Learning to breathe (Brittana)

Aloha genteee!! Aquí va otro capi, besos y abrazos!!! "A los 23 seré famosa y conoceré a Naya"

CAPITULO 10

-Santana no aparece – Dijo Finn dejando literalmente sin aliento a la bailarina mientras empezaba a recordar aquella noche en la que la latina había abandonado su vida.
-¿C-Como que no aparece? – Pregunto la bailarina más pálida que de costumbre.
-Le dije que me venía a la cama y ella dijo que vendría en un rato más – Explicaba Dani con la voz quebrada – Me he despertado porque no estaba, así que la he buscado por la casa y no esta – Dijo derramando algunas lágrimas.
- … - Brittany le dio una rápida ojeada a la habitación y sintió un poco de alivio y confusión al ver las maletas de la latina aun ahí.
-¿No tienes alguna idea de donde podría estar? Algo como para hacernos una idea – Pregunto Sam.
-No tengo ideas, estoy bloqueada… Ha sido culpa mía – Dijo la cantante con culpabilidad.
-¿Cómo que ha sido culpa tuya? ¿Qué ha pasado? – Pregunto la bailarina algo desesperada, era de noche y Santana andaba sola quien sabe dónde.
-Ella estaba muy mal cuando se enteró de los rumores que habían de ella, le dije que no le diera importancia pero algo parecía molestarle… Me voy a casar con ella y aun así no sé cuándo algo anda mal con ella – Dijo la chica para luego romper a llorar.
-No podemos desesperarnos, debemos pensar y actuar – Dijo Puck quien estaba muy preocupado por la latina.
-Yo, Puck y Sam iremos a buscar por los alrededores, los demás se quedaran aquí en caso de que vuelva y trataran de llamarla – Ordeno Finn con su voz de líder.
-Yo también iré – Dijo la bailarina sorprendiéndolos a todos menos a Dani que no tena idea de la historia de las chicas – Me he dedicado a recorrer la isla todos estos días y conozco mas lugares – Dijo con firmeza.
-Si es así yo también quiero ir – Dijo Dani poniéndose de pie.
-No, tú te quedas – Dijo Puck con voz firme.
-Pero es mi novia la que está desaparecida – Reclamo la chica desesperada.
-Lo sé, pero no estás en condiciones de hacer el viaje, es mejor que te quedes en caso de que ella regrese – Dijo Finn esta vez con una voz templada – Andando chicos.

Luego de cambiarse ropa los chicos se juntaron en el salón para hacer ponerse de acuerdo con el recorrido que haría cada uno de ellos, estaban muy nerviosos y preocupados, todos sabían que Santana era una chica fuerte pero la realidad era que estaba sola en un lugar que no conocía y emocionalmente inestable, rápidamente se subieron en los vehículos y partieron a revisar los lugar que le había tocado a cada uno, habían quedado de acuerdo que cada veinte minutos llamarían para ver ¿Dónde estaban? Y ¿Qué novedad tenían?. Brittany incluso había llamado a Emily para explicarle la situación y la chica le dijo que llamaría a algunos amigos que trabajaban en la ciudad en caso de que la vieran.

Había pasado una hora y todavía no pasaba nada, la desesperación empezaba a consumir a los chicos y en especial a Brittany que en más de una ocasión casi choca con uno que otro vehículo por ir a mucha velocidad, ella había notado la expresión de Santana en el aeropuerto y sabía que algo le molestaba pero no había hecho nada ni se lo había comentado a nadie, ahora la chica estaba perdida y nadie sabía que pasaba. “Debería haberle dicho a Quinn que algo andaba mal con ella, pero como Dani no se ha dado cuenta ¡¡Mierda!! Cualquiera que conoce a Santana López sabe que es una cabezota que no dice cuando está mal” Pensaba mientras la frustración de no encontrar a la chica la iba consumiendo, no podía evitar no culpar a la cantante por ser tan poco sensible con la latina “Ella no está acostumbrada a ser el centro de atención como tú” Grito la chica al vacío, no sabía dónde más buscar hasta que observo las olas del mar y tuvo un recuerdo.

En la cama del departamento se encontraba Santana llorando mientras era abrazada fuertemente por Brittany, la chica había tenido una dura semana en la universidad y se había peleado fuertemente por teléfono con sus padres, al llegar al departamento la bailarina la había encontrado rompiendo los libros y la había abrazado mientras la otra se rompía en llanto lo que nos llevaba a la situación principal. Luego de calmarse después de haber llorado por casi una hora, la latina dijo de repente.

-Britt quiero ir a la playa – Hablo mientras miraba a su novia que la tenía envuelta entre sus brazos.
-¿A la playa? – Repitió la bailarina mientras limpiaba las lágrimas de las mejillas de la latina - ¿Es una clase de esos antojos raros?
-Los antojos son de las embarazadas Britt – Explico la morena con una pequeña sonrisa, su novia era única – Y que yo sepa yo y Fred aun no esperamos un hijo – Dijo recuperando su humor.
-Que divertida – Dijo la bailarina con ironía – Entonces dile a Fred que te lleve a la playa – Dijo mientras se disponía a irse.
-Pero que celosa eres Pierce – Dijo la latina mientras tiraba a su novia nuevamente de espaldas y la abrazaba – Sabes que eres la única.
-¿Por qué a la playa? – Pregunto la rubia mientras volvía a abrazar a Santana.
-Sé que sonara cursi, pero el sonido del mar y tus ojos particularmente son las únicas cosas que me dan paz, así que pensé que si tenía ambas cosas en un mismo lugar- Dejo de hablar al ver como la rubia le sonreía embobada - ¿Qué te pasa?
-Tienes razón… Eso ha sonado muy cursi – Dijo la rubia.
-Y después te quejas de que yo soy la poco romántica – Dijo la latina golpeando el hombro de su novia – Olvídalo Pierce, iré sola – Dijo la chica mientras se volvía en la cama quedando de espaldas a la rubia.
-¿Te parece si vamos este fin de semana? – Pregunto la rubia mientras rodeaba con sus brazos a la latina y le besaba el hombro.
-Claro, si no tienes problemas porque pienso ser algo cursi – Dijo la morena aun sin darse vuelta pero la bailarina sabía que estaba sonriendo.
-No hay problema cariño, yo puedo ser algo ardiente ¿Te parece? – Propuso la rubia haciendo reír a su novia.
-Perfecto, será el mejor viaje a la playa de todos los tiempos – Dijo la latina mientras besaba a su novia – Te amo como loca ¿Sabes?
-Lo sé, también te amo como loca – Dijo la rubia mientras le daba un tierno beso en la nariz a su novia – No quiero interrumpir este hermoso momento – Dijo al cabo de un rato- pero yo no limpiare eso – Dijo la rubia al cabo de un rato señalando el desastre de hojas que había en la habitación producto de los pobres libros que habían sido atacados por la latina.
-Eres única Britt – Dijo la latina mientras golpeaba el brazo de su novia riéndose a carcajadas y contagiando a la rubia.

Trato de dejar a un lado el dolor que se alojó de inmediato en su pecho y empezó a pensar los posibles lugares donde estaría la latina “¿Dónde mierda te metiste Santana?” entonces rápidamente tuvo una idea, era el único lugar donde quedaba sin registrar por la bailarina, si no era ahí no tenía idea donde podría estar. Se subió a la moto y entre algunos insultos por parte de ella y recibidos de otros conductores, por fin llego a su destino, era una especie de risco (parecido al que le había mostrado Emily) cerca de la playa en la que habían estado el día anterior, sabía que a Santana le gustaban los lugares así y cuando habían pasado por ese lugar la chica había quedado maravillada, se bajó de la moto y empezó a andar hasta que vio una figura sentada en el borde del risco, no la podía ver con claridad pero podía apostar a la latina. Se acercó un poco más y la vio claramente, la chica tenía una profunda expresión de tristeza en su rostro y se podía notar que había estado llorando, se acercó lentamente a su lado y se sentó bajo la sorprendida e incrédula mirada de la latina.

-Brittany ¿Qué haces aquí? – Pregunto secándose rápidamente las lágrimas.
-Eso debería preguntártelo yo ¿No crees? – Contesto la rubia mientras observaba el cielo, se podían ver las estrellas con claridad desde ahí, era simplemente maravilloso.
-Yo quería estar sola – Dijo la latina abrazándose a sus piernas.
-Podrías haberle dicho a alguien, todos están muy preocupados – Dijo la rubia bajo todo pronóstico entablando una conversación con la latina “Es una tregua Pierce”.
-Lo sé, es solo que… - Se quedó callada, sabía que Brittany no quería tenerla ni un centímetro cerca pero ahí estaba, sentada a su lado pasadas a las 2 de la madrugada porque ella había desaparecido como una cobarde dejándolos a todos preocupados y ella había ido a buscarla, a salvarla.
-¿Qué te pasa Santana? – Pregunto la rubia sin despegar su mirada del cielo.
-Yo nunca te engañe con ningún profesor – Dijo la chica de repente dejando sorprendida y confundida a la bailarina.
-¿A qué te refieres? – Pregunto esta vez mirando a la chica.
-Cuando llegamos esta mañana a L.A para ir a hablar con el incompetente del manager de Dani por la noticia del casamiento me entere de que esa no era la única cosa que se hablaba de mí, de repente habían ciento de informe de idiotas que aseguraban haber salido conmigo… Ni siquiera eso – Hizo una pausa – Haberse acostado conmigo en mi época de estudiante e inmediatamente no pude evitar pensar en ti – Dijo la latina en un susurro.
-¿Por qué pensaste en mí? – Pregunto la bailarina sin entender mucho a la latina.
-Tu y yo salíamos en esa época Brittany – Dijo un poco alterada por la calma de la rubia – Sé que me odias por lo que te hice y lo entiendo, pero yo nunca te engañe con ninguno de esos idiotas, no soy tan perra como para mentirte de esa manera y ahora me siento como basura porque cada vez que intento alejarme de ti para evitarte sufrimiento, termino haciendo todo lo contrario – Dijo la latina mientras se secaba las lágrimas que no paraban de correr por sus mejillas – Por favor, créeme – Dijo en un susurro.
-Yo no te odio Santana pero no puedo decir que me hace feliz estar cerca de ti, de echo me fastidia mucho estarlo, pero eso no quiere decir que me he olvidado de quien eres – Dijo la bailarina con un tono cansado – Te creo, a parte tus profesores eran todos viejos y calvos – Dijo haciendo sonreír tristemente a la latina- Anda, vamos – Dijo poniéndose de pie – Los chicos están muy preocupados, creo que Rachel se empezara a arrancar el cabello a tirones si no te ve llegar.
-Gracias Brittany – Dijo la latina siguiendo a la bailarina que le extendía un casco – No pensaras que me…
-Los chicos están del otro lado de la isla, tengo mucho sueño como para esperarlos y tú no te quedaras sola además no quiero quedarme ni un segundo más aquí – Dijo la rubia insistiendo con el casco – Toma el maldito casco ¿Si? – Dijo esta vez perdiendo un poco la paciencia cosa que la latina se dio cuenta, sabia de primera mano el carácter de mil demonios que adquiría la bailarina cuando tenía sueño.
-Está bien – Se rindió la latina tomando el casco.
-¿No me digas que no has traído cazadora? – Dijo la rubia cada vez más molesta por el sueño y la irresponsabilidad de la morena que estaba solamente llevando una camiseta de tirantes a las casi 3 de la madrugada.
-… - La latina se sentía totalmente avergonzada por su actitud, se sorprendió al ver como la bailarina se quitaba el abrigo y se lo ponía en los hombros quedando únicamente con una camiseta – No es necesario…
-Cállate y sube a la moto, me muero de sueño – La corto la bailarina mientras hacía partir el vehículo - La latina no sabía de qué debía afirmarse, lo más obvio es que se aferrarse al chofer del vehículo pero no quería incomodar a Brittany así que opto por agarrarse de la parte de atrás del asiento pero rápidamente sintió como las manos de la bailarina tomaban las suyas y las dirigía rodeando su cintura – ¿Estas de broma? Si te afirmas de ahí te puedes caer – Dijo para después hacer partir la moto.

El viaje fue corto ya que la bailarina iba a una buena velocidad, pero eso no impedía que la latina se pusiera nerviosa porque podía sentir bajo sus manos el duro abdomen de la bailarina y recordar una serie de cosas que una mujer con pareja no debería pensar, por otra parte el calor que desprendían las manos de la latina estaba haciendo estragos en la mente de Brittany haciendo que se apresurara en llegar a la casa cuanto antes. Llegaron a la residencia siendo recibidas por todos los chicos que estaban muy molestos con la latina pero a pesar de todo la abrazaron.

-Jamás pensé que diría esto pero tenía tantas ganas de verte Satán – Dijo Kurt abrazando a la latina.
-No te pases Lady Hummel, solo he ido a pensar – Decía la latina tratando de escapar del abrazo del castaño para luego ser rodeada por los brazos de su novia.
-Yo iré a dormir, ya cumplí con mi misión – Dijo Brittany con los ojos entrecerrados casi en modo automático mientras se dirigía a su habitación y se dormía.
-Sera mejor que nos vamos a acostar, basta de emociones por hoy – Sugirió Finn siendo seguido por todos.
-Santana ¿Puedes venir un poco? – Llamo Quinn a la latina que se alejó de su novia.
-¿Qué pasa Quinn? – Pregunto la latina acercándose a su amiga.
-¿Por qué no se lo has dicho a Britt? – Pregunto con un tono serio – Sabes que si se entera por otros se volverá loca, ahí sí que te odiara – Sentencio tratando de convencer a la latina.
-Yo no quiero que tenga que pasar por más dolores por mi culpa – Dijo la morena con determinación.
-Créeme, no pasara por mas dolores porque ya no le puedes hacer más daño – Dijo la rubia en un tono duro – Sé que lo hiciste para protegerla pero te equivocaste San, ella tenía derecho a decidir.
-Todo lo que hice fue por ella, para que pudiera tener una vida mejor – Dijo la latina al borde de las lágrimas.
-Tú eras su vida Santana ¿No lo entiendes?, ella te amaba más que a ella misma… Todo este tiempo he tratado de reparar lo que tú destruiste, pero no puedo… No sin que ella sepa la verdad.
-Ella se merece alguien mejor que yo… Además esta Dani.
-Deja de ser una cobarde y díselo, ella merece saberlo y Dani también merece más explicaciones, no puedes casarte con ella porque crees que es lo correcto – Dijo la rubia para luego meterse en su habitación dejando pensativa a la latina.

Ya habían pasado tres días desde la desaparición de Santana y las cosas se habían calmado, las chicas continuaban coordinando la boda de Quinn con la ayuda de Emily mientras los chicos disfrutaban de la playa, después de aquella noche la bailarina había vuelto a su actitud de indiferencia a la latina, hasta este momento Brittany no había tenido la oportunidad de hablar a solas con Emily así que decidió pasarse de sorpresa por la casa de la chica, ya eran las 9 de la noche. Al llegar golpeo la puerta y esta fue abierta por Anna (La modista) quien observo de arriba abajo a la bailarina.

-Vaya, tu eres la chica deportista que sorpresa ¿Qué se te ofrece? – Pregunto la mujer observando curiosamente a la bailarina.
-Venía a ver a Emily ¿Se encuentra? – Pregunto educadamente.
-No querida, esta de turno hoy – Dijo la mujer que al ver la cara de confusión de la bailarina continuo – Emily tiene dos empleos, mantener una casa no es nada fácil.
-¿Me puede dar la dirección por favor?
-Claro que si – Fue dentro de la casa y después volvió con un papel que le tendió a la bailarina – Ya debe estar por salir.
-Gracias – Dijo la bailarina para luego dirigirse a su vehículo y ponerlo en marcha.

Luego de preguntar por el lugar, por fin llego a un restaurant ubicado fuera de la ciudad, era lo que uno se imaginaba cuando pensaba en Hawaii, la rubia iba a entrar al lugar cuando vio a Emily salir de local y rápidamente se le acercó por la espalda.

