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[Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
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micky morales
JVM
Daniela Gutierrez
3:)
8 participantes
Página 3 de 7.
Página 3 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Jajajajajajaja pues San no duro mucho ignorando a Britt, pero quien podría y mas viéndola de esa forma en el bar :3
Y bueno espero que sepa aprovechar muyyyyy bien esa noche.... Aunque no creo que sea la última mas bien creó es el comienzo de algo jajajajaja.
Y bueno espero que sepa aprovechar muyyyyy bien esa noche.... Aunque no creo que sea la última mas bien creó es el comienzo de algo jajajajaja.
JVM- - Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
3:) escribió:Hola morra....
Y se hizo la luz jajaja...
Al fin san se salio con la suya... "Solo una noche"???...
Ya era imposible que se mantuvieran ignorándose y micho menos las horas de gym iban a ayudar!!!
Quiero el otro caso ya!!!
Nos vemos!!!
Hola lu, jajajajajaa xfin! jajajajajaja. Jaajajajajaj, como dije el que la sigue la consigue jajajajajajaja. Obvio q era imposible, osea es el efecto que causan en la otra jajajaja, eso parece jajajajaja. Aquí el siguiente! ajajaja. Saludos =D
micky morales escribió:Por Dios, por todas las animas en pena, no me preocupa que pasen la noche, lo que me preocupa es lo que pasara despues!!!!
Hola, jajajajajajajajajajajajajaj, no¿? aaaaa jajajajaja que razón tienes jajajaja. Saludos =D
JVM escribió:Jajajajajajaja pues San no duro mucho ignorando a Britt, pero quien podría y mas viéndola de esa forma en el bar :3
Y bueno espero que sepa aprovechar muyyyyy bien esa noche.... Aunque no creo que sea la última mas bien creó es el comienzo de algo jajajajaja.
Hola, jajajajaja esk igual es difícil, no¿? xD eso mismo digo, eso mismo digo yo jajajajajajaja. Si que ai que aprovecharla, como dices tu... espero y si lo hagan jajajajaja. Espero y tengas razón jajajaja. Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Cap 13
Capitulo 13
El silencio se hace entre las dos, ninguna sabe muy bien qué hacer. Hasta que tomo la iniciativa.
―Bien, me despido de Sam y…
―No, espera―dice y por un momento creo que se ha arrepentido de irse conmigo―¿Traes auto?
Maldición, yo y mi manía de dejar todo para mañana. Apenas puse un pie en esta ciudad debería haberme comprado un auto.
―No―digo apenada―, Vine en el auto con Sam.
―Bueno, haremos lo siguiente: voy a salir primero y me despediré de mis amigos. Voy por mi auto y te espero dentro de diez minutos en el estacionamiento. Ahora voy, espera un poco para salir―se separa de mi para encaminarse por el pasillo y llegar hasta donde sus acompañantes.
Yo espero unos segundos antes de salir y me dirijo hasta donde están Sam y Kitty. En mi paso me obligo a no mirar en la dirección donde está Brittany.
Llego a mi lugar, me siento en el sofá y comienzo a beber un trago. Kitty se alegra de que haya vuelto a su lado, Sam por el contrario ni siquiera ha notado mi presencia ya que, la mujer que está a su lado, roba toda su atención.
Me empiezo a inquietar y comienzo a mover una pierna en claro síntoma de nerviosismo. De reojo miro que Brittany se está despidiendo de sus amigos y comienza a hacer su retirada del lugar. La veo desparecer del club y disimuladamente miro el reloj en mi muñeca para contar diez minutos.
Siento como que el tiempo no pasara nunca, me está volviendo loca esta espera.
Doy otro largo sorbo a mi trago y vuelvo a mirar mi reloj. Kitty que, me ha estado observando todo el tiempo, de pronto me pregunta:
―¿Qué pasa San?
―Nada ¿Por qué?
―Porque desde que volviste del baño no has hablado ni una sola palabra y además estás mirando tu reloj cada medio segundo.
Vaya con Kitty, me ha estudiado hasta el último de los movimientos. No quiero responder a sus preguntas, solo quiero largarme de este lugar en este preciso momento.
―Me voy―digo y me levanto de un salto.
―¿Cómo que te vas? No puedes irte, recién llegamos. No puedes dejarme sola.
Escucho a Kitty despotricar, sé que está enojada. Ella no esperaba que esto pasara esta noche y tengo que confesar que yo tampoco esperaba tener tanta suerte con Brittany.
Hace unos días solo quería alejarme de ella, no quería seguir rogándole, pero todo eso se fue a la mierda solo con un beso de ella.
No digo nada más a Kitty, me acerco a Sam y le digo lo mismo que a su hermana:
―Me voy.
―¿Y con quién?―pregunta con una sonrisa ladina.
―Sola.
―No te creo.
―Entonces no me creas―y girándome sobre mis talones me alejo de ese lugar.
Acelero el paso hasta llegar a la salida y al mirar nuevamente mi reloj me doy cuenta que ya han pasado exactamente diez minutos. Llego al estacionamiento con una puntualidad Inglesa.
Miro a un lado y al otro y solo veo autos y más autos.
¡Pero que imbécil soy!
Tan estúpida me puso Brittany que no se me ocurrió preguntarle por la marca de su auto.
Voy caminado por entre los vehículos, mirando dentro de ellos y rogando porque la Diabla no se haya ido.
De pronto veo que un Citroen DS 3 color plata parpadea las luces y suelto un gran suspiro de alivio. Ahí, detrás del volante está ella esperándome. Llego a toda prisa hasta el auto, abro la puerta del copiloto y me subo.
―Hola―digo sonriendo.
―Hola―responde―, ¿Lista para irnos?
Yo muevo la cabeza en forma afirmativa y ella pone en marcha el motor para salir del estacionamiento.
Brittany se mete en el tráfico de la ciudad y acelera el auto. Yo la miro embelesada. Vestida con ese corto vestido negro tras el volante y con esos altísimos tacones me ponen a mil, que digo a mil, me ponen a un millón.
Continuamos en silencio, ninguna de las dos ha abierto la boca, hasta que le pregunto:
―¿A dónde me llevas Brittany?
Sonríe pícara y me dice:
―Pero qué preguntona eres, ¿siempre eres tan curiosa?
―Generalmente no, porque sé a qué atenerme, pero contigo tengo que estar alerta ya que siempre me sales con alguna sorpresa.
Me mira rápidamente y se sonroja, luego vuelve la vista al camino y no dice nada. La curiosidad me mata y le vuelvo a preguntar:
―¿No me vas a decir a dónde vamos?
―Tranquila San, no soy una asesina en serie. Así es que no temas que no vas a aparecer en las noticias de mañana.
Yo sonrío por lo que dice, esta es la Brittany agradable, la Brittany que me excita más aún. La Brittany liberada, no la seria profesional que trabaja en el Holding.
Luego de media hora llegamos a un edificio de departamentos y me doy cuenta que Brittany me ha traído hasta su casa. Llegamos hasta el estacionamiento, nos bajamos del auto y comienza a caminar hasta el ascensor y yo la sigo.
Sin decir ni media palabra entramos en el ascensor y presiona el número cuatro en el tablero, las puertas de acero se cierran y el aparato comienza a subir hasta el piso indicado.
Nos miramos, ninguna de las dos dice nada.
Ella con sus claros y brillantes ojos recorre mi cara y me entra la tentación de poseerla ahí mismo, pero debo calmarme, quiero tener a Brittany por entero para mí, en una cama y disfrutar de ella lentamente.
El ascensor se detiene en nuestro destino y ambas salimos de prisa desde el cubículo.
Yo sigo a Brittany hasta donde sea que me lleve.
Siempre es así, yo la sigo sin chistar y no sé porqué el pensamiento de que eso me traerá problemas en el futuro se cuela en mi cabeza.
Llegamos frente a la puerta de su departamento, y yo entro tras ella. El lugar es espacioso y está todo decorado en tonos claros. Todo está muy ordenado, nada fuera de lugar, no podía esperar menos de la estructurada Brittany.
―¿Deseas algo de beber?―pregunta y veo que comienza a quitarse la chaqueta que lleva puesta y queda ante mí solo con el corto y ajustado vestido negro.
―No gracias―me paro frente a ella.
Brittany entre abre la boca y noto que está nerviosa, yo no estoy mejor ya que me siento como una adolecente a la que van a besar por primer vez.
Me acerco más a ella, ya no hay especio entre nosotras. Con mis manos empiezo a recorrer delicadamente sus brazos desnudos. Llego hasta sus hombros y mis manos rápidamente toman su cara entre ellas. La vuelvo a mirar dilatando más de lo que quisiera el momento.
Prometí que después de esta noche me olvidaría de ella, que ya no la perseguiría más, por eso deseo hacer esto lento, con calma y disfrutar cada centímetro de la piel de esta mujer.
Llego a sus labios, pero no la beso, a cambio saco mi lengua y la paso por el labio inferior de mi Diabla. Ella suelta un jadeo, sé que desea que la bese con pasión, pero la haré esperar un poco más por ese beso que, al igual que ella, deseo con locura.
Dejo su boca y llego a su mentón, lo chupo y luego de doy un delicado mordisco y comienzo subir por su mandíbula repartiendo suaves besos y mordiscos hasta llegar a su oreja para succionarle el lóbulo y siento que se estremece.
Luego viajo hasta su cuello, con mi nariz lo acaricio y me permito disfrutar del exquisito y excitante perfume de Brittany. Siento que mete las manos bajo mi camiseta y comienza a subirlas y a bajarla por mi espalda. La pego más a mí, manteniendo una mano en su nuca mientras que la otra ya está en su cintura.
Ya no aguanto más, deseo tanto a esta mujer que, si no estoy con ella pronto, voy a enloquecer. Sé que dije que iría despacio, pero la noche recién empieza y tendré tiempo de sobra para recorrer su piel de todas las formas posibles.
La beso apasionadamente y me responde de igual forma.
¿Qué tiene ella que con un solo beso me hace perder la cabeza?
Me obligo a separarme y le pregunto:
―¿Dónde está tu dormitorio?―mi respiración está agitada mezcla de la excitación y el deseo que me consumen.
―Al final del pasi…
No la dejo terminar la frase, la levanto del piso y me la llevo entre mis brazos.
―¡¡¡San, bájame!!!―grita, pero es un grito divertido, está más que disfrutando de la situación.
―No―digo―, No te bajaré hasta que lleguemos a tu cama.
Y comienzo a caminar lo más rápido que puedo por el pasillo hasta llegar a su dormitorio.
Abro la puerta, entro y recorro con mis ojos la habitación de Brittany que, al igual que el resto del departamento, está decorado con colores claros y luce muy ordenado.
Dejo a Brittany sobre sus pies y quedamos frente a frente. Con mi dedo pulgar recorro su labio inferior y siento en la piel de mi dedo su respiración excitada.
Me acerco a besarla, solo es un beso rápido y la giro para encontrar el cierre de su vestido y comienzo a bajarlo lentamente. Deslizo la tela del vestido hasta su cintura, me acerco más a ella y con mi mano tomo el cabello que cubre su cuello, lo levanto y le doy un suave mordisco en la nuca. Brittany tiembla por ese contacto, luego termino la tarea de quitarle por completo el vestido y lo dejo caer a sus pies.
Ante mis ojos tengo a mi Diabla vestida solo en un conjunto de lencería de encaje en color negro.
Juro que quiero ir lento para disfrutarla, pero esta diosa que tengo frente a mí, hace que mi instinto animal salga a flote y me grita que la posea ya.
Ella se gira y se acerca para besarme profundamente. Con sus manos toma el dobladillo de mi camiseta y comienza a subirla hasta que me la quita. De prisa me quito los zapatos, me desabrocho el jeans y me lo saco quedando vestida igual que ella, solo con ropa interior.
Vuelvo a besarla y la arrastro conmigo para caer juntas en la cama.
Estoy sobre ella y dejo su boca para recorrer a besos desde su cuello hasta su vientre.
Su piel es suave y tiene un perfume sensual.
Vuelvo a su boca, me hace girar y así puede quedar sobre mí. Esta será una lucha de poderes, aunque debo confesar que tenerla sobre mí es una de mis posturas favoritas.
Me besa la mandíbula hasta que llega a mi cuello y es ahí cuando yo pierdo la cabeza. El cuello siempre ha sido mi punto débil, que me besen ahí me hace perder el sentido.
Llevo mis manos a su espalda y en un solo movimiento le quito el brasier y aunque me gusta verla sobre mí, la tomo por sorpresa y la hago girar para que ella vuelva a quedar bajo mi cuerpo.
No aguanto más, e inmediatamente me quito el braiser y las bragas. Reparto muchos besos en los senos de Brittany y hago que ella gima y se arquee de placer cuando con mi boca tomo uno de sus pezones.
―Diabla, ya no aguanto más, te deseo demasiado.
No responde nada solo escucho su respiración entrecortada, jadeando, como si le faltara el aire.
Y sin pensarlo más, sin dar más alargues, me acomodo entre sus piernas y uno nuestros centros en la mujer que me ha vuelto loca todos estos días.
Estoy unida a la mujer que deseo más que a cualquier cosa sobre la tierra.
―¡San!―gime con esa voz ronquita que es como si estuviera disfónica.
―Britt―es todo lo que puedo responder y cierro los ojos por el estremecimiento que me recorre el cuerpo debido al placer que siento.
Vuelvo a ocuparme de sus senos y ella entierra sus uñas en mi espalda. De seguro mañana tendré unas lindas marcas de guerra. Ahora llego a su boca mientras me muevo.
Brittany me encuentra con sus caderas y yo me vuelvo loca.
Quería hacerlo lento, pero no puedo y comienzo a aumentar el ritmo de mis movimientos. Ella envuelve mi cintura con sus piernas, así todo es más profundo y ya estamos pérdidas, tan cerca de tocar el cielo.
Siento que ella comienza a tensarse bajo mi cuerpo. Unos segundos después ella gime mi nombre en medio de un orgasmo del que está siendo presa.
Me sigo moviendo, yo también quiero alcanzar la gloria y estoy muy cerca de logarlo.
La beso una vez más y poso mi boca en su hombro, le doy un mordisco, no tan fuerte, pero de seguro le quedará una marca recordándole esta noche de pasión.
Y gimiendo me dejo ir envuelta en esta maravillosa sensación de estar con Brittany y llegar al orgasmo.
Me quedo sobre ella por un momento con mi corazón bombeando a mil, con mi boca besando el hombro que he mordido antes.
Beso los labios de mi Diabla con un beso suave y me separo de ella, aunque no quiera. Me giro sobre la cama y caigo de espaldas satisfecha.
De pronto veo que Brittany se incorpora en la cama y en un rápido movimiento se levanta y comienza a caminar en dirección al closet.
―¿Qué haces?―pregunto curiosa mientras veo que saca desde el armario una bata de seda de color negro.
―Voy a tomar una ducha―dice y siento que su voz ahora es seria.
―¿Quieres que te acompañe?―digo haciéndole una clara invitación a pasar un buen momento en la ducha.
―No―dice y me mira a los ojos fijamente con una fría expresión―, Quiero que te vayas.
Yo me siento de golpe en la cama al escuchar lo que me ha dicho como si nada.
―¡¿Qué?!―pregunto realmente asombrada por la situación que estoy viviendo.
―Lo que escuchaste. Voy ducharme y cuando vuelva no quiero verte aquí.
―¿Pero qué te pasa Brittany? ¿Por qué actúas así?
―Santana, ya conseguiste lo que querías. Ahora vete, no quiero que estés en mi cama cuando vuelva.
No sé qué pensar.
Ella está realmente loca o tal vez soy yo la loca de remate por perseguir a esta mujer impredecible. Debería haber supuesto que Brittany me saldría con alguna sorpresa, siempre es así.
Me levanto de la cama y con rabia comienzo a vestirme.
―Realmente no entiendo qué pasa contigo Brittany, juro que trato de entenderte, pero no lo logro.
―¿Qué pretendías? ¿Pasar la noche conmigo?
―¡Claro! ¿Tú no?
―No―dice tan segura que me abruma.
Una vez que estoy lista me acerco a ella, muy cerca de su cara, la miro una vez más y le digo:
―¡Me vas a volver loca rubia!
―San…
―Realmente no te entiendo Brittany, pero, ¿sabes qué? Por mi puedes irte a la misma mierda.
Veo en sus ojos cómo quiere tirarme algo por la cabeza, pero la dejo con las ganas, porque salgo a toda velocidad de la habitación y de ese departamento.
Llego a la calle y pido al cielo encontrar pronto un taxi.
