costará mucho, pero debo hacerlo, por ella y por Susan.

Desde hoy en adelante solo seré amiga de Brittany.

Mi teléfono vibra y veo que es la ojiazul la que llama. Es como si estuviéramos en la misma sintonía… Esto va a ser muy difícil para mí.

[i[―Hola, Brittany ¿Todo bien?

―Hola, Santana[/i]―se queda callada, su voz es triste, algo le pasa, algo sucedió con su mamá.

―¿Qué pasa, Brittany? ¿Cómo sigue tu mamá?

―Entré a verla…
―se vuelve a callar, pero luego suelta de golpe―Tiene parálisis facial del lado derecho.

Siento unas enormes ganas de correr hacia ella para abrazarla porque sé que le duele lo que le pasa a su mamá.

No sé muy bien qué decirle, no soy buena en estas cosas, pero si estuviera a su lado la abrazaría con todas mis fuerzas para que supiera que cuenta conmigo.

―¿Qué dijo el médico?

―Solo que hay que esperar. Que todo es por el alza de presión, pero que la parálisis se puede revertir.

―Brittany, ¿quieres que vaya hasta el hospital?

―No, Santana. Estoy bien. Solo que no sé en cuánto tiempo más voy a salir de aquí.

―No te preocupes, ya te dije que Susan está bien. Está con mi hermana en este momento. Quédate tranquila.

―Prometo ir en cuanto pueda…

―Brittany, tranquila…

―Gracias.


La escucho suspirar a través del teléfono y eso hace que mi piel se erice.

Brittany me enciende de sobre manera, por eso sé que mi tarea de ser solo su amiga será de lo más difícil.

―Bueno, tú cuida a tu mamá. Si necesitas que vaya por ti o te lleve algo solo llámame.

―Bien. Te dejo, voy a entrar a ver si ella necesita algo. Adiós, Santana.

―Adió, Brittany.






No sé cuánto tiempo he estado sentado al lado de la piscina.

Pero ya hace frío.

Miro mi reloj y compruebo que ha sido mucho el rato que permanecí afuera.

Brittany no me ha vuelto a llamar y no quiero llamarla para no interrumpir lo que esté haciendo en el hospital, solo la llamaré si es una emergencia.

Me voy a la cocina, no sé dónde se han metido todos.

La mujer del servicio me dice que mis padres salieron a cenar y que mi hermana y la pequeña rubia se llevaron algo para comer en la habitación.

Como algo, ya es tarde y mi estómago lo sabe.

Doy vuelta de un lado para otro la comida en mi plato.

Este día me ha dado muchas cosas en las que pensar y muchas cosas que decidir.


Miro mi reloj y ya son pasadas las ocho de la noche.

Subo hasta la habitación de mi hermana para ver qué hacen esas dos niñas traviesas.

Toco la puerta y Emily me dice que entre. Asomo la cabeza y miro hacia la cama de mi hermana donde se encuentra Susan profundamente dormida.

―La pobre tenía sueño. Le puse unas de mis camisetas y se durmió profundamente.

Veo a la pequeña dormir de lado con la boca entre abierta, una mano bajo su cabeza y con la otra abrazando un oso de peluche de mi hermana.

―Pediré que preparen el cuarto de invitados.

―Déjala aquí. A mí no me molesta.

―¿Segura?

―Sí

―Está bien―me acerco a Susan y le acaricio la frente.

Se ve tan serena durmiendo, como un pequeño ángel rubio.

Mi hermana me mira y me sonríe.

Se muere por preguntar algo, pero antes de que lo haga le deseo las buenas noches y salgo de su cuarto.


Decido llamar a Brittany para decirle que Susan está dormida.

―Santana, en este preciso momento te iba a llamar. Ya voy saliendo del hospital. ¿Me das la dirección de tu casa para ir por Susan?

―Está dormida.

―¿Qué?

―Que Susan está dormida.

―Pero, cómo…

―Estuvo jugando con mi hermana, de seguro está exhausta.

―¿Y qué hago ahora? Mañana tengo que venir por mi mamá y Susan tiene que ir al colegio y…

―Brittany
―la interrumpo―, Ven a casa. Te quedas aquí y así mañana…

―¿Qué?

―Que vengas a casa y que te quedes aquí ¿quieres que vaya por ti?

―Cómo se te ocurre que voy a ir a tu casa y además a quedarme. Ya suficiente hiciste por mi hoy al cuidar a Susan. No. Voy para allá pero voy a buscar a mi hija.

―Brittany, ya es tarde, ella está dormida tranquilamente. ¿No crees que sería una maldad enorme despertarla?

―Pero…pero…

―Lo mejor que puedes hacer es ir por algo de ropa y venir hasta aquí y quedarte a dormir con Susan. Así mañana temprano, yo las llevo al colegio y al hospital. ¿Qué dices?


Nada, ella no dice nada.

Se queda callada en un largo silencio, demasiado largo para mi gusto.

Cualquier otra persona estaría feliz de pasar una noche en la mansión López, pero se me olvidaba que Brittany no es cualquier mujer.

―Vamos, Brittany. No lo pienses tanto. Sabes que es lo mejor y lo más cómodo para todas.

Sigue callada.

¿Qué debo decirle para convencerla?

―¿Quieres que vaya a buscarte? Puedo estar en unos minutos por allá.

―No es necesario. Dame tu dirección y en media hora estaré por ahí.


Sonrío al escuchar su respuesta.

Le doy la dirección y corta la llamada.

Sé que desconfía de mí y mis intenciones, pero no haré nada aquí no con mis padres tan cerca, no cuando he decidido que ella solo será mi amiga.



Doy vueltas en la sala, mis padres aún no llegan de la cena y sé que cuando sepan que Brittany está aquí estará más que sorprendidos.

Mi mamá tal vez se alegre, yo llevando a mi primera mujer a casa.

Mientras mi papá me llenará de advertencias y regaños.


Creo que ya llevo mí vuelta número ocho mil por la sala, cuando el timbre del portero suena y al acercarme a la cámara de seguridad, veo que es un taxi el que está afuera.

Hago que pase y salgo a recibir a Brittany. Ella baja y veo que está agotada.

En sus ojos noto que solo quiere que este día termine.

―Hola―saludo y le beso la mejilla.

Mi cuerpo vibra con aquel íntimo contacto.

¡Qué tortura!

―Hola―dice con una sonrisa tímida.

Comenzamos a caminar mientras que ella me pregunta por Susan. Le digo que está con mi hermana y la llevo hasta la habitación de invitados.

Una vez ahí me dice que no quiere que mi hermana esté incómoda y que prefiere cambiar a Susan de cama para que duerma junto a ella.

Voy hasta el dormitorio de Emily.

Ella aún está despierta viendo una película. Le explico que me llevo a Susan para que duerma con su mamá y me ayuda a sacar a la pequeña de la cama.

Cargo a Susan entre mis brazos. Es tan diminuta y frágil y yo me siento conmovida al verla.

Llego al cuarto donde está Brittany y deposito a la pequeña sobre la cama.

―Te debo una, Santana. Gracias por todo―me dice y yo sonrío ladina.

―Ya pensaré en cómo cobrarme lo que me debes.

Ella abre la boca y yo vuelvo a sonreí.

―Tranquila, Brittany. Ahora duerme que debes estar muy cansada.

Me acerco a ella.

Tengo unas enormes ganas de besarla. De tirarla sobre la cama y hacerle el amor hasta que ambas perdamos el sentido.

Pero, en vez de eso, le beso la frente y le deseo una buena noche.

Salgo de su habitación y me voy a toda velocidad a la mí. Me tiro en la cama y cierro los ojos.

Ella está aquí a tan solo unos metros de mí.

Puedo escabullirme hasta su cuarto, puedo hacer que venga al mí, la deseo enormemente, con todo mi cuerpo y mis sentidos.

Estar cerca de ella y no poder tocarla es una penitencia horrorosa.


Doy vueltas en la cama, será mejor que me dé una ducha bien fría para aplacar esto que estoy sintiendo.


Salgo de la ducha y me coloco un pantalón y una polera de pijama. Camino de un lado a otro en mi habitación.

Mis padres ya llegaron, pero no se han dado cuenta de nada. Mañana me tocará explicar la presencia de Brittany.

Ya no aguanto más, salgo de la habitación y camino sigilosamente por el pasillo. Me detengo en la puerta del cuarto donde está Brittany y giro el pomo de la puerta que, gracias a Dios, no está con seguro.

Entro y me voy acercando a la cama donde las dos hermosas rubias se encuentran profundamente dormidas.

La luz de la mesa de noche les baña la cara. Duermen una frente a otra, con sus cabelleras despeinadas, hermosas ambas.

Me gustaría dormir ahí.

Abrazada al cuerpo de Brittany, sentir esa paz que veo en sus rostros en este instante.

Y de pronto me siento una intrusa en sus vidas.

Siento que nunca voy a poder estar con Brittany como ella necesita.

Tengo que resignarme con una amistad de mierda, pero no puedo hacerle daño, no a ella, no se lo merece.

Alargo mi mano y le acaricio el rostro a Susan. Luego me acerco a Brittany y le beso suavemente la mejilla.

Las observo un poco más.

Sí.

«Dejar de pensar en Brittany con interés sexual es lo mejor» me digo, pero ni yo me lo creo.





******************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 3:) Sáb Oct 22, 2016 7:55 am

Hola morra...

Joder una luz de fe para san lo esta haciendo bien!!!.. ademas para cambiar se hace poquito a poquito!!
Me divirtio la intreracion de su con los lopez sobre todo con alfonso jajaja
Que mal lo que le paso a la madre de britt!!!...
A ver como van las cosas... ahora????...

Nos vemos!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por micky morales Sáb Oct 22, 2016 8:51 am

Ahora se le complican un poco las cosas a brittany, por supuesto estoy segura que san no aguantara mucho ese deseo de ser su amiga, me encanta la familia lopez con todo y los regaños de alfonso, a ver ahora como va esa "amistad"
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por JVM Sáb Oct 22, 2016 1:37 pm

Bueno para San todo esto es nuevo y no termina de entender sus sentimientos.....
Lo peor es que todos le dicen que no es lo suficiente para Britt y su pequeña y que ella lo cree. Cuando si decidiera darse una oportunidad, lo haría lo mejor que puede. Es decir, sin darse cuenta ha ido cambiando, ya no ha salido de fiesta ni con otras mujeres. Pero le falta creer en ella. Además Susan ya se gano el corazón de toda la familia jajajaja
JVM
JVM
-
-

Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 23l1 Sáb Oct 22, 2016 7:15 pm

3:) escribió:Hola morra...

Joder una luz de fe para san lo esta haciendo bien!!!.. ademas para cambiar se hace poquito a poquito!!
Me divirtio la intreracion de su con los lopez sobre todo con alfonso jajaja
Que mal lo que le paso a la madre de britt!!!...
A ver como van las cosas... ahora????...

Nos vemos!!



Hola lu, siii!!! se lo merece! jajajajajaajaja, la morena va mas que bien! jajaajjaajaja. Aii si es un amor!!!!! jajajajaajajajaja. Uyy si =/ esk al rubia va saliendo de una y se va a otra =/ Bueno, aquí el siguiente cap para saber eso! jajajja. Saludos =D





micky morales escribió:Ahora se le complican un poco las cosas a brittany, por supuesto estoy segura que san no aguantara mucho ese deseo de ser su amiga, me encanta la familia lopez con todo y los regaños de alfonso, a ver ahora como va esa "amistad"




Hola, mmmm sip =/ Jajajajajaja la vrdd, creo lo mismo jajajajaja. Jajajjaja serian una muy buena familia los López-Pierce, no¿? jajajajaja. Aquí el siguiente cap para saber mas de eso jajajajaja. Saludos =D





JVM escribió:Bueno para San todo esto es nuevo y no termina de entender sus sentimientos.....
Lo peor es que todos le dicen que no es lo suficiente para Britt y su pequeña y que ella lo cree. Cuando si decidiera darse una oportunidad, lo haría lo mejor que puede. Es decir, sin darse cuenta ha ido cambiando, ya no ha salido de fiesta ni con otras mujeres. Pero le falta creer en ella. Además Susan ya se gano el corazón de toda la familia jajajaja



Hola, mmmm si es lo es=/ pero va bn, no¿? Mmmm no estan ayudando mucho al decir esas cosas, no¿? Creo lo mismo la vrdd! =) Toda la razón, ella misma no se ha dado cuenta de sus propios cambios, pero los ai! Esperemos y lo logre creer =/ Jajajajajaja si que se lo gano! jajajaajajajajaja, bn por la mini rubia jajajajaja. Saludos =D



23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 15

Mensaje por 23l1 Sáb Oct 22, 2016 7:17 pm

Capitulo 15


Brittany


El sonido de la alarma del teléfono celular me despierta de golpe del sueño en el que estaba envuelta.

