Fic Gira, gira la ruleta del Destino - Capitulo 30 El Último Giro de La Ruleta (Capítulo final)

Las manos de Jesse empezaron a recorrer el cuerpo de Rachel, mientras ella le iba desabrochando los botones de la camisa. Los besos iban aumentando su intensidad, lo mismo que el palpitar de sus corazones, que ahora latían uno muy cerca al otro.
De pronto Jesse empezó a besar el cuello de Rachel mientras ella le susurraba su nombre cerca del oído, cuando entreabrió un poco sus ojos y vió que su muñeca brillaba un objeto plateado, una esclava, e inmediatamente la cordura regreso a su cabeza y se detuvo de golpe.
- ¿Qué estamos haciendo? – Dijo sorprendido, luego se incorporó alejándose de ella – Lo siento, lo siento mucho Rachel.
- Oh por Dios, oh por Dios, Jesse yo… - dijo Rachel asustada incorporándose también, mientras acomodaba su ropa.
- Lo siento muchísimo Rachel, pero no puedo, yo…
- Te vas a casar con Santana, oh por Dios ¿Qué estoy haciendo? – dijo Rachel y salió corriendo del granero.
- Rachel espera… - dijo Jesse al verla salir, pero no la detuvo. Luego se puso de pie dando vueltas por el granero con las manos en su cabeza recriminándose por lo sucedido y sin tener en claro que debía hacer.
Mientras tanto Rachel no paró hasta llegar a su habitación, al entrar cerro la puerta con llave, temerosa que Jesse este detrás de ella, se quedo en silencio mientras iba retrocediendo lentamente hasta alcanzar una silla sentandose en ella. Llevo una de sus manos a sus labios, en ellos aun se sentía el calor de los besos de unos instantes atrás. Estaba en shock por lo sucedido, lo último que esperaba era que Jesse la besara y más aún que ella respondiera el beso y menos aún que llegarían a casi… el sonido de golpes en la puerta la alertaron nuevamente.
- ¿Quién es? – preguntó Rachel.
- Sra. Rachel, soy Mia – anunció la muchacha.
- Mia, me vas a disculpar pero voy alistarme para dormir.
- Quería saber si se le ofrecía algo, es que me quede preocupada porque pasó corriendo como alma que se la lleva el diablo – dijo la muchacha provocando que Rachel soltara una sonrisa
- Que cosas dices Mia – dijo al abrirle la puerta.
- Pero es que me preocupo por Usted, además ¿Qué hacía afuera y tan tarde y con tanto frío?
- Vaya cuantas preguntas – sonrió Rachel mientras sentía que su cuerpo la adrenalina dejaba de fluir – Sólo estaba dando un paseo, algo me asusto, pero no fue nada malo.
- Que bueno, ¿No desea que le traíga algo para que pueda descansar tranquila?
- No quiero incomodarte, es muy tarde.
- Para nada señora, regreso en un momento – dijo la muchacha y luego volteo a verla – Señora su blusa esta abierta.
- ¿Qué? – dijo Rachel mirando su ropa descubriendo que tenía algunos botones desabrochados, que rapídamente cubrió con una mano.
Por su parte, Jesse entro sigilosamente al hotel y caminó con rumbo a su habitación, pero quería hablar con Rachel. Caminó con dirección al piso donde quedaba la habitación de ella, pero cuando estaba por subir los últimos escalones, escucho unos pasos, por lo que detuvo su andar y espio por detrás de la pared, viendo como Mia ingresaba con una bandeja de té caliente. Se dio media vuelta y siguió su rumbo.
Al llegar a su habitación se recostó en la cama, recordando cada uno de los momentos junto a Rachel, el sabor de sus labios y su piel, el latido de su corazón sintiéndolo bajo su pecho, el roce de su piel con la de ella, su voz susurrando su nombre en la oscuridad. Estos pensamientos saltaban uno tras otro atormentándolo; se volvía aponer de pie y sacudía su cabeza recrimienadose por lo que había pasado; había cometido un error al besar a Rachel, había descubierto sus sentimientos hacia ella, había traicionado a Santana, a quien unos días atrás había prometido cuidar y proteger de todo y con lo que había sucedido, sería su primer mal. Definitivamente había cometido un error y el problema era como enfrentarlo ahora.

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- Hola ¿Qué haces aquí? – Preguntó Quinn al ver quien había a visitarla.
- Vine a verte, pero creo que no te ha gustado mi visita, creo que mejor me voy – dijo Santana parada al otro lado de la puerta.
- No, no es eso, simplemente me sorprendió verte, pensé que estarías en Washington. Pero pasa, pasa, me da gusto verte.
- Esta bien – dijo mientras entraba al departamento - ¿Esta Sam?
- No, ha salido con Puck, pero dime ¿Quieres hablar algo con él? – Preguntó extrañada.
- Tranquila Fabray, no quiero nada con tu chico, simplemente quería saber si estaba en casa porque quería hablar en privado contigo – respondió.
- Yo no quise decir eso, pero mejor dejemoslo ahí, dime en que puedo ayudarte.
- Vine porque quiero aceptar tu ofrecimiento
- ¿Cuál ofrecimiento?
- Sobre mi boda, ¿Recuerdas que habías ofrecido ayudarme? – Quinn asintió con un ligero movimiento de cabeza – Antes no he venido a verte porque he estado muy ocupada, pero… necesito tu ayuda, había contratado una organizadora, pero la despedi hace una semana y Brittany tiene ideas muy radicales.
- Con gusto lo haré – respondió Quinn – Me alegra que hayas aceptado.
- Sé que a veces suelo ser brusca con mi trato, pero… te aprecio, siempre lo he hecho.
- Gracias Santana, yo también te aprecio mucho- respondió Quinn y ambas muchachas se sonrieron mutuamente.
- Bueno, basta de sentimentalismos – dijo Santana cortando el momento – Tenemos una boda de preparar.
- Santana, ¿es cierto que se casan en menos de dos meses?
- Sí, Jesse puso la fecha después del concierto – respondió algo ida.
- Que bueno que por fin se casen, entonces ¿es definitivo?
- ¿Definitivo? ¿Por qué preguntas eso?
- Disculpa, quiero decir ¿Estas segura? ¿Estas segura que quieres casarte con Jesse?
- Quinn, ¿No veo el porqué a tus preguntas?
- Es que quiero saber si esta realmente segura, el matrimonio no es cosa de juego, - Perfecto, nuevamente con tus tonterías, pensé que quedaba claro. Acaso es tan difícil de creer que quiero enseriarme, sentar cabeza – dijo Santana molesta.
- Lo siento no quise molestarte, pero necesito saberlo – dijo Quinn mientras Santana mortificada se dirigia a la puerta – Quiero saber que ya no estas enamorada de Finn.
- ¿Finn? ¿Qué tiene que ver Finn en todo esto? – preguntó Santana quien habia detenido su paso y volteó a verla.
- Santana recuerda que sé que estabas enamorada de Finn y quería saber si ya no sentías lo mismo.
- ¡Quinn! Eso fue hace años cuando eramos unos chiquillos…
- ¿Estas segura? – Insistió Quinn dandose cuenta que Santana se ponía cada vez más nerviosa - Lo siento Santana, es que en el concierto me pareció que ambos se veían mucho.
- Tú te veías mucho con Puck mientras cantabamos y bailabamos, también con Finn y no por eso pienso que aún sigues enamorada de alguno de los dos – se cruzó de brazos frente a ella – Quinn quiero que te quede en claro que voy a casarme con Jesse, no hay marcha atrás esta decidido.
- Esta bien, Santana, lo siento, no quise ofenderte, sólo me preocupe que las cosas se esten enredando.
- Quinn las cosas sólo se enredan en tu mente – respondió Santana.
- Lo siento nuevamente, no puedo dejar de preocuparme por todo, olvida lo que te dije – respondió Quinn y Santana asintió, luego sacó de un escritorio una libreta con un lápiz – Bueno creo que debemos empezar con lo básico donde se va a realizar.
- La verdad no conosco un buen lugar que sea privado, sólo queremos a los más cercanos.
- Familia y amigos cercanos entonces – dijo Quinn
- Sólo amigos cercanos – indicó Santana.
- Pero… ¿Y sus familias? – Preguntó Quinn.
- La familia de Jesse siempre anda en el extranjero, no creo que lleguen para la boda y…
- ¿Y tus padres y tu hermana?
- Ellos decidieron no asistir – respondió secamente – Pasemos a otros detalles
– Pero Santana… Lo siento mucho – Dijo Quinn al ver que rostro de Santana se ensombrecía.
- Esta bien, no me importa hace tiempo sé que no puedo contar con ellos, así no me afecta – contestó Santana volviendo a cambiar de expresión.
- Ok – dijo Quinn algo preocupada, pero trató de disimular – Creo que lo del lugar lo tenemos solucionado, Kurt tiene un amigo que tiene una hermosa casa a las afueras de la ciudad, podríamos realizar la ceremonia en los jardines de esa casa.
- ¿No habrá problema con ello? – Preguntó Santana.
- Sé que Kurt podrá convencer a su amigo, yo me encargo que lo haga.
- Perfecto, entonces pasemos a otros detalles, necesito que me ayudes a buscar un hermoso vestido de novias.
- Y contratar un buffet y orquesta – indicó Quinn - Creo que lo del buffet pueden ayudarnos los chicos, ellos estaran encantados de hacer degustaciones.
- Ok, ellos siempre buscando excusas para comer – rió Santana.
- Vas a ver que todo será genial, serás la novia más bella que se ha visto.
- No me adules Quinn, pero gracias por decirlo. Otra cosa, necesito que la orquesta me ayude en algo, es una sorpresa para Jesse
- ¿Vas a cantarle algo? – Preguntó
- Sí, quería que fuera en la cena de ensayo, a ver que te parece esta canción – dijo Santana y colocó el CD en el reproductor.
- Eso fue maravilloso – dijo Quinn tratando de contener las lágrimas luego de oír la canción.
- Gracias, Jesse es un hombre maravilloso y voy hacer feliz a Jesse.
- Lo que más me importa que él sea el que te haga feliz, es decir que ambos se hagan felices.
- Lo seremos Quinn, ya no existe nada que pueda cambiar las cosas.

**********

El sonido de teléfono alarmó a Jesse, abrió los ojos intempestivamente y con un rápido movimiento se incorporó de la cama y contestó el aparato.
- Hola – dijo al momento de levantar el auricular.
- Jesse ¿Qué haces en tu habitación? Deberías haber estado hace media hora en el set, te estamos esperando para filmar – Respondió Bryan.
- ¿Qué dices? ¿Qué hora es? – Preguntó aún aturdido por la mala noche.
- ¿Acaso estas enfermo?
- No, no es eso, disculpame estoy en un momento con ustedes.
- Apresuramente Rob no le gusta la impuntualidad y ya ha tenido consideraciones contigo por los días que te dio de más. Así no sé lo que harás pero te necesito lo más pronto posible – sentenció Bryan y colgó el telefono.
- Demonios – Jesse luego de colgar el auricular en su sitio.
Rápidamente se dio un baño y se vistió con lo primero que encontró. Nunca antes había llegado tarde a una presentación, ensayo o entrevista de trabajo. Y ahora era la primera vez que lo hacia y a la filmación de la película que impulsaría toda su carrera. Estaba furioso consigo mismo; gran parte de la noche se la paso pensando que debía hacer al día siguiente pero sin hallar una solución. Finalmente, recien pudo conciliar el sueño cerca del amanecer.
- Corte – gritó Rob – Jesse, puedes acercarte por favor
- Disculpa Rob yo…
- ¿Qué te pasa hoy muchacho estas uy distraido? No sé lo que tienes pero ayer no estabas así ¿Pasó algo? – Preguntó el director.
- No… Bueno, la verdad... – dijo Jesse y de lejos vió pasar a Rachel que caminaba con las chicas al área de vestuario, quedando mudo por unos instantes, luego regresó a la realidad – No me pasa nada.
- ¿Estas enfermo? – Preguntó nuevamente Bryan, quien se había aproximado a los dos hombres y al ver que Jesse tenía su mirada hacia una dirección quiso seguirla.
- No – Respondió Jesse presuroso para evitar que Bryan se diera cuenta a quien habia visto - Sólo que… me siento algo cansado, disculpenme – respondió Jesse avergonzado
- Ok, sea lo que sea tengas muchacho, dejalo de lado, porque ya estamos atrasados con la filmación – indicó Rob y Jesse asintió – Entonces anda a tu lugar que empezaremos de nuevo.
- No me gusta esto Bryan – susurró Rob cuando Jesse se había alejado – Creo que esta así por lo del matrimonio.
- Sólo esta nervioso Rob, comprende es su primer matrimonio – respondió Bryan.
- Lo dices porque tú te has casado tres veces, pero… creo que este chico tiene algo más, ayer estaba perfectamente, me pregunto que habrá sucedido.
- No lo sé, pero por experiencia te digo que no te lo dirá, Jesse es muy reservado – contestó Bryan.
- Bueno, espero que mejore – Luego tomo el megáfono que había dejado a un lado y dio la orden de volver a grabar.
Al terminar las grabaciones Rob le indicó a Jesse que debía concentrarse más y que se preparara las siguientes escenas con más dedicación.

*********

Tal como lo había dicho Quinn, Kurt accedió a convencer a su amigo para celebrar la boda en su casa y quien coincidentemente era un gran admirador de Santana y acepto gustoso en brindar su casa para el matrimonio. Los tres fueron a conocer las instalaciones y quedaron maravillados con la hermosura del lugar.
- Y podemos colocar las carpas aquí y unas luces amarillas en cada arbusto – Dijo Kurt.
- Me encanta la idea – Dijo Santana
- Y tenemos algo super especial, un laberinto en la parte de atrás – Dijo Kurt señalando el lugar – Donde las parejas pueden perder un momento para tener momentos románticos.
- Es hermoso Kurt – Dijo Quinn – La boda será excelente.
- Y ahora nos queda encontrar un vestido de novia – Dijo Santana.
- Bueno tengo te tengo una sorpresa Santana – Dijo Kurt y ambas lo miraron extrañado – Por favor siganme – Indicó introduciendose al laberinto.
- Kurt ¿A dónde vamos? – Preguntó Santana pero no obtenía respuesta – ¿Sabes algo Quinn?
- No – Dijo Quinn.
Pararon al llegar al centro del laberinto, justo en el medio había una hermosa rotonda y dentro de ella estaban un par de muchachas paradas delante de unos objetos cubiertos con telas.
- ¿Qué es eso Kurt? – Preguntó Santana acercandose lentamente.
- Mi sorpresa especial – Dijo Kurt – Ven acercate.
Ambas muchachas se acercaron e ingresaron a la rotonda.
- ¿Qué es todo esto Kurt? – Volvió a preguntar Santana.
- Chicas – Dijo Kurt y las muchachas levantaron la tela dejando a la luz 4 hermosos vestidos de una hermosa tela blanca– Esto es parte de lo mejor de la colección de vestidos de novia de Vera Wang, elige el que más te guste y será tuyo.
- Por Dios un Vera Wang ¿Es enserio? – Dijo Santana sorprendida.
- Son bellísimos – Dijo Quinn.
- Le conte a Vera que se casaba una de mis grandes amigas y le conte quien eras y me pidió que te hiciera llegar el presente, los 4 son de tu talla para que elijas el que más te gusta – Respondió Kurt
Santana recorrio con la vista los vestidos, se acercó a admirar cada uno con detenimiento hasta finalmente quedar parada frente un hermoso vestido strapless y corte sirena.
- ¿Puedo probarmelo? – Preguntó Santana.
- Sigue a las señoritas para que te ayuden a vestirlo – Indicó Kurt y Santana fue a la parte posterior de la rotonda con las muchachas y el vestido. Mientras Kurt servía unas copas de champangne, entregando una a Quinn.
- Magnifico Kurt, ha sido un super detalle – Dijo Quinn chocando su copa con la de Kurt.
- Es lo mínimo – Dijo Kurt – Son mis amigas, debo asegurarme que se vean grandiosas.
- Yo también quiero un regalo similar – Bromeó Quinn.
- Cuando tú te cases, yo mismo diseñare tu vestido linda – Dijo Kurt sonriendo.
- ¿Qué tal me veo? – Dijo Santana y sus amigos enmudecieron al verla, el vestido le quedaba perfecto y resaltaba su hermosa figura.

Spoiler:

- Estas maravillosa – Dijo Quinn emocionada al verla.
- Es perfecto para ti – Dijo Kurt conteniendo las lágrimas.
- Quiten esas caras que me van hacer llorar – Dijo Santana emocionada por la reacción de sus amigos.
- Ok, pero ahora a celebrar – Dijo Kurt entregandole a Santana otra copa de Champangne – Por tu felicidad ¡Salud!
- ¡Salud! – Dijeron Santana y Quinn al mismo tiempo y los tres chocaron sus copas.