Aún estoy sorprendida por la insólita situación que viví hace un minuto atrás.
Media hora de espera después encuentro un taxi y este me lleva a casa.
Subo a mi dormitorio y corro hasta la ducha. Necesito sentir el agua sobre mi cabeza a ver si así la rabia que siento correr por mis venas disminuye un poco.
¿Qué se ha creído esa bruja de ojos azules de Brittany?
No logro entender su forma de actuar esta noche.
Si bien tengo rabia por cómo me echó de su casa, no me puedo quejar, obtuve lo que llevaba días deseando de ella.
Tuve sexo con Brittany y ahora sí podré olvidarme de ella para siempre.
Ahora estoy lista para que pase la siguiente.
―Bien, me despido de Sam y…
―No, espera―dice y por un momento creo que se ha arrepentido de irse conmigo―¿Traes auto?
Maldición, yo y mi manía de dejar todo para mañana. Apenas puse un pie en esta ciudad debería haberme comprado un auto.
―No―digo apenada―, Vine en el auto con Sam.
―Bueno, haremos lo siguiente: voy a salir primero y me despediré de mis amigos. Voy por mi auto y te espero dentro de diez minutos en el estacionamiento. Ahora voy, espera un poco para salir―se separa de mi para encaminarse por el pasillo y llegar hasta donde sus acompañantes.
Yo espero unos segundos antes de salir y me dirijo hasta donde están Sam y Kitty. En mi paso me obligo a no mirar en la dirección donde está Brittany.
Llego a mi lugar, me siento en el sofá y comienzo a beber un trago. Kitty se alegra de que haya vuelto a su lado, Sam por el contrario ni siquiera ha notado mi presencia ya que, la mujer que está a su lado, roba toda su atención.
Me empiezo a inquietar y comienzo a mover una pierna en claro síntoma de nerviosismo. De reojo miro que Brittany se está despidiendo de sus amigos y comienza a hacer su retirada del lugar. La veo desparecer del club y disimuladamente miro el reloj en mi muñeca para contar diez minutos.
Siento como que el tiempo no pasara nunca, me está volviendo loca esta espera.
Doy otro largo sorbo a mi trago y vuelvo a mirar mi reloj. Kitty que, me ha estado observando todo el tiempo, de pronto me pregunta:
―¿Qué pasa San?
―Nada ¿Por qué?
―Porque desde que volviste del baño no has hablado ni una sola palabra y además estás mirando tu reloj cada medio segundo.
Vaya con Kitty, me ha estudiado hasta el último de los movimientos. No quiero responder a sus preguntas, solo quiero largarme de este lugar en este preciso momento.
―Me voy―digo y me levanto de un salto.
―¿Cómo que te vas? No puedes irte, recién llegamos. No puedes dejarme sola.
Escucho a Kitty despotricar, sé que está enojada. Ella no esperaba que esto pasara esta noche y tengo que confesar que yo tampoco esperaba tener tanta suerte con Brittany.
Hace unos días solo quería alejarme de ella, no quería seguir rogándole, pero todo eso se fue a la mierda solo con un beso de ella.
No digo nada más a Kitty, me acerco a Sam y le digo lo mismo que a su hermana:
―Me voy.
―¿Y con quién?―pregunta con una sonrisa ladina.
―Sola.
―No te creo.
―Entonces no me creas―y girándome sobre mis talones me alejo de ese lugar.
Acelero el paso hasta llegar a la salida y al mirar nuevamente mi reloj me doy cuenta que ya han pasado exactamente diez minutos. Llego al estacionamiento con una puntualidad Inglesa.
Miro a un lado y al otro y solo veo autos y más autos.
¡Pero que imbécil soy!
Tan estúpida me puso Brittany que no se me ocurrió preguntarle por la marca de su auto.
Voy caminado por entre los vehículos, mirando dentro de ellos y rogando porque la Diabla no se haya ido.
De pronto veo que un Citroen DS 3 color plata parpadea las luces y suelto un gran suspiro de alivio. Ahí, detrás del volante está ella esperándome. Llego a toda prisa hasta el auto, abro la puerta del copiloto y me subo.
―Hola―digo sonriendo.
―Hola―responde―, ¿Lista para irnos?
Yo muevo la cabeza en forma afirmativa y ella pone en marcha el motor para salir del estacionamiento.
Brittany se mete en el tráfico de la ciudad y acelera el auto. Yo la miro embelesada. Vestida con ese corto vestido negro tras el volante y con esos altísimos tacones me ponen a mil, que digo a mil, me ponen a un millón.
Continuamos en silencio, ninguna de las dos ha abierto la boca, hasta que le pregunto:
―¿A dónde me llevas Brittany?
Sonríe pícara y me dice:
―Pero qué preguntona eres, ¿siempre eres tan curiosa?
―Generalmente no, porque sé a qué atenerme, pero contigo tengo que estar alerta ya que siempre me sales con alguna sorpresa.
Me mira rápidamente y se sonroja, luego vuelve la vista al camino y no dice nada. La curiosidad me mata y le vuelvo a preguntar:
―¿No me vas a decir a dónde vamos?
―Tranquila San, no soy una asesina en serie. Así es que no temas que no vas a aparecer en las noticias de mañana.
Yo sonrío por lo que dice, esta es la Brittany agradable, la Brittany que me excita más aún. La Brittany liberada, no la seria profesional que trabaja en el Holding.
Luego de media hora llegamos a un edificio de departamentos y me doy cuenta que Brittany me ha traído hasta su casa. Llegamos hasta el estacionamiento, nos bajamos del auto y comienza a caminar hasta el ascensor y yo la sigo.
Sin decir ni media palabra entramos en el ascensor y presiona el número cuatro en el tablero, las puertas de acero se cierran y el aparato comienza a subir hasta el piso indicado.
Nos miramos, ninguna de las dos dice nada.
Ella con sus claros y brillantes ojos recorre mi cara y me entra la tentación de poseerla ahí mismo, pero debo calmarme, quiero tener a Brittany por entero para mí, en una cama y disfrutar de ella lentamente.
El ascensor se detiene en nuestro destino y ambas salimos de prisa desde el cubículo.
Yo sigo a Brittany hasta donde sea que me lleve.
Siempre es así, yo la sigo sin chistar y no sé porqué el pensamiento de que eso me traerá problemas en el futuro se cuela en mi cabeza.
Llegamos frente a la puerta de su departamento, y yo entro tras ella. El lugar es espacioso y está todo decorado en tonos claros. Todo está muy ordenado, nada fuera de lugar, no podía esperar menos de la estructurada Brittany.
―¿Deseas algo de beber?―pregunta y veo que comienza a quitarse la chaqueta que lleva puesta y queda ante mí solo con el corto y ajustado vestido negro.
―No gracias―me paro frente a ella.
Brittany entre abre la boca y noto que está nerviosa, yo no estoy mejor ya que me siento como una adolecente a la que van a besar por primer vez.
Me acerco más a ella, ya no hay especio entre nosotras. Con mis manos empiezo a recorrer delicadamente sus brazos desnudos. Llego hasta sus hombros y mis manos rápidamente toman su cara entre ellas. La vuelvo a mirar dilatando más de lo que quisiera el momento.
Prometí que después de esta noche me olvidaría de ella, que ya no la perseguiría más, por eso deseo hacer esto lento, con calma y disfrutar cada centímetro de la piel de esta mujer.
Llego a sus labios, pero no la beso, a cambio saco mi lengua y la paso por el labio inferior de mi Diabla. Ella suelta un jadeo, sé que desea que la bese con pasión, pero la haré esperar un poco más por ese beso que, al igual que ella, deseo con locura.
Dejo su boca y llego a su mentón, lo chupo y luego de doy un delicado mordisco y comienzo subir por su mandíbula repartiendo suaves besos y mordiscos hasta llegar a su oreja para succionarle el lóbulo y siento que se estremece.
Luego viajo hasta su cuello, con mi nariz lo acaricio y me permito disfrutar del exquisito y excitante perfume de Brittany. Siento que mete las manos bajo mi camiseta y comienza a subirlas y a bajarla por mi espalda. La pego más a mí, manteniendo una mano en su nuca mientras que la otra ya está en su cintura.
Ya no aguanto más, deseo tanto a esta mujer que, si no estoy con ella pronto, voy a enloquecer. Sé que dije que iría despacio, pero la noche recién empieza y tendré tiempo de sobra para recorrer su piel de todas las formas posibles.
La beso apasionadamente y me responde de igual forma.
¿Qué tiene ella que con un solo beso me hace perder la cabeza?
Me obligo a separarme y le pregunto:
―¿Dónde está tu dormitorio?―mi respiración está agitada mezcla de la excitación y el deseo que me consumen.
―Al final del pasi…
No la dejo terminar la frase, la levanto del piso y me la llevo entre mis brazos.
―¡¡¡San, bájame!!!―grita, pero es un grito divertido, está más que disfrutando de la situación.
―No―digo―, No te bajaré hasta que lleguemos a tu cama.
Y comienzo a caminar lo más rápido que puedo por el pasillo hasta llegar a su dormitorio.
Abro la puerta, entro y recorro con mis ojos la habitación de Brittany que, al igual que el resto del departamento, está decorado con colores claros y luce muy ordenado.
Dejo a Brittany sobre sus pies y quedamos frente a frente. Con mi dedo pulgar recorro su labio inferior y siento en la piel de mi dedo su respiración excitada.
Me acerco a besarla, solo es un beso rápido y la giro para encontrar el cierre de su vestido y comienzo a bajarlo lentamente. Deslizo la tela del vestido hasta su cintura, me acerco más a ella y con mi mano tomo el cabello que cubre su cuello, lo levanto y le doy un suave mordisco en la nuca. Brittany tiembla por ese contacto, luego termino la tarea de quitarle por completo el vestido y lo dejo caer a sus pies.
Ante mis ojos tengo a mi Diabla vestida solo en un conjunto de lencería de encaje en color negro.
Juro que quiero ir lento para disfrutarla, pero esta diosa que tengo frente a mí, hace que mi instinto animal salga a flote y me grita que la posea ya.
Ella se gira y se acerca para besarme profundamente. Con sus manos toma el dobladillo de mi camiseta y comienza a subirla hasta que me la quita. De prisa me quito los zapatos, me desabrocho el jeans y me lo saco quedando vestida igual que ella, solo con ropa interior.
Vuelvo a besarla y la arrastro conmigo para caer juntas en la cama.
Estoy sobre ella y dejo su boca para recorrer a besos desde su cuello hasta su vientre.
Su piel es suave y tiene un perfume sensual.
Vuelvo a su boca, me hace girar y así puede quedar sobre mí. Esta será una lucha de poderes, aunque debo confesar que tenerla sobre mí es una de mis posturas favoritas.
Me besa la mandíbula hasta que llega a mi cuello y es ahí cuando yo pierdo la cabeza. El cuello siempre ha sido mi punto débil, que me besen ahí me hace perder el sentido.
Llevo mis manos a su espalda y en un solo movimiento le quito el brasier y aunque me gusta verla sobre mí, la tomo por sorpresa y la hago girar para que ella vuelva a quedar bajo mi cuerpo.
No aguanto más, e inmediatamente me quito el braiser y las bragas. Reparto muchos besos en los senos de Brittany y hago que ella gima y se arquee de placer cuando con mi boca tomo uno de sus pezones.
―Diabla, ya no aguanto más, te deseo demasiado.
No responde nada solo escucho su respiración entrecortada, jadeando, como si le faltara el aire.
Y sin pensarlo más, sin dar más alargues, me acomodo entre sus piernas y uno nuestros centros en la mujer que me ha vuelto loca todos estos días.
Estoy unida a la mujer que deseo más que a cualquier cosa sobre la tierra.
―¡San!―gime con esa voz ronquita que es como si estuviera disfónica.
―Britt―es todo lo que puedo responder y cierro los ojos por el estremecimiento que me recorre el cuerpo debido al placer que siento.
Vuelvo a ocuparme de sus senos y ella entierra sus uñas en mi espalda. De seguro mañana tendré unas lindas marcas de guerra. Ahora llego a su boca mientras me muevo.
Brittany me encuentra con sus caderas y yo me vuelvo loca.
Quería hacerlo lento, pero no puedo y comienzo a aumentar el ritmo de mis movimientos. Ella envuelve mi cintura con sus piernas, así todo es más profundo y ya estamos pérdidas, tan cerca de tocar el cielo.
Siento que ella comienza a tensarse bajo mi cuerpo. Unos segundos después ella gime mi nombre en medio de un orgasmo del que está siendo presa.
Me sigo moviendo, yo también quiero alcanzar la gloria y estoy muy cerca de logarlo.
La beso una vez más y poso mi boca en su hombro, le doy un mordisco, no tan fuerte, pero de seguro le quedará una marca recordándole esta noche de pasión.
Y gimiendo me dejo ir envuelta en esta maravillosa sensación de estar con Brittany y llegar al orgasmo.
Me quedo sobre ella por un momento con mi corazón bombeando a mil, con mi boca besando el hombro que he mordido antes.
Beso los labios de mi Diabla con un beso suave y me separo de ella, aunque no quiera. Me giro sobre la cama y caigo de espaldas satisfecha.
De pronto veo que Brittany se incorpora en la cama y en un rápido movimiento se levanta y comienza a caminar en dirección al closet.
―¿Qué haces?―pregunto curiosa mientras veo que saca desde el armario una bata de seda de color negro.
―Voy a tomar una ducha―dice y siento que su voz ahora es seria.
―¿Quieres que te acompañe?―digo haciéndole una clara invitación a pasar un buen momento en la ducha.
―No―dice y me mira a los ojos fijamente con una fría expresión―, Quiero que te vayas.
Yo me siento de golpe en la cama al escuchar lo que me ha dicho como si nada.
―¡¿Qué?!―pregunto realmente asombrada por la situación que estoy viviendo.
―Lo que escuchaste. Voy ducharme y cuando vuelva no quiero verte aquí.
―¿Pero qué te pasa Brittany? ¿Por qué actúas así?
―Santana, ya conseguiste lo que querías. Ahora vete, no quiero que estés en mi cama cuando vuelva.
No sé qué pensar.
Ella está realmente loca o tal vez soy yo la loca de remate por perseguir a esta mujer impredecible. Debería haber supuesto que Brittany me saldría con alguna sorpresa, siempre es así.
Me levanto de la cama y con rabia comienzo a vestirme.
―Realmente no entiendo qué pasa contigo Brittany, juro que trato de entenderte, pero no lo logro.
―¿Qué pretendías? ¿Pasar la noche conmigo?
―¡Claro! ¿Tú no?
―No―dice tan segura que me abruma.
Una vez que estoy lista me acerco a ella, muy cerca de su cara, la miro una vez más y le digo:
―¡Me vas a volver loca rubia!
―San…
―Realmente no te entiendo Brittany, pero, ¿sabes qué? Por mi puedes irte a la misma mierda.
Veo en sus ojos cómo quiere tirarme algo por la cabeza, pero la dejo con las ganas, porque salgo a toda velocidad de la habitación y de ese departamento.
Llego a la calle y pido al cielo encontrar pronto un taxi.
Aún estoy sorprendida por la insólita situación que viví hace un minuto atrás.
Media hora de espera después encuentro un taxi y este me lleva a casa.
Subo a mi dormitorio y corro hasta la ducha. Necesito sentir el agua sobre mi cabeza a ver si así la rabia que siento correr por mis venas disminuye un poco.
¿Qué se ha creído esa bruja de ojos azules de Brittany?
No logro entender su forma de actuar esta noche.
Si bien tengo rabia por cómo me echó de su casa, no me puedo quejar, obtuve lo que llevaba días deseando de ella.
Tuve sexo con Brittany y ahora sí podré olvidarme de ella para siempre.
Ahora estoy lista para que pase la siguiente.
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Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
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23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hasta yo estoy cabreada!!!! que se ha creido Brittany, de verdad siento que la odio un poco, trato a san como basura, "ya obtuve satisfaccion, ahora largate" a ver como van las cosas ahora, pq creo que esta vez y a pesar de su obsecion san no se va a olvidar de esto tan facilmente!!!!
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hola morra....
Que a san se le haya calado bien duro lo que siente por britt y no lo sepa controlar y britt si aunque se este muriendo no va a seder... Es mas pesado lo de su madre!!!! Para mala suerte de san!
Bueno san tubo su noche y nada mas... No se prometieron amor eterno sino todo lo contrario.... A ver si ya san deja de andar como perrito faldero tras de britt....
A ver como lo llevan de ahora en adelante??? Y cuanto les puede "traumar" la vendita noche!
Nos vemos!!
