(FIC-Klaine) "Escenas borradas" Winter “The Talk”

- Hola Blaine Warbler, Sam Warbler—dijo Brittany susurrando y sentándose a la mesa con los chicos.
- Hola Britt, ¿Por qué murmuras?—quiso saber Blaine mientras comía unas papa frita.
-¿”Sam Warbler”?—dijo Sam mirándola raro.
-Estamos en la biblioteca, se supone y debemos hablar así.
-Britt,… este es el comedor—aclaro Sam apuntando con sus dedos las bandejas del almuerzo.
-Pues, el profesor de Ingles, dijo que los libros son el alimento del alma, ¿Qué quiso decir con eso?
Blaine rio y miro a Sam divertido, quien negó con su cabeza también sonriendo.
-No te preocupes por eso, ¿Qué quieres?...
-Quiero saber a qué hora son las audiciones, siendo la “Segunda Nueva Rachel”, merezco el protagónico—aseguro Britt, arreglando su cola de caballo.
-Sera una competencia bastante fuerte, todos quieren el rol de Sandy…
-Pero yo soy rubia y tengo ascendencia Austriaca, soy perfecta…
-De Australia, Sandy era de Australia—corrigió Blaine empequeñeciendo sus ojos un tanto.
-¿Qué dije yo?—pregunto Britt, sin dar cuenta de su error y sacando un par de papas de la bandeja de Blaine.
-Dijiste Austr…da lo mismo, ¿Qué canción vas a cantar?
-¿Me llamaste Sam Warbler?—volvió a preguntar Sam, como recordando de pronto lo que sucediera al comienzo de la conversación.
-“Hopelessly Devoted to You”, es perfecta para expresar lo que siento desde que Santana me dejo y que “Too Cute” comenzó a incluir videos de perros en desmedro de los gatos.
-Yo iba a cantar esa canción—dijo Blaine apuntándose a sí mismo con su palma abierta sobre el pecho.
-¿Por qué?...
-Como que “¿por qué?”
-Porque si estuvieras triste te lo concedo, como cuando recién Kurt te abandono para casarse con Rachel, pero ahora…ahora que te casaste con Sam, ni siquiera debes preocuparte de que te deporten.
-¿Qué?—exclamo en tono de pregunta Blaine, mientras sonreía sorprendido—Britt, eso no tiene nada que ver con la realidad.
-Así es Britt, eso no es cierto, yo no soy gay—agrego Sam riendo también— ¿por eso me llamaste “Sam Warbler”?
-Claro, eso hacen los casados, adoptan el nombre del otro, Courtney Cox-Arquette, Giuliana Depandi-Rancic y Olivia Newton –John, cuando se caso con Elton John…
-Hay un par de cosas erradas en lo que acabas de decir, prime…—Blaine autocensuró su discurso, al ver que Sam le hacia un gesto con sus manos como diciendo “Ni siquiera lo intentes”— ¡no importa!, ¿no es posible que cantes otra canción?
-Bueno, ahora que se que no te volviste a casar, creo que podría hacerlo…
-Qué tal si cantas “Look at me, I’m Sandra Dee”, es fresca, movida y alegre, como tu—explicó Sam.
-No quien es Sandra Dee…
-Estoy de acuerdo…—agrego Blaine poniendo el entusiasmo que no tenia
-Lo pensare, hablare con Lord Tubbington esta noche, el siempre da buenos consejos, incluso cuando esta bajo la influencia el éxtasis —concluyo Brittany, retirándose despreocupada.


Marzo de 2019

-¡¿Por qué no fuiste a la función esta noche?!—exclamo Kurt, antes que cualquier cosa, al sentir que Blaine abría la puerta del departamento.
-Hola Kurt…
-Hola… ¡¿Por qué no fuiste a la función esta noche?!—repitió con su cabeza colgando hacia atrás en el brazo del sofá, donde se encontraba viendo televisión.
-Lo siento… tuve que hacer cosas en el estudio—respondió Blaine descolgándose su bolso y dejando la guitarra.
-Creí que ya habías terminado el disco—insistió Kurt viéndolo acercarse al revés por la posición en la que estaba.
-Hay cosas que hacer luego de terminar un disco, detalles, otros asuntos—explico Blaine de cuclillas frente al brazo del sillón y de cara a la cabeza invertida de Kurt.
-Está bien…—dijo estirando sus labios para que Blaine lo besara.
-¿Me disculpas entonces?—pregunto dándole el beso requerido.
-Por supuesto…
-¿Qué tal la función hoy?