***********

- Rachel, abreme por favor – Dijo Jesse mientras tocaba la puerta de la habitación de Rachel.
- Señor St. James, ella no está – Dijo Mia al verlo.
- ¿A dónde fue? – Preguntó Jesse a la muchacha.
- Salió con las chicas al pueblo cercano a pasear – Dijo Mia.
- ¿Sabes si regresara pronto? – Preguntó
- No lo creo, porque iba a quedarse todo el día por allá ya que no tienen escenas que filmar – Indicó la muchacha.
- Gracias Mia, por favor dile que la estoy buscando – Dijo Jesse y abandonó el lugar.
Rachel había aprovechado los horarios de trabajo para evitar a Jesse desde aquella noche del granero. Recien se volvieron a ver a los dos días de que ella lo viera de lejos mientras él hablaba con Rob y Bryan; al día siguiente de eso se reportó enferma y le dieron descanso por un par de días los cuales los pasó encerrada en su habitación pero Jesse tampoco pudo acercarse porque Mia paraba metida en su habitación cuidandola.
Luego de ello Rachel se incorpoó al trabajo, Jesse se acercó a ella algo avergonzado y Rachel actuó como si nada hubiera pasado y alejandose de él, dejando desequilibrado a Jesse. Después de aquello procuraba no quedarse sola con él, siempre estar rodeada de alguien del elenco o simplemente desaparecer lo más pronto posible de su lado.
- Es una pena que solo falten 5 semanas para terminar de filmar – Se lamentaba Karen.
- Realmente es una pena, los voy a extrañar a todos – Dijo una de las actrices.
- Yo también, les he agarrado mucho cariño a todos los de la producción y a todas ustedes – Dijo Rachel.
- Yo voy extrañarte mucho Berry – Dijo Karen abrazando a Rachel – Pero lo que más voy a extrañar es ver a Jesse todos los días.
- ¿A Jesse? – Preguntó Rachel intrigada.
- Sí, es que tan guapo y caballero – Respondió Karen.
- Y muy buen amigo – Respondió la otra actriz.
- Y muy guapo – Volvió a decir Karen.
- Karen linda, ¿Me parece o te gusta Jesse? Te recuerdo que esta comprometido – Preguntó Rachel.
- Lo sé – Respondió apenada Karen – Es simplemente juego, pero no vas a negar que tengo razón.
- Sí tienes razón – Respondió Rachel de manera esquiva.
- Me pregunto ¿Qué tal besará? – Dijo Karen.
- Rachel puede decirnos – Dijo la otra actriz.
- ¿Qué? ¿Po… po… por qué tendría que yo saberlo? – Preguntó Rachel nerviosa.
- Porque eres la única que tiene escenas románticas con él – Dijo Karen.
- Pero eso es simple actuación – Respondió Rachel.
- Pero yo que sepa por allí leí que alguna vez tú y él salieron – Dijo la otra actriz.
- Eso fue hace siglos – Dijo Rachel algo incomoda – Dejen de hablar de tonterías
- Vamos Rachel cuentanos, ¿Acaso no sabe besar bien? A mi me da la impresión que si – Dijo Karen
- Ok. Sí Jesse besa muy bien – Respondió Rachel.
- Pero cuentanos detalles – Preguntó la otra actriz.
- Chicas de veras no entiendo su interes en saber como besa Jesse si tanto quieren saberlo porque no van y lo averiguan – Contestó fastidiada.
- No es mala idea – Dijo Karen
- Estas loca niña ¿Cómo se te ocurre hacer eso? – Dijo la otra actriz.
- Tienes razón quizás nos volvamos a encontrar en otra película y me toque a mi hacer de la heroína – Dijo Karen y todas rieron por el gesto dramático que hizo.
- Vamos heroína tenemos que regresar al hotel, ya pronto oscurecerá – Dijo Rachel.
Las chicas llegaron al hotel cuando la noche había caído.
- Sra. Berry llegó un paquete para usted – Indico el recepcionista del hotel.
- Gracias – Respondió Rachel y palideció al ver el remitente.
- ¿De quién es? – Preguntaron las muchachas al mismo tiempo trabando de leer el nombre que figuraba en la parte superior del paquete.
- Es de mi esposo, es de Finn – Susurró Rachel – Chicas tengo algo que hacer, las veo en un rato.
- Nos vemos luego Rach – Dijo Karen y camino junto con su otra amiga al salón mientras Rachel corría hacia su habitación.
Al llegar a ella coloco el paquete sobre su cama y lo abrió, dentro de ella había 2 anillados que era guiones que estaban a la espera de su aprobación, unos sobres con fotografías de Beth y Shelby en la última actuación de su escuela y un sobre con el logotipo de un buffet de abogados.
Lentamente saco el contenido de aquel sobre y se encontró con el formato para la petición formal del divorcio, los datos estaban correctamente llenados y tenían una indicación con una flecha autodesiva que le indicaba donde debía firmar.
- Acaba de comenzar el fin de una era – susurró para si misma.
El sonido de alguien llamando la puerta la regreso a la realidad, rapidamente guardo los objetos dentro de la caja para guardarlos debajo de la cama y corrió a abrir la puerta.
- ¿Podemos hablar? – Dijo Jesse al momento de que ella abrió la puerta.
- Jesse… ehh… No entiendo de que quieres hablar – Respondió Rachel tratando de calmar sus nervios.
- Rachel lo sabes bien es sobre lo que pasó en…
- No paso nada, ¿Entendido? – Interrumpio Rachel.
- Sí paso y quiero disculparme por ello, yo no debí…
- No debimos, pero no te preocupes te entiendo – Dijo Rachel
- ¿Qué dices?
- Te entiendo, nos dejamos llevar por la carga sexual que nos dejo la escena que habíamos grabado temprano ese día, tú andas nervioso con el matrimonio y quizás quisiste lanzar una canita al aire, lo bueno es que entramos en razón y nada malo paso.
- ¿Estas diciendo puras tonterías? – Dijo Jesse.
- No, creo que es lo más lógico, lo he pensado mucho, no te preocupes, no hay problema podemos seguir trabajando juntos, no ha pasado nada malo – Respondió Rachel.
- ¿Cuál sería tu justificante? – Contestó Jesse molesto.
- Yo… bueno yo… quizás fue porque ando en pleitos con Finn y quizás me deje llevar por despecho y porque hace tiempo no he tenido intimidad y quizás– Respondió Rachel nerviosa.
- ¿Entonces eso fue por despecho? – Preguntó Jesse claramente fastidiado.
- Creo que sí Jesse, no busquemos otras explicaciones a esto – Respondió Rachel.
- Rachel yo… - Dijo Jesse y se detuvo a pocos centímetros de ella.
- Tú pronto estarás casado con Santana, lo mejor será que ella no se entere nada de eso y nosotros olvidemos aquello. Nada paso ¿Ok?
- Es que Rachel yo… Dijo Jesse pero fue interrumpido.
- Sra Rachel le traigo su… - Dijo Mia entrando alborotamente a la habitación – Disculpen no quise interrumpir.
- Hola Mia, no has interrumpido nada, Jesse ya se iba – Indicó Rachel – Gracias Jesse por venir, nos vemos mañana en el set.
- Ok Rachel así será – Respondió Jesse secamente y salió de la habitación.
- Mia por favor traime una taza de te – Indicó Rachel haciendo salir a la muchacha de la habitación.
Cuando se quedo sola se recosto sobre la puerta pensando en como le había dolido decirle todo eso a Jesse mientras una lágrima se deslizaba por su mejilla. Rápidamente se la limpio y volvió a sacar la caja oculta para poder ocultar el sobre dentro de uno de sus cajones de ropa y el resto del contenido colocarlo en la pequeña mesa que tenía junto aun sillón frente a un gran ventanal.

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Santana y Brittany esperaban a Quinn en lobbie de su departamento, irían a ver las diferentes opciones de buffet para la boda. Cuando de pronto ambas muchachas se alarmaron a ver la figura que ingresaba al edificio.
- ¿Qué diablos haces aquí? – Preguntó Santana al ver que Finn se acercaba hacia ellas.
- Sí Finn no tienes nada que hacer aquí – Dijo Brittany con los brazos cruzados.
- Calmate y cambia de rostro que no estoy solo, los chicos estan por entrar – Dijo Finn e inmediamente vieron como ingresaban Sam, Puck, Artie y Mike.
- Chicos – Dijo Brittany acercandose a sus amigos.
- Disculpa – Susurró Santana.
- No tienes porque disculparte – Respondió Finn.
- Chicos llegaron temprano – Dijo Quinn saludandolos a todos.
- ¿Qué hacen aquí Quinn? – Preguntó Santana alejandose de Finn velozmente.
- Les dije a los chicos que necesitaba ayuda para elegir el buffet – Respondió Quinn.
- Y nosotros estamos encantados de ayudarlas y en especial si hay deliciosa comida de por medio – Respondió Artie.
- ¿Pues que esperamos? – Dijo Brittany y tomo del brazo a Santana saliendo del edificio seguido por todos.
Se dividieron en grupos y visitaron diferentes servicios de buffet, donde los chicos fueron utilizados como conejillos de indias probando los más diversos bocadillos para la recepción. Finalmente terminaron en un restaurante donde se podian servir del buffet lo que desearan comer.
- Te ves linda – Susurró Finn a Santana al acercarse a ella en la fila del buffet.
- Gracias, me sorprendió verte aquí – Respondió mientras miraba disimuladamente si alguien se había percatado que estaban conversando.
- Tranquila Quinn esta con el manager y los chicos estan más preocupados en devorar el buffet – Respondió Finn - ¿Cómo has estado?
- Ocupada – Respondió secamente.
- Entonces todo esta dicho – Dijo Finn.
- Creo que quedo claro la última vez.
- Sí, pero eso no hace que deje de amarte – Dijo Finn y luego se acercó hacia su oído – Aún te amo.
- Finn, basta – Respondió mortificada – Ya te dije tome una decisión y tú no estas en ella.
- Una vez me dijiste que Jesse era un buen hombre, la verdad yo nunca he pensado así de él, pero supongamos que es así, que es un buen hombre que merece lo mejor, no crees que también merece que lo amen – Dijo Finn mientras iba llenando su plato.
- Yo lo haré – Respondió Santana sin verlo.
- Yo me refiero que merece que alguien lo hace con desesperación y pasión como la que sientes por mi – Dijo Finn.
- Ya te respondi, yo lo haré – Volvió a decir Santana.
- Ok, sólo espero que él pueda amarte una décima parte de lo que yo te amo.
- Lo hace y más, eso te lo puedo asegurar – Contestó Santana.
- Ok – Dijo Finn y se percató en el plato de Santana – ¿Sólo eso piensas comer?
- ¿Ahora vas a fijarte en lo que como? – Preguntó Santana molesta.
- Son a penas unas hojas de lechuga y otras verduras, debes comer algo más.
- Eso no es de tu incumbencia – Dijo Santana dejando el plato a un costado y salió de la fila con dirección a la salida.
- Santana espera no quise molestar – Dijo Finn que caminaba tras ella.
- Dejame en paz Finn, necesito aire – Respondió Santana y salio del restaurante pero al llegar a la calle sintió un mareo haciendo que pierda el equilibrio.
- Santana – Dijo Finn corriendo para sostenerla y evitar que caiga al suelo - ¿Te encuentras bien?
- Sí, sólo me maree – Respondió Santana tratando de incorporarse sin percatarse que tenían paparazzis alrededor.
Quinn, Brittany y los demás chicos corrieron a ver lo que pasaba.
- Será mejor que la lleve a su casa – Dijo Quinn.
- Quinn no te alarmes yo puedo sola – Respondió Santana soltandose de Finn y al intentar dar unos pasos perdió el conocimiento.
- Rápido llamen una ambulancia – Gritó Brittany

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En Alemania las grabaciones estaban por culminar pronto, se revisaban las cintas una y otra vez para comprobar si habría alguna escena que necesitarían volver hacer o agregar otros aportes.
- Tenemos que volver hacer la escena – Protestó Rachel – Pensé que había quedado perfecta.
- Sí, pero siento que pueden hacerla mejor – Indicó Rob.
- No pienso volver a desnudarme – Dijo Rachel.
- No te preocupes Rachel, esas escenas ya las tenemos listas, sólo necesitaríamos la escena de la canción, nada más.
- Rachel, Rob es el director si dice que debemos hacerlo de nuevo es porque fallamos en alguna parte – Dijo Jesse
- Ok, lo haremos – Dijo Rachel.
- Perfecto entonces todos a sus lugares – Indicó Rob a los miembros de la producción.
- ¿Te molesta hacer esta escena? – Preguntó Jesse.
- Me molesta saber que he fallado en una escena – Respondió secamente Rachel.
- Muy bien chicos recuerden quiero ver en sus rostros culpa, quiero ver que tengan temor porque han hecho algo prohibido. Quizas como si hubieran sido infieles a sus parejas – Indicó Rob riendo lo que provocó incomodidad en los dos muchachos –
- Eso no es necesario Rob – Dijo Rachel.
- Ok linda – Dijo Rob - Recuerden al final deben darse un beso largo, que nos de chance de encajar la voz del predicador.
- No te preocupes por nada Rob – Dijo Jesse mirando fijamente a Rachel poniendola nerviosa.
- Corre cámara, ¡Acción! – Gritó Rob.

Al terminar la canción Jesse se acercó a Rachel, tomandola por la cintura acercó sus labios a los de ella y la besó de manera apasionada, ella respondió el beso de la misma manera.
- Y ¡Corte! – Gritó Rob pero ellos seguían besandose – Corte ¡Chicos Corte!
Jesse y Rachel se separaron con la respiración algo agitada.
- Acaso no me escucharon ¿Qué diablos fue eso? – Preguntó Rob
- Disculpa Rob – Dijo Jesse mirando a Rachel y luego volteó hacia Rob sonriente – Pero dijiste un beso largo y quisimos ver cuan largo podíamos sostenerlo para el audio que quieres agregar. ¿Cierto Rachel?
- Es cierto Rob – Respondió Rachel con una sonrisa fingida y algo temblorosa
- Que graciosos, vayan a cambiarse – Ordenó Rob – La escena se imprime.
Jesse ayudo a Rachel a ponerse de pie y ambos se separaron cada uno por su lado a sus vestuarios, pero Jesse iba con una certeza en la mente, ninguno de los dos había fingido el beso.

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- ¿Y bien doctor, qué tengo? – Preguntó Santana al hombre que había terminado de examinarla.
- Bueno tengo que esperar los resultados de sus analisis señorita – Indicó el hombre
- ¿Qué tanto pueden demorarse para decirme que es lo que tengo? No sabe lo ocupada que estoy para estar perdiendo tiempo aquí echada en esta camilla – Protestó Santana.
- Calmate Santana, el doctor esta haciendo su trabajo – Dijo Quinn.
- Cierto Santi, debe saber con seguridad porque te desmayaste – Agregó Brittany
- Esta bien ¿Cuándo tendra los resultados? – Preguntó Santana.
- En unos momentos me los traen, disculpe usted pero hemos tenido unos problemas con el laboratorio por eso el retraso – Respondió el hombre.
- Ok, entonces mañana vendre a verlo – Respondió Santana – Chicas vamonos.
- Santana mejor esperemos a que le traigan los resultados – Dijo Quinn.
- Si Santi, no quiero que te desmayes de nuevo – Agregó Brittany.
- Ok, me quedo pero digame que tantos examenes me hicieron el día que me trajeron, me sacaron sangre y nunca pregunte para que eran esos analisis
- Bueno pueden haber muchos factores que provocaran el desmayo, quizas alguna enfermedad pero por el historial medico de la señorita se ve que es una muchacha muy sana, por eso decidimos hacerle un analisis completo, pero quizás sea algo de anemia o quizás una buena noticia.
- ¿Qué enfermedad puede ser buena noticia? – Preguntó Santana mientras cruzaba los brazos enojada
- Quizás este embarazada – Respondió el médico haciendo que Santana palideciera.
- ¿Embarazada? – Preguntaron las tres al mismo tiempo.
- No, no esto debe ser una broma muy pesada – Dijo Santana
- No entiendo porque señorita ¿Acaso pronto no se va a casar? – Preguntó el médico.
- Disculpe doctor – Indicó un joven entro al consultorio – Aquí traigo los resultados de la señorita Santana.
- Perfecto, demelos pronto muchacho – Indicó el doctor y luego de haberlos recibido les dio una hojeada en silencio.
- ¿Qué dice? – Preguntó Brittany.
- Bueno…
- Espere – Interrumpió Santana – Lo que sea quiero que me lo diga en privado.
- ¿Qué dices Santana? ¿Por qué? – Preguntó Quinn.
- Es mi cuerpo y yo decido quien se entera lo que me pasa, así que les agradecería que me esperaran en casa.
- Señorita no me parece correcto que haga eso con sus amigas. Ellas estan muy preocupadas por Usted – Intervino el médico.
- Creo que un paciente puede decidir la privacidad de sus resultados y usted como médico esta en el deber de cumplir ello – Respondió Santana muy seria.
- Ok, Santana te dejaremos sola – Dijo Quinn y tomo del brazo a Brittany abandonando el consultorio.
- Ok, ahora si digame cual es el resultado doctor – Ordenó Santana.

**********

- Estan muy locas – Dijo Rachel al escuchar el plan de sus amigas de reparto.
- Vamos Rachel será un regalo de despedida para todos – Indicó Karen.
- Dirás un regalo para Jesse – Dijo Rachel arqueando la ceja.
- Es una pequeña broma nada más – Dijo Karen.
- Vamos Rachel tenemos que hacerlo todas juntas – Dijo una actriz.
- Dí que sí – Intervino otra.
- Ok lo haremos – Dijo Rachel – Pero con una condición.
- ¿Cuál? – Preguntaron todas al mismo tiempo.
- Karen debe ser la vocalista, dada que fue su idea – Contestó Rachel.
- Pero tú eres la que mejor canta y además eres la protagonista de la película – Dijo otra de las actrices.
- Puede ser, pero no me parece justo, yo me uno a ustedes con el coro – Dijo Rachel.
- Ok, por mi no hay problema – Dijo Karen.
- Entonces todas cantaremos la canción Kiss me y al final de la cancion cada una se acercará a Jesse a darle un beso en la mejilla al cantar la frase que se repite de So Kiss me – Indicó una de las actrices.
- Perfecto, como vocalista Karen será la última – Indicó Rachel.
Como todas las noches el elenco al terminar las grabaciones se sentaba en el salón para distraerse en diferentes actividades. De pronto algunos músicos tomaban posición en el área reservada libre del salón donde había decidido hacer la presentación sorpresa y las chicas ingresaron vestidas de blanco.
- Hola a todos los miembros del reparto y la producción – Saludo Rachel al tomar el micrófono – Hoy tenemos una pequeña sorpresa para todos y en especial para un miembro de nuestro elenco. ¿Dónde esta Jesse St. James?
Jesse levantó la mano al oir su nombre y las demás chicas corrieron a arrastrarlo a una silla que estaba puesta delante de Rachel.
- Muy bien chicas, bueno todas las chicas consideramos que has sido un gran compañero de reparto y en vistas que pronto se acabaran las filmaciones y pronto te irás a New York para casarte con mi hermosa amiga Santana – la gente que ya se había aglomerado alrededor de Jesse gritaba – Las chicas y yo hemos preparado un pequeño regalo para ti – Dijo Rachel haciendo una seña a Karen.
- Esperamos que te guste – Dijo Karen tomando el micrófono mientras Rachel caminaba hacia atrás junto a las otras chicas y Jesse la miraba extrañado – Chicos empecemos.
Los músicos empezaron a tocar Kiss me

