Re: (FIC-Klaine) "Escenas borradas" Glee “10 days for Christmas”

por Klainefan Sáb Jul 23, 2016 3:56 pm

Glee

«4th of July»

Julio de 2040

-¿Estas sonriendo?... —pregunto Blaine mirando a su esposo.

-Lo estoy…

-¿Por qué?

-Porque estoy feliz…

-¿Feliz de conducir por las apacibles calles de Westerville? —agrego con un ojo en él y el otro en su teléfono que acaba de recibir un par de mensajes.

-No… —respondió alargando al «o»— estoy feliz, porque pudimos hacer coincidir nuestras agendas y disfrutar con nuestra familia este día de la Patria— agrego encogiendo sus hombros y sonriendo complacido.

-¡Ah!... me parece muy justo, y aunque me costo un par de futuros días libres… también me alegra el poder haberme tomado un par días.

-¿Cómo que un par de días libres?... ¿de que estas hablando Blaine Anderson-Hummel?

-De que sacrificios debieron hacerse en pos de la Patria, pero no te preocupes, no renuncie a ningún día importante.

-Eso espero… ¿aún no sabes si…?... ya sabes… ¿el próximo año? —pregunto Kurt bajando un poco el tono de su voz para que ni Lizzie ni Noah escucharan esa parte de la conversación.

-Aun no… —contesto rascándose un poco la cabeza— lo siento… —dijo mirándolo de medio lado.

-Está bien… aunque esta espera en la que me tienes es bien desesperante.

-Lo siento… —repitió Blaine mirando las calles del barrio de su infancia.

-¿Estás seguro y no sabes nada?...

-Seguro…

-¿Y ese mensaje que acaba de llegarte?, ¿no será la respuesta que esperamos?

-No… bueno… no lo sé…

-¿Qué tal si lo ves y sales de dudas?

-¿¡Qué murmuran tanto!?... es de mala educación decirse secretos si hay más gente presente… ¡hola! —dijo Lizzie asomándose entre los asientos delanteros.

-Nadie está diciendo ningún secreto Princesa.

-Eso es verdad… y aunque así fuera no deberías de ser tan curiosa… ahora vuelve a tu lugar, no quiero una infracción que arruine mi fin de semana de vacaciones y distinciones varias— termino por decir Kurt sonriendo, Lizzie se echó hacia atrás en el asiento murmurando cosas y poniendo diferentes caras, Blaine sonrió al ver las actitudes de ambos, tomo su teléfono y se dispuso a revisar los mensajes que le habían llegado.

-¿¡Qué!?... —murmuro acercándose la pantalla a la cara, como si tratara de convencerse de lo que estaba leyendo estaba bien leído.

-¿Qué?... —dijo Kurt mirándolo de reojo— ¿qué paso?... ¿quién te escribe?

-Nadie… —respondió como un acto reflejo.

-¿Cómo nadie?... ¿no es del sello?

-No, nada de sello—agrego guardándose el teléfono en uno de los bolsillos más interiores de su chaqueta.

-¿Es tu Mamá entonces ?... —pregunto Kurt mirándolo de reojo.

-Es… es mi Mamá —respondió Blaine cerciorándose de que había apagado el aparato.

-¿Y por qué no le contestas?, estamos a menos de tres calles.

-Precisamente por eso… ¿para que le voy a contestar si ya vamos a llegar?

-¡Blaine!

-¿Qué?... es la verdad... además ya se lo que quiere decirme.

-¿Y eso es?

-Eso es… que ya llegaron todos, mi hermano Cooper de los primeros, y que solo faltamos nosotros…

-¡Ay «Papáblen»!, ¡pobre de mi abuelita!… yo hablare con ella… —dijo Lizzie desde el asiento trasero donde viajaba junto Noah, saco el teléfono desde su bolso además de un pequeño espejo y algunos productos de maquillaje, Noah miro junto a «Desmond» a su hermana, con toda la atención del mundo, mientras esta hablaba con su abuela y corregía su maquillaje, todo al mismo tiempo.

-¿Estas bien?... pareces preocupado… y no quiero ser paranoico, pero recibiste ese texto y se te cambió la cara, el color y todo —sentencio Kurt al verlo mover el teléfono de un bolsillo a otro, Blaine guardo silencio y desvió su mirada hacia la calle— si es por todo el humo que nos rodea, no deberías preocuparte… las múltiples parrilladas de nuestros compatriotas provocan esto, no es que nos vayamos a encontrar con una desgracia cuadras más adelante o algo.

-Lo se… además estoy seguro y el 60% de todo este humo proviene de la casa de mis padres.

-Claro… y estoy muy de acuerdo con mi suegra cuando dice que tu Papá ya debería conocer esa parrilla que demoro años en construir… aunque debo agregar que si ya ha llegado mi propio Padre, el porcentaje de humo es perfectamente aumentable… sonríe… —dijo estirando su brazo para acariciarle el mentón.

-La «AbuPam» dice que ya llegaron todos, que solo faltamos nosotros.

-Te lo dije… —murmuro tanteando su teléfono nuevamente.

-Gruñón… —agrego Kurt por lo bajo— ¿te dijo algo de Henry cariño? —pregunto mirando a su hija por el espejo retrovisor.

-Sí, que ya había llegado también, y que él, los abuelos y el Tío Cooper se están encargando de todo.

-Le subo al 90% si esta mi hermano entonces… —dijo Blaine sonriendo divertido.

-¿Ya llego Henry Anderson Hummel?

-Llego «Goblin»?

-¿Y porque no se vino con nosotros?, también cabe en el auto.

-Cabe… pero como él es súper extra estudioso, se puso a hacer un curso en el verano… ¿puedes creerlo «Goblin»?, ¿estudiar en verano?... ¡hola!

-Princesa, no hables mal de tu hermano en frente de Noah.

-¡Ay «Papáblen»! nadie está hablando mal de nadie… solo es una conversación privada del grupo del asiento trasero… ¿verdad «Goblin»?

-Si… ¡Papá!... —exclamo el pequeño como si recordara 50 cosas diferentes de un segundo a otro.

-¿Qué sucede cariño? —contesto Kurt mirándolo por sobre su hombro.

-¿Dónde está mi traje?

-¿Cuál traje bebé?

-¡Mi traje!… ¡el del “pesidente Lincon”!, el abuelito Burt Hummel me pidió que hiciera mi presentación hoy en la fiesta del país, me lo pido «emcaresederamente», ¿te acuerdas que dijo?

-Me acuerdo cariño… tranquilo —respondió Kurt estacionando el auto en frente de la casa de sus suegros— y no debes preocuparte, tu traje del Presidente Lincoln está colgado junto al del «Papáblen» y el mío en el «zipper» correspondiente.

-Oh… —dijo Noah tranquilizándose de inmediato.

-¿A qué hora es eso en el ayuntamiento Papá? —pregunto Lizzie mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad y ayudaba a su hermanito a hacer lo mismo.

-A las siete cariño… —respondió quitando la llave y tomando algunas cosas desde la guantera y compartimiento entre los asientos— ¿trajiste ropa cariño? —agrego mirándola con preocupación.

-No, pienso ir desnuda..

-¡¿Qué?!

-¡Ay Papá obvio!, ¿alguna vez he lucido mal?

-Nunca… cosa de la que estamos más que orgullosos por cierto… ¿verdad Blaine?

-…

Kurt miro el silencio de su esposo un par de segundos para luego voltearse otra vez hacia sus hijos.

-Cariño, ¿te encargas de tu hermanito?, con el «Papáblen» nos encargaremos del equipaje.

-Si… obvio… ¡vamos «Goblin»!... ¡por dios, todo huele espectacular! —exclamo abriendo la puerta del auto— ¡amo tus costillitas abuelito!... aunque quemadas y pasadas de cocción, pero ¡las amo!— volvió a gritar mientras se bajaba junto a Noah.

-Bajare todo… —dijo Blaine bajándose también, Kurt rodeo el auto por el lado contrario y se paró delante de la maletera, su esposo lo quedo mirando como si no entendiera como iba a sacar el equipaje si él estaba impidiéndoselo— ¿qué estás haciendo? —pregunto mirándolo a él y a su alrededor.

-Parándome aquí…

-Eso es más que obvio… ¿por qué?

-Porque demando que me expliques que te sucedió, y aunque corro el riesgo de que me llames psicótico, paranoico o algo peor, estoy más que seguro que tu actitud cambio cuando recibiste ese texto, así es que como dije… demando que me cuentes de quien era y de que se trataba.

-Kurt…

-Ese es mi nombre… yo lo sé y tú lo sabes… ahora cuéntame… —insistió mirándolo con los brazos cruzados.

-…

-Mira, sé que las festividades a veces nos ponen… no se... nostálgicos por decir algo… pero debería ser Navidad o Año Nuevo… incluso todas esas católicas que hay durante el año... pero ponerse así por el Cuatro de Julio… vamos… hasta Ron Kovic tenía ganas de celebrar cada año…

-Tenía menos después de la guerra de Vietnam..

-No, pero igual tenía ganas… Blaine… —dijo acercando un poco su cuerpo al de él— si era un mensaje del sello diciéndote que tu súper, anhelado y merecido año sabático no sucederá… no hay problema, puedes decírmelo…

-No era del sello, te lo juro, lo puedes comprobar si quieres… —dijo Blaine sacando su teléfono desde lo tenía prácticamente escondido.

-No revisare tu teléfono, el que piense que tu creerás que soy un paranoico, no me hace uno, menos actuar como uno, cuéntame…

-Kurt… primero prométeme que no te pondrás triste o enojado.

-No puedo prometer eso… lo sabes… oye, soy tu esposo, puedes decirme lo que sea… —dijo Kurt al ver que Blaine comenzaba a complicarse más de lo que le hubiese gustado.

-Escucha… sé que este fin de semana es algo que ansiabas desde hace mucho… y no me gustaría que nada lo arruinase para ti…

-Y ese mensaje que recibiste… ¿puede hacer eso?

-Puede…

-¿Qué te escribieron que puede arruinar nuestros planes?... ¿era del ayuntamiento?, ¿se arrepintieron de nombrarme «Hijo ilustre de Lima»?

-No…

-¿Seguro?… porque me daría lo mismo si es así —Blaine lo miro de medio lado como diciéndole «eso no es verdad y lo sabes»— está bien, no me daría lo mismo, me parecería desconsiderado y falta de profesionalismo, en especial porque antes de venirnos hice espacio para el diploma y las llaves de oro de la ciudad que me darán.

-Las llaves no son de oro…

-La mía lo será…

-Por supuesto… y tendrás ambas cosas, tampoco era del ayuntamiento el mensaje que recibí.

-¿De quién era entonces? —insistió poniendo caras de impaciencia.

-De mi Mamá…

-¿Perdón?

-Era de mi Mamá… me envió un mensaje para decirme, prácticamente lo mismo que le dijo a Lizzie…

-Ok…

-Pero además de eso… me dijo otra cosa…

-¿Qué cosa?...

-Que me tenía una sorpresa.

-¿Una sorpresa?... ¿qué sorpresa? —pregunto estirando un poco su cuello.

-Me dice que… —respondió sacando su teléfono para leer textualmente el mensaje al que hacía referencia— «tengo una sorpresa para ti, invite a un ex compañero tuyo de Dalton… me encontré con su esposo en mi reunión de las “VDMSF”»

-¿Qué es la «VDMSF»?

-Voluntarias de médicos sin Fronteras…

-¿Tu mamá pertenece a eso? —quiso saber Kurt arrugando el entrecejo.

-A eso y a no sé cuántas organizaciones mas…

-¿Y ese es todo el mensaje?... —insistió su esposo sin caer en la cuenta de quién se trataba ese ex compañero de Dalton— ¿no se supone que encontrarse con ex compañeros siempre es una dicha? ¿de quién se trata?

-De alguien que está casado con un médico…

-Casado con un médico y ex estudiante de Dalton —repitió soltando una risa— el único que se me ocurre es… —Blaine lo miro fijo como diciéndole que quien pensaba era exactamente de quien estaba hablando— ¡¿QUÉ?!... ¡NO!... —exclamo llevándose ambas manos a la boca.

-Lo siento… —dijo Blaine rascándose la cabeza.

-¡No!..¡Blaine!... ¡con un demonio!… ¡de todas las personas de este mundo!… ¿Sebastian está aquí? —agrego tomándose esta vez la frente.

-Al parecer… aunque no se bien si se trata de él, mejor esperamos, puede ser cualquier otra persona —dijo Blaine tratando de alivianar la situación.

-¡Si claro!… como si todos tus ex compañeros eran gays y se casaron con un doctor… ¿por qué?.... ¡¿Por qué?! —dijo empuñando sus manos al cielo como pidiendo una intervención divina a su padecer.

-No lo sé Kurt… pero insisto que esperemos…

-¿Por qué?, ¿crees que se tratar de otra persona?.

-Tal vez… pero por lo que pone mi Mamá en su mensaje, es un poco obvio que se trata de Sebastian.

-¡Oh por dios!... ¡ni siquiera terminaba de creerlo hasta que me lo dijiste!... ¿qué demonios hace aquí?

-Kurt… —dijo Blaine tratando de tomarlo por los hombros— ¿por qué tenemos que aproblemarnos por alguien que ni si quiera tiene que ver con nosotros?

-¡Por favor!... el siempre tendrá que ver con nosotros, si no, ¿por qué crees que acepto esta invitación?… todo es amabilidad con él al principio, después termina mostrando los dientes y no hablo de manera metafórica, bien lo sé yo… —dijo apartándose.

-¿No le dijiste unas cuantas la última vez que lo vimos? —añadió Blaine volviendo a acercarse.

-Así fue… pero también te recuerdo que fue él quien se quedó con la última palabra, cosa que he masticado sin poder tragar hasta el día de hoy…

-Entonces… toma esto como la oportunidad de que aquello no se repita y puedas decir tú la última palabra esta vez.

-¿Crees que voy a hacer una escena en la casa de tus padres?... ¿qué pasa contigo?

-Por supuesto que no… solo digo que si la oportunidad se presenta, tienes esa posibilidad, entre tanto humo como está saliendo… nadie lo notara —dijo Blaine corrigiéndole el peinado a la altura del flequillo.

-Al fin la falta de experticia culinaria de tu Papá servirá para algo… —respondió esbozando una sonrisa tímida.

-Por supuesto… —agrego dándole un pequeño beso— ¿entremos?... —dijo sacando el equipaje.

-Prométeme algo antes… —pidió Kurt sacando el par de bolsos más pequeños.

-Por supuesto… —respondió su esposo cerrando la maletera.

-Promete que, si el universo esta en mi contra y esta persona a la que tu Mamá hace referencia, es efectivamente el diablo de Sebastian… no me dejaras solo por atender sus requerimientos.

-Obvio que no te dejare solo…

-Prométemelo..

-Te lo prometo, te prometo que me tendrás pegado a tu lado como un mono a un árbol… —sentencio sonriendo mientras avanzaba hacia la entrada.

-¿Tu eres el mono en esa analogía? —quiso saber Kurt como si aquello fuera lo más importante de todo.

-Lo soy… —contesto riendo.

-Bien… siempre es bueno aclarar ese tipo de cosas —añadió cogiéndolo del brazo.

por Gabriela Cruz Mar Jul 26, 2016 10:08 pm

Hola Isa, un capítulo genial y aparece Sebastián de nuevo, por favor no tardes con el siguiente capítulo ya que lo dejas en lo más importante, te deseo una excelente semana y sabes prefiero mil veces a Sebastián que a la odiosa de Rachel, te mando un beso,.

por Klainefan Miér Jul 27, 2016 3:48 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa

Hola Gaby

, un capítulo genial y aparece Sebastián de nuevo, por favor no tardes con el siguiente capítulo ya que lo dejas en lo más importante

Lo se... mi aldo siniestro...

, te deseo una excelente semana y sabes prefiero mil veces a Sebastián que a la odiosa de Rachel, te mando un beso,.

Gracias linda y yo hasta prefiero a Karofsky antes que a Rachel... buena semana para ti tambien

por Klainefan Miér Jul 27, 2016 3:53 pm

Glee

«4th of July»

Part II

Julio de 2040

-¿Crees que voy a hacer una escena en la casa de tus padres?... ¿qué pasa contigo?

-Por supuesto que no… solo digo que si la oportunidad se presenta, tienes esa posibilidad, entre tanto humo como está saliendo… nadie lo notara —dijo Blaine corrigiéndole el peinado a la altura del flequillo.

-Al fin la falta de experticia culinaria de tu Papá servirá para algo… —respondió esbozando una sonrisa tímida.

-Por supuesto… —agrego dándole un pequeño beso— ¿entremos?... —dijo sacando el equipaje.

-Prométeme algo antes… —pidió Kurt sacando el par de bolsos más pequeños.

-Por supuesto… —respondió su esposo cerrando la maletera.

-Promete que, si el universo esta en mi contra y esta persona a la que tu Mamá hace referencia, es efectivamente el diablo de Sebastian… no me dejaras solo por atender sus requerimientos.

-Obvio que no te dejare solo…

-Prométemelo..

-Te lo prometo, te prometo que me tendrás pegado a tu lado como un mono a un árbol… —sentencio sonriendo mientras avanzaba hacia la entrada.

-¿Tu eres el mono en esa analogía? —quiso saber Kurt como si aquello fuera lo más importante de todo.

-Lo soy… —contesto riendo.

-Bien… siempre es bueno aclarar ese tipo de cosas —añadió cogiéndolo del brazo, soltó un poco de aire y miro a su alrededor en todo momento, como si temiera que a quien no deseaba ver, aparecería tras los arbustos del jardín o algo parecido— ¡oh por dios!… ¡ese es su auto!

-¿Cómo? —dijo Blaine casi llegando a la puerta.

-¡Esa SUV que está ahí!... ¿es su auto verdad?

-No lo se Kurt… ese día fueron anunciados como todos los visitantes, no los fui a buscar al estacionamiento —agrego disponiéndose a abrir la puerta.

