(FIC-Klaine) "Escenas borradas" Winter Winter “First Christmas as Parents”

Abril de 2019


-¡Me encanta este barrio!—exclamo Kurt mientras recorría del brazo de Blaine, la Madison Av. en el sector conocido como “Upper East Side”.
-Lo sé…
-También deberías saber que cuando recién surgió la idea de venir a estudiar y a vivir aquí, con Rachel queríamos rentar un departamento en este barrio.
-¿De verdad?
-De verdad, pero luego nos dimos cuenta que el costo de la renta superaba los cinco dígitos, ¡seis inclusive! —recordó Kurt riendo mientras se ocultaba en el hombro de su esposo.
-Bueno, es bastante exclusivo en realidad —opino Blaine mirando los edificios.
-Creo que debe ser porque es el sector más antiguo y tradicional de la ciudad.
-Y muy Hollywoodense… —agrego apuntando los edificios que parecían haber sido la locación de “You’ve got mail”
-Muy cierto… ¿Qué hacemos aquí?
-Bueno, antes de irnos a la casa… necesito pasar a ver a alguien….
-¿A quién?
-A… —trato de decir Blaine pensando en alguien que resultara creíble para Kurt y que no lo descubriera que estaba mintiendo y lo acusara de tener su “Cara de secreto” si no, toda la sorpresa que tenía preparada se iría al fondo de las alcantarillas— el jefe del sello, creo que quiere contarme algo.
-¿Tu Jefe?... pero, ¿estás seguro que vamos en la dirección correcta?, creí que Sony estaba para el otro lado —dijo Kurt mirando hacia la intersección de las calles Madison y la E 55th.
-¿Cómo?... ¡Si claro!... lo sé, es solo que me invito a su casa porque el sello… lo están… lo están fumigando… —contesto carraspeando y entornando los ojos, pensando que aquello era lo peor que podría haber inventado.
-Perfecto… —respondió Kurt sin darle importancia. Blaine pensó que si hubiese dicho que a su jefe se lo había comido un león y tenían que ir a reconocer el cuerpo, hubiera dado lo mismo, nada podía competir con la atención con que Kurt miraba todo a su alrededor— ¿no hubo problemas luego del lio que se armo en la conferencia?
-No, al parecer contribuyo a que pudiera aparecer en más medios escritos y de internet, aunque no he visto a Ginger, además tu deberías saberlo, “cronista del canal “videfmor”—dijo Blaine dándole una especie de toque con su hombro…
-Eso lo hice para que ese periodista mal nacido se tragara sus palabras, y resulto genial, ¿no crees?
-Lo creo… doblemos por aquí —señalo Blaine en la E 66th St.
-¿Ginger no se molesto?
-Al parecer no, con todo el barullo que se armo después creo que olvido todo, aunque ahora anda un poco rara, pareciera como que oculta algo, pero no lo sé…
-¡Qué tal si estas nominado a un Grammy!… “Best New Artist”
-No lo creo…—respondió Blaine sonriendo.
-¿Por qué no?, ¿Cómo la obra en la que participo tiene rumores de Tony?, fácilmente tu podrías ganar uno que otro galardón este año —aseguro Kurt volviendo a acurrucársele en el hombro.
-Esa confianza que tienes en mi, creo que me eleva el ego hasta las nubes… gracias —respondió Blaine besándole la frente.
-Por nada… eres mejor que cualquiera…
-¿Incluso mejor que este barrio que amas?
-Diría que sí, pero más allá de este vecindario, lo que amo es caminar contigo… ¿te imaginas cuando salgamos los tres con Henry?
-Sera maravilloso…—acoto Blaine repitiendo lo del beso.
-Apropósito de Henry, bueno más bien de Julianna, ¿sabías que está saliendo con alguien?…
-¿Si?... ¿como los sabes?
-Porque me lo dijo…
-¿Así sin más? —quiso saber Blaine dándole una mirada sospechosa.
-Si…
-¡Kurt!...