Una a una fueron acercandose a darle un beso en una de las mejillas de Jesse mientras sus compañeros gritaban con cada beso y él solo sonreía.
Llegó el turno de Rachel, ella acercó su rostro al de Jesse y él cerro los ojos al sentirla tan cerca quería voltear el rostro y besarla en los labios pero se contuvo al ver como Rachel se separaba rápidamente de él y se colocaba junto con las demás chicas.
Había llegado el turno de Karen, Jesse rió al verla acercarse lentamente y seductoramente, ya antes ella había bromeado así con él, pero lo que no esperaba era que ella se lanzara directamente a sus labios.
- Hey ¿Qué haces? – Dijo Jesse deteniendola
- Como te dije tengo curiosidad – Contestó Karen
- Estoy comprometido – Dijo Jesse
- Yo no me quiero casar contigo, sólo es una simple curiosidad, vamos un besito chiquito, por pura actuación – Dijo Karen.
Toda la gente alrededor de ellos animaban a que Jesse lo hiciera, mientras Rachel miraba en silencio incomoda ante la situación.
- Después de esto no tendré oportunidad de hacerlo a menos que trabajemos de nuevo juntos y me toque ser la protagonista – Dijo Karen.
Jesse reía nervioso ante la situación y busco con la mirada a Rachel y se percató de su incomodidad.
- Creo que mejor no – Dijo Jesse.
- Vamos Jesse sólo es actuación – Dijo Rachel de manera sarcastica y desafiante.
- Ok lo haré – Respondió Jesse y besó a Karen.
El elenco completo lanzó gritos alentando la situación, asombrados que lo haya hecho, en especial Rachel que sintió que la sangre le hervia al ver esa escena.
- Complacida señorita – Dijo Jesse al separarse de Karen, lanzando una mirada de satisfacción a Rachel.
- Muchisimo – Dijo Karen – Eso fue genial, ya veo porque Rachel no nos decía nada sobre tus besos. Eres una egoísta – Broméo la muchacha.
- No veo que habría que comentar, al final todo es actuación – Respondió Rachel alejandose de allí disimuladamente con dirección a la cocina donde había una salida hacia el exterior del hotel.
Jesse bromeó un momento con algunos de los chicos del elenco y luego se escabullo fuera del hotel.
- ¿Qué haces aquí? – Preguntó Rachel al verlo.
- Lo mismo te pregunto – Respondió Jesse.
- Nada quería caminar un poco, pero será mejor que regrese al hotel – Respondió Rachel y Jesse la detuvo tomandola del brazo.
- ¿Qué es lo que te pasa? – Preguntó
- Nada, porque tendría que pasarme algo – Respondió Rachel desafiante.
- Me parece que estas molesta por algo
- Por nada, pero creo que quien debería estar molesta por tu actitud podría ser tu novia si se enterara lo que acabas de hacer – Dijo Rachel.
- Fue solo actuación, tú misma lo dijiste – Respondió Jesse.
- Puede ser, pero no fue correcto.
- ¿Por qué no fue correcto?
- Porque estas comprometido, es obvio que por eso. Ahora sueltamente porque quiero entrar al hotel.
- Sólo es eso o hay otro motivo – Dijo Jesse.
- ¿Qué otro motivo puede haber? – Preguntó Rachel tratando de soltar su brazo.
- Quizás este – Dijo Jesse y la acertó a él rodeandola entre sus brazos y besandola con furia.
- Sueltame – Dijo Rachel tratando de separarse de él.
- Dime si fue por ello – Exigió Jesse sin soltarla
- Eres un imbecil, sueltame, te juro que gritare – lo amenazó.
- No creo que lo hagas – Dijo Jesse y volvió a besarla pero esta vez el beso fue más sutil y dulce haciendo que Rachel respondiera el beso y dejara de tratar de alejarse.
- Dios mio – Suspiró Rachel al separarse de él llevandose una mano a los labios – Tengo que irme
- No lo hagas Rachel – Dijo Jesse – Tengo que decirte que es lo que pasa.
- No quiero escucharlo – Dijo Rachel y empezo a alejarse rápidamente de allí.
- TE AMO – Gritó Jesse haciendo que Rachel quedara petrificada sin saber que hacer o donde huir.
- No dijiste eso – Susurró Rachel con los ojos cerrados sin percatarse que Jesse se había acercado.
- Sí lo dije, Te amo – Dijo Jesse poniendose delante de ella.
- Jesse no, esto no pude pasar, tú estas confundiendo las cosas, esto no puede estar pasando – Dijo Rachel temblando de nervios.
- Lo sé – Susurró Jesse tomando su mano – No sé como paso, como siento todo esto.
- Pero tú estas con Santana, se supone que estas enamorado de ella, te vas a casar con ella – Dijo Rachel.
- No sentía esto antes que le pidiera matrimonio. Aquella vez estaba decidido que Santana era mi destino, la mujer con quien crecer y formar una familia, pero no sé en que momento me he vuelto a enamorar de ti Rachel, fue de a pocos, desde hace meses atrás, quizás jamás deje de amarte y mantuve ese sentimiento dormido dentro de mi por tanto tiempo.
- Jesse estas confundido, quizás la cercanía de la filmación – Dijo Rachel.
- También pensé eso, he vuelto a luchar contra ese sentimiento, mantenerlo encapsulado, jamás sacarlo a la luz porque pensaba que no me correspondías, o que jamás lo harías porque estabas casada con Finn, pero en el momento que dijiste que serías libre, liberaste ese sentimiento y no puedo contenerlo, sólo quiero estar contigo.
- Jesse yo… - balbuceaba Rachel con la respiración entrecortada por el llanto.
- ¿Dime si tú sientes lo mismo por mí? – Preguntó Jesse – Puedo sentirlo, tú también me amas.
- Estas equivocado – Dijo Rachel alejandose de él – Jesse yo no te veo de esa manera.
- Mientes, mira a la cara y dime que no sientes lo mismo por mí – Dijo Jesse haciendo que lo vea a los ojos – Te lo dije me amas, tus ojos te delatan, puedo escuchar el latido de su corazón, latiendo muy fuerte, sentir tu piel erizarse si la rozo, estas temblando y tus labios – la beso de nuevo – reconocen mis besos y reaccionan a ellos. Tú me amas, si no como explicarías la escena de celos que me acabas de hacer.
- No era correcto lo que hiciste – susurró Rachel.
- Correcto o incorrecto, hizo que reaccionaras y me dejaras saber que sientes. Te amo Rachel, no puedo ocultarlo más, amo tu sonrisa, tus ojos, tu voz, la forma como caminas, vistes, amo todo ser – Dijo Jesse
- ¿Y Santana? ¿Qué pasara con ella? – Preguntó Rachel.
- Debo hablar con ella, pero no por telefono sino en persona – Respondió Jesse.
- Pero aun estan haciendo los planes de la boda – Protestó Rachel.
- Pararé todo si tú me lo pides – Suplicó Jesse – Solo no me pidas que se lo diga de otra manera que no sea en persona, ella no merece eso.
- Ni tampoco esto Jesse, no puedo con esa culpa, lo siento, no puedo corresponderte, esto va a causarme mucho daño y a todos los involucrados – Dijo Rachel.
- Entonces perdoname por no parar lo que siento, perdoname por no para de amarte – Dijo Jesse y vio como Rachel se alejaba de él.

**********

- Sam estoy preocupada – Comentaba Quinn por telefono con su novio.
- Tranquila Quinn, Santana ya les contará lo que le pasa – Contestó mientras se vestía en los camerinos del equipo de fútbol.
- No entiendo porque reaccionó así – Dijo Quinn – A menos que…
- ¿A menos qué? – Preguntó Sam.
- Quizás si esta embarazada – Dijo Quinn
- Eso sería una buena noticia, quizás esta tomando el tiempo para asimilar la noticia y por eso no te ha llamado desde hace dos días – Dijo Sam
- Lo sé pero…
- ¿Qué piensas linda? – Preguntó Sam
- No me hagas caso son tonterías mías – Dijo Quinn – Mejor esperare hasta hoy, si ella no me llama iré a buscarla – Dijo Quinn.
- Tranquila amor, ya veras que te llamará, no te desesperes – Dijo Sam.
- Por favor no le comentes nada a los chicos – Indicó Quinn.
- No lo haré estate tranquila – Dijo Sam – Ahora si tengo que colgar, adios cariño te veo en casa.
- Adios Sam – Corto la comunicación.
- Hey rubio, ¿hablabas con Quinn? – Preguntó Puck al acercarse.
- Si, ¿por qué? – Preguntó
- Es que me quede con la curiosidad que le paso a Santana, no sabes algo.
- ¿Y de cuando aca preguntas por ella?
- Puede que no nos llevemos muy bien, pero no me gustaría que le pase algo malo, al fin y al cabo todos somos amigos, como una familia – Dijo Puck
- Tienes razón – Dijo Sam – Quinn no sabe nada aún.
- Ah ok, pero se puso muy palida eso me hizo acordar cuando Quinn se desmayaba en el Instituto – Dijo Puck
- ¿Cuándo pasó eso? – Preguntó Sam preocupado.
- Cuando estaba embarazada de Beth – Contestó Puck – Hey Bro, quizás eso tenga Santana.
- Puede ser – Respondió Sam.
Ambos muchachos salieron de los vestidores sin percatarse que alguien había escuchado su conversación.

*******

- ¿Quién es? – Preguntó Santana de mala gana.
- Repartidor de pizzas señorita – Respondieron
- Yo no he ordenado nada – Dijo Santana.
- Aquí dice Santana Lopez, acaso no es usted – Protestó la voz al otro lado de la puerta.
- Si, pero no he pedido nada.
- Ok, me iré pero de todas maneras será cargada a su estado de cuenta – Advirtió
- Mira estafador estupido – Dijo Santana enojada y al abrir la puerta se llevó con una sorpresa – Eras tú ¿Qué haces aquí?
- Viene a verte – Respondió Finn al verla, había estado fingiendo la voz.
- Yo no, así que ya puedes irte por donde viniste –
- No me voy hasta que me contestes algo – Dijo Finn.
- ¿Qué cosa Finn? ¿Lo mismo de siempre que ya decidí por Jesse? – Preguntó Santana molesta.
- No, ¿Quiero saber que te pasa? – Preguntó Finn.
- ¿A qué te refieres? – Preguntó Santana
- Sé que en la clínica te hicieron varios exámenes y que sospechaban que estabas embarazada, ¿Eso es cierto?
- Y si fuera eso cierto que te importa
- Que si estuvieras embarazada podría ser mío – Dijo Finn sonriente.
- No es tuyo, es de Jesse – Respondió Santana.
- Entonces si estas embarazada
- Sí pero ya te dije el bebé es de Jesse – Respondió
- Con que seguridad dices que es de Jesse, si cuando el volvió no hacia mucho que tú y yo también estuvimos juntos – Dijo Finn – Podría ser mío.
- Estas loco, es de Jesse porque… porque… porque quede embarazada de él antes que vaya a Alemania – Dijo Santana – Eso me indicó el doctor.
- Entonces no es mío – Dijo Finn con el rostro entristecido – Me voy entonces.
- Sería lo mejor – Dijo Santana acompañandolo a la puerta.
- Espera… Si quedaste embarazada de Jesse antes que se vaya a Alemania, deberías tener unos 6 meses y no creo que los tengas porque estas muy delgada.
- En mi familia los embarazos no se notan – Respondió nerviosa.
- Pero no uno de 6 meses, así que si estas embarazada tienes menos tiempo – Afirmó Finn contento.
- Este… ok, ganaste te estoy mintiendo, no estoy embarazada de Jesse – Respondió Santana – Pero tampoco es tuyo
- ¿Cómo? – Preguntó Finn sorprendido.
- No estoy embarazada, tengo anemia, tiene síntomas similares – Respondió Santana
- ¿Entonces porque me dijiste que estabas embarazada de Jesse? – Preguntó Finn.
- Porque queria desilusionarte
- Pues lo lograste, yo por un momento creí que podría ser… quizás esta vez sí podría…
- ¿Podrías ser que papá? Vamos Finn creí que habías superado el engaño sobre Beth – Dijo Santana.
- No me refería a ella, sino a un hijo propio
- Lo siento Finn no recorde la historia que me contaste hace tiempo, pero no estoy embarazada, lo siento mucho.
- Yo siento a ver venido a molestarte – Dijo Finn marchandose del departamento.

*********

Las filmaciones estan por concluir y se filmaban las últimas escenas. Rachel estaba sentada en el sillón de su habitación mirando fijamente los papeles del divorcio, los había leído una y otra vez sin decidirse que hacer. En la mesa estaba la fotografía de la graduación donde salía con Finn y otra fotografía del viaje a Venecia donde aparecía con Jesse, ella las vió y se hundió en la comoda tela del sillón pensando hasta que por fin decidió que hacer con los papeles.
Después de un rato bajó al lobbie del hotel y dio indicaciones para enviar un paquete a su esposo Finn en New York.
- Hola Rachel – Saludó Jesse al verla sorprendiendola.
- Jesse pensé que estarías con los demás – Respondió Rachel.
- Mia me dijo que viniera – Respondió Jesse – Rachel yo…
- Sr. Jesse – Dijo Mia saliendo de la oficina donde había llevado el paquete de Rachel – Que bueno que llego rápido, llamó la señorita Santana quiere comunicarse son Usted, dijo algo sobre las medidas de su traje.
- Gracias Mia – Dijo Jesse mirando a Rachel
- Te veo en el set – Dijo Rachel secamente mientras Jesse telefoneaba a New York.
Aquella mañana y tarde filmaron las escenas del suicidio de Moritz y su posterior funeral.
Algunos disfrutaban de sus últimos días en Alemania conversando amenamente con sus compañeros y amigos. Jesse y Rachel estaban con todo el grupo del elenco que representaban a los adolescentes de la película practicando la última canción que interpretarían para la película.
- Creo que estamos listo – Dijo uno de los actores.
- Me da mucha pena separarme de todos ustedes, los he llegado a querer mucho – Dijo Karen.
- Sí todos hemos formado un lindo grupo – Dijo Rachel percatandose de reojo que Jesse no dejaba de verla.
- Bueno porque no nos divertimos un poco y cada uno canta algo lindo para los demás – Dijo una de las actrices.
- Perfecto – dijeron varios al mismo tiempo.
Así uno a uno fueron cantando una canción, cuando llego el turno de Rachel ella cantó su clásico Don't Rain On My Parade y fue aplaudida por todos los presentes.
Había llegado el turno de Jesse.
- ¿Bueno que canción quieren que cante? – Preguntó Jesse a todos los presente y dieron varias sugerencias.
- Canta algo de Bryan Adams – Pidió Karen.
- ¿Cuál de ellas? – Preguntó Jesse
- No sé, es que todas son hermosas – Dijo una de las actrices.
- Porque no cantas la que mejor sabes – Sugirió Karen.
- Bueno chicos, yo me retiro, me siento muy cansada que se divierta – Dijo Rachel.
- Por favor Rachel quedate – Suplicaron algunos.
- Tengo sueño y no quiero arruinar lo bien que lo estan pasando, así que hasta mañana – Dijo Rachel y se retiro del salón.
Ella caminó hacia el lobbie y empezó a subir las escaleras que daban acceso hacia el piso de su habitación cuando escuchó el sonido del piano la canción que Jesse se prestaba a interpretar. Esto detuvo su andar y dirigió sus pasos nuevamente hacia el salón.

Todos aplaudieron a Jesse, mientras Rachel lo miraba desde la puerta de ingreso al salón.
- Eso fue maravilloso – Dijo Bryan a Rachel asustandola.
- Sí. Estuvo muy bien – Respondió nerviosa.
- Pareciera que sentía cada palabra – Agregó Bryan y Jesse volteo hacia donde estaba ella.
- Creo que mejor me voy a descansar – Respondió Rachel saliendo del lugar hasta llegar a su habitación, donde empezó a dar vueltas de un lugar a otro mordiendose el labio inferior de los nervios que sentía.
- Sra Rachel le traje su té – Dijo Mia al ingresar a la habitación.
- Gracias Mia – Respondió Rachel.
- Que lindo cantó el Sr. Jesse ¿Verdad? – Dijo Mia – Imaginese que lindo sería que alguien le dedicara una canción así de linda y con su voz.
- Sería un bonito gesto Mia – Respondió secamente.
- Que afortunada la señorita Santana – Agregó la muchacha.
- Sí que afortunada – Respondió Rachel bebiendo un sorbo de la infusión.
- Aunque la letra no iría con ellos. Porque hablaba de un amor que se vuelve a reencontrar y esta intacto – Agregó Mia y Rachel se atoró – ¿Esta bien señora?
- Perfecto, no te preocupes, anda ve a dormir más bien – Respondió Rachel nerviosa.
Luego que la muchacha la dejara sola, Rachel miro por la ventana de su habitación y vio una sombra entrar al granero. Lanzó un profundo suspiro y cerró las cortinas.

*********

Jesse había salido del hotel caminando por alrededores y sin planearlo llegó al granero y decidió entrar. En su interior los recuerdos lo embargaban, los viejos se mezclaban con los actuales haciendolo sentir triste y feliz a la vez.
Al parecer todo estaba dicho y él había nuevamente perdido a Rachel.
Salió del lugar con la determinación de no volver hablar del tema para no incomodarla y con la decisión que después de la filmación se mantendría lejos de ella y sólo se permitiría estar en el mismo lugar en el plano profesional, nunca más volvería decirle a Rachel sobre sus sentimientos y buscaría ser feliz con Santana.
Pensando de esta manera salió del granero con dirección al hotel, cuando el timbre de una voz familiar rompió el silencio.
- Jesse… - Él giró sobre sus talones y volteó en dirección hacia la voz.
- ¿Qué haces aquí? – Preguntó en la oscuridad.
- Al parecer esa pregunta es muy frecuente en nosotros últimamente – Contestó Rachel.
- ¿Por qué cantaste esa canción? – Preguntó Rachel.
- Porque es lo que siento – Respondió Jesse.
- ¿Es verdad que me amas? – Preguntó Rachel acercandose a él.
- Con todo el corazón y con toda la razón, he perdido la cabeza por ti – Respondió Jesse.
- Yo debo estar loca de venir aquí a verte y quizás sea porque también he perdido la razón – Dijo Rachel.
- ¿Qué dices? – Dijo Jesse sorprendido parandose justo delante de ella.
- Que he perdido la razón, porque yo… yo también te amo Jesse – Confesó Rachel.
Jesse tomo el rostro de Rachel y lentamente acercó sus labios a los de ella, uniendose en un dulce beso, luego ambos rieron juntos mientras se abrazaban y besaban nuevamente.
Un gran rugido sonó en el ambiente y un aguacero les callo encima por lo que corrieron de la mano hasta el hotel. Caminaron sigilosamente hasta llegar a la habitación de Jesse.
Después de asegurar la puerta, Jesse se acercó a una nerviosa Rachel y empezo a besarla delicadamente mientras se acercaban a la cama, lentamente fue despojandose de la camisa que llevaba puesta y desaboto vestido de Rachel haciendolo caer al suelo.
- Jesse espera – Dijo Rachel deteniendolo - Te amo, pero no podemos hacer esto, no cuando estamos los dos comprometidos con otras personas.
- Pero Rachel… Nos amamos.
- El día que sea tuya quiero serlo completa, lo mismo quiero de ti. Ahora no es el momento – Dijo Rachel.
- Esta bien, pero quedate conmigo esta noche – Dijo Jesse.
- Lo haré pero debes prestarme algo con que poder dormir – Dijo Rachel y él saco una camisa de manga larga que se puso encima mientras dejo su vestido en una silla para que pudiera secar. Luego ambos se recostaron en la cama abrazados.
- ¿Que vamos hacer Jesse? – Dijo Rachel echada en la cama mirando la lluvia a traves de la ventana.
- Hablare con Santana al llegar a New York – Dijo Jesse luego la volvió a besar – No hablemos de eso quiero disfrutar este momento contigo.
Aquella noche ambos durmieron abrazados arrullados por el sonido de la lluvia. La cual presagiaba los grandes conflictos que les esperaban después de esto.

