(FIC-Klaine) "Escenas borradas" All or Nothing “Awkward and Clumsy”

-¿Papá?...¡Papá!...Ok…—se dijo Blaine para sí, al ver que su Papá no respondía a sus llamados—¿Mamá?...—tanteo esta vez, mientras bajaba la escalera y chequeaba como lucia su cabello y su atuendo en cada uno de los cuadros que allí colgaban—¡¿Mamá?!—exclamo nuevamente hacia la sala y otra vez hacia la cocina. Se dijo a sí mismo “Veo que no hay nadie” y se miro nuevamente en el espejo del recibidor.
-¿Cuál es la ocasión?—dijo la Señora Anderson asomándose desde la sala.
-¿Mamá?...te llame… ¿Dónde estabas?
-Buscando mis llaves bajo el sofá—respondió moviendo un llavero como de perro con al menos ocho llaves—ahora dime, ¿Cuál es la ocasión?
-¿Ocasión de qué?
-La ocasión que te tiene tan vanidoso y que hace que te falte solamente mirar tu reflejo en el pomo de la puerta…—sentencio su Madre mientras se acercaba a su hijo para corregirle el cuello de la camisa más blanca que haya existido.
-¿Papá se fue?—pregunto haciendo caso omiso a la curiosidad de su Madre y mirándose el calce de su chaleco sin mangas a la altura de la cintura.
-Se fue…dijo que te espero demasiado y que tendrías que irte en autobús—concluyó su Madre pasándole la mano por los hombros.
-Será entonces—dijo encogiendo sus hombros y tomando sus llaves del recipiente dispuesto para ello en la mesita del recibidor—mira, si dejaras tus llaves aquí como todo el mundo, no se te perderían—advirtió mientras hacía como que se iba a la escuela.
-¡Blaine, hijo, espera un segundo!—pidió la Señora Anderson dirigiéndose a la cocina.
-¡Mama!, no es ninguna ocasión, siempre me visto así, no tienes porque…
-¡No, no es eso!, además ya sé que no me contaras nada ¡aunque te torture!—grito desde la cocina.
-Mamá, estoy atrasado… ¡MAMÁ!—advirtió Blaine mirando al cielo y perdiendo un poco la paciencia.
-Aquí vengo… ¿Cuál es la prisa?...tu Papá te dejo esto—respondió entregándole unas carpetas con el logo de la NYU y otra con el de NYADA.
-¿De dónde sacaste esto?—pregunto examinándolas.
-Yo no, tu Papá, se supone que son tus escuelas favoritas, en las carpetas encontraras las formas y la información sobre las carreras que te interesan.
-Yo no voy a estudiar algo con negocios—indicó Blaine apuntándola con los papeles.
-Revísalas, no hay nada sobre negocios, me dijo que lo que elijas será decisión tuya.
-¿Qué?
-Eso…
-¿Mi Papá dijo eso?—pregunto Blaine sin dar crédito a lo que escuchaba de la boca de su Madre.
-Lo dijo…
-¿De verdad?—pregunto sonriendo.
-¡De verdad!—repito sonriendo también y pellizcándole una mejilla.
-¡Genial!…ahora de verdad debo irme, ya que perdí mi aventón, debo alcanzar el autobús—respondió alegre y guardando las carpetas en su bolso— ¡adiós Mamá!—agrego dándole un beso.
-¡Y aun quiero saber cuál es la ocasión que te trae tan alegre y vanidoso!—exclamo la Señora Anderson al ver que su hijo no paraba de sonreír desde hacía una semana.
Blaine salió de su casa pensando que solo le faltaba el perro y la cerca blanca para que su vida pareciera un especial escolar, de aquellos que tienen los finales más felices.
-¿Kurt?...—dijo sorprendido al verlo acercarse por el jardín— ¿Qué haces aquí?, pensé que nos encontraríamos en la escuela mas tarde.
-Te vine a buscar…
-¿Por qué?
-Porque ayer mencionaste que si no te llevaba tu papá a la escuela, tendrías que tomar el autobús y tú no sabes cuantos gérmenes e incidentes desgraciados ocurren en los autobuses, por lo que me dije:”Kurt Hummel es tu deber”, así es aquí estoy…
-Gracias Kurt…—dijo Blaine acercándosele para darle un beso pero apartándose al leer en los ojos de Kurt que aquello no correspondía— ¿de dónde sacaste un auto?—pregunto para disimular su fallido actuar.
