*FanFic* -A Punto Cero- Capitulo 75- What I needed- Parte 3 *Nuevo*

Nooooo Diooooos muerte para Erick y su compliceeee!!! hay que quemarlos en la hoguera!

Diooooos me eh leido la ultima parte 2 veces DOS VECES! actualiza lo mas proto que puedas me estoy muriendo y tmb Angel de Mar siiiiiii? aun sigo con la teoria que Britt salva a todos y pues que te digo aca esperaría que Britt salgo tipo superman de entre los escombros y con el gatito a salvo :3 asi San la ve y se enamora (de nuevo) de ella :)

No jodas tu historia cada día esta mas buena! es que enserio toda la trama que as echo ... amo tu fic!! me tiene al borde de algo enserio!! jamas pense que fuera a pasar algo así.. y mi rubia que le paso? necesito saber como esta? ...

Es increible por lo regular en una historia uno mas o menos se imagina que va a pasar se adelanta un poco a los echos, pero contigo pff no se puede!! te tienes que esperar hasta lo ultimo para ver que maravillosa idea se te ocurre y creo que es por eso que amo tanto esta historia!! diosssss!! actualiza pronto

Noo te fuiste de tema re colgado dejaste el capi , quiero saber que le paso a Britt :_ , che con toda la onda no se si te diste cuenta que de cuarenta capitulos que vas las chicas no se dieron ni un beso jajaja te re fuiste de tema con esa . Una pregunta la hija de Finn que onda , no aparece mucho jajajaj bueno espero que actualices pronto che , beso

No puede seer, en tu otro fic, esta desaparecida Quinn, no hagas que desapareca Britt ahora!!!.. Demasiado drama... u.u.. jajajajaja.. No, de verdad, muy bueno el cap, tu fic cada vez se pone mejor!!!.. ^^..

Espero q actualices pronto.... besooo. :D

Ya se estoy bastante loca..., y ya me dijeron que me van a matar lenta y dolorosamente en mi otro fic por mi dramatismo, asique si ven que no actualizo nunca mas es porque lograron su cometido. ._. Bueno bueno volvamos al tema:
¡Lectoras queridas! ¡Muy buenas noches a todas! ¿Felices por la 4ta temporada? Yo si, de verdad :3 Esta todo color de rosa ahora en mi vida (y en el foro dicho sea de paso, no soy fanática de este color pero la pegaron bien hay que admitirlo)
Mil gracias por sus comentarios chicas, ya se que las estoy teniendo bastante en caidas depresivas o ataques nerviosos. Por lo menos en esta parte intentaremos llegar al fin de esto en breve, promesa. Bueno, perdonen la demora, pero volvi mas realista este capitulo que siempre me quejo de la justicia en las novelas salvo CSI:Miami jeje y bueno hay que actuar con pinzas. Saludos, respiren, inhalen, exhalen, relajense... :) Bye!

Capitulo 43: Las sospechas
Habían pasado diez eternos minutos, ya los bomberos cortaban el acceso al edificio, metiéndose velozmente para tratar de extinguir el fuego, e intentar recatar a alguna persona que haya quedado atrapada. Quinn estaba sentada en el asiento del conductor con la mirada nula, atrás la latina miraba toda la situación en la calle aun sin terminar de caer en lo que estaba pasando. Miró a su amiga y sintió un escalofrió.
-Q…
- San, no me preguntes qué ha pasado porque estoy al borde del colapso...
-¿Tienes sangre en el cuello...? La rubia se llevó una mano hacia atrás, notando que algunas espesas gotas quedaban aun en sus dedos.
–Me golpee al pasar. Mintió. No había hablado con nadie, pero por el estado de su amiga ya demasiado estrés estaba generando al ver todo el alboroto y no sabría como explicar en verdad todo lo que vivieron en ese corto tiempo. –Tranquila, voy a estar bien… Agregaba pensando en que estuvo desmayada por un lapso indefinido, pero eran muchas las cosas que pasaban por su mente como para concentrarse en la herida que le había quedado. Santana miró hacia el edificio una vez más, las llamas se distinguían en lo alto y el toxico humo negro se elevaba en el cielo. Un nudo en la garganta estremeció sus sentidos.
-Por favor… Dime que ella no estaba allí arriba. Murmuró abrazando contra su pecho a Axel. Iker estaba mudo, solo atino a moverse hacia adelante notando que su madre rubia se apoyaba contra el volante con cara de tristeza. Quinn lo miró por un instante: en el momento en que sintió el arma en su nuca, lo primero que pasó por su mente fue que no iba a poder ver crecer a su pequeño, ni decirle que lo sentía por regañarlo, o que lo amaba con su ser y su existir. Lo tomó por la cabeza y depositó allí cientos de besos, ahora sus lágrimas caían con angustia. Los ojos de Santana también se humedecieron, interpretando aquel silencio como una terrible respuesta. Empezó a negar con la cabeza, no era posible que Brittany haya estado, dios sabe por qué, en aquel sitio.
-¿Señoritas están bien…? Indagó una oficial de policía, acercándose al vehículo. Las contempló por unos segundos e hizo una seña a sus compañeros pidiendo apoyo. –Por favor, acompáñenme, esta zona es peligrosa. Las chicas asintieron, tomaron cada una a sus hijos y salieron lentamente. De inmediato la policía mando a llamar algún medico para que ayudara a la rubia y su lesión.

-¡Tienen que revisar! ¡Mi amiga esta allí! Gritaba Finn intentando entrar por la fuerza, los policías lo corrían con violencia. Otro oficial le tomaba declaraciones a la judía, que pese a que estaba aun muy alterada podía hablar ampliamente, aunque tampoco tenia un modo claro de explicar todo lo que había ocurrido.
-Nos golpearon y metieron dentro del departamento, yo pude liberarme…
-¿A quien se refiere cuando dice que las golpearon..?
-Erick Montez, ese tipo estaba allí… Después… Oí otra voz, eran cómplices, tenían planeado un asesinato y…
-Por favor, hable tranquila. Explique todo con la mayor cantidad de detalles que pueda.
-¡Suficiente, no me haga usar la autoridad contra usted! Le gritaba un policía al castaño, que luchaba por zafarse.
-¡Brittany Pierce, alta, rubia, ojos celestes, tienen que darme una respuesta, vamos! Repetía el vendedor poniéndose rojo de la furia. Los bomberos comenzaron a sacar a la gente que vivía en los departamentos de otros pisos; algunos se habían caído de las escaleras entre las corridas, por el susto y el sonido de la explosión.

Uno de los bomberos pasaba por las puertas del ascensor, cuando sintió un ruido proveniente del interior. Apoyó lo cabeza intentando escuchar:
-¿Hay alguien ahí…? Preguntó con voz gruesa dando unos golpes leves. La respuesta fue de otros golpes insistentes y veloces. -¡Tenemos una persona atrapada! Gritó haciendo señas para pedir herramientas.
En tanto algunos trabajaban con las personas que salían aterradas y confundidas del lugar, aquel bombero forzaba las puertas del elevador, puesto que la electricidad se había cortado en todo el edificio. Tras un buen esfuerzo con una palanca, logró abrirlo: Brittany estaba sentada en un rincón, respiraba agitada, en sus manos abrazaba al gatito.
-Señorita, ¿Me escucha? La rubia asintió, levantando su mirada, que se encontraba algo ida. –De acuerdo, tranquila, solo la quiero ayudar. Venga. Decía el hombre en tono calmado, extendiéndole una mano para que la sujetara.
La bailarina se movía lentamente: cuando se levantó tras la caída, corrió desesperadamente de allí, alguien había marcado al ascensor para no bajar por las escaleras en las que la gente se chocaba para alejarse tras ir a espiar. Las puertas se estaban cerrando y ella con agilidad se tiró adentro. Cuando terminaron de cerrarse, empezó el descenso, puesto que desde el tercer piso también habían llamado; la explosión se sintió, y el elevador se detuvo. Para suerte de la holandesa, el mecanismo de aquel aparato no había fallado pese a la falta de electricidad que se dio de un momento a otro. El bombero la tomó del hombro, acompañándola para ir a la entrada en la planta baja. Todo eso era una horrible confusión en su mente.