Aún estaba oscuro cuando Rachel abrió los ojos. Por un momento, se sobresaltó al no reconocer la habitación donde había pasado la noche, pero al sentir el brazo que rodeaba su cintura recordó que estaba con Jesse.
Levantó la vista hacia el viejo reloj que adornaba una de las paredes, aún faltaba un par de horas para que se iniciara el movimiento en rutinario de los trabajadores del hotel. Lentamente fue deslizandose fuera de la cama con el más mínimo cuidado para evitar despertar a Jesse. Entró al baño y se mojó un poco el rostro, mientras se secaba miro en el espejo como lucía con la camisa de Jesse, esta le quedaba larga en los brazos y le cubría hasta la mitad de los muslos, pero era suave y de un color que a ella le gustaba, esa imagen se le hizo algo familiar, entonces sonrió al recordar que era la segunda vez que vestía de similar manera en la vida; luego llevó la tela hacia su nariz y la olió profundamente buscando el olor de Jesse en ella, sonreió nuevamente al sentir que aún tenía impregnada el aroma de su colonia favorita. Volvió mirarse al espejo y se acomodo un poco el desorden de su cabello. Al salir camino hasta la silla donde había dejado colgado su vestido para ponerselo, pero este estaba aún muy mojado, así que tendría que regresar a su habitación vistiendo la camisa de Jesse. Luego de lanzar un suspiro, tomó el vestido y caminó hasta el borde de la cama y con sumo cuidado recogió sus zapatos, procurando no hacer el menor ruido posible; giró en sus talones y sigilosamente se dirigió hacia la puerta.
- Te vas sin despedirte – Dijo Jesse justo cuando estaba por girar la perilla de la puerta.
- No quise despertarte – Respondió volteando a verlo – Además si me voy más tarde puede ser que alguien me vea salir…
- Son las 5 de la mañana Rachel, Mía empezara a corretear de un lado al otro a partir de las 7 y subira tu té a las 7:30 y antes de eso nadie sube por aquí, así que tenemos tiempo de sobra – Contestó Jesse.
- ¿Tenemos? Y ¿Cómo sabes a que hora Mia me sube el té? – Preguntó intrigada.
- Te lo dije, hace días buscaba el momento preciso para conversar contigo. Pero no me la hiciste fácil – Contestó Jesse sonriente – Ven acercate y quedate un rato más.
- Un rato nada más – Contestó mientras dejaba el vestido y los zapatos donde los había dejado la noche anterior y se sentó en la cama.
- ¿No piensas recostarte? – Dijo Jesse divertido de verla tan nerviosa.
- Esta bien – Respondió acostandose a su lado y sonrojandose al sentir que la camisa no era lo suficientemente larga para cubrirla.
- Estas muy tensa – Dijo Jesse cubriendole las piernas con la manta.
- Lo siento es que no sé…
- Tranquila Rachel – Dijo Jesse rodeandola con sus brazos y dandole un suave beso – Sólo estamos tú y yo.
- Lo sé, por eso…
- Además te recuerdo que no es la primera vez que te veo así
- Lo sé en la filmación me viste con casi nada – Respondió Rachel sintiendo que el rostro le hervía rojo de vergüenza.
- No me refería a ello, sino… al finalizar aquella travesía después de encontrarnos en el boulevard sólo que esta vez estas sobria, tienes memoria y gracias al cielo no tienes un spray de pimienta con que amenazarme – Comentó Jesse.
- Como querías que reaccionara si despierto en un lugar como ese, con casi nada de ropa, contigo al lado y sin recordar nada de la noche anterior.
- Fue tan divertido ver tu rostro asustado ¿A qué tenías miedo? ¿Quizás que haga esto? – Pregunto Jesse y empezó a besar su cuello.
- Jesse… por favor – Susurró Rachel.
- Tranquila, como te lo dije aquella vez y te lo dije ayer, voy a respetar tu decisión y es lo que haré.
- Gracias – Respondió Rachel dandole un breve beso en los labios.
- Sigues tensa – Recalcó Jesse – Me haces recordar a las veces que me escabullía a tu habitación cuando no estaban tus padres – la arqueó una ceja mirandola seductoramente - En especial aquella vez que salieron y teníamos planes ¿Recuerdas?
- Bueno eramos unos chiquillos – Respondió nerviosa - No medíamos las consecuencias de nuestros actos, si mis padres te hubieran descubierto en mi habitación yo terminaba de monja y tu 3 metros bajo tierra.
- Que bueno que no lo hicieron – Contesto divertido, luego acarició su rostro – Me gusta verte dormir, luces tan serena.
- ¿Qué vamos hacer Jesse? – Preguntó Rachel
- No hables aún de ello – Rehuyó Jesse.
- Jesse podemos pasarnos horas y días evitando el tema, pero tendremos que hablarlo. Esto… ha pasado muy rápido y no quiero salir lastimada.
- No es cierto, no ha pasado rápido, yo diría que fue al revés, lento, muy lento. Esto, este sentimiento ha ido calando día a día dentro de nosotros hasta que ya fue inevitable. Te confieso que cuando estuvimos en Venecia empece a notarlo, pero no quise pensar en ello, evitaba hacerme la pregunta ¿Qué sentía por ti?
- ¿En Venecia? – Preguntó intrigada.
- Sí, creo que desde ese momento empece a dudar si lo que sentía por ti era más que amistad, si aún sentía algo especial.
- Creo que yo también empece a sentir algo desde ese viaje – Respondió acomodando un mechón de su cabello.
- Y al final la vendedora tenía razón – Dijo Jesse tomando la mano de Rachel y besando el anillo que llevaba en el dedo desde aquel viaje – Es símbolo del amor verdadero.
- Y recuerdo la maldición que también menciono – Protesto Rachel
- Y si mal no recuerdo dijo que eso sucedería si la persona que te hubiera puesto el anillo no fuera tu verdadero amor y… yo creo que por eso no te lo has podido quitar, porque yo soy tu verdadero amor.
- O que el anillo en realidad era de una medida más pequeña de la que uso – Respondió Rachel.
- Puede ser, pero no prefieres mi explicación – Susurró Jesse en el oído de Rachel mientras la acercaba más a su cuerpo haciéndola temblar al sentir su aliento.
- En realidad sí – Respondió entrelazando sus dedos en los de Jesse - ¿Pero que vamos hacer ahora?
- Te propongo algo, disfrutemos los días que nos quedan en Alemania, sólo pensemos en nosotros en este momento y cuando lleguemo a New York yo hablaré con Santana y tú con Finn - Dandole un beso en la sien - Buscaremos la forma de seguir juntos. Ahora que sé que me amas no pienso dejarte. Te amo Rachel.
- Y yo a ti Jesse, acepto no pensemos en eso ahora – Respondió Rachel acercandose a él.
Un fuerte sonido los sobresaltó, Jesse rápidamente se puso de pie y camino hacia la ventana para ver de donde había provenido.
- ¿Qué fue eso? – Preguntó Rachel asustada.
- Se acaba de soltar un caballo y ha tumbado unas cosas – Respondió Jesse – Esto va a despertar a todos.
- Creo que mejor regresó a mi habitación – Dijo Rachel poniendose de pie y tomando sus cosas.
- Quedate un poco más – Dijo Jesse tomandola del brazo - ¿Acaso ya te quieres ir?
- No, pero ahora si alguien puede pasar y si me ven salir de tu habitación pueden pensar que…
- ¿Qué pasamos la noche juntos? – Preguntó Jesse – Tengo que recordartelo, lo hicimos, dormimos juntos.
- Bueno sí – Respondió Rachel totalmente sonrojada acercandose a la puerta– Pero es que podrían asumir que lo hicimos, es decir tú y yo…
- ¿Qué hicimos el amor? – Preguntó acercandose a ella y apoyando ambas manos en la puerta, acorralandola contra ella, mientras iba recorriendola con la mirada desde los pies a la cabeza – Como te dije ayer ganas no me faltan, pero respetare la forma como quieres que sean las cosas.
- Jesse… por eso será mejor que me vaya – Respondió nerviosa.
- Esta bien, te veo después – Respondió Jesse liberandola de su encierro. Asomó su cabeza fuera de la habitación para verificar que no había nadie alrededor – Ya puedes salir
- Hasta más tarde – Dijo Rachel y de manera traviesa le dio un beso en la mejilla y camino lo más rápido hasta llegar a su habitación.

*********

- ¿Las flores? – Preguntó Quinn
- Ya estan ordenadas llegaran dos días antes de la ceremonia – Indicó la organizadora.
- Pero se marchitaran para la boda – Protestó Quinn.
- Respira Fabray, Kurt ordeno que alistaran unas congeladoras donde las mantendremos en una temperatura que las conservara – Respondió Blaine ingresando al departamento con una caja en las manos.
- No me parece gracioso cuando me llamas por mi apellido – Protestó Quinn sin levantar la vista de su libreta.
- Pero eres tan graciosa cuando andas estresada – Respondió Blaine sonriendo - ¿Y la novia?
- Esta en su habitación revisando la distribución de los invitados en las mesas y… – Respondió Quinn mirando a su amigo cuando se percató de lo que llevaba en las manos – No me digas que eso es…
- Sí, Kurt me pidió que lo trajera personalmente no quería que alguien lo viera antes del gran día – Respondió sonriente.
- Señorita Quinn acaban de llamarme para pedir la confirmación sobre el menú para la recepción – Interrumpió la organizadora.
- Pero ya lo había hecho – Contestó molesta – Blaine ve donde Santi, yo iré dentro de un momento.
- Ok – Respondió Blaine.
El joven camino hacia la habitación de Santana, levanto la mano para tocar, pero se percato que la puerta estaba entreabierta, al asomarse vió a Santana parada frente a su ventana con la mirada perdida.
- ¿Qué tiene preocupada a nuestra novia del momento? – Dijo al ingresar.
- Eh… Blaine eres tú – Respondió Santana saliendo del trance.
- ¿Por qué esa cara? – Preguntó acercándose a ella.
- Nada, sólo pensaba nada más – Respondió sentándose en la cama donde había dejado las listas y los croquis de distribución de invitados en la recepción
- No me parece – Recalcó Blaine - ¿Qué pasa por esa morena cabeza?
- Nada ¿Por qué lo preguntas? – Preguntó Santana arqueando una ceja
– Sé que no somos muy cercanos pero creo que puedo distinguir que te pasa algo y… lo digo porque estoy aquí hace unos minutos y no me has preguntado que traigo en la caja.
- ¿Qué? Oh… es cierto – Dijo sorprendida – Acaso es mi vestido.
- Lo es linda – Dijo Blaine abriendo la caja para sacar delicamente el hermoso vestido de novia, luego indicó a Santana que se acercara al espejo y desplegó el vestido delante de ella – Te vas a ver hermosa.
- Gracias Blaine – Respondió gran sonrisa pero rápidamente esta se ensombreció.
- ¿Qué pasa Santana?
- ¿Blaine estoy haciendo lo correcto?
- ¿A qué te refieres?
- Digo a todo esto, a casarme…
- ¿Acaso estás dudando?
- Es que… somos muy jóvenes, recién están despegando nuestras carreras y…
- Santana pero creía que Jesse y tú estaban muy enamorados ¿Acaso ha pasado algo?
- No es eso. Yo quiero a Jesse, sólo que…
- Sólo que ¿Qué?
- Creo que… creo que son los nervios prenupciales; no me hagas caso – Respondió nerviosa.
- Santana ¿Amas a Jesse? – Preguntó intrigado
- Por supuesto que sí, no me hagas caso – Respondió más nerviosa aún porque Blaine la miraba fijamente – Sabes qué, gracias por traer el vestido, pero tengo que salir un momento.
Santana salió presurosa del departamento sin detenerse hasta llegar al estacionamiento donde buscó su auto y salió del edificio para manejar alrededor de la ciudad para despejar su mente. Detuvo en un parque desolado junto al río. Camino unos breves instantes hasta que recordó que ya conocía ese lugar y volvió a su auto, tenía que ver a alguien.

- Quisiera aprovechar este momento para agradecer a todos. Estoy muy contento por el trabajo realizado durante todo este tiempo, han sido un elenco maravilloso. Trabajar con ustedes ha sido un privilegio – Dijo Rob al grupo de actores que estaba a su alrededor tomados todos de la mano.
- El privilegio fue nuestro – Respondió Jesse.
- Además que hemos formado buenos lazos de amistad – Agregó Rachel sonriendo al sentir que Jesse presionaba su mano.
- Bueno chicos vamos a terminar en grande esta filmación – Indicó Rob.
- Esta es mi canción favorita – dijo Karen.
- A sus lugares – Indicó Rob y todos corriendo a sus posiciones – Preparados, corre cámara, ¡ACCIÓN!

- ¡CORTE! Y… se imprime – Gritó Rob – Felicitaciones señores ¡TERMINAMOS!
Los actores se abrazaban y felicitaban emocionados. Jesse abrazó a Rachel y la levantó del suelo, girando en su lugar.
- ¡Jesse! no estamos solos – Susurró Rachel.
- Fue la emoción del momento, ahora lo arreglo – Dijo Jesse guiñando uno ojo, con una gran sonrisa mientras la ponía en el suelo luego la bajo, luego corrió donde Mery, la actriz que conocían de Wicked y la abrazó e hizo lo mismo.
- Vaya que Jesse esta muy contento – dijo Bryan al acercarse a Rachel.
- Creo que sí – Respondió Rachel divertida de la escena, Mery protestaba que Jesse la soltara.
- Por cierto felicitaciones has hecho un maravilloso trabajo.
- Gracias Bryan – Respondió Rachel abrazandolo – Esta experiencia te la debo a ti.
- ¿Y que hay de mi? – Protestó Rob acercandose.
- Gracias a ti también, ha sido maravilloso trabajar bajo tu dirección – Respondió Rachel abrazandolo.
- Definitivamente esta película será un éxito – Agregó Bryan palmeando la espalda de Rob – Mira ahí viene el chico de los abrazos.
- Buen trabajo Jesse – Dijo Rob abrazandolo cuando se acercó a ellos.
- Gracias Rob. Esto no hubiera sido por ti – Bryan arqueó una ceja – Y por ti también amigo – Jesse y abrazó a Bryan.
- Gracias muchacho, justo Rachel acababa de decirnos lo mismo – Respondió Bryan.
- Bueno chicos ahora ¿Qué planes tienen para después? – Preguntó Rob.
- ¿Te refieres para más tarde hoy o para cuando dejemos Alemania? – Preguntó Rachel
- Para hoy linda, es que Bryan y yo quisieramos invitarlos a cenar – Respondió Rob.
- Pues sería excelente, pero… los chicos tienen programado hacer una reunión después de la cena – Agregó Jesse.
- No se preocupen los regresaremos para participar en la fiesta – Contestó Rob.
- Entonces trato hecho – Respondió Jesse.
Rob había elegido un hermoso y cálido restaurante ubicado a una esquina del centro del pueblo. El suave sonido del violín amenizaba el lugar.
- Rob esto es bellísimo – Dijo Rachel mientras mirada a su alrededor admirada.
- Que bueno que te guste, Bryan fue quien lo descubrió cuando paseaba con una de sus conquistas – Comentó Rob.
- ¿Bryan con conquistas? Eso tendría que verlo – Dijo Jesse.
- Acaso un hombre maduro no pude salir con alguna muchacha que conoció en un bar – Se defendió Bryan.
- Claro que eso puede pasar, pero tú lo haces muy seguido y cada vez son más jóvenes las damiselas – Dijo Rob divertido.
- Todas mayores de 21 años – Contestó Rob ante la mirada sorprendida de Rachel y Jesse.
- No te conociamos esas mañas – Dijo Jesse
- Felizmente Rachel eres casada porque sino quizás hubiera ido tras tuyo – Agregó Rob divertido
- Sí, felizmente – Respondió Rachel algo nerviosa al ver que ese comentario habia incomodado a Jesse
– Aunque las prefiere rubias como Quinn, tu manager, con quien por cierto un par de veces te encontre hablando de una manera sospechosa – Dijo Rob.
- Ahí te equivocas, por la señorita Fabray siento una gran admiración, es una mujer entregada a sus ideales y una grandiosa profesional y amiga. Antepone las necesidades de otros a las suyas. Quizás más de lo que debería – Contestó Bryan.
- Vaya nunca antes habia escuchado que hablaras así de una muchacha, debe ser muy especial.
- Lo sé, pero no digo esto por la razón que piensas pervertido – Respondió Bryan sonriendo – Sino porque lo merece, ojala que haga caso al consejo que di.
- ¿Qué consejo Bryan? – Preguntó Jesse intrigado.
- Uno muy simple, pero no puedo decirselos. Cambiando de tema, supongo que estas emocionado que ya regresaras a América.
- Sí, extraño mi país – Respondió Jesse.
- ¿Y a Santana? – Preguntó Bryan mirandolo fijamente mientras bebía un sorbo de su copa de vino.
- Por supuesto – Respondió nervioso Jesse.
- ¿Cómo van los planes? No faltana casi nada – Dijo Rob.
- Bueno, estando aquí la verdad no estoy muy enterado como estan llendo las cosas, Quinn esta ayudando a Santana y como dijiste Bryan ella es muy eficiente deben estar haciendo un gran trabajo – Respondió Jesse evitando ver a Rachel.
- Pero aún no han enviado las invitaciones. ¿Acaso lo haran juntos? – Preguntó Rachel fingiendo una sonrisa.
- La verdad…
- ¿Acaso no te llego la tuya? – Preguntó Rob y Rachel la miró sorprendido – La mía llego a mi departamento en Los Ángeles.
- ¿Qué? – Dijeron los dos al mismo tiempo.
- Y la mía a mi departamento en New York – Dijo Bryan.
- ¿Quizás no fui invitada? – Respondió Rachel sarcásticamente.
- ¿Cómo crees que no te invitaría? – Respondió Jesse – Santana debió enviarlas y se le olvido decirmelo.
- ¿Quizás Santana no me quiere en su boda? – Dijo cada vez más incómoda.
- No lo tomes así linda, quizás la tuya esta en tu departamento en New York y como no llamas muy seguido, no te has enterado que esta allí – Intervino Rob.
- Conociendo lo organizada de Quinn, ella debió enviarlas dado que faltan un poco más de dos semanas – Dijo Bryan – Tranquila Rachel eres amiga de toda la vida de Santana.
- Compañeras de clase – Aclaró Rachel.
- Como sea, pero eres una gran amiga de Jesse ¿Crees que te dejarían fuera de ese día tan especial? – Agregó Bryan.
- No, lo siento Jesse. No debí pensar mal de ti – Respondió Rachel disimulando los sentimientos encontrados que habia provocado el tema de conversación.
- No tienes porque disculparte Rachel – Respondió Jesse avergonzado.
- Bueno para calmar los ánimos vamos a celebrar por la felicidad de Jesse y Santana – Dijo Rob alzando su copa - ¡Salud!
- ¡Salud! – Contestaron todos al mismo tiempo, pero sin la misma intensidad y regocijo. Rachel y Jesse evitaron de verse directamente a los ojos durante el resto de la cena.
Al retornar al hotel todos se quedaron en la fiesta hasta altas horas y luego cada uno se retiro a descansar a sus habitaciones.
Los últimos días Rachel y Jesse lo habían pasado encontrandose a escondidas por los diferentes rincones del hotel, siempre cuidandose que cualquiera se percatara de lo que sucedia entre ellos. Cuando estaban con los demás disimulaban lo más que podían, aunque a veces se les escapaban algunas miradas cariñosas y cuando finalmente estaban juntos, sin nadie alrededor, no había lugar a palabras, esos breves momentos los llenaban de apasionados besos; pero Jesse siempre mantuvo su promesa de no ir más allá de lo que ella le permitiese. Durante la noche, Jesse buscaba a Rachel a su habitación después que Mia le llevara su acostumbrado té y no salía de allí hasta que los primeros rayos de sol le recordaban que debía marcharse. Apartarse de ella le resultaba doloroso, con cada día que pasaban sentía que la necesitaba para mantenerse vivo, que su respiración que lograba traerlo y a la vez mostrarle que estaba vivo, si vivo, y la unica que podía lograrlo era ella, sentía a Rachel como su razon de ser.
Pero esa noche, después de aquella accidentada cena, solo se limitaron a acostarse uno al lado del otro sin decir palabra alguna.