-Llena como siempre, habían cronistas de cómo 3 o 4 periódicos, Lily y Richard hablaron con ellos…—conto, al tiempo que normalizaba la posición de su cabeza—te grabe el juego.
-¿Si?... por eso te amo, ¡gracias!
-¿Quieres verlo ahora?
-No, voy a cambiarme de ropa primero y a ver a nuestro hijo después, ¿Julianna se fue?
- Hace media hora…
- ¿Y Henry?...
-Durmiendo como el ángel que es…
-¿Ese es un programa de osos polares?—pregunto Blaine apuntando con su mentón el televisor, mientras se desabotonaba la camisa.
-¡Sí!, no sabía que ver, pero resulto bastante interesante, y son súper tiernos, así es que cuando nos decidamos por una mascota, quiero que sea un oso polar.
-OK…—dijo Blaine riendo y dirigiéndose a la habitación para cambiarse de ropa.
-¡Son muy inteligentes, así es que no nos dará problemas!—grito Kurt comiendo palomitas y exacerbando las cualidades de los osos polares.
-¿Ningún problema?, ¿ni siquiera cuando alcance el peso de 500 kilos?—quiso saber Blaine volviendo a la sala y acomodándose la camiseta azul que le hacía juego con sus pantalones grises de ejercicio.
-Ningún problema, insisto en que el relator dijo que eran muy inteligentes. ¿Te traigo una cerveza?, pareces cansado—opino Kurt al ver que Blaine se desplomaba sobre el sillón como si fuera un saco de patatas de 100 kilos.
-Sí, pero yo voy por ella…—advirtió Blaine utilizando la rodilla de Kurt para darse el impulso que necesitaba para levantarse.
-¡Esos pantalones deberían estar censurados Sr. Anderson-Hummel!—exclamo Kurt comiendo un puñado gigante de palomitas, dejando caer unas cuantas en el sillón y parte de su torso.
-Pues son los pantalones mas cómodos del universo, por lo que Sr. Hummel-Anderson, no dejare que Usted ni nadie los censure—advirtió Blaine inclinándose sobre Kurt y recogiendo con sus labios las cuatro palomitas que habían quedado en su cuello y pecho.
-OK…—dijo Kurt encogiendo su hombro debido a las cosquillas—¿pongo el juego? De acuerdo con las personas que hablaron después, fue extremadamente interesante.
-¿Los comentaristas?—pregunto, mientras sacaba algo de su bolso.
-Los sujetos con los grandes fonos en los oídos—explico Kurt moviendo sus manos como si estuviera sosteniendo unos grandes fonos en sus propios oídos.
-Los comentaristas—sentencio Blaine, dejándose caer de nuevo en el sofá, sin antes dejar un sobre de papel encima de la mesa de centro.
- ¿Lo pongo?...
- No, mas tarde…
-¿Qué es eso?
- Ya lo sabrás… ¿tu quieres una?—pregunto Blaine apuntándolo con su cerveza a medio tomar.
-No, te robo de la tuya—dijo tomándola y bebiendo— ¿quieres palomitas?...un momento, ¿comiste algo?
-Sí, si comí, no te preocupes—dijo sacando un puñado de palomitas del tazón que Kurt mantenía en su regazo
-¿Seguro?...
-Seguro…—afirmo sonriendo y tomando el control remoto del televisor.
-¡Oye!, ahora nunca sabré que paso con el bebé de oso polar, no tenían comida ni nada—reclamo Kurt al ver que Blaine apagaba el programa.
-Estoy seguro que sobrevivirá…no te aflijas—dijo, al tiempo que tomaba el sobre de papel y se lo entregaba Kurt.
-¿Qué es esto?—pregunto devolviéndole la cerveza, limpiándose las manos en el pantalón del pijama y dejando el tazón de palomitas donde antes estaba el sobre.
-Ábrelo…
-Está bien…
Blaine se quedo observando a Kurt, como lo hacía siempre desde el minuto en que se enamoro de él, no quería perderse ningún detalle de su reacción ante lo que estaba a punto de descubrir.
-¡BLAINE TU DISCO!- exclamo tomándolo con delicadeza, como lo haría si tuviera entre sus manos la zapatilla de cristal de la Cenicienta.
-Me lo entregaron hoy día, por eso me demore y no pude ir a tu función, sé que he hecho esta ceremonia 2 veces antes, pero tengo la corazonada que esta será la más importante de todas… ¿Qué te parece?