Que a san se le haya calado bien duro lo que siente por britt y no lo sepa controlar y britt si aunque se este muriendo no va a seder... Es mas pesado lo de su madre!!!! Para mala suerte de san!
Bueno san tubo su noche y nada mas... No se prometieron amor eterno sino todo lo contrario.... A ver si ya san deja de andar como perrito faldero tras de britt....
A ver como lo llevan de ahora en adelante??? Y cuanto les puede "traumar" la vendita noche!
Nos vemos!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
micky morales escribió:Hasta yo estoy cabreada!!!! que se ha creido Brittany, de verdad siento que la odio un poco, trato a san como basura, "ya obtuve satisfaccion, ahora largate" a ver como van las cosas ahora, pq creo que esta vez y a pesar de su obsecion san no se va a olvidar de esto tan facilmente!!!!
Hola, jajajajaja si la vrdd esk enoja un poco mucho xD jajajajajajaja. Mmmm si, tienes toda la razón, britt se safo un poco la vrdd... y la mamá tiene gran culpa de en eso la vrdd =/ espero que se de cuenta de su error. Saludos =D
3:) escribió:Hola morra....
Que a san se le haya calado bien duro lo que siente por britt y no lo sepa controlar y britt si aunque se este muriendo no va a seder... Es mas pesado lo de su madre!!!! Para mala suerte de san!
Bueno san tubo su noche y nada mas... No se prometieron amor eterno sino todo lo contrario.... A ver si ya san deja de andar como perrito faldero tras de britt....
A ver como lo llevan de ahora en adelante??? Y cuanto les puede "traumar" la vendita noche!
Nos vemos!!
Hola lu, jajajajajajaja que razón, pero que razón... todo ese sufrimiento y por un tercero que no tiene nada q ver =/ Mmmm también tienes un buen punto ai, osea san quería una noche más y britt se la dio, tampoco puede estar tan enojada, no¿? =/ Aquí el siguiente cap diga algo xD Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Cap 14
Capitulo 14
Brittany
El chorro de agua que sale de la ducha golpea mi cuerpo.
Estoy tratando de que el agua tibia aclare mi mente, tratando de asumir lo que acabo de hacer.
Después de haber tenido sexo con Santana la eché sin más de mi departamento.
Sé que ella debe estar pensando que estoy loca de remate y también sé que debe de estar muy enojada, porque antes de irse, me mando a la mierda.
No sé por qué actué así, tengo que reconocer que Santana me encanta.
Hoy coincidimos en el club y me propuso tener una noche de sexo. Yo no me pude negar a sus hermosos ojos castaños que brillan con intensidad cada vez que me miran, lo que hace que, algo dentro de mí se remueva y para qué decir cuando me besó, solo bastó un beso de Santana para perder la cabeza.
Ella sabe exactamente cómo besarme y eso hace que desaparezcan las negativas en mí.
Sin pensar en otra cosa que, no fuera tenerla en mi cama, la traje a mi departamento, pero luego de tener un maravilloso sexo, el remordimiento se apoderó de mí. Me sentí vulnerable y la voz de mi mamá resonando en mi cabeza no fue de mucha ayuda.
Ahora ella debe estar odiándome o tal vez no, ya que me pidió solo una noche más. La consiguió y de seguro ya debe estar pensando en su próxima conquista.
Sé que después de hoy no volverá a perseguirme, ella me lo dijo y aunque sienta un poco de decepción, creo que será lo mejor para mí.
Tomo un poco de gel de ducha en mis manos y comienzo a formar espuma para luego recorrer mi cuerpo con ella.
El recuerdo de la boca de Santana sobre mi piel me hace estremecer. Pienso que ninguna persona antes me había cautivado tanto en tan poco tiempo como lo ha hecho Santana López.
Si bien no he salido con personas que trabajen en el Holding Schuester, si he tenido encuentros sexuales con personas que apenas he conocido. Aunque han sido pocas y generalmente eran amigos que me ha presentado mi amigo Blaine, pero nunca nada serio.
Lo que me pasa con Santana es distinto.
Siento tal atracción hacia ella que me da miedo tener este sentimiento. Pero tengo que olvidarme de todo lo que ha sucedido, esta noche fue la última vez con ella y nunca más se volverá a repetir.
Tengo que fingir que nada sucedió entre nosotras, pero no sé si lo lograré viéndola caminar por los pasillos del Holding a diario. Sé que para ella será fácil hacer como que nada pasó, ya que debe estar acostumbrada a hacer esto siempre.
Trataré de fingir lo mejor que pueda.
Tengo que lograr que no se note que su presencia me perturba, tengo que seguir siendo la muralla de hielo que generalmente soy en el trabajo.
Salgo de la ducha, me seco el pelo y el cuerpo, luego llego al dormitorio y me coloco mi pijama. Mis ojos se fijan en la cama que luce desordenada después de la sesión de sexo y la imagen de Santana vuelve nítidamente a mi cabeza.
Todo lo que hicimos fue realmente divino, ella es un amante excepcional… por Dios, tratar de olvidarme de ella será realmente una tortura.
Me dejo caer boca abajo sobre la cama, quiero dormir y ojalá por todo el fin de semana de corrido.
Mi cuerpo se vuelve a estremecer cuando huelo en mi cama el perfume de Santana que se ha impregnado en las sábanas.
No sé cómo lo haré para enfrentarme a ella el lunes y una rabia me toma por los pies al darme cuenta que mi mamá tiene razón cuando me dice:
―Nunca debes meterte con un compañero o compañera de trabajo, menos con uno que tenga fama de don Juan.
Ahora quiero descansar, no quiero pensar en lo que viene, no sé cuál será mi reacción al ver a Santana, pero tendré que actuar con indiferencia, aunque me cueste lo haré.
Es lunes por la mañana y me estoy terminando de vestir para ir a trabajar.
El fin de semana fue más o menos tranquilo, mi amigo Blaine me interrogó más que un agente del FBI. No dejó de llamarme hasta que terminé por contarle todo lo sucedido la noche anterior. También recibí la mayor reprimenda de su parte por haber echado a Santana de mi departamento en plena noche.
Luego de aguantar el regaño de Blaine tuve que escuchar a mi mamá, ya que me negué a almorzar con ella el domingo y presiento que no me creyó la excusa de que estaba enferma.
Ya estoy lista, salgo de mi departamento y tomo el ascensor para bajar hasta el estacionamiento. Me subo a mi auto y lo pongo en marcha para dirigirme al Holding.
Una vez que llego al estacionamiento de mi trabajo, apago el motor del auto y una oleada de nervios se apoderan de mí en ese momento.
Respiro hondo para calmar la ansiedad de la cual soy presa y, una vez consigo calmarme, salgo del auto y comienzo a caminar hasta el ascensor que me llevará a mi piso.
Las puertas de acero se abren en el piso quince y yo salgo a paso raudo y firme, ojalá no me encuentre a Santana en el trayecto.
Tengo suerte, no la veo por ninguna parte.
Entro en mi oficina y comienzo a revisar mi agenda del día.
Media hora después llega Mercedes que me saca de mi concentración.
―Hola Brittany ¿Cómo estás? ¿Cómo estuvo tu fin de semana?―pregunta mi amiga.
―Estuvo bien, ¿y el tuyo?
―Genial, pero ven acompáñame por un café y te cuento con lujo de detalles.
Salgo de mi oficina con mi amiga y nos dirigimos hasta la sala de café. En nuestro camino veo que Santana viene saliendo del ascensor. Al verla tengo que contener el suspiro que quiere escaparse desde mi interior.
Se ve tan guapa.
Hoy lleva una impecable falda y chaqueta azul oscuro y camisa blanca y además noto que su cabellos va ligeramente despeinado.
Se ve mejor que cualquier modelo de revistas.
Ella levanta la vista hacia donde yo estoy con Mercedes y siento que mis piernas flaquean cuando veo que comienza a caminar en nuestra dirección.
Yo sigo mi camino, pero Mercedes se detiene de golpe cuando ve que Santana llega a nuestra altura.
―Buenos días señorita López―saluda ella.
Santana no contesta de inmediato, nos mira pasando sus ojos primero a Mercedes y luego a mí. Su mirada es seria, de seguro aún está enojada por cómo la saqué de mi casa. Yo trato de que no note que sus ojos me perturban.
―Buenos días―dice y luego retoma su andar hasta su oficina.
Santana generalmente lleva una bella y cordial sonrisa en la cara, pero hoy se nota a leguas que no está de buen humor.
―Vaya, parece que alguien no tuvo un buen fin de semana―dice Mercedes y comenzamos a caminar hasta llegar a la sala de café.
―Qué dices Mercedes.
―Pero tú viste la cara que tenía esa mujer, eso era que traía un humor de perros.
―Ya Mercedes, no digas nada más, tal vez tiene problemas o está enferma o…
―Una mala noche de sexo―suelta mi amiga y yo siento que mi cara se calienta.
―¡Mercedes!―digo para que se calle―Deja de hablar tonterías.
―No es ninguna tontería, de seguro la mujer no obtuvo lo que quería y ahora viene a desparramar su mal humor aquí. Gracias a Dios no trabajo con ella.
―¿Quieres dejar de hablar de Santana por favor?―digo con tono de irritación.
―Pero amiga, no me digas que tú también te contagiaste con el mal humor de Santana.
―Sabes Mercedes, voy a volver a mi oficina, no tengo ganas de seguir hablando de esto.
―Pero Brittany…
Dejo con la palabra en la boca a mi amiga y salgo de la sala de café para volver a mi oficina.
Al medio día Will nos dice que después de almuerzo nos quiere dar una información y que debemos presentarnos todos los jefes de sección en la sala de juntas.
La hora llega y ahí estamos todos.
Yo tomo asiento en un extremo de la mesa, cuando veo que Santana entra en la sala de juntas. Mira las sillas desocupadas que hay frente a mí, luego me mira rápidamente, pero en vez de sentarse en uno de esos lugares, camina hasta el otro extremo y ocupa la silla que está casi en la punta de la mesa.
Ella me ignora todo lo que dura la reunión.
Antes siempre se las arreglaba y la pillaba mirándome. Ahora la que la mira soy yo, pero ella no se ha dignado a girar su mirada hacia mí.
Iba en serio cuando dijo que se olvidaría de mí.
La reunión termina y todos volvemos a nuestras labores.
El día pasa rápido gracias a Dios y me marcho del trabajo.
Hoy me toca gimnasio y espero poder botar todo el estress que me está produciendo la situación con Santana.
Pero como la suerte claramente no está de mi lado, me vuelvo a encontrar con Santana y Sam en el gimnasio.
Veo que Santana se sube a la máquina trotadora y comienza con su rutina. Yo como boba la miro, ella sabe que estoy ahí detrás de ella, sentada en una de las máquinas, pero es como si fuera invisible.
Con mis ojos recorro su cuerpo, miro sus brazos, su espalda, bajo a su trasero y sigo por sus piernas.
Tengo que hacer un gran esfuerzo para controlar el ritmo de mi corazón que late desbocado por la mujer que tengo frente a mí. Paso mi lengua por mi boca que se me ha resecado como si fuera un sediento en el desierto.
Ya no sé ni lo que estoy haciendo en la máquina, pero cansada de actuar como una bruta, tomo mi botella de agua y me dirijo a las duchas, ya es hora de irme de ahí.
Paso por delante de las trotadoras y miro de reojo a Santana que, con el ceño fruncido, sigue concentrada en lo suyo, apuro el paso y ya estoy en los camarines.
Esto es una locura, esta mujer no debería afectarme tanto, ¿qué es lo que pasa conmigo?
Busco alguna respuesta, pero nada claro pasa por mi mente.
Me ducho rápidamente, me visto y tomando mi bolso salgo de los camarines hasta llegar a la salida del gimnasio. Me meto en mi auto, y sintiendo una enorme rabia conmigo misma por dejar que esta morena me afecte tanto, salgo a tanta velocidad desde el estacionamiento, que los neumáticos echan humo.
La semana siguió igual, Santana solo se dirige a mí con un buenos días o un buenas tardes.
Y debo reconocer que realmente esto me afecta, pero creo que ya es hora de empezar a olvidarme de ella.
Pensé que tal vez trataría de buscarme, pero no lo ha hecho y por lo visto no piensa hacerlo nunca más.
Estoy tratando de que el agua tibia aclare mi mente, tratando de asumir lo que acabo de hacer.
Después de haber tenido sexo con Santana la eché sin más de mi departamento.
Sé que ella debe estar pensando que estoy loca de remate y también sé que debe de estar muy enojada, porque antes de irse, me mando a la mierda.
No sé por qué actué así, tengo que reconocer que Santana me encanta.
Hoy coincidimos en el club y me propuso tener una noche de sexo. Yo no me pude negar a sus hermosos ojos castaños que brillan con intensidad cada vez que me miran, lo que hace que, algo dentro de mí se remueva y para qué decir cuando me besó, solo bastó un beso de Santana para perder la cabeza.
Ella sabe exactamente cómo besarme y eso hace que desaparezcan las negativas en mí.
Sin pensar en otra cosa que, no fuera tenerla en mi cama, la traje a mi departamento, pero luego de tener un maravilloso sexo, el remordimiento se apoderó de mí. Me sentí vulnerable y la voz de mi mamá resonando en mi cabeza no fue de mucha ayuda.
Ahora ella debe estar odiándome o tal vez no, ya que me pidió solo una noche más. La consiguió y de seguro ya debe estar pensando en su próxima conquista.
Sé que después de hoy no volverá a perseguirme, ella me lo dijo y aunque sienta un poco de decepción, creo que será lo mejor para mí.
Tomo un poco de gel de ducha en mis manos y comienzo a formar espuma para luego recorrer mi cuerpo con ella.
El recuerdo de la boca de Santana sobre mi piel me hace estremecer. Pienso que ninguna persona antes me había cautivado tanto en tan poco tiempo como lo ha hecho Santana López.
Si bien no he salido con personas que trabajen en el Holding Schuester, si he tenido encuentros sexuales con personas que apenas he conocido. Aunque han sido pocas y generalmente eran amigos que me ha presentado mi amigo Blaine, pero nunca nada serio.
Lo que me pasa con Santana es distinto.
Siento tal atracción hacia ella que me da miedo tener este sentimiento. Pero tengo que olvidarme de todo lo que ha sucedido, esta noche fue la última vez con ella y nunca más se volverá a repetir.
Tengo que fingir que nada sucedió entre nosotras, pero no sé si lo lograré viéndola caminar por los pasillos del Holding a diario. Sé que para ella será fácil hacer como que nada pasó, ya que debe estar acostumbrada a hacer esto siempre.
Trataré de fingir lo mejor que pueda.
Tengo que lograr que no se note que su presencia me perturba, tengo que seguir siendo la muralla de hielo que generalmente soy en el trabajo.
Salgo de la ducha, me seco el pelo y el cuerpo, luego llego al dormitorio y me coloco mi pijama. Mis ojos se fijan en la cama que luce desordenada después de la sesión de sexo y la imagen de Santana vuelve nítidamente a mi cabeza.
Todo lo que hicimos fue realmente divino, ella es un amante excepcional… por Dios, tratar de olvidarme de ella será realmente una tortura.
Me dejo caer boca abajo sobre la cama, quiero dormir y ojalá por todo el fin de semana de corrido.
Mi cuerpo se vuelve a estremecer cuando huelo en mi cama el perfume de Santana que se ha impregnado en las sábanas.
No sé cómo lo haré para enfrentarme a ella el lunes y una rabia me toma por los pies al darme cuenta que mi mamá tiene razón cuando me dice:
―Nunca debes meterte con un compañero o compañera de trabajo, menos con uno que tenga fama de don Juan.
Ahora quiero descansar, no quiero pensar en lo que viene, no sé cuál será mi reacción al ver a Santana, pero tendré que actuar con indiferencia, aunque me cueste lo haré.
Es lunes por la mañana y me estoy terminando de vestir para ir a trabajar.
El fin de semana fue más o menos tranquilo, mi amigo Blaine me interrogó más que un agente del FBI. No dejó de llamarme hasta que terminé por contarle todo lo sucedido la noche anterior. También recibí la mayor reprimenda de su parte por haber echado a Santana de mi departamento en plena noche.
Luego de aguantar el regaño de Blaine tuve que escuchar a mi mamá, ya que me negué a almorzar con ella el domingo y presiento que no me creyó la excusa de que estaba enferma.
Ya estoy lista, salgo de mi departamento y tomo el ascensor para bajar hasta el estacionamiento. Me subo a mi auto y lo pongo en marcha para dirigirme al Holding.