-¡Está bien!, casi la obligue que me lo dijera —respondió haciendo un gesto con su mano— pero si, está saliendo con alguien, un agente de viajes divorciado y que tiene un hijo de la edad de Henry… se supone y está loca por él.
-Sera un golpe bajo para Dylan, creo que tiene una fantasía con ella.
-No quiero pensar que traumas quiere compensar con eso de perseguir a nuestra niñera.
-¡Ni yo!…—respondió Blaine riendo— ¿No piensas que se casara y nos abandonara?, ¿verdad?
-¡No!...por supuesto que no, y créeme que fue lo mismo que le dije, pero me aseguro que quiere trabajar con nosotros el mayor tiempo posible, aunque se case y se ponga a tener bebés como desquiciada…
-Me alegra oír eso, porque me gustaría que nuestros siguientes hijos, puedan ser cuidados por ella también.
-¿Has pensando en nuestros siguientes hijos? —dijo Kurt poniendo su mentón en el hombro de Blaine.
-¡Por supuesto!, además tu me dijiste un día que quieras tener tres… así es que…—respondió encogiendo el hombro que era el objeto de los mimos de Kurt.
-¿Cómo es posible que te acuerdes de eso?, te lo comente al pasar hace mas de 8 años…
-Me acuerdo de todo… por aquí… —indico Blaine con su mano para que ambos abandonaran la E 66th St. y se encaminaran por la “Fifth Avenue”.
Kurt lo observo un instante, le encantaba cuando Blaine mencionaba cosas que a veces ni el mismo recordaba, lo hacía sentir especial y único.
-¿Tu productor vive en la quinta avenida?
-Así es…
-Dime ahora que vive en el “The Flatiron Building” y soy capaz de dejarte y mudarme con él
-¡Oye!....—exclamo Blaine pegándole un codazo divertido —además ese edificio está más al sur.
-¡Estoy bromeando!, no te dejaría aunque viviéramos bajo el puente de Brooklyn.
-Eso espero…
-¿Sabías que los edificios de aquí tienen un promedio de 90 años?
-Un momento… ¿no se supone que soy yo quien tiene la cabeza llena de datos sobre las ciudades del mundo?
-Bueno ese es el único dato que me sé, pero pregúntame que películas han filmado en estos edificios y puedo mencionarte por lo menos 30… —aclaro Kurt presumiendo de sus conocimientos sobre trivia fílmica.
-Aquí es… “834 Fifth Avenue”
-¿Vive aquí?... ¡por Dios!… —dijo Kurt sintiéndose acalorado— ¡este es el mejor de todos!
-¿Estas replanteándote lo del puente de Brooklyn? ¿verdad?
-Apuesta las mejores partes de tu cuerpo a que si…—dijo mirando su entorno mientras pasaban al hall de entrada.
-Ok… espérame aquí… —dijo Blaine tomándolo por los hombros, como si quisiera acomodarlo en un lugar sin esperar que se moviera— ¿Kurt?— insistió dándole una mirada y pensando que ya daba por perdidas “las mejores partes de su cuerpo” todo por culpa del lugar en donde estaban.
-¿Qué?...
-Voy a hablar con esas personas —insistió apuntándolas.
-Claro… ve…—dijo moviendo su mano como si espantara un par de moscas, sin quitar sus ojos de los detalles de los muebles del Hall de entrada.
Blaine se acerco al portero y este lo llevo al conserje, le explico porque estaba allí y apuntó a Kurt para decir que ambos venían al dúplex del piso 13. Kurt hizo una seña cuando ambos hombres lo miraron desde lejos, como si quisiera agradar a todo y a todos los que tenían aunque sea una remota relación con el edificio de sus sueños. Blaine estrecho la mano de ambos y recibió algo que Kurt no pudo identificar por la distancia y que luego lo vio guardar en su bolsillo.
-¿Nos anunciaron?
-Algo así, ven…—dijo estirando su mano para que Kurt la cogiera— ¡Kurt! —insistió más fuerte, tratando que volviera del éxtasis al que parecía haberse entregado.