Al salir y volver a sentir aire en sus pulmones, comenzó a respirar agitada otra vez, un tanto abrumada por todo el alboroto en la calle. Finn la vio desde lejos y corrió a su encuentro. Ambos se abrazaron como pudieron, puesto que la rubia no soltaba al gatito, que ronroneaba apoyado en su pecho.
-¡Brittany! ¿¡Estas bien, no tienes heridas, ni nada!? Indagó rápidamente el castaño, ahora tanteándola para percatarse que estaba entera. - Por dios pensé que no te habías salvado…
-Yo creí lo mismo por un instante. Respondía la rubia dejando caer unas lágrimas mezcladas entre nervios, felicidad, confusión y miedo, mucho miedo.
-¿La conoce…? Indagó el bombero salvador. El vendedor asintió, secando las lágrimas que caían de esos perfectos ojos azules. No le agradaba ver a ninguna de sus amigas llorar; el culpable de todo esto tenía que pagar.

Rachel había sido acomodada junto a Quinn y Santana, que no soltaban a sus pequeños. Intentaban respirar más tranquilas, los paramédicos revisaron a la abogada para saber si no tenía una lesión muy grave y estaban haciéndole una limpieza rápida por el corte en su cabeza. La policía esperaba a que las mujeres se calmaran para continuar con las indagaciones.
Los amigos caminaban lento, buscándolas con la cara descolocada de los nervios y el cansancio emocional. Los ojos de la latina se iluminaron de golpe al ver a Brittany. Se paró rápidamente y fue al encuentro de ambos. Sin pensarlo dos veces, abrazó a la bailarina, que le respondió apretándola fuerte contra ella, lo más que pudiera ya que Axel estaba aun en brazos de su madre. Las Faberry sonrieron pero casi volviendo a llorar: era como un milagro verla de nuevo. Cuando Santana se despegó un poco del abrazo, Brittany le sonrió débilmente.
-Estoy bien… Le susurró. Sentirlos cerca de ella le dio una imponente paz por un instante, podía agradecer que viviera: llegó a ver su vida pasar frente a sus ojos y, en los lapsos más largos de esa secuencia de imágenes, aquella latina pasaba constantemente, con su sonrisa del pasado y el presente. Las lágrimas volvieron a surgir, ahora toda aquella adrenalina obligatoriamente se convertía en angustia otra vez. Tragó saliva intentando contener su llanto.
-No, no lo estas… Respondió la morena viéndola con malestar. Simplemente se volvieron a abrazar, que era lo que necesitaban en ese momento.
-Ya pronto lo estaré, sigue confiando en mí... La ex cantante escuchaba suspirando: con todo lo que había visto y oído de Rachel, que no paraba de hablar, se daba una básica idea del terrible peligro que habían enfrentado.

Tres largas horas pasaron, a Quinn le hicieron una sutura pero parecía estar bien, aunque le aconsejaron que vaya al medico para cerciorarse. A los cinco amigos les pidieron que se acercaran a la comisaria junto a otros testigos ni bien pudieran. El matrimonio Fabray-Berry fue el primero que habló, con la contención de uno o dos psicólogos de la policía por cualquier eventualidad. Luego, Finn narró todo lo que sabía y entendía, seguidamente Brittany fue la última que se presentó ante los oficiales. A Santana mucho no pudieron interrogarla puesto que sus amigos explicaron que ella no estuvo presente en todo el hecho, ni enterada al cien por ciento por su condición. Quinn, pidió discreción con sus identidades, podía ser peligroso y además la fama de Rachel no mejoraría de un buen modo.