Una vez que llego al estacionamiento de mi trabajo, apago el motor del auto y una oleada de nervios se apoderan de mí en ese momento.
Respiro hondo para calmar la ansiedad de la cual soy presa y, una vez consigo calmarme, salgo del auto y comienzo a caminar hasta el ascensor que me llevará a mi piso.
Las puertas de acero se abren en el piso quince y yo salgo a paso raudo y firme, ojalá no me encuentre a Santana en el trayecto.
Tengo suerte, no la veo por ninguna parte.
Entro en mi oficina y comienzo a revisar mi agenda del día.
Media hora después llega Mercedes que me saca de mi concentración.
―Hola Brittany ¿Cómo estás? ¿Cómo estuvo tu fin de semana?―pregunta mi amiga.
―Estuvo bien, ¿y el tuyo?
―Genial, pero ven acompáñame por un café y te cuento con lujo de detalles.
Salgo de mi oficina con mi amiga y nos dirigimos hasta la sala de café. En nuestro camino veo que Santana viene saliendo del ascensor. Al verla tengo que contener el suspiro que quiere escaparse desde mi interior.
Se ve tan guapa.
Hoy lleva una impecable falda y chaqueta azul oscuro y camisa blanca y además noto que su cabellos va ligeramente despeinado.
Se ve mejor que cualquier modelo de revistas.
Ella levanta la vista hacia donde yo estoy con Mercedes y siento que mis piernas flaquean cuando veo que comienza a caminar en nuestra dirección.
Yo sigo mi camino, pero Mercedes se detiene de golpe cuando ve que Santana llega a nuestra altura.
―Buenos días señorita López―saluda ella.
Santana no contesta de inmediato, nos mira pasando sus ojos primero a Mercedes y luego a mí. Su mirada es seria, de seguro aún está enojada por cómo la saqué de mi casa. Yo trato de que no note que sus ojos me perturban.
―Buenos días―dice y luego retoma su andar hasta su oficina.
Santana generalmente lleva una bella y cordial sonrisa en la cara, pero hoy se nota a leguas que no está de buen humor.
―Vaya, parece que alguien no tuvo un buen fin de semana―dice Mercedes y comenzamos a caminar hasta llegar a la sala de café.
―Qué dices Mercedes.
―Pero tú viste la cara que tenía esa mujer, eso era que traía un humor de perros.
―Ya Mercedes, no digas nada más, tal vez tiene problemas o está enferma o…
―Una mala noche de sexo―suelta mi amiga y yo siento que mi cara se calienta.
―¡Mercedes!―digo para que se calle―Deja de hablar tonterías.
―No es ninguna tontería, de seguro la mujer no obtuvo lo que quería y ahora viene a desparramar su mal humor aquí. Gracias a Dios no trabajo con ella.
―¿Quieres dejar de hablar de Santana por favor?―digo con tono de irritación.
―Pero amiga, no me digas que tú también te contagiaste con el mal humor de Santana.
―Sabes Mercedes, voy a volver a mi oficina, no tengo ganas de seguir hablando de esto.
―Pero Brittany…
Dejo con la palabra en la boca a mi amiga y salgo de la sala de café para volver a mi oficina.
Al medio día Will nos dice que después de almuerzo nos quiere dar una información y que debemos presentarnos todos los jefes de sección en la sala de juntas.
La hora llega y ahí estamos todos.
Yo tomo asiento en un extremo de la mesa, cuando veo que Santana entra en la sala de juntas. Mira las sillas desocupadas que hay frente a mí, luego me mira rápidamente, pero en vez de sentarse en uno de esos lugares, camina hasta el otro extremo y ocupa la silla que está casi en la punta de la mesa.
Ella me ignora todo lo que dura la reunión.
Antes siempre se las arreglaba y la pillaba mirándome. Ahora la que la mira soy yo, pero ella no se ha dignado a girar su mirada hacia mí.
Iba en serio cuando dijo que se olvidaría de mí.
La reunión termina y todos volvemos a nuestras labores.
El día pasa rápido gracias a Dios y me marcho del trabajo.
Hoy me toca gimnasio y espero poder botar todo el estress que me está produciendo la situación con Santana.
Pero como la suerte claramente no está de mi lado, me vuelvo a encontrar con Santana y Sam en el gimnasio.
Veo que Santana se sube a la máquina trotadora y comienza con su rutina. Yo como boba la miro, ella sabe que estoy ahí detrás de ella, sentada en una de las máquinas, pero es como si fuera invisible.
Con mis ojos recorro su cuerpo, miro sus brazos, su espalda, bajo a su trasero y sigo por sus piernas.
Tengo que hacer un gran esfuerzo para controlar el ritmo de mi corazón que late desbocado por la mujer que tengo frente a mí. Paso mi lengua por mi boca que se me ha resecado como si fuera un sediento en el desierto.
Ya no sé ni lo que estoy haciendo en la máquina, pero cansada de actuar como una bruta, tomo mi botella de agua y me dirijo a las duchas, ya es hora de irme de ahí.
Paso por delante de las trotadoras y miro de reojo a Santana que, con el ceño fruncido, sigue concentrada en lo suyo, apuro el paso y ya estoy en los camarines.
Esto es una locura, esta mujer no debería afectarme tanto, ¿qué es lo que pasa conmigo?
Busco alguna respuesta, pero nada claro pasa por mi mente.
Me ducho rápidamente, me visto y tomando mi bolso salgo de los camarines hasta llegar a la salida del gimnasio. Me meto en mi auto, y sintiendo una enorme rabia conmigo misma por dejar que esta morena me afecte tanto, salgo a tanta velocidad desde el estacionamiento, que los neumáticos echan humo.
La semana siguió igual, Santana solo se dirige a mí con un buenos días o un buenas tardes.
Y debo reconocer que realmente esto me afecta, pero creo que ya es hora de empezar a olvidarme de ella.
Pensé que tal vez trataría de buscarme, pero no lo ha hecho y por lo visto no piensa hacerlo nunca más.
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Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hola morra....
Buuueennooo no era lo que quería britt... Que san no la moleste mas... Ahora que no joda!!! Agua y ajo (a aguantarse y a joderse) jajaj
En la vida ahí causa y efecto.... Y ahora britt lo esta sufriendo!!!
Ya ni todo el ejercicio del planeta ni las 24 hs del día para olvidar esa noche!!!... Su única noche????...
Nos vemos!!!
Buuueennooo no era lo que quería britt... Que san no la moleste mas... Ahora que no joda!!! Agua y ajo (a aguantarse y a joderse) jajaj
En la vida ahí causa y efecto.... Y ahora britt lo esta sufriendo!!!
Ya ni todo el ejercicio del planeta ni las 24 hs del día para olvidar esa noche!!!... Su única noche????...
Nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Quien entiende a Britt, obtuvo lo que quería de San que la dejara de perseguir, aparte después de lo que le hizo era obvio que su comportamiento no seria el mismo, haber si así aprende a tratar mal a la morena jajajajaja. Y esperó que ella sea quien la busque :D ahora le toca a ella
JVM- - Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Lo peor no es que brittany piense que san es una mujeriega que esta acostumbrada a hacer lo que hizo, sino el hecho de que no se pare ni por un momento a pensar que la trato como m... y la boto de madrugada de su apto y pues obvio que por eso tiene razon de estar cabreada!!!!!
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
3:) escribió:Hola morra....
Buuueennooo no era lo que quería britt... Que san no la moleste mas... Ahora que no joda!!! Agua y ajo (a aguantarse y a joderse) jajaj
En la vida ahí causa y efecto.... Y ahora britt lo esta sufriendo!!!
Ya ni todo el ejercicio del planeta ni las 24 hs del día para olvidar esa noche!!!... Su única noche????...
Nos vemos!!!
Hola lu, jajajajajaaja esk quien las entiende¿? una quería una noche mas y listo, mientras que la otra quería que deja en paz... y cuando ambas cosas pasan ninguna esta contenta jajajajajaja... el efecto que causan en la otra jajajaja. Priemro una y luego la otra jajajaja. Nada de nada... espero y no xD jajajaja... al igual que ellas jajajaja. Saludos =D
JVM escribió:Quien entiende a Britt, obtuvo lo que quería de San que la dejara de perseguir, aparte después de lo que le hizo era obvio que su comportamiento no seria el mismo, haber si así aprende a tratar mal a la morena jajajajaja. Y esperó que ella sea quien la busque :D ahora le toca a ella
Hola, jajajajajaja en vrdd quien entiende a ambas¿? cada una deseaba algo y al obtenerlo no están deacuerdo xD como dije, es el efecto que causan en la otra jajajaja. Esperemos y alguna de el primer paso, pero ya! jajajaja. Saludos =D
micky morales escribió:Lo peor no es que brittany piense que san es una mujeriega que esta acostumbrada a hacer lo que hizo, sino el hecho de que no se pare ni por un momento a pensar que la trato como m... y la boto de madrugada de su apto y pues obvio que por eso tiene razon de estar cabreada!!!!!
Hola, mmmm si tienes un buen punto ai =/ Esperemos que se de cuenta de su error e intente solucionarlo... o algo bueno para san y ambas la vrdd jajajaja. Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Cap 15
Capitulo 15
El fin de semana llega y he quedado de juntarme con mi mamá para almorzar.
Quiere contralar mi vida y cada fin de semana nos juntamos para que la ponga al día.
Pero hoy no almorzaremos en su casa. Me ha pedido que la acompañe a comprar un regalo para el aniversario de matrimonio de una pareja de vecinos. Así es que, aprovechando la salida, le dije que la invitaba a un restaurante.
Llego hasta su casa a buscarla.
Mi mamá ya me está esperando algo enfurruñada y eso que solo llevo cinco minutos de retraso.
―¡Por fin llegas! Te he estado esperando hace rato―dice un poco irritada mirando por la ventana del auto.
―Hola mamá, ¿Cómo estás hoy? Yo muy bien―digo con ironía, sé que ahora me va regañar.
―Por qué has demorado tanto, quedaste de pasar a las once y ya son las once y media.
Yo resoplo al escucharla, al parecer no amaneció de buen humor. Si mi mamá normalmente ya es difícil de tratar, malhumorada es peor.
―Mamá, no seas exagerada, ¿quieres? Llevo apenas cinco minutos de retraso. Pero no sigamos discutiendo, sube y vámonos antes de que de verdad se nos haga más tarde.
Ella sube y yo conduzco el auto hasta la ciudad.
―Y bien mamá, ¿hacia dónde vamos?
―Quiero ir a la tienda de decoración del centro. Me gustaría comprar una lámpara que venden ahí, será un lindo regalo para los Howell.
―Claro, vamos a esa tienda y luego buscamos un restaurante para almorzar.
La conversación es poca.
Mi mamá hace las preguntas de rutina sobre mi trabajo y yo le respondo solo con monosílabos. Luego me pregunta si he salido con alguien y yo le cuento solo un poco de lo que he hecho, no quiero que empiece a soltar su amargura.
Llegamos al lugar que ella desea.
Estaciono el auto, bajamos y entramos en la enorme tienda de decoración. Comenzamos a caminar y miro con asombro todo lo que ahí se encuentra.
De pronto pienso que la decoración de mi casa está obsoleta y me entra la tentación de comprar un par de cosas.
Dejo a mi mamá buscando la lámpara que desea y yo me interno en la tienda recorriendo los pasillos que están repletos de maravillosos objetos. Cada vez que veo algo que me gusta, camino otro poco para encontrar otra cosa que me gusta más.
Pienso que debería comprar una colcha nueva y me gusta una blanca que está frente a mí.
Sí, eso será lo primero que compre.
Sigo caminando y veo un portarretratos de plata, es bello, pero, ¿qué fotografía podría poner en el?
Es un elegante marco que de seguro se merece una imagen de alguna ocasión especial.
Continúo recorriendo el enorme espacio, asombrada con cada diseño que veo, cuando de pronto escucho lo que parece una discusión. Me acerco con cautela, caminando por los pasillos para llegar hasta donde sale el barullo.
De pronto la voz que escucho me es conocida… mi mamá.
―¡Por qué no se fija por dónde va imbécil!―grita ella y yo cierro los ojos, no sé si sea buena idea salir a calmar a la fiera―¡Me ha hecho botar la lámpara, usted tendrá que pagarla! ¡Usted ha tenido la culpa!
Siento pena por quien está recibiendo el ataque de mi mamá.
Ella no terminará el escandalo así como así. En ese momento prefiero quedarme oculta, aún no es tiempo de salir, pero me quedo escuchando cada palabra que sale de la boca de Whitney Pierce.
―Y para colmo esa era la última lámpara de este modelo. Qué haré ahora, dígame algo mujer o además de torpe y tonta es muda.
Hay pobre mujer, no tiene palabras para enfrentar a Whitney.
―Señora, si dejara de insultarme podríamos arreglar todo esto conversando como personas civilizadas. Pero por lo visto usted no lo es.
Esa voz, esa profunda voz, no puede ser, no, no.
Me asomo con cuidado y veo que la mujer con la que mi mamá discute es quien yo temía… Santana López.
―¡Insolente! ¡Cómo se atreve a tratarme de incivilizada, quién se cree usted, quién es usted!
―Señora, por qué no para este escándalo y arreglamos lo de la lámpara, nada va a solucionar si continúa gritando.
Ay… Santana no debiste decir eso.
Ahora el dragón de la torre hará su aparición, será mejor intervenir.
―¡No me diga qué es lo que debo hacer!
―Mamá, ¿qué pasa?―digo interponiéndome entre mi mamá y Santana.
Miro la cara de asombro de la morena, de seguro no puede creer lo que está pasando.
―Cálmate quieres por favor.
―No, no me digas que me calme. Esta imbécil que está parada aquí hizo que botara la lámpara que pensaba regalarle a los Howells, qué voy a hacer ahora. Pero ni crea que esto se va a quedar así, usted tendrá que pagarla, usted tuvo la culpa.
―Ya mamá, no sigas por favor que estás haciendo un gran escándalo y todos nos están mirando.
Ella se calma un poco y yo giro mi cara hacia Santana que aún está pasmada.
―Hola Santana, disculpa el incidente―digo mirando directo a sus ojos.
―Hola Brittany…
―Brittany, ¿de dónde conoces tú a esta mujer?―pregunta mi mamá sin dejar a que Santana termine la frase.
―Mamá ella es Santana López trabaja en el Holding Schuester, es ahijada de Will.
Ella da una honda respiración, como tratando de recobrar la calma, pero sé que sus alarmas se han encendido cuando dije que Santana trabaja conmigo, eso y que sea tan guapa es una mala combinación para mi mamá.
―Bueno, quiero saber cómo vamos a solucionar esto―dice ella levantando el mentón.
―Si me hubiera dejado hablar hace un rato, no habríamos pasado este mal momento.
Ah Santana, no sigas si no quieres que te digan hasta de lo que te vas a morir.
―Es usted una grosera, usted tiene la culpa de todo.
―¿Yo? Si era usted la que venía caminando distraída.
―Pero era usted la que estaba parada como un poste en mitad del pasillo mirando el teléfono, usted tuvo la culpa.
Esto podría ser una pelea interminable.
Tengo que tratar de calmar las aguas, pero del lado de mi mamá ya se ha formado un Tsunami.
―Mamá, ¿podríamos escuchar lo que Santana nos quieres decir?
Ella frunce el ceño, se nota leguas que no le gusta la idea de tener que escuchar a esta linda morena.
―Señora, creo que las dos tenemos la culpa de lo que ha pasado, pero con tal de no seguir con esto, voy a hacerme responsable y pagaré la lámpara, ¿está bien eso para usted?
―Es lo mínimo que debería hacer. Pero me arruinó el regalo, esa era la última lámpara y…
―¡San!
El monólogo de mi mamá es interrumpido por una voz femenina que llama a
Santana. Ésta se gira y yo también giro mi cabeza con curiosidad de saber quién es la dueña de aquella voz.
La mujer le hace una seña con la mano a Santana para que se acerque a ella y la morena más alta nos dice:
―Me disculpan un momento, vuelvo enseguida―y se gira para encaminarse hasta donde está la mujer que la ha llamado.
―¿Estás segura de que esta mal educada es ahijada de Will?
―Sí mamá, cien por ciento segura―le contesto, pero con mis ojos sigo cada movimiento de Santana.
La mujer que la acompaña es una risueña morenita. Es muy linda, y se nota que entre las dos hay complicidad.
¿Será su novia?
La muy cara dura tiene novia y se acostó conmigo.
Siento que una rabia comienza a apoderarse de mí, rabia y… ¿celos?
Pero qué diablos me pasa.