-Este edificio es maravilloso, mira el atuendo del portero… ¡ay! creo que me encontrare a Cary Grant y Deborah Kerr, en cualquier momento… imagino que la vista debe ser espectacular.
-La nuestra también lo es… —advirtió Blaine parándose frente al ascensor.
-Claro, claro… vemos unos cuantos arboles, lo que es fantástico, por cierto —se apresuro en responder, para que Blaine no creyera que él estaba pensando que el departamento donde vivían actualmente, era una pocilga inmunda comparado con los pisos de aquel edificio— pero aquí… ¡uf!, debe verse una buena porción del parque desde cualquiera de los departamentos—explico Kurt entrando al ascensor.
-Lo más probable es que si…
-¡Me encantan estas rejitas! —exclamo al ver que el ascensor era casi tan antiguo como el edifico en sí, tenía una reja corrediza, así como una manija de bronce extra pulido, que indicaba los pisos —¿Qué piso es?
-El 13…
-No me digas que tu productor vive en el “pent-house” porque pierdo la compostura en este instante.
-No lo es… el “pent-house” es dos pisos más arriba y creo que le pertenece a Rupert Murdoch.
-Menos mal… —dijo moviendo su mano cerca de su cara, como tratando de bajar la temperatura de su cuerpo. Miro un instante a Blaine que observaba los detalles del ascensor y le observo el cuello, la nariz y las pestañas de ensueño, se le acerco un poco y lo sorprendió con un beso.
-¿Y eso?...
-Me deje llevar por el momento… además creo que los ascensores así de antiguos me provocan algo… —dijo mirando a su alrededor.
-¿Serán los ascensores o este edifico que está en la Fifth Avenue? —corrigió Blaine quitando el seguro para abrir la puerta del ascensor y bajar en el piso correspondiente.
-Ambos… —respondió Kurt dándole otro— ¿este es el piso?
-Este es el piso…—dijo Blaine avanzando.
-¡Mira!...—exclamo Kurt acercándose a un especie de recibidor instalado al lado de la única puerta del piso, tenía una mesa, un espejo, un jarro con flores y un cuenco con chocolates— ¡chocolates! —agrego tomando dos— ¿cuán elegante hay que ser para tener esto para los desconocidos?
-O muy derrochador…
-Hubiéramos puesto algo así en Bushwick, se los hubieran robado todos, incluyendo el pocillo—agrego desenvolviendo uno y entregándole a Blaine el otro.
-Ven —dijo sacando un par de llaves y abriendo la puerta.
-¿Por qué tienes las llaves?, ¿tanta confianza te tienen? —quiso saber medio mascando.
Blaine no dijo nada y solo se remitió a abrir la puerta, desenvolvió su chocolate y guardo el papel en su bolsillo, se puso en un costado sonriendo de la manera más celestial posible y le hizo una seña a Kurt para que ingresara.
-¿Qué…? —dijo al ver que aquel departamento estaba vacío y no había ningún rastro del productor y jefe de su esposo— ¿Blaine?... ¿Qué…? —repitió entrando del todo casi enseñando todo el resto de chocolate que aun no terminaba de tragar.
-¿Qué opinas de este lugar? —quiso saber Blaine cerrando la puerta y avanzado hasta el centro de lo que se suponía y era la sala, se ubico en medio con las manos en las caderas y dio un giro sobre sí mismo, como si enseñara el lugar con sus ojos.
Era un área extremadamente espaciosa y las ventanas eran enormes, las terminaciones de toda la albañilería eran lujosas y el cielo raso estaba a casi 3 metros y medio del piso. Kurt creyó alucinar al ver una escalera al otro lado de la sala donde se encontraban, pensó al mismo tiempo que si hubiese sido mejor en matemáticas en la secundaria hubiese podido sacar la superficie total de aquel lugar, pero sin necesidad de cálculo alguno, lo más probable era que superara los 550 metros cuadrados
-Blaine… ¿Qué estamos haciendo aquí? —pregunto Kurt acercándose a los ventanales para apreciar lo que era efectivamente la mejor de las vistas al Central Park.
-¿Te gusta este lugar?