De a poco abro los ojos y estoy un poco desorientada. No reconozco las paredes de esta habitación y, luego de unos segundos, mi cerebro procesa todo…estoy en la mansión López.

Estiro mis brazos y me desperezo mientras miro a Susan que aún duerme a mi lado plácidamente y toda despeinada.

Se me parte el corazón tener que interrumpir su apacible sueño, pero tenemos que salir de esta casa, ella para el colegio y yo hacia el hospital.

De momento la dejaré dormir unos minutos más, solo en lo que me demoro en tomar una ducha rápida.

Entro en el baño y observo con detenimiento cada detalle de éste.

La habitación es ostentosa, delicada y está finamente decorada. Me entretengo más de lo debido mirando cada rincón y me tengo que regañar mentalmente porque no quiero retrasarme, no este día.

Bajo la ducha, dejo que el agua corra por mi cuerpo, tibia, exquisita, llevándose la pereza del sueño y activándome los sentidos.

Cierro los ojos ante la increíble sensación del agua golpeando mi piel y es en ese instante que ella aparece en mis pensamientos… Santana.

Ella está a solo unos metros de mí en su habitación y un calor comienza a recorrerme el cuerpo por completo.

Qué locura… será mejor que gradúe el agua y la ponga más fría.


Salgo de la ducha y comienzo a secarme, pero no he logrado sacarme a Santana de la cabeza. Tengo que reconocer que estoy gratamente sorprendida por su comportamiento del día de ayer.

Por toda su ayuda y por cuidar a Susan.

Sin eso, no hubiera estado tranquila en el hospital ocupándome de mi mamá.


Me visto a la velocidad de la luz y despierto a Susan.

Mi pequeña rezonga y se estira igual que un gato. Luego, aún con sueño, se levanta y la guío hasta el baño.

Estoy vistiendo a Susan cuando mi celular me indica que he recibido un mensaje. Lo abro y veo que es de Santana.

«¿Ya estás en pie?»




«Sí, estamos listas»
―le respondo rápidamente.



«Bien, dentro de veinte minutos las espero para desayunar»



[color=#009933]«Ok»
[/center]


Termino con Susan, recojo todas nuestras cosas y las meto en el bolso que traje de casa. Miro que nada se me haya olvidado y al llegar a la puerta me invade el pánico.

Tengo que bajar a desayunar y de seguro Alfonso López estará ahí.

Ya sabe que tengo una hija y de seguro no le ha de parecer muy bien el que yo haya pasado la noche aquí.

Abro la puerta y comienzo a bajar la escalera. Susan me indica por dónde ir, ella ya conoce el camino hasta la sala.

Cuando llegamos al comedor contengo la respiración.

En la mesa ya se encuentran desayunando Santana junto a sus padres.

―Buenos días―saludo nerviosa y con la voz un poco temblorosa.

―Brittany, querida―la mamá de Santana se levanta de su silla y viene a mi encuentro. Me da dos besos en las mejillas, me mira a los ojos y luego me susurra―¿Cómo estás? Santana nos contó lo de tu mamá.

Siento un poco de alivio al saber que Santana les ha explicado mi situación y el porqué estoy aquí a sus padres.

―Todo bien, gracias. Ahora tengo que ir hasta el hospital y ver cómo sigue y si le dan el alta.

―Brittany si necesitas algo, lo que sea, no dudes en pedirlo, ¿está bien?

―Gracias.

Es todo lo que puedo decir, las palabras de Maribel hace que me emocione.

Ella que, apenas me conoce, me está brindando su ayuda desinteresada.

―Pero vengan, vengan a desayunar que ya se les hace tarde.

Maribel me toma de una mano a mí y con otra mano a Susan hasta que llegamos a la mesa.

Alfonso me mira, no puedo descifrar muy bien su rostro, pero no noto enojo.

Santana me mira y me sonríe, yo le devuelvo una media sonrisa nerviosa.

―Nos hemos divertido mucho con Susan―dice Maribel haciendo conversación y haciéndome sentir bien, incluyéndome.

―Sí. Mamá, ¿viste la piscina? Es enorme.

―Puedes venir cuando quieras, Susan―Maribel le acaricia la cara a mi pequeña y ella sonríe con la esperanza en los ojos de poder venir y sumergirse en la enorme piscina.

Pero, apenas llegue a casa, tendré que hablar con ella y decirle que, lo de volver a esta mansión, es imposible, que todo fue por una urgencia y que nunca más volveremos a pisar este lugar.

Desayuno rápido.

Alfonso se levanta y se despide de todos para irse al Holding.

―¿Listas para irnos?―pregunta Santana, levantándose de su silla.

―Santana, no es necesario que nos lleves…

―Vamos, Brittany, que Susan llegará tarde al colegio.

―Pero, Santana, ayer te ausentaste del trabajo y hoy vas a llegar tarde. No creo que sea conveniente.

―Querida, deja que Tana te lleve. Así llegas más rápido.

¿Tana?

Miro a Maribel y luego a Santana y sé que no voy a ganar esta batalla. Me levanto de la silla, ya no tengo tiempo que perder.

La mamá de Santana nos acompaña hasta la puerta. Se despide de Susan con un beso y un abrazo y mientras mi hija sale con Santana por la puerta, yo me quedo con Maribel para agradecerle.

―Maribel, gracias por recibir a mi hija. Y muchas gracias por permitir que nos quedáramos a dormir. Muchas gracias.

―No tienes nada que agradecer. Tu hija es un encanto de niña. Y Brittany, ya sabes, no dudes en recurrir a nosotros. Las puertas de esta casa están abiertas para Susan y para ti.

Yo no digo nada, solo asiento con la cabeza.

Estoy agradecida de lo bien que me han tratado, pero esto fue una urgencia.

No se volverá a repetir…espero.

Maribel me abraza con cariño y nos despedimos en el umbral de la puerta, donde me vuelve a repetir que puedo contar con ella.

Camino hasta el auto donde ya me esperan Santana y Susan. Me subo en el asiento del copiloto y Santana pone en marcha el auto.


Santana y Susan conversan entretenidos, mientras que yo observo la carretera por la ventana. Pienso en todo lo sucedido en las últimas horas, en mi hija y en Santana y en lo bien que se llevan ellas dos.


Llegamos al colegio de Susan.

Santana estaciona el auto y se baja raudo para abrirle la puerta a Susan. Luego abre la mía y me bajo para llevarla hasta la entrada del colegio.

―Adiós, Susan. Que tengas un lindo día en el colegio.

―Adiós, Santana. ¿Nos volveremos a ver?

―Vamos, Susan, que llegas tarde―interrumpo.

No quiero que ella se haga ilusiones con respecto a Santana.

Susan gira sobre sus talones y comienza a caminar a mi lado, pero no lleva ni tres pasos, cuando se vuelve a girar y corre hasta llegar a Santana. La morena la recibe entre sus brazos alzándola, ambas sonrientes. Susan le da un beso en la mejilla y Santana, incómoda por no saber qué hacer, sonríe.

Observo la bella postal que se muestra ante mis ojos.

Mi corazón da un vuelco.

No por favor, esto no puede ser.

No con Santana.

Santana le dice algo a Susan y esta asiente con la cabeza feliz y luego se separa para volver corriendo a mi lado.

Caminamos hasta la entrada sin preguntarle nada, pero cuando vuelva por ella tendré que explicarle un par de cosas.

Me despido de mi hija y veo cómo entra con sus demás compañeros en el recinto. Camino hasta el auto donde Santana me está esperando apoyado en el capot. Vestida de traje ceñido oscuro, tan sexy y peligrosa, sobre todo peligrosa.

Peligrosa para mi corazón.

Camino dudosa hasta llegar a la morena que me recibe con una linda sonrisa y esos ojos oscuros y brillantes de pillo.

Noto cómo algunas de las otras personas que van a dejar a sus hijos la miran descaradamente, de seguro nunca en su vida han visto a una mujer tan guapa como ésta que me está esperando a mí, sí, a mí…

¿Pero qué pensamientos son estos?

Vamos mal Brittany, me regaño mentalmente.


Nos subimos al auto y Santana conduce hasta el hospital.

Permanezco en silencio que es interrumpido solo por algún que otro suspiro que se me escapa.

―¿Estás bien?―pregunta Santana, de seguro preocupada porque no he dicho nada en todo el camino.

―Sí, bien.

―Algo te pasa, Brittany. Siento que algo te molesta. ¿Me vas a decir qué es?

―Nada, Santana. Todo está bien.

¿Qué puedo decirle?

«Sí, todo está mal. Eres un peligro andante y no quiero dejarte entrar en mi corazón»

―No te creo. Anda, dime lo que sucede, dime qué es lo que te molesta.

Permanezco callada, no quiero tener esta conversación, no ahora, no aquí.

Sigo muda y ella suelta un suspiro de resignación y no insiste en preguntar.


Llegamos al hospital y yo rápidamente me bajo del auto.

No puedo permanecer ni un segundo más cerca de Santana.

Saco mi bolso del asiento trasero y sin darme cuenta, ella ya está a mi lado. Me mira fijo y me estremezco de pies a cabeza.

Tengo que decir algo.

Tengo que hacer que no se dé cuenta de lo mucho que me afecta tenerla tan cerca.

―Santana, te agradezco todo lo que hiciste por mí el día de ayer y hoy. De verdad, gracias por tu ayuda, no sé que hubiera hecho sin ti.

―Para mí ha sido todo un placer, Brittany. Y ya te dije que, me voy a cobrar el favor, ya se me ocurrirá cómo.

Sonríe ladina y yo tiemblo, claramente afectada por sus palabras.

Debería dejarle en claro un par de cosas, decirle que no voy devolverle el favor de la forma que imagina, pero no puedo.

Me quedo ahí, sonrojada y acalorada pensando en qué tendrá en mente.

Sacudo mi cabeza, debo concentrarme, tengo que ver a mi mamá.

―Bueno, ahora me tengo que ir…

―Brittany, prométeme que si necesitas algo me llamarás. Lo que sea, a la hora que sea, no dudes en llamar, ¿está bien?

―No creo que sea…

―Promételo, Brittany. Si necesitas algo me llamarás de inmediato.

Me pierdo en su profunda mirada.

Quiero decirle que no, que no la llamaré nunca más, porque la quiero bien lejos de mi vida y la de mi hija.

Pero, en vez de eso le digo:

―Lo prometo, te llamaré si necesito algo.

―Bien. Ahora te dejo para que vayas a ver a tu mamá.

―Sí. Será mejor que entre. Adiós, Santana―le digo y doy un paso al lado para esquivarla y salir de ahí lo más rápido que pueda.

Pero, no puedo.

Me toma por un brazo, me atrae a su cuerpo y me besa en los labios. Es un beso tierno, un beso que me reconforta, un beso en el que me demuestra su apoyo.

No, si yo estoy mal.

Ya me estoy imaginando cosas.

Ella es Santana López, una mujer que solo pasa el rato con otras mujeres, una mujer que huye del compromiso… ya basta, Brittany.

―Adiós, Brittany―dice cuando se aparta de mi boca y yo, atontada comienzo a caminar hasta la entrada del hospital.

Me giro ya casi en la entrada y veo cómo se mete a su auto, lo pone en marcha y se va.

Mi corazón late desbocado.

Hace mucho que no me sentía de esta manera.

Esto no puede seguir así.

No tengo que pensar más en esta mujer.



Entro a ver a mi mamá y el médico me recibe con la buena noticia de que ella está mucho mejor.

Que lo de la parálisis es algo pasajero y que, con terapia, todo volverá a la normalidad y, pasado el medio día y si todo sigue bien, me la puedo llevar a casa.

Eso me tranquiliza y me pone feliz.

No me gustan los hospitales, así es que, mientras menos tiempo pase aquí, mucho mejor.