-El taxi ha llegado señorita – Dijo la bailarina con una voz ronca haciendo sobresaltarse a la morena.
-¿Desde cuándo los taxistas son rubias de sonrisas sexys que conducen motocicletas? – Pregunto la morena mientras abrazaba a la bailarina y le daba un beso en los labios, cualquiera que las viera podía jurar que eran pareja.
-Depende, si nos siguen pagando con besos así aumentara el número de rubias conduciendo taxis-motos, aunque no podemos asegurar que tengan una sonrisa así de sexy – Dijo la bailarina con tono engreído haciendo reír a la morena.
-Es bueno verte Brittany Pierce, eres la parte divertida de la rutina – Dijo la morena despegándose de la bailarina que la guiaba hasta la moto y le extendía un casco – Veo que te tomas en serio tu trabajo.
-Por supuesto – Dijo con una sonrisa mientras sentía como las manos de la morena se metían bajo su chaqueta de cuero - ¿Dónde desea ir la señorita?
-Sorpréndeme – Desafío la morena.

La bailarina empezó a conducir la moto hasta que llegaron a frente a la playa y se sentaron en una de las bancas que habían alrededor, estuvieron un rato en silencio hasta que la morena se animó a hablar.

-Me alegro que todo esté bien con Santana, sinceramente cuando me llamaste me asuste un poco – Dijo sinceramente la morena.
-Santana es mi mercenaria – Dijo la bailarina mientras observaba las estrellas.
-¿Ella? – La chica estaba con una expresión de sorpresa en todo su esplendor – Ahora todo calza, los celos de ella y tu desesperación al llamarme – Enumeraba la morena.
-Me desesperaría si cualquiera de mis amigas desapareciera – Dijo la bailarina sin encontrar algo particular en su actitud.
-Claro, pero sonabas jodidamente desesperada… Como si hubieras perdido lo más importante – Explicaba la morena.
-Y lo perdí…
-Te entiendo, me sentí igual cuando sucedió lo de Hanna… Era como si me hubiesen arrancado la vida, como si tomaran mi corazón y lo apretaran hasta dejarlo sin aliento – Relato la morena – Sé que Alex te ha hablado de Hanna, y sé que debería habértelo dicho yo misma pero no me gusta hablar del tema.
-Tu y yo haremos algo – Dijo la bailarina de repente mirando a la morena a los ojos – Durante este mes nos enfocaremos ambas en sanar nuestros corazones, pero quiero que tú lo intentes por última vez con Hanna.
-¿Cómo?
-Trata de traerla de vuelta a ti, no te rindas Emily, no le des la opción de no recordarte – Habló la bailarina con convicción.
-No creo tener la fuerza de volver a hacer eso, a ver esa mirada en su rostro… Como si no fuera alguien especial – Dijo Emily en voz baja.
-Has que te vea de esa manera entonces, no pareces una perdedora Emily Fields… Solo una última vez – Animo la bailarina.
-¿Qué hay de ti Brittany? – Pregunto la morena animada con la idea de la bailarina.
-Mi tiempo con Santana ya paso.
-Tú no tienes la última palabra Brittany, cuando el amor es de verdad nadie se puede interponer – Dijo la morena – Lo hare, pero con una condición.
-¿Cuál es la condición? – Pregunto la bailarina muy curiosa.
-Si de aquí hasta en matrimonio de tu amiga no sucede nada entre mí y Hanna o entre ti y Santana, te quiero conmigo aquí en Hawaii – Propuso la morena.
-Nada me haría más feliz – Dijo la bailarina – Ahora será mejor que te vaya a dejar a tu casa.
-Es un trato, ya me diste tu palabra Brittany Pierce – Dijo la morena mientras seguía a la bailarina.

Al otro día de esa conversación había recibido una llamada de Emily que había decidido viajar a Seattle que era donde vivía Hanna con la excusa de ver los últimos detalles del divorcio, iba a quedarse ahí por una semana, esta era la última oportunidad de ser feliz y Brittany sabía que Emily era la que más posibilidades tenia de serlo de entre las dos. Luego de las insistentes insinuaciones de Rachel y Kurt, el grupo de amigos se dirigía a cenar a un reconocido restaurant de la isla, la judía había hecho las reservaciones antes de hacer el viaje así que no tuvieron problemas. Para Santana y Dani era un poco incómodo estar en lugares públicos desde que se supo lo de su matrimonio y posteriormente lo de la pelea de la cantante con la reportera y por más que se encontraban en un lugar exclusivo, las miradas no las abandonaban ni por un momento.

-¿No es maravilloso que estemos aquí todos juntos? – Dijo la judía muy feliz.
-¿Quién lo imaginaria? – Dijo Tina mientras besaba a Mike.
-Me gustaría ver la cara de la entrenadora Sylvester ahora, siempre nos decía que todos terminaríamos cantando en un cabaret o siendo gogo dancers – Dijo Artie.
-Muchísimas gracias por estar aquí con nosotros chicos – Dijo Quinn mientras tomaba la mano de Puck y la de Beth – Son todos muy importantes en nuestras vidas.
-Solo no te pongas a llorar Q, ya tenemos suficiente con Lady Hummel y el Hobbit – Dijo Santana mientras le sonreía a la rubia.
-Oh Santana, no me había percatado de que estabas entre nosotros – Ataco esta vez Quinn haciendo reír al grupo.

Estuvieron un rato hablando y riendo mientras una joven camarera no le quitaba los ojos de encima a Brittany haciendo que pronto todos se percataran de la situación y la chica se convirtiera en el blanco de las bromas y opiniones del grupo.

-Esa chica no te deja de mirar Britts, dale lo que quiere – Dijo Puck dándole codazos a la rubia.
-Que va, si Britt ya tiene un ligue – Dijo esta vez Mercedes dejándolos a todos colgados – Emily Fields – Aclaro la morena.
-Esa chica esta buenísima – Exclamo Puck llevándose un codazo de Quinn – Pero nadie es como tu cariño.
-¿Cómo lo sabes? – Pregunto Rachel a Mercedes.
-Porque las he visto hablando juntas cuando vamos con Quinn a esas citas raras y tienen esa expresión de “Ya hemos tenido sexo” marcada en sus frentes – Dijo la morena mientras era escuchada atentamente por todo el grupo y asesinada mentalmente por la latina.
-Chicos, estoy aquí pero no se molesten – Dijo la bailarina fastidiada por la actitud del grupo.
-No sabía que te venían las chicas – Dijo Dani algo sorprendida.
-Si supieras – Añadió Mercedes.
-Mi Britts es una caja de sorpresas – Dijo Puck.
-Aquí están sus pedidos – Dijo la joven camarera acercándose al grupo.
-Wow esto está muy caliente – Dijo Beth mientras devolvía algo de comida al plato.
-Así son nuestros platos… Muy calientes – Dijo la camarera mirando a la bailarina mientras casi todos los chicos sonreían y la latina estaba a punto de saltar encima de la chica.
-También se ven algo FACILES de preparar – Dijo Santana sin poder evitarlo.
-Puede ser, pero no creo que es sea un problema – Dijo la chica mientras le guiñaba un ojo a la bailarina y se retiraba.
-Sí que la traes loca – Dijo Puck riendo.
-Esa tipa en una lanzada ¿Quién sabe lo que pueda tener? – Decía Santana mientras los demás sonreían con complicidad, alguien estaba celosa y no podía ocultarlo.
-No es como si Britt se fuera a casar con ella, solo digamos que algo de diversión nunca le va mal a nadie – Dijo Puck apoyando a la camarera.
-Tita Britt ¿Si te casas con Emily aun seguiré siendo tu única chica? – Pregunto de repente Beth dejándolos a todos en silencio, la verdad nadie se imaginaba a Brittany casándose.
-Claro que si cariño, eres la única chica en mi mundo – Dijo la bailarina mientras le guiñaba un ojo a la pequeña.
-¿Porque crees que tú tita se casaría con Emily? – Pregunto Quinn curiosa por las ocurrencias de su hija.
-Porque el otro día ella fue a buscar a la tita muy temprano y cuando volvió a casa traía una sonrisa como las que pone papa cuando su equipo favorito gana –Explicaba la pequeña.
-Una sonrisa de idiota – Completo Quinn.
-Gracias Quinnie, también te amo – Dijo la bailarina con sarcasmo.
-Brittany S Pierce tienes prohibido verte con esa chica, no te quiero lejos de mí y si sigues con ella lo más probable es que te vengas acá a vivir y no te vea con mucha frecuencia – Dijo Quinn con tono amenazante.
-Lo siento Quinn pero tú te vas a casar y sinceramente no me ponen las rubias – Dijo la bailarina con una sonrisa de disculpa.
-Lo sé, a ti te ponen las morenas – Dijo la rubia pero se quedó callada al ver que eso se podía interpretar de muchas maneras.
-Te entiendo, a mí también – Dijo Dani tomando la mano de Santana con el anillo y besándola.

En un sector del lugar estaban preparando un lugar para el karaoke y las personas estaban insistiendo en que Dani fuera a cantar algo pero la chica no quería ya que se sentía muy avergonzada por lo que había pasado con la reportera y no quería hacer más noticia, Quinn le dio una mirada suplicante a Brittany y supo lo que quería que hiciera “Por una maldita vez en mi vida me gustaría ser la mala” pensó la bailarina para luego ponerse de pie y dirigirse al escenario.

-¿Qué esta haciendo? – Pregunto Dani asombrada, no sabía que a la bailarina le gustara ser el centro de atención, más bien la veía como una chica tranquila.
-Salvarles el trasero – Dijo Puck mientras miraba a su amiga orgulloso “Vales oro Britts”

Empezo a sonar How to be a heartbreaker y la holandesa tomo el micrófono y empezó a cantar con tal actitud que los dejo a todos sorprendidos menos a una latina que más bien la miraba con nostalgia, en su época de pareja la bailarina siempre le cantaba en cualquier lugar que estuvieran y hacia cosas alocadas por y para ella, era lo que le daba frescura a la relación.

-Rule number one, is that you gotta have fun
But baby when you're done, you gotta be the first to run
Rule number two, just don't get attached to
Somebody you could lose
So le-le-let me tell you – Empezó a cantar con una expresión engreída en su rostro, esta canción la describía.

-This is how to be a heartbreaker
Boys they like a little danger
We'll get him falling for a stranger
A player, singing lo-lo-lo-love you
How to be a heartbreaker
Boys they like the look of danger
We'll get him falling for a stranger
A player, singing lo-lo-lo-love you
At least I think I do

Cause I lo-lo-lo-love you – Ahora era acompañada por algunas personas que estaban comiendo en el local mientras en una mesa de chicas gritaban “A mí me puedes usar cuando quieras” o “Podemos romper mi camas si quieres” haciendo que Santana enfureciera y quisiera ir a la mesa de esas tipas y darles la paliza de sus vidas, pero estaban Dani.

-Rule number three, wear your heart on your cheek
But never on your sleeve, unless you wanna taste defeat
Rule number four, gotta be looking pure
Kissing goodbye at the door, and leave him wanting more – Sus admiradoras ahora le estaban aventando cosas y juraría que había un sujetador entre esas cosas cosa que la hizo enviarles una sonrisa torcida que no hizo más que sacarles gritos.

-This is how to be a heartbreaker
Boys they like a little danger
We'll get him falling for a stranger
A player, singing lo-lo-lo-love you
How to be a heartbreaker
Boys they like the look of danger
We'll get him falling for a stranger
A player, singing lo-lo-lo-love you
At least I think I do – La ultima parte la canto a coro con casi todo el restaurant que parecía haberse olvidado de Dani y Santana y ahora solo estaban pendientes de esa chica rubia con sonrisa sexy.


Al terminar la canción fue recibida por los gritos y aplausos de sus amigos y un abrazo de Beth que no dejaba de presumir lo grandiosa que era su tita, el resto de la noche transcurrió tranquilamente, algunas personas se acercaron a pedirle autógrafos a Dani y Brittany recibió decenas de números telefónicos de muchas personas que habían intentado ligar con ella. Ya era de noche y todos los chicos estaban acostados, Santana estaba tratando de dormir pero no podía y al parecer no era la única.

-Cariño – Dijo la cantante haciendo que su novia se volviera para quedar frente a ella.
-¿Qué pasa? – Pregunto la latina.
-¿Brittany siempre ha sido así? – Pregunto la cantante entre dormida.
-¿Así cómo? - Pregunto algo desorientada por la pregunta.
-Así de distante, como si no quisiera estar cerca de alguien – Hizo una pausa – Según lo que me dijo Sugar, la persona a la que amaba la abandono y eso la dejo destrozada – Esto hizo que la latina sintiera un escalofrío en todo su cuerpo – Debió haber sido horrible.
-La tipa que la dejo es una desgraciada – Dijo Santana mientras se volvía y fingía un bostezo – Descansa.
-Tú también cariño – Dijo la cantante mientras pasaba un brazo por la cintura de la latina quien estaba destrozada por el daño que le había hecho a Brittany… Tenía que decirle la verdad.

Hanna:

me encantoo, sos lo más escribiendo.
quiero leer más jeje
nos vemos en la proxima

jajaj me encanta como es Brittany , como vuelve loca a las chicas, morí de risa con lo de el sujetador   . Hasta la próxima actualización.

me super encanta tu historia por favor actualiza pronto =)

creo que ya es tiempo de que se sepa que fue lo que paso en realidad para que santana se comportara como basura con brittany!

Aloha people, aquí un capitulo muy importante de la historia, espero que les guste, muchos besos!!! "A los 23 seré famosa y conoceré a Naya"

CAPITULO 11

-San ¿En serio tienes que ir a esa fiesta? – Pregunto Brittany acostada boca abajo en la cama mientras Santana estaba de espaldas vistiéndose.
-Si ese maldito de Zack es un pesado, si no voy seguro le hará algún comentario al jefe – Dijo la latina poniéndose los zapatos.
-Que lastima, yo estaba pensando en una fiesta de otro tipo para ti – Dijo la bailarina mientras besaba la espalda desnuda de su novia – Te la pasaras mejor – Dijo en un susurro al oído de la latina y sintió como la piel de esta se ponía de gallina.
-Vamos Britt, se razonable – Dijo la latina ahogando un gemido – Mientras más rápido me dejes ir, más pronto volveré – Dijo con dificultad mientras sentía como la bailarina le dejaba un camino de besos desde el cuello hasta el hombro.
-Está bien – Se detuvo – Te veo en la noche – La chica hizo una pausa y dijo con voz misteriosa – Te tengo una sorpresa.
-¿Qué sorpresa? – Pregunto muy curiosa la latina - ¿No me digas que quieres hacerlo en el ascensor de nuevo? La otra vez la señora Harrison casi nos atrapa…
-¡¡No San!! – La corto la bailarina riendo mientras recordaba esa ocasión – Es otra cosa, pero tendrás que esperar para saber – Dijo mientras le daba un tierno toque a la nariz de la latina.
-Está bien – Dijo la latina algo resignada mientras se terminaba de vestir – Te veo en la noche amor – Dijo mientras se agachaba para darle un beso a su novia y se dirigía a la salida.
-Te amo como loca Santana López – Dijo la rubia haciendo que la latina sonriera tontamente.
-Te amo como loca Brittany Pierce – Dijo mientras salía de la habitación.


Santana llego al hotel donde se celebraba una fiesta de aniversario de una importante empresa que estaba aliada al bufet donde la chica trabajaba desde hace un tiempo, el lugar estaba lleno de colegas y grandes empresarios que les gustaba esa clase de eventos, la chica se empezó a pasear por el lugar y se dirigió hacia el bar donde pidió un trago y sintió como alguien se acercaba a ella.