-¿Perdón?, ¿te olvidas que mi Papá maneja un taller lleno de ellos?, le pedí prestado uno y me entrego este, no es un Prius del año, pero…
-Nos llevara sin problemas…tu Papá es genial… ¿Cómo esta?
-Está bien…lo que me hace estar bien a mi también…
-Bueno, he de contarte que acabo de sorprenderme con el mío…
-¿Por qué?—pregunto Kurt rodeando el auto para abrir la puerta del chofer y en consecuencia el resto de las puertas.
-Porque mi Mamá me entrego unas carpetas con información de NYU y de NYADA, que según ella, mi Papá fue a buscar personalmente a la escuela…
-¿En serio?
-No sé qué pensar al respecto…
-¿No le crees?—quiso saber Kurt subiéndose al auto.
-No…—respondió Blaine haciendo lo mismo por su lado.
-¿Por qué no?…a veces pienso que no le das suficiente crédito a tu Papá y por eso tienen problemas, siento y deberías darle una oportunidad, podrías sorprenderte—dijo Kurt sonriendo mientras hacía andar el auto.


Septiembre de 2017

-Me dijeron que estabas aquí, pero no me lo creí…
-Hola Dylan…
-¿Qué haces aquí?, ¿no tenias que grabar unas canciones hoy día?... ¿me mentiste para hacerme trabajar doble turno?... ¡Cómo puedes hacerme esto!—exclamo Dylan haciéndose el ofendido máximo y poniendo voz dramática.
-¿Quieres que te insulte?—quiso saber Blaine descolgándose la guitarra para dejarla junto a la máquina de discos.
-¡Me encanta que me trates mal!...
-Dylan… ¿Qué pretendes?
-Pretendo subirte el ánimo…—dijo el Ingles tomándolo y zarandeándolo por los hombros.
-¿Y qué te hace pensar que necesito que me suban el ánimo?—pregunto Blaine mientras trataba de decidirse por qué canción poner en la Jukebox del “The Sheltter”
-A ver, estas aquí sin que sea tu turno de trabajar, escogiendo entre las canciones más tristes que tiene este aparato y tienes cara de cachorro San Bernardo a punto de estirar la pata—dijo Dylan contando con sus dedos cada una de sus frases.
-¡Dylan que haría sin ti!....eres el mejor amigo del mundo…—respondió Blaine tomándose el pecho y dándole un puntapié a la maquina, que por más que lo intentaba, no ponía la canción que había elegido.
-Ven…—dijo Dylan dándole un golpe en la cabeza y señalando con su mentón la barra, que a esa hora aun no tenía clientes.
Blaine volvió a pegarle a la maquina y siguió a su amigo hasta donde le indico. Se sentó en uno de los pisos altos y se desordeno el cabello como enojado consigo mismo.
-Habla con tu amigo…—dijo poniéndole una cerveza al frente y apuntándose a sí mismo con otra botella que dispuso para él.
-Me pelee con Kurt…
-¿Te peleaste?... ¿por qué?... ¡Qué hiciste!
-¡Porque habría de ser yo el culpable!...
-Es obvio que Kurt no ha hecho nada…
-¿Pero por que te pones de su lado?... ¿no se supone y eres MI amigo?—dijo Blaine dando un sorbo a su botella y poniendo acento agudo en el “MI”
-Me pongo del lado que quiero, además Kurt es el único que me alimenta cuando voy a tu casa, estoy en deuda con él solo por aquello…
-Claro—dijo Blaine riendo…
-Cuéntame que paso...
-¿Por qué no tocan mi canción?... ¿no dijiste que hablarías con Julio?
-No puedo, no hablo mexicano…
-Julio es de Chile…
-¿Y?
-Lleva 15 años en New York, habla inglés mejor que tu.
-Respetuosamente discrepo contigo…nadie…NADIE habla mejor Ingles que un nacido en Londres, sino pregúntale a la chica rubia, esa del ojo desviado, que estuvo aquí dos noches atrás…—dijo Dylan levantando y bajando sus cejas tan rápido que Blaine creyó y se le atascarían en algún punto entre la frente y el entrecejo.
-¿Qué?...creo que debí insistir a que Lily tomara tu empleo cuatro años atrás…
-¿De qué estás hablando?, nadie atiende este bar como yo…además “tu amiguita” que tanto extrañas, ¿Dónde está ahora?...