Converso con mi mamá y le cuento lo que me ha dicho el médico y se pone feliz.

Ahora tendrá que seguir un tratamiento para las alzas de presión, tendré que ocuparme de que no se olvide de tomar ni una sola de las píldoras que el médico le ha dejado.



Ya es hora de ir por Susan al colegio y le digo a mi mamá que voy por ella y que luego regreso a ver si el médico ya firmó el alta.



En mi camino hasta el colegio recibo un mensaje de Santana.

Mi corazón late más rápido al mirar la pantalla de celular, si parezco una
quinceañera.

Me pregunta si estoy bien y si necesito su ayuda. Aunque quiero verlo otra vez le respondo que todo está bien, que no necesito nada y que no se preocupe.




Vuelvo con mi hija al hospital.

El médico le da el alta a mi mamá y juntas volvemos a casa.




Acomodo a mi mamá en su habitación y le preparo algo para comer.

Susan ya está en su cuarto terminando sus tareas.

Luego mi hija y yo cenamos en la cocina. Nos sentamos a la mesa y ella me pregunta:

―¿Cuándo volveremos a ver a Sanny?

―¿Sanny?

―Es más corto que Santana―dice como si fuera lo más obvio del mundo

―Ah―digo no muy convencida que la lame así.

―¿Y entonces?

―No lo sé, hija―digo tragando en seco y tratando de buscar alguna excusa creíble―Es una mujer muy ocupada. Tiene mucho trabajo, tal vez no la veamos muy pronto.

―Pero ella me dijo que podíamos ir a su casa y usar su piscina. Yo quiero ir mami.

―Susan, no empieces, por favor.

―¿No te gusta Sanny, mami?

La pregunta de Susan me deja muda.

Claro que me gusta Santana y mucho.

El problema es que la morena no es la persona que yo quisiera que fuera…la persona segura y responsable de la cual enamorarme.

―Susan, ya basta de preguntar. Ahora termina de cenar y te vas a tu habitación.

―Pero, mami. A mí me gusta Sanny. Es mi amiga…

―Susan …

Me mira con los ojitos llenos de tristeza, ella no entiende que Santana no será un personaje presente en nuestras vidas.


Terminamos de cenar y ella se va a su cuarto.

Sé que Susan necesita de un papá y otra mamá, pero justamente esa no es Santana.

Nunca pensé en esto, creí que solo con mi amor bastaría para ella. Pero me doy cuenta de que necesita una figura que llene el vacío que dejo su papá.

Aunque ella nunca diga nada, ni pregunte por él, sé que le hace falta.



Vuelvo a ver a mi mamá por si necesita algo, ella está bien y me quedo muy tranquila.


Entro en el cuarto de Susan y veo que ya está dormida.

Le acaricio su rostro apartándole un mechón de su rubio cabello. Le beso la frente y salgo de su habitación para ir a la mía.


Me tiro sobre la cama, estoy cansada, agotada y mañana tengo un largo día por delante.

Tengo que ir a la agencia de modelos para informar que no puedo aceptar trabajos hasta por lo menos quince días más, tendré que buscar a alguien que me ayude.


Mi teléfono suena y veo en la pantalla que es Santana.

¿Qué debo hacer?

Tal vez no contestarle.

Tal vez así se aburra y no insista más.

El sonido cesa, pero dos segundos más tarde, el celular vuelve a sonar.

Ahora decido contestar, no puedo seguir eludiéndola.

―Hola.

―Hola, Brittany. ¿Cómo estás?

―Muy bien, ¿y tú?

―Bien. ¿Y tu mamá y Susan?

―Bien, ya están durmiendo.


Sigue hablando mientras que yo, tirada en la cama, cierro mis ojos y me imagino que está aquí a mi lado. Muerdo mi labio inferior para evitar que un jadeo escape de mi boca.

Necesito terminar esta llamada, no puedo seguir así.

Luego de unos minutos donde me vuelve a pedir que lo llame si la necesito, se despide y corta la llamada.





Y así seguimos por dos semanas.

Me envía mensajes y me llama varias veces al día. Siempre preguntando si necesito algo y yo siempre contestando que todo está bien y que no necesito nada.


Es sábado y es hora de almuerzo.

Mi mamá ya está muy bien. De a poco su cara vuelve a la normalidad gracias a la terapia.

Estamos las tres en el comedor, ya tengo todo dispuesto para almorzar cuando el timbre de la puerta suena.

Voy a ver quién puede ser a esta hora y en día sábado.

Abro la puerta y me lo encuentro a ella.

Vestido en unos ajustados jeans y camiseta que marca sus perfecto pechos, con esa sonrisa que hace aparecer sus perfectos y tiernos hoyuelos que hacen se me paralice el corazón y me olvide de todo y con un paquete envuelto en papel de regalo bajo el brazo…

Santana está en la puerta de mi casa.






******************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D



23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por micky morales Sáb Oct 22, 2016 7:31 pm

Brittany me saca de quicio, por Dios deja la pensadera y acepta lo que "sanny" te ofrece por ahora, no pdo esperar para leer otro capitulo!!!!! [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 918367557
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 3:) Sáb Oct 22, 2016 8:17 pm

Hola morra....

Amo todo lo que hace sanny por britt!!!
Es normal que britt tenga ese miedo... pero tambien sabe que su necesita algien mas y san esta empezando a ocuparlo??. O por lo menos su lo quiere???
A ver como termina la vicita???

Nos vemos!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 23l1 Sáb Oct 22, 2016 11:59 pm

micky morales escribió:Brittany me saca de quicio, por Dios deja la pensadera y acepta lo que "sanny" te ofrece por ahora, no pdo esperar para leer otro capitulo!!!!! [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 1206646864 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 918367557



Hola, mm si un poco la vrdd xD jajajajaajjaajajaja. Jajajajaa "sanny" es todo, pero todo un amor! jaajaajajajaj. Aquí te dejo el siguiente cap... Creo que te debo un maratón, no¿? jajajaja. Saludos =D





3:) escribió:Hola morra....

Amo todo lo que hace sanny por britt!!!
Es normal que britt tenga ese miedo... pero tambien sabe que su necesita algien mas y san esta empezando a ocuparlo??. O por lo menos su lo quiere???
A ver como termina la vicita???

Nos vemos!!



Hola lu, aiii si yo tmbn! va tan bn encaminada! Mmm eso eso tmbn =/ Aiii pero pienso igual, pero igual a ti! Un gran apoyo no¿? jajajajaja. Aquí el sigueinte cap para saber mas! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 16

Mensaje por 23l1 Dom Oct 23, 2016 12:04 am

Capitulo 16


―Hola, Brittany―saluda Santana con una bella sonrisa que asoma a sus labios.

―Hola. ¿Qué haces aquí?―pregunto de forma brusca.

Aún no logro asimilar que esté en mi puerta, frente a mí.

―Bueno, quería saber cómo estabas. Cómo está Susan y tu mamá. Quería ver si necesitabas algo y…

―Pero si eso me lo preguntaste ayer por teléfono y te dije que todo está bien, que no necesito nada.

―Ah, está bien―dice ofuscada―Tenía ganas de verte.

Su respuesta me deja con la boca abierta y sin replica posible. Y no puedo negar que lo que escucho me gusta…me gusta mucho.

―¡Sanny!―escucho gritar a Susan que ya está a nuestro lado―¡Viniste!

―Sí, pequeña hada―dice y se agacha para quedar a la altura de Susan―Te prometí que vendría a verte y aquí estoy. Además te traje esto.

Ha Santana no parece molestarle que mi hija le tenga un apodo y le extiende el paquete envuelto en papel de regalo color rosa que trae bajo su brazo.

Susan abre los ojos entusiasmada.

Como a toda niña, le encanta recibir regalos.

Susan despedaza con impaciencia el papel que la separa de su regalo y yo sonrío por su actitud.

―¡El manual de las hadas!―grita Susan emocionada al ver la portada del libro que tanto le gusta y que ha deseado tener desde hace meses―Gracias, Sanny.

Se cuelga del cuello de Santana, agradeciéndole el regalo y la morena la estrecha entre sus brazos con un poco de recelo, se nota que no tiene experiencia con niños.

De pronto me siento una intrusa invadiendo este íntimo momento entre las dos.

Esto está mal, sí que está mal.

No quiero que mi hija albergue esperanzas con Santana, no quiero que se haga falsas ilusiones.

―¿Por qué demoran tanto? La comida se va a enfriar―la que aparece ahora en escena es mi mamá.

Santana se levanta y mi mamá la observa con detenimiento y curiosidad.

―Buenas tardes, señora Pierce. Soy Santana López. Es un placer conocerla―le extiende la mano a mi mamá que de pronto se ha quedado sin habla.

Luego de unos segundos pestañea rápido un par de veces reaccionando a tiempo para estrecharle la mano a la mujer frente a ella.

―Encantada, señorita López…

―Dígame Santana, por favor.

―Está bien. Bienvenido, Santana. Pero, Brittany, ¿dónde están tus modales? Cómo no invitas a pasar a Santana. Vamos, entra.

Santana me mira como pidiéndome permiso para poner un pie dentro de la casa. Yo me hago a un lado, no saco nada con oponerme, y pasa al salón.

―Supongo que nos acompañarás para almorzar―pregunta mi mamá que se está desviviendo por agradar a Santana.

―No quiero molestar. Solo vine para ver cómo estaban y traerle el regalo a Susan…

―Pero almorzarás con nosotras. No acepto una negativa.

―Bueno, acepto su invitación encantada―responde con una sonrisa pícara en la cara.

Esto no me puede estar pasando, de seguro es un mal sueño.

Debo despertar.

«Despierta, Brittany»

«Vamos, despierta»

Me doy un pellizco en la piel del ante brazo y el dolor que siento me indica que no estoy soñando.

Santana está en mi casa y se prepara para almorzar con nosotras, como si fuera una más de la familia.



Mientras yo sirvo la comida, mi mamá habla y habla con la invitada, creo que ya está bajo el hechizo de Santana López.

Permanezco callada mirando fijamente la comida en mi plato. Aunque estoy encantada de volver a ver a Santana, algo en mi interior me grita que no es bueno que siga entrando en mi vida.

―¿Pasa algo, Britty?―pregunta mi mamá que ha notado que no he dicho ni media sílaba.

―No, nada. Voy por un poco de agua―me levanto de la silla y camino hasta llegar a la cocina.

Apoyo las manos sobre la mesada y tomo una honda respiración cerrando los ojos y sacudiendo la cabeza.

No quiero que Santana me afecte, no debo dejar que lo haga.

Escucho que el trío que está en el comedor ríe a carcajadas.

¿Qué se traen esas tres?

Vuelvo a la mesa con el vaso de agua en la mano.

Mi mamá sigue hablando con Santana, contándole de su recuperación y esta se muestra interesada con cada detalle que le suelta.



El almuerzo termina y Santana anuncia que se tiene que ir…

¡Por fin!

Se despide de mi mamá, quien la invita a que vuelva otro día y de Susan que, con una triste mirada, le dice adiós.

Luego ambas desaparecen en dirección de la cocina y yo acompaño a Santana hasta la puerta.

―Brittany, gracias por el almuerzo. Lo disfrute mucho.

―De nada. Adiós, Santana.

―Estás muy apurada porque me vaya, ¿verdad? Pero, no lo haré hasta que hablemos.

―¿Hablar? ¿Hablar de qué?

Se me acerca y con su mano derecha coloca un mechón de mi cabello detrás de mi oreja y con sus dedos índice y pulgar presiona el lóbulo de ésta lo que hace vibrar a mi cuerpo traicionero.

Con mi lengua mojo mis labios, tenerla tan cerca me afecta demasiado.

―Tenemos que hablar de cierto favor que me debes.

―¡¿Qué?!―grito sorprendida.

Pensé que lo de cobrarse el favor era una broma.

―Te dije que iba a pensar la forma de cobrármelo y ya sé cómo.

¿Qué tendrá en mente?

Me sonrojo ante las imágenes que pasan por mi cabeza y ella sonríe de seguro adivinando mis pensamientos.

―¿Y cómo pretendes que te pague el favor?

―Quiero una cita contigo.

―¿Qué?―pregunto frunciendo el ceño, confundida.