-¡Es perfecto!... ¿estas son nuestras manos?—pregunto Kurt, haciendo referencia a la foto en blanco y negro de un par de manos entrelazadas que ocupaban gran parte de la carátula y que aparentaba ser un cartel pegado con cinta adhesiva en una pared de madera desvencijada y decolorada, donde se podía leer “My Universe” “de Blaine Anderson”, escrito con un tipo de letra que asemejaba al de las máquinas escribir de los años 30
-¿Te gusta?
-¿Es la foto de nuestra boda?
- Así es…—dijo Blaine sacado el “booklet” de la caja y desdoblándolo—incluí también, estas otras 6 que tomamos ese día, esas son las canciones, los créditos, y todo lo que un álbum de 15 canciones debe tener—agrego apuntando las diferentes partes, a medida que explicaba.
-Blaine…
-Me dijeron además, que quieren otro álbum antes del segundo semestre del próximo año, y que en el verano habrá una gira por la costa oeste.
-¿De verdad?—dijo Kurt al borde de las lagrimas y olvidándose totalmente del destino del bebé de oso polar.
-Si, así es que firme otro contrato y logre que me dejaran libertad para crear los temas y que en la próxima portada aparezcamos los dos.
-¿Los dos?...
-Si, en una sesión de fotos total y absolutamente profesional.
-¿Y la gira, cuando…donde?
-Bueno, comienza en Julio por Seattle, Portland, luego por San Francisco y finaliza en Los Angeles y San Diego, ¿Me acompañaras verdad?
-Por supuesto, Henry y yo ya estamos en el avión, ¿Cuándo lo lanzaran?—quiso saber Kurt doblando el librito con cuidado y poniéndolo dentro de la caja, para terminar por sostener el disco cerca de su pecho.
-El viernes, se supone que habrá prensa y mucha gente, por lo que necesito desesperadamente que estés conmigo—pidió Blaine acariciándole un muslo.
-Obvio que si, Blaine… ¡Esto es maravilloso!—exclamo Kurt ya derramando un par de lagrimas y moviéndose sobre el sillón para terminar montado sobre el regazo de su esposo.
Blaine lo recibió dándole un beso y con sus manos en las caderas de Kurt, lo movió sobre él para terminar de acomodarlo.
-¿Por qué pusiste nuestras fotos?
-Porque todo te lo debo a ti…
-¿De qué hablas?, tu eres el talentoso y lo has sido desde siempre.
-Tal vez, pero el talento no es nada si no hay inspiración y tú me inspiras Kurt, cada día, con cada una de tus acciones. Con la forma en que me amas, con cómo eres con nuestro hijo y porque de manera sutil y paciente, hiciste de nosotros una familia, y esto—dijo Blaine tomando el disco—es algo que no habría conseguido sin ti…te amo…
-¿Aun?...
-Siempre…
Kurt sintió que la emoción lo desbordaba, con los brazos alrededor del cuello, lo abrazo con fuerza, diciéndole al oído “Yo también te amo”
-¿Sabes?, con lo que me pagaron por la película y con las ganancias que comience a tener cuando el disco se venda, podremos por fin cambiarnos a la 5th Avenue., como siempre has querido.
-Pero tu sabes que con lo que he ganado hasta ahora con la obra, podemos demás costear un lugar así.
-Lo sé…pero soy yo el que debo encargarme de eso—advirtió Blaine mientras le acariciaba la cara, el cuello y el mentón.
-¿Por qué?...
-Porque yo prometí cuidar de ti cuando te propuse matrimonio, y no quisiera faltar a ninguna de mis promesas.
-Hasta ahora no has faltado a ninguna—advirtió Kurt, dándole otro beso.
-¿Ninguna?, ¿seguro?...
-Seguro, es más, la más importante de todas la has cumplido desde el primer día…
-¿Malcriarte lo mas que pueda?...
- No, Cheesecake en el refrigerador todo el tiempo—dijo Kurt sonriendo divertido—¿Escuchémoslo?...—pregunto desmontándose de Blaine y procediendo a poner el disco en el CD Player.
-Pero si conoces todas las canciones…
-Sí, pero escucharlas desde aquí es diferente…—insistió Kurt, mostrando el CD con ambas manos como modelo de concurso.
-¿No despertara Henry?—pregunto Blaine subiendo los pies en el sofá, como si se acomodara en su propia cama.
-No despierta cuando hay fiestas, menos lo hará con tu maravillosa música—respondió tomando el control del aparato y ajustando las bandas del ecualizador, para que se escuchara perfecto. Volvió al sillón y se acostó de panza sobre Blaine, con su cabeza en el pecho de este.