Veo como la más baja le sonríe y Santana la mira con adoración. Quiero irme de ahí, no quiero seguir mirando esta escena.
Santana vuelve a acercarse a nosotras y nos dice:
―Bien, ya está todo solucionado. La lámpara fue pagada y la tienda tiene otra igual en bodega, la cual también está pagada y dentro de un momento se la traerán.
―No es necesario que pagues por la segunda lámpara―le digo.
―¡Claro que es necesario Brittany!―dice mi mamá―Ella tuvo la culpa de todo, es lógico que pague por el mal rato que nos ha hecho pasar.
―Bien, como todo está arreglado las dejo, que tengan buena tarde.
Santana se despide y ni mi mamá ni yo decimos una palabra. Llega hasta donde su acompañante, le dice algo y salen de la tienda.
―Me vas a tener que explicar qué pasa entre tú y esa tipa Brittany, porque amistad no es―dice, que se ha dado cuenta que no le he quitado los ojos de encima a Santana.
―No pasa nada mamá, te estás imaginando cosas que no son.
―Claro que no. Vi cómo la mirabas y te sonrojabas y vi cómo te ha mirado ella. Explícame en este mismo instante qué se traen esa tipa y tú.
Yo resoplo, no quiero tener esta conversación con mi mamá, menos en mitad de esta tienda.
No quiero contarle nada de nada, ya estoy de mal humor, ya se me arruinó el día. Pero sé que ella seguirá insistiendo, la curiosidad y su manía por manejarme la vida la están matando.
―Mamá, vamos por la lámpara y luego deberíamos ir a almorzar, la verdad tengo mucha hambre―le miento porque no quiero comer nada, pero con tal de salir de ahí le diré cualquier cosa.
―Sabes que no pararé hasta que sepa todo, ¿verdad?
―Sí mamá, lo sé―digo con desgano y comienzo a caminar hasta un vendedor para que me ayude con lo de la lámpara y así alejarme de ella.
Ya estamos en el restaurante, elegido por mi mamá obviamente, yo me dejo guiar como un manso cordero.
Ya no tengo ganas de discutir con ella, menos discutir por el lugar donde vamos a almorzar. Hacemos el pedido, y como no tengo hambre, pido solo una ensalada.
―Y bien Brittany, ¿algo que me tengas que contar?
Yo entorno los ojos, no voy a contarle lo que ha pasado con Santana, no voy a decirle nada aunque me torture.
―Nada mamá, no tengo nada de nada que contarte.
―¿Estás segura de lo que me estás diciendo?
―Muy segura mamá. Nada nuevo que contar.
El silencio se hace en esa mesa, yo bebo un sorbo de agua, sé que Whitney no se ha tragado nada de lo que he dicho, se le nota en su aguda mirada.
El mesero llega con nuestro pedido y comienzo a mover la ensalada de un lado al otro en el plato hasta que mi mamá vuelve a la carga.
―Cuéntame Brittany, qué pasa con esa tipa de la tienda, con la tal Santana López.
―Nada mamá, ¿por qué piensas que pasa algo con ella?―digo fijando mi mirada en el plato que tengo frente a mí.
―Brittany, se muy bien de tus gustos por las mujeres y los hombres es el mismo. Y por cómo te miraba, no era amistad.
―Mamá, entre Santana y yo no pasa nada, quédate tranquila, ¿quieres?
Ella toma una honda respiración, de seguro ahora vendrá su discurso de siempre y el que yo me conozco más que de sobra.
―Brittany, ya hemos hablado de esto, pero te lo voy a decir otra vez. Nunca tengas una relación con alguien con quien trabajes.
―Mamá, yo…
―No digas nada y escucha. Conoces de memoria mi historia. Sabes de primera mano todo lo que tuvimos que pasar. No eches a perder tu vida Brittany.
―¿Por qué piensas que podría echar a perder mi vida?―digo con cierta irritación.
―Hija, aunque no me lo quieras decir sé que te gusta esa Santana López, lo noto en tus ojos. Ya sabes que yo no confío en ningún hombre y en más de una mujer, menos en alguien como ella. Si es ahijada de Will de seguro es amigo de Sam y las dos sabemos que él es un mujeriego sin remedio, y ésta debe ser de los mismos, mayor razón para desconfiar de ella.
―¿Por qué mamá? Porque es bien parecida, porque trabaja conmigo o por todas las anteriores.
―No quería tener esta conversación porque sé que me saldré de mis casillas.
―Sí, por eso, ya sabes por lo que yo pasé cuando era joven y…
―¡Ya basta!―digo ofuscada, creo que ya es tiempo de parar todo esto―¡Estoy cansada de escuchar esa historia mamá, he estado veintisiete años oyéndote decir lo mismo, ya no más!
Me levanto de la mesa, tomo mi bolso para buscar mi billetera. Saco unos billetes y los dejo sobre la mesa para pagar el fallido almuerzo.
―¿Qué crees que estás haciendo?―me pregunta.
―¡Me voy!―digo y comienzo a caminar hacia la salida y a mi paso me fijo en las miradas de la gente que se encuentran en ese restaurante.
―¡Brittany, espera!―escucho la voz de mi mamá que viene tras de mí.
―¡Qué quieres!―grito con rabia.
―Que hablemos.
―¿Qué hablemos? Pero si solo has hablado tú. Solo he escuchado tu monólogo que ya me sé de sobra.
―¡Brittany cállate!
―No mamá, no me voy a callar. Ya es suficiente. Es mi vida y yo hago lo quiero con ella. No te metas más en mis asuntos.
―Brittany, yo me preocupo por ti, no quiero que sufras como yo, no quiero que te pase lo que a mí.
―¡Pero es que yo no soy tú, entiéndelo de una vez!
Tal vez no debí de decir eso porque veo que los ojos de mi mamá se tornan vidriosos, pero ya no aguanto más esta situación.
―Mamá, sé que te preocupas por mí y te lo agradezco, pero créeme que sé defenderme sola en la vida.
―Brittany yo…
―No digas nada, sube al auto y vamos que te llevo a casa.
No quiero hablar más, estoy completamente agotada después de haber dicho todo lo que acabo de soltarle a mi mamá en su cara.
Dentro del auto hay un silencio sepulcral.
Mi mamá está con la mirada fija al frente. Sé que no se esperaba que yo le dijera todo lo que escuchó, pero tiene que entender que su pequeña hija ya creció.
Llegamos a su casa, yo me bajo para entregarle la lámpara de regalo, caminamos hasta la puerta, ninguna ha dicho ni media palabra.
Me paro al llegar al portal y le paso la lámpara a mi mamá y le digo:
―Adiós mamá.
Ella me mira, levanta su barbilla y entra en su casa sin despedirse de mí.
Camino hasta mi auto, me subo, caigo desparramada sobre el asiento y comienzo a llorar.
Hoy ha sido un día fatal para mí, solo quiero llegar a casa, tomar un a baño y dormir profundamente.
Quiere contralar mi vida y cada fin de semana nos juntamos para que la ponga al día.
Pero hoy no almorzaremos en su casa. Me ha pedido que la acompañe a comprar un regalo para el aniversario de matrimonio de una pareja de vecinos. Así es que, aprovechando la salida, le dije que la invitaba a un restaurante.
Llego hasta su casa a buscarla.
Mi mamá ya me está esperando algo enfurruñada y eso que solo llevo cinco minutos de retraso.
―¡Por fin llegas! Te he estado esperando hace rato―dice un poco irritada mirando por la ventana del auto.
―Hola mamá, ¿Cómo estás hoy? Yo muy bien―digo con ironía, sé que ahora me va regañar.
―Por qué has demorado tanto, quedaste de pasar a las once y ya son las once y media.
Yo resoplo al escucharla, al parecer no amaneció de buen humor. Si mi mamá normalmente ya es difícil de tratar, malhumorada es peor.
―Mamá, no seas exagerada, ¿quieres? Llevo apenas cinco minutos de retraso. Pero no sigamos discutiendo, sube y vámonos antes de que de verdad se nos haga más tarde.
Ella sube y yo conduzco el auto hasta la ciudad.
―Y bien mamá, ¿hacia dónde vamos?
―Quiero ir a la tienda de decoración del centro. Me gustaría comprar una lámpara que venden ahí, será un lindo regalo para los Howell.
―Claro, vamos a esa tienda y luego buscamos un restaurante para almorzar.
La conversación es poca.
Mi mamá hace las preguntas de rutina sobre mi trabajo y yo le respondo solo con monosílabos. Luego me pregunta si he salido con alguien y yo le cuento solo un poco de lo que he hecho, no quiero que empiece a soltar su amargura.
Llegamos al lugar que ella desea.
Estaciono el auto, bajamos y entramos en la enorme tienda de decoración. Comenzamos a caminar y miro con asombro todo lo que ahí se encuentra.
De pronto pienso que la decoración de mi casa está obsoleta y me entra la tentación de comprar un par de cosas.
Dejo a mi mamá buscando la lámpara que desea y yo me interno en la tienda recorriendo los pasillos que están repletos de maravillosos objetos. Cada vez que veo algo que me gusta, camino otro poco para encontrar otra cosa que me gusta más.
Pienso que debería comprar una colcha nueva y me gusta una blanca que está frente a mí.
Sí, eso será lo primero que compre.
Sigo caminando y veo un portarretratos de plata, es bello, pero, ¿qué fotografía podría poner en el?
Es un elegante marco que de seguro se merece una imagen de alguna ocasión especial.
Continúo recorriendo el enorme espacio, asombrada con cada diseño que veo, cuando de pronto escucho lo que parece una discusión. Me acerco con cautela, caminando por los pasillos para llegar hasta donde sale el barullo.
De pronto la voz que escucho me es conocida… mi mamá.
―¡Por qué no se fija por dónde va imbécil!―grita ella y yo cierro los ojos, no sé si sea buena idea salir a calmar a la fiera―¡Me ha hecho botar la lámpara, usted tendrá que pagarla! ¡Usted ha tenido la culpa!
Siento pena por quien está recibiendo el ataque de mi mamá.
Ella no terminará el escandalo así como así. En ese momento prefiero quedarme oculta, aún no es tiempo de salir, pero me quedo escuchando cada palabra que sale de la boca de Whitney Pierce.
―Y para colmo esa era la última lámpara de este modelo. Qué haré ahora, dígame algo mujer o además de torpe y tonta es muda.
Hay pobre mujer, no tiene palabras para enfrentar a Whitney.
―Señora, si dejara de insultarme podríamos arreglar todo esto conversando como personas civilizadas. Pero por lo visto usted no lo es.
Esa voz, esa profunda voz, no puede ser, no, no.
Me asomo con cuidado y veo que la mujer con la que mi mamá discute es quien yo temía… Santana López.
―¡Insolente! ¡Cómo se atreve a tratarme de incivilizada, quién se cree usted, quién es usted!
―Señora, por qué no para este escándalo y arreglamos lo de la lámpara, nada va a solucionar si continúa gritando.
Ay… Santana no debiste decir eso.
Ahora el dragón de la torre hará su aparición, será mejor intervenir.
―¡No me diga qué es lo que debo hacer!
―Mamá, ¿qué pasa?―digo interponiéndome entre mi mamá y Santana.
Miro la cara de asombro de la morena, de seguro no puede creer lo que está pasando.
―Cálmate quieres por favor.
―No, no me digas que me calme. Esta imbécil que está parada aquí hizo que botara la lámpara que pensaba regalarle a los Howells, qué voy a hacer ahora. Pero ni crea que esto se va a quedar así, usted tendrá que pagarla, usted tuvo la culpa.
―Ya mamá, no sigas por favor que estás haciendo un gran escándalo y todos nos están mirando.
Ella se calma un poco y yo giro mi cara hacia Santana que aún está pasmada.
―Hola Santana, disculpa el incidente―digo mirando directo a sus ojos.
―Hola Brittany…
―Brittany, ¿de dónde conoces tú a esta mujer?―pregunta mi mamá sin dejar a que Santana termine la frase.
―Mamá ella es Santana López trabaja en el Holding Schuester, es ahijada de Will.
Ella da una honda respiración, como tratando de recobrar la calma, pero sé que sus alarmas se han encendido cuando dije que Santana trabaja conmigo, eso y que sea tan guapa es una mala combinación para mi mamá.
―Bueno, quiero saber cómo vamos a solucionar esto―dice ella levantando el mentón.
―Si me hubiera dejado hablar hace un rato, no habríamos pasado este mal momento.
Ah Santana, no sigas si no quieres que te digan hasta de lo que te vas a morir.
―Es usted una grosera, usted tiene la culpa de todo.
―¿Yo? Si era usted la que venía caminando distraída.
―Pero era usted la que estaba parada como un poste en mitad del pasillo mirando el teléfono, usted tuvo la culpa.
Esto podría ser una pelea interminable.
Tengo que tratar de calmar las aguas, pero del lado de mi mamá ya se ha formado un Tsunami.
―Mamá, ¿podríamos escuchar lo que Santana nos quieres decir?
Ella frunce el ceño, se nota leguas que no le gusta la idea de tener que escuchar a esta linda morena.
―Señora, creo que las dos tenemos la culpa de lo que ha pasado, pero con tal de no seguir con esto, voy a hacerme responsable y pagaré la lámpara, ¿está bien eso para usted?
―Es lo mínimo que debería hacer. Pero me arruinó el regalo, esa era la última lámpara y…
―¡San!
El monólogo de mi mamá es interrumpido por una voz femenina que llama a
Santana. Ésta se gira y yo también giro mi cabeza con curiosidad de saber quién es la dueña de aquella voz.
La mujer le hace una seña con la mano a Santana para que se acerque a ella y la morena más alta nos dice:
―Me disculpan un momento, vuelvo enseguida―y se gira para encaminarse hasta donde está la mujer que la ha llamado.
―¿Estás segura de que esta mal educada es ahijada de Will?
―Sí mamá, cien por ciento segura―le contesto, pero con mis ojos sigo cada movimiento de Santana.
La mujer que la acompaña es una risueña morenita. Es muy linda, y se nota que entre las dos hay complicidad.
¿Será su novia?
La muy cara dura tiene novia y se acostó conmigo.
Siento que una rabia comienza a apoderarse de mí, rabia y… ¿celos?
Pero qué diablos me pasa.
Veo como la más baja le sonríe y Santana la mira con adoración. Quiero irme de ahí, no quiero seguir mirando esta escena.
Santana vuelve a acercarse a nosotras y nos dice:
―Bien, ya está todo solucionado. La lámpara fue pagada y la tienda tiene otra igual en bodega, la cual también está pagada y dentro de un momento se la traerán.
―No es necesario que pagues por la segunda lámpara―le digo.
―¡Claro que es necesario Brittany!―dice mi mamá―Ella tuvo la culpa de todo, es lógico que pague por el mal rato que nos ha hecho pasar.
―Bien, como todo está arreglado las dejo, que tengan buena tarde.
Santana se despide y ni mi mamá ni yo decimos una palabra. Llega hasta donde su acompañante, le dice algo y salen de la tienda.
―Me vas a tener que explicar qué pasa entre tú y esa tipa Brittany, porque amistad no es―dice, que se ha dado cuenta que no le he quitado los ojos de encima a Santana.
―No pasa nada mamá, te estás imaginando cosas que no son.
―Claro que no. Vi cómo la mirabas y te sonrojabas y vi cómo te ha mirado ella. Explícame en este mismo instante qué se traen esa tipa y tú.
Yo resoplo, no quiero tener esta conversación con mi mamá, menos en mitad de esta tienda.
No quiero contarle nada de nada, ya estoy de mal humor, ya se me arruinó el día. Pero sé que ella seguirá insistiendo, la curiosidad y su manía por manejarme la vida la están matando.
―Mamá, vamos por la lámpara y luego deberíamos ir a almorzar, la verdad tengo mucha hambre―le miento porque no quiero comer nada, pero con tal de salir de ahí le diré cualquier cosa.
―Sabes que no pararé hasta que sepa todo, ¿verdad?
―Sí mamá, lo sé―digo con desgano y comienzo a caminar hasta un vendedor para que me ayude con lo de la lámpara y así alejarme de ella.
Ya estamos en el restaurante, elegido por mi mamá obviamente, yo me dejo guiar como un manso cordero.
Ya no tengo ganas de discutir con ella, menos discutir por el lugar donde vamos a almorzar. Hacemos el pedido, y como no tengo hambre, pido solo una ensalada.
―Y bien Brittany, ¿algo que me tengas que contar?
Yo entorno los ojos, no voy a contarle lo que ha pasado con Santana, no voy a decirle nada aunque me torture.
―Nada mamá, no tengo nada de nada que contarte.