-¿Gustarme?... es…—respondió sin poder encontrar las palabras y remitiéndose a un gesto con su mano seguido de un cruzar de brazos.
-¿Debo asumir que si?
-¿Por qué me lo preguntas?, ¿Qué hacemos aquí?
-Veras…—comenzó a decir Blaine tomándolo de ambas manos y guiándolo a la chimenea— el otro día, y a pesar que Ginger anda de lo más extraña, me comunico dos cosas, la primera— dijo soltándolo y tomando un cuadro que hasta ese momento estaba apoyado en la chimenea con su cara hacia la pared— es que “My Universe” es doble disco de plata —dijo al tiempo que enseñaba el cuadro conmemorativo de aquel logro en ventas.
-¡Blaine!... ¡esto es maravilloso!... —exclamo Kurt agudizando su voz y abrazándolo de manera efusiva —¡estoy tan orgulloso de ti!… ¿por qué no me lo habías dicho? —añadió en tono de reclamo mientras observaba el cuadro de las 200.000 copias.
-Porque quería sorprenderte…
-Qué maravilla…—repitió Kurt emocionándose un resto— ¿Cuál es la otra noticia que te dijo Ginger?—pregunto dejando el cuadro apoyado en la pared con el mayor de los cuidados.
-Me dijo que el sello cree que es muy pronto para hacer mi primer concierto solo, así es que esperaran para ver los resultados de la gira por la costa oeste en julio, pero como tengo la fortuna de ser amigo del guitarrista de la exitosa banda “Dear Beth”, él ha conseguido, no tengo idea como, que su concierto sea doble, por lo que yo también estaré en el Madison Square Garden a mediados del mes próximo.
-¡OH POR DIOS!...—exclamo Kurt con más energía que antes y dando un abrazo el doble de entusiasta— ¡Blaine que cosa tan maravillosa!, créeme que esto merece la mejor de las recompensas— agrego alzando una ceja de manera sexy.
-Te cobrare eso…
-Pero como Dylan pudo invitarte… ¿cantaras con él? ¿no hay problema que sean de sellos distintos?.
-La verdad es que no, por lo demás tengo el presentimiento que toda la industria de la música pertenece a un solo dueño y le ponen diferentes nombres a los sellos para ahorrarse los impuestos.
-¿Cómo la industria farmacéutica?
-¡Exacto!
-Cuéntame más… —pidio Kurt con los ojos llenos de alegría
-Bueno, tengo el título de “estrella invitada”—respondió Blaine moviendo sus manos en el aire como si señalara un cartel luminoso con su nombre en el— así que no sé cuantas canciones cantare ni cuantos minutos me cederán, pero estoy bastante seguro que será más de media hora.
-Que cosa tan extraordinaria… ¿estás feliz? —pregunto acariciándole la cara.
-Mucho…—respondió sonriendo— pero creo que más por la recompensa que acabas de ofrecerme, no creas que no te la cobrare.
-Hazlo… —dijo Kurt acercándolo a él mediante un agarrón en el trasero— pero dígame, “Sr superventas”, ¿Qué tiene que ver tu éxito con este departamento de ensueño?
-Tiene que ver, porque gracias a ese creciente éxito, este departamento de ensueño, es NUESTRO departamento de ensueño, si tú quieres claro.
-¿Cómo? —pregunto Kurt sintiendo que le faltaba un poco el aire.
-Eso… bueno no lo compre ni nada, pero asegure la renta por un año, y después de eso, podemos comprarlo si queremos… ¿Qué opinas?
-¿Estás hablando en serio?
-Muy enserio… este lugar es espacioso para que crezcan nuestros hijos, pero al tener dos pisos tiene la intimidad suficiente para nosotros, y si bien da al zoológico del Central Park, estos vidrios son a prueba de ruidos, así es que eso prácticamente no lo notaremos.
-Pero Blaine…
-Cierra los ojos…
-¿Cómo?
-Eso… cierra los ojos —insistió Blaine cerrándoselos suavemente con una de sus manos, Kurt pudo sentir su olor y la suavidad de sus manos hizo que hasta el último de sus vellos se erizara.