―Ay, Brittany, que tampoco es tanto sacrificio salir conmigo. Una cita. Una normal. Vamos a cenar y quiero que luego me acompañes a la inauguración de un club.

La miro directo a los ojos.

¿Quiero tener una cita con ella?

Me pregunto y me respondo de inmediato…Sí, quiero.

Pero qué estoy haciendo.

Aunque trato de hacerme la dura, me doy cuenta que soy tan débil cuando la tengo frente a mí.

Pero no puedo negarme a salir con Santana.

Me prestó ayuda cuando la necesité, mínimo le debo una cena.

―¿Y cuándo sería esta cita? Bueno, en el caso que acepte, claro.

―El viernes y no acepto un no como respuesta.

Me sonríe ladina, con esa sonrisa peligrosa, con ese brillo en los ojos que me hace estremecer y flaquear.

No digo nada, no puedo porque dentro de mí se libra una batalla entre el deseo y el deber.

Al final me mira, se acerca un poco más y me susurra:

―El viernes paso por ti a las ocho, ¿está bien?

Sigo sin contestar.

Con su mano me levanta el mentón, me mira fijamente con su penetrante mirada oscura y me da un beso rápido en los labios.

―Adiós, Brittany. Hasta el viernes.

Santana sale raudo por la puerta y llega a su auto.

Yo sigo sin poder ordenar mis pensamientos y mi corazón late a toda prisa.

¿Por qué esta mujer pone patas arriba mi mundo?

¿Qué debo hacer?

Veo que el auto de Santana desaparece por el camino y yo aún sigo en la puerta, parada como una estatua, como una boba.

―¿Britty?―escucho tras de mí.

Mi mamá llega a mi lado y me pone una de sus manos en mi hombro. Me giro y entro en la casa cerrando la puerta a mi espalda. Mi mamá me mira, yo no digo nada, pero sé que ahora comenzará el interrogatorio por parte de ella.

Ahora tendré que escuchar lo que piensa de Santana.

―Santana me pareció muy simpática―dice mientras me sigue hasta la cocina donde he entrado tratando de alejarme de ella, cosa que es imposible.

―Qué bien―le digo soltando un suspiro.

―Sí. Además es muy guapa, ¿no crees hija?

―Sí, mamá, muy guapa―me muevo de un lado a otro en la cocina, sacando y moviendo cosas desde los muebles.

Susan está en la sala, entusiasmada con su regalo. Agradezco que esté ahí y no pueda escuchar esta conversación.

―Britty, ¿qué pasa entre Santana y tú?

―Nada, mamá. ¿Qué va a pasar?

―No sé, tal vez… bueno yo pensaba que…

―Nada, no pasa nada entre Santana y yo. Solo somos amigas.

―¿Segura, hija? Porque yo creo que…

―Nada, mamá―le digo enfadada.

No quiero que ella me pregunte por la relación que tengo con Santana, ya que entre nosotras no hay nada más que una seudo amistad.

Salgo de la cocina y me voy a mi habitación.

No quiero seguir escuchando a mi mamá hablar sobre Santana.

Me tiro sobre la cama cerrando mis ojos y respirando hondo tratando de calmar los latidos de mi corazón.





El viernes llega.

Ya son pasadas la siete de la tarde y aún no decido qué ponerme para la cita con Santana.

Ya me he puesto y me he quitado cuatro vestidos. Siento que nada me gusta, pero ya se está haciendo la hora y debo escoger.

Al final me decido por un vestido blanco que me llaga sobre las rodillas y que tiene unos detalles en color negro sobre los hombros.

Llevo el cabello suelto y me maquillo un poco, pero resaltando mi boca con un labial en color rojo.

Me miro una última vez al espejo y creo que luzco bien.

Estoy nerviosa por esta cita.

Nerviosa por lo que pueda suceder esta noche.

Porque sé que, aunque vaya decidida a que no suceda nada con Santana, solo con un beso suyo, ella puede hacerme cambiar de opinión…

Qué rabia me da eso.

Miro mi reloj, faltan quince minutos para las ocho.

Me rocío un poco de perfume cuando escucho el timbre sonar… Ella ya está aquí.

Me vuelvo a mirar al espejo, me arreglo el cabello y salgo de mi habitación.

Cuando llego a la sala mi mamá y Susan ya están con Santana. Me detengo de golpe para observar cómo luce y veo que como siempre… guapísima.

Llego hasta ellas y Santana me mira de arriba abajo sin importarle que mi mamá y mi hija estén ahí, con un descaro que me excita.

―Mami. Te ves muy linda―me dice Susan.

―Susan tiene razón. Te ves muy linda, Brittany―dice Santana con una voz ronca que hace que se me erice la piel.

―¿Nos vamos?―digo para salir de ahí y que nadie note lo perturbada que me tiene esta mujer.

―Diviértanse mucho. Y Santana … cuídame a mi hija, ¿quieres?

―Claro. No se preocupe. La traeré sana y salva.

Nuestras miradas se cruzan.

La mía nerviosa y la de ella con un deseo anticipado.

Me despido de mi mamá y de mi hija pidiéndole que se vaya a acostar pronto.

Santana hace lo mismo y luego caminamos hasta la puerta.

Yo salgo primero y ella me sigue, guiándome hasta su auto con una de sus manos posada en la parte baja de mi espalda. La calidez de su mano traspasa la tela del vestido, mi garganta se seca.

Esta noche todo puede pasar.




Susan


Querida reina de las hadas, me he portado muy bien, ¿podrías cumplirme un deseo?

Quiero que Santana y mi mamá estén siempre juntas.

Santana es muy buena conmigo, es como una princesa y sé que le gusta mamá por como la mira.

Mi mamá también es una princesa.

Entonces, si ellas son unas princesas, ¿no deberían estar juntas?

Prometo no hacer más travesuras, no comer más Nutella cuando mamá me dice que no coma más, hacer todas mis tareas y sacarme buenas notas.

Seré la mejor niña del mundo.

Solo quiero que mamá sea feliz.

¿Me ayudas?




*****************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 17

Mensaje por 23l1 Dom Oct 23, 2016 12:07 am

Capitulo 17



Santana


Estoy en mi auto con Brittany y vamos camino al restaurante que he elegido para nuestra cita…Nuestra primera cita.

Me siento como el puto James Bond, claramente una versión mejorada y sexy, conduciendo mi Aston Martin mientras a mi lado va sentada una hermosa mujer.

Brittany luce preciosa, enfundada en un vestido blanco que abraza sus curvas, pero lo que me llama la atención y, me está desconcentrando, es su
boca que hoy ha pintado de un color rojo furioso.

―¿Dónde vamos?―pregunta Brittany.

―Lo sabrás cuando lleguemos.

―Santana…

―Brittany, vamos a un restaurante que me gusta mucho y espero que a ti también.

Sé que está nerviosa, yo igual lo estoy.

Hace días que he querido tenerla junto a mí, las dos solas.

Me había propuesto ser solo su amiga, dejarla tranquila y olvidarme de ella. Pero al verla todo lo que había pensado se fue a la mierda.

La deseo demasiado, sé que tengo que controlarme con ella. Y sé también
que, todo esto, será una difícil prueba para mí.



Llegamos al restaurante.

Un clásico y elegante local donde preparan la mejor comida francesa.

Me encanta este lugar que, se ha convertido en mi favorito desde que lo conocí.

Llegamos a la entrada del lugar y el maître nos recibe. A mí que, ya me conoce, me saluda con entusiasmo y nos conduce hasta nuestra mesa.

Tomo la mano de Brittany y caminamos por donde nos indican.

Me fijo en cómo algunas personas que están ahí nos miran descaradamente. Me entran unas enormes ganas de golpear a todos los malditos que posan sus lascivas miradas sobre el cuerpo de Brittany.


Llegamos a la mesa y pedimos algo para beber.

Nos traen la carta y pedimos la cena.

Quiero hablar con Brittany, quiero conocerla mejor, quiero saber más de su vida y esta es una buena oportunidad para hacerlo, pero conociéndola lo poco que la conozco, sé que no querrá contarme mucho de ella.

―Este lugar es muy lindo―dice mientras mira un poco a su alrededor.

―Este es mi restaurante favorito. Hace unos años vinimos con mi familia y desde ese día no he dejado de venir seguido.

―Es genial.

―Brittany, ¿te puedo hacer una pregunta sin que me mandes a la mierda?

Ella sonríe y reconozco que ese simple gesto me encanta y me desarma.

―Depende de la pregunta.

―Es una pregunta personal, claro.

Ella toma un poco de agua desde su copa, estudiándome con la mirada, tratando de adivinar qué pregunta le haré.

―Tú preguntas y yo decido si respondo o no.

―Me parece justo.

―Bien, entonces pregunta.

Quiero saber tantas cosas de ella.

Pero hace días que algo no me deja tranquila.

Esto tiene que ser lo primero que le pregunte.

Sé que es algo delicado, pero quiero saber.

―¿Dónde está el papá u otra mamá de Susan?―pregunto.

Abre los ojos y se remueve en su silla, claramente está incómoda. Vuelve a tomar un poco de agua desde su copa. Toma una honda respiración, me mira fijo y abre la boca para responder:

―No lo sé―dice de manera pausada.

―¿Cómo que no lo sabes?

―No lo sé. Santana, la última vez que vi al papá de Susan fue cuando le dije que estaba embarazada.

Me quedo muda, procesando lo que me acaba de contar Brittany.

Confirmado es hombre.

Es un padre.

Sé que este no es un tema del que le guste hablar, se nota que está incómoda, pero mi curiosidad puede más.

―No puedo creer lo que me dices, cómo que el tipo se fue. ¿No conoce a Susan?

―No, Santana. Él no conoce a Susan. Te digo que desapareció el mismo día en que le dije que estaba embarazada, no la vio nacer, no le dio su apellido, Susan es mi hija… solo mía. Y ahora, ¿podemos cambiar de tema? Esto no es algo de lo que me guste mucho hablar.

Asiento con la cabeza, en silencio.

El mesero llega con nuestro pedido y deja los platos sobre la mesa.

No sé qué decirle a Brittany.

No pensé que su historia fue así.

De pronto siento una ira contra ese hombre que les ha hecho un gran daño a esta mujer y a su hija.

Susan…

La imagen de la pequeña hada, con sus grandes ojos claros, se aparece en mi mente. Esa pequeña rubia que se ha colado en mi corazón y sonrío al pensar en eso.

Porque a mí que, no me gustan los niños, me encanta estar con Susan.

―Lo siento, Brittany. Disculpa si te incomodé con mi pregunta. Es que tenía curiosidad y…

―No te preocupes. No me gusta hablar mucho de ese eso, pero ya está, ya sabes lo que querías saber.


La cena sigue entre una conversación sobre banalidades.

Le pregunto por su trabajo y si le gusta y ella me pregunta sobre qué me gusta hacer en mis ratos libres.

Al hablar con ella me doy cuenta que somos tan distintas.

Yo, con mi vida casi resuelta, puedo hacer lo que se me venga en gana.

En cambio ella, aunque tiene un trabajo que podría llamarse glamoroso, trabaja para mantener a una hija.

No para ella, para gastar el dinero en cosas innecesarias, si no para que su hija no pase necesidades y asegurarle el futuro.

Algo se remueve dentro de mí, algo que me grita que no le haga la vida más pesada a la mujer sentada frente a mí. Algo que me pide la deje en paz, que no le dé más problemas.

Pero, así como ese pensamiento aparece en mi interior, también aparece otro pensamiento, algo más animal, algo que me impide alejarme de ella…

Creo que me he vuelto total y completamente loca.



La cena no estuvo como esperaba, aunque Brittany trato de quitarle presión al asunto.

Pero todo lo que vino después de mi pregunta fue muy tenso.


Terminamos en el restaurante y ahora nos dirigimos hasta el nuevo club que se inaugura.

Me bajo del auto entregándole las llaves a un aparcador, mientras otro hombre le abre la puerta a Brittany. Llego a su lado y la tomo de la mano. Ella me mira y sonríe insegura.

Caminamos un poco y nos encontramos con los flashes de las cámaras ya que, varios periodistas se han instalado a las afueras del local.

De seguro que gente importante está invitada a esa inauguración y ellos
quieren tener alguna fotografía exclusiva.