―¿Estás segura de lo que me estás diciendo?
―Muy segura mamá. Nada nuevo que contar.
El silencio se hace en esa mesa, yo bebo un sorbo de agua, sé que Whitney no se ha tragado nada de lo que he dicho, se le nota en su aguda mirada.
El mesero llega con nuestro pedido y comienzo a mover la ensalada de un lado al otro en el plato hasta que mi mamá vuelve a la carga.
―Cuéntame Brittany, qué pasa con esa tipa de la tienda, con la tal Santana López.
―Nada mamá, ¿por qué piensas que pasa algo con ella?―digo fijando mi mirada en el plato que tengo frente a mí.
―Brittany, se muy bien de tus gustos por las mujeres y los hombres es el mismo. Y por cómo te miraba, no era amistad.
―Mamá, entre Santana y yo no pasa nada, quédate tranquila, ¿quieres?
Ella toma una honda respiración, de seguro ahora vendrá su discurso de siempre y el que yo me conozco más que de sobra.
―Brittany, ya hemos hablado de esto, pero te lo voy a decir otra vez. Nunca tengas una relación con alguien con quien trabajes.
―Mamá, yo…
―No digas nada y escucha. Conoces de memoria mi historia. Sabes de primera mano todo lo que tuvimos que pasar. No eches a perder tu vida Brittany.
―¿Por qué piensas que podría echar a perder mi vida?―digo con cierta irritación.
―Hija, aunque no me lo quieras decir sé que te gusta esa Santana López, lo noto en tus ojos. Ya sabes que yo no confío en ningún hombre y en más de una mujer, menos en alguien como ella. Si es ahijada de Will de seguro es amigo de Sam y las dos sabemos que él es un mujeriego sin remedio, y ésta debe ser de los mismos, mayor razón para desconfiar de ella.
―¿Por qué mamá? Porque es bien parecida, porque trabaja conmigo o por todas las anteriores.
―No quería tener esta conversación porque sé que me saldré de mis casillas.
―Sí, por eso, ya sabes por lo que yo pasé cuando era joven y…
―¡Ya basta!―digo ofuscada, creo que ya es tiempo de parar todo esto―¡Estoy cansada de escuchar esa historia mamá, he estado veintisiete años oyéndote decir lo mismo, ya no más!
Me levanto de la mesa, tomo mi bolso para buscar mi billetera. Saco unos billetes y los dejo sobre la mesa para pagar el fallido almuerzo.
―¿Qué crees que estás haciendo?―me pregunta.
―¡Me voy!―digo y comienzo a caminar hacia la salida y a mi paso me fijo en las miradas de la gente que se encuentran en ese restaurante.
―¡Brittany, espera!―escucho la voz de mi mamá que viene tras de mí.
―¡Qué quieres!―grito con rabia.
―Que hablemos.
―¿Qué hablemos? Pero si solo has hablado tú. Solo he escuchado tu monólogo que ya me sé de sobra.
―¡Brittany cállate!
―No mamá, no me voy a callar. Ya es suficiente. Es mi vida y yo hago lo quiero con ella. No te metas más en mis asuntos.
―Brittany, yo me preocupo por ti, no quiero que sufras como yo, no quiero que te pase lo que a mí.
―¡Pero es que yo no soy tú, entiéndelo de una vez!
Tal vez no debí de decir eso porque veo que los ojos de mi mamá se tornan vidriosos, pero ya no aguanto más esta situación.
―Mamá, sé que te preocupas por mí y te lo agradezco, pero créeme que sé defenderme sola en la vida.
―Brittany yo…
―No digas nada, sube al auto y vamos que te llevo a casa.
No quiero hablar más, estoy completamente agotada después de haber dicho todo lo que acabo de soltarle a mi mamá en su cara.
Dentro del auto hay un silencio sepulcral.
Mi mamá está con la mirada fija al frente. Sé que no se esperaba que yo le dijera todo lo que escuchó, pero tiene que entender que su pequeña hija ya creció.
Llegamos a su casa, yo me bajo para entregarle la lámpara de regalo, caminamos hasta la puerta, ninguna ha dicho ni media palabra.
Me paro al llegar al portal y le paso la lámpara a mi mamá y le digo:
―Adiós mamá.
Ella me mira, levanta su barbilla y entra en su casa sin despedirse de mí.
Camino hasta mi auto, me subo, caigo desparramada sobre el asiento y comienzo a llorar.
Hoy ha sido un día fatal para mí, solo quiero llegar a casa, tomar un a baño y dormir profundamente.
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Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hola morra...
Ammmm interesante primer inprecion con la suegra!!!... Si ella se dio cuenta cuanto les falta al resto jajaja
Estoy empezando a odiar a la madre de britt.... Joder que deje vivir su vida a britt y si quiere hacer lo mismo que ella y trompiesa con la "misma piedra" puede que no se caiga como lo hizo ella!!!
Rach ya vio a britt!!! Pobre san ahora jajaja
Nos vemos!
Ammmm interesante primer inprecion con la suegra!!!... Si ella se dio cuenta cuanto les falta al resto jajaja
Estoy empezando a odiar a la madre de britt.... Joder que deje vivir su vida a britt y si quiere hacer lo mismo que ella y trompiesa con la "misma piedra" puede que no se caiga como lo hizo ella!!!
Rach ya vio a britt!!! Pobre san ahora jajaja
Nos vemos!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Que señora mas desesperante!!! Pobre San al conocer a alguien así y más descubriendo quien es :s
Y Britt celosa de la pequeña Rach jajajajaja, espero que reaccione y arregle las cosas con San.
También por fin pudo decirle a su mamá todas las cosas que piensa, espero que la deje de atormentar con todo lo que le paso a ella pues como bien dijo Britt ella no es su mamá.
Y Britt celosa de la pequeña Rach jajajajaja, espero que reaccione y arregle las cosas con San.
También por fin pudo decirle a su mamá todas las cosas que piensa, espero que la deje de atormentar con todo lo que le paso a ella pues como bien dijo Britt ella no es su mamá.
JVM- - Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
3:) escribió:Hola morra...
Ammmm interesante primer inprecion con la suegra!!!... Si ella se dio cuenta cuanto les falta al resto jajaja
Estoy empezando a odiar a la madre de britt.... Joder que deje vivir su vida a britt y si quiere hacer lo mismo que ella y trompiesa con la "misma piedra" puede que no se caiga como lo hizo ella!!!
Rach ya vio a britt!!! Pobre san ahora jajaja
Nos vemos!
Hola lu, jajajajajaaja xD la mejor impresión, no¿? xD jajajajajajaja. Jajajajajaaj es el sexto sentido de una mamá xD jajajajajaja. Mmmm si un poco la vrdd =/ esta haciendo su vida en la de britt =/ JAjajajaajajajaja esk no pueden mejorar las cosas un poco jajajaja. Saludos =D
JVM escribió:Que señora mas desesperante!!! Pobre San al conocer a alguien así y más descubriendo quien es :s
Y Britt celosa de la pequeña Rach jajajajaja, espero que reaccione y arregle las cosas con San.
También por fin pudo decirle a su mamá todas las cosas que piensa, espero que la deje de atormentar con todo lo que le paso a ella pues como bien dijo Britt ella no es su mamá.
Hola, si! Jajajajajaja xD jajajajajaja. Jajajajaja esperemos y rach de alguna y otra maneras las ayude jajaja. Xfin! esperemos y entienda que la vida de ella es la de ella, y la de britt de britt ¬¬ jaajja. Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Cap 16
Capitulo 16
Estoy ya instalada en la oficina para comenzar mi día de trabajo.
Anoche no dormí muy bien ya que, entre los pensamientos de lo sucedió con mi mamá y Santana que se colaba entremedio, me costó mucho conciliar el sueño.
Pienso que tal vez debería ir a pedirle una buena disculpa a Santana por lo sucedió con mi mamá. Ella no merecía ser la víctima de Whitney Pierce y su carácter.
Sí, tengo que ir y hablar con ella.
Sé que aún está enojada conmigo, pero nada pierdo con decirle que siento mucho lo ocurrido.
Llego a su oficina, la que tiene la puerta abierta, pero ella no se encuentra ahí. Tal vez haya ido por un café, así es que me dirijo hasta la sala del café. Entro y la que veo no me causa mucha gracia.
En la sala de café encuentro a Santana como pensaba, pero ella no se encuentra sola. A su lado está Kitty Schuester coqueteando abiertamente con la morena.
Tiene una mano en su cabello mientras habla y le bate las pestañas. Santana le sonríe, no se han dado cuenta de mi presencia.
Por lo visto la morena no es nada de tonta, ahora quiere conquistar a la hija del dueño, claro, y así se asegura el puesto.
Siento que mi estómago se contrae, pero, ¿qué me pasa?
Odio sentir esto.
Decido entrar y tomarme un café.
Aunque mi intención era disculparme con Santana, por el mal rato que le hizo pasar mi mamá, en este momento siento tanta rabia que no le voy a decir nada.
―Buenos días―digo y me acerco hasta donde están las tazas.
Santana se separa de inmediato de Kitty y ella me mira con cara de pocos amigos.
―Buenos días―me responde Santana con mirada seria.
―¡Hola Brittany! ¿Cómo estás?―me dice una efusiva Kitty.
―Muy bien, ¿y tú?
―Estupenda, vine a visitar a San, como se mudó a su nuevo departamento, ya no la veo tanto.
Yo no digo nada, me sirvo una taza de café y comienzo a beberla.
―¿Vas a la reunión Brittany?―pregunta Santana cambiando el tema.
Tal vez no le ha gustado que yo me enterara que tiene un departamento donde, de seguro, se va a llevar a cada conquista que consiga por ahí.
―Claro.
―Ah qué aburridas, no hablen de trabajo en mi presencia―dice la niña de papá―, Mejor hablemos de la fiesta que San dará para inaugurar su departamento.
Miro a Santana a los ojos y veo que está muy sorprendida por lo que ha dicho Kitty.
―Kitty… yo… no…
―¿Me vas a decir que no piensas celebrar que tienes una nueva casa? No te preocupes, si quieres yo te organizo todo. Los invitados, la comida…
―Kitty, no sé si sea buena idea…
―No San, tienes que hacer una inauguración, yo me ocupo de todo, no te preocupes.
No quiero seguir escuchando esta conversación, así es que decido salir de ahí.
―Bueno, vuelvo a mi oficina. Que tengas un buen día Kitty―y tomando la taza de café muy fuerte entre mis manos salgo de esa sala dejando sola a la parejita.
Llego a mi oficina y me siento en mi silla girándola para quedar mirando la inmensidad de la ciudad que es bañada por los rayos del sol matutino.
Bebo un poco más de café y comienzo a pensar en todo lo que ha pasado con Santana.
En todo lo que me ha pasado a mí en estos días desde que la conocí.
Pienso en la chica con que la vi en la tienda de decoración, ¿se la habrá llevado ya a la cama?
Seguro que sí.
Primero pensé que la morena bajita podría ser su novia, pero al verla coqueteando con Kitty, sé que Santana es una mujeriega de mierda que no sería capaz de comprometerse con nadie.
Sacudo mi cabeza para sacar esos pensamientos, pero no sé cómo sacarme esta sensación de celos que me recorre el cuerpo al recordarlo al lado de Kitty.
Nunca debí meterme con Santana.
No quiero que me afecte de esta manera, pero a la vez deseo besarla desesperadamente, apasionadamente. Besar esa carnosa boca que me hace volar fuera de este mundo, que hace que me olvide de todo y de todos, que hace que nada me importe.
Cierro los ojos y tomo una honda respiración para tratar de calmar la rabia que siento en mi interior.
Dentro de poco tengo que entrar en la sala de juntas para una reunión y me encontraré con Santana, de seguro ni me mirará, porque aún se hace la ofendida.
Tengo que aclarar qué es este sentimiento, qué es lo que realmente me pasa con esta mujer.
¿Es solo algo sexual?
Sí, creo que sí.
¿Qué otra cosa podría ser si apenas la conozco?
Esto es una fuerte atracción, pero entonces no debería sentir celos de otras mujeres, no tengo nada con Santana, solo nos unió el deseo carnal que ambas sentimos.
Pienso y pienso y no llego a ninguna parte, a ninguna conclusión.
Mi corazón se acelera al recordar la última vez que estuve con Santana, recordar sus besos y su cuerpo hacen que mi piel se erice y de pronto en mi cabeza resuena algo…
Santana me gusta, me gusta más de lo que quisiera.
Me gusta más de lo que nunca me ha gustado una persona.
Quisiera ir hasta su oficina y abrasarla, sentir su perfume, sentir sus manos.
Yo realmente me estoy volviendo loca y loca de deseo que es mucho peor que cualquier otra cosa.
Luego recuerdo a la morena bajita de la tienda, a cómo la vi hoy con Kitty y me imagino que debe tener un harem de mujeres girando a su alrededor.
Mi sangre se calienta de solo pensar en eso, nunca había experimentado estos celos que siento en este momento.
Me siento vulnerable, sentir celos es lo peor del mundo.
La hora de ir a reunión ha llegado.
Me levanto de la silla, cierro los ojos y respiro profundamente para relajarme un poco.
Salgo de mi oficina y camino hasta llegar a la sala de juntas. Entro y veo a Santana que ya se encuentra sentada a la gran mesa de vidrio. Ella no ha notado mi presencia ya que está con la cabeza gacha leyendo lo que debe ser el informe de la reunión.
Camino hasta la mesa y ocupo uno de los lugares que están frente a ella. Santana levanta la mirada y sus ojos hacen contacto con los míos por unos segundos. Luego vuelve a bajar su vista al papel.
No lo puedo creer, me está ignorando.
Qué se ha creído.
Aún está enojada por haberla echado de mi casa, pero no tiene por qué hacerse la ofendida, lo que pasó entre nosotras para ella no fue nada.
Me entra una rabia porque esta mujer que está ahí me gusta demasiado y eso es terrible.
La sigo mirando fijamente, pero ella no se digna a levantar su vista hacia mí. De pronto veo que una de las comisuras de su boca se eleva en una sonrisa, la que trata de ocultar, pero no lo logra del todo.
Se ha dado cuenta que me tiene mirándola como gato hacia la carnicería…uyyy ¡la odio!
Anoche no dormí muy bien ya que, entre los pensamientos de lo sucedió con mi mamá y Santana que se colaba entremedio, me costó mucho conciliar el sueño.
Pienso que tal vez debería ir a pedirle una buena disculpa a Santana por lo sucedió con mi mamá. Ella no merecía ser la víctima de Whitney Pierce y su carácter.
Sí, tengo que ir y hablar con ella.
Sé que aún está enojada conmigo, pero nada pierdo con decirle que siento mucho lo ocurrido.
Llego a su oficina, la que tiene la puerta abierta, pero ella no se encuentra ahí. Tal vez haya ido por un café, así es que me dirijo hasta la sala del café. Entro y la que veo no me causa mucha gracia.
En la sala de café encuentro a Santana como pensaba, pero ella no se encuentra sola. A su lado está Kitty Schuester coqueteando abiertamente con la morena.
Tiene una mano en su cabello mientras habla y le bate las pestañas. Santana le sonríe, no se han dado cuenta de mi presencia.
Por lo visto la morena no es nada de tonta, ahora quiere conquistar a la hija del dueño, claro, y así se asegura el puesto.
Siento que mi estómago se contrae, pero, ¿qué me pasa?
Odio sentir esto.
Decido entrar y tomarme un café.
Aunque mi intención era disculparme con Santana, por el mal rato que le hizo pasar mi mamá, en este momento siento tanta rabia que no le voy a decir nada.
―Buenos días―digo y me acerco hasta donde están las tazas.
Santana se separa de inmediato de Kitty y ella me mira con cara de pocos amigos.
―Buenos días―me responde Santana con mirada seria.
―¡Hola Brittany! ¿Cómo estás?―me dice una efusiva Kitty.
―Muy bien, ¿y tú?
―Estupenda, vine a visitar a San, como se mudó a su nuevo departamento, ya no la veo tanto.
Yo no digo nada, me sirvo una taza de café y comienzo a beberla.
―¿Vas a la reunión Brittany?―pregunta Santana cambiando el tema.
Tal vez no le ha gustado que yo me enterara que tiene un departamento donde, de seguro, se va a llevar a cada conquista que consiga por ahí.
―Claro.
―Ah qué aburridas, no hablen de trabajo en mi presencia―dice la niña de papá―, Mejor hablemos de la fiesta que San dará para inaugurar su departamento.
Miro a Santana a los ojos y veo que está muy sorprendida por lo que ha dicho Kitty.