-¿Tú eres Santana cierto? – La latina se volvió y vio a un tipo alto, moreno y con complejo de sex symbol.
-Si – Contesto secamente la morena.
-Me han hablado mucho de ti – Dijo el hombre sentándose cerca de la latina mientras le extendía una bebida y la latina dudaba un poco pero al final la aceptaba.
-¿Ah sí? – Dijo la morena con actitud desinteresada mientras le daba un sorbo al trago, había algo que no le gustaba de ese tipo.
-¿Quieres bailar un rato? Dicen que soy un gran bailarín – Dijo el tipo con una sonrisa arrogante.
-No gracias, tengo que ir al baño – La chica se excusó y se fue al baño pero antes de entrar sintió como la tomaban del brazo y la daban vuelta, era el tipo de hace un rato.
-¿A dónde crees que vas? – Dijo el tipo para arrinconarla en un pasillo oscuro, la chica por más que trataba de soltarse su cuerpo no respondía, “Este bastardo le metió algo a la maldita bebida” supo de inmediato la chica que empezaba a perder el conocimiento – Tu y yo tenemos algo pendiente.

El tipo tomo a Santana y la empezó a besar de manera casi brutal mientras la chica estaba muy afectada por la droga que él había metido en su bebida y se dejaba hacer,  “Britt” se le escapaba a la chica entre jadeos desesperados mientras en sujeto recorría el cuerpo de la latina a su antojo haciendo que la chica sintiera asco interiormente ya que no podía controlar su cuerpo, el hombre rápidamente bajo las bragas de la latina y acerco su cabeza al centro de la chica donde empezó a trazar círculos con la lengua haciendo que la chica después de un rato alcanzara el más horrible orgasmo de su vida y se quedara estática, drogada o no acababa de engañar a Brittany, no le importaba el hecho de que fuera forzada sino el hecho de engañar a la rubia, no pudo seguir pensando ya que fue interrumpida.

-Ahora haremos lo siguiente – Dijo el tipo – Esta misma tarde abandonaras la casa de Brittany y no intentaras buscarla, ni llamarla ni nada o la matare – Amenazo el tipo dejando paralizada a Santana.
-¿Quién eres? ¿Por qué haces esto? – Pregunto la chica empezando a recobrar la conciencia y sintiendo el peso de lo que acababa de suceder.
-Solo le hago lo que usted me hizo abogada López – Dijo el tipo mirando sádicamente a la latina - ¿O es que acaso no me recuerda? – Pregunto con una mirada que dejo helada a Santana, él era Chris Davis, el amante de la esposa de uno de sus clientes que quedo en la banca rota porque su marido descubrió la aventura de ella y Chris y la dejo.
- Eres un maldito – Dijo Santana empezando a desesperarse.
-Por tu culpa Dianne me dejo, así que quiero que tu noviecita sienta lo mismo que yo – Hizo una pausa – Esa será mi mejor venganza – Se puso de pie y empezó a dirigirse a la salida – Tienes hasta las 8 de esta tarde para salir de la vida de esa chica, si no lo haces la matare.

Santana se quedó un rato ahí llorando amargamente ¿Qué acababa de pasar? ¿Cómo era posible que esto fuera real? Se puso de pie lentamente y salió del lugar casi corriendo, se subió a su auto y empezó a llorar y golpear el volante, ese tipo le había dicho que tenía que dejar a Brittany esa misma tarde si no quería que la matara así que armó de valor y condujo el auto hasta su edificio, subió al ascensor y entro a su departamento. Al momento de poner un pie en la habitación de la pareja, la fortaleza de la latina se hizo pedazos al igual que ella, cada lugar tenía un recuerdo de esos maravillosos años que había vivido al lado de la bailarina y no podía dejar de llorar al saber que no la vería de nuevo, hace unas horas habían estado juntas y ahora no la volvería a ver. La chica busco hasta encontrar una maleta roja y metió todas sus cosas en ella, era irónico como su vida cabía en una maleta, recorrió la habitación con una mirada de dolor y se dispuso a salir del departamento.

-Te amo como loca Brittany Pierce – Dijo la chica en un susurro antes de cerrar la puerta y dar la espalda a su vida.

Después de salir de ahí había llegar a casa de Rachel donde se había quedado unos meses, la judía no le había preguntado nada de lo que había pasado porque la latina se cerraba automáticamente al tema, el resto del grupo asumió que la latina se había olvidado de Brittany aunque en el fondo nadie se lo creía y además después de eso había conocido a Dani aunque más que una novia, la latina la veía como una amiga que la había ayudado mucho, los únicos que sabían eran Kurt y Quinn, esta última se enteró antes de invitarla al matrimonio y casi le da un infarto “¡¡Ese desgraciado te drogo Santana, tu no la engañaste el muy bastardo te drogo!!...Deberías haberle dicho Santana, las cosas serían distintas” había dicho la rubia pero ella no iba a permitir que algo malo le sucediera a Brittany, entonces una frase de Fabray hizo tambalear toda la decisión que ella creía era la mejor “¿Sabes qué? Santana, estos tres años he visto a Britt es su fase más oscura, quedo tan mal que la tuve viviendo conmigo por casi cinco meses porque no paraba de llorar en ningún momento y temía que cometiera alguna locura… Después de dos años por fin dejo de llorar pero también de sentir, eras su todo San… Deberías haber pensado realmente en ella en lugar de marcharte haciéndote la heroína, el hecho de que tú la dejaras la mato en vida” Finalizo Quinn para luego marcharse “Por cierto, ella también viene a Hawaii”

La latina se incorporó rápidamente y miro a su alrededor, todo había sido un sueño y seguía en Hawaii, se dio cuenta de que Dani no estaba a su lado y miro el reloj “Las 12 del día” se pudo de pie para luego vestirse y dirigirse al salón donde estaban casi todas las chicas.

-Buenos días López – Saludo Quinn con una sonrisa burlesca en su rostro.
-¿Qué te pasa Q? de repente te diste cuenta que tus estrías se han ido – Respondió la latina molestando a la rubia, ese sueño la había dejado de mal humor.
-No, más bien otra personita se ha ido – Ataco la rubia con la misma sonrisa.
-¿Explícate Q? – Dijo la latina ya fastidiada por esa sonrisita que se traía la rubia.
-Dani ha salido temprano hoy a L.A, la han llamado de la disquera porque quieren grabar unos demos y volverá en una semana – Dijo Quinn algo más seria.
-¿Una semana? ¿Por qué no me ha despertado? La hubiese acompañado – Dijo la latina para sí misma.
-Dijo algo como que estabas dormida como un tronco y no pudo despertarte – Se burló la rubia, la latina la iba a atacar pero apareció Beth.
-¡¡Mami!! – Exclamo la niña mientras llegaba corriendo.
-¿Qué sucede cariño? – Pregunto la rubia a su hija.
-Tita Britt esta rara – Dijo la niña.
-¿Rara? ¿A qué te refieres? – La niña se ganó la atención del grupo.
-La fui a buscar a su habitación para que fuéramos a jugar y no se despertaba, la moví y no pasa nada, y a parte tiene unas grandes ojeras negras y hablaba entre dormida – Relato la niña.
-¿No sé qué puede ser? – Pensaba la rubia en voz alta.
-¿Quizás pescó un resfrío? – Dijo Santana a Quinn.
-¿Un resfrío? – Pregunto la rubia con curiosidad – Pero si ayer estaba bien, a parte ¿Por qué se iba a resfriar?
-… - La latina de repente recordó cuando la rubia fue a buscarla en la madrugada, ella no llevaba una cazadora así que la bailarina le había dado la de ella y sabia lo enfermiza que era Brittany.
-Iré a verla, a veces pienso que cree que soy su madre – Dijo Quinn desapareciendo del salón.
-¿Quinn siempre es así con Brittany? – Le pregunto Mercedes a la niña, nadie había sabido mucho de Brittany en años, solo la rubia.
-Siempre, aunque la tita también cuida mucho de mamá – Dijo la niña con una sonrisa mientras recordaba algo – En una ocasión mamá se peleó con unas compañeras de trabajo y si no llega la tía Britt a salvarla, a mami la hubiera mandado la hospital – Todas se quedaron sorprendidas, no se imaginaban a Quinn en una pelea – Fue gracioso porque la tita quedo con un ojo morado y todos en la calle se la quedaban mirando con miedo y papá le decía que parecía una criminal – Relato la niña haciéndolas reír a todas.
-Ni modo, está totalmente resfriada – Dijo Quinn entrando al salón de nuevo bajo la divertida mirada de todas - ¿Qué les dijiste? – Pregunto inmediatamente a su hija.
-Digamos que Quinn Fabray cada vez me sorprende más – Dijo la latina con burla.
-¿Iremos a la feria hoy? – Pregunto la niña muy animada.
-Claro – Respondió su madre – Iremos todas.
-¿Tía Britt también irá? – Pregunto la niña con ilusión.
-No cariño, tía Britt ni siquiera se puede mantener en pie – Dijo la rubia.
-¿Entonces se quedara solita? – Pregunto la niña triste – No me gusta que Tía Britt este solita.
-Britt estará durmiendo como un oso polar probablemente todo el día cariño, ella ni siquiera sabrá que nos fuimos – Dijo Quinn tratando de animar a su hija, sabia cuanto la niña quería a la bailarina.
-Está bien, pero debemos comprarle algo para que se mejore – Sugirió la niña.
-Perfecto – Dijo la rubia tranquilizando a su hija – Vamos andando chicas – Le dijo al grupo que estuvo de acuerdo.
-Iré a despedirme de ella – Dijo la niña mientras salía corriendo.
-Quiere mucho a Britt – Dijo Rachel refiriéndose a la niña.
-Es normal, Britt ha estado presente en los momentos más importantes para nosotros – Relato la rubia – Es una persona única – Termino de relatar mientras Beth llegaba y todas partían hacia la feria.

Mientras tanto en la habitación estaba la bailarina tendida en la cama con un gran dolor de cabeza y cansancio “Eso te pasa por hacerte a genial” se regañaba a sí misma, no podía ponerse ni siquiera de pie porque al hacerlo se mareaba así que decidió quedarse en cama todo el día, “Por lo menos tendré el lugar para mi sola” dijo la rubia al ver que las chicas saldrían y los chicos habían ido a probarse los trajes de padrinos de boda mientras se disponía a dormirse, había tenido una noche horrible.

El camino a la feria fue divertido para el grupo de chicas, visitaron algunas atracciones y después se metieron a una feria artesanal donde quedaron maravilladas por los productos que se vendían, Santana se detuvo al lado de Beth a ver unas pulseras que la niña contemplaba.

-Tía San ¿Crees que esta le guste a Britt? – Pregunto la pequeña tratando de hacer sus averiguaciones acerca de lo que había pasado entre sus dos tías.
-Claro, aunque a Brittany le gustan más las cosas de color celeste – Dijo la latina eligiendo una pulsera que sabía que a la bailarina le encantaría.
-¿Por qué tú y tía Britt no hablan? – Pregunto la niña mirando a la latina de modo que no pudo evadirla “Es igual a Q”.
-Tu tía Britt y yo tenemos algunas cosas que resolver, son cosas de grandes – Dijo la latina algo nerviosa por la mirada de la pequeña.
-Siempre me dicen que son “cosas de grandes” pero nadie me da una respuesta real – Se quejó la pequeña – Yo solo quiero saber ¿Por qué la tita esta siempre triste?
-¿A qué te refieres? Ella ha estado muy bien estos días – Dijo la latina.
-Ella ha sido así desde hace tiempo, esta calmada pero no feliz – La pequeña hizo una pausa – Ella es una persona muy amable pero nunca se puede saber ¿Qué está pasando por su mente?... O al menos es lo que dice papi – Dijo la niña mirando al suelo – Lo único que se es que a pesar de que salga con una y otra de sus amigas, su expresión no cambia.
-… - Santana se quedó en silencio, no sabía que decir.
-¡¡Hey cariño, ahí estas!! – Dijo Quinn llegando hasta las chicas – Vamos a comer – Dijo tomando la mano de su hija y dirigiéndole una mirada a la latina que parecía sumergida en sus pensamientos.

El grupo de chicas se dirigió hasta un pequeño restaurant a la orilla de la playa donde se podía aprecia el mar en todo su esplendor, cada una ordeno algo distinto y empezaron a charlar, a lo lejos Santana pudo divisar a la señora Harrison, era una vecina que vivía un piso más debajo de ella en el departamento que compartía con Brittany antes, la señora alzo la mirada y pudo reconocer a la latina y no dudo en acercarse a ella.

-Hola querida ¡¡Tanto tiempo!! ¿Qué ha sido de tu vida? – Pregunto la señora acercándose a latina quien se puso de pie y saludo a la señora con un abrazo cariñoso, esa mujer había ayudado mucho a las chicas cuando recién habían llegado al departamento.
-Pues no mucho, he estado trabajando demasiado últimamente – Respondió la latina con una sonrisa nostálgica en su rostro.
-¿Cómo te trata la vida de casada? – Pregunto la señora dejando a todo el grupo colgado, en especial a la latina.
-¿Cómo?... – Pregunto la latina a la señora con algo de desconcierto.
-Con Brittany ¿Con quién más? – Dijo la mujer – Recuerdo cuando llego a mi departamento porque dijo que te tenía una cena sorpresa, ¡¡Estaba tan nerviosa, esa chica es tan adorable!! John tuvo que calmarla porque ni siquiera podía hablar con normalidad – Relato la señora mientras Santana sentía como empezaba a tensarse su cuerpo y a sudar frio, no le gustaba a donde se dirigía eso – Entonces dijo que te pediría que te casaras con ella, sinceramente me hubiera gustado ver la propuesta porque era una idea muy original – Termino de relatar la mujer dejándolas a todas de piedra “Esa noche… Esa maldita noche Brittany le iba a pedir matrimonio”.
-¡¡Mamá!! – Se escuchó de lejos haciendo que la mujer se volviera.
-Me tengo que ir querida, después me cuentas – Dijo la mujer despidiéndose del grupo.
-¿Santana? – Llamo Quinn al ver que la latina no se movía, la chica estaba paralizada.
-Yo… - Trato de hablar pero el nudo en la garganta la dejaba a penas respirar – Necesito ir al baño – Dijo rápidamente poniéndose de pie.

Todas las presentes se quedaron impactadas, eso explicaba completamente el hecho de que la bailarina tratara a Santana como si no existiera, porque una cosa es que una novia te deje y una muy distinta es que el supuesto amor de tu vida te deje sin dar explicaciones y en la misma noche que le ibas a pedir matrimonio.

Santana rápidamente llego a los baños, se metió en un cubículo y empezó a llorar, había cometido un error al tratar de cargar con todas las cosas, ese día podría haber sido el mejor de su vida si hubiera hablado con la bailarina en lugar de huir.

-¿San? ¿Dónde estás? – Se escuchó la voz de Quinn afuera del baño.
-Vete Quinn, quiero estar sola – Dijo la latina en un sollozo.
-Anda Santana, no seas terca y ábreme – Siguió golpeando la puerta del cubículo hasta que la latina le abrió.
-Yo no quería hacerle esto Quinn, no quería hacernos esto – Dijo la latina mientras empezaba a llorar y a temblar.
-¿Dónde está la gran Santana López que trata de solucionar las cosas con su poder de Lima Heights en lugar de echarse a llorar como una cría? – Pregunto la rubia mientras abrazaba a la latina.
-No puedo solucionar esto Quinn, no esta vez… No soy la perra de Lima Heights cuando se trata de Brittany, ella es mi debilidad – Dijo la latina mientras lloraba.
-Sabes que ella no te odia ¿cierto? Debes hablar con ella Santana, se lo debes – Dijo la rubia con un tono serio pero a la vez dulce.
-Lo se Quinn pero ¿Qué le diré? “Hey Britt, discúlpame por dejarte el día que me ibas a pedir matrimonio pero estaba ocupada siendo drogada por un tipo que me dio una sección de asqueroso sexo oral del que no me pude resistir porque no podía controlar mi cuerpo, pero tranquila gracias a que me fui no te mató” – Dijo la latino con un tono irónico y herido.
-Vamos Santana, deja esa actitud y piensa bien las cosas – Dijo Quinn mientras le daba una cariñosa palmada en el hombro a su amiga – Podrías empezar por hacer que sepa que no te da igual – Aconsejo la rubia.
-Ella no me quiere cerca Quinn, lo intentó pero no puede y la entiendo – Dijo la chica en un tono triste.
-No te querrá cerca si no le demuestras que la quieres cerca, esa chica es la persona más cabezota del mundo pero también es la más adorable – Dijo Quinn tratando de animar a la latina.
-Gracias Q, será mejor que me vaya… Creo que han sido muchas emociones por hoy, lo único que quiero es acostarme – Dijo la latina poniéndose de pie mientras se trataba de arreglar un poco el maquillaje que estaba esparcido por sus mejillas.
-¿Estarás bien sola? – Pregunto Quinn preocupada.
-Claro que sí, ¿Con quién te crees que estás hablando? – Dijo la latina con una pequeña sonrisa mientras salía del lugar.