Los tipos gritan y nos piden que nos detengamos un segundo para posar para alguna fotografía. Brittany quiere caminar y llegar hasta la entrada, pero la retengo a mi lado y poso sonriente a su lado, tomados de la mano.

―Tranquila―le susurro―, Solo será un segundo―digo cuando noto que se remueve con la clara intención de huir de ahí.

Cuando ya considero que nos han fotografiado bastante, camino con Brittany tomada de mi mano hasta la entrada del club donde nos reciben con una copa de champaña.

―Para ser una modelo al parecer no te gustan mucho los flashes.

―Y tú para no serlo te encanta que te fotografíen―replica con una sonrisa medio enfada medio divertida.

―Ah, Brittany, era solo una fotografía, ¿no estarás enfadada por eso verdad?

―¡Santana López! Cuánto tiempo ha pasado. No puedo creer que te venga a encontrar en este lugar.

Mi conversación con Brittany es inoportunamente interrumpida por Elaine.

Por todos los cielos, cuántos años han pasado desde la última vez que la vi… ¿unos dos?

―Hola, Elaine―digo con desgano.

Ella se acerca a mí ignorando totalmente el que yo esté acompañada. Se acerca más y me besa ambas mejillas, mientras posa sus manos en mi pecho. Retrocedo un poco, incómoda por la situación.

¿Incómoda yo?

Me sorprendo ante esta revelación, pero sí, estoy incómoda ya que Brittany está conmigo y no quiero que piense lo peor de mí…

«Pero tú eres de lo peor, Santana»

―Te he extrañado tanto, Santana. Ya estoy de vuelta en la ciudad, ¿crees que podamos vernos?

No puedo creer que Elaine haya dicho eso.

Miro a Brittany que está con el ceño fruncido y pasa sus ojos desde Elaine hasta mí.

―Si me disculpan, voy al baño―anuncia Brittany y se aleja sin que pueda detenerla ya que Elaine me cierra el paso.

Me voy a mover, pero se acerca aún más, subiendo y bajando una mano por mi pecho y luego me susurra:

―Santana, ¿qué te parece si tú y yo nos perdemos por ahí?

Doy un paso atrás mientras ella me sonríe maliciosa y me dan unas enormes ganas de estrangularla.

―Me alegra que volvieras al país, Elaine, pero por si no te diste cuenta, yo vine muy bien acompañada a este evento. Así que si me disculpas…

Abre los ojos, incrédula de lo que oye de mi parte.

Paso por su lado y no se mueve desde donde está como si con eso me fuera a detener.

Pero no.

Dispuesta a derribarla si es necesario, paso por su lado y la empujo con mi hombro para que se haga a un lado.

Comienzo a buscar a Brittany entre el gentío y no la encuentro.

Camino llegando hasta la barra, la música retumba en mis oídos y busco con desesperación algo que me indique dónde están los servicios. Brittany dijo que iba hasta ahí, así es que debo encontrar ese lugar.

Paseo mí vista una vez más, cuando la veo.

A ella, con una amplia sonrisa en la cara, bella como siempre y conversando animadamente con un hombre.

Mi cerebro tarda unos segundos en asimilar lo que veo, pero pasado ese instante, un extraño sentimiento se apodera de mí.

Camino rauda hasta llegar a ella que sigue sonriendo a algo que el desgraciado que está a su lado le dice.

―¡Con que aquí estás!―digo un poco efusiva.

Ella y el tipo a su lado giran la cara y noto que el hombre me mira de arriba abajo.

―Sí, aquí estoy.

―Bien, ¿vamos a tomar algo?

―Ya tengo mi trago―me dice agitando un vaso frente a mí.

―Brittany, será mejor que me vaya, de seguro los chicos me están buscando―le dice el hombre y yo agradezco que sea tan oportuno.

―Disculpa―le digo al tipo―, Ya que Brittany no nos presentó me presento yo. Soy Santana López, amiga de Brittany, ¿y tú eres?

―Soy Mike, colega de Brittany en la agencia de modelos―el tipo me estrecha la mano que le he extendido.

Noto que Brittany me mira alzando una ceja y luego da un sorbo a su trago.

―Bien, ahora las dejo. Que tengan una excelente noche. Brittany fue un placer verte hoy, señorita López.

El hombre se va y me quedo junto a Brittany que me mira con la cabeza ladeada, esperando una explicación de mi parte.

―Disculpa si interrumpí algo con "tu amigo"―le digo con sorna, enojada por haberla visto junto a un hombre.

―No interrumpiste nada. Mike me estaba dando conversación mientras tú hablabas con tu "amiguita"

No puedo evitar sonreír cuando escucho a Brittany referirse a Elaine como mi "amiguita".

Noto un dejo de celos en sus palabras y debo recocer que eso de ser celado se siente muy bien.

―Ah, eso. La verdad es que hace años que no veía a Elaine, pero no hablemos de ella, ¿quieres?

Asiente con la cabeza y luego la llevo de la mano hasta la barra para pedir algo de beber.

El gentío que hay en el lugar nos obliga a que nuestros cuerpos se junten, se rocen y eso me encanta.

―¿Quieres bailar?―pregunto y ella me da un sí de inmediato.

Comienza a caminar y yo la sigo entre la multitud con mi vista fija en cómo se pega la tela del vestido a su trasero.

Llegamos a la pista y comenzamos a bailar.

Brittany se contonea y de vez en cuando cierra los ojos dejándose llevar por el ritmo de la música. Me acerco más a ella, no lo puedo evitar, aunque sé que debería alejarme, no puedo hacerlo.

Coloco una mano en la cintura de Brittany que detiene su baile por un momento. Me mira con los ojos muy abiertos y con su boca de color rojo furioso entre abierta.

Miro a sus ojos y luego a su boca.

Mi pulso se acelera al tenerla así entre mis brazos, el aroma se su perfume inunda mis fosas nasales y no puedo más.

Mis labios se acercan a los de Brittany y la beso.

Noto cómo se estremece entre mis brazos.

El beso se vuelve más profundo, más sensual, nublando mi mente por completo.

Sin muchas ganas me separo de ella, veo que sus ojos brillan de deseo.

Me desea tanto como yo, pero me pregunto, ¿si estará bien lo que estoy haciendo con ella?

Me gusta Brittany, más de lo que quiero reconocer, me calienta como el infierno en llamas y eso sí que es demasiado.

Levanta una de sus manos y con su dedo pulgar limpia mí boca de labial que de seguro hemos quedado manchadas después del beso.

Ese contacto me estremece, ese simple acto, me parece más íntimo que cualquier otra cosa.

Ella saca de su pequeño bolso un espejito y se arregla el labial.

Quisiera sacarla de ahí y llevarla a una cama donde calmar este deseo, pero no puedo.

Con toda mi fuerza de voluntad deshecho esa idea de mi cabeza.

Brittany nota que algo me molesta, que mi humor ha cambiado y se acerca a mi oído para preguntar:

―¿Quieres irte?

―¿Te molestaría que nos fuéramos?―contra pregunto.

Toda la noche se ha ido a la mierda.

―Para nada. Vamos―dice y comienza a caminar hasta la salida del local.

¿Qué estoy haciendo?

No recuerdo la última vez que termine una cita así.

Creo que nunca me había pasado.



Ya estamos en el auto, ambas en silencio, incómodas, yo más que molesta conmigo misma.



Llegamos a casa de Brittany.

Me bajo para abrirle la puerta y acompañarla hasta la puerta de entrada. Una vez en el pórtico nos quedamos frente a frente, la miro y me siento la idiota más grande por hacer lo que voy a hacer.

Una total y completa cobarde y miserable.

Me acerco a ella y le beso suavemente la boca.

Un beso puro y casto que hasta yo estoy asombrada de haberlo dado.

Luego apoyo mi frente en la suya soltando un suspiro dolorido, como si me costara mucho respirar, pero es verdad, de pronto el aire se ha hecho muy poco para mis pulmones.

Ella rodea mi cintura con sus manos yo le beso la frente y luego abro la boca para decirle algo, aunque esto signifique alejarla de mí, tengo que decírselo.

―Brittany, sabes que te deseo con locura. Me he tenido que aguantar las ganas que tengo de llevarte a algún lugar, de quitarte la ropa y hacerte mía hasta que pierdas la razón.

Escucho como la respiración se le agita, excitada por lo que escucha.

¿Por qué me pasa esto a mí?

―Santana…―me susurra y un escalofrió me recorre por completo, pero no… esto no puede ser.

―Brittany, eres una mujer increíble y me siento la persona más miserable del planeta por estar aquí contigo haciéndote perder el tiempo.

―No… no te entiendo… ¿qué dices?

―Esto debió parar luego de la primera vez que estuvimos juntas. Pero me siento muy atraída hacia ti y no soy mujer que deje pasar a una mujer que le guste. Pero tú eres distinta, Brittany. Te mereces a una persona mejor y claramente ambas sabemos que esa persona no soy yo.

Brittany se separa de mi agarre, como si mi contacto la quemara.

Veo que la furia se instala en su mirada y yo trago en seco.

―¿Y es ahora que te das cuenta de todo esto?

―Brittany, entiende. No quiero que te hagas falsas expectativas…

―¿Expectativas? ¿Y quién te ha dicho a ti que yo me he hecho expectativas contigo? Vaya, tú sí que tienes el ego muy grande.

―Bueno, lo que quiero decir es que no quiero que pienses que tenemos una relación o algo, porque claramente no tenemos nada…

―Lo sé, Santana, sé que no tenemos nada y nunca tendremos nada, no tienes para qué decírmelo.

Siento que en vez de aclarar mis dichos me estoy enredando cada vez más y estoy complicando todo.

Solo quería advertirle, ser sincera con ella, que supiera de primera mano que no estoy hecha para ella.

Que no soy la mujer de compromiso que ella necesita en su vida y en la de Susan y me salió todo mal.

Ahora ella está enojada, endemoniadamente enojada… y se ve preciosa.

―Brittany, yo solo quería que todo estuviera claro entre nosotras…

―Para mí siempre estuvo claro. Como te dije en Aruba, la mujer que se meta contigo tiene que tener claro que no conseguirá más que sexo de tu parte.

―Brittany…

―Fuiste tú la que se ha ido metiendo en mi vida. Tú eres la que viene aquí y le trae regalos a mi hija. No soy yo la que te persigue y si para ti esto es algo molesto, bueno lo dejas de hacer y ya. Ahora me voy. Que tengas una buena noche, Santana.

Me he quedado muda.

Esta mujer me ha dejado sin palabras.

Estoy parada en su pórtico como una estatua sin poder mover ni uno solo de mis músculos.

Pensé que estaba haciendo bien.

Que le estaba haciendo un favor con decirle lo que para ella al parecer era obvio. Debí de recordar que ella ya me había leído como nadie nunca lo había hecho antes.


Luego de unos minutos giro mis pies y comienzo a caminar hasta mi auto.

Siento como si hubiera perdido parte de mi alma… Qué asco me doy.

No entiendo qué demonios me pasa con Brittany.

Porque, aunque quiero que se aleje de mí para no dañarla, no puedo pensar en estar alejada de ella.

Miro una última vez su casa y suelto un gran suspiro cansino.

Pongo en marcha el auto y conduzco en dirección a mi casa.

Quería que esta noche fuera inolvidable para las dos. Explicarle a ella que lo mejor es que seamos amigas, pero si quería hacer eso, no debí haberla besado con tanto deseo y desesperación.

Esa fue mi primera y última cita con esta mujer…De eso estoy completamente segura.





*****************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 18

Mensaje por 23l1 Dom Oct 23, 2016 12:09 am

Capitulo 18



Entro en el vestíbulo del Holding López y llego hasta Tina que me recibe con una sonrisa para entregarme mis mensajes.

Camino hasta mi oficina y me tiro sobre la silla de ejecutivo. Comienzo a revisar los mensajes y, aunque son todos muy importantes, no hay ninguno que me interese…

Ninguno es de Brittany.

Pero yo sí que soy una imbécil.

Le digo que no quiero nada serio con ella y aquí estoy esperando que me llame.

Lo que más me jode es que la he extrañado mucho estos días que han pasado, casi una semana sin saber nada de ella ni de Susan y me estoy empezando a desesperar.

He querido llamarla unas mil veces estos días, pero cada vez que tomo el teléfono y voy a marcar su número, me detengo y no hago nada como una cobarde, como la cobarde que soy.