-Ok…
-Ahora —comenzó a decir cerrando sus ojos también— imagina a Henry dando sus primeros pasitos sobre este mismo piso o corriendo por la casa, arrancando de su hermanita o hermanito menor que le ha tomado sus cosas —Kurt soltó una risa imaginándose totalmente aquello— imagina las cenas en Navidad, con nuestros hijos abriendo sus regalos de manera desesperada al día siguiente…
-¿Bajo un árbol gigante? —quiso saber Kurt sonriendo emocionado.
-Por supuesto… con la altura de estas paredes, hay espacio para el árbol del “Rockefeller Center”… imagínanos en la mesa en la cena del día de “Acción de Gracias”, con Burt y Carol, con un pavo enorme y mis padres inclusive.
-¿Tu lo cocinaras?
-Si me dices como… ¿puedes imaginarte todo eso?
-Claro que puedo…—respondió abriendo los ojos.
-¿Entonces?
-Pero… ¿Cuando?... ¿cómo?
-Cuando qué y cómo que —repitió tomándole las manos.
-Hiciste todo esto, es decir buscar este lugar, reservar el alquiler.
-Bueno, digamos que te mentí un par de veces sobre quedarme a grabar… pero solo fueron solo un par de veces… —aseguro poniendo cara de travesura.
-Blaine… —dijo Kurt tragando saliva y derramando algunas lágrimas.
-¿No te gusta la idea? —quiso saber Blaine acariciándole las manos y dando un beso a cada una.
-Me encanta la idea, sabes que he soñado con vivir aquí desde… no se… ¡siempre!
-Entonces, ¿Por qué lloras? —pregunto recogiéndole las lagrimas con sus dedos.
-Porque si, porque todo esto es increíble —comenzó a decir Kurt apartándose y cruzándose de brazos frente a uno de los ventanales— porque desde el día uno has sido así conmigo… siempre me sorprendes, haces cosas, dices cosas, que me hacen sentir como si fuera único, como si en realidad las mereciera… en cambio yo, son contadas las ocasiones en que te sorprendo con algo y siento que tal vez pienses que es injusto…
-No pienso eso… y sorprenderte es algo que te prometí hace tempo… ¿lo recuerdas?
-Lo recuerdo… Blaine…—dijo caminando hacia a él con seguridad, como quien ve algo que buscaba por largo rato— quiero que sepas que para mi tu también lo eres, eres lo más importante Blaine… pero… —añadió mirando el piso de madera.
-Pero nada, y no creas que no lo siento así, a tu lado me siento más único que este broche de hipopótamo que aun conservas —respondió enderezando la pieza de joyería— Además si haces algo…
-¿Si?... ¿y qué sería eso?—respondió Kurt moviéndose hacia las ventanas, como molesto consigo mismo.
-Amarme… y a mí me basta con eso… —agrego abrazándolo desde atrás.
Kurt soltó un suspiro sintiéndose inmensamente afortunado, no porque el dinero ahora les alcanzara para aquel lujoso departamento, sino porque tenía a Blaine a su lado.
-Eres… lo más dulce, guapo e increíble… eres el mejor de los hombres, y estas conmigo… no puedo pedir más…—dijo Kurt volteándose para darle el mejor de los besos.
-Ok… entonces, Señor Hummel-Anderson, ¿me concedería el honor de mudarse conmigo a este departamento?
-Una pregunta antes… —dijo Kurt acariciándole el pelo.
-¿Cuál?
-¿El baño principal tiene una bañera?
-Por supuesto que si…—respondió Blaine sonriendo de manera amplia y sexy.
-Entonces… ¿Cuándo nos mudamos?
-¿De verdad?
-¡Si!...
-¡Te amo!...—exclamo Blaine abrazándolo con tanto ímpetu que llego a elevarlo unos centímetros del piso, le dio una vuelta y lo beso, lo soltó con cariño y comenzó con él a recorrer las dos plantas de lo que seria su nuevo hogar, el Dúplex del 834 de la Fifth Avenue.