Por otro lado Brittany llevaba toda la tarde tratando de dormir pero no lo conseguía, sentía su cuerpo pesado y tenía mucho frío, estaba peor de lo que creía y no tenía ni siquiera fuerzas para levantarse de la cama, como pudo se puso de pie y empezó a caminar hacia el baño afirmada de las paredes pero todo se movía a su alrededor y se tuvo que detener mientras apoyaba su espalda en la pared y se resbalaba hasta quedar sentada en el suelo “No me falles ahora” se dijo a si misma mientras se trataba de poner de pie nuevamente pero el cansancio era demasiado. Estuvo un rato ahí hasta que sintió la puerta abrirse y vio al poco rato a Santana llegando y agradeció por primera vez en el viaje tenerla cerca, la chica se dio vuelta y al ver a la bailarina en el suelo se acercó casi corriendo a ella.

-Britt ¿Qué te ha pasado? – Pregunto la chica alarmada mientras se agachaba para quedar a la altura de la bailarina y se fijaba en su rostro, estaba más pálida que de costumbre y tenía grandes ojeras debajo de sus ojos que se veían realmente cansados.
-No me siento bien – Dijo la bailarina mientras temblaba de frio, estaba muy mal cosa que hizo entrar en desesperación a la latina.
-¡¡Mierda!! ¿Qué hago?... Debemos ir al hospital cuanto antes – Dijo la latina mientras ponía su mano en la frente de la bailarina y notaba que estaba hirviendo.
-No es necesario que vayas, puedo hacerlo sola – Dijo la bailarina mientras se trataba de poner de pie pero ni siquiera podía levantarse sola, al darse cuenta de que necesitaba la ayuda de la latina soltó un suspiro lleno de frustración.
-Solo esta vez déjame ayudarte Brittany – Dijo la latina casi como una súplica mientras le tendía una mano a la bailarina.
-… - Brittany solo la observo por un rato y un cálido sentimiento se alojó en su pecho, al ver los ojos de Santana por un momento sintió que era su Santana y no la que la había abandonado, pero desecho rápidamente ese pensamiento y sin protestar más tomo la mano de la latina.

Santana paso un brazo de Brittany por su hombro y encaminó a la chica hasta dejarla sentada en un sillón mientras ella iba a buscar las llaves de algún vehículo para llevar a la chica hasta un hospital.

-¡¡Maldita sea!! Se han llevado todos los vehículos – Dijo la latina frustrada al ver que Brittany se mantenía a penas consciente.
-La moto – Hizo una pausa, le estaba costando hilar las ideas – Las llaves están en mi velador.
-¿La moto? Ni siquiera sé cómo se conduce – Iba a seguir reclamando pero al ver que la chica estaba cada vez peor se dirigió rápidamente a la habitación de la rubia y saco las llaves – Tendrás que ayudarme ¿Si? – Dijo la latina mientras ayudaba a Brittany a ponerse de pie y apoyada de ella logro sacarla de la casa y llevarla hasta el garaje donde estaba el vehículo, sin saber cómo se montó en la motocicleta y ayudo a la rubia a hacerlo - ¿Qué debo hacer ahora?

Brittany rápidamente puso sus manos en el acelerador del vehículo rodeando el cuerpo de la latina y sintiendo una conocida sensación de poder, luego de un rato la latina le tomo el ritmo al vehículo y en pocos minutos llegaron a un hospital, ayudo a la rubia a llegar al lugar y luego de esperar unos minutos por fin fue el turno de la rubia para ser atendida. La doctora la examino y finalmente llego a la conclusión del estado de la chica.

-Tiene gripe – Dijo la doctora a Santana mientras Brittany permaneció casi dormida en la camilla -  Debe asegurarse de que su amiga se tome una de estas pastillas cada ocho horas y en unos días estará bien, aunque no debe desabrigarse y debe guardar reposo – Concluyo la doctora.
-¿A qué se debe esta gripe? – Pregunto la latino sintiéndose un poco culpable.
-Cambios bruscos de temperatura o puede que ya estuviera un resfrío y no se cuidara bien – Dijo la doctora – Ahora le pondré una inyección y luego puedes llevártela a casa.
-Nooo – Dijo la bailarina quejándose en un susurro.
-Vamos Brittany, es solo una inyección… No duelen nada – Animo la latina, sabía que Brittany odiaba las inyecciones.
-Sera muy rápido – Dijo la doctora convenciendo a la rubia quien se bajó los pantalones y la doctora le puso velozmente la inyección mientras la latina miraba hacia otro lado – Listo, asegúrate de que ingiera muchos líquidos y si es posible que alguien pase la noche a cargo de ella, la inyección no le vendrá muy bien esta noche pero mañana hará efecto – Finalizo la doctora despidiéndose de las chicas.

Santana salió con Brittany apoyada en ella y esta vez el viaje de regreso fue más difícil porque podía jurar que la rubia se no estaba del todo consciente, así que debía preocuparse de que la chica no se soltara de ella ni de chocar, cuando al fin llegaron la latina pudo ver que todavía ninguno de sus amigo llegaba y se sintió preocupada ya que la bailarina no se encontraba bien. Entre tropiezos logro llevar a Brittany a su habitación, la tumbo en la cama y le saco los zapatos.

-¿Puedes desvestirte? – Pregunto Santana mientras sacaba el pijama de la bailarina de debajo la almohada.
-Si… - La rubia empezó a tratar de sacarse una cazadora que llevaba pero ni siquiera podía desabotonarla – Maldición, esto es ridículo – Se quejó la rubia con frustración.
-¿Quieres que te ayude? – Pregunto temerosa la latina.

La bailarina solo la observo por un momento y pudo ver el miedo en los ojos de la latina, no iba a negar que si se encontrara un poco mejor jamás hubiera permitido que ellas estuvieran en esa situación, pero no era la ocasión y por más que lo odiara necesitaba la ayuda de Santana. Sin mucho ánimo asintió con la cabeza y Santana no pudo ocultar la sorpresa de ese gesto, se acercó más a la bailarina y empezó a desabotonar la cazadora de esta hasta sacársela, luego le saco la camiseta y le ayudo a ponerse el pijama, pero la parte más difícil fueron los pantalones. Luego de salir del problema de la ropa, por fin Brittany ya estaba acostada.

-Trata de dormir, estaré acá si me necesitas – Dijo la latina sentándose en una incómoda silla que había en la habitación.
-Ni se te ocurra, no lo hagas – Decía internamente la bailarina pero luego de un rato dijo – Ven acá – Dijo apuntando un lado de la cama – Odio esa silla, es malditamente incomoda… Ya que te quedaras mientras llega Quinn al menos no quiero sentirme culpable – Finalizó la rubia mientras Santana la miraba con asombro y felicidad.
-No tienes que hacerlo, si te incomoda…
-Solo ven de una jodida vez ¿De acuerdo? – Dijo Brittany algo fastidiada.
-De acuerdo – Dijo la latina para luego acercarse a la cama y sentarse al lado de Brittany apoyando la espalda en la cabecera de la cama.
-Gracias – Dijo la bailarina al cabo de un rato estado de espalda a Santana así que no pudo ver la sonrisa que se formó en el rostro de esta.
-No hay de que, descansa – Dijo la latina que al cabo de un rato sintió como la respiración de la bailarina se hacía más lenta.

Pobre Santana     la paso mal, y ahora se entera que Britt se le iba a proponer, quiero a mis Brittanas juntas   ...hasta la próxima actu.

pobre santana, pero debe hablar con britt, ya es tiempo!!!!!

Aloha gentee!! Aquí otro capi, ahora que todo esta claro puedo escribir libremente momentos Brittana, la verdad hasta el momento no han habido muchos a excepción de los Flashbacks y era porque no me sentía cómoda escribiéndolos hasta que supiera las razones de Santana, aunque las cosas no sera fáciles para ellas. Espero que les guste "A los 23 conoceré a Naya"

CAPITULO 12


Un mes antes de que Santana la desapareciera, Brittany había decidido que ya era momento de formalizar su relación en todos los aspectos posibles, llevaban viviendo juntas desde que habían entrado a la universidad y tenían una relación tan o más sólida que un matrimonio, sin embargo la bailarina quería hacerlo legal en todos los aspectos que el mundo se lo proponía, quiera ser Brittany Pierce de López y que ella fuera Santana López de Pierce lo quería todo de ella.

La rubia estuvo buscando y buscando el anillo adecuado hasta que lo encontró, se detuvo en una de las tantas joyerías de New York y pudo ver un anillo simplemente perfecto para la latina, a Santana siempre le habían encantado los ojos de Brittany y siempre se lo decía, así que al ver un anillo semejante al color de sus ojos no dudo en que ese sería su mejor opción. Luego de un rato observando el anillo, sintió como alguien se acercaba a ella.

-Ese anillo es precioso, sin duda le quedará maravilloso – Dijo una vendedora de edad algo avanzada.
-No es para mí, es para mi novia – Respondió la bailarina expectante a la reacción de la señora.
-Pues, es maravilloso… Seguro le quedara hermoso – Dijo la mujer animada, parece que no le importaba en lo absoluto el tema de la sexualidad.
-Gracias, lo llevo – Dijo la bailarina sonriéndole a la señora.
-¿Le gustaría algún grabado en especial? – Pregunto la vendedora una vez terminado el papeleo.
-Si “Eres mi sueño hecho realidad”  - Dijo la bailarina algo sonrojada, se había juntado un grupo de chicas al lado de ella y decían cosas como “Que tiernas” “Esa chica es adorable” que hacían ponerse más nerviosa a la bailarina.
-Listo querida, lo puedes pasar a retirar en dos semanas más – Dijo la vendedora – Espero que seas muy feliz.
-Muchas gracias – Dijo la bailarina despidiéndose de la mujer.

Por fin había llegado el gran día de la propuesta y Brittany no podía estar más nerviosa, Santana había ido a una fiesta de una importante empresa para la que trabajaba así que eso le dejaría la tarde libre para preparar la sorpresa, la idea de la bailarina era empezar con una cena en la azotea del edificio que se había conseguido con anterioridad, después le cantaría Songbird para finalmente terminar con la proposición y el anillo. Se estaba volviendo loca de los nervios así que decidió ir a ver a su vecina favorita; la señora Harrison para tratar de calmarse, llego a la puerta de ella y rápidamente la señora abrió e hizo pasa a la rubia que estaba hecha un manojo de nervios, John – El esposo de la señora – estuvo un largo rato hablando con la chica para tranquilizarla y lo consiguió de momento. Ya era hora de empezar con los preparativos así que se dirigió velozmente a su departamento.

Ya eran las 8:30 pm y Santana todavía no llegaba, Brittany le había dejado una nota a la chica que estipulaba que cuando volviera –Cosa que supuestamente sucedería a las 7:00 pm – Subiera de inmediato a la azotea del edificio pero había pasado casi una hora y media y todavía no sucedía nada, la bailarina se empezó a inquietar así que decidió bajar a ver si algo andaba mal. Nada en la vida había preparado a Brittany para lo que estaba por vivir, abrió la puerta del departamento y sintió inmediatamente que algo andaba mal, empezó a llamar a Santana y a buscarla y se dio cuenta de que no estaba así que se dirigió al dormitorio y vio algo que la destrozo; no había ninguna pertenencia de Santana en él, por más que busco y rebusco no encontró nada de la latina y la desesperación se apodero de ella, la estuvo llamando insistentemente sin éxito hasta que cayó en la cruel verdad; Santana se había ido, no… La había dejado.

La bailarina se despertó y pudo ver que estaba en Hawaii lo que hizo que se relajara un poco, hace tiempo que no soñaba con ese día y ahora de repente estaba recordándolo, aún tenía mucho cansancio y frio así que opto por seguir durmiendo, se dio la vuelta y pudo reconocer un cuerpo al lado de ella, era Santana que se había quedado dormida mientras esperaba la llegada de Quinn “Ahora todo calza” pensó la bailarina pero no quiso darle más vueltas ya que no se encontraba del todo consiente en esos momentos así que cerró los ojos y siguió durmiendo.

Ahora se encontraba en una especie de cementerio, miro a su alrededor y vio un gran grupo de personas alrededor de una tumba “Al parecer es un entierro” pensó la rubia para luego acercarse al grupo de persona a ver ¿Quién había muerto? Al acercarse al grupo podía reconocer a sus amigos y otros conocidos ahí presente y sintió una punzada de dolor al ver que arriba del ataúd había una foto de Santana “No puede ser” fue lo único que alcanzo a decir antes de desmoronarse. Les pedía explicaciones a las personas presentes pero nadie le respondía, nadie le hablaba, era  como si no estuviera ahí. Pudo reconocer a Quinn entre todos y se acercó a ella.

-¿Qué rayos está pasando Quinn? – Pregunto desesperada mientras tomaba a la chica de los hombros.
-Ella lo merecía – Dijo la chica sin siquiera mirar a la bailarina.
-¿Qué? ¿De qué mierda está hablando Q? es Santana, tú amiga – Dijo exasperada por la actitud de las personas de ahí que más que tristes veían con una expresión de odio el ataúd de la latina.
-¿Acaso no es lo que tú querías? Ella te abandono Brittany, deberías estar feliz – Dijo la rubia para luego hacerse a un lado de la bailarina.
-¿Cómo voy a estar feliz? – Dijo en un grito – Ella ha muerto, nadie gana ni pierde con esto – Dijo mientras empezaba a llorar.
-Entonces ¿Por qué la tratas como si estuviera muerta ante tus ojos? ¿Por qué tú puedes verla con desprecio y nosotros no? – Pregunto Kurt dejando helada a la bailarina ¿Realmente estaba tratando así a Santana? Como si hubiese muerto para ella cuando anteriormente había sido su vida.
-No estas siendo justa Brittany – Dijo esta vez Finn mientras daba la orden para que bajaran el ataúd de la latina.
-¡¡DETENTE, ELLA ESTA VIVA!! – Exclamo la bailarina al oír la voz de la latina desde el ataúd, trato de llegar hasta ella pero los chicos se lo impidieron.
-¿Por qué no deberíamos detener si tu no lo haces? Si la sigues tratando como a alguien que hubiese muerto en tu vida… No la necesitas, no puedes ayudarla – Finalizo Puck.
-¡¡NOOO!! – Dijo la rubia mientras sentía como alguien la tomaba por los hombros y la removía.
- Britt, despierta – Escuchaba la chica a lo lejos.

La bailarina abrió los ojos de golpe y se encontró directamente con los ojos de Santana y supo que  todo había sido un horrible sueño, aun podía sentir la desesperación, estaba sudando y no dejaba de temblar, Santana por su parte la miraba muy preocupada, se había despertado al sentía a Brittany removerse en la cama y pudo adivinar que la rubia estaba teniendo una pesadilla así que empezó a tratar de despertarla pero la chica no parecía escucharla.

-¿Estás bien? ¿Quieres que te prepare un té o algo? Puedo…
-… - Brittany se incorporó y abrazo a la latina, era lo que necesitaba para calmarse y no iba a seguir siendo tan terca, no ahora cuando necesitaba tenerla cerca – Solo déjame quedarme un rato así – Dijo la bailarina con una voz triste.
-C-Claro – Dijo Santana sorprendida por la reacción de la rubia, sin pensarlo más le devolvió el abrazo y empezó a acariciarle la espalda a la chica, sabía que eso siempre la tranquilizaba.

Estuvieron abrazadas por un largo rato hasta que la puerta se abrió de repente dejando entrar a Quinn junto con Rachel a la habitación de la bailarina que al ver la posición en la que se encontraban las chicas no pudieron ocultar su asombro.