-Está en casa, con Richard y Kurt…
-¿Qué?... ¿que estaban haciendo?, ¿por eso se pelearon?...el Swinger es bien complicado, debiste hablar conmigo antes de…
-¡¡¡OYE!!!!...¿quieres dejar de relacionar todo con sexo?
-No relaciono todo con sexo…el sexo se relaciona conmigo que es diferente...—explico Dylan poniendo cara de científico cuántico.
-Bien…—dijo Blaine bebiendo y sin ganas de reírse de las estupideces de su amigo.
-Bueno, me vas a contar o llamo a alguien para que te saque por estar ocupando un taburete sin consumir nada.
-Kurt quiere tener un hijo…
-¿Y?...
-¿Cómo que “y”?...
-¿Tú no quieres tener hijos?, creí que querías tener cincuenta y enseñarles a cantar y a lidiar con un cabello abundante y la baja estatura…
-Quiero, por supuesto que quiero, mas aun si tienen la apariencia de Kurt y su sonrisa… ¡AH!!—grito auto recriminándose—¿Por qué tuve que pelear con él?...¡odio pelear con él!
-Cálmate quieres, dime, ¿si quieres tener hijos porque la decisión de Kurt te tiene tan mal?…
-Porque es muy pronto…siento que es muy pronto…nos casamos hace menos de un año…no se… creo que deberíamos esperar un tiempo, no sé…no sé…—repitió Blaine, bebiendo un sorbo largo de cerveza.
-Eso sería si llevaran menos de un año juntos, pero con Kurt llevas cuanto… ¿10 años?
-No…seis, si no contamos el tiempo que estuvimos separados.
-Seis, diez… es casi lo mismo…el asunto es que ustedes son… ¿cómo se llaman esos pájaros?
-¿Cuáles pájaros?
-Esos…Los que causaron la tragedia en “Bodega Bay”
-¿Qué?...Dylan… ¿de qué estás hablando?
-¡Vamos! si sabes de lo que estoy hablando…—dijo Dylan poniendo caras y golpeándolo con el paño de cocina que se usaba para mantener limpia la barra.
-Hablas de “The Birds”, la película…
-¡Exacto!—dijo Dylan abriendo dos botellas más de cerveza…
-Los “Lovebirds”
-Eso…tu y Kurt son como ellos, “lovebirds”, no creo que exista algo que pueda romper lo que ustedes tienen, y esa estabilidad es lo único que necesita un bebé…–explicó Dylan moviendo sus manos como si un recién nacido fuera igual a una hogaza grande de pan.
-¿Qué tal la estabilidad económica?
-Pero Kurt le va bien con las asesorías en NYADA, y tú si me hicieras caso y besaras a unas cuantas chicas, tendrías el triple de propinas, aunque ahora trabajes menos días en el bar…
-Tal vez si este disco no fuera un fracaso como el anterior…
-No fue un fracaso hombre… —exclamo Dylan pegándole un nuevo manotazo en la cabeza —sabes que no lo fue…—agrego dando otro golpe, esta vez con el paño de limpiar.
-¿Quieres dejar de hacer eso?—pidió Blaine sobándose un lado.
-No si no dejas de actuar como un estúpido…tu álbum no fue un fracaso y ya deja de decir eso.
-Dylan…se vendieron como 10.000 copias en todos lados…eso es el 1% de lo que se necesita para tener el certificado de plata…
-Es el diez por ciento…revisa tus matemáticas…
-Como sea…—dijo bebiendo toda su cerveza de un solo trago.
-Yo creo que es otra cosa la que te molesta, así es que exijo que me la digas.
-¿Qué?...
-Eso, exijo que me digas que te tiene así, sino atente a las consecuencias, tengo métodos para sonsacarte la verdad.
-¿Ah sí?... ¿me estas retando a lo que creo que me estas retando Dylan Westbrook?—dijo Blaine subiéndose por la barra tratando de alcanzar uno de los vasos pequeños que habían tras ella.
-Por supuesto…—respondió sacando él mismo, un vaso pequeño como de tequila y dejándolo sobre la misma.
-Pues atente TU a las consecuencias entonces…
-¿Crees que me ganaras en algo que llevo jugando desde que lo vi en Dawson´s Creek?