************

- Hola ¿Qué haces aquí? – Preguntó Finn al abrir la puerta.
- ¿Puedo pasar? – Respondió Santana.
- Claro, claro pasa – dijo abriendo completamente la puerta - ¿Qué puedo hacer por ti?
- Bueno en primer lugar quiero dejarte en claro que no se me dan bien estas cosas – Dijo Santana mientras ingresaba a la sala del departamento – Así que callate y escuchame. Finn este… ¿Por qué diablos hay tantas cajas? – Preguntó extrañada al ver a su alrededor.
- ¿Eso es venido a preguntarme? – Dijo extrañado.
- No es eso, solo que me causo curiosidad ver tu departamento lleno de cajas. ¿Acaso te has unido a un grupo pro reciclaje?
- No, simplemente Rachel regresa dentro de unos días, así que decidí tener las cosas listas para cuando llegue.
- ¿Acaso se van a mudar? – Preguntó intrigada.
- Corrección, me voy a mudar – Dijo Finn – Ya te lo dije Santana, Rachel y yo vamos a divorciarnos. Ella se va a quedar con el departamento.
- Enana astuta, ¿te va a quitar el departamento?
- No, yo se lo estoy cediendo, pero dime ¿A qué has venido? Como ya te has dado cuenta ando algo ocupado.
- Es cierto, Finn, como te decia no es fácil para mi decir esto, es decir, reconocer que he cometido un error. Así que lo diré de golpe. Lo siento mucho.
- ¿Por?
- Por todo lo que ha pasado, por lo que te he hecho sufrir y en especial por jugarme con el tema del bebé. Había olvidado que ese tema te afecta mucho todavía y lo dije sin pensar porque no queria…
- ¿Qué siga insistiendo? – Interrumpido Finn – No te preocupes no lo haré. Ya me quedo claro que no vas a cambiar de idea.
- Ehh… - balbuceó Santana
- Santana quiero que quede en claro algo – Dijo tomandola por los hombros – Estoy enamorado de ti y te quiero para mi – Luego lanzó un profundo suspiro - Pero más que eso, quiero que seas feliz. Si has decido que Jesse será tu felicidad, entonces yo ya no me interpondré en tus planes; sólo quiero agradecerte la oportunidad que me diste de conocerte y de estar, aunque sea por poco tiempo, cerca de ti, de saber que es amar a alguien con locura y tan intensamente que tenerte a mi lado para siempre no es importante como lo es verte feliz.
- Finn yo…
- No digas nada más Santana. Agradezco y acepto tus disculpas por lo que paso el el otro día y realmente no eran necesarias. No voy a mentirte me emocionó mucho saber que quizás…, pero no importa voy a estar bien y voy a continuar con mi vida – dijo soltandola.
- Pero… ¿Entonces por qué te vas a divorciar de Rachel?
- Porque ya nos hicimos mucho daño y no quiero que terminemonos odiandonos. Creo que ambos merecemos buscar nuestra felicidad en otro lado.
- Finn, yo estoy… yo lo siento mucho.
- Ya no tienes porque, mas bien si me disculpas tengo varias cosas que acomodar.
- Esta bien, entonces me retiro – Contestó Santana dirigiendose a la puerta.
- Santana espera…
- Dime Finn…
- Las invitaciones… te quedaron muy lindas…
- Gracias – Respondió y abandono el departamento entristecida.

*********

- Estuviste muy callada ayer – Dijo Jesse mientras se ponía los zapatos.
- Y había algo que decir – Respondió Rachel.
- ¿Te incomodó mucho la conversación de la cena?
- ¿Tú que crees? – Respondió con un tono sarcástico.
- Rachel, yo no sabía lo de las invitaciones.
- Anoche tuve un baño de realidad Jesse ¿Qué diablos estamos haciendo?
- Estamos juntos, nos amamos.
- Pero los planes de tu boda siguen en marcha, ¿Cómo crees que me siento cuando alguien te pregunta por ellos o te felicita y te da sus mejores deseos?
- Rachel yo voy a terminar con esto, pero como te dije tiene que ser en persona, no puedo hacerlo por telefono. Tampoco puedo decirle a Santana que pare la boda porque no sé como reaccionara. No me parece correcto.
- Pues no es correcto lo que estamos haciendo. Jesse somos amantes y eso es lo último que he querido ser en la vida, ser la otra.
- No eres eso Rachel, eres la única para mi, sólo que…
- Sólo ¿qué? Sientes cosas por Santana aún – Jesse bajo la mirada – Creo que será mejor que te vayas.
- Rachel por favor entiendeme…
- Entiendeme tú a mi. Yo he sufrido que es ser engañada y no puedo creer que sea yo la que ahora provoque que engañes a tu prometida.
- Ya no lo haré más, ya no te haré pasar por esto. Cuando lleguemos a New York lo primero que haré es hablar con Santana y romper nuestro compromiso. Te amo y no quiero perderte ahora que te he recuperado.
- ¿Jesse estas seguro?
- Lo estoy, tú solo preocupate porque Finn firme los papeles del divorcio y ya no habrá nada que nos separe. Es más Bryan me dijo que nos ha reservado pasajes en el mismo vuelo. Llegaremos juntos a New York – El rostro sorprendido de Rachel cambio dando paso a la preocupación - ¿Qué pasa?
- Tengo miedo y ¿si no puedes hacerlo?
- Lo haré, cuando Santana y yo empezamos nuestra relación prometimos ser sinceros si esto pasaba, si yo descubría que sentía cosas por ti o si ella…
- Si ella ¿Qué?
- Nada, olvidalo. Te lo prometo – Dijo Jesse abrazando a Rachel.

*********

- ¿Santana vas a recoger a Jesse al aeropuerto? – Preguntó Brittany
- No, voy a esperarlo aquí – Respondió
- Entonces le diré a Aidan para salir a pasear y darles algo de privacidad, quizás quieran ponerse al día de los tantos meses lejos – Sonrió picadamente la rubia
- Con la boda a la vuelta de la esquina dudo que tengamos tiempo para eso – Respondió Santana.
- Santana – Dijo Quinn ingresando al departamento.
- Hello general Fabray ¿Cómo esta el fuerte hoy? – Bromeó Santana.
- ¿Es cierto que Jesse llega hoy? – Preguntó.
- Si en el vuelo de las 5 – Respondió Brittany.
- Entonces esta llegando con Rachel – Dijo Quinn.
- Sí, dijo que la producción arreglo el viaje para que todos regresen juntos – Respondió la morena.
- Tenemos muchas cosas que hacer, hay tanto que no hemos con él – Respondió Quinn.
- Quinn relajate, todo va a salir perfecto. Con Jesse nada tienen que ver si le queda el traje, lo demás esta hecho – Dijo Brittany, luego se le acercó para susurrarle – Lo único que nos queda es detallar lo la despedida de solteros sorpresa.
- Claro, gracias Brittany por encargarte de eso, pero prometeme que estas siguiendo mis instrucciones al pie de la letra – Recalcó Quinn.
- Por supuesto, ¿Por quién me tomas? – Preguntó Brittany divertida.
- Ok, aún nos falta ¿Quién te llevará al altar? ¿Santana aún sigues con la idea de entrar sola? – Preguntó Quinn.
- La verdad que no, he cambiado de idea.
- ¿Hablaste con tus padres? – Pregunto Brittany extrañada.
- No tengo a otra persona en mente – Respondió Santana.

**********

- No puedo creer que llegamos. New York, como he extrañado mi ciudad – Dijo Rachel al asomarse por la ventanilla del avión.
- Te recuerdo que eres oriunda de Ohio – Recalcó Jesse.
- No importa, habré nacido allí, pero New York es parte de mi – Respondió mientras sacaba su valija de mano del compartimento arriba de su asiento.
Jesse y Rachel descendieron del avión junto con un grupo de los miembros del elenco. Y mientras esperaban pasar los controles de seguridad, fueron despidiéndose de los que hicieron escala hacia otras ciudades. Luego de que sus amigos se marcharon ambos caminaron hasta la rampa donde recogieron sus maletas y caminaron con dirección a la salida.
- ¿Nerviosa? – Preguntó Jesse.
- Algo, ¿tú no lo estas? – Preguntó Rachel
- No, porque ahora te tengo conmigo – Respondió Jesse sonriendo.
- Chicos que bueno que los alcance – Dijo Bryan que había corrido detrás de ellos – Tengo que decirles que Rob y yo vamos a viajar a Los Ángeles, el estudio ha pedido verlo de inmediato. Quieren hablar sobre los avances que les enviara.
- ¿Algún problema? – Preguntó Jesse.
- No, quizás quieren darle algunas sugerencias para la edición – Contestó Bryan – Bueno los veo dentro de unos días.
- Cuidate Bryan, te vemos luego – Respondió Rachel.
- ¿Me pregunto que les habrá parecido el avance? – Preguntó Jesse.
- Yo pienso que les debe haber gustado. Hicimos un excelente trabajo – Respondió Rachel – Ya nos veo nominados a los Globos de Oro como mejor actor y actriz para un musical.
- ¿Y por que solo piensan en el Globo de Oro? Si vamos a imaginar que mejor sea un Oscar ¿No crees? – Respondió Jesse divertido mientras abría la puerta de salida.
Una lluvia de flashes los cegaron, varios periodistas estaban esperandolos en la puerta.
- Jesse ¿Qué te ha parecido trabajar con Rob? – Preguntó un paparazzi.
- Una gran experiencia muy enriquecedora – Contestó mientras se hacía paso entre la gente.
- Rachel ¿Se rumoreo que había una rivalidad entre tú y la actriz Karen Burns? ¿Qué hay de cierto en ello?
- Puras mentiras, el grupo ha sido como una gran familia, somos todos muy buenos amigos – Respondió Rachel caminando detrás de Jesse.
- Jesse algún comentario de la película.
- Chicos gracias por estar aquí pero no podemos comentar ni adelantar nada sobre la película, eso ya se les informara en su momento – Respondió Jesse mientras los miembros de seguridad se ponía al lado de ambos actores para ayudarlos a subir a la camioneta que los esperaba.
- Jesse ¿Te sientes emocionado por tu boda?
- Es obvia la respuesta – Respondió Jesse.
- Vamos chicos dejenmos avanzar nos esperan casa – Dijo Rachel.
- Jesse ¿Qué sientes sobre lo de ser papá? – Dijo un paparazzi en el medio de todos
- ¿Qué? – Dijeron los dos al mismo tiempo.
- ¿Acaso no sabes los rumores que Santana esta embarazada? – Preguntó el paparazzi oculto entre los demás.
- ¿Qué estas diciendo? – Preguntó, al acercarse descubrió de quien se trataba - ¡Jacob!
- Hola Jesse, ¿Acaso Santana no te conto que fue a una clínica para realizarse unos análisis? Tengo fotografías de ella entrando a la clínica y además una copia de la lista de exámenes que se le realizaron – Respondió Jacob - ¿Acaso te lo oculto? ¿Sospechas por qué?
- Mira gusano ¿Qué estas tratando de insinuar? – Dijo Jesse molesto acercándose más al impertinente.
- Jesse – Dijo Rachel tomándolo del brazo – Sera mejor que nos vayamos, Jacob esta distorsionando las cosas, ya sabemos lo mal intencionado que és.
Ambos caminaron con dirección a la camioneta y subieron lo más pronto posible. En el interior ninguno de los dos pronunció palabra alguna, ni se cruzaron las miradas durante todo el trayecto. El auto se estacionó frente al edificio donde vivía Rachel y el chofer descendió para bajar las maletas.
- Rachel yo…
- ¿No sabías de esto verdad? – Y Jesse negó moviendo la cabeza.
- No sé porque Santana me lo ha ocultado.
- Jesse escucha esto cambia nuestros planes, creo que debemos dejarlo aquí. Un hijo es algo en lo que no me interpondría ni me interpondré. Será mejor olvidarnos de todo – Respondió Rachel.
- Pero Rachel… aún no estamos seguros, tú misma lo dijiste que Jacob habla de más.
- Pero también estoy segura que dudas si ese rumor es cierto. No hagamos más lío. Simplemente acabemos esto.
- Rachel no, te he prometido algo y lo haré – Respondió Jesse.
- No lo sé Jesse, ya no tengo el mismo buen presentimiento – Respondió y bajo del auto rápidamente.
El chofer subió y se puso en marcha con dirección al departamento de Jesse.
Mientras se alejaba la camioneta, Rachel sentía como su corazón empezaba a partirse lentamente.

**********

- Ok, entonces pondremos a estas personas en esta mesa, así los chicos de New Direction podemos seguir juntos en la misma mesa – Dijo Brittany mientras revisaba el croquis que Santana tenía sobre la mesa.
- Exacto, cerca de la mesa de los novios – Respondió Santana.
- ¿No crees que ese es el lugar de sus familias? – Preguntó Brittany.
- Pero si ustedes son mi familia – Respondió Santana abrazando a su amiga – No quiero a nadie más en esa mesa que ustedes.
La puerta sonó terriblemente fuerte al cerrarse, las muchachas se asomaron para ver quien había entrado, los últimos días hubo muchas personas entrando y saliendo de aquel departamento.
- Santana – Dijo Jesse al dejar las maletas en el suelo.
- ¡Jesse llegaste! – Gritó Brittany mientras corría a su lado para darle un abrazo, pero se detuvo al ver su seriedad.
- Brittany ¿No crees que la novia debe ser la primera en saludar… - Se detuvo al ver la expresión de su rostro - ¿Qué pasa?
- ¿Por qué no me dijiste de los análisis que te sacaron?
- Porque no fueron de importancia – Respondió.
- ¿Por qué no me dijiste que estas embarazada? – Preguntó Jesse más serio aún.
- ¿Estas embarazada Santi? ¡Qué alegría! – Dijo Brittany abrazando a su amiga.
- Será porque no lo estoy – Respondió Santana y Jesse la miró con duda.
- ¿No? ¿Por qué no? – Preguntó Brittany
- Britt linda, me dejas hablar con Jesse – La rubia asintió y salio del departamento.
- No estoy embarazada, tengo anemia – Respondió cruzandose de brazos - Pero si así fuera así, vaya forma de tomar la noticia, al parecer te hubiera disgustado.
- No es eso – Cambiando totalmente de expresión – Es que me disguto que el imbecil de Jacob me lo dijera, que él que supiera cosas de ti que yo debería saber, me hizo querar como un estupido frente a todos.
- Pues eres un estupido por ponerte así. No te lo conté para no preocuparte – Respondió Santana.
- Lo siento, disculpa mi actitud – Respondió Jesse.
- ¿Y piensas quedarte allí parado sin saludarme? Mínimo merezco un abrazo – Reclamó.
- Lo siento – Dijo Jesse abrazandola.
- Te echado de menos – Dijo Santana acurrucandose en el pecho de Jesse.
- Yo también – Respondió Jesse.
- ¿Y mi beso? – Preguntó buscando sus labios, pero él se alejo rápidamente de ella - ¿Qué paso?
- Santana quiero hablarte de algo – Dijo Jesse volviéndose a poner serio.
- Jesse ¡Que alegría verte! – Dijo Quinn al entrar al departamento.
- Quinn ¿Cómo estas? ¿Qué haces aquí? – Preguntó Jesse mientras abrazaba a la rubia - ¿Cómo entraste?
- Tengo llave – Respondió.
- ¿Cómo que tienes llave?
- Con tan poco tiempo para organizar las cosas y con gente entrando y saliendo ya me sentía mayordomo abriendo y cerrando las puertas, así que les di llaves– Dijo Santana.
- ¿“Les di llaves”? ¿Quiénes más tienen llave del departamento? – Preguntó Jesse
- Dejame ver – Dijo Quinn poniéndose al lado de Santana y ambas hacían un gesto pensativo, mientras llevaban apoyaban su rostro en su puño – Kurt, Blaine, Mercedes, Tina, Brittany y no olvidemos a Aidan.
- ¿Aidan también? ¿Qué hace aquí?
- Esta de vacaciones con Brittany y como ella me esta ayudando con los detalles de la boda los invinté a quedarse en el cuarto de invitados – Respondió Santana.
- Vaya, me pregunto si tendré privacidad en mi propia casa – Dijo Jesse.
- Quinn, Jesse iba a decirme algo, ¿si nos disculpas? – Dijo Santana.
- No, podemos hablarlo después, conociendo a Quinn debe haber llegado para coordinar algo importante
- Sí, pero puedo venir dentro de un rato, pero… – Respondió Quinn con cara de preocupación.
- Pero debes resolverlo ahora ¿Verdad? – Preguntó Jesse.
- Sí, lo siento chicos – Respondió Quinn.
- Esta bien, ¿Qué vamos hacer? – Preguntó Jesse.
- Es que tengo que hacer algo muy importante y quiero que me acompañes a hacer una petición muy especial – Respondió Santana.