-Faltaría mas… ¡y claro que es su auto!, tiene un adhesivo que dice “Yo amo Washington” en el vidrio trasero… —sentenció empequeñeciendo sus ojos, como si tratara de leer algo indescifrable.

-¿Por ese adhesivo concluyes que es él?, puede ser cualquier persona.

-Claro… como es habitual que todos los políticos visiten Westerville… es él, lo se… me pregunto qué quiere compensar con ese vehículo tan grande —termino por decir Kurt mirando a su esposo con la ceja bien levantada.

-A mí no me mires así, no tengo idea de que estas hablando…—respondió Blaine alzando sus manos como en gesto de inocencia.

-¡Blaine! —exclamo dándole unos cuantos golpes con uno de los bolsos que cargaba.

-Ok… escucha… —dijo deteniendo su entrada— si ese es su auto y Sebastian está adentro, no te dejare solo como te lo prometí, y agrego que tendrá que pasar sobre mi si quiere ser pesado contigo o decirte algo que te incomode… ¿de acuerdo?

-De acuerdo… —respondió en medio de un gesto infantil.

-Ahora… ¿qué tal si tú vas a acomodar nuestras cosas y las de Noah a mi antiguo cuarto y yo averiguo que sucede?

-Claro… yo te dejare solo con Sebastian… ¿no llevas acaso casi treinta años conociéndome?

-¿Qué quieres hacer entonces?

-Primero, vamos a dejar nuestras cosas… los dos, luego vamos a la cocina… los dos, a ver lo que puede y no puede comer nuestro hijo y después, como última instancia, vamos a averiguar que sucede, los dos…—sentenció apuntándolo.

-Ok… —dijo Blaine sonriendo— me agrada todos esos «dos» que acabas de mencionar, es súper extra sexy... —agrego mordiéndose el labio mientras se acercaba un poco.

-¿En serio?... —pregunto Kurt de vuelta de lo más meloso— ¿crees que el humo sirva para distraer otras situaciones?

-¿Qué situaciones?

-No lo sé… —añadió abrazándolo por el cuello— situaciones… —repitió dando un par de besos.

-Me encantan las situaciones…

-Y a mi…

-¡Papá!... ¡«Papáblen»!... ¡sucedió algo «incredible»! —exclamo Noah llegando hasta donde sus padres estaban.

-Cariño… ¿no estabas con tu hermanita? —pregunto Kurt apartándose de su esposo y bajando hasta la altura de su hijo, se quitó los bolsos del hombro y lo tomo de las manos.

-Sí, pero Lizzie Anderson Hummel está hablando con Henry Anderson Hummel, le dio un golpe por estudiar en el verano.

-Seguro y fue una broma hijo… —aseguro Blaine agachándose también.

-Lo se… los hermanos no se pegan…

-Claro que no… ahora dinos que cosa sucedió tan increíble bebé…

-Sucedió que están los Papás de Gable Crawford Smythe… pero Gable Crawford Smythe no está... —respondió tomándose la cabeza.

-Vaya… esa noticia nos ahorró todo el plan que hicimos… —murmuro Kurt mirando de soslayo a su esposo.

-¿Tú los viste hijo?, ¿o la abuelita te conto que tal vez vendrán?

-Yo los vi… —exclamo Noah señalándose los ojos— están en el patio con el humo.

-Genial… —dijo Kurt susurrando nuevamente.

-Todo estará bien… —añadió Blaine acariciándole la espalda a manera de consuelo.

-¿Qué estará bien?... —pregunto Noah subiendo sus gafas.

-La parrillada cariño… ¿recuerdas que te gusta la comida del cuatro de julio?

-Si… —contesto el pequeño sobándose el estómago— pero primero debo ir al baño —agrego enseñando sus manos.

-Entonces… —agrego Kurt incorporándose— lo que haremos es ir con el «Papáblen» a acomodar nuestras maletas como primera cosa, te refrescas y lavas tus manitos, después nos cercioraremos que todo lo que te gusta realmente lo puedes comer y después… ¡comeremos! … ¿te parece bien?

-¡Súper bien! … —contesto levantando su mano empuñada.

-Perfecto… —dijo tomándole la mano, Blaine cogió el resto de los bolsos y se dispuso a subir junto a su esposo y a su hijo.

-¡Chicos!... ¡ay que maravilla! —dijo la Señora Anderson apareciendo desde la cocina, llevaba un paño de cocina en el hombro y dos fuentes con ensaladas en sus manos, dejo todo en la mesa del recibidor y saludo a cada uno de los recién llegados con un abrazo y unos cuantos besos.

-Hola Mamá… —respondió Blaine saludando de vuelta.

-Hola Señora Anderson… —agrego Kurt recibiendo otro abrazo.

-¿Cómo están?... Noah me dijo que estaban hablando cosas de casados… por eso no entraban… —señalo Pam haciéndole un cariño a su nieto cuando explicaba lo de los casados— ¿está todo bien?

-Todo está perfecto Mamá… ¿cómo estas tú?

-Bien cariño… soy invencible y lo sabes… ¿y ustedes?... ¿se quedaran aquí supongo?

-Si… —respondió Kurt enseñando el par de bolsos que se había colgado en el hombro— de hecho queríamos… —agrego apuntando la escalera.

-¡Ay pero por supuesto!... suban… les arregle el cuarto de Blaine como siempre, aunque tuve que acomodar a Noah con ustedes, Cooper se quedara aquí… —agrego sonriendo de lo más complacida.

-¿Aquí?, ¿por qué?, ¿no tiene esta vez reservas en un hotel elegante de Westerville?, ya sabes, ¿dónde no se quien, conoció a no sé cuánto? —pregunto Blaine mirando hacia el patio.

-¡Ay cariño!, obvio que las tiene… pero escogió la casa de sus padres… ¿no es genial? —agrego sonriendo aún más.

-Y gratis también…

-Lo es… es genial Señora Anderson —dijo Kurt dando una mirada de reprobación a su esposo— subiremos entonces —añadió haciendo el ademan de comenzar a caminar.

-Claro, claro… vayan… yo llevare esto… no hay parrillada sin maíz asado y ensalada de patatas —dijo tomando las dos fuentes— ahora no sé cómo llevare los condimentos— agrego tratando de acomodar las fuentes en una sola mano como si fuera una malabarista experimentada.

-Te ayudo… —se adelantó en decir Blaine devolviéndose el par de pasos que había dado, dejo las maletas agrupadas al final de la escalera y de dio un beso a su esposo, diciendo que subiría enseguida, Kurt miro de reojo hacia el patio por si es que todo aquello de los condimentos era una treta organizada por Sebastian, comprobó que no y termino por subir junto a Noah, Blaine se le quedo viendo un instante como si no lo fuese a ver en un mes o más.

-¿Qué necesitas llevar?... ¿Qué? —dijo al ver que su madre lo miraba haciendo una mueca tierna con su boca.

-Me encanta que mires a tu esposo como si cada separación fuese a durar un mes o más… —respondió poniendo cara de enamorada.

-Las ventajas de casarte con el amor de tu vida… —contesto caminado hacia la cocina— ¿Qué necesitas llevar?

-Lo condimentos cariño… —respondió su mamá apuntando hacia uno de los gabinetes de la cocina— tu Papá quiere hacer el aderezo secreto para condimentar sus costillas … bueno no «sus» costillas… pero tú me entiendes ¿verdad?

-Siempre Mamá… —dijo Blaine sonriendo, tomo unas cuatro botellas de vidrio más dos frascos de dos portes diferentes— ahora… —añadió leyendo un par de etiquetas— ¿cómo mantendrá el secreto de su aderezo, si ya están todos aquí?

-No lo sé cariño… ese ya es asunto de tu Papá… llego Henry… ¿te lo dije?

-No, Lizzie fue quien nos contó…. me muero por saludarlo… —dijo mirando hacia donde estaban todos.

-Está muy bien… cada vez más grande… ¿cómo es que no para de crecer?

-No lo sé… asumo y salió a su abuelo…

-Claro, Burt es un gigante escondido entre nosotros… —dijo Pam soltando una risa— hijo… ¿recibiste mi mensaje?

-¿Qué mensaje?...

-El de tu amigo que invite… ya llego por cierto… —dijo Pam como emocionada.

-Ah… claro… —respondió Blaine dejando todo sobre la mesa que tenía en frente, se cruzó de brazos y apoyo el trasero en el fregadero— Mamá, con respecto eso… y no quiero que pienses que estoy siendo irrespetuoso o algo, pero… ¿¡en qué demonios estabas pensando!?

-¿Cómo?... —dijo Pam dando un respingo divertido.

-Lo que escuchaste…

-Pero… ¿por qué?… creí que este joven era tu amigo de Dalton… ¿qué sucedió?

-En breves palabras, Kurt lo odia…

-¿¡Cómo!?... —volvió a decir la Señora Anderson repitiendo lo del respingo.

-Eso, básicamente Kurt lo odia…

-¿Desde cuándo?

-Desde siempre Mamá…

-¡Ay cariño!… no tenía idea… —dijo Pam tomándose el pecho.

-Lo se… y no te culpo... pero ya sabes…

-Pero… ¿cómo que lo odia?… ¿le hizo algo cuando estuvieron en tu casa el año pasado?, el que es el más alto de los dos me lo dijo… ¿es verdad?

-Y ese debe ser Sebastian… y lo es… estuvieron en nuestra casa el año pasado, Sebastian nos ayudó cuando Noah tuvo el accidente en que se quebró el brazo, ¿te acuerdas? —Pam hizo un gesto positivo con su cabeza— bueno, allí al parecer todo el odio que Kurt le tenía… o que le tiene más bien, resurgió… y no era tu deber saberlo, pero si es mi deber advertírtelo por si surge algún pleito o conversación incómoda en tu parrillada de este año —Pam se tomó la cara con las dos mano y se quedó como pensando— ¿cómo se te ocurrió invitarlo?

-¡Ay cariño!... no lo sé… pero cuando fui a mi reunión de la «VDMSF» el esposo de tu amigo estaba allí, y ¡oh por dios!... —dijo Pam blanqueando los ojos, moviendo sus manos y dando un pequeño salto, todo al mismo tiempo— era el doctor más guapo que nos había visitado desde que existe la organización… es más, es el doctor más guapo que he visto en toda mi vida…

-Y Papá acaba de sentir un par de pinchazos en la nuca...

-¡Ay hijo!… tu Papá es tu Papá, el amor de vida, el padre de mis hijos… nunca pensaría en engañarlo como bien te lo he dicho… solo estoy aclarando los hechos aquí… en fin… —dijo batiendo sus manos como dispersando sus pensamientos— empezamos a hablar, salió el tema de Dalton y allí lo supe todo… me conto que estaban aquí por un seminario, un congreso o no sé qué, que estarían solos para el 4 y entonces termine invitándolos… ¡oh por dios! —exclamo de pronto— ¿Kurt no me va a odiar?, ¿o sí?

-No Mamá… —dijo Blaine tomando los condimentos nuevamente, se acercó a ella y la medio abrazo con frascos y todo— Kurt no te odiara.. solo… solo trata de que Sebastian no se acerque mucho a mí y todo estará bien —termino por decir saliendo por la puerta de la cocina que daba al patio trasero.

-Cuidado cariño… —dijo Kurt mientras abría la puerta de la antigua habitación de su esposo, Noah entro de los primeros y se metió al baño para asearse como era su deseo. Kurt dejo los bolsos sobre la cama y se paró en la ventana para observar a quienes ya estaban celebrado. Cooper hablaba de cerca con el Señor Anderson, como si le diera consejos por lo bajo de cómo evitar tanto humo, Lizzie estaba abrazada de Burt y Henry de Carol, todos tenían vasos en las manos y los cuatro conversaban con Sebastian y Tyler, que reian y se tocaban como si fueran la pareja más bien avenida de todo el mundo, Kurt blanqueo los ojos al recordar que él sabía que aquello no era cierto.

-Papá… ya me «drefesque» —dijo Noah saliendo del baño.

-¿Cerraste el agua bebé? —pregunto Kurt sin apartar su vista de lo que observaba por la ventana.

-Si… — contesto acercándose a él— ¿Papá?... ¿qué paso con Gable Crawford Smythe?

-…

-¿Papá?... —insistió Noah jalándole la ropa— ¿Papá?

-¿Cómo cariño?... —dijo Kurt mirándolo por fin.

-¿Estas triste acaso?

-¿Qué?... ¡no!… no bebé… hoy pasaran cosas muy bonitas, no tengo porque estarlo…

-¿Y porque no me contestabas?

-Estaba distraído bebé… discúlpame… —añadió apartándose de la ventana, tomo a su hijo de la mano y se sentó con él en el borde la cama— ¿qué me peguntabas?

-Preguntaba que, qué paso con Gable Crawford Smythe, ¿por qué no está con sus Papás?

-No lo sé bebé… tal vez esta con sus abuelos, o visitando a algún amigo u otro familiar por ejemplo.

-Pero sus Papás son su familia… ¿por qué no está con ellos?, ¿estará enfermo con fiebre?

-No lo sé cariño... ¿qué tal si cuando bajemos con el «Papáblen» preguntamos por él?.

-Si… y después debo ponerme mi traje… el abuelito Burt Hummel me dijo que podía hacer mi «aptuacion» después del almuerzo.

-Pues me parece una idea excelente y un horario muy apropiado… —aseguro Kurt mirándolo un instante— cariño… ¿puedo preguntarte algo?

-Si… eres mi Papá…

-Lo soy… escúchame… —agrego acariciándole la cara— ¿qué opinas de eso de actuar?, ¿te gusta?

-Me gusta… además que obtuve un 10, la Señorita Katrhyn Barrett, dijo que mi barba y gorro eran «incredibles».

-Lo se… estábamos contigo, ¿te acuerdas?

-Si… —dijo Noah arreglando sus gafas.

-Entonces… ¿no te gustaría hacer más cosas relacionadas con la actuación?, lo haces muy bien y con el «Papáblen» podríamos inscribirte en algunos talleres y cosas así —dijo Kurt mientras le acariciaba el cabello. Noah movió su boca fruncida de un lado a otro, se llevó una mano al mentón y se quedó en silencio un instante como si reflexionara algo de la mayor importancia.

-¿Tengo decir de «immedato»?

-No cariño… —respondió su Papá dándole un beso en la frente— solo quiero que sepas que si esto te gusta, todos te apoyaremos como lo hemos hecho con todos tus intereses.

-Si lo hago… ¡seré como tú!… —agrego Noah dándole un abrazo, Kurt sonrió sorprendido y le dio otro par de besos esta vez en el pelo.

-Solo si quieres cariño… —le dijo soltando un suspiro.

-Lo pensare… ¿ahora esperaremos al «Papáblen»? —pregunto echándose hacia atrás en la cama.

-Ahora esperaremos al «Papáblen»… —repitió Kurt recostándose también.

por Gabriela Cruz Sáb Jul 30, 2016 2:58 am

Hola Isa, como estas linda?, espero con ganas el encuentro entre Sebastián y Kurt, te mando un beso y sigue así con la familia Anderson Hummel y sobre todo con mi Noah, te deseo un feliz fin de semana.

por Klainefan Sáb Jul 30, 2016 3:36 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa, como estas linda?

Hola Gaby, muy bien y tu?

, espero con ganas el encuentro entre Sebastián y Kurt,

Si!!!... aver que sucede!!!

te mando un beso y sigue así con la familia Anderson Hummel y sobre todo con mi Noah, te deseo un feliz fin de semana.

Seguiré con esta historia, te lo prometo, pero ahora se me ocurrió esta otra, espero y te guste. Gracias linda y buen fin de semana para ti tambien

por Klainefan Sáb Jul 30, 2016 3:40 pm

Glee

«Officer Anderson»

Septiembre de 2022

-¿Cuándo te vas a ofrecer para llevarme esto? —pregunto Kurt haciendo el gesto de quien carga algo extra pesado.

-¿Cómo?

-¡Esto!... —insistió repitiendo el gesto— lo he cargado desde el estacionamiento del teatro hasta mi camerino, después de ahí hasta el estacionamiento otra vez y ahora lo mismo… y estoy agotado… la función fue extenuante, de verdad…

-Dame eso… —dijo Blaine quitándoselo de las manos— ok… no sé si sabes, pero esto esta extra liviano —agrego meneándolo.

-Lo se… pero yo estoy extra cansado.

-¿Cuándo vas a dejar de ir y venir cargando esto?… —pregunto Blaine insistió en lo liviano que el bolso estaba— perfectamente podrías dejarlo en el teatro —agrego abriendo la reja del ascensor.

-¡¿Estás loco Blaine Anderson-Hummel?!, ¡jamás dejaría que alguien tocara mi vestuario!… no lo he hecho antes y claramente no lo empezare a hacer ahora —dijo metiéndose en el elevador.

-¿Lo haces porque Rachel lo hace? —insistió Blaine mirándolo de medio lado.

-«Pardon?»... ¿desde cuando mis decisiones tiene que ver con lago que hace o deja de hacer Rachel Berry? —Blaine lo volvió a mirar ceñudo pensando si debía responder a aquello o no— lo hago porque es necesario y punto —insistió corrigiendo su peinado en una de las paredes espejadas.

-OK… —dijo su esposo marcando el número 13— vaya dia… espero y al menos Henry este despierto... —añadió mirando los números.

-¿Porque dices eso?, ¿sabes qué hora es?

-Lo se… es solo que entre mi trabajo y el tuyo, siento que no he hablado con él hace siglos.

-¿No te estas arrepintiendo de acompañarme cada función?, ¿o sí?

-No por supuesto que no… sabes de sobra que me encanta verte actuar… y que la gente te ovacione, y presenciar que los medios están esperándote para hacerte una entrevista… me siento muy orgulloso de ser yo con quien te vas a la cama.

-Sexy y adulador como siempre —dijo Kurt sonriendo como el que más— si no estuviera tan cansado, te juro y presionaría ese botón rojo para que esto se detuviera y poder así hacerte cosas en el piso— agrego acercándosele.