-Nunca pensé que te haría confesar que veías esa serie…—dijo Blaine riendo mientras sacaba unos centavos de su bolsillo.
-Bórralo de tu mente de inmediato…
-Bien…
-Ya sabes las reglas…como yo soy el experto comenzare yo, si le apunto al vaso, tengo derecho a preguntar lo que sea, si no…te lo preguntare igual…—termino por decir Dylan mientras tomaba el pequeño vaso y lo ubicaba al medio de ambos. Tomo un par de las monedas de Blaine y comenzó el juego. Lanzo uno de los centavos, lo hizo rebotar en la barra y este cayó en el centro del vaso haciendo una especie de espiral dentro.
-¡JA!...te dije, soy un experto…
-Pregunta…
-¿Sientes que con un bebé en la casa todo cambiara con Kurt?
-Si…creo que un tercero en una relación nunca es bueno, menos si es uno que potencialmente Kurt quiera más que a mí… mi turno…
-¿Qué?... ¡NO!... no tienes nada de que interrogarme…el aproblemado aquí eres tú, así es que será un round de uno esta vez…—dijo Dylan tomando todas las monedas de la mesa y escondiéndolas tras la barra.
-¡Dylan!...
-Segunda…—respondió al acertar de nuevo otro centavo en el vaso— ¿Celos?
-¿Qué?...
-Responde…
-No, es decir no sé si son celos, tal vez lo sean, pero… ¿Cómo podría sentir celos de mi propio hijo?...¿no es algo por lo que la gente va a la cárcel o algo?…
-No, pero no creo que debieras preocuparte Kurt es súper generoso, de seguro te acomodara una frazada en el sofá mientras el duerme con el bebé…—aseguro riendo—mira lo que debes hacer es hablar con Kurt, y explicarle esa inseguridad tuya.
-No es inseguridad…
-¿No?, ¿entonces qué es?
-No responderé, no has acertado ninguna nueva moneda—dijo Blaine meneando el pequeño vaso provocando un ruido como de tintineo intenso.
-Bien…—respondió acertando con maestría un tercer centavo— ¿si no es inseguridad, que es?
-Eres un dolor en el trasero Dylan…
-Responde pequeño…
-No es inseguridad, es….no sé…tal vez tengo miedo que Kurt me deje de lado…
-¿Y eso no es inseguridad acaso?, ¿Qué pasa contigo?—respondió Dylan volviendo a lo de los golpes con sus manos y el paño de la barra.
-¿Solo me golpearás?, ¿no me darás algún consejo que me reconforte o algo?
-No…solo recibirás lo que mereces por hacer sufrir a Kurt, ¿Cómo te enteraste de lo del hijo en todo caso?, ¿llego con catalogo de bebés o con la dirección de Angelina Jolie?
Blaine no pudo evitar soltar una risa.
-No…trajo información de una clínica de fertilidad del centro.
Dylan puso sus codos en la barra y lo quedo mirando como si aquella frase estuviera inconclusa.
-¿Qué?—dijo Blaine con la seguridad que le daba el saber que su frase no lo estaba.
-¿Me vas a decir que te espantaste por un folleto?
-¿Ya no seguirás lanzando monedas?
-Olvida las monedas y responde—contesto Dylan enseriándose.
-No es solo el “folleto”, es el hecho de que Kurt averiguara todo por su cuenta…ni siquiera me lo dijo, los encontré porque estaba buscando otra cosa sino, nunca hubiera sabido de sus planes.
-Y después reclamas porque te golpeo… ¡Cómo es posible que pienses que Kurt no te iba a contar de sus planes si los involucra a los dos!, tal vez estaba esperando el momento apropiado, no sé, comprarte un regalo o que se yo lo que hacen las parejas monógamas—termino por decir Dylan alzando sus brazos como si no le cupiera mas desesperación en su cuerpo.
-Tienes razón…soy un idiota, un gran idiota…
-Dejémoslo en idiota y sigamos jugando…
-¿Para qué?, ya no hay nada más que decir.
-Sí que lo hay…te conozco…—dijo apuntándolo con el “paño golpeador”—Cuarta…—dijo repitiendo lo de antes— ¿tiene esto algo que ver con tu Papá?
-Ya no quiero jugar…—respondió Blaine levantándose y buscando su abrigo.
-Oye…reglas son reglas, aun me quedan 5 monedas…
-Dylan, de verdad…ya no quiero jugar...—insistió Blaine poniéndose la pieza de ropa.