Giro mi silla y miro por la venta hacia la ciudad, hacia el horizonte, pensando en ella y en Susan y en qué estarán haciendo.

¿Estará pensando en mí?

Sí, cómo no.

Cierro los ojos y puedo ver claramente su rostro, con esos hermosos y brillantes ojos azules.

―Supongo que estás pensando en cómo lograr la paz mundial―escucho decir a Quinn que ha entrado en mi oficina y yo ni cuenta me he dado.

―Muy graciosa, Lucy, muy graciosa―respondo desganada, no quiero entrar en su juego.

Giro mi silla y comienzo a ver unos papeles que hay sobre mi escritorio.

―¿Puedo preguntar qué es lo que te pasa, San?

―A mí, nada.

―Claro y piensas que yo me voy a creer eso.

―Piensa lo que quieras, Quinn. Hoy no quiero entrar en una discusión contigo.

―Vaya, vaya. Tú sí que estás mal, pero muy mal. Espera, no te muevas, deja y te saco una fotografía para el recuerdo. "El día en que Santana López sufrió por una mujer"

Tomo un lápiz que está sobre mi escritorio y se lo lanzo a la idiota que está parada al otro lado de mi escritorio. Lo esquiva risueña, divertida por el estado en que estoy.

―Quinn, ¿necesitas algo importante? Porque si no es así puedes irte por donde viniste.

―Qué irritable estás. Ya ni una broma aguantas. Brittany sí que te ha dejado mal.

―No sabes lo que dices. No es por…

―Es por ella. Lo sé y no te molestes en negarlo.

―Y ahora resulta que pasar tanto tiempo con la bruja de Rachel te ha dado poderes para adivinar la mente.

Quinn se agacha recoge el lápiz y me lo lanza de vuelta y éste me golpea el hombro.

Su amada Rachel es intocable.

―San, la verdad, nunca te había visto así. ¿Has hablado con ella?

―No―respondo cortante y tragando en seco el nudo que se ha formado en mi garganta.

―¿Y por qué no? ¿Qué pasó con ella, San?

Miro a Quinn que se cruza de brazos esperando mi respuesta. Es mi amiga, más que mi único amiga es mi hermana, la que me conoce mejor que nadie.

Si tengo que contar algo ella es la indicada.

Y como si las palabras lucharan por salir de mi interior, le suelto todo.

―La cague con Brittany. Dije algo… bueno pensé que hacía lo mejor… pero, la verdad… bueno ella…ah, a la mierda.

―San, concéntrate y cuéntame todo con calma.

―Q. Salí con Brittany, fui a cenar y luego a un club. La llevé a su casa y le dije algo que no debí decirle. Ella se enojó.

―Ya, pero qué fue eso que le dijiste.

―Bueno, la besé como loca. Es que tú no sabes cómo me pone esa mujer… pero, Quinn ella es increíble, su hija es adorable, ya ha tenido muchos problemas en la vida como para que yo venga y le de otro más.

Quinn me mira pensativa, de seguro no sabe qué decirme y no espero que lo haga, solo con escucharme me ha ayudado mucho.

―¿Y por qué piensas que tú serías un problema, San?

―Quinn, tú me conoces más que nadie. Tú misma fuiste la que me dijo que dejara en paz a Brittany si no quería nada serio con ella…

―Pero a ti Brittany te gusta y te gusta mucho.

―Sí, pero ella necesita a alguien que se comprometa con ella y con Susan y…

―¿Y tú no te puedes comprometer con ella?

―Vamos, Quinn, tú sabes que yo no estoy hecha para el compromiso.

―Yo tampoco era de ese tipo de persona. Y ya me vez, estoy con Rach, a la espera de un hijo y una pronta boda y no me he muerto.

Es en estas veces cuando siento un poco, pero solo un poco de envidia por mi amiga. Ella se enamoró perdidamente de Rachel, y la persiguió hasta que le dobló la mano a la bruja esa.

―No sé, Q. Todo es complicado en mi caso. Estoy encariñada con Susan y no quiero dañarla a ella menos que a nadie.

―Bueno, si quieres seguir sufriendo allá tú. Ahora te dejo. Voy a ver a tu papá.

Quinn sale de la oficina y me deja sola pensando en todo lo hablado.

¿Debería llamarla?

¿Debería ir a verla?

Algo tengo que hacer.




Brittany


Ha pasado una semana desde la última vez que vi a Santana.

Y me da rabia admitir que la he extrañado.

Susan me pregunta por ella casi a diario y le tuve que inventar que estaba fuera del país en un viaje de negocios.

¿Pero qué pasará cuando el tiempo pase?

No podré seguir mintiéndole.

Tal vez ella se olvide de la morena con el tiempo.

O quizá debería decirle la verdad de que no aparecerá más por acá.

Estoy en la cocina bebiendo un poco de café y me encuentro con un cuaderno de Susan en el que dibuja y pega figuritas.

Lo abro y veo que ha dibujado muchas hadas y corazones. Paso otra hoja para ver un casi retrato mío y otro de su abuela. Paso una hoja más y me encuentro con algo que me deja muda.

Pegada en ese cuaderno, está una página del periódico de una semana atrás. Es la página de sociales y en donde aparece una fotografía de Santana y mía la noche de la inauguración de aquel club al que fuimos.

Toco la hoja con dedos temblorosos mirando a Santana y su bella sonrisa.

Mi corazón se vuelve a acelerar ante el recuerdo de esa noche. Sus besos, su contacto y luego su explicación de lo que no podría ser.

Yo siempre tuve más que claro que ella no era de compromisos amorosos. Pero, mi mente soñadora y romántica, había soñado en lo imposible.

Bueno no quiero seguir pensando en lo que no pudo ser, porque nada gano con eso, solo hacerme daño. Ya no veré más a Santana y aunque sé que eso es lo correcto, no puedo evitar sentir un poco de desilusión.






Es domingo así que decido ir al parque con Susan.

Mientras ella juega con algunos de los niños que ahí se encuentran yo observo cada uno de sus movimientos.

Corre feliz por el parque, y escucho su risa que es tan contagiosa.




Luego de que ya han pasado un par de horas, me llevo a Susan a almorzar en algún lugar por ahí.

Me pide que vayamos al centro comercial, quiere almorzar ahí y aprovechar para ir a la tienda de Hello Kitty.

La complazco este día, ya que hace tiempo que no venimos al centro comercial.

Entramos en el gran espacio y ella tira de mi mano para que apure mi paso.

―Apúrate mamá.

―Tranquila, Susan. Que la tienda no se va ir a ninguna parte.

Caminamos por el lugar hasta que llegamos al local de Hello Kitty. A Susan solo le falta dar un grito de emoción cuando pone un pie dentro de la tienda.

Sonrío al verla tan feliz.

Mira cada cosa que está en el lugar, con los ojos muy abiertos, como si nunca lo hubiera visto antes.

De pronto una extraña sensación me invade.

La sensación de que alguien me observa.

Pero, si miro a mi alrededor, no veo a nadie.

Debo estar paranoica ya que, durante algunos días, he tenido esta misma
sensación.

Sacudo la cabeza para sacar esos pensamientos y me vuelvo a fijar en mi hija.

Me pide le compre una camiseta que no tiene y un pequeño peluche. Yo accedo en darle ese gustito y luego de pagar salimos de la tienda y buscamos dónde almorzar.

Camino distraída por los pasillos del centro comercial, mirando algún lugar que me guste para almorzar con Susan cuando de pronto escucho que alguien la llama:

―¡Susan!

Ella se gira al igual que yo y vemos a Emily, la hermana de Santana, que se acerca a nosotras con una gran sonrisa en la cara.

―¡Em!―grita Susan soltándose de mi mano para ir al encuentro de Emily.

Me fijo que tras Emily aparece la figura de Maribel López. Me comienzo a poner nerviosa, mirando de un lado a otro buscando si Santana viene con ellas.

―¿Cómo estás, Susan?―pregunta la chica mientras le acaricia la cara.

―Muy bien, ¿y tú?

Maribel ya está a nuestro lado, se acerca a mí y me besa en la mejilla.

―Hola, querida ¿Cómo estás?

―Muy bien, gracias. ¿Y ustedes?

―Excelente. Pero, Susan, qué grande estás―dice como si hubieran pasado años sin verla.

―¿Y Sanny? ¿Viene con ustedes?―pregunta de improviso Susan y siento que un escalofrío me recorre por completo.

―No. San se quedó en casa. No le gusta mucho venir al centro comercial, menos con nosotras―responde risueña Emily y con ese comentario me relajo un poco.

―¿Y qué van a hacer ahora?―me pregunta Maribel.

Quiero contestar que nos vamos a casa, pero Susan se me adelanta a responder.

―Vamos a almorzar.

―Qué bien―dice Maribel―Nosotras igual. ¿Qué les parece si almorzamos juntas?

―No, no queremos interrumpir su día…

―Qué dices, si estamos encantadas. Se vienen con nosotras y punto.

Maribel se cuelga de mi brazo y comienza a guiarme por los pasillos del centro comercial, mientras Susan va tomada de la mano de Emily.

Llegamos a una especie de terrazas donde veo varios restaurantes.

Llegamos a uno y nos sentamos a una mesa y un amable mesero nos toma
el pedido.

Susan está feliz conversando con Emily. La chica le muestra unas pulseras que lleva en su muñeca y a mi hija le brillan sus ojitos al verlas.

De seguro ahora querrá tener unas iguales.


Mientras almorzamos no puedo dejar de sentirme nerviosa.

Aunque Maribel y Emily son muy agradables con nosotras, ellas y Susan, sacan cada cierto rato a Santana en la conversación.

Cada vez que escucho su nombre, mi corazón se acelera un poco y un calor se aloja en mis mejillas.

―¿Y cuándo irán a visitarnos a la mansión?―pregunta Maribel y veo que a Susan se le ilumina el rostro.

Yo no digo nada, no quiero responder.

―Sí, mamá―dice Susan entusiasmada―¿Cuándo vamos a casa de Sanny? Ella me dijo que podíamos ir a su piscina. Es muy grande y…

―Susan…

―Por favor, mamá. Vamos, ¿quieres?

―Puedes ir cuando quieras―le dice Maribel y con eso sé que no pararé de escuchar las súplicas de Susan para que la lleve a la mansión López.

Creo que es hora de que hable seriamente con ella.

―Gracias por la invitación. Ya veremos, Susan.

Digo para cortar la conversación que ya me tiene un poco cansada.



El almuerzo termina y Susan se despide de Emily y de Maribel con tristeza. Yo me despido y ellas me hacen prometer que pronto les haré una visita.


Vamos camino a casa y, en todo lo que dura el trayecto hasta ella, Susan no ha dejado de hablar del almuerzo y de lo bien que le caen Maribel y Emily y que pronto quiere ver a Santana.


Estamos en casa y ella corre a su habitación.

Yo la sigo, tengo que hablar con ella.

Explicarle que no verá a Santana y que no iremos a su casa.

―Mamá, Em me dijo que cuando fuera a su casa me podría poner una de sus pulseras. Son lindas, yo quiero unas igual.

―Susan…―digo mientras me siento en su cama―No podemos ir a la casa de Emily.

―¿Por qué, mamá? ¿Por qué no podemos ir? Em y su mamá nos invitaron.

―Sí, pero lo hacen por amabilidad. Solo te quiero pedir que, no insistas más con ir a esa casa, porque no iremos.

―Pero, mamá. Quiero ver a Sanny, ¿tú no quieres verla?

Me quedo callada un momento pensando en la pregunta que me ha hecho mi hija y la respuesta me asombra…

Sí, quiero verla.

―Hija, Santana es una mujer muy ocupada, de seguro no la veremos en un buen tiempo.

La carita de Susan es de decepción total. Me duele verla así, pero sé que pronto se le pasará y se olvidará de todo…o eso espero.

―Pero, mami. La mamá de Sanny dijo que podíamos ir a su casa. Vamos y le damos una sorpresa.

Una sorpresa.

Menuda sorpresa se llevaría Santana si llego a su casa con Susan, sobre todo después de todo lo que me dijo.

―Susan, no insistas, por favor.

Susan se queda callada y se tira sobre la cama.

Mi corazón se parte.

No logro entender por qué siente tal clase de afecto por Santana. Solo espero que esto pase pronto.