-¿Sabías que hay cámaras aquí? —agrego mirando el cielo raso del elevador.

-No…

-Pues las hay…

-Bueno, le pedimos luego la cinta la Señor Jenkins y así tendremos nuestro primer video sexual… —insistió dando un tono rasposo a su voz cuando hablaba de lo «sexual».

-¿Estás hablando en serio? —quiso saber Blaine mirándolo por sobre el hombro.

-No… —contesto riendo— esa es una fantasía que nunca he tenido, ni nunca tendré… —aseguro apartándose— ahora… volviendo a lo de nuestro hijo… no nos hemos perdido de nada, sabes bien que el desayuno es sagrado y que allí hablamos con él todo lo que es posible de hablar con un niño de cinco años… por lo demás… yo si deseo que este dormido o el sueldo de Julianna vera un recorte a fin de mes…

-Entonces… por el bien de Julianna y su salario, me retracto de lo que dije… —dijo Blaine abriendo la reja del ascensor, se apartó hacia un lado para dejar salir a su esposo primero y este le dio un beso en la mejilla como recompensa a aquel derroche de galantería.

-Señor Anderson… Señor Hummel… ¿qué tal la función? —pregunto la niñera como primera cosa al momento que los vio aparecer en la cocina.

-Hola Julianna… muy bien como siempre… —respondió Kurt dejando sus cosas sobre uno de los muebles— ¿mis hijos? —pregunto señalando el «baby monitor» de Lizzie.

-Ambos durmiendo… hace ya bastante rato —contesto la mujer comenzando a alistarse para partir, Blaine hizo un gesto de desagrado al escuchar aquello y Kurt lo miro haciendo un puchero solidario.

-¿Henry estaba bien?... ¿hablo contigo?... —pregunto como si efectivamente no hubiese hablado con él hace siglos..

-Si Señor Anderson, llego muy contento de la escuela, me dijo que ya había escogido su traje para Halloween, que era «súper perfecto» y que los involucraría a los cuatro.

-¿De verdad?... —dijo Kurt sonriendo.

-Si… —añadió Julianna tomándose el pelo en un moño bien abundante— además que trajo esto —dijo tomando un papel doblado en cuatro y que mantenía junto a ella sobre la mesa de la cocina— no tuve al intención de leerlo, pero lo traía en la mano.

-¿Qué es?... —pregunto Blaine al tiempo que desdoblaba el papel.

-Es la información sobre la primera «PTA» de la escuela… es la semana entrante… —explico cruzándose la cartera

-¿«PTA»?... enserio —dijo Kurt arrebatando el papel de las manos de su esposo— ¡vaya!… —exclamo mientras terminaba de leer— ¡me siento un padre tan adulto!… —agrego sonriendo.

-¿Irán los dos?... porque si es así les pido que me avisen con anticipación, para organizarme y poder cuidar a Lizzie.

-Por supuesto que iremos los dos… haz espacio de inmediato en tu agenda querida… —señalo Kurt poniendo la citación en la puerta de la heladera.

-Ok… me organizare con mi esposo en cuanto llegue a casa… Señor Anderson… llego lo que estaba esperando,.

-¿De verdad? —pregunto Blaine poniendo cara de satisfacción, travesura e impaciencia, todo al mismo tiempo.

-Si… deje la caja en su estudio como me lo pidió.

-Gracias Julianna… —agrego sonriendo.

-¿Qué cosa?... ¿Qué estabas esperando?

-¿Qué?... ¡ah!... no es nada… es decir, si es algo… es… es una pieza para la mesa de sonido, el «fader» para controlar lo que entra en el ordenador estaba fallando y la «gain line»…

-¡Ay por favor! —exclamo Kurt como si le estuvieran hablando de una mugre inmunda— no necesito saber todo eso… de hecho... nadie necesita saber todo eso… ¿verdad Julianna?

-…

-¿Julianna? —repitió al ver que la mujer se queda mirando a Blaine como si necesitara una explicación de la explicación que acaba de recibir.

-¿Cómo?... —pregunto luego de otro par de segundos.

-Te quedaste un tanto distraída…

-¿Si?… vaya… disculpe Señor Hummel… es… es tanta palabra de cosas que uno conoce… —dijo tomando su teléfono— ¿mañana? —agrego desde la puerta.

-Mañana… —repitió Kurt haciendo un gesto de obviedad con sus manos.

-Muy bien... adiós Señor Hummel, adiós Señor Anderson.

-Adiós querida…

-Adiós Julianna… ¿te acompaño? —agrego Blaine haciendo el ademan de seguirla hasta la salida.

-No… por favor… llevo aquí más de cuatro años, se perfectamente dónde está la salida… gracias Señor Anderson —termino por decir la niñera dando a su patrón otra mirada un tanto reprobatoria.

-¿Henry primero y después Lizzie? —dijo Blaine mirando a su esposo.

-Y después a la cama por favor… te juro y me puedo quedar dormido aquí mismo —respondió Kurt haciendo como si de verdad podía quedarse dormido allí mismo.

-Esta crema para las manos, es la mejor crema que he podido comprar… —dijo Kurt mientras se metía en la cama esparciéndose el producto entre sus dedos.

-Eso es lo más profundo que se ha dicho en esta cama Señor Kurt Hummel-Anderson… —dijo Blaine acomodándose sobre unos de sus lados.

-Lo se… —agrego este soltando una risa, tomo su teléfono y comenzó a responder algunos mensajes y a anotar cosas en su agenda de la semana.

-Creí que solo querías dormir… —dijo Blaine acercándose un poco a él.

-Es lo que quiero… —respondió moviendo su cabeza de un lado a otro como si se auto tratara una dolencia en las cervicales— pero necesito responder algunas cosas y por sobre todo hacer que este aparato me recuerde otras…

-¿Qué cosas?

-La reunión en la escuela de Henry por ejemplo… un momento… —dijo mirando lo que estaba en su pantalla de más de cerca— la reunión de nuestro hijo es un jueves… —agrego mirándolo.

-¿Si?...

-Si… ¿podrás ir verdad?

-Obvio que podre ir… ¿por qué lo preguntas? —dijo Blaine al tempo que metía su mano por debajo de la camiseta de su esposo.

-Porque es el día en el que ensayas con tu banda… ¿qué harás?

-Cambiar el ensayo para otro día…

-¿Y puedes hacer eso?

-Puedo…

-¿Seguro?...

-Mucho… —respondió dándole un beso en un brazo.

-Genial… —agrego escribiendo las ultimas cosas en su teléfono, se volteo hacia la mesa de noche y lo dejo encima justo al lado de la lámpara, se acomodó junto a su esposo entre los cobertores y le dio un par de besos, pequeños y dulces al principio, pero queriendo algo más después.

-Creí que estabas cansado…

-¡Vaya si eres «mata pasiones» Blaine Anderson-Hummel! —exclamo trepándose en él y siguiendo igual con los besos— sabes que puedo olvidar el cansancio si tú haces la mayor parte del trabajo.

-¿Y eso es justo en tu cabeza? —pregunto acariciándole el cabello.

-Mucho… así como también es súper… extra… justo cuando recibo cosas de ti, sin esperar nada a cambio…

-¿Hablas de regalos?

-De eso y otras cosas que solo yo sé y que tú no te das cuenta… —respondió dando otro par de besos esta vez en la quijada y cerca del cuello— pero lo más, más, más justo de todo, y que ya llega a ser digno de esos superhéroes que tanto te gustan… es cuando me sorprendes haciendo algo que yo no espero… —añadió metiéndole las manos por debajo de la ropa, Blaine sonrió casi en cámara lenta, como si ya tuviera en su cabeza algo planeado y esperaba el momento justo para llevar a cabo su plan, una señal de su esposo o algo parecido— ¿Qué fue eso? —agrego Kurt incorporándose al advertir el gesto de su esposo.

-¿Qué cosa?

-Esa mueca que acabas de hacer… —dijo montándose sobre él.

-No hice ninguna mueca… creo que estas alucinando por el cansancio.

-No, claro que no… se lo que vi… y vi que hiciste una mueca como si hubieras hecho algo malo… ¿Qué hiciste Blaine Anderson-Hummel? —pregunto cruzándose de brazos.

-¿Que?... yo no he hecho nada —respondió acariciándole los muslos— es más… ¿escuchaste eso? —pregunto Blaine poniendo oído.

-Sí, cambia de tema…

-No... de verdad… ¿no escuchaste?

-¿Que?... ¿qué cosa?

-Creo… creo que fue Lizzie… —agrego moviéndose para salir de la cama, Kurt se vio obligado a bajarse de él y a ubicarse en su lado del colchón.

-¿Qué?... ¿estás loco?, yo no escuche nada…

-Te juro y la escuche llorar —insistió poniéndose el «baby monitor» cerca de la oreja— iré a verla — añadió levantándose, se arregló la camiseta y el pantalón y camino descalzo hacia la puerta.

-¿Estás hablando enserio?...

-Vuelvo enseguida… —dijo saliendo sin mirar atrás.

-Te odio Blaine Anderson-Hummel —murmuro echándose hacia atrás en la cama, con tanto ímpetu que alcanzo a rebotar dos veces, sonrió para sí divertido al pensar como debió de verse aquello. Tomo el «baby monitor» de su hija y se lo acerco bien al oído, le subió el volumen y lo movió por encima de su cabeza, sin terminar de creer lo que su esposo decía y había escuchado, volvió a coger su teléfono y se entretuvo hasta que Blaine regreso.

-Apuesto tus mejores partes que Lizzie estaba más que dormida… —dijo al sentir que la puerta se abría— si no querías intimar conmigo debiste decir algo, no era necesario que… —Kurt se silenció al ver aparecer a su esposo de una forma que jamás imagino, se le quedo viendo soltando pequeñas risas entre sorprendidas y traviesas. En efecto, Blaine no había ido a chaquear a Lizzie como había dicho, si no que a cambiarse de ropa, ya no vestía el pijama con que el que salió de la habitación, si no que lucía como un oficial de la policía de New York, desde la gorra hasta los zapatos, todo le quedaba tan bien que parecía y había sido hecho a su medida. Blaine se ajustó un poco el cinturón haciendo sonar las esposas y el arma que cargaba a un costado, se levantó la gorra un tanto y miro a su esposo como solo él sabía hacerlo.

-¿Qué?... ¡Blaine!..

-Oficial Anderson si me haces el favor… —dijo enseñando la placa que tenía prendida al lado derecho del pecho, al tiempo que giraba sobre uno de sus pies como enseñando todo su atuendo de policía, Kurt creyó que se desmayaría allí mismo debido a esos pantalones tan ajustados.

-¿Podría…?... ¿podría repetir eso del giro… Oficial Anderson? —pidió Kurt mientras se mordía el labio, Blaine sonrió como el príncipe que era y volvió a girar, esta vez de manera más lenta, casi sexy.

-¿De dónde salió esto? —pregunto Kurt levantándose de la cama para cercarse a él.

-Bueno… —dijo poniendo sus manos en la hebilla de su cinturón— recuerdo que hace algunos meses, varios en realidad, usted, Señor Hummel-Anderson, me dijo que podía sorprenderlo con algo así el día que quisiera… pues bien… —añadió ciñéndolo a su cadera en un movimiento rápido y sensualmente brusco— hoy es ese día.

-¿Cómo te acuerdas de eso?

-Me acuerdo de todo… —dijo acercándolo mas él.

-Oficial Anderson… ¿tiene otra arma en el bolsillo o es que está feliz de verme? —dijo Kurt sintiendo calor de manera repentina.

-Ambas… —respondió el aludido dándole un beso más que apasionado.

-¿Asumo que no existe tal «falder» que controla el ordenador? —pregunto recobrando el aliento, todo mientras le recorría la espalda y dejaba sus manos de lo más acomodadas sobre el trasero de él.

-No existe… esto fue lo que encargue y me llego hoy día… —respondió Blaine subiéndole la camiseta del pijama, Kurt alzo los brazos y dejo que se la quitara.

-Debo decir que… que te ves…. extremadamente atractivo… y que sería injusto para los otros policías del mundo si tu realmente fueras uno… —dijo Kurt agarrándole el trasero con mayor propiedad.

-¿De verdad?... ¿supero al policía que nos controló en TriBeCa?

-Si… mil veces si… —dijo Kurt desabrochándole el cinturón.

-Pero dijiste que era extra guapo…

-Usted lo es más Oficial Anderson… —rebatió desabotonándole la camisa.

-Excelente… —añadió Blaine quitándose la gorra, se la puso a su esposo y luego lo tomo en sus brazos, como si lo sorprendiera con un «lift» en un baile romántico, se trepo sobre él y volvió a besarlo— porque ahora sabrás lo que es dejarme a mi hacer… «la mayor parte del trabajo»— dijo besando y tocándolo entero.

por Gabriela Cruz Mar Ago 02, 2016 2:24 am

Isa querida!!! , sin palabras, me has dejado con una imagen y una fantasía como no tienes idea, en fin espero que algún día mi pareja me la cumpla, te deseo una excelente semana, espero con ganas el próximo capítulo.

por Klainefan Miér Ago 03, 2016 4:17 pm

Gabriela Cruz escribió:Isa querida!!!

Gaby!!!... que tal?

, sin palabras, me has dejado con una imagen y una fantasía como no tienes idea,

Lo se!!!!... LO SEEEEE!!!!

en fin espero que algún día mi pareja me la cumpla, te deseo una excelente semana, espero con ganas el próximo capítulo.

Gracias linda!! y haber si te cumplen lo que deseas!!!

por Klainefan Miér Ago 03, 2016 4:21 pm

Glee

«4th of July»

Part III

Julio de 2040

-¿Cómo se te ocurrió invitarlo?

-¡Ay cariño!... no lo sé… pero cuando fui a mi reunión de la «VDMSF» el esposo de tu amigo estaba allí, y ¡oh por dios!... —dijo Pam blanqueando los ojos, moviendo sus manos y dando un pequeño salto, todo al mismo tiempo— era el doctor más guapo que nos había visitado desde que existe la organización… es más, es el doctor más guapo que he visto en toda mi vida…

-Y Papá acaba de sentir un par de pinchazos en la nuca...

-¡Ay hijo!… tu Papá es tu Papá, el amor de vida, el padre de mis hijos… nunca pensaría en engañarlo como bien te lo he dicho… solo estoy aclarando los hechos aquí… en fin… —dijo batiendo sus manos como dispersando sus pensamientos— empezamos a hablar, salió el tema de Dalton y allí lo supe todo… me conto que estaban aquí por un seminario, un congreso o no sé qué, que estarían solos para el 4 y entonces termine invitándolos… ¡oh por dios! —exclamo de pronto— ¿Kurt no me va a odiar?, ¿o sí?

-No Mamá… —dijo Blaine tomando los condimentos nuevamente, se acercó a ella y la medio abrazo con frascos y todo— Kurt no te odiara.. solo… solo trata de que Sebastian no se acerque mucho a mí y todo estará bien —termino por decir saliendo por la puerta de la cocina que daba al patio trasero.

-¡Anderson! —exclamo Burt al ver aparecer a su yerno, todo el grupo que estaba con él se volteo a ver al recién llegado, Blaine les hizo una seña a la distancia y sonrió casi incomodo, dejo las cosas que su padre requería sobre una mesa cerca de la parrilla y lo saludo a él y a su hermano, tratando de hacerle el quite al humo que parecía y cada vez era más abundante.

-¿Cómo estas hijo?... —pregunto el Señor Anderson en medio de una carraspera— ¿dónde esta Kurt?

-Bien… —respondió Blaine mientras movía su mano para disipar la humareda— Kurt está dejando una parte de nuestras cosas en la habitación, cosa que por cierto yo voy a completar— agrego dándole una palmada fraternal a su hermano en la espalda.

-¿Te dijo tu mamá que tuvimos que acomodar a Noah con ustedes?

-Si me lo dijo… al parecer mi hermano aquí es quien está ocupando su lugar —contesto mirando de reojo a Cooper.

-¡«Squirrel»!... ¿qué son esos modos?... Mamá insistió, yo tenía reservas en Plaza de Westerville —dijo Cooper retrocediendo algunos pasos cuando el señor Anderson saco desde una caja un aparato similar a un secador de pelo para tratar de avivar más el fuego.

-Es no existe «Coop»

-¡Claro que sí!

-No, solo existe un Plaza y es el de New York….

-¡Que sí!

-OK, como quieras… iré a lo que dije… —contesto Blaine señalando hacia el interior de la casa mirando de reojo hacia donde estaban sus hijos y Sebastian, si bien le había prometido a Kurt que no estaría a solas con él, no podía retirarse sin saludar por lo menos a su hijo, hizo unas señas y se aproximó a ellos.

-«Papáblen», ya creía que no me ibas saludar —dijo Henry abrazándolo antes que todos.

-Por supuesto que no hijo… ¿cómo estás?

-Bien… muy bien… ¿el Papá?

-Está acomodando parte de nuestras cosas, ¿estas acaso más grande de la última vez que te vi?—pregunto apartándose un poco.

-¡Ay «Papáblen»!, ¡si lo viste hace una semana!… ¡hola! —exclamo Lizzie poniendo caras, Carol le hizo un cariño en la cara como si la confortara por ese ataque de celos.

-¿Cómo estas Anderson? —pregunto Burt tomando su turno para saludar.

-Bien Burt, ¿tu?

-Aquí disfrutando de mis nietos y escuchando algunas cosas que no sabía de ti, que tu amigo de la escuela nos está contando de tu paso por Dalton —señalo su suegro apuntando a Sebastian con la cerveza que tenía en la mano.

-¿Es verdad eso? —dijo Blaine mirando a su amigo de soslayo mientras abrazaba a Carol.

-Por supuesto… hay mucho que no has contado Blaine Anderson —añadió Sebastian sonriendo.

-Sebastian… —dijo volteándose hacia él— vaya con las coincidencias —agrego estrechándole la mano, cortando con ello el abrazo que este quería darle.