-¿Tú estas bien, no te sientes mal ni nada? Se preocupó la abogada sentada al lado de su amiga morena.
-Si, odio, eso siento. Pero por lo demás estoy en perfectas condiciones…
-No será que colapsaras después…Deberíamos ir al hospital. Hablaba la judía deambulando por los pasillos.
-Tranquila Rach, estoy o estamos bien. La actriz se quedaba callada, la verdad que el cansancio mental que tenía la estaba derrumbando. –Gracias a dios, todos ustedes están bien.
-Sigo convencida de que Brittany es una heroína, de verdad actuó de una manera increíble. Y se preocupó por todo… De no ser por ella y Finn… No sé que pudo haber pasado. Fue la primera vez que tuve tanto miedo, escucharlos fue tan…
-Sigues asustada Berry… La castaña tragó saliva, todo eso había pasado porque aquel profesor y su secuaz querían hacerle mal a la holandesa. Era muy confuso pensar las razones que podrían tener para querer dañarla, sin lugar a dudas eran unos delincuentes al no temer en lastimar gente, tener una bomba o armas con las cuales actuar. Los niños jugaban en el pasillo de la estación con el pequeño felino, que también de milagro había sido rescatado por un ángel guardián y protector de ojos azules. Por las declaraciones de las chicas, la policía buscaría a Erick. Si bien la explosión no había tenido victimas fatales, no por eso era un hecho menos grave. Algunos vecinos corroboraban las características del sujeto y haberlo visto entrar alguna que otra vez al departamento. Pero, dejaban un margen de duda, puesto que también comentaron que la explosión se dio luego de que los amigos salieran corriendo; podía ser cierto, quizás, que ellos hubieran provocado algo así. Las interrogaciones fueron llevadas por simples oficiales del lugar, y veían que todo ese drama que se estaba desarrollando deberían tomarlo e investigarlo con pinzas. Había muchas cosas que no quedaban claras, y lo peor era que no dejaban bien parados al grupo de ex cantantes.
Cuando finalmente Brittany salió de la sala, miró a sus amigos que la esperaban con igual cara de desconcierto.
-Dijeron que ya podemos irnos… Aunque es probable que nos vuelvan a llamar. Murmuró agachando la cabeza.
-¿Les dijiste que quería matarte a ti? Preguntó la judía cruzándose de cejas. Su esposa le dio un codazo por las costillas, sus palabras eran duras. La bailarina asintió, con un nudo en la garganta.
–Pero solo fue un dato más, no pueden creer eso si no tienen pruebas...
-¿Tu crees que en verdad Erick te haría daño de esa manera? Insinuó Finn poniéndose de pie.
-¡Yo lo oí! Dijeron que la querían a ella, y cuando estábamos encerradas esa tipa murmuró que a nosotras nos haría desaparecer junto a Brittany. Argumentaba la castaña. Las chicas la miraron con curiosidad.
-¿Qué tipa?
-Su secuaz, creo que ella estaba al mando de todo porque le gritaba que la había desobedecido. Tal vez todo era un plan de ella contra ti… Todos se quedaron pensando, ahora no solo el ex novio lunático de la bailarina estaba incluido en aquel macabro intento de homicidio, frustrado por la suerte, el destino y el pensamiento frio.
-¿No llegaste a ver como era…?
-La policía me preguntó lo mismo, ya les dije que me hice la desmayada; igualmente me miraron como si fuera una loca… Pero vamos, no podía abrir los ojos arriesgándome a que me dieran con un fierro también a mí…
-Muy bonito, a mí que me maten, tú por hacerte la muerta te salvaste. Se quejaba Quinn. Su judía la besó en los labios, ya sabia que de algún modo le iba a reprochar el no haberla ayudado, pero ya era tarde para las quejas y el arrepentimiento. Finalmente la rubia la abrazó con fuerza, pidiéndole disculpas, tendrían que estar agradecidas por estar vivas, juntas y dentro de todo completas.
-Sera mejor que me vaya, ya la niñera de Kim se tiene que estar desquiciando. Comentó el vendedor inclinándose de hombros. Tenia muchas dudas pero nada podían hacer por el momento, ahora era turno de confiar en la justicia y por su bien, seria mejor resguardarse de enfrentar nuevos peligros.
-Cuídate mucho por favor. Dijo Brittany sin levantar la mirada, su mente estaba ida en un laberinto de incertidumbre y caminos que no llevaban a ninguna respuesta clara; solamente el terrible sentimiento de saber que todo el tiempo estuvo cerca de una persona que quería dañarla a como dé lugar, sin importarle nada; en ese momento sentía que en las únicas personas en quien podía confiar de verdad eran sus amigos.
-Sera mejor que nosotras también nos vayamos… Murmuró la latina sujetándola levemente por la espalda. Todas asintieron, ya no querían saber nada de policías e investigaciones por el momento. El viaje a casa fue algo silencioso, Santana fue la encargada de conducir. No sabía muy bien qué preguntar, o más bien, por donde empezar con todo eso. Erick era un tipo peligroso por lo que había demostrado; ahora solo rogaba que lo encontraran y le hicieran pagar por haber dañado a sus amigas.
-Tía… Hablaba Iker sentado en las piernas de Rachel. La morena sonrió, al menos los niños no estaban tan preocupados como ellas.
-Dime Aik…
-Tengo hambre ¿Cuándo iremos a cenar? Sus madres lo abrazaron, ese pequeño era lo mejor que podía pasarles.
-Cambio de planes peque… Hablaba Brittany, tratando de omitir todas las hipótesis eh ideas que fluían por sus pensamientos. –Estaba pensando… ¿Podríamos ir a mi casa? Allí preparemos algo para que coman. La conductora asintió, notando el temor aun depositado en las palabras de la bailarina.
Al poco rato llegaron a la casa. Entre todas intentaban distraerse cocinando, Rachel puso música para acompañar la cena.
-Creo que voy a tener un nuevo acompañante… Hablaba la holandesa dándole un vistazo a Axel, que jugaba con el gatito rescatado.
-Tú y tu amor por los gatos, de verdad que darías la vida por ellos. Hablaba Santana en tanto tomaba un poco de agua. La bailarina sonrió inclinándose apenas de hombros.
-Hay seres que son mi debilidad, los gatos son una de ellas…
-Los patos son otra…. Continuaba Quinn, tomando asiento en la mesa.
-Y los Lopez una más. Cortó con picardía la actriz. Santana se giró de golpe mirándola con los ojos muy abiertos, en tanto Brittany se sonrojaba más que un tomate. –Y los Fabray… Y los Hudson… Agregaba lentamente para que no mal interpreten las cosas, aunque ya era medio tarde. Terminaron riéndose, necesitaban descargarse de algún modo. Sobretodo los niños, comieron velozmente la cena preparada; la latina también, aunque no porque tuviera hambre. Las otras tres a tientas probaron bocado, tantas emociones en esa tarde les causaba que el estomago poco más se les cerrara. Al poco rato comenzaron a golpear la puerta, todas se alarmaron: era de noche y el rotundo temor a que cierto profesor terrorista apareciera vino rápidamente a su mente.
-Tranquilas… Es Finn. Las calmaba Santana, dando un vistazo por la ventana de la cocina. Seguidamente fue a abrirle al castaño que traía en brazos a su hija. Entraron rápidamente, la ex animadora cerró con llave.
-Yo… Pensé que necesitarían a un hombre en la casa… Hablaba el vendedor mostrando que traía un bolso con algo de ropa. Las chicas sonrieron, le parecía muy considerado que se ofreciera a cuidarlas.
-¿Y trajiste un guardaespaldas o algo así? Porque no veo a ningún hombre aquí… Se burlaba la morena haciendo que el castaño la abrazara, por todos los medios ella intentaba levantarles un poco el ánimo.
-¿Si podemos quedarnos Britt? Indagó dándole una mirada a la dueña de la casa.
- Te lo agradecería en verdad Finn… No puedo dejar de pensar en lo que ha pasado, y siento que… Quizás si hubiera ido a dejar los papeles… o desde un principio no hubiera aceptado estar con Erick yo…
-Hey, tu no lo sabias Britt. Nadie podría imaginarlo y no digas que tendrías que haber ido porque a esta hora podríamos estar lamentando algo peor. La calmaba Quinn tomándola del hombro; la bailarina cerro los ojos con malestar, aun le dolía haber tumbado la puerta con tanta fuerza. – No tienes culpa en esto ¿Ok? Y no te preocupes, si estamos juntos, ha quedado demostrado que nada puede pasar, porque nos protegeremos. Ambas rubias se abrazaron, suspirando fuertemente, necesitaban relajarse.
-¿Mami nosotros también podemos quedarnos con la tía Britt? Sonrió Iker. Las Faberry miraron a Brittany.
-La casa es grande, puede quedarse el que quiera. Dijo finalmente, dándole una mirada a los morenos con la intensión de invitarlos a que se sumen. La latina tomó en brazos a su hijo que ya se frotaba los ojos con algo de sueño. Lo pensó un momento, no podría quedarse tranquila estando lejos y sabiendo todo lo que estaba pasando.
-Si tú lo dices, nosotros no tenemos problema. Asintió en tanto acomodaba a Axel en su hombro derecho.