*********

Al entrar a su departamento Rachel camino hacia sus ventanas y abrió las cortinas de par en par, bañando la sala de luz, hizo lo mismo con las cortinas de su habitación. Finn no estaba en casa y no tenía la menor idea de donde se encontraba ni a la hora que iba a llegar, así que camino hasta su baño donde abrió la llave de la tina y dejo correr el agua, mientras esta se llenaba, camino hasta el moderno equipo de sonido que había en la sala y después de ojear la selección de CD, tomó uno y lo pusó. Luego de desvestirse se sumergió casi completamente en el agua tibia dejando afuera solo su rostro. No queria escuchar ni pensar en nada, pero no lograba tener éxito, por más que luchaba no podía sacar de su mente a Jesse y mezclar esos pensamientos con recuerdos de él junto a Santana o de posibles reacciones de la morena si se enterase de lo que sentían.
Emergió del agua y abrazo sus piernas luchando por no ponerse a llorar. Una hermosa canción sonaba de fondo, al reconocerla, volvió a reproducir subiendo el volumen con el control remoto, lentamente recostó su cabeza en un extremo de la tina y cerrando los ojos se puso a cantar.

- Llegaste a casa – Dijo Finn desde el umbral de la puerta.
- Finn – Dijo sorprendida mientras trataba de cubrir su desnudez con la espuma del baño.
- No se que escondes que no haya visto – Dijo Finn haciendola sonrojar - ¿Tuviste un buen vuelo?
- Sí, gracias por preguntar – Respondió Rachel – Voy a cambiarme para que podamos hablar.
- Ok, estaré en el comedor – Respondió Finn
Rachel se vistió a toda prisa con las primeras prendas que encontro en sus cajones y salió al encuentro con Finn.
- ¿Cómo has estado? – Preguntó Finn al verla.
- Bien, no puedo quejarme la película ha quedado maravillosa- Respondió - ¿Cómo has estado?
- Tranquilo, entrenando, jugando y pasado algo de tiempo en el departamento de Puck, creo que Carrie me odia un poco por ello – Contestó mientras acomodaba algunas cosas en una caja sobre la mesa.
- Esa chica es muy absorvente – Respondió Rachel acercandose a él - ¿Qué estas guardando?
- Mis cosas – Respondió Finn – Estuve empacando mis pertenencias para dejarte el departamento libre lo más pronto posible. Richard me consiguió un departamento cerca pero recien me terminaré de instalar después de firmar los papeles.
- ¿Entonces Richard ya tiene lista la documentación? – Preguntó mientras se cruzaba los brazos.
- Sí, ya tenemos cita, dentro de dos semanas debemos ir a firmar los papeles definitivos a su oficina y ese mismo días nuestros representantes lo harán público, según Richard es lo mejor para aminorar el escándalo – Respondió sin dejar de meter otros objetos a la caja – Sabes lo irónico, el día que se acaba nuestro matrimonio, inicia otro.
- ¿Qué dices? – Preguntó Rachel intrigada.
- Nos dieron cita el mismo día del matrimonio de Jesse y Santana. Debemos estar allí a las 9 de la mañana, como para que después de firmar podamos arreglarnos, asistir y celebrarlo en la fiesta – Dijo sarcásticamente.
- Bastante irónico – Respondió Rachel nerviosa - ¿Y sabes cómo va eso?
- ¿La boda? – Y ella asintió – Quinn esta haciendo un trabajo maravilloso, te va a gustar, será fuera de la ciudad en la casa de un amigo de Kurt, al aire libre. La comida deliciosa, Quinn nos hizo cerciorarnos de ello.
- ¿Entonces piensas ir, después de…?
- Claro, será el “evento del momento”- Dijo haciendo una señal de comillas con las dedos - ¿Acaso no piensas ir tú? ¿No piensas apoyar a tu gran amigo?
- No me han invitado – Respondió Rachel.
- ¿Qué dices? La invitación esta en la mesa de la entrada. Esta dirigida a los Señores Hudson. ¿Acaso esperabas una directamente a Rachel Berry?
- Que tonta soy – Dijo avergonzada al acercarse y ver la invitación.
- ¿No me digas que te enfadaste con el niño bonito porque pensabas que no te había invitado? ¿Seguro pensaste que Santana no te quería en la boda?
- Algo así – Respondió - ¿Y esta tarjeta rosa?
- Es la invitación para la despedida de solteros que ha organizado Brittany será este fin de semana, tendremos que ir disfrazados, el tema es Mouling Rouge para las mujeres y The Village People para los hombres.
- Vaya se nota que esto lleva la marca de Brittany – Respondió acercándose donde estaba Finn – Hey eso es mío.
- Este cuadro, te recuerdo que Mercedes me lo regalo en nuestro aniversario – Respondió Finn.
- No, me lo regaló a mí – Protesto Rachel quitándoselo de las manos - ¿Qué otras cosas te estas llevando que son mías?
- Sólo he empacado lo que es mío – Respondió Finn caminando tras ella mientras abría las cajas que estaban en una esquina y que no había visto antes.
- Esto es mío – Dijo al sacar un cojín – Me lo regaló Kurt para que pueda dormir bien.
- Pero yo lo use más tiempo, además Kurt es mi hermano.
- Esto también es mío – Sacando unos CD de música – Esta guitarra también es mía.
- No es cierto, esa guitarra nos la dio Artie y tú ni siquiera la tocas, así que me la llevó yo.
- Pero me la entregó en la navidad – Rachel siguió sacando más cosas de las cajas y regándolas por todas partes - Esto es mío también es un regalo de Quinn – Dijo sacando un tazón de porcelana.
- No es cierto Quinn nos lo regalo a los dos, además el único que come helado en ese tazón soy yo – Protestó Finn – Es más mío que tuyo.
- Es mío, además Quinn es mi mejor amiga – Dijo jalando el tazón.
- Y ella fue mi ex novia, nos conocemos de más tiempo y somos más cercanos – Protestó Finn tomando el tazón también.
- Es mío – Dijeron los dos al mismo tiempo, jalando el tazón cada uno por un lado. Ninguno se disponía a soltarlo y pusieron mayor fuerza pero el tazón resbaló de sus manos y salió volado por un costado para finalmente estrellarse contra el suelo haciendose añicos ante la mirada asombrada de ambos.
- Bien ahora es de nadie – Dijo Finn volteando a ver a Rachel y no pudieron contener las risas.
- Por dios parecemos niños – Dijo Rachel sentandose en una silla sin dejar de reirse.
- ¿En realidad te gustaba ese tazón? – Preguntó Finn.
- No – Respondió entre risas - ¿Y a ti?
- No, porque el helado se derretía muy rápido allí – Respondió Finn riendo – Hey espera esto me ha dado una idea. Finn corrió al reproductor para poner un CD. Al sonar la melodía empezó a tronar los dedos al ritmo de la música
- ¿Qué haces? – Preguntó Rachel mientras el empezaba a cantar e invitandola a hacerlo.

Ambos bailaron y saltaron mientras cantaban al terminar se sentaron en el suelo de la sala.
- Eres un tonto, pero a pesar de ello, eso fue tan gracioso ¿Dónde encontraste esa canción? – Preguntó Rachel.
- Te dije que he pasado tiempo en la casa de Puck, ese es un CD de la colección de Carrie – Respondió Finn.
- Ah… - Suspiró Rachel – Hace tanto que no nos divertíamos tanto juntos.
- Es cierto – Dijo Finn – Hace tanto no sonreías así conmigo. ¿En qué momento nos perdimos?
- Finn… - Respondió algo incómoda.
- No te pregunto para incomodarte, simplemente como una pregunta de amigos.
- Ok, quizás fue después de lo del…
- Yo creo que quizás fue antes, New York te deslumbró mucho y sentí que te me ibas de las manos, que iniciar tu carrera fue más importante que yo y empecé a sentirme fuera de lugar – Respondió Finn.
- Pero no fue así Finn... yo siempre quise que encajaras en mi mundo – Respondió Rachel.
- Pero no encajo, muchas veces me sentí como tonto en las reuniones con tus amigos los actores y guionistas. Yo quizás no soy muy complejo, más bien soy práctico y me sentía menos con ellos.
- Pero no eras menos, estabas en al universidad, eras el capitán del equipo de fútbol de allí, eras muy importante.
- Sólo sudor y musculos
- No lo veas así, eres alguien muy listo y tenaz cuando te propones algo, quizás yo también cometí el error de arrastrarte sin percatarme si te sentías cómodo o ayudarte a encajar en el grupo.
- Quizás el destino no era lo que nos tenía reservado, quizás alguien muy distinto a mi hubiera encajado, quizás alguien como… – Dijo Finn y ambos se quedaron en silencio.
- Ya no pensemos en eso, ya pasó y no hay como retrocer para arreglar esos errores – Rompió el silencio Rachel.
- Hay una cosa que quiero dejar en claro, yo te amé; durante este tiempo yo te he amado, lo hice desde que nos besamos por primera vez en el auditorio cuando me practicabamos las diferentes notas. Sé que a veces no estaba seguro de mis sentimientos, pero al final me enamoré perdidamente de ti.
- Yo también te amé mucho Finn – Respondió Rachel – Sólo que…
- Quizás no estabamos destinados a estar juntos. Lo sé…
- Quizás sea eso – Respondió Rachel - La verdad deseo que te vuelvas a enamorar de alguien y que ambos se amen como se lo merecen. Pero nunca olvides de demostrar lo que sientes, no la hagas dudar. Si sientes que no puedes vivir sin esa persona, no le hagas sentir tus dudas. Eso a mi me hizo mucho daño cuando eramos adolescente.
- Lo siento mucho por hacerte pasar por esas cosas Rachel, lo siento por haberte hecho daño. Yo también deseo que encuentres a un hombre que te valore y ame con esa pasión que despertaste en mí y mucho más. En especial que te respete y entienda como yo no supe hacerlo.
- Quiero que me disculpes si te hice en un momento de lado, ahora entiendo que el dolor que sentía no sólo fue mío. Fue de ambos y si yo hubiera actuado de otra manera…
- Los hubiera ya no importan ya – Interrumpió Finn - Este es nuestro presente y estas son las decisiones ya las hemos tomado. Creo que al divorciarnos ahora en este punto de nuestra relación, no destruiremos el recuerdo de lo que fue nuestro amor. Pero quiero que sepas que siempre vas a tener un lugar especial en mi corazón.
- Tú también en el mío Finn – Dijo Rachel abrazando a su aún esposo.

*********

- ¿Y bien? ¿A qué debo su visita? – Pregunto Mrs Schuester.
- La verdad yo tampoco lo sé, acabo de bajar del avión hace un momento – Dijo Jesse.
- Bien lo que pasa es que yo he querido hablar con Usted de algo importante – Dijo Santana.
- Ok, Santana te escucho – Respondió Will intrigado.
- Como sabrá en el colegio siempre fui rebelde, mal geniada, contestona y burlona de los demás, hasta a veces de usted me burle y gracias a dios que ya no usa esos horribles chalecos y tiene mejor estilo al vestir…
- Santana no sé que es lo que tratas de decir, pero creo que te estas llendo por las tangentes – Intervino Jesse.
- Disculpe Mrs Schue, como decía yo actuaba así por diversas razones y confusiones. Pero una principal, aunque mis padres me engreían, siempre estuvieron ausentes para mi. Cuando quise dedicarme a la actuación, es cierto me siguieron ayudando porque pensaban que era un nuevo capricho, pero nunca se interesaron si era buena o no. La verdad a mis padres nunca les ha importado lo que piense, haga o diga.
- Santana no seas tan dura con tus padres, los padres no tienen un manual de cómo ser padres – Dijo Will.
- Profesor Schuester, la única imagen paternal que recuerdo con admiración y estima es la suya. Usted ha sido como un padre para nosotros y yo lo quiero mucho a pesar de mi actitud.
- Yo también te estimo mucho Santana, adoro a todos mis chicos de New Direction.
- Por lo que… en vista que mi padre no le interesa saber de mi, ni de mi boda. Quisiera pedirle que sea usted quien me entregue en el altar – Dijo Santana.
- ¿Qué? – Dijo sorprendido Will.
- ¿Quién mejor que usted para entregarme en el altar? ¿Quiere acompañarme ese día?
- Santana – susurró Will conteniendo las lágrimas – Será un honor.
- Muchisimas gracias – Dijo Santana abrazando a su profesor mientras ambos dejaban caer unas lágrimas y Holly se secaba las suyas mirandolos emocionada desde el otro extremo de la habitación.

*********

Los días pasaban uno tras otro. Jesse quedo totalmente desarmado el día que fueron a hablar con Will, se sentía muy cruel hablar con Santana ese día así que lo pospuso. Aquella noche cenaron con Will y Holly hasta altas horas de la noche y al regresar a su departamento se desplomó en la cama, cansado por el viaje y el peso de la culpa por lo que iba hacer.
Los días posteriores buscó un poco de privacidad para hablar con Santana pero siempre había alguien alrededor de ellos viendo últimos detalles para la ceremonia, llevandolos a cerrar contratos, probandole el traje, siendo invitados a desayunos, almuerzos y cenas de sus diversos amigos y colegas del medio con motivo del evento. Además algunos programas de espectáculo y revistas buscando la exclusiva del evento.
Ni en las noches tenía la oportunidad de hablar a solas con Santana, algo siempre surgía.
- Jesse ¿Estás bien? – Preguntó Santana al verlo apoyado en la barada del balcón de su habitación con una copa de whisky en la mano.
- Eh… Si estoy bien Santana – Respondió tomando un sorbo del trago.
- Es que… últimamente has estado muy callado y no tomabas licor antes de dormir – Señaló Santana – No me gusta
- Ah… el whisky, una mala costumbre de los días de filmación, no te preocupes no lo volveré hacer – Respondió tomando de golpe el último trago de licor.
- Jesse andas un poco raro, se puede saber ¿Qué pasa? – Volvió a preguntar y Jesse camino hacia ella y la sentó en la cama.
- Santana hay algo que quiero hablar contigo… -
El sonido de un quejido los interrumpió, ambos se quedaron callados para escuchar con atención de donde provenía, grande fue su sorpresa al percatarse que era de la habitación contigua, era Brittany que estaba en una sesión amorosa con su novio Aidan. Ambos se miraron y empezaron a reír. Santana sugirió salir un rato al balcón para sentarse a escuchar música como solían hacerlo en las noches de verano.
Pero esta situación se repetía todas las noches. Santana andaba tan ocupada que se le pasaba por alto hablar con su amiga sobre su pequeño descuido.
- Creo que ya pronto acabaran - Dijo Santana cruzada de brazos mientras cambiaba canales con el control remoto y Jesse trataba de leer un libro sentado a su costado en la cama, de pronto el quejido paro - Te lo dije.
- Es raro tener que escucharlos – Dijo Jesse cerrando el libro - No crees que sería conveniente que estuvieran en un hotel.
- La verdad lo he pensando, pero con tantos detalles que tengo que ver necesito que Britt me ayude con todo. Pero ya pararon ahora podemos descansar
- Creo que es buena idea. Bryan me ha llamado para reunirme con él en su oficina a primera hora – Respondió Jesse mientras apagaba las luces de la lámpara.
- Quizás podemos hacer algo más sugirió seductoramente dandole un beso - Demonios - renegó Santana al escuchar que los sonidos iniciaban nuevamente.
- Creo que esta es la tercera vez en la noche - Comentó Jesse
- Ahora entiendes como Brittany y Aidan pueden comer cualquier cosa sin engordar ni un gramo – Dijo Santana - Sera mejor que tratemos de dormir.

********

Rachel no había tenido noticias de Jesse desde que llegaron a New York y esto la tenía furiosa; tampoco se animaba a llamarlo por el temor de que Santana le respondiera el teléfono o escuchar del propio Jesse decidirse por su prometida. Así que trataba de matar el tiempo de la mejor manera posible y a pesar de que Quinn andaba ocupada con la boda de Santana, se las había ingeniado para organizarle algunas entrevistas con algunos productores y directores de Broadway, además que tenía algunos guiones por leer y de esta manera seleccionar cual sería su próximo trabajo.
También aprovecho la oportunidad de salir con sus amigos que se encontraban en New York, como Mercedes y Tina.
En cuanto a su relación con Finn, esta había mejorado muchísimo, sentía como si hubiera retrocedido en el tiempo y recuperado al amigo de la secundaria que alguna vez conoció. Esto hizo más llevadera la convivencia entre ambos, además acompañó a Finn a ver el departamento que Richard le había conseguido y ultimar los detalles de su próxima mudanza.
- Estas pensativa – Dijo Finn mientras endulzaba su café.
- Remordimientos de compradora – Respondió señalando con la mirada la pila de paquetes que tenía al lado.
- Te conozco y no te creo que sea por eso ¿Algo te incómoda?
- No… la verdad sí, no sé nada de…
- ¿De Jesse?
- ¿Vamos a empezar? – Contestó arqueando una ceja en señal de disgusto y él negó con la cabeza – No, no es por Jesse. Estoy preocupada por Rob y Bryan. Ha pasado una semana y no sé nada de ellos y porque los llamaron de casa fílmica - ¿Y si no les gustó la película? ¿Y sí les parece muy simple? ¿O quizás que se hicieron muchos cambios? ¿Qué las canciones les falta fuerza y emotividad? ¿Qué son muy revolucionarias? ¿Quizás no les gustó la escena del desnudo? ¿Quizás les pareció muy vulgar? ¿Quizás…
- Quizás debas calmarte – Respondió Finn– Rob es un renombrado director no creo que lo llamaran para decirle que ha hecho un mal trabajo, quizás sean cosas positivas. Además no creo que alguiense queje de tu desnudo. Yo no me he quejado durante todos estos años.
- Finn – Dijo avergonzada.
- ¿Vamos Rachel? ¿Vas a avergonzarte ahora por lo que dije?
- Me tomaste por sorpresa – Respondió.
- Y… ¿vas a ir hoy en la noche? – Preguntó Finn
- ¿A dónde?
- A la despedida soltera de Jesse y Santana, la invitación decía que era hoy.
- Lo había olvidado, no lo sé ¿Tú irás?
- No me lo pienso perder, ya tengo mi disfraz – Sonriendo al decirlo.
- Quizás iría para verlos disfrazados a todos – Respondió Rachel – La verdad creo que mejor no, estoy muy preocupada por la película, seré una pésima compañía.
- Tranquila Rachel, todo saldrá bien – Dijo Finn tomándole la mano y el celular de Rachel empezó a timbrar.
- Hablando del diablo – dijo Rachel al ver el nombre que aparecia en la pantalla de su celular– Hey Rob ¿Cómo has estado? ¿Qué fue de la película?
- Hola Rachel, tengo buenas y estresantes noticias – comentó el director.
- ¿A qué te refieres? – Preguntó preocupada.
- Al estudio le gustó, es más les encantó – Dijo Rob provocando que Rachel pegara un grito de emoción.
- Eso es maravilloso Rob- Respondió Rachel emocionada.
- ¿Qué pasó? – Preguntó Finn
- Espera… - Indicó Rachel.
- Pero aquí viene lo estresante – Señaló Rob - Quieren empezar la campaña publicitaria ya. Acaban de programar una entrevista con Larry King para el día de hoy.
- Oh por Dios, Larry King va a entrevistarme hoy – Dijo Rachel emocionada.
- Rachel, nos vemos en el set del programa media hora antes, quiero darles un par de indicaciones antes de la entrevista – Indicó Rob.
- ¿Darnos? ¿A quiénes más van a entrevistar? – Preguntó Rachel
- Quieren entrevistarnos a los tres – Señaló Rob.
- ¿Quiénes tres? – Preguntó Rachel.
- A Jesse, a ti y a mi. Linda la película saldrá a competir con las mejores de todas las casas fílmicas, saldrá en la temporada alta del cine. Pretende conseguir entrar en la lista de nominados en las diversas premiaciones del año. Confían que lo lograremos.