-Estados Unidos es un pañuelo —señalo sonriendo a todo lo que sus labios le daban, Blaine pensó que si Kurt hubiera estado allí le habría contado unas 6 piezas dentales nuevas como mínimo.

-Tyler… —continuo Blaine siguiendo con los saludos— gusto en verte de nuevo… supe que conociste a mi Madre.

-Así es… —corroboro el esposo de Sebastian saludado de vuelta— una mujer muy simpática.

-Y dada a tomar decisiones sin consultar también —añadió por lo bajo, todos pusieron caras diferentes como queriendo descifrar que era lo que había querido decir— si me disculpan, debo ayudar con lo de las maletas, en un minuto bajamos con Noah —añadió yendo hacia donde dijera.

-¡Blaine!… —exclamo Sebastian como queriendo impedir aquello, le entrego el vaso del que bebía a su esposo y dio los pasos que Blaine había conseguido alejarse.

-¿Necesitas algo?... te advierto que esta ya no es mi casa —aseguro adoptando una actitud extra defensiva, con sus brazos cruzados y todo.

-Lo se… mira… —dijo sacando un sobre desde el bolsillo trasero de su pantalón— mi hijo supo que vendríamos a la casa de tus Padres y asumió que tú y tus hijos también estarían aquí, por lo que me dijo que le entregaras esto a Noah, «entrégaselo en cuanto lo veas Papá 2» —añadió Sebastian tratando de imitar la voz aguda y pequeña de su hijo— así es que como te acabo de ver… en tus manos —termino por decir entregándoselo. Blaine miro hacia todos lados antes de tomarlo, lo cogió como si estuviese impregnado en veneno y se lo guardo en el bolsillo de su propio pantalón.

-Mira las coincidencias… hace segundos, Noah estaba preocupado porque los padres de Gable Crawford Smythe estaban aquí, pero Gable Crawford Smythe no estaba, pensó que estaba enfermo o algo…

-No, para nada, con un doctor en la casa es difícil enfermarse, ¿verdad? —contesto riendo.

-Lo más probable… ¿y donde esta?

-Esta con los padres de Tyler en Alabama…

-¿Alabama?... ¿el doctor es del sur?, pero… no tiene acento ni nada… —dijo Blaine mirando al esposo de Sebastian.

-Y gracias a dios por eso… —señalo Sebastian blanqueando los ojos.

-Claro… escucha, Sebastian… tengo que ir a ayudar a Kurt… pero nos vemos en un momento... —dijo dándole una palmada amistosa en un brazo.

-¡Aquí estaré!… ¡alejado del humo por cierto!… —respondió Sebastian apuntando al Señor Anderson que en ese minuto usaba el aparato de aire y en vez de humo, comenzaba a volar cenizas encendidas por doquier, Blaine sonrió al ver que Cooper se preocupaba de salvar su cabello antes que nada.

-Cariño… ¿puedo preguntarte algo?

-Si… eres mi Papá…

-Lo soy… escúchame… —agrego acariciándole la cara— ¿qué opinas de eso de actuar?, ¿te gusta?

-Me gusta… además que obtuve un 10, la Señorita Katrhyn Barrett, dijo que mi barba y gorro eran «incredibles».

-Lo se… estábamos contigo, ¿te acuerdas?

-Si… —dijo Noah arreglando sus gafas.

-Entonces… ¿no te gustaría hacer más cosas relacionadas con la actuación?, lo haces muy bien y con el «Papáblen» podríamos inscribirte en algunos talleres y cosas así —dijo Kurt mientras le acariciaba el cabello. Noah movió su boca fruncida de un lado a otro, se llevó una mano al mentón y se quedó en silencio un instante como si reflexionara algo de la mayor importancia.

-¿Tengo decir de «immedato»?

-No cariño… —respondió su Papá dándole un beso en la frente— solo quiero que sepas que si esto te gusta, todos te apoyaremos como lo hemos hecho con todos tus intereses.

-Si lo hago… ¡seré como tú!… —agrego Noah dándole un abrazo, Kurt sonrió sorprendido y le dio otro par de besos esta vez en el pelo.

-Solo si quieres cariño… —le dijo soltando un suspiro.

-Lo pensare… ¿ahora esperaremos al «Papáblen»? —pregunto echándose hacia atrás en la cama.

-Ahora esperaremos al «Papáblen»… —repitió Kurt recostándose también.

-¿Papá?...

-¿Si bebé?

-¿Eso es una cama? —quiso saber Noah mirando fijo hacia su derecha.

-¿Dónde cariño? —pregunto Kurt incorporándose.

-Esa de ahí… —insistió apuntando.

-Al parecer lo es…

-¿Voy a dormir aquí acaso? —añadió tomándose la cara.

-Pues creo que es lo más probable, es un poco pequeña para Henry o Lizzie, ¿no crees? —dijo Kurt haciéndole unas cosquillas en la panza.

-Si… —respondió riendo.

-Al parecer alguien está feliz… —dijo Blaine entrando en la habitación con el equipaje restante, lo dejo en el piso cerca de la ventana y se acercó a ellos.

-¡«Papáblen»!, ¡paso otra cosa «incredible»! —exclamo Noah enderezándose en la cama.

-¿Es verdad eso? —pregunto mientras se sentaba junto a ellos.

-Si… creo que dormiré aquí contigo y con el Papá…—agrego apuntando la pequeña cama de junto.

-Pues me parece que así va ser, la abuela nos lo dijo antes de que subiéramos, pero creo y tú no escuchaste, ¿verdad Kurt?

-Muy verdad… como hay tantas personas, todos debemos acomodarnos.

-Pues a mí me parece súper «incredible»

-Y a nosotros… —dijo Blaine besándole la cabeza— ¿sabes qué otra cosa es increíble? —pregunto mirando a su hijo de medio lado, Noah gesticulo un no y lo miro fijo, se subió las gafas y abrió más sus ojos, como si toda la expectación que aquello le provocaba quisiera expresarla en su mirada— pues que averigüe porque Gable no está aquí con sus Papás.

-¿De verdad que lo «averiguaraste» «Papáblen»?

-Muy verdad, hable con uno de sus Papás y él me lo conto —Noah se tapó la boca aun sin siquiera saber el por qué de la ausencia de su amigo,

-¿Y qué te dijo?

-Me dijo, que está en la casa de sus abuelos, en Alabama… ¿sabes dónde queda?

-No, pero lo «averiguarare»… —respondió Noah haciendo el ademan de querer ir a investigar aquello en ese preciso instante.

-Por cierto que puedes, pero antes quiero que veas otra cosa.

-¿Qué cosa?

-Esto… —dijo sacando la carta desde su bolsillo— Gable te la envía, el Señor Sebastian Smythe hablo conmigo… —Kurt se rasco la cabeza y puso la cara de quien chupa media docenas de limones al hilo— y me dijo, que su hijo quería que te la entregaran en cuanto te vieran.

-¿Una carta para mí? —añadió Noah tomándola con toda la delicadeza del mundo, miro el sobre por todos lados y la sostuvo entre sus manos sin mover un musculo— ¡la leeré! —exclamo bajándose de un salto para subirse de inmediato a la cama que le habían asignado, se puso panza abajo y apoyo la misiva en las almohadas, abrió el sobre con cuidado y desdoblo el papel que venía adentro, lo estiro lo más que pudo y con su dedo índice fue guiando su lectura.

-Si tienes problemas para entender alguna palabra, con el Papá te ayudaremos —aseguro Blaine mirándolo con ternura, Kurt a su vez lo miro a él y se levantó de la cama sin decir palabra.

-Kurt… —dijo levantándose también al advertir su malestar.

-Por favor… no quiero pelear en frente de Noah... —susurro de malos modos, se cruzó de brazos y apoyo su trasero en el otrora escritorio de su esposo.

-¿Que?... ¿por qué habríamos de pelear? —quiso saber Blaine parándose frente a él con una expresión de extrañeza en su cara.

-¡Por favor! —exclamo olvidando que quería que la discusión pasara desapercibida frente a su hijo, miro de reojo a Noah y pudo ver que seguía leyendo de lo más concentrado, sin poner atención a nada su alrededor— dijimos que lidiaríamos los dos con esta situación, los dos —agrego bajando su voz nuevamente— pero claro, como tú no puedes resistirte a hablar con ese engendro del demonio, olvidaste lo que prometiste… ¿no es así?

-No… no es así… —rebatió Blaine acercándose un poco— si salí al patio, fue porque mi Mamá necesitaba mi ayuda, como deje todo al lado de donde estaba mi Papá, aproveche de saludarlo a él y a mi hermano, luego quise regresar pero no puede hacerlo sin saludar a nuestro hijo… —explico Blaine con la mayor de las calmas.

-Por supuesto, por supuesto que debías saludar a nuestro hijo… y que ¡oh!... justamente estaba hablando con Sebastian y con Tyler… y que a propósito no sé qué quieren aparentar estando tan juntos si se llevan de lo peor —dijo Kurt gesticulando su punto de la más teatral de las maneras.

-¿Cómo sabes todo eso? —quiso saber Blaine mirándolo con los ojos empequeñecidos.

-¿Qué cosa?

-Todo eso que acabas de decir… ¿estabas espiando? —agrego mirando hacia la ventana como queriendo reír.

-¿Qué?... ¡no!… ¿por quién me tomas? —dijo Kurt desviando su mirada.

-¡Estabas espiando! — repitió soltando la risa que se había guardado segundos antes.

-No… no estaba espiando…

-¡Sí que lo estabas! —insistió su esposo mientras trataba de descruzarle los brazos.

-¡Que no!... ¡Blaine! —exclamo Kurt tratando de explicarse, le dio unos cuantos manotazos para evitar que lo abrazara y mantenerse serio e imperturbable como estaba, pero la risa de su esposo era tan maravillosamente contagiosa que no pudo evitar comenzar reír también.

-El que explica se complica… —dijo Blaine ubicándose entre sus piernas.

-No me complico... y tal vez… si mire un poco por la ventana… pero me aparte antes que aparecieras tú, porque te juro que si hubiera visto algo sospechoso habría saltado por esa ventana sin pensarlo dos veces…

-Eso fue muy dulce Kurt Hummel-Anderson —dijo Blaine dando a su voz un tono de ternura extrema.

-Lo se… pero quiero que sepas que no olvido que rompiste tu promesa de no ir a hablar a solas con el «dientes de sable» —sentencio apuntándolo.

-Lo se… y lo siento… —agrego dándole un beso en a la mejilla.

-Te creo que así es… y te disculpo, pero solo lo hago en nombre de los padres de la patria que querían unidad y todo eso… —respondió haciendo una mueca infantil.

-Agradezco a nuestros padres fundadores entonces —añadió Blaine queriendo besarlo.

-No te aproveches… —dijo apartando sus labios— mi molestia sigue así es que te tendré en penitencia hasta que comiencen los fuegos artificiales.

-Ok… —contesto Blaine como resignado.

-Ahora… ¿qué hay con esa persona?... ¿está más gordo?, ¿calvo?... ¿con menos dientes que hace un año?

-No sé si más gordo, pero sí creo que le conté unas 6 piezas dentales nuevas, extra blancas y extra grandes por cierto… —dijo Blaine mientras se acercaba más a él de manera casi disimulada— lo que si me sorprendió, es que estaba bastante cariñoso con Tyler.

-¿Perdón?

-Eso… —respondió acariciándole el cabello de la frente— estaban de la mano y todo cuando me acerque a saludar a Henry…

-Aparentado de seguro…

-Tal vez fueron a ver a un consejero matrimonial o algo…

-¿Y tú crees que un consejero matrimonial bastaría para arreglar lo que vimos en nuestra casa el año pasado?

-No lo sé… será que creo que cuando hay amor todo es posible —dijo Blaine encogiéndose de hombros, Kurt no pudo evitar sonreír al escuchar aquello y olvidado la sentencia que le había dado a su esposo lo tomo de la hebilla del cinturón, lo acerco más a él entre sus piernas para tomarle la cara y terminar por darle un beso más que apasionado.

-Creí que estaba sentenciado a otra cosa… —susurro Blaine tomando aire.

-Digamos que con esa frase conseguiste un indulto… —añadió Kurt besándolo de nuevo.

por Gabriela Cruz Miér Ago 03, 2016 5:35 pm

Hola Isa, me encanto, espero el momento en que kurt vea a Sebastián y sigue así con mi bebe Noah., sabes voy a pedir mis fantasías para Navidad, te deseo un excelente fin de semana y sabes quiero frío y lluvia no soporto EL CALOR!!!.

por Klainefan Sáb Ago 06, 2016 3:35 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa

Hola Gaby,

me encanto, espero el momento en que kurt vea a Sebastián y sigue así con mi bebe Noah.

Gracias linda... y ya se acerca el momento...

, sabes voy a pedir mis fantasías para Navidad,

Y yo!!!!!!

te deseo un excelente fin de semana y sabes quiero frío y lluvia no soporto EL CALOR!!!.

Igual para ti linda y aqui el invierno parece que acabo , lo que es mas que injusto!!!!

por Klainefan Sáb Ago 06, 2016 3:39 pm

Glee

«4th of July»

Part IV

Julio de 2040

-No te aproveches… —dijo apartando sus labios— mi molestia sigue, así es que te tendré en penitencia hasta que comiencen los fuegos artificiales.

-Ok… —contesto Blaine como resignado.

-Ahora… ¿qué hay con esa persona?... ¿está más gordo?, ¿calvo?... ¿con menos dientes que hace un año?

-No sé si más gordo, pero sí creo que le conté unas 6 piezas dentales nuevas, extra blancas y extra grandes por cierto… —dijo Blaine mientras se acercaba más a él de manera casi disimulada— lo que si me sorprendió, es que estaba bastante cariñoso con Tyler.

-¿Perdón?

-Eso… —respondió acariciándole el cabello de la frente— estaban de la mano y todo cuando me acerque a saludar a Henry…

-Aparentado de seguro…

-Tal vez fueron a ver a un consejero matrimonial o algo…

-¿Y tú crees que un consejero matrimonial bastaría para arreglar lo que vimos en nuestra casa el año pasado?

-No lo sé… será que creo que cuando hay amor todo es posible —dijo Blaine encogiéndose de hombros, Kurt no pudo evitar sonreír al escuchar aquello y olvidando la sentencia que le había dado a su esposo lo tomo de la hebilla del cinturón, lo acerco más a él entre sus piernas para tomarle la cara y terminar por darle un beso más que apasionado.

-Creí que estaba sentenciado a otra cosa… —susurro Blaine tomando aire.

-Digamos que con esa frase conseguiste un indulto… —añadió Kurt besándolo de nuevo, Blaine se dejó llevar y se acomodó más entre las piernas de su esposo, como queriendo que ese segundo beso durara más que un par de minutos.

-Alguien esta jalando mi camiseta… —susurro Blaine sobre los labios de su esposo.

-¿En serio?... yo sentí un par de «cof, cof»…—agrego Kurt apretándose un poco, miro por sobre el hombro de quien tenía en frente y vio al pequeño Noah de lo más circunspecto, con sus manso atrás los miraba como si esperara su turno para hablar o preguntar algo importante— cariño… —dijo incorporándose del todo— ¿por qué no hablabas?

-No debía…

-¿No?... ¿y por qué no? —agrego Kurt parándose del lado de Blaine.

-Porque no, pero está bien…

-¿Lo está?...

-Si… sé que no debía interrumpir… no se «peocupen»

-Gracias hijo… —dijo Blaine sonriéndole— ¿terminaste de leer la carta de tu amigo? —pregunto alzándolo en sus brazos.

-Si… me dice varias cosas divertidas.

-¿De verdad?... —pregunto Kurt poniendo cara de sorpresa como creyera que nada que tuviera que ver con Sebastian pudiera ser remotamente divertido.

-Si…

-¿La podemos leer? —quiso saber Blaine queriendo tomar la misiva.

-No… es de mi «prevacedad» —respondió Noah ocultando el papel cerca de su pecho.

-No hay problema cariño… nadie más la leerá si tu no quieres… pero… ¿puedo preguntar algo? —dijo Kurt mientras le acariciaba el cabello.

-Si…

-Las cosas que te dice Gable… ¿son amables?

-¿Es lo mismo que cordiales?

-Lo mismo hijo… —respondió Blaine queriendo comérselo a besos en ese instante, decidió solo darle dos, pero bien efusivos.

-Mucho… —dijo el pequeño riendo un poco al tiempo que se tomaba la mejilla recién besada— empieza diciendo que le gusto conocerme y que espera que ya sepa leer para que pueda leer la carta, después dice que lo paso bien cuando fue a la casa, que le gusto el postre y que no me ha llamado porque su «Papá 1» debe viajar porque es doctor que le faltan «fromteras»…—respondió Noah revelando sin querer casi la totalidad de su correspondencia privada, Kurt sonrió a la par con Blaine y ambos le besaron las mejillas al mismo tiempo, Noah volvió a soltar una pequeña risa al ver su cara aprisionada, esta vez por sus dos Papás.

-Ahora que terminaste con tu correspondencia, ¿te parece si bajamos a donde están todos? —dijo Blaine dejándolo en el suelo, le acomodo la ropa y lo quedo mirando en espera de una respuesta.

-¿No debo ponerme mi traje del «Pesidente Lincon» antes de bajar?

-Pero bebé, ¿no quedaste con el abuelito Burt que actuarias luego del almuerzo?

-Si… es verdad… —dijo el pequeño como pensando— ¡Papá! —exclamo de pronto haciéndole una seña a Kurt para que se acercara bien a él— el «Papáblen» no sabe de lo que hablamos y que debía pensar… —agrego Noah ocultando su boca con una de sus manos, como si quisiera que el sonido de sus palabras no llegaran a los odios de su «Papáblen»

-Es verdad… —respondió Kurt gesticulando sorpresa extrema— ¿se lo quieres decir tú? — el pequeño gesticulo un si tan pronunciado que sus gafas se bajaron hasta la punta de su nariz.

-¿Qué me van a decir?... ¿de qué están hablando? —dijo Blaine mirándolo a ambos.