-Es eso entonces…
-¿Qué cosa?...—pregunto arreglándose el cuello y registrando sus bolsillos como si tuviera que pagar la cuenta.
-Todo este embrollo, es porque TU no tuviste una relación cercana con tu Papá y crees que repetirás la historia con tu hijo…—sentencio Dylan como si estuviese especializándose en teorías de la mente.
-Eso…eso es…—trato de decir Blaine con las manos en los bolsillos y mirando la Jukebox, que aun no tocaba su canción.
-Eso es la verdad…—respondió Dylan rodeando la barra y completando la frase de su amigo—mira…—dijo tomándolo por los hombros sin poder evitar sacudirlo un poco antes de hablar, como si Blaine estuviese hecho de trapo y no de carne y hueso—tú no eres él... ¡Oye!—agrego dándole un golpe en la cabeza al ver que Blaine ponía cara de “si Claro”—primero tendrías que medir unos cuantos centímetros más y segundo no serias el hombre que Kurt eligió para pasar el resto de su vida, eres amable, cantas relativamente bien y por sobretodo eres tan generoso que te importa primero el bienestar de todo el mundo menos el tuyo, ¿Quién no querría un papá así?, hasta yo pediría que me adoptaran…—termino por decir poniéndose la mano en el pecho.
-Dylan…
-Lo que tienes que hacer es tomar a Kurt y contarle todo esto, decirle cuáles son tus miedos y que es lo de tu Papá lo que te tiene medio loco.
-Tienes razon...Gracias…
-Por nada amigo—dijo olvidándose de los golpes y dándole un abrazo—ahora vete y arregla las cosas con Kurt—agrego aparatándolo de su lado dándole un empujón—¡No olvides tu guitarra!
-Por supuesto que no…—respondió tomándola y dándole una última patada a la jukebox a ver si tocaba su canción elegida.


-¡Listo Señor Anderson!, en la puerta de la escuela—dijo Kurt deteniendo el auto en la calle en frente del edifico de Mckinley.
-¿Qué harás toda la mañana?—quiso saber Blaine desatándose el cinturón–¿te vas a tu casa?
-No lo sé, creo que no, veré que hago. ¡Ya se!—dijo dando como un aplauso—iré a la biblioteca y después a ver si encuentro a Míster Shuster, para darle animo o algo…claro que no se si encontrare un lugar para estacionar el auto, costaba cuando era estudiante… ¿Qué?—dijo Kurt al ver que Blaine reía por lo bajo.
-Nada, es solo que actúas como si hubieras salido de la escuela hace 15 años, y fue hace menos de 10 meses.
-Bueno, debe ser porque el tiempo corre más rápido en New York—respondió dándose ínfulas.
-Eso es cierto…—contesto Blaine mirándose así mismo en los ojos de Kurt—Estaciona en el lugar de los estudiantes de último año entonces, puedes ocupar mi lugar de Presidente—agrego cambiando el tema.
-Ah…por supuesto…
-Gracias Kurt, por el aventón y por…—dijo Blaine sin especificar lo que deseaba decir y abriendo la puerta para bajarse del auto.
-De nada… ¡oye!, averigué y están proyectando “All about Eve” y “Showgirl”, ¿quieres ir después de clases?...digo, después de que hablemos con Tina… ¿tienes algo que hacer?–dijo Kurt extendiendo su mano como si quisiera alcanzarlo en una ventolera.
-No, bueno tendría que repasar matemáticas, pero entre tú y calculo avanzado, me quedo contigo.
-OK… ¿el receso lo tienes?...
-A las 11:15…
-Perfecto, te ubico en…
-El salón de geografía…—respondió Blaine sonriendo.
-Nos vemos entonces… ¡y no dejes que Tina te acose!—exclamo Kurt una vez que Blaine cerró la puerta tras de él. Este le hizo un gesto de “OK” con sus dedos y se fue hacia la escuela. Kurt lo observo alejarse, lo vio arreglarse el bolso y corregir el cuello de su camisa, pensó en bajarse y secuestrarlo cuando corrió su bolso hacia adelante y se guardo las manos en los bolsillos haciendo que su trasero destacara de manera casi divina. Dio un suspiro y sonrió encendiendo el auto para estacionarse en el lugar de presidente de la clase que Blaine había dejado vacante.