********

Rachel se alistó para la entrevista, estaba muy nerviosa por lo que dijo Rob de la confianza que tenía el estudio en la película y en ella; además le habían enviado un hermoso vestido negro de falda corta y tirantes para lucir en la entrevista.
Finn le ofreció llevarla al canal, ya que estaba de camino a la fiesta de despedida de solteros. Rachel no pudo disimular su risa cuando lo vió disfrazado, había elegido el personaje del Indio Americano, luciendo un enorme penacho de plumas y líneas de varios colores pintados en el rostro.
- Suerte – Deseó Finn al momento que Rachel iba a bajar del auto.
- Gracias Finn – Contestó.
- ¿Vengo por ti para llevarte a la fiesta?
- No, pediré un taxi que me lleve a casa.
- Deberías ir, Brittany ha organizado algo interesante y lo que voy a decir es extraoficial, pero los chicos hemos preparado un número de The Village People, estará entretenido.
- ¿Quién tuvo la idea? – Preguntó divertida
- Kurt nos obligó ¿qué dices? ¿Vas a ir?
- No lo sé, quizás si todo sale bien me anime, yo te aviso.
- Ok, todo va ha salir bien Rachel, eres una excelente actriz. Larry te va adorar. Ahora apurate que te esperan – Dijo Finn y ella le dio un beso en la mejilla.
- Gracias por eso – Dijo Rachel y bajó del auto.
Al ingresar al canal, fue recibida por un miembro de la producción que la esperaba para llevarla al camerino y prepararla para la entrevista. Como fue la primera en llegar tuvo unos minutos para estar sola y poder calmarse. Estaba muy nerviosa, Larry King podía ser un entrevistador intimidante, no sabía con que actitud y de que manera dirigiría la entrevista, no sabía que indicaciones quería darle Rob y sobretodo no sabía como debía actuar al volver a ver a Jesse. De pronto escucho unos pasos acercarse y ella tomó asiento en una de las sillas frente al gran espejo iluminado, esperando que sea Rob o el maquillador.
- Hola – saludó Jesse al ingresar.
- Hola Jesse – Respondió secamente y tomó una revista del tocador que empezó a hojear.
- Estas… estas muy hermosa – dijo Jesse al recorrerla con la mirada, el vestido le quedaba entallado y lucía un nuevo peinado.
- Gracias – contestó secamente
- ¿Rob no ha llegado?
- No – dijo sin levantar la vista de la revista – Pensé que estarías muy ocupado y no vendrías.
- Rachel yo…
- Hoy es la despedida de solteros, eso quiere decir que no has hablado con Santana – dijo mirándolo fijamente – Creo que no lo harás.
- Yo he querido hablar con ella pero no he podido, siempre…
- No tiene caso – Interrumpio Rachel volviendo su atención a la revista – Sigue con tus planes Jesse yo ya tengo los míos.
- ¿Qué quieres decir?
- Lo que oíste.
- Siento la demora chicos – Dijo Rob al ingresar al camerino – Rachel te ves hermosa.
- Gracias Rob – Dijo sonriendo
- Me gusta tu nuevo corte, te ves muy sexy – bromeó el director.
- Es una peluca, aún no termino de convencerme de cortarme el cabello así de chiquito.
- Algún deberías hacerlo, te hace lucir muy bien – Señaló Rob luego se dirigió a Jesse – Disculpa por incomodar tus planes.
- No te preocupes, me ayudaste a escaparme de Brittany, Aidan, Puck y Carrie que querían obligarme a usar un disfraz.
- Bueno, les comentó que el estudio esta encantado con el primer avance que les enviamos y me han hecho preparar el primer tráiler para empezar una fuerte campaña publicitaria; han conseguido que el éste sea presentado durante la emisión de una premiación.
- Eso es grandioso, ¿Pero cual premiación? – Preguntó Rachel
- Los MTV Movie Awards – Respondió Rob – Este año lo harán en París.
- ¿En París? Pero eso es la próxima semana – Recalcó Jesse.
- Es cierto tu boda… - dijo Rob preocupado.
- Tranquilo yo voy a presentar el tráiler – Dijo Rachel.
- Pero no vas a poder ir a la boda de Jesse – dijo Rob.
- Lo importante es que uno de los protagonistas este presente - Agregó Rachel - El estudio nos tiene confianza y debemos hacer lo posible por no defraudarlos.
- Entonces está decidido, haré las coordinaciones – Indicó Rob.
- Rachel ¿Qué haces? – Susurró Jesse
- Como te dije tengo planes.
La entrevista marchó maravillosamente, hablaron sobre la filmación y contaron algunas anécdotas vividas en el set. No cabía duda de los buenos actores que eran Jesse y Rachel, nadie notaba la tensión que había entre ellos.
- Excelente chicos, disfruté mucho entrevistarlos – Dijo Larry.
- Gracias, también lo disfrutamos mucho – Respondió Jesse.
- ¿Y ahora irás corriendo a tu despedida? – Preguntó Larry
- Eso parece – Contestó Jesse
- Que se diviertan mucho – Se despidió Larry.
- Rob ¿Vas a ir a la fiesta? – Preguntó Rachel
- Sí, voy con Jesse – Indicó Rob – ¿Quieres que te llevemos?
- Eso sería perfecto, he quedado encontrarme con mi esposo allá – Respondió Rachel provocando que Jesse la mirara extrañado.

**********

La prensa estaba atiborrada en la puerta de la discoteca donde se realizaría la despedida, habían invitado a varios amigos en común de los novios y de acuerdo a las indicaciones de Brittany todos iban disfrazados.
Dentro muchos bailaban y conversaban mientras esperaban que llegara Jesse de su entrevista para comenzar en sí las celebraciones. En un área privada estaban los chicos de New Direction alistándose para los números que habían preparado. Las chicas cantarían Lady Marmalade y usaban trajes similares a los del vídeo realizado por Christina Aguilera, Pink, Mya y Lil Kim, los chicos por su parte vestían como los personajes de The Village People y bromeaban con sus disfraces.

Santana estaba nerviosa caminando de un lado al otro evitando cruzarse con Finn, pero lo que más la extrañaba es que él actuaba con naturalidad y casi ni la había visto.
- Brittany quiere empezar con el show de karaoke mientras esperamos, pero quiere que iniciemos nosotros, cada uno debe elegir una canción - Dijo Artie a los chicos.
- Está bien – Preguntó Sam – Pero cantaré alguna movida, nada romántico.
- Pero debe haber una balada, aunque sea una balada rock – Contestó Artie
- No me mires a mi – Dijo Puck – Carrie sabe de mi pasado con Santana si lo hago me matara.
- Yo tampoco puedo hacerlo, no creo que a Quinny le agrade la idea – Dijo Sam.
- Finn ¿Puedes hacerlo tú? – Preguntó Artie.
- No he preparado nada – dijo Finn.
- Sólo es karaoke, eliges la canción y la ponen. No es gran lío – Indicó Artie y este accedió.
Los chicos cantaron algunas canciones animando al público que estaba presente, mientras en una mesa frente al escenario estaba Santana rodeada de sus amigos disfrutando del show. Finn revisaba la selección de canciones, buscando que cantar cuando de pronto vio una canción que no podía dejar pasar por alto y cerca un teclado electrónico.
- Gracias Mercedes – despidió Brittany la actuación de su amiga – Bueno, después de bailar con mucho ritmo, les presentó a Finn Hudson, capitán del equipo de fútbol y nuestro gran amigo de toda la vida, cantara una canción algo más lenta porque si baila se acababa el show – bromeó la rubia.
Finn rió con la broma de Brittany y agradeció su presentación. Se instaló en el medio del escenario e indicó que trajeran el teclado cerca a él. Agradeció los aplausos y se dispusó a tocar.
Al escuchar la letra de la canción Santana sintió que la sangre se le había congelado; frente a ella, Finn estaba jugando su última carta.

Santana sonreía nerviosamente tratando de disimular lo que sentía, más cuando Finn dirigió su mirada hacia ella, al terminar de cantar. Los chicos también se miraban extrañados y el resto de invitados, ajenos al drama, aplaudía la impecable presentación.
- Creo que iré por un trago – Dijo Santana alejándose de la mesa seguida de Brittany.
- Eso fue muy extraño ¿A alguien le ha parecido extraño? – Preguntó Mercedes.
- Pensé que fui el único en pensarlo – Agregó Kurt.
- No lo sé, pero fue algo incómodo, como si… - Dijo Tina y luego sacudió la cabeza – No estoy a punto de decir una tontería.
- Como si Finn estuviera enamorado de Santana, eso es muy gracioso – Dijo Artie y todos rieron con ello. Salvo Quinn que se había quedado pensativa y Blaine que a pesar de su sonrisa empezaba a hilar cabos.
Por otro lado Santana tomaba de golpe una copa de champagne junto a la barra.
- Tranquilizate Santana – Dijo Brittany
- Pero si yo estoy muy tranquila –Respondió Santana – Otro por favor.
- No me engañas, esa canción te ha alterado.
- Para nada yo estoy normal – Respondió y vio como Finn se reunía con sus amigos y tomó un gran trago de licor.
- Santi, Jesse no te puede ver así.
- Sí, tienes razón Jesse, pero ¿Dónde está? Ya debería haber llegado.
- Allí esta – Señaló Brittany al verlo entrar junto a Rob y Rachel.
Ambas muchachas se acercaron al joven.
- ¿Dónde están sus disfraces? – Preguntó Brittany
- No podíamos ir con ellos a la entrevista – Contestó Jesse, mientras Santana lo abrazaba.
- Hola chicas – Saludo Rachel – Santana muchas felicitaciones.
- Gracias Rachel, pero pasen y diviértanse – Contestó Santana.
- ¿Nos perdimos de algo? – Preguntó Rob.
- Nada importante, recién vamos a iniciar – Contestó Santana y cruzó su mirada con Finn, cuando este se puso de pie para hacerle señas a Rachel.

*********

El ver a Finn y Rachel compartir con sus amigos con tanta naturalidad y llevarse tan bien sin ningún conflicto entre ellos, incomodó muchísimo a Jesse; aunque lo que más le había incomodado era el termino que había usado nuevamente al referirse a él: “mi esposo”. ¿Acaso había cambiado de opinión sobre el divorcio?
Los días anteriores a la entrevista estuvo dando vueltas por los alrededores del departamento de Rachel buscando la oportunidad de hablar con ella, pero siempre estaba con alguien o la veía salir con Finn a diversas tiendas comprando adornos o almorzando juntos y esta situación continuó después de ella.
Los días pasaban y todo seguía de acuerdo a lo planeado, llegando así al día de la cena de ensayo sin que casi que se diera cuenta. Estaba atrapado entre la espada y la pared y en este punto la idea de romper con ella se le hacía imposible. Él no había hablado a tiempo y por lo que veían Rachel se había reconciliado con Finn, hasta los chicos lo comentaban, por lo visto en la despedida. Si eso había sucedido, entonces él tenía que continuar con su vida.
El evento se realizó en un elegante salón, maravillosamente adornado. Todos estaban presentes sin excepción.
- Rachel… - dijo al verla sola parada en la mesa del buffet.
- Felicitaciones Jesse es una maravillosa cena – Respondió mientras se servía algunos bocadillos del buffet.
- Felicitaciones a ti, veo que te has reconciliado con Finn.
- Hemos limado asperezas – Contestó distraída.
- Que bueno me alegro por ti – respondió secamente.
- Yo también me alegro por ti, como te dije algo me decía que las cosas terminarían así.
- Rachel yo quise… - Dijo Jesse pero fueron interrumpidos por una hermosa mujer de cabellos castaños y ondeados.
- Aquí estabas – Dijo la hermosa mujer.
- ¿Monica? – Preguntó sorprendido y la abrazó efusivamente - ¿Qué haces aquí?
- Crees que me perdería la boda de mi hermanito – Dijo la muchacha – Por lo menos un representante de la familia St. James debía venir. Ya que nuestros padres están en el Tibet buscando el nirvana y David esta escalando Los Alpes Europeos.
- Monica estoy muy feliz de verte – Dijo Jesse.
- ¿Y no me vas a presentar a tu amiga?
- Monica, ella es Rachel Berry, actuamos juntos en Broadway y hace poco en una película – Dijo Jesse.
- ¿Espera ella esa Rachel? – Preguntó Monica intrigada
- Mucho gusto – saludo Rachel.
- Sí eres, vi una foto tuya en el cuarto que tenía Jesse la casa de mi tío, según él Jesse no paraba de hablar de ti cuando ello vivían juntos. No sabía que aun estuvieran en contacto, mucho menos que trabajaran juntos. ¿No habían sido novios?
- Creo… que voy a buscar a Quinn – Respondió Rachel incómoda.
- ¡Mónica! ¿Cómo dices esas cosas? – Reclamó Jesse a su hermana.
- Lo siento si cometí una imprudencia ¿Me disculpas? – dijo haciendo un puchero y Jesse asintió – Excelente, ahora preséntame a mi futura cuñada.
- Monica, muchas gracias por estar aquí, no pensé que…
- ¿Qué fuera a venir? ¿Por las cosas del pasado? Olvidalo, somos hermanos después de todo. Por cierto me encontré con Shelby al entrar, quizó darme su lugar en la ceremonia.
- Sí debo coordinar ese cambio con Kurt, ya que ahora estas aquí, sería mejor que me acompañes al altar en lugar de ella.
- Dejalo así, Shelby ha sido como una segunda madre, quizás más que la nuestra. Si alguien debe estar contigo es ella, yo no tengo problemas con ello.
- Gracias – Contestó Jesse y volvió abrazar a su hermana – Ahora vamos a que te presente a Santana.
Mónica abrazó efusivamente a Santana al conocerla, estaba contenta con compartir este momento con su hermano y ver la manera de curar viejas heridas y volver a unir los lazos que los unían. Durante la cena se percató que Jesse buscaba con la mirada a Rachel y ella también lo miraba disimuladamente. Además notó un comportamiento raro entre la pareja de novios, se mostraban cordiales con el otro, pero algo no le encajaba y eso le intrigaba.
Rapídamente se llegó al momento de los brindis, donde hablaron los amigos cercanos, como los dos profesores que habían sido escogidos como acompañantes hacia el camino al altar, todos deseándoles lo mejor. Cuando llegó el momento que Jesse y Santana dirigieran unas palabras a sus invitados, Quinn se acercó a Santana y ambas abandonaron el salón, estaban por presentar la sorpresa que la novia tenía preparada. Santana rápidamente tomó su lugar detrás del escenario donde estaba ubicada la orquesta, quienes tocaban una canción movida para que los invitados bailene y no levantar sospechas. A media canción el jefe de meseros se acercó a Quinn para comentarle que había un problema en la puerta. La rubia caminó lo más aprisa que pudo hasta el lugar de la emergencia, Will se percató de la preocupación en el rostro de Quinn que caminó tras ella por si necesitara ayuda.
- Le dije que me deje pasar – Protestaba un hombre alto junto a su mujer y una joven.
- No podemos dejarlo señor, no cuenta con invitación – Respondía el miembro de seguridad.
- ¿Acaso no sabe con quien esta hablando? soy el padre de la novia – Gritó el Sr. Lopez empujando al joven logrando ingresar al vestíbulo que separaba de la puerta principal del salón de recepciones.
- Detentase allí – Dijo Quinn.
- Señorita Fabray que gusto verla ¿Acaso vino a decirle a estos señores quienes somos?
- Disculpe Sr. Lopez, pero no puedo dejarlo pasar – Dijo la rubia.
- Que te has creido muchacha insolente, porque ya tienes algo de fama vas a decirle a mi marido que puede y no puede hacer – Protestó la señora Lopez.
- No lo digo por ello, lo digo como amiga de Santana y que está cansada que le arruinen los momentos importantes. Ustedes dijeron que no les importaba el matrimonio. Me lo dijo usted Señor López, cuando lo llamé para buscar la manera que hiciera las pases con su hija.
- Soy su padre y tengo el derecho de estar adentro – Protestó el Sr. Lopez.
- Es cierto somos su familia – Agregó Gloria.
- Bonita familia, una que humilla y que no llama ni en los días festivos- Dijo Quinn – No puedo dejar pasar a ninguno de ustedes.
- ¿Quién lo ordena? ¿El novio de pacotilla que se consiguió Santana? – Dijo el Sr. López
- Santana no los quiere aquí– Dijo Quinn poníendose delante de ellos.
- Trata de impedírmelo niña tonta – Dijo el Sr. Lopez empujando hacia un lado a Quinn.
- No se le ocurra dar un paso más – Dijo Will acercándose a ellos - ¿Estas bien Quinn? – y la rubia asintió.
- Usted es el culpable que esa hija tonta no haya buscado una carrera descente – Dijo la señora Lopez – Le llenó la cabeza de tonterías.
- No fueron tonterías – Protestó Will – Sólo le enseñe a que siguiera sus sueños. Ella es muy talentosa, lo sabrían si se hubieran dado el tiempo de verla.
- Muchas gracias a todos por venir, quiero dedicar esta canción a Jesse, eres muy especial para mi, eres tantas cosas que sólo puedo resumirlo en que eres el hombre correcto – Se escuchó decir a Santana y el sonido de unos violines proveniente del interior del salón empezaba a sonar con mayor fuerza.
- Oh no – Susurró Quinn al esuchar la melodía y recordar la letra de la canción – Por favor será mejor que se vayan ahora.
- No lo haré – Dijo el Señor López pero se detuvo al escuchar que Santana empezaba a cantar las primeras frases de la canción elegida.

El hombre caminó lentamente hacia la puerta, que se encontraba entreabierta y por ese pequeño espacio, vio desde allí a Santana interpretar aquella canción. Vió como Jesse corría al lado de su hija para besarla y abrazarla mientras las lágrimas corrían por el rostro de Santana.
- Vamos – Ordenó el hombre dándose la media vuelta.
- Pero Papá, Santana nos ofende al no dejarnos entrar… - Protestó Gloria
- Dije que nos vamos – Ordenó el hombre y empezó a caminar directo a la salida sin detenerse ni voltear atrás, llevaba el alma destrozada, se acababa de dar cuenta de cuan equivocado estaba.