-«Papáblen», el Papá me dijo que podía hacer más cosas relacionadas con la actuación… para ser como él… —dijo sonriendo orgulloso.

-¿Es verdad eso? —respondió mirando a su esposo y a su hijo de manera alternada.

-Si… dijo que si me gustaba, podía hacer talleres y cosas así, que tú y él me «ipscribirian»

-Pues si es lo que te gusta, por cierto que lo haremos… ahora… ¿qué tal si bajas al patio?... con el Papá te seguimos de inmediato… —dijo Blaine guiándolo hasta la puerta, Noah dio un par de aplausos seguido de pequeño salto, sus sandalias sonaron de manera divertida al chocar con el piso.

-Eso lo aprendió de Lizzie… —dijo Kurt riendo.

-Lo más probable… —agrego su esposo acercándosele.

-¿Por qué no bajamos con nuestro hijo?, ¿quiere continuar disfrutando de su indulto Señor Anderson-Hummel?

-Quisiera… pero más quisiera que me explicaras eso de Noah y la actuación…

-¿Qué debo explicar?

-Que… habíamos quedado que no impondríamos nuestro intereses a nuestros hijos, por ejemplo…

-Yo no impuse nada… solo le sugerí «QUE SI ES QUE»… le gustaba la actuación, nosotros «PODRÍAMOS» inscribirlo en un par de talleres o algo así —dijo Kurt poniendo énfasis en los supuestos.

-¿Seguro?, dijo que quería ser como tú y hablamos que imponerles cosas a nuestros hijos…

-Un momento… ¿piensas actuar como enojado?, porque te recuerdo que el disgustado aquí soy yo… —interrumpió mirándolo un tanto serio, luego sonrió y cerro la discusión con un beso pequeño y sonoro— solo fue una idea con tintes pequeños de sugerencia, no es que haya concertado una cita en la «Glitter Talent Agency» de la 62th…

-¿No la concertaste?

-No… solo esperemos, ¿de acuerdo?

-De acuerdo…

-Ahora… a enfrentar lo inevitable… —dijo Kurt arreglándose la ropa y el pelo.

-Te recuerdo que hay más personas allá abajo, por lo tanto si no quieres hablar con él tendrás con quien distraerte, pero te advierto eso sí, que mi Mamá piensa que la odias o algo por invitar a tu «enemigo número uno», así es que te sugiero que le digas un par de palabras…

-Se las diré, ten por seguro que se las diré… —aseguro levantando su dedo índice al pasar por su lado, como evidenciando una sentencia máxima.

-Kurt…

-Seré amable… tranquilo… —agrego acariciándole la cara— ¿por qué no invito a Ricky Martin?... terminare por sugerirle que cambie su «VMF…» no sé qué, por la «AMLPUC»

-¿Qué es la «AMLPUC»?

-«Asociación de mujeres latinas por una causa»

-¿Y ellas conocen a Ricky Martin?

-¡¿Quién no conoce a Ricky Martin?! —exclamo levantando sus brazos— ¿cómo me veo? —pregunto acomodando su vestuario y peinado nuevamente.

-Más guapo que 10 Ricky Martin —respondió Blaine dándole un beso, Kurt sonrió y le devolvió tres besos a cambio — ¿vamos? —agrego suspirando.

-Vamos… —repitió Kurt tomando aire, como si enfrentar a Sebastian y todo lo que le provocaba, fuera igual que atravesar el océano atlántico a nado.

-Papá… ¿eso no se hace cuando el fuego esta recién encendiéndose? —pregunto Cooper que sostenía un par de frascos de condimentos cerca de su cabeza como protector anti flama.

-Yo sé lo que hago… ¿porque crees que no sé lo que hago? —respondió el Señor Anderson continuando con lo que estaba haciendo.

-Todos te miran… —añadió su hijo mayor sonriendo a todos incluido a Sebastian que acababa de terminar de hablar con Blaine y parecía y tenía mucho que decir sobre lo que estaba pasando cerca de la parrilla.

-Todos están bien… —dijo su Papá tosiendo un poco— ¡Ah!... ¡te lo dije! —exclamo feliz al ver que por fin surgía una llama entre tanto humo— ¡fuego! — agrego levantando los brazos, los demás invitados rieron y aplaudieron el logro del dueño de la casa.

-¿Logro encenderlo Señor Anderson? —dijo Sebastian preguntando lo obvio, se acercó a ellos hasta una distancia prudente queriendo mirar el incipiente fuego.

-¡Por supuesto! —respondió haciendo un ademan engreído — de que almorzaremos, almorzaremos —añadió moviendo las brasas encendidas.

-Nunca dudamos de ello… aunque debo decir que cuando llegamos con Tyler pensamos que ese olor espectacular que aún se siente, venia de aquí… pero al parecer, ¿es de sus vecinos? —dijo Sebastian mirando hacia la casa de junto.

-Si… ellos siempre tienen todo listo antes de mediodía, pero es porque contratan un «catering»… yo digo que para tener de que presumir, es mejor meter las manos… por así decirlo —explico mirando el fuego, satisfecho por haber logrado lo que pretendía.

-Pensé que tendrías sed «Big Anderson» —dijo Burt entregándole una cerveza.

-Gracias Burt… —contesto recibiéndola para tomar un trago extra largo acto seguido— y sí que tenía sed, si de por si hace calor, aquí hace más… —respondió echándose un poco de aire con el mismo aparato con el que había avivado el fuego.

-¿No has pensado comprar esas pequeñas cosas cuadradas que sirven para encender? ¿Cómo se llaman? —dijo Burt gesticulando con sus manos algo pequeño y cuadrado al tiempo que miraba al cielo en busca de la respuesta

-«Pastillas de encendido» —dijo Sebastian creyéndose súper experto.

-¡Eso!… —exclamo el padre de Kurt dándole unos palmetazos en la espalda como recompensa a su experticia— son sensacionales, ¿verdad?, ahorran tiempo y por cierto… humo —agrego señalando a su alrededor, Sebastian comenzó a ensalzar las bondades de aquel producto y ambos debatían de como aquello era lo mejor y que incluso sabían cómo se utilizaba, el Señor Anderson comenzó a arrugar su entrecejo y mirarlos a ambos con ganas de decirles unas cuantas por querer quitarle méritos a lo que había logrado.

-Burt… —interrumpió poniendo caras— ¿está todo listo para la ceremonia de esta tarde?

-Si… si, está todo listo, el alcalde me llamo ayer para terminar de confirmar la asistencia del agasajado.

-Perfecto… ¿nosotros podemos ir?... ¿verdad?

-¿Lo dices porque eres de Westerville «Big Anderson»? —pregunto Burt riendo y dando un sorbo a su cerveza.

-Algo así… —respondió el Papá de Blaine riendo también.

-¿De qué están hablando? —quiso saber Sebastian mirando con curiosidad.

-El hijo de Burt, mi yerno —respondió el Señor Anderson apuntándose a sí mismo— recibirá esta tarde la distinción de «Hijo ilustre de Lima»

-¿En serio?

-Por supuesto… ¿quieres ir Sebastian? —pregunto Burt mientras lo tomaba por un hombro.

-Pues sería bastante interesante… —respondió sonriendo.

-¿Qué es interesante?... ¡Abuelo!, ¿a qué hora las costillas?... ¡hola! —reclamo Lizzie parándose a su lado.

-En un minuto linda… —respondió este, tomo un pocillo que tenia a su disposición y comenzó a mezclar los ingredientes de su aderezo secreto.

-Señor Smythe… el Señor Crawford lo llama al parecer mi hermano quiere hablar con ambos —dijo Henry señalando a donde se encontraba el aludido, Tyler estaba agachado para quedar a la altura de Noah que parecía y le decía unas 50 ideas por minuto.

-Gracias Henry… ¡y por favor!, ¡ya deja de llamarme «Señor Smythe» que me siento como de 100 años!

-Así es él Sebastian, extra correcto… —añadió Lizzie poniendo voz de alguien con capacidades intelectuales extra reducidas, Henry le mostro la lengua y su hermana termino por esconderse tras su abuelo.

-¿Qué pasa con mi sobrinito? —pregunto Cooper que parecía y había recobrado el habla luego de ver que su cabello se había salvado del fuego.

-El hijo del Señor Smythe al parecer le escribió una carta o un dibujo y Noah quiere agradecerles… o al menos es lo que alcance a escuchar —explico Henry parándose al lado de Burt, si alguien los hubiera medio, habría comprobado que eran de la misma estatura.

-Claro… ellos deben saber más… —dijo Cooper apuntando a Blaine y Kurt que se asomaban por la puerta de la cocina, Burt pego un grito diciendo el nombre de su hijo y recordando la condecoración que recibiría en el ayuntamiento como si nadie más lo supiera, el aludido quiso calmarlo con «¡Papá por favor!», pero se encontró con la complicidad de Blaine que comenzó a pedir aplausos para el recién llegado, Kurt hizo un par de caras entre avergonzadas y engreídas para terminar haciendo un par de reverencias ante tanto cumplido, evitando siempre hacer contacto visual con su «enemigo número uno».

por Gabriela Cruz Mar Ago 09, 2016 10:45 pm

Hola Isa, como estás?, sabes me imagino la cara de Sebastián cuando se enteró de la condecoración de Kurt, espero con ganas el momento del encuentro de ellos, y ya sabes con que salga mi bebe suficiente., te mando un beso y Feliz semana.

por Klainefan Miér Ago 10, 2016 4:45 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa, como estás?

Hola Gaby... bien y tu?

, sabes me imagino la cara de Sebastián cuando se enteró de la condecoración de Kurt, espero con ganas el momento del encuentro de ellos,

Lo se!!!... la proxima entrega...

y ya sabes con que salga mi bebe suficiente., te mando un beso y Feliz semana.

Tambien lo se... gracias linda!!! y buen termino de semana para ti tambien

por Klainefan Miér Ago 10, 2016 4:55 pm

Glee

«My Universe»

Febrero de 2019

-¡Esos pequeños dientes tuyos!... son tan hermosos, que te los quitaría todos para hacerme un prendedor… —dijo Kurt mientras acariciaba el escaso cabello de su hijo— ¿o no me los quieres dar bebé?... ¿no?... —agrego al ver que su hijo parecía contestarle a aquello con una negativa— está bien… —dijo mirando la hora en su teléfono— te permitiré… que los conserves… pero solo porque los necesitaras más adelante cuando empieces a comer solidos o cuando quieras morder las galletas exquisitas que prepara el «Papáblen» —añadió mientras lo arropaba asegurándose que ninguna cobija quedara suelta, Henry quedo inmóvil como momia— y a propósito de «Papáblen»… ¿no crees que ya debería de estar aquí?… —dijo volviendo a mirar la hora en su teléfono— ¿crees que si lo llamo daré la impresión de que soy un esposo paranoico y controlador? — le pregunto a su hijo sosteniendo el aparto cerca de su frente, Henry se llevó ambas manos a la boca como si quisiera comerse así mismo partiendo por sus extremidades superiores— lo se… es de paranoico… pero… ¿sabes qué?... tu eres un bebé que no entiende nada de relaciones, ni informales ni a nivel matrimonial, por lo tanto… lo siento cariño… pero no tomare en cuenta tu opinión —sentencio buscando el número de su esposo al tiempo que se sentaba en la silla de junto y le daba pequeñas miradas a Henry a través de las barras de la cuna, como si temiera que un bebé de 6 meses de edad lo reprendiese por desconfiar de su esposo— genial… la contestadora… —dijo apuntando el «speaker» del teléfono— espero que termine el men…. Blaine… soy yo… ¿por qué me responde la contestadora?... ¿estás bien?... ya es bastante tarde… hoy era un día importante y quiero saber cómo te fue… llámame si ya vienes en camino… te amo… —termino por decir finalizando la llamada,, soltó un poco de aire y se quedó viendo la pantalla un instante para luego guardar su teléfono en el bolsillo del pantalón todo mientras se ponía de pie nuevamente y ponía su atención en su hijo— no me mires así… hay cosas permitidas en una relación… como saber la talla de toda la ropa de la persona que vive contigo… o tener la posibilidad de controlarlo en ciertas ocasiones… ¿quieres saber mejor porque es especial este día?, ¿quieres bebé? —agrego Kurt acariciándole la cara— pues veras…

-¿¡Kurt!?... —escucho desde la sala.

-¿Escuchaste?... ¡llego el «Papáblen»!… —exclamo dando pequeños aplausos— luego entre ambos te contamos porque este día es especial, no te quedaras con la curiosidad bebé… te lo prometo… —añadió dándole un beso en la frente.

-Es tarde… lo se… lo siento… —dijo Blaine como primera cosa en cuanto asomo por la puerta del cuarto de su hijo, aun llevaba su guitarra en el hombro más un bolso cruzado a medio cerrar y por cuya abertura se asomaban varios papeles.

-Bastante tarde… —repitió Kurt desde donde estaba.

-Lo sé, lo siento… —volvió a decir su esposo dándole un beso de saludo— ¿cómo esta Henry?... ¿hoy no le han molestado sus dientecitos? —pregunto entrando, se descolgó todo y lo dejo a un costado de la puerta se acercó a la cuna y lo acaricio por sobre los cobertores, Henry, que apenas podía moverse, hizo el ademan de levantar sus piernas y brazos, todo al mismo tiempo, Blaine sonrió y le dio un par de besos por toda la ternura que aquello le provocaba— ¿no le han molestado sus dientes? —repitió mirándolo.

-Para nada… Julianna me dijo que estuvo tranquilo todo el día, estoy bastante seguro que ya le salieron todos los que le tenían que salir… y como nota al margen, te diré que yo también puedo mover mis brazos y piernas a la vez… lo digo… por si es eso lo que se necesita para obtener más de un beso de tu parte…—dijo Kurt haciendo los movimientos correspondientes.

-Eres dueño de todos mis besos y lo sabes… —respondió soltando un suspiro, Kurt sonrió engreído y se ubicó frente a el

-Cuéntame lo que quiero saber… —dijo con sus manos apoyadas en el barandal.

-De inmediato… —contesto rodeando la cuna para sacar lo que precisaba desde su bolso, tomo los papeles más grandes que ocupaban todo el espacio y los dejo en suelo además de varias otras cosas, lápices, dos revistas de deportes y un par de envoltorios de golosinas comidas, Kurt pensó que si dejaba todo tirado allí, le darían cinco patatús.

-Una pregunta… esa basura… ¿la llevas contigo y luego la dejas en el estudio… o tienes un poco en el estudio y otro entre tus pertenencias? —pregunto Kurt arrugando la nariz, como si todo lo que traía su esposo oliera de la peor de las maneras, Blaine sonrió y negó con su cabeza de manera divertida.

-Esto no es basura… bueno… esto si… —respondió tomando las envolturas de golosinas— pero esto… —agrego cogiendo las hojas de partitura— no lo es para nada— agrego ordenándolas una sobre otra, estaban escritas por todos lados y tenían pequeñas anotaciones en las esquinas así como algunos pequeños dibujos y garabatos tachados con lápiz— es la última canción, que por fin…¡por fin!... termine… —añadió levantando sus manos al cielo con papeles y todo, los volvió a acomodar para guardarlas en su bolso nuevamente.

-¿Terminaste tu última canción?... ¡déjame verla! —exclamo estirando su mano.

-Te la mostrare, pero lo primero es lo primero… y eso es… —dijo levantándose con un pequeño papel en las manos— mostrarte esto… —agrego desdoblándolo en frente de sus ojos.

-¿La ultima?...

-La ultima…

-¿Somos libres del acoso bancario? —pregunto Kurt arrebatándoselo de las manos.

-Nunca hubo tal acoso, fuimos responsables y poder llegar a pagar la última cuota es la recompensa… por lo tanto de cierta manera si somos libres.

-Es lo que dije… y recompensa habría sido que nos perdonaran los últimos dos o tres pagos…

-Eso no lo hace ningún banco Kurt… —dijo Blaine volviendo a la cuna para mirar a su hijo que parecía y luchaba con todas su fuerzas por no quedarse dormido.

-Pues deberían hacerlo… —insistió con la vista fija en el papel— así ganarían cientos de clientes.

-Y se irían a la quiebra… y con ello el país.

-Claro eso también… ¿pediste todos nuestros documentos… ¿el pagare?

-Los pedí…

-¿Los trajiste? —quiso saber Kurt mirando el bolso en el suelo.

-Si… —respondió mientras le sonreía al bebé— están dentro de mi bolso en una carpeta.

-¿Conviviendo con toda es basura que vi? —dijo volviendo a lo de la nariz.

-No, conviviendo con mis partituras, que como dije… no son basura… —Kurt banqueo los ojos y tomo el bolso desde la correa, lo puso sobre la mesa cambiadora de Henry y comenzó a sacar las cosas como si estuvieran llegas de gérmenes— asumo y es esta…—dijo enseñando una con el logo del «Wells Fargo Bank».

-Asumes bien… —contesto Blaine sonriendo.

-Esto es fantástico —dijo comenzando a hojear los documentos— ¿sabes lo que esto significa, verdad?

-¿Qué nadie podrá venir a embargar nuestras cosas?, ¿partiendo por tu guardarropa?

-No… —respondió Kurt alargando la «o», dejo la carpeta sobre la mesa y camino los pasos que lo separaban de su esposo— significa… —añadió acercándose más— que nuestros excedentes… podremos gastarlos… en otras cosas —aseguro mientras lo abrazaba a la altura del cuello.

-¿Estás hablando de más ropa? —quiso saber Blaine mirándolo de medio lado.

-Entre otras cosas… —repitió encogiendo un hombro.

-¿Cómo cuáles?… —pregunto de vuelta su esposo tomándolo por las caderas.

-Como por ejemplo… ahorrar para buscar otro departamento, más grande y mejor ubicado, redecorar nuestra habitación y la de nuestro hijo… viajar… —respondió al tiempo que le hundía las manos en el cabello, Blaine creyó que las manos de su esposo en sus rizos, eran lo mejor de la vida.

-¿A islas perdidas del mundo?