Tras un rato de debate, movieron los colchones de las habitaciones y los bajaron al salón. Los niños se quedaron allí viendo películas, con la condición de no hacer ruido ya que el menor de ellos se había dormido. Quinn y Rachel cruzaron rápido a su casa, junto a Finn, para buscar algo de ropa para dormir, y algunas frazadas.
Tras una ducha, Brittany se cambiaba en su cuarto. Trataba de no pensar, pero era difícil. Se colocaba su pantalón para dormir cuando llamaron a su puerta golpeando finamente con los nudillos.
-Adelante. Dijo, apresurándose para tomar su blusa que se le trabo en la cabeza. Santana abrió lentamente la puerta, llegando a ver la lucha de la rubia con su ropa.
-¿Cómo estas? Indagó apoyándose en el marco. La bailarina la miró con una media sonrisa, aunque sus ojos mostraban una pisca de pena o nostalgia, no podía distinguirse bien, seguramente también era miedo.
-Una ducha le viene bien a cualquiera… Le respondió inclinándose de hombros. Hizo una mueca de malestar otra vez, el dolor en su hombro no se calmaba. La latina pudo notar que tenía un buen moretón, por lo que se adentro en la habitación hasta quedar a su lado, poniéndole una bolsa con hielo en el lugar del golpe.
-Esto tendría que vértelo un… Se quedó pensando. Dudaba mucho que aun la bailarina pudiera estar frente a un medico; esa misma tarde se mantenía distanciada de las ambulancias y la paramédico que le hacia curaciones a Quinn. Se tragó sus palabras, sin dejar de sostener el hielo en el hombro lastimado.
-Ah… Tranquila, ya para mañana va a estar bien, no necesito un doctor. La morena asintió. - Nosotros cuando estábamos en…. las giras, siempre nos valíamos del hielo. Pensar en las giras, en donde más de una vez se cruzó con Erick, le daba una mezcla de sentimientos ¿Y si ya en ese tiempo pretendía hacerle daño?
-Todo este lio se va a aclarar… Y como dijo Q, mientras estemos juntos, nos protegeremos.
-Hago lo posible por pensar así. Pero… Tengo miedo San… Hoy pudo haber ocurrido algo terrible, la vida de todos corrió peligro. Y la verdad no sé qué pensar; lo único que tenia en la cabeza es que no podía permitir que a alguien a quien yo quiero le pueda pasar algo. No deseo volver a vivir con temor. Lo soporte por años, y créeme que es horrible… Hablaba Brittany agachando la mirada.
-Si lo soportaste sola, ahora que estamos nosotros podrás salir adelante mucho mejor, créeme. No vale la pena pensar en lo que no fue, están bien, un tanto asustados y golpeados, pero vivos. Y creo que eso es lo que importa. Cortó Santana. A los pocos minutos las Faberry subieron al cuarto buscándolas.
-Muy sexy, y característico de ti, ese pijama Berry. No pudo evitar burlarse al ver a la judía con una camisa y un pantalón lleno de estrellitas.

Un rato después los niños cayeron rendidos, sus padres los acomodaron un poco. En vez de dormir, prefirieron charlar de cualquier tema que pudieran, sentados en la cocina. Bastante tarde, Finn se acomodó junto a Kim, las Faberry (en el colchón más grande) se recostaron abrazadas a cada lado de su hijo. Un tanto más alejados, Santana y Axel se tendieron en el piso, junto al sofá.
-¿Segura que no quieres dormir aquí arriba? Podrías resfriarte… Susurraba la ex animadora ojos azules.
-No te preocupes Britt… Estaremos bien. Al escuchar eso, la rubia se recostó de nuevo en el sofá, tapándose apenas con una manta. El silencio cundió en el salón, y a medida que cerraba los ojos, las imágenes desesperadas de la tarde venían a su mente haciendo que se sobresaltara. Lentamente tanteo la cabeza de Axel, lograba escuchar su sana respiración desde allí. Sintió que alguien, con un calor muy relajante, sujetó sus dedos. Con eso suspiró más tranquila, Santana y ella se quedaron un rato tomadas de la mano, rezando porque las cosas marcharan bien de una vez por todas.

tu fic...es pasdo de bueno....se excede....es excelente!!! osea wash...de donde sacas tu todo eso....cada capitulo es mejor q el anterior!!!

que pena que no pueda mandar aplausos por aquí...xq este capítulo sin duda se merece unos cuantos...no sé cómo explicarlo, pero me ha sacado varias sonrisas al ver a Santana tan dulce y comprensible y protectora con Britt...sin duda jamás dejará de velar por la rubia y de querer protejerla de todo...los pequeños detalles que de ella salen, como tomarle la mano, ponerle el hielo en el hombro, o quedarse con ella a dormir, sin duda son claros ejemplos de que esa morena se muere de amor por Britt, así que a ver si abre ya los ojos y se da cuenta de eso. El amor que se tienen la una por la otra es inmenso, y si el tiempo, ni la distancia, ni los malos entendidos podrán separarlas. Estoy segura de ello.

También me ha gustado mucho que todos estén como una familia, unidos y protegiéndose entre ellos. Desde luego esta batalla la ganarán todos juntos.

Por favor, mata a todos los responsables, te lo agradeceríamos.

De nuevo, ha estado genial ;) Muaaak

Pd: al gato le tienes que llamar Zack...Zack Morris ajaja

Hola otra vez!
Chica autodenominada dramática: tus últimos capítulos han sido dignos de una muy buena novela policial...
Cómo que una mujer es el jefe de Erick? Juró que creí que era un hombre y eso que, por algún extraño motivo, le presto mucha atención a los detalles. Me estás obligando a leer TODO de nuevo... No, no puedo hacerlo. Si tuviera ese tiempo, sería un verdadero placer...
Ufff, ahora las hipótesis pueden variar muchísimo! Y, por supuesto, no creo que sea posible dejar de mirar a Sebastian del todo, ni tampoco a los planes del manager de Kurt. Pero eso lo sabes vos, y nosotras te leemos...
Como siempre, el desarrollo de la trama está impecable. Así que espero que tu vida color de rosa no te aleje demasiado del teclado ni de la fiebre de ficción, y no te impida seguir haciéndote una escritora con todas las letras!! Esto es broma, claro. De hecho, creo que la felicidad es la mayor inspiradora.
Un abrazo grande y gracias, de corazón!!

woow tu cada día te superas mas enserio eh!! amo tu manera de escribir!
Que bueno que a britt no le paso nada, y como es costumbre me has dejado llena de dudas, una mujer es la cabeza principal de todo esto? quien sera esa loca pff!!

espero y pronto se aclare todo eso!

W-O-W genial este cap aunq un poco nostalgico ya quiero saber porque le quieren hacer daño a Britt quien es la mujer detras de esto? y bueno ya todos nos dimos cuenta que Erick es un idiota sin cerebro asi que jamas hubiera podido planear algo bien.... la chik tiene que ser una mente criminal super brillante tal vez alguna ex de Britt que sufrió por su amor y la rechazo? haha quien sabe :)

SIIIII, Britt aparecio! No sabes lo feliz que me pone. Asi que voy a cancelar mi vuelo a donde quieras que vivas, y no te voy a linchar!. (? JEJEJEJEJ

Aww, se dieron la amo. ♥. Osea que ahora van a avanzar las cosas entre las chicas no?. O.o. No seas mala y danos uin poco de Brittana! jejejeje

Besote

Awwww Britt esta bien!!!!.. :D me ponee muy feliz!!!!!.. Ahora lo que falta es que se acerque a San, y San a Britt, y ahi esta completa mi felicidad.. jajajaja.. Dale, no seas mala, danos un poco de Brittana!!!..