Es de noche, y estoy en la cama pensando en lo ocurrido ese día.

Giro de un lado a otro, incómoda, como si toda la ropa de cama me molestara.

Me hago un ovillo, a ver si así logro que el sueño llegue. De pronto la sexy imagen de Santana llega a mi mente.

No quería que fuera así, pero la morena aparece en gloria y majestad en mis pensamientos. Con sus ojos hipnóticos y su sexy sonrisa que hace que me flaqueen las piernas.

Golpeo la almohada por no poder sacarla de mi cabeza.


A altas horas de la madrugada logro conciliar el sueño.



Las horas que dormí soñé con Santana.

Paso a dejar a Susan al colegio y ahora estoy esperando un taxi para ir hasta la agencia de modelos para ver si tengo algún trabajo esta semana.

Creo que tengo que pensar en comprarme un auto, sería más fácil movilizarme así.

Mientras espero el taxi vuelvo a tener esa sensación de que alguien me observa.

Giro la cabeza para ver sobre mi hombro, pero no hay nada. Nunca he tenido delirios de persecución, espero no estar volviéndome loca.

El taxi llega y le doy la dirección a la cual tengo que ir.

En el trayecto reviso mi teléfono, nadie me ha llamado, nadie me ha mandado mensaje… ni una llamada de Santana.

Me reprendo mentalmente por pensar eso.

Tengo que olvidarla, sé que es lo mejor para mí, pero luego de haber estado con ella, eso es una tarea muy difícil.



Llego a mi destino y Mercedes, mi agente, me recibe en su oficina y con la noticia de que el próximo fin de semana me han solicitado para un desfile que hará una marca de trajes de baño.

Hace unos meses que no hago pasarela y me entusiasma volver al ruedo.


Luego de recibir toda la información y la dirección de la diseñadora para la prueba de vestuario salgo de la agencia. Tengo que ir a comprar algunas cosas y aprovecho que estoy cerca del centro para hacerlo.


He dado tres pasos fuera de la agencia cuando escucho que alguien me saluda:

―Hola, Brittany.

Mi piel se eriza y mi estómago se aprieta.

Debo estar soñando, sí, debo estar imaginándome todo esto.

Esa voz, esa voz.

―Tan bella como siempre, Brittany. ¿No me vas a saludar?

Estoy parada y sin poder moverme.

No creo que sea él, no ahora, no después de tanto tiempo.

Percibo el olor de su perfume y siento que él está muy cerca de mí, tan cerca que puedo sentir su respiración en mi nuca.

Comienzo a girarme lentamente, sé que cuando levante la vista veré algo que no quiero. De igual forma y tomando una honda respiración me giro totalmente y quedo frente a frente a este personaje.

―Hola, Britty-Britt. ¿No te alegras de verme?

No digo nada, no puedo, estoy abrumada con esta situación.

Nunca pensé que lo vería otra vez y ahora lo tengo aquí después de tanto tiempo.

―Sam―saludo a este hombre frente a mí.

No, no puede ser.

El papá biológico de Susan ha vuelto.





*****************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por marthagr81@yahoo.es Dom Oct 23, 2016 1:40 am

joder, sam aparece precisamente ahora.. . no puede sufrir un accidente u otra cosa, capaz y tambien modela en esa pasarela, ahora querra derechos sobre susan. Santana y su pasividad estupida, se le van a coger el mandado por tonta...le van a arrebatar su felicidad... su familia....quiero familia López - Pierce.... y no puede ser lo haz dejado ahi.......... stress
marthagr81@yahoo.es
marthagr81@yahoo.es
-*-*
-*-*

Femenino Mensajes : 3589
Fecha de inscripción : 26/09/2013
Edad : 42
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por JVM Dom Oct 23, 2016 1:52 am

Uhhhh, Sam haciendo su reaparición :/
Y San debe decidirse, si quiere formar parte de la vida de esas rubias o no. Esta confundida y tiene miedo de lo que esta sintiendo pero debe entender que es un buena persona y que claro que se merece a Britt, tal vez no haya tomado las mejores decisiones antes, pero el conocerla le cambio la vida. Así que espero que se ponga la pila y vaya por ellas sobre todo ahora que apareció boca de trucha :/
JVM
JVM
-
-

Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 3:) Dom Oct 23, 2016 5:31 am

Hola morra....

En serio?? No jodas aparece el bocon?? Aunque puede que sea interesante!!!
Ahora san se da cuanta de que no es "suficiente" para su y britt... medio tarde para todos en si!!
Amo la inocencia de su.. y deceo a las hadas!!! A ver y no tarden mucho!!!

Nos vemos!!!!
3:)
3:)
-*-*-*
-*-*-*

Femenino Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 32
Club Naya/Santana

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por micky morales Dom Oct 23, 2016 9:23 am

que hace labios de pescado ahi?????? pq tuvo que volver ahora, y que va a pasar con britt sentira remover viejos sentimientos????? santana de los mil demonios mueve ese c..... sino quieres que te roben el mandado!!!!! [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2414267551 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2414267551 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 3287304868 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 4065562827 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2602412967 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2446003554 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 597186406
micky morales
micky morales
-*-*-*-*
-*-*-*-*

Femenino Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Club Achele

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por 23l1 Dom Oct 23, 2016 7:13 pm

marthagr81@yahoo.es escribió:joder, sam aparece precisamente ahora.. . no puede sufrir un accidente u otra cosa, capaz  y tambien modela en esa pasarela, ahora querra derechos sobre susan. Santana  y su pasividad estupida, se le van a coger el mandado por tonta...le van a arrebatar su felicidad... su familia....quiero familia López - Pierce.... y  no puede ser lo haz dejado ahi.......... stress




Hola, uyyyy pero quien lo nombro¿? Nose!!!! pero pienso lo mismo ¬¬ =O nonnonononononono no lo digas que pasa! =O Uyyy si pienso igula =/ Por tonta le pueden quitar todo... espero y no pase... yo tmbn la kiero =/ =O pero si subi maratón xD jajajajajajaaj, pero aquí dejo el siguiente cap! Saludos =D





JVM escribió:Uhhhh, Sam haciendo su reaparición :/
Y San debe decidirse, si quiere formar parte de la vida de esas rubias o no. Esta confundida y tiene miedo de lo que esta sintiendo pero debe entender que es un buena persona y que claro que se merece a Britt, tal vez no haya tomado las mejores decisiones antes, pero el conocerla le cambio la vida. Así que espero que se ponga la pila y vaya por ellas sobre todo ahora que apareció boca de trucha :/



Hola, uyyyy sip ;@ Mmm si que tiene, no las puede perder! Toda, pero toda la razón en lo que dices! Ella era una persona, pero ahora es otra y una mejor para sus rubia! Espero lo mismo, osea debe hacer de todo para recuperarlas y alejar a esa cosa q llego ¬¬ Saludos =D





3:) escribió:Hola morra....

En serio?? No jodas aparece el bocon?? Aunque puede que sea interesante!!!
Ahora san se da cuanta de que no es "suficiente" para su y britt... medio tarde  para todos en si!!
Amo la inocencia de su.. y deceo a las hadas!!! A ver y no tarden mucho!!!

Nos vemos!!!!



Hola lu, esk nose quien rayos lo nombro ¬¬ Q!? aaaaaa para ayudar a que tome las riendas¿? siii siii puede ser jajajajajaja. Mmmmm si... después que no la dejo, ahora si ¬¬ esa morena esta haciendo complicadas las cosas, no¿? =/ Aiii si es un amor!!!!!! es una mini britt! jaajajajajajajaj, tan tierna!!!!! Aquí el siguiente cap para eso! jajaja. Saludos =D





micky morales escribió:que hace labios de pescado ahi?????? pq tuvo que volver ahora, y que va a pasar con britt sentira remover viejos sentimientos????? santana de los mil demonios mueve ese c..... sino quieres que te roben el mandado!!!!! [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2414267551 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2414267551 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 3287304868 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 4065562827 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2602412967 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 2446003554 [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo - Página 3 597186406



Hola, nosee!!!!!! Nooooooo, no digas nada q se cumple! =/ Aii morenaaaaa!!!! esk estaba tan bn, y tubo que retroceder todos los pasos q avanzo! ¬¬ Saludos =D



23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Cap 19

Mensaje por 23l1 Dom Oct 23, 2016 7:15 pm

Capitulo 19


Pienso que lo que estoy viviendo este día es un mal sueño.

Sam no puede estar aquí, frente a mí, después de tantos años y saludándome como si nada.

Parpadeo un par de veces, queriendo con eso que él desaparezca de mi vista, pero no lo consigo.

Él está aquí, tan real como la última vez que lo vi.

Estoy muda, sorprendida por su repentina aparición.

Levanto mi vista y me quedo anclada en su mirada. Esos ojos claros de los que una vez me enamoré perdidamente, esos ojos que tienen la misma expresión de desenfado que vi años atrás, la misma mirada que por meses me perseguía en sueños luego de que me dejara.

Pienso en Susan.

Al pensar en mi hija, mi cuerpo se estremece. Siento que mi corazón se acelera, no sé qué quiere Sam.

No sé por qué aparece ahora, solo presiento que no quiere nada bueno.

―Vaya, al parecer te comieron la lengua los ratones―dice con una sonrisa burlona que se asoma en sus labios.

Me reprendo mentalmente, tengo que reaccionar y salir de ahí.

No quiero hablar con él, no después de tanto tiempo.

No después de todo lo que me costó sacarlo de mi corazón y olvidarlo por completo.

―¿No vas a decir nada? ¿Ni una sola palabra después de todo este tiempo?

Escucharlo hablar de esa forma me da una rabia enorme. Una ira comienza a recorrerme de pies a cabeza.

No tengo por qué estar escuchando a este imbécil, así es que decido no hablar y me giro rápidamente para comenzar a caminar calle abajo.

Pensé que él se quedaría ahí, pensé que no me seguiría, pero en vez de eso viene detrás de mí y, tomándome por una mano, me gira y me pega a su cuerpo.

―Ay, Brittany. Esta no es la recepción que me esperaba.

―¡Suéltame!―grito y trato de zafarme de su agarre, pero él no me suelta.

―Solo quiero hablar calmadamente contigo. ¿Crees que podamos ir a algún lugar y conversar?

―¡Claro que no y suéltame! ¡Déjame ir!

Sam no me suelta, es como si no me escuchara y me aprieta más fuerte contra él.

―Estás hecha una fiera, Britty-Britt. Estás más bella que como te recordaba…ah, ¿te acuerdas de esos días, querida?

―¿Qué quieres? ¿Por qué apareces ahora?

―Ya te lo dije. Quiero hablar contigo, tranquilamente, sin gritos, como gente civilizada.

Escucharlo decir eso hace que me dan unas enormes ganas de voltearle la cara de un cachetazo.

―Pero es que tú y yo no tenemos nada de qué hablar―digo olvidando por un segundo que él y yo tenemos algo en común.

―Creo que te equivocas, querida. Tenemos que hablar. Por aquí hay un parque cercano ¿Qué te parece si vamos hasta ahí y nos sentamos en algún banco a conversar?

―¡No!―grito y trato de que me suelte pero me mantiene firmemente sujeta.

―Si no te gusta el parque podemos ir a una cafetería.

―Sam, ¿qué crees? Que puedes venir como si nada después de todo este tiempo y que yo te reciba con los brazos abiertos. Tú sí que estás loco.

―Bueno, si no quieres acompañarme, tendremos que hablar aquí, en medio de la calle, con la gente viéndonos como si tuviéramos una pelea de enamorados. ¿Eso es lo que quieres?

Trago en seco por lo que escucho.

Una pelea de enamorados… ¿pero qué pasa por la cabeza de este hombre?

Pienso que lo mejor es escucharlo, de seguro no me dirá gran cosa. Solo le daré un par de minutos y con suerte, cuando me diga lo que quiere decir, no volveré a verlo más… Eso espero.

Él me mira esperando mi respuesta, me tiene bien sujeta por los brazos y ese agarre me lastima. Está muy cerca, tan cera que siento su aliento sobre mi rostro.

―Está bien. Vamos al parque y solo será por diez minutos. Ni un segundo más.

―Bien―dice y me suelta.

Me giro y comienzo a caminar en dirección al parque. Camino rápido sin mirar a atrás, sin mirar si él me sigue o no.