-Puede ser… —dijo dándole un beso— aunque pensaba más en Francia o Reino Unido…

-Muy buenos lugares. menos papeleo y más opciones de hospedaje.

-Entre otras ventajas… pero hablando enserio… —agrego apretándose— ¿no crees que haber salido de esto es más que maravilloso?

-Lo creo… pero más maravilloso es lo que pudimos obtener gracias a ese dinero… ¿no crees? —dijo Blaine acercándose a la cuna nuevamente, Henry ya se había dado por vencido y dormía plácidamente.

-Lo se… —contesto Kurt abrazándolo desde atrás, le dio un par de besos en el hombro y se quedó observando también a su hijo— ¿hablaste con tu hermano?

-No…

-¿Cómo qué no?... él lo debe saber, después de todo fue nuestro aval en el banco… debe enterarse que terminamos de pagar sin retrasos ni multas y que por lo tanto, somos súper extra confiables.

-Creo que eso ultimo lo sabía desde antes, pero tienes razón, debe saberlo… lo llamare —dijo sacando su teléfono desde el bolsillo del cárdigan que vestía.

-Pero ahora no… —añadió Kurt impidiendo aquello, le dio otro par de besos en el cuello antes de soltarlo y pararse frente a él— ahora cuéntame lo de tu canción… hasta ayer te tenía bastante estresado y pensabas que no la terminarías nunca.

-Eso era hasta ayer…—dijo tomándole las manos— hoy la termine y la grabe… —explico sentándose en el suelo, justo al lado de la cuna del bebé.

-¿Eso quiere decir que tu disco está listo? —pregunto siguiéndolo con un poco de recelo, tomo uno de los animales de felpa de su hijo y lo uso como cojín.

-Sí y no… —Kurt dio un respingo divertido al no concebir aquello como una respuesta válida— sí, porque ya están las 15 canciones y no, porque ahora viene todo lo de la edición los ajustes de los arreglos, la producción de la caratula, y eso da como para un mes más…

-¿Tu aparecerás en al caratula?

-No lo sé… di varias opciones pero no sé con cual se quedaran los Señores de SONY.

-Espero y sea una donde aparezcas tú, es más fácil que la gente comience a recordarte si ve una foto tuya en vez de una de un corazón sangrando o algo peor…

-¿Es verdad eso?

-Muy verdad… así es que pelea porque seas tú el que aparezca… ¡pero no sexy!... eso esta reservado solo para mí —dijo Kurt apegándose a él.

-Por cierto que si…

-¿Cómo lo llamaras?... ¿sigues con la idea de llamarlo «A million wishes»?

-No, la deseche cuando la cara de Ginger Fletcher se estiro como dos metros…

-Ellos están tomando muchas de tus decisiones, es tu álbum Blaine…

-Lo se… pero ellos son quienes lo financian…

-Pero tú los harás ganar millones, tú eres la estrella aquí… es algo que tienes que empezar a meterte en esa cabeza enrulada tuya.

-Estrella… —repitió Blaine soltando una risa— ¿te acuerdas cuando estábamos con todo el problema del dinero y te dije que mi antiguo sello de «deshacerla de mi»?

-Me acuerdo…

-Pues mírame ahora, a punto de lanzar un álbum con una compañía multinacional… creo si soy una estrella después de todo.

-Y el más talentoso y guapo por cierto… —dijo Kurt dándole un beso— ¿cómo lo llamaras?.

-Pues Ginger me pidió que pensara en algo inspirador, ya que es mi primer álbum y todo… entonces se me ocurrió pensar en la única inspiración verdadera que tengo: tú… así es que lo llame «My Universe»

-…

-¿No te gusta? —quiso saber Blaine la ver que su esposo reaccionaba soltando un suspiro y bajando la cabeza— ¿Kurt? —insistió buscando su mirada.

-Es hermoso… —respondió mirándolo un tanto emocionado por comprobar, como era habitual, que Blaine lo amaba más que nada.

-¿Te gusta entonces?

-¡Me encanta!… —contesto dándole un par de pequeños besos— ahora muéstrame la canción…

-¿Quieres leerla?

-¿Qué si quiero?... ¡obvio!... es la única que me falta por conocer —exclamo lo más alto que un bebé durmiendo permitiría.

-Bien… —dijo Blaine al tiempo que gateaba en el suelo hasta alcanzar su bolso, volvió a registrarlo y saco una de las hojas más arrugadas, Kurt se mordió el labio al tener la mejor vista del trasero de su esposo.

-Aquí esta… ¿acaso me estabas mirando el trasero? —pegunto regresando hasta donde estaba antes.

-Apuesta tus mejores partes a que si… tu trasero una de ellas por cierto —respondió haciendo un ademan engreído.

-Ok… toma… —dijo entregándole al partitura, Kurt la estiro un poco en sus piernas y luego procedió a leerla en silencio, Blaine se acho su cuerpo hacia atrás y termino por apoyar la cabeza en los barandales de la cuna de su hijo .

-¡Señor Anderson-Hummel!... —exclamo Kurt echándose viento con la hoja de papel— nunca creí que una letra de canción podía ser tan sexy —agrego poniéndose de rodillas en frente de él, lo observo un instante y sonrió de manera traviesa.

-¿No crees que se me paso la mano?

-¿Qué?... ¿estás loco?... ¡es sensacional!...

-¿Si?... ¿no crees tampoco que me censuraran o algo?

-Pues se las tendrán que ver conmigo si eso ocurre… un momento… ¿yo soy este de la piel de terciopelo azul?... ¿verdad? —agrego señalando la estrofa correspondiente.

-Te dije que eres mi única, verdadera e inagotable fuente de inspiración, por lo tanto, lo eres.

-Entonces… futuro «Señor súper ventas» —Blaine sonrió al pensar en que aquello por primera vez en lo que llevaba de carrera era totalmente posible— esta canción es la mejor de todo el universo—agrego acercándose más, se ubicó entre sus piernas, le tomo la cara y lo beso, Blaine sintió que la cuna de su hijo se movía unos centímetros— te amo Blaine Anderson-Hummel y estoy sumamente feliz por ti…

-Y to te amo a ti… y también estoy un tanto feliz por mí… —respondió sonriendo.

-Ahora vamos a nuestro dormitorio para que me la cantes —dijo Kurt poniéndose de pie— tal vez yo y mi piel de terciopelo improvisemos el video clip para ti… —termino por decir sonriendo esta vez mas bien coqueto.

por Gabriela Cruz Jue Ago 11, 2016 2:32 am

Hola Isa, me encanto este capítulo, me imagino a kurt enrollando a Henry, sabes en México le dicen tapar a los bebes como tamalitos, en fin te mando un beso y te deseo un excelente fin de semana.

por Klainefan Sáb Ago 13, 2016 3:37 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa

Hola Gaby... ¿como estas bonita?,

me encanto este capítulo, me imagino a kurt enrollando a Henry

Y yo... :),

sabes en México le dicen tapar a los bebes como tamalitos

Que divertido, aqui se dice «hacerlos un lulo»,

en fin te mando un beso y te deseo un excelente fin de semana.

Gracias bonita, buen fin de semana para ti, aca es uno largo porque el lunes es feriado...

por Klainefan Sáb Ago 13, 2016 3:40 pm

Glee

«4th of July»

Part V

Julio de 2040

-Henry Anderson Hummel… ¿estabas aquí adentro acaso? —pregunto Noah al encontrase de frente con su hermano mayor al final de la escalera.

-Vine a recibir los pasteles de manzana... ¿y los Papás?... ¿no iban a bajar contigo? —dijo Henry mirando hacia arriba.

-Están hablando cosas de casados… —respondió el pequeño con convencimiento, su hermano sonrió al escuchar aquello y que era siempre la respuesta de Noah cuando sus padres se quedaban solos— Henry Anderson Hummel, ¿dónde está el Señor Tyler Crawford y el Señor Sebastian Smythe? —pregunto mirando a su hermano hacia arriba, bien abrazado de «Desmond» y asegurándose que ni su carta, ni sus gafas se fueran a caer de donde estaban.

-Pues están en el patio… ¿por qué?

-Debo decirles algo… pero es «prevado» —se adelantó en decir antes que Henry quisiera indagar en más detalles.

-Ok… —dijo acariciándole el cabello con ternura— pues si quieres hablarles están allá afuera, te acompaño?

-Si…—respondió dándole la mano— debo decirles algo sobre su hijo.

-¿Tu amigo Gable?

-Si… pensé que estaba enfermo con fiebre, pero no vino por otras razones.

-¿Qué otras razones? —quiso saber Henry ya en el patio.

-Otras, el «Papáblen» te puede «epsplicar» con más seguridad.

-Ok… mira allí está el Señor Crawford —agrego guiando a su hermanito hasta a donde estaba Tyler.

-¿Y el Señor Sebastian Smythe?... es «importanante» que hable con los dos… —insistió Noah mirando hacia todos lados.

-Pues preguntémosle a su esposo, y él nos dirá… Señor Crawford… —dijo Henry acercándose con su hermano, Tyler estaba con su teléfono móvil en la oreja con medio cuerpo apoyado en uno de los árboles, el chico no supo si era correcto interrumpir aquella conversación, miro a Noah y este le respondió haciendo un par de gestos que indicaba que debía insistir— Señor Crawford… —repitió esta vez tocándole un hombro.

-¡Henry!… —exclamo volteándose— un segundo… —agrego haciendo la señal de alto con una de sus manos, se alejó un poco y termino la conversación, al parecer un paciente tenía problemas serios con su dosis de medicamentos— gajes del oficio… —dijo guardando su teléfono.

-¿Trabaja hasta en el día del país señor Tyler Crawford?— pregunto Noah llevándose la mano que tenía libre a la boca con «Desmond» y todo.

-Pues si… incluso a veces, debo trabajar hasta en Navidad… —respondió encogiéndose de hombros, Noah abrió sus ojos al máximo de la pura impresión que escuchar aquello le provocaba— ¿qué necesitas Henry? —agrego mirando al mayor de sus interlocutores.

-Yo nada, es mi hermanito aquí el que necesita hablar con usted… —dijo sonriéndole al pequeño.

-¿Es verdad eso? —quiso saber Tyler agachándose para quedar a la altura de un niño de 5 años.

-Si… pero también con su esposo, es «importanante»

-Muy bien… Sebastian esta… —agrego mirando a todos— al lado de la parrilla, iré a buscarlo —dijo incorporándose.

-No se preocupe Señor Crawford, yo le digo… debo ir a inspeccionar el trabajo de mi abuelo de todas formas— se adelantó en decir Henry haciendo lo que dijera.

-Tengo que agradecer la carta que me envió su hijo… —susurro Noah tratando que su hermano mayor no se enterara de nada, Henry que igual alcanzo a escuchar algo sonrió camino a la parrilla.

-¿Mi hijo te envió una carta?, ¿es verdad eso?

-Si… ¿usted no lo supo Señor Tyler Crawford?

-Bueno… —agrego caminando hacia un asiento como de columpio que se encontraba bajo el árbol más grande del patio— nos dijo que te enviaría algo, pero no supe que…—dijo sentándose y ayudando a Noah a hacer lo mismo.

-Pero… usted es su Papá…—insistió el pequeño trepándose junto a «Desmond»

-Lo soy, al igual que Sebastian, pero eso no quiere decir que sepa todo lo que hace mi hijo.

-Mis Papás si saben todo lo que hago yo, «ecsepto» lo de mis secretos y «prevacidad», para saberlo, deben preguntarme.

-¿Ves?... yo tampoco se sobre los secretos de Gable…

-¿Es porque le faltan «fromteras»? —pregunto acomodándose.

-Algo así… —contesto Tyler soltando una risa— mira, allí viene Sebastian, ahora puedes hablarnos a ambos —Noah miro en la dirección que Tyler lo hacía e hizo una seña como si estuvieran a una distancia gigante, el aludido se la devolvió sonriendo ampliamente.

-Henry acaba de decirme que querías hablar conmigo…—dijo Sebastian sentándose a su lado.

-Sí, con usted y con el Señor Tyler Crawford, su espso— respondió Noah mirándolos a ambos.

-Creo que sigue muy correcto —opino Tyler haciendo un gesto de obviedad con sus manos.

-Al parecer…

-¿Qué hay con todo ese humo? —añadió señalando la parrilla.

-No lo sé… creo que el Papá de Blaine no es muy de «outdoor» que digamos, aunque creo y ya nadie lo es… —replico Sebastian bebiendo de su botella, Noah los miro de manera alternada esperado que lo notaran.

-Oye… yo soy bastante proclive a la naturaleza y los espacios salvajes, bien lo sabes…

-Tyler por favor… estar en un campamento con todas las comodidades del mundo, no te hace proclive a la naturaleza y a los espacios salvajes, aunque este esté instalado en medio de la sabana africana —rebatió su esposo dándole unos golpes en la espalda por encima de Noah, el pequeño volvió a mirar sin impacientarse.

-¿Vas a volver a lo de denostar todo lo que hago?, creí y habíamos superado eso… —dijo Tyler echándose hacia tras en el asiento columpio, este se movió un poco causando un vaivén divertido.

-No… por supuesto que no… y disculpa, eres sin duda el medico más «outdoor» y salvaje que he conocido en toda mi vida.

-No creo en toda tu vida, pero si lo soy mas que otros que yo si he conocido —corrigió Tyler sonriendo— es más… ¿por qué el alboroto? —agrego al ver que el Papá de Kurt pegaba un grito y todos comenzaban aplaudir.

-Debe ser por Kurt… —respondió blanqueando sus ojos— le entregaran un premio en el ayuntamiento esta tarde.

-¿De verdad?, ¿cuál?

-«Hijo ilustre de Lima». ¿verdad Noah? —dijo Sebastian desordenándole el cabello al hijo de sus amigos.

-Si… todos iremos elegantes…

-Es una ceremonia, deben hacerlo… ¿aún no lo saludamos?... ¿verdad?

-No… solo… solo Blaine se acercó… —respondió Sebastian esbozando una pequeña sonrisa que paso inadvertida por su esposo.

-¿Nos acercamos? —agrego Tyler haciendo el ademan de levantarse, el asiento nuevamente se movió hacia atrás y hacia adelante.

-Creo y será lo más prudente…—contesto su esposo levantándose, termino de beber su cerveza de un solo trago, dejo la botella vacía sobre el suelo a un costado del asiento y pudo por fin advertir el gesto de espera de Noah— ¡pero donde están nuestros modales!… Noah quería decirnos algo…—exclamo tomándose la cabeza primero y señalando al pequeño después.

-Es verdad Noah… discúlpanos… —añadió Tyler repitiendo los gestos.

-Está bien… cuando los grandes hablan, no hay que interrumpir, con «Desmond» lo sabemos —respondió Noah encogiéndose de hombros.

-Pues me parece muy acertado y respetuoso de tu parte… ahora dinos lo que querías que supiéramos —dijo Sebastian cruzándose de brazos frente a él.

-Ahora no… —contesto Noah levantándose del asiento— el abuelito Burt Hummel nos está llamando.

-Claro… ellos deben saber más… —dijo Cooper apuntando a Blaine y Kurt que se asomaban por la puerta de la cocina, Burt pego un grito diciendo el nombre de su hijo y recordando la condecoración que recibiría en el ayuntamiento como si nadie más lo supiera, el aludido quiso calmarlo con «¡Papá por favor!», pero se encontró con la complicidad de Blaine que comenzó a pedir aplausos para el recién llegado, Kurt hizo un par de caras entre avergonzadas y engreídas para terminar haciendo un par de reverencias ante tanto cumplido, evitando siempre hacer contacto visual con su «enemigo número uno». Se acercó a Henry y lo saludo antes que a nadie, siguió con su Papá y su suegro para terminar la ronda de abrazos con su cuñado.

-¡Un discurso!... —exclamo Cooper golpeando su botella con la cuchara de la ensalada.

-¡Eso!... ¡un discurso! —repitió Burt golpeando la suya con su argolla de casado— ahora que no hay humo puedes contarles a todos sobre tu condecoración —añadió Burt riendo de buena gana, el Señor Anderson frunció el entrecejo un tanto.

Kurt se tomó al frente y volvió a sonreír un tanto avergonzado, Blaine lo abrazo por la cintura y se quedó junto a él presumiendo de esposo.

-Ok… hablare… —dijo levantando sus manos abiertas— pero no diré el discurso que tengo preparado, porque si no todos se quedaran dormidos en la ceremonia de esta tarde… bien... quiero…

-¡Un momento!, ¡falta Carol!

-¡Papá!

-¿Que?... estoy orgulloso de mi hijo… ¡y no estoy ebrio!, no me des esa mirada —advirtió apuntándolo— ¡Carol! —grito hacia dentro de la casa —¡Carol! —repitió aun con más ímpetu, esta se asomó junto a Pam por la ventana de la cocina y Burt les hizo una seña para que se allegaran a donde estaban todos.

-Papá, no es necesario… todos saben lo que sucederá —dijo Kurt con la mayor de las calmas.

-No todos, el amigo de ustedes no lo sabía… ¿Cómo se llama?...

-¿Sebastian? —respondió su hijo levantando un poco la ceja.

-Él… termine contándoselo e invitándolo, tendrás un grupo tan grande de aficionados aplaudiendo por ti que ya se lo quisieran los «Brown» en cada juego —termino por decir al tiempo que le hacía señas a Sebastian y Tyler para que también se acercaran.

-Este día se está convirtiendo en una pesadilla —murmuro mirando a su esposo.

-Si lo dieces por el olor a humo…

-Sabes bien porque lo digo, no quieras hacerte el divertido conmigo… —agrego tomándose la cabeza.

-OK… no lo hare… pero debo advertirte que nuestro pequeño hijo se está acercando a nosotros de la mano de Tyler y de tu «enemigo número uno»

-¿¡Qué!?... yo no lo saludare, permiso… —dijo haciendo como que se retiraba en ese mismo instante.

-Kurt….

-No de verdad… lo que menos quiero es que me diga pesadeces, como recordar que me quede afuera por seguirlo al ascensor —insistió queriendo alejarse unos pasos.