Muy bueno el cap.. Beso!!!.. :)

queridisima paz, por aqui de vuelta poniendome al corriente con los capitulos, la verdad es que no tengo mucho tiempo ahora per aprovecho que tengo cinco minutos para comentarte, que te puedo decir, simplemente excelente, la manera en que escribes y como llevas la trama, he reido, he llorado, creo que he terminaod con mis uñas y mis nervios en los dos capitulos pasados han sido horribles, y este no es la excepcion, creo que aun se bien cosas feas y no me equivocaba con erick y sigo afirmando que es la hermana de la rubia, una brazo y aunque no comente ahora seguido ten por seguro que te leo.

que buen capitulo! segui asi pero mas pronto ajja!!

no mms!! doenfhndkss me encanta tu fic!!

está spr... aamm como te explico ppffff me causa demasiada intriga!! es raro porq dices q es una mujer la que está detrás de todo pero no me imagino quien puede ser, por otro lado está también Klaine y los que están detrás de Kurt D= YA NO SE NI QUE!!



akdinddudu queremor Brittana!!!!! 43 capítulos y nada...WOOOW nunca me había tocado leer un fic Brittana que durante tantos capítulos solo hayan tenido un abrazo muy tierno y tomarse de las manos, hasta ahí!! joder q aguante el tuyo!! hehe :D

estaré esperando ansiosa a que pasen esos 2 caps q mencionaste arriba :D para que en el 3ro ¡¡booommm BRITTANA!! hehe bueno ya sabes! ;) xoxo

¡Lectoras queridas! ¡Muy buenas noches para todas! Lo siento, lo siento, lo siento perdon, perdon :C Ya se que me estoy atrasando un poco en actualizar, tengo tan presente que en un principio actualizaba casi todos los dias y ahora tardo mas pero eso era porque me sentaba los fines de semana y adelantaba en el word cuantos capitulos pudiera, de verdad antes de iniciar el fic tenia 12 capitulos listos y para el capitulo 13 ya habia avanzado al 25 y asi. y ya van varios findes en que tengo otras cosas para hacer, como el ultimo que fue mi cumpleaños ._. (puedo narrar lo que es la resaca realmente espero usar esa informacion en un capitulo futuro jajaja) Para mi suerte tengo bastante claro como seguir y eso me hace que cuando tengo el tiempo y me pongo enfrente del teclado saco un nuevo capitulo en cuestion de ratos. Bien, como les contaba más arriba ya vamos llegando al fin... de este misterio, la policia se encargara de gran parte (yo y mi falsa fe en la justicia, la verdad es que me parece ficcion xq en mi pais son un asco para estas cosas) Oki me voy como siempre de tema, este cap intento que sea más light, se que ha sido todo bastante duro y ni hablar como castigue a las lectoras de Angel del Mar, el fin justifica los medios (? jaja bueno que esten bien, espero que les guste, gracias por todo y tenganme paciencia :) ¡Saludos!


Capitulo 44: La bandida
Eran las once de la mañana y todos dormían. En verdad era raro que no se hayan despertado por los ronquidos de Finn, o con Rachel que hablaba entre sueños (y por lo que se ve era un sueño que involucraba nutella y a Quinn) Definitivamente todos estaban exhaustos, y por más asustados que pudieron haber estado, sus cuerpos les pedían una tregua. Kim se despegó de los brazos de su padre, desperezándose ampliamente. Se paró en puntitas: Iker dormía desparramado, y sus madres al borde del colchón se tapaban cada una con una frazada.
-Duerme como un angelito… Un angelito que babea, pero no deja de serlo… Pensaba la pequeña Hudson interiormente. Dio unos pasos, intentando no pisar a nadie, aunque sus cortas piernas no le permitían esquivar del todo los obstáculos. En cierto momento, pisó el control remoto de la televisión, causando que esta se encendiera pasados unos segundos. El fuerte estruendo del canal de las noticias hizo que todos se despertaran sintiendo que se les iba el alma del cuerpo.
-¡Hudson! ¡Apaga ese maldito aparato! Gritó Santana a más no poder.
-¡Oh por dios no veo! Exclamó Rachel sentándose de golpe. Quinn giró los ojos, riéndose.
-Amor aun tienes el antifaz…. Le explicaba a su judía quitándoselo de la cara. Se miraron unos segundos, dándose el beso de todas las mañanas.
-Muy tierno todo, pero no me parece divertido que tu hija nos asuste así. Se quejaba la latina quitándose el pelo de la cara, en tanto su hijo luchaba por abrir los ojos con la luz. Finalmente al girarse, aun recostado, pudo notar que su ex niñera lo espiaba desde más arriba.
-Nany… Sonrió mostrando sus dientes e iluminando su mirada. La bailarina lo tomó en brazos dándole un beso en la mejilla. Nunca se iba a cansar de verlo recién levantado.
-Okey, ahora que nos despertamos será mejor que levantemos campamento. Decía el castaño poniéndose de pie.
-Si además estas dos permanecerán a los besos en tanto sigan acostadas. Agregaba la morena a modo de queja contra sus melosas amigas. Entre todos ordenaron el salón hasta dejarlo impecable, como siempre. Las Faberry hicieron las camas, en tanto Santana se encargaba de vestir a los niños, tarea nada sencilla por cierto. Finn, el chef, se encargó de hacer el desayuno con ayuda de la bailarina. Un rato después se sentaron a la mesa.
-… Debo ir a buscar mi motocicleta, y no tengo deseos de salir a la calle… Comentaba Brittany tomando la azucarera en vez de su taza de café. La latina sonrió, deteniéndola para que no tomara un trago de azúcar en seco.
-Nosotros tendremos que irnos un rato para cambiarnos de ropa y ver que todo este en orden en casa… Si quieres te acercamos. Espero que siga allí y…
-Solo pasaron dos días desde que estuve encerrada en la morgue y desde entonces todo se sacudió peor que cuando pasa un tornado. La rubia no podía dejar de pensar. Había llegado a la conclusión de que aun seguían en peligro, en tanto y en cuando no encontraran a Erick. Nadie podía asegurar que incluso en ese preciso momento aquellos psicópatas no estuvieran planeando algo nuevo para atraparla; sea cual sea el motivo, ninguno era suficientemente fuerte como para desearle el mal a aquella chica, y eso era lo que la mantenía reviendo toda su historia, intentando dar con algún error, con alguna mala acción para obtener enemigos de esa magnitud. Pero no era posible, no es que fuera perfecta, simplemente trataba de llevar la fiesta en paz con todos; o al menos eso creía. No pretendía vivir con miedo, no era ese su plan, menos que involucre a alguna de las personas que quería.
Unas horas más tarde, los amigos intentaron lentamente volver a sus vidas, no seria fácil pero no tenían otra opción.
-Oye… ¿Segura que estarás bien? Indagó por quinta vez Santana, estacionando en las cercanías del hospital. Brittany traía consigo a Axel, ambos se sentían bien estando juntos, solo con sonreír y verse las caras.
-Tengo mis llaves, de aquí pasare a la tienda por algo de comida para la gatita y me voy directo a mi casa…
-¿Cómo sabes que es hembra…? La rubia la miró de manera picara ante esa pregunta.
-Digamos que Lord T, tenía algunos detalles que denotaban su machismo… Aunque para mi tenia conflictos con su sexualidad. Bromeaba la bailarina recordando a esa bola peluda. –Bueno será mejor que me apure…
-Aguarda… Cualquier cosa, sea lo que sea, llámame. La detuvo la latina mirándola de manera fija. –Ayer casi muero con todo lo que paso, pero prefiero estar al tanto, antes que con incertidumbre…
-Perdón San, pero no dejaba de pensar en que no tienes que pasar cosas así… estábamos en un apuro y yo…
-Hey, tranquila. No te estoy reprochando nada. Te agradezco que hayas pensado de esa forma, pero no te preocupes ni dudes en avisarme si ha ocurrido algo. Brittany entre sonrió asintiendo, ¿Cómo decirle que no? Abrió la puerta del auto y seguidamente acomodó a Axel en el asiento de atrás. Tomó sus cosas que habían quedado en la parte del acompañante. Cruzó su mirada con la de su amiga, se acercó levemente y le dejo un beso en la mejilla rápido, fugaz con una pizca de timidez.
-Yo te llamo. Le dijo retrocediendo para marcharse antes de que se sonrojara. Santana arrancó el vehículo cuando se percato que la bailarina llegó al estacionamiento, luego de eso se marchó lentamente rumbo a su casa. Brittany ubicó su moto, en realidad no entendía cómo nadie se molestó en borrarla de allí. Pero ya tenía demasiadas cosas en la cabeza como para pensar en esos detalles. Antes de pasar a la tienda de mascotas, prefiero dirigirse a otro sitio.
Unas dos horas pasaron, Rachel limpiaba un poco la entrada de su casa. Dentro, Iker y Quinn se distraían viendo una película tumbados en el sofá. Un auto negro estacionó frente a la casa de la holandesa, cosa que le llamo la atención a la castaña del otro lado de la calle. Seguidamente dos hombres con anteojos oscuros se bajaron, caminando hasta la puerta. Permanecieron allí, tocando el timbre.
-¿Puedo ayudarlos en algo…? Comentó la actriz, acercándose algo dudosa.
-¿Sabe por casualidad si la dueña de esta casa se encuentra en estos momentos? Indagó uno de los sujetos quitándose los anteojos con modestia.
-No, tenía unas cosas que hacer… Disculpen mi intromisión pero… soy amiga de ella y pensé que podrían…
-Perdone nuestra descortesía. Somos los detectives Malcom Ristter y André Di Blasi. Explicaba el otro hombre en tanto rebuscaba en el bolsillo de su saco. Agentes de la unidad de investigaciones de la policía federal. Se presentaba formalmente, mostrando una placa con su identificación. La judía suspiró un poco mas calmada: al menos no era nadie en quien desconfiar, aunque si fuera alguien malo ya seria tarde para echarse atrás.
-Vera estamos investigando el caso de la explosión en el departamento… ¿Usted esta enterada del siniestro?
-Yo fui testigo y victima podría decirse de gran parte de eso. Relataba la ex cantante cruzándose de brazos un tanto inquieta.
-¿Su nombre…?
-Rachel Berry.
-En efecto ella es una de las involucradas. Hablaba uno de los detectives a su colega, mostrando una libreta con anotaciones. –Señorita, necesitaríamos hablar con usted, y las otras personas que estuvieron ayer en el incendio. También queremos informarnos respecto a sus acusaciones contra Erick Montez. Explicaba releyendo sus escritos.
-¿Hay algún problema con eso…? Interrumpía la ex cantante cruzándose de cejas.
-Necesitamos interrogarlos de nuevo, hay algunas cosas que no quedan claras. Y además…. Cortó Malcom, compartiendo una mirada con su compañero. –Hemos dado con el sujeto al que inculpan… Pero…
-¿Pero…?
-Hace menos de una hora, otros colegas nos informaron que lo ubicaron, el problema es que este hombre estaba mal herido por dos disparos en la zona abdominal. Rachel se llevó las manos a la cabeza, ahora las cosas cada vez se ponían más retorcidas, y tal parecía que los amigos estaban cada vez más comprometidos por sus acciones. Hablaron dos o tres cosas más con los detectives, y estos se marcharon aclarándole que se presentaran todos ellos lo más pronto posible en la unidad de investigaciones de Lima. La judía voló a su casa para llamar a sus amigos, en tanto intentaba explicarle lo sucedido a Quinn.