―Kitty… yo… no…
―¿Me vas a decir que no piensas celebrar que tienes una nueva casa? No te preocupes, si quieres yo te organizo todo. Los invitados, la comida…
―Kitty, no sé si sea buena idea…
―No San, tienes que hacer una inauguración, yo me ocupo de todo, no te preocupes.
No quiero seguir escuchando esta conversación, así es que decido salir de ahí.
―Bueno, vuelvo a mi oficina. Que tengas un buen día Kitty―y tomando la taza de café muy fuerte entre mis manos salgo de esa sala dejando sola a la parejita.
Llego a mi oficina y me siento en mi silla girándola para quedar mirando la inmensidad de la ciudad que es bañada por los rayos del sol matutino.
Bebo un poco más de café y comienzo a pensar en todo lo que ha pasado con Santana.
En todo lo que me ha pasado a mí en estos días desde que la conocí.
Pienso en la chica con que la vi en la tienda de decoración, ¿se la habrá llevado ya a la cama?
Seguro que sí.
Primero pensé que la morena bajita podría ser su novia, pero al verla coqueteando con Kitty, sé que Santana es una mujeriega de mierda que no sería capaz de comprometerse con nadie.
Sacudo mi cabeza para sacar esos pensamientos, pero no sé cómo sacarme esta sensación de celos que me recorre el cuerpo al recordarlo al lado de Kitty.
Nunca debí meterme con Santana.
No quiero que me afecte de esta manera, pero a la vez deseo besarla desesperadamente, apasionadamente. Besar esa carnosa boca que me hace volar fuera de este mundo, que hace que me olvide de todo y de todos, que hace que nada me importe.
Cierro los ojos y tomo una honda respiración para tratar de calmar la rabia que siento en mi interior.
Dentro de poco tengo que entrar en la sala de juntas para una reunión y me encontraré con Santana, de seguro ni me mirará, porque aún se hace la ofendida.
Tengo que aclarar qué es este sentimiento, qué es lo que realmente me pasa con esta mujer.
¿Es solo algo sexual?
Sí, creo que sí.
¿Qué otra cosa podría ser si apenas la conozco?
Esto es una fuerte atracción, pero entonces no debería sentir celos de otras mujeres, no tengo nada con Santana, solo nos unió el deseo carnal que ambas sentimos.
Pienso y pienso y no llego a ninguna parte, a ninguna conclusión.
Mi corazón se acelera al recordar la última vez que estuve con Santana, recordar sus besos y su cuerpo hacen que mi piel se erice y de pronto en mi cabeza resuena algo…
Santana me gusta, me gusta más de lo que quisiera.
Me gusta más de lo que nunca me ha gustado una persona.
Quisiera ir hasta su oficina y abrasarla, sentir su perfume, sentir sus manos.
Yo realmente me estoy volviendo loca y loca de deseo que es mucho peor que cualquier otra cosa.
Luego recuerdo a la morena bajita de la tienda, a cómo la vi hoy con Kitty y me imagino que debe tener un harem de mujeres girando a su alrededor.
Mi sangre se calienta de solo pensar en eso, nunca había experimentado estos celos que siento en este momento.
Me siento vulnerable, sentir celos es lo peor del mundo.
La hora de ir a reunión ha llegado.
Me levanto de la silla, cierro los ojos y respiro profundamente para relajarme un poco.
Salgo de mi oficina y camino hasta llegar a la sala de juntas. Entro y veo a Santana que ya se encuentra sentada a la gran mesa de vidrio. Ella no ha notado mi presencia ya que está con la cabeza gacha leyendo lo que debe ser el informe de la reunión.
Camino hasta la mesa y ocupo uno de los lugares que están frente a ella. Santana levanta la mirada y sus ojos hacen contacto con los míos por unos segundos. Luego vuelve a bajar su vista al papel.
No lo puedo creer, me está ignorando.
Qué se ha creído.
Aún está enojada por haberla echado de mi casa, pero no tiene por qué hacerse la ofendida, lo que pasó entre nosotras para ella no fue nada.
Me entra una rabia porque esta mujer que está ahí me gusta demasiado y eso es terrible.
La sigo mirando fijamente, pero ella no se digna a levantar su vista hacia mí. De pronto veo que una de las comisuras de su boca se eleva en una sonrisa, la que trata de ocultar, pero no lo logra del todo.
Se ha dado cuenta que me tiene mirándola como gato hacia la carnicería…uyyy ¡la odio!
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Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hola morra....
Britt se va a prender fuego si sigue así... Y con los celos no ed muy buena combinación...
Hasta que que empedo a jugar...y le esta llendo demasiado bien jajaja
A ver hasta donde aguanta britt así???
Nos vemos!
Britt se va a prender fuego si sigue así... Y con los celos no ed muy buena combinación...
Hasta que que empedo a jugar...y le esta llendo demasiado bien jajaja
A ver hasta donde aguanta britt así???
Nos vemos!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hasta cuando este tira y encoge entre ellas???? que se confronten y ya!!!! que pesada es la madre de Brittany!!!!!
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Esa Britt imaginando mil cosas de San.... Que mal porque la esta juzgando sin conocerla, lo bueno es que muere de celos jajajajajajaja
Esperó que pronto hablen !
Esperó que pronto hablen !
JVM- - Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
3:) escribió:Hola morra....
Britt se va a prender fuego si sigue así... Y con los celos no ed muy buena combinación...
Hasta que que empedo a jugar...y le esta llendo demasiado bien jajaja
A ver hasta donde aguanta britt así???
Nos vemos!
Hola lu, jajajajajaajajajajaja si, no¿? jajajajaja. Uff esos son unos loquillos que juegan en tu contra, no¿? ajajajajaja. Jajajajajajajajaajajajjaja eso parece jajajajajaja. Aquí el siguiente para ver eso... espero jajaja. Saludos =D
micky morales escribió:Hasta cuando este tira y encoge entre ellas???? que se confronten y ya!!!! que pesada es la madre de Brittany!!!!!
Hola, nose, nose! espero y pare ya =/ Eso mismo digo yo! Ufff y quedas corta la vrdd ¬¬ Saludos =D
JVM escribió:Esa Britt imaginando mil cosas de San.... Que mal porque la esta juzgando sin conocerla, lo bueno es que muere de celos jajajajajajaja
Esperó que pronto hablen !
Hola, su imaginación no ayuda mucho, no¿? Mal, mal, mal =/ jajajajaja, pero como digo, algo bueno tiene que haber, no¿? jajajaja. Y yo tmbn la vrdd xD Saludos =D
23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Cap 17
Capitulo 17
Santana
No puedo creer todo lo que he pasado en estos días.
Pensé que todo comenzaría a andar de lo mejor cuando me fui con Brittany a su departamento y tuve sexo con ella.
Lo que tanto había deseado desde la fiesta de Halloween por fin se volvía realidad. Me llevó hasta su departamento y nos amamos con pasión. Pero luego de eso algo pasó con ella y me echó de su casa sin más.
La he ignorado todos estos días, ella me humilló al tirarme a la calle en medio de la noche, eso no lo voy a olvidar tan fácilmente.
Luego por casualidad conocí y tuve un pequeño altercado con la mamá de Brittany. La mujer es insoportable y de un carácter terrible, ahora sé de quién heredó su genio La Diabla.
Lo bueno ha sido que ya estoy instalada en mi nuevo departamento y justamente estaba en la tienda de decoración junto a Rachel escogiendo algunas cosas para mi hogar, cuando tuve la mala suerte de chocar con la señora Pierce.
Esa mujer es tremenda, ni siquiera me dejaba hablar, al final apareció Brittany para tratar de salvar la situación.
Rachel que, fue testigo de todo el espectáculo, se fijó en Brittany y en cómo yo la miraba pasmada. Me preguntó que quién era y tuve que decirle toda la verdad, pero tuve que retenerla cuando quiso acercarse a ella para conocerla. Le dije que no era el mejor momento dado las circunstancias y ella lo entendió.
Hoy me encuentro a Brittany en la sala de café y siento rabia porque yo estaba con Kitty que no paraba de coquetearme y ella entró justo cuando la chica me tocaba el cabello, debe de haber pensado lo peor.
Ahora estamos en la sala de juntas, ella está sentada frente a mí y no ha parado de mirarme. Aunque no he levantado la vista puedo sentir la intensidad de su mirada sobre mí. Eso me hace feliz, ella quiere que la mire, pero yo me voy a hacer el duro y la haré sufrir un poquito más con mi indiferencia.
Will entra en la sala de juntas junto con Sam. Mi amigo se sienta frente a mí junto a Brittany, la saluda todo risueño y a mi me dan ganas de tomarlo del cuello y sacarlo de la silla.
―¿Ya te estás preparando para la inauguración de tu departamento?―pregunta el discreto de mi amigo sin ningún preámbulo y veo que Brittany levanta su ceja y me mira enojada.
―No―digo cortante.
―Ni falta que hace―sigue hablando Sam―Yo me ocupo de todo. Tragos, comidas, chicas, todo.
Ahora si que lo mato.
Veo que Brittany se sonroja, ¿de celos tal vez?
Pero qué estoy pensando.
―No sé Sam, no he pensado nada.
―Bueno deberías. Y tú Brittany, ¿quieres venir?―suelta de repente Sam.
¿Qué está haciendo este imbécil?
―No gracias―dice ella visiblemente irritada con la invitación.
―Bueno, tú te lo pierdes. Santana, ¿puedo invitar a las modelos que conocimos en el gimnasio?
Este cabrón me está jodiendo el día y en mi mente suena la frase: Sam, te has ganado una lápida en el cementerio con tu nombre.
―Buenos días―la voz de Will nos interrumpe de pronto―Los cité a esta reunión solo para hablar sobre la oferta que hemos recibido desde Arabia Saudita. Los inversionistas quedaron satisfechos con la propuesta, así es que tenemos luz verde para comenzar a estudiar el mercado y ver dónde tenemos que trabajar más para lograr que el Holding se convierta en el número uno.
Veo que Will está muy contento con esta propuesta y eso me hace feliz a mi también.
―Santana, quiero que te esfuerces al máximo en crear una campaña atractiva para el mercado Árabe. Dime, ¿tienes algo en mente?
―Bueno, la verdad es que me gustaría hablar con los delegados árabes y ver qué es lo que ellos desean. Obviamente será una campaña grande y de seguro tendrán algunas exigencias.
―Está bien, esperaremos a que ellos nos visiten y veremos qué es lo que quieren. ¿Alguien quiere acotar algo?
―Sí―escucho a Brittany decir y todos los ojos de los ahí presentes están ahora sobre ella―, La verdad es que solo le pido a la señorita López que trate de ceñirse al presupuesto. No queremos derrochar dinero en cosas innecesarias por mucho que nuestros clientes sean dueños de pozos petroleros.
Mi cara debe ser una oda a la sorpresa por todo lo que acaba de decir Brittany.
¿Qué pretende?
¿Discutir conmigo delante de todos?
―No creo que tengamos problemas señorita Pierce. Pero si el cliente quiere algo especial para su campaña, no puedo negarme a hacerlo―digo encarándola y desafiándola con la mirada a que me diga algo más.
―Pero si el cliente quiere algo en especial le sugiero trate de hacerlo ajustándose al presupuesto. Además no creo que requiera de tanta parafernalia, supongo que usted sabe, como experta en marketing que es, que el mercado árabe es muy distinto al nuestro―me lanza ella y veo que en su boca se esboza una ligera sonrisa.
Yo me turbo, no sé muy bien qué responderle, ya que el jueguito que ha comenzado la Diabla me comienza a excitar y solo pienso en caminar sobre la mesa, lanzarme sobre ella y besarla hasta dejarla sin aliento.
―Señorita Pierce, lo que yo le sugiero es que se ciña a su área de trabajo. Cuando hable con el cliente sabré lo que realmente quiere y usted tendrá un detallado informe de todo y cada uno de los gastos para que los revise y me de su experta opinión.
Es ella la que ahora se queda sin palabras, puedo ver la ira en sus ojos, puedo ver las ganas que tiene de gritarme alguna grosería.
Tan concentradas estamos librando esta pequeña batalla verbal que, no nos ha importado que una mesa llena de gente, más el presidente del Holding, nos estén mirando y de seguro sacando sus propias conclusiones por la escenita.
―Bien―dice Will―, Creo que ha quedado todo claro. Solo les pido un favor―Will me mira con el ceño fruncido―, Traten de trabajar en equipo. Se los pido como un favor personal, este negocio es muy importante para mí. Ahora los libero para que vuelvan a sus quehaceres. Santana, Te espero en mi oficina ahora.
Ah bueno, ahora de seguro voy a recibir una gran reprimenda por haber enfrentado a Brittany en la reunión.
Todos abandonan la sala de juntas, yo soy la última en salir y me dirijo a la oficina de mi jefe.
Llego hasta la puerta que está abierta y veo que Will habla por teléfono. Me hace una seña para que entre. Yo entro y cierro la puerta detrás de mí y espero de pie a que mi jefe termine con su llamada. Hasta que lo hace y me comienza a hablar:
―Santana, quiero que me expliques qué fue lo que pasó con Brittany en la reunión.
Lo sabía, sabía que eso llamaría su atención, la suya y la de todo el Holding.
―Nada Will―trato de decir con voz calmada―, Solo fue un intercambio de opiniones.
―¿Tú crees que yo nací ayer? Te lo advertí Santana, te dije que con Brittany no.
―Estás equivocado Will…
―Ni una mierda que estoy equivocado. Te pedí encarecidamente que no intentaras nada con Brittany, que la dejaras fuera de tus conquistas.
―No Will, estás equivocado―decido mentirle para que termine con el regaño.
―Tú sigues pensando que yo soy ciego o tonto. ¡Por qué no pudiste hacerme caso en esto! ¡Por qué te metiste con Brittany!
Veo que Will está realmente enojado. Ojalá no tenga alguna enfermedad cardíaca, no quiero cargar con un muerto a cuestas.
―Y tú supones todo eso solo porque Brittany y yo tuvimos un pequeña discusión.
―No fue eso, fue por cómo se enfrentaron, fue por cómo se miraban. Por favor Santana, ¿no podías dejar pasar a Brittany?
―Will, te digo la verdad. No ha pasado nada con Brittany. Además creo que esta conversación deberías tenerla con Sam, es él quien ha invitado a Brittany a salir, no yo.
―Lo sé, sé que mi hijo ha invitado a Brittany a salir y no una sino mil veces y sé que una y mil veces recibirá un no como respuesta.
No sé qué trata de decirme Will.
―Realmente no te entiendo Will.
―Mira, Sam es un don Juan, es mi primogénito, pero no puedo hacerme el ciego de como es su forma de ser. Sé que Brittany no se interesaría nunca en él. En cambio en ti…
En mí… en mí qué.
Odio cuando la gente hace esas pausas como si estuvieran en una película de suspenso.
―Qué quieres decir Will.
―Siento que tú podrías llegar a gustarle a Brittany.
Levanto ambas cejas en sorpresa por lo que acabo de escuchar, él sigue:
―Pienso que puede llegar a sentirse atraída hacia ti. Mira San, Brittany tiene una historia que a mí no me corresponde contarte, solo te diré que la conozco de pequeña y ella ha salido adelante desafiando todo pronóstico. La quiero como a mi hija, igual que a ti te quiero como una, solo quiero el bien para ella.
―Y que yo llegara a gustarle a Brittany es malo―digo un poco triste por el concepto que Will tiene de mí.
―Mira San, Brittany es una persona especial y compleja.
Ni que lo diga, la palabra compleja se queda corta, continua:
―, Pero sé que tú podrías llegar a gustarle y mucho. Es una chica inteligente y a las mujeres inteligentes no solo se les conquista con atenciones si no que desafiando su intelecto y lo que acabo de ver en la sala de juntas, tu como mujer hiciste ese desafío ciento por ciento.
―Will yo no…
―No me digas nada, solo quiero que te alejes de ella, voy a confiar en lo que me dices de que no ha pasado nada entre ustedes.
―Está bien Will, pero antes quiero que me aclares algo.
Él me mira y espera mi pregunta.
―¿Por qué piensas que es malo para Brittany el que yo le guste?
―Porque ella podría enamorarse de ti, ¿estás tú dispuesta a enamorarte San?
Yo no digo nada porque claramente nunca he pensado en el amor.
―Ella se merece lo mejor, merece una persona que la ame y la cuide ¿Estás tú dispuesta a eso San?
Sigo sin responder, Brittany me gusta, pero de ahí a enamorarme hay un gran trecho, él se da cuenta:
―Es lo que pensaba, tú solo piensas en divertirte con una mujer. Te pido que pienses en todo lo que te he dicho, eres una mujer inteligente y sé que sabrás qué hacer.