Esto no puede ser verdad, esto tiene que ser una pesadilla.


Llegamos al parque y camino hasta un banco. Me siento y Sam se sienta a mi lado. Me sudan las manos, solo quiero que esto termine pronto.

―Comienzan a correr tus diez minutos, así que habla de una vez―digo moviendo uno de mis pies con impaciencia, él me sonríe de medio lado y al verlo pienso en cuanto hemos cambiado.

Antes yo moría por este hombre y por esa sonrisa que podía derretirme de inmediato. Ahora, nada de eso sucede, es más, puedo decir que solo siento indiferencia ante ese gesto.

―¿Me odias, verdad?

―No. No te odio, serías afortunado de que sintiera un poco de odio por ti. Simplemente no siento nada.

El muy estúpido se ríe fuerte, divertido con esta situación a la que yo no le encuentro la gracia.

―Te quedan nueve minutos y corriendo.

―Bueno, querida, iré directo al grano. Estoy aquí por nuestra hija.

Pestañeo un par de veces y sé que mi cara se desfigura al mirarlo.

«Con Susan no. Con ella no te metas»

―¿Nuestra hija? Nuestra hija no, Sam. Es mi hija, solo mía―digo y siento que un calor me empieza a recorrer el cuerpo y se aloja en mi cara.

La ira creciendo en mi interior.

―"Nuestra hija", Brittany―dice marcando lentamente cada palabra.

―No, Sam―digo seria, ahora dispuesta a darle guerra―Es solo mi hija. Tú no quisiste saber nada de ella, ni siquiera la viste nacer, no le diste tu apellido…pero, es que ni siquiera sabes cómo se llama por Dios y me vienes a hablar de nuestra hija. ¿Sabes?, no tengo que quedarme a escucharte, así es que me voy.

Me levanto para alejarme de él, pero me toma por la mano y me vuelve a sentar bruscamente en el banco.

―Me quedan algunos minutos, amor. Así que me vas a escuchar.

―No. Si el tema es mi hija, no quiero hablar contigo.

Sam suelta un bufido, la paciencia no es su fuerte, nunca lo fue y ahora lo veo enojado, con el ceño fruncido. De seguro pensó que sería más fácil venir aquí y hablar conmigo, pero no se le pasó por la cabeza que ya no soy la loca enamorada que dejó años atrás.

―Bien, entonces si no quieres llevar la fiesta en paz, veremos todo a través de mi abogado.

―¿Qué? ¿Qué estás diciendo?

―Te demandaré, Brittany. Pediré la paternidad de la niña y su tutela.

―Lo dicho, tú sí que estás más que loco. Parece que no recuerdas cómo fueron las cosas entre nosotros. Fuiste tú el que me dejó apenas supo que estaba embarazada. Fuiste tú el que salió huyendo y nunca volvió. No creas que será tan fácil, un juez nunca te daría la tutela de mi hija. Ahora me voy, creo que ya he escuchado suficiente.

Me levanto y ahora me alejo rápido de él para que no me agarre y me vuelva sentar a su lado.

Comienzo a caminar y escucho que él me dice:

―Te recomiendo que busques un buen abogado. Nada podrá evitar que te quite a la niña, ni siquiera esa novia rica que tienes ahora.

Me detengo de golpe, ¿novia rica?

¿A quién se refiere Sam?

Giro mi cabeza y veo que se acerca con aire de triunfo.

―Sí, querida. Te vi en la prensa con tu nueva conquista. Vaya, una de las herederas del Holding López nada menos. Estás aspirando alto, Britty-Britt.

―Ella no… no…―me quedo cada callada, no tengo por qué darle explicaciones.

Que piense lo que quiera.

―Ya lo sabes, no digas que no te lo advertí―se acerca a mí y alarga una de sus manos para tocar mi cara, pero se la aparto de un manotón―Fue bueno verte, amorcito. Ya tendrás noticias mías.

Comienza a caminar y lo veo alejarse de mí.

Siento que me voy a desmayar.

¿Qué pretende Sam?

No quiero ni pensar en que quiera quitarme a Susan.

«Tranquila, Brittany. Él no puede hacer eso. Él no puede, no puede»

Me dice una voz en mi cabeza mientras que de mis ojos caen lágrimas a borbotones que me mojan las mejillas.

¿Qué haré si Sam cumple su amenaza?

Tengo que buscar un abogado.

Alguien que me guíe y me diga qué debo hacer, y que me diga si Sam puede o no lograr su cometido.


Camino las calles con las manos cruzadas sobre mi vientre, como si tuviera frío aunque hay un sol esplendoroso y es que la conversación con Sam me ha dejado helada.

Debo calmarme, no puedo volver por Susan al colegio en este estado.

Tengo que tranquilizarme y buscar una solución segura.

Informarme qué debo hacer.

Me devuelvo a la agencia de modelos y le pido a Mercedes que, me ve un poco fuera de mí, que me ayude y me dé el nombre de un buen abogado. Ella me pregunta qué me pasa, pero le digo que es algo familiar y que no quiero hablar del tema. Mercedes no pregunta nada más y, desde un tarjetero que hay sobre su escritorio, saca una tarjeta de presentación.

―Toma. Tienes que llamar y pedir una cita con Artie Abrams. Solo espero que tenga alguna hora disponible. Es el mejor abogado que conozco y su agenda es apretadísima. Dile que vas de parte mía.

―Gracias, Mercedes.

Tomo la tarjeta y miro el nombre del bufete y del abogado que espero me pueda atender lo antes posible.

Salgo de la agencia y comienzo a caminar sin saber qué debo hacer primero.

Tomo una honda respiración y trato de calmarme.

Todo saldrá bien.



Llego a una pequeña cafetería y pido un capuchino.

Saco mi teléfono móvil y miro el número de la tarjeta del abogado. Marco el número y al segundo tono me atiende una mujer. Le pido me dé una cita con Artie Abrams y que Mercedes me ha recomendado. Me deja en espera, escuchando música clásica a través del teléfono y, luego de unos minutos, me dice que tengo una cita para el día siguiente a las once de la mañana.

Doy gracias al cielo de que esto haya salido tan rápido.

Ahora solo espero que llegue mañana para salir de todas la dudas que tengo.


Un poco más animada voy a recoger a Susan al colegio.

Cuando la veo salir, mi corazón se aprieta, no me imagino la vida sin ella, sin mi pequeña.

No entiendo la aparición de Sam a esta altura de la vida.

No entiendo qué pretende hacer, por qué quiere dañarme otra vez.



Llegamos a casa y trato de que mi cara no exteriorice lo que siento por dentro.

Que mi mamá no note el miedo que siento.



Cenamos tranquilas y Susan se va a su cuarto.



Ya es de noche y voy hasta la habitación de mi pequeña.

Está durmiendo tranquila, nada la perturba y envidio sus sueños. Duerme abrazando un peluche, yo le acaricio la cara y pienso que moriría si la alejan de mi lado.

Me coloco tras ella y abrazándola me quedo dormida a su lado.




Me levanto temprano y comienzo a vestirme.

Tengo que llevar a Susan al colegio y luego ir a la cita con el abogado.

Me pongo un vestido azul oscuro y me maquillo un poco para darle color a mi cara.

Preparo a Susan y, luego de desayunar, ya estamos camino al colegio.

Dejo a Susan en la puerta y ella entra corriendo con sus compañeros.

Tomo un taxi y le doy la dirección del bufete de abogados. Sé que voy un poco adelantada, pero no me importa esperar a que sea la hora.



Entro en el edificio de Abrams, Hudson y Puckerman.

Llego hasta el piso que me han indicado y entro en el vestíbulo. Una amable secretaria me dice que espere. Que el señor Abrams ya sabe que he llegado y que me atenderá enseguida.

Estoy nerviosa, no sé que me dirá el abogado, no sé si la ley está de mi lado.

El momento llega y la secretaria me hace pasar al despacho de Artie Abrams.

Entro dudosa, nunca he tenido la necesidad de orientación legal.

A mi encuentro sale un hombre de pelo castaño, con una amable sonrisa y una intensa mirada azul.

Me extiende la mano para saludarme y yo se la estrecho.

―Buenos días, señorita Pierce. Es un placer recibirla.

―Gracias, señor Abrams.

Él me indica con una mano que tome asiento en una silla, mientras el rodea el escritorio y se sienta frente a mí.

Observo la oficina y veo varias fotografías de la que debe ser su familia. Él con una bella mujer y con dos pequeños en brazos, de seguro su esposa e hijos.

―Bien, dígame, qué la trae por aquí.

―La verdad… es… bueno, no sé por dónde empezar―digo y suelto un gran suspiro―Tengo un problema con el papá de mi hija.

―¿Qué sucede con él?

―Luego de años de no verlo, apareció ayer. Y me dice que quiere quitarme la tutela de mi hija. Yo no sé si él puede hacer eso―suelto de corrido y desesperada.

―Tranquila. Cuénteme, hace cuánto tiempo que no lo veía. ¿Él reconoció a la niña?

―No. Él no le dio su apellido.

Y le cuento cómo pasaron las cosas entre Sam y yo y lo que éste me dijo el día de ayer.

Él me dice que Sam no puede venir así como así y quitarme a mi hija. Que primero tendría que pedir un juicio por paternidad, reconocer a Susan y luego pedir la custodia. Pero con los antecedentes de cómo pasaron las cosas, es casi imposible que un juez se la diera.

Luego me pide que me tranquilice y que espere a ver qué hará Sam. Que, si él decide instalar una demanda, el juicio podría tardar tiempo.

Yo desesperada le digo que no importa lo que me cobre, pero que no deje que Sam se salga con la suya.

Luego me da algunas otras indicaciones más me dice que cualquier duda lo llame y pida una cita.

Le agradezco toda su ayuda y quedo un poco más tranquila.

Solo un poco, porque pienso que Sam ha venido a dar guerra y nada lo hará
detenerse.


Camino por el vestíbulo de vuelta al ascensor. Espero a que el aparato llegue al piso y sin poder evitarlo me pongo a llorar.

Artie me ha dicho que tengo que estar tranquila, que es poco probable que Sam se quede con Susan, pero solo ese pequeño porcentaje de que algo suceda, me pone intranquila.

Con el dorso de la mano trato de secarme las lágrimas que salen de mis ojos.

El ascensor anuncia que ya está en el piso y no quiero que, quien sea que venga en él, me vea llorando.

Las puertas de acero se abren y yo no logro ver las caras de las personas que se encuentran ahí ya que mi vista está nublada por el llanto.

―¿Brittany? ¿Estás bien?

Escucho esa voz tan familiar, esa voz que hace días no he escuchado y a la cual he echado mucho de menos.

―¿Qué pasa, Brittany?¿Qué haces aquí?

―Santana…―digo y me lanzo a su cuerpo.

Me cuelgo de su cuello y la abrazo fuertemente. Me recibe y también me abraza y eso me reconforta de inmediato. Sigo llorando, no puedo hablar, mientras que me acaricia la espalda de arriba abajo con su mano.

―Tranquila. Dime qué pasa―me aparta del abrazo y con sus manos toma mi cara.

No puedo hablar, de mi boca solo salen sollozos. Santana trata de secar mis lágrimas con sus pulgares.

No he tenido tiempo de preguntarme qué hace Santana ahí, pero no importa, está aquí y eso hace que me sienta bien.

―¿Me vas a decir qué pasa?

Asiento con la cabeza y trato de calmar mi llanto.

―El… el papá de Susan … ha vuelto… y quiere… quitarme a mi hija―digo y me pongo a llorar otra vez.

Santana abre los ojos, asombrada por lo que le digo. Niega con la cabeza y levanta la mí para que lo mire directamente a los ojos.

―Escúchame, Brittany. Él no va a quitarte a Susan, eso te lo prometo.

―Pero…pero…―balbuceo.

―Pero nada.

Me vuelve a abrazar y yo me sorprendo al sentirme tan bien entre sus brazos.

Es justamente lo que necesitaba.

Con Santana me siento segura.





*****************************************************************************************************************************************

Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"

Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D


23l1
23l1
-*-*-*
-*-*-*

Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
El mundo de Brittany

Volver arriba Ir abajo

Finalizado Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Pequeño Amor (Adaptada) Epílogo

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Página 3 de 6. Precedente  1, 2, 3, 4, 5, 6  Siguiente

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.