Lentamente se fueron acercando al lugar donde habían sido citados. Enterarse que Erick había sido mal herido no era algo que pudieran creer. Solo rogaban que sobreviviera para que pueda pagar sus malos actos, la muerte seria una salida muy fácil. Santana se retocaba apenas el labial mirándose en el espejo de su auto. Había aprovechado para pasar a cortarle el cabello a su pequeño, y en medio de la peluquería su amiga actriz la llamó para avisarle las novedades.
-¡Ya para de maquillarte que estas bien así! Exclamó la judía metiendo su cabeza por la ventana del conductor, causando que la latina poco más y se parta la cabeza con el techo de su auto del salto que pegó por el susto.
-¡Maldita sea Berry, ustedes van a terminar matándome! Se quejo la morena llevándose una mano al pecho para saber si su corazón seguía latiendo. Sus amigas se reían negando con la cabeza. -¿Es necesario que sigas vistiéndote así…? Insinuó luego dándole una mirada a la actriz, que continuaba con su peluca rubia y los anteojos.
-Ahora más que nunca me da miedo que me reconozcan en la calle.
-Pero si nos presentamos ante los policías van a creer que ocultas algo; o que ¿Piensas que por ser actriz todos tus argumentos son validos? Se quejaba más atrás Quinn, sabiendo que su amiga apoyaría su discurso. –Nos mandan a llamar porque dudan de nuestras declaraciones, tenemos que ser nosotros mismos. Ya se que no ocultamos nada, ni tenemos la culpa, pero es mejor no darle que pensar. La latina solo asentía, en tanto Rachel hacia un puchero de fastidio, quitándose su disfraz.
-Si además sigues siendo fea con o sin disfraz. Se burló Santana esbozando una sonrisa picara.
-¿Yo fea…? ¿Quién oculta todo tras el maquillaje, huh?
-Yo no oculto nada solo resalto mi belleza natural.
-¿Y las ojeras no son parte de eso?
-Al menos puedo ocultarlas, no como tu y tu narizota. Para lo único bueno que te sirve es cuando te compras un hot dog en día de lluvia, porque te lo cubre entero y no se te moja.
-Ouch… Susurró Quinn entretenida con esa discusión, sosteniendo de la mano a Iker. Rachel había quedado con la boca abierta, tocándose su judía nariz, sin saber como continuar con la pelea. Santana sonrió con satisfacción, pocas veces la actriz se quedaba sin palabras.
-Ya tranquila… Hazme un favor y quédate ahí donde estas. Quizás puedo agarrar señal de wi fi...
Continuo bromeando la morena sacando su móvil y haciendo que rebuscaba entre las opciones.
-Mjm… Lopez: 2-Berry de Fabray: 0 Fomentaba para colmo la abogada ante la cara de molestia de su esposa. Acto seguido abrazó a su pequeña judía para que se calmara, en tanto Santana tomaba a Axel para bajar del auto. –Vamos que sabes que ella bromea… Le susurraba dándole un beso en la mejilla. –No seas enojona, quita esa cara. Ríe y el mundo reirá contigo…
-…Estornuda y adiós Lima. Cortó Santana soltando una fuerte carcajada. Inevitablemente su mejor amiga también comenzó a reír, chocando las palmas con la morena; cuando esas dos se aliaban podían ser un peligro jugando con las palabras.
-Bien, así quedamos. Murmuró la actriz apretando los dientes. Tomó a su hijo por la otra mano y caminó de manera molesta hasta la entrada de la unidad de investigaciones. Las chicas recobraban el aliento, les venia bien una cuota de humor.
-¡Vamos Rach!… ¡Todo tiene su lado bueno! ¡Debe ser hermoso despertarse y oler el café…. De Colombia!
-¡AL MENOS YO PUEDO TOMAR CAFÉ! Gritó desde lejos, girándose con una mirada asesina. La latina paró de reír cruzándose de cejas, hasta ahí llegaba el chiste. No se habían percatado que Finn y Brittany las escuchaban más atrás con una sonrisa. Casi se les olvido por un segundo la preocupación que los abarcaba.
-¿Bromeando con la nariz de Rach? Indago Finn con picardía, sus amigas asintieron inclinándose de hombros.
–Tengan cuidado con eso, una vez le dije un piropo de ese tipo y me vació un vaso de café caliente en los pantalones…
-¿Qué le dijiste? Se interesó Brittany, pidiendo con las manos que Axel fuera con ella.
-Nada… Bueno... paseábamos por el parque y ella miraba el paisaje y le dije que debían gustarle los pajaritos, para proporcionarles esa rama…
Entre risas los cuatro amigos entraron a la unidad, se venia un momento de seriedad.
La judía estaba sentada en las sillas del pasillo, cruzada de piernas. Su esposa se acomodó a su lado pero ella corrió la cara con molestia.
-Espero que no hayamos llegado tarde… Comento la castaña en tono ofendido.
-Tranquila a lo mucho explicamos que tu nariz ha llegado a la hora pero tú 15 minutos más tarde. Brittany y Finn se llevaron una mano a la boca tragándose una carcajada, Quinn y Santana no pudieron evitar reír escandalosamente de nuevo. La actriz se estaba poniendo roja de furia, pero fue interrumpida por el llamado de los detectives, que ya los esperaban en una oficina apartada de allí.
-Pueden dejar a los niños con una de las oficiales… Hablaba Malcom, al notar que Iker y Axel deambulaban por los pasillos, Kim se había quedado con la vecina de Finn.
-¿Y cree que voy a dejar a mi hijo con una desconocida? Yo paso.
-San estamos en uno de los lugares más seguros de Lima si no me equivoco… Susurraba entre dientes Finn, poniéndose atrás de su amiga latina. El agente levantó una ceja, le agradaba la personalidad imponente que exponía aquella morena desconocida para él, pero debía permanecer con su trabajo y con seriedad. Tras un breve lapso en que ubicaron alguna oficial que irradiara confianza, los cinco amigos se adentraron en la oficina. El compañero de Malcom los esperaba sentado tras un escritorio, el lugar estaba bien iluminado pero casi sin muebles. El detective que los había recibido cerró lentamente la puerta, una vez que Santana ingresó a la sala siguiendo a sus amigos.