-Hey Britt ¿Cómo te sientes? Te he… - Alcanzo a decir Quinn antes de entrar en la habitación de la bailarina y verla abrazada a Santana, se detuvo repentinamente y Rachel, que venía atrás de ella pudo ver la escena también.
-Oh – Fue lo único que pudo decir la judía al ver a las chicas, supo de inmediato que Santana la mataría por interrumpir esto.
-Llegas tarde Quinn – Dijo la bailarina tratando de evadir el tema mientras soltaba a Santana y está a regañadientes la dejaba ir.
-Si, Es q-que nos entretuvimos y cuando nos dimos cuenta ya eran las 2 de la madrugada – Respondió Fabray tratando de ocultar su curiosidad.
-¿Y tú como te encuentras Britt? Te ves mejor – Dijo la judía tratando de participar en la conversación de manera normal.
-Tiene gripe – Dijo Santana adelantándose a la bailarina.
-¿Gripe? – Repitió Quinn con una expresión de preocupación en su rostro.
-Yo pienso que la doctora estaba exagerando – Dijo la bailarina encogiéndose de hombros como restándole importancia.
-¿Exagerando? Casi estabas inconsciente cuando llegue, debes tomarte tu salud más en serio – Dijo Santana algo alterada por la calma de la bailarina.
-Solo estaba descansando, de todas maneras podría haber llegado al hospital – Dijo Brittany algo sorprendida por el repentino cambio de actitud de la latina quien días atrás apenas se atrevía a dirigirle la palabra y ahora la estaba regañando.
-¿Fuiste al hospital sola? – Pregunto Rachel divertida con la situación, se notaba que a pesar de lo sucedido las chicas seguían conservando esa esencia que hacia unica su relación.
-No – Dijo la bailarina a regañadientes mientras Santana sonreía victoriosa.
-¿Y qué te han dicho? – Pregunto Quinn curiosa de ver como se seguían desenvolviendo las cosas más que de lo que le podía decir la chica.
-Bueno que… - Se quedó callada y miro de reojo a Santana que la miraba con una ceja alzada y reconoció – No lo recuerdo, estaba algo desconectada.
-¿Qué le han dicho? – Pregunto Quinn esta vez directamente a Santana.
-Que debía tener reposo, ingerir muchos líquidos y en unos días estará bien – Relato la latina mientras Brittany miraba a otro lado, estaba en plan berrinche con la latina y eso alegraba a la chica porque hasta ahora era lo más parecido a su Britt que veía.
-¿Cómo está mi Britts? – Dijo Puck entrado a la habitación de la bailarina seguido casi todos los chicos.
-Tengo gripe y me han pinchado – Relato la bailarina con un tono infantil haciendo sonreír a la latina, extrañaba mucho esa parte de la chica ya que hasta ahora había estado viendo a la reina de hielo.
-¡¡Pobre de mi chica!! – Dijo Puck mientras se ponía frente a ella y le tocaba la frente – Estas con mucha fiebre… o ¿Estabas divirtiéndote con alguien? – Dijo el chico con un tono pícaro haciendo que Brittany y Santana se sonrojaran, cosa que no pasó desapercibida para nadie pero no dijeron nada.
-Ya, basta de visitas por hoy – Dijo Quinn de repente – Britt necesita descansar y ya es muy tarde para una reunión de grupo – Sentencio mientras los corría a todos.
-Bueno, será mejor que me vaya – Dijo Santana dirigiéndose a la salida de la habitación - ¿Estarás bien? – Le pregunto a la bailarina.
-Si – Respondió la bailarina pero al ver que la latina se dirigía a la puerta se atrevió a decir – Gracias Santana, te debo una – Dijo con sinceridad.
-No hay de que Britt – Dijo la morena para luego salir de la habitación de la bailarina con una gran sonrisa en su rostro.

Quinn fue a buscar su pijama para pasar la noche cuidando a Brittany, le sorprendía que la bailarina accediera a aceptar la ayuda de Santana y sobre todo de envolverse en una situación tan personal con ella, aunque interiormente se alegraba porque conocía la historia detrás de todo lo sucedido y era una creyente de que las chicas merecían un final feliz. Se acostó al lado de la bailarina y estuvieron un rato en silencio hasta que la bailarina para sorpresa de Quinn, empezó a hablar.

-Yo hace un rato soñé con el día en que Santana me dejo – Dijo rompiendo el silencio.
-… - Quinn solo permaneció en silencio, sabia cuanto le costaba a la bailarina recordar eso y que ahora estuviera hablando por voluntad propia la sorprendía “Debe ser por la gripe, las enfermedades siempre la ponen melancólica”.
-Luego soñé que estaba en el entierro de ella – Dijo la bailarina mientras revivía la desesperación del momento – Recuerdo perfectamente una frase “La estas tratando como a alguien que hubiese muerto en tu vida”.
-¿A qué conclusión te llevo todo esto? – Pregunto por fin la rubia.
-A que me fastidia estar a su lado, me fastidia tener que levantarme en la madrugada para ir a buscarla porque desapareció sin avisarle a nadie, me fastidia tener que ayudar a su prometida que de paso es una insensible, me fastidia que se disculpe conmigo en cada conversación que tenemos… Pero lo que más me fastidia es que probablemente nunca muera en mi vida, odio saber que nunca dejare de amarla – Finalizo la bailarina con un tono derrotado mientras era rodeada por los brazos de su amiga.
-A veces las cosas no son lo que parecen Brittany, no seas tan ciega – Dijo la rubia mientras abrazaba a la bailarina – Buenas noches Britt.
-Buenas noches San – Dijo la bailarina ya dormida dejando con una sonrisa triste a Quinn “Estas dos me van a matar” pensó la rubia para luego quedarse dormida.

El sonido del mar fue el culpable de despertar a la bailarina quien después de su breve conversación con Quinn no había vuelto a despertar en todo lo que quedaba de noche, se giró para ver la hora y se sorprendió al ver que el reloj marcaba las 1:30 pm, se incorporó y pudo notar que se sentía mejor que el día anterior así que decidió levantarse, tomo una camiseta de mangas largas blanca, un jersey deportivo negro, un jeans beige y unas zapatillas, al terminar de vestirse se dirigió al baño y al mirarse en el espejo pudo notar que aún estaba muy pálida pero solo suspiro y se dirigió a la sala de estar. La casa parecía vacía hasta que Brittany escucho unas risas desde el patio del lugar, se puso de pie y se asomó hacia afuera para ver a los chicos haciendo una barbacoa, todos parecían muy felices y por algún motivo ella también se sintió así. Se dirigió lentamente al grupo y se sentó en una silla del comedor exterior mientras era recibida por todos con frases como “Te ves mejor” “Ayer parecías muerta” “Joder no pensé que pudieras verte más pálida” que hicieron sonreír a la chica.

-¿Por qué te has levantado? – Pregunto Santana mientras se acercaba al grupo en compañía de Quinn.
-¿Porque no lo haría? – Respondió con otra pregunta a la latina.
-Porque no puedes, aun estas muy débil – Dijo la latina quedando al frente de la rubia mientras le tendía una pastilla y un vaso de agua – Tómatela.
-¿Desde cuando eres tan mandona? – Dijo la bailarina en voz baja mientras tomaba la pastilla y el vaso que la chica le tendía y se los tomaba a regañadientes.
-¿Desde cuando eres tan terca? – Dijo esta vez la latina siguiéndole el juego a la bailarina.
-¿Desde cuándo son famosas? – Pregunto Quinn en un grito desde el salón haciendo que todos fueran a verla.
-¿De que estas hablando Quinn? – Pregunto Brittany llegando al lado de su amiga.
-Debe ser por estar tanto tiempo en el mar, está empezando a afectarle – Dijo Santana que venía atrás de Brittany.  
-Cállense y miren – Dijo Quinn mientras le subía el volumen al televisor y todos observaban.

Ayer a las 7:30 pm aproximadamente se pudo captar esta foto de la señorita Santana López conduciendo una motocicleta con una rubia muy encaramada de ella que no es su prometida, ¿Quién será esta chica misteriosa que iba con la abogada? (Decía una reportera mientras se mostraba una foto de Santana siendo rodeada por los brazos de Brittany arriba de la moto y detenidas en un semáforo) Según los reportes recibidos, las chicas fueron vistas a las 7 y luego a las 9:00 pm aproximadamente en el centro de la isla de Hawaii y en ambas ocasiones la abogada iba conduciendo una moto de velocidad de manera temeraria siendo fuertemente sujetada por su misteriosa acompañante.

La noticia termino y nadie decía nada hasta que de repente todos los chicos - Excepto Santana y Brittany – Rompieron en risas mientras ellas seguían mirando la tv, Santana se sentía furiosa de que la estuviera siguiendo y empezó a gritar insultos en español a la reportera de la televisión mientras que Brittany después de mucho rato en silencio, se empezó a reír.

-Mamá me va a matar si ve esto – Dijo la bailarina riendo mientras los demás empezaban a reír mas fuerte.
-Sí que lo hará – Dijo Quinn acercándose a su amiga para rodearla por los hombros con un brazo - Ningunos padres se tomarían bien que su hija aparezca en televisión arriba de una moto con Santana López.  
-¿Te imaginas como deben estar tus amiguitas al ver esto? – Dijo Puck borrando la sonrisa de la bailarina de golpe – Te puedes ir olvidando de ellas.
-Mierda – Dijo la bailarina poniéndose seria.
-Pobre Britt, tendrá que dar muchas explicaciones – Dijo Quinn riéndose junto con Puck.
-Que yo sepa no tengo novia, solo es sexo, no le debo explicaciones a nadie – Dijo la bailarina naturalmente dejando a Santana enojada y por sobre todo celosa.
-Pues será mejor que muevas tu trasero y comas rápido porque no puedes estar de pie todo el día – Dijo la latina mientras salía de la habitación dejándolos a los chicos con una sonrisa cómplice, alguien era pésima para ocultar sus celos.
-Alguien se está aprovechando de mi buen humor – Dijo la bailarina al aire para luego dirigirse al comedor exterior con una imperceptible sonrisa, le echaba la culpa a la gripe y los medicamentos pero lo cierto es que se estaba ablandando desde el sueño en el que la latina había muerto.

El almuerzo transcurrió con normalidad y la bailarina se dirigió a su habitación nuevamente ya que sabía que para reponerse del todo debía estar en reposo, todos los chicos habían planeado un viaje a la playa antes de la enfermedad de la rubia y lo iban a suspender para no dejarla sola, pero la chica insistió en que no lo hicieran. Al cabo de un rato sintió los motores de los automóviles encenderse anunciando la partida de los chicos, la bailarina se acomodó en la cama y puso una película para pasar la tarde más rápido, estaban apareciendo las primeras imágenes cuando sintió que alguien tocaba su puerta.

-Adelante – Dijo la chica que pensaba que era Quinn que había olvidado algo.
-Hey – Dijo la latina asomándose por la puerta.
-¿Qué haces aquí Santana? Pensé que estarías con los chicos en la playa – Dijo la bailarina mientras le ponía pausa a la película y observaba a la latina con curiosidad.
-No estoy de humor para ir a la playa, además no quiero a mas acosadores sacando falsas historias de mi – Dijo la latina un poco cortada, había decidido quedarse para poder hacerle compañía a la bailarina, pero ahora que estaba ahí frente a ella no sabía que decir.
-… - Brittany la observo por un momento y recordó el sueño que tuvo con la latina, recordó la desesperación que sintió al saber que había muerto y sintió como la enorme pared de hielo e indiferencia que había construido por esos tres años y medio hacia ella se empezaba a fisurar “Débil”.
-Bueno, iré a mi habitación… Cualquier cosa que necesites solo llámame – Dijo la chica mientras se disponía a irse.
-Ahora que lo mencionas Quinn compro unas galletas buenísimas el otro día – Dijo la bailarina mientras Santana la miraba con diversión, la chica era una glotona. Se dirigió a la cocina y luego de un rato volvió con un plato lleno de galletas y zumo para la bailarina.
-Aquí tienes – Dijo la latina entregándole las cosas a Brittany mientras se disponía nuevamente a irse.
-¿A dónde vas? La película está por comenzar y ya pagaste tu entrada – Dijo la bailarina mientras le ponía play a la película y le señalaba el otro lado de la cama a la chica, por otro lado Santana se acercó a la cama con una sonrisa radiante en su rostro.

creo que es un buen momento para que se sepa la verdad de una buena vez!

Me alegra que Brittany se esté planteando tratar mejor a Santana, espero que pronto se pueda saber todo este malentendido. Actualiza pronto.

Holiiss :3 Me encanta que Britt quiera ser más swettie con Santy, Se merecen estar juntas :3

Lectora nueva reportandosé /O.o/

actualiza pliissss..   

Aloha, lamento mi tardanza pero estaba estudiando para los últimos examenes de la universidad, sin mas que añadir aquí va el capi "A los 23 seré famosa y conoceré a Naya"

CAPITULO 13

Ya habían pasado dos días desde que Brittany estaba en reposo y se encontraba totalmente recuperada, esos días la relación con Santana había mejorado ya que la latina no perdía de vista en ningún momento a la bailarina haciendo que cumpliera con las especificaciones de la doctora, si bien habían momentos en lo que la bailarina no podía evitar recordar que la latina la había abandonado, prefería enterrar todo eso en el fondo de su corazón y hacer como si no lo recordara, de algún modo se había familiarizado con ese dolor de tal modo en que ya ni lo notaba aunque siempre estaba presente al igual que sus peleas mentales respecto a la relación que había adoptado con la latina “No te encariñes mucho que luego te deja”. La chica estaba acostada en la hamaca del patio cuando sintió su móvil sonar y contesto sin siquiera ver de quien se trataba.

-Aquí Brittany – Dijo la chica algo adormilada.
-Aquí Emily – Dijo la chica del otro lado de la línea haciendo que la bailarina se despertara del todo.
-¡¡Hey guapa!! ¿Cómo va todo? – Pregunto Brittany animada por escuchar a la morena, extrañaba a la chica y sus palabras.
- Mejor de lo que esperaba, he estado saliendo con Hanna todos estos días – Hizo una pausa – Quiere volver conmigo a Hawaii por un tiempo para ver si recuerda algo – Relato animada la chica.
-¡¡Eso suena genial!! Realmente me alegro por ti – Dijo la bailarina con sinceridad.
-Gracias… ¿Qué hay de ti Britt? ¿Cómo van las cosas? – Se atrevió a preguntar la morena.
-Pues, creo que se puede decir que bien – Dijo la bailarina con tranquilidad.
-¿Bien? ¿Eso quiere decir que ustedes…? – La chica dejo la pregunta en el aire que rápidamente fue captada por la rubia.
-No, solo estoy tratando de llevarlo bien – Contesto la bailarina algo desanimada.
-¿Te has dado cuenta cierto? – Dijo la morena más en afirmación que pregunta.
-Siempre supe la respuesta, no puedo sanar mi corazón porque no me pertenece del todo… Nunca deje de amarla y probablemente nunca lo haga.
-Britt…
-Hey, tranquila… Eso no quiere decir que moriré sola, tan solo necesito tiempo – Dijo la bailarina tratando de tranquilizar a su amiga.
-Tiempo y alguien especial – Afirmo la morena.
-Si no supiera que estas tratando de recuperar a tu esposa pensaría que te estas ofreciendo – Dijo la bailarina con un aire divertido.
-Puede ser… Pero no olvides que fue idea tuya esto – Dijo la morena haciendo sonreír a la bailarina.
-Tienes razón, un mártir siempre es un mártir – Dijo la bailarina mientras escuchaba la risa de la morena.
-Puede ser, pero por lo menos eres el mártir con la sonrisa más sexy del mundo – Dijo la morena con voz coqueta.
-Eso compensa mi desgracia.
-Debo colgar, llámame si necesitas algo ¿De acuerdo? – Dijo la morena.
-Está bien, espero que todo salga bien guapa, nos vemos en unos días – Dijo despidiéndose mientras colgaba.