-¿Listo?—pregunto apuntando con el control hacia el equipo de sonido.
-Listo—respondió Blaine besándole la frente.
Kurt volvió a acomodarse, como lo haría un gato sobre una superficie mullida, presionó “Play” y el disco comenzó a sonar. Blaine tarareaba despacio cada una de las canciones y contaba las anécdotas que rodearon la grabación de cada una. Kurt manejaba toda esa información, el propio Blaine se la había contado meses antes, cada vez que volvía tarde del estudio, y se quedaban hablando hasta deshoras. Sin embargo, se quedo sobre él escuchándolo cantar y sintiendo en sus brazos y hombros como los dedos de Blaine dibujaban acordes de guitarra.


-Creo que nunca terminare de entender a Brittany.
-Mujeres, “no se puede vivir con ellas… ni sin ellas”—dijo Sam, mientras acompañaba a Blaine hasta su casillero.
-Bueno, de eso, yo no sé nada, además…—trato de seguir Blaine, pero sé que quedo observando la puerta de su casillero.
-¿Estás bien?, vamos “Habla con Wolverine”—sentenció Sam hablando como Mathew McConaughey lo haría.
- ¿No es Hugh Jackman, quien interpreta a “Wolverine”?—pregunto Blaine mirando a Sam con una mueca divertida.
-Sí, ¿Por qué?...—respondió este encogiéndose de hombros, como no encontrando la relación entre una cosa y la otra.
-Da igual…
-¿No te explique el otro día que los amigos están para ayudarse?
-Sí, y gracias, es solo que soy bastante reservado con mis cosas y…, está bien—dijo al ver que Sam levantaba una ceja—es solo que… como te dije el día de las elecciones, vine a Mckinley por Kurt, solo por él, y ahora que ni siquiera estamos juntos, no sé si vale la pena seguir aquí…
-¿Aquí en el pasillo o aquí en Mckinley?...
-En Mckinley, como puedo estar aquí si todo me lo recuerda a él, empezando por estas fotos—dijo Blaine, quitándolas de la puerta y guardándolas dentro de un libro—si estuviera en Dalton, todo se…
-¡WOW!, eso no lo puedes hacer.
-¿Por qué no?...
-Primero porque eres el presidente, segundo…
-Pero tu asumirías como Presidente, ¿no es ese el sueño de todo vicepresidente?, ¿que el presidente en ejercicio muera o se vuelva incapacitado, para sumir ellos?, si estoy fuera de Mckinley, creo que cuenta como discapacidad.
-¿En serio?..
-No has visto “VEEP”, o “Commander in Chief”, bueno esa ultima la cancelaron…—se autocorrigió Blaine al ver que Sam ponía la cara de Puck en clase de geometría.—el asunto es que lo harías fantástico.
- Pues yo no quiero el cargo, no así, además el club Glee te necesita, eres la nueva Rachel, sin ti liderando estamos más que perdidos.
-Los nuevos chicos son bastante buenos.
-¿Estás hablando en serio, verdad?...
-Tú serias un buen líder del grupo, ¿no te acuerdas para las seccionales del año pasado?
-¡Ah!, cuando me acusaste de venderme a mí mismo…—recordó Sam apoyándose en el casillero de junto
-¿Aun me odias por eso?—pregunto Blaine sonriendo y recordando aquella vez, que casi llega a las manos con él.
. NO, por supuesto que no, además fue más el trabajo que hicimos todos que mis movimientos de cadera lo que nos llevo a ganar aquella vez.
-Creo que ambas cosas contribuyeron, y tu puedes hacer ambas—advirtió Blaine apuntándolo con un libro.
-Ahora sí que me estoy preocupando, ¿en serio has considerado el volver a Dalton?
-Sam, cuando todos se enteren de lo que paso entre Kurt y yo, nadie querrá hablarme, todos adoran a Kurt, y en realidad no los culpo por ello…—respondió Blaine cerrando su casillero de un solo golpe.
-Pero es algo entre ustedes, es como si todos comenzaran a odiar a Rachel por que termino con Finn o a Mercedes porque me dio la patada antes de irse a Los Angeles.
-Es diferente, cuando recién llegue aquí, tuve que hacerme un espacio, delegando los solos, soportando las pesadeces de Finn… en cambio en Dalton…
- Pero...
-En fin, si quieres después de la última clase, te ayudo a escoger la canción—dijo Blaine cruzándose el bolso y comenzando a caminar.
-¡Blaine!...
-Nos vemos Sam…—dijo perdiéndose en el pasillo siguiente.