Cuando todos se acomodaron, los policías pasaron a sacar sus dudas, una vez que escucharon la versión de los hechos. Los cinco amigos coincidían en que La Faberry habían sido golpeadas, y secuestradas en el departamento. Rachel había pedido ayuda y los otros tres fueron al rescate.
-¿Por qué no llamaron a la policía de inmediato para que se encargara del asunto?
-Escuche que hablaban, planeaban mantenernos allí encerradas hasta que Brittany apareciera. Si la amenazaban con matarnos… entonces ella no llamaría a la policía. Después cuando ya nos tenían atadas, aquella tipa dijo que tendría que hacernos desaparecer, si descubrían algo, irían presos… Yo… No sabia que pensar, supuse que irían rápido por Brittany… entonces la llame como un modo de avisarle. Tenia miedo, quería salir de allí, y le pedi que nos ayudara. Narraba la judía pensando claramente en sus acciones. Sus amigos la escuchaban sintiendo un escalofrió, tuvieron la suerte de no toparse con ellos. Los detectives anotaban todo con lujo de detalles, continuando con las preguntas.
-¿Qué pueden decir del dispositivo explosivo?
-Debía estar allí… Hablaba la bailarina. –Como entramos tan bruscamente seguramente pasamos a tirarlo y cuando me di cuenta estaba funcionando… Que yo sepa no lo estaba antes que llegáramos.
-Es cierto. Corroboraba la judía interrumpiendo de a ratos. -¿Es posible que se haya activado con un golpe?
-Si existen explosivos de esas características… Contestaba Andre asintiendo levemente.
-Escuche, no puedo dejar de pensar que dudan de nosotros. Pero tienen que creernos todo esto fue una emboscada, hay tipos peligrosos y nosotros no estamos dispuestos a vivir con miedo. Cortaba Quinn, notando la cara de los hombres que los interrogaban.
-Tranquila, gracias a sus declaraciones estamos dando en el clavo de algo importante. Comentaba Malcom. –Si es cierto que se los ha visto como sospechosos, pero todo tiene un margen de duda en estas cosas. Tenemos un informe de los colegas que estuvieron en la escena del hotel, donde hallaron a Erick Montez con dos disparos...
-¿Se encuentra bien…? Digo… ¿No se fue para el otro mundo sin pagar verdad? Preguntaba Finn con malestar.
-Esta internado en el hospital, por lo que se ve ya paso lo peor. Esperamos poder interrogarlo ni bien podamos y nos autoricen los médicos. Bien, en aquella habitación dieron con varios paquetes con sustancias ilegales… Sin contar una buena cantidad de objetos de dudosa procedencia… Continuaba explicando extendiéndole unas fotos para que contemplaran a que se referían. En su mayoría eran joyas u objetos valiosos. Santana levanto una ceja.
-¡Ese es mi dije! Se quejó tomando una de las fotos. –El maldito lo tuvo todo este tiempo…. Los policías la miraron con curiosidad. La latina miro a Brittany.
-Entonces no es que había encontrado esas cosas tiradas…
-No… Hablaban juntas ante la mirada descolocada del resto.
-Se las quería llevar y como lo encontré con el brazalete y la cadena en las manos me mintió… Deducía la rubia llevándose una mano a la frente. Le dolía ser tan ilusa y confiada algunas veces.
-Bueno como decía, también pudimos hayar algunas herramientas y anotaciones que puede haber utilizado para la creación de un dispositivo. Otros agentes se están encargando de eso…
-¿Y la otra persona...?
-Aun no tenemos grandes datos. Por lo que sabemos… Explicaba Andre, tomando una de sus libretas. -Una mujer, según sus declaraciones, cómplice de este tal Erick. El personal del hotel nos dio otros datos como que este hombre era visitado algunas veces por una muchacha, de no mas de treinta años, delgada, de cabello negro. Generalmente se la veía bastante cubierta. Hay algo que les llamó la atención y a nosotros: el móvil de Montez poseía gran cantidad de mensajes, cuyo destinatario era nada menos que Brittany.
-Es que el y yo… estábamos saliendo… pero claramente ya todo termino de la peor manera.
-Entiendo… Dime Brittany, ¿Desde que hora no permaneciste en tu casa hoy? La bailarina se quedó dubitativa ante esa pregunta. Los detectives la miraban fijo, haciendo que se incomodara.
-Yo… Desde las doce mas o menos… hasta las tres o un poco después…
-Vaya justamente en ese lapso, Erick fue mal herido por dos disparos.
-¿Y que con ello? ¿Acaso cree que ella tiene algo que ver? Se indignó automáticamente la abogada, tomando la palabra. Malcom detuvo su discurso con una seña de su mano.
-¿Me podrías decir por favor los lugares a los que fuiste?
-Esto es ridículo… Comentaba Santana por lo bajo. La holandesa movía los ojos con algo de vergüenza.
-Fui al hospital por mi moto, la había dejado allí desde hace unos días…
-Eso es cierto, yo la vi. Argumentaba la latina cruzándose de brazos.
-Después… Quería ir a la tienda de mascotas… Pero cambie de dirección… Sus amigos la miraron con curiosidad, su voz era un tanto temblorosa.
-¿A dónde fuiste...?
-No se si esta bien decirlo… Se inclinaba de hombros, dándole una mirada a Santana, que comenzaba a cambiar de cara por los gestos de aquella rubia.
-Necesitamos que lo digas. Explicaba Andre, expectante. La bailarina agachó la mirada.
-Quise arreglar algo…
-¿Algo…? Todos se estaban confundiendo, parecía una película de drama donde las cosas dan un giro inesperado.
-Si. Cortó finalmente con convicción. –Fui a la iglesia… Necesitaba pedir fuerzas, quería sentir que aun estoy protegida por los dioses..
-¿Y por qué dices que querías arreglar algo...?
-Es que desde hace tiempo le debíamos unas monedas a la virgen, nos salvó de una urgencia. Sonreía algo culpable, como si lo que contara fuera el peor de los crímenes. La latina suspiró aliviada, negando con la cabeza. No era posible que esas pizcas de inocencia nunca se le borraran a la rubia ojos de cielo.
-Dios Britt… Me asustaste. Se reía algo nerviosa. –Es verdad, admito que una vez le sacamos monedas y nunca se las repuse…
-¿Le robaron a la virgen? Se extraño Malcom, con aire divertido. Las chicas asintieron, no mentían y eso las mantenía tranquilas. Los policías compartieron una mirada de complicidad; parecía, en algunos momentos, que los tomaban en chiste.