*********

La noche se pronosticaba larga; de acuerdo a la tradición, el novio no debía ver a la novia hasta que ella este caminando hacia a él frente al altar, por lo que Jesse pasaría la noche en un hotel, mientras que Brittany y Quinn se quedarían con Santana en su departamento. Aidan también se iría con los chicos por petición de Brittany.
Jesse tenía la cabeza hecha un lío, las últimas horas lo habían hecho cuestionarse muchas cosas, en especial cuando Santana empezó a cantar en la cena, con cada frase se sentía un miserable por pretender terminar su compromiso, ella había sido su pilar durante varios años, además de ser su novia había sido su amiga y compartido juntos momentos tristes y alegres. Ella se había abierto a él como no lo había hecho ante nadie y le había dado a conocer su interior, privilegio sólo otorgado en de manera similar a Brittany. Sorprendido y abrumado miraba a su alrededor, todos miraban la escena emocionados de ver por primera vez a Santana invitarlos a conocer el interior de su corazón; de pronto su mirada se cruzó con la de Rachel, ella estaba tan abrumada como él y a punto de llorar. Al terminar la canción se dejo llevar por las emociones del momento y corrió a abrazar y besar a Santana. Pero la última imagen de Rachel secándose las lágrimas y retirandose sigilosamente, fue lo último que se le quedo grabado y que lo torturaba.
Al llegar al hotel, rechazó seguir la celebración con los chicos y los envió a casa. Caminó hasta la habitación y se desplomó en la cama, pero aún así no pudo conciliar el sueño. Se sirvió una copa de licor del minibar, y se apoyó al marco de la ventana con una mano y en la otra sostenía una fotografía que se tomaron Santana y él en la fiesta de graduación de su universidad en Los Ángeles.

Mientras bebía, repasaba todos sus recuerdos buscando uno de paz que lo ayudara a calmarse; al encontrarlo, tomó su chaqueta y abandonó el hotel.

********

Santana estaba sentada en el balcón de su habitación mirando a la calle cuando su celular timbró, al ver el nombre en la pequeña pantalla dudo en contestar, pero luego se armó de todo el valor que pudo reunir en ese momento.
- Hola
- Hola Santana
- ¿Qué quieres Finn? ¿Por qué has llamado?
- Sólo quería decirte que te deseo toda la felicidad del mundo, no pude decírtelo en la cena porque había mucha gente y no quería incomodarte. Hoy me he dado cuenta lo mucho que amas a Jesse y él a ti; por lo que quería pedirte disculpas por ocasionarte tantos problemas y malestares. Disculpa por lo de la canción del otro día pero no pude contenerme e intentar decirte algo, pero…Te prometó que no volverá a suceder jamás, sólo quiero que seas muy feliz, estoy seguro que Jesse velará porque lo seas, pero no le digas que dije algo bueno de él.
- Finn yo…
- No tienes que decir nada… sólo discúlpame que lo diga una vez más, sólo la última vez… Te amo Santana y siempre lo haré. Ahora debo colgar, debes descansar para tu gran día. Que duermas bien.
- Gracias Finn, que descanses tú también – Contestó Santana dejando caer un par de lágrimas.
De pronto Quinn y Brittany ingresaron a la habitación y vieron a Santana sostener el celular sobre su pecho y se percataron que estaba llorando.
- Santana ¿Qué ha sucedido? – Preguntó Quinn temiendo que se haya enterado del inconveniente con sus padres.
- Llamó para despedirse – sollozó Santana.
- ¿Quién llamó Santi? – Preguntó Brittany - ¿Fue…?
- ¿Quién fue?- Insistió Quinn y se percató el nombre que figuraba en el celular cuando Santana lo dejo caer al suelo para abrazar a Brittany.
- Ya no hay marcha atrás, ya lo he perdido por completo – Sollozó Santana.
- Es mejor así Santi, además te vas a casar con Jesse y él es un hombre magnífico. Vas a ser muy feliz, vas a ver que si – Consolaba Brittany a su amiga.
- ¿Estas hablando de Finn? – Preguntó Quinn asombrada.
- Sí, Quinn, estoy hablando de Finn – Respondió furiosa Santana – Si no hubiera hecho caso a lo que decías, si no me hubiera importado tu mirada vigilante, hubiera buscado la manera de poder estar con Finn y no estaría sientiendome así, tan culpable, tan desleal. Me voy a casar con un hombre que no amo, lo quiero muchisimo, pero no lo amo. Ahora Finn creé que Jesse es mejor para mi que él, me acaba de llamar para desearme suerte porque cree que estoy enamorada de Jesse, que él fue un simple desliz – se detuvo cerca a Quinn para gritar – Sabes que no es así Fabray, yo amo a Finn Hudson y no sé que voy hacer – dijo desplomándose en el suelo.
- Yo no sabía, yo no sabía que te sentías así, yo traté de acercarme a ti tantas veces para saber si dudabas de tus sentimientos pero nunca dijiste nada – Respondió Quinn.
- ¿Y para que querías que te lo dijera? Para que la señorita perfección me juzgue, no Quinn, no todos tenemos la vida perfecta como tú – Dijo Santana.
- Yo no tengo la vida perfecta Santana, estas muy equivocada con ello.
- No me interesa, yo a buscar a Finn en este momento y decirle lo que siento – Dijo Santana poniéndose de pie y caminando hacia la puerta.
- ¿Y qué le vas a decir a Jesse mañana? – Preguntó Quinn - ¿Qué le vas a decir después de cantarle que era el hombre correcto? Puede que me haya equivocado con presionarte, pero no me vas a culpar por las cosas que no tuviste en su valentía por hacer. Esto no es de ahora, tú estas enamorada de Finn desde el instituto, si lo perdiste fue allí, cuando no luchaste por él. Ahora como dices es muy tarde para los dos.
- Es muy tarde… - Susurró Santana cerrando la puerta de salida del departamento – Tienes razón es muy tarde.
- Santi, Finn quiere que seas feliz, puedes serlo con Jesse, él te ama mucho – Agregó Brittany acercándose a su amiga junto con Quinn.
- Jesse… tienes razón, no puedo hacerle esto. Lo siento mucho.
Las tres muchachas se abrazaron y caminaron a la habitación a esperar que Santana pudiera descansar un poco.

********

La canción interpretada por Santana marcó mucho a Rachel, se sentía espantosamente por estar enamorada de Jesse y por haberle pedido que la dejara. Más aún cuando cruzó miradas con Jesse, quien también lucía sorprendido y abrumado. Verlo correr hacia Santana, fue la confirmación que Jesse había tomado una decisión y ella no estaba en los planes. Trató de disimular lo más que pudo pero sentía su corazón partirse en miles de pedazos, por lo que optó por retirarse disimuladamente.
Fue hasta su departamento, encerrandose en su habitación a oscuras. Intentó sacar el dolor que sentía, pero por más que lo intentaba no podía hacerlo. Finn la llamó para decirle que iría con los chicos a continuar la fiesta en casa de Puck, por lo que llegaría tarde. Lo cual sería perfecto, porque le daría más tiempo para desahogarse de la mejor manera que conocía sin ser cuestionada. Buscó entre sus discos algo que pudiera expresar lo que sentía y cuando lo encontró no pudo cantar, ninguna nota salía de su garganta. Frustrada tomó su abrigo y salió del departamento, tomó un taxi y pidió que la llevaran a Central Park.
El aire era frío, el sentirlo en el rostro evitaba que derramara lagrímas sin contención alguna. Caminó por varios minutos, hasta llegar al punto donde volvió a ver a Jesse después de tantos años, el pecho parecía encogersele y cambio de dirección. En su camino se cruzaba con parejas enamoradas caminando de la mano o dandose caricias furtivas, avivando el recuerdo de lo vivido en Alemania. De pronto se encontró frente a frente a una sala de cine donde los empleados cambiaban los afiches promocionales, una imagen familiar la hizo acercarse mientras los hombres colocaban el último afiche, al estar frente a el, las lágrimas calleron una tras otra; aquellos hombres habían colocado el afiche de la película que se estrenaría en unos meses y que de acuerdo de las indicaciones de los publicistas del estudio, todos los cines reconocidos de New York, ya debía contar con un afiche similar de Spring Awakening.
Rachel leyó el mensaje impreso a un lado de la imagen de su rostro apoyado en el pecho de Jesse, mientras este apoyaba su mentón en la frente de ella.

Y sintió como si cada palabra se hundiera en su pecho y se alejó lo más rápido que pudo.

*******

- Finn ¿Quieres otro trago? – Preguntó Puck a su amigo, que se había alejado de todos para hacer una llamada.
- No gracias, ya no deseo beber – Respondió Finn con el rostro desencajado.
- ¿Qué paso? ¿Por qué traes esa cara? – Preguntó Puck - ¿Algún problema con Rachel? ¿No me digas que se molestó por seguir con la fiesta?
- No es eso, sólo es que… creo que mejor me voy a casa, lo siento – Dijo Finn saliendo del departamento.
- ¡Finn! – Gritó Blaine que corrió detrás de él.
- ¿Qué pasa cuñado? ¿Quieres que te lleve a casa?
- Te lo agradecería – Respondió Blaine y ambos salieron del edificio.
- Fue agradable la cena ¿Verdad? – Preguntó Blaine a Finn mientras este conducia con dirección al departamento que compartía con Kurt.
- Se podría decir – Respondió secamente.
- ¿Por qué traes esa cara? Y no me salgas que no tienes nada Finn Hudson, podrás engañar a tus amigos y a tu hermano, pero yo siempre me he dado cuenta cuando algo te disgusta, lo recuerdo muy bien porque tenías esa expresión los primeros meses que formé parte de New Directions.
- Estaba celoso que te dieran más solos que a mí – Respondió Finn sonriendo de medio lado.
- Entonces eso confirma que te pasa algo, vamos puedes decirmelo
- Sólo es que… no entenderías.
- ¿Que sientes cosas por Santana? – Dijo Blaine
- ¿Qué? ¿Cómo? ¿Quién te lo dijo? – Preguntó Finn deteniendo el auto en seco.
- Primero calmate que no quiero morir, segundo yo me di cuenta desde hace un par de semanas – Respondió Blaine – Al parecer los demás, no se dan cuenta de las cosas porque ya las dan por hechas y creen que no van a cambiar, por ejemplo cuando Santana apareció del brazo de Jesse, todos pensaban que eran una farsa, pero no fue así. Otro ejemplo es que creían que Rachel y tú serían los primeros de tener la boda magia, pero no lo hicieron, además aún siguen creyendo que terminaran con el viviendo felices.
- Pero comer siempre perdices cansa – Bromeó Finn provocando la risa del otro joven.
- Pero lo bueno es que se llevan bien, los chicos creen que sus problemas se han solucionado porque los ven actuar mejor juntos, ya estaban preparando una Gleeintervención para juntarlos de nuevo, pero yo sé que allí no hay amor. No ves a Rachel, como lo haces con Santana. Además que con la canción de la semana pasada te pusiste al descubierto.
- Pero Santana… ella no siente lo mismo – Respondió Finn.
- No lo sé, la verdad que dudo que ella este enamorada de Jesse, entre ellos hay mucho cariño y respeto, pero… creo que tampoco tendran ese final de cuento de hadas.
- ¿Crees que si evito la boda Santana huya conmigo?
- Eso es una locura – Dijo Blaine - Sólo digo que no me parece muy convencida.
- No, no puedo hacer eso, le he prometido no volver a causarle más problemas.
- Sólo has lo que tu corazón te dicte, en el fondo descubrirás si ella te ama o no – Respondió Blaine dejando pensativo a Finn – Será mejor que nos vayamos, Kurt debe estar preocupado.
- Esta bien, gracias Blaine.

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Rachel recordó una vieja anécdota de Jesse cuando actuaban en Wicked, él le había contado que cuando se sentía abrumado ante alguna de las presentaciones iba al teatro a muy altas horas de la noche y convencía al guardían para que lo dejara solo por algunas horas o toda la noche, este aceptaba casi de inmediato porque extrañaba pasar las noches junto a su esposa. Al estar frente la puerta de servicio tocó temerosa, luego de unos instantes apareció el hombre frotandose los ojos.
- ¿Sra Rachel? ¿Qué hace aquí y tan tarde? – Preguntó el hombre consultando su reloj.
- Hola Frederick, quisiera pedirte un inmenso favor – Respondió Rachel.
Ella le comentó al hombre que Jesse le había contado sobre su trato y que ella estaba muy nerviosa porque al día siguiente viajaría a la presentación del trailer de su película y necesitaba despejar su mente.
- Esta bien Sra Berry, pero tenga mucho cuidado, si escucha algún ruido raro llameme al celular de inmediato, mi casa no queda muy lejos, vendré corriendo – Indicó el hombre.
- No se preocupe, me quedaré un de horas nada más, lo llamaré antes de marcharme – Respondió Rachel y el hombre abandonó el lugar.
El teatro era grande y oscuro, ella camino lentamente hasta el escenario y encendió un par de luces, luego recorrió con la mirada cada rincón, evocando los recuerdos del tiempo vivido en aquel lugar. Todo estaba como lo recordaba, el piano a un lado del escenario daba señas que aún estaban en los ensayos de la producción que se presentaría próximamente allí, pasó los dedos por el suave teclado soltando algunas notas. Luego se puso en el medio del escenario para poder hacer lo que mejor sabía hacer, cantar. De esta manera desahogaría todo lo que llevaba dentro.

Una luz se encendió cegandola por unos intantes.
- ¿Quién anda allí? Le advierto que estoy armada – Dijo Rachel mientras sacaba de su bolso un pequeño frasco.
- Sólo tienes gas pimienta – Dijo un hombre cuya silueta se distinguía detrás de la luz y caminaba hacía ella.
- ¡Jesse! ¿Qué haces aquí? – Preguntó sorprendida.
- Por lo visto conseguiste convencer a Frederick, no es tan difícil ¿cierto? – Dijo mientras subía al escenario.
- ¿Cómo entraste? Él me dejó su llave.
- Pero me dio un duplicado hace tiempo para que pudiera venir cuando quisiera, sólo tenía que llamarlo antes cuando planeaba venir – Contestó Jesse – Sólo que hoy fue algo inesperado
- Entonces me voy, querras estar solo – Dijo tomando sus cosas y dirigiendose a la salida.
- No, espera…No te vayas – Dijo interponiendose en su camino.
- No puedo quedarme Jesse – Dijo Rachel y cuando él tomó su mentón ella esquivo el gesto.
- Has estado llorando ¿Qué pasa Rachel?
- No deberías estar alistandote para tu gran día – Dijo Rachel sarcásticamente.
- Lo siento mucho, no quise causarte tanto dolor – Dijo Jesse tomandola de la mano, pero ella se soltó.
- Lo sé, pero las cosas se dieron de esta manera, yo siento haberte forzado a que trates de romper tu compromiso, ahora sé cuanto te ama Santana y jamás he visto que ella sienta eso por alguien más, hubiera sido una gran maldad que la dejarás.
- Rachel, te juro que trate pero…
- Si todo se interpuso es… - Lanzando un gran suspiro para evitar ponerse a llorar nuevamente – es.. es porque no debía darse. No estaba en nuestro destino estar juntos.
- Pero yo te amo, te amo mucho, me duele no poder estar contigo, no sabes como me recrimino no haberme dado cuenta antes de todo esto que sentía – Dijo Jesse – Me arrepiento de no haberte besado en Venecia, si lo hubiera hecho yo habría fijado la fecha de la boda y no estaríamos aquí…
- Despidiendonos, pero ya no hay que pensar en los hubiera, las cosas no se dieron y no podemos hacer nada ahora. Tengo que irme, no es correcto que este aquí – Dijo Rachel.
- ¿Aún me amas? – Preguntó Jesse.
- Con toda mi alma – Respondió Rachel y se dio la media vuelta para irse pero Jesse la detuvo volteandola hacia él para poder besarla.
- Por favor no te vayas – Suplicó Jesse – Quedate conmigo.
- No deberías hacer eso, dentro de una horas estarás casado con Santana y no es correcto que estemos aquí juntos.
- Por favor…
- No puedo, espero que seas muy feliz – Dijo Rachel bajando las escaleras del escenario dirigiendose a la salida sin voltear a verlo.
- Rachel espera… - Gritó Jesse pero ella seguía de largo. Entonces se percató que a su espalda estaba un piano, corrió a él, cerró los ojos y empezó a tocar.

Rachel paró su camino al escuchar cantar a Jesse y lentamente regresó donde él se encontraba. Cuando terminó de cantar ella tomó su mano y se besaron apasionadamente.
- Quedate conmigo esta noche – Suplicó Jesse.
- Pero Frederick…
- Él no volverá hasta que amanezca y yo quiero tenerte cerca por última vez – volviendola a besar.
- Esta bien Jesse, me quedaré contigo – Respondió Rachel y ambos se abrazaron.
Luego ambos caminaron hasta los camerinos que estaban detrás del escenario, ingresaron a uno donde había un gran sofácama en el interior.
- Estas temblando como una hoja, si no quieres…
- No, si quiero, sólo tengo algo de miedo, siento como si fuera la primera vez – Respondió Rachel
- Es nuestra primera vez juntos – Susurró Jesse mientras tomaba ambas mano de Rachel mientras se sentaban en el sofá.
- Y la última… - Susurró Rachel antes que él volviera a besarla.
Lentamente ambos fueron despojandose de sus prendas, bajo la tenúe luz de una lampara y desde la calle empezaba a escucharse una suave canción que hacía el marco perfecto para aquella noche mágica y única.

Ambos se amaron con todas las fuerzas que tenían, quedando exhaustos de tanta pasión. Entre risas, besos y lágrimas, pasaron esas horas de amor, dejando detrás de cada uno de ellos, pedazos de su alma y de su corazón. Finalmente se quedaron profundamente dormidos, Rachel acostada sobre el pecho de Jesse, arrullada por el sonido de los latidos su corazón.
El sonido de unos tachos de basura callendose al suelo despertó a Rachel. Rápidamente abrió los ojos y se incorporó lentamente, busco en su bolso su reloj, aún marcaban las 4:00 de la madrugada. Con el mayor cuidado tomó su ropa y fue vistiendose lo más aprisa que pudo, tomó sus cosas y camino hasta la puerta, cuando estuvo a punto de girar la perilla se detuvo esperando que sucediera lo mismo que las dos oportunidades anteriores en las que había pasado la noche con Jesse, pero él no despertó. Volteó a verlo por ultima vez y mordiendose el labio inferior conteniendo las lágrimas salió del camerino y del teatro para desaparecer en la oscuridad de la noche.

¿Qué hará Jesse cuando despierte y no encuentre a Rachel? ¿Santana se arrepentirá de casarse?¿Finn detendrá la boda? ¿Jesse se arrepentirá del matrimonio? ¿Finalmente se unirá la pareja St. Lopez? Las respuestas a estas últimas interrogantes se responderán en el siguiente capítulo EL ÚLTIMO GIRO DE LA RULETA