Una vez más me quedo sin palabras, estoy pasmada por todo lo que me ha dicho Will.
Hasta que por fin logro que mi boca diga algo.
―Bien Will, ¿algo más que me quieras decir?
―No, nada más.
―Bien, entonces vuelvo a mi trabajo.
Me giro sobre mis talones y camino hasta la puerta para salir de la oficina de mi jefe.
Recorro el camino hasta mi oficina hecho una furia. La rabia que siento en este momento es enorme.
Quiero ir hasta la oficina de Brittany y preguntarle qué mierda es lo que pasa por su cabeza.
Me echa de su casa, no quiere saber nada de mí y luego me enfrenta tratando de dejar en duda ante todos mi capacidad en el trabajo. Pero no puedo hacer un escándalo, eso sería aumentar el rumor que de seguro ya recorre los pasillos después de la reunión.
Entro en mi oficina y caigo desparramada en la silla agarrándome la cabeza entre las manos. No sé qué hacer para sacarme esta extraña sensación que me recorre de pies a cabeza.
Por una parte siento rabia porque Will me acaba de regañar como si yo fuera una niña.
Me siento mal por tener que mentirle a mi padrino, pero si ya estaba furioso solo de suponer que algo había pasado entre Brittany y yo, si le confirmaba todo de seguro me asesinaba.
También me siento apenado por el concepto que tiene Will de mí. Y aunque sé que en ciertas cosas él tiene razón, no puedo dejar de sentirme triste.
Y por último tengo una enorme confusión con Brittany. La Diabla me gusta, ahora la deseo más que nunca y no debería ser así después de que me echó como un perro de su casa en plena noche. Pero verla y además que me enfrente me enciende de sobre manera.
Pienso en todo lo que Will me ha dicho de Brittany, de su historia, que ahora estoy más curiosa por conocer y lo de que ella se merece una persona que la ame y la cuide.
Pero yo no soy esa persona, yo no sé lo que es el amor.
Tal vez deba hacerle caso a mi jefe y no pensar más en ella.
Pensé que todo comenzaría a andar de lo mejor cuando me fui con Brittany a su departamento y tuve sexo con ella.
Lo que tanto había deseado desde la fiesta de Halloween por fin se volvía realidad. Me llevó hasta su departamento y nos amamos con pasión. Pero luego de eso algo pasó con ella y me echó de su casa sin más.
La he ignorado todos estos días, ella me humilló al tirarme a la calle en medio de la noche, eso no lo voy a olvidar tan fácilmente.
Luego por casualidad conocí y tuve un pequeño altercado con la mamá de Brittany. La mujer es insoportable y de un carácter terrible, ahora sé de quién heredó su genio La Diabla.
Lo bueno ha sido que ya estoy instalada en mi nuevo departamento y justamente estaba en la tienda de decoración junto a Rachel escogiendo algunas cosas para mi hogar, cuando tuve la mala suerte de chocar con la señora Pierce.
Esa mujer es tremenda, ni siquiera me dejaba hablar, al final apareció Brittany para tratar de salvar la situación.
Rachel que, fue testigo de todo el espectáculo, se fijó en Brittany y en cómo yo la miraba pasmada. Me preguntó que quién era y tuve que decirle toda la verdad, pero tuve que retenerla cuando quiso acercarse a ella para conocerla. Le dije que no era el mejor momento dado las circunstancias y ella lo entendió.
Hoy me encuentro a Brittany en la sala de café y siento rabia porque yo estaba con Kitty que no paraba de coquetearme y ella entró justo cuando la chica me tocaba el cabello, debe de haber pensado lo peor.
Ahora estamos en la sala de juntas, ella está sentada frente a mí y no ha parado de mirarme. Aunque no he levantado la vista puedo sentir la intensidad de su mirada sobre mí. Eso me hace feliz, ella quiere que la mire, pero yo me voy a hacer el duro y la haré sufrir un poquito más con mi indiferencia.
Will entra en la sala de juntas junto con Sam. Mi amigo se sienta frente a mí junto a Brittany, la saluda todo risueño y a mi me dan ganas de tomarlo del cuello y sacarlo de la silla.
―¿Ya te estás preparando para la inauguración de tu departamento?―pregunta el discreto de mi amigo sin ningún preámbulo y veo que Brittany levanta su ceja y me mira enojada.
―No―digo cortante.
―Ni falta que hace―sigue hablando Sam―Yo me ocupo de todo. Tragos, comidas, chicas, todo.
Ahora si que lo mato.
Veo que Brittany se sonroja, ¿de celos tal vez?
Pero qué estoy pensando.
―No sé Sam, no he pensado nada.
―Bueno deberías. Y tú Brittany, ¿quieres venir?―suelta de repente Sam.
¿Qué está haciendo este imbécil?
―No gracias―dice ella visiblemente irritada con la invitación.
―Bueno, tú te lo pierdes. Santana, ¿puedo invitar a las modelos que conocimos en el gimnasio?
Este cabrón me está jodiendo el día y en mi mente suena la frase: Sam, te has ganado una lápida en el cementerio con tu nombre.
―Buenos días―la voz de Will nos interrumpe de pronto―Los cité a esta reunión solo para hablar sobre la oferta que hemos recibido desde Arabia Saudita. Los inversionistas quedaron satisfechos con la propuesta, así es que tenemos luz verde para comenzar a estudiar el mercado y ver dónde tenemos que trabajar más para lograr que el Holding se convierta en el número uno.
Veo que Will está muy contento con esta propuesta y eso me hace feliz a mi también.
―Santana, quiero que te esfuerces al máximo en crear una campaña atractiva para el mercado Árabe. Dime, ¿tienes algo en mente?
―Bueno, la verdad es que me gustaría hablar con los delegados árabes y ver qué es lo que ellos desean. Obviamente será una campaña grande y de seguro tendrán algunas exigencias.
―Está bien, esperaremos a que ellos nos visiten y veremos qué es lo que quieren. ¿Alguien quiere acotar algo?
―Sí―escucho a Brittany decir y todos los ojos de los ahí presentes están ahora sobre ella―, La verdad es que solo le pido a la señorita López que trate de ceñirse al presupuesto. No queremos derrochar dinero en cosas innecesarias por mucho que nuestros clientes sean dueños de pozos petroleros.
Mi cara debe ser una oda a la sorpresa por todo lo que acaba de decir Brittany.
¿Qué pretende?
¿Discutir conmigo delante de todos?
―No creo que tengamos problemas señorita Pierce. Pero si el cliente quiere algo especial para su campaña, no puedo negarme a hacerlo―digo encarándola y desafiándola con la mirada a que me diga algo más.
―Pero si el cliente quiere algo en especial le sugiero trate de hacerlo ajustándose al presupuesto. Además no creo que requiera de tanta parafernalia, supongo que usted sabe, como experta en marketing que es, que el mercado árabe es muy distinto al nuestro―me lanza ella y veo que en su boca se esboza una ligera sonrisa.
Yo me turbo, no sé muy bien qué responderle, ya que el jueguito que ha comenzado la Diabla me comienza a excitar y solo pienso en caminar sobre la mesa, lanzarme sobre ella y besarla hasta dejarla sin aliento.
―Señorita Pierce, lo que yo le sugiero es que se ciña a su área de trabajo. Cuando hable con el cliente sabré lo que realmente quiere y usted tendrá un detallado informe de todo y cada uno de los gastos para que los revise y me de su experta opinión.
Es ella la que ahora se queda sin palabras, puedo ver la ira en sus ojos, puedo ver las ganas que tiene de gritarme alguna grosería.
Tan concentradas estamos librando esta pequeña batalla verbal que, no nos ha importado que una mesa llena de gente, más el presidente del Holding, nos estén mirando y de seguro sacando sus propias conclusiones por la escenita.
―Bien―dice Will―, Creo que ha quedado todo claro. Solo les pido un favor―Will me mira con el ceño fruncido―, Traten de trabajar en equipo. Se los pido como un favor personal, este negocio es muy importante para mí. Ahora los libero para que vuelvan a sus quehaceres. Santana, Te espero en mi oficina ahora.
Ah bueno, ahora de seguro voy a recibir una gran reprimenda por haber enfrentado a Brittany en la reunión.
Todos abandonan la sala de juntas, yo soy la última en salir y me dirijo a la oficina de mi jefe.
Llego hasta la puerta que está abierta y veo que Will habla por teléfono. Me hace una seña para que entre. Yo entro y cierro la puerta detrás de mí y espero de pie a que mi jefe termine con su llamada. Hasta que lo hace y me comienza a hablar:
―Santana, quiero que me expliques qué fue lo que pasó con Brittany en la reunión.
Lo sabía, sabía que eso llamaría su atención, la suya y la de todo el Holding.
―Nada Will―trato de decir con voz calmada―, Solo fue un intercambio de opiniones.
―¿Tú crees que yo nací ayer? Te lo advertí Santana, te dije que con Brittany no.
―Estás equivocado Will…
―Ni una mierda que estoy equivocado. Te pedí encarecidamente que no intentaras nada con Brittany, que la dejaras fuera de tus conquistas.
―No Will, estás equivocado―decido mentirle para que termine con el regaño.
―Tú sigues pensando que yo soy ciego o tonto. ¡Por qué no pudiste hacerme caso en esto! ¡Por qué te metiste con Brittany!
Veo que Will está realmente enojado. Ojalá no tenga alguna enfermedad cardíaca, no quiero cargar con un muerto a cuestas.
―Y tú supones todo eso solo porque Brittany y yo tuvimos un pequeña discusión.
―No fue eso, fue por cómo se enfrentaron, fue por cómo se miraban. Por favor Santana, ¿no podías dejar pasar a Brittany?
―Will, te digo la verdad. No ha pasado nada con Brittany. Además creo que esta conversación deberías tenerla con Sam, es él quien ha invitado a Brittany a salir, no yo.
―Lo sé, sé que mi hijo ha invitado a Brittany a salir y no una sino mil veces y sé que una y mil veces recibirá un no como respuesta.
No sé qué trata de decirme Will.
―Realmente no te entiendo Will.
―Mira, Sam es un don Juan, es mi primogénito, pero no puedo hacerme el ciego de como es su forma de ser. Sé que Brittany no se interesaría nunca en él. En cambio en ti…
En mí… en mí qué.
Odio cuando la gente hace esas pausas como si estuvieran en una película de suspenso.
―Qué quieres decir Will.
―Siento que tú podrías llegar a gustarle a Brittany.
Levanto ambas cejas en sorpresa por lo que acabo de escuchar, él sigue:
―Pienso que puede llegar a sentirse atraída hacia ti. Mira San, Brittany tiene una historia que a mí no me corresponde contarte, solo te diré que la conozco de pequeña y ella ha salido adelante desafiando todo pronóstico. La quiero como a mi hija, igual que a ti te quiero como una, solo quiero el bien para ella.
―Y que yo llegara a gustarle a Brittany es malo―digo un poco triste por el concepto que Will tiene de mí.
―Mira San, Brittany es una persona especial y compleja.
Ni que lo diga, la palabra compleja se queda corta, continua:
―, Pero sé que tú podrías llegar a gustarle y mucho. Es una chica inteligente y a las mujeres inteligentes no solo se les conquista con atenciones si no que desafiando su intelecto y lo que acabo de ver en la sala de juntas, tu como mujer hiciste ese desafío ciento por ciento.
―Will yo no…
―No me digas nada, solo quiero que te alejes de ella, voy a confiar en lo que me dices de que no ha pasado nada entre ustedes.
―Está bien Will, pero antes quiero que me aclares algo.
Él me mira y espera mi pregunta.
―¿Por qué piensas que es malo para Brittany el que yo le guste?
―Porque ella podría enamorarse de ti, ¿estás tú dispuesta a enamorarte San?
Yo no digo nada porque claramente nunca he pensado en el amor.
―Ella se merece lo mejor, merece una persona que la ame y la cuide ¿Estás tú dispuesta a eso San?
Sigo sin responder, Brittany me gusta, pero de ahí a enamorarme hay un gran trecho, él se da cuenta:
―Es lo que pensaba, tú solo piensas en divertirte con una mujer. Te pido que pienses en todo lo que te he dicho, eres una mujer inteligente y sé que sabrás qué hacer.
Una vez más me quedo sin palabras, estoy pasmada por todo lo que me ha dicho Will.
Hasta que por fin logro que mi boca diga algo.
―Bien Will, ¿algo más que me quieras decir?
―No, nada más.
―Bien, entonces vuelvo a mi trabajo.
Me giro sobre mis talones y camino hasta la puerta para salir de la oficina de mi jefe.
Recorro el camino hasta mi oficina hecho una furia. La rabia que siento en este momento es enorme.
Quiero ir hasta la oficina de Brittany y preguntarle qué mierda es lo que pasa por su cabeza.
Me echa de su casa, no quiere saber nada de mí y luego me enfrenta tratando de dejar en duda ante todos mi capacidad en el trabajo. Pero no puedo hacer un escándalo, eso sería aumentar el rumor que de seguro ya recorre los pasillos después de la reunión.
Entro en mi oficina y caigo desparramada en la silla agarrándome la cabeza entre las manos. No sé qué hacer para sacarme esta extraña sensación que me recorre de pies a cabeza.
Por una parte siento rabia porque Will me acaba de regañar como si yo fuera una niña.
Me siento mal por tener que mentirle a mi padrino, pero si ya estaba furioso solo de suponer que algo había pasado entre Brittany y yo, si le confirmaba todo de seguro me asesinaba.
También me siento apenado por el concepto que tiene Will de mí. Y aunque sé que en ciertas cosas él tiene razón, no puedo dejar de sentirme triste.
Y por último tengo una enorme confusión con Brittany. La Diabla me gusta, ahora la deseo más que nunca y no debería ser así después de que me echó como un perro de su casa en plena noche. Pero verla y además que me enfrente me enciende de sobre manera.
Pienso en todo lo que Will me ha dicho de Brittany, de su historia, que ahora estoy más curiosa por conocer y lo de que ella se merece una persona que la ame y la cuide.
Pero yo no soy esa persona, yo no sé lo que es el amor.
Tal vez deba hacerle caso a mi jefe y no pensar más en ella.
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Hola, como se dieron cuenta si cambio el nombre del foro xD pero no pasa nada, solo es el nombre SIGAN! publicando, leyendo y comentando. Solo cambien "gleeklatino.com" por "gleelatino.forosactivos.net"
Pero, como les digo SIGAN! comentando, publicando y leyendo! Saludos =D
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23l1-*-*-* - Mensajes : 5832
Fecha de inscripción : 12/08/2013
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hola morra....
Es hora de que san empiese a recapacitar lo que puede llegar a sentir por britt???...
Si se van a empezar con sus cruces con britt... Arde Troya????
Por lo menos que hablen en forma civilizada....!!! Aunque puede que el nuevo proyecto las junte o las mate????
Nos vemos!!!
Es hora de que san empiese a recapacitar lo que puede llegar a sentir por britt???...
Si se van a empezar con sus cruces con britt... Arde Troya????
Por lo menos que hablen en forma civilizada....!!! Aunque puede que el nuevo proyecto las junte o las mate????
Nos vemos!!!
3:)-*-*-* - Mensajes : 5621
Fecha de inscripción : 06/11/2013
Edad : 33
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Hola, hola!!!!!
que lio que tienen estas mujeres!!!!!!
Saludos
que lio que tienen estas mujeres!!!!!!
Saludos
monica.santander-*-*- - Mensajes : 4378
Fecha de inscripción : 26/02/2013
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Otra advertencia de Will para San, solo que esta vez mas fuerte.... Aunque lo que hizo fue agrandar el interés hacia Britt.
Jajajajaja y muy divertida la pelea, siendo ahora la única forma en que sacan sus sentimientos jajajaja
Y pues haber como siguen las cosas.... Y si San le hará caso a Will y se alejará o al contrario ¿?
Jajajajaja y muy divertida la pelea, siendo ahora la única forma en que sacan sus sentimientos jajajaja
Y pues haber como siguen las cosas.... Y si San le hará caso a Will y se alejará o al contrario ¿?
JVM- - Mensajes : 1170
Fecha de inscripción : 20/11/2015
Re: [Resuelto]FanFic Brittana: Dulce Travesura (Adaptada) Epílogo
Bueno, es la verdad lo que dijo will, pero estara segura santana de que no pde darle a brittany lo que ella merece???????
micky morales-*-*-*-* - Mensajes : 7138
Fecha de inscripción : 03/04/2013
Edad : 54
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