La bailarina estuvo un rato más en la hamaca descansando hasta que escucho gritos y un gran portazo y se dirigió al interior del hogar donde estaban todos los chicos discutiendo algo, se notaban preocupados.

-¿Qué ha pasado? – Pregunto la bailarina mientras se sentaba al lado de Beth quien estaba dibujando.
-Han llamado recién los padres de Santana, estaban furiosos – Dijo Kurt.
-Alma se ha enterado por la televisión que Santana se va a casar con Dani y casi se muere – Dijo Rachel triste – A este paso nunca volverá a aceptar a Santana.
-¿Dónde está ella? – Pregunto Brittany con preocupación, sabia como ponía a Santana el tema de su abuela.
-Se ha encerrado en su habitación – Dijo Mercedes mientras se abrazaba a Sam.
-Ni siquiera nos ha dejado decirle algo – Dijo Tina.
-Ya sabes cómo es, no le gusta que la vean triste – Dijo Finn mientras abrazaba a Rachel por la espalda.
-… - Brittany no dijo nada, solo se levantó y se dirigió a la habitación de la latina.
-No creo que sea buena idea, esta de mal humor – Dijo Blaine advirtiendo a la rubia.
-¿Con quién crees que hablas? – Dijo la bailarina con una sonrisa engreída.


Por otra parte Santana estaba tendida en la cama llorando, cada vez veía más lejano el hecho de que su abuela la volviera a aceptar después de todo lo que estaba pasando, sentía que solo servía para causarle dolor a las personas que amaba, en momentos como estos le hacía falta Dani para poder desahogarse, aunque el hecho era que extrañaba los abrazos de Brittany, en los buenos tiempos la bailarina se hubiera quedado con ella abrazándola toda la tarde si fuera necesario y después haría cualquier cosa para hacerla sentir bien, pero la verdad era que de esos tiempos solo quedaban los recuerdos. Trato de relajarse pero no lo consiguió, así que opto por quedarse en su habitación todo el día, estaba concentrada en sus pensamientos cuando sintió a alguien tocar la puerta pero no hizo caso, no estaba de humor para hablar con ninguno de los chicos, pero no contaba con que cierta bailarina no estaba dispuesta a rendirse. Luego de un rato los golpes cesaron y la latina suspiro frustrada, le hubiese encantado que Brittany hubiese entrado por la puerta pero sabía que eso era imposible, aunque la chica trataba de ser amable con ella se notaba que había un rechazo hacia ella que la mataba, sabía que debía decirle la verdad pero tenía miedo de ver la verdad, que se había equivocado al pensar que sin ella la chica estaría mejor y por otro lado estaba Dani, ella se consideraba una persona de palabra y se había prometido tratar de amar a la cantante. Estuvo un rato más llorando hasta que sintió como a sus espaldas se abría la ventana de la habitación y alguien entraba, se dio la vuelta y quedo sin aliento.

-Sí que me lo has puesto difícil eh – Dijo Brittany metiéndose a la habitación por la ventana.
-Britt, tu… - La latina no sabía que decir.
-Este es el trato, tienes dos opciones: Una tarde de películas de acción o un recorrido en moto por los lugares que quieras con la mejor guía turística – Dijo la bailarina poniéndose al frente de Santana que la observaba ensimismada ¿Realmente estaba haciendo eso por ella?
-… - Santana se echó a llorar nuevamente, no podía creer que la bailarina estaba haciendo esto por ella.
-Hey, sabes cómo es ella – Dijo refiriéndose a Alma – Tarde o temprano entenderá.
-No tienes por qué hacer esto Brittany, sabes que no me quieres cerca de ti, todos lo saben, me los has dicho, se te nota… Deja de ser tan comprensiva conmigo – Dijo la latina en un sollozo.
-Si te soy sincera en estos momentos lo único que no quiero es que estés triste, sé muy bien como son las cosas con tu abuela y no la puedo entender, nadie tiene que llevar todas las cargas solo, no es justo para los que quieren ayudarte – Dijo la bailarina confirmando sin saber el error de Santana, ella siempre tenía la solución para todo ¿Cómo había sido tan ciega?
-¿Me odias? – Pregunto la latina temerosa, sabía que Brittany le había dicho que no con anterioridad pero necesitaba escucharlo de nuevo porque ella si se odiaba ahora mismo, al verla tan rota por dentro se odiaba aún más.
-Lo he intentado y cuando estoy por conseguirlo me detengo, me da miedo hacerlo – Dijo la bailarina en un susurro.
-¿Miedo? – Pregunto la latina viendo a su Brittany sin esa mascara de indiferencia, la chica que había amado y la que había dañado.
-Entonces ¿Películas o el viaje? – Pregunto la bailarina cortando el tema.
-Supongo que tomare el viaje, no quiero quedarme un segundo más encerrada, a parte si nos ponemos a ver películas seguro Porcelana o el Hobbit querrán ver “Pretty woman” o “Moulin Rouge” y juro que si veo otra vez más a Satine vomitar sangre, hare lo mismo – Dijo la latina con su característico humor.
-Buena elección – Dijo la bailarina mientras se dirigía a la salida de la habitación – En cinco minutos más salimos.

La bailarina salió de la habitación de la latina y rápidamente fue acosada por el grupo de amigos.

-¡¡Ha sobrevivido!! – Dijo Puck mientras alzaba sus brazos al cielo.
-¿Cómo está? ¿Qué te ha dicho? ¿Qué ha pasado? ¿De qué han hablado? – Pregunto Quinn de manera veloz.
-No he entendido ni la mitad de lo que has dicho Q – Respondió la bailarina a su amiga.
-¿Cómo esta San? – Pregunto esta ve Kurt.
-Ella está muy triste, el tema de Alma siempre la pone así – Explico la bailarina.
-Si estuviera Dani ella podría hacerle compañía – Dijo Rachel expectante a la reacción de la bailarina.
-Bueno, no soy Dani pero supongo que sirvo – Dijo la chica en un tono molesto haciendo sonreír al grupo.
-¿Entonces…? – Dijo Quinn.
-¿Entonces qué? – Pregunto la bailarina.
-¿Se quedara ahí encerrada? – Pregunto Sugar mientras mensajeaba a alguien.
-No, iremos a dar una vuelta por la isla, estar acá no es una buena opción ni para ella ni para ustedes – Dijo la bailarina encogiéndose de hombros como si no tuviera importancia pero nadie pudo ocultar su sorpresa.
-¿Tú y ella? Es decir ¿Ustedes? ¿Solas? – Pregunto Quinn con ilusión en sus ojos.
-No sé qué clase de ideas estas teniendo Q, pero si sigues haciendo ese tipo de preguntas se creerán lo de las rubias – Dijo la bailarina molestando a su amiga.
- Que yo sepa no era yo la que aun creía a los 17 años que los bebes los traía la cigüeña – Ataco la rubia a la bailarina.
-¡¡Eso era falta de información!! – Exclamo la bailarina mientras se ponía roja.
-Llámalo como quieras pero tu pasado te delata Pierce – Dijo la rubia mientras le sacaba la lengua a la bailarina.
-¿Nos vamos? – Pregunto Santana que había salido de su habitación, llevaba una camiseta de tirantes blanca, unos mini shorts azules y unas sandalias cómodas, se podía notar la figura de la latina en todo su esplendor lo que hizo que Brittany sufriera interiormente, viajarían en moto lo que implicaba ir muy apegadas.
-Claro – Dijo la bailarina mientras se dirigía a la salida seguida de la latina.
-Esta vez conduzco yo – Dijo la bailarina subiéndose a la moto y tendiéndole un casco a la latina.
-Buena idea – Respondió Santana subiéndose detrás de la rubia mientras le rodeaba cintura “Piensa en Ponis” Se decía a sí misma la bailarina mientras emprendía camino a sus destinos.

El primer lugar en el que pararon fue en un restaurant ya que ninguna de las dos había comido algo y ya eran pasadas las 2 de la tarde, la bailarina aparco la moto frente al local y se metieron ahí, tomaron una mesa en el segundo piso y ordenaron uno de los platos típicos de la isla, Brittany pensaba que sería más incómodo el viaje pero al transcurrir el tiempo se dio cuenta que por el contrario todo se tornaba muy cómodo. Pero toda la paz se perdió al ver a uno de los reporteros en el lugar, al parecer las habían seguido hasta ahí, se volteo y vio que Santana estaba pálida, esto empeoraría las cosas si las captaban ahí así que la bailarina decidió actuar.

-Esto haremos, cuando este en el otro sector del lugar bajaremos corriendo y no nos detendremos hasta llegar a la moto ¿Ok? – Dijo la bailarina mientras dejaba dinero al lado de la factura que les habían traído con anterioridad.
-¿Qué? ¿Pero y si nos ve? – Pregunto la latina algo temerosa.
-No hay más opciones – Dijo la bailarina poniéndose de pie disimuladamente siendo imitada por la latina – A las 3 – Hizo una pausa - ¡¡Tres!! – Exclamo para coger de la mano a Santana y salir corriendo a toda velocidad del lugar.

Corrieron a toda velocidad mientras eran seguidas desde atrás por el reportero, cuando al fin llegaron a la moto Brittany no se dio el tiempo ni siquiera de ponerse el casco y emprendió camino hacia una feria artesanal cercana entre risas por parte de ambas. Llegaron al lugar y se mezclaron entre la gente que al parecer no reconocía a la latina así que bajaron un poco la guardia, estuvieron mirando las cosas y Santana decidió comprarle una pulsera a la bailarina como agradecimiento por lo que hacía por ella.

-¿Hay algún otro lugar a donde quieras ir? – Pregunto la bailarina de repente mientras la latina estaba observando las tiendas.
-Me gustaría ver el atardecer – Dijo la latina de repente.
-Conozco el lugar perfecto – Dijo la bailarina recordando el risco donde había estado la latina anteriormente, aunque era de noche se había fijado que el lugar tenía una vista hermosa.

Las chicas se dirigieron al estacionamiento y vieron un grupo de chicas en un auto descapotable con música resonando por los pobres parlantes del vehículo, Santana de inmediato se fijó en como una de las chicas miraba a Brittany y la fulmino con la mirada “Ni siquiera se te ocurra perra” pensó, pero la otra chica no hizo caso a la mirada de amenaza de la latina y decidió actuar.

-Oye tú, la rubia – Dijo llamando la atención de Brittany mientras se acercaba a ellas.
-¿Qué te parece si vamos a pasarla bien un rato allá? – Dijo la chica apuntando un callejón oscuro.
-No lo creo – Dijo la bailarina mientras tomaba un casco y se lo entregaba a Santana quien estaba expectante de la situación.
-Anda vamos, puedes dejar a la enana cuidando la moto mientras nos divertimos – Dijo la mujer con veneno en sus palabras “Oh - oh” fue lo único que pensó la bailarina.
-¿Cómo me llamaste estúpida? – Dijo la latina empezando a soltar a Snixx.
-E-N-A-N-A – Dijo la chica provocando más a Santana mientras le daba un ligero empujón en el hombro.
-Ok, ya basta – Trato de intervenir la rubia pero ya era tarde.
-¡¡Te mato perra!! – Exclamo la latina golpeando a la otra chica que no se quedó atrás y tomo a Santana del cabello, Brittany fue por detrás y cogió a Santana por la cintura quitándola de encima de la chica que estaba enfurecida y sangrando.
-¡¡ESTAS LOCA!! – Grito la otra chica tratando de soltarse del agarre de una de sus amigas para llegar hasta la latina.
-¡¡No has visto nada!! – Dijo la latina siendo sujetada por Brittany que la aparto del grupo mientras las otras chicas metían a su amiga al auto y se iban.
-Quieres calmarte – Dijo la bailarina mientras soltaba a la latina.
-¡¡Esa puta me las pagara!! – Exclamo la latina aún muy ofuscada.
-Bueno, la Santana calmada casi me consigue engañar – Dijo la bailarina con una sonrisa divertida al cabo de un rato.
-¿Siempre tienes que ser tan amable con las tipas lanzadas? – Pregunto la latina aun ofuscada.
-No me molestan en lo absoluto y no tengo motivos para ser pesada con ellas – Dijo la bailarina tranquilamente aunque con un tono de frialdad que llevo a Santana a la realidad, la bailarina sabia como era ella celosa y le estaba diciendo amablemente que no tenía derecho alguno sobre ella.
-T-Tienes razón – Admitió la latina en voz baja.
-Ahora por culpa de esa chica tienes un raspón – Dijo la bailarina acercándose a la latina mientras ponía una mano sobre la frente de esta – Pero no, ella tiene que ir y darle de ostias a la primera chica que se porta como una “lanzada” ¡¡Joder San ¿Por qué eres tan difícil?!! – Exclamo la bailarina mientras limpiaba un poco de sangre que caía por la frente de la latina dejándola estática, era la primera vez que le decía San en este tiempo – Será mejor que nos vamos, ya no alcanzamos a ver el atardecer.
-¿Por qué siempre me salvas de todo? – Pregunto la latina en un susurro.
-Porque se me da bien – Respondió la bailarina mientras se subía a la moto y la latina la imitaba.
-Gracias por hoy.

El camino de regreso fue tranquilo, el clima estaba cálido lo que mezclado con el aire libre que les proporcionaba viajar en moto era simplemente perfecto, de regreso al lugar fueron recibidas por las miles de preguntas de Quinn y el drama de Rachel que al ver el raspón en la frente de la latina quería llevarla al hospital, la chica rápidamente explico la situación y todos se empezaron a reír.

-Si tú quedaste así me imagino como quedo la pobre chica – Dijo Puck mientras se reía en voz alta.
-¡¡Ha sido brutal!! Me ha costado quitarla de encima de la otra chica – Dijo Brittany mientras se reía haciendo que todos sonrieran.
-Te ha jodido el ligue, deberías estar enojada – Dijo Mercedes.
-¿Esa tipa? No valía ni un segundo de tiempo – Dijo Santana enfadada.
-Eso no lo decides tu Satán, lo decide ella – Dijo Kurt mientras rodeaba a la bailarina por los hombros con un brazo.
-Le he hecho un favor Porcelana, no como a ti que nadie se atreve a decirte que la ropa que utilizas parece como si hubiese sido vomitada por un gran pony gay – Ataco nuevamente la latina.
-¿No puedes ser amable por solo un minuto de tu vida? – Dijo Kurt iniciando su pelea con la chica.

La discusión entre los chicos duro por un rato más, ya se hacía muy tarde y los chicos decidieron ir a acostarse, mientras tanto Brittany ya se había puesto su pijama y se dirigía a la cocina por un vaso de agua y al pasar de vuelta vio a Santana acostada en el sillón del salón, al parecer se había quedado dormida con el ordenador portátil encendido, se acercó a ella y pudo ver una foto de la latina y su novia como fondo de pantalla cosa que le molesto pero se regañó mentalmente por eso “Solo son amigas, nada más que eso ¿Entendiste?”. Removió a la latina pero no despertaba así que tomo el portátil y lo cerro, luego tomo a Santana a peso y la llevo a su habitación dejándola tendida en la cama y se fue a su habitación con un pensamiento en su mente “¿Qué mierda estás haciendo Brittany?”

La bailarina se despertó al oír una discusión en el salón, iba dispuesta a salir de la habitación cuando la puerta se abre y entra una Dani furiosa lanzándose sobre Brittany y haciendo que ambas caigan al suelo, detrás de ella entraron los chicos que gritaban “Detente Dani, ella no tiene nada que ver” Puck se acercó a la chica y se la quitó de encima a Brittany mientras pateaba y gritaba, los demás estaban con una expresión de preocupación, no se veía a Santana ni a Quinn por ninguna parte.