-No creo y lo recuerde, y no puedes irte, todos están esperando que digas unas palabras…

-Pues me escucharan en la ceremonia de esta tarde… permiso —repitió.

-¡Papá!... —Kurt escucho a Noah y no tuvo más remedio que abortar el plan de escape, tomo un poco de aire como si contara hasta 5428 y se volteo hacia él con la mejor de sus sonrisas.

-Cariño… justo te estaba esperando para que fuéramos a la cocina a ver lo de tu comida…—dijo tomándole la mano sin siquiera mirar a Sebastian y a su esposo.

-Hola Kurt… ¿dijiste ver su comida?... ¿todo bien con el pequeño?… —pregunto Tyler que parecía y era un doctor en guardia las 24 horas del día.

-Sí, todo bien... es solo su alergia alimentaria… permiso… —respondió queriendo caminar hacia el interior de la casa, Sebastian sonrió por lo bajo, como si toda la incomodidad que generaba en Kurt le produjera placer o algo parecido.

-Ah siempre es bueno cuidar los detalles respecto a eso… disculpa, pero creo y no nos saludamos apropiadamente… —dijo estirando su mano, Blaine creyó que ese momento tenso de Tyler esperando el saludo y su esposo dándole la espalda duraría hasta el 5 de julio, se tomó la oreja nervioso y sonrió son saber porque.

-Papá… el «Papáblen» puede «avereguar» lo de mi comida para que hables con el Señor Tyler Crawford y el Señor Sebastian Smythe —advirtió Noah subiendo sus gafas.

-Pero que buena idea bebé… —contesto su Papá acariciándole la cara— ¿Blaine? —agrego mirando a su esposo con cara de quien va a hacer una cosa pero está pensando en otra muy distinta, el aludido no supo de interpretar bien las caras de su esposo y termino retirándose con su hijo mas pequeño.

-Hola —repitió Tyler.

-Hola… —respondió Kurt por fin, giro sobre uno de sus pies y le dio la mano saludándolo de lo mas cordial— ¿cómo estás?, veo que ahora no traes corbata —agrego señalando el atuendo veraniego del doctor Crawford.

-No… pero si traigo trabajo... disculpen…—dijo Tyler apartándose para contestar una llamada, Kurt miro por el rabillo del ojo a Sebastian y volvió a hacer el ademan de retirarse.

-¿Y a mí no me toca un saludo?... —pregunto Sebastian también estirando su mano, Kurt lo miro como si le dijera todas las groserías que se sabía de una sola vez y en silencio y le respondió el saludo sin decir palabra— ¿cómo estás? —dijo sonriendo.

-Bien… o al menos hasta hace un par de minutos lo estaba… —contesto simulando una sonrisa aún más grande.

-¿En serio?... ¿lo dices por todo el humo?

-Gusto en verte… voy a ver a mis hijos —dijo Kurt queriendo cortar la conversación.

-Y a mí me da gusto que hayas podido volver entrar a tu casa… —respondió Sebastian riendo, Kurt lo miro sin poder creer que sacra lago que había pasado hacia casi un año y fingió una gran risotada acto seguido, tomándose la panza inclusive.

-Nos vemos en el almuerzo… —añadió enseriándose de inmediato.

-Blaine esta como quiere… ¿no es así? —Kurt tomo aire y pensó que si le daba un par de golpes, podría justificarlo atribuyendo demencia temporal o algo parecido.

-¿Qué acabas de decir? —dijo poniendo cara de loco.

-Me escuchaste…

-Claro que te escuche… es solo que no puedo creer… ¿sabes qué?... estoy aquí en mi antigua ciudad, celebrando el día de la patria, recibiré un homenaje en un par de horas, n tengo tiempo para esto, al menos no hoy, mejor me voy con mi familia, mis hijos y mi esposo que me ama desde siempre… y que a todo esto resulta ser Blaine… ¿no es genial?

-¿No te engaño en una oportunidad?, digo para que le des una repensada a eso de «desde siempre»

-Eso fue hace un millón de años y si crees que me voy a molestar por eso, te equivocas —dijo dándose media vuelta.

-¿Qué hay de ti?, ¿no lo engañaste una vez también?

-¿Cómo sabes eso?—dijo Kurt abriendo sus ojos más de lo normal.

-No lo sabía… en realidad no tenía idea… pero ahora lo se… —respondió Sebastian sonriendo— permiso… —termino por decir dejando a su interlocutor sorprendido y con la réplica atragantada.

por Gabriela Cruz Mar Ago 16, 2016 7:07 pm

Hola Isa, sabes me encantaría que Kurt se olvidara de sus modales y le diera un buen ataque verbal a Sebastián y lo pusiera en su lugar, espero con ganas el próximo capítulo, Isa quiero un poco de lluvia y frío me estoy quemando con el sol, te mando un beso y sigue así con la familia Anderson Humnel, .

por Klainefan Miér Ago 17, 2016 2:53 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa

Hola Gaby...

, sabes me encantaría que Kurt se olvidara de sus modales y le diera un buen ataque verbal a Sebastián y lo pusiera en su lugar

Tambien lo piensa... creo que ha sido demasiado tolerante... vamos a ver que pasa...

, espero con ganas el próximo capítulo, Isa quiero un poco de lluvia y frío me estoy quemando con el sol, te mando un beso y sigue así con la familia Anderson Humnel, .

Gracias linda.. ya aqui el invierno parece que se fue... lo que es ABSOLUTAMENTE TERRIBLE!!!, feliz termino de semana!!!

por Klainefan Miér Ago 17, 2016 2:58 pm

Glee

«4th of July»

Part VI

Julio de 2040

-¿«Papáblen»?, ¿podré comer de las costillas que le gustan a Lizzie Anderson Hummel? —pregunto Noah mientras entraba a la cocina de la mano de Blaine

-…

-¿«Papáblen»?, ¿me escuchaste acaso?

-¿Cómo hijo? —dijo este como si volviera de otro lugar más lejano y más calmado.

-¿Que sucede?... ¿también querías quedarte a hablar con el Señor Sebastian Smythe y el Señor Tyler Crawford? —insistió Noah al ver que su «Papáblen» esta más pendiente de lo que pasaba en el patio que de cualquier otra cosa.

-¿Qué?... ¡no!.. por supuesto que no, solo… solo estaba distraído… discúlpame… ven… —respondió alzándolo para subirlo al mueble que estaba en medio de la cocina, miro de reojo y por última vez lo que estaba pasando afuera y se concentró para lo que había entrado— vamos a ver que hay aquí…— agrego abriendo el refrigerador, Noah se inclinó un poco junto a «Desmond» para mirar también.

-¿Crees que Gable tenga que tomar leche especial como yo? —dijo Noah leyendo su carta nuevamente, como si en ella estuviera la respuesta a aquello.

-No lo sé hijo, pero al parecer no, porque cuando estuvieron en la casa sus padres no mencionaron nada al respecto —contesto Blaine sacando un par de enveses herméticos etiquetados con el nombre de su hijo— mira que es gentil la abuela, te preparo puré de patatas y esto que no sé lo que es… pero parecen ser macarrones con queso —agrego mirando el envase por todos lados.

-¡Mis súper favoritos!... ¡y tienen mi nombre! —exclamo el pequeño tomándose la cara.

-Lo tienen, porque son para ti… —respondió poniéndolos de nuevo donde los había encontrado.

-Entonces, ¿podre comer?

-Podrás… ahora…—dijo acercándose a él— que tal si…

-¡«Papáblen»!, ¡¿acaso dejaste solo al Papá hablando con Sebastian?!... ¿estás loco?.. ¡hola! —exclamo Lizzie de corrido mientras entraba como loca a la cocina.

-Lizzie Anderson Hummel, tengo comida con mi nombre y es mi súper favorita —dijo Noah de lo más feliz.

-¿Que?... ¡«Goblin»!... esto es súper serio, el Papa ese está enfrentado a su enemi… —Lizzie se silenció sin terminar lo que iba a decir al ver que Blaine le hacía casi 15 caras diferentes y algunos gestos que le pedían que dejara de hablar y le indicaban a la vez que debía cambiar de tema— es decir… ¡No!... ¿Qué?... ¡«Goblin»!... ¿comida con tu nombre?… ¿de que estas hablando? —agrego como disimulando.

-La Abuelita Pam Anderson preparo comida para mí, ¿verdad «Papáblen»?

-Muy verdad, está en refrigerador… y…

-¿Y? — dijo Noah al ver que su interlocutor se quedaba viendo a Lizzie, la chica hacia caras como tratando de decir algo, Blaine sintió que estaba al frente de un mono mal entrenado, su hija termino por apuntar hacia afuera, para luego disimular que se arreglaba el cabello. Kurt parecía y había terminado de hablar con Sebastian y daba un par de pasos en dirección de la cocina, Blaine y Lizzie suspiraron aliviados al mismo tiempo y se miraron de reojo tranquilos de que todo parecía y había terminado bien, Noah esperaba tranquilo junto a su dinosaurio.

-Oh, oh… —agrego Lizzie llevándose las manos a la boca.

-¿Qué? —pregunto Blaine acercándose de inmediato, se paró junto a su hija y vio cómo su esposo se daba media vuelta hacia Sebastian como si hubiera escuchado el peor de los insultos.

-¿Qué le estará diciendo?... —pregunto Lizzie por lo bajo— ¡uy!... ¿por qué no tome ese curso de lectura de labios que me ofreció Colin?... ¡hola!

-No lo sé Princesa… pero al menos terminaron —dijo volviendo a donde estaba Noah, lo tomo de la cintura y lo bajo del mueble, siempre con la vista en lo que acontecía en el patio.

-¿El Papá va a hacer su discurso caso? —pregunto el pequeño una vez en el suelo.

-…

-¿«Papáblen»?

-¡Obvio Goblin!....ven vamos a escucharlo… —se adelantó a decir Lizzie tomándolo de la mano.

-Blaine esta como quiere… ¿no es así? —Kurt tomo aire y pensó que si le daba un par de golpes, podría justificarlo atribuyendo demencia temporal o algo parecido.

-¿Qué acabas de decir? —dijo poniendo cara de loco.

-Me escuchaste…

-Claro que te escuche… es solo que no puedo creer… ¿sabes qué?... estoy aquí en mi antigua ciudad, celebrando el día de la patria, recibiré un homenaje en un par de horas, no tengo tiempo para esto, al menos no hoy, mejor me voy con mi familia, mis hijos y mi esposo que me ama desde siempre… y que a todo esto resulta ser Blaine… ¿no es genial?

-¿No te engaño en una oportunidad?, digo para que le des una repensada a eso de «desde siempre»

-Eso fue hace un millón de años y si crees que me voy a molestar por eso, te equivocas —dijo dándose media vuelta.

-¿Qué hay de ti?, ¿no lo engañaste una vez también?

-¿Cómo sabes eso?—dijo Kurt abriendo sus ojos más de lo normal.

-No lo sabía… en realidad no tenía idea… pero ahora lo se… —respondió Sebastian sonriendo— permiso… —termino por decir dejando a su interlocutor sorprendido y con la réplica atragantada.

-Ahora si puedes hacer tu discurso… —dijo Burt sorprendiéndolo con un par de golpes en la espalda, llegando hasta donde estaban todos junto a su esposa y consuegra.

-¿Estas bien cariño? —pregunto Pam mirando la cara media desencaja de su yerno.

-…

-¡Kurt!... ¡oye! —exclamo su Papá dando otro par de golpes.

-Si… estoy bien… aunque estaría mejor si nadie me hubiera golpeado la espalda… pero bien Señora Anderson… es… solo el humo —respondió dándole una mirada de soslayo a Sebastian.

-¡Ay cariño!, ¡lo sé!... le he dicho más de mil veces a mi esposo que él no está hecho para estas cosas… pero nunca me escucha… ¡nunca!... —dijo Pam elevando sus brazos al cielo.

-¿Todo bien Mamá? —quiso saber Blaine allegándose hasta su esposo.

-¡Tu Padre!...—contesto blanqueando los ojos.

-Ok… —dijo su hijo mirándola raro— ¿estás bien? —agrego mirando a Kurt.

-Tanto y como es posible con tu amigo aquí…—respondió mirándolo apenas.

-Vamos cuñadito, no te pondrás romántico ahora… queremos el discurso… ¿verdad? —dijo Cooper como alentando a una audiencia pasiva — ¡discurso! —repitió golpeando la botella que tenía en la mano, todos repitieron lo mismo en diferentes tiempos.

-Está bien… solo… solo quiero decir que agradezco a todos porque de una u otra forma han sido parte de este éxito que se supone y tengo, Papá, Carol, mis hijos y mi esposo a quien amo… —dijo Kurt sonriendo, todos aplaudieron, el agasajado repitió lo de la reverencia ceremoniosa y Blaine le dio un beso en la mejilla.

-¿Qué beso es ese «Squirrel»?... ¡bésalo como corresponde!... ¿verdad?... ¡beso!... ¡beso! —comenzó a decir esta vez Cooper volviendo a su espíritu de porrista. Blaine sonrió y le dio un pequeño beso en los labios, Kurt vio de reojo que Sebastian no les quitaba los ojos de encima y tomo la cara de esposo para darle un beso más, mucho más que apasionado, todos hicieron ruidos de complicidad adolescente que se fueron apagando cuando notaron que aquel beso parecía y no acabaría nunca.

-Necesito hablar contigo… sube ahora por favor… —susurro Kurt una vez que sus labios se despegaron.

-Ok… —balbuceo Blaine recuperando el aire.

-¿Y por eso lo nombraran «Hijo ilustre de Lima»! —termino por exclamar Burt causando la risa en todos.

-Entre otros motivos… —añadió Kurt retirándose con una gran sonrisa que borro en cuanto entro a la casa, subió la escalera masticando la rabia y auto reprendiéndose por no haberle dicho unas cuantas a quien le provocaba todo ese malestar, llego a la habitación y cerró la puerta de un golpe, se sentó y puso de pie unas 6 veces seguidas antes de que su esposo llegara.

-Con ese beso que me diste, creo y estableciste un precedente para futuras parrilladas en la casa Anderson… —dijo Blaine entrando.

-No hagas eso… no ahora por favor… —pidió Kurt mientras se paseaba de un lado a otro.

-¿Qué no haga qué?

-Eso que haces siempre… salir de todo con un par de bromas… te advierto y no te resultara…

-¿Qué?... ¿por qué habría de querer salirme de algo?

-Escucha, si ibas a andar contándole a tu novio lo que sucedió cuando Henry era un bebé, no debiste prometerme que quedaría entre nosotros.

-¿Qué?… ¿estás bien?, ¿qué sucede?

-Estoy molesto… eso es lo que sucede… —respondió cruzándose de brazos.

-¿Molesto conmigo?

-No… es decir si… es decir no se… —dijo encogiéndose de hombros— no se con quién estoy molesto, si contigo por haberte hecho amigo de Sebastian cuando estabas en la escuela, si con tu Madre por haberlo invitado o conmigo por haber nacido y luego de unos cuantos años tener que pasar por esto.

-Todas muy buenas razones para molestarse, excepto la ultima… el mundo es un mejor lugar desde que tu estas en el —dijo Blaine acariciándole un brazo, Kurt sonrió un poco y quiso bajar la guardia en su enojo, luego recordó todo y le aparto la mano con rudeza.

-¿Esto porque me fui con Noah y te deje solo con Sebastian?

-No es por eso… y no se para que preguntas si lo sabes muy bien, no finjas que no… —dijo dejándose caer en la de silla de un costado de la cama.

-Ok… lo se… obvio que lo se… pero, ¿qué tal si por esas cosas de la vida lo olvide?… tengo mi edad y eso es perfectamente plausible, por lo tanto… ¿podrías ser tan amable y recordármelo? —respondió Blaine poniendo cara de travesura.

-¿Que dije sobre salir de esto con una broma?... ¿quieres llevarme la contra como lo hace tu novio con el doctor?

-Para ahí por favor… —sentencio Blaine poniéndose serio y haciendo el gesto de alto con la mano— si no quieres que yo bromee, tú tampoco lo hagas, menos con eso de decir que Sebastian es mi novio —termino por decir sentándose frente a él en la orilla de la cama, Kurt repitió lo que su esposo le dijera haciendo muecas infantiles.

-Cuéntame que pasa… —dijo de vuelta sin poder evitar sonreír ante aquello.

-Sebastian lo sabe…

-¿Qué es lo que sabe?

-Sabe… no me preguntes como, pero sabe que yo…

-¿Serás el flamante nuevo «hijo de Lima»? —Kurt lo miro más serio que nuca— Ok… no más bromas… ¿qué es lo que sabe?

-En realidad no lo sabe, o si… ¡no lo sé!… me dijo un par de cosas y yo caí en su trampa y termine casi confesando ese beso que casi me cuesta nuestro matrimonio —explico subiendo sus piernas al sillón, desvió la mirada y se concentró en la hebilla de sus zapatos.

-Kurt… es imposible que sepa eso… solo lo sabemos los dos…

-¿Seguro y no se lo contaste?... ¿cuándo estuviste a solas con él en el estudio?

-¿Crees que rompería una promesa que le hice a la persona más importante de mi vida? —pregunto Blaine entristeciéndose un tanto.

-No…

-Pues no, yo nunca te traicionaría con algo así, y creo que Sebastian no sabe nada.

-¿Por qué lo dijo entonces?

-Porque buscaba incomodarte… es un fanfarrón y lo sabes… dijo algo por si acaso esperando acertar…

-Blaine… quiero que sepas que de todas las cosas… eso que paso, es de lo que más me arrepiento y te juro que escuchar a Sebastian hablar de ello como si lo supiera fue…

-Lo se… lo se… —dijo Blaine acariciándole una pierna.

-Lo odio Blaine… te juro y lo odio… y no solo por las cosas que dice y esa actitud trillada de villano adolescente, que por cierto ya no le queda porque se ve más viejo que tú y yo juntos —advirtió como si aquel detalle fuera indispensable mencionarlo, Blaine sonrió y siguió escuchando— si no por lo que me hace sentir… es… es como si fuera un odioso «pepe grillo» diabólico y dientudo cuya única misión fuera la de recordarme todas las cosas que no soy… y que él si es… —dijo abrazando su rodillas.