Cerca de media hora después, dejaron que los amigos se marcharan. Ya habían intentado despejar sus dudas y no tenían otra opción que seguir investigando.
-Ojala que no tengamos que vivir asustados… Comentaba Quinn tomando del brazo a su esposa.
-Tranquilas, estamos intentando llegar al fondo de esto.
-Eso espero, aun tengo fe en el sistema del país.
-Cualquier cosa necesitamos que nos avisen de inmediato, nada de hacerse los súper héroes. Agregaba Andre desde la oficina. Las Faberry tomaron a su hijo y se marcharon a la salida. Malcom acompaño a Santana hasta donde se hallaba la oficial que cuidaba de Axel.
-Yo… ¿Peco de loco si te pido tú numero? Sonrió el detective de manera coqueta. La latina se giro viéndolo algo sorprendida.
-Tú ya me diste el tuyo, ya me quedo claro que si hay algo más que decir tendremos que llamarlos. Además… Comentó acercándose. –Tienen todos mis datos ya registrados… Sonrió mientras cargaba a Axel.
-Es cierto… Disculpa. Agregaba el hombre de manera nerviosa. La morena se entretenía viéndolo, además era buen mozo. Caminaron por el pasillo, Brittany y Finn los esperaban allí.
-Una última pregunta… ¿Te molestaría que te llame? Los amigos se cruzaron de cejas, lo único que les faltaba era que un agente con el libido hirviendo viniera a coquetearle a su amiga.
-San vamos. Cortó Finn haciéndole una seña para que se apresurara. La morena se percató de la presencia de ambos y cambio su cara, dándole una mirada a Malcom.
-No tengo tiempo para estas cosas… Concéntrate en tu trabajo. Dijo alejándose.
-Eres mala… Pero eso es sexy. Comento por atras el hombre, parado en el medio del pasillo. Brittany tomó del hombro a Santana, casi empujándola para que se marcharan de allí, aun con las cejas cruzadas. Finn le hizo una seña al detective señalándolo, y después mostrando que le cortaría el cuello si volvía a meterse con su amiga latina, obviamente en broma... O no...

Otros detectives, en el hospital de Lima, ingresaban a una habitación. Erick había despertado hacía un rato, y tenía las suficientes fuerzas para hablar, pero mantenía la boca cerrada.
-Así que Erick… Hablaba el detective acercándose hasta quedar al lado del castaño convaleciente. –Mira no vale la pena que hagas voto de silencio… Estas en graves problemas por tener toda esa droga en la habitación de un hotel. Hay personas que declararon en tu contra, y sabemos que tienes una cómplice en esto. Comienza a hablar muchacho… El profesor los miraba de manera molesta, sin mover ni un musculo. El otro agente se acercó tras intercambiar unas palabras con uno de los doctores.
-No esta en peligro de muerte, asique en breve podremos interrogarlo… Hay algo que quiero ver… Decia mientras levantaba las frazadas que cubrían el cuerpo del herido. Un tatuaje en su pierna derecha hizo que los investigadores levantaran modestamente una ceja.
-Vaya, vaya… Esto se pone bueno… Tendremos mucho de que charlar. Sonreía con ironía el detective más viejo. –Pero empecemos por lo básico… ¿Cómo fue que te hirieron? Tras un breve lapso de silencio, Erick finalmente no pudo más. Había ocurrido todo en la habitación del hotel, y jamás pensó que aquella chica seria capaz de hacerle daño de esa forma.
-La que ustedes dicen que es mi cómplice… Ella me disparó. Creyó que podía matarme, pero aquí estoy…
-Queremos más detalles Erick… ¿Cuál es su nombre?
-Tiene muchos… Podrían encontrarla aun, si es que ya no se escapo en un avión… Es rápida de pensamiento, pero como se vieron frustrados muchos de sus planes… Se desquito conmigo.
-Dinos su nombre…
-Samanta Linker, con ese nombre se maneja en sus documentos. Obviamente son falsos. Es alta, ojos azules, cabello negro, es muy fácil identificarla: tiene una cicatriz en su mejilla derecha.
Entre ambos se habían traicionado: él había quedado herido por querer escapar con toda la mercancía. Ella estaba cegada, el plan de matar a Brittany no resultó y para colmo el lugar donde permanecía parte de sus productos y el dispositivo para robar más cosas, explotó. Lucharon,y ella sin más remedio le disparó. Creyendo que lo había matado huyó a toda velocidad. Debían encontrarla, aun tenia un arma, y era peligrosa cuando ya no le importaba nada.

que buen capituloo ojala actualices prontoo!!

jajajaja que tierna Britt con lo de las monedas!!!.. :D.. Y le dio un beso en la mejilla, bueno, se estan acercando, primero le toco la mano, despues la abrazo ahora un beso, bien, de a poco va la cosa.. ¬¬.. jajajajja.. Dale, genial, se acerca Brittana entonces!!!.. Confio y q vas a escribir un re cap!!!. :D

Beso.. Cuidate.. :D..

Que linda britt con eso de que tenia que arreglar unas cosas, yo hasta ya estaba pensando mal, jaja, me alegra que ya se estén aclarando un
poco las cosas, pero quien es esa mujer? al menos ya nos diste el nombre xD..

Nos leemos en la próxima chao.

Exlente cap. Me re gusto!. :). Pero espero que no haya mas drma, aunque se acerc aas todavia no?. ¬¬ jejejejejje. El detective tirandole onda a santana y Heather celosa. e.e. Si, Brittana is on!. :P. Eso me pone feliz, pero no me molestaria qeus ebesen o algo eh! Aviso por las duas (?

Ahora, no te hagas drama, que mi amiga tiene una casa en Barilo y vamos de vez en cuando, y siempre viajamos en avion, asi que puedo ir a lincharte si no me gusta algo de tu Fic!. Estas advertida. jejeje. Y ahora que se que vivis alla. Es verdad que cerraron By Pass? O_O Yo fui hace como 2 meses y estaba abierto, pero me dijeron que la semana pasada estaba cerrado! Decime que No!. Amo ese bolcihe, soy habitue e.e. ejejejeje.

Besote. Cuidate!.