-¿Pero qué rayos te sucede? – Pregunto Brittany levantándose del suelo mientras limpiaba un rastro de sangre de su labio.
-¡¡¿Te crees que no sé qué viniste a este viaje para recuperar a Santana?!! – Exclamo la chica alterada dejándolos a todos helados, esto no iba por buen camino – Me entere por un tal Jacob Israel que ustedes salían en la secundaria, puedes dejar de negarlo ya.
-Parece que no te contó toda la historia – Dijo Brittany con un fría calma haciendo tambalear la actitud de Dani.
-¿A qué te refieres? – Pregunto la chica con duda.
-Olvídalo – Dijo la bailarina – Yo no he venido en ningún caso por Santana, he venido por Quinn, Puck y Beth, solo eso – Explico la bailarina bajo la atenta mirada de todos.
-Pero, ustedes…
-Ella no te dejara – Afirmó la bailarina cortando a Dani - Se va a casar contigo, te quiere… Lo nuestro no fue nada, puedes estar tranquila – Dijo la bailarina en voz baja, decir eso le había costado más de lo que debería.
-Yo… - La cantante se quedó callada, se sentía como una tonta.
-Déjalo así – Dijo Brittany saliendo de la habitación.

Por otro lado venia Quinn, Santana y Beth llegando al hogar, habían salido temprano de compras y así aprovechado para hablar de muchas cosas sin los demás chicos interponiéndose, la rubia estaba estacionando la camioneta cuando pudo ver a Brittany salir casi corriendo de la casa mientras se montaba en la motocicleta y salía a gran velocidad del lugar dejando a las chicas desconcertadas, después vieron a Puck salir de la casa y empezaron a preocuparse así que rápidamente bajaron y se dirigieron al chico.

-¿Ha pasado algo cariño? – Pregunto Quinn siendo seguida por Santana y Beth.
-Algo así – Dijo el chico mientras miraba a Santana y se quedaba callado.
-Habla de una vez Puckerman – Dijo la latina ya nerviosa.
-Hace poco ha estado Dani acá y se le ha abalanzado a Britt, al parecer Jacob Israel se contactó con Dani y le conto de que ustedes salían en secundaria así que ella se ha hecho una idea equivocada y ha venido a culpar a Britt de querer algo con Santana – Relato el chico dejándolas de piedra.
-¿Dónde está Dani ahora? – Pregunto Quinn ya que Santana parecía en otro mundo.
-Se ha ido, estaba muy avergonzada después de que Britt le aclarara todo – Dijo Puck.
-¿Qué le ha dicho? – Pregunto Santana con un nudo en la garganta.
-Solo lo que ella debería saber, que la quieres y no la dejaras – Relato Puck con algo de tristeza – Si yo fuera Brittany le habría partido la cara a esa chica.
-¿Y Britt? ¿Dónde está ella? – Pregunto Santana con desesperación.
-No tengo idea, ha salido hecha un cohete de aquí… Debe estar molesta, no es muy agradable tener que estar reviviendo constantemente un corazón roto - Dijo el chico mientras entraba a la casa con las bolsas de las compras de las chicas.
-La iré a buscar – Dijo Quinn acercándose al auto.
-No, iré yo – Dijo Santana decidida.
-¿Estas segura? – Pregunto Quinn dudando un poco – Ella no es agradable cuando está molesta.
-Lo se Q, ¿Con quién crees que hablas? – Dijo la latina mientras entraba al auto.

Por otro lado Brittany estaba en el lugar secreto que Emily le había mostrado aunque ni siquiera el agradable recuerdo de la chica podía quitarle el mal humor que llevaba en ese momento, primero tenía que aguantar ver a la nueva noviecita de Santana besarla e incluso escucharlas en acción y ahora demás debía convertirse en su muñeco sparring “Y una mierda” dijo en un grito, se calmó un poco cuando sintió vibrar su móvil; era su primo.

-Hola Luke ¿Qué tal? – Pregunto la chica tratando de sonar normal.
-Hey Britt ¿Ha pasado algo? Suenas enfadada – Pregunto preocupado el chico, conocía perfectamente a su prima.
-Nada, estoy bien ¿Qué sucede? – Pregunto la bailarina evadiendo el tema.
-Pues, he averiguado algo que deberías saber – Dijo el chico algo nervioso – Es acerca de Santana.
-¿Qué es? – Pregunto la chica casi en un grito.
-Bueno veras, años atrás ella estuvo involucrada en un caso de un tal Jim Garret ¿Lo recuerdas? – Pregunto el chico con seriedad.
-Jim Garret – La chica hizo una pausa y luego recordó – El tipo que pidió el divorcio a su esposa porque ella lo engañaba con el mayordomo.
-Ese mismo – Afirmo el chico.
-¿Qué hay con él? – Pregunto la bailarina cada vez más curiosa.
-El otro día me encontré con Daniel – El paramédico - Me dijo que hace poco tuvieron que ir a buscar a uno de los abogados que asesoraron a Jim en el divorcio porque había sido apuñalado en un callejón oscuro, al parecer su ex esposa se ha escapado de la cárcel y junto con su amante se están vengando de los responsables – Relato el chico.
-¿Y crees que ahora van tras Santana? – Dijo Brittany mientras sentía como se tensaba su cuerpo.
-Puede ser, aunque el abogado que fue a buscar Daniel dijo algo como “No les basta con todo el daño que han hecho”… Britt, no quiero ser precipitado pero creo que esto tiene algo que ver con el ¿Por qué? Santana se fue – Dijo el chico tratando de medir sus palabras.
-¿Tú crees que ellos le hayan hecho algo a Santana? – Preguntó la chica temerosa.
-No lo sé, pero es una posibilidad… Nunca me explique el hecho de que se fuera, se notaba a leguas que te amaba – Dijo el chico – Tratare de averiguar pero por el momento no le comentes nada a ella ¿De acuerdo?
-Está bien – Dijo Brittany en un susurro, si eso era cierto y alguien le había hecho algo a Santana para que se separara de ella esa persona conocería a Brittany Pierce en su esplendor.
-Trata de actuar normal y no te apartes mucho de ella – Recomendó el chico - ¿Qué harías si supieras que todo lo que paso fue culpa de alguien más? – Pregunto el chico al cabo de un rato.
-Lo destruyo – Dijo la chica con una convicción que dejo helado a su primo.
-Nos vemos Britt, no hagas nada precipitado – Dijo el chico – Cualquier novedad te avisare.
-Gracias Luke, es muy importante para mi saber esto – Dijo la bailarina mientras se despedía del chico y colgaba el móvil.

Si había alguien detrás de todo lo que había pasado, si alguien le había hecho algo a Santana para que se viera obligada a tomar esa decisión se las vería con ella, era capaz de seguir hasta el mismo infierno a ese infeliz con tal de hacerle pagar por todo aunque ella se viera arrastrada en el camino. Estuvo un rato más pensado y replanteando algunas cosas hasta que decidió volver a casa, seguro Quinn estaba hecha una furia por su desaparición y no quería más regaños de ella. Iba camino a casa cuando reconoció una camioneta de los chicos y se detuvo un poco para ver si localizaba a alguno de sus amigos, se bajó de la moto y vio algo que la dejo paralizada; en un callejo sin salida estaba Santana siendo rodeada por un grupo de chicas mientras la tipa lanzada del día anterior estaba en posición de pelea tratando de empezar una con la latina, sin pensarlo se acercó a toda prisa y pudo oír más claramente.

-Ahora que estas sola no pareces muy valiente – Dijo la chica cerca de la latina.
-¿Y ellas son el público o las que evitaran que te patee el culo?, muy valiente – Dijo Santana tratando de parecer calmada.
-Ambas, eso te lo ganas por interrumpir mi charla con esa rubia, estaba buenísima pero por tu culpa no nos pudimos conocer más… Aunque se nota de esas chicas que solo buscan follar y nada más – Dijo la chica con veneno en sus palabras – ¿Son de esas amiguitas que follan y luego salen de compras?
-¡¡De ella no tienes permitido hablar así puta!! – Dijo la latina lanzándose encima de la chica empezando la pelea.
-¡¡Esta vez no te salvas de esta zorra!! – Dijo la chica poniéndose encima de Santana pero junto cuando la iba a golpear sintió como la tomaban por los hombros y la quitaban de encima de la chica.
-Por tu bien será mejor que no la hayas llamado de la manera que creí escuchar – Dijo Brittany poniéndose delante de una impresionada Santana.
-Eres tú de nuevo – Dijo la chica con una mirada desagradablemente lujuriosa – ¿Qué te parece si retomamos lo que dejamos pendiente ayer?
-Lo único que quedo pendiente es la paliza que te estaba dando ella – Dijo Brittany mientras le extendía una mano a Santana quien la acepto y se puso de pie.
-No me digas que prefieres irte con ella a quedarte conmigo – Dijo la chica con una actitud que delataba que no estaba acostumbrada al rechazo.
-Claramente – Respondió la bailarina empezando a caminar seguida de la latina.
-Las chicas como tu son las ilusas que dejan cuando putas como ellas encuentran a alguien mejor – Dijo la chica con furia haciendo que Santana se parara y Brittany también.
-… - Brittany se dio la vuelta y pudo ver a Santana con la cabeza gacha lo que la hizo enojar, se le nublaba la razón en el momento en que alguien ofendía a la latina, siempre había sido así – Hey tú, será mejor que te disculpes con ella – Dijo la bailarina mientras le dirigía una mirada furiosa que dejo helada a la chica pero no lo quiso reconocer.
-¿Qué me harás si no? Eres solo el juguete de esa pu… - La chica no pudo continuar hablando porque Brittany le dio un puñetazo que la tiro al piso.
-Si vuelvo a escuchar la palabra “Puta” “Zorra” o cualquier insulto dirigido a hacia ella – Dijo señalando a Santana – Te daré una paliza digna de contarla a tus descendientes.

Brittany se dio vuelta y cogió a Santana de la mano llevándola lejos del lugar, ya cuando se encontraron en el estacionamiento la latina empezó a llorar haciendo que el corazón de Brittany se doliera, en todos los mundos, tiempos y dimensiones existentes odiaba y odiaría verla llorar “Hay cosas que jamás cambian” pensó Brittany con melancolía mientras se acercaba a la chica.

-Hey San ¿Qué pasa? – Pregunto la bailarina en un tono dulce mientras ponía las manos sobre los hombros de la latina.
-Me gustaría ser yo la que te salvara en alguna ocasión, es injusto que tú siempre seas la que está para salvarme – Dijo la latina con una voz tan triste que dejo sin aliento a la bailarina.
-No digas eso, de no ser por ti me hubiese terminado creyendo que era estúpida cada vez que me llamaban así – Dijo la bailarina con una sonrisa dulce – Aunque mayormente gracias a Snixx.
-Odio estar así – Dijo la latina secándose las lágrimas.
-¿Así cómo? -Pregunto la bailarina con curiosidad.
-Así de llorona, como el Hobbit cada vez que ve Funny girl… O como Lady Hummel cada vez que puede vestirse con un tu-tu para las clases de ballet – Dijo la latina aun con tristeza.
-Yo sé cómo podemos traer a Santana López de vuelta – Dijo la bailarina en un tono misterioso haciendo que la latina la mirara con curiosidad, nunca se sabía que se traía entre manos la bailarina cuando usaba ese tonito.
-¿Qué tienes en mente? – Pregunto la latina divertida por la actitud de la rubia.
-Tendrás que confiar en mi – Dijo la chica mientras se subía a la moto y le extendía un casco a la latina – ¿Te arriesgas?
-Sabes la respuesta – Dijo la latina mientras tomaba el casco y se subía a la moto emprendiendo rumbo a un lugar desconocido para ella.

Me gusto el capitulo muy bueno espero tu proxima extualizacion :)

Me gusto el capitulo ya quiero que se entere britt de lo que le isieron al san . actualiza pronto

Lindo capitulo, ahhh que le pasa a Dani, como se le ocurre golpear a Britt, actualiza pronto

mi pregunta es: se atrevera santana a dejar de una vez por todas a la idiota esa de la tal dany cuando se descubra todo y se desate la furia de brittany?

Oh mierda...! Que mal la esta pasando Britt ya no sabe como hacer para sacarse del corazon a Santana, y esa cercania entre amabas va hacer una bomba porque solo Britt esta que no sabe que hacer con todo su amor....! Ojala no tardes en actualizar :)

Actualiza pronto porfió, muero por leer el siguiente capitulo   

actualiza por favor, te juro q no duermo al esperar que actualices, no nos hagas esperar porfa ocupo leer tu historia me tiene atrapada
  

Aloha gente!! I'm back!!! lamento mucho la demora pero estaba ocupada con cosas de la universidad y sinceramente no tenia tiempo ni siquiera para respirar... Hoy amanecí con la impactante noticia de que nuestra Naya se ha casado en secreto con el señor Ryan Dorsey, es algo romanticamente inesperado, aun no se como reaccionar aunque he de admitir que me gusta mas que Big Sean, pero Brittana jamas morirá!! "A los 23 definitivamente debo conocer a Naya y espantar... Digo saludar a Ryan"

CAPITULO 14

El camino hacia el lugar misterioso de Brittany fue rápido, llegaron luego de unos minutos al centro de la isla donde la bailarina se detuvo frente a un gran centro comercial y guio a la latina hacia una tienda de videojuegos, Santana no podía estar más confundida pero aun así siguió a Brittany. La bailarina se posiciono frente a un juego de pistoleros, saco unas monedas de sus bolsillos y las metió y luego le ofreció una pistola de juguete a la latina que no dudo en tomarla, a decir verdad disparar a criminales en estos momentos la estaba haciendo relajarse de una manera casi milagrosa. Estuvieron por un gran tiempo recorriendo las atracciones del lugar hasta que repentinamente el estómago de la latina protesto con un rugido que hizo sonrojar a la chica.

-Muy sutil – Dijo Brittany con una sonrisa burlona haciendo que la latina desviara su mirada – Anda, vamos a comer algo – Propuso la bailarina mientras salía de la tienda con la latina.
-Gracias por esto, disparar a criminales vestidos de mariachis realmente me hizo recordar mi verdadero yo – Dijo la latina mientras observaba a la bailarina que la miraba con una sonrisa ladeada “Malditas hormonas” pensó la latina.
-Lo supuse, todo eso suena como Santana López – Dijo la bailarina señalando un local de comida - ¿Aquí está bien?
-Sí, claro – Dijo la latina metiéndose al local junto con la bailarina y agradeciendo internamente porque estaba casi vacío.

Tan pronto como se sentaron llego una camarera a tomarles la orden que llego de manera veloz y Santana rápidamente reparo en un corte que había en el labio de la bailarina “Que no sea lo que estoy pensando” dijo para sí misma teniendo una sospecha.