-Sé que hay muchas cosas que él es y tú no…

-Espero y esa frase tenga un final que me favorezca —interrumpió Kurt apuntándolo.

-Lo tiene… sé que hay muchas cosas que él es y tú no… pero que tal… si nos concentramos en todas… todas… las cosas que tú eres y el no… —dijo Blaine casi dejando su alma cuando mencionaba lo de «todas las cosas»

-¿Cómo cuáles? —quiso saber Kurt poniendo la voz de un niño pequeño.

-Empezando con lo evidente, tú eres más guapo que él…

-Sigue hablando… —dijo su esposo sonriendo al sentirse más guapo que nadie.

-Eres más talentoso que él… tu corazón es más grande… tu alma es inmensamente más generosa que la de él… tu sonrisa es más dulce y sincera y aunque no tengo evidencia empírica de esto que diré a continuación, podría apostar mi vida a que tú besas mejor que él, cocinas mejor que él y por cierto… es indudable que amas mejor que él… —termino por decir Blaine sonriendo de la más maravillosa de las maneras, Kurt sonrió también y sintió que se ponía un poco colorado al escuchar a su esposo hablar sin pudor de sus habilidades como amante.

-Eso fue muy dulce… —dijo haciendo un puchero.

-¿Lo fue?... ¿verdad? —repitió Blaine crispando al nariz en señal de duda extrema.

-Siento ser tan melodramático… —agrego bajando sus pies para sentarse recto frente a él.

-No serias tú si no lo fueras —se adelantó en decir Blaine acercándolo a él.

-¿Podemos pedirle que se vaya? —pregunto Kurt abrazándolo por el cuello.

-Si estuviéramos en nuestra casa, podríamos…

-Esta será tu casa cuando tus padres mueran… —aseguro haciendo una mueca— lo siento… —agrego riendo.

-No hay problema… ¿estás bien?

-Mucho…

-Te amo… —dijo Blaine como cantando.

-Lo se… —respondió su esposo dándole un pequeño beso— y Sebastian lo sabe, lo es que lo mejor de todo… —añadió mirando al cielo como si efectivamente eso fuera lo mejor de todo.

por Gabriela Cruz Vie Ago 19, 2016 1:16 am

Hola Isa, como estás , sabes me gustaría que fuera Blaine el que de una vez pusiera en su lugar a Sebastián, me encanta la manera en como tratan Henry y Lizzy a mi hermoso Noah, te mando un saludo y te deseo un excelente fin de semana.

por Klainefan Sáb Ago 20, 2016 2:50 pm

Gabriela Cruz escribió:Hola Isa, como estás

Hola Gaby... bien y tu?

, sabes me gustaría que fuera Blaine el que de una vez pusiera en su lugar a Sebastián

Tambien creo que es lo que corresponde...

, me encanta la manera en como tratan Henry y Lizzy a mi hermoso Noah, te mando un saludo y te deseo un excelente fin de semana.

gracias linda, tambien para ti...

por Klainefan Sáb Ago 20, 2016 2:53 pm

Glee

«Tessa Caldwell»

Noviembre de 2022

-Ahí hay un lugar… —dijo Blaine señalando hacia adelante un espacio justo en la entrada de la “Montessori School of New York International”— bueno, había… —agrego al ver que otro conductor aparcaba su auto sin mirar a nadie y sin ningún tipo de remordimientos.

-Eso fue bastante maleducado… ¿no me vio señor que hice las señas y todo?, ¿no me vio acaso?—advirtió Kurt moviendo la palanca de las luces.

-Él no te escucha, ¿lo sabes verdad? —respondió su esposo entrelazando un par de dedos con los de él.

-Lo se… pero aun así, solo quiero dejar en claro que hice mis señas como indica el manual del conductor —insistió avanzando para dar otra vuelta a la manzana— debimos tomar un taxi —añadió por lo bajo mientras señalizaba para doblar.

-Ya no lo tomamos, estacionemos en la cuadra siguiente, no hay problema —dijo Blaine mirándolo desde su asiento, Kurt negó con la cabeza como si se tragara una frustración enorme.

-¿Te fijaste en el número de la matricula?

-No…

-Yo tampoco… ¿por qué no te fijaste?

-No lo sé... mira, aquí hay cientos de lugares, no nos hará daño caminar un poco —dijo Blaine señalando a su alrededor.

-Si pero estamos casi a tres cuadras de la escuela, tendremos que caminar, de ida y de vuelta, y de vuelta tendremos que hacerlo con Henry, su bolso y sus cosas…—explico deteniendo el auto— no es solo caminar Blaine Anderson-Hummel, ¿de verdad no te fijaste en el numero? —insistió quitándose el cinturón de seguridad.

-No… —respondió haciendo lo mismo— por lo general, no ando memorizando matriculas de autos ajenos, ¿para qué quieres saberlo?

-Porque… —dijo tomando algunas cosas antes de bajar— si supiéramos el número, podríamos llamar a la policía y ver si era un vehículo con encargo por robo o algo...

-¡No era un vehículo con encargo por robo!—exclamo Blaine sonriendo mientras abría la puerta para bajarse.

-Podría serlo… nadie lo sabe… nadie sabe nada en realidad… —dijo soltando un suspiro, puso las manos cruzadas sobre su regazo y se quedó observando el tablero del velocímetro como si no pensara bajarse.

-¿Qué tienes? —pregunto Blaine al ver la inmovilidad de su esposo.

-Nada… —respondió sujetándose del volante y soltando otro suspiro más hondo y largo.

-¿Es porque tienes que caminar? —agrego acomodándose en el asiento nuevamente— porque si no quieres caminar, puedo llevarte hasta la puerta y luego me devuelvo con el auto hasta aquí.

-No, no es eso… ¿puedo preguntar algo sin que pienses que estoy poniéndome en lo peor o algo?

-Puedes… siempre puedes —respondió su esposo cerrando la puerta nuevamente— pero como «nota al margen», debo decir que siempre te pones en lo peor.

-¡Blaine!... ¡eso no es verdad!… bueno… lo es… pero no deberías mencionarlo, menos si estoy al frente de un volante de automóvil, ¿qué tal si el espíritu de Louise Shawer se apodera de mí y piso el acelerador sin pensar en nada?... ¿Qué?... es totalmente posible…—agrego al ver Blaine ponía la car de quien rebate aquello.

-Nada… y lo es… tienes razón, es totalmente posible, aunque esta es la E55 st. y no el Gran Cañón y nuestro auto es un cómodo y familiar Chrysler del año y no el Ford Thunderbird del 66… lo que dices es totalmente posible… —Kurt levanto su ceja como reafirmando su teoría de película— ahora la pregunta…

-¿Cómo crees que saldrá todo esto?

-¿Te refieres a nuestra reunión con la Señorita Walton?

-Si…

-Pues ella es muy amable, no creo que tengamos problemas..

-¿Qué hay de los padres de la endemoniada de Tessa Caldwell?

-Si la llamas así en frente de ellos, de seguro y tendremos mas de un problema.

-No la llamare así… aunque se lo merece por decirle tantas estupideces a nuestro bebé… ¿crees que sus padres sean igual?

-¿Igual de endemoniados?

-Si… o peor… ¿qué tal si son mormones o algo?... ¿o fanáticos religiosos?... ¡oh por dios nos regalaran biblias y esas cosas con cuentas! —exclamo Kurt tomándose la cabeza y haciendo el gesto con su mano de quien reza una decena de un rosario en tiempo record.

-¿Quieres calmarte?, nada de eso pasara… estoy seguro que siendo una escuela laica, la Señorita Walton no dejara que nos regalen nada de eso que mencionas, ni que nos rocíen con agua bendita.

-¿Crees que sea posible?

-Kurt…

-¡No!... Blaine, escúchame… no conocemos a estas personas, los hemos visto en las PTA de cada mes, pero nunca hemos hablado con ellos, ni siquiera sé cómo es su cara.

-Ni yo… pero confió en que sean amables.

-¿Con esa hija que tienen? —rebatió Kurt alzando su ceja.

-Es una niña Kurt… los niños son así en ocasiones.

-Henry no es así, y estoy seguro y Lizzie tampoco lo será…

-Por supuesto que no… a lo que me refiero es que tal vez quería presumir de conocimiento o algo…

-¿La estas justificando?... porque si te pones de su parte no quiero que sea este Blaine Anderson el que me acompañe a la cita —sentencio cruzándose de brazos.

-No me pongo de su parte ni tampoco la justifico, pero no es posible que una niña de la edad de Henry maneje todos esos datos de genética y Papás bilógicos… tal vez tiene hermanos más grandes que le dieron esa información, la aprendió y la repitió.

-O se las dicen sus padres, lo que refuerza mi teoría de que son un par de fanáticos religiosos que se dedican a la ciencia.

-Ok… —dijo Blaine mirando a su esposo con los ojos empequeñecidos— ¿vamos?... no me gustaría llegar retrasado a la reunión —agrego haciendo el ademan de bajarse.

-Ni a mi… pero… espera… —dijo tocándole el hombro— ¿nos pondremos del lado de Henry?, ¿verdad?

-Por supuesto, es nuestro hijo… si bien actuó mal diciendo esa «palabra fea», que por cierto pensé en algo mucho peor cuando nos confesó aquello.

-Y yo… pero asumo y en su cabecita bella «tonta» es una palabra fea.

-También lo creo... pero el asunto es que si ponemos todo en contexto es casi justificable, por lo tanto somos 100% del «Team Henry»… vamos…

-Si… un momento…

-Kurt…

-Lo último, lo juro…

-¿Qué cosa?

-¿Qué le diremos a nuestro hijo?, ¿le contaremos todo lo que se hable en la reunión?, ¿o lo editaremos a conveniencia?

Blaine miro hacia arriba como analizando una respuesta.

-Ninguno… —dijo mirándolo— ya que lo más probable es que Henry este con nosotros.

-¿En una conversación de adultos?, ¿por qué?

-Porque él es el protagonista de la historia, junto con su compañera claro esta… por lo tanto asumo y contrastaran las versiones entre ambos, y ahora me bajare y esta vez, nada de lo que digas me lo impedirá…—sentencio Blaine poniendo un pie en el suelo.

-Blaine…

-Kurt, llegaremos tarde…

-Ahora sí que es lo último te lo juro… —dijo Kurt poniendo sus dedos en cruz.

-Que…

-Gracias… —dijo tomándole la cara para darle un pequeño beso.

-¿Por qué? —pregunto su esposo sonriendo.

-Por ser tú en todos los momentos de mi vida… en especial en los que pierdo el control…

-Por nada… el placer es mío —respondió Blaine besándolo de vuelta— ¿ahora sí que nos vamos?

-Ahora si… —contesto Kurt bajándose por fin, su esposo hizo lo propio de su lado del auto y se arregló un poco la ropa antes de reunirse con el sobre la acera, Kurt lo tomo del brazo y juntos caminaron hacia el colegio, hablando de Lizzie, de todo lo que había que hacer ´para el «Día de acción de gracias», de los edificios y de cualquier cosa que no involucrara la endemoniada Tessa Caldwell y sus dichos.

-Aún está el auto que nos ganó el estacionamiento… ¡ya se! —exclamo Kurt dando un pequeño brinco— anotemos la matrícula y digámosle al conserje que le robaron las ruedas o algo así —dijo sacando el teléfono de su bolsillo y sonriendo de manera traviesa.

-¿Qué?... ¿esas loco?, yo no hare algo así, vinimos a otra cosa… y esa cosa es la que haremos —sentencio Blaine al tiempo que abría la puerta de entrada para su esposo.

-Eres bastante aburrido cuando te lo propones Blaine Anderson-Hummel.. —respondió entrando de mala gana, Blaine sonrió como siempre y le hizo un par de cosquillas en el cuello mientras esperaban tras la puerta de la Señora Scheinberg— tal vez no está, golpeare de nuevo… —añadió Kurt empuñando su mano.

-Acabas de golpear… debe estar ocupada, ten paciencia… —se adelantó en decir su esposo tomándole la mano.

-No me gusta esa actitud tuya… te lo advierto —dijo en tono de reclamo.

-¿No dijiste recién que estabas agradecido por lo que soy?

-Lo dije y ahora me arrepiento… es más… ¡Señora Scheinberg!… ¡buenas tardes!…—exclamo cuando esta abrió la puerta.

-Buenas tardes Señor Hummel… ¿en qué puedo ayudarlo?

-Me conoció, me siento afortunado, debo decir —dijo dándole la mano.

-Lo reconocí desde el día uno, pero no dije nada para que mi ética no se viera comprometida... usted sabe… —agrego la mujer haciéndole un gesto cómplice, como si Kurt realmente supiera lo que ella sabía— dígame que puedo hacer por usted.

-Con mi esposo nos citaron pro un problema que tuvo nuestro hijo…

-A nosotros y a los padres de la niña involucrada —añadió Blaine al ver que la mujer ponía diferentes caras de duda.

-Nuestro hijo es Henry…

-¡Por supuesto!, ¡Henry!… —exclamo dándose un golpe en al frente, Kurt y Blaine dieron un pequeño salto de la impresión— mi cabeza se pone un poco difusa cuando ya está terminando el día, disculpen ustedes —agrego batiendo sus manos cerca de su cabeza.

-No se preocupe… nos dijeron que la reunión era a las 2 —dijo Kurt en tono de pregunta.

-Si, por supuesto… —contesto la mujer entrando en su oficina, tomo un par de carpetas desde su escritorio y volvió a salir— la Señorita Walton me puso al tanto, los padres de Tessa Caldwell, ¿no es así? —pregunto mirando los documentos.

-Así es… hubo un problema entre ella y nuestro hijo y nos enviaron una nota para venir hoy día —explico Blaine tomando la mano de su esposo.

-Lo se… acompáñenme, la maestra de Henry los atenderá en la oficina de la directora.

-¿Estará ella también?... hasta ahora pensaba que era un mito en esta escuela —dijo Kurt casi sarcástico, Blaine le apretó la mano en señal que aquel comentario estaba demás, y el aludido murmuró un «¿qué?» de manera divertida.

-Por supuesto que existe Señor Hummel, ¡se lo puedo asegurar! —respondió tomándose el pecho.

-No dudamos de ello —se adelantó en decir Blaine— lo que pasa es que no pensábamos que el incidente era para preocupar a las altas autoridades del colegio, por así decirlo.

-No lo fue Señor Anderson… por aquí… —dijo señalando a su izquierda— pero para nosotros la buena convivencia entre los niños es fundamental —agrego Valerie separando las silabas de «fundamental», Kurt creyó que aquella mujer trataba a todas las personas como si fueran alumnos de alguna clase de lentos.

-Para nosotros también, créame Señora Scheinberg que nuestro hijo no es así, Henry es muy correcto y respetuoso, es solo que cuando se trata de su familia es muy protector, a pesar de los pocos añitos que tiene, ¿verdad Blaine?

-Así es, le hemos enseñado que no hay nada malo con tener dos papás, por lo tanto se ofende con facilidad cuando alguien se mete con nosotros… —añadió Blaine sonriendo orgulloso.

-Lo entiendo, y no se preocupen, no habrá sanción alguna para su hijo, las familias «homoparentales» son como el resto, y para nosotros no hay diferencia alguna, por aquí…—dijo esta vez señalando a su derecha— por lo tanto, no deben preocuparse… —continuo al tiempo que se detenía frente a la puerta que tenía el nombre de la directora escrito en una placa como de oro— y entre nosotros —agrego Valerie haciéndoles una seña para que se acercaran a ella, bajo la voz y miro a su alrededor antes de continuar con lo que estaba diciendo— esa niña bien merecía que alguien le respondiera sus comentarios... —dijo guiñándoles un ojo, Kurt se sintió el ganador de inmediato en su aun no disputada pelea con los Caldwell, la Señora Scheinberg golpeó la puerta y puso unas 8 caras divertidas mientras esperaba que le abrieran.

-Valerie… —dijo una mujer al ver a la asistente facultativa parada en el umbral, era alta y fornida, usaba gafas de prescripción que hacían que sus ojos azules se vieran enormes, tenía el cabello castaño y corto hasta a los hombros y un flequillo elevado como hojas de palmera, vestía un traje de dos piezas y una blusa con un rosetón que se asoma en el escote, Kurt creyó que había retrocedido hasta las pasarelas de los años 90.

-Julliet, los Señores Anderson-Hummel ya llegaron —respondió apuntando a sus acompañantes.

-Perfecto… los estábamos esperando… mucho gusto, creo y no nos conocíamos, ¿o sí?, Julliet Norwood, Directora de la escuela —dijo estrechando la mano de Kurt primero y la de Blaine después.

-No habíamos tenido ese placer, Kurt Hummel-Anderson —dijo apretándosela de vuelta.

-Lo se… su reputación en Broadway lo precede.

-¡Oh!... gracias Señora Norwood…

-Por favor llámenme Julliet, ya tengo suficiente con que cientos de niños me llamen así cada día —dijo saludando a Blaine, este se presentó al igual que su esposo pero no recibió cumplido alguno— pasen… —añadió aparatándose hacia un costado de la puerta.

La oficina era grande e iluminada, había un escritorio, un estante de libros que abarcaba de punta a punta una de las paredes, un par de sillas y una mesa redonda en uno de los rincones, Kurt pudo ver a su hijo que sonrió en cuanto los vio, estaba sentado con sus manos sobre la mesa y parecía impacientarse. A su lado estaba una niña rubia que no dejaba de mirarlo como si le dijera en silencio un sinnúmero de pesadeces y por ultimo junto a ella, dos adultos vestidos elegantes con colores casi iguales, Kurt se sentó mirando de reojo a su esposo como queriendo hacer notar aquel detalle, Blaine no pudo evitar pensar que la teoría de los fanáticos religiosos o era tan lejana en realidad.

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