-¿Cómo te has hecho eso? – Pregunto la latina y al ver que la bailarina no entendía procedió a señalar su propio labio.
-Ah, esto – Dijo la bailarina comprendiendo pero después se puso un poco incomoda confirmando las sospechas de la latina – No lo recuerdo, supongo que me golpee con algo – Dijo restándole importancia.
-Fue Dani ¿Cierto? – Dijo la latina mirando directamente a los ojos de la bailarina viendo una silenciosa confirmación en ellos.
-No ha sido nada – Dijo encogiéndose de hombros – Tu novia golpea como mi abuela.
-Ella me va a escuchar, no tenía derecho a hacer eso – Exclamo la latina algo alterada haciendo que Brittany sonriera con nostalgia, la latina siempre la había defendido de cualquiera que se metiera con ella.
-Creo que yo actuaria peor si supiera que la ex de mi novia ha estado bajo el mismo techo que ella por unas semanas – Dijo mirando hacia un punto lejano – Aunque para la próxima no le irá tan bien – Dijo la rubia entrecerrando un poco los ojos haciendo que la latina se quedara hipnotizada mirándola.
-¿No has pensado en casarte? – Pregunto repentinamente la latina haciendo que la atención de la bailarina se volviera de inmediato a ella, no sabía que la había llevado a preguntarle eso, probablemente el hecho de que se había enterado hace poco que se lo pediría a ella “Gracias genio” se dijo mentalmente al ver como la expresión de Brittany pasaba de asombro a una de indiferencia alzando de repente ese gran muro de frialdad entre ellas.
-En lo absoluto… No es como que no haya estado sola o algo así pero no he tenido nada serio, no sé si quiero amarrar mi vida a alguien a largo plazo – Respondió la bailarina mientras se quedaba callada y pensativa - ¿A ti que te hizo querer casarte con Dani?
-Sinceramente no lo sé – La pregunta había tomado por sorpresa a Santana, no pensaba que la rubia iba a continuar hablándole del tema ni mucho menos preguntándole exactamente lo que ella se llevaba preguntando desde la proposición de la cantante – Supongo que la costumbre.
-¿La costumbre? – Repitió la rubia esta vez sin poder esconder su asombro - ¿Desde cuándo te has convertido en una persona conformista?
-Bueno, no todos tienen la suerte de tener a las personas que aman...
-Tú si la tienes, deberías buscar otra respuesta para esta pregunta – Intervino la bailarina inmediatamente, era imposible que alguien como Santana tomara una decisión tan importante por algo como la costumbre, había algo más atrás de eso “O será que simplemente no te quiere incomodar”.
-Supongo que no es una razón muy fuerte, pero es lo que tengo – Dijo la latina en un tono bajo haciendo que Brittany se preguntara por millonésima vez en el día si alguien había influido la decisión de dejarla.
-Si tu razón es lo suficientemente fuerte como para aceptar casarte con ella, entonces supongo que está bien – Dijo la bailarina de repente sintiéndose obligada a decir algo para que la latina creyera que no era un tema importante para ella “Masoquistamente mentirosa”.
-… - Santana quería gritarle que la única razón por la que estaba con Dani era porque jamás la podría tener a ella de nuevo, sabía que cuando Brittany se enterara de todo las cosas cambiarían abruptamente y estaba aterrorizada, debía decírselo pero pensaba a la vez que era egoísta hacerla cargar con algo que había sido culpa de ella.
-Mierda – Dijo la bailarina captando la atención de Santana mientras se hundía un poco en la silla.
-¿Qué te pasa? – Pregunto la latina con curiosidad.
-Yo me acosté con ella – Dijo la bailarina señalando a una chica de cabello castaño y cuerpo envidiable que estaba al lado de otra chica de cabello corto.
-¿Y cuál es el problema? – Pregunto Santana sintiendo un repentino torrente de celos inundar su conciencia.
-Bueno, ella era virgen y caliente, y yo estaba muy borracha - Dijo la bailarina en voz baja – Y ella – Dijo señalando a la chica de cabello corto – Estaba enamorada de ella… No tenía idea – Dijo la bailarina en un tono de arrepentimiento.
-¿O sea que te acostaste con una chica virgen estando borracha y había otra chica que la quería pero tú no sabías y te arrepiente de haber sido su primera vez? – Dijo Santana hilando los datos de la rubia en una historia.
-Casi, me acosté con una chica virgen que estaba muy caliente mientras yo estaba muy borracha, me arrepiento de que su primera vez fuera con alguien que no estaba del todo consciente y ni siquiera tenía un pequeño grado de afecto por ella… Mientras que la chica que la amaba, me dio la paliza de mi vida después de eso – Relato la bailarina dejando a Santana boquiabierta, no se imaginaba a Brittany en un escenario así.
-Yo no sé qué decir – Dijo Santana sinceramente, era demasiada información - ¿Has estado con más chicas vírgenes? – No se pudo resistir a preguntar.
-Consciente no – Dijo mientras sonreía al ver como Santana arrugaba en entreceño.
-Bueno, espero que ella tampoco te recuerde – Dijo la latina señalando a las chicas que se acercaban a su mesa borrando la sonrisa de la bailarina.
-Tú de nuevo, ¿No pensaras estar asechándola o sí? – Dijo la chica de cabello corto mientras tomaba la mano de la castaña.
-Disculpa ¿Cómo se llaman? – Intervino la latina observando a la pareja.
-Yo me llamo Claire – Dijo la chica de cabello corto – Y ella es Lisa – Dijo señalando a la castaña mientras recorría a la latina con su mirada haciendo que Brittany tuviera ganas de golpearla.
-Bueno Claire ¿Te parece si nos dejas en paz? – Dijo la latina – Estamos tratando de comer tranquilas y si sigues acusándola de algo tan serio como el asecho también puedes tener problemas ¿Sabías que las calumnias también son sancionadas por la ley? – Argumento la latina en plan abogada dejando sin palabras a la chica.
-Pero ella… yo – Tartamudeaba la chica mientras era observada por una intimidante Santana.
-Sera mejor que nos vamos cariño – Intervino Lisa – Lamento molestarlas chicas – Se disculpó y luego se jalo de la mano a la chica.
-San – Dijo la rubia llamando la atención de Santana.
-¿Qué pasa? – Pregunto la latina curiosa mientras miraba a la bailarina.
-Creo que en esta oportunidad tú me has salvado el trasero – Dijo la rubia sonriendo ampliamente a la latina.
-¡¡Ya era hora ¿No crees?!! – Espeto la latina en una carcajada, haciendo que Brittany de pronto se pusiera más seria, la manera en la que Santana la había defendido o el sonido de su risa la trajo dolorosamente de vuelta a la realidad; estaba sentada frente al que fue el amor de su vida tan tranquilamente, como si nunca hubiera pasado nada, como si nunca la hubiese destrozado al dejarla o como si estuviera resignándose al hecho de que el corazón de la latina ya no le pertenecía mas, en ese momento Brittany no supo ¿Cuál? de las opciones anteriores le dolía más.
-Bueno, creo que es momento de regresar con los chicos – Dijo Brittany poniéndose de pie acompañada por la latina.
-Te agradezco lo que haces por mi Britt, estoy segura que no es muy grato para ti pasar tantas horas conmigo – Dijo la latina ya estando en frente de la motocicleta.
-Si te soy sincera, pensé que no podría… Pero lo llevamos bien, sigues siendo la misma chica, eso lo hace más simple aunque a la vez más confuso – Dijo la bailarina con un aire de nostalgia en su voz mientras encendía el vehículo y emprendía rumbo al hogar de los chicos.

Ya estaba oscureciendo cuando las chicas llegaron al lugar, se podían sentir desde afuera risas y cantos de adentro lo que hizo extrañarse a las chicas, cuando entraron al lugar pudieron divisar a los chicos en el salón, bebiendo y divirtiéndose mientras que desde la cocina apareció Dani y se acercó rápidamente a Santana besándola mientras la abrazaba fuertemente, la chica estaba muy aturdida como para reaccionar ya que venía de pasar una tarde con Brittany y ahora tenía a su prometida – De quien apenas se hacía acordado – besándola de una manera que gritaba “¡Quiero echarme un polvo ya!” , por su parte Brittany observaba la escena desde una distancia prudente sintiéndose estúpida y dolida de haberse dejado llevar por sus emociones “Si alguien tuvo que ver con que Santana se fuera ahora mismo no importa, ella tiene a Dani y es feliz… Si esa persona existe en realidad, deseara nunca haberse topado en mi camino”. Quinn se dio cuenta de la mirada de Brittany hacia la pareja y se dispuso a llevarla a la cocina con una excusa para hablar con la bailarina.

-¿Quieres decirme algo? – Pregunto Quinn a la bailarina mientras servía unos bocadillos.
- No, que yo sepa no hay nada nuevo que decir – Dijo la bailarina apoyándose en una encimera.
-He visto la manera en la que ves a Dani, pero por sobre todo como ves a Santana, habla conmigo Britt – Dijo la rubia mientras observaba directamente a los ojos de la bailarina notando como esa tristeza que había estado alojada por años en ellos, crecía cada vez más.
-Yo pensé que podría con esto, encontrarme a Santana y ser capaz de no sentirme así de mal, como si hubiesen pasado solo horas desde que se fue… Realmente pensé que lo tenía todo cubierto Quinn, pero luego apareció ella y su sonrisa acompañada con su actitud especial que siempre tuvo conmigo y yo simplemente supe que no puedo sentirme de otra manera con ella que no sea jodidamente enamorada – Relato la bailarina con un tono cansado mientras su amiga la miraba con tristeza.
-Lo siento Britt, no debí ser tan egoísta… Podría haber hecho la boda en New York y solo tendrías que haberla visto por unas horas solamente – Dijo Quinn recriminándose.
-Está bien Quinn, no es tu culpa querer compartir tu felicidad con tus amigos, soy yo la que no funciona como debería… Ya han pasado tres años y medio, debería haberlo superado ya – Dijo Brittany mientras le sonreía tristemente a Quinn – Sera mejor que vamos donde los chicos.
-Claro.

Estaban charlando acerca de anécdotas, la carrera de Dani, cotilleos de los famosos y otras cosas cuando Brittany recibió una llamada y se alejó del grupo para contestar.

-¿Diga? – Respondió la rubia sin siquiera ver quien era, había estado tan desesperada por salir de ese grupo y no ver como Dani acariciaba o besaba a Santana en una vez más.
-Brittany Pierce ¿Alguna vez pones atención a quien te está llamando? – Pregunto una voz muy conocida para ella al otro lado de la línea.
-¡¡Hey Emily!! No sabes lo que me alegra oír tu voz ¿Qué tal? – Dijo la bailarina emocionada por oír a la chica.
-Muy bien, estoy llegando a casa junto a Hanna ¿Por qué no vienes? Si te soy sincera, estoy muy nerviosa – Dijo la morena mientras se escuchaba un ligero temblor en su voz.
-¿Qué oigo? ¿La gran Emily Fields tiene miedo? – Pregunto Brittany con aire divertido.
-Miedo no Pierce, ¡Pánico! – Reconoció la morena ganándose la empatía de Brittany.
-Estoy allá en cinco, compra Pizza – Dijo la rubia.
-Dalo por hecho – Dijo la morena cortando la llamada.

Brittany fue a cambiarse de ropa ya que hacia un poco de frio, opto por un jeans desteñido, un jersey negro, unas zapatillas converse y una cazadora gris. Al salir se encontró con la curiosa mirada del grupo.

-¿A dónde vas Britts? ¿Algún buen ligue por el que nos abandones esta noche? – Pregunto Puck con una sonrisa pícara.
-Si Noah, estoy camino a una orgía bestial – Dijo la rubia mientras se dirigía hacia la salida, pudo ver de paso el rostro enojado de Santana y eso la complació de una manera contradictoriamente genial.
-¡¡Esa es mi chica!! - Sintió que decía Puck mientras ella cerraba la puerta.

El trayecto a la casa de Emily fue corto y reponedor para Brittany, esa chica y sus hermanos le producían una tranquilidad que creía perdida con Santana, se estaciono en el garaje de la casa y toco la puerta que rápidamente fue abierta por Alex – la hermana de Emily – y el pequeño Tom quien la recibió con un fuerte abrazo, mas adentro, en la sala de la casa específicamente, se encontraba Emily sentada al frente de una chica “De seguro ella es Hanna” pensó Brittany al ver a una rubia, de piel clara, ojos azules y rostros atractivo. La chica era sin duda muy atractiva pero Brittany nunca había sido inclinada por las rubias, primero se dirigió a Emily quien la saludo con un fuerte abrazo y después volteo su mirada a Hanna mientras se acercaba a ella y le tendía la mano.

-Mi nombre es Brittany Pierce, un gusto conocerte – Se presentó la bailarina mientras le daba una sonrisa amable a la chica frente a ella.
-Hanna Marin, el gusto es mío – Respondió la chica con una sonrisa parecida a la de Brittany aunque se notaba algo desconcertada - ¿Nosotras nos conocíamos con anterioridad?
-No tranquila, es la primera vez que nos vemos – Dijo la bailarina captando de inmediato el alivio en el rostro de Hanna.
-¡¡Que alivio!! pensé que eras mi hermana y te había olvidado – Dijo la chica haciendo reír a Brittany.
-Si tuviera una hermana al menos yo lo recordaría – Dijo la bailarina con una sonrisa que contagio a Hanna y a los demás.
-¿Quién quiere Pizza? – Pregunto Emily poniéndose de pie.
-¡¡Yo!! – Dijeron Hanna, Brittany, Alex y Tom a la vez volviendo a reírse.

El grupo estuvo hablando y comiendo hasta altas horas de la noche, los primeros en caer ante el sueño fueron Alex y Tom y después de un rato Hanna, dejando a Emily y Brittany solas, las chicas se fueron a sentar a una banca fuera de la casa mientras observaban las estrellas, esa noche en particular resplandecían por todo el cielo.

-Y ¿Cómo te sientes? – Pregunto Brittany mientras le daba una ligera mirada Emily.
-Estoy abrumada, tengo susto de que ella no recuerde, pero a la vez estoy aliviada de que haya accedido a venir aquí y estoy feliz de tenerla aunque sea una vez más a mi lado – Dijo la morena con total sinceridad.
-¡Wow! esas son más emociones de las que están permitidas señorita, deberá eliminar una de ellas, si me permite le sugieren que sea el susto – Dijo la rubia con un tono serio haciendo sonreír a Emily.
-No entiendo cómo puedes ser tan dulce y divertida a la vez Brittany Pierce, si no estuviera totalmente enamorada de mi esposa serias la primera en mi lista – Dijo la morena dándole un tierno empujón en el hombro a Brittany.
-Lo sé, soy la combinación perfecta para la felicidad – Dijo la rubia con una sonrisa engreída.
-¿Cómo van las cosas con Santana? – Pregunto la morena al cabo de un rato haciendo tambalear la sonrisa de Brittany.
-Sinceramente ni siquiera yo misma lo tengo claro, lo único que sé es que hay algunas cosas que no calzan en todo esto – Dijo Brittany midiendo sus palabras, no quería precipitarse a sacar conclusiones pero una parte de ella quería creer que Santana no se había alejado de ella por su propia voluntad.
-Entonces hazlas calzar Brittany, sé que tú puedes hacer lo que sea… Eres algo así como una súper persona – Dijo la morena ganándose la mirada de Brittany.
-Gracias, siempre es un gusto hablar contigo Emily – Dijo la rubia poniéndose de pie – Sera mejor que me vaya, necesitas descansar de tu viaje.
-Puedes venir cuando quieras, buen viaje – Dijo la morena dándole un rápido abrazo a Brittany.
-Gracias – Dijo Brittany saliendo del campo visual de la morena.

La rubia llego al cabo de un arto al hogar que compartía con el grupo de amigos y sin más se fue a dormir, necesitaba despejar su mente de todo lo que estaba pasando y dormir era su terapia, durmió hasta que sintió como una brisa helada le acariciaban la piel y se despertó pesadamente, se incorporó con pesar y observo el reloj mural que marcaba las 2:23 pm y maldijo por lo bajo. Se dirigió al baño donde tomo una ducha rápida y después fue de vuelta a su habitación donde se puso un jeans celeste desgastado con algunos agujeros, una camiseta blanca sin mangas con la palabra “Californication” grabada y encima una camisa de cuadros azul, unas converse rojas y un gorro de lana, el día estaba helado y tenía pinta de llover así que prefirió ser precavida. Después se vestirse se dirigió a la cocina donde había una nota pegada en la nevera que ponía “Fuimos a arreglar los últimos detalles de los vestidos, espero que descanses. Quinn” se debatía “Desayuno o almuerzo” luego de una corta pelea mental opto por tomar un plato y llenarlo con cereales y leche.

Un ruidoso trueno confirmo las sospechas de Brittany acerca de la tormenta que se acercaba, aunque no sería solo una tormenta física para ella.

Termino su desayuno-almuerzo y se puso a ver televisión por un rato, se supone que con todos fuera esa sería una tarde tranquila para ella pero el insistente sonido de su móvil la saco de su pequeño oasis, se movió del living para tomas el pequeño aparato que estaba encime de una encimera en la cocina y estaba vez miro en la pantalla para no recibir otra burla de Emily, pero esta vez la pantalla marcaba “Luke” y un nudo de nervios se instaló en el estómago de la chica, se apresuró a contestar, era ahora o nunca.

Hola quiero que britt se entere luego lo que le paso a san saludos actualiza pronto

Hola....! que bueno que actualizaste :) Y bueno aun estamos en shock con lo de Naya yo abria mi b hoy y aparecia esa nota y yo de mierda....!
En fin el capitulo fue bueno pero odio que Britt sufra tanto por que aun ama a Santana, pero si se entera respecto al tema Santana no querra dejar a Dani porque segun ella le ayudo :S Espero que ya no desaparezcas, saludos!!!!